El génesis para empezar a leer literatura

En palabras del docente español, Jesús Maestro: nadie aprende nada leyendo literatura,
quizás vaya a surgir el levantamiento en protesta de algunos de ustedes, estimados
lectores, ya que asegurarán que estoy redactando alguna estupidez, o leyendo alguna
falacia y compartiéndolo con ustedes para que tengan conocimiento, y así puedan salir de
sus zonas erróneas; que los estoy instruyendo equívocamente un tema en la materia que
más amo: Literatura; pero no es así. Al principio, les comentaré, también me indigné (pues
me imagino cómo habrá sido sus reacciones al leer la primera línea), y viví tres meses
indignado por esas afirmaciones que lanzó en uno de sus libros el profesor Jesús Maestro:
El Materialismo Filosófico como Teoría, Crítica y Dialéctica de la Literatura; y recién ayer
(esto es cierto) me propuse investigar esas palabras y ver de quién eran, para que también
fuera esta una carta de presentación en la sección Literatura de esta página; y –volviendo-,
afirmativamente, fueron de un docente que enseña el curso de Teoría Literaria en una
universidad de España. ¡Qué sorpresa me llevé! Y, al leer el libro, mis dudas fueron
totalmente absueltas; ya no continué injuriando a la persona que creí que discriminaba a la
literatura, ya no continué creyendo que la literatura era inservible; ahora me doy cuenta que
para leer literatura se tiene que tener muchos conocimientos previos. ¿Qué quieres decir
con eso, amigo? Pues que uno no se puede lanzar así nomás a leer un libro de literatura,
pues apuesto que encontrarás algún término que no conoces y correrás a otro libro a
investigar qué significa o qué cosa es; o también encontrarás párrafos en donde aluden a
una batalla o a algún conflicto que se presentó en el año en que escribió nuestro autor o
autora el libro, y te aseguro que en ese momento irás deprisa a buscar en algún libro cómo
se desarrolló la batalla, qué cosa tuvo que ver nuestro autor para desarrollar el libro y anotar
en él esa batalla, y varios motivos más. Te comparto esto, querido lector, porque a mí
también me pasó lo mismo. Y, para que sepa más usted de lo que estoy comentando, les
compartiré unos datos sobre la necesidad de estar preparados antes de coger un libro y
enrumbarse hacia un mundo totalmente diferente.

Estamos más que seguros que la literatura es un texto escrito, y que básicamente basta
saber leer para leerlo. Estamos más que seguros que la literatura está envuelta de historias
hermosas, trágicas, misteriosas, que cualquiera con conocimiento de lectura puede leerlo.
Pero la literatura no es solamente un texto escrito, un conjunto de palabras que enlazan una
historia o varias, una enramada de verbos con sustantivos y adjetivos. No. La literatura es
mucho más que eso; y ahora es cuando quiero defender esta postura para que ustedes,
lectores, comprendan.

La literatura es la expresión artística que se basa en el uso del lenguaje, según definición de
la Real Academia Española. Al ser una expresión artística, significa que está
cuidadosamente estructurada, a la vez que posee estética; también, hace referencia a la
acumulación de conocimientos que nos guían al correcto modo de escribir y de leer.

Se considera también a la literatura como la ciencia que estudia las obras literarias, a la
ciencia que se encarga de analizar los escritos de autores, de ver qué quiso decir con tal
historia que escribió, de ver qué nos quiere contar. No es fácil darnos cuenta que un escritor
envolvió tales ideas en una historia, pues este tal vez utilizó un complejo método literario y
hace que nos desviemos y volvamos a la relectura. Sucede muy a menudo con las historias
que tienen los famosos Vasos Comunicantes. Esta técnica literaria–no quiero desviarme del
tema central, solo quiero dar un ejemplo de conocimientos previos para leer literatura- que
muchos escritores utilizan para contar historias en sus obras, requiere de un estudio muy
profundo, pues si el lector decide leer una novela en donde está presente esta técnica, lo
primero que hará es volver a leer, y si lo hace y sigue sin entender dejará el libro y se
sentirá decepcionado de no poder comprender la novela. Ese será un libro de más en su
biblioteca.

Como dije arriba, muchos escritores son exquisitos en técnicas literarias, pero no solamente
de recursos (técnicas) están llenas las novelas, sino también de temas externos que son
independientes de las historias; y me refiero a la política, la sociología, la historia, la
geografía. Mencionemos un libro para que se familiarice usted, lector: Lituma en los andes.
Exitoso libro de nuestro novelista galardonado con el premio Nobel de Literatura en el año
2010. Esta novela, que además es considerada como una de las cien mejores novelas en
español del siglo xx, y que considero como una de mis novelas favoritas, incluye en su
estructura la matanza ocurrida por el grupo terrorista Sendero Luminoso; las leyendas que
se cuentan en la sierra; además que también los lugares en donde ocurrieron estos hechos.
Si el lector es primerizo, no podrá entender la novela, y tendrá que recurrir a investigar
sobre Sendero Luminoso; tendrá que leer sobre el lugar donde provienen los personajes;
tendrá que leer qué significa tal término en quechua, etc.

La literatura es eso: relatos que unen disciplinas independientes de ella. El autor desea
contar la historia que vivió en determinado momento: si fue política, pues lo cuenta; pero él
no sabe si nosotros tenemos conocimiento de esa historia que él vivió. El autor quiere
contarnos sobre un lugar que él visitó y se enamoró de una bella joven, y esta joven es hija
de un rey que vivió durante el Siglo de las luces, y lo escribe; pero él no sabe si sus lectores
conocen qué es el Siglo de las luces. Ellos cuentan porque quieren inmortalizar sus
historias; y hasta el momento perduran, y perdurarán por toda la vida. Sus lectores, o sea
nosotros, somos quienes tenemos que prepararnos para amar esta bella expresión literaria.
Si inician en la literatura, no tienen por qué alarmarse cuando encuentren una palabra
nueva, para eso está el recurso Diccionario, lo encuentran, leen el significado y prosiguen
con la lectura. No hay por qué perjudicarse cuando está presente una historia política, para
eso están los recursos Biblioteca e Internet, vayan e investiguen cuándo y cómo ocurrió esa
historia; estoy seguro que cuando lo lean y luego revisen en su novela, se sentirán
extasiados de ver esa exquisita correlación (a mí me pasó en muchas ocasiones).

Y así, estimado lector, debe suceder cuando emprenda en esta hermosa ciencia (más me
gusta utilizar, creo, el término expresión artística). Los conocimientos previos son de gran
importancia, pues serán de bastante ayuda cuando decida leer una novela, y más cuando
sea de gran complejidad, como lo son Ulises, de James Joyce, o de Vargas Llosa,
Conversación en La Catedral. Créame que tuve que leer bastante información extra para
comenzar a leer esas grandiosas novelas, porque luego de haberlas leído, ahora digo que
son unas de las mejores novelas que se han escrito. Puedo asegurar que, así como ha
leído, usted se convertirá en un próximo escritor, y así aconsejará a que próximos lectores
tengan conocimientos previos antes de iniciar en este bello arte, porque a la Literatura hay
que llegar, y hay que acudir con conocimientos procedentes de otras ramas del saber.