ENSAYO: ENTREGA FINAL SEMANA 7

MIGRACIÓN VENEZOLANA INFLUYENTE EN LA DEMOCRACIA DE COLOMBIA

ARISMENDI MARTÍNEZ MILANGIE TATIANA - 1821022761

BOJACÁ RODRÍGUEZ DANIELA - 1821022100
CORONADO DUARTE WILMAR - 1821020431
COY BENAVIDES LEIDY TATIANA - 1621024304
CUERVO HOLGUÍN HERVIN ABDOM -1821025605

INSTITUCIÓN UNIVERSITARIA POLITÉCNICO GRANCOLOMBIANO

CONSTITUCIÓN E INSTRUCCIÓN CÍVICA

BOGOTÁ D.C.
2019
 INTRODUCCIÓN Y TÉSIS

La migración ha sido en Colombia un fenómeno muy conocido, ya que por la problemática

social, cultural, económica y de seguridad, ha obligado a muchos de nuestros compatriotas a

abandonar sus tierras y familias en búsqueda de mejores oportunidades. Desde hace algunos años,

hemos podido evidenciar que nuestro país es uno con los más altos índices de emigración. Sin

embargo, actualmente estamos atravesando un movimiento migratorio, siendo el país de mayor

recepción de inmigrantes venezolanos que buscan escapar de la dictadura y baja economía que

enfrenta su país desde la llegada al poder del señor Nicolás Maduro en el año 2.013.

Según los datos de las autoridades nacionales de migración y otras fuentes, como la ONU,

los países de América Latina y el Caribe albergan a aproximadamente 2,4 millones de personas

refugiadas y migrantes de Venezuela, mientras que otras regiones albergan a los restantes 600.000.

Colombia por compartir una extensa frontera con Venezuela recibe la mayor parte de los migrantes

con más de un millón de personas viviendo en el país, sin contar los migrantes que van de paso

para otros países, que mientras están rumbo a su destino final se convierten en un problema del

Estado.

Por otro lado, la actual situación que atraviesan los inmigrantes venezolanos, se ha

convertido en una problemática que está afectando notablemente a los colombianos. De igual

forma, se observa que el estado de Venezuela no posee una verdadera democracia, puesto que no

se están tomando en cuenta las opiniones de un pueblo y en consecuencia se está generando una

elevada migración de esta población a nuestro país, lo que a su vez, genera desequilibrio en el libre

desarrollo de la democracia colombiana, entonces si estamos enfocados en una ayuda solidaria

nosotros como país nos estaríamos viendo afectados.

 “Tan antigua como los humanos, la migración ha obligado a muchos pueblos a repensarse

como sociedad. Colombia no estaba preparada para recibir inmigrantes y hoy está ante el desafío

de tratarlos como personas -no apenas como cifras-.” Echeverry, A (2018).

De acuerdo con lo establecido por el autor, la crisis del país vecino se ha salido de control,

debido a que el Estado no estaba preparado para el debido manejo, ya que desde hace un año a

diario se incrementa el ingreso de inmigrantes lo cual ha generado todo tipo de impacto a nivel

económico, social, cultural, laboral, etc., que nos hace pensar sobre la desigualdad, la inseguridad,

la falta de oportunidades y las dificultades que ya estamos viviendo internamente en nuestra

nación. Ante esto podemos analizar cómo, aún en medio de esta situación Colombia sigue ante la

falencia de vivir una inestabilidad democrática.

CUERPO DEL TRABAJO

Indiscutiblemente, la migración de personas de nacionalidad venezolana hacia Colombia

en los últimos años ha incrementado considerablemente y la cifra se eleva ampliamente en la

misma medida en que la situación de Venezuela se vuelve más insostenible para el gobierno,

evidenciando una falta de democracia y economía en este país. Inicialmente esta oleada de

migrantes se veía especialmente en las ciudades fronterizas al ser estos los lugares más propicios

para la llegada masiva de esta población, pero en los últimos tiempos se ha precipitado estos

desplazamientos a las ciudades capitales haciendo que estas ciudades tengan que afrontar la

instalación y manutención de estos moradores permitiendo de esta manera que se instauren en

puntos de concentración que les facilita subsistir y mantener una calidad de vida superior a la que

están habituados en su país natal.

 En todas las ciudades capitales de Colombia se han tomado medidas para ayudar a los

migrantes, algunas de estas órdenes ofrecen hogares de paso dónde ellos pueden acceder a una

buena alimentación, servicios de salud física y psicológica y en algunos simplemente les permiten

descansar para recuperarse de las largas caminatas por un tiempo limitado; pero estas medidas no

han sido suficientes ya que el número de viajeros es superior a las ayudas que nuestro país les

puede ofrecer; reflejando la crisis humanitaria que está afrontando nuestro país vecino.

Los venezolanos que han llegado a estas ciudades en búsqueda de oportunidades y

condiciones mejores para ellos y sus familias se han encontrado con un país que no les puede

brindar la posición que muchos de ellos esperan, ya que en su mayoría son profesionales y con

estudios muy sólidos en diferentes áreas, pero al no tener un estatus legal o al no haber tramitado

los respectivos permisos de permanencia y trabajo, deben someterse a realizar trabajos no

calificados, forzosos, con horarios extendidos y con muy baja remuneración. Esta posición

favorece a que las condiciones de estos pobladores los lleve a cometer actos vandálicos con el fin

de satisfacer sus necesidades básicas y las de sus familias, por tanto, los habitantes de estas

ciudades han perdido la confianza y respeto por los venezolanos, manifestando así rechazo hacia

los migrantes de Venezuela, en algunos casos llegan al extremo de sufrir de xenofobia evitando

que se les contrate en una empresa, se les dé un hogar en arriendo o simplemente se les tienda la

mano con un plato de comida, todo esto por el temor a que los venezolanos retribuyan de mala

manera las ayudas que se les puedan brindar, como ya se ha visto en muchas ocasiones

anteriormente.

A nuestro modo de ver, puntualmente en este tema el gobierno debe ponerse en la tarea de

redactar una ley migratoria, que regule todas las actividades que estén o no permitidas para los

extranjeros, ya que no basta solo con calcular cuantas personas han ingresado al país, si no que
adicionalmente se debe tomar decisiones más drásticas que impida definitivamente la creciente

avalancha de vandalismo y problemática generada por estos forasteros.

Hace algunos meses el gobierno colombiano adopto unos permisos especiales de

permanencia (PEP), donde aproximadamente unos sesenta y nueve mil venezolanos han tramitado

este permiso en diferentes ciudades de Colombia, esta medida de emergencia se tomó por el

cuantioso flujo de venezolanos en el país y con el fin de tratar de regularizar esta situación

garantizándoles el acceso a los derechos. Con este permiso de dos años de duración el venezolano

está autorizado para ejercer cualquier actividad, ocupación y también conseguir un empleo de

manera legal en el país, de manera positiva nos podemos beneficiar de esta problemática debido a

que al país está recibiendo una población productiva, en edad de trabajar reforzando la fuerza de

la mano de obra local y los que se integran formalmente realizan pagos de impuestos fortaleciendo

la economía.

Sin embargo, según las estadísticas que ya se presentaron de toda la situación de migración

podemos reflejar los diferentes tipos situaciones que siempre pasan en Colombia y una de ellas es

que el país quede ante los medios de comunicación como uno de los más solidarios siendo esto

algo contradictorio para nuestros compatriotas fundamentalmente en que todos nosotros

conocemos de primera mano la realidad y la precaria situación en la que se encuentran algunos

lugares de nuestro país en el que para el gobierno no son prioridad o simplemente indican que no

existen los recursos suficientes para suplir las necesidades de los pobladores colombianos en estas

regiones; y a los ojos de muchos de nuestros coterráneos, existe una preferencia en el cuidado y

sustento de los foráneos, generando un mayor repudio hacia las respuestas negativas y por parte

de estos migrantes. Es momento que el gobierno nacional tome las riendas de esta situación y fije

de alguna manera un límite o genere alguna estrategia para controlar y dar las prioridades
necesarias en las ayudas que brinda tanto a los migrantes como a nuestros conciudadanos,

demostrando de esta manera la equidad y democracia que existe en nuestro país.

Es importante entender que más allá de todo lo que Venezuela está atravesando, con la

situación migratoria, Colombia no es ajena a este fenómeno, debido a que con la crisis los

sentimientos negativos hacia los migrantes, es cada vez más notorio. Es por ello que ha sido

aprovechado para adelantar agendas políticas y que, sin duda, la democracia de nuestro país fluctué

ya que, los que manejan el poder están dejando de lado la defensa de los valores democráticos

liberales para hacer frente a la crisis migratoria.

Por tal razón mientras en Venezuela no se estabilice su democracia y economía, Colombia

y los demás países fronterizos, tendrán que seguir afrontando y recibiendo un gran volumen de

migrantes que a diario se desplazan desde este país en busca de un mejor futuro para ellos y sus

familias, cabe aclarar que nuestro país vecino llegó a este punto porque sus pobladores no tomaron

la decisión de acabar con un gobierno corrupto, lleno de vicios políticos, donde se acostumbraron

a que todo les tuvieran al día sin la necesidad de esforzarse ni conseguir su sustento diario por sus

propios medios, poniendo en evidencia que un gobierno con esta ideología política no es el

apropiado para una cultura como la de Venezuela.

De igual forma, Colombia por ser un país tan cercano, se encuentra entre la espada y la

pared, ya que se avecina una guerra por el poder y la libertad de un pueblo que muchos ciudadanos

no son conscientes del nivel tan subyugado en el que se encuentran, y de esta forma no lucha por

sus derechos, los que sí son conscientes de la grave problemática que se vive en su país son los

que esperan que pronto se vean reflejados cambios radicales en el gobierno, la economía, la salud

y la educación de sus compatriotas. Actualmente la única contingencia que nos apremia es la

problemática que se vive en Colombia por el apoyo económico y social que se les presta a los
venezolanos y de los cuales los colombianos no están disfrutando, siendo uno de los lamentos más

repetitivos el hecho de que a los venezolanos les brinden tantos beneficios por nuestro gobierno y

a nuestros compatriotas los castiguen por el simple hecho de vender algún producto en las calles

o pedir dinero en plazas y lugares públicos, pero al gobierno de nuestro país lo que realmente le

interesa más allá de una ayuda es el hecho de que lo vean como una “democracia” en la que a pesar

de las adversidades puede ayudar.

En conclusión y basados en nuestras vivencias y conocimientos previos podemos asegurar

que la migración de venezolanos estanco los niveles de pobreza de los colombianos ya que hay

muchos venezolanos viviendo condiciones precarias que dependen económicamente del gobierno

colombiano, por tanto las guerrillas como el ELN y grupos armados como las BACRIM se han

fortalecido debido al apoyo de chavistas a estos grupos tratando de desestabilizar el gobierno de

Iván Duque, que ha servido de eje para apoyar la salida del dictador Maduro, debido a todo esto

podemos decir que parte del aumento del desempleo en Colombia ha sido, consecuencia de la

migración, ya que están desplazando laboralmente a los nacionales .

Sin duda, es evidente como la crisis del país vecino va en aumento y aunque se ha unido la

mayoría del pueblo y se han pronunciado en las calles, se logra concluir y comprobar que los

venezolanos en Colombia son una realidad y -no apenas cifras- Echeverry, A (2018) y que para

que exista un cambio sin duda debe terminar la crisis presidencial, política, económica,

humanitaria e indiscutiblemente democrática, aquella que tanto ha afectado al pueblo venezolano

y que es la verdadera causante de este complejo problema que ya es de impacto mundial.

 BIBLIOGRAFÍA

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Bogotá D.C. Recuperado de http://concejodebogota.gov.co/impacto-de-la-migracion-ven ezolana-
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