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Autores:
Ciudad de la Habana
Curso 2004-2005
ÍNDICE
Introducción
Capitulo I Corrientes teóricas del siglo XIX que tributan al desarrollo de una Sociología
de la familia
Conclusiones
Bibliografía
INTRODUCCIÓN
La familia siempre ha sido una entidad social, el tabú del incesto es la primera regla
elaborada por los humanos que marca, según Levi Strauss, el paso de la especie
animal a su condición humana, de la naturaleza a la cultura, que es decir la sociedad.
Y el tabú del incesto es una regla que determina la aparición de la familia. Por tan solo
citar un ejemplo dentro de las múltiples transformaciones que se produjeron al interior
de los diferentes grupos, de índole cultural y que propiciaron la formación de una
relación de unidad entre sus miembros sobre la base del compromiso social normativo,
filiaciones, herencias simbólicas de generaciones pasadas entre otras
transformaciones en el orden relacional interno y externo jugaron un papel
fundamental a la hora de analizar la formación de la familia.
Los estudios de familia cuentan con una importancia que trasciende los intereses de
explicar la dinámica y funcionamiento de la familia, a través de los estudios de esta
relevante parte de la sociedad se pueden establecer conexiones entre otras
estructuras con un mayor nivel de complejidad, por ejemplo los estudios de mercado,
los estudios basados en el consumo de medios, en la medida que el sistema
mantenga una interacción con la familia este podrá tener siempre una medida de su
reproducción y con estos fines muchos científicos de todas las épocas y ramas de la
ciencia han intentado comprender los lazos que unen esta forma de organización de la
vida con el resto de la sociedad comprendiéndola de diversas formas en la evolución
de la ciencia y la historia misma. Entre esos científicos que se han destacado en el
estudio de la familia tienen un lugar cimero los sociólogos que han tratado de legitimar
sus construcciones conceptuales a través del entendimiento de la estructura interna de
la familia así como de su rol desde el punto de vista de la socialización del individuo, y
de las formas de interacción que se dan en su interior.
Las normas de grupo que le son propias a la familia actúan como prescripciones de
conducta para sus miembros con un efecto modulador fortalecedor o debilitador, por
otra parte la familia puede funcionar como moduladora y selectora de acciones y
actitudes de sus miembros orientadas por la sociedad.
Pero no solo la familia establece sus normas de interacción, la sociedad marco influye
decisivamente en los comportamientos de los miembros integrantes, la división social
y sexual del trabajo, al igual que diversas esferas de la misma como la ciencia trazan
nociones de diferencia entre los miembros de la familia, una de las construcciones
sociales más evaluadas en esta época es la relación de igualdad o inferioridad entre el
hombre y la mujer en la relación conyugal.
Por ello el presente trabajo dando continuidad a esas diversas polémicas teóricas
sobre la familia se ha propuesto como Objetivo General:
Los objetivos antes enunciados pretenden ser alcanzados dando respuesta a dos
preguntas que forman el marco problematizador de la presente indagación:
Ø ¿Cómo han enfocado las diferentes corrientes sociológicas del siglo XIX y XX las
relaciones entre el hombre y la mujer en la familia?
Debido a que el trabajo de curso se basa en el análisis del discurso del pensamiento
clásico y contemporáneo construido por la sociología de la familia es innegable que
una de las fuentes principales para el logro de este fin es la utilización de textos para
emplear el método análisis documental y llegar a conclusiones acordes con el nivel de
seriedad del asunto que nos ocupa. Se logró identificar bibliografía en diferentes
centros de documentación, tales como: la biblioteca nacional José Martí, la biblioteca
de las facultades tales como la Facultad de Comunicación, la Facultad de Psicología y
en Centros como San Juan de Letrán, además de la facilitada por la tutora y las que
teníamos en las bibliotecas personales. En estos lugares se encontró bibliografía
primaria como Economía y Sociedad, las obras de Talcote Parsons, Apuntes para una
Teoría de la Acción, Family and the companionchip, el manual de Teoría Sociológica
Contemporánea de Ritzer, las algunas obras de Carlos Marx y de Federico Engels El
Origen de la Familia, la Propiedad Privada y el Estado. Dentro de las fuentes
secundarias se encentran consultas en Internet, artículos de Gerardo Pastor, Las
Nuevas Sociologías de Philippe Curcuff, La Familia y las Ciencias Sociales, entre
otros.
ü El lenguaje denso desarrollado por algunos de los autores, por ejemplo Talcott
Parsons y en alguna que otra medida algunos de los autores del interaccionismo
simbólico.
Capitulo I Corrientes teóricas del siglo XIX que tributan al desarrollo de una
Sociología de la familia
En toda su interpretación el mundo toma como punto de partida las ciencias naturales,
surgiendo como reacción a la filosofía tradicional. La ciencia como el único
fundamento posible de la vida humana individual y social. El positivismo acompaña y
provoca el nacimiento y la afirmación de la organización técnico-industrial de la
sociedad, fundada y condicionada por la ciencia. Expresa la esperanza, los ideales y el
optimismo, que han provocado y acompañado esta fase de la sociedad moderna. El
hombre ha creído, en esta época, haber hallado en la ciencia la garantía infalible de su
propio destino. Por esto, ha rechazado, por inútil y supersticiosa, toda alegación
sobrenatural.
El positivismo puede ser clasificado como una de las corrientes que legaron una
explicación sociológica de la familia en el siglo XIX, gracias a figuras como Frédéric Le
Play (aunque sus aportes a la Sociología han sido opacados) y Emile Durkheim; a éste
último se le ha considerado incluso, como el representante más avanzado de la
corriente positivista.
1.1.1 Reflexiones teóricas de Frédéric Le Play y Emile Durkheim en torno a la
familia y su relación con el matrimonio y el parentesco.
Aunque la figura de Le Play ha sido marginada del grupo fundador de las ciencias
sociales, 1 éste pensador, por sus innumerables innovaciones básicas para el futuro
de la Sociología, se ubica entre los principales ingenieros sociales del siglo XIX con
Saint Simon, Owen, Comte, etcétera.
Le Play tiene una posición tradicional de la realidad, posición ésta que le hace tomar
partido respecto al papel que le asigna a la mujer, presentando gran similitud con el
pensamiento de otros autores del siglo XIX; sin discrepancias ni posturas innovadoras,
en definitiva, sin romper con el marco cultural dominante. Advertía en los cambios
sociales que se estaban produciendo en esos momentos, un peligro para la posición
de la mujer dentro y fuera del hogar.
Le Play concebía a la sociedad como un agregado de familias y vio como una salida a
la inestabilidad revolucionaria la recuperación del protagonismo público de la familia,
como organización social. De esta manera, le otorgaba a esta institución un carácter
instrumental, al servicio del orden social, con discriminación de derechos y funciones
entre los sexos, con una organización autoritaria y jerárquica.
Le Play distingue 3 tipos de familias: patriarcal, inestable y troncal, cada una con su
peculiar sistema de sucesiones que inciden tanto en la situación de la familia como en
la propiedad. Crítica la familia patriarcal y la familia inestable, por sus regímenes de
sucesiones, donde el padre, el poder supremo (después de Dios),
se encuentra en desventaja con respeto a los hijos en cuanto a la transmisión
hereditaria. Sin embargo, sitúa a la familia troncal como un modelo de orden social y
estabilidad, viéndola como el tipo de familia esencial para el restablecimiento del
sistema tradicional. Pero la piedra angular de su preferencia hacia este tipo de familia
estaba en el afianzamiento sólido de la autoridad en relación con su capacidad para
determinar la suerte de su descendencia. En realidad la familia troncal de Le Play es
una modalidad de la familia patriarcal, el término troncal se nombra en relación al
papel que el derecho de primogenitura ejercía en la conservación de la familia.
La familia troncal tiene como centro material el hogar, y como centro simbólico a la
mujer. El sistema necesitaba de una mujer centrada, exclusivamente, en el hogar. A la
mujer le correspondía el papel central en la vida doméstica de la familia troncal, básica
para su estabilidad y pervivencia.
Mientras que Le Play produjo su obra en los inicios del positivismo, la de Durkheim es
un producto de fines del siglo XIX y principios del XX. Emile Durkheim, nació el 15 de
abril de 1858, en Espiral, Francia. Justamente, el hecho de ser francés va marcar
pautas importantes dentro del desarrollo y los matices de su obra; pues los últimos 25
años del siglo XIX en Francia, se caracterizaron por la entrada del capitalismo en la
fase imperialista, con los fenómenos propios de ésta, de la crisis económica, política y
espiritual. El sistema social y económico no podía garantizar su propia existencia
estable y se encontraba bajo la constante amenaza de los movimientos
revolucionarios de las masas trabajadoras. Los círculos clericales y monárquicos
luchaban contra los republicanos burgueses tratando de restaurar el régimen social
reaccionario. En consecuencia, Durkheim vivió un periodo de gran expansión
económica e industrial del que Francia fue protagonista y presenció toda la vorágine
desatada por las fuerzas productivas en desarrollo y sus consecuencias. Desde muy
temprano, se interesó por la Sociología, por tener referencias tan cercanas (Saint
Simon y Comte, ambo franceses). Tanto es así, que se le considera uno de los
principales fundadores de la teoría sociológica moderna. Sus fuentes ideológicas-
teóricas de la actividad científica y pedagógica fueron las concepciones de la
Ilustración y, en particular, las de Montesquiu, Condorcet y Rousseau, así como la de
Saint Simon y Comte.
Su obra La división del trabajo social es, uno de los tantos análisis que hace Durkheim
para tratar de dar esa imagen de la sociedad capitalista como un todo lo más armónico
posible. El concepto división del trabajo le permite acentuar el aspecto cooperativo del
sistema social e ignorar otros. La división del trabajo, según él, indica el grado en que
las tareas se han especializado, y los cambios en esta división han tenido enormes
implicaciones para la estructura de la sociedad, lo cual refleja en los diferentes tipos de
solidaridad: mecánica u orgánica. En esta obra, Durkheim pretendía ignorar las
consecuencias conflictivas de la división del trabajo al establecer diferencias
jerárquicas entre los actores sociales que dan a unos la potestad de mandar y oprimir
y a otros, la necesidad de obedecer y ser oprimidos.
5 Para Durkheim esta sociedad presenta una estructura social indiferenciada, con poca o ninguna
división.
En este libro, Durkheim expresa su visión acerca del papel trascendental que juega la
división del trabajo en la cohesión y equilibrio de las sociedades modernas. En este
sentido, introduce el concepto de solidaridad conyugal, con el objetivo de ejemplificar
la validez de este postulado en el plano de las relaciones entre hombres y mujeres. La
solidaridad conyugal, según entiende, dependía de diferencias existentes entre los
sexos, que en vez de oponerse y excluirse, se complementan, siendo la división
sexual del trabajo la fuente de solidaridad conyugal.
La división del trabajo condiciona las diferencias de los individuos que desarrollan sus
dotes y talentos individuales, personales, de acuerdo a su rol profesional. Ahora cada
individuo es personalidad. La conciencia de cada uno depende de otro y que todos
están vinculados por un sistema único de relaciones sociales, creadas por la división
del trabajo, suscita el sentimiento de dependencia mutua, de solidaridad, de sus lazos
con la sociedad.
Pero, incluso en esta esfera de acción, la mujer aporta su propia naturaleza, y su papel
sigue siendo muy especial, muy diferente del papel del hombre. Además, si el arte y
las letras comienzan a volverse cosas femeninas, el otro sexo parece abandonarlos
para dedicarse más especialmente a la ciencia. Podría ocurrir pues, muy bien que este
retorno aparente a la homogeneidad primitiva no fuera otra cosa que el comienzo de
una diferenciación. Por lo demás, esas diferencias funcionales se hacen materialmente
sensibles por las diferencias morfológicas que la determinan. No sólo la talla, los
pesos, las formas generales son muy desemejantes en lo hombres y en las mujeres,
sino que con el progreso de la civilización, el cerebro de los dos sexos se diferencia
cada vez más.6 En relación al análisis de las causas que determinan la división sexual
del trabajo Durkheim es inconsecuente con su sociologismo, dado que le atribuye al
factor biológico el papel esencial.
7Ibidem
• El suicidio (1897)
El problema suicidio, al cual Durkheim dedicó toda una serie de monografías, atrajo su
atención por muchas razones. Era un grupo de factores bien delimitados y fáciles de
determinar.
9 Ibidem
Según sus investigaciones, en los países donde son numerosos los divorcios, los
hombre casados tienen un menor inmunidad contra el suicidio, que donde el
matrimonio es indisoluble. Encuentra así que por el contrario, en este tipo de países,
las mujeres tienen un mayor coeficiente de preservación. Es decir, que cuanto más
practicado es el divorcio, más favorecida resulta la mujer con relación al marido.
Porque el amor es, en nosotros, un hecho más mental que orgánico lo que el hombre
busca en la mujer no es simplemente la satisfacción de sus deseos genésicos. Si esta
inclinación natural ha sido el germen de toda evolución sexual, se ha complicado,
progresivamente, con sentimientos estéticos y morales (...) Al contacto de estos
elementos intelectuales, el hombre se ha libertado parcialmente del cuerpo (...) Las
razones morales le sugieren tanto como la intelectuales. No tiene ya la periodicidad
regular y automática que presenta en el animal. En cualquier época puede despertarlo
una excitación psíquica (...) Pero precisamente porque estas diversas inclinaciones,
así transformadas, no están directamente colocadas bajo la dependencia de
necesidades orgánicas les es indispensable una reglamentación social. Puesto que no
hay nada en el organismo que les contengan, es preciso que sean contenidos por la
sociedad. Tal es la función del matrimonio. Regula toda esta vida pasional (...)10 Por
lo tanto, el divorcio implica un debilitamiento de la regulación matrimonial.
A pesar de los intentos de instaurar una sociedad con una clase media única, en la
primera mitad del siglo XIX la clase obrera fue emergiendo como una fuerza social
independiente, diferente completamente a la clase burguesa. Al ser instauradas las
nuevas formas de producción capitalistas, se logró reconocer la explotación a la que
eran sometidos los obreros en las largas jornadas de trabajo. Esto trajo consigo la
aparición de concepciones que pretendían mejorar las condiciones de la clase obrera.
Con el surgimiento de estas dos clases antagónicas (proletarios y burgueses)
comienza a desarrollarse el marxismo, a través de sus principales figuras Carlos Marx
y Federico Engels . Dedicaron sus vidas a estudiar los mecanismos que la sociedad
tenía para lograr una superación del movimiento obrero.
En fin se puede plantear que el marxismo surgió en la década de 1840, su cuna fue la
lucha liberadora de la clase obrera. El surgimiento del marxismo representó un gran
viraje en la ciencia de la naturaleza y de la sociedad, debido a sus concepciones
revolucionarias y racionales, ya que los planteamientos que comienza hacer el
marxismo van a estar basados en ideas progresistas y de cortes empiristas.
Federico Engels nació en Barmen en 1820, realizó una fuerte crítica a las condiciones
en que se desarrollaban las sociedades capitalistas. Participó activamente en
actividades políticas e intelectuales. Fundó en colaboración con Carlos Marx la teoría
marxista. Desde su juventud se sintió atraído hacia la lucha por la transformación de
las relaciones sociales que imperaban, debido a que conocía muy de cerca la situación
a la que la clase obrera de Inglaterra era sometida, ya que su padre lo envió a ese
país para que se dedicara e estudios comerciales. Así comprendió la situación
económica del proletariado y la falta de derechos políticos que tenían. Como
consecuencia de sus estudios surgieron diversos trabajos, entre ellos, “La situación de
la clase obrera en Inglaterra” (1845). En ellos Engels presenta una explicación
profunda de la situación presente y el futuro del proletariado, mostró que el
proletariado es una clase que lucha por su total liberación.
Carlos Marx nació en Trévesis en 1818. Su carrera periodística lo ayudó a ampliar sus
conocimientos sobre cuestiones políticas. Posteriormente viajó a París, donde
continuó con sus ideas revolucionarias. Allí conoció a Engels y se hicieron grandes
amigos y colaboradores. Engels comentó: “Nuestra total coincidencia en todos los
campos teóricos se hizo manifiesta...y nuestra obra conjunta data de aquel tiempo” .
Marx inicia así sus escritos en los “Manuscritos económicos y filosóficos” (1884), “Las
Tesis sobre Feuerbach” y “La Ideología Alemana” (1845-1846). En 1845 se exiliaron a
Bruselas y allí se unieron a una organización de trabajadores radicales, donde se les
pidió escribir un manifiesto teórico oficial, de ahí comenzó la elaboración del Manifiesto
del Partido Comunista (1848). Con este escrito demostraron el carácter revolucionario
de sus propuestas y su capacidad de crear el programa que representaría
posteriormente a un partido.
Esta corriente considera al Comunismo como la fase superior del desarrollo humano,
en el cual la lucha de clases no existe, por lo tanto las relaciones de producción están
basadas en la igualdad. La doctrina marxista fue apoyada en su época por muchos y
era considerada como ideología del partido y del movimiento obrero. Pero no solo en
su época, sino también en las venideras, el marxismo tuvo muchos seguidores como:
Rosa Luxemburgo, Trotsky, Luckács, Gramsci y fuera del contexto europeo, se
pueden mencionar a Mao, Ho Chi Minh, Mariátegui, el Che, Fidel, entre otros.
El marxismo fue una de las tantas respuestas de la época moderna en el siglo XIX a
las consecuencias que produjo el capitalismo, fue una forma de reflexionar sobre el
mundo más dinámica. El marxismo era una ideología social del conflicto. Pero en su
apasionado análisis de todos los problemas, refiriéndolos a cuestiones de fundamento
económico, organización de clases, conflicto de clases, y en su intento de reducir
todos los fenómenos (arte, música, literatura, filosofía, religión, Estado, etc.) a formas
dependientes de la economía, desempeñó un gran papel por el hecho de llamar la
atención de los científicos modernos sociales sobre estos fundamentos.
Lenin planteó: “el genio de Marx estriba precisamente, en haber dado solución a los
problemas planteados antes por el pensamiento avanzado de la humanidad” .
Marx y Engels fueron ante todo hombres de su época, y se ubicaron a partir de la
realidad de aquellos países que mayor desarrollo habían alcanzado en el capitalismo,
por esa misma razón han trascendido hasta nuestros días.
Ellos dedicaron la mayor parte de su vida al auge que tuvo el capitalismo en las
sociedades modernas. Se centraron en las pésimas condiciones en las que se
encontraba el proletariado. A raíz de esto se adentraron de manera profunda al tema
de los sexos.
Marx y Engels se iniciaron en los estudios de familia a raíz de la inserción que tuvo la
maquinaria en las mujeres como trabajadores asalariados “la historia de la familia se
explica a partir de la incidencia que el factor material ejerce sobre las relaciones
familiares. El desarrollo de la tecnología, la técnica, las formas de apropiación, las
relaciones de poder y el derecho son razones que sirven para explicar la evolución de
la familia” Las investigaciones del marxismo hicieron mucho énfasis en el enfoque de
clases, estableciendo distinciones entre la familia burguesa y la proletaria.
Todo este análisis lo explican muy bien en “La situación de la clase obrera en
Inglaterra”. Engels hace un análisis exhaustivo de las incidencias del sector industrial
en la vida familiar y de las difíciles condiciones que tenían las obreras en las
industrias.
Según los datos por Engels consultados la mayoría de los obreros de las fábricas son
mujeres, lo cual demostraba la incorporación del sexo femenino a la actividad
industrial, poniendo en un segundo plano a los hombres.
A Engels también la preocupan los cambios que se están produciendo en las familias
debido a las nuevas posiciones entre hombres y mujeres, ya que estas últimas son las
que en muchos casos mantienen económicamente a la familia. “(...) La mujer es quien
mantiene a la familia, el hombre se queda en la casa, cuida a los niños, hace la
limpieza y cocina”
A Marx le llamó mucho la atención la obra de Morgan, al morir dejó unas notas que
Engels fue capaz de ordenar, aportar y publicar bajo el título de “El origen de la familia,
la propiedad privada y el Estado” (1887). Según Engels la teoría de Marx tiene como
factor decisivo la producción de los medios de subsistencia y la reproducción de la
especie humana a través de la familia.
Engels plantea que la subordinación a la que las mujeres eran sometidas, no era
resultado de su constitución biológica sino de raíces históricas que conllevan a un
orden social, es decir, para Engels el que las mujeres fueran esclavizadas no tenía
nada que ver con que su constitución fuera débil por nacimiento sino que la tradición
histórica ha legitimado que para que el orden reine en la sociedad la mujer debe estar
subordinada al sexo masculino.
Plantea Engels que en las sociedades Occidentales la familia está compuesta por la
pareja y su procreación, normalmente comparten un hogar común, el cual es
patriarcal, ya que la autoridad recae en el cabeza de familia. Dentro de esta institución
la mujer que no trabaja es considerada como propiedad del esposo.
Engels se apoya mucho en Morgan y en sus estudios acerca de los tipos de familias
existentes en la humanidad: la familia consanguínea (existe una promiscuidad sexual
entre hermanos y hermanas, los padres e hijos quedan excluidos), la familia punalúa
(prohibición del comercio sexual se extiende a los hermanos y hermanas), la familia
sindiásmica (el hombre vive con una sola mujer, aunque la poligamia y la infidelidad
ocasionales sean un derecho para el hombre) y la monogámica (se funda en el
predominio del hombre, su fin expreso es el de “procrear hijos cuya paternidad sea
indiscutible esta paternidad se exige porque los hijos serán los herederos directos de
los bienes de su padre” . Se diferencia de la anterior por lazos conyugales con mucha
mayor solidez. Solo el hombre puede romper estos lazos y repudiar a la mujer. Fue la
primera forma de familia que no se basaba en condiciones naturales sino económicas
y sociales).
Estos tipos de familias coinciden con los estadios principales, trasmitidos por el
desarrollo de la humanidad: familia por grupos (salvajismo) en el cual había un
comercio sexual sin trabas, en el que cada mujer pertenecía a todos los hombres y
viceversa. Aquí la descendencia solo podía ser establecida a través de la madre, ya
que no se tenía seguridad de quien fuera el padre. “este designa el reconocimiento
exclusivo de la filiación maternal y las relaciones de herencia que después se han
deducido de él con el nombre del derecho materno”.
Los otros tipos de familias que corresponden a los posteriores estadios históricos son:
la familia sindiásmica (barbarie) y la familia monogámica (civilización). Al surgir la
propiedad privada sobre los medios de producción, el predominio de la mujer fue
sustituido por la familia sindiásmica patriarcal. Esto llevó posteriormente al surgimiento
de la monogamia, en el cual el hombre como propietario de los medios de producción
se convirtió en opresor de la mujer.
Los cambios que se producen entre los sexos posteriormente trae consigo el
establecimiento de un orden social en cuanto al orden familiar se refiere, donde impera
la monogamia histórica. El cambio reside en el nacimiento de la igualdad de la relación
entre los sexos en el matrimonio. Se produce la sustitución de una monogamia
patriarcal a una basada en la igualdad.
.
Marx plantea que la mujer debe de dejar de ser un instrumento de producción para
insertarse en el sistema productivo, pero aclara cuales eran los oficios que debían
asumir las mujeres, es decir, él apoya que la mujer salga de ese mundo que es el
hogar para participar de las relaciones productivas, pero hace diferenciación de los
oficios entre hombres y mujeres.
Engels apoya a Morgan cuando plantea que: “los sistemas de parentesco, son
pasivos, sólo después de largos intervalos registran los progresos hechos por la
familia y no sufren una modificación radical, sino cuando se ha modificado
radicalmente la familia”. Al paso que la familia se mantiene, el sistema de parentesco
se hace más fuerte; y mientras este continúa debido a la costumbre, la familia
sobrepasa su sistema. En el sistema de parentesco americano (y en casi todos los
sistemas), un hermano y una hermana no pueden ser padre y madre de un mismo
hijo.
La segunda mitad del siglo XIX y principios del XX estuvo caracterizada por el
sentimiento de crisis social global que atravesaba la sociedad burguesa. Ese
pesimismo se vio reflejado en todas las esferas de la intelectualidad moderna.
Cada país tuvo sus particularidades.
Es importante señalar que esta Sociología desde sus inicios nació fragmentada entre
Marx y sus seguidores a la par de los que pudiéramos llamar los primeros gigantes de
la corriente sociológica principal de Alemania: Ferdinand Tonnies, Georg Simmel y
Max Weber.
2. Marido – Mujer
3. Padre – Hijo
4. Entre hermanos.
Esas son las más fuertes aunque reconoce otras como la de los hermanos de la
madre, tías primos donde existe una conexión de familia en grupo o sea la familia
puede extenderse como un miembro honorable, como un hijo adoptivo siempre y
cuando cumpla con sus deberes como miembros.
El rol de la madre/mujer es la máxima impresión de la comunidad. ¿Qué es la
comunidad? Lo irracional primitivo, afectivo, natural que responde a una convivencia
de mutuo beneficio. Reconoce la existencia de desigualdades de sexo, edad, fuerza
física y morales en cada una de las relaciones sociales en comunidad y como principal
comunidad a la familia nuclear con hijos, madre y padre y como nexos principales al
parentesco y al matrimonio.
El parentesco es una condición esencial para que todos los miembros de esa familia
puedan gozar de los privilegios comunales. En la relación matrimonial el instinto sexual
o la mera relación sexual no implica duración, se necesita una mutua habitación, se
necesita voluntad de unión para procrear y voluntad para seguir juntos a un con la
ausencia de hijos. En Tonnies es fuerte la idea de la religión en el matrimonio, lo
reconoce como un nexo esencial para que surja la familia y el principal escenario
donde ocurre la necesaria subordinación de la mujer con respecto al hombre. Esa idea
de la religión en el matrimonio, según el autor se debe a que la mujer es la que
necesita creer porque es la que debe orar para que no hayan demonios que
derrumben la unión.
Reconoce que hay matrimonio solo cuando está presente un representante jurídico.
Esta relación marido – mujer junto a las otras dos, está mediada por la existencia de la
reciprocidad y el hábito.
Entre la enorme gama de relaciones sociales que cita entiende por relaciones
naturales aquellas que puedan llegar a convertirse en relaciones sociales tipo,
basadas en la afectividad, la correspondencia de intereses y la irracionalidad. La
familia lo es cuando sus miembros no conviven en relaciones aisladas sino toman
conciencia de su unidad como cuerpo social y plantea que una unidad social que
tenga su base en el compañerismo se concreta mejor que un cuerpo social cerrado.
Este problema es centro para el autor que ve al comercio desmedido como la causa
de la destrucción de la reciprocidad e igualdad que tiene la comunidad, la cual es
sustancialmente anterior a la sociedad: sin comunidad no hay sociedad.
Tonnies evidencia la necesidad de la armonía para lograr una familia y concibe a esta
familia como nuclear por tanto la típica familia moderna con relaciones diferenciadas
entre el hombre y la mujer, donde la supremacía es para el sexo masculino porque es
quien posee la voluntad para ocupar ese lugar. Cuando habla de voluntad establece el
concepto de antinomia conceptual que comprende a la voluntad social como un acto
de voluntad y de razón al mismo tiempo, por eso es el sexo femenino quien carece de
voluntad ya que no tiene la capacidad de raciocinio adecuada.
Dejó una importante huella en la sociología aunque muy cuestionada desde hace
décadas, que fue la creación de las topologías de comunidad (familias) y de sociedad
rescatadas especialmente por Durkheim bajo los nombres de solidaridad mecánica y
orgánica.
En ella las relaciones entre los individuos son dinámicas con una función bien definida
y que tiene que ser cumplida, lograr la unidad en la interacción. Esta unidad se logra
con una correlación de acciones mutas entre los individuos. Para entrar en sociedad –
según Simmel – es necesario que se produzca una generalización pero esto no impide
que cada hombre manifieste su individualidad, se establece una especie de cambio, el
hombre cede un poco de su individualidad al grupo e incorpora un poco de esa
generalización a su individualidad. Estas son las condiciones para una socialización o
sea cuando “la coexistencia aislada de los individuos, adopta formas de cooperación y
colaboración”.3
La familia es una de las más complejas formas de socialización y junto al Estado, a los
sindicatos y a los sacerdocios, constituyen formas de socialización cristalizadas que
según Simmel son las pertinentes al estudio sociológico. En sus dos obras, Sociología,
estudios sobre las formas de socialización y Cultura femenina y otros ensayos realiza
un análisis exhaustivo de las familias patriarcales en el pasado, expresando la enorme
colaboración que lograron a su interior junto a una estructura de interrelación entre sus
miembros. En su opinión la modernidad ha trastornado esta unidad, si bien no realiza
un análisis profundo del parentesco, si ofrece una connotación negativa al matrimonio
si lo tomamos como entrega mutua y total, para el la soledad en esa unión es la que
presenta un carácter sociológico positivo. La intimidad se interrumpe, por muy buena
que esta sea, cuando nace un hijo, por ello algunos matrimonios ven al hijo como la
posible unión y no lo desean, esto es muy común en las familias modernas. Simmel
expresa que para algunos el matrimonio es bueno y para otros es malo, este análisis
se extiende desde aquellos que no tienen hijos, los que si lo tienen y los que están
conformados por un (a) amante.4
La competencia en la familia es algo normal, sui géneris a ella; es una unidad orgánica
que depende del conflicto familiar para sobrevivir y desarrollarse cada miembro de la
familia demuestra constantemente su individualidad. La división social del trabajo es la
primera en poner de manifiesto las diferencias entre los géneros. A la mujer le
corresponde la labor del hogar que es más múltiple pero menos especializada que
cualquier profesión masculina.
Las mujeres pueden trabajar en una profesión masculina pero siempre dándole el
sentido de la intuición, la pasión y el sentimiento por ejemplo como escritora o como
intérprete teatral. Simmel realiza un estudio de elementos esencialmente femeninos
como la coquetería, uno de los puntos donde la mujer es muy buena tanto así que el
hombre se presta sin reservas a este juego sin olvidar su masculinidad y sus
privilegios; ellas son mas ilustradas en aquello a lo cual se sienten unidas, los hombres
son mas relativistas, son pensadores y productores.
3-ver en Sociología, estudios sobre las formas de Socialización de Gerorg Simmel . Ed Espada Calpe,
1939, pp 14
4 ver en Sociología, estudios sobre las formas de Socialización de Gerorg Simmel . Ed Espada Calpe,
1939, pp 82 y pp90
El análisis de la moda dentro de su obra releva su idea de mujer como el sexo débil
que necesita recurrir a lo que está aprobado socialmente un poco para escapar a la
monotonía y a la homogenización de la que han sido objeto y entregarse a la moda
que es cambiante; fundamentalmente Simmel se centra en la cultura para establecer
estas diferencias; según su opinión la cultura es cuando los individuos logran alcanzar
el espirito de objetivación en la historia de la especie humana. Distingue dos tipos de
cultura la objetiva y la subjetiva, la primera es la verdadera, la dominante, la suprema,
y pertenece a los hombres; en cambio la mujer es portadora de una cultura subjetiva
que aportaba algo especifico íntimamente relacionado con el ambiente domestico
donde actuaba; deja claro que la única posibilidad es que realicen algo donde sean
diferentes a los hombres, es decir, en la feminidad, sensibilidad, subjetividad, cuidado
personal etc. Solo a través de la distinción de su sexo la mujer puede ser autónoma.
Simmel aunque enuncia este fenómeno no cree realmente en la posibilidad de esta
autonomía femenina el resultado es que ellas imitan al hombre en todo.
Para analizar cada uno de los fenómenos sociales estableció el concepto de acción
social y con el explico cada aspecto de la vida del hombre, pues la acción social son
las conductas humanas que tienen un carácter subjetivo e individual; subjetivo porque
estas acciones se basan en la voluntad, en una capacidad para la anticipación o la
resistencia, el hombre actúa porque tiene una motivación y no un instinto puramente
mecánico. Individual porque son las acciones de un individuo dirigido a otro u otros.
Con este concepto incluido define a la comunidad y a la sociedad.
No le interesan a este autor solo las relaciones económicas o las sexuales, sino
también las que se establecen entre los hijos. Estas relaciones llegan a tener
significación cuando forman parte de una unidad económica específica: la comunidad
domestica. Dentro de ella la mujer tiene la total supremacía en la casa, la cual se
conserva de otras organizaciones familiares anteriores, pero solo cuando el hombre no
esta y reconoce que la causa principal para esta ausencia es el servicio militar – según
Weber – la comunidad domestica es igualmente extensa en todas sus partes pero
representa de manera excepcional la comunidad económica más universalmente
extendida, en ella el individuo contribuye según sus fuerzas y goza según sus
necesidades.
La casa es el único lugar donde existe una posición común de bienes y donde el
comercio sexual no puede existir, sin embargo existe. El sociólogo refleja que en otras
épocas para evitar contradicciones en las relaciones matrimoniales estas se realizaban
entre familias de una misma clase social. El hombre siempre adquiere los derechos
sexual exclusivos sobre la mujer esté en su comunidad o en la de ella.
La mujer en esta unidad domestica queda renegada al plano de instructora de los hijos
y al cuidado del hogar. El autor introduce el concepto de autoridad para explicar las
diferentes relaciones de la sociedad, en el caso de su teoría sobre el poder de la
familia se explica desde el concepto de autoridad patriarcal, como uno de los tipos de
dominación desde el cual se explica las diferencias entre sexos. Acepta que la
existencia de la subordinación en la familia ocurre de manera natural y esta existe
porque es necesario y organizativa para lograr la estabilidad familiar. Se produce una
estratificación entre el hombre y la mujer basada en el prestigio (status) y en el poder.
Weber resume que la familia es el núcleo de las relaciones de dominación
tradicionales y más específicamente de dominación patriarcal.6 Los teóricos de la
sociología posteriores, especialmente los norteamericanos, consideraron que la teoría
marxiana atacaba a su propia sociedad, por ello Weber era una opción atractiva, sus
opiniones políticas adoptaron una forma muy científica y académica, muy distinto a
Marx, quien en “El Capital” por ejemplo, llamo a los capitalistas “Vampiros” y “Hombres
Lobos”.
Además, sus estudios de acción social Inter. – individuales fueron también antesala
del interaccionismo.
6 ver en Economía y Sociedad de Max Weber Ed Fondo de Cultura económica 1997 .pp298 -
299
Consideraciones Finales
Las diferentes concepciones sociológicas sobre las familias elaboradas por estos tres
autores de la escuela alemana son producto, en gran medida de la crisis social que
vivía el país en ese momento histórico de lucha entre la naciente burguesía capitalista
y el enraizado poder feudal, por ello todas en alguna medida comparan su actual
familia alemana con la anterior extendida y patriarcal. La reconoce como familia
nuclear nacida espacialmente de estas contradicciones donde el parentesco es
reducido a personas muy allegadas al núcleo familiar.
El matrimonio es reconocido como un nexo sumamente importante que deben
establecer el hombre y la mujer para la existencia familiar. Reflejan en sus
concepciones ideas importantes como la interacción, acción reciproca o acción social
que contribuye a la formación de la sociedad y de la comunidad como lo evidencian
Tonnies y Weber, o para la socialización base de la sociedad y la familia para Simmel.
El individuo es un punto centro en toda la teoría alemana y alrededor de el se mueven
fenómenos sociales como la economía, la cultura, la política y la moda; por ello es
entendido como un ente activo que reacciona no de una forma mecánica sino por una
voluntad y por un interés marcado; por ello reconocen en la familia a un institución
social dinámica.
La mujer, o el sexo femenino, fue un asunto de especial interés para Simmel, pues
desarrollo de una manera más profunda la explicación de la diferencia entre los sexos,
Tonnies y Weber también tocaron esta idea, todos mantuvieron una posición
intermedia y solapada. Tonnies reconoce la subordinación de la mujer en el hogar, sin
embargo, el hogar necesita de armonía e intercalación conyugal; Weber no dice que la
mujer sea inferior solo que no tiene la voluntad de dominación adecuada y Simmel
ofrece las posibilidades de un desarrollo y ascenso femeninos pero no realizable
verdaderamente y lo refleja con su teoría de cultura objetivo y cultura subjetiva. Los
tres sostuvieron puntos de vista androsentricos. Esta escuela de sociología es un
puente entre el siglo XIX y el XX más avanzado.
Abrió paso a nuevas concepciones que tomaron como centro indiscutible al individuo,
sus relaciones con la sociedad, interrelaciones y acciones. Estas teorías son la base
del pensamiento norteamericano muy interesado en la realidad empírica y en las
relaciones inter- individual o sea para la escuela de Chicago y para la corriente
integracionista que abre concretes el siglo XX estadounidense.
Es imposible obviar en esta explicación que uno de los antecedentes teóricos en las
formulaciones de carácter interaccionista se hallan en la Escuela Alemana
considerada en el capitulo anterior.
En Weber también existe la creencia de la debilidad y natural subordinación de la
mujer al hombre.
Burgess se apoya en la metodología weberiana de los tipos ideales para explicar sus
ideas sobre el proceso de diferenciación histórica de la familia y así argumenta el por
qué de la transición de la tradición institucional a la tradición grupal. Su enfoque
microsociológico sobre la familia se consolidó a través de una visión y una práctica
investigativa empírica que potenciaba la metodología cualitativa. Trabajó en el
desarrollo de una metodología longitudinal en la investigación sobre familias que
intentaba explicar a esa entidad en una perspectiva de desarrollo, pero de su progreso
interior a través de las etapas de su ciclo vital.
La Escuela de Chicago
Los grupos primarios se caracterizan por una asociación íntima y cara a cara por la
cooperación y el antagonismo directos, proporciona a los individuos su primera y más
completa experiencia de la unidad social, y esa experiencia de grupo da nacimiento a
ideales sociales universales. Solo en los grupos primarios pueden desenvolverse esos
ideales, y al propagarse por la sociedad más amplia se convierten en señales de
progreso y democracia.
La familia, por supuesto, es significativa, y podemos decir que la familia existe antes
que el hombre. Hay no sólo la necesaria relación entre padre e hijo que se debe al
periodo de la infancia, sino también a la relación entre los sexos, que puede ser
relativamente permanente y que conduce a la organización de la familia.
Por su parte el reconocimiento de la acción social, clarificó y vino a acentuar los
procesos microsociológicos y de interacción social, haciendo más comprensible la
síntesis interaccionista ratificando la primacía de la sociedad por un lado y por otro, los
significados y valores interiorizados por el individuo en el grupo en el cual se
desenvuelve. El marco grupal, como otro generalizado, conciliaba los procesos de
socialización e individualización haciéndolos independientes.
No sólo hay un periodo fisiológico de la infancia, sino que esta se extiende de tal
modo, que representa aproximadamente un tercio del término medio de vida del
individuo. Corresponde a ese periodo la relación paterna con el individuo ha sido
prolongada mucho más allá de la familia, el surgimiento de escuelas y de instituciones
tales como las implicadas por la iglesia y el gobierno, es una extensión de la relación
paterna.
En Mead no hay un marcado pensamiento referente al matrimonio ni a la relación
hombre – mujer pero si se ponen de manifiesto claramente las funciones de la familia
en la construcción del self y la puesta en funcionamiento en correspondencia con lo
referente a las etapas del acto unidad en la interacción al interior de la familia. Este
tipo de valoraciones tampoco puede apreciarse en el pensamiento de Cooley, carece
de valoraciones en cuanto a estas cuestiones y se inclina más a la socialización en el
grupo primario.
Burguess
Burgess presentó a la familia como una unidad interactiva en la que cada uno tenía
una posición y un rol que desempeñar dentro de una estructura jerarquizada. Durante
el proceso de interacción los actores perciben los patrones de conductas, forman sus
expectativas sobre el resto de sus miembros y definen la situación social de la familia.
La interacción se produce al nivel simbólico y de muy diversas maneras: conflictiva,
autoritaria, conciliadora, cohesiva, etc. . Para Burgess la visión institucional de la
familia se justificaba solo en el pasado, cuando esa era su forma natural, que ella
adquiría determinada por factores como las leyes, la moral, la opinión pública, la
tradición, la disciplina rígida impuesta por el cabeza de familia y los rituales. En las
sociedades modernas – para este sociólogo – la familia adquiere una nueva forma que
él denomina “companionship” y que define como una sociedad más democrática,
basada en el consenso familiar, con alta movilidad, que se expande en medios
urbanos y se reorganiza, por solo mencionar algunas de sus características.
En este sentido nos dice que la naturaleza humana tiene la capacidad de tener
imágenes sociales; para ponerse en el lugar de otra persona, y mirarse, en el espejo
de las actitudes de otras personas, y ocuparse de papeles humanos como la realidad
social lo demanda de la personalidad, es necesario mirarlos no como absolutos pero si
como concerniente a la situación de social. Se vuelve a evidenciar en su pensamiento
la idea de la reflexividad social del pensamiento weberiano que atraviesa a su vez el
de Cooley y el de Mead.
Bajo estas condiciones el niño desarrolla una personalidad integrada con mayor o
menor grado de conflicto entre los papeles que él desempeña en lo referente a otros
miembros de la familia. Donde alcanzar una madurez social implica el logro de una
organización estable de la vida en la cual los valores de la persona sean coordinados
e integrados por un valor o una filosofía central de la vida. Algunas personas pasan de
niñez en un estado del adulto sin experimentar la tensión de la adolescencia.
La idea de la funcionalidad de la familia en cuanto a socializadora y formadora de la
personalidad en los valores sociales, normas interiorización de conductas y patrones
es reiterada en el pensamiento de Burgess aunque esto sucede en mayor medida en
su pensamiento a través de las relaciones parentesco que se establecen en la familia.
Un alto grado de integración al interior de la familia puede ser alcanzado por influencia
de una diversidad de factores entre ellos se encuentra la presión de la comunidad o
puede ser obtenido por el afecto mutuo, la comprensión, intereses comunes,
relaciones democráticas entre las correspondencias marido - esposa, y entre los
padres y los niños, como en la familia del compañerismo.
La comunicación es el mecanismo a través del cual las ideas, las actitudes, y los
valores son adquiridos por las personas determinando así, en gran parte, su
comportamiento futuro. La familia como unidad de la personas en comunicación
implican la guarnición conjunta de reacciones y actitudes entre el marido y la esposa.
El principio de base, sin embargo, es que las personas que obran recíprocamente
experimentan la modificación en el proceso de la interacción comunicativa dentro de la
familia. Esto significa que con la comunicación particularmente del tipo íntimo
encontrado en la mayoría de las familias, hay fusión en la interpenetración de actitudes
entre el marido y de la esposa.
La unidad en la Familia
Los factores que influyen mayormente en la unidad de la familia puede ser analizados
a través de los componentes siguientes: afecto mutuo, interdependencia emocional,
comprensión, compatibilidad temperamental y consenso en valores.
Burgess utilizó las siguientes tipologías para representar a las diversas familias y sus
grados de unidad: (1) la familia rota, (2) la unión relativa de organización en la familia,
(3) habito limita la familia, (4) la familia altamente solidificada, y (5) la familia
dinámicamente unificada.
La familia quebrada. Las familias están quebradas por muerte, divorcio, debido a
discordia doméstica, y la separación. En una familia libremente organizada hay poca
integración. El hábito limita la familia se integra en base de respuestas habituales. La
familia altamente solidificada con la subordinación; del los miembros a un patriarca, a
un matriarca, o a un cierto concepto de la familia; unidad tal como familismo.
En la integración dinámicamente unida la familia evoluciona y se mantiene con la
participación voluntaria de sus miembros en la realización de un objetivo común.
Estados Unidos salió de la guerra fortalecida en todos los órdenes, esto es constatable
por las medidas del progreso que se visualizaron, tales como eran el Producto Bruto
Interno (PBI), la alfabetización, la urbanización y otras similares, todas basadas en
criterios cuantificables. En la práctica la modernización aceleró la urbanización o la
occidentalización de la estructura de élite.
En esta etapa influida por el liberalismo que se extendió desde el siglo XIX y bajo la
influencia del Darwinismo Social se desarrolla el Funcionalismo que tuvo que
empalmar en el ámbito intelectual del desarrollo de la Sociología con el empirismo y
todas sus implicaciones reduccioncitas.
Su idea básica era que la sociedad debía funcionar y si no lo hacía, debía intentarse
que así fuera. Es por esto que lleva el conflicto social y la lucha de clases a un
segundo plano, ya que pensaban en una sociedad armónica. La sociología americana
sólo valoraba al que se adaptaba al medio, por lo tanto, legitimaba las desigualdades.
Otra peculiaridad americana era la Universidad, la sociología no tuvo ningún problema
para su implantación en la universidad. El paradigma de la modernización,
predominante en los círculos académicos entre alrededor de 1945 y 1965, apoyó la
transferencia de tecnología y de la cultura sociopolítica desde las sociedades
desarrolladas hacia las sociedades tradicionales.
Influenciado por el medio y las ideas imperantes emerge la figura de Talcott Parsons
quien llega a convertirse en una de las más destacadas de la sociología
norteamericana.
Nace en 1902 en Colorado, Texas, al Sur de EE.UU. Pertenece a una clase media-
alta, de familia religiosa, siendo su padre ministro de la iglesia y rector de una pequeña
universidad. Estudia en Londres económicas, donde conoce a Malinoski y la obra de
Spencer. Con posterioridad conoce la producción de Max Weber, del que toma parte
de su obra. Años más tarde se va a Harvard, donde es alumno de Sorokin y
ulteriormente le hacen jefe de departamento, llegando a ser presidente de la Sociedad
Americana de Sociología.
Sus obras son "Estructura de la Acción Social" (1937). Donde da también a conocer la
obra de otros pensadores. El primer periodo al que pertenece este libro es el periodo
intersubjetivo. El segundo periodo es el funcionalista y su libro más importante es El
Sistema Social"(1951). El tercer periodo es el Sistemático.
También tiene una obra con Smelser, "Economía y Sociedad", artículos sobre teoría
sociológica contemporánea. Otra de sus obras es sobre política y estructura social
"Estructura y proceso en las sociedades modernas" y en 1978 "La teoría de la acción y
la condición humana". Conocido como funcionalismo estructural, su quehacer teórico
constituye uno de los sistemas más influyentes de la sociología del Siglo XX.
El Funcionalismo es una teoría totalizadora de la realidad, inspirada en un análisis de
convergencia de las obras de Weber, Pareto, Durkheim, Freud, Marshall, Brown.
Estudia no solo las causas que explican o determinan los fenómenos sociales, sino
también las consecuencias, fines o funciones que se desprenden del propio efecto.
El funcionalismo toma como punto de partida el Darwinismo (H. Spencer) y sus
conceptos de estructura, función, sistema y subsistema. La Antropología social inglesa
de Malikoski, Raccliffe-Browun entre otros autores, recrea los conceptos del
funcionalismo y los aplican a las culturas primitivas. Estos antropólogos afirman que en
todas las sociedades existen unas necesidades primarias y a través de la cultura los
hombres satisfacen sus necesidades por medio de las instituciones sociales. De
Durkheim toma la teoría del hecho social bajo su aspecto normativo, considerando al
conflicto como un hecho marginal. Mientras asume por otra parte la reducción que
hace Weber del hecho social a la acción individual, haciendo especial énfasis en una
sociedad consensual, integrada y profesional…
Pretende solventar el problema social del orden (Las normas y la voluntad). Ofrece
una estructura de análisis que explica la sociedad como un conjunto de acciones que
equilibran los planos normativos y voluntarista.
Parsons centra especial atención a la constitución de los sistemas sociales y sobre las
bases de su estructura. Dentro de este Sistema Social la unidad más significativa la
constituyen la participación donde se pueden destacar dos aspectos importantes:
El aspecto posicional (lugar donde se haya localizado el actor en relación con otros
actores, es decir el status).
El aspecto procesual (es lo que hace el actor en sus relaciones con otros
considerando el contexto de su significación funcional para el sistema es decir el rol).
De aquí se deriva que la relación status –rol constituye la unidad funcional del sistema
social.
Se hace necesario señalar –aclara Parsons- que los roles son mecanismos primarios a
través de los cuales se cumplen las condiciones esenciales del sistema social: aunque
la existencia de diferentes roles distribuidos de forma diferente dentro de la población.
La relación estatus-rol es para Parsons cuando un actor no se orienta sólo por los
valores, sino también por las acciones. Considerando que las orientaciones de valor
son pautas culturales integradas e internalizadas por el proceso de socialización. Para
Parsons, por lo general, loa actores no actúan, sino que están constantemente
orientados hacia las situaciones.
Los actores, cuando llevan a cabo una acción se orientan hacia una situación
concreta, por lo tanto, no actúan. Todos estos conceptos son mecanismos de ajuste al
sistema social para lograr la integración institucional. Los ajustes están en función de
la satisfacción y la orientación.
Un sistema funciona mejor si no requiere mucho control social, siempre que el proceso
de socialización sea bueno.
Mills indica una traducción del libro de Parsons en cuatro párrafos, donde señala los
principales aportes de la teoría parsoniana:
“El sistema social es donde los individuos actúan con referencias el uno del otro,
acciones que por lo general son ordenadas, porque los individuos del sistema
comparten tipos de valor y modos apropiados de conductas, algunos de los cuales
podemos llamarles normas y en la medida en que se actúa adecuándose a ellas hay
regularidades sociales que en caso de ser estables y duraderas pueden denominarse
“estructurales”; las que se pueden considerar dentro del sistema social como un
equilibrio grande e intrincado. Hay dos modos principales de conservar el equilibrio
social y del fracaso de uno de ellos o de ambos es que resulta el desequilibrio: la
socialización y el control social.”
Lo esencial de esta crítica, que no es solo de Mills, es que la teoría de Parsons es una
teoría sobre el orden, que margina la posibilidad de pueden ordenar una sociedad
también sobre la base de un conflicto. Parsons no da alternativas teórico ni
metodolόgicas para concebir la sociedad en un proceso permanente de cambio. Es
preciso señalar también que su concepción del orden es un poco idealista, para el está
determinado por los valores como componentes culturales.
Se hace preciso partir de que la Teoría sobre la familia de Parsons es una extensión
de su teoría funcionalista, ya que el quiere explicar las estructuras de la familia y sus
funciones y también como se relacionan en los diferentes tipos de sociedades.
Las relaciones hombre - mujer que comprenden también relaciones sexuales dan lugar
casi automáticamente al surgimiento de una familia lo cual demuestra que la
socialización dentro de la familia predispone al niño a asumir roles maritales y
parentales en su propio ciclo vital.
Las principales funciones que debe cumplir la familia dentro del sistema social son:
La familia conyugal compuesta por padres e hijos es muy importante en los sistemas
de parentesco. Se dice que el sistema es conyugal porque se compone
exclusivamente de familias conyugales relacionadas ente si. Esta tesis esta
relacionada con su concepción funcionalista.
El sistema de parentesco tiene una gran influencia sobre el niño que disponen de
manera uniforme sus modelos de reacción emocional. De este modo se pueden
explicar los rasgos estables y sólidos de la orientación emocional adulta así también la
las orientaciones afectivas del niño se concentran en un marco muy reducido de
personas sobre todo por el carácter nuclear de la familia en las sociedades
industriales.
Parsons propone para las familias una especialización de las mujeres sobre las cuales
deben descansar los valores de integración de dicha institución.
Debe decirse que es propio del sistema familiar centrar en la madre los primeros
cuidados del niño y sobre este hecho se encuentran las bases de de la diferenciación
de roles entre los sexos esto se debe principalmente a las incapacidades propias del
embarazo, así como la falta de sustituto en la lactancia materna.
La diferenciación sexual del trabajo defiende la especialización de cada sexo en una
serie de roles que establecen sus diferencias. El hombre posee un rol instrumental
mientras el rol de la mujer es expresivo. Los cuales al unirse conforman la familia y
contribuyen al buen funcionamiento del sistema. Según su teoría de la
complementariedad en roles evita el conflicto y hace que desaparezca la competencia
en el matrimonio esto constituye para Parsons la base de la familia moderna.
“La figura materna es el modelo más asumido por las niñas es por eso que en cuanto
adquiere la aptitud física necesaria, la niña comienza el aprendizaje directo de las
funciones femeninas adultas esto le proporciona la oportunidad para la maduración
emocional. En cambio el niño no dispone de manera inmediata del modelo de padre
para imitar debido fundamentalmente a la ausencia la mayor parte del tiempo de la
figura paterna y en cambio suele resultarle vergonzoso criarse como una mujer por
considerarlas como inferiores.”
La función del hombre implica una serie de tensiones propias de la estructura familiar
relacionadas con el empleo y la forma de ganarse la vida.
“No hay actualmente ninguna sociedad donde las mujeres dispongan de las mismas
oportunidades que los hombres. Esta desigual condición causa considerables
discrepancias entre la gran contribución de las mujeres al desarrollo humano y su
pequeña participación en los beneficios.” 1
La Teoría Feminista se sitúa dentro de las teorías sociológicas del siglo XX junto a las
Teorías Interactivas, al Estructural Funcionalismo y al Marxismo. Ya en este siglo se
desarrolla una interpretación estática sobre la familia que privilegia el análisis de
formas estructurales y sus funciones, hay una introducción del análisis grupal de la
familia, se construye una teoría sobre su ciclo vital considerada una visión más micro
de su desarrollo, se elaboran metodologías muy diversas para los estudios empíricos
de la familia, el Feminismo académico contribuye a la formación de una interpretación
crítica desde una visión de género sobre la familia. En la actualidad se ha
institucionalizado un enfoque más cultural que busca articular visiones macro y micro
dentro de la familia.
La Teoría Feminista constituye esa parte de investigación reciente sobre las mujeres
que implícita o formalmente presenta un sistema de ideas general y de gran alcance
sobre las características básicas de la vida social y la experiencia humana
comprendidas desde una perspectiva centrada en las mujeres. En primer lugar, su
principal “objeto” de investigación, el punto de partida de todas sus investigaciones, es
la situación (o las situaciones) y experiencias de las mujeres en la sociedad. En
segundo lugar, considera a las mujeres como “sujetos” centrales del proceso de la
investigación; es decir, intenta ver el mundo desde el distintivo y ventajoso punto (o
puntos) de vista de las mujeres en el mundo social. En tercer lugar, la teoría feminista
es una teoría crítica y activista que actúa en nombre de las mujeres; su objetivo es
producir un mundo mejor para las mujeres y, por tanto, para toda la humanidad. 2
Para estudiar esta perspectiva hay que partir, como toda teoría, desde su génesis y
aquí concuerdo totalmente con Geneviéve Fraisse donde dice que “…el discurso
filosófico de las mujeres y su diferenciación de sexos se halla necesariamente en la
encrucijada de la historia…” 3
1 Afirmación proveniente del Informe sobre el Desarrollo Humano elaborado por el PNUD
(Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo) en 1995.
2 Ritzer, George. Teoría Sociológica Contemporánea. Editorial Félix Varela, 2003 p.354
3 Con este planteamiento inicia Geneviéve Fraisse su artículo: Del destino social al destino
personal. Historia filosófica de la diferencia de los sexos.
Es como respuesta a estas injusticias contra la mujer que se alzaron las voces
femeninas para exigir igualdad, pero no tanto igualdad de sexos, sino que se trate a la
mujer con respeto. Frases contra las mujeres realmente sobran rebasando lugares y
épocas históricas. Hiponax en una ocasión exclamó: “... Sólo hay dos días en la vida
en que la mujer sea fuente de alegría: el día de su boda y el de su entierro…” 5 esto
nos da la medida de la discriminación que a través de la historia ha sido víctima la
mujer.
"Las mujeres son los negros de la humanidad" cantarían años después Yoko Ono y
John Lennon para describir la verdadera cara de las relaciones entre hombres y
mujeres.
Sobre los años 20 el feminismo quedó absorto durante décadas hasta la eclosión en
los años 60. A este período se le puede designar como “crisis de transición entre dos
feminismos”. El resonante de esta etapa fue la publicación del libro de Betty Friedan
en 1963. Su mensaje central fue que “algo” estaba pasando entre las mujeres
norteamericanas, que denominó: “el problema que no tiene nombre”. Eran muchas las
mujeres que, a pesar de su feliz matrimonio y con grandes desenvolvimientos
económicos, no dejaban de sentir una sensación de asfixia, de vacío.
En una elaboración rigurosa con evidentes orientaciones libertarias, esta autora hace
suyas, de manera profundamente crítica, las perspectivas del evolucionismo, del
materialismo y del psicoanálisis, fundamentos de la revolución intelectual de la que el
feminismo es parte indisoluble. Al construir de Beauvoir el primer discurso filosófico
sobre las mujeres desde la óptica de las mujeres, muestra las falacias del
determinismo biologista para el que todo está preestablecido por la naturaleza, los
instintos y la anatomía; de la misma manera, discute con el materialismo clasista que
no reconoció a las mujeres como sujetos de la historia, y exhibe las limitaciones del
psicoanálisis cuya base es el postulado de que lo masculino es universal,
paradigmático, referente único de lo humano, mientras que lo femenino es simple
expresión de la carencia de lo masculino.
Así fue como ellas comenzaron a escribir su propia historia: una historia de la
humanidad en femenino, en la que las mujeres son protagonistas de la cotidianidad de
todas las culturas y en la que hay cosas más importantes que las gestas guerreras y
las maniobras políticas y diplomáticas de paladines en pugna; de una historia más
apegada a la vida de la gente y menos a la exaltación de los héroes de la violencia y el
patriarcado.
Al principio ya enarbolé como uno de los objetivos del feminismo su centro de atención
en la mujer, pero se hace un pequeño desvío a favor de todos los ciudadanos
oprimidos.
6 Ibidem
7 Engels, Federico. El origen de la familia, la propiedad privada y el estado.
El feminismo de la diferencia coexiste con el radical, éste primero fue formado por
feministas radicales que evolucionaron abogando por identificar y defender la identidad
propia de la mujer y marcar bien sus señas diferenciales.
Lo que sucede es que el feminismo ha entrado en una nueva fase, más difícil de
analizar; además, una vez alcanzados los objetivos primarios que afectaban a todas
las mujeres por igual, ahora los intereses que surgen no siempre son coincidentes.
Finalmente, estos teóricos se opusieron a las ideas feministas; para ilustrar esta tesis
el ejemplo más convencional es Talcott Parsons pues afirma que “para que la familia
funcione con eficacia debe darse en ella una división sexual del trabajo en la que los
varones adultos y las mujeres desempeñan papeles muy diferentes.” 11
A pesar de los avances realizados por la mujer hacia la igualdad en Occidente, les
queda aún mucho por hacer, de acuerdo a las estadísticas internacionales.
· Las mujeres poseen nada más que el 1% de la riqueza del mundo, y ganan cerca del
10% de los ingresos, a pesar de conformar más del 51% de la población.
· Cuando se consideran el cuidado de los hijos y el hogar, la mujer trabaja durante
más tiempo que el hombre tanto en países industrializados como en países en vías de
desarrollo.
· Las mujeres tienen una representación legislativa mucho menor en comparación a la
de los hombres: Suiza posee el mayor número de mujeres con un 42%, mientras que
el promedio mundial es del 9%.
· En promedio la mujer gana un 30% menos que el hombre, incluso en iguales tareas.
Ante estas disyuntivas el feminismo sigue de pie, cada vez reforzando sus objetivos y
metas bien definidas, siguen manteniendo su voto a la igualdad de sexos, a la no
discriminación social de la mujer por el simple hecho de serlo, a cambiar la tesis de
que “el hombre sigue siendo su amo” 13 y que la mujer “está destinada a ser
sometida, poseída y explotada” 14 que durante años ha estado vigente.
El matrimonio no deja de tener una gran importancia social y la familia conyugal tiene
una existencia muy fuerte en el plano humano, dentro de ésta, la mujer producto de la
maternidad pareciera que está destinada a una existencia sedentaria; mientras el
hombre realiza tareas fuera del hogar la mujer debe permanecer dentro de él. El
feminismo es partidario, como teoría, de establecer una relación de equidad y no de
subordinación dentro del hogar. Trata de borrar esa suerte que, desde tiempos
remotos, se le ha dado a la mujer; mujer como sinónimo de esposa, madre, objeto
sexual; tratándose también de romper esas barreras que les han sido impuestas: el
hogar.
Diderot considera que la inferioridad de la mujer ha sido en gran parte creada por la
sociedad. Beauvoir expone en su gran obra un ejemplo típico de este razonamiento;
escribe:
Esta teoría sociológica demanda la paz, y no la guerra, entre los sexos; las relaciones
de armonía sobre los conflictos. En cuanto a esta relación de igualdad o desigualdad
entre los sexos G. Fraisse realiza diferentes observaciones: por una parte la mujer
puede ser hija, esposa, madre y hermana, y es sólo esta última relación la que ubica a
la mujer en igualdad con el hombre. En cuanto a la división entre familia y ciudad sólo
el hombre está presente en ambos sectores, evidenciándose la libertad que le está
vedado a la mujer. Se puede apreciar que siempre el mundo que le fue destinado a la
mujer, desde tiempos remotos, fue el hogar; su mundo se limita solamente al espacio
doméstico.
Es muy común oír que la era del feminismo comienza con los utopistas, pero también
con John Stuart Mill, que mantenía un fuerte compromiso con la igualdad de los sexos.
Se manifiesta en total desacuerdo con Auguste Comte en el hecho de que la biología
no podía ser la última verdad de la relación entre los sexos; las mujeres actuales son
productos de la educación, que es modificable. 17 Le otorga total igualdad a la mujer
con relación al hombre en cuanto “derecho político, lo mismo que en derecho civil, así
en la ciudad como en el espacio doméstico”. 18
15 Ibidem
16 Fraisse, Geneviéve: Del destino social al destino personal. Historia filosófica de la diferencia
de los sexos.
17 Ibidem
18 Ibidem
Para Comte el matrimonio es, para las mujeres, la prohibición absoluta de dirigir o
ejecutar nada en la vida pública y la exclusión de la vida política y social. Por tanto,
para muchos autores el matrimonio no era más que otra forma de manifestar la
desigualdad de los sexos. El feminismo en contradicción con estos planteamientos
trata de lograr una equidad dentro del matrimonio y la familia, trata de desintegrar ese
disfraz de mujer obediente, capaz de dejar de vivir su propia vida para dedicarse a ser,
ante todo, madre y esposa.
La política del capitalismo le otorgó un gran paso de avance a la lucha femenina pues,
al disolverse la familia proletaria, introduce a las mujeres al mercado de trabajo
desarraigándolas de su espacio doméstico, esto da lugar al comienzo del proceso de
liberación de las mujeres. El trabajo asalariado es el primer paso a la autonomía de las
mujeres que se llevará a su punto culminante con el comunismo. Así se evidencia que
el fundamento de la emancipación femenina, así como el e una nueva estructura
familiar no es el derecho, sino la economía.
19 Ibidem
En los Manuscritos de 1844, Marx trata de darle una definición filosófica a la familia
como primera relación social y a la mujer como el ser natural que permite al hombre
crear esa primera relación social. El capitalismo lo que hace es reducir el papel de la
mujer a una mercancía y únicamente la evolución de la familia y del conjunto de las
relaciones sociales están en condiciones de restituirle su humanidad.
El Feminismo “trata de dar una voz a personas que raramente son escuchadas” 20,
haciendo entender al mundo que ninguno de los dos sexos aparece de entrada como
privilegiado, que ninguno está sometido; que la mujer no es una presa ni tampoco un
simple pretexto. La mujer es tan real como el hombre.
Esta teoría sociológica trata, desde sus inicios, de devolverle a la mujer esa libertad de
la que es dueña al nacer, esa libertad que el hombre ha tratado de vedarle; esa es la
lucha incansable de las feministas que a pesar de los logros que han tenido y los
obstáculos que han ido venciendo en el camino, todavía el “sexo débil”, como osan
mal llamarlo, es víctima de la discriminación.
20 Esta frase fue dicha por Oscar Lewis, célebre por sus estudios sobre los pobres en América
Latina. En este contexto yo utilizo la frase para referirme, generalmente, a las mujeres.
Hoy, por vías paralelas y equivalentes que se acercan cada día más y en muchos
aspectos confluyen en una sola, con el feminismo se construyen la equidad y la justicia
que en otros tiempos fueron ideales, utópicos y materialistas, de las pensadoras y los
pensadores que además de comprender a las sociedades se propusieron
transformarlas. Las acciones afirmativas, con las que se hacen aquí y ahora cambios
concretos, son en gran medida resultantes de un feminismo incansable del que parten
muchas mujeres y algunos hombres.
Tal vez éste sea uno de los signos que desde ahora hayan de caracterizar al siglo XXI,
inicio de lo que se llama ya el milenio feminista.
CONCLUSIONES:
La familia es la institución más antigua creada por la humanidad, razón por la cual ha
sido una de las más analizadas por el pensamiento social desde la antigüedad hasta
nuestros días. En torno a ella convergen las ciencias más cercanas al estudio del
hombre como la Psicología, Historia y Sociología. Mientras que como objeto de
estudio, la Familia ha sido vocera de debates y diversas polémicas en cuanto a su
presencia histórica en las formaciones económicas y sociales, como sujeto de la
cultura y como unidad de vida social por excelencia.
Se suele pensar en familia de forma general como una entidad social destinada para la
sexualidad y la reproducción; por ser una institución encargada de la regulación social
de actividades con bases biológicas definidas; en particular el sexo y la reproducción;
pero su gran complejidad hace posible que no exista un modo único de estudiarla y
que en consecuencia; emerjan un sin número de valoraciones derivadas de
presupuestos, métodos y estilos científicos diferentes.
Otra postura distinta fue la del Marxismo; ésta nace con el desarrollo del capitalismo y
el surgimiento del proletariado y la burguesía. Esta teoría contribuyó a que
posteriormente se desarrollaran teorías de liberación, ya que no legitima las
diferencias entre los sexos, sino que las denuncia y aboga por la emancipación de la
mujer como un ente activo de la sociedad. Denuncia en su mayoría la penosa
situación de la clase obrera, sobre todo la de la mujer insertada en el mercado de
trabajo.
Un principal aporte de esta concepción marxista es que la relación entre los sexos no
fue analizada solamente desde el punto de vista familiar sino que también en el ámbito
del sistema productivo.
La concepción del progreso familiar en la teoría marxista plantea que todas las
sociedades se iniciaron por un estado de promiscuidad sexual y transitaron por
diferentes formas, que representan los diversos momentos de organización de las
relaciones sexuales, hasta concluir en la monogamia moderna que Engels denomina
histórica porque se le exige sola y jurídicamente a la mujer.
La escuela alemana finalizo el siglo XIX y abrió el XX con un análisis del factor
subjetivo como fuente de exploración para la sociedad, por ello la comprensión de la
familia tomo como centro al individuo, sus relaciones con la sociedad, interrelaciones y
acciones.
Simmel enunció la desigualdad entre los sexos pero su teoría no alcanzó un nivel
crítico y terminó por legitimar la posición anterior.
A medida que vayan evolucionando las teorías y las concepciones de familia, y dentro
de éstas ya el sistema patriarcal y la invisibilidad de la mujer quedará en la historia
sólo como un mal recuerdo y se borrarán frases como “La mujer es la falta del hombre”
que durante mucho tiempo fueron predominantes en la sociedad.
Ahora, de manera sistematizadota se observa que la hipótesis del matrimonio pone en
condiciones de igualdad a todos los pensadores que opinan que es la base de la
familia moderna aunque hacia su interior visualicen de manera diferente la relación
entre los sexos. Dicho análisis en casi todos los teóricos se refiere al matrimonio como
parte de la familia. Sólo el Funcionalismo y el Feminismo muestran interés en
identificar como se produce un proceso de socialización en la relación padres-hijos de
corte sexual.
Por tanto, a la hora de exponer las ideas esenciales tenemos tres grandes grupos: Por
un lado tenemos al grupo de teóricos andocéntricos como lo son Le Play, Durkheim,
Escuela Alemana y Parsons. Otro grupo se caracterizan por invisibilizar este análisis;
aquí se ubica al Interaccionismo. En el tercero aparecen el Marxismo y el Feminismo,
ambos mantienen posiciones de denuncia al respecto.
BIBLIOGRAFÍA
ü Disobedience, Willful. Más allá del feminismo, más allá del género.
ü Salas, María. Una mirada sobre los sucesivos feminismos. Mujeres en red