You are on page 1of 13

SALA ACCIDENTAL

MAGISTRADO PONENTE DOCTOR HÉCTOR MANUEL CORONADO


FLORES

La Sala Séptima de la Corte de Apelaciones del Circuito Judicial Penal del


Área Metropolitana de Caracas, integrada por los jueces JESÚS ORANGEL
GARCÍA, DEYANIRA NIEVES BASTIDAS (ponente) y NORMA ELISA
SANDOVAL MORENO, en fecha 3 de septiembre de 2004, declaró sin lugar el
recurso de apelación propuesto por la defensa contra la decisión del Juzgado
Vigésimo Primero de Primera Instancia en Función de Juicio del mismo Circuito
Judicial, que condenó al acusado RICARDO ELÍAS CORIAT GONZÁLEZ,
venezolano, con cédula de identidad Nº 11.228.477, a la pena de DOCE (12)
AÑOS, CUATRO (4) MESES y UN (1) DÍA DE PRESIDIO, por la comisión de
los delitos de HOMICIDIO INTENCIONAL EN GRADO DE FRUSTRACIÓN,
previsto en el artículo 407, en relación con el 80 y 77, ordinales 8º y 14, del Código
Penal, en perjuicio de la ciudadana DOLORES SOLANO DE INSERNY y ROBO
EN LA MODALIDAD DE ARREBATÓN, tipificado en el artículo 458, en
concordancia con el 77, ordinales 8º y 14, eiusdem, en perjuicio de YOLANDA
ARANGUREN DE SOLANO.

Contra dicho fallo propuso recurso de casación la abogada ZULAY


MALDONADO, Defensora Público Quincuagésimo Noveno Penal del Área
Metropolitana de Caracas, en su carácter de defensora del acusado.

Transcurrido el lapso legal para la contestación del recurso, sin que se llevara
a cabo la realización de tal acto, fueron remitidas las actuaciones al Tribunal
Supremo de Justicia. Recibido el expediente, el día 24 de octubre de 2004, se dio
cuenta en Sala de Casación Penal y se designó ponente al Magistrado Suplente
Doctor JUAN BAUTISTA RODRÍGUEZ DÍAZ. Posteriormente, ante la
designación por parte de la Asamblea Nacional, en fecha 13 de diciembre de 2004,
de los Magistrados Principales y Suplentes del Tribunal Supremo de Justicia,
correspondió la ponencia al Magistrado Doctor HÉCTOR MANUEL CORONADO
FLORES, quien con tal carácter suscribe el presente fallo.

Por cuanto fue declarada con lugar la inhibición de la Magistrada Doctora


DEYANIRA NIEVES BASTIDAS y aceptada la convocatoria hecha al Doctor
FERNANDO GÓMEZ, en su carácter de Tercer Suplente de esta Sala, se constituyó
la Sala Accidental que habrá de conocer de la presente causa.

Cumplidos los trámites procedimentales del caso, pasa la Sala a pronunciarse


sobre la admisibilidad o desestimación del recurso propuesto en los términos
siguientes:

DE LOS HECHOS
El Juzgado Vigésimo Primero de Primera Instancia en Función de Juicio del
Circuito Judicial Penal del Área Metropolitana de Caracas, dio por probados los
siguientes hechos:

“...el día 26 de Agosto del año 2002, aproximadamente a las 10:00


horas de la mañana, se presentó en la residencia de la ciudadana SOLANO
DE INSERNI DOLORES, de 75 años de edad, ubicada en la avenida San
Felipe con Séptima Transversal de Altamira, Quinta Arsolfina; pidiendo un
poco de comida y como en otras ocasiones la mencionada ciudadana se la
busca y le sirve una arepa rellena con queso y un café con leche, luego le
brinda agua fría, al traérsela, en ese momento el acusado CORIAT
GONZÁLEZ RICARDO ELÍAS, aprovecha y se le abalanza encima
agarrándola con las manos alrededor del cuello, haciéndole tanta presión, que
hace evidente la falta de oxigeno y asfixiándola realizando todo lo necesario
para causarle la muerte, sin embargo, no lo logra por circunstancias
independientes de su voluntad; ya que la ciudadana DOLORES SOLANO, al
ver que la estaban matando logra sacar fuerza y comienza a gritar pidiendo
auxilio, acudiendo a su llamado su cuñada YOLANDA DE SOLANO y la
señora que labora en su casa como doméstica, quienes acuden de inmediato
ya que se encontraban en dicha residencia, y cuando ven que el acusado la
está asfixiando intervienen para ayudarla, sin embargo el acusado CORIAT
GONZÁLEZ RICARDO ELÍAS, continua forcejeando y al percatarse el
acusado que no puede alcanzar el resultado delictivo, logra darle un manotazo
a la señora YOLANDA DE SOLANO, arrebatándole una cadena de metal de
color amarillo, que tenía en su cuello para el momento en que ocurrió el
hecho, presentándose en la vivienda el ciudadano JOSÉ LUIS BRITO, quien
es un vecino del sector al escuchar los gritos de auxilio, y observar como el
acusado tenía agarrada a la ciudadana DOLORES SOLANO, y de inmediato
interviene, comenzando a forcejear con el acusado hasta que logra dominarlo,
y logra amarrarle las manos con un cable de teléfono y salió a buscar ayuda,
logrando avistar a dos funcionarios de la Policía del Municipio Chacao que
luego se identificaron como CABRERA GUSTAVO y JOSÉ RODRÍGUEZ,
quienes se presentan en el lugar de los hechos, y al practicarle la inspección
personal al acusado, como lo establece la normativa legal, le incautaron en la
mano derecha una cadena, elaborada en metal de color amarillo, de
aproximadamente 46 centímetros de largo, procediendo a practicarle la
aprehensión definitiva, previa lectura de sus derechos constitucionales.”
DEL RECURSO

Con fundamento en el artículo 460 del Código Orgánico Procesal Penal, la


impugnante denunció la infracción del artículo 13 eiusdem, por falta de aplicación.
Expresa que la Corte de Apelaciones al resolver la apelación propuesta se limitó a
señalar que la recurrente debió alegar contradicción y no ilogicidad en la
motivación, dejando de resolver el planteamiento de la defensa, referido a que el
acusado fue condenado por Homicidio Intencional en Grado de Frustración, a pesar
de que “todos los testigos, incluyendo a la víctima, hablaron de robo, hecho que
además fue reconocido por el acusado, pues se demostró que la violencia que éste
ejerció contra la ciudadana DOLORES SOLANO, estuvo dirigida únicamente a
despojarla de una cadena y nunca encaminada a quitarle la vida”.

La Sala, para decidir observa:

En atención a lo dispuesto en los artículos 257 de la Constitución de la


República Bolivariana de Venezuela y 18 de la Ley Orgánica del Tribunal Supremo
de Justicia, en aras de garantizar la tutela judicial efectiva de los derechos e intereses
de las partes, la Sala, antes de conocer el recurso de casación propuesto, ha revisado
las actas procesales y observa que existe un vicio que hace procedente la casación
del fallo. A tal efecto, se observa:

El Juzgado Vigésimo Primero de Primera Instancia en Función de Juicio del


Circuito Judicial Penal del Área Metropolitana de Caracas, dio por probada la
culpabilidad del acusado en la comisión del delito de Homicidio Frustrado, en
perjuicio de la ciudadana DOLORES SOLANO DE INSERNY, para ello estableció
lo siguiente:
“En cuanto a lo señalado por el acusado CORIAT GONZALEZ
RICARDO ELÍAS, en el sentido de que no tenía la intención de cometer el
delito de Homicidio, sólo de arrebatarle la cadena a la señora DOLORES
SOLANO, se observa que a pesar de que transcurrió un tiempo suficiente
para que el acusado le arrebatara la cadena antes de que la prenombrada
ciudadana gritara solicitando ayuda, en ningún momento dirigió la violencia
para arrebatarle la cadena, ni tampoco le señaló que se la entregara, tal como
se desprende de la declaración rendida por la ciudadana DOLORES
SOLANO, sino que procedió a ejercer presión en su cuello con la finalidad de
asfixiarla y causarle la muerte.....OMISIS......se pudo demostrar que la
violencia y la fuerza física ejercida por el acusado a la prenombrada
ciudadana era con la intención de causarle un daño irreparable, como el de
quitarle la vida, cuando intento asfixiarla, diagnosticándole múltiples
excoriaciones en la cara y cuello por el Dr. JOSÉ GONZÁLEZ VISO,
adscrito al Servicio Médico de la Policía del Municipio Chacao.. Así las
cosas, esta juzgadora atendiendo a las reglas de la sana crítica, de la lógica,
los conocimientos científicos y las máximas de experiencia referidos en el
artículo 22 del Código Orgánico Procesal Penal, considera que del acervo
probatorio antes descrito y del cual fuera objeto del contradictorio, ha
quedado plenamente demostrado que el ciudadano CORIAT GONZALEZ
RICARDO ELÍAS, fue la persona que el día 26 de agosto del año 2002,
siendo aproximadamente las 10:00 horas de la mañana, se presentó en la
residencia de la señora DOLORES SOLANO, pidiéndole comida, y una vez
que le entregara un vaso con agua se le abalanza, ejerciendo presión en su
cuello para asfixiarla con la intención de quitarle la vida, no pudiendo
lograrlo, en virtud de que comienza a gritar, acudiendo en su auxilio su
cuñada YOLANDA DE SOLANO y la señora de servicio ARACELIS SAN
JUAN, quienes se encontraban en la cocina de la quinta, donde ocurrieron los
hechos, así como también el vecino JOSÉ LUIS BRITO, de 39 años, quien
logró neutralizar al acusado por medio de la fuerza física, amarrándole las
manos con un cable y observando en una de sus manos una cadena que le
había arrebatado a la señora YOLANDA, cuando forcejeaba con el acusado
ayudando a su cuñada....”

El acusado en su declaración rendida en el juicio oral y público, manifestó


que:
“...las señoras tienen razón en manifestar de que en ciertas
oportunidades fui a la casa a pedir alimentos, pero era una época en
que yo consumía drogas, estaba en el mundo de la calle y lo que me
llevó a cometer el delito era que yo tenía una deuda por drogas y me
sentía presionado porque no tenía con que pagar y cuando yo le fui a
pedir alimento y le vi la cadena a la señora, ciertamente cuando veo la
cadena, yo maquino, le quito la cadena y con eso solvento mi
problema, la señora me da la arepa y el café, la mando a buscar agua,
cuando ella viene de nuevo le zumbo el arrebatón para quitarle la
cadena, no llegue a alcanzarla y entonces la señora se metió para
adentro y yo me metí adentro y ciertamente le zumbe varios
arrebatones, pero yo no logré alcanzarla en ningún momento y
ciertamente la otra señora me empezó a zumbar objetos con la señora
de servicio, en un momento que yo le tengo la mano, sujetando la
cadena a la señora, entonces en vista de que no puedo agarrar esa, me
llené de avaricia en el momento que quería robarme las dos cadenas al
mismo tiempo, la de una y la de la otra, busco de agarrar una, pero no
había logrado alcanzarla, ya había perdido la posibilidad, pero como
llegó la otra señora a lanzarme varios objeto, yo llegue y le quité la de
la otra señora, pero realmente estoy arrepentido de esto, en ese
momento estaba drogado, pero yo le había cogido cariño por lo que
ellas hacían conmigo, de darme comida...”.

Por su parte, la ciudadana DOLORES SOLANO DE INSERNY en su


declaración rendida en el juicio oral y público, expresó:

“...este señor había ido varias veces a pedir que le dieran algo de
comer y yo siempre le daba......entonces caliento una arepa en el
microondas, caliento el café con leche lo agarra y me dice que le
buscara un poquito de agua fría, cuando le entregué el vaso de agua,
haló la reja, la abrió y me trató de quitar una cadenita que tenía ....lo
empujo, él me empezó a manotear para darme y yo tratando de buscar
la puerta de madera para trancarla, pero él se fue detrás de mi, me
agarró por el cuello me clavó el dedo y entonces empecé a gritar y
salió mi cuñada y empezó a darle golpes....”

A la pregunta formulada por la defensa a la ciudadana DOLORES SOLANO


DE INSERNY en relación a que si creía que el acusado entró a su casa con el
propósito de matarla, respondió que no. Igualmente manifestó que no presentó
lesiones de gravedad, que tenía el cuello rojo, porque era por donde la había
agarrado y que no fue a la medicatura forense porque no tenía heridas.
Asimismo, el ciudadano JOSÉ RAFAEL GONZÁLEZ VISO, médico
adscrito al Servicio Médico de la Policía del Municipio Chacao, en su declaración
rendida en el juicio oral, manifestó que:
“....la señora ingresa angustiada ella refería para ese momento
tener un dolor de cabeza muy fuerte y refería ser hipertensa.......para
ese momento presentaba lesiones leves, excoriaciones en el cuello que
iba prácticamente en la línea media hasta la parte posterior, presentaba
un aumento de volumen leve en la parte posterior, excoriación en el
labio inferior y una excoriación nasal del lado izquierdo. La paciente
dentro de todo estaba en buenas condiciones generales...”

A preguntas formuladas, el nombrado ciudadano aclaró que: “...las


excoriaciones son lesiones que desde el punto de vista médico tienen un tratamiento
local ... muchas veces la excoriación como tal no implica el daño, pero por ejemplo
si vamos a un caso de ahorcamiento o sofocamiento no es tanto la magnitud de la
lesión de la piel, sino la lesión interna....”.

En el presente caso, la Juez de Juicio condenó al acusado RICARDO ELÍAS


CORIAT GONZÁLEZ, a la pena de doce (12) años, cuatro (4) meses y un (1) día de
presidio, por la comisión de los delitos de Homicidio Intencional en grado de
Frustración, en perjuicio de la ciudadana DOLORES SOLANO DE INSERNY y
Robo en la modalidad de Arrebatón, en perjuicio de YOLANDA DE SOLANO.

El delito de homicidio frustrado supone siempre la intención o dolo, es decir,


la intención de matar. Dicho animus nocendi deberá deducirse de la naturaleza del
arma empleada, el número y dirección de las heridas y acudiendo a signos objetivos
anteriores de la acción (existencia de amenazas, personalidad del agresor y de la
víctima y relaciones entre ellos); coetáneos con dicha acción (región afectada por la
agresión, manifestación de las personas involucradas, reiteración de los actos
agresivos) y posteriores a la acción delictiva (palabras y actitud del agresor ante el
resultado producido). Estos criterios son indicativos de la intención del sujeto.
En consideración de la Sala, en el presente caso la juzgadora no dejó reflejado
en el fallo que haya analizado los criterios expuestos a los fines de dejar
suficientemente probada la intención del acusado de matar a la ciudadana
DOLORES SOLANO DE INSERNY. La juzgadora, como se observa de la
trascripción hecha anteriormente, se limitó a desvirtuar el alegato de la defensa en
cuanto a la falta de intención del acusado de causar un grave daño a la nombrada
ciudadana y de que la misma estuvo dirigida a robarle la cadena que llevaba en su
cuello, refiriendo la juzgadora que la violencia del acusado no estuvo dirigida a
quitarle la cadena a la víctima sino que procedió a ejercer presión en su cuello con la
finalidad de asfixiarla y causarle la muerte, lo que no logró, según la juez por la
intervención de las ciudadanas YOLANDA DE SOLANO y ARACELIS SAN
JUAN.

La intención del acusado de causarle la muerte a la ciudadana DOLORES


SOLANO DE INSERNY, lo cual era indispensable a los fines de la declaratoria de
su culpabilidad en el delito de Homicidio Frustrado, no quedó suficientemente
probado, razón por la cual la Sala absuelve al acusado RICARDO ELÍAS CORIAT
GONZÁLEZ, del delito de Homicidio Frustrado previsto en el artículo 407, en
relación con el 80, del Código Penal, materia de la acusación fiscal. Quedando
condenado el nombrado acusado por el delito de Robo en la modalidad de
Arrebatón, a la pena impuesta por el juzgador de la primera instancia, vale decir, a
dieciocho (18) meses de prisión. Así se declara.

DECISIÓN

Por las razones antes expuestas, este Tribunal Supremo de Justicia, en Sala de
Casación Penal, administrando Justicia en nombre de la República y por autoridad
de la ley, anula, de oficio, la sentencia dictada por el Juzgado Vigésimo Primero de
Primera Instancia en Función de Juicio del Circuito Judicial Penal del Área
Metropolitana de Caracas, de fecha 4 de junio de 2004, en cuanto a la condenatoria
del acusado por el delito de Homicidio Frustrado, así como la decisión dictada por la
Sala Séptima de la Corte de Apelaciones del mismo Circuito Judicial de fecha 3 de
septiembre de 2004, la cual no advirtió el vicio en el cual incurrió el juzgador de la
primera instancia, y absuelve al acusado RICARDO ELÍAS CORIAT
GONZÁLEZ, venezolano, con cédula de identidad Nº 11.228.477, del delito de
Homicidio Frustrado, previsto en el artículo 407, en relación con el 80, del Código
Penal, materia de la acusación fiscal y ratifica la pena de dieciocho (18) meses de
prisión impuesta al nombrado acusado por la comisión del delito de Robo en la
modalidad de Arrebatón, previsto en el artículo 458, único aparte, eiusdem.

Publíquese, regístrese y bájese el expediente.

Dada, firmada y sellada en el Salón de Audiencias del Tribunal Supremo


de Justicia, en Sala de Casación Penal, en Caracas, a los doce ( 12 ) días del mes de
agosto de 2005. Años 195° de la Independencia y 146° de la Federación.

El Magistrado Presidente de la Sala,

ELADIO APONTE APONTE

El Magistrado Vicepresidente,
HÉCTOR CORONADO FLORES
Ponente

Los Magistrados,

ALEJANDRO ANGULO FONTIVEROS

BLANCA ROSA MÁRMOL de LEÓN

FERNANDO GÓMEZ

La Secretaria de la Sala,

GLADYS HERNÁNDEZ GONZÁLEZ

HMCF/mj
Exp Nº 2004-0487

VOTO SALVADO

Quien suscribe, Blanca Rosa Mármol de León, Magistrada de la Sala de


Casación Penal del Tribunal Supremo de Justicia, salva su voto en la presente
decisión, con base en las siguientes consideraciones:
La mayoría de esta Sala ANULÓ DE OFICIO la sentencia dictada en fecha
4 de junio de 2004 por el Juzgado Vigésimo Primero de Primera Instancia en
Función de Juicio del Circuito Judicial Penal del Área Metropolitana de Caracas, así
como la decisión de fecha 3 de septiembre de 2004 dictada por la Sala Séptima de la
Corte de Apelaciones del mismo Circuito Judicial Penal y ORDENÓ la celebración
de un nuevo juicio oral contra el acusado RICARDO ELÍAS CORIAT
GONZÁLEZ.

Disiento de mis colegas Magistrados de la Sala de Casación Penal, en cuanto


a las razones dadas para ello, porque para arribar a tal decisión establecieron hechos
distintos a los dados por probados por el Tribunal de Juicio al momento de dictar
sentencia.
La Sala no puede analizar pruebas presentadas en el juicio oral, ni establecer
nuevos hechos, toda vez que ello le corresponde a los Jueces de Juicio, ante quienes
se presentan las pruebas en el debate oral, en virtud del principio de la inmediación
consagrada en el artículo 16 del Código Orgánico Procesal Penal.

Asimismo, considero que la Sala debe resolver y decidir conforme a lo


advertido por las partes en el recurso de casación, siempre y cuando de su
fundamentación se desprendan con claridad las infracciones cometidas por el fallo
contra el cual se recurre; proceder a la “nulidad de oficio” o desestimar el recurso de
casación por ser manifiestamente infundado y “revisarlo de oficio”, de acuerdo con
el artículo 257 de la Constitución de la República, obviando el procedimiento
establecido en el Código Orgánico Procesal Penal para resolver las causas viola el
debido proceso y el derecho a recurrir que tienen las partes que se sientan
perjudicadas por una decisión, así como también, el de ser oído públicamente (tutela
judicial efectiva). Este criterio ha sido sustentado en los siguientes votos:
03-0297 (mayo de 2004), 04-0266 (septiembre de 2004); 04-0439 (octubre de
2004); 04-0122 y 04-0462 (noviembre de 2004); 03-0356 y 03-0106 (diciembre de
2004); 03-0337, 04-0334, 03-0227 y 03-0406 (marzo de 2005); 03-0439, 05-0028,
04-0095, 03-0488 y 05-0067 (abril de 2005); 04-0065, 05-0100, 04-0376, 04-0460 y
04-0521 (mayo de 2005); 04-0586, 05-0021, 04-0346, 04-0497, 04-0574, 04-0466,
04-0337, 04-0507, 04-0208, 04-0046, 04-0245 y 04-0032 (junio de 2005); 04-0251,
04-0527, 05-0156, 05-0249, 05-0070, 04-0211, 05-0218, 05-0146, 04-0569, 05-
0274 y 05-0208 (julio de 2005).

En virtud de lo anterior y por no compartir la argumentación acogida por la


mayoría de la Sala, en defensa de la correcta aplicación de las leyes, quedan así
expresadas la razones del presente voto. Fecha ut supra.

El Magistrado Presidente,

Eladio Aponte Aponte

El Magistrado Vicepresidente, El Magistrado,

Héctor Coronado Flores Alejandro Angulo Fontiveros

La Magistrada Disidente, El Magistrado Suplente,

Blanca Rosa Mármol de León Fernando Gómez

La Secretaria,

Gladys Hernández González


BRMdL/hnq.
Exp. N° 04-0487 (HMCF)

You might also like