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Ingeniero de U l n a s

ICESIDAD í IIPORTAIIA DI ü EDlACIi FÍSICA

Causa hondea pena vei* la generación actual com- na, amores imposibles y otros delirios de la mente exal-
puesta en su inmensa mayoria de seres anémicos, ra- tada; esas señoritas que se desmayan por el más fútil
quíticos y con propensión á la tuberculosis muchos de motivo, que no pueden tomar más que caldos de aves, y
ellos; pero sume al hombre pensador en tristezas toda- no hacen con libertad la digestión de un par de paste-
vía más profundas, considerar los hijos que en su día les, están destinadas á ser las madres, las creadoras de
puedan nacer de tales padres; los que obligados por los hombres de mañana, que seguramente serán el col-
• nuestra carrera y aficiones particulares, nos vemos pre- mo de la degeneración, el prototipo de la escrófula y la
cisados á examinar todos los días buen número de ni- realidad de la tisis.
ños, sentimos verdadero disgusto al apreciar en nues- PJS preciso que estos absurdos y anomalías acaben
tros enfermitos dolencias debidas las más de las veces á de una vez para siempre, es necesario destronar á los
descuidos en los primeros años de la vida, durante los nervios y conceder algo más de importancia á los múscu-
cuales, tradiciones arraigadas, absurdos inconcebibles los, haciendo comprender á los padres y á los mismos
é ideas difíciles de desterrar, hacen que se atienda al niños, que de nada ha de servirles un cerebro muy des-
niño en todo cuanto se relaciona con su parte psíquica, arrollado, si no tienen cuerpo robusto para soportarle,
pero descuidando completamente su desarrollo orgáni- como de nada vale la fragante flor que carece de tallo
co; sienten muchos padres verdadero orgullo en comu- que la sostenga, la nutra y meza á impulsos de la brisa
nicar á deudos y amigos que su hijo será Bachiller á los juguetona que la acaricia.
doce años; que su niña, sin saber palabra de castella- Desde los tiempos más remotos se ha concedido
no, habla francés é inglés; y que en determinadas ins- importancia grande á la educación física del hombre;
tituciones á donde asiste, cursa a l a vez catorce asigna- los chinos, hace más de 4.500 años que en su Congfou
turas diferentes. dieron reglas precisas para el buen funcionamiento del
Esto, que sirve para halagar el amor propio de al- aparato respiratorio; los indios, en el Agur-veda, e» el
gunas personas, nunca podrá la ciencia médica dejarlo Código de Manou y en el Susruta; los egipcios, en su
pasar sin protestas enérgicas, pues aquel presunto Ba- Agonística; los griegos, con sus juegos olímpicos, en los
chiller es casi siempre un ser raquítico, de corta estatu- cuales se concedían grandes honores á los victoriosos,
ra, hidrocefálico, con tiras de papel mojado en lugar de sentaron reglas higiénicas que no han rectificado los
músculos, arcos de violín en vez de piernas, porque millares de años transcurridos desde aquellos tiempos;
faltos de nutrición sus huesos, no teniendo las sales cal- y para convencernos de toda la importancia que los
cáreas precisas para la buena construcción del esquele- ejercicios físicos adquirieron en Roma, baste saber que
to, se tuercen y ceden, como caen los edificios cuyos muchos emperadores tenían á título preciado el haber
pies derechos, formados por madera podrida ó resque- vencido en luchas memorables, y entre otros Cómodo,
brajada, caresen de solidez y son constante preocupa- se enorgullecía con el dictado de Vencedor de mil gla-
ción del engañado dueño de la finca. diadores.
Aquella señorita que dice poseer dos idiomas extran- Las termas romanas, edificios soberbios, sin ejem-
jeros sin conocer probablemente la hermosa lengua pa- plar que se las parezca en las pretenciosas construccio-
tria, recuerda por su delgadez, color pálido y rostro nes de nuesti'os días, eran no y a templos, sino verdade-
ojeroso, las heroínas del romanticismo, que á principios ras catedrales, levantadas en honor de la Higiene, don-
de este siglo apagaban su sed con vinagre para des- de se rendía incesante culto á la diosa de la salud.
engrasar más cada día, y presas de la histeria, conse- La Edad Media, aquel periodo tan agitado de nues-
cuencia á su vez de una sangre pobre en glóbulos rojos, tra historia, en el cual las luchas políticas y religiosas
nó peasaban más que en raptos, fugas de la casa pater- adquirieron carácter de horrible ferocidad; la influencia ,
kLl
 760 MADRID
perniciosa del misticismo, que, despreciando la mate-
ria, quería dedicar su atención tan sólo al espíritu, trajo
como consecuencia natural, decaimiento en las oner-
ííías, preponderancia de nervios, anemia en el pueblo,
imposición del más futirte, imperio del elemento reli-
gioso, en todo tiempo y en todas oc-isiones intransigen-
te y dominante, afeminaniiento de todas las clases de
la sociedad, y una cohorte de brujas, hccliiceros é in-
quisidores, parásitos obligados de las agrupaciones hu-
manas debilitadas por la molicie, el fanatismo religioso
y mala nutrición orgánica.
Jerónimo Mercuiial, fanu)so médico de aquellos ca-
lamitosos tiempos, fué el único que so atrevió en lí)(i9 á
publicar su ylr^' 6'/»í)i(ís//cfl,-y ya roto el hielo, Jlon-
taigne, Rabelais y Lutero, le ayudaron en su obra de
vigorizar los hombres de aquelhi época poi'medio de
útiles publicaciones.
El siglo XVllI se inaugura con una obra de Andry,
Itecano do la Facultad de Medi<Mna de París; y puesta
de nuevo en el t(;rreno de la ]n'áct¡ca la educación físi-
ca, Housseau (ii su ÍV);Í/7/O, l'estalozzi, Fi'robel y Jahn
eu Alemania,, Clias y Amores en Francia, Ling en
Suecia, dieron notable impulso á la (¡imnástica, hacien-
do comprender á sus compatriotas toda la importancia
que para la vida de los pucbl.is tiene la educación física
de los hombres que los forman.
En nuestros días, apenas si existe nación en el viejo
ó nuevo continente donde deje de practicarse la educa-
ción física, con todas aquellas reglas, aparatos y ade-
lantos que la ciencia tiene como más acreditados.
Suecia ha establecido desde 18()1 la enseñanza obli-
gatoria de la Gimnástica; todas las escuelas, aun las
más elementales, están dotadas de barras, maromas,
Cuerdas y otros sencillos aparatos, para que los alum-
nos practiquen sus ejercicios al aire libre.
También en Francia, Sajonia, Hungría, Noruega,
Dinamarca, Bélgica y Austria, sucede lo mismo.
En Inglaterra no existe gran afición a l a gimnástica,
pero suplen las ventajas d(! ésta con los ejercicios de
sport, ocurriendo algo análogo en los Estados Unidos,
donde la natación, el canotaffe, la pelota, la equita-
ción, la esgrima, el canto, el baile y la bicicleta, desa-
rrollan las extremidades, robustecen brazos y piernas,
aguzan los sentidos, ensanchan el pecho, dando á los
pulmones la capacidad respiratoria que necesitan; tra-
yendo todo esto como resultados prácticos aumento del
apetito, nutrición más viva, sangro rica en oxigeno,
que lleva gérmenes de vida á los últimos limites del
organismo y energías á la intimidad de los tejidos, obte-
niéndose como síntesis de todo ello perfecta salud y
sensación de agradable bienestar en todo el orga-
nismo.
En nuestro país, y en la época presente, podemos
afirmar que la educación física está completamente ol-
vidada; se instruye al niño apenas tiene edad para
ello, en doctrina cristiana^ arte, derecho, psicología,
francés, y qué se yo cuántas cosas más, las cuales no
aprenden más que á medias, sin comprenderlas, y esto
á fuerza de dañosos esfuerzos de memoria; pero nada
de gimnástica, nada de vigorizar su raquítico organis-
mo, sucediendo muchas veces que los ptidres se ven
sorprendidos por la meningitis ó la tisis, que les arre-
batan, crueles, sus prendas más queridas.
CIENTÍFICO
Los niños permanecen horas enteras en escuelas
donde el local reúne detestables condiciones, cuartos
pequeños la mayoría^ con retretes mal olientes; care-
ciendo de la luz vivificante del sol, que todo lo desin-
fecta y anima; sujetos á un régimen escolar detestable,
adoptado como bueno por maestros tan pedantones
como ignorantes; precisados, como viajeros de terce-
ra clase, á la inmovilidad más absoluta, porque á nada
que se nnievan, tropiezan con el compañero, tan apro-
vechado está el sitio; y en estas fatales condiciones, sin
salir al campo, sin libertad para estirar sus músculos,
con aire envenenado en sus pulmones, caen presa de
las enfermedades más mortíferas. No créase que exa-
gero ni que mi objeto es recargar el cuadro con
tintas de negrura, no; recorred la mayor parte de las
escuelas oficiales y particulares de Madrid, especial-
mente aquellas á que concurren los hijos de las clases
media y popular, y las veréis tal y como las he descri-
to; así muere tanto niño y asi estallan, cuando menos
se esperan, mortíferas afecciones, que, transmitidas por
contagio de unos pequeños á otros, siembran el pánico
en el s<>no de las familias, que entonces lamentan sus
descuidos y lloran sus ignorancias.
El abandono de la educación fí.sica trae, como veis,
lamentables consecuencias; más elocuentes que cuantos
razonamientos pudiera yo hacer aquí, son los cifras de
mortalidad que voy á exponer á vuestra considera-
ción: el número de niños muertos en nuestro país alcan-
za la terrible proporción de un 60,83 por 100; durante
el año 1889 murieron 10.1(53 niños; desde entonces acá,
lejos de disminuir la mortalidad, va en aumento; sola-
mente en el mes de Enero de 1890 fallecieron 71 de dif-
teria y 118 de meningitis.
Según un trabajo, leído hace poco en la Sociedad
Española de Higiene, durante el año 1895 fallecieron en
Madrid, sólo de meningitis, 1.072 niños.
Si de los pequeños pasamos á los miiyores, veremos
que en España han muerto de tuberculosis dui'ante el
decenio de 1880 á 1890, 104.388 individuos, cifra aterra-
dora, capaz de llamar la atención de los Gobiernos y
de los hombres pensadores; la tuberculosis, que se pre-
senta sin ruido, sin aparatos, escogiendo sus víctimas
lo mismo en el dorado alcázar, que en la humilde vi-
vienda, que no respeta edad, sexo, ni clase, es treinta
y ocho veces más mortífera que la viruela y la escarla-
tina reunidas, seis veces mi\s que la fiebre tifoidea, y
ocho veces más temible que la difteria; enfermedades
todas ellas, á cuya sola enunciación tiemblan los apren-
sivos y se preocupan los más fuertes.
Ahora bien; ¿qué es la tisis? Pues no es otra cosa que
el último grado de debilidad orgánica. ¿Y cómo se ad-
quiere ésta? Descuidando nuesti'a educación ifísica, no
preocupándonos para nada del vigor y grado de resis-
tencia en que siempre debemos mantener nuestros sis-
temas y aparatos, para que de su debido y perfecto
equilibrio resulte el mayor bien que puede atesorar el
hombre: la salud.
No hay para qué calcular la imensa riqueza que la
nación pierde con la muerte de tantos miles de hom-
bres, en tan corto espacio de tiempo, en lo mejor de su
vida, en épocas en que el trabajo podría dar mayores
rendimientos, efecto de las energías juveniles; pero
¿quién se preocupa de todo esto en un país como el
 MADRID CIENTÍFICO 761
nuestro, donde si un Ministro implanta una reforma útil, como de ancianos sólo pueden concebir chocheces y de-
el que le sucede, apenas ocupa la poltrona, la echa por bilidades; este es el pueblo á quien se acuchilla porque
tierra? Hubo un día en que el establecimiento de una da vivas calurosos á la patria donde nació, donde abra-
Escuela oficial de íliinnAstica, que fué plantel de bri- zó á su madre y donde tavo sus primeros amores.
llantes profesores, nos hizo concebir la esperanza de Este es el pueblo que aguanta que la inmoralidad se
que España entraba por fin en el buen camino; pero haya apoderado en nuestros días do todas las clases so-
cuan poco durai'on nuestras alegrías; apenas nacida ciales, vicio que mancha con su asquerosa baba, lo
cuando muerta tan útil institución, so pretexto de no mismo las esferas del poder que los institutos religiosos,
haber fondos en el presupuesto para sostenerla, quedó que ni aun protegidos por el manto sacratísimo de la fé,
la educación física relegada al olvido, los niños tan ra- se ven libres do la falaiyc de tunantes que impera en
quíticos como antes, y la i-aza española, asombro un día esta época.
del mundo entero, degenerando rápidamente. Todo esto, es efecto del estado de decadencia física
Es necesario llevar el convencimiento al ánimo de en que nos hallamos sumidos; un pueblo viril no tolera-
todos, especialmente al de las señoras que tanta influen- ría tales escándalos, y si á ellos no se pone remedio ur-
cia ejercen en la sociedad y en la familia, para que de- gente, nuestra querida patria se hundirá do seguro en
jando á un lado ideas rancias, procuren educar física- el abismo; el barco de buen blindaje, do robusto apare-
mente á sus hijos, desde el momento que nazcan, no jo y recio velamen, resiste bien las acometidas del hu-
abandonándolos en este terreno hasta que hayan lofjra- i'acán, capea el temporal más desecho con fortuna; el
do su cabal desarrollo en la edad viril. que carece de estas condiciones, pronto so va al fondo.
Las-prácticas hidroterápicas, baños, duchas, afusio. Preparemos, pues, á la generación que hoy nace,
nes frías, etc., casi no se practican en nuestro país, para que esté dispuesta á los grandes sucesos que se
aquí donde hay tantas manos negras y tanta concien- han de presentar en el porvenir: menos afeminamiento
cia sucia: la gimnástica, que muchos toman como ejer- y más fuerza; convencidos hoy de que lapas armada
cicio de titiriteros, es eficaz y segurísimo remedio para impera, de que el derecho internacional no existe, de
deformaciones d ,1 cuerpo, á donde no alcanza la me- que no se escuchan razones justas y sólo so atiende al
dicina, y en donde la intervención quirúrgica es hasta más fuerte, volvamos la vista al pasado, reconquiste-
perjudicial en muchos casos; unos meses de equitación mos nuestra perdida influencia, y no tendremos, como
curan cu las señoritas anemias que habían resistido mu- • el Rey moro, que llorar como tnujeres lo que no supi-
chos años de medicinas; un año de esgrima ó gimná£,ti- mos defender como liombres.
ca salva de la tisis, en muchas ocasiones, con más segu- Y si un día recobramos el vigor perdido, si nuestra
ridad que los ti'atamientos mejor dirigidos. patria sale del letargo en que yace, efecto de su debilidad,
La debilidad orgánica, la poca resistencia de nues- debemos emplearlo en recabar nuestra legítima inter-
tros sistemas y aparatos, es la causa de la mayor parte vención en el concierto europeo, donde, como vemos, sólo
de las enfermedades; el hombre que es robusto y no rige la ley del más fuerte, el vat victis de los antiguos
comete excesos, no enferma nunca, ó rara vez: muei'e Si la Providencia, por el contrario, nos ha apunta-
de viejo ó de un accidente fortuito; el débil, el mal do en el libro de los pueblos llamados á desaparecer de
constituido, se ve presa del catarro, de cuantas epide- la historia, no lo hagamos sin lucha, sin intentar el
mias se pasean por la población donde resida; siempre último esfuerzo; y si nuestras energías son escasas,
está dolorido, carece de energías para el trabajo, ve por nuestro corazón, vigoroso todavía, nos dará alientos
esta causa disminuir sus i'ecursos y muere joven, en para, con frase enérgica, despreciar á nuestros opre-
medio de melancólicos pensamientos, después de haber sores, y maldecir á los causantes de la ruina de nues-
arrastrado una existencia miserable. tra patria.
Trabajemos, pues, todos en la medida de nuestras Dr. CALATRATEÑO
fuerzas, para que la ASOCIACIÓN NACIONAL DE GIMNÁSTICA »c-3^gg->
alcance sus nobles ideales, que no son otros que la re-
generación de la raza española. LOS CAMINOS T LOS ÁRBOLES
Causa pena vernos en el estado de anemia en que El Estado tiene 586 viveros, 1.047.G71 árboles plan-
hoy nos contemplamos; el pueblo que paseó triunfante tados en las carreteras: árboles que valen aproximada-
sus banderas por todo el orbe, que conquistó centenares mente .'i.700.000 pesetas, y se hallan repartidos en unos
de ciudades, que arrojó á los moriscos de su suelo, que 6.800 kilómetros.
dominó en las más vanadas latitudes, descubrió Améri- La provincia que tiene más arbolado es la de Burgos
ca y derrotó á Napoleón del trono que se había cons- con 104.549, y después sigue la de León con 67.714.
truido con las coronas de los Reyes que iba sometiendo De las demás tienen también bastantes, aunque no
á su férreo poder; ese pueblo está hoy á merced de gro- llegan á 60.000, las de Canarias, Soria, Barcelona, Ma-
seros comerciantes en tocino, que allá, al lado de un drid y Logroño, figurando en el último lugar, con me-
pedazo de nuestro territorio, que pretenden robarnos, nos de 5.000 árboles, las de Cádiz, Castellón, Ciudad
nos insultan y escarnecen, sin que respondamos como Real, Coruña y Pontevedra.
debiéramos á sus insolentes provocaciones; este pueblo La plantación de árboles en las provincias de Zamo-
es el que sufre que le arrebaten las actas de los Diputa- ra, Guadalajara y Lérida se eleva á unos 25.000, exis-
dos que elige por sufragio universal, derecho comprado tiendo sólo en la primera pi'oviuoia cinco viveros, plaii-
con su generosa sangre, vertida en cien luchas por la tados en 600 kilómetros de carretera 21.569 árboles, cu-
libertad; el que soporta las genialidades de gobernantes yo valor será de más de 70.000 pesetas.
con el cerebro ya medio deshecho por los años, y que
 762 MADRID
TRESILLO
Con motivo de un problemita de tresillo propuesto en
uno de los pasados números, me han pedido algunos afi-
cionados que escriba algo acerca de los estuches.
—«¿No es el tresillo un juego de combinaciones?—
me dicen en una de las cartas.—Pues usted que tanta
afición denota hacia el Calculo de ProhahiUdades podrá,
á buen seguro, discutir ciertas jugadas de tresillo con
más acierto que otros.» Acaso tenga razón mi comunican-
te en que el CálciUo de Probabilidades sea un poderoso
auxiliar para abordar los problemas de tresillo. Yo, sin
embargo, me permito dudarlo no poco. Los juegos de
azar (monte, bacarrat, treinta y cuarenta, etc.) sí son
bien fáciles de atacar por las matemáticas. Y dicho sea
de pasada, i-esulta del consabido ataque que el jugador
se las há con un enemigo invencible que tarde ó tempra-
no lo arruina.—Todo Jugador acaba por arruinarse, ha
demostrado el gran Laplace, en un ingeniosísimo teore-
ma corolario de otro de Bernouilli. Mas respecto al tre-
sillo, no se me ocurre cómo se le pueda meter el diente
por medio de las matemáticas. Mientras en un juego do-
mina exclusivamente el factor suerte, os sencillo discu-
tirlo matemáticamente. Mas apenas aparece ese otro fac-
tor aleatorio que se llama saber, ya caen por tierra
cuantos cálculos se forjen. Quien juegue medianamente
al tresillo, no perderá nunca siendo mano un juego de
seis de estuche caballo A palo corto: un principiante es
fácil que lo pierda. Ganar ó perder una jugada, depende
en numei'osas ocaciones de la elección en la salida. To-
cante á la mencionada elección, ninguna luz pueden dar
las matemáticas. La jugada que los tresillistas llaman
falsear un rey, es otra de las que se presentan á cada
momento, y sin embargo, no puede someterse al cálculo
de las probalidades. En cambio los juegos en que las car-
tas falsas no tienen apenas valor y en que los triunfos
lo son todo, se prestan perfectamente á las prediccio-
nes matemáticas. Aclaremos lo expuesto con algunos
ejemplos.
Un jugador tiene siete triunfos de espada (á .palo cor-
to) y dos falsas cualesquiera. Se supone que el jugador
es mano. Si arrastra de espada y sirven al arrastre, el
juego no puede perderse. Si arrastra de espada y uno de
los jugadores no sirve, el juego será muy fácil que se
pierda. Para que se pierda, pues, el juego, es preciso
que los cuatro triunfos (diferencia de siete á once) que
al jugador le faltan, se hallen en una mano. ¿Cuál es
la probabilidad de que esto ocurra? Asi planteado el
problema, es de muy fácil resolución. Los dos jugadores
que hacen la contra tienen entre ambos dieciocho car-
tas. De las dieciocho, cuatro son triunfos. ¿Cuál es la
probabilidad para que eligiendo al azar nueve de las
dieciocho cartas, en las nueve no haya ningún triunfo
y en las nueve restantes estén los cuatro triunfos?
El número total de combinaciones que se pueden for-
mar con dieciocho objetos, tomados nueve á nueve, es:
18.17.16.15.14.13.12.11.10
1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8. 9
Si en el grupo de las nueve cartas escogidas no hay
ningún triunfo, claro es que este grupo será uno cual-
CIENTÍFICO
quiera de los que se pueden formar con las dieciocho
cartas desprovistas de los cuatro triunfos, es decir, con
catorce cartas tomadas nueve á nueve, ó sea
14.13.12.11.10.9.8.7.6
1. 2. 3. 4. 5. 6.7.8.9
El cociente de estas dos fracciones indicará la proba-
bilidad de que uno de los jugadores no tenga triunfos.
Este cociente es:
14.13.12.11.10. 9. 8. 7. 6
(aproximadamente).
18.17.16.15; 14.13^1231 JLO 100
Y como lo mismo da, para los efectos de perder el
juego, que cualquiera de los jugadores que van á la con-
tra no posea triunfos, será preciso duplicar la probabili-
dad obtenida (-7r-) y decir que de cada cien veces, ocho
\ 100/
de ellas se perderá el juego y noventa y dos se ganará.
Hasta ahí el razonamiento es fácil y riguroso, pero
incompleto. Aun cuando todos los triunfos que faltan al
-jugador estén juntos, puedo éste ganar el juego con tal
de que sus falsas sean firmes para aquél. ¿Cuál es la pro-
babilidad de que así suceda? Aquí es y a donde decía-
mos que claudicaba el cálculo de probabilidades. Supon-
gamos que el jugador tiene por falsas dos oros pequeños.
Si el contra que lleva los triunfos está fallo á oros, es evi-
dente que el jugador gana el juego. Mas, ¿cuál es la pro-
babilidad de que el contra se halle fallo á oros? Si no
hubiera en el tresillo lo que se llama «descarte», la dicha
probabilidad seria bien fácil de calcular. Mas como el
«descarte» depende del capricho del jugador, habría
necesidad de calcular la probabilidad de un determina-
do capricho y los caprichos no pueden someterse al cál-
cuWde probabilidades. Mientras no salgamos de com-
binaciones de triunfos, todas las jugadas se calculan;
mas apenas entren en juego las falsas, los cálculos re-
vestirían gran complicación, y aun suponiendo que se
efectuaran, serían casi ineficaces para los efectos del
juego.
Lo propio que hemos dicho del juego anterior puede
decirse del de seis de espada, mala, blanquillos y tres
falsas (á palo corto). Si el jugador es mano y arrastra
de espada y de mala, y le sirven á los dos arrastres, se
gana el lUego. ¿Cuál es la probabilidad de que sirvan á
los dos arrastres? Un cálculo análogo al anterior hace
ver que de cada siete veces se ganará el juego cinco y
se perderá dos. El dicho solo (de mano) es, pues, bueno,
aun cuando los tresillistas suelen opinar de otra mane-
ra. En el mencionado juego puede preguntarse: ¿qué
probabilidad hay de que yendo al robo por tres cartas
se roben dos firmes, en cuyo caso se gana siempre el
juego, ó de que se robe un triunfo, en cuyo caso tam-
bién siempre se gana? La contestación es fácil, y si la
omitimos, es para que por sí mismos la hallen los afi-
cionados.
Fansio BABEL.
 MADRID CIENTÍFICO
ASTROLOGIA
TRATADO DE LA ' A S T R O L O G Í A , RÚSTICA Y PASTORIL., IMPOR-
TANTE PARA LABRADORES, PASTORES Y NAVEGANTES
Señales de vientos por el Sol
Si cuando el Sol naciere mostrare tener en sí alguna
concavidad, señala vientos húmedos.
Cuando el Sol apareciere á ¡a mañana amarillo, con
algunas nubes debajo, denota vientos septentrionales.
Cuando á la mañana apareciere el Sol rubio, señala
vientos muy enjutos.
Cuando al nacer el Sol esparce las nubes, unas hacia
el austro, y otras hacia el septentrión, señala vientos hi'i-
medos, y aun con agua.
Cuando el Sol al salir ó al ponerse se viere de color
verde ó cetrino, rodeado de nubes gruesas, señala vien-
tos recios y húmedos.
Cuando al salir del Sol se mostrare más grande (|ue
lo acostumbrado, señala fuertes vientos al tercero día.
Cuando el Sol tuviere muchos circulas alrededor, se-
ñala tempestad de vientos: si tuviere solo un circulo de
muchos colores, señala lo mismo.
Señales de serenidad por la Lnna
Si la Luna tuviere los cuernos agudos y resplande-
cientes por tres dias antes ó después de la conjunción ó
posición, ó cuartos, denota serenidad por todo aquél
cuarto.
Si la Luna al cuarteó lleno tuviere la parte que mira
al septentrión más delgada y clara que la ¡(xue mira al
austro, denota serenidad.
Si la Luna al cuarto día tuviere las puntas delgadas,
y ella estuviere muy resplandeciente, denota serenidad
por toda la lunación.
Si la Luna al tiempo de su nacimiento estuviere clara
y sin nubes alrededor, significa serenidad.
Si la Luna al tiempo del nacimiento mostrare su luz
á la redonda, significa serenidad.
Si la "Luna tuviere alrededor algunos círculos, y
fueren blancos, amarillos y rubios, denota serenidad.
Señales de vientos por la Lnna
Cuando la Luna se mostrare muy rubicunda tres
dias antes ó después de su conjunción, ó si tuviere algún
círculo de dicho color, señala fuertísimos vientos.
Cuando la Luna siendo nueva tuviere las puntas
muy delgadas, coloradas ó resplandeciente.?, y que pa-
rece que se mueve, señala terribles vientos.
Cuando la Luna antes del cuarto día no mostrare sus
puntas agudas, sino romas, señala vientos duraderos
por casi toda la lunación, y que vendrán de occidente.
Cuando al cuarto día de la Luna mosti'are sus pun-
tas gruesas, y que pareciere moverse, señala vientos
grandes y mojados.
Cuando la Luna al cuarto día tuviere un círculo ru-
bio denota vientos.
Cuando la Luna se mostrare rubicunda en cualquier
tiempo, señala vientos.
Cuando la Luna saliere por el occidente, ó se pusiere
y se mostrare rubia, y no resplandeciente, señala vien-
tos ftiertísimos al tercer día.
763
Cuando la Luna tuviere algún círculo negro ó verde
é intercisa por muchas partes, denota vientos fuertes.
Cuando la Luna fuero llena, y tuviere algún circulo,
y dentro del círculo hubiere nube alguna, señala vien-
tos terribles.
Señales de llnvla por la Lnna
Cuando la Luna antes de su conjunción ó lleno tres
dias mostrare las puntas gruesas y obscuras, significa
llover al cuarto do la Luna.
Cuando la Luna apareciere después de su girante
obscura, cárdena ó verde, denota llover presto.
Cuando la Luna mostrare la punta que mira al aus-
tro gruesa y obscura, lloverá antes del plenilunio.
Cuando la Luna al cuarto día no se mostrare, y rei-
nasen vientos occidentales, denota grandes aguas.
Cuando la Luna se volviere en martes, acostumbra
llover. Y si acaso lloviere el primer martes después de
vuelta, durará el agua todo un cuarto de Luna.
Señales de tempestades por la Luna
Cuando la Luna antes de su conjunción y oposición
por tres días, y otros tres después mostrare las puntas
gruesas y no agudas, y ella pareciere moverse, señala
tempestad y tormenta en el mar por muchos días.
Cuando la Luna pareciere centellear en el agua, y
sobre los romos del bajel, señala tempestad.
Cuando la Luna tuviere muchos círculos obscuros é
intercisos, significan mal tiempo por aguas y vientos.
Cuando la Luna se mostrare muy encendida & los
dieciséis días de su curso, señala presto borrascas, así
en el mar como en la tierra.
Cuando la Luna pareciere amarilla, y tuviere algún
círculo cárdeno, significa que habrá tempestad con pie-
dra y rayos.
Señales de frío por el Sol, Luna y Aves.
Cuando el Sol apareciere en el invierno muy resplan-
deciente ó rubio, denota fríos.
Si cuando el Sol sale ó se pone tuviere algún círculo
de color de plomo, significa fríos al otro día siguiente.
Cuando la Luna en sus cuartos fuere de color de
plomo ó verde, ó so hallare en alguno de los signos tó-
rreos, denota grandes fiúos en aquél cuarto que lo dicho
tuviere.
Cuando muchas aves pequeñas de diferentes especies
se congregaren, buscando el mantenimiento junto á po-
blado, señala heladas muy grandes.
Cuando el pergamino y papel en tiempo húmedo se
paran secos súbitamente, señala mudanza de tiempo en
grandes fríos.
Señales de serenidad por las estrellas
Cuando las estrellas están quietas y muy resplande-
cientes, denotan serenidad.
Cuando se viere correr de una parto á otra exhala-
ciones como Estrellas, denotan serenidad con vientos.
Cuando las lístrellas fijas y planetas tuvieren algún
circulo alrededor, y fuere blanco, amarillo ó rubio, de-
notan serenidad; y si acaso tuvieren más de un círculo,
y fuere rubio, denotan serenidad con vientos.
 /04 MADRID CIEISITIUCO
FOTOGRAFÍA DE LOS RUIDOS DEL CORAZÓN
Cuatro años faltan para qiu; termino el siglo XIX y
¡sabe Dios! en esc lapso de tiempo los prodigios que nos
revelará la fotografía, que, visto el estado á que ha lle-
gado, le falta poco ó nada para que pueda considerarse
como ciencia.
Desde aquellos feos y amanerados retratos al dague-
rreotipo, en «lue hasta el más gran señor tenía, cuando
mucho, aire de criado de casa distinguida, hasta la foto-
grafía de colores, tomados del natural, ¿qvib adelantos
no ha hecho ese que, á justo título, puede llamarse arteV
Y como si todas las innovaciones introducidas no fue-
sen bastantes, y como si todo lo que ese arte ha creado
y producido fueran cosas nimias, hoy elevando el vuelo,
pretende ayudar A la ciencia y prestar servicios á la me-
dicina y A la cirujía.
Como el título de este artículo lo indica, ya tenemos
la ¡fotografía de los ruidos del corazón!...
Hay para preguntarse: ¿qué es lo que no se fotogra-
fía en la época actual?
Del exterior, ha pasado el objetivo A apoderarse del
interior del individuo, y les ha llegado la vez de poner-
se delante del cristal A los ruidos del corazón, es decir:
las vibraciones sonoras producidas por el cierre de las
válvulas aurícolo-ventriculares y sigmoideas.
M. A. Holowinski ha llegado A combinar un método
enteramente automático para fotografiar los instantes de
los ruidos cardiacos.
El principio reposa en el hecho de que la tensión pe-
riódica de las vAlvulas es, no solamente syncrónica con
las vibraciones sonoras de los ruidos esteoscópicos, sino
con las «sacudidas mecánicas» (extremecimientos) que
la acompañan al propagarse por toda la superficie del
tórax; estos sacudimientos, son insensibles directamente
al oído (á causa de su escasa frecuencia), pero se sienten
con frecuencia A la presión del dedo y se los ve por re-
flexión de un punto de mira sobre un espejo aplicado en
todos los puntos del tórax.
Para fijar fotogrAficamente estos sacudimientos syn-
crónioos con el esteóscopo, el autor emplea: un micrófo-
no perfeccionado, un teléfono óptico, animado por el mi-
crófono y cuyo diafragma produce los anillos colorea-
dos de Newton; un sistema óptico para iluminar los ani-
llos y reflejar la imagen real, inversa y agrandada so-
bre una ligera hendidura vertical: un tambor rodeado
de un papel muy sensible que gira alrededor detrás de
]a hendidura de la cámara fotográfica,
Este descubrimiento puede ser de gran utilidad para
los flsiologistas y los médicos, haciéndoles conocer do
visu las modificaciones de los ruidos del corazón, vinien-
do á ser de ese modo la fotografía auxiliar de la aus-
cultación.
*<-^x3m-^*
CIENCIAS NATURALES
Descubrimientos que se deben al clero:
La d^ctilonmia y la quisomancia, al monje Beda.
La primera afirmación de la redondez de la tierra y
do la existencia de los antípodas, al Arzobispo de Salz-
burgo.
La clave, la escala musical y la armonía al morje
Guido de Arezzo.
El imán y la brújula, al diácono Giojo.
Los anteojos-, al dominico Spina.
El cinc y el arsénico, al dominico Alberto el Grande.
hñs ideas claras sobre todos los descubrimientos de
nuestro siglo, al monje Regerio Bacon.
Los fusiles y la pólvora de cañón, al fraile Schwartz.
Las bombas, al obispo Crien.
La primera aplicación A la medicina de los recursos
de la química, al benedictino Blas el Valentino.
La Algebra, á Lucas de Burgo.
La linterna mágica y la construcción del espejo
ardiente por medio de los vidrios planos, al jesuíta
Kirchez.
L.'i difraeión de la luz y el descubrimiento de los di-
fusorios, al jesuíta Caballero.
El sistema métrico, al Cardenal Regio Montano.
El verdadero sistema del mundo, al cardenal Cusa y
al canónigo Copérnico.
El principio de la instrucción A sordomudos que des-
pués perfeccionó el cura l'Epcé, al benedictino Ponce.
La instrucción de los ciegos, al jesuíta Luna.
La invención del corte de piedras, al cura Campori.
El arte de desenvolver los manuscritos de Herculano,
A un monje.
líl litótomo al fraile Cosme, quién fundó además un
hospital para aliviar á los enfermos con el aparato de su
invención.
El clavicordio ocular^ en el cual se ven los colores en
vez de oírse sonidos, al P. Castel.
El hidrocronómetro, nuevo reloj de agua, al domini-
co Embriaco.
Los mejores brazos y antebrazos artificiales para
adoptarlos á los miembros operados, al cura Noel.
El mismo Xoel inventó la señal de alarma, y el sa-
cerdote Curtosi el freno instantáneo para los trenes en
caso de peligro.
El meteorógrafo, al jesuíta Seechi.
El pantelegrafo, al P. Caselli.
El anemometrógrafo, al P. Zaillard.
El multiplicador eléctrico, al P. Pernisetti.
El telémetro acústico y óptico, al P. Chagey.
El contador solar, al P. AUegret.
El alconómetro perfecto, al P. Vidal.
El electrógano constante, al P. Fithol.
Los relojes eléctricos, al P. Cándido.
Jlentecasino, una de las enseñanzas médicas en Eu-
ropa y la espuela de Salerno, y el magnífico hospital de
Guadalupe, donde se dio principio al estudio de la Clíni-
ca en aquella época, y á la enseñanza práctica de la
anatomía potológica, fueron fundados y dirigidos por
frailes.
La «Nueva esfera copernicana con las órbitas elípti-
cas» fué construida bajo la dirección del benedictino
Zafón y Ferrer.
El tratado de «Hidrografía» con la teoría práctica de
todas las partes de la navegación y la «Noticia geográ-
fica del Orbe, de las costas, de los mares y orillas de los
ríos» se deben al jesuíta Fournier.
Y otra infinidad de obras.
««xji^jjaw-i
 MADRID CIENIIFIOO
LA E S C U E L A D E B I L B A O
ARTILLEROS É INGENIEROS INDUSTRIALES
Sr. Director de MADRID CIENTÍFICO.
Distinguido señor nuestro: en la Revista que usted
tan dignamente dirige, y en el número correspondiente
al 7 del actual, aparece un artículo bajo el doble título
La Escuela de Bilbao. Un engeuch-o, Armado por
D. I. Boixader; como ese artículo contiene apreciacio-
nes inexactas respecto á la concesión d(!l titulo de In-
genieros Industriales á los Oficiales de Artillería, nos
apresuramos á remitir á usted el adjunto comunicado
exponiendo algo relativo al asunto.
No dudamos que su imparcialidad é indudable co-
rrección hará que dicho comunicado vea la luz en MA-
DRID CIENTÍFICO, con objeto de rectificar (siquiera en
breves frases) los conceptos inexactos del Sr. Boi-
xader.
Eeciba usted la consideración más distinguida de
sus afectísimos s. s. q. 1. b. 1. m.,
EmiUo SERGIO Joaquín GAROOQUI
Capitán de Artillería
Capitán de ArtiUería
c Ingcuiero Industrial ó Ingeniero Industrial
Svgovia 15 Marzo 1897.
Sr. D. I. Boixader, Ingeniero Industrial:
Muy señor nuestro: no nos guia el deseo de entablar
una polémica con usted respecto á la conveniencia de
crear en Bilbao una nueva Escuela de Ingenieros Indus-
triales (conveniencia que, salvo su respetabilísima opi-
nión, creemos indudable); sólo nos mueve el deseo do
rectificar el concepto que vierte en su artículo titulado
Un engendro, y publicado en MADRID CIENTÍFICO el 7
de Marzo último, respecto á la pretensión de los artille-
ros i'ecabando el titulo de Ingenieros Industriales. Esta
pretensión, que usted no quiere calificar (dando con
ello una prueba de esquisita prudencia) la juzga basada
únicamente en que salimos los aludidos de la Academia
de Segovia con dos estrellas en la manga, y créanos el
Sr. Boixader que tal creencia no es digna de ser conce-
bida por un Ingeniero Industrial de su talla científica;
nosotros hemos solicitado ese título y le tenemos (con
gran dolor de usted y satisfacción nuestra) después de
largos informes y de ser resuelta nuestra petición en el
Consejo de Estado; éste, sin sospechar que á usted le
molestase, ci'ej'ó que los programas de estudio de nues-
tra Academia satisfacían con exceso las exigencias
científicas de la Escuela de usted, y esa es precisamente
la base de que hoy podamos ostentar el indicado
titulo.
Lamentando la ignorancia en que se hallaba usted,
respecto á este asunto, aprovechamos con gusto la oca-
sión de ofrecernos en nombre do nuestfos compa-
ñeros.
Suyos afectísimos s. s. q. 1. b. 1. m.,
Emilio SERGIO Joaquín GAROOQUI
Capitán de Artillería Capitán de Artillería
c Ingeniero Industrl»! é Ingeniero Indagtrial
765
DE ENSEÑANZA
Discurriendo acerca del ingreso en las Escuelas es-
peciales, escribe en una revista técnica el profesor de la
Escuela de Montes 1). Valeriano (lonzález Mateo:
«En un semanario profesional se publica un notable
artículo referente al ingreso en la Escuela de Ingenieros
de Caminos, Canales y Puertos, suscrito por el dignísi-
mo Director de la misma Sr. Alvarez Núñez, en el cual,
partiendo del proyecto que al parecer existe de unificar
los programas para ingresaren las Escuelas especiales,
se hacen atinadas observaciones en pro de idea tan sim-
pática, y enumera las positivas ventajas que tal medida
reportaría á la juventud escolar que se dedica á las ca-
rreras de Ingenieros.
La sana doctrina que se defiende, y la indiscutible
autoridad que da al pensamiento el ser tratado por per-
sona de los méritos del Sr. vvlvarez Núñez, nos hace con •
cebir la halagüeña esperanza de que la Superioridad se
fije en materia tan importante, y ponga remedio á las
anomalías que resultan en el sistema actual.
Es verdaderamente inconcebible que teniendo las Es-
cuelas de Ingenieros programas de ingreso, en los que,
si alguna diferencia se nota en ellos, es puramente de
detalle, que en nada afectan á la esencia de los conoci-
mientos que el aspirante á Ingeniero ha de adquirir; y
siendo, por otra parte, análogo el sistema de exámenes,
la suficiencia demostrada en una Escuela no sirva de
abono para otra, si por cualquier circunstancia á unas-
pií'ante se le ocurre variar de carrera. Sólo podría con-
cebirse el actual sistema si para el ingreso en las cita-
das Escuelas se fijase un número limitado de plazas,
pues en este caso, tomando los ejercicios el carácter de
una oposición, no basta, como es sabido, demostrar sufi-
ciencia, sino también mérito superior entre los que se
disputan un puesto. Pero cuando esto no ocurre, repito
que no concibo la limitación impuesta, y es más, me pa-
rece algo depresiva para nuestras Escuelas, porque re-
vela cierta desconfianza que, á nuestro juicio, no tiene
fundamento serio que la abone.
No se me oculta que la validez de estudios comunes
de una í^scuela para otra daría lugar á ciertos recelos,
desde el momento en que la juventud escolar marcase
preferencia á determinada ó determinadas Escuelas
para obtener los certificados de aptitud, y á evitarlos
obedece, sin duda alguna, la solución que propone el
Sr. Alvarez Núñez, de que los exámenes se verifiquen
con Tribunales mixtos. Hecho en esta forma, creemos
que llegarían á realizarse los ideales de todos ó casi
todos los Ingenieros, y inejor aún, creando un Centro
oficial conforme propone también el Sr. Alvarez Núñez,
en el que se dé la verdadera enseñanza preparatoria,
aliviando á las familias de los enormes sacrificios que
les impone el período de la preparación, causa de que
sólo sean asequibles estas carreras á los escolares de po-
sición desahogada.
Reciba el sabio Director de la Escuela de Caminos
nuestro modesto aplauso, y persevero en tan noble idea
pues seguramente ha de ser bien acogida por el dignísi-
mo Ministro de Fomento, el que, con el claro criterio que
le distingue, sabi'á desarrollarla en forma que satisfaga
á las necesidades de todos los Cuerpos de Ingenieros.»
 766 MADRID CIENTÍFICO
NOTAS DE ELECTRICIDAD
CÁDIZ
Dicese que en breve se ¡nstalai'á el alumbrado eléc-
trico en Villamartin.
El Ayuntamiento de aquella villa ha otorgado el co-
rrespondiente permiso para el establecimiento de la
mejora, y el contratista ha adquirido un buen molino
para utilizar la fuerza hidráulica en el desenvolvimiento
de esta industria.
También se piensa establecer dicho alumbrado en
Arcos de la Frontera.
Celebraremos que ambas poblaciones puedan disfru-
tar pronto de estas mejoras.
Se vende un juego de ARCOS VOLTAICOS, sistema
Piepor, con sus guarniciones, globos, resistencia, etcé-
tera—7 amperes.
Dirigirse á esta Administración.
En Gorbejuela (Vizcaya) los Sres. Falcó, Iglesias,
Hermida y Peña han firmado el contrato para el alum-
brado eléctrico, en el que se emplearán 30 caballos que
serán engendrados en un alternador que producirá su
corriente á 3.000 volts. El Ingeniero encargado de diri-
gir los trabajos de montaje será nuestro querido amigo
y compañero D. Juan Urrutia.
Se ha remitido á informe de la Dirección de Obras
públicas un proyecto do fabrica de energía eléctrica
para ampliar el alumbrado existente en Albacete, y do-
tar del mismo á todos los pueblos que lo deseen denti'o
de un radio de 30 kilómetros, cuyo centro es dicha fá-
brica, api'ovechando para ello, como fuerza motriz, 11
metros cúbicos por segundo de agua del río Júcar, en el
sitio conocido por «Molino de Moranchel», en término de
Valdeganga, de aquella provincia, y un salto de 5,75
metros que ofrece dicho punto, acumulando al de la
presa del molino otros dos que naturalmente existen en
el lecho del rio próximos á agua abajo de la citada
presa.
Se ha concedido á D. Eudaldo Morell, vecino de San
Lorenzo de Campdevánol, autorización para aprovechar
2.000 litros por segundo de las aguas del río Tresser
para producir energía eléctrica para una fábrica de di-
cho término.
PRECAUCIONES QUE DEBEN DE TOMARSE EN LA
FABRICACIÓN DE LOS ACUMULADORES ELÉCTRICOS
La fabricación do los acumuladores eléctricos consti-
tuye, en las actuales circunstancias, una industria muy
importante que exige especiales precauciones.
L'Electricien las indicará los interesados resumiendo
una importante Memoria de M. P. Schooq en el Zeits-
chrift für Elektrotechnik.
Según este especialista, como en la operación se ma-
nejan tantos compuestos de plomo, conviene que se exi-
ja el mayor aseo á los obreros. Al mismo tiempo, y en
cada momento de reposo, se obligará á los operarios á
que se laven las manos, brazos y cara con agua caliente
y jabón, como también cambiar de ropas. Los vestidos
para el trabajo deberán ser todos de lana; se sacudirán
y cepillarán diariamente, lavándolos todas las semanas.
La habitación donde se manipulan las materias, de-
berá ser muy ventilada; el piso será de asfalto y se la-
vará completamente dos veces por día.
No se empleai'á en la preparación de las pastas á
ningún obrero que no sea sano y robusto, ni se le dejará
continuar ese servicio más do una quincena de días con-
secutivos, después de lo que se le hará trabajar otros
quince días al aire libre.
Al primer síntoma de envenenamiento, que se mani-
fiesta por la pérdida de apetito y vómitos, deberán vigi-
larse cx)n atención estos síntomas, llamando enseguida
al médico.
Si se toman las procauciones convenientes, no hay
motivo para que un obrero no goce de buena salud y no
viva largo tiempo, por más de que se ocupe de tan peli-
grosos trabajos.
ZAHORA
En Fuentesauco se establecerá seguramente el alum-
brado eléctrico, pues acordado por el Ayuntamiento
como lo está, no dudamos ha de ser un hecho.
LA FUERZA DE LA MAREA
Acaso la primera vez que se haya intentado utilizar
la gran energía de la marea sea el experimento que se
está llevando á cabo en la costa del Pacifico, en Santa
Cruz. Se está instalando un dinamo que ha costado
4.000 libras y funcionará por un raudal de agua alzado
por la marea; la energía que se obtendrá de esta mane-
ra se empleará en alumbrar á la ciudad é impulsar los
vehículos públicos. Esto es al menos lo que se proyecta,
aunque aún está por probar si puede llevarse á efecto
de un modo satisfactorio. Se notará que si este plan re-
sulta factible, la energía que alumbrará Santa Cruz é
impulsará á su tráfico será derivada, no como la que
alumbra otros lugares del sol, por el intermediario, de
combustible ó de fuerza hidráulica, sino de las rotacio-
nes del mundo, jiues aunque es la atracción del sol y
de la luna que alzan la ola do la marea, es la rotación
del globo terráqueo la que le da su energía.
BIBLIOGRAFÍA
DICCIONARIO COMERCIAL, por v.ii-ios colaboradores, bajo la
dirección de D. Vicente Guimerá, Vocal del Consejo de
Aduanas y Aranceles y redactor de la sección de Ha-
cienda en El Imparcial.
Comprende los productos naturales y fabricados.
Procedencias.—Principales fábricas y depósitos.—
Agencias. — Acondicionamientos. — (íeografía comer-
cial.—Plazas mercantiles.—Usos y costumbres.—Servi-
cio de navegación.— Metrología. — Monedas, pesas y
medidas.—Derecho mercantil.—Leyes de comercio y
aduaneras. —Aranceles de todos los países.—Contabili-
dad.—Aritmética lüercantil.—Cambios y arbitrajes.—
Formularios. —Modelos de cuentas, facturas, pólizas y
toda clase de documentos de crédito.
Por las materias que desarrolla se ve claramente
que es muy útil para toda clase de comerciantes, pues
el aprendizaje al pie del mostrador resulta nulo si no
va acompañado de las nociones, conocimientos y datos
necesarios para aplicar, dirigir ó modificar la práctica,
llenando este libro el vacío que se notaba en nuestra
enseñanza mercantil, evitando así que el comercio de-
genere en una rutina que destruya toda iniciativa y
todo espíritu de empresa.
 MADRID CIENTÍFICO
NOTAS VARIAS
TELÉFONO ENTRE MADRID T PARÍS
Dicen algunos periódicos extranjeros que se encuen-
t r a actualmente en vías de realización un proyecto im-
portante, cual es el de unir telefónicamente. París con
Bayona por Burdeos. Han acordado subvencionar la
proyectada línea los Municipios de Bayona y Biarritz
con 40.000 y 10.000 pesetas respectivamente; con éstos
auxilios puede decirse que está ya casi completo el ca-
pital necesario para llevar á cabo la idea; y como San
Sebastián está unido por teléfono á Madrid, os de creer
que no pase mucho tiempo sin que se lleve á la práctica
el expresado proyecto.
EL FOTO-ESMALTE
Combinando hábil y artísticamente la fotografía y
la química, pueden obtenerse pruebas sobre metal, mar-
fil, madera y telas, y obtener de esc modo efectos deco-
rativos notables.
En el Monitor de Quesnecille hallamos el procedi-
miento, debido á Mr. Josz, y que consiste en transpor-
tar las pruebas fotográficas sobre las superficies que se
quiei'en adornar, empleando un barniz graso, con base
de resina y baños que ablanden el papel.
He aquí cómo se procede de un modo general;
Prepárese la superficie sobre la que se quiere obte-
ner la imagen fotográfica, recibiéndola de una capa
delgada y regular de barniz á base de goma resinosa:
déjasela secar hasta que quede pegajosa ál tacto. Se
toma una prueba fotogi-áfica en cualquier papel, barni-
zado de antemano con el mismo barniz. Se deja secar
completamente éste. Sobre la imagen fotográfica coló-
case el lado pegajoso del barniz, sobre el que se quiere
sacar la imagen fotográfica y se le somete durante'diez
minutos á una presión de 150 atmósferas en la prensa
hidráalica. Retirase la superficie llevando la prueba
fotográfica, y se la hace secar durante tres ó cuatro ho-
ras en una estufa caldeada á 40-45" R. Enseguida se in-
troduce la prueba fotografiada en un baño compuesto de:
Agua 100 partis
Soda cáustica 15 » luz intensa, con llama de media vara de alto, que dura
Alcohol rectificado 100 » cuatro ó cinco horas.
Acido acético '^5 » Con tan poderoso auxiliar es imposible perder un
Déjasele reposar en este baño durante 15 minutos.
Lávase en agua corriente, y con un tapón plano cubier-
to de filtro fino, frótase ligeramente toda la superficie.
El papel reblandecido por este baño, se despega poco á
poco, dejando intacto sobre la superficie barnizada del
soporte, la capa de albúmina ó de gelatina que ha teni-
do la parte fotográfica sobre papel.
Lávase al agua corriente, y sumérgese la prueba en
una disolución compuesta de:
Alumbre 15 gramos
Agua 100 »
que tiene por objeto dar solidez á la capa de gelatina
^ a d a sobre la superficie. Para obtener el reporte de la
767
imagen fotográfica en diferentes colores, se aplican éstos
al óleo y con secante, sea sobre la prueba fotográfica
barnizada, descrita más arriba, con pincel ó por medio
de la prensa litográfica, sea aplicando los colores sobre
la base barnizada que debe recibir la prueba; en uno ó
en otro caso y secado que esté el color, se procede como
hemos indicado.
EL GICLOFOTÓGRAFO
El señor Rochefox Macquard, conocido inventor bel-
ga, lia dado la solución de un original problemas; ha in-
ventado el llamado ciclofotógrafo, aparato fotográfico
adaptable á las bicicletas.
Consiste el raro aparato en una minúscula cámara
fotográfica, de doble objetivo, que obtiene con una velo-
cidad incomparable la impresión del paisaje en una lar-
go tira de papel sensibilizado, y que pasa á enrollarse
en un cilindro en el interior de la máquina, que, fija en
el frente del guía de la bicicleta, presenta sus dos obje-
tivos A ambos lados del camino que recorre.
La vertiginosidad de las impresiones es tal, que no
se nota la solución de continuidad en las tiras de papel,
regulándose su mayor ó menor precipitación por un
complicado aparato de relojería en combinación con la
marcha de la bicicleta.
La invención parece que es tan admirable como sen-
cilla, y el modo mecánico de operar el no menos de los
problemas resueltos por el inventor.
TORPEDOS FOSFORESCENTES
No basta saber lanzar un torpedo con todo el apa-
rato que su argumento requiere, sobre todo tratándo-
se de un torpedo de ejercicios de tiro, sino que conviene
saber «do va la nave», es decir, adonde va el proyec-
til y seguir teóricamente las peripecias de su marcha
destructiva.
La mai'ina inglesa ha tenido la idea, por demás inge-
niosa, de utilizar para su objeto el fosfuro de calcio.
La estación naval de torpedos de Inglaterra prepa-
ra dicho fosfuro calentando el fósforo hasta el rojo blanco
en presencia del calcio, en una retorta de hierro.
Medio kilogramo de dicha sustancia sumergida en el
agua, á una profundidad de 5 ó 6 metros, produce una
torpedo en los ejercicios navales y como el subido pre-
cio de estos artefactos no permite que se malgasten, con-
viene estudiar la nueva luminaria para los efectos con-
siguientes.
LAS GRANDES CHIMENEAS DE LAS FÁBRICAS
Las grandes chimeneas de fábricas son una aplica-
ción interesante de las leyes de la física y la muestra
frecuente del orgullo industrial.
En ciertas regiones cada industrial hace porque su
chimenea sea la más alta, y sin razón plausible, el
colosal tubo de ladrillos se levanta, se yergue, se corona,
todo derecho, desafiando á su alrededor, como unpara-
dógico punto de exclamación.
 768 MADRID
Desde el punto de vista estricto y utilitario, es preciso
descontar bastante en este orden de ideas.
• El empleo de chimeneas para ventilación está limi-
tado por la débil depresión que se obtiene así de un
modo costoso; con frecuencia es racional y ventajoso, re-
currir al empleo de un ventilador.
Así, una chimenea de 40 metros de altura, por la que
se escapan los gases á la temperatura de 350" centí-
grados, no d a m a s que una depresión, de 3 centímetros
de agua.
Cuando las chimeneas no realizan una utilización de
calores perdidos, deben preferirse los ventiladores que
producen, con el mismo gasto de combustible, ui^ efecto
útil m¡\s considerable, y con los cuales se obtiene mayo-
i-es depresiones, á condición, bien entendido, de que la
instalación mecánica del ventilador no acarree compli-
caciones desagradables.
Lo? ventiladores son las chimeneas de fábrica del
porvenir en gran númei'o de casos; son. siempre mucho
más económicas que las chimeneas, cuando hay preci-
sión de quemar combustible para procurar el aire nece-
sario al tiro.
En ciertas circunstancias, cuando el espacio es limi.
tado en el establecimiento industrial, puede reemplazar-
se con ventaja la chimenea para tener el tiro, con inyec-
tores de chorro de vapor ó de aire comprimido y por
trombas de agua empicadas en los países montañosos,
en cuyo principio estaban fundados los «hogares catala-
nes» desde comienzos de la metalurgia.
Aquí se presenta la ocasión de «hallar lo que no está
perdido.»
Mientras que una chimenea que se emplea para la
ventilación puede tirar 1.000 kilogramos de aire por ki-
logramo de hulla quemada, un chorro de vapor da unos
600 metros cúbicos por kilogramo de vapor, el chorro de
aire comprimido da de 400 á 500 metros cúbicos de ven-
tilación por kilogramo de hulla.
Estas instalaciones mecánicas suprimen la chimenea
tradicional, con todos sus inconvenientes.
INGENIEROS DE CAMINOS
Cuando el general Martínez Campos pidió desde la
Habana varios Ingenieros de Caminos con objeto de ac-
tivar las obras públicas en algunas comarcas cubanas,
llamamiento que hubo de motivar una viril y simpática
declaración de los Ingenieros residentes en Andalucía,
quienes por boca del Sr. Carcer se mostraron dispuestos
á apelar al sorteo en caso de que faltaran voluntarios,
hubo murmuraciones acogidas por alguna parte de la
prensa de Madrid tocante á la inexperiencia y falta de
práctica de los jóvenes Ingenieros de Caminos designa-
dos por el Ministerio de Ultramar para desempeñar mi-
sión tan delicada.
Nosotros, que teníamos sobrados motivos para cono-
cer el valimiento personal de los jóvenes que por aquel
entonces marcharon á la perla de las Antillas, augura-
mos el brillante éxito que seguramente coronaria la
gestión de los jóvenes Ingenieros de Caminos. Lo que
ayer era sólo una esperanza, hoy es una realidad. Véa-
CIENTIílCO
se lo que acerca de Bernardo Granda escribe la prensa
de Matanzas, con el titulo de Justo homenaje:
«Nada más plausible que los acuerdos tomados por
nuestro Ayuntamiento en la última sesión, con referen-
cia á D. Bernardo Granda, Ingeniero jefe de Obras pú-
blicas de esta región.
Los importantes trabajos realizados por el Sr. Gran-
da, ya dirigiendo la armadura y lanzamiento del puen-
te Romero Robledo, ya regalando al Cuerpo de Bombe-
ros un soberbio pi'oyecto para el Cuartel, ya dirigiendo
personalmente la construcción del hermoso parque de la
Iglesia, acudiendo unas veces al llamamiento de nuestro
celoso Gobernador para la construcción,de fortines ó de
planos, prestando en otras el concurso de su privilegia-
da inteligencia y de su gran ilustración, siempre en be-
neflcio de esta ciudad, le han hCcho acreedor á la consi-
dei'acion y aprecio de todos los matanceros.
He aquí los acuerdos de referencia;
Consignar un expresivo voto de gracias y obsequiar-
le con un objeto de arte.
Bautizar con el nombre de Plaza de Granda la que
resulta inmediata al puente Romero Robledo, encerrada
por las calles Riela; Río, Magdalena y el nuevo Cuartel
de Bomberos.
Poner en conocimiento del Sr. Ministro de Fomento
estos acuerdos i'elacionando todos los servicios prestados
por el Sr. Granda.
Comunicando también á la Escuela de Caminos, Ca-
nales y Puertos, á quien se enviará como recuerdo el
proyecto y planos de lanzamiento y vistas fotográficas
del puente.
Consignar un voto de gracias para todo el personal
de Obras públicas de esta región.»
IE3Cr
COSAS DE INGENIERÍA
Todavía no se ha convocado al personal temporero
de las cartillas evaluatorias; esta tardanza obedece, sin
duda, á la falta de presupuesto, pues no se comprende
cómo no se activan los trabajos en esta época, que son
para estos los mejores meses del año.
Tenemos noticia que el Reglamento para su ejecu-
ción está preparado y que el personal del Instituto fun-
cionará desde el 1." de Abril, pero nada más.
Nos decía el otro día un distinguido Ingeniero que
el art. 51 no es un hecho por la sencilla razón de que no
se quiere; el procedimiento es ñlcil, consiste sólo en no
ser admitidos por los jefes de provincias los proyectos ó
estudios que sean firmados por individuos extraños á
las cai'reras de Ingenieros.
No sabemos á qué se destinarán las 100.000 pesetas
que los presupuestos actuales dedican al Reglamento de
policía minera.
Pero, ya verán ustedes, mientras los obreros de las
minas carecen de la necesaria protección técnica, habrá
buenos premios para el fomento de la cría caballar.
**
 MADRID CIENIIFICO 769

Por fin este año los alumnos del último curso de la Fomento autorizando á los ciudadanos extranjeros para
Escuela de Minas salen á prácticas; dirigidos por tres que del propio modo que los nacionales puedan matricu-
de sus distinguidos profesores, visitarán las minas é ins- larse, cursar y ser examinados como Alumnos oficiales ó
talaciones de Arrayanes, La Tortilla, San Miguel y La libres en todos los establecimientos docentes.
Cruz. Igualmente se les faculta para verificar grados aca-
Aprovecharán, para no perder ninguna clase teóri- démicos en las Universidades ó los ejercicios á éstos
ca, la próxima Semana Santa. equivalentes en las Escuelas Especiales, en cuya virtud
Es de suponer que estos viajes se costearán con las podrán obtener toda clase de títulos, previo el p.igo del
8.000 pesetas que para ellos liay presupuestada.s; pues impuesto al efecto establecido para los Alumnos cspa-
ya se dio el caso que los alumnos ji.igas -n de su bolsillo ñohís.
particular todos los gastos, menos los del ferrocarril. Estos títulos no liabilirán á los extranj.jros para el
goce de los derechos que rt()Ucllos conceden, ni por tan-
El Negociado del personal facultativo de Obras pú- to para desempeñar cargo alguno que tenga an(;JM au-
blicas, al jubilar los Ayudantes cuyos nombres publica- toridad ó jurisdicción.
nios en el número anterior, lia tenido en cuenta, no so-
lamente que pasaban de los sesenta y cinco anos, sino Loemos en un colega, que una Co:np.T,ñia poderosa
la condición de haber cumplido más de dos años en su tiene el p'-opósito do construir un forroríarril de vía an-
último empleo. cha que partiendo de San Sebastián y pasando por To-
Este mismo procedimiento ííe/je emplearse para to- los'i, Lecuiiiborri, Paniploni, Ií>l:ílla. Lv Solann, Soria
dos los individuos de los distintos Cuerpos, y veríamos y Alcun!^z:i, ll<iguc linst:i .San Cirios do la K ipita, unien-
con mucho gusto <iuc en los Negociados cjue dependen do asi el Océano con el Mediterráneo.
de la Dirección de Agricultura, Industria y Comercio Se asegura como cosa cicrtí qu-i en v\ inonumto en
se imitaba este buen criterio. que el ferrocarril Central do Ar.tg.'m esté t •i-ininado,
Al paso que vamos, no habrá nunca personal joven pasará á ser propiedad de la Conipiñia il^ú Modiod-'a.
dentro de los escalafones. En breve publicará la Gaceta el programa para la
En el de Minas, por ejemplo, cuando entren al ser- convocatoria de varias plazas de Doliniautos de Obras
vicio del Estado los 62 Ingenieros excedentes que hoy públicas.
existen, algunos de éstos lo harán á los cuarenta años
de edad. Por fallecimiento del Ingeniero mecánico D. José
La única esperanza que les queda es que tarden en Amoros y Amil, se proveerá por concurso dicha plaza en
jubilarlos, como hoy sucede.—C. ferrrocarrilos cutre los Ingenieros industriales que la so-
<^3E^xf--itii • liciten,
Nuestro querido amigo el Inspector de Minas, señor
NOTICIAS Maureta, ha experimentado una notable mejoría en la
El Imparcial del pasado lunes ha elogiado la dispo- grave enfermedad que llegó á poner en peligro su vida.
sición relativa á las matrículas de honer en la Escuela Constantes muestras de simpatía está recibiendo el
de Caminos, disposición otorgada por Fomento merced Sr. Maureta y su distinguida familia do sus numerosos
á la gestión del director de aquella Escuela Sr. Alvarez amigos.
Núñez. Por su casa han desfilado el Presidente Sr. Escosura
y los Inspectores de la Junta Consultiva, los Profesores
Se halla vacante la plaza de Arquitecto municipal de y alumnos de la Escuela de Minas y casi todos sus com-
Córdoba, retriduída con 3.000 pesetas y 250 para gas- pañeros.
tos de material; el concurso es hasta el 28 de Marzo. Celebraremos sinceramente el poder dar muy pron-
También la Asociación de propietarios de Madrid, to noticia de su total restablecimiento. Mucho bueno es-
Silva, 14, necesita un Arquitecto, admitiendo las solici- pera del mencionado señor el Cuerpo de minas.
tudes para dicho cargo hasta el 31 de Marzo.
Hemos recibido el Anuario de la Bolsa, del Comer-
Nuestro amo y señor el nuevo presidente de la Ee. cio y de la Banca; para 1897, por D. Eduardo Diez Pi-
pública norteamericana, Mac-Kinley, tiene la manía, nedo, y el Curso elemental de mecánica aplicada á las
según dicen algunos periódicos, de tomar únicamente construcciones, por D. Aurelio Sandoval y García.
loa alimentos cuya base principal es la cebada. En el próximo número nos ocuparemos más extensa-
Dados los respetos que merece tan elevada persona. • mente de estas obras.
omitimos los comentarios naturales al considerar las
consecuencias de esta clase de alimentación. La industria minera en Francia, alcanza proporcio-
Mas sobrio es el presidente de la República francesa, nes de la mayor irapoatancia en todos conceptos.
cuya costumbre es comerse... las uflas. Se explotan .502 concesiones de minas que producen
por término medio anual 32.344.000 toneladas de las
La fábrica de armas que el Estado tiene en Oviedo substancias respectivas. Calculando lo que el conjunto
dirigida por el Cuerpo de Artillería y admirablemente representa en los mercados al por mayor, resulta un
montada por estos Ingenieros Industriales del ejército valor que pasa de 340.000.000 de francos.
produce ya al aflo 30.000 fusiles Maúser. El carbón, de diversas clases, tiene una parte eleva-
da en el total de las substancias mineras. Su producción,
La Gaceta publicó un Real decreto del Ministerio de es de más de 28.000,000 de toneladas ó sean como
 770 MADBID CIENTÍFICO
300.000.000 do francos. En 1896, ha tenido un aumento
de 22 por 100 sobre el 1895.
Se asoí^ura que existen en dichas minas 148.600 obre-
ros, comprendidas 52.00 mujeres, 8.300 jóvenes de 26 á
18 años y 9.000 menores de IG.
El Diario de Manila dice lo que sigue:
«Sabemos que desde el principio de la insurrección
se viene trabajando con gran actividad, tanto por la Ins-
pección general de Minas, como por las de Obras públi-
cas y Montes, en la saca de copias de los planos que
dichos Centros poseen levantados por el personal de los
mismos en previsión de que aquellos planos pudieran
ser de alguna utilidad al ejército en las presentes cir-
cunstancias.
Muchas de estas copias las ha puesto ya la Inspec-
ción de Montes ;l disposición del Excmo. Sr. General
Ríos, Jefe de las fuerzas que opei'an en la provincia de
Movimiento del personal
OBRAS PUBLICAS
Ingenieros
Ha sido declarado supernumerario en el Escalafón
del Cuerpo, por pasar al servicio de la Sociedad «Elec-
tra de Bilbao», D. Eugenio Grassct y Echevarría.
Se ha dispuesto que D. Alberto Corral continúe
prestando sus servicios en la provincia de Santander,
quedando sin efecto su traslado á la de Oviedo,
Ingenieros Aspirantes
Han sido declarados supernumerarios:
D. Emilio Azaróla.
Y D. José María Hernández Delás.
D. Antonio Eivas Matilla, ha tomado posesión de su
destino en la División hidrológica del Guadalquivir.
Ayudante s
Ha sido dado de alta en el sei'vicio del Estado y des-
tinado á la provincia de Alicante, D. José María Martí-
nez Grau.
D. Manuel Luna y Mesa y D. Adolfo de la Torre,
han solicitado les expidan sus títulos profesionales.
Han cesado de prestar sus sei-^'icios en la Comisión
de los Puertos dé Cádiz y San toña, D. José María Ortíz
y Sánchez y en la provincia de Ciudad Real D. Joaquín
Luis del Pozo y Bresso.
Sobrestantes
D. Lorenzo González y Ramírez ha sido trasladado
do la provincia de Palencia á la de Madrid.
la Pampanga, Bulacán, Tarlac y Nueva Ecija, por con-
ducto del Ingeniero-jefe del Distrito del Centro, D. Cé-
sar Guillena, quien, aiixiliado por un Ayudante del
ramo, se encuentra á las órdenes del referido general.
También sabemos que todo el personal de Ingenieros
y Ayudantes de las mencionadas Inspecciones se en-
cuentran animados del mejor deseo para auxiliar á las
fuerzas del ejército en operaciones, ya sirviéndoles de
guía como conocedores del terreno, ó bien de la manera
que se les conceptúe más útiles, renunciando á indemni-
zación alguna por esos servicios especiales.
Digna de aplauso es tan patriótica y desinteresada
conducta, por la que se tiende á cooperar á los fines
de la campaña actual por cuantos medios se encuentran
á su alcance y con el mayor desinterés.
Y aún más que aplauso, bien de la patria merecen
los señores Abella, Olano y Gíllelmi con el personal que
secunda tan admirablemente las intenciones que les
guían.»
Han cesado de prestar sus servicios en la provincia
de Burgos, D. Julio Montes Prior.
Y en la Huelva, D. José Nieto y Aguilar.
IMOIVTES '
Ingeniex'os
D. José María García Viana, Profesor déla Escuela
del ramo, ha sido nombrado para la Sección tercera de
la Junta Consultiva.
Ay-udantes
D. José BatUe, ha sido destinado á la provincia de
Teruel.
3MI1VAS
I n g e n i e r o s
D. Antonio Vargas Salvador, ha sido destinado al
Distrito minero de Palencia.
Ha sido nombrado Jefe del Negociado de Minas del
Ministerio de Fomento, D. Joaquín Aguirre.
SEB.VIOIO AOIVOISrO]VHOO
Ha sido admitida la renuncia presentada por el Co-
misario D. Joaquín Reig y Bigne.
Han sido nombrados Comisarios de Agricultura, In-
dustria y Comercio:
D. Emilio Rivera Gómez, para la provincia de Va-
lencia.
D. Pedro León Martín, para la de Valladolíd.
Y D. Vicente Jaén y Jiménez, para la de Ciudad
Real.
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