You are on page 1of 2

CRECIMIENTO DE LA POBLACION EN EL MUNDO

La población humana mundial es el número total de personas que viven en todo el mundo en un
momento en específico. Está determinada por los nacimientos y los fallecimientos de los
individuos,1 así como por su esperanza de vida.2

La población mundial ha pasado de los casi 1.000 millones de habitantes que había en 1800 a los
más de 6.000 millones en el año 2000.345 El 30 de octubre de 2011 se alcanzaron los 7.000
millones (7 millardos).345 En noviembre del 2017 se contaron los 7.350 millones de habitantes.46

Algunas proyecciones estiman que la población mundial podría llegar a 11.400 millones en el año
2050 y a 15.300 millones en 2100.

El crecimiento poblacional o crecimiento demográfico es el cambio en la población en un cierto


plazo, y puede ser cuantificado como el cambio en el número de individuos en una población por
unidad de tiempo para su medición. El término crecimiento demográfico puede referirse
técnicamente a cualquier especie, pero se refiere casi siempre a seres humanos, y es de uso
frecuentemente informal para el término demográficomás específico tarifa del crecimiento
poblacional, y es de uso frecuente referirse específicamente al crecimiento de la población
humana mundial.

Los modelos simples del crecimiento demográfico incluyen el modelo del crecimiento de Thomas
Malthus y el modelo logístico. Las teorías que explican los cambios demográficos modernos son
la teoría de la revolución reproductiva —apoyada en estudios longitudinales—, la teoría de la
transición demográfica y la teoría de la segunda transición demográfica -apoyadas estas últimas en
estudios transversales.

CAUSAS

Descenso de la tasa de mortalidad gracias a la medicina principalmente: la Revolución Industrial trajo consigo
la revolución en el mundo de la medicina. Los avances científicos permitieron, a partir de esta época, vencer
enfermedades que hasta entonces habían sido mortales de necesidad. La invención de las vacunas y el
descubrimiento de antibióticos como la penicilina salvaron miles de vidas y son un factor clave del desmedido
crecimiento poblacional. Así, al descender el número de muertes anuales y mantenerse constante el de
nacimientos, la población aumenta.

Progresos en la producción de alimentos: por su parte, la investigación científica y mejoras tecnológicas


permitieron mejorar la producción agrícola: cultivos durante todo el año, semillas más resistentes,
plaguicidas… aspectos que Malthus no tuvo en cuenta cuando enunció su catastrofista teoría que condenaba
al ser humano a la desaparición. Las mejoras en las técnicas de pesca y ganadería también contribuyeron a
disponer de más alimentos con los que alimentar a la población.

Migraciones y concentración urbana: en determinados países, el impacto de las migraciones y acumulación de


la población en las ciudades ha sido muy relevante pero no sólo respecto al crecimiento demográfico, también
en lo referido a la generación de riqueza. En la actualidad, más de la mitad de la población mundial vive en
ciudades de más de 300.000 habitantes, ciudades a las que se prevé que siga aumentando el número y llegue
alcanzar el 70 % de la población.
EFECTOS:

Hoy día el mundo está experimentando las consecuencias y efectos de años de aplicación de
estas políticas de control de la población. Los países desarrollados experimentan actualmente
serios problemas de bajas tasas de natalidad, altos índices de abortos y envejecimiento de su
población, lo que no les permite tener generaciones de recambio. En otras palabras, los jóvenes
serán menos que los ancianos, con las consecuencias que ello trae tanto para la mano de obra
como para el pago de las pensiones y beneficios sociales para la tercera edad.
En Europa se está sufriendo fuertemente este fenómeno de la despoblación y envejecimiento de
su gente. En 1975 la edad promedio en el mundo era de 22 años, para el 2050 este promedio será
de 38 años. En 1900 Europa concentraba el 25% de la población mundial, las proyecciones para el
2050 son de que este continente tendrá sólo el 7% de la población del mundo.
Casos como los de España e Italia son preocupantes. Las mujeres españolas tienen hoy día un
promedio de 1,07 hijos, siendo que el mínimo que se necesita para tener generaciones de
recambio es de 2,1 hijos promedio. La mayoría de los países europeos ya no se están
reemplazando a sí mismos demográficamente. Según las Naciones Unidas, 61 países (incluida
toda Europa) tienen una tasa de natalidad inferior a la de recambio, cifra que llegará a 80 países el
año 2001.
El promedio de hijos en Europa Occidental es de 1,6 por mujer, tasa que incluso es menor en
Europa del Este, principalmente los países del ex bloque comunista donde la tasa de fertilidad es
de 1,3 hijos promedio.
Por su parte, la población italiana disminuirá en un 28% para el año 2050, y si a eso se suma que
para el año 2005 la tercera parte de la población europea estará cobrando sus pensiones, nos
encontramos frente a una situación bastante compleja. Más aun cuando es el Estado quien debe
asumir esta carga, es decir, los contribuyentes europeos deberán solventar estas pensiones, así
como los sistemas de salud y cuidado de los ancianos que ya no cuentan con familiares que se
hagan cargo de ellos, debiendo asumir esta responsabilidad el Estado.

You might also like