You are on page 1of 6

Jordi Carballido, psicólogo especialista en obesidad

"El obeso es un adicto, es un enfermo que está matándose"

VÍCTOR-M. AMELA - 12/09/2009

Tengo 54 años. Nací y vivo en Barcelona. Soy psicólogo, terapeuta familiar y


jefe de la unidad de obesidad . Estoy casado y tengo tres hijos. Creo en el
Estado de bienestar. Soy creyente. La obesidad es una enfermedad por una
indebida relación con la comida

Estamos gordos?

La obesidad es la epidemia del siglo XXI. Y no es cuestión de kilos...

¿De qué, pues?

De una relación patológica con la comida. De una relación adictiva.

¿La comida como droga?

Sí. La comida como consuelo de vacíos, carencias, frustraciones. El obeso es


un enfermo, un adicto a comer. El obeso come para aniquilarse: está
matándose.
¿El obeso quiere matarse?

Un obeso vive de quince a veinte años menos que alguien en su peso. A más
obesidad, más riesgo de enfermedades y morbilidad.

Pero hay obesidades de nacimiento...

No. Hay personas con la tendencia innata a desplegar conductas


compulsivas, extremas, y si alguien así crece en un entorno comilón... sí será
obeso fácilmente.

O sea: el obeso se hace.

Sí. Por eso hay que desterrar ya lo de "qué niño tan rollizo, qué guapo" o lo
de "que no quede nada en el plato".

¡Cuánto lo hemos oído!

Es la madre que fuerza a su niñita pequeña a comer más... y un buen día le


suelta lo de "niña, estás gorda: tendrás que hacer dieta".

El mal ya está hecho.

Sí. Esa niña es candidata a mujer obesa: ha entrado en el ciclo de las dietas,
que llevan al cuerpo a engordar más y más...

¿Las dietas no adelgazan?

¡Las dietas engordan!


¿Sí?

Puedes perder unos kilos en poco tiempo, pero esa pérdida no se consolida:
la homeostasis corporal tiende a recuperar esos kilos... ¡más unos kilos de
propina! A la siguiente dieta, el proceso va a repetirse.

Cada septiembre muchas personas se proponen una dieta...

El 98% de los que hoy empiezan una dieta por su cuenta pesarán más en un
año.

¡Toma! ¿Qué deberían hacer, pues?

Acudir a especialistas para reaprender a comer, aprender a relacionarse


correctamente con la comida. Al alcohólico y al fumador les quitamos alcohol
y tabaco para siempre, pero al obeso no podemos quitarle la comida para
siempre: ¡debe disciplinarse para comer correctamente el resto de su vida!

¿Cómo?

Un uso temporal de balón gástrico ayuda a reaprender. Pero luego el


paciente deberá ser cuidadoso con la comida. ¡Ni siquiera la reducción de
estómago garantiza el éxito!: un obeso será obeso toda su vida, aunque esté
en el peso correcto. Deberá cuidarse.

¿Comiendo qué?

De todo. De todo un poco, y de nada mucho.


Y haciendo ejercicio, supongo.

Como dice el cardiólogo Valentí Fuster, camina diariamente 45 minutos a


paso vivo y alargarás 10 años tu vida.

¿Cuál es el caso de obesidad más extremo que ha tratado?

He tratado a personas con 175 kilos, con 200 kilos... Una perdió 100 kilos.

¿Cómo llega alguien a pesar tanto?

Mediante ciclos de atracones y dietas. A partir de los 120 kilos, dejas de


pesarte: tienes la ilusión de que ya no engordarás más...

¿Qué es exactamente un atracón?

Episodios de comer sin tasa: más comes, más hambre sientes. Y sigues
comiendo, hasta caer derrengado o quedar dormido.

Cuénteme algún caso.

Una señora vertía una botella de dos litros de Coca-Cola (¡light!) en un bol de
centro de mesa, le añadía azúcar, volcaba un kilo de patatas chips y con una
cuchara engullía ese mejunje, sentada ante el televisor. Mientras lo hacía,
lloraba.

Qué estampa...

Padeces una disociación. Luego te sientes culpable. Pero recaes. Una chica se
apostaba detrás de una pastelería para recoger los restos de los
contenedores, y hasta se prostituía para comprar comida.

Buf...

Una mujer joven dejaba a su hija con la abuela y se encerraba en la cocina


para comer siete huevos fritos con pan. Otra ponía jabón a los restos de
comida que tiraba.

¿Jabón? ¿Para qué?

Para no rescatarlos de la basura y comérselos. Hasta que empezó a pasarles


agua para quitarles el jabón y comérselos.

Sí, es una enfermedad...

La obesidad es una enfermedad... y un colosal negocio basado en la mentira.


Dietas milagro, fármacos...: la mayoría se venden en internet, fabricados en
Siria en condiciones infames. Pero la gente paga por los atajos engañosos:
prefiere engañarse a curarse.

¿Cuáles son las dietas milagro más frecuentadas?

Dietas disociadas, dieta del jarabe de salvia, dieta de la sopa de cebolla...


Modalidades de ayuno temporal ¡que luego te devolverán más kilos! Es aún
peor si se usan cócteles de anfetamina-tiroides: queman la tiroides. El 30%
de mis pacientes obesos llegan con la tiroides dañada...

Se han sometido a esa dieta...


Muchos obesos adultos pueden haber probado hasta 300 dietas, repetidas y
distintas... ¡Son museos vivientes de dietas!

Además de frecuentar dietas, ¿qué otras conductas delatan un problema?

Comer deprisa hasta sentirse lleno, pesarse a menudo, comer para aliviar
angustias, comer a escondidas, aplazar citas hasta haber perdido peso,
pensar insistentemente en comida... Si vieras que haces un par de estas
cosas, estás enfermo: ¡corre a tratarte!

..

You might also like