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CENTRO EDUCATIVO NTRA. SRA.

DE LA
ALTAGRACIA
JARABACOA

CELEBRACION EUCARISTICA DEL DIA DE LA


GRATITUD
25/04/2018

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Monición de entrada

La Eucaristía es un acto comunitario de alabanza y


de acción de gracias por todos los regalos que
diariamente recibimos de Dios. El mundo en que
vivimos, la vida misma, todo lo que atesoramos son
regalos, por lo tanto tenemos muchas razones para
cultivar un verdadero sentido de gratitud, tanto a
nivel personal como grupal.

Unamos nuestros corazones y demos juntos gracias a


Dios por la persona de Sor Verónica y todas las
demás hermanas que conforman esta comunidad.
Movidos por estos sentimientos de gratitud nos
ponemos de pie y cantando junto al coro damos
inicio a nuestra celebración Eucarística.

Monición primera lectura


1ra. de Tesalonicenses 5, 11-15

Esta primera lectura nos invita a tener los mismos


sentimientos de compasión, perdón, reconocimiento
y agradecimiento por el bien que recibimos de los
demás, especialmente de nuestros educadores y
formadores, para poder vivir y mantenernos alegres.
Escuchemos con atención.

Por eso anímense mutuamente y


edifíquense juntos, como ya lo están
2haciendo. Hermanos, les rogamos que se
muestren agradecidos con los que trabajan

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para ustedes, los dirigen en el Señor y los
corrigen. Ténganles mucho aprecio y cariño
por lo que hacen. Y vivan en paz entre
ustedes. Les rogamos también, hermanos,
que reprendan a los indisciplinados, animen
a los indecisos, sostengan a los débiles y
tengan paciencia con todos. Cuiden que
nadie devuelva a otro mal por mal, sino
constantemente procuren el bien entre
ustedes y con los demás. Estén siempre
alegres, oren sin cesar y den gracias a Dios
en toda ocasión; ésta es, por voluntad de
Dios, su vocación de cristianos.

Palabra de Dios.

Monición al Santo Evangelio


Lucas 5, 17-19

En este Evangelio de San Lucas, Jesús nos narra la


parábola de los diez leprosos y con la misma nos
invita a ser agradecidos, agradecer a aquellas
personas que nos hacen el bien con un gesto o con
una palabra. Nos ponemos de pie y escuchamos con
mucha atención la palabra de Jesús, nuestro Maestro.

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De camino a Jerusalén, Jesús pasaba por los
confines entre Samaría y Galilea, y al entrar
en un pueblo, le salieron al encuentro diez
leprosos. Se detuvieron a cierta distancia y
gritaban: «Jesús, Maestro, ten compasión de
nosotros.» Jesús les dijo: «Vayan y
preséntense a los sacerdotes.»
Mientras iban quedaron sanos. Uno de
ellos, al verse sano, volvió de inmediato
alabando a Dios en alta voz, y se echó a los
pies de Jesús con el rostro en tierra, dándole
las gracias. Era un samaritano. Jesús
entonces preguntó: « ¿No han sido sanados
los diez? ¿Dónde están los otros nueve? ¿Así
que ninguno volvió a glorificar a Dios fuera
de este extranjero?» Y Jesús le dijo:
«Levántate y vete; tu fe te ha salvado.»

Palabra del Señor.

Oración de los fieles


A cada petición respondemos: Te lo
pedimos Señor.

1. Hoy queremos dar gracias a Dios por


el Papa Francisco, nuestros sacerdotes
y religiosos, por todas las hermanas de
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esta obra educativa, porque en su
entrega generosa hemos visto tu
rostro Señor. En este día te pedimos
que tu gloria se siga derramando
sobre cada uno de ellos, para que a
través de su testimonio de vida
sigamos conociéndote cada día más.
Roguemos al Señor.

2. Por el don de esta vida tan hermosa


que Dios nos ha dado, para que
podamos desarrollarla y hacer
realidad nuestros sueños de ser
buenos cristianos y honrados
ciudadanos. Roguemos al señor.

3. Por el regalo de la comunidad


educativa que nos da tantas
oportunidades de crecimiento en
todos los órdenes. Para que ella
alcance todos sus objetivos.
Roguemos al Señor.

4. Por el don de nuestras familias, de


nuestros colaboradores, de nuestras
hermanas, nuestros maestros y de
todo el personal de esta obra
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educativa, para que el Señor los colme
de bendiciones en este día del gracias.
Roguemos al Señor.

5. Por los jóvenes de este pueblo, para


que se sigan formando y creciendo
como lo quiso nuestro padre Don
Bosco, jóvenes honestos y buenos
cristianos que formen una nueva
sociedad en valores. Roguemos al
Señor.

6. Por todos nosotros que nos hemos


congregado en este día para dar
gracias a Dios por la entrega y trabajo
de cada día, para que sepamos
descubrir sonrisas hermosas, manos
hábiles, actos valiosos, espíritus
valientes, luchadores tenaces y
promotores de paz. Roguemos al
Señor.

Ofertorio

1. Flores: Representan la frescura y el


candor de todos los jóvenes que
vienen a nuestra casa en busca del
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bien y del pan de la enseñanza. Te las
presentamos Señor.

2. Luz y grupo de niños: “Yo soy la luz”,


Jesús nos invita a ser como María, luz
y testimonio en medio de las
dificultades de nuestra vida y como
Don Bosco llevar la luz del Evangelio a
otros niños y jóvenes. Te los
presentamos Señor.

3. Corazón: Este corazón simboliza la


caridad, solidaridad y la unión de esta
comunidad educativa. Te lo
presentamos Señor.

4. Pan: Te presentamos este pan partido


y molido, que en unos momentos se
convertirá en tu cuerpo. Recíbelo
Señor.

5. Vino: Te presentamos este vino, vino


de la alegría, de la fiesta, de la
fraternidad, que se convertirá en tu
sangre. Recíbelo Señor.

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Acción de gracias después de la comunión

Gracias Señor por este día que amanece,


este día que como un regalo nos entregas a
nosotros, tus hijos. Gracias por la luz y por el
sol que en la mañana comienzan a despertar.
Gracias por el viento, por el aire, que nos
permites respirar.

Gracias por las aves del cielo y por los


pajarillos que ya comienzan su canto.
Gracias por la naturaleza entera.
Gracias por la vida como un don, gracias por
la vida de aquel que dona todo, gracias por
su entrega.

Gracias por la Eucaristía, banquete


sustancioso que fortalece nuestra
fraternidad. Gracias Señor por tu amor.

Todos: Gracias Señor.

8
EL ORIGEN DE LA FIESTA DE LA GRATITUD

Corría el año 1849. Los muchachos del Oratorio, como


todos los años se preparaban para
celebrar la fiesta de San Juan Bautista,
día de la onomástica de Don Bosco. En
estas ocasiones, para demostrarle su
afecto, los alumnos internos del
oratorio preparaban cariñosos
poemas de felicitación y los alumnos externos le ofrecían
algún ramo de flores.

Sin embargo este año iba a ser diferente. Dos alumnos,


Carlos Gastini y Félix Reviglio, se pusieron de acuerdo en
secreto para ir ahorrando durante varios meses, una
pequeña cantidad de dinero de sus propinas, y lograron
comprar a Don Bosco dos corazones de plata. Y así, en la
víspera del día de San Juan, se los ofrecieron como
muestra de agradecimiento por todo lo que hacía por
ellos.

Cuando el resto de alumnos


se enteraron del gesto,
decidieron que al año
siguiente organizarían para
Don Bosco, una fiesta de
todo el Oratorio. Y así fue
como, en 1850, comenzó a
celebrarse la Fiesta de la
Gratitud, en la que los
muchachos agradecían a Don Bosco su labor para con
ellos con una gran fiesta.

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