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PROTOCOLO DE ALERTA EPIDEMIOLOGICA EN BROTES POR

INFECCION NOSOCOMIAL 1

INTRODUCCION:
La infección nosocomial continúa siendo una preocupación en los hospitales
españoles, por lo que la vigilancia epidemiológica y control de la misma supone
una actividad prioritaria de las unidades de medicina preventiva. Los resultados
de esta actividad son de gran interés para la evaluación de la calidad
asistencial, ya que son indicadores fiables del proceso y resultados de la
estructura, organización y actividad del centro.
La prevalencia de infección nosocomial en los hospitales españoles ha ido
disminuyendo progresivamente, y según datos obtenidos del estudio
multicéntrico EPINE, ha pasado de un 8.45% en 1990 a un 6.90% en el año
2000, estabilizándose en los últimos cuatro años alrededor del 7%. Este
porcentaje representa una cifra muy aceptable en el contexto de los estudios
multicéntricos de prevalencia europeos y según los criterios de la OMS.

Prevalencia de brotes:
Se consideran casos pertenecientes a brotes (que generalmente se suceden
en agregados de unos pocos pacientes) de un 5-10% de los casos de IN.
Tras una revisión de todos los brotes de infección nosocomial estudiados por
los CDC entre los años 1980 y 1994 se constata que en los últimos años han
aumentado los brotes relacionados con instrumentos, productos y
procedimientos, las infecciones quirúrgicas y las bacteriemias. Los brotes por
microorganismos resistentes a los antibióticos como los producidos por
Estaphilococo aureus meticilin resistente (EAMR) o Acinetobacter spp están
afectando a las UCIs de muchos hospitales en Europa y Estados Unidos.
En Europa se constata una diferencia importante entre los países nórdicos en
que las cifras de resistencia de los microorganismos aislados en las UCIs son
significativamente menores que en los países del Sur y Centro de Europa,
atribuible a una política de antibióticos mas restrictiva y a las prácticas del
control de la infección. Asimismo se destaca que en los últimos años se han
originado brotes de infección nosocomial a partir de pacientes ingresados en
residencias de ancianos.

CONCEPTO DE ALERTA:

Definición de Infección Nosocomial:


Se define la infección nosocomial (IN), como aquella condición sistémica o
localizada resultante de una reacción adversa debida a la presencia de un

1
Elaborado por grupo de trabajo:
-Pedro Gonzalez de la Flor. Preventivista del H.Ciudad de Jaen.
-Montserrat Olmedo. Preventivista del H.SanAgustin de Linares
-Rosario Varela. Preventivista del H. San Juan de la Cruz de Ubeda
-Lourdes Ballesteros. Preventivista del H. Alto Guadalquivir de Andújar
-Loreto Lemus. S.M.Empresa del H. Princesa de España de Jaén.
-Lourdes Muñoz Collado. Delegación Provincial de Salud de Jaén.
agente infeccioso o de sus toxinas, que ocurre en un paciente ingresado y no
existen evidencias de que estuviera presente o en estado de incubación en el
momento del ingreso hospitalario actual, o que aparece después de la
hospitalización, dentro del periodo de incubación.2
• Aunque debieran ser tenidas en cuenta como nosocomiales las infecciones
que sufre el personal sanitario como consecuencia de su actividad laboral
transmitidas por contagio desde el paciente enfermo o portador
asintomático, dichas infecciones asociadas al riesgo laboral se excluyen de
la definición. Sin embargo, cuando se estudia un brote no pueden
ignorarse casos de infección en el personal asistencial porque pueden ser
origen de nuevos casos en los pacientes, por tanto la delimitación entre
estos dos tipos de infecciones nosocomiales deben quedar claramente
establecidas en la definición de caso.

Concepto de Alerta:
Se considera situación de alerta la aparición ó detección de un brote epidémico
hospitalario, frente al cual es necesario actuar de modo eficaz y urgente para
interrumpir su transmisión.

Concepto de Brote:
La ocurrencia de casos de una enferrmedad concreta, infecciosa o no por
encima de lo esperado, en el lugar y tiempo considerados.
El brote nosocomial es el brote epidémico que acontece sobre alguna infección
nosocomial, y se debe a un agente infeccioso único, por lo que el Brote por
infección nosocomial se definiría como:
Todo incremento significativo en la incidencia de una IN determinada, en
relación a los valores habituales de incidencia, y que normalmente se
caracteriza, además por:
- Se trata de una infección adquirida en el hospital durante su estancia, y no
estaba presente ni en periodo de incubación en el momento del ingreso.
- Presenta etiología común en todos los afectados aunque sean
microorganismos habituales en la flora del hospital, o un caso de IN con
etiología por microorganismo raro o no frecuente en la flora hospitalaria.
- O se trata de una IN de localización determinada (bacteriemias, de herida
quirúrgica, respiratoria...).
- Limitarse a pacientes de una unidad, servicio o planta.

El número de casos depende de la cadena epidemiológica de la I.N.:


• El germen de que se trate: El agente es inseparable de su reservorio y
fuente de infección: personas y fómites (portadores sanos o asintomáticos,
en caso de fuente endógena; otro paciente o el personal de asistencia,
como fuente exógena. La piel, tubo digestivo, boca y vías respiratorias son
los reservorios mas representativos de la flora saprófita causante de las IN.
• Mecanismo de transmisión. Por contacto, el mas frecuente, bien directo
(manos del personal y/o paciente) o indirecto (Fómites); transmisión por el
aire y por gotitas.
• Huésped susceptible. Aquí es muy importante el concepto de puerta de
entrada para relacionar el mecanismo de transmisión con el huésped

2
Criterios de clasificación de inf. Nosocomial(CDC 1992).
susceptible. La apertura de nuevas puertas de entrada por maniobras de
instrumentación diagnóstica (punción transcutánea, la traqueotomía, el tubo
nasogástrico, la ventilación mecánica, etc), la enfermedad de base y
comorbilidades en el momento del diagnóstico.
• Tamaño y estructura de la población en la que se produce (áreas de
quemados, UCIs, UCIs pediátricas, salas de inmunodeprimidos, etc).
• Exposición previa a antecedentes de casos en el ámbito hospitalario
(existencia de caso previo en el mismo hospital o traslado desde otro
Centro).
• El tiempo en que se produce.

Así, por ejemplo, la ocurrencia de un solo caso de EAMR, es sospecha de


brote, no por el número de casos en si, sino por las características del agente
(reservorio), su mecanismo de transmisión y las características del huésped al
que afecta.
Este concepto de brote nosocomial, lógicamente lleva a la necesidad de
registros previos para poder estimar que la ocurrencia es, ahora, excesiva. La
infección nosocomial aparece de forma endémica en todos los hospitales, de
modo que se acepta la existencia de tasas basales. En el caso de gérmenes
habituales es el conocimiento de ese nivel de endemia (variable para cada
hospital) asociado a determinadas localizaciones y/o tipo de instrumentaciones,
ese nivel de endemia el que nos va a hacer sospechar el brote. Por tanto la
ausencia de estos registros nos llevará a la subnotificación de esta situación.
Cuando el germen es muy raro es muy fácil sospechar que estamos ante un
brote, pero no suele ser lo mas habitual.

Definición de caso:
La definición de caso es siempre opcional. Lo importante no es lo exhaustiva
que sea la lista de los criterios sino el hacerla explícita, es decir utilizar una
ficha epidemiológica, para permitir comparaciones y un posterior análisis.
Al principio puede ser conveniente una definición amplia, aunque provisional,
pero conforme se vayan conociendo mas características de la enfermedad,
deberá precisarse al máximo la definición de caso. Los criterios para definir la
enfermedad deberán estar en base a:
1. Criterios clínicos. Ej: Neumonía por pseudomona en paciente sometido a
ventilación mecánica .
2. Criterios de Laboratorio: el aislamiento de un agente específico y la
identificación de su serotipo, biotipo, fagotipo y/o antibiograma.
3. Características epidemiológicas: lugar, tiempo, persona.
4. Características epidemiológicas del germen: principales reservorios,
supervivencia en el medio ambiente, ubicuidad, principales mecanismos de
transmisión y susceptibles potenciales.
Los casos una vez aplicado el criterio definitivo, pueden ser divididos de
acuerdo con otras características:
- Primario/Secundario
- Probable/Confirmado
- Agudo/Crónico

Definición clínica de caso:


En este protocolo general, la definición clínica de casos coincide con la
definición de infección nosocomial. En cada situación. específica, esta
definición se elaborará previamente por el responsable de la investigación.

Criterio diagnóstico de laboratorio:


Aislamiento del agente patógeno en muestra clínicas con valoración
cuantitativa, a efectos de diferenciación entre colonización e infección (si
procede según microorganismo).

Clasificación:
- Caso sospechoso/probable: compatible con la definición clínica del caso y
epidemiológicamente relacionado.
- Caso confirmado: compatible con la definición clínica de caso y
confirmación microbiológica
- Portador

DETECCIÓN DE LA ALERTA:
Fuentes de información:
• Microbiología, debe estar alertada, mediante comunicación con M.
Preventiva de la importancia de avisar ante el crecimiento de gérmenes
multiresistentes, u otros patógenos que provocan IN, para que se realice la
investigación oportuna.(ANEXO I : listado de causas interesantes de brotes
nosocomiales publicados en los últimos tiempos).
• El personal sanitario de las unidades asistenciales (relación continua con
los clínicos de áreas diana como UCI; UCI neonatal).
• M. Preventiva, vigilancia activa prospectiva continuada, seguimiento y
recogida sistemática de datos, análisis e interpretación de datos sobre
resultados específicos necesarios para planificar, implementar y evaluar la
práctica diaria de la actividad hospitalaria en cuanto a prevención de
infección.

COMUNICACIÓN.
Ante la sospecha de un brote por infección nosocomial, deberá comunicarse:
- Al Servicio de Medicina Preventiva, si dicho brote ha sido detectado por
otros servicios (Microbiología, servicios clínicos...)
- El Servicio de Medicina Preventiva debe comunicarlo:
- Al Director Médico
- A la Delegación Provincial de Salud
- A la Comisión de Infecciones
- Al Servicio implicado.
- A Microbiología.
- A la Dirección de Enfermería.
- La Delegación Provincial de Salud lo comunicará a la Consejería de Salud,
por los cauces establecidos.
♦ Dadas las características específicas de este tipo de brotes, en los que
debe existir un criterio de confidencialidad, se reitera la propuesta de que la
comunicación debe realizarse exclusivamente a la Delegación Provincial de
Salud (sin participación del Distrito correspondiente). Además de la no
especificación de lugar de origen, cuando se incluya en publicaciones
periódicas del Sistema de Vigilancia Epidemiológica (Boletín semanal...).
DIANOSTICO DE ALERTA.
Confirmación del brote:
La confirmación del brote epidémico se basará en la comparación entre el
número de casos ocurridos (“observados”) y el número de casos esperados,
por unidad de tiempo y lugar determinado. Se trata de confirmar que la
presencia de un determinado número de casos de la enfermedad diagnosticada
en el hospital aparece como excesiva en relación a la frecuencia habitual de
dicha enfermedad en la misma población y durante periodos de tiempo
anteriores de duración comparable.
Casos observados:
Normalmente al hacer el cálculo inicial de casos actuales no se dispone de
información suficiente de cada caso para confirmar el diagnóstico. En este caso
se debe:
Incluir en el cálculo inicial a aquellos casos que al menos tienen determinados
signos y síntomas en común.
Fijar los criterios diagnósticos que se van a utilizar para la confirmación de los
casos.
Contactar con las diversas fuentes de información para obtener, si es
necesario, mas detalles acerca de las características de los casos.

Casos esperados:
Se entiende por casos esperados aquellos que, sobre la base de experiencias
anteriores, deberíamos observar en un periodo de tiempo y lugar determinado
en ausencia de epidemia; se trata de la frecuencia habitual de presentación de
la enfermedad en tiempo y espacio.
Con las cifras de casos esperados y observados se calcula el índice epidémico,
que es el cociente entre el número de casos observados (incidencia actual) y el
número de casos esperados (incidencia habitual):

Indice epidémico = Nº de casos observados


Nº de casos esperados
Cuando dicho índice epidémico es mayor, igual o menor que 1, las incidencias
observadas son mayores, iguales o menores, respectivamente, que las
esperadas. Dicha información facilita la valoración de si nos encontramos o no
ante un brote.
No siempre es fácil llegar al diagnóstico de epidemia. Por ejemplo puede haber
situaciones en las que se producen diferencias significativas entre la incidencia
habitual y la actual, pero no debidas a la existencia de un brote epidémico, sino
a las siguientes causas:
- Mejoras en el sistema de notificación.
- Detección de un aumento de casos por la aparición de nuevas técnicas
diagnósticas.
- Errores en la estimación de casos esperados, etc.

Descripción del brote:


Se deben analizar las variables de tiempo/lugar/personas
Tiempo:
Se debe analizar el patrón temporal de la enfermedad, que es la variación con
respecto al tiempo de la frecuencia de ocurrencia de casos de una enfermedad
en una población.
Se debe realizar la curva epidémica, que es un gráfico en el que los casos de
una enfermedad que suceden durante el periodo epidémico, se representan
según el momento del inicio de la enfermedad.
Lugar:
Se debe elaborar un mapa de casos, que es un mapa de la zona afectada en el
que a cada caso se le asigna un punto. Su finalidad es permitirnos identificar la
pauta de distribución en función del lugar.
Se deben calcular las tasas de ataque, que pueden definirse como la
probabilidad de que una persona expuesta al factor de riesgo desarrolle la
enfermedad.

Tasa de ataque = Nº de personas que enferman


Nº de personas expuestas al riesgo

Características personales:
Las personas pueden describirse en función de sus características, actividades
y condiciones. Las cuales son importantes porque pueden influir en quien tiene
el mayor riesgo de adquirir una enfermedad específica.
Se debe realizar la construcción de tablas que suministren información sobre
las características del brote en relación con la variable persona (edad, sexo,
religión o cualquier otra variable que se estime relevante).

Formulación de hipótesis y confirmación de la misma:


A partir de los datos iniciales que sugieran una asociación
tiempo/lugar/personas, se formulará una o mas hipótesis, escogiendo la mas
probable y se procederá a la verificación de dicha hipótesis.
El método mas simple para demostrar que existe un mayor riesgo de
enfermedad, entre las personas expuestas a la fuente sospechosa y las no
expuestas, es el estudio basado en las tasas de ataque. Estas tasas se han de
calcular tanto para las personas expuestas a la fuente sospechosa como para
las no expuestas.
Un método mas completo para confirmar la hipótesis en la investigación de un
brote epidémico es la realización de un estudio de casos y controles.
Una vez finalizado este análisis se puede llegar a:
Aceptar la hipótesis formulada y por tanto llevar a cabo las medidas de control.
Rechazar la hipótesis actual por lo que se habrán de generar hipótesis nuevas.
Este análisis epidemiológico que nos ha permitido aceptar o rechazar la
hipótesis puede ser complementado con pruebas de laboratorio, que siempre
que estas sean factibles, nos ayudarán a confirmar los factores causales.

Toma de Muestras.
Los Servicios de Medicina Preventiva, Microbiología y Clínicos Implicados en el
tema, determinarán los tipos de muestras mas adecuados para los objetivos de
la investigación.
Dichos servicios determinarán las actuaciones a seguir, siendo responsabilidad
de la Dirección Médica el cumplimiento de las mismas. Asimismo, es
responsabilidad de la Dirección Médica el asegurar que dichas muestras se
procesan en los laboratorios adecuados.

Investigaciones de antecedentes:
Investigación de fuentes: según los datos que aporte la investigación
Encuesta:
- Realizar a enfermos y a sanos
- Síntomas
- Periodos de incubación
- Fuentes sospechosas o mecanismos de transmisión probables
- Evolución de los casos
- Muestras tomadas (ambientales y personales)
- Resultados

ORGANIZACIÓN DE RECURSOS.
Una vez comunicada la Sospecha de brote al Director Médico, éste formará un
EQUIPO MULTIDISCIPLINAR (ANEXO III) y compuesto por:
- El responsable de Medicina Preventiva, como coordinador del mismo.
- Un responsable clínico del servicio implicado.
- Un microbiólogo.
- Un responsable de enfermería.
- Un especialista en enfermedades infecciosas, si existiera (según tipo de
hospital)
que desarrollará las actividades de investigación del brote:
- Estudio epidemiológico del brote
- Toma de muestras
- Primeras medidas de protección/prevención
- Búsqueda activa de casos

El Director Médico será el responsable de que se ejecuten las medidas


propuestas por el equipo.
La organización de recursos se refleja en el cuadro anexo.

MEDIDAS DE AISLAMIENTO o DE PROTECCION.


En general, es fundamental la detección precoz del brote. Para ello la
existencia de un programa de vigilancia de la infección hospitalaria.
El control de los brotes de fuente común implica la identificación previa del
origen de la infección, reconocido éste, el control del brote no suele revestir
mayor problema.
Entre tanto, se deben extremar las medidas generales de control como si se
tratara de un brote de fuente múltiple.
El control de los brotes por fuente múltiple o mixtas implica, fundamentalmente,
el control de los reservorios y de los mecanismos de transmisión. En este
sentido hay que resaltar la importancia de las siguientes medidas:
1) Extremar el cumplimiento de las medidas de control habituales de la
infección nosocomial, especialmente el lavado de manos.
2) Desalojar los Servicios al máximo, acortando estancias, realizar los ingresos
estrictamente necesarios. Siempre que sea posible sustituir la atención
hospitalaria por la ambulatoria o domiciliaria.
3) Aumentar al máximo la separación física de los pacientes, especialmente de
los pacientes infectados y/o colonizados con respecto al resto de pacientes
susceptibles.
4) Aislamiento y desinfección de las fuentes de infección reconocidas.
5) Traslado de pacientes especialmente susceptibles a zonas de bajo riesgo
6) Despistaje de portadores entre los pacientes y los miembros del personal
sanitario. Tratamiento de los mismos (infectados o colonizados) y
separación temporal del servicio del personal sanitario afectado.
7) Educación sanitaria a los pacientes, las visitas y al personal sanitario.
8) En casos graves, puede ser necesario cerrar temporalmente la sala
afectada por el brote.
9) Desinfección de fómites, superficies, suelos, etc. Reemplazar el material de
difícil descontaminación por material nuevo.
10) Cuando la contaminación sea extensa y generalizada en diversos puntos de
un servicio o incluso de todo el hospital, será necesario habilitar una zona
limpia, en la que previamente se ha de realizar una desinfección terminal, y
en la que se encamarán los ingresos nuevos. Solo se destinará a dicha
unidad a miembros del personal sanitario en los que se haya descartado la
presencia del agente responsable del brote, para evitar que este se
propague de nuevo.
11) En casos extremos, puede ser necesario realizar una identificación y
seguimiento de los pacientes fuera del hospital, tanto de los infectados y
colonizados, como de los que estuvieron ingresados en las fechas en que
se originó el brote.

ANEXO II: precauciones universales y medidas especificas según categorías.

FINALIZACION DE LA ALERTA.
Se declarará la finalización de Alerta, una vez se hayan normalizado las tasas
de incidencia y/o no aparezca ningún caso mas relacionado con dicho brote. Se
elaborará un informe final para la Dirección Médica, ésta lo remitirá a la
Delegación Provincial de Salud y ésta, a la Consejería de Salud.
BIBLIOGRAFIA CONSULTADA.
- Estudio de Brotes Nosocomiales. J. García de Jalón; P. Astier; M.E. Polo; E.
Escobar.
- Guía para la Gestión del Sistema de Información de Vigilancia
Epidemiológica en el medio hospitalario. Socorro Fernández Arribas. D.G.S.
Pública de la Consejería de Sanidad y Servicios Sociales. Galicia.
- Delgado M; Lardelli P; Arenas C.A.; Investigación y control de brotes
epidémicos en: Galvez R; Delgado M; Guillén J.F.;eds: INFECCION
HOSPITALARIA. UNIVERSIDAD GRANADA. Pág: 331-345 (1993).
- Documento de Consenso sobre recomendaciones y recursos necesarios
para un programa de Control de la Infección Nosocomial en los hospitales
españoles. Grupo de Estudio de Infección Hospitalaria de la Sociedad
Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica, Sociedad
Española de Medicina Preventiva, Salud Pública e Higiene, Grupo de
Trabajo de Enfermedades Infecciosas de la Sociedad Española de Medicina
Interna, Clínica y Unidad Coronarias.
- Documento Técnico de Vigilancia y Control de la Infección Nosocomial.
Grupo de Estudio de Infección Hospitalaria de la Sociedad Española de Enf.
Inf. Y M.,SEMPSPH, Grupo de trabajo de Enf. Inf. de la SEMICUC.
- Wendt C., Herwaldt L.A. “Epidemics: Identification and management”. En :
Richard P. Wenzel. Preventión and Control of Nosocomial Infections. Ed.
Williams&Wilkins. Pag: 175-213. 1997. (3ª edic).
- DC. Public Health focus: surveillance, prevention and control nosocomial
infections. MMWR 1992;41:783-787.
- Principios Generales1. En García León J, Morales ML, Ramirez
FernandezRosa, Rosado martínM, Ruiz Ramos M. Investigación de brotes
epidémicos. Junta de Andalucía. Consejería de Salud y Asuntos Sociales.
S.A.S.
- Doebbeling BN. Epidemics: identification and management. En Wenzel RP,
ed. Prevention and control of nosocomial infections. Williams and Wilkins
1993: 177-206.
- Emerging Infection Disease. 1998. Jan-Mar;4 (1):21-27.
ANEXO I
Reservorio y fuente de agentes infecciosos.

Acinetobacter sp Se encuentra en el suelo y en el agua y es saprófito


humano (piel, 25%; vagina, 5-15%). Capaz de sobrevivir en lugares
húmedos, jabones, desinfectantes y equipos de respiración mecánica.
Enterobacter sp Saprófito habitual del intestino humano, puede asentar en
tracto urinario, respiratorio o la herida quirúrgica con consecuencia de
infecciones en esa localización.
Pseudomonas sp Bacilos gram-negativos ampliamente distribuidas en
agua y suelos, capaces de sobrevivir en recodos húmedos de los equipos
de asistencia (nebulizadores, sondas de aspiración traqueal, circuitos de
respiradores, conductos de difícil acceso para el lavado y secado en los
endoscopios que quedan húmedos).
Serratia Bacilos gram-negativos de distribución similar a las Pseudomonas.
Se han encontrado en gran variedad de plantas, pero probablemente
provengan de los suelos.
Clostridium difficile Saprófito habitual del intestino del hombre, es el
agente de la colitis pseudomembranosa y responsable de brotes de
diarreas asociada al uso de antibióticos y particularmente la clindamicina,
en virtud del desequilibrio de la flora intestinal y predominio de este germen
resistente a la clindamicina. Se ha aislado en el 7% de los pacientes a su
ingreso y en el 28% de los pacientes ingresados (N Eng J Med, 1999; 341:
1690-1691).
Klebsiella sp Bacilos gram-negativos, ampliamente distribuidos en suelo,
agua y semillas y son comensales habituales del intestino humano y
faringe, y de animales.
Candida sp Hongos levaduriformes que constituyen un componente
transitorio de la flora comensal de lugares húmedos de temperatura
adecuada (piel, boca, vagina, heces de la especie humana). El 30-50% de
la población sana son portadores. La Candida parapsilosa es la especie
más comúnmente aislada de las manos del personal sanitario.
Aspergillus sp Hongo filamentoso que vive y se reproduce formando
esporas en el medio ambiente, en los suelos y materiales en
descomposición (estiércol de los tiestos y los cultivos de plantas. La
remoción de estos materiales y en particular de los escombros en obras
hace que las esporas pasen al aire donde por su pequeño tamaño pueden
permanecer a favor de corrientes.
Legionella sp Bacilos gram-negativos que viven y se reproducen en el
biofilm que recubre el interior de los tanques, depósitos y remansos de
agua, incluido el agua de beber. Puede mantenerse en lugares húmedos,
en los aerosoles que se producen por salpicaduras o remolinos del chorro
de salida de grifos y duchas.
Rizopus Hongo filamentoso, ubicuo que se reproduce con formas
vegetativas en medios húmedos con abundante materia orgánica (mohos) y
temperatura adecuada. Forma esporas que se diseminan por las corrientes
de aire, y su concentración se han visto aumentar en las proximidades de
las obras de remodelación y producción de escombros en los hospitales.
EAMR Coco Gram-positivo que produce las lesiones piógenas habituales
de (Estafilococcus aureus piel (atribuible a su capacidad coagulasa-
positiva) y es capaz de Meticilin Resistente) sobrevivir en pliegues de piel
(axilas, ingles) y vestíbulo nasal (20-60 % de portadores humanos en esa
localización). La variedad MR es resistente a los antibióticos del grupo
meticilina, con lo que son difíciles de tratar.
Estafilococcus Cocos Gram-positivos, saprófito habitual de la piel del
hombre, sin epidermidis capacidad coagulasa-positiva.
Enterococo Cocos gram-positivos que incluyen varias especies de
estreptococos grupo D. Son comensales habituales del intestino del
hombre.
Listeria Bacilo gram-positivo saprófito del intestino del ganado vacuno y
lanar; 20% (6-70%) de portadores humanos sanos en intestino, vagina y
faringe. Capaz de sobrevivir en superficies secas o húmedas 20-30 días, y
en los alimentos del ganado (forraje almacenado) y humano (lechuga , apio
crudos y carnes de animales y derivados).
M. Tuberculosis Complejo bacilo ácido-alcohol resistente causante de la
tuberculosis en el hombre. El reservorio son las lesiones humanas y para el
Mycobacterium bovis ciertas especies de mamíferos. Los bacilos que
escapan de la fuente con el esputo pueden permanecer viables varias
semanas en el medio y transmitirse por el aire.
Sarna Ectoparasitosis caracterizada por la invasión de la capa córnea de la
piel por el ácaro Sarcoptes Scabies var. hominis.
ANEXO II
Precauciones universales de prevención de infecciones
nosocomiales

Las PRECAUCIONES UNIVERSALES son medidas preventivas que se deben de


tomar frente a sangre y fluidos corporales de todos los pacientes.

Se APLICAN a:

Ü SANGRE Y TEJIDOS

Ü LIQUIDOS ORGANICOS: semen, secreciones vaginales, L.C.R., l. Sinovial, l. Pleural, l.


Peritoneal, l. Pericárdico, l. Amniótico.

Ü CUALQUIER FLUIDO CONTAMINADO CON SANGRE

NO se APLICAN a:

Ü Saliva, heces, secreciones nasales, esputo, sudor, lágrima, orina, vómitos, ....... a
menos que contengan SANGRE visible.

PRECAUCIONES DE BARRERA

GUANTES No estériles, desechables, siempre que se


tenga contacto con sangre y líquidos
orgánicos de riesgo.

LAVADO DE MANOS En los contactos entre pacientes, e


inmediatamente si se contaminan con
sangre o líquidos orgánicos, así como al
quitarse los guantes.

BATA Y DELANTALES Durante los procedimientos que puedan


producir salpicaduras de sangre o líquidos
orgánicos.
MASCARILLA Y PROTECTORES Sólo durante los procedimientos que
OCULARES puedan producir salpicaduras de sangre o
líquidos orgánicos, para proteger las
mucosas de la boca y nariz.
OTRAS PRECAUCIONES

PRECAUCIONES PARA EVITAR Todo el personal sanitario debe tomar


HERIDAS ACCIDENTALES precauciones para evitar heridas
causadas por agujas, bisturíes y otros
instrumentos cortantes o punzantes durante
intervenciones, en su limpieza, al
desecharlos y en su manejo en general.

Especialmente las agujas no deben


reencapucharse, doblarse, separarse de
las jeringas, ni en general manejarse con
las manos.

Después de usarse, todos los objetos


cortantes y punzantes desechables, se
depositarán en recipientes rígidos,
impermeables e imperforables, y éstos
estarán en la zona más próxima al lugar de
trabajo.

PERSONAL CON LESIONES CUTÁNEAS El personal sanitario con lesiones


cutáneas exudativas o dermatitis, deben
quedar exentos del cuidado directo de
los pacientes, así como del manejo de
equipos que estén en contacto directo con
los mismos.

TRABAJADORAS Las trabajadoras embarazadas no están


EMBARAZADAS expuestas a un riesgo especial. Sin
embargo, si se infectan durante el
embarazo, la infección puede afectar al
feto, por lo que deben observar
rigurosamente todas las precauciones.
ANEXO III-ORGANIZACIÓN DE RECURSOS EN LA ALERTA DE BROTE DE INFECCIÓN NOSOCOMIAL

DIRECCIÓN GERENCIA

DIRECCIÓN MÉDICA FEA


UNIDADES CLÍNICAS
COMISIÓN DE INFECCIONES ENFERMERÍA

SIST. ALARMA
S. M. PREVENTIVA LAB. MICROBIOLOGÍA
OBSER. DIRECTA

HISTORIAS CLÍNICAS
CULTIVOS MICRO.
SOSPECHA DE BROTE VIGILANCIA ACTIVA PLANTAS HOSPITALIZ.
A. PATOLÓGICA
CMBD
COMUNICACIÓN

INVESTIGACIÓN

DELEGACIÓN PROVINCIAL SALUD CONFIRMACIÓN

CONTROL

FINALIZACIÓN

* EQUIPO MULTIDISCIPLINAR
Loreto A. Lemus López

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