Professional Documents
Culture Documents
Buenos Aires:
Biblos, 2011.
Prólogo
Cronología
Introducción
La Unión Soviética en la década de 1980
Las reformas de Gorbachov y su fracaso
La perestroika tecnocrática
La “segunda perestroika”: los cambios económicos y políticos
▪ La perestroika económica
▪ Las transformaciones institucionales
El retorno de la cuestión nacional
La política exterior
La caída de las democracias populares
Las explicaciones sobre el fin de la Guerra Fría
La sociedad y cultura frente a la perestroika
El derrumbe
1
El golpe de agosto y la disolución de la Unión Soviética
¿Por qué cayó la Unión Soviética?
Las explicaciones “esencialistas”
Los factores estructurales como causa del derrumbe
El componente personal
2
Medvedev, el delfín
La segunda guerra de Chechenia
Putin y las relaciones exteriores
¿Una nueva guerra fría?
Rusia y el BRIC
La sociedad rusa en el nuevo siglo
Coda
[Autonomía a las repúblicas] “[…] Los dirigente s adquirieron entonces una continuidad en
sus cargos que les brindaba oportunidades para montar sus aparatos de dominación y
desarrollar redes de corrupción, con la casi completa seguridad de que no iban a ser
“molestados” desde el Kremlin […]´”. (p. 33)
[Nacionalismo] “[…] en la mayor parte de las repúblicas los reclamos se realizaban sin que
hubiera una vocación mayoritaria de secesión y los protagonistas constituían sin duda una
minoría […] el problema más perturbador para la gestión de Gorbachov fue sin duda el
surgimiento de un movimiento nacionalista ruso bajo el liderazgo de Yeltsin […]”. (p. 49)
3
[Plan de los 500 días (de Gorbachov)] “[…] la privatización masiva de las empresas
estatales, la reducción de la ayuda exterior a países como Cuba, el achicamiento del
presupuesto de la KGB y de las fuerzas armadas, la liberalización de los precios al
consumidor (con la excepción de los productos de primera necesidad), la emisión de bonos
del Tesoro público y la implementación de medidas destinadas a facilitar la movilidad de la
mano de obra para ajustarla a la demanda. Se trataba básicamente de movilizar las reservas
del Estado para financiar la transición a una economía de mercado”. (p. 61-2)
[Davos para Yeltsin] “[…] los principales oligarcas favorecidos por las privatizaciones
decidieron en ese lugar de Suiza, donde todos los años se celebra un foro de enorme
repercusión mundial, unir sus esfuerzos para lograr la reelección de Yeltsin […]”. (p. 144)
[Mendigos] “Una de las (lamentables) novedades que se produjeron en el paisaje urbano fue
la aparición de gran cantidad de mendigos, en su gran mayoría jubilados, alcohólicos o
madres sin hogar con niños pequeños […] los camiones de basura, además de su tarea
específica, cargaban con los mendigos muertos durante las noches y los llevaban a un
crematorio”. (p. 162)
[Putin sobre el rol económico del Estado] “El desarrollo de las corporaciones del Estado no
es un fin en sí mismo. Han sido creadas para impulsar el desarrollo en aquellas áreas en las
que las empresas privadas no muestran interés. No vamos a desarrollar un capitalismo de
Estado. No es nuestro camino. Pero sin el apoyo del estado no seremos capaces de reconstruir
importantes segmentos de nuestra economía”. (p. 193)
4
[Estabilidad] “[…] Putin no generaba entusiasmo –al revés de lo que había ocurrido con
Yeltsin al principio de su gestión-, pero su modo de gobernar y su activismo, reflejado
puntualmente por los medios, sometidos al control estatal, parecían satisfacer las expectativas
de una sociedad que aspiraba a la estabilidad y al orden”. (p. 207)
[Revolución de las canas] “La denominada “revolución de las canas” movilizó en enero de
2005 a más de un millón de jubilados que se oponían a la “capitalización” de las ventajas
sociales con las con las que habían contado ese momento […]”. (p. 217)
[Relaciones exteriores] “Putin debe restaurar lo que Yeltsin destruyó: el orgullo de sentirnos
parte de una gran potencia […]”. (p. 229)
[Multimillonarios] “[…] hay más multimillonarios que en cualquier otro país del mundo, y
en términos absolutos es el tercero después de la India y Estados Unidos […]”. (p. 252-3)
[Conclusión] “[…] la debacle social que se produjo era evitable […] Rusia es un país más
libre en 2011 […] notoriamente más injusto, con seguridad muy lejos de las expectativas de
quienes cuestionaban el régimen soviético […]”. (p. 263)
[Opinión] “[…] en un alto porcentaje consideran que los cambios debieron realizarse
manteniendo el socialismo […]”. (p. 272)
Comentarios
Saborido reconoce que la disolución de la Unión Soviética pudo ser evitada, y lo valora como
positivo debido a la catástrofe social que ocurrió a posteriori. Pero lo piensa desde la unión y
no desde el socialismo. Piensa que lo mejor hubiera sido una Unión Soviética capitalista y que
en definitiva era la voluntad de la mayoría.