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Salmos 46:2

Por tanto no temeremos aunque la tierra sea removida;


Aunque se traspasen los montes al corazón de la mar.

**Un mensaje de aliento para el creyente que busca la fidelidad a Dios.**

©2007 Alejandro Riff - www.Palabrafiel.com.ar


permitida su libre distribución sin alterar el texto.
Versión utilizada por su fidelidad a los originales:
Santa Biblia Reina Valera 1909

1
INDICE

INTRODUCCION……………………………………pag 2
EL MUNDO QUIERE TU TRIBUTO………………pag 3
EL MUNDO QUIERE REHENES…………………..pag 5
LO QUE LE MOLESTA A SATANAS……………..pag 6
BANDERAS DE DESALIENTO…………………....pag 7
PROMESAS DE PROSPERIDAD MUNDANAL...pag 8
EN NUESTRO MISMO IDIOMA!............................pag9
ESTADISTICAS DESALENTADORAS…………...pag10
EXPONIENDO NUESTRA CAUSA A DIOS……..pag11
CUANDO LA CAUSA ES DE DIOS……………….pag12
DIOS PELEA NUESTRA BATALLAS……………...pag13
UNA QUIETUD ACTIVA……………………………pag 14
DIOS ES NUESTRO AMPARO Y FORTALEZA…pag15

2
 INTRODUCCION 
Salmos 46:2 Por tanto no temeremos aunque la tierra sea removida; Aunque se
traspasen los montes al corazón de la mar.

Si podemos enumerar los males del creyente hoy día, la mayoría estaría de acuerdo en
que una de las enfermedades espirituales mas frecuente es el desaliento.

Muchos que comienzan corriendo la vida cristiana, o su ministerio de parte del Señor,
lo han hecho con gran vigor, pero con el paso del tiempo y las luchas espirituales, han
logrado aminorar su paso.

Así pues cansados del camino, nos sentamos en un lugar desértico y suspiramos por
no lograr nuestros anhelos de una vida espiritual floreciente.

Nos preguntamos: ¿Qué pasa con los hermanos.? ¿Dónde quedó el entusiasmo de la
vida cristiana.? ¿Por qué la frialdad invade la iglesia.? ¿Por qué nuestros hijos aman al
mundo? ¿Por nuestros esfuerzos no logran resultados.?
...0 porqué ya no soy el/la mismo/a de antes.!

El desaliento entra a nuestro corazón tiñendo nuestro interior como quien arroja un
chorro de tinta en un vaso de agua. Al cabo de un tiempo todo se torna sombrío.

Quiero compartirles un pasaje de las escrituras, que ilustra mucho nuestro


desalentador panorama espiritual actual, pero que también nos llena de esperanza al
saber, que Dios está con nosotros en esta difícil situación.

En la historia de Israel en tiempos del rey Ezechias, nos sentiremos identificados.

Se dice que el salmo 46 está relacionado con el suceso de cómo Dios libró a Israel de
una muerte segura en dicho suceso.

Podremos decir como el salmista: ¿No temeremos... aunque la tierra sea removida.?

Sí solo sí, confiamos y ponemos a Dios delante de nosotros.!

Salmos 46:7 Jehová de los ejércitos es con nosotros; Nuestro refugio es el Dios de
Jacob. (Selah.)

Que el Señor me ayude y te ayude a confiar siempre en El.

Alejandro Riff – Enero 2007.

Antes de comenzar este estudio leer los pasajes de la Biblia que son la base del
mismo:

2da reyes cp 18 y 19 – 2da Crónicas cp 30,31 y 32

3
 EL MUNDO QUIERE TU TRIBUTO 
Ezechias era un rey temeroso de Dios, que restituyó el culto a Jehová en medio de un
tiempo de gran apostasía del pueblo de Israel.

El rey de Asiría Zenacherib, hostigó a Israel y le obligó a pagar tributo: trescientos


talentos de plata y trescientos talentos de oro. (2da Reyes 18:14)

Algo así como… tres toneladas de metal precioso.

Ezechías, un rey pacífico, accedió a la demanda.

Podemos compararlo con la ocasión que dijo el Señor Jesús cuando también le
exigieron tributo.(Pero esta ves los romanos.)
Mateo:22:21:...: Pagad pues á César lo que es de César, y á Dios lo que es de Dios.

Sin embargo las exigencias de Senacherib eran mayores.

Para pagarle, Ezechias tuvo que sacar del templo aquellas cosas que eran de Dios.

2Reyes 18:15 Dió por tanto Ezechîas toda la plata que fué hallada en la casa de
Jehová, y en los tesoros de la casa real.

Todos aquellos utensilios del templo usados para el culto a Dios ahora eran entregados
en manos de este rey idólatra de los asirios.

Y como si fuera poco hasta las mismas puertas del templo!

2Reyes 18:16 Entonces descompuso Ezechîas las puertas del templo de Jehová, y los
quiciales que el mismo rey Ezechîas había cubierto de oro, y diólo al rey de Asiria.

De la misma forma, hoy día, el “príncipe de este mundo”(Satanás) se las ingenia


siempre para debilitar a la iglesia.

Además, las exigencias del mundo sobre el creyente son cada vez mayores.

Oramos por tal hermano para que consiga trabajo, y una vez que lo consigue este le
ocupa todo el tiempo impidiéndole venir a los cultos, ocuparse en la obra etc.

Oramos por otro para le vaya bien en los estudios, y luego resulta que su carrera es un
obstáculo para su servicio al Señor.

Otro que formó felizmente una familia ahora las responsabilidades, le impiden asumir
compromisos con la obra del Señor.

Así pues nuestra agenda personal es monopolizada por este mundo.

Dios, en el mejor de los casos aparece al final de la grilla diaria.

El grueso del tiempo, esfuerzo y capacidades mentales de los creyentes de hoy se los
lleva el mundo.!

4
Pareciera que el tributo a Senacherib es justificable antes que nuestra fidelidad a Dios.

Nos encogemos de hombros y decimos: No somos hombres de guerra, el mundo


demanda de nuestras responsabilidades, no podemos evitarlo.!

Los talentos más preciosos de la gente de las iglesias son puestos en manos del
príncipe de este mundo.

¿Entendemos porque hay cada vez menos gente comprometida con la obra del Señor.?

La energía de los hijos de Dios no es que ha desaparecido, esta ha sido reencausada


en dirección al mundo.!

“Cesar se lleva lo que es de Cesar... y nosotros también le entregamos lo que es de


Dios.”

Antes había una puerta que nos separaba de las cosas del mundo, ahora hasta eso
hemos entregado en manos de este mundo, como lo hizo Ezechías a Senacherib.

Los creyentes han salido al mundo, y el mundo ha invadido a nuestros creyentes, pues
la puerta de contención no está presente.

¿Que nos ha pedido el mundo últimamente.?

Podemos descansar en nuestra ignorancia y decir:

Puedo convivir con esto.

Podemos decir en nuestro falso consuelo:

Aun puedo dar a Dios algo de mi tiempo y recursos, y seguir siendo un creyente
respetable a los ojos de lo demás hermanos.

Pero... Ay hermano! El príncipe de este mundo seguirá en sus demandas y hasta ni eso
podrás cumplir.!

No te resignes a pagarle tributo.!

5
 EL MUNDO QUIERE REHENES 
Si la carga para Israel solo fuera comercial, quizá lo hubiesen soportado.

Pero luego de un tiempo, Senacherib vuelve a cercar a Israel con un ejército, y esta
vez exige algo más:

2Reyes 18:23 Por tanto, ahora yo te ruego que des rehenes á mi señor, el rey de
Asiria, y yo te daré dos mil caballos, si tú pudieres dar jinetes para ellos.

Ahora quiere dos mil almas que sirvieran al rey de Asiria para la guerra.!

Dos mil almas que adoraran a sus dioses falsos.

Dos mil varones que adulteraran con las hijas de Asiria.

Dos mil almas que derramaran sangre, en guerras injustas.

Para Israel pagar tributo era una cosa que podía tolerar, pero que su gente sea
capturada y puesta al servicio Asirio no.

De la misma forma este mundo perverso y el diablo, se para ante nosotros para
realizar sus exigencias.

Si bien la cuota tributaria del esfuerzo que el creyente entrega al mundo debilita a la
iglesia, ahora el león rugiente anda buscando a quien devorar. (1Pe 5:8.)

Como Senacherib el Diablo plantea sus exigencias:

• Entréguenme a vuestros hijos.!


• Entréguenme vuestro testimonio cristiano.
• Entréguenme la fidelidad de vuestras almas. Etc.

Muchos jóvenes ya se han ido en pos de los vicios mundanales.

Muchos adultos han bajado el escudo de la fe, abandonando el camino del Señor.

La multiplicación de la maldad (Mt 24:12) comprime nuestros corazones, y empezamos


a sentir los síntomas del resfriamiento espiritual.

El ejército de Senacherib es muy grande y amedrentador como este mundo.

A medias tomamos el escudo de la fe, y a medias levantamos la espada del Espíritu.

No estamos hechos para ser civiles sino para ser soldados de Jesucristo. (2 Tim 2:3)

Sin embargo el desaliento espiritual nos hace abandonar la armadura del Espíritu, para
transformarnos en cristianos civiles.

Queremos minimizar nuestros problemas viviendo una vida de anonimato cristiano.

Por supuesto que este estado, es el triunfo perseguido de Satanás: La iglesia callada.

6
 LO QUE LE MOLESTA A SATANAS 
2Cronicas 32:1 DESPUÉS de estas cosas y de esta fidelidad, vino Sennachêrib rey de
los Asirios, entró en Judá, y asentó campo contra las ciudades fuertes, y determinó de
entrar en ellas.

Ezechías había destruido los altares de toda adoración idólatra en Israel.

Había restituido los levitas y el sacerdocio en el templo de Dios, que llevaba mucho
tiempo en el vacío de la inactividad.

También reinstauró la olvidada celebración de la pascua y la ley de Dios se volvió a


leer al pueblo.

Tomó actitudes fieles, por eso la Biblia dice “ después de esta fidelidad.” Etc.

Justamente los ataques de Asiria se acentuaron “después de esta fidelidad.”

Ahora Senacherib envía a capitanes con la misión de pedir a Israel su rendición


incondicional.

Nos preguntamos a veces: ¿Por qué me sucede esto justo ahora que quiero servir al
Señor.? ¿Por qué estas contrariedades justo ahora que sigo fiel al Dios.?

Querido hermano, es porque solo somos preocupantes para los planes del Diablo
cuando la iglesia del Señor es fiel a su Palabra.

Es una regla bélica fija que “después de una fidelidad” el Diablo quiera destruir todo
fundamento.

El sabe bien que una iglesia fiel cumplirá con la gran comisión, y que ganará almas del
reino de las tinieblas, atrayéndola a la luz del evangelio de Cristo.

¿Porque nos asombraremos ante estas pruebas.?

1Pedro 4:12:Carísimos, no os maravilléis cuando sois examinados por fuego, lo cual se


hace para vuestra prueba, como si alguna cosa peregrina os aconteciese;

Sabemos que es doloroso pasar por la prueba.

La noche del desaliento es muy oscura... pero hay una promesa de Dios que consuela
a su iglesia:

Salmos:46:5: Dios está en medio de ella; no será conmovida: Dios la ayudará al


clarear la mañana.

7
 BANDERAS DE DESALIENTO 
Senacherib quería que el pueblo de Israel se rindiera. Jerusalén estaba cercada de
muros, con sus guardias sobre el, y el pueblo aguardando dentro.

Este estado de sitio ponía en vilo a toda la población. Ezechías instaba al pueblo a que
no perdiera su fe en Dios, quien los salvaría.

Pero Senacherib ideó una estrategia para desalentar al pueblo.

Quería influir en ellos para que dejen su confianza en Dios, diciendo:

2Crónicas 32:13 ¿No habéis sabido lo que yo y mis padres hemos hecho á todos los
pueblos de la tierra? ¿Pudieron los dioses de las gentes de las tierras librar su tierra de
mi mano?

La idolatría Asiria creía que Jehová era un falso dios como el de los demás pueblos.

Y para esto publicó en forma escrita tal blasfemia para que todo Israel lo leyera.

2Crónicas 32:17 Además de todo esto escribió letras en que blasfemaba á Jehová el
Dios de Israel, y hablaba contra él, diciendo: Como los dioses de las gentes de los
países no pudieron librar su pueblo de mis manos, tampoco el Dios de Ezechîas
librará al suyo de mis manos.

De la misma forma el mundo exhibe hoy sus pancartas de blasfemia a Dios a los ojos
del pueblo creyente.

Las banderas de desaliento son percibidas en forma visual, y leídas por todos.

Algunas pancartas que el diablo exhibe al estilo Senacherib:

• No vale la pena ser cristiano, tu vida terminará igual que los demás.
• La fidelidad a Dios de nada les aprovechará.
• No es tiempo de predicar el evangelio, pues no hay efecto.
• Ríndanse, y todo les irá mejor.
• Apártense de la iglesia, y vivirán libres de cargas.
• Este es un tiempo difícil ¿Para que perseverar.? No vale la pena.

Estimado hermano: ¿Te son familiares estas banderas de desaliento.?

¿Sabes en cuantos hermanos ya ha hecho efecto.?

No mires la blasfemia de este tiempo, mira a Cristo, y cobrará aliento tu corazón.!

8
 PROMESAS DE PROSPERIDAD MUNDANAL 

2Reyes 18:31 No oigáis á Ezechîas, porque así dice el rey de Asiria: Haced conmigo
paz, y salid á mí, y cada uno comerá de su vid, y de su higuera, y cada uno
beberá las aguas de su pozo; 32 Hasta que yo venga, y os lleve á una tierra
como la vuestra, tierra de grano y de vino, tierra de pan y de viñas, tierra de
olivas, de aceite, y de miel; y viviréis, y no moriréis. No oigáis á Ezechîas, porque
os engaña cuando dice: Jehová nos librará.

Acaso nunca falta alguien que diga: “Mirad a fulano, se apartó del Señor y que bien le
va.”!

Cuando algún creyente cree a esta mentira, y se va tras la promesa de prosperidad, el


diablo encontró su victoria.

Nuestro concepto de “irnos bien” es muy ambiguo.

Una prosperidad temporal material es lo que nuestros ojos carnales ven.

Rara vez vemos con los ojos espirituales que es la verdadera prosperidad espiritual.

Como creyentes los negocios pueden irnos mal o bien, Aquel que no tenia donde
recostar su cabeza en esta tierra, no está obligado asegurarnos las comodidades.

Si te va bien, da gracias a Dios, si te va mal, confía en Dios para el sustento.

Para que en buenas y malas puedas decir como el apóstol Pablo:

Filipenses 4:12 Sé estar humillado, y sé tener abundancia: en todo y por todo estoy
enseñado, así para hartura como para hambre, así para tener abundancia como
para padecer necesidad.

Senacherib se presentó a Israel abriendo una puerta de prosperidad engañosa.

Muchos habrán dicho: “Es una puerta que nos abre Jehová”

¿Conoces a creyentes que han reaccionado de la misma manera.?

¿Cuantas veces se pone a Dios de por medio en nuestras conveniencias.?

¿Cuántas veces aplicamos un barniz cristiano a nuestras decisiones puramente


personales.?

Tengamos cuidado con las promesas de prosperidad de este mundo.

No pedirán a cambio menos que el amor de nuestro corazón a ellas antes que al
Señor. (Lucas 12:21)

9
 EN NUESTRO MISMO IDIOMA! 
2Cronicas 32:18 Y clamaron á gran voz en judaico al pueblo de Jerusalén que
estaba en los muros, para espantarlos y ponerles temor, para tomar la ciudad.

Una cosa es que los siervos de Senacherib desalentaran al pueblo de Dios en Siríaco
donde muy pocos entendían el idioma.

Pero otra, era que hablaran en hebreo, el mismo lenguaje que ellos. Suceso que les
infundía mas temor al pueblo, pues daba a entender lo mucho que los conocía su
enemigo.

No es de extrañar que el diablo quien osó tentar al Señor Jesús en el desierto, usando
textos del antiguo testamento, desaliente a la iglesia…. digamos “en su mismo
lenguaje espiritual.”

Creo que soportaríamos cualquier insulto del alguien del mundo hacia nosotros, pues
automáticamente razonamos: “Es entendible, no tiene a Dios por eso dice lo que
dice.”

Pero ay, cuando este desaliento viene de la boca que habla nuestro mismo lenguaje
cristiano.!

Lo que mayor causa desaliento no es enfrentar al mundo sino las críticas internas de
los creyentes.!

Si bien Zacarías 13:6 es un versículo mesiánico, tomamos por analogía:

“Sería entendible ser herido en casa de nuestros enemigos... pero no en la casa de


nuestros amigos.”

¿La iglesia no debiera ser un testimonio vivo del amor fraternal.? (Heb 13:1)

Sin embargo las principales heridas nos las infringimos nosotros mismo y no
el mundo.!

Siempre hay creyentes dispuestos a ser influidos por Satanás para desalentar al
pueblo de Dios en su mismo lenguaje.

En la guía de Espíritu Santo nuestra lengua es una herramienta de bendición.

Pero en nuestra guía carnal enciende los mayores fuegos:

Santiago:3:6: Y la lengua es un fuego, un mundo de maldad. Así la lengua está puesta


entre nuestros miembros, la cual contamina todo el cuerpo, é inflama la rueda de la
creación, y es inflamada del infierno.

Los peligros para el desaliento cristiano es de afuera y desde dentro.

Y creo en lo personal, que el desde dentro es peor.

10
 ESTADISTICAS DESALENTADORAS 
2Cronicas 32:13 ¿No habéis sabido lo que yo y mis padres hemos hecho á todos los
pueblos de la tierra? ¿Pudieron los dioses de las gentes de las tierras librar su tierra de
mi mano?

Senacherib le decía a Israel que era “un pueblo más” y que “Jehová era un Dios más.”

Pues las estadísticas de los pueblo subyugados por el, así parecían demostrarlo.

(¡Por supuesto, que no sabia que en esta oportunidad se entrometía con el pueblo
cuyo Dios era Jehová de los ejércitos.!)

¿Acaso el mundo de pecado no nos amenaza de la misma manera.? Nos dice:

-Todos los matrimonios se destruyen ¿Por qué el tuyo quedará en pie.?

-Todos los jóvenes aman el mundo ¿Por qué tus hijos seguirán a Dios.?

-Todas las iglesias se disuelven ¿Hasta cuando seguirá la tuya.?

-No hay ningún creyente fiel en este tiempo ¿Por qué quieres ser la excepción.?

Lamentablemente estas estadísticas también se cumplen hoy día.... pero tenemos una
respuesta para Satanás:

Salmos :46:7: Jehová de los ejércitos es con nosotros;

Cristo está en su iglesia!:

Mateo:16:18 ... y sobre esta piedra edificaré mi iglesia; y las puertas del infierno no
prevalecerán contra ella.!

Alguno dirá: Pero... ya muchos creyentes, hijos y matrimonios han sido presa del
enemigo.!

Con mas razón y mas que nunca, cada integrante de la familia, cada integrante de la
congregación caiga sobre sus rodillas y clame a Dios pidiendo protección sobre nuestra
débiles almas desalentadas, para que el Señor nos guarde del enemigo.

Y también rogando por aquellos que se han apartado del Señor para que vuelvan a su
camino.!

Dios ama al hijo pródigo. No dejemos de orar por ellos y de instarle con lágrimas que
regresen al Señor.

11
 EXPONIENDO NUESTRA CAUSA A DIOS 
2Reyes 19:14 Y tomó Ezechîas las letras de mano de los embajadores; y después que
las hubo leído, subió á la casa de Jehová, y extendiólas Ezechîas delante de
Jehová. 15 Y oró Ezechîas delante de Jehová, diciendo: Jehová Dios de Israel, que
habitas entre los querubines, tú solo eres Dios de todos los reinos de la tierra; tú
hiciste el cielo y la tierra. 16 Inclina, oh Jehová, tu oído, y oye; abre, oh Jehová,
tus ojos, y mira: y oye las palabras de Sennachêrib, que ha enviado á blasfemar al
Dios viviente

Cuando estamos en problema lo primero que tendemos a hacer es tratar de


solucionarlo nosotros mismos.

Damos vueltas, ideamos estrategia, planificamos soluciones, y llegamos a la conclusión


que no hay solución.

Como último recurso presentamos nuestra causa a Dios, pero a esa altura el desaliento
ya nos invadió, y nuestra fe es tan escasa que no confiamos el asunto a El.

¿Pero que hizo Ezechías.? ¡ Una, y cada una de las cartas de desaliento, las extendió
delante de la presencia de Dios. ¡

Las presentó delante de Aquel quien tiene poder para obrar milagros.

Humanamente no había escapatoria del gran ejército asirio.

Pero Ezechias creía en la intervención Divina.!

No extendió delante de Dios sus problemas a manera de queja.

No extendió sus aflicciones para lamentarse delante de ellas, y llorar su desdicha.

No, sino que las extendió con la confianza que Dios podía obrar.!

Lo hizo con la confianza de que lo que era imposible para los hombres era posible para
Dios. (Marcos 10:27)

Hermanos: Traigamos nuestra causa ante Dios, antes que idear soluciones propias.

Nuestras espaldas no son lo suficientemente fuertes para trasladar un bloque de


cemento... ¿Cuanto menos para trasladar un monte de un lugar a otro.?

Para eso está la fe en Dios. (Mateo 17:20)

¿Qué causas tienes hoy para extender delante de tu padre celestial.?

12
 CUANDO LA CAUSA ES DE DIOS
2Reyes 19:20 Entonces Isaías hijo de Amós envió á decir á Ezechîas: Así ha dicho
Jehová, Dios de Israel: Lo que me rogaste acerca de Sennachêrib rey de Asiria, he
oído. 21 Esta es la palabra que Jehová ha hablado contra él: Hate menospreciado,
hate escarnecido la virgen hija de Sión; ha movido su cabeza detrás de ti la hija de
Jerusalem. 22 ¿A quién has injuriado y á quién has blasfemado? ¿Y contra quién
has hablado alto, y has alzado en alto tus ojos? Contra el Santo de Israel.

La “manada pequeña” sitiada en Jerusalén oró a Dios... y Dios les respondió.

Dios hizo propia su causa: La blasfemia asiria no era contra carne y sangre sino contra
el Santo de Israel.!

A veces pensamos que las luchas que sufrimos en la vida cristiana son contra nosotros.

De esta forma nos sentimos desamparados y abandonados ante los hechos injustos de
esta vida.

Son muchos palos en la rueda de nuestro carro de buenas intenciones.

Pero hermano déjame decirte algo: Si tu causa es la de Dios no tienes que temer.

Si somos concientes que no es nuestra voluntad humana lo que nos impulsa, sino
nuestra fidelidad al Señor, No temamos: es Su causa.

Lucas 18:7 ¿Y Dios no hará justicia á sus escogidos, que claman á él día y noche,
aunque sea longánime acerca de ellos?

La espera ante la longanimidad de Dios no acorta su justicia.

No es la cantidad de nuestra gente o nuestros recursos como iglesia lo que nos hace
fuertes, sino que la causa de Dios esta sobre nosotros.

Lo que mantiene a Filadelfia en pie no son sus recursos, ni hasta sus débiles
instrumentos humanos sino ese “poco de potencia de Dios” que reside en ella.! (Ap
3:8)

Mientras el pueblo de Cristo “guarde su Palabra y no niegue su nombre”, seremos Su


causa.

Si por el contrario nuestro corazón no sigue la senda de la fidelidad, será solo “nuestra
causa” y no la de Dios. (Demás está decir que somos blanco fácil del enemigo.)

Nuestras bibliotecas teológicas no suplirán lo que falta a nuestra fe.

Que nuestro clamor al Señor pidiendo su guía cada día no decaiga.!

13
 DIOS PELEA NUESTRA BATALLAS 
2reyes 19:35 Y aconteció que la misma noche salió el ángel de Jehová, é hirió en el
campo de los Asirios ciento ochenta y cinco mil; y como se levantaron por la
mañana, he aquí los cuerpos de los muertos.

Numéricamente Israel no podía pelear contra el grandioso ejército asirio.

Tampoco estaba muy bien entrenado para la guerra, ni poseía cuantioso armamento.

Lo único que hicieron Ezechías, el profeta Isaías y el pueblo es: orar a Dios.

Y Dios demostró que El pelea nuestras batallas.

Envió a su ángel y derrotó al ejército Asirio, cayendo ciento ochenta y cinco mil
hombres.!

¿Y que pasó con aquel hombre Senacherib que consideraba a Jehová un falso dios.?

Murió en templo de su falso dios (Nisroch) asesinado por sus propios hijos.! (1Reyes
19:37.)

Vemos como Dios es quien va delante de nosotros en la batalla.

Hace cesar las guerras y no por nuestra fuerza, sino por su intervención.

Salmos 46:8: Venid, ved las obras de Jehová, Que ha puesto asolamientos en la
tierra. 9: Que hace cesar las guerras hasta los fines de la tierra: Que quiebra el
arco, corta la lanza, Y quema los carros en el fuego.

La obra donde peleamos nosotros y somos heridos en batalla la conocemos de


memoria.

Pero ahora, la Palabra de Dios nos dice “Venid y ved las obras de Jehová”.

Una obra donde la intervención humana no tiene protagonismo, sino Su poder.

Una obra donde la gloria humana es excluida, pues es toda de Dios.

Nuestra única intervención por llamarla de algún modo sería: Depositar nuestra
confianza en Dios.

Si ponemos a Dios delante de nosotros, El peleará nuestras batallas.

¿Quién queremos que vaya delante de nosotros.?


¿Algún hombre.? ¿Nuestra capacidad y estudios? ¿Nuestra osadía personal.?

Eso no son más que dioses con minúscula. Como Israel que en un momento dijo
Exodo:32:1:.. Levántate, haznos dioses que vayan delante de nosotros..

Pongamos a Cristo delante de nosotros... siempre! Y a nada ni nadie más.

14
 UNA QUIETUD ACTIVA 
Salmos:46:10: Estad quietos, y conoced que yo soy Dios.

¿Que hubiera pasado si algún grupo de Israelitas hubiera atacado a Asiria.?

¿Qué hubiera pasado si algún grupo huía por miedo de la ciudad.?

Sin embargo la consigna fue: “estar quietos... porque Dios iba a obrar”

A veces confundimos este tipo de quietud con inactividad, y no es así.

Desgraciadamente muchos creyentes interpretan esta quietud como la excusa para no


hacer nada de lo que el Señor le dio por mandamiento.

La iglesia tiene la gran comisión de testificar de Cristo a este mundo perdido, pero
ingenuamente nos cruzamos de brazos diciendo: Dios va a obrar.

El mundo eclesial es desviado por las falsas doctrinas, pero la trompeta de plata de la
verdad apenas suena.

Si bien Dios da el crecimiento a la planta, pero esto no quita la tarea de plantar y


regar. (1Cor 3:6)

Así también por el contrario nuestro denuedo y esfuerzo no hace que una planta crezca
más rápido solo por insistencia.

Hay que estar quietos y conocer a Dios en lo que es El.

Es una clase de quietud una espera que no nace de la incredulidad, sino por el
contrario de una confianza en que Dios quiere y puede obrar.

Salmos:28:7 Jehová es mi fortaleza y mi escudo: En él esperó mi corazón, y fuí


ayudado; Por lo que se gozó mi corazón, Y con mi canción le alabaré.

Este conocimiento de Dios es lo que alienta nuestro corazón.

La base de nuestros desalientos se basan en que olvidamos QUIEN ES EL.

Siempre pensamos en lo que somos nosotros... y con razón nos desalentamos.!

Pero si pensamos y dimensionamos someramente en nuestra mente finita la persona


de Cristo y su obra en la cruz a favor nuestro, nos quedamos quietos, y
reconocemos su grandeza.!

Luego de los terremotos, en la quietud del calvario el centurión romano dijo:

Mateo:27:54 Y el centurión, y los que estaban con él guardando á Jesús, visto el


terremoto, y las cosas que habían sido hechas, temieron en gran manera, diciendo:
Verdaderamente Hijo de Dios era éste.

15
DIOS ES NUESTRO AMPARO Y FORTALEZA
Conclusión

Salmos:46:1 DIOS es nuestro amparo y fortaleza, Nuestro pronto auxilio en las


tribulaciones. 2 Por tanto no temeremos aunque la tierra sea removida; Aunque se
traspasen los montes al corazón de la mar.

Este es un lindo coro que cantamos muy a menudo, pero que es un desafío a nuestra
fe actual.

Hermanos: La tierra está siendo removida, pues vemos su fenómenos naturales


descontrolados, siendo este el “principio de dolores” de lo que le queda a este
mundo que próximamente será traído a juicio.

También vemos que la iglesia es removida, por falsas creencias y apostasías predichas
para este último tiempo previo a la venida del Señor.

También la caridad fraterna es movida de su lugar.

Podemos decir: ¿Es un tiempo justificable para nuestro desaliento?

Sin embargo la Palabra de Dios nos insta a seguir confiando en el AUNQUE la tierra sea
removida AUNQUE los montes se traspasen al corazón de la mar.

AUNQUE muchos abandonen la fe. (1 tim 1:19)


AUNQUE seamos menospreciados. (2Co 8y9)
AUNQUE Satanás maquine contra nosotros. (2da Cor 2:11)
AUNQUE la maldad se multiplique y se resfríe la caridad. (Mt 24:12)
AUNQUE AUNQUE AUNQUE y a pesar de todo:

DIOS ES NUESTRO AMPARO Y FORTALEZA.!

Aunque el Diablo intente destruir la iglesia y envié a sus Senacherib a desalentarnos:

DIOS ES NUESTRO PRONTO AUXILIO EN LAS TRIBULACIONES.!

Querido Hermano:

La táctica del desaliento a los creyentes seguirá siendo utilizada por el enemigo de las
almas.

¿Cuantos creyentes que han dejado la congregación suspiran en sus casas en aquellos
Domingos de soledad, añorando volver, pero su desaliento les gana la batalla.?

¿Cuántos padres suspiran por aquel hijo o hija que se apartó del camino del Señor.?

¿Cuántos malos entendidos hay entre los creyentes que impiden gozar la verdadera
comunión fraterna.?

¿Qué dolor nos causa aquellos que comenzaron en el evangelio… pero se volvieron
atrás involucrándose en sus antiguos pecados.?

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¿Cómo nos pesa la indiferencia actual de las almas por el evangelio.?

¿Cómo nos desespera la falta de manifestación de dones y de vidas consagradas al


Señor genuinamente.?

¿Cómo nos preocupa el empequeñecimiento del remanente fiel.?

Razones no faltarán para el desaliento, sin embargo el Señor nos invita a guarda la
“palabra de su paciencia.” (Ap 3:10)

No nuestra corta paciencia que tiende al desaliento, sino SU paciencia, que nos habla
que Cristo esta esperando las horas y minutos para venir a buscarnos.

Esto debería alegrarnos y alentarnos: Que El está con nosotros aguardando.

Antes de perder la corona de fidelidad, se hace presente el desaliento.

El Señor nos dice “retén lo que tienes.” (Ap 3:11)

Con el desaliento nuestras manos se vuelven débiles, nuestros párpados espirituales se


cierran, dejamos de velar... y es allí donde nuestra corona es arrebatada.!

Esta historia del antiguo testamento que hemos visto es tan vigente hoy como nunca.

La iglesia debe ser consciente que Dios pelea sus batallas.

Cristo es el alfa y la omega, El quiere ir delante de nosotros para luchar, tanto como
en nuestra retaguardia para protegernos.

El quiere sostenernos y sacarnos de nuestro desaliento, como cuando levantaba a


Pedro del agua diciéndole:

Mateo 14:31: Oh hombre de poca fe, ¿por qué dudaste?

Himno 143

Aunque fálteme la fe, Cristo me tendrá,


Aunque el Diablo búsqueme, Cristo me tendrá
No Cual yo le tengo a él, Cristo me tendrá
Débil soy y no muy fiel, más él me tendrá
Soy objeto de su amor, Cristo me tendrá
Y me gozo en su favor, Cristo me tendrá
Ya jamás me perderé, Cristo me tendrá
Pues su vida le costé, y él me sostendrá.

CRISTO ME TENDRA SALVO ME TENDRA


ES TAN GRANDE SU AMOR, SIEMPRE ME TENDRA.

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