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Funci

ón de excreción en los seres vivos


¿Qué conozco del tema?
1º ACTIVIDAD
Resuelvo de manera personal las siguientes actividades:
a)En la siguiente sopa de letras busco los nombres de diez sustancias excretadas por algunos
seres vivos y seis órganos que cumplen dicha función y los relaciono por medio de flechas.
b)Observo detenidamente la palabra que
aparece a mi izquierda. Luego busco tres sinónimos en el conjunto de palabras de las columnas de la
derecha y los subrayo.
c)¿Cómo se relacionan los sistemas digestivo,
circulatorio y excretor en un organismo vivo? Explico a partir de mis presaberes.
d) ¿Cómo está organizado el sistema renal en el hombre? Hago un mapa conceptual.
e) ¿Qué otros aparatos participan en la función excretora en el hombre? Explico cómo está formado cada
uno y
qué sustancias excreta.
f)Hago un cuadro comparativo con algunas enfermedades que afectan el sistema excretor indicando: órgano que
afecta, en qué consiste la enfermedad y las causas.
LECTURA: SOY EL RIÑÓN DE JUAN
Mis funciones serán vulgares y poco estimadas pero yo soy el gran
químico del todo el cuerpo humano. Como los demás órganos de Juan,
tengo muy pocos encantos: soy de color castaño rojizo, de forma de
habichuela y tamaño como su puño aproximadamente. Yo soy el riñón
derecho de Juan: mi compañero esta situado al otro lado de la región
inferior de su columna vertebral.
Juan tiene un concepto muy deprimente de mí. Cree que soy tan
solo el productor de un líquido muy vulgar: la orina; y me juzga como
unidad secundaria para la eliminación de desechos. ¡Imagínense
ustedes!
En realidad, soy el químico maestro del organismo de Juan. Y el
principal sistema que tiene Juan para deshacerse de sus desperdicios no
es el tubo intestinal: soy yo. A través de mi esta pasando constantemente
la sangre, que yo limpio y filtro, librándola de
B Z Z C U F E S A S W P P U X X L A D K
C G B V L P A D E A P N K Y X Q R L G W S P S I G N
X F R M U D S G H A A V F I P O Q A I L B N U O F M
O X P T T E W B E I R S M I A A I T Z F F I E S H J
W L A I E I S I O N O S P H R X B P D C L E C R M Z N
I R G D E M O R M E N H U I B I V C X E A F G A U D S
U S L X Y H U U D O C A I N O M A U L W Y P I M Q E
T Y O S K X B A J N S L G A W S P I Z N S L Ú U F K
W D E A L Y J A L U M D O X U I R D S J X W L W V T
X H L A F W X K S A I O Q S M U C O R O F M J C C E
E T P Z C R Z P D I O X I D O D E C A R B O N O O I
C N Y H C S O N E M O C N O I E F P J S A R I Ñ O N
E O L L A T S X H M X V U L Y D Q I B S B L I X E A
R P Y O A A G E T Z L C O U P G O U B S A I X B Q L
Q M Z Z M P Z C A T L L B R V F H H D V B T X J D R
Z V Y V X E Z X J T I Q C E
Función de excreción en los seres vivos

¿Qué conozco del tema?


1º ACTIVIDAD

Resuelvo de manera personal las siguientes actividades:

a)En la siguiente sopa de letras busco los nombres de diez sustancias excretadas por algunos
seres vivos y seis órganos que cumplen dicha función y los relaciono por medio de flechas.

b)Observo detenidamente la palabra que


aparece a mi izquierda. Luego busco tres sinónimos en el conjunto de palabras de las columnas de la
derecha y los subrayo.
c)¿Cómo se relacionan los sistemas digestivo,
circulatorio y excretor en un organismo vivo? Explico a partir de mis presaberes.
d) ¿Cómo está organizado el sistema renal en el hombre? Hago un mapa conceptual.
e) ¿Qué otros aparatos participan en la función excretora en el hombre? Explico cómo está formado cada
uno y
qué sustancias excreta.
f)Hago un cuadro comparativo con algunas enfermedades que afectan el sistema excretor indicando: órgano que
afecta, en qué consiste la enfermedad y las causas.

LECTURA: SOY EL RIÑÓN DE JUAN


Mis funciones serán vulgares y poco estimadas pero yo soy el gran
químico del todo el cuerpo humano. Como los demás órganos de Juan,
tengo muy pocos encantos: soy de color castaño rojizo, de forma de
habichuela y tamaño como su puño aproximadamente. Yo soy el riñón
derecho de Juan: mi compañero esta situado al otro lado de la región
inferior de su columna vertebral.
Juan tiene un concepto muy deprimente de mí. Cree que soy tan
solo el productor de un líquido muy vulgar: la orina; y me juzga como
unidad secundaria para la eliminación de desechos. ¡Imagínense
ustedes!
En realidad, soy el químico maestro del organismo de Juan. Y el
principal sistema que tiene Juan para deshacerse de sus desperdicios no
es el tubo intestinal: soy yo. A través de mi esta pasando constantemente
la sangre, que yo limpio y filtro, librándola de
residuos mortales en potencia. Obro como acicate para ayudar en la producción de
glóbulos rojos; vigilo el potasio, el cloruro sódico y otros compuestos disueltos en la
sangre.
Si cualquiera de ellos aumentara o disminuyera una pizca con respecto a lo
normal, podría provocarle la muerte. Regulo el equilibrio del agua, vital, porque las
células de Juan se ahogarían si hubiera mucho en su organismo, y el se “se secaría” si
le quedara poco agua.
Procuro que su sangre no esté demasiada ácida ni demasiada alcalina. En
realidad, hago tantas cosas a favor de Juan, que los médicos no han determinado
todavía el catalogo de mis actividades. Vean ustedes mi anatomía. Aunque sólo peso
150 gramos, estoy formado por más de un millón de unidades filtrantes pequeñísimas,
llamadas nefronas. Con un microscopio potente se ven como si fueran gusanos con
una cabeza abultada y una cola retorcida que se llama túbulo.
Entre mi compañero y yo filtramos cada hora el doble del volumen de sangre que
circula por el cuerpo de Juan. Y diría yo, además, que en una labor de filtrado
sumamente compleja. No dejo que pasen por mis finos filtros glóbulos rojos, ni otras
partículas grandes de proteínas sanguíneas que son esenciales, pues si así lo hicieran
se perderían en la orina, con resultados tan rápidos como calamitosos para Juan. En
mis túbulos se reabsorbe el 99% del fluido.
Las imprescindibles vitaminas, los aminoácidos, la glucosa, las hormonas, etc.,
vuelven también al torrente circulatorio aunque descartando el exceso de cualquiera
de ellos. Así, por ejemplo, si Juan ha comido dos buenas raciones de flan, en su orina
podrá aparecer tal cantidad de azúcar que se confundiría el medico y le diagnosticaría
una diabetes. Si come pescado ahumado o cualquier otro plato con abundante sal, y
yo no se la extraigo de la sangre se pondrá en verdadero peligro. La sal retiene el
agua. Cuando se deja que la sangre este demasiado salada, el exceso de líquido se
empieza acumular en ella y en los espacios intercelulares. La cara, los pies y el
abdomen de Juan se empieza a hinchar, y al cabo de un tiempo su corazón, a fuerza
de aspirar e impeler cada vez mas litros de fluido retenido, acabaría fallando y
parándose .El potasio (procedente sobre todo de la carne y los zumos de
frutas)requiere, también, en la misma medida mi atención vigilante, Si escaseara, los
músculos empezarían flaquear, en esencial los músculos respiratorios, Una pizca de
mas, obra como freno sobre el corazón y puede incluso detenerlo completamente. Yo,
si, más elimino el exceso. En cambio, si Juan no ingiere bastante potasio en sus
comidas, atesoro como un avaro el que le pueda quedar en el cuerpo.
El residuo más importante del que debo ocuparme es la urea, producto final de la
digestión de las proteínas. Como todos los demás, este compuesto debe guardar un
equilibrio preciso. La poca urea es señal de trastornos de mi vecino de arriba: el
hígado. Cuando hay mucha se debe pensar en una de las enfermedades que menos
gustan a los médicos: la uremia. Este nombre quiere decir presencia de la urea en la
sangre y, si no se domina, es un mal que puede llevar al choque, la coma y la muerte.
Cuando la urea se acumula en la sangre, el organismo hará esfuerzo heroico para
librarse de esta asesina. Hay veces en que aparece sobre la piel del enfermo una
como “escarcha” de urea, formada por cristalitos blanquecinos de esta sustancia que
expelen las glándulas sudoríparas con el fin de ayudar al organismo a desintoxicarse.
Pero Juan tampoco tiene que preocuparse por eso. Puede comer todos los
filetes que quiera, pues yo me ocupo de eliminar el exceso de urea que le puede
resultar por su afición a la carne.
El funcionamiento de los órganos excretores y por tanto la regulación de la
composición de los líquidos es controlado por el sistema nervioso.
Tomado de la revista Selecciones

2º ACTIVIDAD

a)Realizo en forma personal la lectura del artículo “Soy el riñón de Juan” para
concientizarme de las funciones
que realiza el riñón y valorar la función excretora de dicho órgano en mi cuerpo.
b) ¿Considero que la función de excreción que realizan los seres vivos es valiosa?
¿Por qué?

c) ¿Qué aspectos puedo cambiar en mi vida a partir del estudio de éste tema?

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