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Ray Kurzweil afirma que los computadores, para 2030, cogerán dentro de un glóbulo
sanguíneo Seríamos capaces de acceder a Internet con el cerebro El futurista tiene
65 años y quiere estar vivo para ver si esto se cumple.
Kurzweil es un futurista prestigioso y opina que para 2030 el tamaño de los computadores
habrá quedado tan reducidos en tamaño que podrían almacenarse perfectamente en
alguno de nuestros glóbulos sanguíneos y en ellos transportarse. De esta forma, podrían
circular por nuestro cuerpo millones de computadores o nanobots "manteniéndonos sanos,
aumentando nuestro sistema inmune, también yendo al cerebro y poniendo
nuestro neocórtex en la nube", según las palabras del experto. Esto se traduciría en que
seremos capaces de manera diaria de acceder a recursos de Internet utilizando nuestro
cerebro.
“Imaginemos que en un futuro se consiguiese tal hito científico. Eso nos daría la posibilidad
de comprar un curso de inglés con el que bastaría pagar una ingente cantidad para que la
nanorobótica se encargase de que ese conocimiento fuera nuestro”. O por poner otro
ejemplo, que pudiésemos comprar un paquete de datos con el que hacer consultas y
descargas en un internet cuya interfaz no podemos imaginar, pero en la que hacer una
Universidad Mariano Gálvez de Guatemala Fecha: 28/02/2019
Nombre: Luis Mario Ratzán Rodríguez Carné: 3090 19 22292
Lógica de Sistemas Sección: “A”
Ingeniero: Mynor Cayetano Lapoyeu López
consulta de una información que desconocemos y disponerla en nuestra memoria fuese
cuestión de segundos.
A mi modo de ver, esto presenta posibilidades tremendas. Ya que el ser humano lograría ir
más allá de sus límites y expandir su conocimiento. Pero este hipotético futuro presenta, en
mi opinión, cuatro grandes problemas.
Por otro lado, la gran duda por completo hasta qué punto hay posibilidades de ello, pero el
hecho de que la información de internet (y por tanto cualquier tipo de información) pueda ir
directamente a nuestras neuronas, supone cuanto menos un debate intenso sobre las
repercusiones que podría tener.
En la actualidad, Kurzweil tiene 65 años y quiere ver llegar estos avances tecnológicos. Tal
es así que a diario toma 250 suplementos alimentarios, además de realizar diversas
terapias nutricionales que le ayuden a vivir lo suficiente como para que su "cuerpo 1.0", que
es como él llama a su cuerpo, le permita ver con sus propios ojos si se cumple lo que está
prediciendo.
El líder de ingeniería de Google opina que los humanos somos como un proceso de
software, pudiendo así en un futuro vivir sin estar limitados por la forma física, subiendo
nuestra conciencia a Internet y transportándonos por el mundo en forma de nanobots o
cuerpos de algún tipo. Entonces tendríamos "un cuerpo biológico en un momento y ninguno
en otro, y luego de nuevo, luego lo cambiamos, y así".
Por otro lado muy importante: Investigadores de la Universidad Miguel Hernández (UMH)
de Elche (Alicante) han desarrollado un sistema que permite navegar por Internet y controlar
de forma completa un ordenador a través de la actividad cerebral. La investigación ha sido
llevada a cabo por los profesores José María Azorín y Eduardo Fernández y el estudiante
José Luis Sirvent, pertenecientes al grupo de Neuroingeniería Biomédica de la universidad
alicantina.
Si bien se trata de un campo nuevo, algunos países ya cuentan con cierto desarrollo como
es el caso de Estados Unidos, Alemania, Reino Unido y Japón, entre otros.
Una revolución médica. La Unión Europea pretende liderar la “revolución médica” que
podría suponer la aplicación de nanotecnología a la medicina. La Comisión Europea ha
financiado la organización de Euronanoforum en Edimburgo para exponer los avances
realizados y posibles en el campo de la medicina con aplicaciones de nanotecnología.
Según las exposiciones realizadas, nuevos tratamientos desarrollados durante los próximos
diez años podrían ayudar a combatir y tratar enfermedades cardiovasculares, diabetes,
cáncer, SIDA, Alzheimer y Parkinson. La posibilidad de descubrir cómo dirigir
nanopartículas hacia la raíz de estas enfermedades abrirá nuevas posibilidades para la
medicina y nuevas vías de curación para los enfermos.