GIMNASIO VERMONT

DEPARTAMENTO DE ESPAÑOL Y LITERATURA

EL AMBIENTE EN UNA OBRA LITERARIA

Undécimo Grado

El ambiente es el espacio en cual se desarrolla el relato; en él se mueven los personajes y de manera general puede ser
físico o psicológico, aunque de esa escueta taxonomía surgen ramificaciones que se mueven hacia el infinito.

Ambiente físico

Es el lugar donde los personajes existen, viven o se mueven. Dentro de él se pueden considerar dos aspectos: el local y el
temporal.

El ambiente físico local: es el lugar donde están situados los personajes y se desarrollan los acontecimientos. Puede ser
de dos tipos:

Lugar determinado: Bogotá, Buenos Aires.

Determinado, pero ficticio. Macondo, Yonatapawa.

El ambiente físico local se encuentra caracterizado en la narración, es decir, se señalan datos sobre él que nos permiten
conocerlo. A veces, esta información es entregada directamente por el narrador, pero en otras ocasiones se extrae de la
propia historia.

El ambiente físico temporal: se refiere a la época histórica en la cual transcurren los hechos. Puede ser la época actual, es
decir, el presente. Por ejemplo: "En la casa del lado viven dos hermanitas...". Además, aunque la obra esté situada, por
ejemplo, hace unos años atrás, se sigue considerando el ambiente físico temporal como presente, ya que se trata de la
época histórica actual.

La época

Puede ser una época pasada, por ejemplo: "Esta historia tuvo lugar durante la Segunda Guerra Mundial"; o remontarse
al futuro, por ejemplo: "A comienzos del año 2050...". En este último, se trataría de narraciones fantásticas, o de ciencia
ficción. En ambos casos, no importa que el autor de la obra sea de esta época. Él puede situar su historia en cualquier
período, gracias a la imaginación propia, y a la recepción de los lectores.

Ambiente psicológico

Es la atmósfera o clima emocional o psicológico, en la cual se desarrollan los acontecimientos. Este espacio está creado
por todos los elementos presentes en la historia, aunque se hayan puesto en ella sin perseguir necesariamente ese fin.
Los factores que influyen en la creación de un ambiente psicológico no siempre pueden delimitarse con claridad.

Fragmento del cuento Luvina, de Juan Rulfo:

"De los cerros altos del sur, el de Luvina es el más alto y el más pedregoso. Está plagado de esa piedra gris con la que hacen
la cal, pero en Luvina no hacen cal con ella ni le sacan ningún provecho. Allí la llaman piedra cruda, y la loma que sube
hacia Luvina la nombran cuesta de la Piedra Cruda. El aire y el sol se han encargado de desmenuzarla, de modo que la
tierra de por allí es blanca y brillante como si estuviera rociada siempre por el rocío del amanecer; aunque esto es un puro
decir, porque en Luvina los días son tan fríos como las noches y el rocío se cuaja en el cielo antes que llegue a caer sobre
la tierra."

El ambiente físico local: un pueblo determinado pero ficticio, llamado "Luvina".

Caracterización física del ambiente: el narrador nos dice que el pueblo está situado en un cerro, que es alto y pedregoso,
con tierra blanca y brillante, y que en él hace mucho frío.

El ambiente psicológico: no se dice nada específico, pero la sensación que emana de lo físico es de ambiente hostil, con
frío, tierra y piedras. Todos los elementos, que fueron puestos allí para definir el ambiente físico, permiten la percepción
del ambiente psicológico en el que transcurrirá el resto del relato.

Diferencia entre el espacio y el ambiente

El espacio se refiere a aspectos físicos. El autor hace saber al lector en dónde se desarrollan los acontecimientos, se hace
alusión a todo lo físico que les rodea: una casona, un patio, un hospital, una escuela, la calle, etcétera.

El ambiente se refiere a aspectos no físicos, es el clima psicológico que crea el autor para transmitir terror, alegría,
tristeza, soledad, etcétera. En algunas obras, la escenografía y la utilería ayudan a crear determinado ambiente en el
ánimo del lector, aunque en otras, el ambiente psicológico puede contrastar con el ambiente físico, es decir, con la
escenografía.

No confundir el espacio con el ambiente. El espacio es el marco físico donde los personajes y los acontecimientos se
desarrollan, y el ambiente es el clima psicológico de la narración, forma parte del marco; es un elemento del espacio
narrativo.

El ambiente también se puede catalogar como real o ficticio, rural o urbano, actual o histórico, determinante o
condicionante de los personajes.

La atmósfera o clima espiritual, es el sentimiento general que preside la obra. Puede ser de misterio, terror, suspenso,
alegría, tensión, romance, asfixiante, caótico, idílico, bélico, etc.

Espacios Físicos Abiertos: son aquellos espacios exteriores, de afuera, que son muy grandes o amplios para el desarrollo
de los hechos y que dan libertad a los personajes para actuar, pues cuentan con el lugar para hacerlo, plazas públicas,
avenidas, autopistas, ríos, mares, montañas, etc. El clima es definitivo a la hora de adentrarse en el análisis de un espacio
abierto.

Espacios Físicos Cerrados: son los espacios reducidos y pequeños, que limitan y entraban las acciones que ejecutan los
personajes en la narración, casas, habitaciones, tiendas, cubículos de la cárcel, cuartos de hospital, etc.

Afirma Bachelard (Francia, 1884 1962) en la Poética del Espacio (1932) lo siguiente:

“Para un estudio fenomenológico de los valores de intimidad del espacio interior, la casa es, sin duda alguna, un ser
privilegiado, siempre y cuando se considere la casa a la vez en su unidad y su complejidad, tratando de integrar todos los
valores particulares de un valor fundamental. La casa nos brindará aun tiempo imágenes dispersas y un cuerpo de
imágenes” (p 33)

“Todo espacio habitado lleva como esencia la noción de casa” (…) el ser amparado sensibiliza los límites de su albergue.
Vive la casa en su realidad y en su virtualidad, con el pensamiento y los sueños” (p 35)

El filósofo se refiere al topoanálisis como el “estudio psicológico sistemático de los parajes de nuestra vida íntima” porque
es esa vida íntima la que impregna cada espacio dotándolo de significado. En la literatura ningún espacio resulta gratuito,
cada uno tiene honda repercusión en la vida de los personajes.
Objetos. Ahora bien, qué sería de los espacios sin la presencia de los objetos. Los objetos definen historias, sustentan las
experiencias de los personajes, guardan la memoria, conectan el presente con el pasado. A propósito de los objetos dice
Bachelard:

“Los objetos así mimados nacen verdaderamente de una luz íntima; ascienden a un nivel de realidad más elevado que los
objetos indiferentes, que los objetos definidos por la realidad geométrica. Propagan una nueva realidad del ser. Ocupan
no solo su lugar en un orden, sino que comulgan con ese orden. De un objeto a otro, en el cuarto, los cuidados caseros
también tejen lazos que unen un pasado muy antiguo con el día nuevo. El ama de casa despierta los muebles dormidos.”
(p 100)

Un ejemplo de objetos importantes son los cajones por su carácter de misterio, de incremento de la intimidad. En el cajón
nos es posible hacer labores de archivo, y a través de ella las posibilidades de conceptualización son abundantes.

“Como es sabido, la metáfora del cajón, y algunas otras como la de “el traje hecho”, son utilizadas por Bergson para
explicar la insuficiencia de una filosofía del concepto. Los conceptos son cajones que sirven para clasificar los
conocimientos; los conceptos son trajes hechos que desindividualizan los conocimientos vividos. Cada concepto tiene su
cajón en el mueble de las categorías” (p. 108)

El mundo de los objetos, los rincones de la casa, las puertas, las ventanas, los lugares secretos, son definitivos a la hora de
analizar un ambiente. Según Bachelard tienen sentido expresiones como “leer una casa”, “leer un cuarto”, “leer un cajón”.

Espacio psicológico: es el ambiente espiritual que rodea al entorno, influye en las formas de actuar que tengan los
personajes. Este espacio es el que cada personaje tiene en su interioridad, en directa relación con sus sentimientos, sean
de alegría, angustia, frustración u otros, además es importante recordar que el espacio psicológico se conecta con el
entorno material.

Espacio social: es el espacio cultural en el cual están las ideas ético-morales, los pensamientos religiosos y políticos, entre
muchos más que rodeen a los hechos ejecutados por los personajes. Es decir, es el entorno en que se realiza la acción.

Tipos de descripción de los escenarios en la narración:

Descripción Estática

Es la descripción sin movimiento del narrador mismo o un personaje. Esto implica que se cuenta la historia desde un punto
fijo, donde el que cuenta no se mueve en la medida en la que transcurren los hechos o varían los espacios.

Descripción Dinámica

Recibe también el nombre de Descripción Cinematográfica y es porque justamente esta descripción se asocia a una
cámara filmadora, ya que el narrador va moviéndose según avanzan los hechos o cambian los escenarios de la acción y de
esta forma va relatando lo que acontece.

Descripción Objetiva

El narrador busca retratar de modo verídico y real los hechos que ve y esto lo plasma por escrito; solo se hace una
descripción fiel de la realidad del mundo representado.

Descripción Subjetiva

El narrador muestra lo que ve desde un punto de vista más personal y cercano, con una gran sensibilidad, lo que hace que
él sienta la libertad de interpretar las acciones y, de la misma forma, exista un ambiente de confianza para poder plasmar
el cómo se siente, lo que piensa acerca de los acontecimientos y exprese sus sentimientos.
Conclusión

Importancia del espacio.

“La emergencia de algunas corrientes teóricas en las últimas décadas (la ecocrítica, el ecofeminismo o la ecosofía) han
actualizado la relevancia de esta categoría cultural que guarda una íntima relación con cuestiones tan importantes como
la expresión de la identidad.

De hecho, nuestra imagen del mundo depende básicamente de las configuraciones espaciales que han quedado fijadas
en el imaginario colectivo a través de la literatura universal: el Londres de Dickens, el París de Zola, la Lisboa de Pessoa, el
Buenos Aires de Mallea, La Habana de Lezama Lima, el Macondo de García Márquez son sólo ejemplos del arraigo que el
espacio literario logra alcanzar en nuestra cultura; una cultura basada, al fin y al cabo, en la representación.

Por otro lado, la relación entre espacio literario e identidad es intensa y prolongada. Las reflexiones de la ecosofía o la
ecocrítica, no hacen más que enfatizar la necesidad de un análisis más profundo sobre el discurso y las representaciones
artísticas del espacio, en relación con nuestra conciencia del mismo”. (tomado de:
http://www.mipaginapersonal.movistar.es/web3/aliciallarena/printable/00000098fc05fa903/0000009cf512a6a02/index.html)

FUENTES:

Bachelard, G. (1997) La poética del espacio. Fondo de cultura económica, México. D.F.