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Dimensión para la Nueva

Evangelización y
Catequesis

Evangelio según san Juan

Alumno: Jesús Trejo Castro

Maestro: María del Refugio Félix Rodríguez

Fecha: 21 de julio de 2016

Lugar: Guadalupe, Zacatecas


Introducción

Los Evangelios toman una parte esencial en la vida del Cristiano, además de ser el punto
central de toda la Sagrada Escritura, son la misma imagen de Cristo, pues en ellos se narran
los acontecimientos que dan lugar a sus enseñanzas, y por lo tanto, el cristiano llamado a
imitar a Cristo, en ellos encuentra el camino que le hace cumplir este objeto.

El Evangelio de san Juan, catalogado como el “Evangelio del amor”, nos da una
mirada diferente de los otros llamados sinópticos, pues nos muestra a Cristo en su esplendor,
en su divinidad, por ello he querido detenerme en él, para que como la figura que representa
al evangelista, el águila, pueda abrir yo mis alas al conocimiento de Cristo, por medio del
Evangelio y poder así vivir una vida verdaderamente cristiana.

Así pues, en el presente trabajo, presentaré algunos rasgos importantes del Evangelio
de san Juan, los cuales me ayudarán a centrarme en la comprensión del escrito de la Sagrada
Escritura, poniéndome en el contexto histórico, conociendo sus características literarias, su
estructura y el mensaje que en general nos quiere dar el autor sagrado con su obra.
Descripción del Evangelio

Destinatarios
Los destinatarios de este Evangelio son aquellos cristianos que no reconocían que Jesús era
más grande que Juan el Bautista, así como a aquellos que no aceptaban la divinidad de
Jesucristo. Además, a los cristianos que eran perseguidos y tenían miedo de predicar a Cristo
y presentarse como discípulos ante la sociedad.

Características literarias

Tiene fuentes propias, es decir, Juan en sí mismo es una fuente, pues él como Apóstol de
Cristo, vivió el Evangelio, así escribe conforme a sus recuerdos. Seleccionó algunos milagros
y profundizó en su significado simbólico, en función de la enseñanza a la comunidad
cristiana.

Es rico de discursos y tiene una manera de hablar profunda, reflexiva y abstracta. Por
eso su lenguaje es para adultos en la fe. Habla con los nuevos conceptos que se manejaban
en la cultura helenística: luz, tinieblas, vida, amor, logos, etc., y los adapta a la concepción
cristiana de la fe. Nos habla de realidades concretas para después transportarnos a realidades
superiores mediante los símbolos.

También son muy abundantes los diálogos con los cuales se expresan las enseñanzas de Jesús
de una manera más práctica.

Estructura

Prólogo (1, 1-51): Introducción y sumario a la vida terrena del Verbo/Palabra encarnado.

Primera sección: el libro de los signos (2, 1-12,50): Las acciones de Jesús son calificadas
como signos o señales; en esta primera sección recoge el autor siete.

1. Jesús es la Palabra de una nueva religiosidad (2,1-4,42). Las señales son dos:
transformación del agua en vino en una boda en Caná y la purificación del Templo
(2,1-25).
2. Jesús es la Palabra que ofrece una vida nueva (4,46-5,57) Las señales son: curación
del hijo de un funcionario real (4, 46-54) y la curación de un enfermo en la piscina de
Betesda (5,1-18).
3. Jesús es la Palabra que se transforma en alimento de vida nueva (6,1-71).Señales:
multiplicación de los panes (6,1-15) y dominio sobre el mar (6,16-21).
4. Jesús es la Palabra que da verdadera libertad (7,1-59). Juan recoge una serie de
actitudes de incredulidad de algunos de sus familiares y de los jefes de la nación que
no aceptan a Jesús como Mesías, ni como Hijo de Dios, ni como quien puede dar la
verdadera liberación.
5. Jesús es la Palabra que ilumina el mundo (),1- 10,42). La señal es la curación de un
ciego de nacimiento.
6. Jesús es la Palabra de la resurrección (11,1-57). La señal es la resurrección de Lázaro.

Segunda sección: el libro de la hora de Jesús (13, 1-20,31): Repetidas veces ha dicho Jesús
en la primera parte que “todavía no había llegado su hora” (2,4; 7,6.30), en este momento ya
ha llegado (13,1). En esta segunda sección Juan antepone la enseñanza a la gran señal: pasión
muerte y resurrección de Jesús.

1. Jesús es el Cordero (siervo de Dios en la Nueva Pascua 13,1-17,26).


2. Discursos de despedida: 1° (13,31-14,31); 2° (15,1-16,33); 3° en estilo de oración
(17, 1-26).
3. La gran señal: Pasión muerte y resurrección de Jesús (18, 1-20,31).

Epílogo (21,1-25): apariciones pospascuales en Galilea.

Doctrina del Evangelio

Como lo escribe Juan al final de su Evangelio (20, 31) su finalidad fue que creyéramos que
Jesús es el Hijo de Dios, así mediante los signos o milagros nos muestra cómo algunos
paganos se van convirtiendo a las enseñanzas de Jesús, esto en la primera parte.

En lo que resta en la segunda, Juan nos da a conocer que Jesús se va, pero no nos deja solos
sino que nos promete el Consolador, así es una invitación a no desfallecer en la predicación
de las enseñanzas cristianas por su pasión y su muerte, sino al contrario, mediante la
asistencia del Espíritu nos exhorta a dar testimonio sin miedo a la muerte.
Conclusión

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