You are on page 1of 7

Programa de

Capacitación y
Profesionalización
para Oficiales Notificadores y Oficiales de Justicia

Modulo Temático I (marzo-mayo 2012)

Hernán A. Errecart
Of. Notificador
Of. de Mandamientos y Notificaciones
Mar del Plata
El procedimiento de mediación en la Provincia de Buenos Aires.
Otra forma de acceder a la Justicia

Introducción – Síntesis normativa – Análisis proyectivo - Conclusiones


La ley sobre mediación 139511 de la Pcia. de Buenos Aires institucionalizó finalmente
como herramienta obligatoria del derecho la posibilidad de resolver conflictos en forma
alternativa. Responde a una necesidad social pero requiere una acertada interpretación para su
eficacia, ya que como en otras ramas del saber jurídico; no alcanza con leer un libro ni
comprender la información contenida en el texto publicado, sino que se requiere la ductilidad
en el uso de aquel saber hasta entonces solo descriptivo, para operarlo en contexto. La
mediación es una forma mas de garantizar el libre acceso a la justicia para el logro de una
convivencia armónica y equilibrada, “la magia de la mediación consiste en ayudar a la
gente a cambiar sus percepciones acerca del problema que las aflige, y modificar la
percepción del problema significa poder mirarlo desde otro lado2”. Esta ley y su
reglamentación por dto. 25303 de la Pcia. de Buenos Aires producen un cambio definitivo en
la forma en que se comunican las partes en conflicto.
El convencimiento social que a lo largo del tiempo ha terminado por imponerse
manifiesta un cambio paradigmático, tanto para los que están involucrados en el conflicto y
son parte interesada como para los terceros que son convocados por la norma en carácter de
mediadores, abogados y hasta el propio juez. Todos son revalorizados y reconocidos.
Si bien hoy en construcción, como lo expresara la Corte Suprema de Justicia en sus
fallos, es una disciplina valiosa que llega en auxilio de la justicia ordinaria, la integra y
expande.
Las Dras. Elena Highton y Gladys Alvarez4, referentes indiscutibles definen a la
mediación como “el procedimiento no adversarial, en el cual un tercero neutral
(mediador), ayuda a las partes a negociar, para llegar a un resultado mutuamente
aceptable”. Remarco en esta instancia los términos “mutuamente aceptable” ya que son la
clave de acceso para comprender en esencia este sistema.

1
B.O. 10/02/03 y EDLA 2009-A, pág. 1076.
2
Diez, F. y Tapia G. 1999. “Herramientas para trabajar en mediación”. de Paidós Mediación. 5ta. Re-impresión. Pág. 23.
3
02/12/2010, en uso de atribuciones conferidas por art. 144 – inc. 2º - de la Constitución de la
Pcia. de Buenos Aires, el art. 30 de la Ley Nº 13.951 y la Resolución 462/2012.
4
Highton E. y Alvarez G. 1995. “Mediación para Resolver Conflictos.” de Ad-Hoc. Pág. 122.
Síntesis normativa:
El procedimiento legal de la mediación obligatoria, comienza formalizando el reclamo
ante la Receptoría de Expedientes de la ciudad asiento del Departamento Judicial que
corresponda, mediante el formulario publicado por la SCJBA.
Se sortea mediador y juzgado para la posible homologación del acuerdo, y la
intervención judicial en el pleito.
Dentro de los cinco (5) días de anoticiado el mediador fija fecha de audiencia cuya
comparecencia es obligatoria, y no puede ser fijada mas allá de los cuarenta y cinco (45) días
corridos desde la designación. El proceso desde la notificación al requerido puede ocupar
hasta sesenta (60) días corridos. Prorrogable por acuerdo de partes hasta quince (15) días mas
si el mediador tiene su opinión favorable. El mediador como director libre del procedimiento
siempre será quien deba convocar a las partes para las audiencias donde se labrarán las actas
pertinentes con constancia de comparecencia positiva o negativa. Agregado de cédulas y
fijación de nuevas fechas. Todo en un marco de confidencialidad y evitando parcialidades.
De llegar a un acuerdo el mismo se vuelca en un acta firmada por el las partes, sus letrados
y el mediador. En caso de resultado negativo una copia del acta se entrega a las partes, habilitando
la vía judicial en la que las mismas serán acompañadas. De llegar al acuerdo, se homologa por el
magistrado sorteado, constituyendo el instrumento ejecutable conforme las normas rituales sobre
ejecución de sentencia en un procedimiento civil y comercial.

Análisis:
Ley y Dto. Establecen la Mediación Pre-judicial Obligatoria y Voluntaria.
La ley enumera principios rectores a saber: neutralidad, imparcialidad,
confidencialidad y consentimiento informado.
Otros caracteres no enumerados son la voluntariedad ya que solo se obliga a concurrir
en la primera audiencia pero no proseguir y llegar a un arreglo. La autocomposición traduce el
ideal de facilitar la comunicación directa entre las partes intervinientes en su conjunto. La
informalidad se da en la práctica evitando una estructura rígida como en el proceso judicial. Y
la proyección positiva de preservar dentro de lo posible, las relaciones en el futuro para
favorecer el bienestar general. De esta forma se puede comprender ya desde el principio y a
traves de sus presupuestos el objetivo perseguido por nuestra carta magna, la ley de
mediación, y el conjunto de leyes que conforman nuestro sistema normativo.
Se declara a la mediación de interés público.
La ley enumera los temas que quedan exceptuados sin perjuicio de que igualmente
puedan arreglarse por la mediación.
Estos temas en concordancia con el resto de la legislación son los indisponibles para
particulares (menores e incapaces).
Un tema aparte es el de los alimentos que normalmente se acuerdan y son presentados
para su homologación al Tribunal. Por lo que considero que serán un item a reformar dejando
de figurar entre los temas exceptuados.
La familia es el lugar donde primero deben trabajarse todas las problemáticas sociales.
Además los acuerdos en familia, con la colaboración de los abogados o con mediación han
tenido un grado mas efectivo de cumplimiento que las imposiciones por sentencia judicial.
Entre los arts. 6º y 24º inclusive se regula el procedimiento. Responsabilidades, plazos
y la asistencia letrada obligatoria. Se limitan los casos de representación para personas
jurídicas y aquellos que vivan a mas de 150 km del lugar de Mediación. El juez se designa por
sorteo y si el acuerdo fuera rechazado, se habilita el reclamo por vía judicial.
Para ser mediador y mediadora se requiere título de abogado, tres años de ejercicio,
matrícula y capacitación básica del Colegio de Abogados Dptal o universidades habilitadas.
Además de una capacitación contínua anual.
Se designó como autoridad de aplicación a la Dirección Provincial de Medios
Alternativos de Resolución de Conflictos, dependiente de la Subsecretaría de Justicia del
Ministerio de Seguridad y Justicia Pcial.
Se establece una escala de honorarios entre 2 y 20 IUS para la retribucion de los
mediadores con posibles adiciones por superarse el máximo legal del reclamo o por llegar a la
cuarta reunion de mediación. Al igual que la retribución del abogado los honorarios del
mediador se consideran un derecho alimentario, y resultan indisponibles para las partes. Se
considera de aplicación supletoria el Dto. Ley 8.904/77, por ejemplo para interpretar los
máximos legales. Si el procedimiento fracasa, se interrumpe o no se inicia el juicio dentro de
los 60 días corridos, responde por los honorarios el promotor en distintas proporciones.
Si se llega a un acuerdo las partes convienen libremente el pago de honorarios.
Finalmente se regula la mediación voluntaria (arts. 36 al 38) que no es otra que la
obtenida sin la imposición legal de concurrencia. Y es a lo que aspira la ley puesto que por
lógica las partes estarán desde un comienzo mejor predispuestas pudiendo obtenerse
excelentes resultados.
La intervención de mediadores con una formación diferente a la jurídica efectiviza la
actividad. También se pregona el trabajo interdisciplinario ya que enriquece el método, con el
aporte de nuevos elementos de trabajo y visiones mas amplias de nuestra realidad.
La homologación judicial podría contradecir en alguna medida el principio de
autocomposición. En desmedro de la voluntariedad, el consentimiento informado y la
confidencialidad consagrados por la propia norma. Además el acuerdo constituye en realidad
una transacción como modo de extinguir obligaciones contemplado en el art. 832 del Código
Civil. Es un especie dentro del contrato pero con caracteres diferenciales otorgados por la
propia ley. Por tanto los arts. 19 a 22 de la ley 13951 pueden resultar inconstitucionales al
avanzar sobre facultades delegadas por las pcias. al Congreso Nacional que legisló una
cuestión sustancial pues exige mas recaudos que el propio Código de fondo para la
transacción (art. 75 inc. 12 CN).
Una particularidad respecto el principio de neutralidad en el procedimiento de
mediación es una actitud del mediador, que para su buen desempeño debe omitir ciertos
caracteres personales como nacionalidad, sexo, religión o cualquier otro de las partes en
conflicto. La imparcialidad apunta al caso concreto para utilidad de todas las partes, sin
favoritismos. Actuando con consciencia y en forma equilibrada. La relación que hay entre
ambos conceptos es de género a especie. (art. 16 y art 30 ley 13951) La falta de cumplimiento
por el mediador podrá acarrearle sanciones.
La confidencialidad se impone también en forma expresa y abarca a los dichos de las
partes, a la actividad del mediador y se aplica a toda la documentación exhibida durante el
proceso de mediación. Asimismo al convenio final si así lo pactaran las partes. Es una de las
características mas importantes porque genera un clima de confianza donde los protagonistas
pueden expresarse con libertad. Encuentra su lógica limitación en el conocimiento de la
comisión de un delito grave o de violencia juvenil.
La voluntariedad también esencial en la mediación, hace referencia a la libertad de las
partes para adoptar sus propias decisiones durante la totalidad del transcurso del
procedimiento. Desde su concurrencia y permanencia, la selección de temas a tratar, elección
de posibles soluciones hasta la decisión final tanto de alcanzar como no arreglar un acuerdo, y
en su caso cada una de las cláusulas del mismo.
El consentimiento informado proviene del ámbito de la medicina, el profesional debe
explicar con la suficiente información y de manera razonablemente comprensible. Se
relaciona con el pcipio. de autodeterminación.
En conclusión: Siempre se ha buscado reducir la conflictividad o a lo sumo
gestionarla de forma pacífica. Si bien los métodos de mediación se van instalando
definitivamente en nuestro territorio, todo cambio requiere ajustes normativos para conseguir
un sistema legal cada vez mas coherente. Tal vez parezca a simple vista un tema simple, pero
entran en juego la confianza que vincula a los abogados con sus clientes y las incumbencias
profesionales acerca del límite para el mediador frente a la cuestión sustantiva. Se vinculan
otras temas que pueden generar fricciones legislativas y lagunas normativas como el beneficio
de litigar sin gastos, la validez de los acuerdos y sus efectos, la suspensión del proceso de
mediación frente a la caducidad, o la asimilación de la mediación voluntaria practicada por un
mediador oficial.
Hasta hace un tiempo el Estado paternalista se hace cargo de resolver los conflictos
impidiendo la “justicia por mano propia”. Hoy sin negar su responsabilidad en la gestión y
administración de justicia, devuelve parte del poder que tuvieron los ciudadanos en el origen, pero
a través de una norma legal, que bien utilizada puede aliviar la actividad en los tribunales.
Pareciera que el estado nacional confía en una ciudadanía activa, participativa,
autónoma y responsable de sus propios actos.
Creo que el cambio es sustancial ya que los litigios no se resuelven con un ganador y
un perdedor, creando una ficción de objetividad.
Comparativamente en el proceso judicial se construye una verdad formal a partir de
confrontar las pruebas aportadas para recrear el pasado.
Pero la mediación transcurre en palabras con el objetivo de obtener una verdad
responsable acordada por cada uno de los sujetos que tengan intereses en pugna.
El abogado/profesional y mediador es solo un facilitador de la comunicación, no
puede asesorar a las partes protagonistas, tomando decisiones y respondiendo por sus
consecuencias.
Creo que debemos buscar la aplicación con un sentido práctico de la proporción
cuantitativa mediante resultados finales concretos.
Pretendo reforzar un pequeño espacio de reflexión sobre las enormes
responsabilidades éticas que conlleva esta actividad y la importancia de sus principios
rectores, directrices que confluyen en un ideal de justicia.
Los problemas y tópicos cuya solución no se requiere en la aplicación de la ley de
mediación por ser del dominio del legislador, pero cuya existencia los operadores del derecho
no podemos ignorar, se han presentado tan solo en forma esquemática con la única pretensión
de situarnos rápidamente en la mediación para abrirnos paso al estudio mas profundo en libros
especializados.

You might also like