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674 Revista de la Asociación Geológica Argentina 65(4): 674-686 (2009)

EVIDENCIAS PALEOCLIMÁTICAS EN DURICOSTRAS,


PALEOSUELOS Y SEDIMENTITAS SILICOCLÁSTICAS, DEL
CENOZOICO DE URUGUAY
Ofelia Rita TÓFALO1 y Héctor J. M. MORRÁS 1,2

1
Departamento de Ciencias Geológicas, FCEN, Universidad de Buenos Aires, E-mail: rtofalo@gl.fcen.uba.ar
2
INTA-CIRN, Instituto de Suelos, Hurlingham.

RESUMEN
Las sedimentitas continentales del oeste y sur de Uruguay permiten inferir importantes cambios climáticos ocurridos duran-
te el Cenozoico, que se inicia con calizas palustres paleocenas denominadas Formación Queguay y relacionadas con calcretes
freáticos que afectan principalmente a sedimentitas fluviales de la Formación Mercedes (Cretácico Tardío). La presencia de es-
tas rocas carbonáticas indica clima semiárido, marcadamente estacional. La Formación Asencio (Eoceno temprano) está se-
parada de la Formación Mercedes por una discontinuidad, la paleosuperficie Yapeyú, que limita dos ciclos sedimentarios.
Sobre ella se disponen depósitos fluviales que en clima cálido, húmedo y estacional generaron Ultisoles; estos durante lapsos
de desecamiento prolongado habrían originado ferricretes, cuyos niveles superiores fueron desmantelados por rehidratación
debido a incremento de las precipitaciones. Suprayace en discordancia la Formación Fray Bentos (Oligoceno-Mioceno tem-
prano), integrada por loess depositados bajo clima semiárido, a partir de los cuales se desarrollan paleosuelos y calcretes pe-
dogénicos, entre los que se describe una nueva variedad: calcretes tubulares. Su morfología en planta correspondería a la de
un microrrelieve gilgai típico de Vertisoles, igual que la estructura prismática derivada de procesos de expansión-contracción
de arcillas esmectíticas en climas estacionales. La presencia de calcretes pedogénicos sugiere condiciones de clima semiárido
estacional. La Formación Raigón (Plioceno tardío-Pleistoceno medio) de origen fluvial, se formó en un período húmedo y
presenta en el techo un paleosuelo generado bajo clima estacional. La Formación Libertad (Pleistoceno temprano a medio),
apoya en discordancia y está integrada por loess depositados durante intervalos glaciales y modificados por pedogénesis du-
rante períodos interglaciales o interestadiales.

Palabras clave: Duricostras, Paleosuelos, Sedimentitas silicoclásticas, Paleoclimas.

ABSTRACT: Paleoclimatic evidence in duricrust, paleosoils and siliciclastic deposit of the Cenozonic of Uruguay. The continental deposits found
in southern and western Uruguay show important climatic changes along the Cenozoic. The sequence begins with Paleocene
palustrine carbonates known as the Queguay Formation, associated with calcretes of phreatic origin which developed mainly
on fluvial sediments of Mercedes Formation (Late Cretaceous), and indicates a semiarid climate, seasonally contrasted. The
Asencio Formation (Early Eocene) is separated from Mercedes Formation by the Yapeyu paleosurface, limiting two sedimen-
tary cycles. Fluvial deposits lies above this surface, on which Ultisols developed under a warm and humid climate; periods of
intense dryness would provoked their induration and formation of ferricretes, which under subsequent increased precipita-
tion were dismantled. Above, Fray Bentos Formation (Oligocene-Early Miocene) lies unconformably. It is composed by loes-
sic sediments deposited in a semiarid climate, paleosols and diverse pedogenic calcretes developed on these sediments, among
which a new type named tubular calcrete, are here described; in the latter the tubular units are related to a coarse prismatic
structure derived from shrink-swell processes and the surface morphology of this calcrete refers to a gilgai microrelief, typical
for Vertisols. The pedogenic calcretes point to a seasonal semiarid climate. The Raigón Formation (Late Pliocene- Middle
Pleistocene) of fluvial origin was formed in a humid period, and shows a paleosol at the top developed in a seasonally con-
trasted climate. Lying unconformably, the Libertad Formation (Early to Middle Pleistocene) is composed by loesses deposi-
ted during glacial periods that were subsequently modified by pedogenesis during interglacial periods.

Keywords: Duricrusts, Paleosols, Siliciclastic sedimentites, Paleoclimates.

INTRODUCCIÓN éssicos y fluviales presentan abundantes las variaciones climáticas de ese sector de
duricostras y paleosuelos. En la presente las cuencas de Paraná y de Santa Lucía. Si
Los depósitos continentales cenozoicos contribución se realiza el análisis integral bien la mayoría de estos depósitos pueden
de los sectores occidental y sur de Uruguay, de los mismos a partir de observaciones observarse en Argentina (Fig. 2) los aflora-
tienen indicadores paleoclimáticos signi- de campo y del estudio petrológico y mi- mientos son mucho más pequeños y se en-
ficativos ya que además de sedimentos lo- cromorfológico, lo que permite deducir cuentran dispersos.
Evidencias paleoclimáticas en duricostras, paleosuelos y sedimentitas... 675

Las duricostras (calcretes, silcretes, ferri-


cretes) son comunes en el registro estra-
tigráfico, pero particularmente abundan-
tes en cuencas continentales del
Mesozoico y Cenozoico. En las últimas
décadas se han llevado a cabo diversos
trabajos sobre las mismas y su asociación
con niveles de paleosuelos y calizas pa-
lustres (Tandon y Narayan 1981, Arakel
1982, Wright 1982, Goudie 1983,
Wright, 1990, Wright y Tucker 1991,
Thiry y Milnes 1991, Wright et al. 1992,
Mack y James 1994, Wright y Platt 1995,
Banerjee 1998, Bourman y Conacher
1998, Thiry 1999, Mack et al. 2000,
Khadkikar et al. 2000, Tandon y Andrews
2001, Alonso Zarza 2003, Bellosi et al.
2004, Huerta y Armente-ros 2005, Ullyott
y Nash 2006, entre otros).
Los calcretes constituyen importantes
depósitos característicos de regiones se-
miáridas, con precipitación media anual
de alrededor de 500 mm (Wright y
Tucker 1991). Los calcretes pedogénicos
son comunes en suelos bien drenados y
los de aguas subterráneas se originan en Figura 1: Mapa de ubicación indicando las principales localidades mencionadas en el texto: 1
el área de influencia de la capa freática. Paysandú, 2 Algorta, 3 Piedras Coloradas, 4 arroyo Vera, 5 Gruta del Palacio, 6 cuenca del arroyo
Coquimbo, 7 Pedro Chico, 8 Nueva Palmira, 9 Sauce Solo, 10 Migues.
Frecuentemente se asocian con carbona-
tos palustres formados en zonas bajas, simple y preservan las estructuras del ma- (Achyuthan 2004).
donde la capa freática aflora para consti- terial original (Ullyott y Nash 2006). La Por su parte los paleosuelos son indicado-
tuir pantanos carbonáticos muy pandos micromorfología proporciona importan- res paleoclimáticos relevantes, pues su
(Wright y Platt 1995), sujetos a deseca- tes pautas para determinar su origen e existencia y tipo depende de la combina-
ción intermitente. identificar los procesos de silicificación. ción de los factores (clima, material paren-
La formación de calcretes y carbonatos Los ferricretes son duricostras cementa- tal, relieve, biota y tiempo) y de los proce-
palustres y su significado paleoambiental das por óxidos de hierro. El término late- sos formadores (adiciones, transferencias,
depende de varios factores como clima, rita, usado para describir materiales en- translocaciones y pérdidas). La presencia
tectónica e hidrología (Alonso Zarza 2003), durecidos por óxidos de hierro y comu- de paleosuelos bien desarrollados indica
por lo que resulta muy importante cono- nes en regiones tropicales, ha sido usado escaso aporte sedimentario terrígeno y
cer cómo esos factores afectan a la acu- poco estrictamente, lo que ha ocasionado condiciones de estabilidad tectónica.
mulación de los carbonatos y qué repre- considerable confusión (Segalen 1994, Finalmente, los loess son sedimentos eó-
sentan los calcretes y las facies palustres Widdowson y Gunnell 1999). Los ferri- licos principalmente limosos depositados
en la estratigrafía secuencial continental cretes más comunes, son de origen pedo- en planicies con clima semiárido, por lo
(Huerta y Armenteros 2005). génico, ya que presentan abundantes ras- que también resultan indicadores de pale-
Los silcretes se forman en la superficie o gos edáficos, en contraposición con los oclimas, en tanto su intercalación con pa-
cerca de ella y pueden ser utilizados para ferricretes freáticos (Wright et al. 1992), leosuelos indica que la sedimentación no
identificar paleosuperficies, para realizar formados en el límite superior de la capa fue continua.
reconstrucciones paleoambientales y aná- freática, donde prevalecen condiciones
lisis de cuencas (Thiry 1999). Los silcre- más oxidantes (Coelho et al. 2001). Los MARCO GEOLÓGICO
tes pedogénicos son los más comunes, ferricretes son un atractivo marcador es-
tienen un perfil complejo e indican perí- tratigráfico, ya que indican clima tropical El escudo uruguayo está formado por
odos de estabilidad. Los silcretes de y están relacionados con intensa meteori- bloques de corteza de diferente petrolo-
aguas subterráneas tienen un perfil más zación en planicies de muy bajo relieve gía e historia geológica, asociados a rocas
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magmáticas y supracorticales que alcan- les cenozoicos son interpretados como En afloramientos su potencia no es ma-
zaron una estabilidad tectónica relativa al paleosuelos y el chert, que comúnmente yor de 15 m y en subsuelo los espesores
final del Cámbrico y principio del se observa en las rocas carbonáticas, se ha- máximos parecen no ser superiores a los
Ordovícico (Masquelín 2006). Se lo divide bría generado por procesos de silcretiza- 100 metros (Bossi y Navarro 1988). Según
en tres dominios: oriental, central y occi- ción (Veroslavsky et al. 1997). Romano y Tófalo (2000) el perfil tipo de
dental, separados por discontinuidades La Formación Asencio está circunscripta 14 m de potencia, que aflora en las ba-
corticales (Rossello et al. 2007). El domi- al sector SO de Uruguay e integrada por rrancas próximas a la ciudad de Fray
nio oriental recibe el nombre de Punta una sucesión silicoclástica roja con trazas Bentos, está integrado por mantos de lo-
del Este, el central el de Nico Pérez y el fósiles de insectos (Fig. 2), atribuida al ess ricos en vitroclastos a partir de los cua-
occidental el de Piedra Alta. El registro Eoceno temprano (Bellosi et al. 2004). les se generan niveles de paleosuelos con
sedimentario durante el resto del Fane- Según Bossi (1966) el contacto inferior con rizolitos y revestimientos de arcilla, de hie-
rozoico involucra tres cuencas: Paraná, la Formación Mercedes es concordante y rro y de carbonato de calcio. Las sedimen-
Santa Lucía y Merín (Fig. 1) transicional y la divide en los Miembros titas sufrieron varios procesos vinculados
Las calizas y silcretes afloran principal- Yapeyú (inferior) y del Palacio (superior). con la diagénesis vadosa, que dieron ori-
mente en el oeste de Uruguay, en la cuen- El primero está constituido por areniscas gen a distintos tipos de calcretes. Escasos
ca de Paraná y ocupan también áreas más finas de color rosado a blanco, con cemen- depósitos de geometría lenticular con
reducidas en la cuenca de Santa Lucía (Fig. to arcilloso o carbonático (Bossi y Navarro base erosiva, se interpretaron como pe-
1). Se desarrollan generalmente en la par- 1988) y tiene nidadas de huevos de dino- queños paleocanales.
te superior de la Formación Mercedes, su- saurios. El miembro del Palacio se halla Según Ubilla (2004) incluye depósitos flu-
cesión fluvial constituida por una alter- integrado por las mismas areniscas afec- viales de relleno de canal y barras integra-
nancia de bancos lentiformes psefíticos y tadas por importantes y generalizados pro- dos por areniscas y areniscas conglomerá-
psamíticos y atribuida al Cretácico Tardío cesos de ferrificación y esporádicos fenó- dicas con base erosiva; depósitos fluviales
(Fig. 2). menos de silicificación (Bossi y Navarro de planicie de inundación; paleosuelos;
La potencia de las calizas raramente su- 1988). Ford y Gancio (1989) definieron niveles de calcretes y silcretes; depósitos
pera los 15 m y su edad ha sido discutida provisoriamente la Formación Palmitas, de flujos gravitatorios compuestos por
por diversos autores, entre los que cabe constituida por conglomerados de su- diamictitas y fangolitas y depósitos loéssi-
mencionar a Lambert (1940), que postu- puesto origen fluvial, que contienen ni- cos. Este autor propone el perfil de
ló varios episodios de precipitación car- dos fósiles de insectos y la asignaron ten- Picada de Berget (Canelones) como hipo-
bonática desde el Cretácico hasta el tativamente al Cenozoico temprano. estratotipo de la unidad por contener a la
Terciario Temprano. Bossi (1966) las atri- Pazos et al. (1998) limitan la Formación mayoría de los litotipos mencionados;
buyó al Terciario y posteriormente al Asencio al Miembro del Palacio, ya que cabe destacar que la mayoría de las sedi-
Cretácico Tardío (Bossi et al. 1975) y re- determinan una discontinuidad regional mentitas de este perfil (85%) son limo
cientemente Goso Aguilar y Perea (2004) con abundantes indicadores edáficos que arenosas y la participación de depósitos
propusieron denominarlas Formación limita dos ciclos sedimentarios, la paleo- canalizados en la columna es escasa.
Queguay y las ubicaron en el Terciario superficie Yapeyú, localizada en el tope La Formación Raigón (Goso 1965) aflo-
Temprano. del Miembro Yapeyú. Los procesos de ra en las barrancas costeras del Río de La
Tradicionalmente a todas las calizas se les ferrificación serían posteriores a la sedi- Plata. Su potencia máxima es de 30 m y se
atribuyó un origen lacustre (Bossi 1966, mentación y habrían afectado en profun- la asigna al Plioceno tardío-Pleistoceno
Sprechmann et al. 1981, entre otros), pero didad hasta la Paleosuperficie Yapeyú. medio (Perea y Martínez 2004) (Fig. 2).
esto ha sido discutido a partir de nuevos Desestiman la existencia de la Formación En afloramientos apoya sobre la Forma-
estudios. Tófalo (1986) indica que son cal- Palmitas, ya que no observan característi- ción Camacho, pero en perforaciones lo
cretes de aguas subterráneas. Chebli et al. cas compatibles con flujos generados por hace también sobre la Formación Fray
(1989) interpretan que se habrían origina- acción fluvial. Bentos y sobre el basamento cristalino
do por procesos de iluviación, de ascen- La Formación Fray Bentos (Bossi 1966) (Spoturno y Oyhantçabal 2004). Según
so capilar desde la capa freática y por pre- aflora en el oeste de Uruguay en la cuen- Bossi y Navarro (1988), está constituida
cipitación en cuerpos de agua. Veroslavsky ca de Paraná y hacia el este en las cuencas por arcillas verdes, arenas finas verdes
y Martínez (1996) infieren que son calcre- de Santa Lucía y Merín (Fig. 1). Apoya algo arcillosas, arenas finas blancas, are-
tes de aguas subterráneas e indican contro- discordantemente sobre la Formación nas medias feldespáticas blancas, arenas
les estructurales que actuaban elevando Asencio (Fig. 2) o sobre el basamento cris- feldespáticas gruesas y niveles de conglo-
el nivel freático, posteriormente a la sedi- talino y se relaciona también en discordan- merados. Andreis y Mazzoni ( 1967), si-
mentación de la Formación Mercedes. cia con las sobrepuestas Formaciones Ca- guiendo el criterio de Francis y Mones
Los niveles superiores de calizas con fósi- macho (Mioceno) y Salto (Plio-Pleistoceno). (1966) la denominan Formación San José
Evidencias paleoclimáticas en duricostras, paleosuelos y sedimentitas... 677

FIGURA 2: Cuadro estratigráfico.


Edad Estratigrafía Génesis Inferencia Fósiles
Uruguay Argentina Paleoclimática

Pleistoceno Fm. Libertad Fm. Ensenada Loess, paleosuelos y calcretes Semiárido Estacional Mamíferos
temprano a medio
Plioceno tardío- Fm. Raigón (sur) Fm. Salto Chico (este) Depósitos fluviales Templado Húmedo Mamíferos (Toxodontes,
Pleistoceno medio Fm. Salto (oeste) Fm. Ituzaingó (oeste) Hacia el techo estacional Gliptodontes, Roedores)
Oligoceno- Formación Fray Bentos Formación Fray Bentos Loess, paleosuelos y calcretes Semiárido Estacional Mamíferos (Marsupiales, Roedores
Mioceno temprano Xenartras, Nothoungulados)
Eoceno temprano Fm. Asencio Dep. fluviales, Subtropical Seasonal Nidos de insectos
Ultisoles, ferricretes
Puerto Yeruá
Formación
Paleoceno Fm. Queguay Calcretes, carbonatos palustres Semiárido Estacional Gastrópodos terrestres y
dulceacuícolas, nidos de insectos,
ostrácodos, characeas
Cretácico Maestrichiano Formación Mercedes Depósitos fluviales Templado Húmedo Cáscaras de huevos de
Campaniano dinosaurios

y la dividen en dos secciones, una inferior Formación Raigón y sobre formaciones en la que se observan granos flotantes,
formada por arcillas, limos, limos areno- cretácicas y rocas paleozoicas y su tope es corroídos y desplazados y comunes cris-
sos y arenas subordinadas gris verdosas y también discordante con formaciones del talarias (rellenos cristalinos, en el sentido
otra superior compuesta por psamitas Cuaternario medio y superior (Spoturno y de Stoops 2003); en los calcretes beta, en
medianas a muy gruesas de coloraciones Oyhantçabal 2004). Según Bossi et al. (1998) cambio, dominan las características bio-
rosadas a amarillentas. Tófalo et al. (2006b) incluye lodolitas macizas friables con are- génicas, como rizoconcreciones, calcita
indican que estas sedimentitas fluviales na gruesa dispersa y abundante carbonato fibrosa, textura alveolar-septal, etc. Para
pueden dividirse en dos secciones predo- de calcio. De acuerdo a Tófalo et al. (2006b) describir la fábrica de los silcretes se uti-
minantemente arenosas separadas por corresponde a depósitos loéssicos, acu- lizó la terminología propuesta por
una discontinuidad de carácter regional, mulados por el viento en regiones semiá- Summerfield (1983), quien denomina
que marca un episodio de reactivación en ridas de escasa pendiente y que han sufri- grano-soportada a la fábrica caracteriza-
la sedimentación. do importantes procesos de pedogénesis da por granos esqueletales mayores de 30
Atribuida al (Plioceno tardío-Pleistoceno) (Fig. 2). µm que se tocan entre sí y constituyen el
la Formación Salto también de origen flu- esqueleto estable de la roca, la cementa-
vial, se observa en reducidos afloramien- MATERIALES Y MÉTODOS ción se produce por relleno del espacio
tos cercanos al río Uruguay y fue correla- intergranular. En cambio, flotante es la
cionada con la Formación Raigón por Se levantaron perfiles y se realizaron ob- fábrica en la que los clastos mayores de
Goso (1965). Se correlaciona también con servaciones geológicas, para determinar 30 µ no tienen contactos entre sí y la sili-
las Formaciones Salto Chico e Ituzaingó estructuras, geometrías y tipo de contac- cificación se ha producido por reemplazo
en la Mesopotamia argentina (Fig. 2). to entre bancos. También se utilizaron de material arcilloso o carbonático.
Según Veroslavsky y Montaño (2004), son testigos de perforación suministrados
depósitos de ríos entrelazados, pueden por la compañía minera ANCAP (Aso- FORMACIÓN QUEGUAY
distinguirse dos ciclos depositacionales y ciación Nacional de Combustibles,
tienen geometría lenticular, son multiepi- Alcohol y Portland). El color se fijó por Calizas
sódicos y grano de crecientes. Estos auto- comparación con los patrones cromáti- Descripción: En las proximidades de la lo-
res realizan un pormenorizado análisis de cos del Rock Color Chart Commitee (1951). calidad de Paysandú (Fig. 3a), se obser-
la Formación Salto, por lo que dado lo re- Las muestras fueron estudiadas micros- van calcretes brechosos y masivos (Tofalo
ducido de sus afloramientos en el área es- cópicamente, teniendo en cuenta sus ca- et al. 2001). En los primeros el carbonato
tudiada y su semejanza y correlación con racterísticas texturales y composicionales. de calcio se introduce en el paleosuelo
la Formación Raigón, no se trata en parti- Para las descripciones micromorfológicas hospedador, lo brecha y desplaza sus par-
cular en la presente contribución. se siguieron los criterios de Stoops (2003) tes, lo que genera una serie de cristalarias
La Formación Libertad (Pleistoceno tem- y para evaluar la micromorfología de los que suelen estar cortadas sucesivamente
prano a medio) fue definida por Goso calcretes se usó terminología de Wright por otras, lo que pone de manifiesto que
(1965) y aflora en los departamentos del (1990), quien propone dos miembros fi- existen varias etapas de fracturación y re-
suroeste del Uruguay. Tiene espesor de al- nales: los calcretes alfa consisten en una lleno.
rededor de 20 m y es discordante sobre la matriz densa micrítica o microesparítica, En los calcretes masivos, de color blanco
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(N9), el carbonato autigénico envuelve, Interpretación: A las calizas arenosas silicifi- En las calizas fosilíferas la ausencia de la-
separa y cementa en forma continua, frag- cadas con gastrópodos dulceacuícolas ubi- minación y la presencia de bioclastos, jun-
mentos de paleosuelos (pedorelictos), y cadas cerca de Algorta se asignó un pro- to con texturas brechosa y peloidal-intra-
muy escasa proporción de clastos tamaño bable origen lagunar (Ford y Gancio 1990) clásica (Fig. 3d), son evidencias de depó-
arena que comúnmente presentan los bor- y a las calizas próximas a Piedras Coloradas sitos palustres de muy baja energía en zo-
des corroídos. Se genera así un típico cal- se las interpretó como paleosuelos calcá- nas de muy bajo gradiente (Huerta y
crete masivo, denso, con fábrica alfa (Fig. reos (Veroslavsky y Martínez 1996, Martí- Armenteros 2005). Las facies palustres
3b). Hacia el tope de la sucesión, se han nez et al. 2001), en tanto que las de la re- probablemente representen depósitos en
observado restos de valvas fragmentadas gión de Sauce Solo fueron interpretadas charcos efímeros, locales y poco profun-
y totalmente reemplazadas por esparita. como calcretes de aguas subterráneas y dos, desarrollados en depresiones topo-
Son muy frecuentes tanto en los calcretes las calizas fosilíferas como un calcrete pe- gráficas de una planicie subaérea de bajo
brechosos como masivos los rellenos silí- dogénico (Veroslavsky et al. 1997). relieve y por lo tanto están menos exten-
ceos complejos de macro y microporos. La mayoría de las calizas, con excepción didas que los calcretes.
En las proximidades de la localidad de de los niveles con restos fósiles son masi- La presencia de calcretes y carbonatos pa-
Algorta (Fig. 1), se han observado calizas vas (Fig. 3 b), tienen las características mi- lustres indica períodos o áreas con redu-
arenosas silicificadas con abundantes gas- cromorfológicas determinantes de calcre- cido aporte clástico, donde el clima ejerce
trópodos dulceacuícolas (Ford y Gancio tes con fábrica alfa (fisuras complejas y un importante control; ambos se desarro-
1990) y cerca de Piedras Coloradas (Fig. cristalarias, granos esqueletales flotantes y llan bien en clima semiárido, pero condi-
1), calizas con gastrópodos terrestres y de con bordes corroídos, cristales esparíticos ciones más áridas favorecen la formación
agua dulce, ostrácodos, oogonios de cha- rómbicos, fábrica densa), la cual se origi- de calcretes y las subhúmedas la genera-
ráceas, rizoconcreciones e icnofósiles te- na por crecimiento desplazante de calcita ción de carbonatos palustres (Alonso Zarza
rrestres (Veroslavsky y Martínez 1996, en el material clástico hospedador, debido 2003).
Martínez et al. 2001). principalmente a fenómenos de evapora- Los fenómenos de calcretización y el dis-
Cabe destacar que en la región de Sauce ción y evapotranspiración. La micromor- creto desarrollo de encharcamientos semi-
Solo (cuenca de Santa Lucía) Veroslavsky fología de los calcretes indica que se han permanentes se hallaría relacionado con el
et al. (1997) definen 4 litofacies: areniscas originado en los ambientes diagenéticos ascenso freático en sectores con un mar-
calcáreas, calizas arenosas, calizas macizas freático y vadoso. Las brechas intrafor- cado control estructural (Veroslavsky y
y calizas fosilíferas. Las calizas arenosas y macionales son comunes en ambiente Martínez 1996).
macizas fueron interpretadas como cal- diagenético vadoso, donde existe alter- La posición estratigráfica de las "Calizas
cretes de aguas subterráneas y las calizas nancia entre condiciones de cementación del Queguay", tradicionalmente asignadas
fosilíferas como un calcrete pedogénico. y fracturación no tectónica, lo que origi- al neocretácico, ha sido motivo de contro-
Aproximadamente a 10 km de la locali- na varios episodios de fragmentación, versias. Sin embargo, las calizas aflorantes
dad de Migues (cuenca de Santa Lucía), brechamiento y cementación. Estas ca- en la cuenca de Santa Lucia son portado-
afloran 8 m de calizas color blanco (N9). racterísticas indican que se trata de cal- ras de restos de invertebrados y nidos fó-
En los 3 m basales el carbonato de calcio cretes originados por migración vertical y siles, que las ubican en el Paleoceno
autigénico envuelve, separa y cementa lateral de la capa freática. La falta de cla- (Martínez et al. 1997), lo mismo que a las
clastos tamaño arena que comúnmente ras evidencias de fábrica beta, caracteri- aflorantes en la zona de Piedras Coloradas
presentan los bordes corroídos, generan- zada por el dominio de estructuras biogé- (Martínez et al. 2001).
do un calcrete masivo, denso, con fábrica nicas (calcita fibrosa, pellets, canales, fábri-
alfa (Tófalo et al. 2006a). Las característi- ca alveolar septal, etc.), indicaría que se Silcretes
cas microscópicas de las rocas son equi- formaron en zonas con escasa actividad Descripción: Los silcretes están bien des-
parables a las observadas en calcretes del biológica, hecho que resulta contradicto- arrollados y preservados sobre epiclasti-
departamento Paysandú (Tofalo et al. 2001) rio, con la abundancia de paleosuelos tas correspondientes a la Fm. Mercedes.
y de la provincia de Entre Ríos (Tofalo y particularmente en la zona de Pay-sandú. En un mismo perfil pueden observarse
Pazos 2002). Los carbonatos suprayacen- Sin embargo, debe tenerse en cuenta que varios horizontes de silcretes, que se in-
tes (Fig. 3c) tienen textura peloidal-intra- los procesos vinculados a la freática pue- tercalan entre sedimentitas clásticas y en
clástica (Fig. 3d). Son comunes en algu- den haber actuado mucho después que se ocasiones rellenan poros de rocas carbo-
nos niveles las bioturbaciones horizonta- originaron los suelos y que los intensos náticas y/o las reemplazan parcialmente.
les y principalmente en el tope de la suce- procesos de recristalización que caracteri- No presentan gran extensión lateral y las
sión los bioclastos de gastrópodos gene- zan a toda la sucesión estudiada, podrían estructuras sedimentarias primarias están
ralmente fragmentados. Es común el re- haber borrado los rastros de actividad parcialmente conservadas. Utilizando la
emplazo parcial del carbonato por sílice. biológica. terminología de Summerfield (1983), pue-
Evidencias paleoclimáticas en duricostras, paleosuelos y sedimentitas... 679

den observarse fábricas grano-soportadas


(GS), típicas de silcretes formados a par-
tir de areniscas sin matriz y flotantes (F),
comunes en aquellos generados por reem-
plazo de materiales arcillosos o carboná-
ticos. En muchas muestras estas fábricas
coexisten, debido a que el proceso de si-
licificación ha tenido lugar en areniscas
con abundante matriz.
Cuando el material hospedador de los
silcretes son areniscas, la forma de sílice
más común es el ópalo castaño que relle-
na la mayor parte del espacio intergranu-
lar y forma lentes masivos. Los rellenos
porales complejos son muy frecuentes y
tienen estructura botroidal o mamelonar.
En las calizas la sílice se presenta como
reemplazo del carbonato o como relle-
nos milimétricos a centimétricos. En el pri-
mer caso el carbonato ha sido reempla-
zado por sílice, pero conservando las es-
tructuras.
Interpretación: La superposición de varios
horizontes de silcretes, la preservación
de las estructuras de las rocas hospeda-
doras, la escasa extensión areal, la forma-
ción de lentes masivos y rellenos porales
complejos y la carencia de un sector su-
perior columnar, indican que los silcretes
se han generado por silicificación a partir
de aguas subterráneas (Thiry 1999). Cada
horizonte silcretizado indica distintas po-
siciones de la capa de agua y se relaciona
con la disección de la paleosuperficie.

FORMACIÓN ASENCIO
La paleosuperficie Yapeyú (Fig. 3e) mar-
ca un cambio en las condiciones climáti-
cas, ya que sobre ella se disponen sedi-
mentitas fluviales representadas por ca-
nales de baja jerarquía y niveles de paleo- Figura 3: a) afloramiento de calcretes freáticos de la Formación Queguay, Cantera El Vichadero,
suelos apilados. Los procesos de ferrifi- Paysandú; b) corte delgado de calcrete freático con fábrica; c) afloramiento caliza palustre,
cación son posteriores a la sedimentación Migues; d) corte delgado de caliza palustre con textura peloidal-intraclástica y restos de microfó-
siles fragmentados (flecha blanca); e) paleosuperficie Yapeyú, por debajo Formación Mercedes,
de toda la sucesión y afectaron en pro- sobre el contacto coraza ferruginosa de la Formación Asencio, arroyo Vera; f) estrato nodular de
fundidad hasta dicha paleosuperficie, la la Formación Asencio con icnofósiles (flecha blanca), cantera Palmitas; g) aspecto general de la
que habría actuado como barrera geoló- Formación Fray Bentos, Nueva Palmira; h) corte delgado de loess de la Formación Fray Bentos
con numerosas trizas vítreas (flecha negra).
gica para la migración en profundidad de
las soluciones (Pazos et al. 1998). Según cambio es neta y suavemente irregular en En la cantera Espiga cercana a Nueva
estos mismos autores la paleosuperficie la cuenca del arroyo Coquimbo (Fig. 1) Palmira (Fig. 1) y en una cantera abando-
se presenta neta y subhorizontal en Pedro donde se observan fracturas por las cua- nada en las proximidades de Paysandú, se
Chico y la Gruta del Palacio (Fig. 1) y en les han penetrado las soluciones. ha observado también una topografía
680 O. R . T Ó FA L O Y H . J. M . M O R R Á S

marcadamente irregular de dicho límite, as canalizadas y son macizos y clasto-so- sitos lentiformes con base cóncava y ero-
con lenguas de unos 2 m de profundidad portados (González et al. 1998, Pazos et siva, correspondientes a canales.
del material ferruginoso de color rojizo al. 1998), aunque hay niveles matriz-so- Microscópicamente las rocas que consti-
de la Formación Asencio penetrando en portados, están formados por nódulos de tuyen esta facies están formadas por 40%
el tope de la Formación Mercedes. color rojo oscuro (5R 3/4) a rojo grisá- de material arcilloso impregnado por óxi-
Bellosi et al. (2004), determinan dos fa- ceo (5R 3/6), inmersos en material arci- do de hierro, en el que "flotan" 35% de
cies en la Formación Asencio (en el sen- lloso más claro con tonalidades que varí- clastos tamaño arena muy fina y limo
tido de Pazos et al. 1998, 2002): duricos- an entre amarillo grisáceo (5Y 8/4), rosa- grueso (Fig. 3 h), subangulosos constitui-
tras ferruginosas y estratos nodulares ma- do grisáceo (5R 8/2) y gris amarillento dos por cuarzo (50% de los clastos) equi-
cizos, interdigitados y repetidos hasta 3 y 4 (5Y 8/1), (Fig. 3 f). Son frecuentes los dimensional a prolado, entre los que se
veces en el espesor total de la formación. pasajes laterales y verticales transicionales distinguen granos con crecimiento se-
de costras a estratos nodulares, por au- cundario fracturado, con extinción ondu-
Duricostras ferruginosas mento en el porcentaje de material arci- lante, policristalinos y fragmentos de cal-
Descripción: De acuerdo con los estudios lloso (Bellosi et al. 2004). cedonia. Entre los feldespatos tabulares
de Bellosi et al. (2004), están formadas por Interpretación: De acuerdo con estos últi- (35%) predominan las plagioclasas sobre
areniscas rojas arcillosas, muy endureci- mos autores es común la preservación de la ortosa. Los vitroclastos, en ocasiones
das y macizas, tabulares, onduladas o len- parches de duricostras rodeados por es- devitrificados son porcentualmente im-
ticulares de 0,5 a 2,5 m de espesor (Fig. 3 tratos nodulares, lo que sugiere que estos portantes (10-20%) y no muestran indi-
e). Las más compactas son rojo oscuras últimos se originaron por meteorización cios de haber sido retransportados (Fig.
(5R 3/4), con abundantes marcas de raí- química de las primeras. Este proceso se 3h). Las pastas de rocas volcánicas bási-
ces, mientras que las de menor consolida- denomina desmantelamiento y se debe a cas pueden alcanzar el 10% y su grado de
ción tienen estructura edáfica prismática la desintegración superficial de los ferri- alteración puede ser muy intenso. Los mi-
o en bloque e incluyen abundantes nidos cretes debido a un importante incremen- nerales accesorios más comunes (2% a 3%)
de abejas y coleópteros (Icnofacies de to en las precipitaciones, que produce la son los opacos, micas, epidoto, hornblen-
Coprinisphaera). Ambas tienen microes- corrosión de la hematita y la formación da y augita.
tructura compleja, predominantemente de estratos nodulares residuales. Interpretación: Las características de la fa-
esponjosa, fábrica-b grano y poroestriada Posteriormente un nuevo período de se- cies clástica de la Formación Fray Bentos
y fuerte enriquecimiento en arcilla iluvia- dimentación seguido por las condiciones revelan que son sedimentos loéssicos de-
da, lo que permite caracterizarlas como aptas para la formación de Ultisoles, con positados en zonas de clima semiárido y
horizontes Bt. La fracción gruesa está for- precipitaciones entre 1.300 y 1.700 su composición muestra una procedencia
mada principalmente por cuarzo mono- mm/año, iniciaría un nuevo ciclo. mixta, con importante aporte de arco mag-
cristalino (85-90%), acompañado por mático. La abundancia de paleosuelos in-
otras variedades de sílice y muy escasa FORMACIÓN FRAY BENTOS dica que los procesos de sedimentación
proporción de fragmentos de rocas gra- fueron discontinuos.
níticas y feldespatos. En la Formación Fray Bentos (Fig. 3g), se
Interpretación: Las citadas características in- han reconocido siete facies, una silicoclás- Paleosuelos
dican un proceso de ferruginación en cli- tica, una pedogénica y cinco correspon- Descripción: Los paleosuelos (Fig. 4a), tie-
ma cálido, húmedo y estacional y según dientes a distintos tipos de calcretes. La nen estructura prismática gruesa y ocasio-
González (1999) los paleosuelos se clasi- coloración general de la formación es gris nalmente en bloques subangulares muy
fican como Ultisoles. rosado (5YR 8/1) a castaño claro (5YR finos (Fig. 4b) y pueden reconocerse dis-
Durante lapsos de desecamiento prolon- 6/4). tintas variedades de rizolitos. Microscópi-
gado se habría producido la deshidrata- camente son muy comunes los revesti-
ción de los suelos, endurecidos por una Facies silicoclástica mientos arcillosos y carbonáticos de gra-
densa red de cristales de hematita, formán- Descripción: Está constituida por depósitos no y de poros y se ha observado fábrica-
dose las duricostras o ferricretes, las que limosos con base neta y techo transicional. b moteada, estriada paralela y poroestria-
por sus abundantes rasgos edáficos e ic- Son mantiformes, con paredes verticales, da y en algunos niveles son comunes los
nofauna se consideran de origen edáfico generalmente masivos, aunque en ocasio- nódulos disórticos.
(Bellosi et al. 2004). nes se puede observar cierta laminación
borrosa causada por la precipitación de Calcretes
Estratos nodulares carbonato en bandas difusas y a veces Pueden observarse variedades nodulares,
Descripción: Forman niveles irregulares y discontinuas de 0,5 a 1,5 cm de espesor. brechosas, masivas y laminares y se des-
discontínuos que no presentan geometrí- Ocasionalmente pueden observarse depó- cribe aquí brevemente un nuevo tipo de
Evidencias paleoclimáticas en duricostras, paleosuelos y sedimentitas... 681

Figura 4: a) Paleosuelo de
la Formación Fray Bentos,
Fray Bentos; b) corte del-
gado de paleosuelo de la
Formación Fray Bentos
con microestructura en
bloques; c) calcrete nodu-
lar; d) calcrete brechoso; e)
calcrete masivo; f) calcrete
laminar; g) calcrete tubular;
h) calcrete tubular (vista en
planta); i) calcrete tubular
microrelieve tipo gilgai (las
flechas negras indican las
depresiones).
682 O. R . T Ó FA L O Y H . J. M . M O R R Á S

calcrete, aparentemente no citado en la li- rrelieve oscila generalmente entre los 20 plejos de calcretes con varias facies, des-
teratura, que denominamos tubular. y 30 cm. de calcretes nodulares a laminares, carac-
Descripción: En los primeros (Fig. 4c) el Interpretación: Los nódulos (Fig. 4c) se ori- terizan a los calcretes pedogénicos, que
porcentaje de nódulos en el material hos- ginan por concentración de carbonato en son propios de suelos bien drenados. Se
pedador (loess o paleosuelos) oscila de el material hospedador, del cual conser- forman por agua meteórica que produce
10% a 70%. Son aproximadamente equi- van relictos. Los órticos se forman por la la lixiviación del loess, a medida que des-
dimensionales, subredondeados y contie- difusión de carbonato en determinados ciende. Si la estación seca coincide con
nen un porcentaje aleatorio del material puntos seguido por precipitación, despla- veranos calientes, las soluciones alcalinas
hospedador. zamiento, y reemplazo de los granos de- saturadas, tienden a ascender por acción
En los calcretes brechosos (Fig. 4d) el car- tríticos. Los nódulos disórticos también capilar y al evaporarse se produce la pre-
bonato forma cubiertas continuas alrede- son formados in situ pero desplazados por cipitación de carbonato.
dor de fragmentos angulosos tamaño gui- pedoturbación, posiblemente por la acti- Un elemento interpretativo fundamental
ja y guijarro, correspondientes a calcretes vidad biológica. de la génesis del calcrete tubular (Figs.
masivos, a paleosuelos y a clastos terríge- El origen de los calcretes brechosos (Fig. 4g-h), es el microrrelieve de estos niveles,
nos, a los que ha desplazado determinan- 4d) se explica por expansión del material que se deduce en los cortes verticales y se
do fábrica flotante secundaria. arcilloso, fracturación por crecimiento de puede observar en las exposiciones en
Los calcretes masivos (Fig. 4e) tienen fá- raíces, humedecimiento y desecamiento al- planta. Este microrrelieve de crestas y va-
brica alfa, en la que los elementos consti- ternante (expansión y contracción) y ex- lles con un patrón aproximadamente cir-
tuyentes del material hospedador han sido pansión térmica, que causan la rotura y cular ha sido observado en distintos tipos
separados, corroídos, reemplazados y ce- rotación del material hospedador o de de suelos (Blokhuis 1983). Dadas las con-
mentados por calcita. La micrita primaria calcretes ya formados. diciones paleoambientales del área y que
ha recristalizado a microesparita con tex- Los calcretes masivos (Fig. 4e) se forman la composición de la fracción fina de la
tura microgranular. Son comunes las cris- por desplazamiento y reemplazo del ma- formación presenta una proporción impor-
talarias tanto circumgranulares como irre- terial hospedador por calcita, debido a tante de minerales expansibles (Ferrando
gulares y entrecortadas. procesos de evaporación, evapotranspi- y Daza 1974, citado por Puentes y Altami-
Los calcretes laminares (Fig. 4f) presen- ración y pérdida de gases. La micrita ori- rano, 1975, Bossi y Navarro, 1988), se con-
tan bandas de 3 mm a 1,5 cm de espesor, ginal refleja precipitación rápida en la sidera que la morfología de la paleosuper-
lateralmente discontínuas, debidas a la al- zona vadosa, a partir de soluciones su- ficie corresponde a la de un microrrelieve
ternancia de láminas de calcita, con otras persaturadas, produciendo la destrucción ¨gilgai¨ de tipo normal de suelos Vertisoles
formadas por fragmentos angulosos de de la fábrica primaria. La abundancia de (Fig. 4i).
paleosuelos, calcretes y pellets, cementa- microesparita secundaria se debe a pro- Estos suelos se caracterizan asimismo por
dos por carbonato de calcio. cesos de disolución y reprecipitación una estructura prismática muy gruesa de-
Los calcretes tubulares (Fig. 4g) están (Tandon y Narayan 1981). rivada de procesos de expansión-contrac-
constituidos por unidades estructurales Los calcretes laminares (Fig. 4f) tienen ción, posibilitada por la existencia de arci-
carbonáticas de morfología tubular, de dos orígenes posibles, uno es inorgánico llas esmectíticas y condiciones climáticas
desarrollo vertical variable, de sección y está relacionado con la dificultad para alternantes secas y húmedas de duración
circular o pseudohexagonal y que encie- que el agua llegue hasta la capa freática variable (Ahmad 1983, Blokhuis 1983,
rran en su interior el material limoso y de debido a la presencia del calcrete masivo Wilding 2004). Dado asimismo que el lí-
color rosado típico de la formación. impermeable. Por esta causa las solucio- mite mínimo de precipitación necesario
En corte vertical (Fig. 4g) los tubos se nes tienden a fluir lateralmente como una para la formación de un microrrelieve gil-
presentan yuxtapuestos formando nive- película sobre el techo de dicho calcrete y, gai es de unos 500 mm anuales (Jewitt et
les continuos, con una potencia que osci- al producirse evaporación, se forma una lá- al. 1979, citado por Blokhuis 1983), am-
la entre 100 y 350 cm. Estos niveles pre- mina carbonática. La superposición de es- bos elementos sugieren para esta paleo-
sentan límites superior e inferior ondula- tas bandas genera los calcretes laminares superficie condiciones climáticas subhú-
dos, siendo en general este último el de (Braithwaite 1979, Semeniuk y Meagher medas con déficits hídricos estacionales.
mayor amplitud de onda. 1981). La segunda está relacionada con la Las estructuras carbonáticas tubulares, en
En planta (Fig. 4h) el límite superior de tendencia de las raíces a ocupar posicio- consecuencia, pueden ser interpretadas
estos niveles carbonáticos presenta un mi- nes horizontales o subhorizontales, debi- como rellenos posteriores, fosilizando un
crorrelieve con un patrón circular o pseu- do a que no pueden introducirse en el cal- patrón de fisuración de origen edáfico, a
dohexagonal. El diámetro de las depre- crete masivo (Semeniuk y Meagher 1981, partir de la solubilización de carbonatos
siones circulares oscila alrededor de los Wright et al. 1988, Alonso Zarza 1999) de depósitos más recientes.
300 cm y la variación de altura del micro- La presencia de perfiles maduros y com- En términos generales, la presencia de es-
Evidencias paleoclimáticas en duricostras, paleosuelos y sedimentitas... 683

tos diversos tipos de calcretes muestra re- reactivación en la sedimentación. Ambas Interpretación: La geometría de los depósi-
ducido aporte clástico y pueden indicar secciones se caracterizan por una asocia- tos de la Formación Libertad, el tipo de
límites de secuencias (Alonso Zarza 2003). ción de litofacies Ss (rápida depositación de estratificación, la propiedad de mantener-
La acumulación de carbonato de calcio carga de lecho gruesa), Sp (depósitos ge- se en paredes verticales, el color, el tama-
en el horizonte B de suelos es el principal nerados por migración de dunas bidimen- ño de grano con modas en las fracciones
proceso pedogénico que ocurre en zonas sionales) y Sr (trenes de pequeñas óndu- limo y arcilla, acompañadas por porcenta-
subtropicales secas (Mack y James 1994) las) que yacen sobre base cóncava y ero- jes variables de arena fina y muy fina, in-
y la formación de calcretes se ve favore- siva, lo que indica que corresponden a dican que esta unidad corresponde a de-
cida por lluvias que oscilan entre 500 y depósitos de relleno de canal. La litofa- pósitos loessicos, acumulados por el vien-
600 mm/año (Goudie 1973). Sin embar- cies Fm (depósitos generados a partir de to en regiones semiáridas de escasa pen-
go el límite superior de precipitación me- suspensiones) se interpreta como depósi- diente. El nivel paleoedáfico que se obser-
dia anual podría superar los 600 mm tos de llanura de inundación (Tófalo et al. va en el sector medio e inferior de la for-
(Mack y James 1994) y el inferior ser de 2006b). mación se caracteriza por la presencia de
solo 50 mm (Alonso Zarza 2003). El paleosuelo en el tope de la unidad es- horizontes B de iluviación.
taría vinculado a un período de no depo-
FORMACIÓN RAIGÓN sitación, desarrollado probablemente SÍNTESIS DE LA
bajo condiciones estacionales, con iluvia- EVOLUCIÓN GEOLÓGICA
Descripción: En las barrancas costeras del ción de arcillas durante los períodos hú-
Río de La Plata la Formación Raigón tiene medos y precipitación de carbonato en Las cuencas de Paraná y Santa Lucía, fue-
un espesor de aproximadamente 5 m y las estaciones secas. El material arcilloso ron colmatadas durante el Cretácico tardío.
pueden identificarse claramente los dos predominante sería la esmectita (Tófalo Debido a esto la Formación Mercedes,
sectores diferenciados por Tófalo et al. et al. 2009). presenta abundantes conglomerados en la
(2006b). base, pero solo registra areniscas media-
El inferior de color gris rosado (5YR FORMACIÓN LIBERTAD nas y finas hacia el techo y niveles de pa-
8/1) a naranja grisáceo (5Y 7/4), tiene leosuelos, que indican una interrupción
una potencia de 2 a 2,4 m y el superior de Descripción: Tiene geometría tabular, es- en la sedimentación.
color naranja grisáceo (5Y 7/4) a naranja tratificación gruesa, forma paredes verti- El Cenozoico temprano se caracteriza
rojizo moderado (10R 6/6), tiene un des- cales y su espesor es de aproximadamen- por el predominio de procesos no depo-
arrollo vertical de 3 m. Ambos sectores te 5 m. Es friable a moderadamente con- sitacionales, con generación de calcretes,
están formados por una sucesión grano- solidada. El color varía de rosado naran- carbonatos palustres y paleosuelos. Du-
decreciente de bancos tabulares y lenticu- ja grisáceo (10R 8/2) a rojo moderado rante el Paleoceno, la baja tasa de sedi-
lares, con estratificación fina a gruesa. Los (5R 5/4). No presenta estructuras sedi- mentación y la subsidencia causaron una
bancos tienen base erosiva y son grano- mentarias internas y está compuesta por gradual depresión de las cuencas. En este
decrecientes desde grava fina o sábulo (li- material limo-arcilloso que contiene can- marco y bajo clima predominantemente
tofacies Ss), areniscas gruesas a medianas tidades variables de arena fina y muy fina. semiárido y estacional, con rangos eleva-
con estratificación entrecruzada tabular Esta formación incluye un paleosuelo y dos de evaporación y evapotranspiración,
(litofacies Sp), culminando con arenas me- en el tope se desarrolla el suelo actual. se desarrollaron calcretes de aguas subte-
dianas a finas con óndulas (litofacies Sr) y El paleosuelo no es uniforme a lo largo rráneas que se expandieron lateralmente.
esporádicamente bancos pelíticos maci- de la ribera sino que presenta variabilidad En ocasiones, la capa freática intersectó a
zos (litofacies Fm). Composicionalmente lateral en ciertas características. En algu- la superficie y se desarrollaron carbona-
las psefitas tienen clastos de rocas plutó- nos sectores presenta dos horizontes B tos palustres. Estos depósitos constitu-
nicas y metamórficas y las psamitas son profundos, estructurados en bloques, con yen la Formación Queguay (Fig. 2).
cuarzo-feldespáticas. El tope de la for- revestimientos arcillosos oscuros y una En el Eoceno temprano, períodos de se-
mación está edafizado (litofacies Fr), y se proporción importante de carbonato de dimentación representados por depósi-
observan estructuras poliédricas, revesti- calcio, principalmente como rizoconcre- tos de canales de baja jerarquía y de llanu-
mientos de arcilla y de manganeso y ciones. En este caso no tiene horizonte C ra de inundación, fueron interrumpidos
abundantes acumulaciones de carbonato y el horizonte B del paleosuelo en Libertad por otros de no depositación, lo que per-
de calcio de morfologías variadas siendo se encuentran soldado con el horizonte B mitió la generación de varios niveles de
notorias las rizoconcreciones. del paleosuelo en Raigón. En otros secto- Ultisoles, ferricretes y niveles nodulares,
Interpretación: la discontinuidad de carácter res se observa la secuencia Bt-BC-C, con formados en clima subtropical húmedo a
regional que separa los dos sectores de la un nivel loéssico de poco espesor en la base tropical seco, correspondientes a la Forma-
Formación Raigón marca un episodio de de la formación (Tófalo et al. 2009). ción Asencio (Fig. 2).
684 O. R . T Ó FA L O Y H . J. M . M O R R Á S

Procesos de erosión generaron la discor- lustres del Paleoceno correspondientes a Soil Taxonomy. II. The Soil Orders. En Wilding,
dancia sobre la que se depositaron los se- la Formación Queguay, indican períodos L., Smeck, N. y Hall, G. (eds.) Elsevier,
dimentos del Oligoceno y Mioceno tem- o áreas con reducido aporte clástico y cli- Developments in Soil Science 11B: 91-123,
prano, épocas caracterizadas por un en- ma predominantemente semiárido, con Amsterdam.
friamiento global y retracción del nivel del estaciones húmedas y secas bien marca- Alonso Zarza, A. 1999. Inicial stages of laminar
mar. Los movimientos incaicos habrían das. El límite transicional entre ambos de- calcrete formation by roots: examples from
generado nuevos espacios de acumula- pósitos sugiere levantamiento progresivo the Neogene of central Spain. Sedimentary
ción en los que se depositó la Formación de la capa freática. Geology 126: 177-191.
Fray Bentos (Ubilla et al. 2004) en clima - Durante el Eoceno habría predominado Alonso Zarza, A. 2003. Palaeoenvironmental sig-
semiárido, con intervalos más secos y frí- clima subtropical húmedo a tropical seco, nificance of palustrine carbonates and calcre-
os durante los que sedimentó loess y otros lo que permitió la generación de Ultisoles, tes in the geological record. Earth-Science
relativamente más húmedos, que permitió formación de ferricretes en lapsos de de- Reviews 60: 261-298.
la formación de paleosuelos y calcretes secamiento prolongado, con desmantela- Andreis, R. y Mazzoni, M. 1967. Sedimentología
pedogénicos (Fig. 2). miento de los niveles superiores por rehi- de las Formaciones Kiyú y San José. Depar-
Durante el Mioceno tardío se produce dratación debido a fuerte incremento de amento de San José, R. O. del Uruguay. Revista
una importante ingresión marina, cuyos las precipitaciones. del Museo de La Plata (Nueva Serie), Sección
depósitos más extensos se encuentran en - Desde fines del Eoceno al Mioceno tem- Geología 6: 41-96.
Argentina, donde se conocen como Forma- prano habría predominado un clima se- Arakel, A.V. 1982. Genesis of calcrete in
ción Paraná, mientras que en Uruguay miárido, con fases más secas durante las Quaternary soil profiles, Mutt and Leeman la-
solo se los observa en algunos sitios de la que se depositó loess y otras relativamen- goons, western Australia. Journal of Sedimen-
costa del Río de La Plata y se denominan te más húmedas con déficit hídrico esta- tary Petrology, 1: 109-126.
Formación Camacho. cional, en las que se generaron paleosuelos Banerjee, P., 1998. Basic research on laterites in
Luego de retirarse el mar mioceno, se de- bien drenados y calcretes pedogénicos. tropical countries. Quaternary Intenational
positan sedimentos continentales fluvia- - Los sedimentos fluviales del Plioceno 51/52: 69-72.
les, en clima húmedo, correspondientes a tardío-Pleistoceno, indican períodos húme- Bellosi, E, González M. y Genise, J. 2004. Origen
las Formaciones Raigón y Salto (Plioceno dos. El paleosuelo del tope de la Formación y desmantelamiento de lateritas paleógenas
tardío-Pleistoceno medio), (Fig. 2), con- Raigón, se habría formado bajo condi- del sudoeste de Uruguay (Formación Asencio).
trolados estructuralmente por una tectó- ciones climáticas estacionales. Revista Museo Argentino de Ciencias Naturales
nica joven relacionada a la reactivación - Los depósitos loessicos el Pleistoceno 6(1): 25-40.
de lineamientos NO y subordinadamente temprano a medio se habrían depositado Blokhuis, W.A. 1983. Morphology and genesis of
NE y NS (Veroslavsky y Montaño 2004). durante intervalos glaciales y habrían sido Vertisols. En Vertisols and rice soils of the
Cabe destacar que ambas formaciones modificados por pedogénesis durante pe- tropics. 12th International Congress of Soil
presentan una discontinuidad de carácter ríodos interglaciales o interestadiales. Science, Symposia Papers 2: 23-47, New Dehli.
regional que marca un episodio de reacti- Bossi, J. 1966. Geología del Uruguay. Universidad
vación en la sedimentación, probable- AGRADECIMIENTOS de la República, Colección Ciencias 2, 464 p.,
mente relacionado a actividad tectónica Montevideo.
penecontemporánea y que separa dos ci- Loa autores desean expresar su agradeci- Bossi, J. y Navarro, R. 1988. Geología del Uruguay.
clos de depositación. miento a la Universidad de Buenos Aires, Universidad de la República, Publicaciones
Durante el Cuaternario, en ambiente con- que posibilitó la realización del trabajo en 2(15): 761-809, Montevideo.
tinental de praderas o estepas, sedimentó el marco de los proyectos UBACyT X236 Bossi, J., Ferrando, L., Fernández, A., Elizalde, G.,
la Formación Libertad (Pleistoceno tem- y X219. Asimismo agradecen a los árbi- Morales, H., Ledesma, J., Carballo, E., Medina,
prano a medio), con depósitos loéssicos, tros Dres. Marcelo Zárate y Oscar Orfeo, E., Ford, I. y Montaña, J. 1975. Carta Geológica
paleosuelos y calcretes, que indican un cuyas sugerencias y comentarios permi- del Uruguay, a escala 1:1.000.000. Dirección de
período de calma tectónica y la existencia tieron mejorar el manuscrito. Suelos y Fertilizantes, 1-32, Montevideo.
de un clima predominantemente semiári- Bossi, J., Ferrando, Montaña, J., Campal, N.,
do estacional con fluctuaciones de las con- TRABAJOS CITADOS EN EL TEXTO Morales, H.,Gancio, F., Schipilov, A., Pyñeyro,
diciones climáticas y varios ciclos de ero- D. y Sprechmann, P. 1998. Memoria explicati-
sión, sedimentación y pedogénesis. Achyuthan, H. 2004. Paleopedology of ferricrete va de la Carta Geológica del Uruguay, a esca-
horizons around Chennai, Tamil Nadu, India. la 1:500.000. Universidad de la República
CONCLUSIONES Revista Mexicana de Ciencias Geológicas 21(1): CDR. Montevideo.
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- Los calcretes freáticos y carbonatos pa- Ahmad, N. 1983. Vertisols. En: Pedogenesis and teritic" duricrust in Western Australia. Quater-
Evidencias paleoclimáticas en duricostras, paleosuelos y sedimentitas... 685

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