Professional Documents
Culture Documents
1
intensa y absorbente" que puede entenderse como una serie de opciones
tomadas como respuesta, a las atracciones exhibidas en los centros
comerciales, en la televisión y en los sitios web en competencia; también
en los sitios públicos y dentro del mismo hogar ( Bauman, 2004: p.62).
En la Sociedad de la información no sólo se adquieren bienes para la
superviviencia, sino bienes simbólicos que satisfacen imaginarios
individuales y colectivos. Cuando accedemos a una red social, no lo
hacemos necesariamente para comprar, sino para satisfacer imaginarios
lúdicos, de sociabilidad y pertenencia.
Sin embargo, aun en tiempos de convergencia los beneficios del consumo
no son equitativos y menos cuando están ligados a la tecnología, pues
cabe recordar que sólo la cuarta parte de los habitantes del mundo tiene
acceso a Internet; en el caso de México un 30% tiene acceso (AMIPCI,
2011).
Si nos atenemos a la categorización de Manuel Castells (2006: p .404 )
son más los individuos interactuados que los interactuantes a nivel global
y en México.
2
un individuo que ha dejado de ser pasivo, para convertirse en agente
competente, que incorpora a sus prácticas de consumo la interactividad
con las marcas, a través de una importante cantidad de plataformas y
aplicaciones; se trata de un consumidor que tiene la posibilidad de
criticar, calificar e interpelar a las empresas de la economía digital.
También de compartir sus experiencias de compra con otros
consumidores, a través de las redes sociales de moda, espacios
multiculturales convertidos en mercados virtuales en los que no existen
delimitaciones físicas ni temporales.
De esta forma, en la Sociedad de la información se observan dos procesos
simultáneos, uno top down de las empresas al consumidor y otro bottom
up de los consumidores hacia las empresas las cuales, se han tenido que
adaptar a este nuevo contexto de consumidores proactivos.
En este escenario convergente las empresas acostumbradas a tener
consumidores dóciles, se ven obligadas a escuchar las necesidades del
consumidor, que tiene el poder de erosionar la reputación de una marca a
través de un hashtag en Twitter o a través del botón "me gusta" opción
que ofrece la plantilla predeterminada de la exitosa red social Facebook
con el objeto de moldear perfectamente un mercado potencial a sus
anunciantes
Es parte de nuestra cotidianeidad convergente descargar música; votar en
un programa de televisión para ver qué pareja baila mejor ; comprar en
Mercado libre o E bay.
Las empresas tienen ahora la posibilidad de escuchar propuestas de
mejora a un producto o servicio. Les obliga a desterrar ideas de la
mercadotecnia de la era pre Internet como "las actitudes predecibles del
consumidor "(Jenkins,2006:p.18) pues el internauta es justamente lo
contrario: impredecible.
3
Como ha señalado Chris Anderson, la economía pre Internet se basaba en
la escasez y los costos de distribución y almacenamiento. El entorno
digital crea abundancia y un espacio virtual que rompe con las barreras
físicas favoreciendo la abundancia y una serie de fenómenos culturales
inéditos como las descargas de videos y música lo cual, ocasiona un
choque de paradigmas con el orden legal de la era pre Internet.
Esta economía descrita por Anderson, favorece un mercado de nichos que
está siendo objeto de experimentos publicitarios como los de las
empresas que se desenvuelven dentro de la Sociedad de la información
tales como Google o Facebook, que se han convertido en grandes
negocios.
Estas prácticas del prosumidor, se refieren a un tipo ideal porque para
tener prosumidores se requiere antes de factores estructurales como la
educación y una cultura participativa; de políticas públicas y empresas
responsables así como de leyes y regulaciones que garanticen los
derechos del consumidor en el entorno convergente.
Como la tecnología corre más rápido que el conocimiento sobre sus
efectos, este contexto transformador también acarrea desafíos
multisectoriales, es decir, para los gobiernos, las empresas, la sociedad
civil organizada y por supuesto, los consumidores.
Plantearé algunas de las tensiones más comunes en torno a las
transformaciones en las prácticas culturales de los consumidores, en un
contexto tecnológico-cultural convergente .
¿Consumidores o Ciudadanos?
4
representa una expansión del consumo y territorio ideal para las empresas
que cuentan con nichos segmentados de consumidores, que a su vez
requieren:
• Buenos precios,
• Competencia
• Ubicuidad
• Calidad
• Libertad de expresión
• Derecho a la información
• Resguardo de datos personales
• Derecho a la privacidad
5
• El derecho al olvido en Internet
6
Particularmente han sido visibles acciones colectivas en contra del
operador dominante de telefonía celular en el país.
A los tomadores de decisiones, les corresponde armonizar este conjunto
de intereses del ciudadano-consumidor mediante políticas públicas,
regulaciones y leyes.
En el ámbito de las telecomunicaciones y medios que son el eje de la
Sociedad de la información, hemos sido testigos de cómo las empresas se
desagarran por conquistar mercados y consumidores, ante un Estado
pasivo, cuando la telefonía celular e Internet también son herramientas
indispendables para la educación, la salud y la creación de pequeñas
empresas.
Por si cabía la duda, luego de observar los movimientos sociales en el
mundo árabe y las recientes protestas en España, ya nadie puede dudar de
su poder movilizador para causas sociales y políticas.
En México comienzan a articularse incipientes movilizaciones, pero
somos aun muy pocos internautas y nuestra cultura participativa deja
mucho que desear.
7
Además del número reducido de internautas, sabemos que el comercio
electrónico es inicipiente en México, ya que de acuerdo al INEGI (2011),
el porcentaje de mexicanos que realiza transacciones en línea es de 5%
por ciento.
Estos datos nos llevan a sostener que aun es pronto para hablar de un
mercado digital mexicano vigoroso, en el que se anuncien las empresas.
El 60% de la publicidad aun se dirige a la televisión abierta y un reducido
4% a Internet (AMIPCI, 2011).
Es pronto porque pese a que la protección de datos personales fue
elevado a derecho fundamental, los ciudadanos-consumidores aun no
tenemos la certeza de que nuestros datos, que son el insumno a través del
cual se articula la economía digital, no irán a parar a Tepito con toda
impunidad, o en el peor de los casos, a manos de un delincuente que
ejecute desde la cárcel y en complicidad con autoridades atroces delitos.
Internet promueve una sociedad transparente. Para tener un México de
ciudadanos- consumidores, se requiere que el Estado y sus instituciones,
así como las empresas no esquiven transparentar sus prácticas y rendir
cuentas.
Para tener un México de ciudadanos consumidores, debemos resolver el
problema de la propiedad intelectual en Internet.
Particularmente en el ámbito de los derechos de autor, es necesario partir
del reconocimiento de esta tensión compleja consumidor- ciudadano, para
proponer nuevos modelos de negocio sustentables, producto de
negociaciones plurales, que no miren únicamente al internauta como
potencial consumidor de discos y películas, sino como un ciudadano
cuyas prácticas culturales se han modificado y a quien se deben
garantizar derechos como la libertad de expresión y derecho a la
información, así como el resguardo de sus datos y su derecho a la
privacidad.
8
Requerimos también de ciudadanos plenos, y responsables para con
problemas que afectan a la sociedad. En México no es común que la
sociedad articule acciones para defender sus derechos ni como
audiencias, ni como usuarios, ni como consumidores, ni como
ciudadanos. Para ello, es necesaria una reforma educativa de fondo que
garantice la incorporación de competencias digitales en la currícula de la
primaria, toda vez que éstas son las habilidades necesarias para
desenvolverse como ciudadanos-consumidores en la Sociedad del
conocimiento.
En esta ponencia, he delineado brevemente algunas de las tensiones que
caracterizan a nuestros tiempos complejos y que deben ser resueltos de
manera multisectorial , en que ninguna de las partes se imponga a la otra.
Ni los intereses culturales y sociales deben subordinarse al interes
privado, ni viceversa y ésto es posible, si se antepone el desarrollo
humano de los mexicanos.
9
Referencias
AMIPCI (2011,16 de mayo). Hábitos de los usuarios de Internet en México. Recuperado el 17 de mayo
de 2011 de http://www.amipci.org.mx/noticias/index/cvenoticia/1021
Anderson, C (2006). The long tail. Why the future of buisness is selling less for more.
New York :Hyperion
INEGI. (2011,16 de mayo). Estadísticas a propósito del día mundial de Internet. Recuperado el 16 de
mayo de 2011 de:
http://www.inegi.org.mx/inegi/contenidos/espanol/prensa/Contenidos/estadisticas/2011/internet0.doc
Livingstone, S., et al. (2005). Citizens and consumers. Discursive debates during and after
Communications Act 2003. Media, Culture and Society. Vol 29.Pp.613-638
Internet World Statistics. World Internet Users and Population stats. Recuperado el 11 de mayo de
2011 de: http://www.internetworldstats.com/stats.htm
10