COMUNIDADES DE PRÁCTICA: APLICACIÓN A OTRO CONTEXTO
Luis Fernando Barajas Gómez
Le teoría del aprendizaje social, propuesta por Etienne Wenger en su libro Comunidades de práctica, aprendizaje, significado e identidad es un marco conceptual que tiene su fundamento en un estudio etnográfico realizado en una empresa aseguradora, lo que la convierte en un planteamiento teórico interesante no sólo por sus conceptos y estructura, sino por la manera en que esta se va estructurando en el texto a través de la vivencia etnográfica del autor en el contexto particular que analiza. Pero, aunque nace de un contexto particular, la pretensión es siempre generalizar los hallazgos en esta clase de estudios. Wenger no es la excepción. De hecho, define las Comunidades de práctica como “un contexto viviente que puede ofrecer a los principiantes un acceso a la competencia y que también puede provocar una experiencia personal de compromiso por la que incorporar esa competencia a una identidad de participación [… en ellas] se exploran visiones radicalmente nuevas sin convertirnos en tontos ni atascarnos en un callejón sin salida. Una historia de compromiso mutuo en torno a una empresa conjunta” (p.259). Caracteriza a las comunidades de práctica como contextos por ser omnipresentes: están en todos lados todo el tiempo y formamos parte de ellas. A partir de esto, me planteé corroborar si esta teoría, que nace de un medio empresarial, posee la suficiente claridad para ser aplicable a la comprensión de fenómenos considerablemente diferentes, por lo que el entorno con el cual decidí ejemplificar esta teoría es el de el contingente del Partido Comunista de México durante su marcha independiente el primero de mayo en la Ciudad de México. Lo califico como un caso considerablemente diferente porque su duración es mínima, no tiene una espacialidad definida durante un tiempo prolongado y la empresa que se persigue es en sí misma el proceso de realizarla. Sin ser militante me incorporé a las tres horas con 15 minutos al contingente del PCM que se dio cita bajo el Monumento a la Revolución. Antes de llegar, me había comunicado con un compañero que está adscrito a este grupo. Lo primero que hice fue tomar registro fotográfico de las personas que ahí se encontraban: eran grupos fragmentados que se iban rompiendo para formar un conjunto organizando de mayor tamaño. Encontré a quien estaba esperando y, sin esperar lo siguiente, me pidieron que sostuviese la manta con la consigna “si no hay poder obrero, no hay cambio verdadero” que iba al frente del contingente. Acepté y, tras unos minutos de espera avanzamos. Unos pasos adelante comenzaron las consignas, lo que me hizo preocupar por un momento al desconocerlas en absoluto o, al menos, la gran mayoría. Conforme avanzaba el contingente, y yo con él, me iba familiarizando con ellas hasta lograr memorizarlas y unirme cuando era pertinente. Al llegar a Av. Paseo de la Reforma, frente a la Secretaría de Trabajo, la camioneta que iba guiando se detuvo, bajaron algunos y encendieron el micrófono, otros llevaban una cubeta y hojas de papel impresa. En esos momentos corrieron y utilizando el líquido que se encontraba en los recipientes comenzaron a pegar en la puerta de cristal frases diversa al tiempo que otro hablaba por el micrófono haciendo alusión a su inconformidad con la gestión laboral actual ofreciendo datos sobre la misma y estableciendo relaciones entre sus premisas y los datos para mostrar, desde su perspectiva, las razones por las cuales tomaba dicha posición al respecto. Alrededor, algunas personas que iban transitando se quedaban a escuchar, otras sólo continuaban su paso. Una vez más, avanzamos. En este momento ya era capaz de reconocer el orden con el cual presentaban las consignas y había memorizado algunos de los datos que continuamente repetían en el micrófono: “esta es la cuarta marcha que decidimos hacer de manera independiente”, por sólo mencionar una en un espacio tan acotado. Al acercarnos al Zócalo capitalino informaron que se cantaría el Himno del PCM y la Internacional. Ambos totalmente desconocidos para mí. En ese momento, todos detenidos sobre la calle cinco de mayo, comenzaron a cantar, mientras yo observaba en silencio. Una vez que terminó continuamos el camino. Ya frente a la Catedral Metropolitana, se volvió a reproducir ambos himnos a los cuales pude unirme. Una vez terminado el trayecto, se comenzaron a conformar pequeñas agrupaciones para organizar su retiro. Yo hice lo mismo y nos retiramos. Una vez descrita la situación anterior me permito relacionar los elementos principales de la Teoría de Wenger con los elementos del ejemplo ofrecido. Puede observarse en todo el ejemplo la existencia de prácticas tanto implícitas como explícitas: quién habla, quién comienza las consignas, cómo es la formación, hacia dónde se avanza, etc. Un ejemplo muy claro, a mi parecer es el de pegar las hojas impresas en la puerta de la STPS, un acto que no era para mí explícito por ser ajeno al grupo pero que, al estar ahí, se da por sentado su validez en ese contexto. La cosificación se muestra en la elaboración de material que condensa y objetiva la presencia efímera del contingente. Ejemplo de ello son las mismas impresiones, pero también la impresión de lonas, el periódico que editan, etc. Recordemos que este concepto “hace referencia tanto a un proceso como a su producto”. También interesante resulta la aplicación del término comunidad en este caso, pues implica la existencia de dimensiones como la empresa conjunta, el compromiso mutuo y el repertorio compartido. Corresponden estos tres a la marcha misma, la ideología que los une y las consignas y formas de organización descritas, respectivamente. En cuanto a los conceptos vinculados con el aprendizaje, es posible enfatizar que hay un desarrollo de formas de compromiso mutuo pues se define en la misma práctica la manera de participar, de relacionarse y de identificación; hay una comprensión de su empresa y ajuste en la cual existe un esfuerzo para el logro de la empresa; por último, desarrollo de repertorio, en el que se adoptan artefactos, el registro y recuerdo de eventos, la creación de rutinas, etc.