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La Arquitectura como lenguaje y medio comunicativo

¿Cómo nos comunicamos mejor?


¿Cómo usamos la información?

Orlando Villamizar Quevedo


Noviembre de 2018
UNIVERSIDAD LA GRAN COLOMBIA
BOGOTA
COMPETENCIAS COMUNICATIVAS 1
La Arquitectura como lenguaje y medio comunicativo

La arquitectura está muy asociada con la comunicación pues en si es una forma de

comunicar ideas que dan solución a diferentes problemáticas de la sociedad, en este aspecto

podemos ver que la arquitectura tiene su propio lenguaje y que como cualquier otro idioma,

este ha ido evolucionando con el paso del tiempo en busca de una mejora de sus elementos

esenciales para alcanzar una comunicación más efectiva sin dejar atrás la tecnología y todos

los recursos necesarios que contribuyan para lograr este fin. Podremos entonces observar

la importancia de la comunicación en esta área, con el fin de llegar analizar lo más

significativo que se ha tenido en cuenta para su desarrollo, y que nos pueda ser útil para

contribuir en la búsqueda y el desarrollo de la comunicación entre nosotros como seres

humanos, pues bien aunque tanto la arquitectura como un lenguaje tiene sus propios

elementos finitos, su fin es lograr la comunicación (Lorena Márquez, 2015),se pretende

conocer muchísimo más sobre las relaciones y herramientas que puedan ser útiles y tal vez

pueda ayudarnos a entender mucho mejor la comunicación entre nosotros y nuestro

entorno, o descubrir que por el contrario no hay relación alguna que pueda contribuir con

este fin, para despejar más estas ideas se indagaron diferentes artículos en donde se expone

el lenguaje de la arquitectura dese diferentes puntos de vista y en diferentes épocas por las

que ha pasado el hombre.

Es muy interesante como en la arquitectura se utilizan diferentes elementos para la

comunicación desde los simbólicos hasta los gráficos y estos últimos en especial han ido

evolucionando con el fin de explorar mucho más a fondo los elementos arquitectónicos y

lo que nos transmiten como cultura y sociedad, y lo que puede lograr si se utiliza como un
instrumento de invención social y política (Navarro, 2015) pues el desarrollo de estos

elementos ha llevado a la arquitectura a ser más acertada con su fin y por medio de este

expresar mucho más contundentemente las ideas sin dejar tanto vacío para la especulación

que se puede dar al momento de ser meramente textual, ya que de no hacerse acertadamente

genera confusión, además se debe tener en cuenta que la arquitectura como muchas áreas,

cuenta con su propio lenguaje que se ha ido desarrollando a través de los siglos y el cual

no es completamente universal, por lo cual resultaría mucho más difícil explicarlo solo oral

o textualmente.

El lenguaje del arquitecto como herramienta de comunicación y signo de pertenencia para

el hombre tiene notables dificultades cuando lo trasladamos a la universidad, u otros

diferentes contextos, donde el arquitecto tiene que transmitir sus ideas y no hay un lenguaje

compartido. (Prieto, 2013), esto es en gran parte considerado no positivo para la

comunicación pues por lo general en las sociedades nunca se enseña dicho lenguaje sino

hasta estudios universitarios, lo adecuado según docentes de la Universidad europea de

Madrid, es que se debería enseñar dicho lenguaje para ser adquirido mediante la escritura

Académica, lo que contribuiría a disminuir la baja comprensión que se da en la enseñanza

de la arquitectura, por el desconocimiento del lenguaje técnico propio de la arquitectura y

que ocurre por el nulo desarrollo de competencias comunicativas en la etapa escolar y por

las pocas estrategias educativas para ello.

Dicho lenguaje arquitectónico no ha de perderse pues es de gran importancia para nuestra

sociedad, por tanto es el que nos identifica con lo que nos rodea y al haber ausencia de este
se puede notar como afecta e influye positiva o negativamente en una sociedad, la que a

fin de cuentas termina siendo el receptor final del lenguaje arquitectónico, es como el caso

de la etapa modernista que se vivió y se vive en la arquitectura en el cual según el arquitecto

Charles Jencks la calidad del diseño y del lenguaje en esta etapa de la arquitectura cae,

porque nadie controla el trabajo entero desde principio hasta el final, y porque el edificio

debe construirse rápida y eficazmente, Jencks dice que ese tipo de edificios son

desagradables, brutales y demasiado grandes, porque se construyen para ganar dinero por

urbanizadores ausentes, para propietarios ausentes y para habitantes ausentes (JENCKS,

1981), dejando de lado el verdadero valor y lenguaje que debe tener la obra arquitectónica,

por ende busca dar por terminada la etapa modernista y abrir paso a la etapa posmodernista

donde se rescaten los valores históricos de cada obra en su contexto y utilizando la

tecnología para proyectar con un lenguaje más propio de cada región o lugar donde se

desarrollen los proyectos en busca de una armonía con el espacio y el ser humano.

También podemos observar que dicho lenguaje sin importar la época o corriente de

influencia, no ha de dejarse perder, ya que en él hay información de gran utilidad para el

eficaz futuro y el desarrollo de dicho lenguaje, pues un claro ejemplo es el de la arquitectura

clásica en donde los arquitectos realizaban magníficos trabajos de investigación,

documentando con precisión métrica el denominado estado actual de los monumentos y

obras arquitectónicas objeto de estudio, sus detalles, sus soluciones constructivas, para

luego elaborar, las reconstrucciones teóricas a partir de los conocimientos exhaustivos que

tenían de la antigüedad, planteando propuestas acordes con el conocimiento que la

arqueología había aportado hasta el momento. De todo el amplio abanico de arquitecturas


que ha ido generando la sociedad durante los siglos de su existencia, en particular la

arquitectura denominada clásica, ha permanecido a lo largo de varios períodos de la historia

de la cultura occidental, y ha configurado un lenguaje rico y preciso, perfectamente

reglado, que como cualquier idioma ha evolucionado para dar respuesta a las necesidades

de la sociedad (Santamaría, 2004).

Podemos observar que en todos los casos la mejor manera para mejorar la comunicación

en general es el continuo desarrollo de la misma, siempre generando nuevas formas

innovadoras en las que la comunicación pueda ser mucho más efectiva, clara y concisa, y

que se pueda generar con ética y llena de valores, para no distorsionar la comunicación y

siempre enfocarla en el beneficio del ser humano. Actualmente en nuestra sociedad se

debería contemplar un amplio estudio para la mejora de la comunicación y la creación de

un lenguaje propio que nos ayude en la solución de infinidades de conflictos que se dan

por la ruptura que hay en la comunicación al cegarnos en una postura propia y motivada

en gran parte por entes emocionales que no nos dejan lograr esa efectiva comunicación y

el razonamiento adecuado ante pensamientos que pueden ser opuestos a los nuestros y a

los de nuestras creencias , negándonos en la mayoría de casos el aprendizaje de esas otras

formas diversas de pensamiento. Como en la arquitectura debería haber en nuestras vidas

un desarrollo adecuado de la comunicación y el interés por la mejora continua de la misma,

para que se logre con el paso del tiempo y así llegar a ser más acertados en lo que queremos

comunicar, facilitando el adecuado desarrollo entre nosotros como seres humanos y tal vez

deje de haber esa barrera que cada vez afecta más nuestra comunicación, en gran parte
debe haber un granito de arena para hacer de nuestra comunicación algo más efectivo en

todos los ámbitos de nuestras vidas buscar esa mejora continua, además de darle un uso

adecuado a la información, ya que por lo general no lo hacemos, pues en nuestro país el

hábito de la lectura es cada vez menos, según la encuesta nacional de lectura hecha por el

DANE menos de la mitad de la población colombiana tienen el hábito de la lectura (DANE,

2017), y aunque dispongamos de toneladas de información asequible no la analizamos

como es , pues nuestra lectura no es una lectura crítica si no superflua, que carece de ese

análisis, como en el caso de los medios de comunicación que nos informan aun sin saber

la veracidad de dicha información y por lo general la persona del común no se preocupa

por verificar si lo que se le está diciendo es realidad. Es un poco desalentador esta situación

pero se puede ir mejorando, si todos creamos esta cultura desde nuestros hogares y con

todos los niños, jóvenes y adultos que nos rodean, incentivando la lectura crítica y haciendo

caer en conciencia de los beneficios de la tecnología y el fácil acceso a la información que

se tiene hoy en día y que por ende se le debe dar su adecuado uso enfocado al beneficio de

nuestra sociedad en general. La arquitectura y el lenguaje tienen una estrecha relación y se

puede extraer muchas cosas que nos pueden ayudar a entender la comunicación entre

nosotros como seres humanos y una clara evidencia de esto es la continua búsqueda por

una clara comunicación con los demás y con el entorno, que la ha llenado de elementos de

apoyo para hacer de esta mucho más asertiva y que no deja de estar en permanente

desarrollo.
Lista de referencias

Bibliografía

DANE. (2017). Boletín Técnico Encuesta Nacional de Lectura –ENLEC.

JENCKS, C. (1981). EL LENGUAJE DE LA ARQUITECTURA POSMODERNA.

Lorena Márquez, V. L. (2015). ¿Qué relación hay entre la arquitectura y el lenguaje?


Universidad de los Andes- Facultad de Arquitectura y Diseño, 5/10.

Navarro, E. (2015). La Arquitectura Como Elemento Comunicador. 3-15.

Prieto, E. C.-J. (2013). Lenguaje del arquitecto: diagnóstico y propuestas académicas.


REDU-Revista de Docencia Universitaria.

Santamaría, M. Á. (2004). Arquitectura clásica y lenguaje.

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