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Contenido
Introducción
1.1. Consideraciones Generales. 1.2. Concepto. 1.3. Naturaleza Jurídica. 1.4. Objeto y fin.
1.5. Ante quién y por quiénes deben impugnarse las resoluciones judiciales. 1.6. Cuándo
se actualiza el derecho de impugnación. 1.7. Etapas del procedimiento en que procede.
1.8. Tiempo y forma dentro del cual procede el recurso de impugnación. 1.9. Clasificación.
1.10. Terminación del procedimiento de impugnación.
2.1. Consideraciones Generales. 2.2. Concepto. 2.3. Legislación vigente. 2.4. Naturaleza
Jurídica. 2.5. Objeto y fin. 2.6. Ante quién debe interponerse. 2.7. Quiénes tienen derecho
a interponerlo. 2.8. Situaciones en las que procede. 2.9. Tiempo dentro del cuál procede
su interposición. 2.10. Forma de interponer el recurso. 2.11. Actos fundamentales en que
comprende la substanciación de la apelación. 2.12. Reposición del procedimiento.
3.1. Consideraciones Generales. 3.2. Concepto. 3.3. Legislación vigente. 3.4. Naturaleza
Jurídica. 3.5. Objeto y fin. 3.6. Ante quién debe interponerse. 3.7. Quiénes tienen derecho
a interponerlo. 3.8. Situaciones en las que procede. 3.9. Tiempo dentro del cual procede
su interposición. 3.10. Forma de interponer el recurso. 3.11. Actos fundamentales que
comprende la substanciación de la denegada apelación.
4.1. Consideraciones Generales. 4.2. Concepto. 4.3. Legislación vigente. 4.4. Naturaleza
jurídica. 4.5. Objeto y fin. 4.6. Ante quién debe interponerse. 4.7. Quiénes tienen derecho
a interponerlo. 4.8. Situaciones en las que procede. 4.9. Tiempo dentro del cual procede
su interposición. 4.10. Forma de interponer el recurso. 4.11. Actos fundamentales en que
comprende la substanciación de la revocación.
Capítulo V. Queja
5.1. Consideraciones Generales. 5.2. Concepto. 5.3. Legislación vigente. 5.4. Naturaleza
Jurídica. 5.5. Objeto y fin. 5.6. Ante quién debe interponerse. 5.7. Quiénes tienen derecho
a interponerlo. 5.8. Situaciones en las que procede. 5.9. Tiempo dentro del cual procede
su interposición. 5.10. Forma de interponer el recurso. 5.11. Actos fundamentales que
1 IMPORTANTE: Se autoriza la reproducción de este texto para fines no comerciales, agradecemos citar la
fuente.
comprende la substanciación de la queja.
Conclusiones
Bibliografía
Cuestionario
● Introducción.
El Derecho Penal y el Derecho Procesal Penal por ende, no son injustos, sino la manera de
aplicarlos e interpretarlos por el órgano jurídico y por la negligencia de quien lo hace valer.
Partiendo de esta perspectiva, es procedente ocuparnos del estudio de estos recursos que
como medios de control o remedios jurídicos habrán de reestablecer el equilibrio perdido y
su enmienda a través de una nueva resolución que, eliminará la anterior; para ello, serán
necesarios una serie de actos que habrán de darles vida.
Así mismo se hace evidente la ausencia del amparo, ya que es considerado como un
medio de impugnación extraordinario, se trata de un juicio efectivo fuera del proceso, se
hace valer posteriormente a la sentencia y como último medio de control ante el acto
recurrido, como un juicio superveniente al proceso; en cambio los recursos ordinarios
motivo de estudio en el presente escrito se ejercitan en contra de autos y sentencias,
resoluciones que se emiten dentro del proceso penal.
Objetivos.
1. Objetivo General.
2. Objetivo Particular.
3. Objetivos Específicos.
Rafael De Pina define los medios de impugnación como las “Facultades conferidas a las
partes y poder del Ministerio Público, en su caso, que les permiten combatir las
resoluciones de los jueces cuando entienden que no se ajustan al Derecho.
Los Medios de impugnación comprenden tanto los recursos como los procesos autónomos
de finalidad impugnativa (v. gr., el juicio de amparo). La finalidad de los medios de
impugnación es la de ofrecer la oportunidad de corregir los errores en que los jueces
pueden incurrir en la aplicación del Derecho, no ya por malicia, sino, simplemente, por las
dificultades propias de su función y en atención a la falibilidad humana”.[2]
Al estudiar la impugnación debemos distinguir lo que Antonio Micheli Gian nos expone, “El
proceso de cognición no se agota con el pronunciamiento de la decisión por parte del juez
que ha sido el primero en tomar el examen de la controversia. El legislador ha acogido, en
efecto, una regla de la experiencia que enseña como dos jueces diferentes tengan el
modo de profundizar mejor que uno solo la sustanciación y la decisión de la causa y por
consiguiente, de decidir mejor la controversia. Los medios de impugnación son los
instrumentos procesales ofrecidos a las partes para provocar aquel control sobre la
decisión del juez, y este control es, en general, encomendado a un juez no sólo diverso de
aquel que ha emitido el pronunciamiento impugnado o gravado, sino también de grado
superior, aun cuando no esté en relación jerárquica verdadera y propia con el primero. No
se excluye, sin embargo, que en ciertos casos, en consideración al tipo de control
invocado, este último sea ejercitado por el mismo juez que ha pronunciado la sentencia,
objeto del control (revocación, oposición de terceros)”.[3]
Con una pretensión de sistematizar todo lo relativo a la impugnación, Gómez Lara nos
advierte que el número de dichas impugnaciones es tan elevado, que cualquier recuento
corre el peligro de quedarse corto.
“Hay nombres que parecen vivir sólo en la historia: Primera y Segunda suplicación,
recurso de injusticia notoria, querella nulitatis, restitutio in integrum, el residente y el
rescisorio, etcétera. Otros se atacan por ser neologismos, extranjerismos o barbarismos,
como reconsideración o reacertamiento y, en fin, los más son ambiguos o equívocos como
revocación, inconformidad, etcétera.” Mas adelante el propio autor, excluyendo ya a la
acción impugnativa, nos habla de: “Censura, crítica y control...frente a petición, queja y
reacertamiento.”[7]
Para evitar o prevenir tales males, que en los mas de los casos podrían ser irreparables, o
susceptibles de romper la justicia. La ley nos permite inconformarnos a través de diversos
medios de impugnación, cuyo fin es restituir las cosas al estado anterior del acto
impugnado o bien lograr el obsequio de la petición realizada; debiendo tomar en cuenta
que, quienes resuelven la controversia son seres humanos, capaces de equivocarse o de
verse afectados por sus propios intereses naturaleza humana, siendo factibles en tal caso
las pasiones, los intereses en pugna o la forma de percibir los hechos.
Claro está que nos referimos al amparo directo, es decir, al amparo casación que implica,
utilizando la terminología expuesta por De la Rua, una acción de impugnación es un medio
extraordinario que tiende a rescindir el fallo ya formado. Es decir, la sentencia en estos
procesos impugnativos, en estas acciones de impugnación, viene a ser una mera sentencia
que o bien deja subsistente la anterior (niega el amparo), o bien, si encuentra que la
sentencia impugnada adolece de vicios o de defectos entonces la desaplica (se otorga el
amparo) y al desaplicarla remite el asunto, lo reenvía al tribunal que dictó la sentencia
combatida, para que dicte una nueva que puede obligarlo a corregir vicios ya sea de mero
procedimiento (in procedendo) o ya sea cometidos a la sentencia (in iudicando) o sea lo
que nuestro sistema de amparo ha venido conociendo como, en el primer caso, las
violaciones de procedimiento, y, en el segundo, las violaciones sustanciales o de fondo.
Toda resolución judicial que reúna los requisitos de sentencia no puede ser modificada por
su autor. Es principio del moderno derecho el que la jurisdicción se pierde en el momento
mismo en que se ejercita, el cual ya fue afirmado por el mismo órgano que emitió la
sentencia.
Es tarea del superior jerárquico emitir una nueva resolución, modificando, confirmando o
anulando la resolución recurrida. Esta nueva resolución anulará los vicios propios del acto
de juzgar o del propio procedimiento si el caso lo amerita. Pero para actualizar estos
recursos debemos analizar su propio objetivo y fin. Contra esta sentencia no procede
recurso alguno, tal y como lo vemos enmarcado en el propio derecho adjetivo.
1.2. Concepto.
Como hemos mencionado con antelación, los medios de impugnación pueden ser
ordinarios o extraordinarios, también habremos de distinguir que no todo medio de
impugnación es un recurso y que los recursos ordinarios son materia de estudio en la
presente memoria. Por tal motivo analizaremos el concepto de recurso en lo subsecuente.
El origen etimológico de la palabra recurso viene del italiano “ricorso” que significa “volver
al camino andado” por tanto el recurso es un ente jurídico, que en razón del principio de
legalidad constituye una forma legal y necesaria para obtener el resultado que se desea y
a bien proceda.
Solo que tal principio no tiene ya valor absoluto, pues fuera de los casos antes recordados
el juez conserva su propia jurisdicción en lo que hace a la admisibilidad formal de los
recursos y de los incidentes en la ejecución.
Castillo Larrañaga nos hacen mención de los recursos con la siguiente reflexión “Los
recursos son los medios mas frecuentes de impugnación, pero no son los únicos. Cuando
se hace referencia a los recursos, no se agotan todos los medios de impugnación contra
las resoluciones judiciales, pues no todos los medios de impugnación son recursos”.
Por otra parte, los citados son medios técnicos mediante los cuales el Estado atiende a
asegurar el más perfecto ejercicio de la función jurisdiccional.
De Pina define el recurso como un “Medio de impugnación de los actos administrativos o
judiciales establecidos expresamente al efecto por disposición legal”. Además agrega, “El
recurso es un medio de impugnación de las resoluciones judiciales que permite a quien se
halle legitimado para interponerlo someter la cuestión resuelta en éstas, o determinados
aspectos de ella, al mismo órgano jurisdiccional en grado dentro de la jerarquía judicial,
para que enmiende, si existe, el error o agravio que lo motiva”.[8]
Ricardo Reimundin apunta sobre los recursos “La ley ha instituido diversos medios de
impugnación de las resoluciones judiciales, para fiscalizar la justicia de la decisión.” Dichos
medios son los recursos.
El Jurista Hugo Alsina produce un concepto de recurso similar: “llámense recursos, los
medios que la ley concede a los particulares para obtener la oportunidad de que una
providencia judicial sea modificada o dejada sin efecto.” [9]
El procesalista James Golschmidt expresa “Recursos son los medios jurídicos procesales
concedidos a las partes, a los afectados inmediatamente por una resolución judicial y a los
intervinientes adhesivos para impugnar una resolución judicial que no es formalmente
firme, ante un tribunal superior (efecto devolutivo), y que suspenden los efectos de cosa
juzgada de la misma (efecto suspensivo)”.[10]
En este punto debemos observar que el efecto es una consecuencia natural de un acto, y
que en su carácter de devolutivo es la calificación del conocimiento que toma un juez o
tribunal superior de la resolución de un inferior sin suspender su ejecución, en cambio en
su carácter de suspensivo es la calificación del conocimiento que toma un juez o tribunal
superior de la resolución de un inferior suspendiendo su ejecución.
Si aceptamos que los recursos son medios de impugnación jurídico procesales dirigidos a
combatir resoluciones judiciales, que se conceden a las partes, a los afectados
inmediatamente por una resolución judicial y a los intervinientes adhesivos, es plausible
también la observación de que la resolución judicial combatida aún no es firme. No
obstante, no es requisito esencial que del recurso conozca un tribunal o juzgador que
dictó la resolución. Por otra parte, los efectos de los recursos dependen del alcance que el
legislador suele darles.
El concepto a manejar pues del Recurso es el siguiente, los recursos son medios
ordinarios establecidos por la ley para impugnar las resoluciones judiciales que, por alguna
causa fundada se consideran injustas, garantizando de esa manera, en forma mas
abundante, el buen ejercicio de la función jurisdiccional.
Tomemos en cuenta que los medios de impugnación son el género y los recursos la
especie, y que estos se actualizan a través de un impulso procesal en donde se manifiesta
la inconformidad de un procedimiento, y que son creados estos medios de impugnación
por la propia ley para así poder reparar la legalidad del derecho violado durante el
proceso.
Con respecto al probable autor del delito constituyen un derecho que en ocasiones es
condicionado para su actualización o es un acto de voluntad en donde manifestará su
inconformidad.
Para el Ministerio Público son derechos condicionados, ya que apelar sin fundamento
conduciría a la incertidumbre y pérdida de tiempo.
En cuanto al Defensor, es una facultad y es un deber el invocarlas en beneficio de su
defenso o el deber de abstenerse si lo considera improcedente, aunque en la práctica y
por mandato de la ley, deben inconformarse de manera conjunta, tanto el procesado
como su defensor.
1.4.Objeto y fin.
Aquí esta claramente determinado el objeto y fin de los recursos, obtener un nuevo fallo,
posterior al primero, en el que, después de revisado lo actuado y lo que se ha manifestado
como inconformidad, se confirma o se anula lo establecido en el auto o en la sentencia
anterior.
El recurso es una institución jurídica procesal que permite al mismo órgano que la dictó o
a uno superior, examinar una resolución jurisdiccional dictada, a efecto de determinar si
se revoca, modifica o confirma y nos manifestamos de acuerdo con el autor con los
elementos del concepto propuesto, que son:
El órgano decisor respecto a los medios de impugnación que se hacen valer puede ser el
mismo que dictó la resolución impugnada o bien, se trata de un órgano jurisdiccional
diferente, superior al primero. El legislador, según la decisión que adopte al respecto,
puede otorgar al mismo órgano o bien a uno superior, la facultad de revisar la legalidad
formal y material de la resolución que recaerá en el proceso que se siga con motivo de la
interposición del recurso.
Se apunta como objetivo esencial de todo recurso la revisión de una resolución
jurisdiccional dictada. Ante la posible falibilidad humana de la persona o personas que
encarnan el órgano jurisdiccional que dicta la resolución, el recurso es una oportunidad de
revisar lo hecho por el órgano jurisdiccional que ha producido una resolución.
Quien revisa la resolución jurisdiccional dictada, concluye con una nueva resolución
recaída al recurso interpuesto en la que determina su criterio, en una triple posibilidad que
hemos incluido en el concepto de recurso: revocar, modificar o confirmar. Habrá un nuevo
pronunciamiento, producto de la interposición del recurso y el sentido del nuevo fallo
marcará una opción hacia cualquiera de las tres metas indicadas.
El objeto de la impugnación son los autos y las sentencias, el fin perseguido a través de la
impugnación, es el establecimiento del equilibrio perdido en el proceso, es decir, al
examinarse de nueva cuenta la resolución, se repara el daño producido, ordenando las
medidas que para el caso prevé la ley. Son las omisiones o errores cometidos en la
aplicación de las normas procedimentales los que provocan la impugnación y el
reestablecimiento del equilibrio perdido es la finalidad última.
Pueden interponer recursos todos los sujetos procesales, a excepción, naturalmente, del
juez. No obstante la ley dice en cada caso quién es titular del derecho de impugnar.
Nace al producirse el error por el órgano jurisdiccional en la resolución que dicta, (previa
resolución y notificación), Se actualiza cuando el impugnante manifiesta su inconformidad
con la resolución judicial.
Si tomamos en consideración que si la resolución le es favorable del todo a las partes sería
ilógico interponer el recurso, pero aun no siendo así , tanto la resolución, como la
notificación son presupuestos necesarios e indispensables para la actualización del
derecho porque hasta antes de conocerse la resolución no deja de ser una simple
abstracción.
En este momento es necesario definir qué son las resoluciones Judiciales y los actos
fundamentales en que comprende la substanciación de la impugnación. Para ello será
necesario especificar los artículos en que se hacen mención por el Código Federal de
Procedimientos Penales.
Artículo 94. Las resoluciones judiciales son: sentencias, si terminan la instancia resolviendo
el asunto en lo principal; y autos, en cualquier otro caso.
Toda resolución deberá ser fundada y motivada, expresará la fecha en que se pronuncie y
se redactará en forma clara, precisa y congruente con la promoción o actuación procesal
que la origine. Toda resolución deberá cumplirse o ejecutarse en sus términos.
IV. Un extracto breve de los hechos exclusivamente conducentes a los puntos resolutivos
del auto o de la sentencia en su caso, evitando la reproducción innecesaria de
constancias.
Artículo 96. Los autos contendrán una breve exposición del punto de que se trate y la
resolución que corresponda, precedida de su motivación y fundamentos legales.
Articulo 97. Los autos que contengan resoluciones de mero trámite deberán dictarse
dentro de cuarenta y ocho horas, contadas desde aquella en que se haga la promoción;
los demás autos, salvo lo que la ley disponga para casos especiales; dentro de tres días y
la sentencia dentro de diez días a partir del siguiente a la terminación de la audiencia;
pero si el expediente excediere de quinientas fojas, por cada cien de exceso o fracción se
aumentará un día más de plazo señalado, sin que nunca sea mayor de treinta días hábiles.
Artículo 98. Las resoluciones judiciales se dictarán por los respectivos ministros de la
Suprema Corte de Justicia, Magistrados o Jueces, y serán firmadas por ellos y por el
Secretario que corresponda, o, a falta de éste, por testigos de asistencia.
Artículo 99. Para la validez de las sentencias y de los autos que no sean de mero trámite,
dictados por un Tribunal Colegiado, se requerirá, cuando menos, el voto de la mayoría de
sus miembros.
Artículo 101. Ningún juez o tribunal unitario puede modificar ni variar sus resoluciones
después de formuladas, ni los colegiados después de haberlos votado. Esto se entiende
sin perjuicio de la aclaración de sentencia.
Artículo 102. Las resoluciones judiciales causan estado cuando notificadas las partes de las
mismas, éstas manifiesten expresamente su conformidad, no interpongan los recursos que
procedan dentro de los plazos señalados por la ley o, también, cuando se resuelvan los
recursos planteados contra las mismas.
Ninguna resolución judicial se ejecutará sin que previamente se haya notificado de la
misma al Ministerio Público y a quien corresponda, conforme a la ley.
En este caso los sujetos a la relación jurídica procesal son, el Agente del Ministerio
Público; el procesado, sentenciado o acusado: el Magistrado o Magistrados, integrantes de
la Sala del Tribunal; el ofendido; y los terceros intervinientes, auxiliares o colaboradores
del proceso.
Debemos considerar el proceso como una relación jurídica, entre sus diversos
intervinientes, como el proceso, es una fase, perteneciente al procedimiento, los actos,
formas y formalidades legales, originadas por algunos recursos, son una etapa de la
misma relación procesal, a que dio lugar el ejercicio de la acción penal, en razón de que
aquella tiene un carácter unitario dentro del procedimiento.
Guillermo Colín Sánchez nos hace una cita de Leone, asegura “En el proceso penal no hay
ningún caso de impugnaciones extraordinarias, al provocar la reapertura del proceso
definitivamente cerrado, se comportan como fases de una misma relación procesal”. [12]
Entendemos por Término, el momento en que un acto debe comenzar a producir o dejar
de producir sus efectos característicos, denomínase también plazo. Dicho término que se
encuentra expresamente fijado por la ley, destruye la posibilidad de que el acto sea
realizado con posterioridad.
De Pina define como plazo “Espacio de tiempo que generalmente se fija para la ejecución
de actos procesales unilaterales, es decir, para las actividades de las partes fuera de las
vistas; v. gr. la interposición de un recurso, acontecimiento futuro pero cierto cuya
realización determina la efectividad o la extinción de los efectos de un acto jurídico. La
palabra plazo se considera sinónimo de término”.[13]
En el Código Federal de Procedimientos Penales se hace mención a los plazos para aplicar
el derecho invocado en los artículos 71 y 72 que a la letra dicen:
Artículo 71, , Los plazos son improrrogables y empezarán a correr desde el día siguiente al
de la fecha de la notificación, salvo los casos que este Código señale expresamente.
No se incluirán en los plazos, los sábados, los domingos ni los días inhábiles, a no ser que
se trate de poner al inculpado a disposición de los tribunales, de tomarle su declaración
preparatoria, o de resolver la procedencia de su formal prisión, sujeción a proceso, o
libertad.
Artículo 72. Los plazos se contarán por días hábiles, excepto los que se refieren a los tres
casos mencionados en la segunda parte del artículo anterior y a cualquier otro que por
disposición legal deba computarse por horas, pues éstos se contarán de momento a
momento, a partir de la hora que corresponda conforme a la ley.
Los términos se fijarán por día y hora, y salvo los actos a que se refiere el artículo 19
constitucional y otras disposiciones, se precisarán el día y hora en que se hayan de
celebrar las actuaciones a que se refieran.
Con respecto a la forma, el recurso puede ser presentado en forma verbal o escrita, el
recurso debe contener especificaciones sobre quien lo interpone, el sustento legal que lo
avala, y la resolución y el daño o perjuicio resentido, el nombre de la autoridad que la
emitió y ante qué autoridad se presenta la solicitud de revisión a la resolución impugnada.
1.9.Clasificación.
Los recursos pueden tener dos efectos, devolutivos, que son los que hacen que el nuevo
juicio lo lleve a cabo otro órgano jurisdiccional diferente y superior al que juzgó en primer
lugar, y suspensivos en donde se detiene el proceso en tanto sea resuelto el acto que se
impugna.
El efecto suspensivo también es inmediato en cuanto impide que la resolución del juez
inferior pueda ser ejecutada; es decir, al haber sido transferida al superior que habrá de
analizar la citada resolución y que hasta que emita una nueva podrá dar continuidad al
proceso.
Artículo 352, La aclaración se pedirá ante el tribunal que haya dictado la sentencia, dentro
del término de tres días, contados desde la notificación, y expresando claramente la
contradicción, ambigüedad, obscuridad o deficiencia de que, en concepto del promovente,
adolezca la sentencia.
Artículo 353. De la solicitud respectiva se dará vista a las otras partes por tres días, para
que expongan lo que estimen procedente.
Artículo 355. Cuando el tribunal que dictó la sentencia estime que debe aclararse algún
error de ella, dictará auto expresando las razones que crea existan para hacer la
declaración. Dará a conocer esa opinión a las partes, para que estas, dentro de tres días,
expongan lo que estimen conveniente, y en seguida procederá en la forma que dispone el
artículo anterior.
Artículo 357. La resolución en que se aclare una sentencia se repercutirá parte integrante
de ella.
Frente a la oscuridad de las resoluciones, ante las equivocaciones en que se suele incurrir,
o para hacer frente a alguna omisión, contradicción o ambigüedad, lo indicado es que, el
autor resuelva los aspectos señalados, ya sea de voluntad propia o a petición del
interesado. En otras condiciones, no podría entenderse el alcance, contenido, o efecto de
lo resuelto. Para poder impugnar una resolución, es indispensable entender lo que se
pretendió significar en tal o cual frase o expresión; por ende, toda solicitud de aclaración
de algún punto en la sentencia, no puede ser impugnación, sino petición encaminada a
esclarecer lo incomprensible, y sin que esto, vaya encaminado a alterar el contenido de la
resolución.
Contra las sentencias definitivas que terminan el juicio en primera instancia procede el
recuso de apelación, y en segunda instancia solo procede el recurso de amparo.
La construcción jurídica del recurso está necesariamente dominada por los principios
generales que rigen la actividad procesal. En relación con ellos tenemos que ver, cuáles
son los límites del nuevo examen de la causa y los poderes del juez que conoce de la
impugnación en lo que hace a la reforma de la resolución impugnada.
II.A partir del día en que se realizó el último acto de ejecución o se omitió la conducta
debida, si el delito fuere en grado de tentativa;
Por medio de este recurso, el juicio pasa de la primera a la segunda instancia, sin que
después de esta, en el derecho mexicano, quepa ninguna otra, si bien la sentencia recaída
en apelación pueda ser impugnada, utilizando el juicio de amparo.
Lamentable es que se haga del amparo, no sólo uso, sino abuso. La apelación no es sólo,
el recurso ordinario más importante, sino también el que más frecuentemente se ha
utilizado.
Las leyes procesales de nuestro tiempo han adoptado en esta materia el principio del
doble grado de jurisdicción. La apelación es, pues, un recurso judicial ordinario admitido
en todas las legislaciones. Sin embargo, no han dejado de formularse objeciones contra
ella.
Refiriéndonos al problema de la instancia única o doble, escribe Beceña que “no cabe
negar que el procedimiento penal, reducido a una sola instancia, gana en brevedad,
simplicidad y economía. No hay nada más simple que la supresión. El problema está en
averiguar si estas ventajas, puramente externas del proceso, se obtienen con el sacrificio
de las necesarias y mínimas garantías que aquél debe ofrecer a los ciudadanos, y, en
segundo lugar, si los mismos beneficios pueden o no buscarse y conseguirse con las
reformas de aquellas accidentalia procesales de las que nuestro enjuiciamiento ofrece
abundantísima y exuberante flora, sin disminuir por ello el valor que toda ordenación
procesal debe representar para el Estado que legisla y administra justicia y para el
ciudadano, cuyos derechos no tienen más protección que ésta”.[15]
La actividad del juez de apelación recae sobre la materia objeto del proceso, no sobre la
sentencia de primera instancia exclusivamente.
Esta actividad, no obstante, tiene la limitación impuesta por la pretensión del apelante,
que no permite al tribunal suplir agravios no formulados, ni la deficiencia de los que hayan
debido ser.
2.2. Concepto.
La palabra apelación se deriva del latín “apellatio”, que significa llamamiento o
reclamación. Este recurso data de épocas inmemoriales pero el derecho romano lo adopta
legalmente y lo introduce en su legislación.
Previa a esta impugnación debe existir resolución, misma que debe darse a conocer, y que
además proceda su interposición y pueda ser apelable.
Tomando como idea general el Artículo. 363 del Código Federal de Procedimientos Penales
para así poder conceptuar este recurso definimos que “El recurso de apelación tiene por
objeto examinar si en la resolución recurrida no se aplicó la ley correspondiente o se
aplicó ésta inexactamente, si se violaron los principios reguladores de la valoración de la
prueba, si se alteraron los hechos o no se fundó o motivó correctamente”.
Debo mencionar la opinión que tiene De Pina con respecto a la apelación. “Medio ordinario
de impugnación de resoluciones jurisdiccionales que permite someter una cuestión ya
decidida en primera instancia a la reconsideración de un juez superior, competente para
darle la solución que estime arreglada a derecho, tomando en cuenta los agravios
formulados al efecto por la parte recurrente”. [16]
Este recurso es de los más antiguos que hayan existido, El Código Federal de
Procedimientos Penales lo enmarca en el capitulo II, del título décimo en los artículos 363
al 391, y en el Código de Procedimientos Penales para el Estado de Veracruz en los
artículos 299 al 316 mismos en los que suscriben que el recurso de apelación tiene por
objeto examinar si en la resolución recurrida no se aplicó la ley correspondiente o se
aplicó esta inexactamente, si se violaron los principios reguladores de la valoración de la
prueba y del arbitrio judicial o si se alteraron los hechos, o no se fundó o motivó
correctamente confirmando revocando o modificando la resolución apelada.
Para Chiovenda, “la sentencia sujeta a recurso no es una verdadera y propia sentencia,
sino un simple elemento que con el concurso de otro (término, caducidad o renuncia de la
apelación) llegaría a ser la declaración de derecho; o, dicho de otro modo, que la
sentencia sujeta a recurso constituye sólo una situación jurídica que, al concurrir hechos
particulares, se convertirá en una verdadera sentencia. ”[18]
La sentencia sujeta a recurso en nuestra opinión es pues, un acto jurídico perfecto con
fuerza obligatoria propia, pero dada la posibilidad de los dos grados de jurisdicción, tiene
efectos limitados y parciales mientras sea posible otra diversa declaración del derecho
(sentencia de segundo grado), ya que los órganos jurisdiccionales competentes para
conocer en segunda instancia, tienen facultad de revocar el acto de declaración de los
órganos inferiores, sometidos a su revisión, y de pronunciar una nueva y diversa
declaración mediante otra sentencia.
Tiene por objeto que el superior revoque, modifique o confirme la resolución apelada.
Examinando si en la resolución recurrida no se aplicó la ley correspondiente o se aplicó
inexactamente, si se violaron los principios reguladores de la valoración de la prueba, si se
alteraron los hechos o no se fundó o motivó correctamente.
Por otro lado su finalidad, en el caso de este recurso se refiere a la reparación de daños y
perjuicios y a las medidas precautorias conducentes a asegurarla, para resolver sobre los
agravios que estime el apelante le cause la resolución recurrida.
El Código Federal indica ante quién debe interponerse en el Articulo 364. La segunda
instancia solamente se abrirá a petición de parte legítima, para resolver sobre los agravios
que estime el apelante le cause la resolución recurrida. Los agravios deberán expresarse al
interponerse el recurso o en la vista del asunto. El tribunal de apelación suplirá la
deficiencia de los agravios cuando el recurrente sea el procesado o, siendo el defensor, se
advierta que por torpeza no los hizo valer debidamente.
Las apelaciones interpuestas contra las resoluciones anteriores a la sentencia de primera
instancia, deben ser resueltas por el tribunal de apelación antes de que se emita dicha
sentencia.
Para el caso del Código de Procedimientos Penales del Estado de Veracruz indica en el
Artículo 300 que la segunda instancia se abrirá a petición de parte legítima, para resolver
sobre los agravios que estime el apelante le cause la resolución recurrida, sin perjuicio de
que el tribunal de apelación supla la deficiencia de los agravios cuando el recurrente sea el
acusado, o siéndolo su defensor, se advierte que por torpeza no los hizo valer
debidamente. En este último caso, el tribunal de alzada lo comunicará al Procurador
General de Justicia del Estado, a los efectos de su representación
Guillermo Colín Sánchez, en su obra Teoría del Procedimiento Penal, manifiesta que los
Tribunales Unitarios de Circuito se encuentran compuestos por un magistrado, del número
de secretarios, actuarios y empleados que determine el presupuesto y conocerán de la
tramitación y fallo de apelación, cuando proceda este recurso, de los asuntos sujetos en
primera instancia a los Juzgados de Distrito; del recurso de denegada apelación; de la
calificación de los impedimentos, excusas y recusaciones de los Jueces de Distrito, excepto
en los juicios de amparo; de las controversias que se susciten entre los Jueces de Distrito
sujetos a su jurisdicción, excepto en los juicios de amparo. [19]
En este ultimo caso distinguimos que además se habrá de dar a Conocer de la deficiencia
al Procurador General de Justicia del Estado.
Para el caso del Código Federal de Procedimientos Penales son apelables en ambos
efectos solamente las sentencias definitivas en que se imponga alguna sanción.
Artículo 366.“Son apelables en ambos efectos solamente las sentencias definitivas en que
se imponga alguna sanción”.
I.Las sentencias definitivas que absuelven al acusado, excepto las que se pronuncien en
relación con delitos punibles con no más de seis meses de prisión o con pena no privativa
de libertad, en los términos del primer párrafo del artículo 152.
II.Los autos en que se decrete el sobreseimiento en los casos de las fracciones III a VI del
artículo 298 y aquellos en que se niegue el sobreseimiento;
III.Los autos en que se nieguen la acumulación de autos; los que decreten o nieguen la
separación de autos, los que concedan o nieguen la recusación.
III.bis. Los autos que ratifiquen la constitucionalidad de una detención a que se refiere el
párrafo sexto del artículo 16 constitucional.
IV. Los autos de formal prisión, los de sujeción a proceso, los de falta de elementos para
procesar; y aquellos que resuelvan situaciones concernientes a la prueba.
V. Los autos en que se conceda o niegue la libertad provisional bajo caución, los que
concedan o nieguen la libertad por desvanecimiento de datos, y los que resuelvan algún
incidente no especificado;
VI. Los autos en que se niegue la orden de aprehensión o se niegue la citación para
preparatoria. Estos autos sólo son apelables por el Ministerio Público;
VII. Los autos que nieguen el cateo, las medidas precautorias de carácter patrimonial o en
arraigo del indiciado;
VIII. Los autos en que un tribunal se niegue a declarar su incompetencia por declinatoria,
o por librar el oficio inhibitorio a que se refiere el artículo 436, y
Para el caso de dicho Código Procedimental son apelables en ambos efectos las sentencias
definitivas y los autos que concedan o nieguen la libertad por desvanecimiento de datos.
Para el caso del Código Procedimental para el Estado de Veracruz manifiesta que son
apelables en el efecto devolutivo:
I. Los autos en que se decrete el sobreseimiento en los casos de las fracciones II a VI del
artículo 277 y aquellos en que se niegue el sobreseimiento.
II. Los autos en que se niegue o conceda la suspensión del procedimiento judicial; los que
concedan o nieguen la acumulación de autos, y los que decreten la separación de autos;
III. Los autos de formal prisión; los de sujeción a proceso, y los de falta de elementos
para procesar;
IV. Los autos en que se conceda, niegue o revoque la libertad provisional bajo caución y
los que resuelvan algún incidente no especificado. Si la inconformidad versa únicamente
sobre el monto de la caución en que se concedió la libertad, procede el recurso de
revocación.
VI. Los autos en que un tribunal se niegue a declarar su incompetencia por declinatoria; o
a librar el oficio inhibitorio a que se refiere el artículo 361; y Las demás resoluciones que
señala la ley.
La omisión de este requisito surte el efecto de duplicar el término legal para interponer el
recurso, y el secretario o actuario que haya incurrido en ella será castigado
disciplinariamente, por el tribunal que conozca del recurso, con una multa de cinco a
cincuenta pesos. En ambos Códigos se hace esta prevención.
Para conocer debidamente este tema debemos analizar lo siguiente, Como primer punto
de análisis encontraremos que el efecto en que procede la apelación es llamado de
“Calificación de grado”, ya que una vez admitida la inconformidad del interesado señalará
el efecto en que procede.
Con antelación hemos especificado ya que este recurso puede ser apelable en ambos
efectos o en uno solo.
Todo lo que se ha indicado hasta este momento origina una serie de actos de tipo
procedimental, indispensables para realizar el objeto y fin del medio de impugnación; por
ello, vamos a ocuparnos de los mismos.
La interposición de este recurso deberá hacerse en tiempo para poder ser admitido,
independientemente de que deberá soportarse con bases firmes para proceder y de esta
manera el Tribunal que dictó la resolución apelada lo admitirá o lo desechará de plano si
la resolución judicial es impugnable, según sea el caso.
Contra el auto que admita la apelación no procede recurso alguno, sin perjuicio de lo que
dispone el artículo 374 del Código Federal de Procedimientos Penales.
En este caso no solamente se atenderá el aspecto cronológico para su admisión sino que
además el órgano jurisdiccional deberá tomar en cuenta también, si la resolución judicial
es impugnable o no por este medio, o si el apelante tiene o no personalidad, ya que de lo
contrario no habría posibilidad de desechar ninguna apelación a pesar de su
improcedencia.
Ahora bien dentro de este punto debemos distinguir que si lo que da lugar al recurso son
los agravios en necesario hacerlos valer, y por tal motivo debemos analizar detenidamente
lo que comprende el agravio
a) Concepto. Deberemos definir como Agravio a todo daño o lesión que sufre una
persona por violaciones a la ley en una resolución judicial, cuando estos existen es
necesario hacer valer el recurso.
De Pina define al agravio como una lesión, daño o perjuicio ocasionado por una
resolución, judicial o administrativa, por la aplicación indebida de un precepto legal o por
falta de aplicación del que debió regir el caso, susceptible de fundar una impugnación
contra la misma. [20]
b) Momento en que deberán ser expresados los agravio. El artículo 364 del Código
Federal hace referencia en este punto con lo siguiente: “...Los agravios deberán
expresarse al interponerse el recurso o en la vista del asunto...”,
El artículo 310 del Código Procesal para el estado de Veracruz indica que si el apelante no
promoviere pruebas, dentro del término de seis días contados desde la fecha en que se le
dé vista, expresará agravios.
Una vez que se haya admitido el recurso el Tribunal está obligado a substanciarlo y así
remitirlo al tribunal de alzada, tal como se indica en el artículo 372 del Código Federal que
a la letra dice “Admitida la apelación en ambos efectos, se remitirá original del proceso al
tribunal de apelación respectivo. Si fueren varios los acusados y la apelación solamente se
refiere a alguno o algunos de ellos, el tribunal que dictó la sentencia apelada ordenará se
expidan los testimonios a que se refiere el artículo 531.” Dicho articulo sugiere que una
vez pronunciada una sentencia ejecutoriada condenatoria o absolutoria, el juez o el
tribunal que las pronuncie expedirá dentro de cuarenta y ocho horas, una copia certificada
para la Dirección General de Prevención y Readaptación Social con los datos de
identificación del reo. El incumplimiento de esta disposición será sancionado con multa.
Que el juez se obliga a dictar de oficio, todas las providencias conducentes para que el reo
sea puesto a disposición de la Dirección General de Prevención y Readaptación Social.
El primer acto procedimental que inicia esta instancia es el auto de radicación del asunto,
Este auto deberá contener la fecha y la sala en donde se radica, la fecha para la audiencia
de “vista”, la designación del magistrado integrante de la Sala quien deba ser el ponente,
la solicitud de mandato para requerir al procesado, acusado o sentenciado, según sea el
caso impugnado, para que este a su vez pueda nombrar persona de su confianza
encargada de su defensa, advirtiéndole que, de no hacerlo en el término de tres días
siguientes a su notificación, se designará al defensor de oficio adscrito a la Sala.
En cambio el articulo 307 del Código Procesal para el Estado de Veracruz hace la
aclaración que de no hacerlo, se le tendrá como defensor al de oficio.
La notificación del auto y sus efectos.
Artículo 374. Dentro de los tres días a que se refiere el artículo anterior, las partes podrán
impugnar la admisión del recurso, o el efecto o efectos en que haya sido admitido, y el
tribunal dará vista de la promoción a las otras partes por tres días, y resolverá lo que
fuere procedente dentro de los tres días siguientes.
Si se declarare mal admitida la apelación, se devolverá el proceso al tribunal de su origen,
si la hubiere remitido.
Artículo 375. Si las partes no impugnan el recurso conforme al artículo anterior, se podrá
declarar de oficio, después de la celebración de la vista, que fue mal admitida la apelación,
y sin revisarse la resolución apelada, se devolverá el expediente, en su caso al tribunal de
su origen.
El auto mencionado se dará a conocer a las partes para que puedan tomar en la secretaría
del tribunal los apuntes que necesiten para alegar, de la misma manera contaran con tres
días siguientes a la notificación para impugnar la admisión del recurso sobre el efecto o
efectos en que halla sido admitido y la sala dentro de tres días siguientes resolverá lo
pertinente y en caso de considerar la apelación como mal admitida, devolverá la causa al
juzgado de origen sin revisar la sentencia o auto apelado.
La aportación de pruebas.
Una vez admitidas las pruebas podrá desahogarse en un término de cinco días, según y
posteriormente se citará para la vista que se efectuará dentro de los treinta días
siguientes a la conclusión del primer plazo si se tratare de sentencias definitivas y dentro
de cinco si se tratare de autos.
Tal y como lo dice el artículo 373 del Código Federal de Procedimientos Penales.
Artículo 376. Si dentro del plazo para promover prueba a que se refiere el artículo 373,
alguna de las partes la promueve, expresará el objeto y naturaleza de la prueba. Dentro
de tres días de hecha la promoción, el tribunal decidirá, sin más trámite, si es de admitirse
o no. Cuando se admita la prueba, se rendirá dentro del plazo de cinco días. Desahogada,
denegada o pasado el plazo que se concedió para rendirla, nuevamente se citará para la
vista de la causa dentro de los plazos que señala el articulo 373.
Artículo 378 Sólo se admitirá la prueba testimonial en segunda instancia, cuando los
hechos a que se refiera no hayan sido materia del examen de testigos en primera
instancia.
Artículo 379. Siempre que se haya interpuesto el recurso de apelación en contra de una
sentencia definitiva, el tribunal tiene facultad para admitir las pruebas que no se hubieren
promovido o practicado en primera instancia, para justificar la procedencia de la condena
condicional y para resolver sobre ellas al fallarse el asunto, aún cuando no hayan sido
motivo de agravio el no haberse conocido ese beneficio en la primera instancia.
Tratándose de apelaciones respecto de los autos de formal prisión, sujeción a proceso o
libertad por falta de elementos para procesar, el tribunal podrá ordenar el desahogo de las
pruebas que no se hubiesen practicado, si las partes las promueven.
Artículo 380. Los instrumentos públicos son admisibles mientras no se declare vista la
causa.
La audiencia final.
Artículo 382. El día señalado para la vista comenzará la audiencia haciendo el secretario
del tribunal una relación del asunto; enseguida hará uso de la palabra el apelante y a
continuación las otras partes, en el orden que indique quien presida la audiencia. Si fueren
dos o mas los apelantes, usarán la palabra en el orden que designe el mismo funcionario
que presida.
Siempre que esta diligencia se lleve a cabo en la condición de ser razonable, ya que de no
ser así de desvirtuaría el proceso y perdería la naturaleza, objeto y fines del recurso. Dado
que subsanará omisiones o deficiencias.
La sentencia.
Esto significa que está prohibido aumentar la pena impuesta al apelante. Si el procesado
apela sería injusto que se aumentase su pena ya que sus esperanzas de alcanzar la
absolución o atenuación de la sentencia de condena han sido el motivo por el cual ha
interpuesto este recurso.
Para el caso de que si apela el Ministerio Publico manifestando como agravio la escasa
penalidad, el tribunal podrá aumentarla si procede, previo análisis de la personalidad del
sentenciado y de la verdad histórica del proceso, y si este considera que no fueron
debidamente analizadas las circunstancias que lo llevaron a tomar esta determinación, y
en el caso de que no corresponda la cuantía de la sanción con el grado de temibilidad
establecido por las referidas circunstancias.
Los efectos de la sanción dependerán según recaigan en un auto o sobre una sentencia.
Cuando la resolución se modifica, el proceso continuará instruyéndose con los hechos que
en segunda instancia se señalen y se cumplirá además, con lo que no fue modificado. Si la
resolución se revoca, el proceso no podrá continuar.
Si la resolución impugnada fuere una sentencia producirá los siguientes efectos: Pone fin a
la segunda instancia, Si se confirma la sentencia apelada causará ejecutoria, y con ello la
etapa de ejecución dará inicio.
De Pina define la reposición como un recurso. “Medio de impugnación utilizable contra los
decretos y autos del Tribunal Superior de Justicia, aun de aquellos que, dictados en
primera instancia, serían apelables”. [21]
Guillermo Colín Sánchez define la reposición del procedimiento. “Es la substitución de los
actos procedimentales que, por resolución del juez superior, se dejaron sin efecto, en
razón de infracciones trascendentales en cuanto a las formalidades esenciales no
observadas durante una parte o en toda la secuela procedimental”.[22]
Esto quiere decir que a través de una resolución judicial se invalidan determinadas
actuaciones; practicándolas de nueva cuenta atendiendo al principio de legalidad.
Por tanto reponer el procedimiento significa anular lo actuado, para que se repitan los
actos procesales, por considerarse que son viciosos o irregulares. Al ordenarse una
reposición, el resultado de la primera ya no será modificar, revocar o confirmar la
resolución recurrida, sino repetir el procedimiento a partir del acto procesal que da motivo
a la reposición.
Este precepto lo vemos contenido dentro del recurso de apelación en los artículos 386 al
391 pero este surge a causa de los agravios que el apelante manifiesta, y el efecto que
produce es el de declarar nulos los actos viciados y se practiquen de nueva cuenta, en
razón de las exigencias del principio de legalidad antes mencionado, en sus diversas
manifestaciones. Ya que se encontrará fundada una resolución sobre bases falsas, y si lo
señalado en los agravios son violaciones a las formalidades, esto es lo inmediato sobre lo
que hay que resolver.
II. Bis. Por haberse omitido la designación del traductor al inculpado que no hable o
entienda suficientemente el idioma castellano, en los términos que señale la ley;
III. Por no habérsele ministrado los datos que necesitare para su defensa y que constaren
en el proceso,
IV. Por no habérsele careado con algún testigo que hubiere depuesto en su contra, si el
testigo rindió su declaración en el mismo lugar donde se sigue el proceso, estando allí
también el procesado;
V. Por no haber sido citada alguna de las partes para las diligencias que tuviere derecho a
presenciar;
VI. Por no habérsele recibido a alguna de las partes, injustificadamente, las pruebas; con
arreglo a la ley;
VII. Por haberse celebrado el juicio sin asistencia del funcionario que deba fallar, de su
secretario o testigo de asistencia y del Ministerio Público.
VII. Bis. Por existir omisiones graves de la defensa en perjuicio del sentenciado; se
reputan como omisiones graves de la defensa:
a)No haber asesorado al inculpado sobre la naturaleza y las consecuencias jurídicas de los
hechos imputados en el proceso.
b) No haber asistido a las diligencias que se practicaren con intervención del inculpado
durante la averiguación previa y durante el proceso;
c) No haber ofrecido y aportado las pruebas necesarias para la defensa del inculpado;
VIII. Por haber hecho la insaculación de jurados en forma distinta de la prevenida por este
Código.
X. Por no haberse integrado el jurado por el número de personas que señale la ley o por
carecer alguna de ellas de algún requisito legal;
XI. Por haberse sometido a la resolución del jurado cuestiones de distinta índole de las
que la ley señale.
XII. Por haber sido juzgado el acusado por un tribunal de derecho, debiendo haberlo sido
por el jurado, o viceversa.
XIII.Por haberse condenado por hechos distintos de los que fueron considerados en las
conclusiones del Ministerio Público.
XIV. Por haberse negado a alguna de las partes los recursos precedentes, o por haberse
resuelto la revocación en forma contraria a derecho; y
XV.Por haberse tenido en cuenta una diligencia que, conforme a la ley, fuese nula.
Artículo 389. Notificado el fallo a las partes, se remitirá, desde luego la ejecutoria al
tribunal de primera instancia, devolviéndole el expediente, en su caso.
Artículo 391. Cuando el tribunal de apelación notare que el defensor faltó a sus deberes:
por no haber interpuesto los recursos que procedían; por haber abandonado los
interpuestos, cuando de las constancias de autos apareciere que debían prosperar; por no
haber alegado circunstancias de probadas en el proceso y que habrían favorecido
notablemente al inculpado, o por haber alegado hechos no probados en autos, podrá
imponerle una corrección disciplinaria o consignarlo al Ministerio Público, si procediere. Si
el defensor fuere de oficio, el tribunal deberá, además, dar cuenta al superior de aquél,
llamándole la atención sobre la negligencia o ineptitud de dicho defensor.
Denegar significa no conceder lo que se pide o solicita; por ende, cuando se habla de
denegada apelación, se alude a la negación de la procedencia del recurso de alzada.
3.2. Concepto.
Este recurso se encuentra enmarcado el Capitulo III del Código Federal de Procedimientos
Penales. En los artículos 392 al 397. Y en el Código de Procedimientos Penales para el
Estado de Veracruz en los artículos 317 al 323.
Mismos en los que se suscribe que este recurso procede cuando la apelación haya sido
negada, o en caso de que se conceda solo en efecto devolutivo debiendo ser en ambos
Su objeto es la resolución que niega la admisión de la apelación o el efecto con que ésta
debió admitirse. Atendiendo a los lineamientos legales, se estudiará si el impugnante tiene
o no derecho a apelar si la resolución judicial del caso es apelable, y por último, siendo
apelable, en qué grado lo es.
Lo previsto por la legislación vigente implica que, sólo es procedente esta manifestación
ante el juez autor del auto.
Guillermo Colín Sánchez, en su obra Teoría del Procedimiento Penal, manifiesta que los
Tribunales Unitarios de Circuito se encuentran compuestos por un magistrado, del número
de secretarios, actuarios y empleados que determine el presupuesto y conocerán de la
tramitación y fallo de apelación, cuando proceda este recurso, de los asuntos sujetos en
primera instancia a los Juzgados de Distrito; del recurso de denegada apelación; de la
calificación de los impedimentos, excusas y recusaciones de los Jueces de Distrito, excepto
en los juicios de amparo; de las controversias que se susciten entre los Jueces de Distrito
sujetos a su jurisdicción, excepto en los juicios de amparo.[24]
Tienen derecho a interponerlo el o los sujetos a quienes la ley faculta para apelar y todos
aquellos a quienes se les haya desechado la apelación, tal es el caso del Ministerio Público,
el procesado, acusado o sentenciado, defensor, y ofendido o su legítimo representante.
Este recurso procede cuando la apelación se haya negado, o cuando se conceda sólo en el
efecto devolutivo siendo procedente en ambos, aún cuando el motivo de la denegación
sea que no se considera como parte al que intente el recurso. Artículo 392 del Código
Federal y 317 del Código de Veracruz.
3.9. Tiempo dentro del cual procede su interposición.
Este recurso se interpondrá dentro de los tres días siguientes al en que se notifique la
resolución que niegue la apelación. Artículo 393. del Código Federal y 318 del Código de
Veracruz.
Este recurso se interpondrá verbalmente o por escrito, dentro de los tres días siguientes al
en que se notifique la resolución que niegue la apelación. Artículo 393. del Código Federal
y 318 del Código de Veracruz.
El Código Federal de Procedimientos Penales nos indica que actos son los que proceden a
la interposición de este recurso en los artículos que a continuación se señalan.
Artículo 394. Interpuesto el recurso, el Tribunal, sin más substanciación, mandará expedir,
dentro de tres días, certificado en el que brevemente expondrá la naturaleza y estado de
las actuaciones, el punto sobre que recayó el auto apelado, e insertará este a la letra, así
como el que lo haya declarado inapelable. En el Artículo 319 del Código de Procedimientos
Penales para el Estado de Veracruz se encuentra la misma redacción al respecto.
Artículo 396. Recibido por el promovente el certificado, deberá presentarlo ante el tribunal
de apelación dentro del término de tres días, contados desde que se le entregue, si el
tribunal reside en el mismo lugar. Si reside en otro, el de primera instancia señalará,
además de los tres días, el término que sea necesario, atendidas las distancias y los
medios de comunicación, sin que el término total pueda excederse de treinta días. Artículo
321 del Código de Procedimientos Penales para el Estado de Veracruz
Para el caso del Código de Procedimientos Penales para el Estado de Veracruz concede
como máximo el término de quince días y además hace mención a que si en el caso de
no presentarse el certificado dentro del termino señalado, se tendrá al interesado por
desistido del recurso.
Actualmente no es necesario contar con tanto tiempo para hacer la entrega respectiva,
dado el caso de que los medios de comunicación son varios y muy rápidos, además
debemos tomar en cuenta que este recurso en especial se caracteriza por su gran
celeridad en el proceso, tal situación es conveniente para la parte que interpone el
recurso.
Artículo 397. El tribunal de apelación, sin más trámite, citará para sentencia y pronunciará
ésta dentro de los cinco días siguientes a la notificación. Artículo 322. del Código de
Procedimientos Penales para el Estado de Veracruz
La sentencia en este caso se encuentra sujeta al tiempo en que se haga del conocimiento
del caso a la segunda instancia.
La sentencia atenderá los aspectos señalados para este tipo de resoluciones, aunque, se
atiende al auto que lo motiva, en cuanto a la personalidad del impugnante, la procedencia
del recurso, o bien el grado en el que se admitió, determinando su procedencia.
4.2. Concepto.
Este recurso solo se interpondrá contra los autos en los cuales no se conceda el recurso
de apelación y contra las resoluciones que se dicten en segunda instancia antes de la
sentencia.
“Su objeto es el auto contra el cual se interpone para que previo estudio que haga el
órgano jurisdiccional, lo reconsidere. La finalidad del mismo consiste que en el acto
impugnado se realice su reposición a la resolución por el Tribunal recurrido. En caso
contrario, confirme el auto impugnado”.[27]
El Código Federal estatuye en el artículo 362 “El plazo para interponer el recurso de
revocación y ofrecer pruebas será de cinco días, contados a partir de que surta efectos la
notificación de la resolución que se impugna
El Código del Distrito Federal indica en el artículo 413, que deberá ser interpuesto en el
momento de la notificación o al día siguiente hábil
El Tribunal resolverá el recurso oyendo a las partes en una audiencia que se efectuará
dentro de las cuarenta y ocho horas siguientes a la notificación que se haga a la parte que
no interpuso el recurso, acerca de la admisión de éste.
Se interpondrá por escrito en donde se hará mención del acto impugnado, la autoridad
que emitió el auto, y la petición de dejar sin efecto la misma fundamentando debidamente
los motivos que conforme a derecho deberán respetarse por la propia autoridad.
Y en forma verbal donde la autoridad deberá oír a las partes en una audiencia que se
efectuará posteriormente a la notificación que se haga a la parte que no interpuso el
recurso, y en ese momento se deberán desahogar las pruebas que conforme a derecho se
consideren supervenientes. Tal es el Caso del Código Federal de Procedimientos Penales.
Para el caso del Código de Procedimientos Penales para el Estado de Veracruz procede
interponerlo en el acto de la notificación (en forma verbal) o dentro de las veinticuatro
horas siguientes a este acto, (en forma escrita).
Para el Código Federal este procedimiento es muy sencillo ya que una vez interpuesto el
recurso de revocación el Tribunal lo resolverá oyendo a las parte en una audiencia que se
efectuará dentro de las cuarenta y ocho horas siguientes a la notificación que se haga a la
parte que no interpuso recurso en contra de la admisión de este, posteriormente en la
audiencia se desahogarán las pruebas ofrecidas, se escuchará a las partes y se dictará
resolución en el mismo acto, resolución contra la que no procederá recurso alguno, y si en
esta audiencia no es posible desahogar en forma concluyente las pruebas, el juez podrá
convocar a una segunda audiencia por una sola vez.
El Código de Procedimientos Penales para el Estado de Veracruz deja abierta la posibilidad
de resolver de plano el acto impugnado por el Tribunal correspondiente si estimare que no
es necesario oír a las partes, acto que le concede celeridad al procedimiento, y que en
caso contrario citará a las partes a una audiencia verbal que se efectuará dentro de las
cuarenta y ocho horas siguientes al acto de notificación y en ella dictará su resolución,
contra la que no procede recurso alguno.
Hay pues dos maneras de substanciar un recurso de revocación, uno de plano y el otro,
previa audiencia verbal, dependiendo ambos del criterio del juez o del tribunal.
En el entendido de que la resolución que sea pronunciada en revocación, confirmando o
negando la procedencia del recurso, no admite recurso ulterior.
Capítulo V. Queja.
El Código Federal de Procedimientos Penales manifiesta que este recurso procede contra
las conductas omisivas de los jueces de Distrito que no emitan las resoluciones o no
señalen las prácticas de diligencias dentro de los plazos o términos que señale la ley, o
bien que no cumplan las formalidades o no despachen los asuntos de acuerdo a lo
establecido en este Código adjetivo.
5.2. Concepto.
La queja es un recurso ordinario procedente para las conductas omisas de los jueces de
distrito que no radiquen una averiguación, no resuelvan respecto al libramiento o negativa
de la orden de aprehensión o comparecencia, no den por terminada la instrucción dentro
del tiempo señalado por la ley o no resuelvan los problemas de incompetencia dentro de
los plazos previstos para esos fines.
Con respecto al probable autor del delito constituye un derecho que como es evidente
agiliza el proceso y reduce en grado superlativo la espera innecesaria que a causa de la
negligencia del órgano que conoce del caso le produzca daños que en ocasiones podrán
ser en cuanto a la restricción de su libertad provocando un sufrimiento prolongado de
forma por demás innecesaria.
Para el Ministerio Público son derechos y obligaciones dependiendo de la etapa procesal.
Ya que en defensa del interés público tiene obligación de tutelar.
Observemos que para las partes intervinientes en el proceso a excepción desde luego del
juez, es un derecho y una obligación, y que para efectos de la procedencia del juicio de
amparo, estatuye una obligación agotar todos los recursos existentes que en su caso
procedan para garantizar su procedencia, por lo que, debemos concluir que, es
estrictamente necesario utilizar este medio de impugnación necesariamente.
El fin de este recurso es que los órganos jurisdiccionales actúen y se ajusten a los
términos o plazos dentro de los cuales deben resolver, evitando daños a las partes por las
conductas omisas y cumplir con las formalidades del proceso.
Guillermo Colín Sánchez, en su obra Teoría del Procedimiento Penal, manifiesta que los
Tribunales Unitarios de Circuito conocerán, de los asuntos sujetos en primera instancia a
los Juzgados de Distrito, de las controversias que se susciten entre los Jueces de Distrito
sujetos a su jurisdicción, excepto en los juicios de amparo.[29]
Con respecto a estos preceptos el articulo 142 del Código Federal de Procedimientos
Penales expresa:
Los plazos a que se refiere este artículo se contarán a partir de la fecha del auto de formal
prisión o del de sujeción a proceso, en su caso. Dentro del mes anterior a que concluya
cualquiera de los plazos antes señalados, el juez dictará auto que señale esta
circunstancia, así como la relación de pruebas, diligencias y recursos que aparezcan
pendientes de desahogo. En el mismo auto, el Juez ordenará se gire oficio al Tribunal
unitario que corresponda, solicitándole resuelva los recursos antes de que se cierre la
instrucción y dará vista a las partes para que, dentro de los diez días siguientes,
manifiesten lo que a su derecho convenga, indicándoles que de no hacerlo resolverá como
lo ordena el articulo 150 de este Código. Cuando el juez omita dictar el auto al que se
refiere el párrafo anterior, cualquiera de las partes podrá recurrir en la forma prevista por
este Código para la queja. No se resuelva algún problema de competencia dentro del
término legal.
A este respecto el artículo 433 del Código Federal de Procedimientos Penales manifiesta lo
siguiente: “El tribunal que reciba las actuaciones que le remita el que se hubiere declarado
incompetente, oirá al Ministerio Público dentro de tres días y resolverá en el plazo de seis
días si reconoce su competencia. Si no la reconoce remitirá las audiencias al tribunal de
competencia con su opinión, comunicándole al tribunal que hubiere enviado el expediente.
Si el tribunal que reciba las actuaciones conforme a lo previsto en la primera parte de este
artículo, no resuelve dentro del plazo señalado, se procederá como en la queja.”.
El articulo 398 bis manifiesta en el párrafo cuarto lo siguiente: “El Tribunal Unitario de
Circuito, en el plazo de cuarenta y ocho horas, le dará entrada al recurso y requerirá al
juez de Distrito, cuya conducta omisiva haya dado lugar al recurso, para que rinda informe
dentro del plazo de tres días.
Transcurrido este plazo, con informe o sin él, se dictará la resolución que proceda. Si se
estima fundado el recurso, El Tribunal Unitario de Circuito requerirá al juez de Distrito
para que cumpla las obligaciones determinadas en la ley. La falta del informe al que se
refiere el párrafo anterior, establece la presunción de ser cierta la omisión atribuida y hará
incurrir al juez en multa de diez a cien veces el salario mínimo vigente en el momento y
lugar en que hubiese ocurrido la omisión”.
Conclusiones:
Los medios de impugnación deben dar respuesta a las promociones de los sujetos que
intervienen el proceso, estas resoluciones contienen la mayor importancia para el correcto
desenvolvimiento del proceso y la pretensión punitiva.
Es de concluirse que la existencia del procedimiento de impugnación es necesario para las
partes se podrá constituir como un derecho, pero la no interposición de los medios de
impugnación acarrearán graves males, en tal grado que la sentencia de primera o
segunda instancia no se encontrará dentro de la legalidad, esta situación, hace aparecer
sentimientos tales como, el de la desesperanza para el sentenciado, y la visión repulsiva
de la sociedad contra los órganos jurisdiccionales o contra el derecho mismo.
Este tema es muy amplio, y por mas extenso que parezca, solo he deseado resaltar en un
lenguaje muy sencillo de comprender para cualquier persona y en forma objetiva el objeto
de estudio de esta memoria, dicho objeto como ya lo he mencionado son los recursos
ordinarios tales como la apelación, la denegada apelación, la revocación y la queja.
Con la finalidad de contribuir al estudio del Derecho, dejo este documento en manos de
quien considere, que en algún momento de su vida habrá de necesitarlo.
Bibliografía:
Rafael de Pina
Diccionario de Derecho,
Editorial Porrúa, S.A.
Cuarta Edición.
México 1975, Págs. 392
Manuel Rivera Silva
El Procedimiento Penal
Editorial Porrúa, S. A.
Séptima Edición.
México 1993. Págs. 625