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Es muy importante que el agua que tomamos esté purificada. Debido a que los microbios son
invisibles a simple vista, el agua podría estar completamente cristalina y aun así, podría estar
contaminada. Ya sea por motivos de un desastre natural o porque te encuentres en algún lugar
en el que no haya agua potable, es bueno que sepas cómo purificar el agua. Esta guía te
enseña cómo hacerlo.
1.
Limpia los contenedores en los que vas a almacenar el agua. Usa jabón lavatrastos y agua.
Enjuaga muy bien. Después llena los contenedores con una solución de agua con cloro. La
solución debe ser de una cucharada de cloro por cada litro de agua. Asegúrate de que toda
la superficie interior de los recipientes esté en contacto con esta solución por al menos 15
segundos.
o No uses contenedores que hayan tenido leche o jugo, ya que las proteínas de
la leche o el azúcar del jugo aceleran el crecimiento de las bacterias en el agua que se va
a almacenar.
2. Filtra el agua con un pañuelo. Luego deja que se asiente por unos 30 minutos. Este
proceso de filtrado y sedimentación es especialmente importante si vas a estar utilizando
purificación química, ya que los desinfectantes son menos eficaces en el agua turbia.
3. Acelera la limpieza del agua. Una forma de hacerlo es añadir un poco de sulfato de
aluminio. Esto hace que las impurezas se coagulen, por lo que las partículas se depositan en
el fondo del recipiente.
o Desinfecta: La desinfección con cloro mata a algunos, pero no todos, los tipos
de microbios que causan enfermedades. Puedes usar blanqueador a base de cloro, pero
no uses blanqueadores perfumados o con color, o blanqueadores que vienen mezclados
con otro tipo de limpiadores. Agrega 2 gotas de blanqueador por litro de agua, mezcla bien
y deja reposar durante 30 minutos antes de usarla. Si después de los 30 minutos de
reposo en agua no tiene un ligero olor a cloro, repite la dosis, mezcla y espera otros 15
minutos.
5. Mejora el sabor del agua purificada, si es necesario. El agua hervida puede tener un
sabor raro, y el agua desinfectada puede tener un fuerte sabor a cloro. Cámbiala de un
envase a otro varias veces para que le dé el aire. También puedes añadir una pizca de sal
por cada litro de agua. Si el sabor es desagradable aún, utiliza un polvo para preparar agua
con sabor.
6. Ten cuidado al consumir el agua. Una vez que el agua en el recipiente ha sido
purificada, abre y cierra el recipiente con cuidado. No toques el interior o en el borde con los
dedos, o de lo contrario podría convertirse en agua contaminada.
[editar] Consejos
[editar] Advertencias
• Todos los métodos indicados anteriormente están diseñados para eliminar las
amenazas biológicas solamente, como las bacterias. Pero no eliminan químicos como
residuos industriales de aluminio o la contaminación radiactiva. Si sospechas que el agua
contiene contaminantes de este tipo, para purificarla tendrías que destilarla.
• Las personas con problemas de la tiroides deben consultar a su médico antes de tomar
agua tratada con yodo.
• El cloro y el yodo pueden ser tóxicos. No utilices cantidades más grandes de las
recomendadas en esta guía y sólo en situaciones de emergencia.