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Factores que predisponen a la depresión en pacientes geriátricos

Emerson Barreto Flores, Jorge Luis Blas Colin, Jorge Moises Ortiz Cardona, Janet Lorena Islas
Rendón, Francisco Meré Gómez.

Psiquiatría, Facultad de Medicina, Universidad Autónoma de Guadalajara.

Resumen:

La depresión es uno de los trastornos psiquiátricos más frecuentes en todo el mundo, se calcula
que afecta aproximadamente a 350 millones de personas, de entre los cuales una gran parte son
adultos mayores, produciendo un alto grado de mortalidad y reduciendo significativamente la
calidad de vida del paciente. Es de gran importancia reconocer las factores predisponentes de este
trastorno para poder realizar un diagnostico correcto y así llegar a un tratamiento adecuando, ya
que este suele ser complicado debido a las enfermedad es médicas presentadas por los pacientes,
la extrema sensibilidad a los fármacos y la gran cantidad de fármacos que se consumen en este
etapa de la vida.

Introducción:

La depresión geriátrica representa tan solo el 1% de la población global, sin


embargo si nos vamos a grupo determinado como por ejemplo residencias
geriátricas, la prevalencia se incrementa considerablemente hasta un 20-25%.
El término tercera edad o vejez, hace referencia a la etapa del ciclo vital que
comienza a las 65 años. Se clasifica a los adultos mayores en dos grupos, los
ancianos jóvenes, que van desde los 65 hasta los 74 años y los ancianos
mayores, a partir de los 75 años. Algunos autores usan el término anciano para
referirse a los mayores de 85 años.
El número de personas mayores de 65 años ha ido en aumento durante los
últimos años, este incremento excede por mucho el crecimiento de la población
general y está previsto que continúe aumentando.
El proceso de envejecimiento se caracteriza por un declive gradual de la
funcionalidad de todos los sistemas corporales, la edad por sí misma no es un
factor de riesgo para la aparición de depresión, embargo la viudez y sufrir alguna
enfermedad crónica suelen ser factores que se asocian a una vulnerabilidad a los
trastornos depresivos.
Este trastorno depresivo en ancianos es un importante problema de salud pública
ya que pude enmascarar el comienzo de más enfermedades, de ahí la importancia
de detectarla a tiempo para poder dar un adecuado tratamiento.
Uno de los factores más importantes que predisponen a esta enfermedad es el
abandono de los familiares, y es quizás también el factor que más tenemos en
nuestra contra, ya que muchas veces con el abandono vienen sentimientos de
inutilidad, soledad, desamparo y desesperanza, que sin tratamiento podrían
llevarnos a un cuadro depresivo mayor y posteriormente a un riesgo muy alto de
suicidio.
Desgraciadamente en nuestro mundo actual, la población geriátrica se encuentra
muy abandonada, lo que incrementa este tipo de trastornos, el estado normal de la
tercera edad es el de la salud física y mental, no hay por qué pensar que es
sinónimo de enfermedad y debilitamiento. Por eso creemos que es muy importante
identificar los factores que influyen a que este trastorno se desarrolle para poder
evitarlo en medida de lo posible y dar un adecuad trámite todo a esta población de
la tercera edad que es la que más debemos de cuidar más, ya que también la
presencia de enfermedades crónico degenarativas aumenta muchísimo la
posibilidad de presentar en el futuro un cuadro de depresión.
Los antidepresivos y la psicoterapia han mostrado ser de alta efectividad en
ancianos con depresión, sin embargo es muy común que esta población esté sin
un correcto diagnóstico o sin tratamiento, se ha visto que tan solo el 12-25% de los
ancianos con cuadros depresivos han sido diagnosticados de manera adecuada y
están bajo el tratamiento correcto de acuerdo a su edad y al trastorno.
Lamentablemente es un trastorno que se diagnostica muy poco y demasiado
tarde, la razón es que muchos de estos pacientes y sus familiares creen que es un
cuadro característico de la edad y muy rara vez buscan ayuda médica para este
padecimiento y los que si buscan ayuda del médico, generalmente acuden a este
por causas o síntomas físicos, síntomas de deterioro cognitivo, alteraciones
conductuales inespesíficas, aumento de la irritabilidad, intolerancia, aislamiento
social, entre otro, que podrían estar enmascarando un verdadero trastorno de
depresión.

Marco teórico:

El envejeciendo es uno de los problemas de salud más importantes en la


actualidad, dado que el índice poblacional mundial indica que cada año la
población de adultos mayores ha ido creciendo, y esto implica una mayor
demanda, ya que este grupo representa los más altos índices de morbilidad y
discapacidad. Los problemas de depresión son los más frecuentes entre esta
población pacientes y se cree que para el 2020, la depresión va a ser el mayor
problema de salud en el mundo.
Existen ciertos factores de riesgo para padecer este trastorno, es de gran
importancia identificarlos a tiempo para que se pueda evitar un cuadro de
depresión mayor o el cuadro ya está presente, indicar una buena médica
terapéutica.
Tengamos en cuenta que la mayoría de las personas de edad avanzada son
personas que por lo general viven solas, la mayoría de las veces con su pareja,
esto es un factor muy importante, ya que la soledad o el padecimiento de
enfermedades crónicas, poco a poco los va conllevando a un cuadro depresivo,
por otro lado, están las personas de la tercera edad que viven con familiares, en
este escenario es importante destacar que muchos de los familiares no tiene el
tiempo adecuado o el interés para atenderlos, de ahí que muchos de estos
pacientes presentes ideas suicidas, se vean a sí mismos como estorbos, inútiles o
simplemente solos.
Es complicado una vez ya identificados los factores de riesgo, poder hacer frente a
ellos, ya que muchas de estas circunstancias están en manos de la familia, es
importante hacer conciencia que el término vejez no es sinónimo de enfermedad.
Dentro de los factores de riesgo se destacan principalmente: el duelo, este suele
agudizarse si la pérdida es de un familiar muy cercano o de la pareja, trastornos
del sueño, discapacidad, al menos un episodio depresivo previo, género femenino
como tal es un factor importante ya que la depresión es más frecuente en mujeres,
cualquier tipo de demencia y encontramos también las enfermedades crónico
degenerativas, que generan un conjunto de síntomas físicos y mentales que poco
a poco llevarán al paciente a un cuadro depresivo, ya que muchas de ellas les
causan incapacidades y un deterioro significativo de su calidad de vida,
sumándole quizás algunos otros factores agravantes que pueda haber en su
ambiente.
El cuadro clínico típico de estos trastornos depresivos incluye disminución de la
energía y de la concentración, alteraciones del sueño, anorexia, perdida de peso,
animo triste, ansiedad y más quejas somáticas de las que se presentarían en un
cuadro depresivo a una menor edad.
Los adultos de edad avanzada son sumamente propensos a episodios de
depresión mayor con tintes melancólicos, caracterizados por la depresión,
hipocondría, baja autoestima, sensación de inutilidad y tendencias
autoinculpatorias en ocasiones con ideas suicidas y paranoides. Si es que llegara
a existir una alteración cognitiva en estos pacientes, a este se le conoce como
Síndrome demencias de la depresión, la demencia también es un factor de riesgo
muy importante, ya que alrededor del 15% de los pacientes geriátricos deprimidos
presenta una seudodemencia y alrededor del 25 al 50% de los pacientes
diagnosticados ya con demencia, están deprimidos.
El paciente anciano con depresión presenta dos a tres veces más probabilidades
de morir, acude mayor número de veces a los servicios de salud y en aquellos
ancianos que se encuentran hospitalizados con frecuencia se complican y
prolongan su estancia hospitalaria. Los efectos del envejecimiento sobre la salud
mental también pueden relacionarse con factores socio-ambientales, incluido el
entorno asistencial.
Es importante también hablar de otro tipo de factores de riesgo, como lo son lo
trastornos médicos, es decir cualquier otra patología ya diagnosticada que altere la
calidad de vida del paciente y lo incapacite.
Entre los trastornos médicos relacionados con la depresión en el adulto mayor
podemos encontrar los siguientes:
 Las enfermedades neoplásicas
 Enfermedades cardiovasculares
 Trastornos endocrinos
 Trastornos neurológicos
 Enfermedades metabólicas y/o de la nutrición
 Infecciones como la hepatitis, infección por VIH, herpes zoster, etc.
 Efectos adversos de algunos fármacos como antihipertensivos
 Abuso de alcohol, cocaína y otras sustancias

Resultados:
Se encontró, que existen muchos factores de riesgo relacionados con la
depresión, el más importante de ellos es la relación familiar, si viven con familiares
o con su pareja o su viven en casa de reposo, se vio que los pacientes geriátricos
que viven en casa de reposo son más propensos a la depresión y suelen tener
más pensamientos de inutilidad e ideas suicidas.
El duelo y las enfermedad es crónico degenerativas también suelen ser factores
importantes, ya que en cuanto a las enfermedad es degenerativas, reducen
significativamente su calidad de vida.

Discusión:

Nos parece bastante lógico que el factor de riesgo más importante para la
depresión geriátrica sean factores sociales, ya que repercute mucho el entorno en
el que se relacione el paciente en su salud, los resultados nos indicaron que hay
una mayor prevalencia a la depresión en pacientes que viven en casas de reposo
sin familiares o sin su pareja, en pacientes con enfermedades crónico
degenerativas y en pacientes que ya habían cursado por episodios de depresión a
lo largo de su vida. Se obtuvieron más factores influyentes de los que se creían
conforme se fue realizando la investigación, la información consultada nos fue de
gran ayuda, ya que logramos ver la enfermedad desde otro punto de vista, para
así llegar a entenderla y poder tener claros los factores que influyen y que agravan
este trastorno.

Conclusiones:

Los pacientes geriátricos deberían tener una adecuada y completa observación


por parte de su médico tratante, debe ser una observación global hacia el
paciente, no sólo de sus enfermedades ya diagnosticadas, si este es el caso, sino
de todos los aspectos que rodean la vida del paciente, ya que es de gran
importancia detectar si hay factores que pueden influir en los pacientes para
desarrollar un trastorno depresivo y si es que se detecta alguno, dependiendo la
gravedad de dicho factor poder ayudar al paciente, ya sea con tratamiento
farmacológico y terapia, o con simples consultas de seguimiento si es que los
factores influyentes no están claramente definidos. Se debe realizar también una
historia clínica completa, que en dado caso nos podría ayudar a detectar factores
como por ejemplo si el paciente durante su vida a cursado con un cuadro
depresivo previo, ya que este dato también es d importancia para evitar una futura
recaída.
De esta manera se pretende reducir las cifras de adultos de la tercera edad con
depresión o en riesgo de sufrir algún cuadro depresivo.

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