You are on page 1of 10

Acta geológica lilloana 20 (1): 19–28, 2007 19

Análisis de los ambientes geomorfológicos de la


cuenca del Río Acequiones (Trancas, Tucumán)
utilizando fotointerpretación y factores climáticos

Páez, Silvia V.
Instituto de Geología de Cuaternario y Paleoclimas, Fundación Miguel Lillo, Miguel Lillo 251, (4000)
San Miguel de Tucumán. verpaez@yahoo.com

R E S U M E N — La Cuenca del Río Acequiones se encuentra en el sector norte del Valle de Tapia-
Trancas, provincia de Tucumán, Argentina, tiene dirección general de escurrimiento W-E y constituye un
tributario del río Salí. Este trabajo tiene por objeto una identificación de los ambientes geomorfológicos
de este sector en el que se encuentra la ciudad de Trancas considerando la influencia de los parámetros
climáticos sobre las condiciones de estabilidad de las geoformas que a su vez muestran una íntima
relación con la estructura. Se realizó fotointerpretación y tratamiento de los datos climáticos provenientes
de estaciones meteorológicas de la zona por métodos de: clasificación climática, balance hídrico y relación
de los parámetros climáticos con la morfodinámica. Las observaciones fueron volcadas en la confección
del mapa geomorfológico. Se identificaron dos formas de erosión en la vertiente oriental del la sierra Alto
de la Totora, dos formas de acumulación en el piedemonte, y formas de origen fluvial en la zona de
influencia de los ríos Acequiones y del Tala-Salí.
P ALABRAS CLAVE : Cuenca Tapia-Trancas, procesos morfodinámicos, tipos climáticos, geomorfología pe-
demontana, formas de erosión, formas de acumulación.

A B S T R A C T — “Analysis of the geomorphological environments of the Rio Acequiones basin


(Trancas, Tucumán) using interpretation of aerial photography and climatic factors”. The Río Acequiones
basin is located in the north of the Tapia-Trancas Valley, Tucumán province, with W-E runoff trend. The
city of Trancas is located within the study area. In this paper an identification of geomorphologic units
in the area of Acequiones-Zárate Basin has been made. This work also studies the influence of climatic
parameters on the stability of geoforms, closely related to geological structure. The methodology consists
in the interpretation of aerial photographs and analysis of climatic data. The used methods were hydric
balance and methods of climate classification and relationships between these climatic parameters and the
morphogenetic processes. Finally, a geomorphological map was elaborated. Two erosion geoforms were
identified on the east slope of Alto de la Totora range, two accumulation forms in the pediment, and
several forms of fluvial origin in the influence zone of Acequiones and del Tala-Salí rivers.
K EYWORDS : Tapia-Trancas basin, morphodynamical processes, climate types, pediment geomorphology,
erosion forms, accumulation forms.

INTRODUCCIÓN

La depresión de origen tectónico Valle el Río Salí. El valle de Las Arcas represen-
de Choromoro o de Tapia-Trancas, en el ta el antiguo cauce del río Acequiones (Pa-
sector centro-norte de la provincia de Tu- trilleau et al., 1987). La generación de los
cumán, limitada al Oeste por Cumbres diferentes niveles pedemontanos, junto a la
Calchaquíes y al Este por las sierras del presencia cercana al eje del valle del Río
noreste tucumano, está localmente domi- Salí de afloramientos de edad cretácico-
nada por condiciones de clima semiárido. terciaria, aporta al área una morfología
Hacia al Oeste se incrementan las precipi- particular intensamente ligada a la estruc-
taciones, en el flanco oriental de Cumbres tura, a las condiciones climáticas de la
Calchaquíes. región y a la dinámica hídrica actual.
Dos niveles pedemontanos truncan los La geología de la cuenca fue estudiada
depósitos cretácicos y terciarios adosados por varios autores como Bossi (1969,
a las Cumbres Calchaquíes. El río Acequio- 1984), Bossi y Gavriloff (1998), Carta
nes o Zárate conforma uno de los valles Geológica 2766 II San Miguel de Tucu-
fluviales que surcan los depósitos precua- mán-SEGEMAR (1999). Los aspectos de la
ternarios para desembocar finalmente en estructura regional fueron estudiados por

Recibido: 07/12/06 – Aceptado: 06/07/07


20 S . V. P á e z : A n á l i s i s d e l o s a m b i e n t e s g e o m o r f o l ó g i c o s d e l a c u e n c a d e l R í o A c e q u i o n e s

varios autores, entre ellos uno de los más tenidos del balance para una caracteriza-
recientes, Mon y Mansilla (1998). El clima ción del área volcando los valores de tem-
ha sido estudiado regionalmente por Mi- peratura media anual (TMA) y precipitación
netti (1973), Minetti et al. (1979), Andrés en el gráfico adaptado de Wilson (1969), y
y Ricci (1980), Minetti (1999), mientras con el mismo criterio se determinaron los
Torres Bruchman (1975, 1978) analiza la procesos morfodinámicos actuantes en rela-
aplicación del balance hidrológico y dis- ción con los parámetros climáticos prome-
tintas clasificaciones climáticas al territo- dios mensuales de temperatura y precipita-
rio de la provincia de Tucumán. ción para la zona de estudio.
El objetivo de este trabajo es determi- Sobre la base de la fotointerpretación
nar los ambientes geomorfológicos, las for- del área a escala 1:50.000, se confeccionó
mas del paisaje actual y la influencia de el mapa geomorfológico que luego fue
los parámetros climáticos en las condicio- controlado en campo y llevado a formato
nes imperantes para su formación, así digital.
como en la estabilidad de esas geoformas.
Si bien la geomorfología de las distintas CARACTERÍSTICAS
regiones de la provincia fue descripta por DE LA ZONA DE ESTUDIO
Sayago et al. (1984, 1998), tal descripción
es a escala regional. Este trabajo apunta a Geología y topografía.— La cuenca se lo-
un análisis de las unidades geomorfológi- caliza en el sector centro–norte del valle
cas de esta zona en particular. Hacia el de Tapia-Trancas o Valle de Choromoro,
Oeste de los límites de este trabajo Guido comprendido en el Departamento Trancas
(1987) estudia en detalle la geomorfología de la Provincia de Tucumán. Se accede a
de la Cuenca del Río Tipas, aledaña a la la zona desde la ciudad de San Miguel de
cuenca del río Acequiones. Tucumán, 89 km al Norte por la Ruta Na-
cional Nº 9. El río Acequiones se origina
METODOLOGÍA
al Oeste, en la vertiente oriental de Cum-
bres Calchaquíes, con la confluencia de
Se realizó el análisis estereoscópico de los ríos Chulca, Tipas y Tacanas y drena
fotografías aéreas a escala 1:50.000 co- hacia el Este hasta su desembocadura don-
rrespondientes a los vuelos de la década de se une con el río del Tala para formar
60/70 que cubren en su totalidad el área el río Salí. La topografía se caracteriza
de interés. por alturas entre los 1.500 msnm y menos
De los archivos de la Estación Experi- de 700 msnm con pendiente NW-SE (Carta
mental y Agroindustrial Obispo Colombres topográfica 2766 II – San Miguel de Tucu-
se obtuvieron los registros de temperatura mán, IGM, 1985).
y precipitaciones de estaciones de la zona La geología está caracterizada por el
para dos periodos de 30 años comprendi- basamento de bajo grado metamórfico que
dos en el Siglo XX. Se utilizaron los datos conforma el núcleo de la sierra Alto de la
de cinco estaciones meteorológicas del Totora, parte del Sistema de Cumbres Cal-
área para el período 1920-1951 (estacio- chaquíes (Mon, 1972). En contacto discor-
nes de Trancas, Leocadio Paz, Ruiz de los dante erosivo se depositaron sedimentos
Llanos, San Pedro de Colalao y Benjamín mesozoicos y cenozoicos correspondientes
Paz), y de tres de ellas para 1961-1990 a la formación El Cadillal (Bossi, 1969),
(Leocadio Paz, Trancas y Benjamín Paz). de edad cretácica y constituida por arenis-
Se hizo el cálculo del balance hídrico cas y conglomerados brechosos y areniscas
con los datos mencionados por el método litofeldespáticas con rodados de origen
de Thornwaite (1948), según Torres Bruch- volcánico. El Terciario está representado
man (1975) y se compararon los resultados por la formación Río Loro (Bossi, 1969)
entre los dos períodos, correspondientes a del Paleoceno, con areniscas conglomerádi-
la primera y segunda mitad del Siglo XX. cas rosadas a rojizas, y formaciones del
También se compararon los resultados ob- Grupo Choromoro (Mon, 1972): 1- Subgru-
Acta geológica lilloana 20 (1): 19–28, 2007 21

po Carahuasi con edades entre Mioceno y a la Formación Ticucho (Bossi, l969), y


Plioceno, con las formaciones Río Salí las gravas, arenas, limos, loess y aglome-
(Ruiz Huidobro 1960) con arcilitas, mar- rados del Holoceno.
gas y limolitas con bancos de yeso y cali-
zas, India Muerta (Bossi, 1969) con are- Vegetación y suelos.— La vegetación es en
niscas y limolitas y Chulca (Porto y Danie- general xerófila de montaña con elemen-
lli, 1974) con areniscas conglomerádicas y tos de la provincia chaqueña. En la cerca-
2- Subgrupo Trancas, representado por li- nía de los cursos de agua hay ejemplares
molitas y conglomerados de la denomina- de mayor tamaño que varían a monte
da por Porto y Danielli (1974) formación mesófilo, con elementos de la Selva Basal
Acequiones. El Cuaternario está representa- al acercarnos hacia el Oeste a la zona con
do por los conglomerados de edad Pleisto- mayores precipitaciones, en el faldeo
cena que truncan las formaciones cretáci- oriental de Cumbres Calchaquíes (Andrés y
cas y terciarias y posiblemente corresponde Ricci, 1980)

Figura 1. Comparación de los balances hídricos de las estaciones


Trancas (dos períodos) y San Pedro de Colalao.
22 S . V. P á e z : A n á l i s i s d e l o s a m b i e n t e s g e o m o r f o l ó g i c o s d e l a c u e n c a d e l R í o A c e q u i o n e s

El desarrollo del suelo en este sector de Se analizaron los rangos de temperatu-


la cuenca fue descripto en forma regional ras y las características de las precipitacio-
por Sayago et al. (1998) de acuerdo a la nes y se determinó por el método de Köp-
clasificación del sistema norteamericano pen (1948) (Torres Bruchman, 1978) que
(Soil Taxonomy), con sus equivalentes de existen localmente dos tipos climáticos
la clasificación de la FAO (1989) (en Sa- cuyos límites son definidos por las isoter-
yago et al., 1998). Sobre las terrazas flu- mas medias anuales y del mes más cálido
viales, con cubierta loessica, los suelos así como por las precipitaciones registra-
son del orden molisoles con horizonte su- das en las estaciones consideradas, en cla-
perficial oscuro y profundo, ricos en bases ra correspondencia con la topografía:
y materia orgánica. En los niveles de pie- A) Cwbk: hacia el Oeste, caracteriza
demonte ese autor describe la presencia un clima templado moderado lluvioso con
de suelos del Orden Entisoles, es decir re- la temperatura del mes más frío entre 18
cientes, escasamente desarrollados. La acti- y –3º C (C). El invierno es seco no rigu-
vidad agrícola se desarrolla en las zonas roso y en el mes más lluvioso de verano
bajas donde hay mayor desarrollo de sue- llueve más de diez veces lo que en el mes
los, lo que los hace aptos para el cultivo. más seco de invierno (w). La temperatura
de cuatro meses es mayor de 10º C y la
Clima.— El Valle de Choromoro o de Ta- del mes más cálido es menor de 22º C
pia-Trancas está comprendido geográfica- (b). La TMA es inferior a 18º C y la del
mente en una región mesotermal de clima mes más cálido mayor (k). En cuanto a
continental cálido templado con invierno las precipitaciones, por ejemplo en la esta-
seco (Andrés y Ricci, 1980). Localmente, ción San Pedro de Colalao las precipita-
éste sector de la cuenca de Tapia-Trancas ciones en enero, el mes más lluvioso, son
está dominado por condiciones de clima de un promedio de 133 mm, más de diez
semiárido como consecuencia de la inte- veces lo que en los meses de invierno en
rrupción de la circulación de los vientos que no hay lluvias.
húmedos del anticiclón del Atlántico por B) Bshwa: en el piedemonte y centro
la presencia de las sierras del noreste tu- del valle coexisten la escasez de precipita-
cumano, inmediatamente al Este de la ciones y grandes pérdidas por evapotrans-
cuenca, en posición meridional. Este factor piración que es proporcional a la tempera-
le confiere un carácter especial de aridez tura (B). La vegetación es xerófila (S).
que lo aísla del esquema climático regio- Hay lluvias estivales y en el mes más llu-
nal. Hacia el Oeste se incrementan las vioso las precipitaciones son diez veces
precipitaciones en el flanco oriental de mayores que las del mes más seco (w).
Cumbres Calchaquíes, con valores de pre- La TMA es superior y la media del mes
cipitación de hasta 600 mm en la estación más frío inferior a 18º C (h), y la media
meteorológica de San Pedro de Colalao. del mes más cálido mayor que 22º C (a).
En la cuenca la temperatura media En cuanto a las precipitaciones, por ejem-
anual (TMA) oscila entre 14,5º y 19,8ºC, plo en la estación Leocadio Paz las preci-
y las precipitaciones entre 402 y 552 mm pitaciones en enero, el mes más lluvioso,
según los registros para el período 1921- son de un promedio de 104 mm, más de
1950. En la ciudad de Trancas, único cen- diez veces lo que en los meses de invierno
tro urbano importante en el área, la TMA en que no hay lluvias.
es de 19,6ºC, con un máximo promedio El Balance Hidrológico, calculado se-
en el mes de enero de 24,6ºC y un míni- gún el método propuesto por Thornthwaite
mo en junio de 13,1ºC. Para el mismo en 1948 (Torres Bruchman, 1978), refleja
período las precipitaciones alcanzan un los rasgos principales de la dinámica cli-
promedio de 402 mm, el más bajo medido mática, acotando los períodos excedentes
en la zona de estudio, con las máximas y deficitarios del recurso hídrico de los
lluvias en verano y las mínimas entre cuales, anualmente, el déficit domina en
mayo y setiembre. detrimento de posibles excedentes, casi en
Acta geológica lilloana 20 (1): 19–28, 2007 23

el 100% del área considerada. Por ejemplo RESULTADOS


se calcula para la estación Trancas, en el
período 1921-1950 un déficit de 653,2 Unidades geomorfológicas.— Las caracterís-
mm (figura 1-a). El período de disponibi- ticas distintivas de las unidades geomorfo-
lidad de agua se restringe al sector cerca- lógicas en la zona permitieron el mapeo
no a la localidad de San Pedro de Cola- de las mismas (figura 2) con base en el
lao y solamente entre los meses de diciem- análisis estereoscópico de fotografías aé-
bre y marzo (figura 1-c). reas. Son las siguientes:

Figura 2. Mapa geomorfológico.


24 S . V. P á e z : A n á l i s i s d e l o s a m b i e n t e s g e o m o r f o l ó g i c o s d e l a c u e n c a d e l R í o A c e q u i o n e s

Siguiendo el criterio de Strahler (1981) reoscópico un nivel de terrazas bien defini-


se identificaron formas de erosión y for- do y uno incipiente más bajo.
mas de acumulación o deposicionales. En la margen Oeste del río del Tala se
Formas de erosión: Localizados en los observaron dos niveles de terrazas de ca-
sectores occidental y centro del área se racterísticas similares pero de mayor exten-
identifican dos tipos, genéticamente dife- sión areal. Al noreste de la zona se obser-
rentes, de vertientes de erosión: Por un va, sobre el nivel superior, una serie de
lado la vertiente oriental de las Cumbres meandros abandonados, evidencias de una
Calchaquíes, localmente Alto de la Totora, actividad fluvial antigua que expresa el
de más de 1.500 msnm, que recibe los carácter de madurez del río.
vientos húmedos del sudeste no retenidos El valle de Las Arcas muestra el desa-
por las sierras del noreste tucumano, pre- rrollo de niveles aterrazados que se inter-
senta mayor desarrollo de la vegetación pretan como el antiguo cauce del río Ace-
que las laderas con otras exposiciones que, quiones (Patrilleau et al., 1987) cuyos de-
como el faldeo occidental de la Sierra de pósitos de acarreo, entre 10 y 20 m de
Medina y la parte central del Valle de profundidad, fueron atravesados por las
Choromoro, se encuentran a sotavento de perforaciones para la captación de agua
las mencionadas corrientes, con cotas en subterránea, por debajo de la cubierta li-
la zona de estudio inferiores a los 700 moloésica hoy bajo cultivo.
msnm hacia el centro del valle. Esta situa- Los principales ríos y arroyos que dre-
ción atenúa los procesos actuantes, dado nan la región presentan marcado control
que la vegetación disminuye los procesos estructural (figura 2). Son de régimen per-
de remoción en masa. La otra categoría manente, con crecidas de características
está representada por un grupo de loma- torrenciales en verano y menor caudal en
das con núcleo Terciario expuesto. Están invierno. El río del Tala-Salí, principal
adosadas al núcleo de basamento al Oeste colector de la región, exhibe característi-
y hacia el Este emergen en el área pede- cas meandrantes, evidencia de madurez
montana mediante un sistema de fallas de respecto a sus tributarios.
rumbo general NNE-SSW. De escasa altu- Los restantes cursos de agua son de ré-
ra, se encuentran bajo la acción de las gimen estacional, drenan las lomadas cre-
corrientes de agua actuales. tácico-terciarias y los sedimentos cuaterna-
Formas de acumulación: Dos niveles rios que rellenan los sectores deprimidos.
pedemontanos están constituidos por sedi- Formas de los valles: Los diferentes ti-
mentos conglomerádicos filíticos y pizarro- pos de rocas aflorantes dan a los valles
sos de granulometría diversa con intercala- labrados en ellas características particula-
ciones de cuerpos arenosos y limosos: El res. En los desarrollados sobre el basa-
más elevado y antiguo en contacto con el mento, de baja permeabilidad secundaria,
bloque montañoso Alto de la Totora se domina el escurrimiento sobre la infiltra-
encuentra mejor conservado junto a la sie- ción y su diseño es en V. Las escarpas se
rra, con una altura máxima aproximada suavizan a medida que se acercan a los
de 1.200 msnm (Hoja Topográfica San Mi- ríos colectores. Esto ocurre en los cauces
guel de Tucumán, 1999) y en lomadas re- temporales del faldeo oriental del Alto de
lícticas mesetiformes hacia el centro del la Totora.
valle, cuyas alturas máximas aproximadas Los valles desarrollados sobre sedimenti-
están alrededor de los 800 msnm. tas cretácicas, terciarias y cuaternarias, por
Formas de origen fluvial: Estas unida- la naturaleza del material, presentan un
des se disponen en correspondencia con los diseño más suavizado. En estos domina la
rasgos estructurales del área. En la cuenca infiltración sobre el escurrimiento. Cuando
del río Acequiones, que al igual que los las corrientes superficiales pasan de la zona
demás ríos del valle de Tapia-Trancas está serrana al piedemonte, donde los materia-
controlado por la estructura (Sayago et les son más fácilmente erosionables y dis-
al., l984), se observó en el análisis este- minuye la pendiente, depositan sedimentos,
Acta geológica lilloana 20 (1): 19–28, 2007 25

constituyendo valles de fondo plano. Estas precipitaciones hacia el Oeste, en la esta-


características se repiten en el resto de los ción San Pedro de Colalao, se desplazan en
cursos de agua y principalmente en el río los meses de verano al campo del clima
Acequiones. templado húmedo, restringiéndose el domi-
nio del clima árido en un mes menos que
Procesos morfodinámicos actuantes de acuer- en las otras estaciones y con promedios cer-
do a la metodología de Wilson.— La rela- canos al límite con lo semiárido.
ción del clima con la morfodinámica está De igual manera, la importancia del
dada, en los diferentes sectores del área de clima estacional en la intensidad de estos
estudio, por la medida en que intervienen procesos, remitiéndonos al gráfico de Wil-
los parámetros climáticos en la génesis de son (1969) (figura 4) que considera las
las geoformas y en la dinámica de los pro- medias anuales, se estima mínima a mo-
cesos actuales. Los datos meteorológicos derada para la meteorización Química,
están localmente vinculados a la longitud Hídrica y Remoción en Masa, moderada
geográfica. En el análisis de los procesos para la Meteorización Mecánica, pero con
morfodinámicos, se observa que al volcar una Erosión Eólica máxima en los sectores
los pares temperatura/precipitación media del centro del valle. Hacia el Oeste, don-
mensual en el cuadro adaptado de Wilson de la temperatura decrece y se incremen-
(1969) (figura 3), la influencia del clima tan las precipitaciones, la Erosión Hídrica
se asemeja en las estaciones de Trancas, junto a la Meteorización Mecánica se vuel-
Leocadio Paz, Benjamín Paz y Ruiz de los ven de importancia moderada, con una
Llanos, casi alineados en la dirección N-S. Erosión Eólica moderada, que se incremen-
Estos valores correspondientes a la mayor ta en invierno.
parte, principio y fines del año, ocupan en
el gráfico el campo del clima semiárido. En DISCUSIÓN
los meses intermedios, mayo a setiembre, el
clima imperante, atendiendo este método, Los dos niveles identificados como for-
es árido. Los promedios de temperatura y mas de acumulación están adosados al

Figura 3. Procesos morfogenéticos y regímenes climáticos (adaptado de Wilson, 1969) para las esta-
ciones Trancas y San Pedro de Colalao.
26 S . V. P á e z : A n á l i s i s d e l o s a m b i e n t e s g e o m o r f o l ó g i c o s d e l a c u e n c a d e l R í o A c e q u i o n e s

núcleo de basamento y en algunos sectores De esta manera las escasas precipitacio-


en contacto también con los sedimentos nes participan en procesos de arroyada
terciarios. Su forma actual responde a la mantiforme sobre las geoformas, desgastan-
acción de corrientes temporales, producto do los sedimentos más antiguos, los que
de un clima probablemente más húmedo presentan progresivamente un aspecto de
que el de su formación y de una posible relictos mesetiformes. Esto se observa en las
reactivación tectónica (Guido, l987), con lomadas terciarias que por su litología va-
variación del nivel de base. El nivel infe- riada responde en forma diferencial a los
rior, más moderno y de mayor extensión, procesos. Sin embargo el nivel pedemonta-
se encuentra asociado a las corrientes de no de acumulación más antiguo, se presen-
agua actuales. Este fue formado por el ta en cambio más vulnerable debido a su
material proveniente de la erosión del pri- mayor granulometría, porosidad y menor
mero y ocupa los sectores deprimidos, compactación de sus sedimentos. Las loma-
producto de la destrucción del más anti- das relícticas continúan perdiendo material
guo (Sayago, l984) limitando al nivel de a favor de las formas más modernas y és-
terraza y los ríos de régimen temporal de tas a su vez sufren procesos de erosión en
la cuenca (Guido, op. cit.). surcos, exhibiendo las direcciones de esco-
La humedad retenida en el suelo facili- rrentía en los sectores más bajos.
taría los procesos de remoción en masa, Según Sayago et al. (1998) la edad de
sin embargo la mayor parte del año existe estos materiales es difícil de establecer
déficit de agua, los que se obtiene del ba- dado su carácter poligenético, aunque po-
lance hídrico de las estaciones meteoroló- drían hipotéticamente ser atribuidos al
gicas de la zona.

Figura 4. Importancia del clima estacional en la intensidad de los procesos morfodinámicos( Adaptado
de Wilson, 1969) para la estación Leocadio Paz.
Acta geológica lilloana 20 (1): 19–28, 2007 27

Pleistoceno Inferior-Medio y al Superior BIBLIOGRAFÍA


respectivamante, mientras la cubierta detrí-
tica que exhiben correspondería al Pleisto- Andrés, S de y T. Ricci. 1980. Geografía de Tucu-
mán. Facultad de Filosofía y Letras, UNT.
ceno Tardío y Holoceno, por extrapolación Publ. 1299, 175 pp.
de dataciones en depósitos similares en la Bossi, G. E., 1969. Geología y estratigrafía del
provincia. sector sur del valle de Choromoro. Acta
Geológica Lilloana X: 2, 17-64.
Bossi, G. E. 1984. Terciario. En: Aceñolaza, F.,
CONCLUSIONES Bossi, G., Toselli, A. (editores). Geología de
Tucumán, Public. Esp. Colegio de Geólogos
Los ambientes geomorfológicos son: 1) de Tucumán: 67-79.
vertientes de erosión: a) vertiente oriental Bossi, G. E.; I. Gavriloff y G. Esteban. 1998. Ter-
ciario. Estratigrafía, Bioestratigrafía y Paleo-
del Alto de la Totora; b) lomadas con nú- geografía. En Gianfrancisco, M., Puchulu,
cleo Terciario expuesto. 2) dos niveles pe- M., de Cabrera, J. y Aceñolaza, G. (edito-
demontanos: a) uno más elevado y anti- res). Geología de Tucumán. Public. Esp.
Colegio de Graduados en Ciencias Geológi-
guo junto a la sierra y en lomadas relícti- cas. Tucumán: 87-110.
cas; b) uno inferior, más moderno y exten- Carta topográfica de la República Argentina, escala
so, formado por el material la erosión del 1:250.000 - 2766 II - San Miguel de Tucu-
primero mán. 1985. IGM.
Carta Geológica de la República Argentina, escala
El Balance Hidrológico refleja los ras- 1:250.000 - 2766 II - San Miguel de Tucu-
gos principales de la dinámica climática: mán. 1999. SEGEMAR.
anualmente, el déficit hídrico domina en Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colom-
bres (EEAOC). 1997. Archivo del Departa-
detrimento de posibles excedentes casi en
mento de Agroclimatología. Tucumán.
el 100% del área considerada. Las geofor- Guido, E. Y. 1987. Geomorfología básica y aplicada
mas descriptas en la zona se encuentran en la cuenca del río Tipas, Dpto Trancas,
sujetas a esa dinámica, en particular a las Provincia de Tucumán. Facultad de Ciencias
Naturales e Instituto Miguel Lillo (Seminario
condiciones de mayor aridez hacia el cen- inédito): 139 pp.
tro del valle. Esto implica que al ser baja Minetti, J. 1973. el Régimen Pluviométrico de la
la humedad retenida en el suelo, las esca- Provincia de Tucumán. RAGA 27 (2): 223-
sas precipitaciones estacionales solo alcan- 228. Buenos Aires.
Minetti, J.; M. Ramírez y L. Suárez. 1979. Balance
zan a producir la arroyada mantiforme Hidrológico de la cuenca y subcuencas del
que va acumulando sedimentos en los sec- Río Salí. EEAOC. Misceláneas Nº 64. 52pp.
tores deprimidos en perjuicio de las for- Minetti, J. 1999. Atlas Climático del Noroeste Ar-
gentino. Laboratorio Climatológico Sudameri-
mas de los niveles superiores. cano- Fundación Caldenius, CONICET y
Los incrementos en las precipitaciones Facultad de Filosofía y Letras de la U.N.T.
estivales solo inciden en los valles de los (Inédito)
ríos Acequiones y del Tala, los que deben Mon, R. 1972. Esquema estructural de Tucumán,
Revista de la Asociación Geológica Argenti-
gran parte de su caudal a las lluvias pro- na 27,2: 223-228.
ducidas fuera del área de estudio. Como Mon, R y N. Mansilla. 1998. Estructura Geológica
resultado, posiblemente asociado a reacti- del Territorio Tucumano. En: Gianfrancisco,
M., Puchulu, M., de Cabrera, J. y Aceñola-
vaciones tectónicas y sin duda a periodos
za, G. (editores). Geología de Tucumán.
sucesivos de disminución de las precipita- Public. Especial Colegio de Graduados en
ciones, existen hoy los dos niveles de te- Ciencias Geológicas. Tucumán: 147-154.
rrazas. Por otro lado allí es donde prospe- Patrilleau, R. D.; B. Bakarcic y Calvetty Amboni.
1987. Estudio hidrogeológico en la zona de
ra en mayor medida la vegetación natural, Trancas, Provincia de Tucumán. XI Congre-
a excepción de los sectores cercanos a la so Geológico Argentino, Tucumán, Actas:
zona serrana que recibe mayores precipita- 219-222.
ciones, donde la vegetación es más abun- Porto, J. C. y C. Danielli 1974. Geología del sector
noroeste de Trancas, Provincia de Tucumán.
dante e incorpora elementos de la selva Acta geológica lilloana 12 (12): 189-230.
basal. Ruiz Huidobro, O. 1960. Contribución a la Geología
de Cumbres Calchaquíes y Sierra del Acon-
quija, Tucumán-Catamarca. Acta Geológica
Lilloana 8: 215-247.
28 S . V. P á e z : A n á l i s i s d e l o s a m b i e n t e s g e o m o r f o l ó g i c o s d e l a c u e n c a d e l R í o A c e q u i o n e s

Sayago, J. M.; L. Ratto y M. M. Collantes. 1984. Torres Bruchmann, E. 1975. El Balance Hidrológico:
Geomorfología. En: Aceñolaza, F., Bossi, G., su determinación y aplicaciones. Serie didác-
Toselli, A. (editores) Geología de Tucumán. tica Nº 39, FAZ, U.N.T. 34 pp.
Public. Esp. Colegio de Graduados en Cien- Torres Bruchmann, E. 1978. Las clasificaciones cli-
cias Geológicas. Tucumán: 143-153. máticas de Köppen y Thornthwaite. Serie
Sayago, J. M.; M. M. Collantes y M. A. Toledo. didáctica Nº 48, FAZ, U.N.T. 27 pp.
1998. Geomorfología. En: Gianfrancisco, M., Wilson, L. 1969. Les relation entre les proceses
M. Puchulu, J. de Cabrera y G. Aceñolaza geomorphologiques et le climat moderne
(editores). Geología de Tucumán. Public. méthode de paleoclimatologie. Revue de
Especial Colegio de Graduados en Ciencias Géographie Physique et de Géologie Dinámi-
Geológicas. Tucumán: 241-258 que. Vol. XI, Fasc. 3.
Strahler, A. N. 1981. Geografía Física, Ediciones
Omega, Barcelona: 83 pp

You might also like