You are on page 1of 6

Revista Mexicana

Revista Mexicana de Biodiversidad, de85:


Supl. Biodiversidad,
S100-S105, 2012
2014
100 DOI: 10.7550/rmb.30953
DOI: 10.7550/rmb.30953
Delgadillo-Moya.- Biodiversidad de musgos
Fecha de publicación: 30 octubre, 2012

Biodiversidad de Bryophyta (musgos) en México

Biodiversity of Bryophyta (mosses) in Mexico

Claudio Delgadillo-Moya
Departamento de Botánica, Instituto de Biología, Universidad Nacional Autónoma de México. Apartado postal 70-233, 04510 México, D. F., México.
moya@unam.mx

Resumen. Los musgos (Bryophyta) están representados por alrededor de 12 800 especies en el mundo. En México se
reconocen 984 especies y variedades por registros en la literatura y por ejemplares depositados en el Herbario Nacional
(MEXU). En los estados del sur y en los situados a los largo del Eje Neovolcánico, la riqueza de especies de musgos
es mayor, pero la exploración en los otros estados todavía puede ser fructífera. La proporción de endemismos es baja
HQWRGRVORVWLSRVGHYHJHWDFLyQH[FHSWRHQODÀRUDDOSLQDGRQGHDOFDQ]DHOPLHQWUDVTXHHQHOSDtVDSHQDVOOHJD
DO/DGLYHUVLGDGÀRUtVWLFDVHFRQFHQWUDHQGHODVIDPLOLDVUHFRQRFLGDVSDUDODÀRUDODVTXHFRQWLHQHQ
HVSHFLHV\YDULHGDGHV GHODÀRUD ODVPiVGLYHUVDVVRQODV3RWWLDFHDHFRQHVSHFLHV\YDULHGDGHV/DIDFLOLGDG
de dispersión y su longevidad son responsables del bajo nivel de endemismo de los musgos en México. Sólo 6 especies
VHUHFRQRFHQR¿FLDOPHQWHFRPRUDUDVRHQSHOLJURSHURPXFKDVHVWiQHQULHVJRSRUODSHUWXUEDFLyQGHORVERVTXHV\
de su microhábitat, por el hombre.

3DODEUDVFODYH%U\RSK\WDGLVWULEXFLyQHQGHPLVPRÀRUDGHPXVJRV0p[LFR

Abstract. Mosses (Bryophyta) comprise about 12 800 species in the world. In Mexico, 984 species and varieties are
recognized from literature records and specimens in the Bryophyte Collection of the National Herbarium (MEXU). The
southern states and those along the Neovolcanic Belt are the richest in terms of number of species, but the botanical
exploration elsewhere may still produce many records. The proportion of endemic taxa is low in most vegetation types,
H[FHSWLQWKHDOSLQHDUHDVZKHUHLWUHDFKHVZKLOHLWLVRQO\DWWKHQDWLRQDOOHYHO0RVVGLYHUVLW\LVFRQFHQWUDWHG
LQRXWRIIDPLOLHVWKDWFRQWDLQVSHFLHVDQGYDULHWLHV RIWKHPRVVÀRUD WKHPRVWGLYHUVHIDPLO\LVWKH
3RWWLDFHDHZLWKVSHFLHVDQGYDULHWLHV(DVHRIGLVSHUVDODQGORQJHYLW\DUHFRQVLGHUHGUHVSRQVLEOHIRUWKHORZOHYHO
RIPRVVHQGHPLVPLQ0H[LFR2QO\VSHFLHVDUHRI¿FLDOO\UHFRJQL]HGDVUDUHRUHQGDQJHUHGEXWPDQ\RWKHUVDUHDW
risk because of forest and microhabitat disturbance by man.

.H\ZRUGV%U\RSK\WDGLVWULEXWLRQHQGHPLVP0H[LFRPRVVÀRUD

Introducción pared delgada que se conoce como hialodermis. Los tallos


SXHGHQ HVWDU PiV R PHQRV FXELHUWRV SRU ¿ODPHQWRV XQL-
Los musgos son plantas verdes, generalmente peque- VHULDGRV R UDPL¿FDGRV OODPDGRV SDUD¿OLRV R OOHYDU RWUDV
ñas, miden desde unos milímetros hasta 20-30 cm, aunque HVWUXFWXUDVHVSHFLDOHVORVSVHXGRSDUD¿ORVSDUDSURWHJHU
en algunas formas erectas o con tallos colgantes alcanzan ODV]RQDVPHULVWHPiWLFDV3RUVXSDUWHODVKRMDVVRQFRQ
en ocasiones casi 1 metro. Viven sobre el suelo, rocas o frecuencia láminas de una célula de espesor, excepto en la
FRPR HSt¿WRV HQ VLWLRV K~PHGRV DUUDLJDGRV R ÀRWDQGR parte media donde puede encontrarse un nervio con célu-
HQFXHUSRVGHDJXDGXOFHQRVRQPDULQRV/DSDUWHPiV las de sostén y de conducción. Las células foliares pueden
FRQVSLFXD GH FXDOTXLHU PXVJR HV HO JDPHWR¿WR TXH FRQ- H[KLELU IRUPDV \ WDPDxRV GLYHUVRV VXV RUQDPHQWDFLRQHV
VLVWHHQXQWDOORFRQDKLOHUDVGHKRMDVHQXQDUUHJOR R HQJURVDPLHQWRV OHV FRQ¿HUHQ SURSLHGDGHV PHFiQLFDV R
UDGLDO3RUVXDQDWRPtDORVWDOORV\ODVKRMDVVRQHVWUXF- ¿VLROyJLFDV HVSHFLDOHV SDUWLFXODUPHQWH UHODFLRQDGDV FRQ
WXUDVVLPSOHVORVSULPHURVSXHGHQWHQHUXQHMHRFRUGyQ la economía del agua o con la fotosíntesis. Los tallos lle-
central de células más pequeñas rodeadas por varias capas van rizoides lisos o papilosos en la base o a lo largo de su
de células parenquimatosas más grandes que a su vez están cuerpo, a veces en tal abundancia que forman un tomento.
rodeadas por una o varias capas de células epidérmicas de /RVUL]RLGHVVRQ¿ODPHQWRVPXOWLFHOXODUHVFRQODVSDUHGHV
paredes gruesas que forman una esclerodermis. En ciertos transversales oblicuas. Los órganos sexuales –arquego-
casos, la epidermis está formada por células grandes de QLRV\DQWHULGLRV±HVWiQSURWHJLGRVSRUKRMDVPRGL¿FDGDV
\SRUSDUD¿VRVHQWUHPH]FODGRVTXHD\XGDQDPDQWHQHUOD
Recibido: 29 marzo 2012; aceptado: 10 octubre 2012 humedad. Los arquegonios se forman en posición apical o
Revista Mexicana de Biodiversidad, Supl. 85: S100-S105, 2014
DOI: 10.7550/rmb.30953 101
Delgadillo-Moya.- Biodiversidad de musgos

lateral, mientras que los anteridios varían en posición en et al. (1999) reconocen 12 800 especies, mientras que Gof-
tallos monoicos o dioicos. ¿QHWHWDO  HVWLPDQTXHH[LVWHQDOUHGHGRUGH
El ciclo de vida de los musgos es haplo-diplobióntico, en el mundo.
KHWHURPyU¿FRGRQGHHOJDPHWR¿WRKDSORLGHDOWHUQDFRQHO /DV FRQWULEXFLRQHV D OD ÀRUD GH PXVJRV GH 0p[LFR
HVSRUR¿WRGLSORLGHpVWH~OWLPRHVHOUHVXOWDGRGHODIHFXQGD- (Sharp et al., 1994) describen e ilustran las especies
ción de la célula sexual femenina u oosfera. Los anterozoides FRQRFLGDV KDVWD HVD IHFKD VXV GDWRV GH GLVWULEXFLyQ
ELÀDJHODGRVQDGDQKDFLDHODUTXHJRQLRKDVWDOOHJDUDODRRV- local, sin embargo, no son exhaustivos pues dejan fuera
fera. Después de la fecundación, las divisiones sucesivas colecciones importantes de muchos herbarios o de algu-
GDQOXJDUDODVHVWUXFWXUDVIXQGDPHQWDOHVGHOHVSRUR¿WR nas regiones del país. Es probable que haya especies sin
SLHVHWD\FiSVXOD(OSLHDQFODHOHVSRUR¿WRDOFXHUSRGHO descubrir en sitios alejados de los centros de población o
JDPHWR¿WRODVHWDHVHOSHGLFHORTXHHOHYDODFiSVXODSRU SRFRH[SORUDGRVSRUORVFROHFWRUHV3RUHOORODViUHDVGH
HQFLPDGHOJDPHWR¿WRSDUDIDFLOLWDUODGLVHPLQDFLyQGHODV distribución de las especies conocidas, todavía no están
esporas. Las esporas producidas por meiosis, son liberadas bien delimitadas. La recolección por estado amplía inva-
a través de la boca de la cápsula y al geminar producen un riablemente el área de distribución nacional conocida de
FXHUSR ¿ODPHQWRVR R ODPLQDU GHQRPLQDGR ³SURWRQHPD´ PXFKRVPXVJRV3RUHMHPSORHQ*XDQDMXDWR'HOJDGLOOR
,QLFLDOPHQWH OD ERFD  HVWi FXELHUWD SRU HO RSpUFXOR SRU y Cárdenas (1996) registraron 114 especies aunque los
GHEDMRGHpOORVSURFHVRV¿OLIRUPHVGHOSHULVWRPDHQFRP- HVWXGLRVSUHYLRVVyORFLWDEDQHQ4XHUpWDUR+HUUHUD
ELQDFLyQFRQODIRUPDGHODFiSVXODUHJXODQHOQ~PHURGH 3DQLDJXDHWDO  OLVWDURQHVSHFLHV\YDULHGDGHV
esporas liberadas en cada evento de diseminación. La pared que incluyen 44 previamente conocidas de ese estado. La
de la cápsula tiene estomas que pueden ser funcionales en ÀRUDGHPXVJRVGH0p[LFR 6KDUSHWDO UHJLVWUy
ORVHVSRUR¿WRVLQPDGXURVRYHUGHV XQDVHVSHFLHVSDUD=DFDWHFDVHQFDPELR'HOJDGLOOR
$SHVDUGHVXDSDUHQWHVHQFLOOH]HOJDPHWR¿WR\HOHVSR- \&iUGHQDV  FLWDURQHVSHFLHV\YDULHGDGHVSDUD
UR¿WRH[KLEHQQXPHURVDVYDULDQWHVHVWUXFWXUDOHV0XFKDVVH HVH HVWDGR /RV PXVJRV GH$JXDVFDOLHQWHV \ OD ÀRUD GH
utilizan como argumentos taxonómicos para separar grupos áreas de Baja California, Sonora, Chihuahua y Coahuila,
HQIDPLOLDVRGLYLVLRQHVGLIHUHQWHVRWURVD\XGDQDH[SOLFDU solamente se conocen por la recolección incidental de
HO FRPSRUWDPLHQWR HFROyJLFR \ ¿VLROyJLFR GH ORV PXVJRV pocas muestras.
De manera similar a las hepáticas y a los antocerotes, los Los musgos de los estados del centro y del sur del país
musgos son plantas muy antiguas que se cuentan entre las parecen mejor conocidos. El Eje Neovolcánico abarca
SULPHUDVHQRFXSDUHODPELHQWHWHUUHVWUHSUHFHGLHURQDODV YDULRV HVWDGRV TXH HQ FRQMXQWR UH~QHQ DOUHGHGRU GH 
plantas vasculares y sus adaptaciones son comparativa- especies de musgos (Villaseñor et al., 2006). Sus relaciones
mente simples pero efectivas para colonizar tales ambientes. JHRJUi¿FDVVHKDQGLVFXWLGRHQYDULDVSXEOLFDFLRQHV SHM
Su persistencia en los ecosistemas terrestres indica su éxito 'HOJDGLOOR SXHVVHFRQVLGHUDTXH
HFROyJLFRVXGLYHUVLGDGGHHVSHFLHVUHÀHMDODH[LVWHQFLDGH la distribución de los musgos puede ser fuente de informa-
estrategias adaptativas que les han permitido ocupar hábitats FLyQ¿WRJHRJUi¿FD\SDUDHQWHQGHUODKLVWRULDGHRFXSDFLyQ
no disponibles para otras plantas. SRUSODQWDVHQHVWDUHJLyQ3RURWUDSDUWHORVPXVJRVGH
Las siguientes referencias contienen información gene- Veracruz, Oaxaca y Chiapas también son comparativa-
UDOVREUHGLYHUVRVDVSHFWRVGHODELRORJtDGHODV%U\RSK\WD mente bien conocidos. No se cuenta con un inventario de
&UXP   'HOJDGLOOR \ &iUGHQDV   *RI¿QHW \ HVSHFLHV GHO ~OWLPR HVWDGR SHUR SDUD9HUDFUX] 'HOJDGL-
6KDZ  5LFKDUGVRQ  6FKR¿HOG  \9DQ- OOR  HQOLVWDHVSHFLHV\YDULHGDGHVPLHQWUDVTXH
GHUSRUWHQ\*RI¿QHW   SDUD2D[DFD'HOJDGLOOR\&iUGHQDV  UHFRQRFHQ
especies. Es probable que por su clima benigno, por ser
Diversidad parte de rutas comerciales o por sus atractivos turísticos,
esos estados hayan recibido mayor atención por parte de
De acuerdo con Sharp et al. (1994) o en LATMOSS colectores desde hace muchos años.
 'HOJDGLOOR   OD ÀRUD GH PXVJRV GH 0p[LFR (O HQGHPLVPR HQ OD ÀRUD GH PXVJRV GH 0p[LFR HV
incluye 984 especies y variedades. Además, en la Colección bajo. Datos previos (Delgadillo, 1994) indicaban que el
GH %ULR¿WDV GHO +HUEDULR 1DFLRQDO GH 0p[LFR 0(;8  SRUFHQWDMHGHHQGHPLVPRHUDGHPiVGH HVSH-
están depositados ejemplares que representan especies no cies). No obstante, con la mejor exploración en México
FLWDGDVHQRWUDVIXHQWHV\TXHGHEHQVHUFRQ¿UPDGRVSDUD y en otros países y el avance en la revisión de géneros y
QXHVWUDÀRUD&RQVLGHUDQGRHVRVUHJLVWURVSRWHQFLDOHVVH IDPLOLDV HO Q~PHUR GH HVSHFLHV UHVWULQJLGDV VH KD UHGX-
HVWLPDTXHORVPXVJRVHQODÀRUDGH0p[LFRVXPDQDOUHGH- FLGR$FWXDOPHQWHVHUHFRQRFHQDOUHGHGRUGHHVSHFLHV
GRUGHHVSHFLHVFDVLGHODÀRUDPXQGLDO&URVE\ FD UHVWULQJLGDVDOWHUULWRULRQDFLRQDO
Revista Mexicana de Biodiversidad, 2012
DOI: 10.7550/rmb.30953
102 Delgadillo-Moya.- Biodiversidad de musgos
Fecha de publicación: 30 octubre, 2012

$QLYHOORFDOORVHVWXGLRVÀRUtVWLFRVUHJLRQDOHVRSRU circunscrita a unos cuantos estados circunvecinos. La


WLSR GH YHJHWDFLyQ PXHVWUDQ TXH HO Q~PHUR GH HVSHFLHV exploración botánica fragmentaria también puede ser res-
restringidas es pequeño. El llamado bosque de Liquidam- ponsable del desconocimiento del área de distribución real
barODÀRUDGH=DFDWHFDVODGHO9DOOHGH7HKXDFiQGHOD de muchos taxa. El ejemplo de Streptopogon matudianus
península de Yucatán o del estado de Chiapas contienen podría ilustrar el caso de una especie considerada como
una proporción muy reducida de especies endémicas. Sólo HQGpPLFDSRUPXFKRWLHPSRIXHGHVFULWDHQ &UXP
OD ÀRUD DOSLQD SDUHFH FRQWHQHU XQ SRUFHQWDMH LPSRUWDQWH  \DSHVDUGHWHQHUXQDPRUIRORJtDGLVWLQWLYDSDVy
GH HVSHFLHV UHVWULQJLGDV DOUHGHGRU GHO  'HOJDGLOOR LQDGYHUWLGD SRU FDVL  DxRV +DFLD ¿QHV GHO VLJOR ;;
 1RH[LVWHHYLGHQFLDGLUHFWDGHODVFDXVDVGHOPD\RU Matteri y Schiavone (1998) la registraron de Argentina.
QLYHO GH HQGHPLVPR HQ OD ÀRUD DOSLQD SHUR VH VXJLHUH El cuadro 1 muestra datos sobresalientes de la riqueza
que aunque existen presiones selectivas que promueven ÀRUtVWLFDGHPXVJRVPH[LFDQRV$XQTXHODÀRUDFRPSUHQGH
la especiación, los taxa formados han tenido el tiempo y IDPLOLDVHOQ~PHURPD\RUGHHVSHFLHVHVWiFRQFHQWUDGR
ODORQJHYLGDGVX¿FLHQWHVSDUDGLVSHUVDUVHDPSOLDPHQWHR HQGHHOODVHVGHFLUXQWHUFLRGHODVIDPLOLDVLQFOX\HQ
para mantener sus áreas de distribución. El género Hyp- HOGHODVHVSHFLHVUHJLVWUDGDVSDUD0p[LFR/DIDPLOLD
nodontopsis se ha registrado en los depósitos de ámbar PiVLPSRUWDQWHHV3RWWLDFHDHFRQDOUHGHGRUGHOGHO
GHVGHHO(RFHQRGH(XURSDH. mexicana (Thér.) H. Rob. total de las especies, seguida por las Bryaceae, Dicrana-
parece abundante en esos depósitos, pero su distribución FHDH)LVVLGHQWDFHDH\2UWKRWULFKDFHDH/DV3RWWLDFHDHVRQ
DFWXDOVyORLQFOX\H0p[LFR\8JDQGD )UDKP (Q PXVJRVGHDPELHQWHVH[WUHPRV =DQGHU SRUORTXH
contraste, las zonas alpinas de México son geológicamente su distribución en México está generalizada. Con respecto
recientes y por ello conservan muchas de sus especies DODVHVSHFLHVHQGpPLFDVHOFXDGURPXHVWUDTXHHO
HQGpPLFDVHQHOFDVRGHRWUDVUHJLRQHVODPD\RUtDGHODV de ellas pertenece a 19 familias y que a pesar de que las
especies endémicas tienen un área de distribución pequeña, 3RWWLDFHDHHVWiQUHSUHVHQWDGDVHQODÀRUDSRUJpQHURV

Cuadro 1.5LTXH]DGHHVSHFLHVHQODVIDPLOLDVGHPXVJRVPH[LFDQRV6HOLVWDQVRODPHQWHODVIDPLOLDVFRQPiVGHWD[RQHVHVSHFt¿FRV
RLQIUDHVSHFt¿FRV\HOQ~PHURFRUUHVSRQGLHQWHGHHVSHFLHVGHGLVWULEXFLyQUHVWULQJLGDD0p[LFR

Familias Géneros Especies y variedades Especies endémicas


Amblystegiaceae 12 22 2
Bartramiaceae 6 33 3
Brachytheciaceae 9 30 1
Bryaceae 12 86 9
Calymperaceae 3 24 0
Cryphaeaceae  11 0
Daltoniaceae 4 12 0
Dicranaceae  60 4
Ditrichaceae 10 19 4
Entodontaceae 2 12 1
Fissidentaceae 1  1
Funariaceae 3  2
Grimmiaceae   3
Leskeaceae 8  1
Meteoriaceae 9  1
Neckeraceae 9 22 2
Orthotrichaceae 8  2
3LORWULFKDFHDH 11 39 
3RO\WULFKDFHDH 6 19 1
3RWWLDFHDH   13
3WHUREU\DFHDH 9 14 0
3\ODLVLDGHOSKDFHDH 8  2
Sematophyllaceae   1
Sphagnaceae 1 13 0
0
Thuidiaceae 3 11
7RWDO   
Revista Mexicana de Biodiversidad, Supl. 85: S100-S105, 2014
DOI: 10.7550/rmb.30953 103
Delgadillo-Moya.- Biodiversidad de musgos

\XQQ~PHURDOWRGHHVSHFLHVHOQ~PHURGHHQGHPLVPRV SHUR FRQVLGHUDQGR ORV YRO~PHQHV H[WUDtGRV \ ORV HIHFWRV


también es comparativamente pequeño. sobre las comunidades vegetales de esa zona y sobre la
En contraste con los anteriores, los datos recíprocos que micro-fauna asociada a los musgos, también requieren
GHULYDQGHOFXDGURVRQLJXDOPHQWHLQWHUHVDQWHV(QODV vigilancia y protección legal. En esta zona y en todo el
IDPLOLDVPHQRVGLYHUVDVDSHQDVVHUH~QHQHVSHFLHV\ país, dicha protección se debe extender a los musgos cuyo
HQGHHOODVVyORKD\HVSHFLHVHQGpPLFDV/DH[SOL- tamaño, cobertura o biomasa los hace blanco de recolec-
cación de la disparidad de datos seguramente está ligada ción o uso indebido. Sin embargo, la mejor protección a
a la edad geológica y a la historia y distribución principal los musgos radica en la preservación de los bosques y de
de cada familia. Algunas familias como las Calympera- su microhábitat.
FHDH /HXFREU\DFHDH 0HWHRULDFHDH \ 3WHUREU\DFHDH VRQ
fundamentalmente tropicales, en tanto que otras como las Agradecimientos
$PEO\VWHJLDFHDH*ULPPLDFHDH+\SQDFHDH\3RO\WULFKD-
ceae, son principalmente templadas. Además de carecer de A Susana Guzmán de la UNIBIO, Instituto de Biolo-
evidencias sobre su edad, con los criterios taxonómicos gía, UNAM, por la obtención de las imágenes digitales
DFWXDOHV HV GLItFLO H[SORUDU OD D¿QLGDG JHRJUi¿FD GH ODV de musgos mexicanos que ilustran este trabajo y a Ánge-
IDPLOLDV(O~OWLPRHVTXHPDGHFODVL¿FDFLyQGHORVPXVJRV les Cárdenas por la selección de los ejemplares idóneos.
*RI¿QHWHWDO LQFRUSRUDIDPLOLDVVHJUHJDGDVUHFLHQ- También se agradecen las observaciones de dos revisores
temente o que han experimentado rearreglos taxonómicos anónimos.
importantes, notablemente las Bryaceae, Hookeriaceae
y Thuidiaceae, entre otras. Los comentarios adicionales Literatura citada
VREUHODGLYHUVLGDGWD[RQyPLFDGHODÀRUDGHPXVJRV GH
México podrían revisarse nuevamente cuando los estudios Crosby, M. R., R. E. Magill, B. Allen y S. He. 1999. A checklist
moleculares que han promovido el rearreglo de las familias of the mosses. Missouri Botanical Garden, St. Louis. 306 p.
y géneros ofrezcan mayor estabilidad taxonómica. &UXP + $  7ZR QHZ VSHFLHV RI 0H[LFDQ PRVVHV
Con excepción de las endémicas, las demás espe- FROOHFWHGE\$-6KDUS%U\RORJLVW
cies de musgos mexicanos tienen áreas de distribución Crum, H. 2001. Structural diversity of bryophytes. University
en 2 o más países, en franjas altitudinales y latitudinales RI0LFKLJDQ+HUEDULXP$QQ$UERUS
IUHFXHQWHPHQWH DPSOLDV 3RGUtD VXSRQHUVH TXH SRU HVWDU 'HOJDGLOOR &  7KH 1HRYROFDQLF %HOW RI 0H[LFR DV D
representados en varios países, los musgos no requerirían barrier and route of migration for mosses. Monographs in
protección especial para su conservación. Sin embargo, la Systematic Botany from the Missouri Botanical Garden
pérdida de la cubierta vegetal en muchas zonas, el cambio 
de uso del suelo, la contaminación ambiental y el cambio 'HOJDGLOOR&0RVVGLVWULEXWLRQDQGWKHSK\WRJHRJUDSKLFDO
climático son importantes en la región y determinantes VLJQL¿FDQFHRIWKH1HRYROFDQLF%HOWRI0H[LFR-RXUQDORI
para la permanencia o en la reducción del área de distribu- %LRJHRJUDSK\
ción de muchas especies. La información sobre especies de Delgadillo, C. 1988. Floristic corridors for moss distribution
México en categorías de riesgo es virtualmente nula (véase across the Neovolcanic Belt of Mexico. I. The Tuxpan
+DOOLQJElFN \ +RGJHWWV   DXQTXH HO 'LDULR 2¿FLDO FRUULGRU-RXUQDORI%U\RORJ\
del 6 de mayo de 1994, en respuesta a la preocupación 'HOJDGLOOR &  (QGHPLVP LQ WKH QHRWURSLFDO PRVV ÀRUD
del Instituto Nacional de Ecología, publicó los nombres %LRWURSLFD
de 6 musgos raros o en peligro (Delgadillo, 1996). Esta Delgadillo, C. 1996. Moss conservation in Mexico. Anales de
~OWLPDSXEOLFDFLyQLQFRUSRUDWDPELpQORVQRPEUHVGHRWURV Instituto de Biología, Universidad Nacional Autónoma de
musgos mexicanos que requieren protección especial. Es 0p[LFR6HULH%RWiQLFD
bien conocido el uso de varias especies durante la época Delgadillo, C. 2009. Floristic corridors for moss distribution
QDYLGHxDRFRPRSDUWHGHDUUHJORVÀRUDOHV*yPH]3HUDOWD across the Neovolcanic Belt of Mexico. IV. The Toluca and
\:ROI  GRFXPHQWDURQODH[WUDFFLyQGHWRQHODGDV &KDOFRFRUULGRUV-RXUQDORI%U\RORJ\
GH SHVR IUHVFR GH EULR¿WDV GH OD 5HVHUYD GH OD %LRVIHUD Delgadillo, C. 2011. Los musgos, Veracruz y el Corredor
en la Sierra Chincua de Michoacán durante una estación Florístico del Golfo. In La biodiversidad en Veracruz.
GH UHFROHFFFLyQ $GHPiV GHO UHWLUR GH ODV ³FDUSHWDV´ GH Estudio de estado, volumen II, A. Cruz-Angón (ed.).
musgo, los autores mencionan la remoción accidental de CONABIO, México, D. F. p. 89-96.
11 000 plántulas de Abies y otras plantas herbáceas. Varias Delgadillo, C. 2011. Latmoss 2010. KWWSZZZLELRORJLDXQDP
especies de Hypnum, Thuidium, Bryum y Mironia no reco- mx/briologia/www/index/~OWLPDFRQVXOWD,,,
nocidas como en riesgo, formaban parte de las carpetas, 'HOJDGLOOR & \ $ &iUGHQDV  0XVJRV GH =DFDWHFDV
Revista Mexicana de Biodiversidad, 2012
DOI: 10.7550/rmb.30953
104 Delgadillo-Moya.- Biodiversidad de musgos
Fecha de publicación: 30 octubre, 2012

0p[LFR,,,6tQWHVLV\¿WRJHRJUDItD%ROHWtQGHOD6RFLHGDG Hallinbäck, T. y N. Hodgetts (comps.). 2000. Status survey


%RWiQLFDGH0p[LFR and conservation action plan for bryophytes. mosses,
'HOJDGLOOR & \ $ &iUGHQDV  0DQXDO GH EULR¿WDV liverworts, and hornworts. IUCN/SSC Bryophyte Specialist
segunda edición. Cuadernos 8. Instituto de Biología, Group, IUCN, Gland. 106 p.
81$00p[LFR')S +HUUHUD3DQLDJXD3&'HOJDGLOOR-/9LOODVHxRUH,/XQD
Delgadillo, C. y A. Cárdenas. 1996. A preliminary checklist 2008. Floristics and biogeography of the mosses of the state
of the mosses of Guanajuato, Mexico. Flora del Bajío y RI4XHUpWDUR0p[LFR%U\RORJLVW
5HJLRQHV$G\DFHQWHV)DVFtFXORFRPSOHPHQWDULR;, Matteri, C. M. y M. M. Schiavone. 1998. Sobre el género
Delgadillo, C. y A. Cárdenas. 2011. Bryophyta (Musci). In Streptopogon 3RWWLDFHDH0XVFL HQ$UJHQWLQDVXEWURSLFDO
'LYHUVLGDGÀRUtVWLFDGH2D[DFDGHPXVJRVDDQJLRVSHUPDV$ 7URSLFDO%U\RORJ\
J. García-Mendoza y J. A. Meave (eds.). Instituto de Biología, Richardson, D. H. S. 1981. The biology of mosses. Blackwell
81$0&21$%,20p[LFR')S 6FLHQWL¿F2[IRUGS
)UDKP - 3  7KH JHQXV Hypnodontopsis (Bryopsida, 6FKR¿HOG : %  ,QWURGXFWLRQ WR EU\RORJ\ 0DFPLOODQ
Rhachitheciaceae) in Baltic and Saxon amber. Bryologist New York. 431 p.
 6KDUS$-+$&UXP\30(FNHO HGV 7KHPRVV
*RI¿QHW % \ $ - 6KDZ HGV   %U\RSK\WH ELRORJ\ ÀRUD RI 0H[LFR 0HPRLUV RI WKH 1HZ <RUN %RWDQLFDO
VHFRQG HGLWLRQ &DPEULGJH 8QLYHUVLW\ 3UHVV &DPEULGJH *DUGHQ
S 9DQGHUSRRUWHQ$\%*RI¿QHW,QWURGXFWLRQWREU\RSK\WHV
*RI¿QHW % : 5 %XFN \ $ - 6KDZ  0RUSKRORJ\ &DPEULGJH8QLYHUVLW\3UHVV&DPEULGJHS
DQDWRP\DQGFODVVL¿FDWLRQRIWKH%U\RSK\WDIn Bryophyte Villaseñor, J. L., C. Delgadillo y E. Ortiz. 2006. Biodiversity
ELRORJ\ % *RI¿QHW \ $ - 6KDZ HGV  &DPEULGJH KRWVSRWV IURP D PXOWLJURXS SHUVSHFWLYH PRVVHV DQG
8QLYHUVLW\3UHVV&DPEULGJHS senecios in the Transmexican Volcanic Belt. Biodiversity
*yPH]3HUDOWD 0 \ - + ' :ROI  &RPPHUFLDO DQG&RQVHUYDWLRQ
EU\RSK\WH KDUYHVWLQJ LQ WKH 0RQDUFK %XWWHUÀ\ %LRVSKHUH =DQGHU5+*HQHUDRIWKH3RWWLDFHDH0RVVHVRIKDUVK
Reserve, Sierra Chincua, Michoacán, Mexico. Bryologist environments. Bulletin of the Buffalo Society of Natural
 6FLHQFHV
Revista Mexicana de Biodiversidad, Supl. 85: S100-S105, 2014
DOI: 10.7550/rmb.30953 105
Delgadillo-Moya.- Biodiversidad de musgos

A C

Figura 1. A, tallo seco de Brachymitrion cochabambae (Müll.


+DO  $ .RS FRQ HVSRUR¿WR (O SHULVWRPD HQ OD ERFD GH OD
cápsula se observa con claridad. B, tallo seco de Cryphaea patens
+RUQVFKFRQHVSRUR¿WRVFDVLVpVLOHVHQSRVLFLyQODWHUDO&WDOORV
secos de Fissidens polypodioides Hedw. El tallo de la derecha
OOHYD XQ HVSRUR¿WR DSLFDO FRQ SHULVWRPD URML]R \ OD FDOLSWUD
todavía unida a la cápsula y D, ramas de Neckeropsis undulata
+HGZ 5HLFKDUGWPRVWUDQGRYHQWUDOPHQWHXQHVSRUR¿WR

You might also like