Curso: Filosofía de la Educación

Alumno: Gianfranco Pérez Quispe

¿Qué es la ética?

La ética se refiere a la experiencia de la mesura en la convivencia humana, y a la conciencia

de los límites que no debieran sobrepasarse para poder hacerla posible. Es la convicción de
que la convivencia humana requiere de una conciencia y una internalización de ciertos límites
que se expresan por un código regulador de la conducta con la manera de vivir.

En la ética, todos son competentes, porque lo fundamental es la forma de vivir y reflexión

filosófica sobre el sentido de dichas normas morales. Es una concepción valorativa de la vida
que se propone establecer cuál es la mejor manera de vivir.

¿Cuáles son los modelos y paradigmas de la ética?

El primer modelo de respuesta es el Paradigma de la ética del bien común o el Paradigma de la
felicidad. De acuerdo a esta concepción, el criterio normativo orientador de la conducta de las
personas y la marcha de la sociedad debe buscarse es un ideal imaginario de convivencia que
promueva el respeto de la libertad de cada individuo, sin distinción de culturas ni de religiones , y la
práctica sistemática de la democracia y la tolerancia; el segundo modelo ético se le conoce el
Paradigma de la ética de la autonomía o el Paradigma justicia, aunque también de él hay otras
denominaciones que prefieren destacar rasgos como la imparcialidad o la consensualidad. Este
segundo modelo considera que se debe construir una sociedad para todos los humanos y donde las
emociones sean reorientadas a en función de un bien mayor.

¿Cómo vinculamos el sistema educativo con la ética?

La educación debe tener principios éticos donde el docente como profesional busque velar por una
adecuada conducta con los alumnos y tenga un trato igualitario a todos en la participación y
oportunidad. El estudiante por su parte debe mantener un rendimiento académico transparente y
debe velar por salir evaluado de forma justa. Las instituciones educativas buscan hacer más apto y
capaz al estudiante para ser un mejor humano que pueda convivir mejor en sociedad y por ello es
indispensable que aprenda valores, actitudes beneficiosas y herramientas necesarias para su
desarrollo.

El sistema educativo debe basarse en un conjunto de parámetros equitativos, igualitarios, inclusivos y

justos hacia todos los estudiantes en donde el docente, personal y autoridad sea también cumplidor
de esas normas para garantizar en todos los niveles un aprendizaje y valoración adecuados donde se
priorice el esfuerzo, mérito y la innovación con una serie de parámetros que velen por el progreso
social, la armonía con la naturaleza y la felicidad humana.