You are on page 1of 5

12.

leer el libro camino a cristo


RESUMEN: El Camino a Cristo
Capitulo 1
AMOR SUPREMO
Por medio de la naturaleza Dios manifiesta su grande amor hacia
nosotros de manera visual y tangible. Por medio de su palabra nos
muestra su amor a través de la historia de la humanidad. Mas sin
embargo, fue la encarnación de su amado Hijo quien nos mostro la
evidencia suprema de “Dios con nosotros”.
Jesús hizo manifiesto su amor por medio de sus principios prácticos y
vivos, también nos mostró una clara forma de relación con los diversos
tipos de personas y en medio de un mundo agobiado por el maligno, sanó
las dolencias de los hombres. Y cuando hubo realizado toda su obra de
amor, se dio a sí mismo para garantizar nuestro rescate, resurrección y
acceso al cielo por medio de Él, a quien rendimos honra y gloria.

Capítulo II
LA MÁS URGENTE NECESIDAD DEL HOMBRE
Salido de la mano del Altísimo el hombre era perfecto, imagen de Dios,
pero Satanás desfiguró la magnífica obra de la creación; ahora estamos
tan llenos de pecado, y malos hábitos. Cristo es nuestra única solución El
es la escalera que une el cielo con este mundo, es quien puede
transformarnos, tiene poder para hacerlo, Él, que venció toda tentación y
pensamiento inmundo nos capacita hoy para vencer cualquier pecado,
nos transforma de nuevo en seres que glorifican al Eterno con sus actos.

Capítulo III
UN PODER MISTERIOSO QUE CONVENCE
Podemos enderezar nuestra senda solamente arrepintiéndonos; “el
arrepentimiento comprende la tristeza por el pecado y abandono del
mismo”. No debe confundirse la tristeza bíblica con el lamentar los
resultados. El Espíritu santo marca la diferencia entre los sentimientos y
para poderlo recibir necesitamos acudir a Cristo tal cual somos. A medida
que vallamos relacionándonos con Él sus mandamientos se harán vivos
en nosotros. Podemos resistirnos pero al contemplar un pequeño rayo de
la gloria de Dios vemos cuan inmundos somos. Podremos vernos
externamente bien pero necesitamos ver la naturaleza espiritual de la ley
para encontrar nuestra inmundicia. Ahora viendo esto, para que esperar
un mensaje más persuasivo, hay que pasar a la acción. No debemos hacer
de las faltas de otros una excusa por el propio descuido del deber; el
modelo es Cristo. La religión intelectual solamente encubre de santidad
un corazón no santificado. “reconoce tu pecado pero di a Satanás que
Cristo murió por ti”. Mucho mal hemos hecho mucho se nos ha
perdonado.

Capítulo IV
PARA OBTENER LA PAZ INTERIOR
No necesitamos hacer algo que gane el favor de Dios, solamente
confesarle nuestros pecados. Cuando la transgresión ha sido pública
entonces debe haber una confesión pública y dichas confesiones van
acompañadas de arrepentimiento y reforma. Cuando no se sede al podes
del Espíritu Santo siempre se pondrán excusas a las faltas; el espíritu de
justificación propia tuvo su origen en el diablo.

Capítulo V

LA CONSAGRACIÓN
Debemos entregar todo el corazón a Dios para que efectúe una
transformación completa y en esto consiste la guerra contra nosotros
mismos. Debemos abandonar todo aquello que nos separa de Él. El amor
manifestado por nuestro Dios debe ser nuestro motivo de entrega.
Cuando abandonamos todo, abandonamos un corazón manchado de
pecado y eso es a lo que difícilmente renunciamos. Todo el cielo está
interesado en el Hombre y la vida verdadera consiste en que se forme en
ella Cristo.
Deseamos hacer su voluntad mas sin embargo somos débiles y
dominados por nuestra vida de pecado. Pero el secreto de la victoria está
en elegir servir a Dios y así la naturaleza estará bajo el dominio del
Espíritu Santo.

Capítulo VI
MARAVILLAS OBRADAS POR LA FE
Cuanto más luchamos por escapar del pecado más cuenta nos damos de
nuestra falta de fuerza. Lo que necesitamos es paz. Cuando pedimos
perdón y un corazón limpio, creamos que nos lo dará. No esperemos a
sentirlo porque él lo ha prometido, agradézcamele por haberlo recibido.
Ahora bien ya entregado no debo regresar a mi camino antiguo, pero si
caigo puedo regresar a Dios quien ya espera para poderme limpiar. Todas
sus promesas son la expresión de un amor y una piedad inefables.

Capítulo VII
CÓMO LOGRAR UNA MAGNIFICA RENOVACIÓN
Aunque es posible que una persona no pueda definir el momento exacto
de conversión, los cambios movidos por el Espíritu testifican del
magnífico acontecimiento. Los cambios producidos no son movidos por
deseos personales, es el Espíritu quien impulsa cada fibra del ser. No hay
evidencia de arrepentimiento verdadero cuando no hay una evidente
reforma. Debemos evitar fijarnos en nuestras propias obras y por otro
lado pensar que la fe en Cristo nos exime de guardar la ley. Recordemos
que la obediencia no es un mero cumplimiento externo, es un servicio de
amor, es la verdadera prueba del discipulado. Cristo cambia el corazón y
habita en el por fe, así no hay en nosotros motivo de jactancia. A menudo
caemos pero no debemos desesperar, oremos con más fervor,
desconfiemos de nuestra propia fuerza y aferrémonos al poder de Cristo.
Cuanto más cerca estemos de Cristo más imperfectos nos veremos porque
no puede haber amor profundo al Señor en un corazón que no conoce su
propia perversidad. Mientras menos cosas de estima veamos en nosotros
mas apreciaremos la pureza y santidad infinitas de nuestro salvador y
tanto más reflejaremos su imagen.

Capítulo VIII
EL SECRETO DEL CRECIMIENTO
El origen de la vida espiritual es el mismo de la material, Dios. Así como
un niño no pude crecer por su propia voluntad, el cristiano necesita de
Dios para crecer. Cristo autor de nuestra fe también es su consumador;
necesitamos permanecer en Él. Sea nuestra oración Tómame ¡oh señor!
Como enteramente tuyo. Pongo todos mis planes a tus pies. Úsame hoy en
tu servicio.

Mora conmigo y sea toda mi obra hecha en ti. Meditemos en las diversas
aristas de la manifestación de Cristo. Cuando pensamos mucho en
nosotros mismos, nos alejamos de Cristo. Si le contemplamos
constantemente llegaremos a ser transformados en la misma semejanza,
de gloria en gloria, la influencia regeneradora del Espíritu Santo renovara
nuestro corazón. Todo lo que Cristo fue para sus primeros discípulos
desea ser para nosotros hoy.
Capítulo IX
EL GOZO DE LA COLABORACIÓN
El gozo de nuestro salvador estaba en levantar y redimir a un hombre
caído. Este mismo gozo caracteriza a los ángeles y es el mismo que hereda
todo discípulo de Cristo. El amor al señor Jesús se manifestará por el
deseo de trabajar para beneficiar a la humanidad.
Los participantes de la gracia estarán dispuestos a hacer cualquier
sacrificio para que otros por quienes Cristo murió compartan el don
celestial.
Si aceptamos ese privilegio, al trabajar ganando almas para El, sentiremos
mas necesidad de una experiencia más profunda e intima y obtendremos
un conocimiento más amplio de las verdades divinas; tendremos hambre
y sed de justicia.
Este es el modo de crecer en la gracia, aprovechando cada oportunidad
que Dios nos permita, sin desperdiciar una sola.

Capítulo X
LOS DOS LENGUAJES DE LA PROVIDENCIA
Si tan solo queremos escuchar, las obras que Dios creó nos enseñarán
preciosas lecciones de obediencia y confianza. No sufriríamos ansiedades
indebidas; cada cosa se dejaría en las manos del Dios que nos habla
mediante sus obras providenciales y la influencia del Espíritu Santo en el
corazón.
Dios nos habla también en su palabra, con líneas más claras nos revela su
carácter. Nadie equivocará o perderá el camino, salvo los que sigan su
juicio privado en vez de la voluntad divina.
Mediante el estudio de la biblia podremos elevar el pensamiento y
vigorizar nuestras facultades. Para esto debemos estudiar un pasaje hasta
que su significado nos sea claro y evidentes sus relaciones con el plan de
salvación; leer un pasaje meditar en el hasta que se grabe en la mente y
por sobre todo orar fervorosamente para que el Señor nos dé luz y
conocimiento.

Capitulo XI
¿PUEDE EL HOMBRE COMUNICARSE CON LA DIVINIDAD?
Debe existir un verdadero intercambio entre Dios y nosotros,
comentándole todo punto tocante a nuestra vida real, abrirle nuestro
corazón como a in amigo. Dios nos está esperando lleno de bendiciones
para sernos derramadas y nosotros ¡orando tan poco!
Sintamos real necesidad de la ayuda que Él nos puede dar.
Confesando nuestros pecados y sumando toda la fe existente en nosotros
podemos estar seguros que Dios contestará de la manera más
conveniente, recordando que la perseverancia es otro componente
esencial de la oración eficaz; debemos mantener una constante charla con
nuestro padre.
Orar en el nombre de Jesús es orar con los sentimientos y el espíritu de Él,
creyendo en sus promesas, confiando en su gracia y haciendo sus obras.
Al alabarle, al expresarle nuestra gratitud nos aproximamos al culto que
rinden los habitantes del cielo.

Capítulo XII
¿QUÉ DEBE HACERSE CON LA DUDA?
Nuestra fe debe reposar sobre evidencias y no sobre demostraciones.
Podemos comprender de la biblia lo su fuente para amarle y todo aquello
que es bueno que sepamos. Si la biblia fuera totalmente revelada, no
tendría la insondable huella de la mente de su autor; debemos admitir
que la mente finita no basta para abarcar lo infinito. Esto produce
humildad en el ser y lo prepara para tener la fe como de un niño
dispuesto a aprender. Si buscamos discrepancias las hallaremos;
busquemos practicar lo conocido antes de continuar estudiando en busca
de nuevas fronteras.
Crezcamos en gracia obteniendo un conocimiento más claro de la palabra
de Dios.

Capítulo XIII
LA FUENTE DE REGOCIJO Y FELICIDAD
En cada uno de nosotros Dios está enviando caratas al mundo; nuestra
influencia siempre debe ser totalmente positiva, no hablemos de algo que
no construya, reconforte, edifique o fortalezca. Las aflicciones no agobian
si hemos llevado nuestras cargas a Cristo y poniendo toda fe en Él nos
decidamos a actuar según nos ilumine. Somos comprados por precio
carísimo, somos valiosísimos para nuestro padre que nunca nos dejará,
un padre que hasta aquí no ha ayudado y estará con nosotros hasta el fin.

You might also like