You are on page 1of 31

c 


  

Me parece conveniente distinguir a la Economía Ambiental, que tiene como referente,


para comprender su naturaleza, a la Economía, como ciencia. Podemos citar al
reconocido autor Lionel Robbins, del London School of Economics que, en 1934,
intervino en el debate sobre lo que se entendía en esa época por ciencia económica. El
panorama de la situación reflejaba claramente una preferencia por considerar que la
Economía era la ciencia, que indagaba por las causas del bienestar material de los
individuos. Robbins por el contrario, observaba que la Economía no se debería enfocar
en el bienestar material pues no recoge la genuina situación económica.

Creo, sin embargo, que hay algo que está más allá del bienestar, que es lo realmente
económico, en el comportamiento del hombre: la escasez como problema, que se
considera, de hecho, como uno de los principales problemas económicos. Considero
que una situación típicamente económica es aquella que cumple entonces con las
siguientes condiciones: que el ser humano tenga múltiples fines o deseos o
necesidades, que estos fines se puedan ordenar según su prioridad, que los medios
para lograr esos fines sean escasos y que los medios tengan usos alternativos, por lo
que pueden ser movilizados para los fines más diversos.

Retomando a Robbins, ³la Economía es la ciencia que estudia las formas del
comportamiento humano resultantes de la relación existente entre las ilimitadas
necesidades por satisfacer y los recursos que, siendo limitados, tienen usos
alternativos´1. De ahí que, para la mayoría de los economistas ésta es la definición
típica de Economía. Por otro lado, cito la definición de Paul Samuelson: ³la Economía
es el estudio de la manera en que las sociedades utilizan los recursos escasos para
producir mercancías valiosas y distribuirlas entre los diferentes individuos´2

1
Robbins, Robins Lionel, ³Ensayo sobre la Naturaleza y Significado de la Ciencia Económica´. Fondo de Cultura Económica.
México 1934, p. 37.
2
Paul Samuelson, ³Economía´, 17a edición en español, Mc Graw Hill, 2002.
Me parece que a nivel agregado, las sociedades que se organizan en torno al mercado,
permiten que ésta, en conjunto con el gobierno, como cabeza del Estado, organicen
estructuradamente, el sistema de producción y consumo. Este sistema necesita de
factores de producción para echarse a andar. Estos factores originariamente se
denominaron Tierra, Trabajo y Capital. Algunos autores hacen referencia a que,
además de esos factores es indispensable el uso de la Coordinación, como elemento
de armonía en los otros tres.

1.1. ¿QUÉ ES LA ECONOMÍA AMBIENTAL?

Intuyo, indudablemente, que la Economía Ambiental entra en el mecanismo de la


ciencia económica, como la herramienta que permite armonizar el problema económico,
con el normal funcionamiento del ecosistema. Así pues, defino a la Economía
Ambiental como la explotación de recursos, medios de gestión ambiental e
instrumentos para lograr el desarrollo sustentable. Para iniciar el estudio sobre
Economía Ambiental, primero ubiquémosla en el espacio económico:

| 

 | 

|  D| B||




|  B|


Deduzco a partir del esquema anterior, que la Economía Ambiental abarca el estudio de
los problemas ambientales, empleando la visión y las herramientas de la Economía.
Desde mi punto de vista, actualmente, existe un concepto un tanto inexacto de
Economía, ya que lo primero que se piensa es que, su campo de estudio, es en su
totalidad sobre decisiones de negocios y cómo obtener rendimientos en el modo de
producción capitalista. Pero la Economía se enfoca también sobre las decisiones que
realizan los actores económicos sobre el uso de recursos escasos.
Por otro lado, al hablar de Gestión Ambiental, es importante mencionar sus principales
principios, los cuales son: la regulación de la capacidad de absorción del medio a los
impactos, la previsión y prevención de impactos ambientales, ordenar la planificación
territorial, y el monitoreo de informes, de las condiciones ambientales. Percibo que un
aspecto adicional que debe estar contemplado dentro de la Gestión Ambiental, es la
educación ambiental, es decir, si se cuenta con una concientización desde la edad
temprana, se podrán prevenir muchos de los graves problemas ambientales que nos
aquejan en la actualidad.

Todas estas medidas e instrumentos tienen como único objetivo el desarrollo


sustentable, que se refiere al uso adecuado de los recursos que permita la satisfacción
de necesidades básicas presentes de los habitantes, pero sin comprometer los recursos
de generaciones futuras. En este nuevo orden global es la planificación socio-
económica de los recursos disponibles, la opción para resolver los problemas que
avanzan por las necesidades sociales (desigualdad para alcanzar una calidad de vida
por sobre los niveles de pobreza). Pues los problemas ambientales no están limitados a
las fronteras de cada país y por esto, es crucial en la determinación del desarrollo o el
atraso de una nación.

Creo, por lo tanto, que lo más relevante es encontrar instrumentos económicos y de


regulación que permitan el uso eficiente y eficaz de los recursos, en la producción y
explotación, la incorporación de los costos junto a estas medidas, ya que así, se
cumplirá con una función de protección ante la indiferencia de aquellos que no tengan
la intención de llegar a los niveles de exigencia fijados internacionalmente. A
continuación se analizan algunos conceptos de los expertos en la materia.

Atendiendo a lo que la Economía Ambiental le concierne, hago un esbozo del aporte de


Robert Merton Solow3, uno de los principales precursores en el ámbito de la Economía

3
Economista estadounidense, especialmente conocido por sus trabajos sobre teoría del crecimiento económico. En 1987 recibió

el Premio Nobel de Economía.


Ambiental, el cual se fundamentó en su especialización sobre las teorías del
Conocimiento Económico, donde el factor clave para lograr el crecimiento económico es
el progreso técnico, en el cual, el ahorro forma parte esencial en el buen desempeño el
mismo.

Considero que su contribución a la teoría económica se resume a sus estudios


econométricos sobre las inversiones en capital fijo y sobre el impacto de
la tecnología en el aumento de la productividad. Para Solow, el factor clave para lograr
el crecimiento económico es el progreso técnico, que determina los salarios reales.
Su modelo de crecimiento neoclásico es un modelo claramente dinámico, donde el
ahorro desempeña un importante papel. Con él, Solow calculó que cuatro quintas
partes del crecimiento norteamericano eran atribuibles al progreso técnico. El análisis
de Solow muestra que en los países avanzados, la innovación tecnológica contrarresta
los rendimientos decrecientes, obteniendo más producción, aún con la misma cantidad
de capital y trabajo4.

Concluyo, con respecto a las aportaciones de Solow, que los países pobres tienen altas
tasas de crecimiento demográfico y bajas tasas de ahorro, mientras que los ricos
presentan la situación inversa; el capital tiende a crecer más rápido en las naciones
pobres, debido a que es un recurso escaso y, por lo tanto, habrá mayor rentabilidad y
más oportunidades de inversión.

Por otro lado, Ronald H. Coase5, que tiene dentro de sus contribuciones, el terorema
que lleva su nombre, el ³Teorema de Coase´, tiene importantes aportaciones en
materia. Es considerado el fundador del Análisis Económico del Derecho y de la Nueva
Economía Institucional. Coase explica el reparto de los costos ambientales, a través
del funcionamiento de mecanismos institucionales de asignación, como el mercado.
Atribuyen los fallos en el proceso de asignación, que provocan el deterioro del medio
ambiente a la existencia de un fallo institucional en los derechos sobre el medio

4
Cue, Agustín/ Quintana, Luis. Introducción a la Macroeconomía. Un enfoque integral para México. Grupo editorial Patria, México,
2008.
5
Economista británico, premio noble de economía 1991, porsu Teorema de Coase (1960)
ambiente, proponiendo como corrección la implantación de sistemas completos de
6
derechos. Coase es el creador del concepto de ³costos de transacción´ que han
adquirido un papel de gran trascendencia en la economía moderna.

El punto de partida de Coase es la afirmación de que, para que exista una externalidad
7
siempre tiene que haber dos partes: alguien que la cause, y alguien que la sufra. Este
teorema afirma que, en ausencia de costos de transacción, el problema causado por las
externalidades podría resolverse asignando en favor de una de las partes el derecho de
propiedad sobre el medio a través del que se transmite la externalidad: dejando a favor
de una de las partes de la definición de lo que se puede y no se puede hacer en ese
medio. Es decir, este método busca, que las personas involucradas en problemas de
negocios, siempre tengan en cuenta el entorno que se este discutiendo.

De acuerdo a lo anterior, remarco la importancia de que, como sociedad, siempre


debemos tener en cuenta los recursos naturales en favor de alguien, para que algunos
problemas ambientales queden, si no solucionados, por lo menos minimizados.

1.2. LA ECONOMÍA Y EL AMBIENTE

En los tiempos modernos donde la globalización gana los titulares de los medios de
comunicación, parece mostrarnos una aparente falta de interés hacia la conservación
del medio ambiente, pero en realidad no es así, creo pertinente mencionar que una
verdadera integración económica, debe ir a la par de la implementación de medidas
regulatorias, que no restrinjan la actividad económica y que contribuyan a un desarrollo
sustentable, además de una gestión ambiental en donde se vea implicada la

6
En economía y disciplinas relacionadas, un costo de transacción es un costo incurrido para realizar un intercambio económico,
más precisamente una transacción en el mercado. Este costo no existe en el marco de una competencia perfecta. La idea de un
costo del sistema de precios fue evocada por primera vez por el economista Ronald Coase en su artículo „      

 (1937).
7
En economía y otras ciencias sociales, una externalidad es, parsimoniosamente hablando, "una interdependencia no
compensada." También se le puede calificar como un beneficio o un costo que no refleja su precio real en el mercado. Es decir, es
un costo o beneficio de una transacción económica que recae sobre gente que no participa en la transacción, que son el resultado
de la falta de derechos de propiedad.
ciudadanía, no como grupo de presión, sino como personas partícipes, al tomar
decisiones con consecuencias ambientales.

Es precisamente en este esquema general donde surge la Economía Ambiental, para


buscar, o por lo menos plantear, vías favorables que conlleven a la optimización en la
explotación de recursos naturales, cuyas reservas son escasas, pero con usos diversos
por los cuales hay que optar. La Economía Ambiental abarca el estudio de los
problemas ambientales empleando la visión y las herramientas de la Economía.
Actualmente, debe considerarse que la Economía se enfoca sobre las decisiones que
realizan los actores económicos sobre el uso de recursos escasos, como he
mencionado anteriormente.

Opino que, así como las grandes empresas establecen un costo social, deberían
comenzar a considerar un costo ambiental, en donde las actividades sean en beneficio
del medio ambiente, e inclusive complementarias. Es evidente, entonces, que las
empresas deben implementar medidas estratégicas que evalúen los efectos sociales,
tecnológicos, culturales, económicos y ecológicos, que permitan crear una cultura
ambiental, y olvidarse de ganancias que se obtengan a expensas del medio ambiente.

Tomando en cuenta que, no sólo las empresas son fuente de contaminación, los
consumidores individuales también contribuyen a esta problemática de una manera
potencial, un ciudadano no cuenta con un registro contable que le permita conocer la
utilidad o pérdida que le ocasiona contaminar, pero sí conoce las consecuencias de
hacerlo. La sociedad humana ha generado alteraciones en los ecosistemas desde
mucho antes de la Revolución Industrial; pero los problemas ambientales,
principalmente en la actualidad, difieren cualitativamente y en intensidad con respecto a
los del pasado.

Por todo ello se hace presente la necesidad de recurrir a un enfoque ecológico,


sociológico y económico, para poder desarrollar, de una forma realista y segura,
modelos de gestión de sistemas naturales que sean viables a medio y largo plazo. Así,
la Economía y la Ecología deben construir relaciones eficaces, que permitan crear una
visión compartida de una sociedad que busca mejorar su capital humano y construirlo,
sin comprometer la salud de los sistemas naturales del planeta del que forma parte.

'  


 
 

Tengo la idea clara de que, al igual que los análisis económicos, financieros,
institucionales y de ingeniería, la evaluación ambiental forma parte de la preparación de
un proyecto, y por tanto, es responsabilidad del prestatario. La evaluación ambiental se
encuentra íntimamente ligada a otros aspectos de la preparación del proyecto, lo cual
garantiza que las consideraciones ambientales cobren su debida importancia durante la
toma de decisiones, referentes a la selección, ubicación y diseño del proyecto, y así, su
realización no retrase indebidamente el procesamiento del proyecto.

Creo pertinente mencionar que la evaluación puede ser realizada desde dos puntos de
vista diferentes: a) La evaluación privada: Que a su vez tiene dos enfoques: la
evaluación económica, que asume que todo el proyecto se lleva a cabo con capital
propio y, por lo tanto, no toma en cuanta el problema financiero; y la evaluación
financiera, que diferencia el capital propio del prestado. b) La evaluación social: En
ésta, tanto los beneficios como los costos se valoran en términos de eficiencia. Para la
evaluación social nos interesa el flujo de recursos reales (de los bienes y servicios)
utilizados y producidos por el proyecto, así como el impacto que provocan.

2.1. ANÁLISIS DE COSTO-BENEFICIO: BENEFICIOS

Como contador público, y en pleno ejercicio de mi profesión en diferentes ámbitos, el


análisis de diferentes fuentes, me ha llevado a pensar que el concepto de eficiencia fue
definido como la relación existente entre los productos y los costos que implica la
ejecución de todo proyecto. Cuando los resultados y los costos del proyecto pueden
traducirse en unidades monetarias, su evaluación se realiza utilizando la técnica del
Análisis Costo-Beneficio. Así sucede en los proyectos económicos.
En cambio, en la mayor parte de los proyectos sociales, los impactos no siempre
pueden ser valorizados en términos de dinero, por lo que la técnica más adecuada es el
Análisis Costo-Efectividad, y su característica radica en comparar los costos con la
potencialidad de alcanzar más eficaz y eficientemente los objetivos, no expresables en
moneda o con la eficacia y eficiencia diferencial real, que las distintas formas de
implementación han mostrado en el logro de sus objetivos.

Por todo eso defino que la medida de la eficacia es, principalmente, el impacto, pero sin
duda, para determinar el impacto es necesario realizar una comparación para su futura
evaluación, es decir, para la identificación de los costos y beneficios del proyecto que
son pertinentes para su evaluación, es necesario definir una situación base, o situación
sin proyecto; la comparación de lo que sucede con proyecto contra lo que hubiera
sucedido sin dicho proyecto, lo cual definirá los costos y beneficios pertinentes del
mismo.

Con lo anterior, estimo que la evaluación económica tiene como objetivo el determinar
el impacto que el proyecto produce sobre la economía como un todo. La evaluación
social se diferencia de la anterior por incorporar explícitamente el problema
distribucional dentro de la evaluación. Esta integración de eficiencia con equidad se
traduce en una valoración de ³precios sociales´. En los proyectos sociales se ha
planteado la cuestión de quién afronta los costos, desde una perspectiva diferente.

Al respecto opino que son tres los posibles involucrados: el individuo, el gobierno local,
o la sociedad en su conjunto. A continuación explico, desde mi punto de vista, las tres
perspectivas: Desde el punto de vista individual, estimo la perspectiva que tiene el
beneficiario del proyecto. La perspectiva de la comunidad local plantea el problema de
la fuente de financiamiento. Respecto a la sociedad nacional, hay que considerar no
solo los costos y beneficios directos, sino también los de carácter secundario e
intangible. Aunado a ello, el Análisis de Costo Beneficio permite determinar los costos y
beneficios a tener en cuenta en cada una de las perspectivas consideradas
previamente.

La evaluación social de proyectos incluye además los costos y beneficios secundarios,


llamados también efectos indirectos o ³externalidades´, que ya hemos definido
anteriormente. Ellos se producen como consecuencia del proyecto, pero fuera del
ámbito en que éste se realiza. La existencia de externalidades hace que las
evaluaciones, social y privada, difieran entre sí. Así, hay externalidades, incluyendo las
negativas, tales como la contaminación producida al instalar una fábrica, y las
externalidades positivas, como las derivadas de un proyecto de reforestación.

A la par, infiero que existen muchos proyectos sociales, los cuales tienen efectos
directos o indirectos, y que modifican la esperanza de vida de la población que recibe
su impacto. Ello resulta evidente si se considera, por ejemplo, los proyectos de salud o
los alimentarios nutricionales. A pesar de la indudable relevancia del problema del costo
y valor de la vida humana, no existe consenso sobre cómo efectuar ese cálculo. Aun
cuando se reconozca que la evaluación asigna un valor a la vida humana, ello no
contesta a la pregunta de cuál debería ser ese valor.

Sin embargo, aún cuando los objetivos de un proyecto social no se puedan expresar en
unidades monetarias, en muchas ocasiones se busca valorarlos, para poder comparar
costos y beneficios. La valoración monetaria de los efectos cualitativos, orientados en
función de los precios de mercado, se persigue frecuentemente a través de: la
determinación de la medida en que el proyecto va a incrementar los ingresos de los
beneficiarios o la valoración de los bienes y servicios generados por el proyecto a
precios de mercado.

2.2. ANÁLISIS DE COSTO-BENEFICIO: COSTOS

Tengo entendido que el análisis costo-beneficio es una técnica importante dentro del
ámbito de la teoría de la decisión, el cual pretende determinar la conveniencia de un
proyecto, mediante la enumeración y valoración posterior en términos monetarios de
todos los costos y beneficios derivados, directa e indirectamente, de dicho proyecto.

De acuerdo a mi práctica profesional, he observado que este método se aplica a obras


sociales, proyectos colectivos o individuales, empresas privadas, planes de negocios,
etc., prestando atención a la importancia y cuantificación de sus consecuencias sociales
y/o económicas. Pienso que el análisis de costo-beneficio que se determina de forma
privada, también puede aplicarse en proyectos públicos, ya que éstos pretenden
determinar si los beneficios sociales de una actividad pública propuesta superan los
costos sociales. Estas decisiones de inversión pública usualmente implican gran
cantidad de gastos, y se espera que sus beneficios ocurran a lo largo de un período
extenso.

A continuación doy una idea clara de los factores a considerar para evaluar los
proyectos por medio de este análisis:

- Beneficios para el Usuario: Para iniciar el análisis costo-beneficio, se identifican


todos los beneficios del proyecto (resultados favorables) y sus perjuicios o
contrabeneficios (resultados no favorables) para el usuario. También debemos
considerar las consecuencias indirectas relacionadas con el proyecto, los
llamados efectos secundarios. Es decir:
Beneficios para el usuario (B) = beneficios ± perjuicios

- Costos del Patrocinador: Podemos determinar el costo para el patrocinador


identificando y clasificando los gastos necesarios y los ahorros (o ingresos) que
se obtendrán. Los costos del patrocinador deben incluir la inversión de capital y
los costos operativos anuales. Cualquier venta de productos o servicios que se
lleve acabo al concluir el proyecto generar ingresos; por ejemplo, las cuotas de
peaje en carreteras. Estos ingresos reducen los costos del patrocinador.
Entonces podemos calcular los costos del patrocinador combinando estos
elementos de costo:
Costos del patrocinador = Costos de capital + Costos de operación y
mantenimiento ± Ingresos

- Selección de una tasa de interés: En los análisis del sector público también hay
que seleccionar una tasa de interés, llamada tasa de actualización social, para
determinar los beneficios y costos equivalentes. En los proyectos públicos como
no tienen fines de lucro, se dice que debe de seleccionarse una tasa de
actualización social que refleje únicamente la tasa gubernamental vigente de
obtención de prestamos (CETES); y cuando se desarrollan proyectos con
contrapartidas privadas se debe considerar una combinación de la tasa de
actualización social y la tasa exigida por los inversionistas privados.

ð   



El Análisis de Política Ambiental puedo definirla como el proceso de asegurar que las
opciones de desarrollo bajo consideración sean ambientalmente adecuadas y
sustentables, y que toda consecuencia ambiental sea reconocida pronto en el ciclo del
proyecto y tomada en cuenta para el diseño del mismo. La evaluación ambiental
identifica maneras de mejorar ambientalmente los proyectos y minimizar o compensar
los impactos negativos, es decir, ayuda a prevenir a los diseñadores de un proyecto, las
agencias ejecutoras, y su personal, sobre la existencia de problemas; por lo que las
evaluaciones ambientales, tratan los problemas ambientales de manera oportuna y
práctica, reducen la necesidad de imponer limitaciones al proyecto, además ayudan a
evitar costos y demoras en la implementación, que pueden ser producidos por
problemas ambientales no anticipados.

Me parece relevante exponer que las evaluaciones ambientales también proporcionan


un mecanismo formal para la coordinación entre instituciones, para así tratar las
preocupaciones de los grupos afectados y organizaciones no gubernamentales locales.
Además, pueden desempeñar un papel central en el fortalecimiento de la capacidad
ambiental del país.

3.1. CRITERIOS PARA EVALUAR LAS POLÍTICAS AMBIENTALES

Son criterios específicos de evaluación de los diferentes tipos de políticas ambientales,


tanto centralizada como descentralizada que se pueden llevar a cabo. Existe un criterio
denominado el criterio de la eficiencia y el principio de la equidad. La eficiencia puedo
definirla como la minimización de los costos totales, incluyendo en este caso, los de
reducción de la contaminación y de los daños ambientales. El otro criterio de evaluación
utilizado en políticas ambientales es la equidad basado en la ética y el interés por la
distribución de los beneficios y los costos de las mejoras ambientales entre todos los
miembros de la sociedad.

Por tanto, visualizo que una política ambiental es tanto más eficiente cuanto más se
aproximen sus resultados al punto en que el costo marginal de reducción de emisiones
o de la calidad ambiental se iguala con el daño marginal. En algunas ocasiones no es
posible estimar los daños producidos por la degradación ambiental, en este caso se
utilizará una política de eficacia en costos, es decir, cuando obtenemos la máxima
mejora posible, aplicando este criterio, en la calidad ambiental en función de los
recursos existentes a partir del menor costo posible.

Cuando una política es eficiente, debe cumplir este criterio de efectividad en costo, pero
esta relación no tiene porque ser reciproca. Cuando los programas no son eficaces en
costo, los que administran y diseñan las políticas, llevan a establecer objetivos menos
restrictivos en términos de cantidades deseadas en las reducciones de emisiones. Una
política con costos excesivamente elevados, implicaría que la sociedad tendrá que fijar
reducciones de emisiones inferiores a lo que seria deseable. Podemos obtener como
conclusión que los recursos empleados para mejorar la calidad ambiental deberían ser
usados de tal manera que logren el mayor éxito posible.
3.2. POLÍTICAS DESCENTRALIZADAS

Entiendo por política centralizadora aquella que requiere la existencia de algún


organismo administrativo control, que se haga responsable de determinar las medidas
que hay que adoptar en cada caso.

Sin embargo, una política de tipo descentralizada obtiene sus resultados de la


interacción de las decisiones de muchos agentes individuales, cada uno de los cuales
hace básicamente su propia evaluación de la situación. Las políticas descentralizadas
(leyes de responsabilidad civil), son aquellas que esencialmente permiten que los
individuos involucrados en un problema de contaminación ambiental sean quienes lo
solucionen por sí mismos. Los enfoques descentralizados tienen una serie de ventajas
respecto de otras políticas. Se consideran pues dos circunstancias:

 Las partes involucradas (las que producen o sufren daños ambientales) tienen
grandes incentivos en buscar una solución al problema.
 Las partes involucradas son las que saben más acerca de los daños y los costos
de reducción, de modo que son los más calificados para hallar el equilibrio justo
entre ambos factores. Como consecuencia se tiende siempre a una solución
eficiente.

3.3. ESTRATEGIAS DE REGULACIÓN DIRECTA Y CONTROL: EL CASO DE LOS


ESTÁNDARES ESTRATEGIAS BASADAS EN INCENTIVOS: IMPUESTOS Y
SUBSIDIOS A LAS EMISIONES

Una regulación directa y control en las políticas públicas, es aquella en que, con el fin
de generar un comportamiento considerado socialmente deseable, las autoridades
públicas decretan por ley el comportamiento y hacen uso de mecanismos de ejecución
de leyes útiles para hacer que las personas se ciñan a la norma.
8
En las políticas ambientales, depende de diversos estándares para generar
mejoramientos en la calidad ambiental. De tal forma que podemos enunciar los
siguientes tipos de estándares:

 ESTÁNDARES AMBIENTALES: La calidad ambiental del entorno se refiere a las


dimensiones cualitativas del entorno circundante; como el aire y el agua de una
ciudad. Un estándar ambiental es un nivel nunca sobrepasable por determinado
contaminante en el entorno ambiental. No pueden ejecutarse directamente, se
puede obligar al cumplimiento de las diversas emisiones que conducen a los
niveles de calidad ambiental.

 ESTÁNDARES DE EMISIONES: Son niveles no superables aplicados


directamente a las cantidades de emisiones que provienen de las fuentes de
contaminación. Se expresan en términos de la cantidad de material por
determinada unidad de tiempo, por ejemplo, gramos por minuto. Las corrientes
continuas de emisiones pueden someterse a estándares para tasas instantáneas
de flujo.

 ESTÁNDARES TECNOLÓGICOS: Se trata de otro tipo de estándar que no


especifican un resultado final, pero determinan la tecnología, técnicas o prácticas
que deben adoptar los contaminadores potenciales. El requerimiento de que los
automóviles deben estar equipados con convertidores catalíticos es un estándar
tecnológico. Si a todas las empresas de energía eléctrica se les exigiera la
instalación de extractores de impurezas en sus chimeneas de escapa para
reducir las emisiones de dióxido de sulfuro, estos serían estándares
tecnológicos, puesto que las autoridades centrales especifican un tipo particular
de tecnología.

8
Un estándar solo es un nivel decretado de desempeño que se hace aplicar mediante la ley, como la tasa máxima de emisiones
legalmente permitida. El concepto consiste simplemente en aprobar una norma que haga ilegal esa actividad; después se remite a
la autoridad competente para que ejecuten ese mandato. Son sencillos y directos, establecen objetivos claramente específicos;
recurren al sentido de todas las personas que desean enfrentar de forma decidida y directa la contaminación ambiental y lograr su
reducción, por lo que parecen compatibles con nuestro sentido ético.
A continuación explico la diferencia entre estándares ambientales y de emisiones:
Establecer estándares emisiones de cierto nivel no lleva a cumplir con un conjunto de
estándares ambientales. Entre las emisiones y la calidad ambiental se encuentra la
naturaleza, en particular los fenómenos metereológicos e hidrológicos que vincula a
estos dos factores. La calidad ambiental del agua en diversos puntos, ubicados a lo
largo de la corriente depende de la cantidad de emisiones al igual que de las
condiciones hidrológicas del río: su tasa de flujo, temperatura, condiciones naturales de
reaireación otros factores.

Por otro lado, el vínculo entre las emisiones y la calidad ambiental también puede verse
considerablemente afectado por las decisiones de los humanos, como el caso de los
automóviles. Por ejemplo, un programa de contaminación del aire por fuentes móviles
establece estándares de emisiones para los nuevos modelos en términos de emisiones
por kilómtero recorrido. Pero al no existir forma de controlar bien ni la cantidad de
automóviles en las carretera, ni el total de hors recorridas, la cantidad agregada se
contaminantes en el aire no se controla de forma directa.

Considero que los estándares de emisiones se refrieren a los resultados finales que se
esperan lograr de los contaminadores que son regulados, establece una restricción
según un criterio de desempeño y luego permite que las personas escojan los mejores
medios para lograrlo. Un estándar tecnológico en realidad impone ciertas decisiones y
técnicas que se deben utilizar, como equipos o prácticas operativas particulares que
deben utilizar los contaminadores. En nuestro país, hasta no hace mucho, la gente
utilizaba el medio ambiente como vertedero de residuos a un coste prácticamente nulo,
no tenía demasiados incentivos para reflexionar sobre las repercusiones que sus
acciones tenían en el entorno y para economizar el uso de los recursos ambientales.

El objetivo de las políticas de los incentivos es cambiar esta situación. Existen


básicamente dos tipos de políticas de incentivos, y que más delante desarrollaremos:
 Las de impuestos y subsidios.
 Las de permisos de emisión negociables.
Así pues el enfoque más directo para controlar las emisiones de un residuo en
particular consiste en hacer que una entidad pública ofrezca un incentivo financiero
para modificar estas emisiones. Esto se puede realizar de dos maneras aplicando un
impuesto a cada unidad de emisiones o suministrando un subsidio por cada unidad de
emisiones que reduzca la fuente.

LOS IMPUESTOS SOBRE LAS EMISIONES: Este tipo de sistemas se dirigen a quien
contamina, y consiste en fijar un impuesto sobre las emisiones, que equivale a obligar a
las empresas contaminadoras a pagar por los servicios ambientales (transporte,
dilución, descomposición química, etc.), igual que lo hacen cuando emplean otros
factores productivos. Y del mismo modo que las empresas siempre tienen un incentivo
para economizar el uso de la mano de obra y otros factores convencionales escasos,
una vez establecido el impuesto lo tendrán también para hacer un uso razonable de los
servicios ambientales.

Esto se realiza, en un principio, de cualquier forma que parezca razonable. Se permite a


los contaminadores que determinen libremente de qué manera pueden reducir mejor las
emisiones, entra en juego su propia energía, creatividad y deseo de minimizar costos
para hallar la forma menos gravosa de reducir las emisiones. Asimismo, si en lugar de
establecer un impuesto, se establece un estándar de emisiones, el desembolso de la
empresa es menor que si se establece el impuesto.

En ambos casos, el costo total de reducción es el mismo, pero mientras que en el


primer sistema la empresa puede utilizar gratuitamente el medio ambiente, en el
segundo debe pagar por sus servicios. En este tipo de actuaciones basada en las
presiones competitivas conducirán a que las empresas realicen lo que esté a su
alcance para minimizar sus costos. Así cuando hay competencia en la industria sujeta a
un impuesto a las emisiones, las empresas reducirán sus emisiones en respuesta al
gravamen. Sin embargo, por la misma razón se debe reconocer que si la competencia
es débil, las empresas pueden no responder de esta manera. Desde esta perspectiva la
empresa contaminante prefiere los estándares en vez de los impuestos a las emisiones,
Sin embargo para la sociedad a menudo preferirá los impuestos a los estándares.

LA POLÍTICA DE SUBVENCIONES: SUBSIDIOS A LAS REDUCCIONES:


Básicamente, se puede lograr el mismo efecto si, en vez de un impuesto, se aplica un
subsidio a la reducción de emisiones, en cuyo caso lo que hace la autoridad es pagar al
contaminador una determinada cantidad por cada tonelada de emisiones que logre
reducir a partir de cierto umbral. Sin embargo la diferencia es que, mientras con el
impuesto la empresa tiene costos, con el subsidio tiene un ingreso. Así, la posición
financiera de la empresa es muy diferente. En efecto, obtendrá mayores ganancias,
después de la imposición del subsidiado, y esto puede tener el efecto de hacer más
atractiva esta industria para nuevas empresas.

La responsabilidad de cierto comportamiento consiste en asumir cualquier


consecuencia desfavorable que resulte de dicho comportamiento, es decir rendir
cuentas de todo perjuicio que resulte de él. Así pues, una posible solución a los
problemas ambientales, se basa en la responsabilidad civil, declarando a los
contaminadores responsables de los daños que ocasionen.

El objetivo de esta política no es garantizar que los afectados sean indemnizados una
vez ocurrido el daño, sino lograr que los posibles contaminadores sean más cuidadosos
al saber que tendrán que rendir cuentas por los daños ambientales que causen y tomen
conciencia de sus efectos externos. De esta forma, el efecto inmediato de esta ley, será
que se internalizar los daños ambientales y convertirlos en costos internos para los
contaminadores.

A partir de la entrada en vigor de la ley de responsabilidad civil se obliga a la industria


contaminante a apagar a los damnificados una indemnización igual al perjuicio
ocasionado. De esta forma, el efecto inmediato de esta ley será que los daños, que
antes eran externos, pasan a representar costos internos para los contaminadores, por
lo que a partir de ese momento, los tendrán en cuenta a la hora de decidir sus niveles
de emisión. Por tanto, al menos en teoría, un sistema basado en la responsabilidad
civil, podría llevar las emisiones de la empresa hasta el nivel de emisión eficiente.

Desde esta persepctiva, supongo que este enfoque parece resolver, tanto el problema
de los incentivos, es decir, conseguir que las empresas tengan en cuenta los daños
ambientales que puedan causar, como el problema de la compensación a los
damnificados, pero en realidad esto dependerá del proceso legal, por el que se
establece la responsabilidad y la cuantía de las indemnizaciones en cada país. Así por
ejemplo en Estados Unidos y en otros países de tradiciones jurídicas similares, es
probable que estas cuestiones se solventen mediante procesos basados en los
principios del derecho consuetudinario9, aunque también podrían resolverse a través de
normas aprobadas por cuerpos legislativos competentes.

Los sistemas de compensación basados en el derecho consuetudinario funcionan por


medio de juicios donde demandantes y demandados presentan sus acusaciones y sus
descargos. Normalmente en ellos es un jurado quien determina los hechos y la cuantía
de la indemnización con que se debe pagar a los damnificados en proporción con los
daños causados. Existen distintas doctrinas legales sobre daños y responsabilidades
que han ido surgiendo con el tiempo. La legislación distingue entre responsabilidad
(cuando el causante de los daños es responsable de ellos independientemente de las
circunstancias) y negligencia (cuando el causante es responsable únicamente cuando
no ha tomado las precauciones pertinentes).

Así por ejemplo, en el caso de una empresa que vierte materiales peligrosos al medio
ambiente, si se considera responsable de los daños ocasionados por sus residuos
deberá compensar a los damnificados por los daños que resulten de sus vertidos
independientemente de las precauciones que haya adoptado y si se considera

9
 , también llamado usos y costumbres, es una fuente del derecho. Son normas jurídicas que se
desprenden de hechos que se han producido repetidamente, en el tiempo, en un territorio concreto. Tienen fuerza vinculante y se
recurre a él cuando no existe ley (o norma jurídica escrita) aplicable a un hecho. Conceptualmente es un término opuesto al
de derecho escrito, pero con dos efectos jurídicos: su uso repetitivo y generalizado y la conciencia de obligatoriedad.
negligente, sólo se considera responsable a la empresa si se abstuvo de tomar las
medidas adecuadas para no contaminar al medio.

En un sistema de responsabilidad civil, los factores determinantes son dos: sobre quien
cae el peso de la prueba y qué criterios debe satisfacer la prueba para ser considerada.
Esto supone dos pasos fundamentales, ambos pasos muy difíciles de determinar, ya
que los criterios de prueba que se aplican en los tribunales son muy estrictos. En primer
lugar demostrar que el material contaminante fue la causa directa de los daños, y en
segundo lugar demostrar que el acusado fue realmente quien originó la contaminación:
En estos casos si el damnificado no puede atribuir la emisión de un contaminante a un
acusado concreto seguramente no logrará una indemnización.

El concepto de costos de transacción, como se han definido anteriormente, es aplicable


a los sistemas de responsabilidad civil, en este caso los costos de transacción
comprenden todos los gastos legales derivados de la búsqueda de pruebas, la
presentación de la demanda, la contestación a las alegaciones de los demandados, la
determinación de los daños y el cobro de la indemnización. Si el juicio es relativamente
sencillo, con una parte de cada lado y un daño claro, el sistema de responsabilidad civil
puede funcionar con un mínimo de costos de transacción y determinar un nivel de
emisión aproximadamente igual al eficiente. Sin embargo la mayoría de los juicios
entrañan complejas cuestiones científicas o hay más de dos partes involucradas por lo
que será muy difícil encontrar soluciones que satisfagan a tos y los costes de
transacción serán muy elevados. Así los sistemas de responsabilidad privada basados
en el derecho consuetudinario identifican el nivel de emisión eficiente cuando hay
relativamente pocos implicados o los daños son fáciles de medir.

3.4. ESTRATEGIAS BASADAS EN INCENTIVOS: PERMISOS NEGOCIABLES DE


DESCARGAS

Cito nuevamente el Teorema de Coase: "Los derechos de propiedad (individuales o en


grupo) permite crear las condiciones necesarias para que un proceso de negociación
descentralizado produzca un nivel eficiente de calidad ambiental". Puntualizo la ventaja
de este teorema el cual se resume a que, las partes implicadas son las que mejor
conocen los costos de reducción y daños, por lo que buscarán el punto óptimo. Como
es un sistema descentralizado ningún organismo administrativo central toma decisiones
con intereses políticos en lugar de puramente económicos. Con esto se ha llegado a
que se recomiende la propiedad privada de los recursos naturales y ambientales para
garantizar un uso eficiente de éstos.

Para que el sistema funcione correctamente y se alcance un nivel de contaminación


ambiental próximo al eficiente se deben dar las siguientes condiciones: Los derechos
de propiedad deben estar bien definidos, ser ejercitables y enajenables, debe existir en
sistema eficiente y competitivo que permita a las partes negociar y llegar a un acuerdo
sobre el uso de los derechos de propiedad y; debe haber un conjunto completo de
mercados que permita al propietario de un activo ambiental extraer de él todo el valor
social que pueda derivarse de su uso.

El uso eficiente de una propiedad depende de las negociaciones y acuerdos de las


empresas. En ciertos casos los costos de negociación y los de transacción (los
derivados de la supervisión del cumplimiento de los acuerdos), son los bastante bajos,
como para permitir a las empresas negociar sobre el nivel eficiente de emisión. Por
ejemplo, si en lugar de dos empresas tenemos una empresa que contamina un lago de
una población de varios miles de habitantes, que utiliza este lago como suministro de
agua y zona de ocio, en este caso, la empresa contaminante tiene que negociar con el
representante de la población, pero el valor de la mejora de la calidad del agua que
tiene para cada habitante es mínima, comparado con el valor que tiene para la empresa
contaminar el lago. Pero para los habitantes la calidad del agua es un bien público y
esto aumenta mucho los costos de transacción para alcanzar un acuerdo entre las
partes.

Uno de los principales problemas que tienen los bienes ambientales es que no existe un
mercado plenamente desarrollado ni definido, que establezca un valor apropiado de
ellos. Estos activos ambientales son bienes públicos y las empresas u organizaciones
interesadas en conservar su valor ecológico, sólo disponen del dinero percibido de las
aportaciones voluntarias, para competir con otras empresas de carácter no ecológico
por la compra de bienes ambientales, así es que, el propietario del activo ambiental
recibirá más dinero y ganancias de actividades, como el turismo y terrenos destinados a
actividades lúdicas, que el recibido si destina su propiedad a la conservación del medio
natural.

¢  


 

Dentro de nuestro Sistema Jurídico mexicano, se tiene bien sabido que la Constitución
Política de los Estados Unidos Mexicanos es la Ley Suprema de la Unión, razón por la
cual se citarán, cuando sea el caso, las disposiciones que de ella emanan en la materia,
ya que constituyen las bases constitucionales en las que se construye el sistema
jurídico para el manejo y eliminación ambientalmente adecuados a la contaminación de
aguas, del aire, así como de las sustancias tóxicas o peligrosas.

La Constitución Política, que delimita los ámbitos de las jurisdicciones entre la


Federación y los Estados, específicamente, señala al respecto que: "Las facultades que
no están expresamente concedidas por esta Constitución a los funcionarios federales,
se entienden reservadas a los Estados". Los Estados, a su vez, están constituidos por
municipios considerados como la base del sistema político del país, los cuales tienen
potestad para participar en asuntos relativos a la gestión ambiental y establecimiento de
normas jurídicas de carácter general y abstracto sobre la materia. En el tema que nos
ocupa es preciso, sin embargo, estudiar con detenimiento en que medida los Estados y
los Municipios tienen facultades que les permitan asumir la autoridad necesaria para el
logro de los objetivos que se persiguen en relación a dichos asuntos ambientales.

Lo anterior tiene una importancia fundamental, porque a través de las disposiciones


anteriores, se eleva a un rango constitucional el derecho a un ambiente sano, puesto
que no puede concebirse la protección de la salud en un ambiente deteriorado.
Además, al incluirse en la Exposición de Motivos que fundamentan el derecho a la
protección a la salud, que la responsabilidad al respecto no atañe solo al Estado sino "a
todos y cada uno de los mexicanos", se enmarca jurídicamente la participación de todos
los sectores de la sociedad en las acciones para prevenir, controlar y reducir riesgos
para la salud y el ambiente. La participación ciudadana también está enmarcada en la
Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección del Ambiente10, específicamente al
plantear que: "Se concede acción popular para denunciar ante la autoridad competente
todo hecho que contamine el medio ambiente".

Es importante rescatar que el sistema de aprobación de leyes federales en México tiene


una serie de procedimientos que dependen del rango que ocupan; se puede decir que
como principio general, toda norma puede ser derogada o reformada con el mismo
procedimiento que le dio origen. Este principio protege el régimen de legalidad del
sistema jurídico mexicano y asegura su permanencia y debido cumplimiento.

Así pues, para el caso de la emisión de leyes estatales, si se trata de la Constitución


local, cada localidad establece su sistema de reforma y, para la emisión de leyes
estatales es el Congreso del Estado, quien puede emitirlas en ejercicio de su facultad
legislativa. A nivel municipal, quien emite los bandos y reglamentos municipales es el
Ayuntamiento. De esta manera, sintetizo que, en cuanto a su estructura, el Sistema
Jurídico en México es especial, ya que se conforma por una serie de ordenamientos
que se establecen de acuerdo con el siguiente esquema:

 Las normas constitucionales: La expedición de las Normas Constitucionales, es


decir de las reformas al texto de nuestra Carta Magna, se realiza conforme al
procedimiento que la misma señala, siendo necesaria para cualquier
modificación, la reunión del Congreso de la Unión, que se amplía con las
Legislaturas de los Estados para su aprobación.

10
Expedida el 28 de enero de 1988
 Leyes: Las reformas a las leyes reglamentarias de la Constitución o a las
especiales, que se llaman secundarias, tienen que seguir el proceso legislativo,
que comienza con el envío de la iniciativa a la Cámara de Origen, una vez
aprobada pasa a la Cámara Revisora y después de su aprobación, al Presidente
de la República para que ejerza su derecho de veto, y se proceda a su
promulgación y publicación. Las Cámaras fungen regularmente como iniciadoras
y la denominada de Origen y la Revisora, determinan la forma como se envía la
iniciativa y el tema, pudiendo en ambos casos, ser tanto la Cámara de
Diputados, como la de los Senadores.

 Reglamentos: Los reglamentos son expedidos por el Ejecutivo en ejercicio de la


facultad reglamentaria, que para algunos constitucionalistas es una facultad
legislativa que tiene el ejecutivo, como plantea el esquema. Existen reglamentos
de las leyes expedidas por el congreso y reglamentos que no necesariamente
tienen una referencia legal directa, y que son denominados reglamentos
autónomos, como es el caso de los expedidos para la jurisdicción del Distrito
Federal, en el que no existe Congreso local.

 Normas reglamentarias: A partir del uno de julio de 1992, con la expedición de la


nueva Ley Federal de Metrología y Normalización, las normas técnicas
ecológicas (NTEs), que han sido expedidas por la Secretaría de Desarrollo
Urbano y Ecología (hoy Secretaría de Desarrollo Social), así como las normas
técnicas sanitarias (NTSs), expedidas por la Secretaría de Salud, dejarán de
estar vigentes en 15 meses y se transformarán en Normas Oficiales Mexicanas
(NOMs), siempre y cuando sean sustentadas en un análisis de costo-beneficio.
La expedición de tales normas requerirá, según sea el caso: su fundamentación
científico-técnica y/o de protección del consumidor, la especificación de los
beneficios potenciales de la norma, incluyendo los intangibles y no cuantificables
monetariamente, la identificación de los beneficiarios de la norma, la
especificación de sus costos potenciales, comprendidos los efectos adversos
posibles que no puedan ser cuantificados en términos monetarios, así como la
justificación del porqué se considera que la NOM constituye la mejor alternativa
posible para alcanzar el objetivo que se persigue. Esto último implica que se
consideren las otras alternativas para el logro de tal objetivo.

De acuerdo al marco de referencia anteriormente expuesto, y respecto a la legislación


mexicana, con el propósito de hacer congruentes todas las disposiciones legales que
rigen la materia ecológica, el 28 de enero de 1988, se publicó la Ley General del
Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente11. En esta ley, que entró en vigor en 1
de marzo del mismo año, se reconoce que un desarrollo sostenido y ambientalmente
sano sólo puede lograrse con la intervención de todos los niveles del gobierno, y que la
prevención es el medio más eficaz para preservar el equilibrio de los escosistemas.
Debido a que la citada ley es bastante amplia, a continuación me permito resumir los
puntos principales de dicha ley:

Hace mención, entre otras dispociones, del carácter reglamentario de la ley respecto a
las disposiciones constitucionales, define el sistema de concurrencia entre los tres
niveles de gobierno y dispone la descentralización, a las entidades federativas y a los
municipios, de las diversas facultades en materia de contaminación, áreas rurales
protegidas, ambiental y ordenamiento ecológico, delimitando sus ámbitos de
competencia. Precisa las atribuciones de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Ecología
y la coordinación de las dependencias y entidades de la Administración Pública Federal.

Del mismo modo, establece los principios de la política ecológica, precisa los
instrumentos que deberán aplicarse para su ejecución, como son la planeación y
regulación de los asentamientos humanos, el ordenamiento y la evolución del impacto
ambiental, las normas técnicas y la investigación y educación ecológicas. Señala las
áreas naturales del territorio podrán ser materia de protección, mediante la imposición
de limitaciones para su uso y aprovechamiento racionales. Precisa las normas a las
que se sujetará su establecimiento, conservación, administración, desarrollo y
vigilancia. Dentro de la las áreas naturales protegidas, considera las que tienen como

11
http://bibliotecadigital.ilce.edu.mx/sites/ciencia/volumen2/ciencia3/097/htm/sec_11.htm
propósito la preservación de suelos y aguas y asegura que su establecimiento y
administración se lleve a cabo conforme a lo dispuesto por las Leyes Forestal y Federal
de Aguas. De la misma forma, hace mención a la prevención y el control de la
contaminación de la atmósfera, del agua, de los ecosistemas acuáticos del suelo.

Me llama la atención, por ejemplo, como dentro del quinto título de la mencionada ley,
que expresa como propósito, establecer las bases para que la sociedad participe, de
manera permenente, en las acciones ecológicas, así como la celebración de convenios
de concertación y la presentación de opiniones y propuestas en el seno de la Comisión
Nacional de Ecología, lo cual me parece relevante, por tratar de articular la participación
de la población en dichas disposiciones, ya que considero que el cumplimiento de las
disposiciones anteriormente mencionadas, es responsabilidad, no sólo del sistema,
sino de todas las partes que lo conforman, y por supuesto, el participante activo, que es
de quien se originan las actividades en cuestión y en quien recaen sus efectos.

4.1. POLÍTICA FEDERAL PARA EL CONTROL DE LA CONTAMINACIÓN DE AGUAS

En México, existen las Normas Oficiales Mexicanas (NOM) para el control de la


contaminación del agua. La elaboración de las NOM, se realiza de conformidad con lo
establecido en la Ley Federal de Metrología y Normalización. Esta instancia define a la
NOM como ³una regulación técnica de observancia obligatoria expedida por lasa
dependencias de la administración pública federal´12.

Para la elaboración de las NOMs en materia de protección ambiental, la Secretaría de


Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAP) ha constituido el Comité
Consultivo Nacional de Normalización para la Protección Ambiental, integrado por
dependencias del sector público, industrial y académico. Este Comité, para sus tareas
de normalización cuenta con seis Subcomités. El Subcomité No. 5 es el que consulta la
Calidad del Agua Residual. Estos Subcomités son los encargados de discutir los

12
Ley Federal de Metrología y Normalización, publicada en el Diario Oficial de la Federación el 1º de julio de 1992.
anteproyectos de normas, que elabora el Instituto Nacional de Ecología (INE), que son
sometidos a consideración del Comité Consultivo.

Una vez publicados como proyectos, las NOMs están en consulta pública durante 60
días. En la sección de NOMs en elaboración se señalan aquellas que actualmente
están en esta fase. Para que una observación del público sea válida deberá remitirse
por escruto a la Secretaría Técnica del Comité Consultivo. En la elaboración de cada
proyecto de NOM, además de los aspectos técnicos, se evalúan los aspectos
económicos, a través de un análisis de costos y beneficios, así como de otras
alternativas regulatorias que podrían ser utilizadas para lograr el mismo objetivo.13
Dentro de las NOM se citan las siguientes: 14

 NOM-001-ECOL-1996: Establece los límites máximos permisibles de


contaminantes en las descargas de agua residuales en aguas y Bienes
Nacionales.
 NOM-002-ECOL-1996: Establece los límites máximos permisibles de
contaminantes en las descargas de aguas Residuales a los sistemas de
alcantarillado urbano y municipal.
 NOM-003-ECOL-1996: Establece los límites máximos permisibles de
contaminantes para las aguas residuales tratadas que se reusen en servicios al
público.

4.2. POLÍTICA FEDERAL PARA EL CONTROL DE LA CONTAMINACIÓN DEL AIRE

En el marco del Día Mundial de la Calidad del Aire15, celebrado el 8 de agosto, se ha


mencionado que en la década de los 80, el Distrito Federal ocupaba el primer lugar
entre las ciudades más contaminadas del mundo, a pesar de los grandes esfuerzos y
programas como la verificación vehicular y el hoy no circula. Sin embargo, ante la falta

13
Página del Instituto Nacional de Ecología. http://www.ine.gob.mx
14
LEY FEDERAL SOBRE METROLOGÍA Y NORMALIZACIÓN Fecha de publicación en Diario Oficial, Enero 6, 1997. Última
revisión: 30 abril de 2009.
15
http://saladeprensa.semarnat.gob.mx/
de políticas nacionales estrictas, que regulen la calidad del aire en todo el país, el
crecimiento poblacional, el desarrollo industrial y el aumento en la flota vehicular, otras
ciudades como Guadalajara, Monterrey y Toluca han visto mermado el aire que
respiran sus habitantes.

Basta consultar las cifras de la Organización Mundial de la Salud y estudios de los


institutos nacionales de Ecología y de Salud Pública, los cuales señalan, que en la
Ciudad de México, Monterrey, Guadalajara y Toluca, 26 millones de habitantes están
expuestos frecuentemente a la contaminación en niveles nocivos, lo que ocasiona que
miles de personas mueran cada año por complicaciones respiratorias.

El panorama no es nada alentador. Pero México, mediante la Secretaría de Medio


Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) asegura que entre los logros más
importantes destaca el Programa para Mejorar la Calidad del Aire (Proaire), vigente en
Toluca, Puebla, Salamanca, León, Monterrey, Cuernavaca, Durango, Ciudad Juárez y
la Zona Metropolitana del Valle de México.

Dentro de este programa se encuentran medidas como la verificación vehicular. En el


caso de la ciudad de México, se instauró el hoy no circula, que ahora también se aplica
los sábados. Sin embargo, hay temas pendientes en la agenda, entre ellos, homologar
la verificación a nivel nacional, no sólo a los autos particulares, también al transporte de
carga, que contribuye con el mayor porcentaje de Gases de Efecto Invernadero16. El
gobierno del Distrito Federal ha criticado la falta de una política nacional estricta que
regule la calidad del aire, éste fue su argumento para que en conjunto con el Estado de
México, en la zona metropolitana, por ejemplo, se instrumentara la restricción de la
circulación vehicular.

16
Martínez, Edith. La situación de la calidad del aire en México. Portal Mexico Haz Algo. Contaminación, publicación semanal. 11 de
agosto de 2010.
Contemplo que tanto ésta, como otras situaciones situaciones, motivaron la
preocupación de autoridades y científicos por conocer los riesgos sanitarios asociados
con la exposición a contaminantes atmosféricos. Así se inician los primeros esfuerzos
por conocer las concentraciones de los contaminantes atmosféricos de la Ciudad de
México, dando lugar a un proceso histórico en el que han intervenido numerosas
instituciones y que continúa en la actualidad con la integración del Sistema de
Monitoreo Atmosférico (SIMAT).

A continuación menciono a grandes rasgos, algunos de los eventos de mayor


relevancia de la útlima década, en la historia del monitoreo de la calidad del aire en la
Ciudad de México17.

 La Secretaría de Medio Ambiente del Gobierno del Distrito Federal, a través de la


Dirección General de Gestión Ambiental del Aire, inicia la Integración del Sistema
de Monitoreo Atmosférico de la Ciudad de México (SIMAT), con la finalidad de
unificar los esfuerzos destinados a la medición de contaminantes atmosféricos y
parámetros meteorológicos.

 La creación del SIMAT incorpora una visión de mejora continua de los productos
y servicios que ofrece, por medio de la evaluación de su representatividad, la
medición de partículas menores a 2.5 micrómetros e hidrocarburos, el acceso
a bases de datos y la difusión de la información por medio de publicaciones e
indicadores ambientales. Sus procesos internos están debidamente
documentados y disponibles, conforme los requerimientos de los sistemas de
administración de la calidad. La creación de un Consejo Asesor supervisa la
operación del SIMAT y evalúa las propuestas técnicas para su mejora, evita la
toma de decisiones unilaterales en la operación y administración de este
sistema, lo que garantiza la confiabilidad de la información que proporciona.

17
http://www.sma.df.gob.mx/simat. istema de moniteoreo atmosférico de la iudad de éxico, ecretaría del
edio mbiente.
 El SIMAT inicia la medición de radiación fotosintéticamente activa en 1 estación,
esta información es valiosa en estudios del clima y aprovechamiento de la
energía solar.

 Se inicia la recepción de datos de partículas menores a 2.5 micrómetros,


después de la conclusión del proyecto para el diseño de una red de monitoreo.

 Se realizó una campaña para la medición de Compuestos Orgánicos Volátiles


(COV¶s) de septiembre de 2005 a septiembre de 2006, con la colaboración del
Centro Nacional de Investigación y Capacitación Ambiental (CENICA) y la
Universidad Autónoma Metropolitana Plantel Iztapalapa (UAM-I).

 En este año se reactiva el Laboratorio de Análisis Ambiental con la instalación y


puesta en marcha de los Laboratorios de Gravimetría y Medición Atómica.

 Inicia la operación de tres estaciones nuevas: Iztacalco, Chalco y Acolman. En


2009 Se retira la estación Metro Insurgentes (MIN), e niciará el monitoreo
continuo de los compuestos tóxicos benceno, tolueno y xileno en la estación
Merced.

Todo lo anterior me da el panorama para afirmar que en realidad, en nuestro país


existen actualmente programas en materia ambiental con respecto a la cvontaminación
del aire, pero desafortunadamente, el impacto que la sociedad ha percibido como
consecuencia de las actividades económicas ha sido mucho mayor. Considero
necesario no implementar más políticas, pero sí darle un adecuado seguimiento, que en
realidad asegure la buena gestión en materia ambiental.

En la globalización, la capacidad de decisión de los gobiernos nacionales tiende a estar


acotada por límites más estrechos. Los estados han tenido que elevar el nivel de
integración política con otros estados, abriendo camino a la creación de instituciones
internacionales que establecen reglas de acción para la colectividad mundial. La
globalización genera y enmarca problemas que requieren soluciones a nivel mundial o
regional; redefine la relación entre el contexto mundial y el estado-nación. Estos
problemas trascienden las posibilidades de un solo país.

Los elementos políticos como la consolidación de una democracia gobernable, la


capacidad de las agencias burocráticas, la ampliación de los mecanismos de
representación y la pluralidad de las instancias decisorias, favorecen la construcción de
escenarios de decisión pública, que sean amplios y eficientes. Además, permiten una
mayor incorporación social, aportan mayor justicia, apuntalan la legitimidad del sistema,
obligan a los gobernantes a dar cuenta de sus actos, y al mismo tiempo, a responder en
forma más efectiva a los requerimientos de la población. Esos resultados suelen
condicionar de manera positiva las posibilidades de consolidar una estrategia de
desarrollo racional, equitativo y sustentable. Las instancias netamente políticas pueden
servir para revertir mecanismos irracionales de producción colectiva, sobre todo en el
ámbito económico.

Es necesario que el gobierno, las agrupaciones empresariales y sindicales cobren


conciencia también de la gran responsabilidad en el largo plazo, que la nación
mexicana y la sociedad civil, cobremos conciencia del nuestros recursos naturales, de
los asentamientos humanos, del sistema político, económico, social, e institucional que
nos rodea como país, en el contexto de la globalización económica y financiera.

En los últimos veinte años, México ha vivido un proceso de transformación política en el


que destacan: el proceso de transformación política, la transformación del sistema
electoral y la visión política de la prospectiva mexicana, entre otras. Tanto en México,
como en otras partes, se requerirá la revaloración de la importancia de las personas.
Será preciso también conformar de manera más precisa y equitativa el dominio de las
comunidades locales sobre sus recursos, teniendo en cuenta tradiciones y a la vez
innovaciones tecnológicas.
De acuerdo a todo lo anteriormente expuesto, es evidente que con base en la presente
investigación, nos forma un claro marco de referencia para determinar lo que la Política
Ambiental de nuestro país pretende, por medio de la práctica de la Economía y la
Economía Ambiental, que se rusume, desde mi punto de vista, en el camino hacia un
desarrollo sustentable y equitativo, que será, sin duda largo, pero dependerá en mucho
de lo que la propia sociedad civil sea capaz de hacer. En conjunto, desarrollo cultural y
desarrollo sustentable y equitativo habrán de combinarse para lograr los objetivos a
largo plazo que, en una nueva etapa de humanidad globalizante, la sociedad mexicana
quiera para su propio bienestar.

You might also like