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Agricultura Orgánica
La Agroecología
La agroecología es la ciencia consistente en la aplicación de los
conceptos y principios de la ecología al diseño, desarrollo y gestión de
sistemas agrícolas sostenibles.
Ante los múltiples factores negativos de la agricultura convencional,
emerge la concepción de la agricultura ecológica que promueve la
producción agrícola en donde se apoya la conservación de los recursos
naturales elementales como el suelo, agua y biodiversidad. Estas
acciones se basan en el respeto a las comunidades rurales (quienes
aportan el material genético de menor contaminación, casi puro
genéticamente) y a los principios éticos y humanos en la realización de
estas actividades.
Así, la agricultura biológica pretende ser productiva y a su vez sostenible
en producción y conservación a largo plazo con la finalidad de poder
solventar el abastecimiento de alimentos a una creciente población
humana. Para atender este reto, actualmente se desarrolla la ciencia de
la agroecología, la cual se define como la aplicación de conceptos y
principios ecológicos al diseño y manejo de agroecosistemas sostenibles
e implica la realización de prácticas agrícolas sustentadas en el
conocimiento técnico y científico de los procesos ecológicos,
agronómicos, y sociales que ocurren al interior del agoecosistema.
En esta perspectiva, el diseño y manejo de agroecosistemas sostenibles
no puede ni debe abandonar las prácticas convencionales sino que debe
considerar las prácticas tradicionales para justificar su sostenimiento. Se
trata de diseñar científicamente nuevas concepciones y tecnologías
agrícolas, sobre la base de los métodos y conocimientos ecológicos
actuales y los principios tradicionales de conservación de los recursos
naturales que muchas comunidades rurales tienen y en las que cubren
sus necesidades alimentarias sin requerir grandes insumos externos en
su ciclo productivo.
No obstante, la agricultura biològica para ser reconocida como tal debe
seguir normas establecidas y universalmente reconocidas. No basta con
la aplicaciòn de los principios ancestrales y el apoyo de los gobiernos por
lograr una producciòn màs limpia. Es necesario que los agricultores
ademàs de aplicar los principios de la agroecologìa, lo hagan bajo
normas y procedimientos verificables por los organismos certificadores.
Solo de èsta forma, el consumidor puede estar seguro de que los
productos que compra como "orgànicos" realmente lo son.
La Agroecología
La agroecología es la ciencia consistente en la aplicación de los
conceptos y principios de la ecología al diseño, desarrollo y gestión de
sistemas agrícolas sostenibles.
Ante los múltiples factores negativos de la agricultura convencional,
emerge la concepción de la agricultura ecológica que promueve la
producción agrícola en donde se apoya la conservación de los recursos
naturales elementales como el suelo, agua y biodiversidad. Estas
acciones se basan en el respeto a las comunidades rurales (quienes
aportan el material genético de menor contaminación, casi puro
genéticamente) y a los principios éticos y humanos en la realización de
estas actividades.
Así, la agricultura biológica pretende ser productiva y a su vez sostenible
en producción y conservación a largo plazo con la finalidad de poder
solventar el abastecimiento de alimentos a una creciente población
humana. Para atender este reto, actualmente se desarrolla la ciencia de
la agroecología, la cual se define como la aplicación de conceptos y
principios ecológicos al diseño y manejo de agroecosistemas sostenibles
e implica la realización de prácticas agrícolas sustentadas en el
conocimiento técnico y científico de los procesos ecológicos,
agronómicos, y sociales que ocurren al interior del agoecosistema.
En esta perspectiva, el diseño y manejo de agroecosistemas sostenibles
no puede ni debe abandonar las prácticas convencionales sino que debe
considerar las prácticas tradicionales para justificar su sostenimiento. Se
trata de diseñar científicamente nuevas concepciones y tecnologías
agrícolas, sobre la base de los métodos y conocimientos ecológicos
actuales y los principios tradicionales de conservación de los recursos
naturales que muchas comunidades rurales tienen y en las que cubren
sus necesidades alimentarias sin requerir grandes insumos externos en
su ciclo productivo.
No obstante, la agricultura biològica para ser reconocida como tal debe
seguir normas establecidas y universalmente reconocidas. No basta con
la aplicaciòn de los principios ancestrales y el apoyo de los gobiernos por
lograr una producciòn màs limpia. Es necesario que los agricultores
ademàs de aplicar los principios de la agroecologìa, lo hagan bajo
normas y procedimientos verificables por los organismos certificadores.
Solo de èsta forma, el consumidor puede estar seguro de que los
productos que compra como "orgànicos" realmente lo son.
El Ecosistema Natural
La ecología es la ciencia que estudia la relación de los seres vivos con el
medio que los rodea, lo que incluye tanto elementos bióticos como
abióticos, que de manera permanente intercambian con el medio
ambiente materia y energía.
Los ecosistemas naturales que apreciamos hoy en día son el resultado
de la evolución conjunta durante millones de años de una enorme
diversidad de especies. En este proceso muchas especies no siempre se
perpetúan y son eliminadas posiblemente por falta de capacidad para
adaptarse a las condiciones del clima, por ser muy susceptibles a las
plagas y enfermedades, porque no pueden asegurarse los suficientes
alimentos o energía o porque simplemente no compiten eficientemente
con otras especies.
Los ecosistemas permanecen en constante cambio , los procesos de
selección natural son continuos, se estableces relaciones sinérgicas
entre cada uno de los componentes a través de intercambios de materia
y energía y el sistema gracias a su diversidad logra mantenerse en un
estado de equilibrio dinámico.
Producciòn sustentable
La producciòn sostenible pretende conservar la capacidad productiva
del sistema en el tiempo de manera que la producciòn sea constante
y estable sin detrimento de los recursos para las generaciones
futuras.
Renuncia al uso de fertilizantes y pesticidas de origen sintético o
químico. Se aplica a los sistemas agrícolas que siguen los principios y
las lógicas de un organismo viviente en el cual todos los elementos (el
terreno, las plantas, los animales, los insectos, el agricultor etc.) están
estrechamente vinculados unos con otros.
El arte de la agricultura orgánica es hacer el mejor uso de los
principios y procesos ecológicos. Por ello promueve practicas como la
rotaciòn de cultivos, los cultivos intercalados, la labranza mìnima y el
control biològico y natural . Supone sistemas biodiversos en donde
todos los componentes generan interaaciones que mantienen al
sistema en equilibrio. Al lograrse el equilibrio no son necesarios los
insumos externos y los costos de producciòn disminuyen.
LECCION 2
Criterios de la agroecologìa
El riego
Teoria GAIA
La hipótesis o Teoría de Gaia fué propuedsta por James Lovelock en
1969 (aunque publicada en 1979) siendo apoyada y extendida por la
bióloga Lynn Margulis.
Es un conjunto de modelos científicos de la biosfera en el cual se postula
que la vida fomenta y mantiene unas condiciones adecuadas para sí
misma, afectando al entorno.
Según la hipótesis de Gaia la atmósfera y la parte superficial del planeta
Tierra se comportan como un todo coherente donde la vida, su
componente característico, se encarga de autorregular sus condiciones
esenciales tales como la temperatura, composición química y salinidad
en el caso de los océanos.
Esta teoría se basa en la idea de que la biomasa autorregula las
condiciones del planeta para hacer su entorno físico (especialmente
temperatura y química atmosférica) más hospitalario con las especies
que conforman la «vida».
Según la segunda ley de la termodinámica un sistema cerrado tiende a la
máxima entropía. En el caso del planeta Tierra su atmósfera debería
hallarse en equilibrio químico, todas las posibles reacciones químicas ya
se habrían producido y su atmósfera se compondría mayoritariamente de
CO2 sin apenas vestigios de oxigeno y nitrógeno. Según la teoría de
Gaia, el que al día de hoy la atmósfera la compongan un 78% de
nitrógeno, 21% de oxigeno y apenas un 0,03% de dióxido de carbono se
debe a que la vida, con su actividad y su reproducción, mantiene estas
condiciones que la hacen habitable.
La Hipótesis de Gaia lo que propone es que dadas unas condiciones
iniciales que hicieron posible el inicio de la vida en el planeta, ha sido la
propia vida la que las ha ido modificando, y que por lo tanto las
condiciones resultantes son consecuencia y responsabilidad de la vida
que lo habita.
Para explicar cómo la vida puede mantener las condiciones químicas de
Gaia, Margulis ha destacado la gran capacidad de los microorganismos
para transformar gases que contienen nitrógeno, azufre y carbono.
La idea de Lovelock es que la vida (toda la vida de la tierra en su
conjunto) interacciona y tiene la capacidad de mantener su entorno de
manera que sea posible la continuidad de su propia existencia. Si algún
cambio medioambiental amenazara a la vida, ésta actuaría para
contrarrestar el cambio de manera parecida a como actúa un termostato
cuando cambia el tiempo encendiendo la calefacción o el aire
acondicionado.
El término técnico para este tipo de comportamiento es homeostasis.
Este sistema que se conserva a sí mismo, no sólo se adapta a los
cambios, sino que incluso hace sus propios cambios alterando su medio
ambiente siempre que sea necesario para su bienestar.
Lovelock encontró que aparte de que resultaba evidente que el
desequilibrio de la atmósfera terrestre era producto de la vida, había
indicios de que otros procesos, como la temperatura, el nivel oxígeno,
nitrógeno, metano, amoníaco y la salinidad -que se han mantenido
estables en el planeta al menos por los últimos dos mil quinientos
millones de años-, no podían ser resultado de procesos químicos
puramente abiológicos. Sólo la presencia de la vida podía explicarlos
adecuadamente.
Llegó a la conclusión de que existía una especie de organismo
superregulador que coordinaba a los demás organismos del planeta.Este
super-organismo fué denominado GAIA.
Gaia como «una entidad compleja que afecta a la biósfera de la Tierra,
de las ballenas a los virus y de los robles a las algas, la atmósfera, los
océanos y el suelo, con la totalidad, constituyendo un feedback
(retroalimentación) o sistema cibernético que busca un entorno físico y
químico que sea óptimo para la vida en este planeta. El mantenimiento
de condiciones relativamente constantes por medio del control activo
puede describirse de modo conveniente con el término de homeostasis»
(propiedad de los seres vivos, los ecosistemas y la biósfera de mantener
constantes ciertos procesos internos a pesar de variaciones externas).
El concepto de que la tierra no sólo posee vida, sino que está viva -que
es un ser vivo-, puede ser cotejado aplicando los mismos parámetros
que Humberto Maturana, en su libro «El Arbol del Conocimiento»,
propone para definir un organismo autopoiético: él dice que los seres
vivos «se caracterizan porque -literalmente- se producen
continuamente a sí mismos». A ese proceso de autoproducción, de
autoorganización, le denominan organización autopoiética.
La autopoyesis, definida como 'el conjunto imperativo de procesos
biológicos energéticos continuos (que implican la formación de
compuestos de carbono) por medio de los cuales todos los seres vivos
se automantienen', es una característica de los organismos vivos en su
lucha permanente por mantenerse (conservar su integridad tanto
estructural como bioquímica) activamente al enfrentarse a las
adversidades ambientales. En resumen, los seres vivos o redes
autopoyéticas reciclan continuamente sus componentes para así
automantenerse, gracias a numerosos procesos que conforman lo que
llamamos metabolismo. Los flujos de energía se utilizan para impulsar el
recambio cíclico de materia que se necesita al objeto de mantener un
ente individual determinado.
Lo que hace distinta la dinámica de estos organismos, de la suma simple
de transformaciones moleculares en procesos naturales, es el hecho de
que su metabolismo «produce componentes, que se integran a la red de
transformaciones que los produjo, y que -en algunos casos- forman un
borde, una especie de límite para esta red de transformaciones». En
términos morfológicos, esta estructura que permite el continuo y
dinámico ciclaje y reciclaje de compuestos, puede verse como una
membrana.
Lo importante es que esta membrana, este borde membranoso, no es
producto del metabolismo del organismo -como una tela es producto de
una máquina de producir telas-. Ello, porque esta membrana no sólo
limita la extensión de la red de transformaciones que la produjo, sino que
-además- participa en esa misma red.
Lo que se tiene entonces, es una situación muy especial en cuanto a
relaciones de transformaciones químicas: por un lado existe una red de
transformaciones dinámicas que produce sus propios componentes y
que es la condición de posibilidad de un borde. Por otro, existe un borde
que es la condición de posibilidad para el operar de la red de
transformaciones que la produjo como una unidad.
Estos son dos procesos secuenciales de un mismo fenómeno. No es que
primero hay borde y luego dinámica y luego borde y luego... etc. Estamos
hablando de un tipo de fenómeno, que para existir depende de la
integridad de los procesos que lo hacen posible. Si se interrumpe en
algunos puntos la red metabólica resultante, no hay más unidad. Nuestro
organismo desaparece, muere.
Gaia es una entidad autoregulada y autoorganizada. No hay separación
entre la membrana atmosférica y el citoplasma de la flora y fauna
terrestres y marinas, ambas constituyen partes del mismo proceso: la
vida planetaria.
Microorganismos Eficientes
La tecnología EM fue desarrollada en la década de los ochenta por el Doctor Teruo Higa, profesor de
horticultura de la Universidad de Ryukyus en Japón. Estudiando las funciones individuales de diferentes
microorganismos, encontró que el éxito de su efecto potencializador estaba en su mezcla. Desde
entonces, esta tecnología ha sido investigada, desarrollada y aplicada a una multitud de usos
agropecuarios y ambientales, siendo utilizada en más de 80 países del mundo. Los microorganismos
eficientes o EM son una combinación de microorganismos beneficiosos de origen natural, como
bacterias, hongos, y levaduras.
Los microorganismos eficientes actúan de manera que toman sustancias generadas por otros
organismos basando en ello su funcionamiento y desarrollo.
Las raíces de las plantas secretan sustancias que son utilizadas por los microorganismos eficientes para
crecer, sintetizando aminoácidos, ácidos nucleicos, vitaminas, hormonas y otras sustancias bioactivas.
Cuando los microorganismos eficientes incrementan su población, como una comunidad en el medio en
que se encuentran, se incrementa la actividad de los microorganismos naturales, enriqueciendo la
microflora, balanceando los ecosistemas microbiales, suprimiendo microorganismos patógenos.
Tipos de microorganismos presentes
1) Bacterias Fototróficas
Son bacterias autótrofas que sintetizan sustancias útiles a partir de secreciones de raíces, materia
orgánica y gases dañinos, usando la luz solar y el calor del suelo como fuentes de energía.
Las sustancias sintetizadas comprenden aminoácidos, ácidos nucleicos, sustancias bioactivas y
azúcares, promoviendo el crecimiento y desarrollo de las plantas.
Los metabolitos son absorbidos directamente por ellas, y actúan como sustrato para incrementar la
población de otros microorganismos eficientes.
2) Bacterias Ácido Lácticas
Estas bacterias producen ácido láctico a partir de azúcares y otros carbohidratos sintetizados por
bacterias fototróficas y levaduras.
El ácido láctico es un fuerte esterilizador, suprime microorganismos patógenos e incrementa la rápida
descomposición de materia orgánica.
Las bacterias ácido lácticas aumentan la fragmentación de los componentes de la materia orgánica,
como la lignina y la celulosa, transformando esos materiales sin causar influencias negativas en el
proceso.
3) Levaduras
Estos microorganismos sintetizan sustancias antimicrobiales y útiles para el crecimiento de las plantas a
partir de aminoácidos y azúcares secretados por bacterias fototróficas, materia orgánica y raíces de las
plantas.
Las sustancias bioactivas, como hormonas y enzimas, producidas por las levaduras, promueven la
división celular activa. Sus secreciones son sustratos útiles para microorganismos eficientes como
bacterias ácido lácticas y actinomiceto.
Ana Biosca (Diciembre 2001)
Efectos de los EM
Los microorganismos eficientes, como inoculante microbiano, reestablece el equilibrio microbiológico del
suelo, mejorando sus condiciones físico-químicas, incrementando la producción de los cultivos y su
protección; además conserva los recursos naturales, generando una agricultura sostenible.
Entre los efectos sobre el desarrollo de los cultivos se pueden encontrar:
En los semilleros:
Aumento de la velocidad y porcentaje de germinación de las semillas, por su efecto hormonal, similar al
del ácido giberélico.
Aumento del vigor y crecimiento del tallo y raíces, desde la germinación hasta la emergencia de las
plántulas, por su efecto como rizo bacterias promotoras del crecimiento vegetal.
Incremento de las probabilidades de supervivencia de las plántulas.
En las plantas:
Genera un mecanismo de supresión de insectos y enfermedades en las plantas, ya que pueden inducir la
resistencia sistémica de los cultivos a enfermedades.
Consume los exudados de raíces, hojas, flores y frutos, evitando la propagación de organismos
patógenos y desarrollo de enfermedades.
Incrementa el crecimiento, calidad y productividad de los cultivos.
Promueven la floración, fructificación y maduración por sus efectos hormonales en zonas meristemáticas.
Incrementa la capacidad fotosintética por medio de un mayor desarrollo foliar.
En los suelos:
Los efectos de los microorganismos en el suelo, están enmarcados en el mejoramiento de las
características físicas, biológicas y supresión de enfermedades. Así pues entre sus efectos se pueden
mencionar:
Efectos en las condiciones físicas del suelo: mejora la estructura y agregación de las partículas del suelo,
reduce su compactación, incrementa los espacios porosos y mejora la infiltración del agua. De esta
manera se disminuye la frecuencia de riego, tornando los suelos capaces de absorber 24 veces más las
aguas lluvias, evitando la erosión, por el arrastre de las partículas.
Efectos en la microbiología del suelo: suprime o controla las poblaciones de microorganismos patógenos
que se desarrollan en el suelo por competencia. Incrementa la biodiversidad microbiana, generando las
condiciones necesarias para que los microorganismos benéficos nativos prosperen.
Abonos verdes
Hay muchos tipos de mulch, como el compost parcialmente descompuesto, restos de cortezas, virutas
de madera, paja, conchas, hojas, cascarilla de arroz, etc. Su función es la de cubrir el suelo desnudo,
para impedir la escorrentía superficial, regular la temperatura del suelo, conservar la humedad y evitar el
crecimiento de malas hierbas por falta de luz. Un buen mulch suministra nutrientes lentamente al suelo a
medida que se descompone.
Son muchos los materiales que pueden ser utilizados como Mulch: Pajas, vagazo de caña, cascarilla de
arroz y de café, residuos secos de cosecha, malezas arrancadas , mantillo, turba, hojarasca,
compostajes o bocaccis. Sinmenbargo hay ciertos materiales que no deben utilizarse como el Aserrin,
viruta y astillas de madera, a menos que tengan 2 años de antigüedad. esto debido a que su
descomposición crea un desbalance del nitrógeno disponible para la planta a causa de los
microorganismos que entran a descomponesr los compuestos de lignina y celulosa de la madera. Así,
habrá un déficit temporal hasta que los microorganismos liberen nuevamente el nitrógeno al suelo y el
déficit temporal podría comprometer la producción del cultivo.
Alelopatía
Los organismos vegetales están expuestos a factores tanto bióticos como abióticos, con los que han
evolucionado. Esto provocó el desarrollo en los vegetales de numerosas rutas de biosíntesis a través de
las cuales sintetizan y acumulan en sus órganos una gran variedad de metabolitos secundarios. Se sabe
que estos metabolitos juegan un papel vital en las interacciones entre organismos en los ecosistemas.
Entre estos encontramos compuestos producidos por plantas que provocan diversos efectos sobre otros
organismos. A estas sustancias se les conoce como aleloquímicos y el fenómeno se designa
aleloquimia, o alelopatía cuando se establece entre individuos vegetales.
Algunos biólogos han considerado que la alelopatía es parte de la competencia. Sin embargo la
competencia entre plantas involucra la reducción en la disponibilidad de algún factor del entorno, debido
a su utilización por un individuo vegetal, que es requerido también por otra planta que comparte el mismo
hábitat. En cambio la alelopatía implica la liberación al entorno por parte de una planta de un compuesto
químico que ocasiona un efecto sobre otra. Estos conceptos son diferentes entre sí pero desde un punto
de vista ecofisiológico se pueden considerar estrechamente ligados y complementarios en su efecto.
Para evitar confusiones se utiliza el término interferencia para designar al efecto total de una planta sobre
otra, es decir, la suma de efectos debidos a los fenómenos de competencia y alelopatía.
Numerosos bioensayos muestran que extractos o lixiviados de hojas, corteza, hojarasca y semillas de
varias especies de eucalipto contienen aleloquimicos capaces de afectar negativamente a varias
especies de plantas. Todas las especies de eucalipto probadas tienen sustancias que inhiben, en
diferentes grados, el crecimiento y la germinación de muchas, pero no todas, las plantas expuestas in-
vitro o en invernadero a los extractos o lixiviados. Los cultivos anuales plantados con gradientes de
distancia a eucaliptos sugieren que la alelopatía ocurre en condiciones de campo, las plantas cercanas a
eucaliptos rinden menos y son de talla menor que las plantas lejanas a estos árboles.
Los monoterpenos son los principales componentes de los aceites esenciales de los vegetales y son los
terpenoides inhibidores de crecimiento más abundantes que han sido identificados en las plantas
superiores. Son conocidos por su potencial alelopático contra malezas y plantas de cultivo. Entre los más
frecuentes con actividad alelopática se pueden citar el alcanfor, a y b pineno, 1,8-cineol, y dipenteno.
Dentro de las plantas que los producen podemos citar los géneros Salvia spp, Amaranthus, Eucalyptus,
Artemisia, y Pinus.
En las comunidades bióticas, muchas especies se regulan unas a otras por medio de la producción y
liberación de repelentes, atrayentes, estimulantes e inhibidores químicos. La alelopatía se ocupa de las
interacciones químicas planta - planta y planta - organismo, ya sean estas perjudiciales o benéficas.
La alelopatía es pues, la ciencia que estudia las relaciones entre las plantas afines y las plantas que se
rechazan, utilizando las feromonas para evitar el ataque de las diferentes plagas y enfermedades a las
que pueden ser susceptibles.
Para definir el término feromonas, debemos aclarar que en los tejidos vegetales hay ciertas sustancias
que constituyen un sistema de defensa. Estas sustancias llamadas alelo químicos alomónicos, son
compuestos moleculares que actúan como señales o como mensajeros de disuasión, produciendo
efectos repulsivos, antialimentarios, tóxicos, alteradores de la fisiología y/o comportamiento sexual o
poblacional de insectos.
Estas relaciones se hacen especialmente importantes a medida que las plantas adultas sintetizan
esencias y aromas característicos. El fríjol verde y la fresa, por ejemplo, prosperan más cuando son
cultivados juntos, que cuando se cultivan separadamente. La lechuga sembrada con espinacas se hace
más jugosa cuando se siembra en relación de 4 a 1.
Algunas plantas segregan unas sustancias tóxicas que no permiten ser cultivadas en asocio, un ejemplo
de estas es el ajenjo cuyas raíces son tóxicas; sin embargo estas mismas sustancias controlan pulgas y
babosas cuando se utilizan en forma de té; también aleja los escarabajos y gorgojos de los granos
almacenados. El hinojo, el eneldo y el anís rechazan insectos terreros.
El efecto alelopático de una planta sobre otro organismo no es total para bien o para mal, sino que está
regido por manifestaciones de mayor o menor grado según sean las características de los organismos
involucrados. Sin embargo, el potencial de productos naturales que pueden ser usados por sus
propiedades biológicas particulares como herbicidas, plaguicidas, antibióticos, inhibidores o estimulantes
de crecimiento, etc., es prácticamente inagotable.
El estudio de las interacciones químicas entre las principales especies de un agro ecosistema y del
impacto de los alelo químicos en la dinámica y en la producción de los mismos, debe conducirnos hacia
metas ecológicas y hacia la búsqueda de mayor información que nos permita aprovechar dicho potencial.
Muchas plantas producen metabolitos secundarios que influyen en los procesos de germinación y
crecimiento (Heisey 1990). Se ha sugerido que la alelopatía es un factor importante en la regulación de
la estructura de las comunidades vegetales y de la velocidad de crecimiento de las plantas en campo
(Wardle et al 1996). Esta función alelopática ha sido atribuida a varios flavonoides, estructuras
fenólicas y terpenoides (Withaker & Feeny 1971).