Es una institución jurídica, regulada por el Derecho procesal,
mediante la cual los órganos a los que el Estado tiene encomendada la función jurisdiccional resuelven los diferentes conflictos de intereses relevantes en el plano jurídico que se producen en cualquier forma de convivencia humana. El propio carácter social de la persona lleva consigo la existencia de una conflictividad entre los miembros de la sociedad que debe ser regulada por el Derecho. Cuando las personas que han generado el conflicto no lo resuelven de forma voluntaria (a través de un arreglo amistoso o transacción, o por medio del sometimiento al arbitraje), se hace necesaria su regulación coactiva que se lleva a cabo a través del proceso, al que también se denomina pleito, litigio, juicio o lite.E El proceso se inicia con una petición a los tribunales realizada por las partes o litigantes, petición que de acuerdo con el lenguaje jurídico se denomina pretensión, y que el órgano jurisdiccional actúa o deniega según parezca o no fundada en Derecho. Los sujetos que intervienen en el proceso son tres: el que hace la reclamación o formula la pretensión (llamado actor o demandante), el sujeto a quien se dirige la pretensión (que es el demandado) y el órgano jurisdiccional que decide si da la razón o no al demandante, decisión que se impone de forma coactiva a las partes. Este esquema es el propio de los procesos civiles, aunque constituye el esquema típico, reproducible de una forma fácil en otros órdenes jurisdiccionales (sobre todo en los procesos ante los tribunales contenciosos administrativos y laborales). El proceso penal, en cambio, tiene un desarrollo distinto pues, por lo común, es el Estado quien se encarga de alentar la persecución del delito e incoar el correspondiente proceso, si bien, existen algunos delitos que sólo son perseguibles a instancia de parte, requiriendo denuncia del perjudicado, lo que hace que la aludida bipolarización demandante-demandado se reproduzca aquí también, salvando las distancias. Lo que en el proceso civil es el demandado, en el proceso penal se denomina reo. El demandante sería aquí el denunciante o el propio Estado. Y lo que en el proceso civil es la demanda, en el penal es la acusación. El proceso se compone de una pluralidad de actos encadenados entre sí, de modo que los actos anteriores justifican y son requisito de validez de los posteriores. Este encadenamiento se denomina procedimiento. El proceso civil comienza con la demanda, en la que el demandante expone los hechos y los argumentos jurídicos en los que basa su pretensión. A la demanda contesta el demandado, que puede observar una de estas situaciones: allanamiento, si está de acuerdo con lo solicitado por el demandante y se allana a cumplir lo que éste le exige; oposición, si ocurre lo contrario, en cuyo caso formulará excepciones, es decir, argumentos que tienden a contrarrestar o quitar eficacia a lo que el demandante propone; por último, cabe la reconvención, que supone que el demandado se convierte a su vez en demandante y contesta a la demanda planteando a su vez otra demanda contra la parte opuesta. A continuación viene la fase probatoria, en la que cada una de las partes propone las pruebas que se quiera hacer valer (confesión, testimonio, pericia, documentos, inspección ocular del juez y prueba de presunciones). El procedimiento termina con la sentencia, que dará la razón a quien la tenga y se pronunciará también sobre quién tiene que soportar las costas del procedimiento. PROCESO: conjunto de actos jurídicos coordinados y sistematizados que se desarrollan con la finalidad de alcanzar un fin que es la solución al conflicto de interés por medio de la decisión judicial. El proceso termina cuando se obtiene una sentencia definitiva o puede terminar de forma distinta a la sentencia definitiva. LA COMPETENCIA CONCEPTO DE COMPETENCIA Hay autores que indican que la competencia es una porción de la jurisdicción, otros que es un agregado, y otros al igual que nosotros que es una limitante, la competencia se compone de aquellas disposiciones del orden legal que van a determinar de que asunto conoce un juzgado. El concepto de competencia responde a, la función jurisdiccional la cual tiene que sujetarse a las limitaciones legales que mejor respondan a las necesidades públicas, fijando a cada órgano jurisdiccional un número tasado de facultades para poder desenvolverse jurídicamente. La característica de la competencia es establecer limites al ejercicio jurisdiccional, o como se decía: “la competencia es la medida de la jurisdicción”. La competencia suele ser fijada en ciertos casos en atención a las personas que requieren los servicios jurisdiccionales y si no a las personas en sí, así por ejemplo: si se trata de deslindar responsabilidades a funcionarios públicos, por delitos oficiales, al igual de si el problema consiste en que se les retire a ciertos funcionarios la traba constitucional (Fuero) y puedan ser acusados por delitos del orden común, la competencia incumbe al gran jurado. Se llama competencia de un tribunal o de un órgano jurisdiccional el conjunto de las causas (procesos y procedimientos) en que puede ejercer, según la ley su jurisdicción, es decir sus facultades consideradas dentro de los límites en que le son conferidas. CAUSA QUE DETERMINAN LA COMPETENCIA (Función, territorio, materia, cuantía, turno) A QUO!PRIMERA INSTANCIA A QUEM! SEGUNDA INSTANCIA POR RAZÓN DE LA FUNCIÓN: hay jueces de primera instancia que conocen desde el escrito de la demanda hasta que se dicte la sentencia definitiva y se ejecute esta. Es un órgano unipersonal ya que tiene un solo titular (juez) en la practica para hacer referencia a un juez de la instancia se usa A QUO Hay tribunales de segunda instancia a los que se denominan salas y a los que van a conocer de los motivos de inconformidad de las partes respecto de las resoluciones dictadas en primera instancia. Es un órgano colegiado ya se integra de tres magistrados y sus resoluciones se toman por mayoría o unanimidad. A los de segunda instancia se les llama AD QUEM POR RAZÓN DE TERRITORIO: los tribunales del DF. Conocerán de todos los asuntos que se generen en su territorio. En ocasiones para un mejor funcionamiento de los tribunales se fracciona su territorio y se crean los llamados distritos judiciales tal como sucede en el edo de México donde su territorio se ha fraccionado en distritos judiciales y así tenemos el distrito judicial de Tlalnepantla, Ecatepec, Toluca. Ya dentro de un distrito se vuelve a fraccionar el territorio y así tenemos el distrito judicial de Naucalpan de Juárez, Atizapan de Zaragoza, Tlalnepantla de Baz. Pertenecen al distrito judicial de Tlalnepantla. En el DF. No existe esta división de territorio por lo que se habla de un solo distrito judicial. POR RAZÓN DE LA MATERIA: los juzgados de lo civil conocerán de los asuntos de jurisdicción voluntaria cuyo conocimiento no corresponda a otro juzgado, de los asuntos de relativos a propiedad o derechos reales, cuando se supere el monto de aquellos que deben ser resueltos por los juzgados de paz en materia civil. De los demás asuntos cuyo monto supere la cuantía de aquellos que deben conocer cuando se trate de derechos reales. Los juzgados de lo penal conocerán de todos aquellos asuntos cuyo delito merezca pena privativa de libertad superior a los dos años de prisión. Los juzgados de arrendamiento inmobiliario, conocerán de todos aquellos asuntos que se susciten en materia de arrendamiento, destinados a casa-habitación, comercio o industria. Los juzgados de lo familiar, conocerán de todos los asuntos relativos al matrimonio y su nulidad, divorcio, el régimen de bienes en el matrimonio, rectificación de actas en el registro civil, de todo lo relativo a filiación, patria potestad, estado de interdicción, de lo relativo a patrimonio de familia, de los juicios sucesorios, parentesco y todos aquellos asuntos que afecten a los menores de edad. Juzgados de lo concursal, son aquellos que conocen de lo relativo a concurso, quiebra o suspensión de pagos (actualmente existe la ley de concursos mercantiles que es federal y a virtud de lo cual los anteriores asuntos, actualmente conoce los juzgados de distrito en materia civil.
En el DF. Solo existe ya un juzgado de lo concursal
Lectura 83 PRIETO SANCHÍS, Luis, Neoconstitucionalismo y Ponderación Judicial, en CARBONELL, Miguel (Ed.), Neoconstitucionalismo(s), Pp. 123-137 - Unlocked