INTRODUCCIÓN Los materiales de construcción constituyen un área muy importante en la formación de los ingenieros civiles. La gran diversidad de obras civiles en las que el ingeniero puede participar requieren de conocimientos básicos firmemente consolidados, y que le permitan, con la práctica profesional ahondar en la tecnología de los materiales empleados en la industria de la construcción. Para el ingeniero civil es muy importante optimizar los recursos económicos disponibles para construir las obras, esto lo puede lograr entre otras cosas haciendo buen uso tanto de los materiales baratos como de los materiales caros. A un lado de la búsqueda de una economía bien entendida, el ingeniero tiene la obligación de construir obras que además de ser seguras reflejen la mejor calidad de vida de sus ocupantes o usuarios, apegándose siempre a las especificaciones y reglamentos de construcción vigentes. Toda construcción debe ser antecedida por una etapa de selección de los materiales. El ingeniero debe evitar hasta donde sea posible el experimentar directamente en la obra con materiales desconocidos, ya que esto acarrea casi siempre defectos en la obra. La experimentación es un medio excelente para verificar el comportamiento de los materiales bajo condiciones especiales, y debe ser estimulada en cualquier organización, pero se debe llevar al cabo con buena anticipación a la obra. La experimentación tanto en laboratorio como en campo son igualmente provechosas cuando se les interpreta correctamente. La selección de los materiales de construcción depende de muchos factores, y resulta difícil ser muy específico al respecto, como ejemplo considérese que la selección del material puede depender desde la disponibilidad del mismo en una determinada localidad hasta el gusto del dueño de la obra, quien puede decidirse por alguno o algunos de los materiales que se emplearán en la misma. En ocasiones la selección de un determinado material puede ser tan complicada que requiera de un complejo estudio estadístico para decidirse ya sea por un determinado banco de material, por un determinado lote de material o por un determinado fabricante. La gran mayoría de las veces son el ingeniero civil y el arquitecto quienes proponen al dueño de la obra los materiales que se deben emplear, por lo tanto estas personas deben tener los conocimientos suficientes para lograr que se cumplan los objetivos de la obra y se satisfaga el presupuesto de la misma. Particularmente el ingeniero civil debe tener la capacidad técnica suficiente para realizar la selección de los materiales de una manera más científica de lo que generalmente se cree. La base primordial para la selección de los materiales de construcción generalmente lo constituyen las propiedades ingenieriles de los mismos . Es imprescindible verificar la o las propiedades de mayor interés en los materiales antes de hacer uso de ellos. La verificación se realiza por medio de ensayes. Usualmente los ensayos ya sean de laboratorio o de campo se realizan siguiendo normas estándar o procedimiento aceptados de común acuerdo entre los interesados en el buen uso de los materiales. En toda construcción es necesario adoptar especificaciones y normas estándar, con el objeto de garantizar la seguridad y durabilidad de la obra. Las especificaciones y normas estándar son producto de acuerdos logrados en el seno de muy diversas organizaciones, las cuales se integran por un cúmulo de representantes de la iniciativa privada, del gobierno y de las universidades e institutos dedicados a la investigación. La American Association for Testing and Materials (ASTM), es quizás la organización más importante a nivel mundial que se dedica a desarrollar normas técnicas para una gran variedad de materiales, incluyendo aquellos materiales que se emplean normalmente en la industria de la construcción. Otras asociaciones no menos importantes son: el American Concrete Institute (ACI), el American Institute of Steel Construction (AISC), la American Association of State Highway and Transportation Officials (AASHTO), la USA Standards Institute (USASI), este organismo es la representación norteamericana ante la International Organization for Standardization (ISO) y la Pan American Standards Committee (PASC). En nuestro país existe una estructura de normatividad que permite tanto al constructor como al dueño de la obra aspirar a la consecución de una mejor calidad en la obra. Sin embargo es necesario que ambos entiendan bien la importancia que tienen las especificaciones, las normas y los reglamentos de construcción. Una especificación es una característica o cualidad por lo general medible que desea obtener el dueño de la obra. La exactitud con la cual el constructor pueda satisfacer los deseos del dueño de la obra depende mucho del avance tecnológico, del grado de conocimiento con el que se cuente para cumplir con el objetivo, y de la claridad con la que se defina o enuncie la especificación. Una especificación vaga generalmente lleva a errores constructivos, por lo que es necesario que el dueño de la obra y el constructor se pongan de acuerdo y definan todo el escenario que permita satisfacer las expectativas del trabajo. Para que el constructor cumpla con las especificaciones acordadas, generalmente se deben seguir una serie de pasos que garanticen que el trabajo llegará a un buen término. En el caso del manejo de los materiales de construcción, los pasos a seguir se apoyan en el cumplimiento de normas. Se dice que una norma es como una regla que hay que seguir, también se interpreta como un procedimiento o método con el que hay que cumplir para obtener resultados que sean reproducibles. Las especificaciones y las normas están muy relacionadas, a tal grado que las especificaciones pueden citar normas, o éstas pueden contener especificaciones. Por ejemplo, en una construcción se puede especificar la resistencia mínima del concreto, en este caso el constructor está obligado a seguir una serie de pasos (contenidos en normas) para verificar la resistencia de su concreto y poder aclarar si cumplió o no con la especificación. Algunos de los pasos que seguiría el constructor serían: realizar un muestreo del concreto, elaboración de cilindros de concreto, curado de los cilindros, cabeceo de los cilindros de concreto, ensaye de los cilindros y cálculo de las resistencias obtenidas. Para complementar la ilustración de términos considérese ahora un caso de la industria cementera, por ejemplo en esta industria el cemento puzolánico debe cumplir con la Norma Mexicana "Industria de la Construcción Cemento Portland Puzolana", en el texto del objetivo y campo de aplicación de la norma se señala: "Esta Norma Mexicana establece las especificaciones que debe cumplir el Cemento Portland Puzolana para la fabricación de concretos, morteros lechadas, productos de asbesto-cemento y productos prefabricados de cemento y de concreto". Las especificaciones que se mencionan en el objetivo de la norma son tanto de tipo químico como físico e indican valores específicos con los que se debe cumplir, estos valores representan evidentemente mediciones de algunas de las propiedades del material. ENSAYES E INSPECCIÓN Como se ha mencionado los materiales de construcción se seleccionan primordialmente con base en sus propiedades, claro sin olvidar ciertas cualidades estéticas. Estas propiedades se evalúan mediante ensayes. Los ensayes que se emplean en la industria de la construcción pueden ser de campo o de laboratorio, pudiendo ser destructivos y no destructivos. En todo caso los ensayes se deben apegar a normas estándar para garantizar la reproducibilidad de resultados. En el caso de no existir normas para la realización de los ensayes, tanto el dueño de la obra como el constructor o contratista se deben poner de acuerdo en el procedimiento a seguir, se recomienda que este procedimiento esté de acuerdo al avance experimental que se haya tenido en el área respectiva. No se puede concebir un programa de control de calidad en la construcción sin la ejecución de ensayes o pruebas. La adopción de normas no garantiza la consecución de calidad en las obras, a menos que exista una adecuada supervisión o inspección de los trabajos de construcción. Además, es imprescindible que tanto el personal técnico que realiza las pruebas como el mismo laboratorio de pruebas estén debidamente acreditados. Esto significa, que para que una prueba esté bien realizada, debe ser ejecutada por el personal calificado de un laboratorio de pruebas certificado ante el organismo oficial competente. La construcción es una actividad bastante compleja en donde intervienen muchos factores que inciden en la calidad final de las obras, obviamente los materiales son elementos primordiales, sin embargo, no basta con saber que los materiales cumplen con las normas o especificaciones preestablecidas, sino que es necesario hacer un buen uso de ellos, integrándolos a la obra de acuerdo a los procedimientos constructivos adecuados. Por ejemplo, se puede contar con un cemento que cumple las normas, con una arena que cumple las normas, con un agua que también cumple las normas y sin embargo se puede hacer un mal concreto y un mal colado De aquí que es necesario contar con una buena supervisión o inspección de los trabajos de construcción. En México existe un Programa de Certificación del ACI para Inspectores de Concreto creado por un Comité de Certificación ACI, por medio de este programa se imparte la capacitación adecuada para que el aspirante reciba después de cumplir con los requisitos, un certificado como Inspector de Concreto en diferentes campos o áreas. Desafortunadamente existen muchas áreas de la construcción que aún no cuentan con programas semejantes, y en esos casos la calidad de la supervisión descansa en los programas particulares de las empresas ligadas a la industria de la construcción de un cierto elemento estructural . Con la apertura del Tratado Trilateral de Libre Comercio entre Canadá, Estados Unidos y México, la industria de la construcción está experimentando grandes cambios. Particularmente el ingeniero civil se encuentra inmerso en una actividad que está siendo invadida por nuevos sistemas constructivos y nuevos materiales, además de nuevas filosofías y prácticas cuyo objetivo es la calidad total de las obras. La competencia se espera tan dura que solo sobrevivirán aquellas empresas constructoras que tengan los recursos y deseos de reorganizarse o aliarse con empresas extranjeras. De ahora en adelante, las grandes obras y aquellas que requieran de una ejecución impecable solo serán otorgadas a empresas constructoras que garanticen la calidad de las mismas, esto solo se puede lograr si las propias empresas adoptan estándares de calidad en todas las áreas que les competan, ya sean administrativas o técnicas.