ASIGNACIONES FAMILIARES

EXPEDIENTE N° 15235-BR-03 – 3° SESION ORDINARIA

ACTUALMENTE SE ENCUENTRA EN TRATAMIENTO EN LA COMISION DE

PRESUPUESTO Y HACIENDA

FUNDAMENTOS

El Decreto Provincial 2348/01del mes de diciembre de 2001,

fundado en la invocación de una aparente emergencia económica, del Poder Ejecutivo
Provincial cercenaba el derecho constitucional de los empleados públicos a gozar de un
derecho de seguridad social en razón de las cargas de familia, o “compensación económica
familiar” como lo consagra el artículo 14º Bis de la Constitución Nacional, sin fijar un plazo de
duración de dicha restricción económica, ni prever la modalidad en que dichos beneficios
serán recuperados en el futuro por los empleados, como asimismo el reintegro de las sumas
sustraídas a sus haberes a partir del 1º de diciembre de 2001, como legalmente corresponde
para el caso de normas de necesidad y urgencia.

Asimismo, el mentado Decreto 2348/01 invita a los municipios a

adherir al recorte de salarios familiares de los empleados municipales en los mismos
términos, condenable opción a la que se plegó la Municipalidad local mediante el Decreto
4015/01 del 12 de diciembre de 2001, en forma automática, tan solo un día después del
dictado del decreto provincial, y aún antes de la publicación de esta norma en el Boletín
Oficial, hecho que sucedió el 13 de diciembre de 2001, lo cual hace suponer a nuestra
Municipalidad como una dependencia administrativa ordinaria más, del Gobierno Provincial.

A partir del 1º de diciembre de 2001, mediante Decreto Municipal

4015/01 del 13 de diciembre del año próximo pasado se aplico la sensible reducción de las
asignaciones familiares a los empleados municipales, instrumento legal que fue ratificado por
este Honorable Cuerpo mediante la ordenanza nº 4449 promulgada por Decreto 3252 del 02
de mayo del corriente año.

Por otro lado, en ningún momento fueron tomadas en

consideración los pedidos y reclamos hechos por los empleados municipales ante este
Honorable Cuerpo, siendo acompañados por más de 2.000 firmas de vecinos de Río
Gallegos, que en un gesto solidario reconocen la legitimidad de su demanda. Del mismo
modo, fueron ignoradas las gestiones y sugerencias hechas por los representantes
gremiales del personal municipal, así como por otras agrupaciones de empleados
municipales, a fin de arribar a soluciones alternativas al desbalance financiero comunal, y
poder así recomponer los ingresos salariales de la familia municipal.

Se aprobó el presupuesto municipal 2002, donde pudimos ver

como el Ejecutivo Municipal piensa gastar los recursos municipales, a pesar de la crisis que
azota a nuestro municipio no se han reducido partidas presupuestarias donde existen gastos
superfluos, como donaciones, subsidios, telefonía, etc., como así también y de acuerdo a la
rendición del año 2001 el Departamento Ejecutivo Municipal gasto mas de $ 740.000 en
publicidad y propaganda, suma superior a la que el oficialismo pretendió ahorrar con la
reducción en los salarios familiares de los empleados municipales.

En el actual contexto de la situación económica, esta sustracción a

los bolsillos de los trabajadores municipales, se hace sentir con mayor crudeza, en razón de
la diaria degradación del poder adquisitivo de los salarios, ante el avance de los índices
inflacionarios sobre los bienes y servicios de necesidad más elemental. Siguiendo cifras
oficiales del INDEC, la inflación desatada a partir de diciembre 2001 alcanza el 43 %, y la
canasta básica de alimentos superó los $ 720 para una familia tipo con un aumento del 73
%, en tanto que la canasta escolar aumentó en un 70 % respecto de los precios del año
2001, y siempre considerando los precios vigentes en el Gran Buenos Aires. Todos sabemos
que en nuestra región sufrimos aumentos de precios adicionales por distintos factores, que
encarecen aún más los productos de consumo masivo e indispensable.

Por ello ante esta preocupante circunstancia que nos involucra a

todos, es conveniente disponer de voluntad para discutir, las distintas opciones existentes
para amortizar el gasto público municipal, sin recurrir a la afectación de las asignaciones
familiares de los trabajadores municipales, como derecho esencial reconocido por la
Constitución Nacional, y que en definitiva traslada el costo de la crisis, a los empleados
municipales con cargas de familia, resultando contradictorio con los principios de solidaridad
y equidad a la hora de sostener las consecuencias de la emergencia.

Ante este panorama, y como contrapartida del empobrecimiento de

los hogares municipales, el proceso de devaluación de la moneda iniciado en enero del
2002, trajo como consecuencia automática, un aumento no previsto en los ingresos del
Estado Provincial y por ende de la Municipalidad de Río Gallegos, en concepto de regalías
de petróleo y gas natural, las cuales durante los primeros seis meses del año 2002,
duplicaron los ingresos previstos por el presupuesto provincial según el cual en todo el año
2002 ingresarían $ 154.000.000 por tal rubro, cuando en términos reales ingresaron de
enero a mayo la suma de $ 135.800.000, es decir casi la misma cantidad prevista para todo
el año.

En función de esta nueva realidad de las cuentas municipales, que

también se vieron ostensiblemente beneficiadas durante el año 2002 y lo será también en el
corriente 2003, con partidas de fondos adicionales no previstas, mensurables en varios
millones de pesos, es que impone con toda legitimidad, el derecho a reclamar la
recomposición de los salarios familiares vigentes hasta diciembre del 2001, cuando entró en
vigencia el decreto 4015/01. Especialmente, se reinstaure la ‘asignación familiar por
‘cónyuge’ de $ 60 –eliminada por el decreto 4015/01-, y se restablezca el monto original de
la ‘ayuda preescolar y escolar primaria’ de $ 520, en lugar del actual por $ 240, y la
asignación por ‘escolaridad primaria’ de $ 12, en lugar del actual monto de $ 10.

La adopción de estas medidas de reajuste positivo, en beneficio de

las economías familiares del personal municipal, es una solución justa desde todo aspecto,
tanto social como económico y político, que ante las posibilidades presupuestarias que
ofrece el nuevo contexto financiero, se muestra como la primera prioridad del poder político
municipal. Esto en atención, a sostenidos rumores y trascendidos derivados del
Departamento Ejecutivo local, que indicarían la intención de derogar el Decreto 1633/01, que
como medida de emergencia establecía el descuento del 10 % de las remuneraciones de los
cargos políticos, a fin de aliviar el tesoro municipal.

Desde ya que una iniciativa tal merecerá el justificado rechazo de la

comunidad riogalleguense en general y de la planta del personal municipal en particular, que
aún sufriendo un arbitrario recorte salarial desde hace más de un año, deberían tolerar el
lamentable espectáculo de ver a los funcionarios municipales, disponer la mejora de su
situación personal, devolviéndose por si mismos el 10 % del sueldo.

En el entendimiento que, sólo de esta manera se hace honor al

principio de ser solidarios con los que menos tienen, es que se propicia la unánime
aprobación de la presente iniciativa.

POR ELLO:
EL HONORABLE CONCEJO DELIBERANTE, EN SESION ORDINARIA DEL DIA DE LA
FECHA, SANCIONA CON FUERZA DE:

ORDENANZA

Artículo 1º.- REINSTAURAR la existencia de la ‘asignación familiar por cónyuge’ a

favor de los agentes municipales que estén en condición de percibirla.
Artículo 2º.- ESTABLECESE que las asignaciones familiares percibidas por los agentes
de la Municipalidad de Río Gallegos, no podrán ser en ningún caso inferiores a las vigentes
hasta el mes de noviembre de 2001.
Artículo 3º.- INSTRUMÉNTESE el reintegro de las sumas descontadas a los agentes
alcanzados por el Decreto 4015/01, mediante la confección de un cronograma de pagos, que
deberá ser dictado por el Departamento Ejecutivo dentro del plazo de quince (15) días, y
cumplido en el término de seis (6) meses de promulgada la presente Ordenanza.
Artículo 4º.- DEROGASE la Ordenanza Municipal nº 4.449 y toda otra norma que se
oponga a la presente.
Artículos 5º y 6º.- De Forma.-

JORGE CRUZ
CONCEJAL