You are on page 1of 8

FORMACIÓN DOCENTE

PERMANENTE Y EN SERVICIO
1ª Jornada
2019

Nivel Secundario
Formación Docente Permanente y en Servicio – 1ª Jornada – Nivel Secundario - 2019

PRESENTACIÓN

A la comunidad educativa Chaqueña:


El Programa de Formación Docente, Permanente y en Servicio, dependiente de la Dirección General de
Capacitación, Perfeccionamiento y Actualización Docente convoca a las y los docentes de todos los
Niveles y Modalidades del Sistema Educativo de la Provincia del Chaco a compartir las Jornadas de
Capacitación 2019, ámbito privilegiado de circulación de saberes, prácticas, enfoques a partir de la
palabra compartida.

Nuestras prácticas de enseñanza se desarrollan en aulas y en salas heterogéneas y nos invitan a pensar
las diversas formas de conocer logros de aprendizajes de nuestras y nuestros estudiantes.
Afortunadamente, hace décadas, las clases no son esos lugares del silencio acobardado o apático, sino
que son ámbitos en los que la palabra oral circula de diferentes maneras.

Es por ello que esperamos que los estudiantes hablen para preguntar, opinar, indagar u objetar, entre
otros propósitos. Los turnos de habla, en tiempos pasados, estaban rígidamente regulados por el
docente cosa que hoy resultan más flexibles, el trabajo grupal requiere conversaciones paralelas; y si
bien el ruido ambiente o las intervenciones extemporáneas no son deseables, se asumen con
naturalidad o comprensión por parte de los profesores.

Nos proponemos generar espacios que sirvan de encuentro entre docentes y que se constituya en
dispositivos de reflexión de nuestras prácticas de enseñanza. Las jornadas de este año, focalizará el
trabajo con la oralidad en las aulas y también, fuera de ellas. En esta oportunidad, se propone una
mirada integral sobre la temática, que luego se irá profundizando en los posteriores encuentros.

OBJETIVOS
• Compartir instrumentos teóricos- metodológicos para la mejora de los procesos de enseñanza
y aprendizaje en el marco de la formación docente. Específicamente, desde las didácticas.
• Analizar los diferentes saberes que se desarrollan en las situaciones de oralidad en las aulas;
con ciertas condiciones didácticas que favorecen el desarrollo de la oralidad de los estudiantes;
• Establecer acuerdos didácticos institucionales de las situaciones de oralidad en las aulas, en
todas las áreas/disciplinas escolares.

CONTENIDOS Y CAPACIDADES
Contenidos

• Pensar y repensar las prácticas docentes


• La oralidad y las formas de participación social
• Los diferentes tipos de saberes implicados en la oralidad
• Las condiciones didácticas que favorecen el desarrollo de la oralidad

1
Formación Docente Permanente y en Servicio – 1ª Jornada – Nivel Secundario - 2019

Capacidades

• Cognitivas
o Resolución de problemas
o Pensamiento crítico

• Intrapersonales
• Aprender a aprender

• Interpersonales
o Trabajar con otros.
o Comunicación

AGENDA DE TRABAJO
PRIMER MOMENTO DE 08:00 A 10:30 HS.
Para ser trabajado por el Equipo de Conducción de la institución y Docentes.

ACTIVIDAD N° 1
Presentación del material de la Jornada (objetivos, agenda y documentos), a cargo del equipo de
conducción.

ACTIVIDAD N° 2
En grupos de profesores los invitamos a leer la propuesta bibliográfica de esta Jornada de Formación
e ir relacionando con sus prácticas de enseñanza.

En caso de una escuela FARO les proponemos una relectura de los fundamentos de las Proyectos de
Aprendizajes prioritarios. Nos interesa, fundamentalmente, que se socialice el PEA.

SEGUNDO MOMENTO DE 10:30 A 13:00 HS.


Para ser trabajado por docentes de la misma área

ACTIVIDAD N° 3
Lectura grupal del documento delimitado por área de estudio, elaboración de las actividades
correspondientes y registro de las producciones solicitadas.

TERCER MOMENTO DE 13:00 A 14:00 HS.


Para ser trabajado por el Equipo de Conducción de la institución y Docentes de la Institución.

2
Formación Docente Permanente y en Servicio – 1ª Jornada – Nivel Secundario - 2019

ACTIVIDAD N° 4
Socializar y reflexionar grupalmente de los acuerdos concretados y abordados en el primer y segundo
momento. Acuerdos didácticos en relación con el desarrollo de la capacidad oralidad.

PRIMER MOMENTO

UNA BUENA ESCUELA


A lo largo de los años, el concepto de qué es una ‘buena escuela’ se fue transformado. Se suele caer
en lugares comunes para pensar en lo que es una buena escuela, recurriendo a aquella escuela que
tiene buena disciplina, es exigente, tiene muchos estudiantes y posee un gran edificio, entre otras.
Seguramente, esas ideas están presentes e incluso muchas veces naturalizadas, pero nos alejan de lo
que lo verdaderamente es una buena escuela, aquella que enseña y comparte saberes socialmente
significativos. Es por ello que la comunidad educativa debe ser el espacio propicio para que los
estudiantes aprendan cada día más y mejor.

Stoll y Fink (2004) sostiene que una buena escuela es aquella que:

Garantiza que cada alumno llegue a su máximo nivel posible.


Sigue mejorando año a año.
Promueve el avance de todos los alumnos, más allá del conocimiento que poseen y
de las características del contexto.
Aumenta todos los aspectos relativos al conocimiento y al desarrollo del alumno
(integral, más allá de las áreas académicas).

En el marco, de las jornadas institucionales desde un análisis didáctico, nos permite comprender que
la didáctica es una ciencia social compleja, una disciplina que nos permite estudiar las prácticas de la
enseñanza, las describe, explica y fundamenta para una mejor resolución de aquellos problemas que
éstas prácticas plantean a los profesores y estudiantes. Las prácticas de la enseñanza son prácticas
sociales atravesadas por múltiples determinantes. En tanto práctica social, puede y debe reinventarse,
de forma colectiva a partir de demandas e inquietudes de los docentes, buscando “una didáctica que
echa mano de la reflexión pedagógica” Brailovsky, D. (2017:19).

ACTIVIDAD 1
Reunidos en grupos, les proponemos pensar y debatir entorno a los siguientes interrogantes.

¿Siempre que yo enseño mis estudiantes aprenden?


¿Si yo enseño y ellos no aprenden, esto significa que lo que yo hice no fue enseñar?
¿A mis estudiantes, puedo enseñarles lo que yo quiera y del modo que me parezca?
¿Quién decide qué enseñar en los jardines de infantes?

3
Formación Docente Permanente y en Servicio – 1ª Jornada – Nivel Secundario - 2019

El docente ¿qué tan obediente debe ser respecto a las decisiones de qué enseñar?
Creen que todos los niños y las niñas ¿deben aprender más o menos lo mismo cuando
concurren a la misma sala del jardín, o al mismo grado de la escuela primaria?

La palabra enseñanza es la que mejor caracteriza a los docentes en su oficio. Sin enseñanza, no tiene
sentido hablar de educación. Lo que distingue de un educador de quien no lo es, es la enseñanza.

Por su parte, Edelstein (2002), diferencia el concepto prácticas de la enseñanza del de prácticas
pedagógicas. Nos interesa puntualizar en esta presentación, el de prácticas de la enseñanza, en tanto
es un proceso preocupado por la transmisión de contenidos culturales legitimados en el currículo. La
autora entiende las prácticas de la enseñanza como aquella actividad intencional que excede lo
individual ya que sólo puede entenderse en el marco del contexto social e institucional del que forma
parte. Desde esta perspectiva, entonces, las prácticas de enseñanza suponen imbricaciones de distinto
orden: político, social, cultural, ideológico, y también psicológico.

Una definición bien conocida, destaca a la enseñanza como “un intento de alguien de transmitir cierto
contenido a otra persona” (Basabe y Cols, 2007). En dicha definición encontramos a dos sujetos, por
un lado, uno que enseña, y por otro al destinatario; y algo que se trasmite, se pasa o se comparte.
Cabe reflexionar acerca de ¿cómo saber si la transmisión se produjo?, ¿Quién enseña bien?, ¿Cuál es
la clave para enseñar?, son preguntas que inquietan a profesores y pedagogos.

La enseñanza debe adecuarse al contexto y a las características particulares de los destinatarios. Es el


contexto el que determina la enseñanza. No es lo mismo enseñar en una escuela situada en un barrio
de clase alta, que una escuela de los suburbios. No es lo mismo enseñar a chicos con ‘estas familias’
que con ‘otras’. En el campo educativo, cuando se utiliza la palabra contexto puede referirse a varias
cosas, espacio geográfico, medio socioeconómico, particularidades de la época, a la diversidad étnica,
sexual o cultural. El termino frecuentemente, es entendido como un obstáculo.

Muchas veces las escuelas y quienes formamos parte de ellas, buscamos recetas. Ante las dudas
intentamos hallar respuestas. Cuando no se encuentra el rumbo, nos gusta que alguien no oriente o
guie y nos marque el camino por dónde ir. Aunque del otro lado, los especialistas o académicos
advierten que ellos ‘no tienen recetas’. Y la pregunta que surge es ¿cómo salir de esa incertidumbre?
La primera receta apunta a pararse a reflexionar, solos y en equipo, sobre qué vamos a hacer y por
qué, y también sobre aquello que hicimos y cómo salió. Esta primera receta, sugiere darnos un tiempo
para pensar sobre el hacer, para empezar a actuar, aun cuando sea necesario flexibilizar
permanentemente el camino para llegar a la solución. Planificar nos ayudará a reducir la improvisación,
partiendo desde las necesidades del contexto y no, desde idealidades.

Habitar la enseñanza es algo más que dominar un tema o apoyar aprendizajes. No se comparte solo un
saber, sino que lo que comparte es el propio deseo de saber. Es necesario abrir los lugares a la
posibilidad de otras experiencias, ir explorando diferentes posibilidades, diferentes modos se ser y de
hacer en el encuentro pedagógico. En el encuentro entre profesores, estudiantes y conocimientos es
necesario aventurarnos en experiencias zigzagueantes que nos permitan pensar y repensar nuestras
prácticas docentes.

4
Formación Docente Permanente y en Servicio – 1ª Jornada – Nivel Secundario - 2019

Trabajar con y por los estudiantes, es asumir la responsabilidad ética y política por la enseñanza,
reflexionando a partir de las propias inquietudes y abriendo el juego de las preguntas. Pensar y hacer
de la escuela un lugar de encuentro con lo desconocido, recuperando el deseo de aprender. Para que
ello suceda, es necesario que suceda una interrupción, pararse a pesar, pararse a mirar, pararse a
escuchar y demorarse en los detalles.

Y AHORA ¿CÓMO SEGUIR?... INCLUIR Y RECONOCER


La escuela que conocíamos, la que incluía a partir de la homogeneización ha perdido legitimidad y
eficacia, dejó de ser legítima porque actualmente la sociedad no tolera la discriminación. La
homogeneización y el disciplinamiento ya no son posibles y mucho menos deseables, aunque suele
escucharse en las salas de profesores la invocación por un mundo que ya no es.
El estudiante, y las nuevas subjetividades no se dejan moldear por la escuela, ya que hay muchas otras
agencias discursivas que operan sobre ellas. Quizás muchos docentes vean esto como una derrota,
pero no hay que olvidar que en buena medida los docentes hemos luchado por desmantelar la escuela
burocrática y civilizadora, basada en la enseñanza que Paulo Freire denominó “bancaria”.

“Civilizar a los bárbaros” fue una consigna de enorme potencia política porque funcionó como soporte
de un sistema exitoso, por suerte pocos se animan a reivindicarla por su evidente sesgo discriminatorio.
La diversidad de tradiciones culturales y estilos de vida fueron uno de los enemigos durante la
configuración de nuestro sistema educativo. Nuevas voces demandan un cambio en el discurso y en
las prácticas escolares frente a la diversidad, aunque frecuentemente generan nuevos enunciados de
la exclusión. En las primeras visiones, los niños eran salvajes o diferentes que debían ser civilizados,
adaptados y moldeados, en las últimas cada niño es como es y sólo podemos mirarlos sin intervenir en
su historia. Así pasamos de la omnipotencia de querer dejar una marca en el otro, a la prepotencia de
impedir que cualquier otro deje una marca en nosotros; de la imposición de un arbitrario cultural, a
una tolerancia donde la diversidad es inexpugnable.

La función de la escuela es dejar la marca del mundo en los estudiantes para que ellos puedan, dejar
una marca en el mundo. Sin perder de vista esta idea, el nuevo lema en educación debe ser incluir a
todos (Siede; 2007), lo cual implica abrirles las puertas de la experiencia cultural que han llevado a cabo
las generaciones anteriores, con sus conquistas histórica, con sus preguntas abiertas y sus tensiones.
Educar debe ser habilitar lo público a las nuevas generaciones, para que ellos participen en la
construcción de lo común. Chicos y chicas tienen derecho a esperar que una puerta al mundo se abra
en la escuela. La escuela puede provocar, invitar sin someter, dar herramientas para labrar la propia
subjetividad u para construir proyectos colectivos. Es por ello que los chicos y chicas tienen derecho a
que la escuela los ponga en contacto con lo que no conocen e incluso con lo que no les interesa porque
no han tenido oportunidad de dejarse interesar.

La escuela no puede quedar indemne en este proceso, pues cada estudiante porta una biografía y a la
vez una singularidad que busca ser reconocida en el espacio público del aula. El desafío de la pedagogía
actual es habilitar la palabra de la diferencia, para que la escuela y el mundo se enriquezcan con el
nuevo aporte, para que cada uno sea interpelado por la mirada de los otros. Reconocer a cada uno
implica abandonar la imagen del desierto, de la tierra vacía en la mente de los otros, del estudiante
que es definido como alguien que no sabe, no quiere, no puede, no dicen, no hace, no acepta, no busca

5
Formación Docente Permanente y en Servicio – 1ª Jornada – Nivel Secundario - 2019

o no encuentra. Sólo empezamos a supera la imagen del desierto cuando dialogamos con nuestros
alumnos para saber qué saben, qué quieren, qué pueden, qué dicen, qué hacen, qué aceptan, qué
buscan y qué encuentran. Reconocerlos como sujetos de derecho es entender que cada cual tiene una
historia y unas circunstancias.

ACTIVIDAD 2
El aula un escenario para trabajar en equipo
Estanislao Antelo (2014) nos propone pensar nuestras prácticas docentes a partir de los siguientes
interrogantes:

¿A qué llamamos enseñar? / ¿Por qué hay que enseñar? / ¿Para qué enseñar? / ¿Qué hay que enseñar?
/ ¿Cómo hay que enseñar?

En la discusión en equipo, la perspectiva de una persona moviliza la de otra, una idea sugiere otra y
reconciliando ideas diferentes, se produce una liberación de la inteligencia, para esta actividad les
proponemos analizar nuestras prácticas educativa a partir de los siguientes interrogantes.

Nosotros como docentes ¿estimulamos la participación de todos las y los estudiantes?, ¿retomamos
lo que vimos en la clase anterior?, ¿recuperamos las intervenciones o acciones de nuestros
estudiantes?, ¿nos enfocamos en lo que entienden nuestros alumnos o solo a partir de señalar las
incorreciones?, ¿proponemos estrategias de enseñanza y aprendizaje variadas?, nuestras propuestas
áulicas ¿incentivan el uso de la biblioteca, el laboratorio o dispositivos tecnológicos?

En cuanto al tiempo, ¿existen horarios prestablecidos para las actividades? ¿se respetan dichos
horarios?, ¿las actividades que desarrollamos en el aula se encadenan unas con otras o se presentan
de forma aisladas?

REFERENCIA BIBLIOGRÁFICA

• Alliaud, A. y Antelo, E. (2014): “Los gajes del oficio. Enseñanza, pedagogía y formación”.
Buenos Aires: Aique.

• Basabe, L. y Cols E. (2007): “La enseñanza”, en Alicia Camilloni: El saber didáctico. Buenos
Aires: Paidós

• Brailovsky, D. (2017) Didáctica del Nivel Inicial en Clave Pedagógica. Bs. As.

• Edelstein, G. (2002). Problematizar las prácticas de la enseñanza en Didácticas y Prácticas


en Educación Superior. “Alternativas”. Serie: Espacio Pedagógico. Educación Superior.
Antecedentes y propuestas actuales. Publicación trimestral del LAE. Año VII- Nº 26 – San
Luis, Argentina.

6
Formación Docente Permanente y en Servicio – 1ª Jornada – Nivel Secundario - 2019

• Davini, M. C. (2016): “La formación en la práctica docente”. Buenos Aires: Paidós.

• Gvirtz, S. (2018): “Decálogo para la mejora escolar”. Buenos Aires: Ediciones Granica.

• Rattero, C. (2013): “La escuela inquieta. Nuevas versiones de la enseñanza y del


aprendizaje”. Buenos Aires: Noveduc.

• Siede, I. (2007): “La educación política. Ensayos sobre ética y ciudadanía en la escuela”.
Buenos Aires: Paidós.

• Stoll, L. y Fink, D. (2004): “Para cambiar nuestra escuela”. Barcelona: Octaedro.

video sugerido: Silvina Gvirtz propone cómo hacer para mejorar la escuela (2015).
Disponible en: https://www.youtube.com/watch?v=oOxEGJsW20Y

Textos elaborados por el Instituto Nacional de Formación Docente y la Dirección de Perfeccionamiento,


Capacitación y Actualización Docente.

You might also like