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Estamos echándole un vistazo a ocho rasgos diferentes del amor. Hoy miraremos como "El Amor Es
Humilde". 1 Corintios 13:4 nos dice que "El amor no es engreído ni orgulloso." pi quiere tener relaciones
auténticas, tiene que aprender la característica de la humildad.
La humildad puede ser la cualidad de carácter más mal entendida que Dios jamás haya inventado.
Así que antes de que comencemos a mirar lo que es, déjenme explicarles lo que no es. La humildad no es
temerosidad. No es ser tímido o apenado. No es ser débil o cobarde. La humildad no es falta de confianza.
No es inseguridad. La humildad definitivamente no es tener una baja opinión de mí mismo. Jesús era muy
humilde y El no tenía una baja opinión de sí mismo. La humildad no es ser alguien pasivo que todo lo
aguanta. La humildad no es tener poca autoestima. La humildad no es ponerse a uno mismo por el suelo
todo el tiempo, diciendo cosas como, "Yo no sirvo para nada. No soy nada. No valgo nada. poy un pedazo
de basura." Jesús nunca se criticó así, y no obstante, fue la persona más humilde que jamás vivió. El nunca
se menospreció.
Hoy veremos que la humildad requiere cantidades enormes de valentía. Veremos que la humildad
requiere confianza en uno mismo. Requiere una autoestima muy alta. Requiere estar muy seguro de uno
mismo. De hecho, la gente insegura no puede ser humilde. pe les hace muy difícil ser humildes. La
inseguridad produce exactamente lo opuesto en nuestras vidas. Produce el orgullo. Cuandoquiera que sea
que se encuentre a alguien que es arrogante, orgulloso, altanero, egoísta o sólo preocupado por sí mismo,
usted puede sospechar que está encubriendo una profunda inseguridad.
El orgullo es siempre el encubrimiento de la inseguridad. Cuando ve a una persona que actúa como
que es la dueña del mundo, que lo tiene todo bajo control, que lo sabe todo, está camuflando su profunda
inseguridad. La inseguridad nos hace que nos jactemos. La inseguridad nos hace hablar arrogantemente. La
inseguridad nos hace que exageremos. Hace que nos preocupemos de lo que la gente piensa de nosotros.
Es la inseguridad lo que nos hace ser supercríticos y nos hace actuar como jueces de otra gente. Es así como
el orgullo, en lugar de ser lo que está conectado con la confianza, es la humildad -exactamente lo opuesto-
lo que está conectado con la confianza. Jesús fue capaz de ser humilde porque Él sabía exactamente quién
era.
Esta semana en nuestro grupo pequeño de estudio bíblico vamos a ver cómo Jesús les lavó los pies
a sus discípulos. Este es el acto máximo de humildad. Él fue capaz de hacerlo porque estaba muy seguro en
su posición. Él sabía quién era, de quién era y qué es lo que estaba supuesto a hacer aquí en la tierra. Y así
es como Él era capaz de tomar un papel humilde y una posición humilde.
Esta semana, estudiando las Escrituras descubrí que hay un número enorme de promesas acerca de
la humildad en la Biblia. Dios hace más promesas acerca de la humildad que acerca de cualquier otro tema
excepto tal vez la generosidad. Déjenme leerles unas cuantas.
Dios salva al humilde. Dios apoya al humilde. Dios promete guiar al humilde. Dios le da sabiduría al
humilde. Dios rescata al humilde. Él promete exaltar al humilde. Una y otra vez Dios dice "Te honraré, si
eres humilde". Con la humildad viene el honor. Por otro lado, Dios odia el orgullo. "Hay siete cosas que Dios
odia..." Y la cosa número uno es el orgullo. Fue el orgullo lo que hizo que patanás fuera expulsado del cielo.
Pero Dios ama la humildad. De hecho, la Biblia dice esto en Isaías 66:2, "Las personas que más
atesoro son los humildes. Ellos dependen de mí." Dios dice, "Yo atesoro la gente que tiene un espíritu
genuino y real de humildad."
Voy a poner estas promesas en el sitio de Internet de la iglesia para que las puedan descargar si
quieren. pi Dios ha prometido todas estas cosas acerca de la humildad, ¿qué cosa es? Ya sabemos lo que no
es. ¿Qué cosa es?
Porque la humildad es una parte del amor -el amor es humilde- la Biblia nos enseña que la
humildad es algo que usted hace. Es una manera de pensar y es una manera de actuar. No tiene nada que
ver con sus sentimientos. Usted dice, "No me siento muy humilde." Eso no importa. Los sentimientos no
tienen nada que ver con la humildad del todo. De hecho, como se sienta es muy irrelevante. La humildad es
una manera de actuar. Es algo que se hace. Es una manera de pensar. Y debido a eso, como el amor, la
humildad es una escogencia. Usted escoge ser humilde. No es algo que le hacen a usted. Es algo que usted
mismo decide hacer.
En todas sus páginas, la Biblia nos dice, "Humíllense ante Dios." Es algo que escoge hacer. En cierta
ocasión, un amigo me dijo, "Le pedí a Dios que me quitara mi orgullo. Dios me dijo que no. No le entendí.
Entonces Él dijo, "El orgullo no es algo que necesito quitarte. Es algo que estás supuesto a dejar de hacer."
Es una escogencia. Usted escoge no ser egocéntrico. Usted escoge no ser arrogante. Usted escoge no ser
ególatra. En lugar de eso, escoge actuar en maneras humildes.
¿Qué es la humildad? Es pensar y actuar en el interés de otros en lugar del suyo. La humildad
significa enfocarse en otros. pignifica pensar en otros y olvidarse de uno mismo. La humildad es olvidarse
de sí mismo. Usted está tan interesado en otros que ni siquiera está pensando en "¿Qué es lo que le voy a
sacar a esto?" Entonces, no es pensar menos de sí mismo. Uno simplemente no piensa en sí mismo del
todo.
Ésta es una escogencia y es algo que todos podemos hacer. Es algo que puede practicar. 1 Juan
3:18 dice, "Go sólo hablemos acerca del amor, practiquemos el amor verdadero." Ponga un círculo
alrededor de "practiquemos". La Biblia dice que el amor es algo que puede practicar, algo a lo que se puede
hacer bueno, repitiéndolo una y otra vez.
Usted sabe lo que significa practicar. ¿Cuántos de ustedes han tomado clases de música? Ustedes
saben lo que significa practicar. ¿Cuántos de ustedes han sido parte de un equipo deportivo? Ustedes
saben lo que significa practicar. Tiene que trabajar duro para hacerse bueno. ¿Cuántos de ustedes han
hecho mucho ejercicio en un gimnasio por más de dos semanas? Ustedes conocen el significado de la
práctica. Cuando hace algo repetidamente una y otra vez, se hace bueno a eso. Usted se mejora. Cuando
empieza a hacerlo, no parece ser tan divertido. No parece ser natural. Usualmente al principio es muy
difícil. Pero mientras más lo hace, se va mejorando.
La Biblia dice que el amor y la humildad son algo que puede practicar. Hoy vamos a hablar acerca
de cuatro formas prácticas en las que usted puede practicar la humildad. Algunos de ustedes pueden que
estén pensando, "No necesito este mensaje." pi piensa así, usted lo necesita más que nadie. Lo asombroso
acerca del orgullo es que lo vemos instantáneamente en otra gente y lo odiamos. Pero siempre estamos
ciegos al orgullo en nosotros mismos. Puede que esté pensando, "Yo no ando allí de bocón. Yo no ando allí
hablando con arrogancia acerca de mí. Yo no ando allí exagerando y hablando acerca de mí todo el
tiempo." Esta es sólo una de las miles de diferentes expresiones del orgullo. Hay muchas otras maneras de
ser orgulloso que tan solo la jactancia. pon esas otras formas de orgullo que están menos expuestas, que
son internas, que no son tan obvias, las que realmente nos hacen caer.
Hoy vamos a echarle un vistazo a cuatro tipos de orgullo que normalmente no notamos y algunas
maneras en las que podemos practicar la humildad.

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Piense en situaciones en su vida en las que le es difícil dar la preferencia a otra persona.

     Pensé acerca de un par de escenarios y tal vez se puede identificar con
ellos. Imagínese que está en la línea de caja del supermercado. Es la línea más larga... y la más lenta.
¿Cuántos de ustedes tienen la tendencia a meterse siempre en la línea más larga y más lenta? Usted está
ahí parado esperando. Tiene prisa. El tipo detrás de usted lo está empujando con su carrito. No halla las
horas de salir. De pronto oye este anuncio en los altavoces del supermercado, "La caja cuatro está abierta."
¿Qué haría en ese momento?
Les pregunté a varios pastores de la iglesia que harían. Y estas son las respuestas que recibí:
Uno me dio lo que llamaría la táctica de Rambo. Todo lo que tiene que hacer es apartar y empujar a
niños y ancianas y sale directo a la caja cuatro. (Estos son nuestros pastores.)
Otro me dijo, "Agarre un jamón, póngalo bajo su camisa y diga, ' Madre con bebé' y se dirige a la
línea cuatro."
Otro pastor hace esto todo el tiempo -la treta de la mala dirección. Apuntando en la dirección
equivocada, él dice, "¡La caja cuatro está abierta!" Y después se va como loco en la dirección correcta.
Déjeme darle otro escenario. Usted está en el estacionamiento de la iglesia. Llega a la iglesia, 10
minutos tarde (algunos de ustedes siempre llegan a la iglesia 10 minutos más tarde.) Los niños han estado
peleando, y ve un espacio abierto. Tres carros se dirigen al mismo espacio. ¿Qué haría? A) acelerar. D)
frenar. C) dejar que el otro carro se le adelante y se estaciona detrás de él. Es su escogencia.
Esto es lo que la Biblia tiene que decir acerca de esto. Romanos 12:10 dice, "Con respeto, den la
preferencia los unos a los otros." Hace como semana y media, tuvimos la oportunidad de hacer algo que
nunca habíamos hecho antes. Fuimos invitados a ir a la sinfonía por unas personas muy amables. pé que los
sorprende que nunca he ido, a pesar de lo culto que soy, pero nunca había ido a la sinfonía. Fue una
experiencia muy agradable. Esa noche aprendimos mucho. Hicimos muchas preguntas. Había un tipo allí al
que todos le ponían atención especial. Cuando entró, todos aplaudieron. El conductor personalmente lo
saludó. Todos aplaudieron. Había un compositor invitado esa noche. Él le dio reconocimiento a esta
persona. Todos aplaudieron. Él se fue sólo del escenario. Todos aplaudieron. Él era sólo un violinista -¿qué
está pasando? Entonces nuestro anfitrión me dijo que él es el violinista de la primera silla, el maestro de
concierto. Me imagino que eso era especial.
Recordé una cita de Leonard Bernstein, el famoso conductor de orquesta, que cuando le
preguntaron cuál era el instrumento más difícil de tocar en la orquesta, él respondió, "El segundo violín".
Pienso que esto es verdad. Todos quieren el lugar de prominencia. Habían como unos 20 violinistas
esa noche en la sinfonía. Y sólo una persona podía sentarse en ésa silla. Todo el resto tenía que ser
respaldo. Pero sin el resto, no hay sinfonía. pe necesitan todas las partes, toda la armonía, todos
ejecutando su parte para producir la música. Pero sólo uno puede estar en eselugar prominente.
¿Y qué del resto de nosotros que podemos practicar ser el segundo violín en las muchas facetas de
la vida? Para parafrasear el versículo que acabamos de leer, Romanos 12:10 (la paráfrasis de The Message),
"èractiquen ser el segundo violín." Lo animo a que encuentre algunas categorías en su vida donde puede
dejar que otros reciban la atención y donde les puede dar la preferencia y el reconocimiento.

          


                   
     
Hace como 8, 10 años y hace como unas 25 libras, solía correr mucho y de vez en cuando corría en
competencias. Pero nunca tenía lo necesario para ganar. Me entrenaba duro, trabajaba duro, pero cuando
llegaba el día de la carrera, nunca lograba acabar en ninguno de los tres primeros lugares. No en la
categoría de mi edad. Ocasionalmente era como el quinto en la categoría de los de 60 a 80 años. Pero
nunca era primero, segundo o tercero en la categoría de mi edad.
Pero un camarada mío, siempre acababa en uno de los tres primeros lugares. Gary siempre fue
muy rápido. Le pedí que me ayudara con mi tiempo y lo hizo. Finalmente me dijo, "¿Por qué no entramos
en una carrera y corro contigo toda la carrera?" Fue tremendo. Cuando me sentía débil, en ese tiempo de
las carreras cuando empezaba a perder el paso, Gary me aconsejaba y me empujaba, me animó -paso por
paso. Me habló durante toda la carrera. pin embargo, sabía lo que pasaría una vez que dobláramos la
esquina y viéramos la meta. Y estaba pensando, "Aquí es donde Gary me deja."
Pero me equivoqué. Doblamos la esquina, vimos la meta y me quedé pasmado de lo que pasó. Él
empezó a perder la delantera. pe estaba quedando atrás. "¡Lo voy a alcanzar!" Pero ustedes saben que no
era eso lo que estaba pasando del todo. Él miró la meta y sabía que yo tenía una posibilidad. Y aunque él
hubiera podido ganarme, dejó que me adelantara. Esta fue la primera y última vez que jamás logré una
tercer lugar en una carrera en la categoría de mi edad. Gary dejó que me adelantara.
Mucho más importante que adelantarse en una carrera por las calles es adelantarse en la vida y
finalmente un día vivir en la presencia de Dios para siempre en el lugar que la Biblia llama el cielo. ¿pabe
cómo pasó esto? Fue porque Jesús nos dio la preferencia. Como un esclavo, como un siervo, él puso a un
lado sus propias preferencias, sólo para que usted y yo pudiéramos adelantarnos. Leemos acerca de esto
en Filipenses 2:3-8, "Go se empujen hasta el frente... èónganse a un lado y ayuden a otros a que tomen la
delantera. Go se obsesionen con solo aventajarse. Olvídense de ustedes mismos por un momento para
echar una mano. èiensen en ustedes de la misma manera que Jesús pensó en sí mismo. Él era Dios... pero él
tomó la posición de un esclavo... un proceso increíblemente humillante. El no pidió privilegios especiales. En
lugar de eso, él vivió una vida obediente y sin egoísmo..." Piense en la vida humilde que Jesús vivió, viniendo
del cielo a la tierra, naciendo en un establo. En el fin de semana cuando estaba haciendo su entrada pública
a Jerusalén, la mayoría de los eruditos bíblicos de ese día pensaban que el Mesías entraría triunfalmente
como un militar victorioso, talvez cabalgando un garañón blanco. En lugar de eso, el Hijo de Dios escogió
entrar a la ciudad montado sobre un asno. Y después murió la muerte de un criminal. ¿Por qué? Porque en
su muerte, usted y yo recibimos la oportunidad de tener vida. Jesús nos prefirió a nosotros antes que a sí
mismo.
           
        
pantiago 1:19 dice, "Sean rápidos para oír, lentos para hablar y lentos para enojarse". Hacemos al revés las
dos primeras. pomos lentos para escuchar pero rápidos para hablar.
Una vez tenía un amigo que vivía cerca de la vía del tren. Cuando lo visitábamos y el tren pasaba,
era una distracción muy grande. Él vivía tan cerca de los rieles que la vibración y el ruido del tren
estremecían su casa. Era tanto el ruido que teníamos que gritarnos para poder oírnos mientras el tren
pasaba. Una vez le pregunté, "¿No te molesta?" Me respondió, "¿Qué cosa? pi vives cerca de un gran ruido,
después de un rato aprendes a ignorarlo."
Aprendí algo acerca de mí mismo ese día. poy de esos tipos que muy a menudo quiere más hablar
que oír. Y pensé, " pi yo soy el único que está hablando, si solo soy el único ruido en la sala, es muy fácil ser
ignorado." Por lo tanto, estoy aprendiendo a dejar que otros sean los que hablen; así, cuando tenga algo
que decir, talvez entonces la gente me oiga. Pero se necesita la práctica de la humildad.
                    

Estar abierto a las sugerencias de otros, estar abiertos a la corrección de otros, estar abierto aún a
la crítica. Este es un componente crucial de la humildad. Parte de la humildad es tomar la postura de un
aprendiz, estar dispuesto a oír y a aprender, estar dispuesto a crecer, estar abierto a las sugerencias y a las
correcciones de otra gente. Uno no piensa que lo sabe todo. Uno no actúa como que si lo sabe todo.
¿Por qué debería de hacer esto? ¿Por qué debería de estar abierto a la crítica? ¿Por qué debería de
estar abierto a la corrección de la gente a mí alrededor? Existen tres razones muy buenas.
       La Biblia dice en Proverbios 15:12, "Ê la gente engreída no le gusta ser
corregida y nunca piden consejos". Lo digo otra vez, la raíz del orgullo es la inseguridad. "Tengo temor de
que se dará cuenta que en realidad no sé mucho." Pero será más gustado si no es tan orgulloso, si está
abierto a ser enseñado. ¿Le gusta a usted estar alrededor de gente arrogante? Por supuesto que no. Es
pura irritación. pon una gran molestia. Una de las cosas que hace la humildad es hacerlo a usted más
gustado. perá más gustado por otros si es humilde en lugar de ser orgulloso.

                  . Proverbios 15:32 dice, "Si
rechazas la crítica, solo te dañas a ti mismo; pero si escuchas la corrección, creces en el entendimiento." El
que es humilde siempre está aprendiendo porque está abierto a la corrección. Todos somos ignorantes,
sólo que en diferentes temas. Usted sabe algunas cosas que yo no sé, y yo sé algunas cosas que talvez no
sabe. La persona a su lado sabe de algunas cosas que talvez los dos nosotros no sabemos. Todos hemos
tenido diferentes experiencias y pasados.
Por eso es que dos cabezas son mejores que una y es sabio aprender de las experiencias de otros.
Usted no tiene tiempo en la vida para aprender todo lo que debe aprender experimentándolo
personalmente. Es más inteligente aprender de las experiencias de otros. Y cómo lo hace es aprendiendo a
hacer preguntas. Y la única manera de aprender a cómo hacer preguntas es si usted es humilde, si está
abierto.
Tiene que decidir si quiere ser sabio o si quiere aparentar ser sabio. pi quiere ser inteligente o
aparentar ser inteligente. pi quiere aparentar ser inteligente, entonces no puede dejar que nadie sepa que
no sabe. Por lo tanto, siempre tiene que exagerar para salirse de situaciones apretadas y así sí que nunca
aprenderá nada. piempre les digo a los pastores que vienen a nuestras conferencias, "Todos los líderes son
aprendices. En el momento que deja de aprender, deja de ser líder." Es una de las cualidades claves del
liderato. Uno nunca deja de aprender y de crecer. Usted se mantiene abierto, se mantiene con una postura
de aprendiz. pi tiene un negocio -un negocio que prospera necesita un dueño que está creciendo, un
ejecutivo que está creciendo. En el momento que deja de crecer, su negocio deja de crecer. Tiene que
mantener la postura de alguien que quiere aprender más.
Proverbios dice, "La gente inteligente siempre está buscando nuevas ideas. De hecho, están
abiertos a ellas y las están buscando todo el tiempo". Usted mira a su alrededor y dice, "¿Qué más me
pueden enseñar? ¿Qué más puedo aprender?" perá más sabio si está abierto a la corrección.
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 Tendrá menos conflictos si está abierto a la corrección de otros.
Proverbios 13:10 dice, "El orgullo sólo produce las discusiones." Tengo un interés personal en este versículo.
Este fue el primer versículo que mi esposa y yo nos memorizamos después que nos casamos. Justamente
nos lo memorizamos en nuestra luna de miel porque lo necesitábamos en nuestra luna de miel. "El orgullo
sólo produce las discusiones." Cada vez que se mete en una discusión, puede estar seguro que el orgullo
está manifestando su horrible presencia.
Este es el versículo de memorización de esta semana: Proverbios 13:10, "El orgullo sólo produce las
discusiones." Espero que se memorice este versículo y lo ponga en su cabeza. Más tarde esta semana
tendrá un argumento con alguien que ama o alguien que no ama, y Dios le dirá, "¿Recuerdas ese versículo?
El orgullo sólo produce las discusiones". pe puede calmar si reduce el orgullo en su vida y tiene una actitud
más humilde y entonces podrá ver lo que está causando el problema. El orgullo está siempre, siempre
detrás de cualquier argumento o discusión -el orgullo manifestando su horrible presencia.
Y cada vez que lo critiquen, Dios lo está probando. La crítica es siempre una prueba de su humildad.
Puede contar con ello. Cada vez que es criticado, Dios está probando su humildad para ver si va a
responder defensivamente, ofensivamente o humildemente.
Tuve la oportunidad de aprender de la corrección esta semana. Mi agenda está siempre muy llena.
Tengo una vida muy ocupada, muchas juntas, muchas decisiones y presiones, hay un montón de cosas que
están pasando en mi vida. pimplemente hay muchísimas cosas que están pasando. Y me había estado
sintiendo un poquito agotado.
Cuando llegó el fin de semana pasado, cuando vine a hablar, honestamente me sentía totalmente
sin fuerzas. La verdad es que había llegado a mis límites emocionalmente. Y pensé, "Dios, no sé cómo voy a
aguantar hablar en cinco cultos y atender el sexto -el culto con video. No sé cómo todo eso va a pasar.
Tendrás que ayudarme ha sobrevivir esto." Me sentí que estaba totalmente exhausto, físicamente y
emocionalmente. Después de los cultos la semana pasada, me fui a casa, me acosté y me dormí por 13
horas. Me levanté a la mañana siguiente, y todavía me sentía como que un bus me había atropellado.
Apenas me estaba poniendo al día con mi sueño después de semana tras semana de mover esto, jalar
aquello, arreglar esto, y poner aquello. Y esto me estaba perturbando.
Entonces el lunes por la mañana me levanté y tuve una pequeña junta familiar con Kay, mi esposa.
Le dije, "Tienes que ayudarme. Dame un consejo. ¿Qué necesito cambiar en mi vida, porque esto es una lo-
cura? No puedo mantener este trajín de vida. Algo tiene que cambiar. ¿Qué es lo que estoy haciendo mal
en mi vida?" Y escuché. Traté de abrirme a la corrección. Entre los dos hicimos una lista de seis o siete cosas
que se podían cambiar en mi agenda para hacerla más manejable, cosas que necesitaba recortar y cambiar.
Pero estaba abierto diciéndole, "Dímelo honestamente. ¿Qué es lo que ves?"
En un momento de puro candor, Kay dijo, "La verdad Rick, es que a causa de tu agenda, me he
estado sintiendo muy sola." Eso me partió el corazón. Fue como si me lo hubieran sacado, lo hubieran
tirado al suelo, y lo hubieran pateado. Las lágrimas se me salieron de los ojos. No sé que le puede causar
más convicción a un marido que oír a la persona que más ama decir, "Me siento sola. No tienes tiempo
para la persona más importante en tu vida en este momento. Me siento sola." Me sentí totalmente
aplastado por su confesión. pinceramente, me rompió el corazón. Me sentí avergonzado, humillado y
obviamente le pedí perdón inmediatamente y me dije a mí mismo, "Las cosas tienen que cambiar. No me
importa si nunca nada más pasa en mi vida, mi esposa no va a estar sola. Porque yo hice el compromiso
'Hasta que la muerte nos separe.' Y esta va a ser una de mis prioridades." palí de allí y pasé el resto del día
pensando acerca de los cambios que Dios necesitaba hacer en mi vida y lo que Dios quería hacer, y las
diferencias. Una de las cosas que hice para recordarme fue que me compré un reloj despertador. Me dije
que éste reloj, de aquí en adelante, me iba a servir para recordar esto: haz tiempo para lo que más importa.
Cada vez que mirara ese reloj, me va iba decir: "Haz tiempo para lo que más importa".
¿Tiene agallas para hacer esto? La humildad no es para cobardes. No es para debiluchos. No es
para gente pasiva y con poca autoestima -gente insegura. pe requiere valentía ser humilde, confrontar los
problemas, aguantar la crítica, y decir, "pé de lo más honesto conmigo. Dime dónde es que estoy mal en mi
vida." ¿Tiene la valentía de ir a esa persona que lo conoce muy bien y preguntarle, "¿Qué es lo que está
fuera de orden con mi agenda? ¿Qué es lo que está fuera de orden con lo que considero importante? ¿En
mi vida? ¿Qué prioridades están fuera de orden? ¿Qué es lo que está mal?"? pe necesita una valentía
enorme para ser humilde. ¿A quién necesita preguntarle?
Tenía una escogencia. Cuando mi esposa me dijo, "Tu estilo de vida me está haciendo sentirme
sola", tenía que tomar una decisión rápida e instantánea en ese momento. O me abro a la corrección y
humildemente acepto lo que dijo o me encierro en una negación orgullosa y empiezo a defenderme. Podía
haber dicho, "No tienes la más mínima idea de la presión que siento. ¿Te sientes sola? ¿Cómo te gustaría
ser el pastor de la segunda mayor iglesia en los EE.UU. y que en un mes se aparezcan 3000 personas
nuevas? Y mover 2000 personas a grupos y..." y defenderme a mí mismo. Del orgullo viene el conflicto,
vienen los argumentos, viene la riña. Cuando se pone a la defensiva nunca llega a ningún lado. No crece, no
aprende, no se desarrolla; no se hace más como Cristo, si defiende el pecado en su vida.

c    
        . No que seamos infantiles, pero en lo
que respecta a la humildad, Dios quiere que seamos como niños. "El que se humilla como este niño es el
mayor en el reino de los cielos." ¿Por qué es que Dios quiere que seamos como niños en nuestra humildad?
Porque los niños están abiertos a ser enseñados. Están abiertos a aprender, están deseosos de aprender.
No están a la defensiva. Ellos no dicen, "No necesito aprender a caminar. No necesito aprender a hablar. No
me pueden enseñar nada acerca de leer." Los niños están abiertos a ser enseñados. Usted tiene una
escogencia esta mañana. Usted puede estar abierto a ser enseñado o puede estar cerrado, ser un intocable
o puede humillarse.

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Puedo practicar admitirlo cuando estoy equivocado. Esto es más fácil para algunos de nosotros que
para otros. Pero la verdad es que todos cometemos errores. Y lo hacemos con gran regularidad. Y he
descubierto que decimos que admitimos que estamos equivocados solamente hasta cierto punto. Es fácil
decir que estaba equivocado si solo deseo aceptarlo por un minuto para después regresar a mi posición de
ataque puedo desviar en otra dirección. "Cometí un error. Pero tú..." o "Lo siento mucho pero si tan sólo
hubieras..." O empezamos a dar excusas, "Fue por esto, fue por lo otro." Tratamos de suavizarlo todo.
Cuando en realidad lo que necesitamos es una brutal y honesta humildad. "Lo acepto. Cometí un error. Lo
siento." Es muy difícil para nosotros en éstos días, decir solo la verdad de lo que realmente está pasando en
nuestras vi-das ʹdecir la verdad acerca de quién somos realmente.
El pastor Gerald me contó la historia de una mujer que ilustra esto. Esta mujer andaba en un viaje
de negocios lejos de su marido y de sus hijos, dejándolo a él en casa encargado de todo. Una noche llamó
para ver cómo estaba todo y él le dijo, "Pues no muy bien. Hoy se murió el perrito." Y ella dijo, "Esa sí que
es una mala noticia. Pero lo peor es la manera en que me la diste. Podrías habérmelo dicho poco a poco,
podrí-as haberme preparado para esa clase de noticia, podrías haberme dejado que me preparara. La
primera vez que llamé a casa, podrías haber dicho, 'Cariño, sin saber cómo, el perrito se subió al techo.'
Después la no-che siguiente que llamé, podrías haber dicho, 'El perrito se tiró del techo y no está bien.'
Entonces la tercera noche, podrías haber dicho, 'El perrito se murió.' Entonces es que hubiera estado lista
para la mala noticia." Él le dijo, "Trataré de hacerlo mejor la próxima vez." Y entonces ella le dice, "Bueno,
cambiemos de tema. Estás en casa con los niños, estás cuidando la casa, y sé que mi mamá llegó para
visitarnos por un rato. pé que ella no te agrada mucho. ¿Cómo va eso? ¿Cómo le va a mi mamá?" Y él dijo,
"pe subió al techo."
Tratamos de suavizar las malas noticias, pero la honestidad y la humildad lo llevan a uno muy lejos.
Hace unos meses, un pastor en la región central del país me llamó y me dijo, "Brad, tengo el nombre de un
tipo que conoces. Estoy considerándolo para una posición pagada aquí en la iglesia. En su curriculum vitae
incluyó una carta que él escribió que indica que tuvo algunos problemas en su última posición ministerial
tiempo atrás. Me gustaría saber más acerca de eso y saber si me pudieses recomendar a éste tipo." Yo le di-
je, "Antes de que te dé una recomendación o te diga que no puedo dártela, me gustaría ver su carta." No
los entretendré con los detalles de los problemas de mi amigo pero solo quiero decirles que fue un colapso
mo-ral de proporciones mayores. Dañó profundamente a su propia familia y dañó profundamente la iglesia
en la que estaba sirviendo.
El pastor que estaba considerando a mi amigo me mandó su carta por correo electrónico y cuando
la leí me conmovió. Mi amigo asumió toda la responsabilidad. No suavizó nada. No trató de evadir su
respon-sabilidad. No la calificó. No la descontó. No trató de dar excusas. No culpó a nadie. Cuando los
problemas ocurrieron, él no hizo nada de esto. Pero ahora, podía verlo en su carta, él estaba en una
posición en la que podía ser totalmente transparente. Había un alto grado de honestidad y de verdadera
humildad en esa carta. Él dijo más acerca de la situación que lo que yo probablemente le hubiera
aconsejado que dijera, pero él es-taba muy deseoso de ser honesto y abierto.
Llamé de regreso al pastor y le dije, "Habiendo leído la carta de mi amigo, creo que le daría una
oportunidad. pi él hubiera tratado de negarlo, tratado de encubrirlo de alguna manera, tratado de
suavizarlo en alguna manera, hubiera dicho que él no estaba listo. Pero él ha sido brutalmente honesto
contigo acerca de su pecado. Pienso que se lo deberías de decir a toda la congregación. No quieres que se
enteren más tarde y piensen que has estado ocultando esto. Mi amigo no necesita venir a tu ciudad
preguntándose si su pasado lo va a perjudicar allí también. Procede a decírselo a toda la congregación.
pácalo a la luz. pé honesto con todos." Él le contó a la iglesia, y la iglesia votó casi unánimemente que mi
amigo viniera y empezara a ser-vir en la iglesia. El ya tiene varios meses de estar allí. Le va muy bien. Yo no
podría estar más complacido. Él recibió otra oportunidad, y está de regreso sirviendo. Dios está usando su
vida y sus dones. EL AMOR Ep HUMILDE ´ 
    r 
La Biblia habla acerca de esto. Proverbios 28:13 dice, "El hombre que rehúsa admitir sus errores
nunca puede tener éxito. èero si los confiesa y los abandona, recibe otra oportunidad."No conozco su pa-
sado. Algunos de ustedes pueden que hayan crecido en hogares donde nunca oyeron decir, "Lo siento". Na-
die nunca dijo, "Estoy equivocado." Entonces ahora estamos imitando ese comportamiento y se nos hace
di-fícil admitir nuestros errores en el trabajo o en la escuela o en el hogar y decir, "Cometí un error." Por
algu-na razón creemos que si la gente llega a saber que somos menos que perfectos, que nuestra estima en
sus ojos se disminuirá. ¿pabe qué? Ya saben que no es perfecto.
Yo no soy perfecto. Mi esposa me ayuda con esto. Particularmente en lo que concierne a nuestras
hijas. pi he sido impaciente, si he sido duro, si he sido un poquito negligente y no les he puesto atención o
no les he dado el amor apropiado, Kim me dice, "Probablemente eso es algo que deberías debe arreglar
con las niñas." Y lo hago. Voy y hablo con ellas y les digo, "pu papá estaba equivocado en eso, y reaccioné
muy fuerte," o "Lo siento que no estuve tan presente con ustedes a como podía haberlo hecho." Y en lugar
de que mi estima en sus ojos se achique, mientras más lo admito, más alta se hace en sus ojitos. Es
sorprendente ver que ellas piensan más de su papito cuando les digo que estaba equivocado que cuando
nunca les admito que estaba equivocado.
El primer paso hacia la sanación de relaciones siempre comienza con la humildad. pantiago 5:16 di-
ce, "Hagan de esto una práctica frecuente." Ponga un círculo alrededor de "práctica". Es un concepto muy
profundo del cual el pastor Rick está hablando. El hecho es que podemos escoger ser humildes y podemos
practicarlo y llegar a ser buenos a esto. "Hagan de esto una práctica frecuente: confiesen sus pecados los
unos a los otros y oren los unos por los otros a fin de que vivan sanados y en plenitud...".
Demos la bienvenida a Bob, quien nos dará un testimonio acerca de esto.
Bob:
Me gustaría compartir con ustedes como Jesús me ayudó a restaurar las relaciones
severamente averiadas en mi familia cuando dejé mi orgullo, cuando dejé de negar mis problemas, y
empecé a admi-tir a Dios y a aquellos que había estado hiriendo por años, que estaba equivocado.
Cuando tenía como 12 años empecé a experimentar con las drogas y el alcohol. Lo que comenzó como
algo que hacía para ser aceptado por otros, pronto se hizo una adicción. Por muchos años viví en una
total negación orgu-llosa de que tenía un problema. Como resultado, era como un tornado en la vida
de todos aquellos a mi alrededor. Dejaba la destrucción en mi camino, adonde quiera que fuera.
Finalmente mis padres me es-cribieron una carta y me dijeron cuánto me amaban y cuánto interés
tenían en mí pero que ya no podían verme destruir mi vida. Me sacaron del negocio de la familia y de
la casa.
Lo que destruyó mi negación fue el ministerio Celebrando la Recuperación de aquí de la iglesia,
al que empecé a ir desde hace como siete años. Los nuevos amigos que conocí ahí me ayudaron a dar-
me cuenta que mi recuperación dependía de una relación personal con Jesucristo. Nunca me iba a
poner mejor por mi cuenta. Ya había probado eso. Así que me humillé, admití mis defectos y le pedí a
Jesús que fuera el peñor, el palvador y el Director de mi vida. Ahora tengo el poder para cambiar. En el
mo-mento en que me humillé y le pedí ayuda a Dios, Él lo hizo. Los cambios empezaron a ocurrir
inmedia-tamente. Por ejemplo, se me hizo más fácil ver cómo mi orgullo me tenía estancado en mis
malos hábi-tos. Otro cambio fue mi deseo de restaurar mi relación con mi madre, con mi padre y con
mi hermana. A medida que avancé a través de los pasos específicos del proceso de recuperación, Dios
me dio el va-EL AMOR Ep HUMILDE ´ 
    r=
lor para hacer lo que tenía hacer -hacerle frente a mi familia y buscar su perdón por el daño
que causé y empezar a reconstruir la confianza que tenían hacia mí.
Con el tiempo mi familia vio los cambios que Jesús estaba haciendo en mi vida y las relaciones
fueron restauradas. Pero más sorprendente que eso, fue que me sentí aún más humilde ya que Dios
me consideró digno de ser usado para ayudar a los miembros de mi familia a que también tuvieran una
re-lación personal con Jesucristo. Primero, mi hermana que vio lo que pasó con mi vida, empezó a
venir a la iglesia y al ministerio Celebrando la Recuperación y le dio su vida a Cristo. Después fue mi
mamá. Ella empezó a venir a la iglesia para encontrar fortaleza en su batalla contra el cáncer. pu
relación con Jesús creció, y hace ya tres años que se fue a la presencia del peñor. Estoy tan agradecido
a Dios porque hizo sonar la alarma para que nuestra relación fuera restaurada antes que muriera.
Después de tomar la clase 101, un año más tarde, tuve la valentía de hablarle a mi padre acerca de
Jesús. Tuve el privilegio de guiar a mi padre en una oración en la que le pidió a Jesús que entrara en su
vida y después el 27 de Abril de este año mi papá también se murió y se fue al cielo a estar con mi
mamá y con su palvador.
Mirando mi pasado, estoy muy agradecido por el dolor que me agarró la atención. De otra ma-
nera, hubiera estado estancado en mi orgullo, negando que necesitaba la ayuda de Dios y viviendo con
todas esas relaciones arruinadas. Fue humillante admitir mis defectos y mis errores, pero Dios le da
gracia al humilde, y esa gracia me dio el poder para cambiar. pi el orgullo no le ha permitido que admi-
ta sus defectos y que pida perdón a aquellos que ha herido, le urjo a que se humille hoy y que haga lo
debido. No espere. Uno no tiene para siempre la oportunidad de restaurar esas relaciones.
Rick:
1.                   
 

Esto es lo que usualmente hacemos. Hacemos nuestros planes sin ni siquiera consultar con Dios.
Después oramos y le pedimos a Dios que bendiga nuestros planes que hicimos sin tomarle en cuenta. Asu-
mimos que nuestros planes son su voluntad. Entonces cuando nuestros planes no se realizan en el tiempo
que queremos que se realicen o no se realizan del todo, nos enojamos con Dios. Eso se llama orgullo. Dios
odia el orgullo. El toma muy en serio el orgullo.
pantiago 4:6-7, "Dios se opone a cualquiera que es orgulloso, pero le da gracia a todo aquel que es
humilde." Ponga un círculo alrededor de "se opone." Puedo pensar en un montón de gente que no me
gusta-ría tener de oponentes, que se opongan a mí. No me gustaría estar en un cuadrilátero de boxeo
peleando co-ntra Evander Hollyfield. No me gustaría estar en una cancha de baloncesto jugando contra
Michael Jordan. No me gustaría estar en una subasta contra Bill Gates. No hay manera alguna que pueda
ganar esa.
Pero definitivamente no quiero ser opuesto por Dios, porque absolutamente no hay manera que
vaya a ganar esa batalla. La Biblia dice que cuando me pongo orgulloso, Dios no está solamente un poquito
irri-tado conmigo. Él se opone a mí en ese mismo instante. Estoy queriendo tomar el papel de Dios. Dios
está opuesto a mí. Me hago un enemigo de Dios siempre que me lleno de orgullo. ¿Qué significa entregarse
y entregar sus planes a Dios? EL AMOR Ep HUMILDE ´ 
    r
Romanos 6:13 dice, "Entreguen todo su ser a Él para que sean usados para sus justos propósitos."
Entregarse significa, "Dios, me voy con tus planes para mi vida, no los míos. Dios, tengo planes, tengo sue-
ños, tengo metas, tengo ambiciones pero sé que me pusiste en esta tierra por una razón, con un propósito,
y Dios, voy a escoger intencionalmente tu plan para mi vida en lugar del mío. pé que no me lo revelarás de
un solo. Vendrá poco a poco a su tiempo, por lo tanto voy a tomarlo paso a paso pero quiero tu plan, no el
mío." Esa es la humildad. A eso se le llama ser humilde, entregándole sus planes a Dios.
Ya viene la Navidad. ¿Ha pensado por qué de todas las mujeres del mundo Dios escogió a María pa-
ra que fuera la madre de Jesús? Él escogió a una muchachita campesina para que fuera la madre del palva-
dor del mundo. ¿Por qué? Porque la actitud de María fue una de total humildad. Ella estaba dispuesta a
hacer todo lo que Dios quisiera. El ángel vino a María y le dijo, "María, Dios te ha escogido para que seas el
vehículo por medio del cual Él va a entrar al mundo." Dios pudo haber venido al mundo de cualquier mane-
ra que quisiera, pero Él escogió venir al mundo de la misma manera que todos lo hicimos, a través del naci-
miento. Y no sólo eso, pero Él escogió a una jovencita pobre, y el bebé iba a nacer en un establo. No se
puede ser más humilde que eso. Y entonces él le dice, "María, aunque nunca has conocido hombre, saldrás
embarazada. Pero será Dios a quien cargarás. Él vendrá en forma humana. pe va a humillar y hacerse huma-
no. Porque nunca has conocido hombre, la gente no te va a entender. Van a pensar que has sido
promiscua. Cuando les digas, 'Estoy cargando el Hijo de Dios', nadie te va a creer. Así es que, María, esto va
a ser muy duro para ti." Y María le dijo al ángel, "Que así sea. poy la sierva del peñor. poy su sierva. Lo que
sea que Él quiera hacer con mi vida está bien conmigo." Esto es lo que significa entregarle sus planes a Dios.
Esto es ser humilde. Esto es lo que se llama morir a uno mismo.
¿Ha hecho esto? ¿Ha tomado esta decisión? ¿Ha llegado a ese punto en su vida en el que dice,
"Dios, ya no voy a seguir mi plan. Me voy totalmente con tu plan para mi vida. No sé que cosa es, pero ya
firmé mi nombre en la parte baja de esta página en blanco y te digo, 'pí, peñor. Cualquier cosa con la que
quieras lle-narla, está bien conmigo.'" Esto es entregarle sus planes a Dios.
Después de esa junta del lunes con Kay, pasé el resto del día básicamente pensando, orando,
hablan-do con el peñor y estudiando las Escrituras acerca de los cambios que sentí necesitaban ser hechos
en mi vi-da. Dios trajo a mi mente dos versículos de la Biblia y una frase. Por eso es que es bueno
memorizarse las Escrituras porque Dios las puede traer a mi mente justo cuando las necesito. No tuve que
ir a buscarlas y de-cir, "Me pregunto qué es lo que Dios dice acerca de esto." Dios trajo esos versículos a mi
mente.
La frase fue una frase que no está en la Biblia: "Bendito es el hombre que conoce sus límites." pe
me estaba viniendo a mi mente constantemente. No está en la Biblia. Es una cita de ese gran teólogo Clint
Eastwood. En la película "Dirty Harry", Harry dice, "Un hombre tiene que conocer sus limitaciones." Pero
como soy pastor tengo que hacerlo que suene espiritual, y por lo tanto dije, "Bendito es el hombre que
cono-ce sus límites."
¿pabían que la palabra "humor" y "humildad" y "humanidad" y "humano" vienen todas de la misma
raíz latina? La humildad es cuando toma a Dios en serio, y no se toma a usted mismo muy en serio. Necesita
más humor acerca de usted mismo. La mayoría de nosotros hacemos exactamente lo opuesto. Nos
tomamos a nosotros mismos demasiado en serio. pomos tan arrogantes y pomposos, que no tomamos a
Dios lo sufi-cientemente en serio. Dios dice, "Haz exactamente lo opuesto. No te tomes a ti mismo muy en
serio. Ten un poquito de humor acerca de ti mismo, pero sí tómame a mí muy en serio." EL AMOR Ep
HUMILDE ´ 
    r´
La humildad es en realidad aceptar su humanidad. No es ponerse a usted mismo por el suelo,
maltra-tándose diciendo, "¡No soy nada! ¡No valgo nada!" Es darse cuenta de que es un manojo de ambas
fuerzas y debilidades. Es ser simplemente honesto acerca de su humanidad. Usted tiene grandes fortalezas
y también tiene grandes debilidades. Yo tengo grandes fortalezas y también tengo grandes debilidades. La
humildad es ser honesto acerca de las dos. No es negar sus fortalezas; es ser honesto acerca de sus
debilidades. El orgullo está siempre basado en una falsa evaluación de usted mismo. Usted reduce su
campo de referencia para que pueda sentirse el pez gordo de un charco y empieza a pensar qué grande que
es y en su perspectiva no inclu-ye al mundo entero. El orgullo siempre está basado en una mentira. Está
basado en una falsa evaluación de sus propios talentos, de sus propias habilidades y de dónde vinieron.
Todo lo que tiene, incluso su talento, es un don de Dios. Usted no es dueño de eso, no se lo mereció, no se
lo ganó; Dios se lo dio todo. Usted no tiene nada sin Dios. La humildad, por otro lado, es un entendimiento
preciso e imparcial de sus fuerzas y de sus debilidades. Usted se da cuenta que tiene limitaciones. La
humildad comienza con la verdad.
Entonces, ¿cuál es la verdad acerca de usted? La Biblia dice que es amado infinitamente por Dios,
que es dotado, y que es profundamente defectuoso. Todas estas tres cosas son verdad. Es dotado, es
profun-damente defectuoso, es un pecador, a como todos lo somos, y es profundamente amado porque el
amor de Dios no está basado en su comportamiento. Una cantidad considerable de la tensión nerviosa en
su vida y en mi vida viene de hacer cosas que Dios nunca planeó que hiciéramos. Hacemos esto: hacemos
nuestros planes. Decimos, "Puedo hacer más, puedo lograr más. Puedo ser más. Puedo tenerlo todo." No lo
puede te-ner todo. Los comerciales le pueden decir que lo puede tener todo, pero no lo puede tener todo.
Ese es un mito. Es un mito arrogante. No puede ser todo, no puede tenerlo todo y no puede hacer todo lo
que le gusta-ría hacer en la vida. Tiene sus límites. Tiene que reconocer esto. Dios nunca le va a pedir que
haga más de lo que Él le da poder, energía y tiempo para hacerlo. Lo cual quiere decir esto: si se siente
como que siem-pre está tenso, si su lista de 'Cosas que Hacer' nunca se acaba, si siempre tiene más cosas
que hacer que horas en el día, entonces significa solo una cosa: está haciendo algunas cosas que están
afuera de la voluntad de Dios. pon sus planes, y no los planes de Dios; porque Dios no le da más cosas que
hacer que el tiempo que le da para hacerlo.
pi está constantemente tenso, está haciendo algunas cosas que Dios nunca pretendió que hiciera y
es-tá siendo motivado por su propio orgullo y no por el plan de Dios. Necesita entender sus limitaciones.
Usted no es Dios. Usted ni siquiera es superman o superwoman. Tiene sus límites.
Uno de los versículos que Dios me dio ese lunes fue "Tomen mi yugo sobre ustedes y aprendan de
mí, porque soy manso y humilde de corazón y encontrarán descanso para sus almas."Cuando pensé en este
versículo ese lunes, se me ocurrió que quería ese descanso de alma. Estaba muy interesado en ese reposo
de alma. La Biblia dice, "Aprendan de mí." Jesús dice, "Yo soy humilde, y si aprendes de mí a como ser
humilde, tendrás descanso para tu alma."
La humildad es el antídoto de la tensión nerviosa. La humildad es la clave. Cuando se llena de orgu-
llo, se llenará de tensión nerviosa. Con más humildad, se sentirá menos tenso. ¿Por qué? Jesús dice esto,
"Tomen mi yugo sobre ustedes." ¿Qué es un yugo? Probablemente no creció en una finca. Un yugo es una
doble pieza de madera bajo la cual se amarran dos bueyes para jalar una carreta. Es un pedazo de madera
que junta a dos animales. El propósito del yugo es siempre hacer que la carga sea más liviana, hacer que la
carga sea más fácil de mover. Tiene a dos bueyes jalando una carreta llena de granos en lugar de uno.
Éste es un simple símbolo de dos cosas. Primero es un símbolo de asociación. Jesús dice, "pi te unes
a mí, si te conectas conmigo, si pones mi yugo sobre ti, te ayudaré a jalar la carga." Nunca fue la intención
EL AMOR Ep HUMILDE ´ 
    r
de Dios que viviera su vida jalando su carga por su cuenta. Jesús dice, "Pon mi yugo sobre ti. Es
fácil. Es li-viano." Y le ayuda a jalar la carga. Cuando quiera que sea que está tratando de jalar la carga por
su cuenta, sentirá tensión. Por lo tanto, tiene que humillarse. "Conéctate conmigo y seré tu socio de por
vida." Y cuan-do sea que se desconecte de Jesucristo, va a sentir tensión otra vez. Todo el tiempo. Y cada
vez que se reco-necta a Jesucristo bajo su yugo, el nivel de tensión en su vida comenzará a disminuir.
También es un símbolo de control. Cuando pone un yugo sobre dos animales, tienen que ir en la
misma dirección y tienen que ir al mismo paso. Jesús dijo, "pi pones mi yugo sobre ti, entonces yo le daré
dirección a tu vida, y yo marcaré el paso de tu vida, y no sentirás tensión." Él dice, "Mi yugo es liviano."
Muchos de ustedes están pensando, "Mi yugo no es liviano. Tengo una agenda pesada. No puedo ni empe-
zar a decirle todas las cosas que tengo que tener hechas esta semana. Es una carga pesada." ¿Es su vida una
carga pesada? Entonces es su yugo y no el de Dios. Está siguiendo sus propios planes para su vida -los que
Dios no programó para usted- en lugar de pus planes. Acerca de pus planes, Él dice, "Mi yugo es liviano, mi
carga es liviana y encontrarás descanso para tu alma." Él dice, "Únete a mí. No sólo te ayudaré con la direc-
ción de tu vida, pero le marcaré el paso." Y Él sabe justo el paso que es bueno para usted; ni muy rápido, ni
muy lento.
La humildad es entregar el control de su vida a Dios su creador que lo hizo. Ese es el máximo acto
de humildad. "Dios, tú da las órdenes. Eres el encargado. Me pongo bajo tu yugo. Me estoy conectando
con-tigo." Cuando hago esto, mi tensión nerviosa se comienza a disminuir.
El otro versículo que Dios me dio el lunes fue Miqueas 6: 8,"Esto es lo que el Señor demanda de ti:
practicar la justicia, amar la misericordia, y vivir humildemente con tu Dios." Dios trajo este versículo a mi
mente. Me lo había memorizado hace mucho tiempo. Dios dice que sólo hay tres demandas en la vida. Pon-
ga un círculo alrededor de "demanda". ¿Qué es lo que Dios demanda de mí? ¿Qué es lo que Dios quiere de
mí? Él nos lo dice claramente en Miqueas 6:8: Haga lo justo, ame la misericordia [eso significa que tenga
buenas relaciones, que es de lo que estamos hablando en estos 50 Días de Amor, perdonar y exhibir miseri-
cordia y amor a la gente] y caminar humildemente ante Dios. pi hace estas tres cosas, usted ha hecho todo
lo que Dios demanda de usted en la vida. Practicar la justicia, amar la misericordia [demostrarla a otra
gente] y caminar humildemente ante Dios. Esto simplifica la vida enormemente. Usted dice, "Dios, aquí
están las co-sas que necesito hacer hoy -practicar la justicia, demostrar el amor en mis relaciones, y
caminar humilde-mente ante ti." Necesitamos orar este próximo versículo, palmo 119:37, "Go me dejes
querer otro plan que no sea el tuyo." La humildad es entregarle sus planes a Dios a cambio de los de Él.
Vivimos gran parte de nuestras vidas creyendo el mito de que estamos en control. Pensamos que
es-tamos controlando nuestro destino, nuestra vida profesional, nuestras familias, etc. No estamos en
control de nada de eso. Es una ilusión. No puede ni garantizar su próximo aliento. Puede controlar cómo
responde a la vida, puede controlar sus reacciones a la vida y puede controlar sus actitudes hacia la vida,
pero no puede controlar lo que le va a pasar. No sabe siquiera lo que pasará y ya ni hablemos de
controlarlo. Todo eso es un mito.
Jeff Friend escribe, "Crecí en un hogar cristiano, y estaba muy activo en la iglesia. Era el cristiano
perfecto. O al menos eso era lo que quería que todos creyeran. Tenía puesto el perfecto disfraz. Me sabía
to-das las frases cristianas y las oraciones apropiadas. Me pasé toda una vida edificando defensas y paredes
gruesas para no dejar que la gente viera mi verdadero yo. Un día amanecí con un piquete de zancudo. Me
dio mucha comezón, y después de unos pocos días la picadura era tan grande que visité al doctor. Él hizo
todo lo posible para que dejara de hincharse y de dolerme pero ninguna cosa surtió efecto. Después de una
EL AMOR Ep HUMILDE ´ 
    r
semana, el dolor constante de mi pierna era indescriptible. Estaba en agonía. Fui referido a un
cirujano que lo diagnosticó como un piquete de araña café reclusa. Los próximos dos años continuaron con
una multitud de cirugías y tratamientos, pero ninguno de ellos me hacía nada. Estaba en constante dolor,
en depresión y mi matrimonio se estaba derrumbando. Mi aislamiento de la gente, incluyendo a mi esposa,
después de tanto tiempo, estaba empezando a afectarme. pabía que necesitaba que Jesucristo estuviera al
mando de mi vida, pero mi orgullo me prevenía de entregarme a pu control. Hice una cita con uno de
nuestros pastores y le dije con lágrimas en mis ojos, "He estado yendo a la iglesia toda mi vida. Todos le
dirían que soy cristiano. Pero es falso. Es toda una mentira. Nunca he aceptado verdaderamente a Cristo.
Nunca le he entregado verdade-ramente mi vida a Él." Le pedí que me guiara en una humilde oración de
compromiso. Cuando lo hice, se me salieron años de frustración acumulada y sentí paz total y perdón y
libertad. Cedí el control de mi vida, y dejé que Dios asumiera el control. Desde entonces, me he sentido
completamente libre de los secretos y de la prisión que yo mismo me hice. Fue algo increíble. Es también
increíble para mí ver cómo Dios usó algo tan insignificante como el piquete de un insecto para enseñarme
cuánto lo necesitaba y traerme a Él."
Puede que usted todavía se haga ilusiones de que está al mando de su vida. Pero un día recibirá un
pequeño piquete de insecto -algo pequeñito pasará con sus finanzas o su familia o sus relaciones o su salud
o su profesión, y se va a hacer muy grande y muy grande y muy grande y muy grande hasta que finalmente
sea confrontado con el hecho de que usted no es Dios. Y que no está en control de su vida. Y que la cosa
más segura y sólida que debe hacer es entregarse a su creador y decir, "Jesucristo, tú toma el volante. Tú sé
el encargado. Tú toma las riendas. Tú sé el director, el jefe ejecutivo de mi vida." pinceramente deseo que
no se espere hasta que esto ocurra para que se humille ante Dios.
Algunos de ustedes en esta audiencia, estoy seguro, han estado yendo a la iglesia toda su vida. Y es
una "buena" persona. Usted es una persona religiosa, y se sabe las oraciones y la terminología, y todos pen-
sarían que es un cristiano. Pero en realidad no lo es porque nunca ha entregado de veras toda su vida a
Jesu-cristo. Por eso es que Dios lo trajo aquí hoy, para que lo pudiera hacer. No hay mejor tiempo que
ahora mismo para hacer esta entrega. Cuando hace eso, la vida se le hace mucho más enfocada. ¿Qué lo
preven-dría de hacer esto? pólo una cosa -la arrogancia, el orgullo. "Yo voy a sostener las riendas. Yo voy a
ser mi propio Dios." Y eso es un error fatal. Lo pone en oposición a Aquel que lo ama, que murió por usted y
que lo creó. ¿Por qué no le entrega su vida a Él ahora mismo?
Hoy usted se ha dado cuenta que en realidad nunca le ha entregado su vida a Cristo. Tal vez usted
se ha percatado que hay un poquito más de orgullo en su vida que lo que pensaba. ¿En cuál de estos cuatro
hábitos necesita tomar acción esta semana? ¿Qué tan rápido se ajusta a las necesidades de otros a su
alrede-dor? ¿Le da usted reconocimiento a las preferencias de otros? ¿Qué tan animado está usted en
escuchar y en aprender de la corrección? ¿pe pone a la defensiva? ¿Qué tan rápido es en admitirlo cuando
está errado? ¿Ha hecho esto alguna vez? pe necesita valentía para ser humilde. ¿Qué tan dispuesto está a
entregarle sus planes a Dios? Dios dice, "La gente que atesoro más son los humildes." pi quiere la bendición
de Dios es su vida, ¿podría orar esto conmigo?
Oración:
Dios amado, quiero ser la clase de persona humilde que bendices. Admito que muy seguido hago
las cosas en egoísmo y orgullo y preocupado por lo que otra gente pueda pensar de mí. Te pido que me
ayudes esta semana a practicar estos hábitos de la humildad. Ayúdame a darle la preferencia a otros -sus
necesida-des, sus intereses. Ayúdame a que no siempre las cosas salgan a como quiero y que se haga lo que
digo. Ayúdame a estar abierto a la corrección y a la crítica. Ayúdame a admitirlo cuando estoy equivocado.
Hoy EL AMOR Ep HUMILDE ´ 
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te entrego toda mi vida y mis planes. Quiero tu voluntad para mi vida. Ayúdame a tener una verdadera
apre-ciación de mis fuerzas y de mis debilidades. Jesucristo, te entrego las riendas de mi vida. Te pido
humilde-mente que seas el director de mi vida. Quiero depender de ti, de hoy en adelante. Te lo pido en tu
nombre. Amén.

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