Se dan en el marco de la terapia cognitiva y tienen como finalidad que el
paciente: Sea capaz de identificar los pensamientos que más problemas le están causando. En función del tipo de cambio que se deba realizar, así será escogida la técnica a utilizar Sea capaz de ver aquellas cosas que no está percibiendo. Vea más allá de lo que está percibiendo, lo que le va a permitir modificar, como ya se ha comentado con anterioridad, algunos de los principales errores o distorsiones cognitivas. Logre que el paciente desarrolle un conocimiento más valido, es decir, que dote a sus pensamientos, supuestos o creencias de un soporte empírico. Deba convertir sus ideas negativas en hipótesis, es decir, hipótesis con las que debe trabajar, siguiendo la metáfora del ser humano como un científico. Introduzca la duda frente a la certeza. Resumen: Ayudar al paciente a buscar evidencia que contrarreste las ideas negativas. Ayudar al paciente a que busque puntos de vista alternativos y que introduzca la duda frente a la certeza. Que el paciente sea capaz de trabajar, detectar y, por tanto, modificar, sus principales errores cognitivos. DESCRIPCIÓN Ofrecer psicoeducación: Ejemplo: dar información sobre la seguridad de los directa ascensores a un paciente con esa fobia Definir los términos Ejemplo: preguntarle al paciente, “¿cómo definiría ‘fracaso’ (análisis semánticos) o ‘éxito’?” Descenso vertical/flecha descendente: Preguntar, “¿qué significaría (qué sucedería, por qué sería un problema) si X ocurriera?, ¿qué ocurriría después? Y que significaría (qué sucedería, por qué sería un problema) Reestructuración cognitiva: Incluye ciertos elementos o subtécnicas que buscan encontrar los fallos en el procesamiento de la información del paciente, y que le permitirán dar cuenta de esos errores para luego poderlos modificar. Se utiliza un debate tipo socrático: Un Dialogo Socrático es la forma más popular del método socrático. En este método, los participantes intentan investigar de un modo más o menos estructurado la verdad y el valor de sus opiniones, con la intención de responder a las preguntas elegidas por ellos mismos. El material de la investigación es su propia experiencia, tanto si se trata de una experiencia que han vivido aquí y ahora o de algo memorable que les sucedió en el pasado. Reducción al absurdo: ¿Son absurdas las implicaciones del pensamiento del paciente? (i.e., “Si estoy soltero, quiere decir que no me quiere nadie; toda la gente que está casada estuvo soltera antes; por tanto, a la gente casada no la quieren”) Mantener un registro diario: Hacer que el paciente lleve un registro de conductas/ acontecimientos que confirman o desconfirman un pensamiento Negación de los problemas: Hacer que los pacientes hagan una lista de por qué una situación no es un problema, más que las razones por las que es un problema Re atribución: ¿Se pueden considerar otras causas de una situación? (i.e., provocación, carencia de conocimiento o preparación, dificultad de la tarea, carencia de guías claras, etc.) Si es así, ¿puede el paciente reatribuir parte de la responsabilidad de la situación/ acontecimiento a esas causas? Actuar “como si”: Primero, con juego de roles y luego en situaciones reales, hacer que el paciente actúe como si no creyera en sus pensamientos negativos Comprobar predicciones: Hacer que el paciente haga una lista de predicciones específicas para la próxima semana y haga un seguimiento de los resultados Luchar contra la sobre generalización: Preguntar al paciente, “¿sólo porque X haya ocurrido, significa que es inevitable que suceda?” Técnica De Inoculación De Estrés: La inoculación contra el estrés es como una especie de vacuna que nos enseña cómo afrontar y relajarnos ante una amplia variedad de experiencias estresantes. El entrenamiento incluye aprender a relajarse utilizando la respiración profunda y la relajación muscular diferencial y rápida, de tal forma que cada vez que se experimente ansiedad, dónde y cuando sea, uno pueda relajar la tensión. El primer paso es elaborar una lista personal de situaciones estresantes para nosotros y ordenarla desde los ítems menos estresantes hasta los más estresantes. Una vez elaborada aprenderemos a evocar cada una de estas situaciones en la imaginación y a relajar la tensión mientras se visualiza claramente la situación estresora. Cuantas más situaciones mejor y cuantos más pensamientos de afrontamiento de estrés podamos utilizar como alternativa para contrarrestar los antiguos pensamientos automáticos ansiógenos mucho mejor. Por último, lo practicaremos en situaciones reales para poco a poco conseguir la total inoculación. Entrenamiento en autoinstrucciones: Creado por Meichenbaum, el entrenamiento en autoinstrucciones se basa en el papel de éstas sobre la conducta. Se trata de las instrucciones que con las que guiamos nuestra propia conducta indicando qué y cómo vamos a hacer algo, las cuales están teñidas por las expectativas hacia los resultados a obtener o a la propia eficacia. Determinadas problemáticas tales como una baja autoestima o percepción de autoeficacia pueden producir que la conducta se vea perjudicada y no pueda realizarse con éxito e incluso evitarse. Con esta técnica se pretende ayudar al individuo a que sea capaz de generar autoverbalizaciones internas correctas, realistas y que le permitan llevar a cabo las acciones que desea realizar. Entrenamiento en resolución de problemas: El entrenamiento en resolución de problemas es un tipo de tratamiento cognitivo-conductual a través del cual se pretende ayudar a los sujetos a hacer frente a determinadas situaciones que por sí mismos no son capaces de solucionar. En este tipo de técnica se trabajan aspectos como la orientación hacia el problema en cuestión, la formulación del problema, la generación de posibles alternativas para solucionarlo, la toma de una decisión respecto a la más apropiada y la verificación de sus resultados.