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LOS PASOS DE CRISTO Y MISTERIO DE LA SEMANA

SANTA DE SEVILLA ELABORADOS EN MADERA:


IMPRONTA ARTÍSTICA, EVOLUCIÓN Y CATALOGACIÓN
UNIVERSIDAD DE SEVILLA

LOS PASOS DE CRISTO Y MISTERIO DE LA SEMANA SANTA DE


SEVILLA ELABORADOS EN MADERA:
IMPRONTA ARTÍSTICA, EVOLUCIÓN Y CATALOGACIÓN

Trabajo realizado para optar al grado de Doctor en Bellas Artes por el Licenciado

Jesús Manuel Vega Santos

Director

D. Juan Manuel Miñarro López


Prof. Titular de la Universidad de Sevilla
A mis padres, Pilar y Tomás
Agradecimientos

En primer lugar debo recordar a mi abuelo paterno Tomás, que es la


persona que me transmitió el cariño y la devoción por la Semana Santa de Sevilla.
Sin duda, él es el primer responsable de la consecución de este trabajo.

También quiero destacar la ayuda de numerosos artistas y artesanos


actuales, como tallistas, orfebres e imagineros, que siempre prestaron su
colaboración cuando fue requerida, en especial la de mi buen amigo y gran
ejecutor de pasos Francisco Verdugo, el cual facilitó mi labor con buenos
consejos.

Asimismo, debo resaltar la colaboración de las cofradías sevillanas, las


cuales nunca han puesto impedimento para el acceso a sus archivos y cualquier
tipo de información que necesitara.

Gracias de corazón a mis padres, Pilar y Tomás, y mi hermano, que han


demostrado hacia mí mucha paciencia, afecto y una infinita confianza para llevar a
cabo esta investigación.

A Nuria Mezquita, mi mujer y compañera, por sus palabras de ánimo


constantes, así como mi hijo Santiago el cual, aun siendo pequeño, en cierto modo
me ha dado el espaldarazo definitivo para terminar esta ardua labor investigadora.

Por último, y no menos importante, quiero agradecer al Dr. Don Juan


Manuel Miñarro López la confianza que desde el primer momento depositó en mi
persona al haberme aceptado como investigador, proporcionándome en todo
momento lo necesario para llevar a cabo este trabajo. Quiero destacar su labor
artística y orientadora en el desarrollo de esta tesis, pero sobre todo su faceta
humana, suponiendo para mí un verdadero ejemplo en todos los aspectos.
ÍNDICE

________________________________
LOS PASOS DE CRISTO Y MISTERIO DE LA SEMANA
SANTA DE SEVILLA ELABORADOS EN MADERA:
IMPRONTA ARTÍSTICA, EVOLUCIÓN Y CATALOGACIÓN

INDICE

CAPÍTULO I.- Introducción, justificación y consideraciones……….….….7

I.1.- Introducción………….……………………………….………….…….…..7
I.2.- Estado de la cuestión………………………………..………….………......9
I.3.- Justificación del tema………………………………..………….………....13
I.4.- Definición y consideraciones…………………………………….………..15
I.4.1.- Los pasos o andas procesionales……………………….………...15
I.4.1.1.- Tipos de paso……………………………………………….…..16
I.4.2.- La ejecución de los pasos…………………………….…………..17
I.4.3.- La madera como material principal…………………….…….…..19

CAPÍTULO II.- El paso procesional como objeto artístico…………………21

II.1.- La composición en los pasos de Cristo o de Misterio.………….………...21


II.1.1.- Tipos de composición.………………………….………………..22
II.1.1.1.- Tipos de iluminación…………………………………………..24
II.2.- Condicionantes espaciales y morfológicos de los pasos……………..…...26
II.2.1.- Sobre el tamaño de los pasos……………………………………………27
II.3.- Características y funcionalidad de los pasos.………………………....…..28
II.4.- Los pasos y su impronta retablística……………………..………….….…31
II.4.1.- El paso procesional: retablo itinerante en la calle………..…....…32
II.4.1.1.- Costaleros para llevar los pasos…….…………………….……32
II.4.1.2.- La mecánica aplicada a los pasos……………..……..…….…..34

CAPÍTULO III.- Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del


paso……………………………………………………………………………..37

III.1.- Importancia de los retablos en relación al paso procesional……………..37


III.1.1.- Estilos artísticos adaptados a los pasos…………….…………………..38
III.2.- Impronta del retablo barroco sevillano en la ornamentación del paso…...39
III.2.1.- Modelo de Francisco Dionisio de Ribas…………………….......39
III.2.2.- Modelo de Bernardo Simón de Pineda……………………..…...41
III.2.3.- Modelo de Duque Cornejo..…………….…..…………………..43
III.2.4.- Modelo rococó de Cayetano de Acosta…………….…………….45
III.2.4.1.- Estilo “churrigueresco”…………………….………...……….48
III.3.- La estatuaria barroca en la ornamentación del paso………….…………..49
III.4.- Adaptación del estilo barroco a los pasos………….………….…………53
III.4.1.- Tipos de composición………….…………………………….….53
III.4.2.- Recursos decorativos aplicados al modelo de paso barroco…….54
III.5.- Impronta del retablo gótico sevillano en la ornamentación del paso….…61
III.5.1.- El Retablo Mayor de la Catedral…………….……………….....61
III.5.2.- La importancia del neogótico en Sevilla………………………..63
III.5.2.1.- Retablo neogótico de la Capilla de Los Luises……...………..64
III.6.- La estatuaria neogótica en la ornamentación del paso…………………...67
III.7.- Adaptación del estilo neogótico a los pasos……..……..……….…….….69
III.7.1.- Recursos decorativos aplicados al modelo de paso gótico …..…70
III.8.- Impronta historicista en la ornamentación del paso.…………………..…75
III.8.1.- La impronta clásica-historicista en el retablo sevillano………...76
III.8.1.1.- El retablo mayor de la parroquia de San Roque………………76
III.8.2.- La estatuaria historicista en la ornamentación del paso………...78
III.8.3.- Recursos decorativos aplicados al modelo de paso historicista...79

CAPÍTULO IV.- Siglos XIV-XVI: Primeros precedentes de pasos


procesionales……………………………………………………………………...83

IV.1.- Breves consideraciones sobre el nacimiento de las cofradías en Sevilla...83


IV.2.- Primeros precedentes conocidos de pasos procesionales………….……..89
IV.2.1.- La roca..………………………………..…………..……………89
IV.2.2.- Las tarascas y la custodia del Corpus…….…………………..…90
IV.3.- Segunda mitad del XVI: Transición al barroco…………………..……....92
IV.3.1.- La hermandad de la Soledad de San Lorenzo en el XVI…...…...93
IV.3.2.- La hermandad de Pasión en el siglo XVI……………...…….….94
IV.3.3.- Los pasos de la cofradía de Jesús Nazareno, (el Silencio)….…..95
IV.3.4.- La hermandad del Museo en el XVI………………..……….….96
IV.3.5.- La hermandad del Gran Poder en el XVI y principios del
XVII…………………..………………………………………………….97
IV.3.6.- Pasos de la cofradía del Santo Entierro a finales del
XVI………………………………………………………………………98

CAPÍTULO V.- Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso


procesional……………………………………………………………….……100

V.1.- Consideraciones históricas, (siglos XVII – XVIII)……………….……..100


V.1.1.- La evolución de los pasos, (siglos XVII y XVIII)..............…….101
V.2.- 1ª etapa: Manierista y protobarroca, (primera mitad del XVII)…………102
V.2.1.- Aproximación al modelo barroco, (1640-1650)………………..105
V.3.- 2ª etapa, (segunda mitad del siglo XVII): Nace el modelo barroco…….…..108
V.3.1.- La participación en los pasos de grandes maestros….………....109
V.3.1.1.- La intervención de Pedro Roldán…………………..……….….110
V.3.1.2.- Francisco Antonio Gijón………………..……………………119
V.3.1.3.- Bernardo Simón de Pineda…………………………………...128
V.3.1.4.- La participación de Andrés Cansino……………………..…..129
V.3.1.5.- Sebastián Rodríguez…………………………………….....…130
V.3.1.6.- Cristóbal Pérez………………………………………………..131
V.3.1.7.- Antonio Cardoso, Francisco de Cobos y los pasos de la
hermandad del Santo Entierro de 1693……………… …………….....132
V.3.1.8.- Otras obras destacadas periodo………………..………...……135
V.4.- La difusión del paso barroco en el siglo XVIII………..………………...142
V.4.1.- Las peanas “de jaspes”…………..…………………………......143
V.4.2.- Trabajos realizados documentados, (siglo XVIII)………....…...144
V.4.3.- Obras de autor anónimo………………………………...………146

CAPÍTULO VI.- Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional.…158

VI.1.- Postrimerías del Barroco y siglo XIX: Decadencia de la talla


procesional……………………………………………………………………..158
VI.1.1.- Primeras fuentes fotográficas………………..……………...…160
VI.1.2.- Estilos artísticos en el siglo XIX…………..………………..…160
VI.2.- El paso historicista…………….…………………………......................162
VI.2.1.- El estilo “corintio”………………………..……………………163
VI.3.- Evolución del paso historicista ……………...……………….................164
VI.3.1.- Pasos de estilo historicista, (siglo XIX)...…………………..…164
VI.4.- Pasos neogóticos…………………………………………………..……187
VI.5.- El paso neobarroco: Década de los 40 y segunda mitad del XIX……....196
VI.6.- Otras obras en esta centuria…………………………………….……….213

CAPÍTULO VII.- 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional...216

VII.1.- Resurgimiento de la talla procesional, (1900-1939)……………..…….216


VII.1.1.- Estilos artísticos, (1900-1939)..………………………………218
VII.2.- El paso neobarroco, (1900-1939).…..……………....…………………220
VII.2.1.- La producción de José Gil…………………………..…...……220
VII.2.2.- Otras obras barrocas destacadas en este periodo…..………....228
VII.3.- El paso neogótico, (1900-1939)……………………………….…...…..245
VII.3.1.- Pasos de estilo neogótico..……………..…………………….245
VII.4.- El paso historicista, (1900-1939)…...……………………………….…249
VII.4.1.- Pasos de estilo historicista..………………..…………………249

CAPÍTULO VIII.- 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional..258

VIII.1.- Plenitud ornamental en los pasos……………..………………..……..259


VIII.1.1.- Estilos artísticos, (1939-2000)……………………………….260
VIII.2.- El paso barroco, (1939-2000)…………………………….…….…..…263
VIII.2.1.- Rafael Fernández del Toro…………........................….…….264
VIII.2.2.- Francisco Ruiz Rodríguez………….…………..………..…..272
VIII.2.3.- Antonio Girón………………….……….……………………276
VIII.2.4.- Antonio Castillo Lastrucci…………….…….……….……....277
VIII.2.5.- Francisco Posadas…………….…………………………...…279
VIII.2.6.- Manuel Guerra…………………………………..….………..281
VIII.2.7.- José Gallego………………………………….………………283
VIII.2.8.- Manuel Guzmán Bejarano……………..………….…………284
VIII.2.9.- Antonio Martín Fernández……….………………………..…292
VIII.2.10.- Antonio Vega Sánchez..…….………………………...……303
VIII.2.11.- José Martínez...…………………….…………...…………..306
VIII.2.12.- Juan Mayorga………………….……...……………………310
VIII.2.13.- Francisco Verdugo……….………………………..………..311
VIII.2.14.- Obras conjuntas……………………………..……………...312
VIII.3.- El paso neogótico, (1939-2000)………………………………………315
VIII.3.1.- Luis Jiménez Espinosa ………………………..………….…315
VIII.3.2.- Antonio Martín Fernández …………………………..……...317
VIII.3.3.- Obra conjunta…………………………………………..……320
VIII.4.- El paso historicista, (1939-2000)…………………….…………….….322
VIII.4.1.- Manuel Casana………………………………………………322
VIII.4.2.- José Merino………………..………………………….……..325
VIII.4.3.- José Sanjuán Navarro……………………………….….……327
VIII.4.4.- Antonio Martín.……………………………....……….….….328
VIII.5.- El paso “neorrenacentista”……………………………………………330
VIII.5.1.- Emilio García Armenta…………………………….….…….330

CAPÍTULO IX.- La talla procesional en la actualidad……..………..……333

IX.1.- La talla procesional en nuestros días………………………………..…..333


IX.1.1.- Manuel Durán………………………………...………………..334
IX.1.2.- Taller de Manuel Guzmán Bejarano………………..…………335
IX.1.3.- Hermanos Caballero…………………..……………………….336
IX.1.4.- Francisco Pineda…………………………………..…………...338
IX.1.5.- Antonio Ibáñez…………………………..………….………….339

CAPÍTULO X.- CONCLUSIONES FINALES………………….……….…342

X.1.- Conclusiones finales…………………………………………….……….342


X.1.1.- Conclusiones generales…………….……………….…………..342
X.1.2.- Conclusiones histórico-artísticas…………………….………….344
X.1.3.- Cuadrante-resumen de la evolución del paso……….…………..348

TERMINOLOGÍA…..……………………………………………………….354

BIBLIOGRAFÍA………………………….....……………………………….358

ÍNDICE GRÁFICO, (por capítulos)…………...............……………………377


CAPÍTULO I
________________________________
Capítulo I Introducción, justificación y consideraciones

I
Introducción, justificación y consideraciones

I.1.- Introducción

La Semana Santa de Sevilla constituye en la ciudad un acontecimiento que ha


sido objeto de estudio desde numerosas perspectivas históricas y artísticas.

Una gran cantidad de publicaciones han profundizado en la diversidad de


oficios que hacen posible que esta celebración devocional, sea lugar de encuentro
de artesanos y creadores de distinta índole.

Dentro de esa gran variedad de oficios relacionados con el arte cofrade,


sobresale el de la talla en madera policromada y dorada, no sólo en lo que se
refiere a la imaginería, sino a la puramente decorativa.

La imaginería ha sido el apartado en el que se ha profundizado más a nivel de


investigación, quizás por lo que las imágenes suponen para el pueblo, o por que
quizás hayan despertado mayor interés por la participación de algunos maestros
imagineros.

7
Capítulo I Introducción, justificación y consideraciones

Sin embargo, un aspecto esencial que no ha sido tan estudiado en el universo


cofrade sevillano es el soporte de esas imágenes, la base y contexto de esas
escenas pasionistas o doctrinales.

Este soporte escenográfico denominado paso, ha sido pieza clave para el


desarrollo de estas manifestaciones religiosas. Ante todo, es fiel reflejo de la
evolución del Arte a lo largo de la Historia tanto a nivel local como en un ámbito
más genérico, y un escaparate único para los mejores artistas del momento en una
ciudad como Sevilla, en la cual estas obras se desarrollaron de una forma muy
particular.

A esto debemos unir la relación entre los pasos y el retablo sevillano en sus
diferentes modalidades, objetos artísticos de semejante evolución plástica, y que
crecerán de forma pareja, construidos en muchos casos por los mismos
carpinteros, tallistas y escultores.

Desde la creación de los primeros pasos o andas procesionales en torno al siglo


XIV, estas servirían como soporte para representar una escena, empezando a
decorarse y a enriquecerse con todo tipo de elementos ornamentales de las
técnicas más variadas; este concepto decorativo irá a más y constituirá un
auténtico reto para los artistas que desarrollarían sobre ellas sus habilidades
técnicas y los ideales artísticos de su tiempo.

8
Capítulo I Introducción, justificación y consideraciones

I.2.- Estado de la cuestión

La mayoría de las publicaciones profundizan en el apartado histórico y en las


imágenes titulares de las cofradías, deteniéndose pocas veces a analizar los pasos,
aunque a partir del siglo XIX sí encontramos datos interesantes, como los
aportados por José Bermejo y Carballo y Félix González de León.

Asimismo, no son pocos los estudios monográficos sobre cofradías, boletines,


artículos de prensa y revistas cofrades, o reportajes de temas más o menos
concretos sobre pasos procesionales, o algún oficio relacionado con los mismos,
además de documentos antiguos referentes a contratos o acuerdos de las cofradías
con los encargados de hacer los pasos.

También han sido objeto de estudio archivos de estas hermandades, algunos


muy antiguos y valiosos.

Hemos elegido cinco de las publicaciones que contienen mayor información


sobre el tema que nos ocupa para definir el estado de la cuestión.

• Glorias Religiosas de Sevilla, por José Bermejo y Carballo, (1817-1888).


Sevilla 1882, (reimpresión en 1977)

En Glorias Religiosas de Sevilla, el historiador Bermejo y Carballo enumera


todas las hermandades existentes, dedicando en el capítulo de cada cofradía una
parte dedicada a las andas procesionales que cada una de ellas tenía en el siglo
XIX.

Pocas veces indaga en los antiguos pasos, pero sin duda se trata del mejor
documento histórico-artístico de estas obras durante el XIX, ya que el autor

9
Capítulo I Introducción, justificación y consideraciones

describe la mayoría de los existentes en esos años con todo lujo de detalles y,
aunque no analiza su estilo, suele valorar la calidad artística de cada uno de ellos.

• La imaginería procesional sevillana: Misterios, nazarenos y Cristos, por


Jesús Miguel Palomero Páramo. Sevilla 1981.

La primera parte del libro se desarrolla en torno a la importancia sociocultural


de las cofradías a lo largo de los siglos, refriéndose posteriormente a los títulos de
las corporaciones, fusiones entre ellas, extinciones y diversos conceptos y
definiciones para comprender su existencia.
Este primer capítulo contiene un apartado interesante respecto al nacimiento de
las procesiones de Sevilla y los primeros pasos, algo que continúa en el capítulo II
con el origen de la imaginería procesional, ideales artísticos, primeros contratos y
algunos datos histórico-artísticos sobre la creación de las primeras andas.

El capítulo III es de carácter iconográfico, enumerándose al final del mismo


todos los datos alusivos a los pasos de misterio que existían en el momento de la
publicación del libro.

Por tanto, esta investigación nos aporta datos de las primeras andas y algunas
fichas técnicas de las obras existentes en el siglo XX.

• Anales de las Cofradías sevillanas por Juan Carrero Rodríguez, (1934-


2006). Sevilla 1984.

Este importante historiador cofrade del siglo XX, menciona en sus apuntes
muchos de los pasos que han existido en las hermandades de Sevilla.

10
Capítulo I Introducción, justificación y consideraciones

Sus Anales ofrecen una visión muy amplia de las cofradías, sin centrarse en
el tema que nos ocupa, ya que en la mayoría de las ocasiones tan sólo cataloga
los pasos en su estilo artístico sin profundizar en su descripción.

Por ser sobre todo una publicación de carácter histórico, aporta escritos o
contratos relacionados con los encargos, definiendo algunos rasgos estilísticos
que se desprenden de esos documentos.

Sin duda esta publicación, al igual que otras del autor, resulta magnífica por
su aportación histórica.

• Sevilla Penitente. Editorial Gever. Sevilla 1995.

Esta colección de varios autores la componen tres tomos en los que se


abordan diferentes temas de la Semana Santa sevillana. El tomo II contiene un
capítulo dedicado a los pasos de los Cristos, en el cual se hace un repaso histórico
general de las andas conocidas.

Su título es “El paso procesional. Talla, dorado y escultura decorativa”, a


cargo del conocido historiador sevillano D. José Roda Peña, desde la página 2
hasta la 80.

El capítulo aporta datos importantes, constituyendo una interesante


aproximación histórico-artística al paso procesional, desarrollada de forma
cronológica y con abundante documentación gráfica, -sobre todo de las obras
contemporáneas-, pero sin llegar a resultar un estudio definitivo.

11
Capítulo I Introducción, justificación y consideraciones

• Palios de Sevilla, (tomo II). Ediciones Tartessos. Sevilla 2003.

El libro forma parte de una colección de cuatro tomos en los que se hace un
estudio de los pasos de palio de Sevilla en diferentes ámbitos. El tomo II, titulado
“Los pasos de palio hispalenses”, lo desarrolla el historiador sevillano D. José
Fernando Galardón de la Banda, el cual se ocupa del apartado artístico de estas
obras.

Aunque nosotros hemos enfocado nuestro tema en los pasos de Cristo y su


relación con el retablo sevillano, la estructura de este libro es uno de los pocos
precedentes de interés que pueden asociarse a la iniciación de nuestro trabajo.

Además de una interesante introducción, se establece una aproximación


histórica al nacimiento de estas obras y su importancia en Sevilla.

Asimismo, profundiza en las numerosas variantes de pasos de palio a partir del


siglo XX, terminando con una completa catalogación de todos los actuales,
partiendo de su proceso histórico y terminando con su descripción actualizada.

12
Capítulo I Introducción, justificación y consideraciones

1.3.- Justificación del tema

Podemos afirmar que el paso procesional ha sido objeto de análisis desde una
perspectiva histórico-artística en la que se han analizado sus diferentes estilos sin
ahondar en las peculiaridades de cada uno, sin relacionarlos claramente con el
retablo sevillano, y sin marcar unas pautas en el tiempo para saber cómo han
evolucionado. Tan solo de una manera superficial se ha hecho mención al carácter
arquitectónico de los mismos y, aún menos, se ha valorado su nexo de unión con
el retablo sevillano en sus diferentes modalidades.

A esto hay que añadir que jamás se han catalogado en una misma publicación
todos los pasos procesionales que han existido en la Semana Santa de Sevilla.

Partiendo entonces del estado de la cuestión que nos aporta la mencionada


bibliografía, enumeramos nuestras pretensiones para este trabajo, objetivos los
cuales podemos resumir en los siguientes apartados:

1.- Analizar las primeras andas procesionales, (ss. XIV-XVI) para entender su
origen, su funcionalidad, y los primeros elementos que las decoraban. Valorar
asimismo como poco a poco han sido objetos artísticos que han evolucionado
hacia un enorme virtuosismo decorativo.

2.- Descubrir los diferentes estilos artísticos que se han adaptado a estas obras,
por lo que no han permanecido ajenas a las distintas vertientes artísticas de su
tiempo.

3.- Entender los nexos de unión entre el lenguaje plástico utilizado en los pasos
y el de los retablos sevillanos en sus diferentes modalidades, además de apreciar
cómo se ha adaptado ese lenguaje a un espacio tan particular como es un paso.

13
Capítulo I Introducción, justificación y consideraciones

4.- Valorar el hecho de que no sólo han participado en la consecución de los


pasos meros artesanos, sino numerosos artistas de primera línea, muchos de ellos
también ejecutores de esos magníficos retablos que encontramos en iglesias
sevillanas.

5.- Entender por qué las cofradías han dado especial importancia a estos
soportes escénicos, ya que encargarían su realización a las primeras figuras del
ámbito pictórico y escultórico del momento, los cuales participarían tanto en un
campo creativo como otro más artesanal.

6.- Realizar un catálogo completo de todos y cada uno de los pasos de Cristo y
de Misterio que se han hecho para la Semana Santa de Sevilla.

14
Capítulo I Introducción, justificación y consideraciones

I.4.- Definición y consideraciones

I.4.1.- Los pasos o andas procesionales

Juan Carrero define como andas al


“tablero sostenido por varas paralelas y
horizontales que sirve para conducir a las
Imágenes o las Custodias procesionales”.
En el caso que nos ocupa, la describimos
como una parihuela o estructura de cuatro o
seis patas, -también llamadas en el argot
Fig. 1: Parihuela
cofrade “zancos”-, trabadas por una
zambrana o listón. En la parte superior de
dicha estructura van las trabajaderas, que son los travesaños utilizados por
personas para portarlas. A estas personas se les denomina tradicionalmente
“costaleros”1.

Esta estructura, que puede ser de madera o metálica, es la base o esqueleto


sobre el cual se construye un paso.

El término procesión, derivado del verbo latino procedo, o de la palabra


processio también latina, quiere decir “marchar o pasar adelante”; lo definimos
también a partir del Diccionario de la Lengua Española que dice, en su tercera
acepción, que es el “acto de ir ordenadamente de un lugar a otro muchas
personas con algún fin público y solemne, por lo común religioso”, por lo que se
entiende que todas las andas o pasos serán procesionales desde el momento en el
que se ejecutan para formar parte de una procesión.

En el caso de la ciudad de Sevilla, la denominación más común que se le da


a unas andas procesionales es la de paso, algo explicable gracias a la definición de

1
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Diccionario Cofrade. Sevilla 1980, p. 28.

15
Capítulo I Introducción, justificación y consideraciones

este término en el diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, el cual,


en su 22º acepción, lo define como “cada uno de los sucesos más notables de la
Pasión de Jesucristo”.

El historiador Juan Carrero Rodríguez hace una definición semejante: “la


efigie o grupo que representa un suceso de la Pasión de Cristo”2.

Esta palabra, teniendo en cuenta su procedencia latina, significa


“sufrimiento”.

I.4.1.1.- Tipos de paso

En la Semana Santa sevillana existen dos tipos:

• De Cristo o de Misterio: Muestra alguna escena de la vida de Cristo, -


generalmente relacionada con su pasión y muerte-, o alguna de tipo
doctrinal o alegórica.

Si es una escena cristífera, puede aparecer tan solo la imagen de Jesús, aunque
en general va acompañado de otras, caracterizándose entonces por su teatralidad y
denominándose de forma más común “de misterio”, por representar un momento o
paso de las Sagradas Escrituras.

• De palio: En él aparece representada María, la mayoría de las veces sin


acompañamiento, aunque puede ir una imagen de San Juan o María
Magdalena. Se caracteriza por llevar el denominado palio, que es el dosel o
techo decorativo que protege el paso.

2
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Diccionario…, p. 220.

16
Capítulo I Introducción, justificación y consideraciones

En lo que se refiere a su estructura, debemos subrayar que sobre la parihuela


de los pasos de Cristo o Misterio se colocará un “canasto” en los que se asentará la
escena, mientras los de palio sólo tienen como estructura la parihuela propiamente
dicha, salvo alguna inusual excepción3.

I.4.2.- La ejecución de los pasos

La ejecución de un paso, como obra compleja que es, corre a cargo de


diversas personas dedicadas a distintos oficios.

Los carpinteros o herreros, imagineros y los profesionales de la talla


artística en madera serán los principales responsables de la ejecución de estas
obras, además de doradores y orfebres, que contribuirán a su enriquecimiento
ornamental.

Su diseño correrá a cargo de un artista dependiendo de cada caso, bien un


tallista, un imaginero o cualquier otra persona vinculada al mundo del arte.

• Los carpinteros y herreros

Los carpinteros se ocupan de la construcción de la parihuela. Pocas veces se


ocupan del trabajo artístico, aunque en ocasiones pueden intervenir. Aunque es
menos común, a veces esta estructura es metálica, encargándose entonces un
herrero de su consecución.

3
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Diccionario…, p. 28.

17
Capítulo I Introducción, justificación y consideraciones

• Los tallistas

Llevan a cabo la talla artística en madera, ocupándose a veces de su


estructura, haciendo entonces las labores de carpintería.

• Doradores

Se encargan de acometer el dorado del paso y, en algunos casos, de la


policromía de elementos decorativos.

• Orfebres

Enriquecen el paso con algún objeto ornamental trabajado en metal,


principalmente plata o alpaca plateada.

• Los imagineros

La palabra imaginero, según el Diccionario de la Lengua Española significa


“estatuario o pintor de imágenes”. Debido a que la palabra “imagen” tiene como
segunda acepción la de “estatua, efigie o pintura de Jesucristo, de la Virgen, o un
Santo”, deducimos que el imaginero será “aquel que hace escultura, efigies o
pinturas sagradas”, tanto para la consecución de una escena como a nivel
ornamental.
Sabemos que a lo largo de la historia no siempre un autor tallaba y
policromaba; de hecho, en la etapa más brillante de los gremios, -el siglo XVII-,
no era habitual que un artista realizara una obra de forma completa.
Es difícil saber con exactitud cuando se produce el momento a partir del
cual se aúnan los dos oficios, - escultores que tallan la obra y pintores que
ejecutan la policromía-, aunque parece evidente que a medida que iba
desapareciendo el carácter gremial de los talleres, más individualista era el trabajo.

18
Capítulo I Introducción, justificación y consideraciones

Desde luego, sería razonable que los escultores intentaran ejecutar, o al


menos dominar, la policromía de las imágenes, aunque hay que decir que la
legislación gremial sevillana fue tajante a este respecto, ya que sólo se podía
ejercer una profesión estando examinado en la misma4.

I.4.3.- La madera como material principal

El material principal para la ejecución de los pasos de Cristo o de Misterio


es la madera, borne o cedro, siendo posteriormente embolada y dorada, mientras
que los pasos de palio, salvo alguna excepción, se construyen por medio de la
técnica del repujado de metal.
Sin duda, el hecho de que la madera sea la base de los pasos de Cristo o
Misterio, lo relaciona especialmente con el retablo sevillano en sus diferentes
estilos, ya que su evolución técnica y morfológica será parecida.
Otros materiales se utilizarán para su enriquecimiento, como la plata, el
carey, el marfil o el bronce.
En ocasiones se complementan dos o más técnicas.

4
GAÑÁN MEDINA, Constantino: Técnicas y evolución de la imaginería polícroma en Sevilla”.
Universidad de Sevilla 1999, p. 25.

19
CAPÍTULO II
________________________________
Capítulo II El paso procesional como objeto artístico

II
El paso procesional como objeto artístico

II.1.- La composición en los pasos de Cristo o de Misterio

Exteriormente la podemos dividir en cuatro partes: Escena, canasto o


canastilla, respiraderos y faldones.

Fig. 1.- Partes de un paso procesional

21
Capítulo II El paso procesional como objeto artístico

• Faldones: Telas que cubren la parihuela o estructura interior que sirve


como soporte a todos los elementos que componen la composición.
• Respiraderos: Objeto decorativo que también cumple una función de
ventilación por la que recibe su nombre. Sobre él, delante del paso, se sitúa
el “llamador”, que es la herramienta con la que se llama a los costaleros
para avisarles de la reanudación o la finalización de la marcha. También en
los laterales se sitúan las denominadas maniguetas, objeto el cual hoy día
tiene una función puramente decorativa.
• Canasto o canastilla: Sobre él se asientan las imágenes que reproducen una
determinada escena. El techo de la misma se denomina mesa, lugar sobre el
que se disponen las figuras de la composición.
• Escena: Sobre el entarimado o mesa, se disponen una o más imágenes que
describen un determinado momento bíblico o doctrinal.

Como ya hemos apuntado, debemos subrayar que esta es la composición


habitual de los pasos de Cristo o de Misterio, ya que los pasos de palio, salvo
alguna inusual excepción tan solo llevan respiraderos, careciendo por tanto de
canastilla.

II.1.1.- Tipos de composición

• Se clasifican según la composición del canasto:

1) Composición piramidal: El canasto se


compone desde su parte inferior de más
grande a más pequeño, estrechándose por
tanto la mesa del paso.

Fig. 2.- Paso de composición piramidal

22
Capítulo II El paso procesional como objeto artístico

2) Pirámide invertida o de maceta: Cuando el


canasto se abre desde la parte inferior hacia la
superior, provocando que haya más espacio
en la mesa donde se desarrolla la escena.

Fig. 3.- Paso “de maceta”

3) Composición de perfil recto: En estos


casos el canasto es totalmente lineal,
provocando una forma compositiva de tipo
rectangular.

Fig. 4.- Paso de perfil recto

• Además, existen dos tipos de respiradero:

1) De cajón: Se denomina así por su


composición rectangular. Normalmente se
divide en pequeñas secciones o casetones.

Fig. 5.- Respiraderos “de cajón”

23
Capítulo II El paso procesional como objeto artístico

2) Dinámico: Su línea no es continua, ya que


asciende y desciende en función de la
talla.

Fig. 6.- Respiradero dinámico

II.1.1.1.- Tipos de iluminación

En los pasos resultan importantes como complementos los candelabros o


faroles que iluminan la escena y que nacen del propio canasto. Lo hacen
habitualmente en las esquinas, aunque pueden situarse en otras zonas de la
composición.

• Candelabros de guardabrisas dinámicos: Brazos


tallados que se distribuyen de forma caprichosa.
Cada brazo sostiene una vela, habitualmente
protegida por un recipiente de cristal denominado
guardabrisa, el cual a veces lleva una “coronilla”
que la decora en el borde. Es el tipo de
iluminación más utilizado y, aunque su impronta
Fig. 7.- Candelabro es barroca, podemos verlo en pasos de otras
de un paso
tendencias artísticas.

24
Capítulo II El paso procesional como objeto artístico

• Candelabros de guardabrisas “de piña”: Brazos


tallados que se distribuyen y elevan de forma
simétrica y radial.

Fig. 8.- Candelabro


“de piña”

• Farol: Casi siempre es de metal repujado, aunque


existen casos en los que el objeto es tallado en
madera.

Fig. 9.- Farol

25
Capítulo II El paso procesional como objeto artístico

II.2.- Condicionantes espaciales y morfológicos de los pasos

La construcción y elaboración de los pasos conllevará unas dificultades y


unos condicionantes a tener en cuenta, los cuales enumeramos a continuación.

• Condicionante urbano

El complejo callejero y arquitectónico de la ciudad es el primer factor a


tener en cuenta para justificar la proporción de un paso, lo que explicaría el mayor
tamaño de este soporte escénico en ciudades caracterizadas por calles más anchas.

En este sentido debemos tener presente el tamaño de las puertas de la


Catedral por las que entran las procesiones, lugar donde desde 1604 hacen
Estación de Penitencia las cofradías, por mandato del Cardenal Niño de Guevara1,
lo que pudo condicionar las medidas de los pasos sevillanos.

• Condicionante escénico

En función a la escena que soporten las andas y el número de imágenes que


lleve el paso, este será más grande o más pequeño.

• Condicionante morfológico

Debido a lo particular del espacio compositivo los autores adaptarán los


motivos ornamentales al canasto y los respiraderos del paso.
El reto será, por tanto, componer dichos elementos decorativos en el
espacio que permite el soporte.
1
MARTÍN DE LA TORRE, A: “Via Crucis a la Cruz del Campo” en Archivo Hispalense. T. XVI, números
51-52. Sevilla 1952, pp. 55-56.

26
Capítulo II El paso procesional como objeto artístico

II.2.1.- Sobre el tamaño de los pasos

Aunque las primeras andas eran muy pequeñas, podemos afirmar que las
medidas actuales de los pasos se imponen a partir de la segunda mitad del XVII.

Un dato que demuestra esta afirmación es una obra concertada por Pedro
Roldán para la Quinta Angustia en 1659, que debía medir 2,08 x 4,59 m., medidas
impresionantes para esa época2.

Otro documento que corrobora esta afirmación es el dato del que


disponemos por una importante obra descrita en 1680, encargada a Ruiz Gijón por
el escribano Juan Muñoz Naranjo; en el libro II de su escribanía, folio 1003, y
fechado el 22 de julio dice: “…me obligo a hacer una urna con pariguela la cual
a de tener quatro varas y media de largo y de ancho el que tuvieren las puertas
por donde entran y salen las cofradías de la santa iglesia mayor y la dicha urna e
de hazer con las hechuras de nuestra señora y san juan y el águila y con ocho
tarjas con ocho ystorietas del Apocalissi y veintiocho ángeles los veinti y quatro
que acompañen las tarjas desnudos y lo cuatro bestidos en las esquinas con sus
tarjetas para escudos y la dicha urna y ymagenes todo ello a de ser de talla y de
madera y no de otro genero de madera alguna…”3

Teniendo en cuenta que una vara, -medida de aquellos tiempos-, equivalía a


unos 83 cm., el paso mediría unos 3,75 metros de largo, lo que evidencia que la
obra era de una considerable envergadura.

Por tanto, teniendo en cuenta que hoy día los pasos de Cristo o Misterio
más largos están en torno a 5,50 m., constatamos que estas medidas de finales del
XVII se han mantenido hasta nuestros días.

2
SANCHO CORBACHO, Heliodoro: El escultor sevillano Pedro Roldán y sus discípulos, Sevilla 1950, p.
30-31, 53-54.
3
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: “Los ángeles mancebos de la bofetada”, en Diario ABC (Sevilla), 30 de
julio de 1981.

27
Capítulo II El paso procesional como objeto artístico

II.3.- Características y funcionalidad de los pasos

• Soporte escénico

Sirve como base o peana de la escena representada sobre la mesa del paso.

• Ideal formativo y devocional

Las procesiones organizadas por la cofradías tuvieron por objeto promover la


devoción pública, como decía el historiador Bermejo y Carballo: “Con este fin
fueron instituidas esas utilísimas confraternidades, dedicadas a la contemplación
de la Pasión y Muerte de Nuestro Señor Jesucristo; y para que su memoria se
renovase con más eficacia en los corazones cristianos en los días que la Iglesia
con especialidad la recuerda, dispusieron un culto público, cual es, llevar
procesionalmente y con la mayor devoción la imagen de Nuestro Divino Salvador
en alguno de los pasos de su Pasión cruenta”4.

Sin duda, cualquier desfile procesional responde al deseo de exteriorizar la


fe y el culto a Dios con dignidad y grandeza. La procesión recuerda al pueblo de
Dios en marcha hacia la tierra de promisión y refleja la conducta nómada del
hombre sobre el planeta, desfilando simbólicamente ante la sociedad, por lo que
despierta interés popular5.

En una procesión, el paso es elemento devocional y formativo, no sólo por


la escena que portan, sino por numerosísimos elementos decorativos en los que
aparecen figuras con personajes evangélicos, -del Nuevo Testamento o del
Antiguo-, además de escenas de todo tipo gracias a las tarjetas o cartelas, capillas
o pequeños cuadros con múltiples representaciones.

4
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas de Sevilla. Sevilla 1882, pp. 11-12.
5
RODA PEÑA, José: “El paso procesional. Talla, dorado y escultura decorativa”. En Sevilla Penitente.
Tomo II. Sevilla 1995, p.84.

28
Capítulo II El paso procesional como objeto artístico

• Valor estético

Muy pronto la belleza ornamental de este tipo de obras resultará prioritaria


para las cofradías, las cuales intentan tener los pasos más bellos y suntuosos.

El centro de atención del espectador no va a limitarse a la simple


contemplación de la escena que se desarrolla en la parte superior del paso, sino en
el mismo soporte.

Progresivamente se complementarán con gran cantidad de elementos


ornamentales llegándose a asociar con diversas tendencias artísticas.

Sorprende que, partiendo de las formas simplísimas que decoraban en sus


primeros tiempos estas obras, se evolucione hasta el punto de encontrar en un
mismo paso multitud de objetos de decoración.

• Utilidad litúrgica

Al igual que el paso se concibe para el exterior, también debemos contar su


actividad litúrgica en el interior del templo, tanto para el culto como para su
carácter expositivo.

• Ventilación

Bajo las mismas se adentran hombres para portarlas, por lo que su


tratamiento ha estado en cierto modo condicionado a este aspecto.

29
Capítulo II El paso procesional como objeto artístico

Debido al escaso espacio de las mismas y a la cantidad de personas que las


llevan, los autores han tendido a hacerlas más ligeras de peso y a tallarlas calando
la madera para así conseguir una ventilación mayor del interior del paso.

30
Capítulo II El paso procesional como objeto artístico

II.4.- Los pasos y su impronta retablística

Los pasos poseen un fuerte contenido arquitectónico, por su concepción


técnica y morfológica.

Sin duda, estas ejecuciones son verdaderas adaptaciones, -en un espacio tan
particular como es un paso procesional-, de diversos conceptos arquitectónicos y
ornamentales de su época, y muy especialmente del retablo sevillano.

A lo largo de la historia la evolución de las andas ha ido de la mano de los


retablos, tanto a nivel estilístico como morfológico. Ya desde el Manierismo
finisecular del Quinientos, para seguir con su consolidación posterior y difusión
del modelo Barroco, así como la eclosión neoclásica y movimientos artísticos
decimonónicos hasta el siglo XX, en el que predomina de nuevo el neobarroco6.

La unión y potenciación del concepto del retablo en los pasos se produce en


el último tercio del XVII, en el que se tipifica por vez primera un modelo de
canasto de plenitud barroca, con formas ampulosas y dinámicas, gracias a la
intervención de grandes maestros de la talla del momento.

Estos grandes maestros, -muchos de ellos habituales creadores de retablos-,


aplicarán sus ideales artísticos a la composición y el espacio que un paso permite,
adaptando los elementos ornamentales y figurativos a estas obras. Poco a poco las
corporaciones intentarán que sus pertenencias sean las más suntuosas y de calidad
artística, por lo que lo mejor será contratar para sus encargos a artistas de
garantías.

Por tanto, para apreciar la evolución del paso procesional resulta


fundamental entender su nexo de unión con el retablo sevillano.

6
RODA PEÑA, José: “El paso procesional. Talla, dorado y escultura decorativa…, p.3.

31
Capítulo II El paso procesional como objeto artístico

II.4.1.- El paso procesional: retablo itinerante en la calle

Dos factores fundamentales diferenciarán un retablo de un paso


procesional: el condicionante espacial y morfológico, -comentado anteriormente-,
y el carácter itinerante de las andas.

El hecho de que las procesiones sean manifestaciones callejeras, unido a la


evolución del tamaño de los pasos, ha provocado que estas obras hayan tenido que
ser trasladadas aportándole una peculiaridad única: su carácter dinámico.

Son actos de protestación de fe con el objetivo habitual de hacer Estación


de Penitencia, normalmente a la Catedral de la ciudad.

II.4.1.1.- Costaleros para llevar los pasos

Aunque se conoce la existencia de porteadores desde finales del XVI, es de


imaginar que debido al escaso tamaño de las primitivas andas, serían pocos los
hombres que necesitarían para llevarlas, a lo que debemos sumar que las primeras
imágenes estaban hechas en su mayoría de pasta de madera, por lo que su peso
sería escaso.

El mismo historiador Arenas González ya lo expresaba así en su artículo


escrito el 23 de marzo de 1985 en El Correo de Andalucía titulado “Las cofradías
de Sevilla”, al afirmar que entre 1590 y 1600 la hermandad de Monte-Sion sólo

32
Capítulo II El paso procesional como objeto artístico

tuvo que contratar a dieciséis costaleros para llevar el paso de la Oración en el


Huerto7.

Otro ejemplo de esos primeros tiempos lo tenemos en la extinguida


cofradía de los Sagrados Clavos, Nuestra Señora de la Cabeza y San Juan
Evangelista, que aprueba unas Reglas en 1595, apareciendo en el cortejo el paso
de un crucificado, el cual llevarían los hermanos que señalaren “los Alcaldes y
Mayordomo”8.

A este respecto, el profesor


Teodoro Falcón realizó un interesante
descubrimiento en 1982, encontrando
en los archivos de la Catedral de
Sevilla unos dibujos de finales del
siglo XVII, (fig. 10), alusivos a la
procesión del Corpus en el que
aparecían estos porteadores, vestidos Fig. 10.- Dibujo de costaleros atribuido a
Lucas Valdés
con pantalón corto, camisa suelta
cogida con una faja y abultadísimo
costal muy parecido a los actuales. También hay datos que corroboran que estas
personas procedían de los muelles, incluso se detalla en una crónica del 3 de junio
de 1649 que por falta de costaleros a causa de la peste no pudieron procesionar la
Custodia y otras andas9.

El Abad Gordillo, (1561-1644), se refería a ellos como “los hombres


seglares de buenas fuerzas”10 aunque en la actualidad, el nombre más utilizado es

7
ARENAS GONZÁLEZ, H.: “Las cofradías de Sevilla”, en El Correo de Andalucía., (Sevilla), 23 de
marzo de 1985.
8
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p. 320.
9
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: “Historia de capataces y costaleros I”, en Diario ABC, (Sevilla), 10 de
marzo de 1985.
10
FALCÓN MÁRQUEZ, Teodoro: “Iconografía de Pasos, Costaleros y Capataces en la Sevilla del
Barroco”. En Actas del I Congreso de Capataces y Costaleros. Sevilla 1993, p.40.

33
Capítulo II El paso procesional como objeto artístico

el de costalero, nombre que les viene por el saco o costal que llevan sobre su
cabeza y nuca, para resultarles más cómodo el trabajo de portarlos.

Como ya apuntamos en el primer capítulo, la posibilidad de que sean


llevados por personas es viable gracias a los travesaños denominados
“trabajaderas”, por lo general de madera, que forman parte de la parihuela,
alineados a lo largo del paso de forma horizontal.

Todo hace indicar que los primeros


porteadores los cargarían desde el
exterior, desconociendo cuando surge la
necesidad de introducirse debajo de las
andas. Esto explicaría la existencia en los
pasos de las denominadas maniguetas11,
pequeños brazos o salientes situados en
Fig. 11.- Manigueta de un paso de Cristo
cada esquina del mismo, (fig. 11).

II.4.1.2.- La mecánica aplicada a los pasos

En algunos momentos de la historia de las cofradías, se han dado casos en


los que se ha valorado la posibilidad de que los pasos sean trasladados por medios
mecánicos, en vez de hombres; normalmente esta circunstancia viene provocada
por la falta de costaleros que los carguen.

Una de las pruebas más conocidas se llevó a cabo durante la estación de


penitencia del Gran Poder el 26 de marzo de 1875, resultando un auténtico
fracaso, debido principalmente a que la imagen acusaba un temblor de muy mal
gusto que no satisfizo a sus devotos. El artilugio lo había creado Manuel

11
RODA PEÑA, José: “El paso procesional. Talla, dorado y escultura decorativa…, p.5.

34
Capítulo II El paso procesional como objeto artístico

Requejo12. Se da la circunstancia de que la causa del intento fue el mal


comportamiento de los costaleros en la estación de penitencia del año anterior, por
lo que la cofradía pretendió crear este sistema para no necesitar de cuadrillas para
llevar las andas13.

La misma corporación, siguiendo las indicaciones del Cardenal Ilundáin,


llevó a cabo un nuevo intento para motorizar sus pasos el 28 de enero de 1930. La
prueba, que no fue pública, se hizo con ingenio de Laverán, pero finalmente llegó
a oídos del pueblo que alzó la voz en contra de este artilugio, por lo que se
descartó la idea radicalmente14.

El 1 de noviembre de 1972 se acometió la prueba del “paso propulsado”


por parte de Rafael Ponce Jiménez, resultando de nuevo infructuosa pues, a pesar
de que se intentó imitar el andar del costalero, nunca se llegaba a la dinámica real
provocada por el trabajo de los mismos15.

Lo que parece evidente es que este tipo de inventos nunca han sido del
agrado de los cofrades.

12
ACADEMIA DE BELLAS ARTES DE SANTA ISABEL DE HUNGRÍA: Acta sesión de Junta del 27
de febrero de 1875. // PUEBLO, -periódico-, Sección Andalucía Oriental. Sevilla 21 de febrero de 1970.
13
SÁNCHEZ HERRERO, José: Semana Santa en Sevilla. Sevilla 2003, p. 232.
14
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales de las Cofradías sevillanas. Sevilla 1984, p. 412.
15
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Hemeroteca Cofradiera. Volumen I, Artículos de revista y prensa
especializadas sobre la Semana Santa de Sevilla, años 1972-1987. Sevilla 2003, pp. 16-17.

35
CAPÍTULO III
________________________________
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

III
Impronta del retablo sevillano en la ornamentación
del paso

III.1.- Importancia de los retablos en relación al paso procesional

Ya hemos apuntado en el capítulo anterior la importancia del retablo


sevillano en relación a los pasos, y cómo desde el siglo XVII han evolucionado de
manera semejante en su concepción y sus características ornamentales.

Es por ello por lo que en este capítulo, vamos a comentar los modelos de
retablo sevillano que han sido adaptados al paso procesional, basándonos en
diversos retablos, que sirvan como ejemplo para apreciar esa adaptación.

Todo ello, con el objetivo de encontrar semejanzas entre los mismos y


confirmar que esos modelos tradicionales de retablo, podemos apreciarlos
adaptados a unas andas procesionales.

37
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

III.1.1.- Estilos artísticos adaptados a los pasos

Desde que se hicieron los primeros pasos, existen tres estilos artísticos
desarrollados en ellos.

• Barroco: El más utilizado desde el siglo XVII hasta nuestros días, basado
principalmente en los modelos de retablos sevillanos barrocos en sus
diferentes modalidades.
• Gótico/Neogótico: Comienzan a tener protagonismo a partir de la
segunda mitad del XIX. Se trata de un estilo de carácter revisionista que
tiene como principal referencia el Retablo Mayor de la Catedral de la
ciudad, así como diversos retablos o construcciones de impronta
neogótica.
• Historicista: A diferencia de los casos anteriores, resulta complicado
relacionarlos con los retablos sevillanos, tratándose de un estilo ecléctico
en el que se funden elementos y recursos ornamentales clásicos,
renacentistas, barrocos incluso en algunos casos, neogóticos. Comienza a
utilizarse en los pasos en el siglo XIX.
• Neorrenacentista: Esta denominación la hemos utilizado para clasificar
obras que parten de un eclecticismo historicista, pero que contienen una
marcada impronta Renacentista. Tan sólo hemos clasificado un paso de
esta tipología, realizado en 1957.

38
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

III.2.- Impronta del retablo barroco sevillano en la ornamentación del paso

A continuación vamos a comentar cuatro modelos de retablo barroco


sevillano para, posteriormente, apreciar la impronta de los mismos en el paso
procesional.

III.2.1- Modelo de Francisco Dionisio de Ribas

Dionisio de Ribas, (1616-1679) pertenece a una familia de cordobeses


afincados en Sevilla desde 1630, en la cual destacó su hermano Felipe de Ribas,
(1609-1648).

Fig. 1.- Retablo de la Iglesia de los Terceros

39
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

Este último puede considerarse impulsor del cambio hacia unas fórmulas
plenamente barrocas, aunque, debido a su muerte prematura, su hermano Dionisio
continuará la evolución estilística introduciendo cambios importantes a partir de la
segunda mitad del siglo XVII.

Como ejemplo tenemos el retablo mayor de la Iglesia de los Terceros de


Sevilla, realizado en 1669 en madera y dorado en su acabado, (fig. 1).

Las señas de identidad de este modelo son:

• Composición: Posee un solo cuerpo y ático. El banco se forma mediante


niños atlantes que soportan las columnas; dos postigos de medio punto y
casetones con decoración vegetal.

La separación de los cuerpos se hace mediante grandes volutas en la que se


disponen dos figuras alegóricas.

• Soporte: Como elemento principal sobresale la inclusión de la columna


salomónica, en este caso con decoración vegetal. Este recurso da nombre al
retablo salomónico y será protagonista principal en los primeros años del
barroco. Aparece tímidamente en España durante el siglo XVII y se
implanta definitivamente en la segunda mitad, aportando su característica
dinámica, movilidad, fuerza y viveza tectónica y decorativa. Estas
columnas las sostienen ángeles atlantes.

Algunos han vinculado la aparición de la columna salomónica a José de


Arce, (¿?-1666), gracias al encargo conocido para la Cartuja de Jerez de este autor
en 1637, en donde sabemos que había este tipo de motivo decorativo, algo
probable pues podemos constatar que Arce estuvo en Italia unos años debiendo
conocer por tanto el baldaquino de San Pedro de Roma.

• Motivos ornamentales: Predominan modelos inspirados en el mundo


natural, en especial los de origen vegetal, interpretaciones de la naturaleza,

40
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

como flores, frutas, hojas de árbol, etc… Especial protagonismo tiene la


denominada “hoja de acanto”, que a la larga será la habitual en la
modalidad de retablo y paso barroco por excelencia. La estatuaria barroca
se dispone en unas hornacinas de las calles laterales, en las que aparece San
Luis y San Elesario, San Ivo, San Conrado.

III.2.2.- Modelo de Bernardo Simón de Pineda

La producción de Simón de Pineda, (1637-1704?), autor afincado en Sevilla


desde 1652, será difícilmente comparable a la de otros autores de su época.

Fig. 2.- Retablo del Hospital de la Caridad

41
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

Su tipología de retablo constituirá el súmmun de teatralidad y efectismo,


destacando por sus nuevas pautas estructurales y ornamentales.

Como modelo incomparable de este espíritu rompedor tenemos el retablo


mayor del Hospital de la Caridad de Sevilla, (fig. 2), en el cual colaborarán
importantes artistas como Juan Valdés Leal, (1622-1690), encargado en este caso
de la pintura y el dorado, y Pedro Roldán (1624-1699), el cual era la primera vez
que colaborara con el maestro, encargándose este último de la estatuaria.

Se trata del retablo de madera dorada más importante e influyente del


barroco sevillano, después del seiscientos.

Las señas de identidad del modelo:

• Composición: Retablo articulado por cuatro columnas salomónicas que


sostienen el primer y único cuerpo. El centro del retablo está organizado
mediante un baldaquino sostenido por cuatro columnas retalladas con anillo
de separación en el tercio inferior emplea cartelas ovales que no dejan
verlo1.
• Soporte: Columna salomónicas de orden gigante, de cinco espiras y media,
sostenidas por dos ángeles atlantes cada una, y decoradas de hojas y
racimos de vid. Su capitel es de orden corintio con los caulículos hacia
arriba.
• Motivos ornamentales: Principalmente inspirados en la naturaleza, como la
hoja de acanto, hoja de cardo, hojas cartilaginosas, conchas, volutas, frutas
y flores.

A nivel de estatuaria destaca el grupo principal que representa el Entierro


de Cristo. Además, en las calles laterales se disponen imágenes de San Jorge y
San Roque y en la parte central del ático se encuentra un medallón con una
alegoría de la Caridad; a ambos lados, representaciones de la Fe y la Esperanza.

1
HALCÓN, Fátima: “El Retablo salomónico”. En El Retablo Barroco Sevillano. Sevilla 2000, p.275.

42
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

Numerosos ángeles mancebos que revolotean alrededor de las Virtudes;


atlantes y cabezas de ángeles completan la decoración figurativa.

III.2.3.- Modelo de Duque Cornejo

Durante la primera década del XVIII, comienzan a agotarse las fórmulas del
pasado produciéndose una verdadera yuxtaposición de formas entre elementos
existentes y otros más novedosos.

En estos años el retablo sevillano no responde a un simple formalismo de


naturaleza cronológica, si no a un conjunto de constantes estilísticas que le
peculiarizan, cuyos elementos se extienden prácticamente por toda la Andalucía
occidental, convirtiéndose en una verdadera “modalidad” dentro de los cauces
barrocos.

Fig. 3.- Retablo de la Iglesia de San Luis


de los Franceses

43
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

La columna salomónica en muchos casos comenzará a convivir con un


nuevo estilo de fuste: el estípite, así como la hoja de cardo va perdiendo
protagonismo frente a la hoja de rocalla que se potenciará progresivamente52.

Estos años dorados se habían iniciado a principios de siglo con Jerónimo


Balbás, (¿?-1748), creador del retablo de estípites. El uso de ese soporte peculiar,
hará que el modelo de retablo se denomine de igual forma.
Un buen ejemplo de estas afirmaciones, lo tenemos en uno de los retablos
de la Iglesia de San Luis de los Franceses de Sevilla, (fig.3), realizado a principios
del XVIII por Pedro Duque Cornejo, (1667-1777).

Las señas de identidad del modelo:

• Composición: Se pierde el esquema estructural en comparación con los


modelos vistos anteriormente. A pesar de todo, en el modelo que nos
ocupa, se mantienen las tres calles y el remate de medio punto con
templete, eso sí, con una novedosa distribución de los elementos
ornamentales.

• Soporte: El estípite, de ascendencia castellana y protagonista en esta


composición, se compone de una especie de pirámide invertida truncada,
que puede llegar a ser de gran complejidad ornamental, y que
normalmente en su base tiende a empequeñecerse.

• Motivos ornamentales: predomina la hoja de cardo, elemento a la postre


muy común en futuras realizaciones, contribuyendo al enmascaramiento
y a la desmaterialización de las formas, potenciándose también un
sentido más geométrico, gracias a la abundancia de círculos, marcos

2
HERRERA GARCÍA, Francisco Javier.: “El Retablo de estípites”. En El Retablo Barroco Sevillano.
Sevilla 2000, p. 102.

44
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

mixtilíneos, complejidad en el recorrido de las molduras y cornisas, todo


ello dando una impronta de tensión al objeto artístico, el cual se
complementa con multitud de figuras de pequeño formato, como ángeles,
cabezas de serafines, flores, jarras, guirnaldas, etc…

Llama la atención la inclusión de jaspes rojos y negros en la decoración del


banco.

III.2.4.- Modelo rococó de Cayetano de Acosta

Después de que Pedro Duque Cornejo, máximo exponente hasta el ecuador


del siglo XVIII, marchara en 1748 a Córdoba para hacer la sillería del coro de la
Catedral, se cierra en el ámbito artístico una etapa dorada en Sevilla.
A pesar de ello, el panorama artístico dio un vuelco excepcional en la
década de los cincuenta, principalmente gracias a un personaje portugués:
Cayetano de Acosta, (1711-1780).
Como ejemplo de la tipología de los retablos de Acosta, tenemos el
portentoso retablo mayor de la Iglesia Colegial del Salvador de Sevilla, encargado
en 1740, comenzando su dorado en 1774 y siendo bendecido en 1779, (fig. 4).
Se trata del último gran retablo barroco del arte español.

Las señas de identidad del modelo:

• Composición: De planta ligeramente cóncava, estructurado en banco, cuerpo,


tres calles y el ático. El banco es muy alto y está realizado en mármol negro
y rojo, abriéndose en él dos postigos dorados.

La espectacular composición se divide en cuatro monumentales columnas


de capitel corintio, siendo ocupada la calle central un gran sagrario y manifestador

45
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

y en la parte superior una representación escultórica de la Transfiguración del


Señor, acompañado por Moisés, Elías, San pedro, Santiago y Juan. Todo el grupo
se encuentra sobre una volada repisa sostenida por dos ángeles.

Fig. 4.- Retablo de la Iglesia del Salvador

En las calles laterales aparecen en su parte inferior dos santos que deben ser
San Isidoro y San Leandro y en la parte central los arcángeles San Rafael y San
Uriel, cobijados bajo un dosel. A su lado, delante de las columnas, otras dos
parejas de ángeles.

El ático lo preside una figura de Dios Padre, ángeles y querubines,


flanqueados por dos distorsionadas columnas.

Asimismo, importante resulta el exento sagrario-manifestador, pequeño


retablo dentro del retablo, el cual posee dos cuerpos. En inferior, -un tabernáculo

46
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

en el que se encuentra el sagrario-, lo sostiene cuatro columnas salomónicas,


mientras que el superior es un manifestador sostenido por ángeles atlantes.

• Soporte: Cayetano de Acosta parece que quiere aunar en esta gran obra la
tradición retablística local, empleando una gran variedad de soportes
diferentes.
En primer lugar llama la atención el protagonismo las columnas corintias
que dividen la composición, lo cual puede tener su explicación en el parecido con
las del propio templo. Bien es verdad que están revestidas de una profusa
decoración de guirnaldas y rocalla.
Con menos protagonismo vemos otro tipo de soportes, como columnas
salomónicas en el manifestador, las últimas del barroco sevillano, ángeles atlantes
y los dos estípites del ático, muy peculiares y desintegrados por la profusa
decoración.

• Motivos ornamentales: El recurso ornamental más importante en este retablo


es la rocaille, -rocalla-. Cayetano de Acosta potenció esta fórmula como
elemento decorativo y la renovó hasta tal punto que abrió la etapa rococó,
que iba a suponer el punto y final del barroco.

La rocalla, que había surgido a principios del XVIII en Francia, invadió el


panorama ornamental de los retablos, aunque en Sevilla no se notó su incidencia
hasta estas fechas.

Se trata de un recurso decorativo difícil de definir, por su enorme variedad


formal, aunque sin duda se caracteriza por la libertad y la fantasía compositiva,
además de una voluntaria asimetría e irregularidad, siempre buscando una
“apariencia geológica”, como formaciones rocosas, conchas marinas, texturas
minerales, u otros tipos de inspiración vegetal3.

3
RECIO MIR, Álvaro: “El Retablo Rococó”. En El Retablo Barroco Sevillano. Sevilla 2000, p. 173.

47
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

Otros detalles ornamentales, como guirnaldas, flores, frutas, hojas, además


de la estatuaria ya comentada terminan de decorar esta portentosa obra.

III.2.4.1.- El estilo “churrigueresco”

En relación a este último modelo de Cayetano de Acosta, debemos subrayar


la aparición a nivel nacional del denominado churrigueresco, -nombre proveniente
de la familia de arquitectos de apellido Churriguera-, a veces utilizado para
calificar este abigarrado estilo barroco, no sólo en los retablos realizados hasta
principios del XVIII, sino en algún paso procesional de impronta semejante.

Cierto es que esta forma de calificarlos, está un poco fuera de lugar en


Andalucía, ya que esta región asumió los castellanos postulados churriguerescos,
para enfocar su propia modalidad4.

A pesar e ello, subrayamos esta denominación ya que algunos historiadores


en contadas ocasiones, califican algún paso con este término.

4
HERRERA GARCÍA, Francisco Javier: “El Retablo de estípites”…, p. 103.

48
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

III.3.- La estatuaria barroca en la ornamentación del paso

En el ámbito barroco tres personajes resultarán fundamentales para definir


en la estatuaria el estilo barroco sevillano, como son Juan Martínez Montañés,
(1568-1649), Pedro Roldán, (1624- 1699), y su taller, y Pedro Duque Cornejo,
(1678-1757).

Estas variantes estilísticas son las que decorarán los pasos en el estilo
artístico que nos ocupa.

• Modelo de Juan Martínez Montañés

Su obra se inicia dentro del clasicismo manierista,


influencia que perdurará a lo largo de casi toda su
obra.

Como apreciamos en el ejemplo del San Juan


evangelista, (fig. 5), se caracteriza por su sentido de
la mesura, del equilibrio y belleza clásico, al que irá
aportando elementos naturalistas, llegando en su
última época, (1630-1648) a una plenitud barroca.
Fig. 5.- Imagen de San Juan
evangelista D. José Hernández Díaz, apunta que Montañés
cuida especialmente de la expresividad de los
ropajes, tratándolo en grandes masas, envolviendo la delantera de la figura,
acentuando las notas de horizontalidad.

También añade Hernández Díaz, que “su forma de componer es clara y sobria
inscribiendo las figuras en motivos apiramidados de fuerte y ancha base”,
encontrándolas “sostenidas con firme verticalidad en una de las extremidades

49
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

inferiores, basculando la contraria”, algo de origen claramente clásico, y


“centrando en la rodilla de esta una masa de ropaje que atraviesa la mitad baja
del conjunto” 5.

Asimismo, el historiador subraya que Montañés cuidó especialmente la


estatuaria decorativa, realizando la mayoría de pié, siendo pocas las que hizo para
procesionar.

Destaca además la calidad de la policromía mate de sus esculturas, realizada


por el maestro Francisco Pacheco, que acentúa el realismo de las mismas.

• Pedro Roldán y su taller

Pedro Roldán es la cabeza visible de un destacado


taller de escultura en el que se encuentran algunos de sus
familiares más directos, como su propia hija Luisa,
conocida popularmente como “La Roldana”.

De padres antequeranos y nacido en Sevilla, sus


inicios artísticos acontecen en Granada, donde asimila la
soltura técnica y la emoción de su maestro Alonso de Mena
para, tras casarse, instalarse definitivamente en Sevilla
completando su formación bajo el influjo de Montañés,
Alonso Cano y José de Arce.
Fig. 6.- Imagen de
San José
Su estilo se caracteriza por el uso de grandes planos
y masas compactas de cabellos, combinando la contención mesurada de Martínez
Montañés con la dulzura de Cano y la agitación de pliegues y ropajes derivada de
Arce, (fig. 6).

5
HERNÁNDEZ DÍAZ, José: Martínez Montañés. Sevilla 1987, pp. 76-79.

50
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

En su estatuaria gusta de usar efectos dinámicos, de claroscuros,


preocupándose habitualmente por lo fenoménico y empírico de la morfología,
buscando llamar la atención de los sentidos, más que a la profundidad del
mensaje.

En su taller, que llegó a ser el más grande de Sevilla, trabajaban personajes


como Luis Antonio de los Arcos, (casado con su hija Luisa) y Cristóbal de
Guadix, personajes los cuales seguían la estela del maestro, aunque ninguno, salvo
su propia hija Luisa, se acercara a la calidad artística de Roldán.

• Modelo de Pedro Duque Cornejo

Proviene de una importante tradición familiar de


escultores, ya que era nieto del maestro Pedro
Roldán. En él se define un estilo barroco de gran
plenitud.

Su arte parte de la tradición de los grandes


maestros, desarrollando el ideal barroco de manera
exacerbada, donde tanto los contornos como sus
fórmulas violentas, se expresan con una técnica

Fig. 7.- Imagen de San José influenciada por Bernini. El modelado es sinuoso y
entrecortado.

Sus figuras, como la del San José que reproducimos, (fig. 7), recuerdan a la
dinámica de lo pictórico, más que la serenidad vertical de lo escultórico. En los
retablos la estatuaria se compenetra a la perfección con los fondos de perspectiva,
el juego de planos y espacios, en armonía con su plástica en movimiento. A su

51
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

visión escultórica se une una rica y brillante policromía, en la mayoría de los casos
de abundancia de oros y brillos.

52
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

III.4.- Adaptación del estilo barroco a los pasos

El barroco se adapta a las medidas de los pasos procesionales por medio de


diversas formas de composición que enumeramos a continuación.

III.4.1.- Tipos de composición

Teniendo en cuenta la morfología del canasto, nos encontramos con los


siguientes tipos de composición:

• De casetones, (fig. 8): En este


caso el canasto se divide en
secciones, las cuales suelen estar
delimitadas por una o varias
columnas, creando espacios
cuadrados o rectangulares en los
que suelen colocarse cartelas u
otros elementos decorativos.
Fig. 8.- Canasto de un paso
También pueden verse pequeñas
capillas incluidas en el mismo.

53
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

• Abombada, (fig. 9): El canasto


posee una composición curva
hacia fuera, provocando una
sensación de relieve o
abultamiento.

Fig. 9.- Canasto abombado

• Dinámica, (fig. 10): Al contrario


que en el primer caso, la línea de
composición del canasto entra y
sale del mismo de forma dinámica,
provocando interiores y primeros
planos.
Fig. 10.- Canasto dinámico

III.4.2.- Recursos decorativos aplicados al modelo de paso barroco

• Soporte: Tanto la columna salomónica, (fig.11), como el


estípite suelen usarse para dividir el canasto en secciones o
para simular una pequeña capilla. Es difícil saber desde
cuando se utilizan en los pasos, aunque sabemos que ya en
1693 el paso de la Urna del Santo Entierro incluía este Fig. 11.-
Columna
elemento en su composición. salomónica

54
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

• Estatuaria: Desde el siglo XVI se decoran los pasos con


este tipo de esculturas, las cuales se ciñen a los
comentados modelos barrocos. Suelen representarse
evangelistas, profetas o ángeles.

Fig.12.- Evangelista

• La tarjeta o cartela, (fig. 13): Estas


representaciones utilizadas en los pasos
desde el siglo XVI, recuerdan a las escenas
desarrolladas en los retablos barrocos.

Su carácter escenográfico e iconográfico, se


desarrolla al igual que un relieve sobre un Fig. 13.- Cartela

mismo plano en el que se ajustan las tres


dimensiones, encontrando a un nivel genérico tres tipos: el bajorrelieve, el
mediorrelieve, y el altorrelieve.

La temática suele ser pasionista, aunque se desarrollan escenas alusivas a


cualquier momento bíblico; también vemos medallas o retratos de personajes.

En estas obras conocidas en sus orígenes como tarjetas o tarjas, el autor


aprovecha para aplicar sus conceptos de composición, escenificación e
iconografía, así como su destreza formal, todo ello teniendo en cuenta el contexto
donde debe enmarcar la obra.

Al igual que ocurre con las figuras de bulto redondo, predomina en ellas el
dinamismo propio del barroco, aunque normalmente se ajustan al estilo de todo el
conjunto.

55
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

• Cabezas de ángeles o de Santos, (fig.


14): Este tipo de detalles se incluye en
los pasos desde finales del siglo XVI.
La mayoría de las veces se realizan por
la técnica del altorrelieve.

Fig. 14.- Detalle de un respiradero

• Motivos vegetales: Frutas, hojas o flores se


reproducen o interpretan en este tipo de tallas,
siendo su función meramente decorativa, (fig.
15).
Fig. 15.- Detalle de un canasto

• Hoja de acanto: Es el motivo


predominante en los pasos procesionales,
basándose en la interpretación de una hoja
que aparece de forma dinámica y
armoniosa, de la cual habitualmente nacen
otras resultando adecuada para evocar el
Fig. 16.- Hoja de acanto
concepto barroco de movimiento,
compenetrándose normalmente con otros motivos del mundo natural, como
hojas o frutas, (fig. 16).

56
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

• Hojas cartilaginosas: Es una interpretación de


la hoja de acanto en la que esta lleva consigo
una especie de lámina o membrana,
formando motivos auriculares, recordando a
veces en el sentido arquitectónico a una
voluta, apareciendo a menudo enroscándose
de forma exagerada, (fig. 17). Fig. 17.- Hoja “de cartílago”

• Rocalla: Recurso habitual en los pasos


inspirados en el barroco tardío, (fig. 18).
Al igual que ocurre con el estípite, no
podemos asegurar que la rocalla fuera asimilada
en los pasos procesionales, al menos en los siglos
XVIII y XIX, pero sí se potenciará en el siglo
Fig. 18.- Detalle de la rocalla en XX, al igual que otras modalidades barrocas.
un respiradero

• Animales: Son menos comunes y se reducen normalmente


a simples detalles ornamentales. Su función suele ser
decorativa aunque en ocasiones poseen un trasfondo
simbólico, (fig. 19).
Fig. 19.- Pájaro
tallado en un paso

57
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

• Escudos o heráldicas: En muchas ocasiones se


emplean escudos asociados a la cofradía, por lo general
relacionados con la historia de la misma, tallados a
modo de relieves sobre el canasto o los respiraderos,
(fig. 20).
Fig. 20.- Escudo
corporativo

• Capillas: Se trata de uno de los elementos que mejor


recuerdan la arquitectura del estilo. Desde la
segunda mitad del XIX tenemos constancia de la
utilización de pequeñas capillas como recurso
ornamental en los pasos, ya que en 1885 sabemos
que el paso de la Exaltación de José García Roldán
las llevaba. Normalmente se reproduce en un hueco
del paso, incluyéndose en ocasiones una pequeña
bóveda que recuerda la de un templo. Este espacio Fig. 21.- Capilla incluida
en un canasto
suele aprovecharse para colocar alguna escultura
figurativa. Casi siempre está flanqueada por columnas, bien salomónicas o de
estípites, (fig. 21).

• Otros motivos arquitectónicos: A medida que el modelo barroco fue


perfeccionándose, sobre todo a principios del siglo XX, comenzaron a
incluirse elementos que recordaban recursos arquitectónicos utilizados en
el retablo barroco, como frisos, cresterías o molduras.

58
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

• Esculturas simbólicas

- Pelícano: Aparece alimentando a sus crías. Símbolo


del Amor, (fig. 22).

Fig. 22.- Pelícano

- Águilas bicéfalas: El canasto se ennoblece con


águilas bicéfalas, -en ocasiones coronadas-, que según
San Jerónimo aluden a la Ascensión y Oración. Por
ello, estimamos que se refieren al ascenso de las
oraciones hacia el Señor y el descenso de la Gracia
sobre los mortales. Si van coronadas sus atributos
subrayan la santificación y el signo del poder divino6, Fig. 23.- Águilas en un
canasto
(fig. 23).

- Arcángeles: Cada Santo Ángel trae consigo una fuerte carga


simbólica, sobre todo por que al igual que ocurre con los
Santos, se identifican con elementos concretos alusivos a cada
uno de ellos, (fig. 24).

Además de de la influencia barroca que poseen estas


esculturas, podemos relacionarlas con los ángeles lampararios
Fig. 24.- Arcángel que hizo Bernini para el puente de Sant Angelo, (Roma).

6
Web de la Hermandad del Calvario de Sevilla: www.hermandaddelcalvario.org

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Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

- Perleados o emperlados: También denominados en


la antigüedad agallones, se denominan así por que
imitan a perlas o cuentas gruesas de un Rosario, (fig.
25).

Fig. 25.- Perleado

- Objetos y herramientas utilizados para la crucifixión,


(clavos, tenazas...), (fig. 26).

Fig. 26.- Objetos


relacionados con
la Pasión

- Símbolos de la Pasión: Paño de la mujer Verónica,


motivos eucarísticos o litúrgicos, pergaminos o escritos
doctrinales, (fig. 27).

Fig. 27.-
Detalle de un
respiradero

60
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

III.5.- Impronta del retablo gótico sevillano en la ornamentación del paso

Esta impronta está condicionada en los pasos por dos vertientes


relacionadas con el arte gótico. Por un lado, la puramente gótica, (siglos XII-XV),
que en Sevilla tiene su mejor referencia en el portentoso retablo mayor de la
Catedral, y por otro, el neogótico aparecido en la ciudad en el siglo XIX; este
último, aunque basado en el propio gótico, posee unas características muy
particulares, incidiendo en el arte local de una manera muy significativa.

Por tanto, vamos a señalar como referencias de esta impronta gótica, el


retablo mayor de la Catedral el cual, por su grandiosidad resultará siempre
influyente en el arte local y, en cuanto al neogótico, una aproximación a la
importancia que tuvo en Sevilla y un ejemplo en el retablo de la Capilla de los
Luises de la capital hispalense.

III.5.1.- El Retablo Mayor de la Catedral

Nos encontramos ante la obra gótica sevillana más influyente en siglos


posteriores y, por extensión, en relación a los pasos procesionales.

Considerado el más grande de la cristiandad, se trata de un impresionante


retablo diseñado en 1482 por el escultor, desconocemos si flamenco o alemán,
Pyeter Dancart. Mide 20 metros de alto por 18 de ancho, (fig. 28).

Tras su muerte, posiblemente en 1488, otros autores dirigieron su


construcción, como el maestro Marco de origen flamenco, el cual tomó el mando
desde 1497 hasta 1505. Posteriormente, de 1507 a 1508, intervino Pedro Millán,
(1487?-1507?), sustituido por Jorge Fernández Alemán quien, con su hermano, el

61
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

pintor Alejo Fernández, (1475-1545), se ocupó de la terminación de la primera


fase hasta 1529.

Fig. 28.- Retablo Mayor de la Catedral


de Sevilla

La segunda fase comienza en 1550, ya que el Cabildo catedralicio


decide añadir al retablo dos calles laterales que hagan ángulo recto con el
frente principal. En estos trabajos intervinieron Roque Balduque, (¿?-1561),
Juan Bautista Vázquez el Viejo, (1510-1588) y Pedro de Heredia,
completándose todo el conjunto en 1564.

Otros autores como Miguel Florentín, Juan Marín y Diego de Pesquera,


intervinieron también llevando a cabo la realización de las estatuas de los
muros exteriores de la capilla.

62
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

Señas de identidad del modelo:

• Composición: posee cuatro cuerpos de altura y un banco, además de siete


calles. Sobre el amplio y volado dosel, configurado por casetones
octogonales, se dispone una viga que lleva en su parte central una Piedad
flanqueada por un apostolado.
• Soporte: Dividen las calles del retablo unas pilastras góticas, las cuales
contienen infinidad de detalles figurativos y arquitectónicos relacionadas
con este estilo.
• Motivos ornamentales: El retablo posee un conjunto de cuarenta y cuatro
relieves y más de doscientas figuras de santos que en las pilastras articulan
el retablo. Las escenas se enmarcan en capillas, imitando bóvedas,
ornamentación de inspiración vegetal y numerosos elementos
arquitectónicos propios del arte gótico, como agujas y ventanas.

La Piedad y el apostolado de la viga superior, llevan la firma de Jorge


Fernández. Todo el conjunto lo corona un monumental calvario gótico del siglo
XIV, anterior a la ejecución del retablo, y que el cabildo decidió que presidiera el
conjunto.

III.5.2.- La importancia del neogótico en Sevilla

En 1862 aparece en Sevilla el primer paso realizado en un estilo de


impronta neogótica, ya que hasta el momento, la tendencia barroca se había
impuesto en toda la ciudad.

No era casualidad la ejecución de este paso neogótico para la hermandad de


la Carretería. En Sevilla este estilo enmarcado en el historicismo reinante, estaba

63
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

cobrando protagonismo principalmente en la


arquitectura, desde la religiosa y funeraria hasta
la civil y urbana.

La propia Catedral de Sevilla,


comenzada en 1401, tenía que ser terminada en
el XIX con este “nuevo” estilo revisionista. Un
buen ejemplo es la puerta de la Concepción del
Patio de los Naranjos de dicha Catedral, (fig.
29). Este magnífico pórtico quedó sin concluir
en el proceso inicial del templo hasta 1887, año
Fig. 29.- Puerta de la
Concepción en que se completó con diseño del arquitecto
Adolfo Fernández Casanova, (1843-1915). Este
ajustó acertadamente el estilo gótico del resto del edificio por lo que, a pesar de
concluirse en el XIX, armoniza perfectamente con lo construido en siglos
anteriores.

En lo que se refiere a la estatuaria será diferente. No podemos decir que


exista un escultor “neogótico”. La estatuaria se enmarcará en un “eclecticismo
historicista”, que resultará complicado catalogar como veremos posteriormente.

Quizás este sea el motivo por el cual la figuración decorativa en los pasos
neogóticos será escasa.

III.5.2.1.- Retablo neogótico de la Capilla de los Luises

Sirva este ejemplo como referente y aproximación al retablo neogótico


sevillano, el cual tuvo una importancia significativa en la ciudad en la segunda
mitad del siglo XIX y del XX.

64
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

Esta capilla forma parte de una magnífica construcción del arquitecto Aníbal
González, (1876-1929), y ocupada por la Compañía de Jesús, (fig. 30).

Fig. 30.- Retablo mayor de la capilla


de Los Luises

En estilo neogótico italiano, el exterior del edificio está hecho en ladrillo


visto tallado, constituyendo un buen ejemplo de eclecticismo gótico en el que
destaca el retablo de madera oscura que preside la capilla.
Todo el conjunto se hizo entre 1916 y 19207 y, aunque pueda resultar
sorprendente, desconocemos la autoría del retablo. En ningún libro la hemos
encontrado, ni historiadores consultados ni hermanos de la Compañía de Jesús la
conocen.

- Composición: El retablo lo componen cuatro calles que incluyen pequeñas


capillitas con escenas alegóricas relacionadas con la congregación jesuita. En el

7
PÉREZ ESCOLANO, Víctor: Aníbal González. Colección Arte Hispalense. Sevilla 1996, p.71.

65
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

camarín se encuentra una inmaculada que parece una copia de “La Cieguecita” de
Martínez Montañés, realizada por el escultor Antonio Cabral, según la
información que nos facilitó el capiller del templo.

Llama poderosamente la atención el banco escalonado, con otras dos


escenas a modo de relieves y numerosas figuras de Santos, así como unos
arcángeles en los laterales.

- Soporte: Delgadas columnas góticas actúan como soporte del retablo.

- Motivos ornamentales: La estatuaria de impronta neogótica-historicista, o


mejor dicho, una escultura de aire clásico enmarcada en un espacio neogótico,
como veremos en el próximo apartado de estatuaria. Predominan los motivos
ornamentales de tipo vegetal, en especial la hoja de cardo como protagonista de
todo el conjunto.

66
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

III.6.- La estatuaria neogótica en la ornamentación del paso

A diferencia de la arquitectura, en la cual el neogótico incidió de forma tan


poderosa, la estatuaria no podremos definirla con tanta claridad.

Su incidencia, debemos enmarcarla en el eclecticismo historicista que ya


hemos comentado. Incluso esculturas que se enmarcan en un entorno neogótico,
como es el caso de la Catedral, se adaptarán al estilo pero de una forma mucho
más difusa.

Se puede decir que hay una “adaptación al espacio neogótico”, pero una
esencia clásica-historicista en la figuración.

Partiendo de esta premisa, encontramos una serie de escultores importantes


que pueden explicar esta afirmación; estos escultores podríamos enmarcarlos tanto
en este apartado de “impronta gótica” como en el siguiente en el que nos
referimos a los pasos de impronta historicista.

• Ricardo Bellver, (1845-1924)

Aunque nació en Madrid en


1845 realizó para Sevilla obras
reseñables. Algunas de ellas se
aproximan al estilo neogótico, como
las esculturas del tímpano de la Puerta
de la Asunción de la Catedral, (fig.
31).

Fig. 31.- Pórtico de la Asunción Este pórtico, terminado en 1885, es


un buen ejemplo del “gótico-

67
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

historicista” al que nos referimos.


Si echamos un vistazo a la composición del tímpano su impronta general
encaja a la perfección con el entorno gótico que desprende el edificio, pero, si
atendemos a la figuración, apreciamos una esencia clásica-historicista, mucho más
acorde con el gusto del autor y de su tiempo.

• Joaquín Bilbao Martínez, (1864-1934)

Este escultor sevillano fue


discípulo de Antonio Susillo y, tal y
como afirma el historiador
contemporáneo Mario Gómez,
evoluciona de un “realismo
historicista, -tocó todos los “neos”-,
hacia el naturalismo”8.
Fig. 32.- Tímpano de la Puerta de la
Concepción
Al igual que ocurre con Ricardo
Bellver, Joaquín Bilbao es un
escultor polifacético que ejemplifica a la perfección el eclecticismo de muchos de
sus contemporáneos.

En relación al tema que nos ocupa, resulta interesante el apostolado que Bilbao
ejecutara para la finalización de la Puerta de la Concepción de la Catedral, (fig.
29), junto con el tímpano, que representa una alegoría de la Inmaculada, (fig. 32),
y que resulta muy descriptivo de la adaptación de estas esculturas historicistas al
espacio neogótico.

8
Diario de Sevilla, (edición digital). 11 de diciembre de 2007:
http://www.diariodesevilla.es/article/ocio/8884/hermano/olvidado/gonzalo.html

68
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

III.7.- Adaptación del estilo neogótico a los pasos

Nos encontramos con los siguientes tipos de composición:

• De casetones, (fig. 33): El canasto se


divide en secciones, habitualmente
rectangulares, ocupadas por ventanas
y divididas por columnas. En las
esquinas suelen aparecer capillas.

Fig. 33.- Canasto de un paso gótico

• De cajón: La composición del


canasto se basa en una forma
rectangular, incluyéndose capillas en
las esquinas. (fig. 34).

Fig. 34.- Canasto de cajón

• Dinámica: Al igual que en caso


barroco, la línea de composición del
canasto entra y sale del mismo,
provocando interiores y primeros
planos, (fig. 35)

Fig. 35.- Canasto dinámico

69
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

• De capillas: En el canasto se
incluyen capillas de estilo gótico,
en las cuales se suelen reproducir
relieves o pinturas, (fig. 36).

Fig. 36.- Canasto de un paso gótico

III.7.1.- Recursos decorativos aplicados al modelo de paso neogótico

Todos los elementos ornamentales que se enumeran comenzaron a incluirse


en los pasos en la segunda mitad del siglo XIX.

• Columna gótica: Su fuste suele ser un haz de columnillas,


mientras que el capitel está adornado con hojas muy recortadas,
parecidas a las de cardo, buscando siempre la estilización, (fig.
37).

Fig. 37.-
Columna gótica

70
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

• Estatuaria: En este tipo de pasos son muy


escasas, aunque pueden aparecer imágenes de
Santos, ángeles, evangelistas o profetas, (fig.
38).

Fig. 38.- Ángel incluido en un


canasto

• Cartelas: Al igual que ocurre con


la estatuaria, no las encontramos
prácticamente hasta el siglo XX
gracias quizás a la influencia de
los modelos barrocos, en los que
eran muy habituales. Se impone
Fig. 39.- Cartela en este tipo de obras las escenas
pasionistas como vía para la
emotividad y la emoción, presentándose en la figura de Cristo la imagen de
una persona que sufre y conmueve. Aunque además del personaje principal
aparecen otros, suelen girar en torno a la figura de Jesús, centrando la
atención escénica principalmente en él, (fig. 39).

71
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

• Motivos inspirados en el mundo vegetal:


Como hemos comentado anteriormente, el
gótico contiene una fuerte inspiración
naturalista, por lo que serán muy
numerosas las interpretaciones
ornamentales en relación al mundo
vegetal. Al igual que ocurrirá con la
imaginería este tipo de ornamentación se

Fig. 40.- Detalle de un respiradero


convierte en una “naturaleza viva”, en la
que se identifican perfectamente los
elementos del mundo vegetal y animal,
(fig. 40).

• Cuadros: Sólo encontramos un caso, en el paso


realizado para la hermandad de Santa Cruz en
1922 por Juan y Cayetano González Gómez, que
llevaba pinturas de Rafael y Blas Rodríguez.
Este paso se sustituiría por otro semejante en
1973, ejecutado por Antonio Martín Fernández,
realizando sus pequeñas tablas pintadas con
Fig. 41.- Cuadro incluido
motivos pasionistas Francisco García Gómez, en un canasto

obras estas de gran calidad, e inspiradas en


antiguos modelos de pintura gótica, (fig. 41).

72
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

• Capillas: En el canasto se incluyen capillas


que enmarcan alguna escena, (fig. 42). En
ocasiones su techo suele ser una bóveda de
ojiva, caracterizada por sus nervios que
suelen ser cruceros o diagonales y
compuesto por los plementos y los arcos
formeros. Dichos plementos que ocupan la
techumbre entre esos nervios se
Fig. 42.- Capilla en un canasto
enriquecerían con otros nervios y otros
recursos ornamentales en el siglo XV, algo
que también se trasladaría a los canastos.

• Arquerías: Encontramos arcos que nos recuerdan


frisos o cornisas de catedrales características del
gótico, en el que se utiliza a menudo la repetición de
dichos arcos. En ocasiones el arco es apuntado,
aportando esfuerzo y dinamismo a la composición
Fig. 43.- Detalle de un gótica, (fig. 43). También, aunque en menor medida,
canasto
apreciamos el uso de gabletes.

• Torres o agujas: También llamado chapitel, es sin duda


uno de los elementos góticos más interesantes, en el que se
aplica el concepto ascensionista de este estilo. Estas torres
comienzan en su parte inferior con plantas cuadradas para
acabar en la aguja como remate superior de forma afilada,
Fig. 44.- Agujas
(fig. 44).

73
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

• Pináculos: Es una de las piezas


características del arte gótico que recuerda
a los chapiteles, ya que es un elemento
fundamental para la creación de sus
catedrales. En ellas, el pináculo actúa
como clavo entre el arbotante y el

Fig. 45.- Detalle del


contrafuerte, gracias a los cuales se soporta
canasto de un paso el peso de la construcción, fenómeno
denominado contrarresto. A pesar de su
importante funcionalidad suele ir tallado y decorado con un recurso
denominado florón, que se suele guarnecer de una o varias filas de ganchillo.
En los pasos procesionales su cometido es esencialmente decorativo, (fig. 45).

74
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

III.8.- Impronta historicista en la ornamentación del paso

Si algo caracteriza esta modalidad es su eclecticismo, resultando una fusión


de estilos en el que predominan los recursos de impronta clásica y barroca.

A causa de esta fusión, en ocasiones resulta complicado catalogar estas


obras, aunque podemos establecer ciertas pautas para hacerlo.

En líneas generales, existe en ellas un concepto basado en la espacialidad y


perspectiva: Las andas poseen un fuerte carácter lineal, siendo en su composición
de perfiles rectos, algo fundamental dentro del clasicismo potenciado en
corrientes artísticas como el Renacimiento. Esta perspectiva lineal marcará los
ritmos de su diseño, existiendo dos fórmulas compositivas:

• De casetones: El canasto se divide en


secciones, habitualmente rectangulares.
Estas secciones suelen estar divididas por
columnas o pilastras de orden corintio, en
ocasiones emparejadas.
Toda la composición es de líneas rectas y
Fig. 46.- Frontal de un canasto en numerosas ocasiones se enriquece con
capillas o relieves, (fig. 46).

• De cajón: La composición del canasto se basa en una forma rectangular. Por


ser una fórmula realizada a principios del XIX, no poseemos documentación
gráfica adecuada para ejemplificarla.

75
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

III.8.1.- La impronta clásica-historicista en el retablo sevillano

No cabe duda que el barroco y el neogótico fueron los elegidos por


numerosas cofradías sevillanas para definir sus estilos, en especial el primero de
ellos.
En Sevilla, las preferencias fueron parecidas y el neoclásico no se impondrá
con la fuerza de otras ciudades. A pesar de todo debemos resaltar algunos detalles
de su incidencia en el XIX, lo que explica que existan bastantes pasos de
influencia clasicista, incluidos los de impronta renacentista.
Para comprender esta influencia, podemos afirmar que no se han hecho
pasos puramente neoclásicos ni renacentistas, pero sí algunos de tipología clásica
que forman parte de un eclecticismo historicista que evolucionará desde principios
del XIX.
No hay que olvidar que, aún no siendo del gusto sevillano, se llegaron a
acometer unos pocos retablos de este estilo, como el de la Capilla de San José de
la Catedral, realizado entre 1799 y 1805 por Manuel Núñez y Juan Pedro Arnal, o
el que nos disponemos a comentar: el desaparecido retablo mayor de la Parroquia
de San Roque, realizado por Gabriel Astorga, (1827-1895).

III.8.1.1.- El retablo mayor de la parroquia de San Roque

Este retablo fue construido en 1850 por Gabriel Astorga, hijo del afamado
imaginero Juan de Astorga, (1779-1849), respondiendo al gusto neoclásico
impuesto en la retablística española a principios del XIX, y que tan poco había
incidido en Sevilla.

76
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

Desapareció en el incendio de la parroquia de 1936, y con él toda la estatuaria


que lo complementaba9.

- Composición: Constaba de una mesa de altar


centrada por el sagrario, cuerpo principal y ático en
forma de medio punto. En la calle central de cuerpo
único, de perfil sobresaliente con respecto al plano
del muro, se superponían el manifestador y la
hornacina para la escultura de San Roque,
flanqueándose por columnas pareadas de orden
corintio. En los extremos, sobre los ejes de las
puertas de entrada al camarín, se situaban dos
tableros cajeados. Sobre el canónico entablamento
Fig. 47.- El retablo en una foto
de principios del siglo XX reposaba el ático, con caja adintelada para enmarcar
al crucificado de San Agustín y un busto de Dolorosa
a sus pies, rodeados por un cortinaje10.
- Soporte: Columnas de orden corintio.
- Motivos ornamentales: Sobre el dintel se disponían una pareja de ángeles
que sostenían un paño de la Santa Faz, mientras que en los laterales aparecían las
armas reales, además del emblema de la ciudad, (NO8DO).
Sin duda, supone un ejemplo interesante de la inclusión de esta corriente
artística en una ciudad como Sevilla, en la cual el barroco prevalecía sobre
cualquier gusto estético.

9
RODA PEÑA, José: El Ayuntamiento de Sevilla y el retablo mayor neoclásico de la Parroquia de San
Roque. Sevilla, p. 212-213.
10
Ibidem.

77
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

III.8.2.- La estatuaria historicista en la ornamentación del paso

La estatuaria empleada en los pasos de este estilo es escasa. Su impronta es


sobre todo clásica-historicista, aunque puede contener otras reminiscencias
artísticas.

Los escultores anteriormente comentados como Joaquín Bilbao o Ricardo


Bellver, son también ejemplos de este tipo de figuración, aunque vamos a destacar
como símbolo de esta tendencia a Enrique Pérez Comendador, (1900- 1981).

• Enrique Pérez Comendador

Aunque nace en Hervás, (Cáceres), en 1907 llega


a Sevilla con su familia, comenzando en 1914 su
formación artística en escuelas de arte, además de
ingresar como discípulo en el estudio de Joaquín
Bilbao. Durante su formación artística en la ciudad
conoce a personajes importantes como Gonzalo
Bilbao, Virgilio Mattoni, Manuel González Santos,
Félix Lacárcel o el arquitecto José Millán. También
le influyeron autores del novecientos como Juan de
Astorga o Ricardo Bellver.

Fig. 48.- Escultura de San


Pedro de Alcántara, (Cáceres) Esta diversidad formativa le hizo tocar muchos
estilos, aunque la mayoría de su obra es de impronta
clásica, ya que admiraba la estatuaria de la Romanidad, la imaginería medieval,
impresionándole singularmente Lorenzo Mercadante de Bretaña, que incorporó a

78
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

nuestras tierras los valores eyckianos de las comarcas flamencas, cargados de


naturalismo tardogoticista11.

Hernández Díaz definía su producción de la siguiente forma: “Su arte es


figurativo, de mentalidad clásica, helenizante y toscana; su realismo no es
fotográfico, sino trascendente, buscando lo permanente en cada caso, o sea, el
carácter del personaje retratado junto a su realidad fisionómica, […]”12.

Sin duda, la descripción que nos hace el historiador resulta muy acertada para
ejemplificar la decoración figurativa en la modalidad que nos ocupa.

III.8.3.- Recursos decorativos aplicados al modelo de paso historicista

Los elementos ornamentales que se comentan a continuación comienzan a


incluirse en los pasos a principios del XIX.

Salvo en contadas ocasiones no suelen dorarse, predominando los de caoba o


madera oscura con pequeños detalles en orfebrería dorada o plateada.

• Soporte: Columnas o pilastras, predominando las de


fuste acanalado. Suelen complementarse con
decoración vegetal siendo el capitel corintio el más
habitual, (fig. 49).

Fig. 49.- Columna y pilastra

11
HERNÁNDEZ DÍAZ, José: Enrique Pérez Comendador, escultor e imaginero. Colección Arte
Hispalense. Sevilla 1993, p. 25.
12
Ibidem…, p. 31.

79
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

• Arco: Se imita en los pasos uno de los elementos


recuperados por parte del Renacimiento, evocando la
arquitectura clásica, como es el caso del paso de la
cofradía de la Hiniesta, (fig. 50).

Fig. 50.- Detalle de una


canastilla

• Frontones: Es uno de los típicos recursos de


los templos clásicos, que consiste en una
sección triangular o gablete dispuesto sobre
un entablamento sobre el que descansan las
columnas. El tímpano suele ir decorado con
detalles naturalistas o figurativos, (fig. 51).

Fig. 51.- Detalle de un canasto

• Estatuaria: En el siglo XIX las andas de este tipo no


solían llevar. A partir del siglo XX se utilizan poco, ya
que en numerosas ocasiones estos se decoran con
estatuaria de impronta barroca. A pesar de todo
encontramos casos interesantes, como la figuración del
paso del crucificado de Los Estudiantes de Antonio
Bidón, (fig. 52). Fig. 52.- Imagen de
impronta historicista

80
Capítulo 3 Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

• Relieve: Se utiliza poco en este


tipo de modalidad, aunque en
esos casos predomina el
bajorrelieve, en ocasiones
colorista y de composición
cuadrada o rectangular; este
formato servirá para crear escenas Fig. 53.- Relieve en el canasto del Stmo. Cristo
de Burgos
panorámicas. La medalla cobra
cierto protagonismo en alguna de
las ejecuciones de este estilo. En algunos casos, como ocurre en las escenas del
paso del Stmo. Cristo de Burgos, (fig. 53), la composición recuerda a la pintura
de historia de finales del XIX y principios del XX, propia de pintores
sevillanos como Eduardo Cano de la Peña o Virgilio Mattoni.

• Motivos inspirados en la naturaleza:


Predomina la hoja de acanto, motivos
florales y, en menos ocasiones, animales,
(fig. 54).

Fig. 54.- Detalle en un respiradero

81
CAPÍTULO IV
________________________________
Capítulo 4 Siglos XIV – XVI: Primeros precedentes de pasos procesionales

IV
Siglos XIV-XVI: Primeros precedentes de pasos
procesionales

IV.1.- Breves consideraciones sobre el nacimiento de las cofradías en Sevilla

Félix González de León,


escribió que “la fundación de
estas corporaciones era quizá
lo más oscuro de la Historia de
Sevilla después de la conquista,
por la ignorancia o el poco
cuidado de los primeros
congregados en ella, que nada Fig. 1.- Grabado de una procesión del siglo XVI
escribieron de su origen; y que
si en alguna hubo este cuidado,
la incuria de los que le siguieron, o las vicisitudes de los tiempos, ocasionaron la
pérdida de este trabajo; por lo cual nada se encontraba en sus archivos que
revelara el tiempo de sus fundaciones en años fijos, a excepción de alguna otra”.
Posteriormente añade: “que lo único que puede referirse a la existencia de estas
corporaciones, es la aprobación de sus ordenanzas por la Autoridad

83
Capítulo 4 Siglos XIV – XVI: Primeros precedentes de pasos procesionales

Eclesiástica”, por lo que se deduce que esta es la manera más fiable para saber
que existieron1.
El historiador Bermejo y Carballo, refiriéndose a unas palabras de González
de León respecto a la fundación de las cofradías dice: “que tuvo lugar este
acontecimiento en el siglo XIV o muy al principio del XV; y que algunas también
se erigieron en el siglo XVI”2, tal y como indica el grabado anónimo que vemos,
(fig. 1).
Varios factores que enumeramos a continuación marcarán esta primera
etapa de tentativas:

• El Concilio de Trento, (1563)

En este Concilio el Papa Pío IV recomendará la enseñanza evangélica por


medio de las imágenes, por lo que a partir de 1572 comenzaron las hermandades a
ejecutar grupos escultóricos que reproducen misterios pasionistas sustituyendo a
los antiguos crucificados de tamaño académico que se portaban por medio de unas
parihuelas llevadas por el clero, cofrades o por un sacerdote cerrando el cortejo
procesional.

Esta práctica se irá haciendo habitual, y con el tiempo aparecerán imágenes


de mayor tamaño que necesitan de una estructura mayor para ser cargadas.

• La devoción al Via Crucis

El profesor José Sánchez Herrero apunta que la práctica del Via Crucis
“era la forma de piedad más extendida y popular en el bajomedievo”.

1
GONZÁLEZ DE LEÓN, Félix: Historia crítica y descriptiva de las Cofradías de penitencia, sangre y luz,
fundadas en la ciudad de Sevilla. Sevilla 1852, p. 11.
2
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p. 5.

84
Capítulo 4 Siglos XIV – XVI: Primeros precedentes de pasos procesionales

En ella tendrá protagonismo principal en Sevilla el


humilladero de la Cruz del Campo, construido en
extramuros de la ciudad, junto al camino que conducía a la
localidad de Carmona, en el siglo XV, (fig. 2).
Todo humilladero se erigía por tres motivos
fundamentales: “con el triple propósito, de ordenar el
tránsito, señalar el límite o término de la población vecina
Fig. 2.- El humilladero y fomentar la piedad de los viandantes, recordándoles su
en la actualidad
obligación cristiana de persignarse y arrodillarse ante la
imagen que allí existía”3, de ahí su nombre.

Desde el siglo XIV algunos


cristianos acudían en apretadas filas o
procesiones espontáneas; eran laicos que,
tras asistir a predicaciones, practicaban la
disciplina o penitencia, bien individual o
bien colectiva, caminado hacia este lugar.
Algunos portan cruces, otros piden
limosnas, incluso llevan pequeños altares
de culto con escenas variadas a modo de
“estaciones” de la Pasión, o simplemente
cruces que colocan a lo largo del camino;
Fig. 3.- Devociones penitenciales en torno al
era común ver a clérigos franciscanos, humilladero, (siglo XVI)

dominicos, agustinos o trinitarios


predicando y pidiendo limosnas en pequeños altares montados para tal efecto.

La devoción penitencial al Via Crucis la Cruz del Campo en el XVI, (fig.


3), provocó en los dos siglos posteriores la gestación de numerosas hermandades
no penitenciales, que reglamentaban la participación procesional desde la casa de

3
PALOMERO PÁRAMO, Jesús Miguel: Ciudad de Retablos. Sevilla, 1987, p.15.

85
Capítulo 4 Siglos XIV – XVI: Primeros precedentes de pasos procesionales

Pilatos hasta el humilladero. Podemos afirmar por tanto, que esta es la génesis de
no pocas cofradías4.
José Gestoso, Justino Matute, y sobre todo Luis de Peraza, apuntan que
debieron ser los cofrades de los Santos Ángeles, cofradía sita en el hospital del
mismo título, quienes edificaron un nuevo templete hacia 15605.

El símbolo que presidía este tipo de construcción era una simple cruz,
aunque con posterioridad, -como ocurriera en el caso que nos ocupa-, se hizo
habitual la representación de un pequeño crucificado.

Justino Matute y Gaviria señala dentro de estos actos ciertos abusos e


inmoralidades causados en gran medida por la masificación de cofrades,
penitentes y disciplinantes que acudían a la Cruz del Campo los viernes de
cuaresma al atardecer; este hecho justifica que el cardenal Niño de Guevara en
1604 ordenara que todas las cofradías de penitencia hiciesen estación, por calles
asignadas por el Provisor General, a la Santa Iglesia Catedral de Sevilla, algo que
se ha mantenido hasta nuestros días6.

• La creación de la escuela sevillana

Aunque antes del XVI ya había escultores como Pedro Millán, Miguel
Perrín, Roque Balduque o Lorenzo de Mercadante, es en este siglo cuando se
forma como tal la escuela de imagineros de Sevilla.

Según el historiador sevillano D. José Hernández Díaz, la obra de Roque


Balduque, (¿?-1561), servirá de enlace con la producción de la segunda mitad del

4
SÁNCHEZ HERRERO, José: “El origen de las cofradías penitenciales”. En Sevilla Penitente, tomo I, pp.
15-55.
5
GARCÍA FERNÁNDEZ, Manuel; “Piedad Popular y cofradías de Penitencia en el Humilladero de la
Cruz del Campo, (siglos XIV-XVI)”. En El Humilladero de la Cruz del Campo y la religiosidad sevillana.
Sevilla 1999, pp.42-43.
6
MARTÍN DE LA TORRE, Antonio: Via Crucis a la Cruz del Campo. Archivo Hispalense. T. XVI,
números 51-52. Sevilla 1952, pp. 55-56.

86
Capítulo 4 Siglos XIV – XVI: Primeros precedentes de pasos procesionales

siglo cimentando y aportando multitud de elementos para la escuela. En 1553


llega desde Ávila Isidoro de Villoldo, (¿?-1560), conocido discípulo de
Berruguete para hacer el Retablo Mayor de Santa María de las Cuevas,
pudiéndose considerar el momento fundacional de la escuela sevillana.

Juan Bautista Vázquez “el Viejo”, (1510-1588), procedente del núcleo


abulense será considerado iniciador de la escuela. Será junto a él con quien
trabajen numerosos artistas de renombre como Marcos Cabrera, Jerónimo
Hernández, (1540-1586), Andrés de Ocampo, (1555?-1623), Juan de Oviedo “el
Mozo”, Gaspar Núñez Delgado, Diego de Pesquera, (1540-1581), Miguel Adán,
(1532-1610) o Gaspar del Águila, (1530-1602), autores que consolidarán la
escuela que tendrá su cima con Juan Martínez Montañés7.

• La instauración de los gremios

Aunque el nacimiento de los gremios artísticos tiene un origen medieval, en


España la creación de estas corporaciones no se consolida hasta el mandato de los
Reyes Católicos a finales del siglo XV.
Lo cierto es que los Reyes Católicos recopilarán las ordenanzas de los
gremios que serán comunes para todo el territorio nacional, marcando la correcta
organización de estas asociaciones artísticas para los próximos tres siglos.
Estas agrupaciones constituían una unión de personas ocupadas en los
mismos oficios, eliminando la competencia debido a que se regularán los precios,
se controlará la calidad, así como la técnica y la enseñanza de los aprendices.
Además, los integrantes de los gremios recibirán la seguridad material y
personal de sus componentes, incluso espiritual, ya que en el seno de estas
asociaciones se formarán hermandades que, gracias al pago de sus cuotas
asegurarán a sus integrantes un entierro digno y un seguro de vida para su viuda,

7
GONZÁLEZ GÓMEZ, Juan Miguel, RODA PEÑA, José: Imaginería procesional de la Semana Santa de
Sevilla. Sevilla 1992, p. 55.

87
Capítulo 4 Siglos XIV – XVI: Primeros precedentes de pasos procesionales

además de la formación gratuita de su hijo, probablemente en el mismo taller del


padre8.
Tras pasar por el rango de aprendiz se les admitía en el rango de oficial,
auténticos “jornaleros del Arte” a los que se les pagaba por día; estos oficiales a
veces tenían la posibilidad de hacer algún viaje para mejorar su formación en otros
talleres europeos9.
A finales del siglo XIV se producirá un hecho importante en la ciudad ya
que debido al mal estado de la antigua Mezquita Mayor, - Catedral cristiana en
aquellos años-, el Cabildo catedralicio se plantea la realización de un nuevo y
majestuoso templo, gran construcción que finalmente comienza al principio del
siglo XV. Este hecho trascendental traerá como consecuencia que muchos
maestros y oficiales pertenecientes a los gremios se trasladarán a las
inmediaciones de la Catedral, produciéndose un enriquecimiento artístico en los
ambientes creativos de la ciudad.
Por tanto, no habrá un apogeo artístico total hasta el siglo XV, en el cual
intervendrán factores socioeconómicos importantes en el floreciente desarrollo de
la urbe, -además de las causas comentadas-, como el Descubrimiento de América,
que contribuirá a que Sevilla sea puerto de entrada de muchas riquezas10.

• Las epidemias de peste

Entre el siglo XIV y XVI acontecerán numerosas epidemias de peste, algo


que en no pocas ocasiones condicionará la realización de obras artísticas, sobre
todo por que las corporaciones existentes se veían mermadas en cantidad de
afiliados. En el siglo XVI por ejemplo, sobresale la acontecida en 1582 llamada
“de Landres”, la cual fue calificada por el historiador Bermejo y Carballo como
“muy cruel”, por lo que deducimos que se cobraría numerosas muertes11.

8
VAN DER ELST, José: El último florecimiento de la Edad Media. Buenos Aires 1947, p.55.
9
Ibidem…, p.65.
10
GAÑÁN MEDINA, Costantino: Técnicas y evolución de la imaginería…, p.32
11
BERMEJO Y CARBALLO, José.: Glorias Religiosas…p. 406.

88
Capítulo 4 Siglos XIV – XVI: Primeros precedentes de pasos procesionales

IV.2.- Primeros precedentes conocidos de pasos procesionales

IV.2.1.- La roca

El precedente conocido más


próximo al paso procesional es “la
roca”, (fig. 4), que consistía en una
especie de plataforma transportada por
hombres, sobre la cual una serie de
intérpretes o actores, representaba algún
auto sacramental durante las fiestas del

Fig. 4.- Grabado de una “roca” Corpus Christi, algo que ocurriría en
torno a la primera mitad del siglo XV12.

Estas “rocas” eran grandes carrozas en cuya parte posterior se elevaba un


redículo y aditamentos que ostentaba, pareciendo una gran nave. Su origen puede
ser el de recordar los carros de representaciones de autos sacramentales.

En estos se llevaban escenas alegóricas con motivos místicos sagrados con


figuras y escenas de las Escrituras, Lucifer, del Desposorio, de San Antonio y San
Pablo, de los Hijos de Jacob, del convite de Abraham, del Bautismo de San Juan,
de San Joaquín y Santa Ana, de la Justicia Espiritual, de las costas de la Muerte,
de los cinco sentidos, de la viña del Señor, del Sembrador, del convite celestial, de
la Asunción de la Virgen, etc…13

12
RODA PEÑA, José: “El paso procesional. Talla, dorado y escultura decorativa…, p. 3.
13
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Orígenes del Corpus sevillano I. En Diario ABC, Sevilla, 2 de junio de
1985.

89
Capítulo 4 Siglos XIV – XVI: Primeros precedentes de pasos procesionales

IV.2.2. Las tarascas y la Custodia del Corpus

En esta festividad del


Corpus, celebración de gran
importancia desde que el Papa
Urbano IV la instituyera,
podemos encontrar parte de los
orígenes de las andas
procesionales; en Sevilla

Fig. 5.- Custodia del Corpus en 1647


sabemos que existía esta
procesión en 1400, -muy alegre
en esos primeros tiempos-, y ya en la antigüedad iban abriendo la misma las
conocidas como tarascas. Este nombre procede de la ciudad de Provenza de
nombre Tarascón donde sus habitantes pasaron mucho miedo por la existencia de
un bicho mitológico de siete cabezas, seis patas y con forma de dragón.

La relación con los pasos la encontramos debido a que la reproducción de


esta historia se representaba con el dragón con cola de serpiente y las más
caprichosas alegorías, construido en madera y montado sobre ruedas, siendo
empujado por uno hombres que iban en su interior. Sobre el lomo del animal
descansaban dos figuras: una de mayor tamaño, el tarascón y otra más pequeña, el
tarasquilla, que los gremios se encargaban de vestir14.

Las tarascas fueron suprimidas junto con otros elementos de la procesión


debido a los numerosos excesos e irreverencias por parte de las personas que
participaban en ellas.

Por otra parte, en los primeros años de estas procesiones eucarísticas, el


Santísimo se llevaba en un arca sacramental a modo de tabernáculo, cumpliendo la

14
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Orígenes del Corpus sevillano I, …Sevilla, 2 de junio de 1985.

90
Capítulo 4 Siglos XIV – XVI: Primeros precedentes de pasos procesionales

función de Custodia. Generalmente era de madera, a semejanza del viejo


Testamento, colocada sobre andas adornadas con ángeles y siendo portadas por
cuatro sacerdotes con casullas medievales de gran riqueza. Posteriormente, a partir
del XVII, se portaba en ostensorios irradiados de flamígeros donde había espadas
evangélicas en incandescencias solares abiertas en rayos15.

15
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Orígenes del Corpus sevillano II…, Sevilla, 4 de junio de 1985.

91
Capítulo 4 Siglos XIV – XVI: Primeros precedentes de pasos procesionales

IV.3.- Segunda mitad del XVI: Transición al barroco

Si hay algo que caracteriza las primeras andas procesionales es su


simplicidad, tanto estructural como decorativa.

Numerosos datos corroboran esta afirmación, como el que se desprende de


la hermandad de la Coronación de Espinas, la cual, según unas Reglas de 1567,
“habían de llevarlo cuatro cofrades cada uno el de la Coronación y el de la
Virgen”, mientras que el crucificado sólo dos, lo que nos hace imaginar que serían
unas parihuelas muy pequeñas16.

Desde finales del XVI la carpintería resultará el oficio fundamental gracias


a la labor de los carpinteros que dominaban la labor de ensamble de las maderas,
existiendo ya una interesante riqueza constructiva; un ejemplo lo tenemos en
Diego López Bueno, que llevó a cabo numerosos proyectos acorde con su estética
clasicista de progenie manierista, como unas andas concertadas con Melchor de
Torres el 29 de Mayo de 160017.

A veces los propios carpinteros se ocupaban de la construcción de los


mismos, bien solos o bien con otros creadores, incluso alguno de ellos podían ser
los que se ocuparan de la realización de las imágenes de la escena que llevara el
paso; otros trabajos, como era el caso del dorado, solían realizarlo doradores
cualificados para tal labor.

Sin duda, será en el último tercio del siglo XVI cuando empieza a notarse el
gusto por la ornamentación en los pasos, con la inclusión en ellos de pinturas
realizadas en lienzos, pequeñas esculturas o joyas, en ocasiones prestadas por los
hermanos para la salida procesional de la cofradía.

16
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, pp. 328-329
17
SANCHO CORBACHO, Heliodoro: “Arte sevillano de los siglos XVI y XVII”. En Documentos para la
Historia del Arte en Andalucía. Tomo III. Sevilla 1931, pp. 34 y 35.

92
Capítulo 4 Siglos XIV – XVI: Primeros precedentes de pasos procesionales

Dentro de este periodo de tentativas, encontramos diversa documentación


que aportamos a continuación, la cual nos permite saber cómo eran en sus
primeros tiempos las andas procesionales.

IV.3.1.- La hermandad de la Soledad de San Lorenzo en el XVI

Bermejo y Carballo llega a la conclusión de que a finales del XVI todas las
hermandades ya llevaban pasos, gracias a documentos como el encontrado en un
inventario de 1597 de la Soledad de San Lorenzo, en el que se describe la
procesión de esta cofradía18.

En dicho inventario se dice que existían dos imágenes de la Virgen, una de


tristeza y otra de alegría. También poseían un Cristo Resucitado y un Sepulcro,
además de unas andas para el del Sepulcro y para la Virgen de triste expresión, la
primera de ellas “que lleva alrededor cuatro lienzos pintados” y cinco ángeles
para decorarla; asimismo, dos parihuelas, una del Calvario y otras para el
Resucitado.

A este documento añadiríamos otro indirecto, un contrato que el 8 de abril


de 1592 el pintor de imaginería Miguel Ballés firma con un vecino de Tenerife
llamado Baltasar de Torres, que obligaba a ejecutar el proyecto en quince días,
estimando su precio en 115 reales: “un sepulcro de madera de hechura y pintura,
como el sepulcro que tiene la cofradía de la Soledad de esta ciudad, que está en el
Carmen, con que tenga dos varas y tercia de larga de cuerpo , con sus molduras y
cuatro bolas abajo doradas o blancas, y ha de llevar un ángel de pasta”19.

18
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p. 496.
19
RODA PEÑA, José: “El paso procesional. Talla, dorado y escultura…, p. 5.

93
Capítulo 4 Siglos XIV – XVI: Primeros precedentes de pasos procesionales

En el escrito ya se hablaba de cierta decoración, con molduras, bolas y


alguna escultura de bulto redondo, por lo que deducimos que ya en estas fechas
existía gusto por la ornamentación. Parece ser que en los primeros años del XVII
dejaron de sacarlo a la calle20.

Conviene reseñar que con anterioridad a estos encargos, el 21 de noviembre


de 1574 Jerónimo Hernández concierta la realización de unas andas y una imagen
de Resucitado. Por la premura de tiempo el encargo hubo de posponerse un año,
desconociendo su composición21.

Asimismo, según la tradición, fue la primera que utilizó palio, costoso y


rico según parece, que usaba a principios del XVII, llevando en aquella época,
además, otro paso de la Santa Cruz22.

IV.3.2.- La hermandad de Pasión en el siglo XVI

Uno de los documentos de mayor antigüedad del cual se deduce lo


elemental de estos trabajos en sus orígenes, es el escrito aportado por Bermejo y
Carballo por el que la hermandad de Pasión, ya a mediados del XVI sabemos que
llevaba en su cortejo “la Imagen de Nuestro Divino Redentor con la Cruz sobre
sus hombros, y Simón Cirineo ayudándole a llevarla, conducidos en unas andas
por los mismos cofrades”23.

20
SÁNCHEZ GORDILLO, Abad Alonso: Memorial de las religiosas estaciones que frecuentan la
religiosidad sevillana. Sevilla 1983, p. 170.
21
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan.: Anales…, p. 593
22
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p. 498.
23
BERNALES BALLESTEROS, Jorge: “Francisco Antonio Gijón”. Colección Arte Hispalense. Sevilla
1982, p. 261.

94
Capítulo 4 Siglos XIV – XVI: Primeros precedentes de pasos procesionales

A pesar de lo escueto de la información, este comentario nos hace suponer


que no sería excesivo el número de porteadores que llevarían las imágenes, ni el
tamaño de las mismas.

IV.3.3.- Los pasos de la cofradía de Jesús Nazareno, (el Silencio)

La simplicidad estructural y
decorativa de estas primitivas
andas, queda patente en el primer
documento gráfico que tenemos de
un paso, como son los dibujos de la
hermandad del Silencio fechados
Fig. 6.- Dibujos del archivo de la cofradía hacia 1611, (fig. 6)24. Estas andas
debieron ejecutarse a finales del
XVI o principios del XVII.
El del Nazareno era de enorme sencillez, ya que llevaba una tarima muy
simple con forma rectangular y perfiles rectos, rematada en sus esquinas con unos
faroles y una peana en el centro para colocar la imagen con dos velas que iluminan
la misma.

El Abad Gordillo criticaría posteriormente el hecho de que este paso fuera


algunos años bajo palio, ya que “aunque es así que aquella Estación que Cristo
Nuestro Señor hizo con la cruz fue el carro en que triunfó del demonio, no es ésta
la fiesta ni el Misterio glorioso que se representa allí”25.

24
FALCÓN MÁRQUEZ, Teodoro. “Iconografía de Pasos, Costaleros y Capataces…, p. 36.
25
SANCHEZ GORDILLO, Abad Alonso: Memorial de las Religiosas…, p. 160. // GARCÍA DE LA
CONCHA DELGADO, Federico: “Estudio Histórico Institucional de la Primitiva Hermandad de los
Nazarenos de Sevilla, (El Silencio)”. Sevilla 1987, pp. 140 y 172-173.

95
Capítulo 4 Siglos XIV – XVI: Primeros precedentes de pasos procesionales

Numerosos documentos atestiguan que esta cofradía era muy popular a


finales del XVI, y que ya en 1567 procesionaba26.

Sería en abril de 1578 cuando el Hermano Mayor, Mateo Alemán,


confecciona unas nuevas reglas en las que se habla de la procesión penitencial,
informándose que los cofrades debían “conducir en dicho acto las imágenes de
Nuestro Redentor Jesucristo con la Cruz al Hombro y de su Santísima Madre”,
que antes no llevaban27.

IV.3.4.- La hermandad del Museo en el XVI

Por un lado, sabemos que el paso del crucificado llevaba tarjetas o cartelas
en 1575, aunque desconocemos su paradero. Es el primer paso que tenemos
constancia de que las llevaba, aunque podemos aventurarnos a afirmar que en
estos tiempos ya abundaba como recurso decorativo28.

A este dato podemos añadir que la corporación hizo estación de penitencia


el Viernes Santo de 1576, en la que se describen los datos siguientes:
“Antiguamente sacaba dos pasos, el primero aparecía un sol eclipsado sobre un
monte y canasto hermoso; en el segundo un Cristo Expirando hermoso. Era el de
mayores dimensiones de la época hasta el punto de que volvía por la calle
Génova en vez de Placentines, siendo de gran mérito artístico. Su construcción
era francamente rara, ya que consistía simplemente en un gran monte que parecía
estar descansando sobre la peana, a la que descubría a trozos irregulares, dando
al conjunto un efecto raro, a la vez caprichoso y grandioso, completándose la
obra con cuatro evangelistas, situados en las esquinas de la peana, que son los

26
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 370.
27
LÓPEZ MARTÍNEZ, Celestino: “La Hermandad de la Santa Cruz de Jerusalén, (El Silencio)”. En
Revista Calvario. Sevilla 1945.
28
BERNALES BALLESTEROS, Jorge: “Francisco Antonio Gijón…, p. 98.

96
Capítulo 4 Siglos XIV – XVI: Primeros precedentes de pasos procesionales

mismos que posee en la actualidad. Ambos pasos eran de Francisco Antonio


Gijón”29.

No hay documento alguno que demuestre con seguridad que este autor
realizara dichas imágenes, tan solo un manuscrito anónimo de 1732 en el que se
describe el patrimonio que por aquel entonces tenía la Casa Grande de la Merced;
en él se habla de la autoría de Gijón del paso existente para el crucificado,
incluido relieves, evangelistas y ángeles; aun así llama la atención la descripción
de las proporciones del canasto30.

González de León corrobora que por aquellos años era el mayor paso de la
ciudad, insistiendo en que ni siquiera cabía por la calle Placentines31.

Tras la invasión de los franceses se hundió el almacén donde estaban


guardados los pasos, por lo que en 1829 encargaron otro a Juan de Astorga, en el
cual se situaron también los evangelistas antiguos32.

IV.3.5.- La hermandad del Gran Poder en el XVI y principios del XVII

Esta cofradía aprueba unas nuevas reglas en 1570, en la que se describe que
iría un paso de Calvario, un Cristo con la Cruz a cuestas y la Virgen del Traspaso
desmayada en brazos de San Juan, así como un crucificado que presidía la
estación penitencial, aunque desconocemos la composición de los pasos33.

Gracias a sus archivos sabemos que se encargan poco antes de la


realización del titular de la cofradía, -llevada a cabo en 1620-, “cuatro celusías del

29
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, pp. 163-164
30
BERNALES BALLESTEROS, Jorge: Francisco Antonio Gijón…, p. 98.
31
GONZÁLEZ DE LEÓN, Félix.: Historia crítica y descriptiva…, p.144.
32
Ibidem.
33
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, pp. 396-397.

97
Capítulo 4 Siglos XIV – XVI: Primeros precedentes de pasos procesionales

paso del Xpo. De la Cruz a Cuesta; dos carcajes con que se lleva al Santo Cristo
de la Cruz a Cuestas el Viernes de cada año; ocho horquetas de llevar los pasos;
más una cruz hueca de madera del Xpo. De la Cruz a Cuestas”. En 1621 ya
aparecen inventariadas unas “andas grandes con su tarima y celusía del Xpo. De
la Cruz a Cuestas”, lo que hace imaginar que aprovecharon la realización de la
nueva imagen para hacer a la vez unas andas para la misma34.

Destacamos el término “celusía”, -celosía- que imaginamos sería un


enrejado de pequeños listones, lo que nos hace pensar que el canasto sería un
objeto de este tipo.

IV.3.6.- Pasos de la cofradía del Santo Entierro a finales del XVI

En los últimos años del XVI, realizaban una peculiar procesión en la que
llevaban, según describe el historiador Bermejo y Carballo, “un paso con una
Cruz grande y muchos jeroglíficos”; después, tras un cortejo ”iba otro paso o
andas en que iba el Señor, sobre hombros de sacerdotes, con capas pluviales
negras”. Al final de la procesión, precedida por otros hermanos con hachas y luces
iban otras andas con una imagen de la Virgen35.

Interesante el hecho de que llevara “muchos jeroglíficos”, por lo que


deducimos las andas tendrían diversas pinturas o escenificaciones simbólicas las
cuales, si interpretamos que complementaban el soporte, sería uno de los
precedentes más antiguos que tenemos de cartelas o tarjetas.

34
SERRANO Y ORTEGA, Manuel: Noticia Histórico-artística de la Sagrada imagen de Jesús Nazareno
que con el título de Gran Poder se venera en su capilla del templo de San Lorenzo de esta ciudad. Sevilla
1898, pp.126-127. Se presupone que el poco coste de esas obras en este momento y el poco espacio de
tiempo en el que se hicieron supondrían una escasa calidad artística de los trabajos.
35
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas..., p. 474.

98
CAPÍTULO V
________________________________
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

V
Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso
procesional

V.1.- Consideraciones históricas, (siglos XVII – XVIII)

Tanto el siglo XVII como el siglo XVIII estarán condicionados por avatares
históricos de cierta relevancia, lo cual provocará que las corporaciones existentes
en esas dos centurias lleven una vida irregular en la que pocas se mantienen
florecientes durante muchos años seguidos.

En el XVII destacan las numerosas epidemias de peste que asolaron la


ciudad, muy especialmente en 1649, en la que las crónicas de la época llegan a
cifrar las víctimas en la escalofriante cifra de 200.000 personas1.

Sabemos de otra epidemia de peste en 1676, que afectó a Andalucía entera


y que duró varios años2.

A pesar de estas desgracias, si contamos con que la primera etapa brillante


de las hermandades será el siglo XVII, considerado Siglo de Oro a nivel cultural,
así como los primeros años del XVIII, podemos entender por qué el ideal barroco

1
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p. 373.
2
Ibidem, p. 416.

100
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

será el que deje la huella más honda en las cofradías a lo largo de los siglos,
incluso hasta nuestros días.

También mejoraron mucho en virtud de Sínodo de 1604, contribuyendo


para ello la Estación a la Catedral, algo que estimulaba a las corporaciones y sobre
todo la aparición de grandes artífices que aparecieron en esos años, los cuales
realizaron en ocasiones importantes tallas que por desgracia hoy no conservamos3.

Mención especial merece la llegada a nuestra ciudad del escultor flamenco


José de Arce, (¿?-1666), lo que supondrá el impulso en la escuela sevillana de las
formas dinámicas y barrocas, transmitidas a sus contemporáneos, muy
especialmente a sus discípulos4.

V.1.1.- La evolución de los pasos, (siglos XVII y XVIII)

Tras la fase inicial del XVI, los siglos XVII y XVIII a nivel artístico
constituyen dos centurias en las que podrían distinguirse tres etapas:

• Manierista y protobarroca: Etapa de búsqueda y tentativas, (primera mitad


del XVII).
• Segunda mitad del XVII: Aparición del modelo barroco, el cual surge
gracias a la intervención de grandes maestros.
• Primera mitad del XVIII, en la que se consolida el modelo barroco de
andas5.

3
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, pp. 40-41.
4
GONZÁLEZ GÓMEZ, Juan Miguel, RODA PEÑA, José: Imaginería procesional…, p.112.
5
RODA PEÑA, José: “El paso procesional. Talla, dorado y escultura decorativa…, p.5.

101
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

V.2.- 1ª etapa: Manierista y protobarroca, (primera mitad del XVII)

De estos años existe poca


información sobre el estilo de los
pasos, por lo que no podemos definir
claramente un modelo.

Entendemos esta etapa como


una fase de ensayos y tentativas, que se
extiende en el tiempo hasta mediados
Fig. 1.- Ilustración de principios del XVII, (detalle) del siglo XVII.

Durante estas décadas no existe un nexo claro de unión entre los pasos y los
retablos barrocos del momento. La decoración de las pequeñas parihuelas que se
usan desde el XVI hasta estos primeros años del XVII se basa en lienzos pintados,
pequeños motivos decorativos de tipo pictórico, así como alguna figura, sobre
todo ángeles, siendo su construcción bastante simple.

Poco conocemos de los ejecutores de estas obras en estos primeros años del
XVII, quizás por no participar en ellas artistas de prestigio, ni ser realizaciones de
gran mérito.

A continuación, enumeramos la información que tenemos, en la que se


aprecia el progresivo enriquecimiento ornamental, sobre todo entre 1640 y 1650.

102
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

• Cofradía de la Soledad, (San Lorenzo)

Bermejo y Carballo apunta que los enseres de la hermandad en torno a


1639 eran de enorme valor, incluido los pasos, que llevaban numerosos motivos
decorativos de plata6.

• Datos de la hermandad de la Macarena

Esta corporación solicita en 1615 a la autoridad eclesiástica hacer Estación


de Penitencia de madrugada, algo que no se le permitiría, ya que sólo les concede
permiso para hacerla un año más tarde junto con la hermandad del Cristo de la
Humildad y Paciencia; así lo hicieron hasta 16227.

El 5 de abril, parece ser de ese mismo año, salen por primera vez de forma
independiente a la Catedral y, en el capítulo 18 de las Reglas dice que los
hermanos con cirio irán “acompañando al Santo Cristo, el cual lo han de llevar
con un alcarcás y un velo de resplandor por respaldo”, añadiendo posteriormente
que “irá una imagen de Nuestra Señora vestida de negro y un escapulario verde,
con sus parihuelas verdes; y llevará sus músicas en dos coros, la una con la
imagen y la otra con el Santo Cristo”8.

Deducimos en este caso que todavía no poseían un paso propiamente dicho


y aún procesionaban con una pequeña estructura en la que portaban las imágenes.

6
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p. 501.
7
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 426.
8
LÓPEZ MARTÍNEZ, Celestino: “Documentos para la Historia de la Hermandad de la Esperanza”. En El
Correo de Andalucía. Sevilla, 19 de octubre de 1961.

103
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

• Paso de Jesús del Gran Poder

Gracias a un inventario del 15 de marzo de 1618, sabemos que el Cristo iba


en un paso de parihuela llevado a hombro con horquetas, -horquillas-9.

La horquilla es una especie de vara que acaba en su parte superior por una
U, donde encajaban los brazos, -maniguetas-, de las antiguas andas al parar la
procesión. En algunos lugares de Andalucía todavía se utilizan, aunque su uso ha
perdido el valor de antaño, quedando como un elemento decorativo.

Durante todo el siglo XVII la hermandad hacía estación de penitencia desde


la Iglesia del Valle, atravesando la Puerta del Osario, a templos como el de la
Trinidad, San Agustín o a la Cruz del Campo10.

• Hermandad de la Vera Cruz

En un manuscrito de Fray Francisco José de Aldana se describe la


procesión en el año 1621, en los que dice que salía el Jueves Santo a las nueve de
la noche: Tras un cortejo formado por un muñidor, doce niños del Sagrario, dos
diputados y el estandarte, aparece la Santa Cruz “que con su carcax debajo de los
sobrepellices, llevan los religiosos con una toalla negra”11.

9
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 397.// SERRANO ORTEGA, Manuel: Noticia Histórico
artística de la Sagrada imagen de Jesús Nazareno…, p. 39.
10
Ibidem.
11
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 638.

104
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

V.2.1.- Aproximación al modelo barroco, (1640-1650)

A partir de la década de los cuarenta del siglo XVII comienzan a apreciarse


serias intenciones por parte de las cofradías, así como de los artistas, que
empiezan a intervenir sobre la morfología y ornamentación de los pasos, de
enriquecer la decoración de las peanas o canastos que soportan las escenas
pasionistas, lo cual indica la dirección tomada hacia lo que en el último tercio de
siglo supondrá la cima artística de estas obras.

Debido a la participación de estos reconocidos tallistas e imagineros,


poseemos mayor documentación sobre los autores que las realizaron, pues los
conjuntos se disparan en valor artístico, sobre todo si los comparamos con los del
siglo XVI.

• La desaparecida hermandad del Lavatorio

Un documento de interés es el que conocemos del 28 de febrero de 1640,


fecha en la que Agustín Franco contrató con la desaparecida hermandad del
Lavatorio la pintura y dorado de la “urna”, -paso-, del crucificado del Mandato.

Decía que los aparejos debían ser “muy buenos” y “que no lleve ningún
yeso demasiado porque por curso del tiempo salta”. En una cláusula final pone
que “todo el campo de la urna ha de ir de negro al ólio, conforme ay otras urnas
en Sevilla y a de dorar de almagra los festones, cartelas y todas las ojas y las
cartelas con sus fajas de oro y assimesmo todo lo que fuere molduras,
guarniciones, boceles y piedras y agallones an de ir dorados de suerte que quede
con toda perfección”.

105
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

De este interesante dato se desprende que sería habitual en los canastos de


la primera mitad del XVII dejar su fondo de color negro y dorada la talla. Los
flancos de la urna llevaban en su parte central cartelas pintadas al óleo con las
advocaciones de la Cofradía; el Lavatorio de Jesús a sus apóstoles, la Virgen del
Pópulo y una pareja de ángeles arrodillados, portando aguamanil y toalla, como si
estuvieran sirviendo al mismo Cristo12.

Esta información indica ya una enorme variedad de elementos decorativos,


como cartelas, hojas, molduras, boceles, -moldura convexa de sección
semicilíndrica-, agallones, -cuentas gruesas de un rosario, también llamados
perleados-, guarniciones, -colgaduras-, que dejan en evidencia la aproximación al
modelo que veremos posteriormente13.

• La cofradía de las Penas, (Triana)

A pesar de que ya se han acometido trabajos de cierta magnitud aún se


encargan otros de menor tamaño, como el solicitado el 16 de febrero de 1649 por
el ensamblador Antonio Martínez, el cual concierta unas andas de escasa
envergadura para la hermandad de las Penas de Triana, (La Estrella).

El motivo que sustentaría era el del Triunfo de la Santa Cruz y su costo fue tan
sólo de 300 reales, suponemos debido a lo pequeño del encargo, que tal y como se
describía tendría planta cuadrada con vara y media de largo, además de tres
cuerpos superpuestos sobre los que iría “una bola redonda que hace el Mundo con
su sierpe revuelta, y una calavera, y una cruz tosca por encima”14.

12
LÓPEZ MARTÍNEZ, Celestino: Retablos y esculturas de traza sevillana. Sevilla 1928, pp. 18-19.
13
Web de la Real Academia de la Lengua Española: http://www.rae.es/
14
CUÉLLAR CONTRERAS, Fco. de Paula: “El paso del Triunfo de la Santa Cruz para la Hermandad de
las Penas de Triana. Obra del maestro ensamblador Antonio Martínez”. Año 1649. Revista Tabor y
Calvario, núm. 7. Sevilla, junio 1990.

106
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

Fernando Farfán doró el paso por 500 reales, haciéndose esta escritura el 22 de
enero de 165115.

• Paso para el crucificado de la Sangre

Un ensamblador llamado Luis Vázquez concertó con la hermandad de la


Encarnación un paso para el crucificado de la Sangre, que costó 2300 reales.
Dicho contrató se firmó el 12 de Mayo de 1647, acordándose tomar como modelo
“el paso que tiene la cofradía del Señor San Pedro desta ciudad de Sevilla, que
dicen de los estudiantes; excepto que ésta ha de tener media vara más de alto, y
cuatro ángeles a las esquinas vestidos”16.

Lo que si apreciamos aquí, a pesar de la escueta explicación, es la


aportación decorativa de este trabajo, así como el tamaño del encargo.

15
CUÉLLAR CONTRERAS, Fco. de Paula: “Dorado del paso del Stmo. Cristo de la Hermandad de las
Penas de Triana”. Año 1651. Boletín de las cofradías, núm. 216. Sevilla, septiembre de 1977, p. 11.
16
CUÉLLAR CONTRERAS, Fco. de Paula: “Paso para el Stmo. Cristo de la Sangre, de la Cofradía de
Nuestra Señora de la Encarnación, (San Benito). Años 1647-1648”. Revista Tabor y Calvario, número 38.
Sevilla, junio 1990, p. 44.

107
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

V.3.- 2ª etapa, (segunda mitad del siglo XVII): Nace el modelo barroco

En la segunda mitad del XVII comienzan a consolidarse los postulados


barrocos que no dejarán de evolucionar hasta nuestros días. Se llega a un
considerable enriquecimiento decorativo de las andas procesionales y, poco a poco
se produce una aproximación morfológica y estilística en la construcción y la talla
de los pasos barrocos.

Gracias a la intervención de grandes maestros, escultores y tallistas de


retablo, se produce la primera adaptación seria del estilo barroco en los pasos, que
tenía como una de sus bases arquitectónicas la columna salomónica.

Este elemento, que resultaba fundamental tanto para el soporte como para
la decoración, fue asimilándose poco a poco en la arquitectura, mientras que en los
pasos no podemos asegurar que se implantara con fuerza, sobre todo por la falta
de documentación y porque se trata de una fase de asimilación estilística.

Otros recursos ornamentales se adaptan a las andas, predominando la hoja


de acanto como base ornamental, la hoja de cartílago, así como la inclusión de
figuras como pequeños ángeles, evangelistas y cartelas. Desconocemos también si
la rocalla se asimiló en esos tiempos.

En lo que se refiere a la composición, se busca un acentuado movimiento y


una interesante dinámica en la que se juega con los espacios, en algunos casos
gracias a volúmenes que entran y salen creando un movimiento que evoca el
espíritu barroco, provocando claroscuros, luces y formas caprichosas.

La obra cumbre que ejemplificará esta visión estética será el paso de


Francisco Antonio Ruiz Gijón para la cofradía del Gran Poder, encargado en
1688, el cual se conserva en la actualidad con leves alteraciones y en el que se
alcanza el modelo barroco por excelencia.

108
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

También existe gusto por las joyas, que en ocasiones eran prestadas por los
hermanos para la procesión tal y como ocurriera con la hermandad de
Montserrat17.

V.3.1.- La participación en los pasos de grandes maestros

La participación de importantes maestros del retablo la certificamos por un


documento del 20 de junio de 1651, en el que prestigioso tallista Francisco
Dionisio de Ribas concertó con la hermandad del Cristo de San Agustín un paso
que se describía como “de una urna de parigüela” para el crucifijo. Su elevado
coste, de 8500 reales y sin dorar, da muestra del caché del maestro en aquella
época, y del encargo se deduce que la obra podría acercarse a las que conocemos
hoy día en sus proporciones; es una pena que la escritura no sea más explícita en
la descripción estilística del paso18.

Autores como Francisco Antonio Gijón, Pedro Roldán, -el cual tendrá un
número considerable de discípulos que acometerán muchos encargos-, Pedro de
Borja, Simón de Pineda, Sebastián Rodríguez o Cristóbal Pérez resultarán
fundamentales para dar el salto cualitativo en este tipo de obras.

A ellos se les suman doradores de cierto nivel que aportan riqueza


ornamental y polícroma, como Pedro de Medina, Juan de Aragón, Juan Antonio
López o Francisco de Vega.

17
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p. 306. A finales del XVII y principios del
XVIII, era común esta práctica en la hermandad de Montserrat. Sus hermanos eran del gremio de los
mercaderes de lienzos y aportaban importantes cantidades para la procesión.
18
CUÉLLAR CONTRERAS, Fco. de Paula: “Paso para el Stmo. Cristo de San Agustín. Año 1651. Boletín
de las cofradías, núm. 226, Sevilla, julio de 1978.

109
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

V.3.1.1.- La intervención de Pedro Roldán, (1624- 1699)

Pedro Roldán será protagonista fundamental de estos encargos debido a que


su estilo y sus formas se alargaron durante muchos años después de su muerte,
acontecida en 1699, gracias a sus discípulos y colaboradores19.

• Pasos para la hermandad de la Quinta Angustia

Un documento interesante que testifica la


magnitud de los trabajos que comienzan a hacerse,
es el fechado el 22 de abril de 1659 por la
hermandad de la Quinta Angustia, que contrata a
Pedro Roldán y a Francisco Ramírez como
ensamblador, para ejecutar un paso de enormes
dimensiones que debió sorprender en su tiempo,
ya que medía 2,08 x 4,59 m., medidas
descomunales para la época. De la gran riqueza

Fig. 2.- Antigua cartela del paso decorativa se habla en el escrito, aclarándose que
debía llevar once relieves pasionistas del
mencionado escultor, acompañados por parejas de angelitos, a los que se sumaban
once serafines desnudos y seis ángeles mancebos vestidos, que portaban en sus
manos un rótulo y en la otra una insignia de la Pasión20.

En un mueble-escribanía de la Sala Capitular de de esta hermandad se


conservan tres relieves que pudieran haber sido los de Pedro Roldán que

19
RODA PEÑA, José: “El paso procesional. Talla, dorado y escultura decorativa…, p. 8.
20
SANCHO CORBACHO, Heliodoro: El escultor sevillano Pedro Roldán …, p. 30-31, 53-54.

110
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

pertenecieran a este paso21. En ellos se aprecia la mano del maestro, por el


dominio de sus planos y la perspectiva así como de la composición, de las formas
y de las proporciones, (fig.2).

El 16 de enero de 1665 junto con el ensamblador Pedro Camacho,


concertaría Pedro Roldán un nuevo trabajo para la cofradía del Dulce Nombre, -
fusionada posteriormente con la de la Quinta Angustia-, que por entonces estaba
en el Convento de San Pablo. Esta canastilla tendría forma de media caña calada y
en las esquinas se situarían cuatro ángeles del maestro, junto con ocho cartelas, lo
que deja entrever que sería un paso de canasto abombado pero tallado y continuo,
como el que hoy día posee la hermandad de San Esteban22.

El dorado y la policromía corrió a cargo de Pedro de Medina y Balbuena, a


quienes se les pagó 4300 reales, según contrato del 6 de marzo de 166723.

Por otras fuentes, sabemos que este canasto presentaba una altura de 1,70
m. y 2,40 m. el costero, y que las “tarjas” o cartelas se dispondrían cuatro en las
esquinas, -así como cuatro peanas-, y las otras dos una en el frente y otra en la
trasera. Al escultor Pedro Roldán le corresponde la ejecución de dichas tarjas y
otros mancebos en los ángulos del canasto, así como los relieves que
representaban: la Circuncisión de Nuestro Señor Jesucristo, Jesús Niño entre los
Doctores de la Ley en el Templo de Jerusalén, el Nacimiento de Cristo y la
Adoración de los Reyes Magos. Todas las escenas iban adornadas con cabezas de
serafines.

Algunos historiadores creen que este encargo no llegó a realizarse24.

21
GONZÁLEZ GÓMEZ, Juan Miguel., RODA PEÑA, José: “Imagineros e imágenes de la Semana Santa
sevillana, (1563-1753)”. En Las Cofradías de Sevilla en la modernidad. Sevilla 1988, p. 209.
22
LÓPEZ MARTÍNEZ, Celestino: Retablos y esculturas…, p. 118.
23
MURO OREJÓN, Antonio: Pintores y doradores. En Documentos para la Historia del Arte en
Andalucía. Tomo VIII, Sevilla 1935, pp. 96-97.
24
Boletín de las Cofradías de Sevilla. Sevilla, septiembre 1974.

111
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

• Paso para la hermandad de la Quinta Angustia, (Dulce Nombre de


Jesús)

En el caso de que la anterior ejecución no se hiciera la corporación pudo


acometer el siguiente trabajo del que tenemos documentación en noviembre de
1675, fecha en la que se encarga otro paso, al maestro ensamblador y dorador Juan
de Aragón, y al ensamblador Martín Rodríguez: “el primero ha de medir tres
varas y media sin los brazos y de ancho dos varas y tercia, debiendo llevar cuatro
tarjetas con dos niños, y así mismo la Hermandad ha de dar los cuatro ángeles
grandes que tiene la misma con sus incensarios. El otro paso lo hemos de hacer
componiéndolo del que tienen hoy en la cofradía en que salía el niño Jesús que
sobre el primer cuerpo ha de tener un banco ochavado de una cuarta de alto con
media caña hacia fuera con ocho xuguetes que se han de poner en las esquinas y
sobre este banco se ha de poner la urneta que tiene la cofradía y sobre ella
habemos de hacer un basamento que ha de tener una vara de alto en medio cuatro
serafines y en el embasamento ha de encajar un Sol que ha de tener dos varas de
punta a punta de los rayos, en medio un JHS y ha de ser labrado por ambas
caras, según lo que dispusiere el Padre Fray Antonio de Jesús, religioso de dicho
convento, hermano de la dicha cofradía y a su satisfacción. Pagando por todo ello
la Cofradía ocho mil cuatrocientos reales de vellón”25.

Francisco Antonio Gijón, enriqueció las andas con esculturas sedentes de


evangelistas y cuatro Doctores de la Iglesia, seguramente los Padres de la Iglesia
Latina. En las dependencias de la corporación de la Quinta Angustia, se conservan
hoy día dos de esos Doctores, puede que San Buenaventura y Santo Tomás, en
mal estado, pero estilísticamente cercanas a este maestro, por lo que podrían ser de
su producción.

Estos datos se demuestran gracias al contrato, en el que Gijón se obliga a


“hacer cuatro Evangelistas y cuatro Doctores de madera, de escultura de una

25
MURO OREJÓN, Antonio: “Artífices sevillanos de los siglos XVI y XVII”, en Documentos para la
Historia del Arte en Andalucía. Tomo IV, Sevilla 1932, pp. 41-43.

112
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

tercia de alto, sentados para el paso del Niño Jesús de esa cofradía. Los cuales he
de dar acabados a satisfacción el dicho Cristóbal Sánchez de la Rosa, para el día
fin del mes de Enero del año que viene de mil seiscientos setenta y ocho, acabados
y puestos en dicho paso a toda costa. Y por la manufactura y madera de los
dichos cuatro Evangelistas y cuatro Doctores, ha de ser obligado el dicho
Cristóbal Sánchez de la Rosa, deme dar y pagar mil reales de moneda de vellón,
los quinientos reales de ellos que me ha dado y pagado en contado, de que me doy
por entregado a mi voluntad…”26.

Esta hermandad pasó posteriormente años de decadencia, y en 1719 el paso


de la Quinta Angustia vuelve a hacer Estación después de varios años27. Mientras
que en 1763 deja de salir en procesión la del Dulce Nombre de Jesús y en 1786
dejaría de hacerlo la Quinta Angustia28.

• Paso para La Exaltación, (1678)

Posiblemente estemos ante los datos más destacados de esta segunda mitad
del XVII.
Sabemos que en 1651 sacaba un paso alegórico el cual pudo escenificar el
Triunfo de la Santa Cruz, pero lo realmente interesante el documento fechado el
13 de junio de 1678 en el que se firma el contrato con Luis Antonio de los Arcos y
Cristóbal de Guadix, por el cual realizarán el paso de Misterio. Este tendría ocho
relieves sostenidos por parejas de querubines, cuatro ángeles mancebos en las
esquinas y el Misterio completo salvo el crucificado. Al llevar tantas figuras el

26
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 321.
27
GARCÍA DE LA CONCHA DELGADO, Federico: La Pontificia y Real Hermandad y Archicofradía de
Nazarenos del Dulce Nombre de Jesús, Sagrado Descendimiento de Nuestro Señor Jesucristo y Quinta
Angustia de María Santísima Nuestra Señora, en Misterios de Sevilla. Tomo II. Sevilla 2003, p. 161.
28
GONZÁLEZ DE LEÓN, Félix: Historia crítica y descriptiva…, p. 178.

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Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

canasto sería de enormes proporciones, fijándose su


consecución el Domingo de Ramos de 1679,
recibiendo sus creadores 24.000 reales29.

Sería más que probable que los autores no


cumplieran de nuevo el plazo de ejecución de la obra,
disculpándose además el mayordomo de la época,
Bartolomé González, quien en 1693 se excusó ante la
autoridad eclesiástica de no poder acudir a la

Fig.3.- Arcángel del paso


procesión del Corpus ya que “como es notorio, el paso
de dicha cofradía que es nuevo salió tan grande que
estamos achicándolo y los gastos son muchos”30.

Además de la posible atribución de los ladrones que aparecen en la


escenificación actual de este Misterio, podríamos añadir la autoría de los pequeños
ángeles de las esquinas del paso a la producción de Luisa Roldán, - La Roldana-,
(1656-1704), así como las cartelas del maestro Pedro Roldán31.

Un libro de actas de la hermandad alude al encargo de estos ángeles


pasionarios atribuidos a La Roldana, quedando fechados entre 1683 y 168432.

Son cuatro ángeles llorosos que portan atributos pasionistas: tenaza, corona
de espinas y tres clavos y martillo; fueron restaurados en 1930 por Antonio
Infantes Reina. Su factura es excelente, con el lenguaje plástico propio de su
padre, Pedro Roldán, caracterizándose por los cabellos ondeantes, elegantes
curvas en su composición y dulzura, -a veces afeminada-, en su expresión, (fig. 3).

Los ocho medallones realizados por Pedro Roldán lo revalorizan como un


experto en este tipo de obras de pequeño formato, a veces casi miniaturescos, (fig.
29
CUÉLLAR CONTRERAS, Fco. de Paula: “Las imágenes y el Paso de la Exaltación de Cristo”. En
Boletín de las cofradías nº 187, Sevilla abril de 1975.
30
Archivo General del Arzobispado de Sevilla. Sección de Hermandades. Leg. 95. Expediente de las listas
formadas para el orden de la procesión del Corpus Christi, 1613-1756, p.99.
31
RODA PEÑA, José: “El paso procesional. Talla, dorado y escultura decorativa…, p. 18.
32
GARCÍA OLLOQUI, Mª Victoria: La Roldana. Sevilla 1977, pp. 53-54.

114
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

4). Aparece en el frontal la escena de la Exaltación de la Cruz, en la cual se


inspiraría Ricardo Comas en 1960 para recomponer la escena del paso. En el
costado izquierdo se encuentran la escena de la Caída del Nazareno, Jesús
Despojado y la Crucifixión; en el derecho están las del sorteo de la Túnica
Sagrada, el Descendimiento y el Santo Entierro, mientras que en la trasera se
encuentra la Flagelación33.

En todos ellos existe un dominio de la


composición excelente, aportando en cada
uno cierta variedad en este sentido, además
de un control por parte del maestro en la
perspectiva, el espacio y la policromía,
aportando multitud de detalles en una tarjeta
de escaso tamaño, llegando a un virtuosismo
Fig.4.- Cartela
muy avanzado para este tipo de creación,
suponiendo por tanto un auténtico ejemplo en
el campo de la escenificación de pequeño formato.

• Paso de La Carretería de 1677, obra del taller de Roldán

La cofradía de la Carretería en el XVII tuvo una intensa actividad


procesional, pues tenemos constancia de que el 28 de enero de 1606 procesionó
junto con la de Columna y Azotes a San Agustín, en rogativas por la enorme
sequía que acontecía. Años después, en la mañana del Viernes Santo de 1615,
sabemos que procesionaba “un paso con el sepulcro y las Marías” y para cerrar la
procesión un Santo Cristo34.

Asimismo, en un acta de un Cabildo de 1630, se describe que saldría


llevando una “Cruz del sudario” y tras los disciplinantes, “un Santo Cristo” y para
33
RODA PEÑA, José: “El paso procesional. Talla, dorado y escultura decorativa…, p. 18.
34
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p. 437.

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Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

cerrar la imagen de una Dolorosa, -que pudo salir por vez primera-, suprimiéndose
por tanto el Sepulcro que salió con anterioridad35.

Pero será en el último tercio de siglo donde encontramos una escritura


fechada el 2 de mayo de 1677 sobre la realización del Misterio, en la cual además
de referirse a las imágenes del mismo, aluden a la consecución de “un paso de
escultura en madera de cedro, que ha de tener una cuarta más que el de la
Cofradía de la Quinta Angustia y el ancho ordinario para pasar por las calles”, lo
que delata que sería de grandes proporciones. Añade que “deberá llevar ocho
tarjetas, las cuales han de ser de esculturas con los Misterios de la Pasión, a
medio relieve, todo de buena obra”. El plazo de la obra, encargada a Luis Antonio
de los Arcos y Cristóbal de Guadix expiraba en 1680, aunque no llegó a estrenarse
hasta diez años después, obligando a intervenir el maestro Pedro Roldán, debido a
los pleitos provocados por la hermandad para con sus dos discípulos. El precio
total de la obra ascendería a 16.200 reales36.

Uno de los motivos del retraso de la entrega del encargo, fue el traslado de
residencia a Cádiz por parte de Luis Antonio de los Arcos en 1687 junto con su
esposa Luisa, “La Roldana”, aunque la acción del maestro salvaría finalmente el
prestigio del taller.

Hay que destacar que en las cuentas dadas por el mayordomo de la época
entre 1686 y 1690, Manuel Márquez, aparecen estas partidas: “Más beynte y dos
reales que se gastaron en el pleyto que se yntentó poner a Xpl. Guadis y Pedro
Roldán, con que acabé de pagar el passo”, pudiéndose considerar estas palabras
el finiquito de la obra; se añade además en unas cuentas anteriores a 1682 y 1683
“dos mill y nobenta y ocho reales que tengo dados a Cristóbal de Guadix y Luis
Antonio de los Arcos a quenta del paso que están assiendo, los cuales consta por
carta de pago que tengo en mi poder”37.

35
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p. 438.
36
CUÉLLAR CONTRERAS, Fco. de Paula.- “Las imágenes y el Paso de la Exaltación…, pp. 12-13.
37
Archivo General del Arzobispado de Sevilla. Sección de Hermandades. Leg. 95…, 1613-1756, p.99.

116
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

El dorado correría a cargo de Juan Antonio López, que lo haría en 1702 por
3.500 reales, ascendiendo el coste final de la obra a 18.048. En 1702 el Cabildo
acuerda dorar el paso, labor que realizara Juan Antonio López y Antonio Morales.
Estas andas fueron sustituidas en 184438.

Las cartelas de esta ejecución


escenificaban los siguientes pasajes
pasionistas: Las Tres Necesidades,
Humildad y Paciencia, (fig. 5), el
Prendimiento, la Flagelación,
Coronación de Espinas, el camino del
Calvario, la Crucifixión y el Gólgota.
Fig. 5.- Una de las cartelas en la actualidad
Estas, -que hoy día posee la
hermandad de la Sagrada Cena de
Sevilla-, recuerdan a las comentadas anteriormente realizadas por el maestro
Pedro Roldán, del paso de la Exaltación de 1678, aunque de menor nivel. Dada la
mediocridad artística de Luis Antonio de los Arcos y Cristóbal de Guadix, parece
evidente que son de su producción, aunque por las circunstancias comentadas
pudo intervenir el maestro Roldán, al menos en alguna de ellas; su impronta
pudiera estar en la escena de las Tres Necesidades, algo lógico ya que es la que
tiene relación con la cofradía que solicitó el encargo, además de por su correcta
composición y por su acertado criterio en la utilización de los planos y la
terminología de los elementos.

En las demás se observan ciertas limitaciones formales y conceptuales,


como fallos en la perspectiva, en las proporciones y las formas, echándose de
menos la elegancia en la composición y en el tratamiento de los personajes.

Según apuntan algunos hermanos actuales de la hermandad de la Cena, las


cartelas fueron intervenidas en torno a 1970 por Antonio Dubé de Luque,
alterándose profundamente su policromía.
38
RODA PEÑA, José: “El paso procesional. Talla, dorado y escultura decorativa…, p. 18.

117
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

• Paso de la Púrpura: obra de Pedro Roldán y Pedro de Borja

No menos interesantes son los datos que aporta la hermandad de Las


Cigarreras, que hacía Estación a la Iglesia de San Agustín ya en 1606, en
compañía de la hermandad de la Tres Necesidades, aunque en 1611 se trasladaría
a los Terceros.

En 1628 hacen Estación de penitencia con tres pasos, el primero con Jesús
atado a la columna, el segundo con el Señor de la Sagrada Púrpura y el tercero con
la Virgen bajo palio. A pesar de ello, el dato más destacado de estas fechas es de
1664, año en el cual se suscribe un contrato ante el escribano Diego de Ramón por
el que “el maestro escultor Pedro de Borja se compromete a realizar la
construcción de la urna y paso para el Stmo. Cristo de la Púrpura debiendo
quedar terminado en la primera semana de la Cuaresma siguiente”, dato que nos
revela la posible participación de este autor en obras de esta índole. A pesar de
ello, por causas que se desconocen, el trabajo no pudo ser terminado hasta dos
años después39, ya que en 1666 se firma un nuevo contrato con Pedro Roldán por
parte de esta corporación para que finalizara el encargo, reduciéndose el acuerdo a
la realización de dos ángeles, cuatro cabezas de querubines para otras tarjas, así
como otros cuatro relieves para las cartelas principales, todo por 3500 reales,
donde estaban incluidos los gastos referentes a la intervención de Pedro de Borja
que equivalían a 2000 reales40.

Hasta el 15 de noviembre de 1696, no pudo concretarse el dorado de esta


obra, labor que hiciera Francisco de Vega, que además se comprometió a encarnar
y estofar “los quatro ángeles pequeños de arriva”, así como a retocar “los quatro
maiores de avaxo”. Esta escritura fue cancelada el 24 de marzo de 169841.

39
GARCÍA OLLOQUI, Mª Victoria.: La Roldana…, pp. 53-54.
40
RODA PEÑA, José: “El paso procesional. Talla, dorado y escultura decorativa…, p. 18.
41
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p. 437.

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Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

• Paso para Jesús de la Conversión, (Montserrat)

Tras adquirir fondos por la venta del paso antiguo, la hermandad de


Montserrat encarga unas nuevas andas. Lo demuestra un acta del cabildo del 1 de
abril de 1674, en la que se aclara que el resto del dinero se consiguió a base de
donativos de sus cofrades, terminando también el dorado de la obra, siendo el
coste final de 34.000 reales. Un inventario de 1682 informa de la ejecución de los
relieves y los ángeles de este paso por Pedro Roldán. Este parece que se vendió en
1804 a la hermandad del Valle debido a la enorme decadencia que sufría la de
Montserrat en torno a esta fecha42.

Por otras fuentes sabemos que fue destruido en el último tercio del siglo
XIX, que la compra a la hermandad de Montserrat pudo producirse en 1809 y que
posiblemente fue ejecutado por Martínez Montañés; Bermejo lo describía
comentado que se trataba “de una peana tallada y calada con varias tarjetas de
relieve de asuntos de la Pasión, y en las esquinas cuatro hermosos ángeles con
inscripciones en tarjetas, las cuales van ahora en el paso de la Coronación”43.

V.3.1.2.- Francisco Antonio Gijón

Sabemos poco de la formación recibida por Gijón, (1653-1720¿?), nacido


en la población sevillana de Utrera, aunque consta que en la Academia de la Casa
Lonja tuvo como maestro a Pedro Roldán, además de haber sido aprendiz de
Andrés Cansino. Precisamente se casará, tras la muerte de Cansino en 1670 con su

42
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p. 438 // CUÉLLAR CONTRERAS, Fco.
Paula: “Las imágenes de la Hermandad de la Carretería, (I)”, en Boletín de las cofradías de Sevilla, nº 179.
Sevilla, agosto de 1974.
43
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p. 176.

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Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

viuda, Teresa de León, aunque posteriormente, en 1677, se casará por segunda


vez44.

Gijón destaca en la escuela sevillana con singular personalidad, entre las


denominadas líneas estilísticas “José de Arce - Andrés Cansino” y la
“roldanesca”45.

Su estilo e impronta lo sitúan en la plenitud barroca, identificándose con lo


teatral y lo popular, caracterizándose sus imágenes por su espiritualidad, su
dinamismo, su verismo, y la fuerza expresiva en los gestos.

Los mismos criterios compositivos y formales los trasladará a los pasos, en


su dinámica y sus formalismos, aplicando el ideal barroco en su máxima
expresión, tanto en escultura figurativa como en talla ornamental.

Su figura resultará fundamental en la evolución de este tipo de obras, sobre


todo por la consecución del paso más influyente en siglos posteriores: el de
Nuestro Padre Jesús del Gran Poder.

Sin duda, tanto a nivel compositivo como morfológico, supondrá un antes y


un después para la talla procesional sevillana.

• El Gran Poder: modelo de paso procesional barroco

En 1688 se concierta la realización de un paso para el Señor del Gran Poder


por parte de Francisco Antonio Gijón, (fig. 6 y 7), el cual debía tener cuatro varas
y media de largo, dos cuartas de ancho y tres cuartas de alto la tarima, con su
monte “donde ha de ir su Majestad”. El material para acometerlo según el
contrato sería “de pino de cedro”, y la parihuela tenía que ser de pino con treinta y

44
GONZÁLEZ, Juan Miguel, RODA José: Imaginería procesional…, p. 114.
45
BERNALES BALLESTEROS, Jorge: Francisco Antonio Gijón…, p. 51.

120
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

cuatro ángeles “con ocho tarjetas y sus historietas”, y la tarima según el perfil,
cercado de medias cañas toda la tarima en redondo46.

Fig. 6 y 7.- El paso en la actualidad

Este paso conservado en la actualidad con algunas modificaciones, es


barroco y abombado en el canasto, con una trabajada decoración, sosteniendo los
ángeles escenas con relieves de gran exquisitez. Estas escenas hoy día
representan: Moisés tocando con la vara la peña, la destrucción del Templo por
Salomón, El arca de Noé, David peleando con Goliat, Sansón llevando sobre sus
hombros las puertas de la ciudad de Gaza, Jesús en la calle de la Amargura, la
vuelta del hijo pródigo e Isaac llevando la leña para su sacrificio. En las esquinas
del canasto, águilas bicéfalas con medallones.

Respecto a las cartelas Serrano y Ortega de 1898, describe las escenas


existentes: Moisés tocando con su vara la peña(1); la destrucción del Templo por
Sansón(2); el Arca de Noé,(3); David peleando contra Goliat(4), Sansón llevando

46
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 399.

121
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

sobre sus hombros las puertas de la ciudad de Gaza(5); camino de Calvario(6); la


vuelta del Hijo Pródigo (7) e Isaac llevando la leña para el sacrificio(8)47.

Los relieves 1, 2, 3 y 7 aparecen hoy día en las esquinas, incluidos en las


águilas bicéfalas coronadas; aun así, con posterioridad debieron sustituirse los
números 4, 5 y 6, ya que junto a la escena del Calvario en el centro de los costados
se sitúan otros tres relieves pasionistas que describen el Prendimiento, la
Flagelación y el Escarnio de Cristo, del estilo de Gijón aunque los dos últimos son
de inferior calidad48.

Las cartelas son de estilo barroco, apreciando en ellas un buen estudio del
espacio, de la terminología y profundidad por parte del autor, recreándose en
bastantes detalles y provocando en muchos de ellos el efecto de “ojo de búho”,
aportando numerosos elementos arquitectónicos y naturalistas.

Hoy día el paso lo apreciamos con veinticuatro angelitos de gran


dinamismo y movilidad que rodean las escenas de las cartelas, además de cuatro
cabezas aladas de querubines situadas en los laterales. La crestería la remata seis
ángeles virtudes de gran calidad artística, -0,84 cm. de alto-, llevando los de las
esquinas escudos e instrumentos pasionistas, mientras que los del centro de los
costados enseñan filacterias con el versículo del Christus factus est, alusivos a la
obediencia de Cristo hasta la muerte y muerte de cruz. Los restauró Blas Molner
en 1776 por 100 reales junto con la corona del Nazareno que también fue
intervenida49.

En el contrato, en el que no hay datos descriptivos de la obra, se dice que


debe realizarse “según y en la forma que se contiene en un dibujo que dello se a

47
CUÉLLAR CONTRERAS, Fco. de Paula: “Las imágenes de la Hermandad de la Carretería, (II)”, en
Boletín de las cofradías de Sevilla, nº 180. Sevilla, septiembre de 1974, pp. 18-19.
48
RODA PEÑA, José: “El paso procesional. Talla, dorado y escultura decorativa…, p.28.
49
Ibidem…, p.28.

122
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

hecho, el cual para en poder de la dicha cofradía rubricado de mi el dicho


principal y del presente escribano público”50.

El costo del paso se acordó en 500 ducados, de los cuales 1000 reales
debían abonarse de entrada para afrontar el coste material de la obra; lo demás se
abonaría progresivamente aunque se aclaraba que la duración del trabajo no podía
ser de más de diez meses. Finalmente no se terminaría hasta el septiembre de
1689, ya que el día 8 de ese mes el autor otorgó la carta de pago por los 3.179
reales que recibió del encargo desde que lo comenzara. Será después de cancelarse
la escritura el 8 de abril de 1692 cuando describa detalles sobre el diseño del paso,
que medía 3,75x 1,87x0,60, utilizando como material el cedro y el pino, llevando
consigo ocho cartelas con sus relieves y 34 ángeles. La hermandad le recompensó
con otras cantidades debido a la satisfacción existente entre sus cofrades por la
realización de esta gran obra51.

En cuanto a la autoría, parece que el diseño corrió íntegramente a cargo de


Gijón, a pesar de que se aprecie la impronta retablística de otros autores como
Simón de Pineda. Sin ir más lejos, en 1898 Serrano y Ortega, atribuiría la
realización de las andas a este autor, pues recordaba al estilo del mismo “en el
airoso corte y sus movidas líneas”; también reconocía que era el decano de los
pasos de Sevilla, “pues todas las peanas habían sido destruidas y otras muy
alteradas con las restauraciones que se han hecho”52.

Juan Carrero Rodríguez piensa que, aunque la obra escultórica sería de


Gijón, su talla y trazado correspondería al maestro ensamblador Bernardo Simón
de Pineda.

50
RODA PEÑA, José: “El paso procesional. Talla, dorado y escultura decorativa…, p.22.
51
Ibidem, p.18.
52
SERRANO Y ORTEGA, Manuel: Noticia histórico- artística de la Sagrada Imagen de Jesús
Nazareno…p. 128.

123
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

A finales del XIX, (fig. 8) el


historiador Bermejo y Carballo, señalaba
erróneamente como autor del paso a
Martínez Montañés, valorándolo como el
mejor de la ciudad, describiéndolo como
una obra “toda calada con labores
caprichosas muy bien ejecutadas, con un
perfil airoso y mucho ensamblaje y
movimiento”. También añade que en esos
tiempos la peana estaba bastante
maltratada, pero fue restaurada y dorada
en 1853 quedando en mejor estado53.
Fig. 8.- El paso a finales del XIX

Eugenio Noel, en su libro Semana Santa en Sevilla escribió: “Entre plata y


oro, águilas, relieves que hablan del gran poder de la imagen, cresterías caladas,
tarjetones, con los sufrimientos de ese mismo Dios tan poderoso, y ángeles con
atributos de martirios de la Pasión, Nuestro Padre Jesús del Gran Poder se
muestra agobiado, hermoso en su humillación, sin que el verismo en el
sufrimiento quite los rasgos soberanos del rostro, su majestad imponente”54.

Gracias a este impresionante paso podemos considerar a Gijón como el


artista más influyente para la realización de andas procesionales de estilo barroco,
tanto a nivel estilístico como compositivo.

53
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p. 250.
54
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 400.

124
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

- Intervenciones posteriores:

En 1853 restauran y doran las andas, dándole a la parihuela mayor altura en


esta intervención55.

Cinco años después, en 1858, sufriría una nueva alteración estética, ya que
se sustituyen los faroles del Nazareno por unos de guardabrisas de estilo barroco56.

En 1908 se altera la fisionomía del canasto por la inclusión de los faroles


que lleva hoy día y que en plata realizara el taller de Rafael León en Córdoba. Son
de estilo rocalla y su traza se inspira en los existentes en las andas del paso de la
urna del Santo Entierro de la ciudad de Écija, siendo dorados un año después.
Como no terminaban de liquidar el trabajo, el orfebre sólo mandó tres de ellos, por
lo que ese año salió con dos en la delantera y dos de guardabrisas que llevaba
detrás habitualmente57.

En 1969 Manuel Guzmán Bejarano completa este paso con un moldurón


sobre los faldones, tallado y dorado al estilo del canasto, además de unas
maniguetas en madera de Guinea.

Precisamente el mismo autor aprovechó para restaurar el canasto, además


de sustituir el monte de madera en mal estado por la carcoma, dándole al conjunto
el aspecto final que hoy conocemos58.

55
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 405.
56
SERRANO ORTEGA, Manuel: Noticia Histórico artística de la Sagrada imagen de Jesús Nazareno…, p.
132.
57
GARCÍA DE LA CONCHA DELGADO, Federico: La Pontificia y Real Hermandad y Cofradía de
nazarenos de Nuestro Padre Jesús del Gran Poder y Mª Santísima del Mayor Dolor y Traspaso, en
Nazarenos de Sevilla. Tomo I. Sevilla 1997, p. 354. // SERRANO ORTEGA, Manuel: La iconografía
pasionista y las reformas del paso del Señor del Gran Poder al finalizar el siglo XIX y comienzos del XX.
Sevilla 1901.
58
Programa de Semana Santa, “EL CORREO DE ANDALUCIA”. Sevilla 1969.

125
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

• El paso del Cristo del Amor

Fechados el 6 de mayo de
1685, encontramos datos muy
interesantes en la hermandad del
Amor, que concluiría la
construcción del paso que hoy día
conserva con importantes
modificaciones, (fig. 9).

Todo comienza con el


acuerdo al que se llega con
Sebastián Rodríguez para acometer
la realización de “un paso con su
tarima con todos sus adornos”,
acordándose el costo en 4.000
reales. No se conocen muchos
Fig. 9.- El paso en la actualidad
detalles del mismo, pero se sabe por
el contrato que el canasto debía
componerse de dos cuerpos, figurando en cada uno cuatro relieves pasionistas y
ocho querubines; rematando la urna se situarían otros cuatro ángeles con escudos,
mientras que al pié de la cruz habría una calavera con dos huesos entrelazados
aludiendo a la muerte y, tras el madero un pelícano alimentando a sus polluelos
como símbolo del Amor59.

Parece ser que este autor no llegó a finalizar el trabajo ya que viajó a las
Indias, por lo que el 26 de mayo de 1692 Cristóbal de Guadix y José de la Barrera
tasan el trabajo acometido por Sebastián Rodríguez en 800 reales. El hecho de que
el 16 de junio de 1694 la hermandad encargara otro proyecto a Francisco Antonio

59
RODA PEÑA, José: “El paso procesional. Talla, dorado y escultura decorativa…, p.29.

126
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

Gijón, hace suponer que el trabajo de Sebastián Rodríguez no había sido muy
extenso. El costo del nuevo encargo ascendería a 300 ducados y se concibió de
una manera distinta al anterior. Sus relieves serían cuatro y estarían cada uno
flanqueados por dos ángeles, apareciendo también imágenes de los evangelistas y
cuatro ángeles en las esquinas, manteniendo la simbólica imagen del pelícano.
Juan Francisco de Neira doraría el paso en 1718 costando su trabajo 2500 reales60.

Este paso de Gijón es el que vemos hoy día pero con numerosas
alteraciones estructurales y estilísticas; un inventario de 1787 dice que ese año aún
existían en el paso la efigie de los Evangelistas, los cuales se desconoce donde
fueron a parar posteriormente61.

Según José Roda Peña y Juan Miguel González Gómez no tendría


fundamento la tradición oral que transmitió Cuéllar Contreras, en las que atribuía
los evangelistas que hoy día procesionan en el paso del crucificado del Museo con
los que en su día hizo Gijón para la hermandad del Amor62.

En su traza el paso es de rectos perfiles, con bombo en el canasto y con talla


basada en las hojas de acanto, en ocasiones “de cartílago”, motivos vegetales y
pequeños motivos que recuerdan a una arquitectura, siendo los respiraderos de
líneas dinámicas y del mismo lenguaje formal que el canasto.

- Intervenciones posteriores:

La mayor reforma se produce en 1916, año en el que se estrenan unos


candelabros para las esquinas además de ser agrandado el paso, adaptándose unos
ángeles que figuraban con anterioridad en el paso de la Entrada en Jerusalén63.
Estos eran de discreta calidad y movida factura, y llevaban unos paños morados

60
QUILES GARCÍA, Fernando: Noticias de Pintura, (1700-1720). Sevilla 1990. pp. 168-169.
61
BERNALES BALLESTEROS, Jorge: Francisco Antonio Gijón…, pp. 95-97.
62
RODA PEÑA, José: “El paso procesional. Talla, dorado y escultura decorativa…, p.79.
63
El noticiero sevillano, nº 9. Sevilla, 17 de abril de 1916.

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Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

con flecos dorados donde se lee: “A LOS”/ “ENCARCELADOS”/ “AMOR” / y


“SOCORRO”64.

Las cartelas actuales fueron realizadas por Manuel Guzmán Bejarano y los
relieves de 1998 son de buena factura, obras de Carlos Valles.

• Paso para la cofradía del Despedimento

En 1688 Francisco Antonio Gijón labra y diseña un paso para el Misterio


del Despedimento, siendo su medida de 2x4 metros. La parihuela sería de pino,
mientras que la parte correspondiente a talla ornamental se haría de cedro; en el
diseño se contemplaban cuatro relieves sobrepuestos sostenidos por tres ángeles
querubines. Sobre la canastilla se dispuso la colocación de un trozo de jardín,
aunque no se especifica qué imágenes aparecían65.

• Paso para la cofradía de San Isidoro

Sabemos que en 1688 realiza unas andas y el Cirineo que procesiona en la


actualidad, aunque por desgracia desconocemos su composición66.

V.3.1.3.- Bernardo Simón de Pineda

El antequerano Bernardo Simón de Pineda, (1637- 1704?), se afincará en


Sevilla hacia 1652. Como ya hemos apuntado en el capítulo alusivo al retablo

64
RODA PEÑA, José: “El paso procesional. Talla, dorado y escultura decorativa…, p.31.
65
CUÉLLAR CONTRERAS, Fco. de Paula: Un testimonio de la Cofradía del Despedimiento. Boletín de
las Cofradías. Sevilla, diciembre de 1977.// CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales …, p. 649.
66
BERNALES BALLESTEROS, Jorge.: Francisco Antonio Gijón…, p.87.

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Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

sevillano, su producción retablística será difícilmente comparable a la de otros


autores de su época. Por desgracia, disponemos de escasa documentación que
certifique una numerosa ejecución de pasos67.

El único documento que acredita la segura participación de este importante


personaje son unas cartas de pago por parte de la hermandad de Monte-sion
fechadas el 25 de abril de 1669, el 17 de julio de 1670 y el 28 de marzo de 1674,
por la que se comprometía a hacer un paso para el Misterio de la corporación. Esta
le entregaría el ya existente y pagaría al autor 15.000 reales.

El paso lo doraría un año después Juan Salvador por la cifra de 7.000 reales
y se sustituiría en 1833, aunque se aprovecharon sus cartelas, en número de ocho,
con motivos pasionistas, que desaparecieron en los acontecimientos previos a la
Guerra Civil española de 193968.

No disponemos de más datos para conocer la composición de esta obra.

V.3.1.4.- La participación de Andrés Cansino

Discípulo de José de Arce, escultor flamenco que llega a Sevilla en 1636,


Andrés Cansino, (¿?-1670) fue oficial en el taller de este gran maestro de la
imaginería. Su prestigio profesional le hizo ser profesor de la Academia de Arte
de dibujo y pintura que fundara Murillo en 1660, aunque su carácter rebelde
propició su expulsión de la misma, siendo readmitido en 1669, falleciendo un año
después.

67
HALCÓN, Fátima: “El Retablo salomónico…. p.19.
68
BERNALES BALLESTEROS, Jorge y GARCÍA DE LA CONCHA DELGADO, Federico: Imagineros
andaluces de los Siglos de Oro, pp. 75-77.

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Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

Al igual que en el caso del maestro Simón de Pineda, sabemos que Andrés
Cansino, subscribe un contrato con la hermandad de la Columna y Azotes, (Las
Cigarreras), el 5 de abril de 1667 por el que él mismo, así como Lorenzo Ávila, -
maestro dorador-, harán por 2500 reales “una media caña que ha de tener media
vara de alto y de ancho lo que requiere para la imagen del Señor Titular de la
cofradía, la cual haremos con dieciséis niños, -querubines-, del mismo tamaño de
los cuatro que ahora tiene la aludida tarimilla con los atributos de la Pasión y
con las historietas que se pidieren”69.

En 1698 estrenan el paso de la Sagrada Púrpura, de madera tallada y


dorada, del cual desconocemos su composición70.

V.3.1.5.- Sebastián Rodríguez

Se conoce poco sobre la vida de Sebastián Rodríguez, (¿?-1692¿?), aunque


artísticamente sigue la línea estilística de Martínez Montañés y Juan de Mesa71.

• Paso para la hermandad de la Sagrada Cena

Estos datos se refieren a un contrato del 17 de mayo de 1688 en la que el


escribano Bernardo García acuerda la realización de un paso con Sebastián
Rodríguez, discípulo aventajado de Juan de Mesa, del cual se desprende por parte
del autor: “…otorgo a favor de la Cofradía del Santísimo Cristo de la Humildad,
sita en el convento de San Basilio, de esta ciudad, y digo que estoy convenido y
concertado de obligarme como la presente me obligo de hacer un paso que se
compone de urna con su monte donde ha de ir colocado el Santo Cristo. Seis

69
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 299.
70
Ibidem.
71
GONZÁLEZ, Juan Miguel, RODA, José: Imaginería procesional…, p. 97.

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Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

tarjetas con dos niños en cada una de escultura y cuatro ángeles uno en cada
esquina, vestidos y una figura de dos varas…”72, suponemos por la descripción
que se trataba de un paso para el Cristo de la Humildad y Paciencia.

• Paso para la cofradía del Despedimento

Esta corporación fue fundada a finales del XVI y extinguida


posteriormente, teniendo constancia de un documento fechado el 28 de mayo de
1686, referente al encargo de un paso que tenía como responsable al escultor
Sebastián Rodríguez:”…yo , Sebastián Rodríguez, haré a toda costa manufactura
el paso que ha de salir de Nuestra Señora en dicha Estación, con su tarimilla de
escultura y tres tarjetas en ella en la forma que contiene el dibujo y traza que
para ello se ha hecho. Siendo la madera en lo que toca a las esculturas de cedro,
y las piezas de dicho paso en pino de Flandes”.

Se añade también que su costo era de novecientos reales y que debían


entregar al taller el paso antiguo. Además, se especifica que no entraba en el
acuerdo el dorado del paso ni los varales73.

V.3.1.6.- Cristóbal Pérez

Conocemos poco de la biografía de Cristóbal Pérez, (¿?-1685), aunque a


nivel estilístico su obra de imaginería se queda con los postulados de principios de
siglo, alejándose de las fórmulas roldanescas74.

72
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales …, p. 70-71.
73
Ibidem, p. 648.
74
GONZÁLEZ, Juan Miguel, RODA, José: Imaginería procesional…, p. 110.

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Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

De los documentos que tenemos, destaca el fechado por la hermandad de la


Macarena el 15 de julio de 1681, según escritura ante el escribano público Pedro
de la Riva, en el que se concierta la realización de un paso de Misterio: “Ha de
constar de cinco judíos, además de los siete que tiene la cofradía, y dieciséis
niños y ocho tarjetas de la Pasión; y la sillería y el sitial para Pilato, y su tarima
tallada para los pies del Santo Cristo”. El trabajo debía estar preparado para
procesionar en la Semana Santa del año siguiente, y finalizadas para la de 1683.

El coste sería de 11.000 reales, lo que presupone una obra de gran


envergadura75.

De este texto se desprende la magnitud y el cariz que ya habían tomado los


encargos de este tipo, no sólo por su tamaño, sino por el precio y el detalle con el
que se describe lo solicitado a sus autores, lo que demuestra la importancia que la
cofradía le daba a la ejecución de la obra; también destacamos los motivos
decorativos que se especifican: “dieciséis niños”, -refiriéndose a ángeles
mancebos-, y “ocho tarjetas de la Pasión”, lo que deja claro el enriquecimiento
ornamental que poseía, aunque por desgracia, desconocemos el paradero de estas
imágenes.

V.3.1.7.- Antonio Cardoso, Francisco de Cobos y los pasos de la hermandad


del Santo Entierro de 1693

En 1691 hermanos del Santo Entierro pretenden volver a realizar estación


de penitencia, comprobando que no poseían enseres suficientes y los que tenían

75
ÁLVAREZ JUSUE, Aurelio: “La cofradía de la esperanza Macarena en el siglo XVII”. En Archivo
Hispalense. T. XX. Sevilla 1954, pp. 156-159.// CUÉLLAR CONTERAS, Fco. de Paula: “Paso para el
Stmo. Cristo de la Sentencia”. Año 1681, obra del maestro escultor Cristóbal Pérez”. En Boletín de las
cofradías, número 198, Sevilla, marzo de 1978.

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Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

estaban en mal estado. La hermandad se había unido a la de la Soledad del


Carmen en 1635 debido al estado de decaimiento en el que se encontraba76.

Aún así aprobaron ese año nuevas Reglas y se adentraron en el proyecto,


consiguiendo salir el Viernes Santo llevando tres pasos.

Existe algo de confusión a la hora de enumerar los pasos, ya que en el


primero, según Bermejo y Carballo, aparecía una escena compuesta por Nicodemo
y José de Arimatea trasladando a Cristo a sepulcro envuelto en una sábana, en el
segundo la Virgen y las Tres Marías, mientras que el tercero era una
representación del monte Calvario77.

Sin embargo, Juan Carrero apunta que en 1693 el primer paso que sacan es
el del Triunfo de la Santa Cruz, que año tras año variaba su escenificación; este
paso iba sobre “peana dorada con cartelas de atributos de la Pasión”78.

A pesar de ello, podemos describir dos de los pasos que tenían:

• Paso de la urna

Sin duda destacan los datos alusivos al paso de la urna, uno de los más
suntuosos de la época si nos atenemos a los materiales para su realización,
estrenado aquel año, llevando una peana de base dorada con ocho cartelas
pasionistas talladas en sus esquinas y centros, realizadas por Antonio Cardoso de
Quirós; sobre esta base iban cuatro columnas de plata bien trabajada cuyos
capiteles sustentaban el sepulcro, que por fuera estaba decorado con carey y plata,
siendo de plata también los bastidores los cuales iban con cristales para apreciar el
interior de la urna. En la parte baja de las esquinas cuatro ángeles de talla, ocho
faroles de plata y como remate, en la parte alta unos serafines y florones de

76
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales …, p. 580.
77
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias…, p. 477.
78
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales …, p. 580.

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Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

madera tallada. Los faroles eran de brocado negro con ramos de oro y aplicaciones
de seda. Esta obra la hizo el ebanista Francisco Humanes, persona encargada
también de colocar encima de las andas pebeteros que quemaban incienso y
pastillas olorosas, además de asentar el carey que la enriquecía79.

• Paso del Duelo

El tercer paso llevaba en un testero un sitial de madera tallada y dorada, con


cúpula de forma de capitel y bajo este aparecía la Dolorosa que frente a ella, tenía
a los Santos Varones, San Juan y las Marías80.
Fue dorado por Juan José Salinas, dato que se conoce por la escritura
existente del acuerdo fechado el 5 de mayo de 169481. Se conoce también el
compromiso adquirido el 30 de octubre del mismo año para dorar las andas del
paso alegórico, incluyendo el estofado de la bola del mundo y las flores del Monte
Calvario, trabajo encargado a Juan de Molina82.

Las peanas de los pasos fueron talladas por el ensamblador Francisco de


Cobos y los ocho faroles de plata que se describen en el del yacente de Pedro de
Torres, que también cinceló las columnas que sujetaban la urna83.

Por desgracia, los pasos comentados se perdieron durante la Invasión


Francesa84.

79
MURO OREJÓN, Antonio: “La cofradía del Santo Entierro en 1927”. En El Correo de Andalucía.
Sevilla 4 de abril de 1958; CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: “Tallas en los pasos de Sevilla (VI)”. En
Diario ABC, Sevilla 10 de marzo de 1987, p. 69. CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Antecedentes
Históricos de la hermandad del Santo Entierro”. En Manifiesto de la Hermandad del Santo Entierro.
Sevilla 1992, pp.16-21.
80
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 581.
81
CUÉLLAR CONTRERAS: “Un documento del siglo XVII de la cofradía del Santo Entierro. Dorado del
paso y sitial de Nuestra Señora de Villaviciosa”. En Boletín de las cofradías, número 208, Sevilla, enero de
1977.
82
SANCHO CORBACHO, Heliodoro: “Artífices sevillanos del siglo XVII”. Homenaje al Profesor Dr.
Hernández Díaz. Sevilla 1982, p. 649.
83
MURO OREJÓN, Antonio: “La cofradía del Santo Entierro en 1927”…4 de abril de 1958. // CARRERO
RODRÍGUEZ, Juan: Tallas en los pasos de Sevilla (VI)…, p. 69. //CARRERO RODRÍGUEZ, Juan:
Antecedentes Históricos de la hermandad del Santo Entierro”…, pp.16-21.

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Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

V.3.1.8.- Otras obras destacadas

• Paso de la cofradía de los Sagrados Clavos

Existen numerosos datos sobre la realización de este paso, los cuales


comentamos a continuación.

La cofradía de los Sagrados Clavos, -extinguida posteriormente en el


XVIII-, concierta con Francisco Antonio Gijón unas andas el 12 de julio de 1680
el cual, en la carta redactada para tal efecto declaraba que: “…por la presente me
obligo a hacer una urna con su parihuela la cual ha de tener cuatro varas y
medio de largo y de ancho el que tuvieran las puertas por donde entran y salen
las cofradías de la Santa Iglesia Mayor de esta ciudad, la dicha urna he de hacer
con las hechuras de Nuestra Señora y San Juan y el águila y con ocho tarjas con
ocho historietas del Apocalipsis, y veintiocho ángeles, los veinticuatro que
acompañan las tarjas desnudos y los cuatro vestidos en las esquinas con sus
tarjetas para escudos y la dicha urna e imágenes todo ello ha de ser de talla de
madera de cedro y no de otro género de madera alguna, y la parihuela de madera
de Flandes con sus cantoneras de hierro y las visagras que fueren que está hecho
y firmado de mi nombre y de Juan Antonio Barriendo, Diego Díaz Madrinero y
Juan Francisco de Blas y Antonio Torres, Oficiales de dicha cofradía”.

Parece que este proyecto no debió consumarse pues en 1688 se concierta


con el antequerano Bernardo Simón de Pineda la ejecución de unas andas
parecidas85, describiéndose en el contrato de la siguiente forma: “me obligo a
hacer una urna de madera de cedro, todo enteramente menos la parihuela que ha
de ser de pino de Flandes, de cinco varas de largo fuera de la parihuela y el

84
RODA PEÑA, José: “El paso procesional. Talla, dorado y escultura decorativa…, p. 35.
85
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: “Los ángeles mancebos de la bofetada…”, 30 de julio de 1981.

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Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

ancho correspondiente a el largo según arte y que diera lugar los sitios y calles
por donde ha de salir y entrar y de alto con su coronación la dicha urna ha de
tener una vara y el alto de todo el paso será el que pareciere conveniente y
proporcionado, de la historia de San Juan Evangelista en el Apocalipsis, ha de
llevar cuatro historias, una en el medio de cada una de sus fachadas y, estas han
de ser de medio relieve y cada una acompañada de cuatro niños y en cada uno de
sus ángulos un águila, y en el monte ha de estar sobre dicha urna la imagen y el
dragón que demuestra el dibujo…”

Posteriormente, se compromete a entregar la obra en un plazo de nueve


meses, por lo cual le pagarían cinco mil reales. Se da la curiosidad de que ese
mismo año Francisco Antonio Gijón concierta con la hermandad del Traspaso las
andas comentadas anteriormente del nazarenos del Gran Poder, de similares
características, quedando la duda de si son estas las que había concertado este
autor para esta hermandad de los Sagrados Clavos86.

Según Bernales Ballesteros, a pesar de que en el contrato realizado a Simón


de Pineda no aparece nada al respecto, Francisco Antonio Gijón pudo entregar a la
hermandad algunas de las imágenes realizadas y acordadas en su contrato con la
corporación87.

En el 1700 la cofradía paga al ensamblador Diego de la Rosa para que


prosiga la ejecución del paso para su terminación según el dibujo que poseían de
Francisco Antonio Gijón, añadiendo el dragón, un ángel y otras partes
convenidas88.

Esto hace sospechar que Bernardo Simón de Pineda tampoco finalizó la


obra debido muy probablemente a dificultades económicas, por lo que tuvo que
plantearse un proyecto de menor envergadura, algo que se deduce por el modo en

86
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 663. //SANCHO CORBACHO, Heliodoro: “Arte
sevillano de los siglos XVI y XVII… pp. 97-99.
87
BERNALES BALLESTEROS, Jorge: “Francisco Antonio Gijón…, pp. 77-80
88
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 664.

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Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

que la hermandad baja sus pretensiones económicas paulatinamente, comenzando


con Gijón, que acordó como costo 7.700 reales, pasando a Simón de Pineda, 5.000
reales, y por último Diego de la Rosa, con el que estipuló la cifra de 2.850 reales.
El paso, finalmente, no se sometió al diseño de los dos primeros artistas, sino al
“dibuxo hecho por el susodicho”89.

Lo que parece estar bastante claro es que el trabajo se realizó con lentitud,
ya que el autor cobró 600 reales el 3 de enero de 1701 por una “tarjeta de dragón
y todas las labores menudas del paso dicho”90.

En torno a 1721 la corporación vendió los pasos a la hermandad de la


Bofetá, que dejó de procesionar en 174591.

Precisamente los ángeles que hoy día posee esta corporación podrían
atribuirse a Francisco A. Gijón por sus características, pero por una escritura de
los escultores Agustín de Perea y Miguel Franco fechada el 24 de Mayo de 1691
con esta cofradía, por la cual acordaban la ejecución de un paso para el crucificado
del Mayor Dolor, se describía que “para el y para sus esquinas la Hermandad nos
ha de entregar quatro ángeles que tiene para dicho efecto”92.

Puede que estos ángeles procedieran de un acuerdo anterior con Gijón,


aunque lo que se sabe es que debieron conservarse en el Beaterio de la Trinidad,
rescatándolos la hermandad tras reorganizarse en el 1919. En esas fechas ya
habían perdido sus alas y los supuestos escudos con inscripciones; los restauró
Emilio Pizarro en 1922 y en 1945 Manuel Echegoyán los sacó de punto otros dos
que, portando clavos y escalera aparecen en el centro de los costados del paso que
procesiona hoy día93.

89
Archivo Histórico Provincial de Sevilla. Sección de Protocolos Notariales. Leg. 9535. Oficio 15. Libro
único de 1699, f.577.
90
SANZ, Mª Jesús Y DABRIO, Mª Teresa: “Documentos de artistas sevillanos del siglo XVIII” En
Archivo Hispalense, números 171-173. Sevilla 1973, pp. 356 y 367.
91
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas… p. 141.
92
ROMERO, Purificación HEREDIA Mª Carmen: Noticias sobre el escultor Agustín de Perea” En Archivo
Hispalense, números 171-173. Sevilla 1973, pp. 291-293.
93
BERNALES BALLESTEROS, Jorge: Francisco Antonio Gijón…, p. 80

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Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

• Paso para Jesús de la Pasión

La hermandad poseía en el XVII unas suntuosas andas para el nazareno la


cual, según los cronistas de la época era incomparable a todas las demás; estaba
labrada con grandes chapas de carey con molduras y adornos de cartelas en plata,
en las que figuraban escenas de la Pasión del Señor94.

Parece ser que estas andas de tanta riqueza ornamental, se perdieron en los
saqueos de los franceses de 181095.

• Paso para Jesús Nazareno, (El Silencio)

Tenemos constancia que procesionaba en el XVII con el Señor


“acompañado de oficiales de la hermandad con varas de plata”, “llevando cuatro
mozos de carga que iban ayudando a llevar el paso con las manguetas”; estos
últimos porteadores iban con capirote bajo y sin cola en la túnica96.

Pero quizás uno de los documentos más atractivos sea el fechado el 31 de


mayo de 1672, día en el que se realiza una escritura ante el escribano Francisco
Romero para dorar y estofar las andas del Nazareno: “Sepan cuantos esta carta
vieran como yo Lorenzo Dávila, maestro dorador y estofador, vecino de esa
ciudad de Sevilla de la collación de San Martín, y yo Salvador Ramos, maestro
ensamblador, vecino de esta ciudad , como su fiador… otorgamos y conocemos
que nos obligamos a que desde hoy de la fecha de esta carta en adelante hasta
cuatro más cumplidos primeros siguientes, yo el dicho principal doraré y estofaré
a toda costa conforme a arte, la urna y paso en que se pone al Santísimo

94
BERNALES BALLESTEROS, Jorge: “Francisco Antonio Gijón… , p. 267.
95
GONZÁLEZ DE LEÓN, Félix: Historia crítica y descriptiva…, p.105.// CARRERO RODRÍGUEZ,
Juan: Anales…, p. 248.
96
GONZÁLEZ DE LEÓN, Félix: Historia crítica y descriptiva…, p.91.

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Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

Jesucristo de Jesús Nazareno, de la cofradía sita en la Casa Hospital del Sr. San
Antón de esta ciudad… debiéndome pagar cuatro mil doscientos reales de
vellón…” 97.

Fig. 10.- Cuadros de los pasos propiedad de


la cofradía

Esta corporación posee unos interesantes cuadros de autor anónimo


fechados a finales de esa misma centuria, donde se muestra con más detalle y
color el profundo enriquecimiento decorativo, con interesantes elementos tallados
en madera o repujados en orfebrería, (fig. 10).
Por su impronta abocetada, parece ser un diseño previo a la realización de
las andas. Se trata del primer documento pictórico de un paso en la Semana Santa
sevillana.

Sin duda, se trata de una información importante que demuestra la impronta


retablística de los pasos a partir de la segunda mitad del XVII.

97
Archivo de la Primitiva Hermandad de Jesús Nazareno, (El Silencio).

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Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

• Paso para la cofradía de la Demostración

La hermandad de Madre de Dios de la Presentación y Santísimo Cristo de la


Demostración, -posteriormente extinguida-, el 2 de Junio de 1690 concierta con el
escultor y ensamblador Antonio José Navarro un paso para el Misterio que iba
presidido por un Ecce Homo. El encargo incluía la ejecución de un romano y
debía estar terminado para noviembre de 1690; llevaría cuatro relieves y cuatro
querubines, además de otros cuatro ángeles con escudos que irían en las esquinas.
Al no cumplir el contrato fue demandado por la hermandad, pleito zanjado el 29
de diciembre de 1691 por lo que el autor se comprometía a terminar el trabajo en
dos meses98.

En abril de 1692, el escultor embargaría el paso a la hermandad,


presumiblemente por no haber cobrado99.

• Paso para la Entrada en Jerusalén, (Triana)

Esta hermandad, fundada en Triana a mediados del XVI100, contrata el 22


de febrero de 1677 al maestro ensamblador Alonso de Fonseca la hechura de una
tarima para el paso de su titular. Ha de ser “de pino de cedro, que tenga tres varas
de largo y dos de ancho, y de alto una tercia; y la labor de ella ha de ser de tres
lados tallados con tres tarjetas con la historia de la cofradía, de relieve, con dos
pebeteros labrados de madera en toda perfección. Y en dicha tarima ha de poner
la madera que se ofreciere; la cual me obligo darles acabada para el día de la
víspera del Domingo de Ramos de este presente año”. Finalizaba llegando a un
acuerdo por el que el autor recibiría mil cuatrocientos reales de vellón101.

98
CUÉLLAR CONTRERAS, Fco. de Paula: “Documentos varios de Hermandades en el siglo XVII”. En
Boletín de las cofradías, número 309, Sevilla, junio de 1985.
99
Archivo Histórico Provincial de Sevilla. Sección de Protocolos Notariales. Libro de 1692, p. 92.
100
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 681.
101
CUÉLLAR CONTRERAS, Fco. de Paula: Noticias de una extinguida Cofradía de Triana. Boletín de las
Cofradías. Sevilla, agosto 1976.

140
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

De todos estos datos se desprende que esta ejecución sería bastante


completa a nivel ornamental.

• Paso para la cofradía del Dulce Nombre

En el caso de la Cofradía de la Bofetada que le dieron a Nuestro Divino


Redentor, -fundada en 1595 y desaparecida en 1745-, recordamos los datos por los
cuales sabemos que concierta el 24 de mayo de 1691 con Agustín de Perea y
Miguel Franco la realización de un paso para esta hermandad.

Dice en la escritura que para este y sus esquinas, “la dicha cofradía nos ha
de entregar cuatro ángeles que tienen para el dicho efecto, por el cual paso a los
dichos Alcaldes como particulares, han de ser ajustados a pagar seis mil reales
de vellón…”. Parece ser que los artistas dieron por cancelado este contrato dos
años después102.

• Paso para la Sagrada Cena

Existe constancia de la ejecución de un paso del cual no poseemos datos de


su composición para este Misterio, por parte del ensamblador José Guisado, el
cual concierta con la cofradía este compromiso el 11 de septiembre de 1698,
residiendo la corporación en San Basilio103.

Con este pudo realizar las estaciones de penitencia llevadas a cabo en el


siglo XVIII, aunque no disponemos de datos suficientes para poder afirmarlo con
total seguridad.

102
ROMERO, Purificación Y HEREDIA, Mª Carmen: Archivo Hispalense. Nº 171-173. Sevilla 1973.
103
Boletín de las Cofradías de Sevilla, nº 553. Sevilla Marzo de 2005.

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Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

V.4.- La difusión del paso barroco en el siglo XVIII

El paso consagrado en la segunda mitad del XVII se difunde con fuerza


como prototipo de paso barroco por excelencia. No podemos asegurar con
seguridad que el estípite como objeto ornamental fundamental se introdujera a
pequeña escala en los canastos procesionales, bien como elemento de sostén o
simplemente decorativo, al igual que sucediera con los retablos de la época.

Tampoco es seguro que la rocalla fuera asimilada a partir de los primeros


años del XVII, aunque lo que sí es cierto es que la escultura decorativa adaptó los
postulados tardobarrocos típicos de la imaginería de la época, ya que los pasos
siguen complementándose con tarjetas y esculturas figurativas de bulto redondo.

Los encargos decayeron debido principalmente a que muchas de las


hermandades del momento ya poseían sus andas; podemos afirmar que se
realizaron numerosas reformas y mejoras en algunos pasos, sobre todo si
contamos con el deterioro de alguno de ellos, debido principalmente a ruinas en
almacenes, lluvias y sus consiguientes riadas, usos inadecuados, etc104 …

Existen datos confusos que apuntan a la riqueza de varias corporaciones,


incluso algunas ya desaparecidas, como la extinguida cofradía de la Antigua y
Siete Dolores, que en 1714 salía en la noche del Jueves Santo llevando dos pasos,
describiéndose el primero del Señor de la Cruz al Hombro, “con unas parihuelas
dignas de la grandeza de esta hermandad”105.

En lo referente a la talla sobresale el hecho de que muchos de los encargos


que se realizan no se encuentran documentados, algo que podemos asociar a
varios motivos, como la escasa categoría de los mismos, o que muchas obras que
encontramos desaparecieran años más tarde. Tan sólo conocemos la intervención

104
RODA PEÑA, José: “El paso procesional. Talla, dorado y escultura decorativa…, p.37.
105
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p. 230.

142
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

de autores como Pedro Sánchez, Manuel Romero, Diego de la Rosa, o el


ensamblador Pedro Ruiz Paniagua, ninguno de ellos a la altura de los grandes
maestros que participaron en la segunda mitad del XVII.

Sin duda el paso dieciochesco que poseemos en la actualidad mejor


conservado y menos alterado es el de la Sagrada Mortaja.

V.4.1.- Las peanas “de jaspes”

Debido a la precariedad económica de algunas corporaciones, en los


primeros años de esta centuria comienza a utilizarse para la ejecución de los
pasos, pequeños elementos decorativos de impronta barroca, junto con una base
polícroma que imitaba el mármol u otra piedra, recurso denominado jaspear.

Según el Diccionario de la Lengua Española jaspear es “pintar imitando las


vetas y salpicaduras del jaspe”. Si por la misma fuente, sabemos que “jaspe”, es la
“piedra silícea de grano fino, textura homogénea, opaca y de colores variados,
generalmente veteado, que se emplea en ornamentación”, deducimos que
entendemos por peana jaspeada la que imita en su decoración este tipo de piedra o
alguna semejante, aunque en ocasiones se imitaba madera o elementos naturales.

Estas peanas “de jaspe” eran de rápida ejecución y hasta finales del XIX no
dejaron de existir. Solían ir acompañadas de pequeñas molduras doradas y otros
complementos, en la mayoría de las ocasiones motivos que recordaban al barroco,
lo que desde luego no era una fórmula muy brillante pero si práctica y económica.

143
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

V.4.2.- Trabajos realizados documentados, (siglo XVIII)

• Paso de la Lanzada

Aunque no sabemos demasiado sobre la composición de esta obra, la


destacamos principalmente por ser una de las pocas documentadas de esos años,
así como por detallarse datos de los numerosos elementos decorativos de su
composición.

La cofradía de la Lanzada el 5 de febrero de 1703 encarga un paso al


ensamblador y escultor Pedro Sánchez, decorándose con seis relieves y veinte
ángeles, lo que hace pensar que iba muy bien complementado a nivel ornamental;
estas andas desaparecieron a finales del XVIII al derrumbarse el almacén donde la
guardaban106.

• Paso de las Siete Palabras

El 23 de abril de 1705 se contrata por parte de la hermandad de las Siete


Palabras un paso con el ensamblador Pedro Ruiz Paniagua. Existe cierta confusión
a la hora de identificarlas, ya que se habla de “un paso para el Señor San Juan”,
en el contrato y en el finiquito del 21 de mayo de 1707 publicado por Caro
Quesada se hace referencia “al paso del Santísimo Xripto”. Parece tratarse de este
último, debido a que pocos años antes Diego de la Rosa le había construido uno a
San Juan Evangelista, canasto que ensambló sin ningún tipo de decoración Ruiz
Paniagua107.

106
CARO QUESADA, Mª Josefa: Noticias de escultura, (1700-1720). Sevilla 1992, pp. 197-198;
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias religiosas…, p. 344.
107
RODA PEÑA, José: “El paso procesional. Talla, dorado y escultura decorativa…, p.40.// SANCHO
CORBACHO, Heliodoro: Arquitectura sevillana del siglo XVIII. En Documentos para la Historia del Arte
en Andalucía. Tomo VII. Sevilla, 1934, p. 31. // CARO QUESADA, Mª Josefa.: Noticias de escultura…,
pp. 185-186.

144
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

En 1790 unos devotos que apreciaron el abandono de esta antigua cofradía


deciden reorganizarla, aprobando sus Reglas en esta fecha, aunque en principio no
procesionaría, incluso se extinguiría hasta que en 1864 unos jóvenes encabezados
por el conocido historiador José Bermejo y Carballo la impulsarían de nuevo. A
pesar de esta circunstancia en 1798 se comentaba en sus Reglas la posibilidad de
hacer Estación con el paso del Sagrado Corazón y Clavos de Jesús108.

• Pasos para la cofradía el Prendimiento

Después de haber sido fundada en 1621 la cofradía del Prendimiento tras


años de decadencia, se reorganiza gracias a la ayuda del cura párroco que une a
sus cofrades en 1797. Hace ese año estación de penitencia con dos pasos, siendo el
primero tallado por Manuel Romero, el cual desconocemos en su morfología109.

Esta misma corporación el 30 de mayo de 1797 concierta con el mismo


arquitecto y decorador un paso de Misterio que costaría 3.400 reales; sin
maniguetas, mediría cuatro varas y media de largo, llevando doce cartelas con
atributos de la Pasión y dieciséis ángeles110.

Por desgracia, no poseemos más datos sobre la composición de este paso.

108
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 258.
109
CORREO DE ANDALUCÍA, El: Publicado el 15 de diciembre de 1961.
110
SANCHO CORBACHO, Heliodoro: Arquitectura sevillana del siglo XVIII.... 109-110.

145
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

V.4.3.- Obras de autor anónimo

• Paso de Jesús Nazareno, (el Silencio)

En diciembre de 1737 comienzan a tallarse unas andas procesionales para


Jesús Nazareno que constaban de un simple moldurón de madera tallada y dorada
que va en consonancia con los respiraderos; sobre él aparece el canasto, que
arranca de una pronunciada escocia y de la cual parte un bocel, culminando en una
cornisa triple.

En la parte superior de esta hay una crestería de plata que guarda seis
medallones de madera con escenas de la Pasión en medio relieve. Además cuatro
faroles de plata en las esquinas cuadrados, rematados por una cupulilla de media
naranja con su corona. Todo el canasto va pintado imitando el carey recordando la
cruz del Señor. No hay plena certeza de que se conservara la estructura lígnea y
las cartelas del paso anterior de 1672, o si se trataba de una nueva obra hecha en
1737111.

- Intervenciones posteriores:

Lo que es seguro es que el paso llegó al último cuarto del siglo XVIII en un
pésimo estado, restaurándose laboriosamente por Vicente Alanís y Francisco de
Acosta, que repolicromaron los relieves en 1785 por el precio de ochenta
maravedíes; el maestro dorador Diego de Teodoro San Román y Codina
recompuso el resto de las andas. Martín Macías sitúa esta intervención en 1794,
mientras que García de la Concha en 1784, fecha que parece más fiable,
documentando además un estofado del paso en 1792 de Francisco de los Reyes112.

111
GARCÍA DE LA CONCHA DELGADO, Federico: Estudio Histórico Institucional de la Primitiva
Hermandad de los Nazarenos de Sevilla, (El Silencio)”. Sevilla 1987, p.142 // MARTÍN MACÍAS,
Antonio: “El Paso de Nuestro Padre Jesús Nazareno de la Hermandad del Silencio a través de los tiempos”.
En Boletín de las Cofradías de Sevilla, nº 167. Sevilla, agosto de 1973.
112
MARTÍN MACÍAS, Antonio: “El Paso de Nuestro Padre Jesús Nazareno …, Sevilla, agosto de 1973.//
GARCÍA DE LA CONCHA DELGADO, Federico: Estudio Histórico Institucional… pp. 142-143.

146
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

En la reforma de 1794, necesaria por la lluvia que le cayó al paso, se


sujetaron correctamente las planchas de carey que estaban en mal estado, seis
penachos, doce jarras de carey de dieciocho centímetros, así como algunas partes
de plata, flores del mismo metal, un barandal de plata y cuatro respiraderos
rectangulares de ébano113.

También sabemos que en 1726 fueron incluidos en sus andas para iluminar
la imagen dos ángeles mancebos del taller de Duque Cornejo, de “una vara de
alto”, de buena factura, rostros melancólicos y túnicas bien estofadas, llevando
unos faroles entre sus manos. José Segura las restauró en 1800 y Juan de Astorga
en 1828, el cual los atribuyó precisamente a la gubia de Duque Cornejo, opinión
que se ha mantenido hasta nuestros días; en 1831 Juan de Ojeda realiza el estofado
de sus ropajes y en 1868 también fueron restaurados114. Se caracterizan por su
dinamismo, especialmente acentuado en sus airados ropajes.

En los saqueos llevados a cabo por los franceses en 1810, se perdieron los
ricos materiales que decoraban este paso. A pesar de ello la hermandad lo
recuperó en 1814 en un lugar cercano a Andújar. Sería remodelado entre octubre
de 1830 y marzo de 1831 bajo una impronta neoclásica, por el escultor Juan de
Astorga y el dorador Juan de Ojeda. Esta intervención de colores jaspeados
recordaba los antiguos apliques de carey, mientras que los medallones se
repintaron de blanco imitando al mármol, a modo de crestería, quedando
enlazados por una guirnalda de laurel con entonaciones que imitaban al bronce115.
En 1832 se compondrán estos adornos de manera distinta116.

113
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 383.
114
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan Hemeroteca Cofradiera. Volumen I, Artículos de revista y prensa
especializadas sobre la Semana Santa de Sevilla, años 1972-1987. Sevilla 2003, pp. 16-17.//
HERNÁNDEZ DÍAZ, José: Pedro Duque Cornejo y Roldán. Sevilla 1983, pg. 90.// GARCÍA DE LA
CONCHA DELGADO, Federico.: Estudio histórico-institucional…, pp. 127-128.
115
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 383.
116
Ibidem…, p.385.

147
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

Fig. 11.- El paso en la ilustración firmada por


M. Grima a finales del XIX

De nuevo se reformaría el paso entre 1865 y 1868, optándose por dorar


toda la canastilla y añadir algunos adornos, labor que realizara Eduardo Robles
Pardo; en su taller se tallaron los candelabros de guardabrisas que sustituirían a los
faroles que por entonces llevaban las andas, mientras que los relieves los restauró
Francisco Milano y Vargas, quien parece ser el responsable de la eliminación de
los repintes117.

A finales del XIX, (fig. 11), sabemos que llevaba seis hermosos
candelabros, tallados y dorados, aunque con anterioridad flanqueaban la imagen
unos ángeles mancebos con faroles de plata y en las esquinas otros faroles muy
grandes, de los cuales los delanteros también eran de plata118.

117
GONZÁLEZ DE LEÓN, Félix: Historia crítica y descriptiva…, p. 87. // BERMEJO Y CARBALLO,
José: Glorias religiosas…, p. 214. // GARCÍA DE LA CONCHA DELGADO, Federico.: Estudio Histórico
Institucional… pp. 98 y 143.
118
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias religiosas…, p. 216.

148
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

• Pasos de la hermandad del Santo Entierro en el XVIII

En 1727 la hermandad del Santo Entierro vuelve a sacar los pasos a la calle,
algo que no hacía desde 1700. Tras un cortejo en el que participaban numerosos
hermanos, iba el paso de “la Santísima Cruz”, tal y como aparecía a finales del
XIX, según Bermejo y Carballo.

Después de este, otro peculiar cortejo que precedía el paso del Sepulcro,
que se describe como una obra de gran categoría, por el uso de numerosos
elementos ornamentales: “su peana o base estaba jaspeada con seis tarjetas
doradas con atributos de la Pasión. En cada esquina formaba un florón que
servía de peana a cuatro ángeles con atributos, sin otra multitud de adornos
primorosamente tallados y dorados que la decoraban. Sobre cuatro columnas
salomónicas de carey, con basas, capiteles y otros perfiles de plata, se eleva el
sepulcro que era todo de plata y cristales, con serafines en las esquinas y centros,
y sus correspondientes remates y adornos. Por dentro estaba dorado el Sepulcro
con Imágenes de miniatura, y en el moldurado de los cristales estaban engastadas
diferentes piedras preciosas, registrándose por todas partes el Sagrado cuerpo
del Señor”. Cerrando la procesión, precedido por hermanos, iba el paso de la
Virgen “con las demás imágenes”, siendo su peana tallada y dorada, y lo mismo el
sitial de la Señora que llevaba “labores y calados de mucho trabajo”119.

Interesante resulta cuando menos la descripción del paso del Sepulcro, en la


que se enumeran una gran cantidad de elementos ornamentales, destacando las
tarjetas con atributos pasionistas, sobre peana imitando mármol, así como los
ángeles “primorosamente tallados y dorados”, además de los motivos
arquitectónicos, como columnas salomónicas y capiteles, lo que evidencia la
buena factura de la obra.

119
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias religiosas…, p. 481-482.

149
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

• Paso para la cofradía del Cristo de la Sangre

La hermandad del Santísimo Cristo de la Sangre, San Juan Bautista y María


Santísima de la Candelaria, -cofradía desaparecida años más tarde-, concierta el 6
de abril de 1704 con el escultor José Guisado la ejecución de un paso en el que se
escenificaba la degollación de San Juan Bautista. El hecho de que tan sólo costara
50 ducados, se explica por que la obra estaba realizada en su totalidad en madera
de pino; del paso que poseían anteriormente aprovecharon la parihuela, el monte y
los cuatro ángeles de las esquinas que eran los únicos que servían de decoración
en las andas120.

• Paso para el Cristo de la Fundación, (Los Negritos)

Un dato de interés fechado en 1718 es el que se desprende de la hermandad


de Los Negritos, que estos años comenzaría a hacer Estación de Penitencia en la
tarde del Viernes Santo, ya que en el primer tercio del siglo XVI se conoce que lo
hacía de madrugada. En estos años del XVIII contaba con dos pasos, siendo el
primero el de un crucificado “sobre una peana mezquina y de poco mérito”, según
González de León, por lo que no sería una obra de mucha calidad121.

• La hermandad de San Bernardo en el XVIII

La historia de esta corporación nace en la década de los cuarenta del XVIII,


cuando unos jóvenes sacaban por las calles del barrio una modesta procesión, con
una imagen de barro del Señor con la Cruz a cuestas al que le dieron el título de
Tres Caídas. En 1748 solicitan un crucificado y una dolorosa, ambos de barro,
dándoles el título de Cristo de la Salud y Nuestra Señora del Patrocinio. Así

120
SANCHO CORBACHO, Heliodoro.: Arquitectura sevillana del siglo XVIII…, pp. 45-46.
121
GONZÁLEZ DE LEÓN, Félix: Historia crítica y descriptiva…, p. 156.

150
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

salieron unos años del domicilio de uno de ellos haciendo estación a la Plaza de la
Iglesia, con sus correspondientes insignias de papel.

En 1762 consiguen sacar en procesión el crucificado de la parroquia sobre


un paso; un año después salen con dos pasos que se montaron en el Convento de
Santo Domingo, siendo trasladados procesionalmente a la Parroquia el Domingo
de Resurrección. Será en 1764 cuando van por vez primera a la Catedral con el
paso perteneciente al Convento122. Al parecer, un año después salió con dos pasos
nuevos, de estilo parecido a los que sacaba pero de mayor tamaño123.

Según González de León, la cofradía apenas salió dieciséis veces en


ochenta y tres años a grandes intervalos, pero que aquello que empezó como un
entretenimiento era hoy una cofradía seria y comprometida124.

A pesar de los numerosos datos históricos, no disponemos de fuentes


suficientes para describir estos pasos.

• Paso de Jesús del Silencio, (La Amargura)

La hermandad de Jesús del Silencio en el


Desprecio de Herodes, (la Amargura), tras fundarse en
el XVII, hace la primera estación de penitencia en el año
1699, con la imagen de una Virgen que había en la
Iglesia de San Juan de Letrán125.

El escultor Benito Hita del Castillo, (1714-1784)


Fig. 12.- Ángel de
Hita del Castillo firma un recibo el 4 de marzo de 1763 en el que finiquita

122
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 226.
123
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias religiosas…, p. 428.
124
GONZÁLEZ DE LEÓN, Félix: Historia crítica y descriptiva…, p.157.
125
Ibidem…, p.57-58.

151
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

la realización de “dos ángeles mancebos para el paso del Señor y azerle cuerpo y
candelero a la Virgen de la Amargura”, (fig. 12)126.

Estos ángeles se perdieron en 1936 por los saqueos previos a la Guerra


Civil Española, tras figurar en el frontal de las andas del paso de Misterio, en
actitud reverente y portando candelabros de guardabrisas127; podemos apreciar la
aceptable factura de estos en la documentación fotográfica de finales del siglo
XIX.

En 1786 tenemos constancia que estrenaron un paso de Misterio de grandes


dimensiones, con peana pintada en blanco, perfiles y adornos en dorado, formada
por un cuerpo arquitectónico con muchas pequeñas columnas, intercolumnios y
portaditas entre las que destacaban cuatro relieves con pasajes de la Pasión del
Señor, escudos corporativos y pinturas al óleo en los intercolumnios del Antiguo
Testamento128, en los cuales suponemos que aparecerían los ángeles de Hita del
Castillo.

• La Sagrada Mortaja: Modelo de paso dieciochesco

Se trata del mejor ejemplo de paso procesional de esta centuria, que además
aún conservamos en buen estado, aunque con variaciones.
La hermandad de la Sagrada Mortaja aprueba unas nuevas Reglas en 1702
gracias a las cuales sabemos que la Estación de Penitencia queda fijada para el
Viernes Santo, refiriéndose también en las mismas a que iba “el paso de la Cruz”
delante del de Nuestra Señora129.

126
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias religiosas…, p. 154; GONZÁLEZ ISIDORO, José: Benito de
Hita y Castillo, (1714-1784). Sevilla 1986, p. 144.
127
RODA PEÑA, José: “El paso procesional. Talla, dorado y escultura decorativa…, p.41.
128
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 99.
129
ARCHIVO GENERAL DEL ARZOBISPADO: Legajo número 2. Hermandades de Sevilla.

152
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

Esta cofradía estrena en 1710 estas andas de estilo barroco, con perfiles y
bombo en el canasto, de líneas rectas; lleva candelabros de guardabrisas de hojas
de palma en las esquinas y delante de los mismos ángeles mancebos. Las cartelas
describen escenas pasionistas, en número de ocho y de bulto redondo. Medía
2,34x4,68x1,50130, (fig. 13 y 14).

El lenguaje formal de la talla se basa


en las hojas de acanto y en otros motivos
vegetales, predominando la hoja “de
cartílago”; la dinámica de estas formas
contrasta con otras zonas sin tallar.
El encargo se produjo previa
enajenación del antiguo y algunas
pertenencias de plata de la corporación para
abaratar el costo de la obra. Se desconocen
los artistas que intervinieron, aunque se ha
llegado a señalar como posible autor a Pedro
Roldán “El Mozo”, como ejecutor de sus
Fig. 13.- El paso a principios
del siglo XX esculturas y relieves policromados, ya que
por entonces era hermano de la corporación,
además de la similitud estilística de estas obras en relación con otras
documentadas del autor131.

Las cartelas, de forma ovalada, son de aceptable factura, apareciendo las


escenas de la Oración en el Huerto, las Caídas, la Calle de la Amargura, la
Exaltación, el Calvario, el descendimiento y la aparición de Jesús a la Magdalena.

130
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…p. 555. // Boletín de las Cofradías de Sevilla. Sevilla,
Noviembre 1970.
131
ROMERO MENSAQUE, Carlos José; GARCÍA DE LA CONCHA DELGADO, Federico y SOUSA
SOUSA, M.: Aproximación a la historia de la Hermandad de la Sagrada Mortaja. Sevilla 1993, pp. 39 y 50.

153
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

Los respiraderos siguen la línea estilística del canasto, con un friso


inspirado en motivos vegetales, bajo el cual la talla se inspira en hojas de acanto,
levando pequeños medallones con objetos alusivos a la Pasión.

- Intervenciones posteriores:

González de León se quejaría en 1852 del estado en el que se encontraban


las andas, que habían sido incluso pintadas al óleo sobre el mismo dorado,
comentando además las tarjetas; a pesar de todo señala que su peana “es de las
buenas, y de canasto por estar calada de labores caprichosas las medias cañas y
contornos que forman su perfil. Tiene además ocho targetas ovaladas, con muy
buenos bajo relieves con pasages de la Pasión de Jesús”132.

El mal estado del paso podría deberse a las inclemencias del tiempo que
causaron algunos años verdaderos estragos en la cofradía, sobre todo en 1835 y
1840, año en el cual la hermandad decidió salir a pesar de la amenaza
meteorológica lloviéndole durante casi toda la Estación, muy especialmente de
regreso, llegando a entrar la cofradía prácticamente sin acompañamiento de
público y con los enseres, paso e imágenes completamente empapados. Fue un
acontecimiento difícil para sus hermanos, que se vieron obligados a hacer ropas
nuevas, así como adornos del paso y otros enseres133.

Las andas fueron restauradas y doradas durante varios años hasta 1861,
fecha en la que parece ser que desaparecieron los repintes134.

132
GONZÁLEZ DE LEÓN, Félix: Historia crítica y descriptiva…, pp. 170-171.
133
CONZÁLEZ DE LEON, Félix: Crónicas de Sevilla de 1800 a 1852. Archivo Municipal de Sevilla. //
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias religiosas…, p. 464-465.
134
Boletín de las Cofradías de Sevilla. Sevilla, Noviembre 1970.//CARRERO RODRÍGUEZ, Juan:
Anales…., p.556.

154
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

Entre 1882 y 1885 se acometió una reforma mayor en la que se vendieron


dos de los medallones al anticuario Joaquín Pérez y se añadieron ocho candelabros
tallados imitando hojas de palma por Antonio Domínguez, que también talló las
esquinas del canasto, insertándoles tarjas con escudos.

Fig. 14.- Paso en la actualidad

Las andas fueron de nuevo doradas y talladas en 1891135 y en 1929 se


retocan los respiraderos en sus esquinas a juego con el canasto, eliminando unas
pilastras que tenían y que llegaban casi hasta el suelo136.

135
ALMELA VINET, Francisco: Semana Santa en Sevilla. Historia y descripción de las Cofradías que
hacen estación durante la misma. Sevilla 1899, p.158.

155
Capítulo V Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso procesional

Podemos decir que tras esos cambios el paso quedó tal y como lo
apreciamos hoy día.

136
CORREO DE ANDALUCÍA, El: Publicado el 7 de marzo de 1929. Sevilla.

156
CAPÍTULO VI
________________________________
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

VI
Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

VI.1.- Postrimerías del Barroco y siglo XIX: Decadencia de la talla


procesional

En el siglo XIX la sociedad se verá sacudida por diversos acontecimientos


negativos que afectarán a las hermandades considerablemente.

Durante 1810, la Revolución Francesa trajo consigo muchos saqueos en


toda la nación y la consecuente pérdida de patrimonio por parte de las cofradías.

La Desamortización de Mendizábal y la Revolución septembrina de 1868,


afectarán al pueblo desde un punto de vista socioeconómico y, consecuentemente,
a las cofradías sevillanas.

Al igual que en siglos precedentes apareció la amenaza de las epidemias,


como la de 1800 y 1878, en este caso de cólera, aunque no con la crudeza de
épocas anteriores1.

1
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p.387.

158
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

Estos importantes condicionantes provocarán que no pocas cofradías caigan


en una profunda decadencia, extinguiéndose algunas, aunque otras lograron
revitalizarse ayudadas en algunos casos por los Duques de Montpensier.

También será una época de creación de nuevas andas de esas corporaciones,


-normalmente las de mayor poder adquisitivo-, renovadas o recuperadas de
diversas vicisitudes, siendo escasas las que pueden mejorar su patrimonio
procesional.

A nivel cultural, a mediados del XVIII se había percibido un agotamiento


de las formas barrocas, produciéndose posteriormente un “nuevo renacimiento” o
neoclasicismo, basado en las fuentes de las que se alimentó el arte romano:
Grecia, Egipto, Etruria y Oriente.

En 1775 se había fundado en Sevilla la Real Escuela de las Tres Nobles


Artes, institución que resultará de gran influencia para el arte local y que
contribuirá a que la talla de los pasos sevillanos se adapte un poco al gusto
neoclásico e historicista.

Además, la creación de numerosas Academias de Bellas Artes contribuyó


al decaimiento de los grupos gremiales y los talleres.

Aun existiendo esta influencia académica, condicionada por la importancia


del barroco en España y la crisis reinante, el neoclasicismo no se impondrá con
fuerza, por lo que su influencia en la Semana Santa se traducirá en un clasicismo-
historicista bastante pobre.

A pesar de los problemas comentados, resulta interesante la descripción que


hizo el historiador Bermejo y Carballo durante la segunda mitad de esta centuria,
subrayando la riqueza de la Semana Santa: “En estas procesiones, todo es rico,
todo grandioso, todo sorprendente. Sus pasos, sus imágenes, vestiduras y
adornos, son de todo punto admirables por su magnificencia y esplendor;
llamando especialmente la atención general, según se indico antes, los pasos en

159
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

los que va la Reina Soberana, en los que la piedad acumula cuanta riqueza puede
reunir. Baste decir, que toda la plata, oro y piedras preciosas, de que es
susceptible una ciudad como Sevilla, se emplea en el adorno de dichos pasos”2.

VI.1.1.- Primeras fuentes fotográficas

En el XIX disponemos de las primeras fuentes fotográficas de la historia,


por lo que será más sencillo valorar estas ejecuciones, además de una importante
aportación gráfica, como las ilustraciones firmadas por M. Grima, que pudiera ser
un seudónimo de un pintor aragonés llamado Manuel Guillén3. Se trata de unos
dibujos a color que debieron publicarse en torno a 1886 y en los cuales aparecen
los pasos de aquella época, ofreciéndose en los mismos numerosos detalles de la
composición y la morfología de estas obras.

VI.1.2.- Estilos artísticos en el siglo XIX

En esta centuria existirá cierta tendencia a volver la mirada a referentes


artístico del pasado, -neogótico, neobarroco…-, además de una novedosa corriente
historicista en la que se unen diversos estilos, aunque predominan los de impronta
clásica.

Los estilos artísticos utilizados en los pasos del XIX son los siguientes:

2
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p.52.
3
SERVICIO DE PUBLICACIONES del Excmo. Ayuntamiento de Sevilla: Las cofradías de Sevilla.
Sevilla 1983, p.8.

160
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

• Estilo historicista, (1800-1900)

Se caracteriza por su eclecticismo, imponiéndose una perspectiva


historicista de reminiscencias clásicas, abundando recursos decorativos sencillos y
económicos, como el jaspeado.

Este gusto clásico deja de lado el barroquismo decorativo y el dinamismo


en plantas y alzados, buscando mayor estatismo y pureza en el diseño de las andas
que quedarán consecuentemente empobrecidas en el apartado iconográfico y
figurativo4.

• Neobarroco, (1840-1900)

Siguen construyéndose pasos basados en los antiguos modelos de retablo


barroco, algo que queda de manifiesto en numerosas informaciones de la época
que en ocasiones hablan de pasos realizados “imitando los antiguos”.

El parecido estilístico no es pleno, por lo que podría hablarse de un


barroquismo romántico bastante mesurado, cayendo en ocasiones en el exotismo
ornamental.

• Neogótico, (1850-1900)

Aunque es una corriente enmarcada en el ámbito del historicismo, posee


unas peculiaridades muy concretas, siendo ante todo un estilo revisionista, basado
en una aproximación al estilo gótico, sobre todo por la utilización de recursos
ornamentales de su arquitectura.

4
GONZÁLEZ GÓMEZ, Juan Miguel, RODA PEÑA, José: Imaginería procesional …, p.141.

161
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

VI.2.- El paso historicista

El paso historicista es aquel que contiene la unión de diversas corrientes


artísticas revisionistas, predominando ante todo la impronta clásica y, en menor
medida, la barroca.

Este eclecticismo o fusión de estilos provoca cierta confusión a la hora de


clasificar un paso.

Los detalles decorativos se reducen a la mínima expresión, con un


repertorio muy limitado en el que aparecen pilastras, casetones, heráldicas,
inscripciones, guirnaldas, pequeñas portadas con columnas o emblemas
pasionistas; en numerosas ocasiones se aprovechan esculturas antiguas que se
reforman o se adaptan para nuevas creaciones, como relieves, medallones o
ángeles.

Se abusa además de la imitación de jaspes o mármoles realizados con


diversas técnicas pictóricas en ocasiones de poca calidad, algo que ya ocurriera en
la pasada centuria y que aumenta en esta a causa de la poca liquidez de la mayoría
de las cofradías.

La técnica del dorado tampoco pasa por su mejor momento, pues suelen
utilizarse para decorar molduras o cubrir adornos en la talla.

162
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

VI.2.1.- El estilo “corintio”

Dentro del historicismo existe un


modelo que suele denominarse
tradicionalmente “estilo corintio”, de
influencia clásica, (fig. 1).

Como elemento ornamental de ellos


Fig. 1.- Columna y capitel de orden
corintio sobresale la inclusión en la composición de la
columna de este orden, que por su
protagonismo da nombre a esta modalidad de paso. Este tipo de columna, propia
del arte griego, se caracteriza por el tipo de capitel, de profusa decoración de hojas
de acanto, lenguaje que encaja a la perfección dentro de la morfología compositiva
de los pasos. Su fuste suele presentarse acanalado.

En ocasiones, aunque la columna no disponga del capitel completo, sino de


una o varias hojas, los historiadores lo catalogan con dicho término.

Estos pasos suelen estar divididos en secciones o casetones, cada uno de


ellos separados por una o dos columnas de este tipo, siguiendo después la estela
ornamental de los pasos historicistas.

163
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

VI.3.- Evolución del paso historicista

Apreciamos dos etapas:

1ª etapa, (siglo XIX): Pasos de líneas rectas, de decoración simple, sin


excesos ornamentales. Predominan los elementos de inspiración naturalista y la
columna de orden corintio, la cual podemos considerar objeto principal.

2ª etapa, (siglo XX): La base compositiva es semejante a la etapa anterior,


pero se produce un enriquecimiento importante en la decoración, potenciándose
además el carácter arquitectónico de la obra y la utilización de recursos de
impronta renacentista.

En ambas etapas se utiliza a menudo la tradicional técnica del jaspeado.

A continuación enumeramos las realizaciones de impronta historicista en el


siglo XIX.

VI.3.1.- Pasos de estilo historicista, (siglo XIX)

• Paso de la Antigua y Siete Dolores

Bermejo y Carballo describe cómo iba a finales del XIX el paso del
crucificado de las Cinco Llagas, que originalmente se hiciera para esta de la
Antigua y Siete Dolores: “Es de forma antigua y regular perfil, con adornos
encima, tallados y dorados”5.

5
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p.83.

164
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

Como apreciamos en las


ilustraciones de M. Grima, (fig. 2),
su composición era bastante simple,
destacando la crestería tallada sobre
la que se asientan seis candelabros
de guardabrisas “de piña”, mientras
que la base del canasto estaba
pintada de rojo, llevando adornos
Fig. 2.- Paso a finales del XIX tallados y dorados sobre el mismo,
imitando guirnaldas y motivos
vegetales. Además llevaba medallones policromados con escudos corporativos y
carecía de respiraderos.

• Paso del Descendimiento de Juan de Villarrica

La cofradía de la Quinta Angustia se


reorganiza en 1807 y vuelve a salir
estrenando el paso del Descendimiento, (fig.
3), un paso con canasto y respiraderos de
caoba pulimentada, de líneas rectas y perfiles
dorados. En medio de sus cuatro frentes se
levantan portaditas de graciosa forma, con
columnitas, áticos y remates. Lo demás de la
Fig. 3.- Paso del Descendimiento
peana lo forman casetones llevando en el en 1854
centro de cada uno, escudos de las religiones
de la cristiandad a las cuales está agregada la corporación. Todos son iguales de
tamaño, tallados y pintados de colores. Hay también cuatro ángeles mancebos
bellísimos llorando y con tarjetas en las manos con textos de las Sagradas

165
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

Escrituras, que procedían del antiguo, colocados en las esquinas. La obra fue
realizada por el tallista Juan de Villarrica siendo el primer paso que se hizo con el
color de la madera en tonalidad oscura6.

Estas andas se restauran en 1844 y 1850 después de que la corporación


pasara años en que salió a la calle de forma irregular, por lo que estos enseres
habían sido muy descuidados7.

Precisamente, tras no salir durante algunos años vuelve a hacerlo en 1850


estrenando un paso del cual no tenemos descripción, ya que el otro se deterioró
debido a los numerosos traslados8.

• Paso para El Prendimiento

En 1815 estrena un paso de misterio de formas rectas y con filetes dorados,


destacando su peana jaspeada, de la cual no disponemos de documentación
gráfica9.

• Paso del Sagrado Decreto, (La Trinidad)

Según Bermejo y Carballo, en 1815 se estrena un nuevo paso para este


Misterio alegórico, (fig. 4), tras haber sufrido la pérdida de sus enseres durante los
años de la Invasión Francesa, ya que es seguro que en la primera década de esta
centuria salían a la calle.

6
GONZÁLEZ DE LEÓN, Félix: Historia crítica y descriptiva…., p. 179-182.
7
RODA PEÑA, José: “El paso procesional. Talla, dorado y escultura.., p. 42.
8
GONZÁLEZ DE LEÓN, Félix: Historia crítica y descriptiva…, p.180.
9
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 248

166
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

Esta ejecución la
describe este mismo autor en
1882, señalando también que
fue restaurado en 1868: “Este
paso es de los mayores de
Sevilla, y uno de los más
vistosos y celebrados por el
público. La peana de estilo
moderno, está pintada
Fig. 4.- Paso del Decreto según M. Grima imitando a palo santo con los
adornos dorados, y tiene
escudo entre las esquinas y centro”10.

Poco más podemos añadir a esta descripción, además de apreciarlo en las


ilustraciones de las que disponemos y añadir que poseía unos dinámicos
candelabros de guardabrisas en número de diez, de distintos tamaños.

Parece que se restaura en 191811 y, posteriormente, se reforman y


enriquecen para que vuelva a salir en 1940. Dejaría de hacerlo en 1951,
adquiriendo sus andas una hermandad de Cádiz12.

• Paso de la Entrada en Jerusalén

La hermandad de la Entrada en Jerusalén estrena un paso en 1817 definido


por Carrero Rodríguez como de estilo corintio13, (fig. 5), y describiéndolo el
historiador Bermejo y Carballo como uno de los “más vistosos y celebrados” de la

10
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p.79-82
11
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 573.
12
Boletín de las Cofradías de Sevilla. Sevilla, febrero 1971.// CORREO DE ANDALUCÍA, El. Programa
de Semana Santa. Sevilla 1940.
13
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 115. // RODA PEÑA, José: “El paso procesional. Talla,
dorado y escultura …, p.43.

167
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

época, explicando que el canasto tiene “ocho portaditas de dos columnas: cuatro
en sus esquinas y las demás en los centros. Aquellas y la de los costados tienen las
armas reales, y las restantes escudos de agregaciones, de los cuales llevan
también en toda la circunferencia, ocupando los recuadros.” También comenta
que sufrirá algunas intervenciones años más tarde.

La descripción coincide
con el paso del que disponemos
de documentación gráfica en el
que, además de lo destacado por
Bermejo, sobresale la
pronunciada crestería del canasto
y sus esbeltos candelabros de
guardabrisas.
Fig. 5.- El paso en una foto del año 1900

Sobre este paso se coloca en 1924, -por no poseer guardabrisas-, unos


faroles de latón que creaba extraños efectos14.

• Paso de Jesús de la Expiración , (el Cachorro)

Sabemos en 1882 existía un paso descrito por Bermejo, el cual decía que
era “una peana moderna con adornos dorados”15.
Todo apunta a que esta realización es la documentada de Vicente Arestoy
en el año 1819, (fig. 6), al cual se contrató para la realización de unas andas para
el crucificado, aunque ese año procesionaría con unas prestadas por la hermandad

14
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p.117.
15
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias…, p.545.

168
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

de San Bernardo. El año siguiente estrena el mencionado paso de Arestoy. Desde


1810 a 1817 no había hecho Estación16.

Por la documentación
gráfica constatamos que es un
paso difícil de definir, ya que
fusiona elementos clásicos con
otros barroquizantes. Es de
líneas rectas, siendo su
decoración de tipo vegetal,
llevando tan solo unos pequeños
medallones, -seis en los laterales
Fig. 6.- Paso del Cachorro en la ilustración
de M. Grima y uno en el frontal y en la trasera
de la canastilla-.

Asimismo, destacaban sus dinámicos candelabros de guardabrisas en


número de seis y sus esquinas en las cuales se asentaban unas pequeñas volutas
como uno de los pocos elementos decorativos.

• Paso de la Exaltación

Esta cofradía presenta como novedad en 1827 un paso de líneas rectas con
columnitas y recuadros tallados, en cuyas esquinas aparece una especie de
templete con sus cúpulas los cuatro evangelistas; completan la obra diez portaditas
limitadas cada una de ellas por dos columnas distribuidas, ocho en los costados y
las restantes en el frente y trasero, en cuyo interior se encuentran los relieves de
Pedro Roldán del paso anterior; Bermejo lo describe como el más largo que existía
a finales del XIX en la ciudad y aclara que se hizo nuevo, -quizás fue reformado
prácticamente en su totalidad-, debido al aguacero que recibió en la calle el

MACIAS MÍGUEZ Manuel: Antecedentes históricos de la Hermandad del Santísimo Cristo de la


Expiración y Mª Santísima del Patrocinio. Sevilla 1982, p.199.

169
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

anterior en 1819, concretamente junto a las gradas de la Catedral llegando los


costaleros incluso a abandonar el primer paso que ya antes de este hecho estaba en
mal estado17.

González de León completa esta información comentando que para la


ejecución del mismo pudo influir el deterioro del que poseían, principalmente a
causa del mencionado suceso de la lluvia, por lo que hubo que intervenirlo con
una importante restauración18.

Los respiraderos eran unas simples celosías de construcción rectangular.


Según algunos historiadores se hicieron en 182019.

En 1865 al renovarse el canasto de este paso le quitaron las capillitas o


templetes en las esquinas y las portadas, haciéndose además otras variaciones20.

• Pasos para la hermandad del Museo

La hermandad del Museo procesiona en 1829 con el paso del crucificado y


una dolorosa a los pies, el primero con una peana tallada y dorada sobre la que
aparece el monte con el crucificado en el centro del mismo, llevando también
inscripciones en sus tableros, propias del Misterio que representa y cuatro
evangelistas en las esquinas de Ruiz Gijón21.

Este paso y el palio de la corporación, estrenados en 1829, se hicieron bajo


la dirección de Juan de Astorga, (1779-1849), con un canasto algo desairado por
su escaso tamaño en el caso del crucificado22.

17
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p. 301.
18
GONZÁLEZ DE LEÓN, Félix: Noticias históricas y curiosas…, Sevilla1884, p.130.
19
RODA PEÑA, José: “El paso procesional. Talla, dorado y escultura…, p.43.
20
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p. 302.
21
Ibidem…, p.339.
22
RODA PEÑA, José: “El paso procesional. Talla, dorado y escultura…, p. 43.

170
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

• Paso para Jesús de la Salud, (Los Gitanos)

Después de salir desde 1816 con pasos prestados en 1829 estrena uno
propio, siendo el canasto pintado a imitación de jaspe y doradas sus molduras,
llevando en sus centros dos columnas con el escudo de la corporación; la ejecutó
Manuel Rodríguez Espinosa23.

• Pasos para la hermandad de la Cena

En abril de 1829 se reorganiza la


cofradía de la tras años de decadencia, y
lo hace construyéndose nuevos pasos,
ropas para las imágenes y otros enseres
necesarios para procesionar.

Esta hermandad el 7 de abril de


1830 volvería a salir el Miércoles Santo,
Fig. 7.- El paso en la procesión del Santo
estrenando los pasos del de la Humildad y Entierro Magno de 1854

el de la Cena, (fig. 7), mientras que las


andas de la Dolorosa eran prestadas por la de la Encarnación de Triana24.
El paso de la Cena lo describe González de León en 1852 de la siguiente
forma: “En el primero, sobre peana tallada, jaspeada y dorada, en cuyos frentes
se leen con letras de oro algunos textos de las Sagradas Escrituras; va el
Salvador sentado en la mesa, cenando con los doce apóstoles, todos sentados,
cada uno en una silla de caoba, de hechura moderna y el Salvador con el cáliz en
la mano”25.

23
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p.258.
24
GONZÁLEZ DE LEÓN, Félix: Crónicas de Sevilla de 1800 a 1852. Archivo Municipal de Sevilla.
25
DELGADO ABOZA, Francisco Manuel: “El paso de Misterio de la Sagrada Cena en el siglo XIX y
XX”, en Boletín de la Hermandad Sacramental de la Sagrada Cena de Sevilla, nº 92. Sevilla, enero de
2006.

171
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

Esta acertada descripción se complementa por el diorama fechado en 1854


de autor anónimo que se encuentra en los Reales Alcázares de Sevilla, en el que
además se confirma que iba iluminado por cuatro faroles.

• Pasos para la del Santo Entierro, (1830)

Tenemos constancia de la reorganización de esta cofradía en 1829. Un año


después saldrá de nuevo en 1830 con el paso gótico del Triunfo de la Santa Cruz
tal y como lo hacía en 1727; después el paso de la Urna y el del Duelo26, los
cuales se estrenaban ese año siguiendo el diseño de Melchor Cano y debiendo su
ejecución a Juan de Astorga27.

- Paso de la Urna, (fig.8): Si


nos remitimos a la pintura de los
Reales Alcázares de Sevilla del
Santo Entierro Magno de 1854,
apreciamos una ejecución de
reminiscencias clásicas. Se trata de
un paso de perfiles rectos de tableros
de color blanco además de
Fig. 8.- El paso de la Urna en la procesión del
Santo Entierro Magno de 1854 elementos ornamentales tallados y
dorados. Su iluminación corre a
cargo de cuatro grandes tulipas o faroles en las esquinas.

26
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…p. 584.
27
RODA PEÑA, José: “El paso procesional. Talla, dorado y escultura…, p.43.

172
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

- Paso del Duelo, (fig. 9): Al


igual que en el caso anterior, parece
ser el de la mencionada pintura de los
Reales Alcázares de Sevilla. De
canasto abombado, decorado con
elementos de inspiración natural de
impronta historicista, así como zonas
talladas y doradas, siendo los
respiraderos de líneas rectas, llevando Fig. 9.- El paso del Duelo en la procesión
del Santo Entierro Magno de 1854
entre este y el canasto escudos o
cartelas.

En 1867 se restaurarían los pasos y se doran eliminándose las pinturas de


jaspes28.

• Paso de la Humildad y Paciencia

En la pintura que conocemos del Santo


Entierro Magno de 1854, aparece el paso que
procesionaba en esos años, en el cual aparecía
la imagen del Cristo de la Humildad y
Paciencia, que debe ser el estrenado en 1830,
(fig. 10).
Fig. 10.- Paso en la procesión del
Santo Entierro Magno de 1854
Se trata de unas andas alumbradas por
pequeños faroles, de madera dorada y perfiles rectos, sobre los que hay casetones
y columnas con motivos decorativos de inspiración clásica. Llama poderosamente
la atención la altura del canasto, muy grande, así como los centros del mismo

28
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p.492.

173
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

sobre los que se reproducen en el mismo material escudos o cartelas, asentándose


sobre el mismo un monte sobre el que aparece la escena pasionista.

• Paso de Monte-Sión, (1833)

Curiosa historia la de este paso


de la Oración en el Huerto,
(hermandad de Monte-Sión),
encargado en 1833 junto con el palio
de la cofradía. El de Cristo se
consideraba de los mejores de la época
y de los que más gustaban al público;
según Bermejo y Carballo llevaba una
peana moderna estilo corintio, de
Fig. 11.- El paso en una fotografía de líneas rectas, pintado de blanco y
principios del siglo XX
dorados “sus filetes”, (fig. 11).

Todo el canasto estaba dividido por unas pilastras de fuste acanalado en


casetones, en los que se repartían ocho hermosos relieves ovalados con asuntos de
la pasión, pertenecientes a un paso antiguo. Todo se hizo a cuenta de dos
magníficos faroles grandes en plata de ley que vendieron29.
Gracias a la documentación fotográfica podemos apreciar la buena factura
de este paso, en el cual la talla está bien elaborada, a base de motivos vegetales,
que flanquean unos interesantes relieves de escenas pasionistas.
Los candelabros de guardabrisas son de líneas movidas y los respiraderos
“de cajón”, con ornamentación similar a la talla del canasto y sus molduras. No
llevaba esculturas figurativas complementando la decoración.

29
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p.128.

174
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

Existen datos contradictorios respecto a este paso: Juan Carrero apunta que
fue restaurado en 1866 y que en 1908 se hizo uno nuevo, mientras que Roda Peña
señala que ese año sólo se restauró y doró, teoría que consideramos más
acertada30.

En 1931 se produce el “reestreno”


de estas andas, ya que sufre una
importante reforma, (fig. 12), perdiéndose
posteriormente en 1936 por los actos
vandálicos que precedieron a la Guerra
Civil Española31.

Observando las novedades


ornamentales del paso, apreciamos su
“barroquización” tras la reforma, ya que
se eliminan las pilastras y se añaden
motivos decorativos de inspiración

Fig. 12.- El paso en una fotografía de


naturalista, además de la inclusión de
1935
estatuaria en las esquinas que no estaban
anteriormente.

La impronta barroca del paso se acentúa con la inclusión de unos nuevos


respiraderos de composición dinámica, con motivos vegetales y hojas de acanto,
así como escudos corporativos en sus centros y maniguetas de color oscuro.

Gracias a la documentación fotográfica existente, sabemos que los primeros


años antes de dorarse procesionó en madera oscura.

30
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 309-310// RODA PEÑA, José: “El paso procesional.
Talla, dorado y escultura…, p.41.
31
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 311.

175
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

• Paso para la Coronación de Espinas, (el Valle)

En 1837 estrena unas


andas32, (fig. 13), que parecen ser
las que vemos en los dibujos
firmados por M. Grima, talladas y
doradas, de perfiles y líneas
rectas, talla basada en motivos
vegetales y cartelas en sus
centros, siendo la concepción del
Fig. 13.- El paso en una ilustración de M. Grima canasto bastante simple, aunque
efectista.

Llaman la atención las esquinas se situaban unas volutas que sostenían unos
estáticos ángeles que iban junto a unos candelabros de guardabrisas que podíamos
catalogar “de piña”, por su composición simétrica y su simplicidad.

Podemos asegurar que el paso fue bastante alterado a lo largo de los años,
algo que se desprende de las palabras de Bermejo y Carballo que escribía a finales
del XIX: “era de estilo antiguo, calada; y aunque construida en el año 1837,
estaban tan destruidas sus andas, que casi se ha hecho nuevo, dorándose toda por
completo”33.

32
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 336
33
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p.175.

176
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

• Paso de Jesús del Silencio, (La Amargura)

La hermandad de la Amargura
estrena unas andas en 1841 para el Misterio
que realiza Rodríguez Espinosa en estilo
corintio, (fig. 14), siendo su peana de forma
recta con pequeñas columnas y tableros en
forma de cuarterones34.

Bermejo y Carballo la describe con


detalle en sus apuntes históricos, diciendo
“que pertenece al orden corintio, y se
estrenó en 1841. Tiene en su rededor doce
portaditas con cuatro columnas, colocadas
Fig. 14.- Paso de 1841
tres a cada costado, una en el frente, otra
en la espalda, y las restantes en las
esquinas. Estas últimas forman como una capillita, en la que se hayan los
Evangelistas. Las de los centros contienen medallones de medio relieve, de
asuntos del antiguo y nuevo testamento; y las restantes atributos de la Pasión. En
los costados hay además 16 pinturas con otros tantos profetas, y varios adornos
en los otros lados”. Añade que en la delantera van dos ángeles mancebos de Hita
del Castillo del paso anterior-, y otros pequeños de distinto autor en los remates de
la peana, calificándolo como uno de los mejores y más vistosos de Sevilla35.
Los respiraderos, eran “de cajón”, con decoración de hojas de acanto y
otros motivos inspirados en la naturaleza vegetal.
En 1891 lo reforman añadiendo a la escena un dosel también de estilo
corintio. Como destacada novedad, aparecían dieciséis pinturas al óleo
representando profetas.

34
GONZÁLEZ DE LEÓN, Félix: Historia crítica…, Sevilla 1852, p.61.
35
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, pp. 154-155.

177
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

Fue muy alterado en 1891 y 1896, este último año por Rossi bajo la
dirección de Virgilio Mattoni, los cuales incluyen unos tableros tallados en estilo
rocalla sustituyendo las cartelas con el escudo de San Juan que rodeaban el
canasto36.
En 1910 lo adquiere la hermandad de Santa Cruz para reducirle sus
dimensiones y reformarlo, labor que llevó a cabo Farfán Ramos, incluyéndole
cuatro faroles que pertenecieron a la cofradía de la Vera Cruz37.

• Paso de La Carretería

El 5 de abril de 1844 se estrenan las andas del Misterio de la Carretería, de


grandes dimensiones y líneas rectas, con casetones donde van talladas y doradas
sobre respaldo de cristal, repartidas a iguales proporciones, ocho tarjetas del paso
anterior con escenas de la pasión, (fig. 15).

Fig. 15.- Ilustración de M. Grima

36
RODRÍGUEZ MATEOS, Joaquín: “[…] cofradía de nazarenos de Nuestro Padre Jesús del Desprecio de
Herodes, […], en Misterios de Sevilla, Sevilla 2003, p.277.
37
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 214.

178
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

En las esquinas embutidos en cristales por delante y molduras doradas los


Evangelistas con papeles o pergaminos impresos de los Evangelios. Sobre ellos
cuatro pedestalitos en cuyos cuatro frentes hay pintados ramos de flores de colores
y sobre cada uno un farol. Se doró por estas fechas también un sepulcro que iba en
el monte siendo la obra completa de Rodríguez Espinosa38.
Estas andas, -que podemos apreciar en la ilustración de M. Grima-, (fig.
15), sustituyen a las del taller de Pedro Roldán estrenadas en 1690 adaptándose las
tarjetas ya comentadas que en su momento hiciera con casi toda probabilidad Luis
Antonio de los Arcos, aunque es posible que en una de ellas, -la que plasma las
Tres Necesidades-, sea del maestro Pedro Roldán39.
Posteriormente, serían vendidas a la hermandad de la Cena, que también
incluyó las tarjetas en su paso de Misterio, representando otros motivos además
del mencionado: Beso de Judas, Flagelación, Coronación de Espinas, Camino de
Calvario, Cristo de la Humildad, Exaltación de la Cruz y el Calvario.
En 1861 doran el paso y lo restauran40, siendo el encargado del dorado
Eduardo Robles Pardo41.

• Paso del Cristo de la Sangre

Tan sólo tenemos referencias de una obra catalogada como renacentista por
un historiador, ejecutada en 1845 para la cofradía del Cristo de la Sangre,
actualmente conocida como la de San Benito.
Este encargo lo describe González de León apareciendo la escena del
Calvario, con tableros tallados en forma de cuarterones, pintados a imitación de

38
ALMELA VINET, Francisco: Semana Santa en Sevilla…, p.140.
39
GARCÍA DE LA TORRE, Fuensanta: Estudio histórico artístico de la Hermandad del gremio de
toneleros de Sevilla, (La Carretería). Sevilla 1979, pp. 113.
40
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 498.
41
RODA PEÑA, José: “El paso procesional. Talla, dorado y escultura…, p.43

179
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

piedras de jaspe y perfiles dorados. Es el primer año en el que hizo estación a la


Catedral cruzando el río42.
Tras gran esplendor y por las deudas acumuladas así como por conflictos
internos, aparece en 1848 en plena decadencia, desapareciendo algunos años43.

• Pasos para la hermandad de la Sagrada Cena

Nuevamente nos referimos a esta corporación, que en unas Reglas de 1877


consta que la procesión estaba prevista para el Jueves Santo por la tarde. Aun así
al año siguiente saldría el Martes, con dos pasos, el de Humildad y Paciencia y el
de palio, el cual estrenaban44.
Pocos años después, según Bermejo, procesiona el Martes Santo de 1881
estrenando un paso para el de la Humildad y Paciencia aún sin terminar, hoy
desaparecido.
Lo describe el historiador diciendo que en esos años “la peana era de
bastante gusto, jaspeada y dorada, con inscripciones propias del asunto que
figuraba; y otros adornos”45.
Almela Vinet sin embargo, dice que la cofradía dejó de salir en 1881, para
volver a hacerlo en 1897 con tres pasos46.

• Paso de Jesús con la Cruz al Hombro, (el Valle)

El segundo paso de esta cofradía, ejecutado entorno a 1878, lo describe


Bermejo como “una bonita peana con tallados toda dorada” y sobre él se
escenificaba el encuentro con la Verónica47.

42
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 199.
43
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p.550.
44
ARCHIVO GENERAL DEL ARZOBISPADO: Legajo número 2. Hermandades de Sevilla.
45
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p. 121.
46
ALMELA VINET, Francisco: Semana Santa en Sevilla…, pp. 14-15.

180
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

Si nos atenemos a la fotografía de 1888


que adjuntamos, (fig. 16), su composición era
bastante simple, ya que su estructura era “de
cajón”, de líneas rectas con casetones divididos
por columnitas en los cuales había decoración
con pequeños motivos de inspiración vegetal, sin
llevar ningún tipo de escultura figurativa y con
unos simples respiraderos de celosía, además de
dinámicos candelabros de guardabrisas de
Fig. 16.- Paso en una fotografía
de 1888 impronta barroca.

• Paso para Jesús de las Penas, (San Vicente)

Tras fundarse esta hermandad efectúa


en 1878 su primera estación de penitencia
con dos pasos prestados, hasta que en 1879
estrena uno para el nazareno que combina
elementos barrocos con otros clasicistas48.

Todo apunta que se trata del que


podemos ver en la ilustración de Antonio
Iglesias, (s. XIX), de estructura simple y de
líneas rectas; tanto los respiraderos como el
Fig. 17.- Ilustración de A. Iglesias
canasto son “de cajón”, en los que van
incluidos casetones con pequeños motivos

47
ALMELA VINET, Francisco: “Semana Santa en Sevilla…, p.175.
48
RODA PEÑA, José: “El paso procesional. Talla, dorado y escultura…, p.43

181
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

decorativos de origen vegetal, siendo alumbrado por cuatro pequeños faroles, (fig.
17).
Hasta 1882 sale interrumpidamente pero tras este año no lo hará hasta
192449.

• Pasos para la hermandad de la Vera Cruz

En 1882 Bermejo y Carballo describe los pasos de esta cofradía, pocos años
antes de su temporal decadencia, de la siguiente forma: “Lleva dos pasos: el
primero tiene una peana muy sencilla de tableros y pilastras, jaspeadas y dorada,
y sobre ella otra más pequeña que recibe un figurado monte en el que va la
imagen del Señor, escultura antigua, y sobre la primera peana seis ángeles
mancebos en actitud dolorosa”.
Continúa el relato con el paso de palio, que lleva “una peana de madera
dorada y jaspeada, y palio de terciopelo negro con fleco de oro y varas de
madera pintadas”50. No tenemos documentación gráfica que nos aporte mayor
documentación.

• Paso del Buen Fin

Esta hermandad efectúa su primera estación de penitencia el Miércoles


Santo de 1884, con un paso que representa el calvario, con un crucificado y María
y San Juan a su lado, (fig. 18).
Cuatro años más tarde, en 1888, solicitan el traslado a San Pedro para poder
salir debido a la estrechez de la puerta de San Antonio. El escrito, elevado al
cardenal Fray Ceferino González, Arzobispo de Sevilla, y firmado por el Hermano
Mayor, Secretario y Mayordomo decía así: “que siendo imposible efectuar la
49
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 147.
50
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, 365.

182
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

salida procesional de la Iglesia de San


Antonio, por la estrechez de sus
puertas, ha tenido que verificarla años
anteriores desde otro templo,
careciendo a la vez de una imagen de
crucificado adecuada al intento, pues la
que ha sacado, aún siendo mucha su
Fig. 18.- Ilustración de M. Grima antigüedad, es de pasta y sumamente
deteriorada, y ha resuelto la
corporación trasladarse a la Iglesia de San Pedro, y la capilla del Santísimo
Cristo de Burgos”51.
Todo apunta a que estas andas son las que apreciamos en las ilustraciones
firmadas por M. Grima, el cual es muy peculiar en su composición. Si es así,
resulta complicado enmarcar este paso en un estilo concreto, aunque por sus
perfiles rectos y su simplicidad ornamental lo hemos incluido en este apartado.
En la ilustración vemos lo atípico de la construcción del canasto, llamando
poderosamente la atención las esquinas del mismo, que se elevan en forma de pico
provocando una morfología poco habitual.
Al margen de este dato, su decoración es escasa, aunque sí apreciamos
pequeños motivos en sus centros y esquinas, además de secciones en los perfiles
que contienen pequeñas celosías.
También observamos unos pequeños ángeles en la cornisa del canasto,
además de otros dos de mayor envergadura que sostienen en cada lateral unos
dinámicos candelabros de guardabrisas; otros cuatro de igual estilo hay en las
esquinas pero no acompañados por escultura figurativa.

51
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 234.

183
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

• Paso para La Exaltación

En 1885 se estrena este paso


de Misterio realizado por José
García Roldán, de líneas rectas con
tableros tallados y con las primitivas
cartelas52.
Estas se habían cambiado en
1865 por unas pinturas de órdenes

Fig. 19.- Ilustración de M. Grima


religiosas, labor que realizó el
profesor José Díaz53.
Este paso parece ser el que
vemos en las láminas firmadas por M. Grima, de finales del XIX, (fig. 19), en la
que aparece como objeto de enormes dimensiones, siendo el canasto de rectos
perfiles alternando casetones con motivos decorativos de inspiración vegetal,
sobre fondo de color blanco, con las cartelas que poseían de Pedro Roldán del
siglo XVII.
Los respiraderos tampoco aportan ninguna particularidad ornamental, ya
que es un simple celosía con forma “de cajón”, así como los peculiares
candelabros de guardabrisas, muy elementales en su concepción.

• Paso para El Prendimiento

En 1887 la cofradía del Prendimiento encarga un nuevo paso a Rodríguez


Espinosa, de líneas rectas y estilo corintio, del cual desconocemos su
composición, aunque por su descripción encaja con el modelo habitual de este tipo

52
PÉREZ PORTO, Luis Carlos.: Recuerdos de la Semana Santa de Sevilla. Láminas de dibujo de sus
pasos. Sevilla 1886. Litografía de Juan Sáenz.
53
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p. 302.// GONZÁLEZ DE LEÓN, Félix:
Historia crítica y descriptiva…, Sevilla 1852, p.131.

184
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

de andas, dividido por columnas en casetones, de líneas rectas y decoración


vegetal54.

• Paso para Jesús del Calvario

Gracias a la documentación fotográfica


que poseemos es posible describir el canasto
con el que salió por primera vez esta
corporación en 1888, (fig. 20).
Aunque no se ciñe exhaustivamente al
típico modelo “corintio” posee la impronta del
mismo, además de su concepción estructural,
sobresaliendo ante todo sus perfiles rectos
divididos por pilastras que dividen el paso en
casetones, los cuales incluyen motivos
Fig. 20.- Paso en una fotografía decorativos del mundo vegetal de impronta
de 1888
clásica, llamando poderosamente la atención
que la ejecución está prácticamente entera pintada de blanco, destacando los
candelabros de guardabrisas “de piña”.

• Paso para El Prendimiento

En 1894 son novedad unas andas para el Misterio del Prendimiento,


ejecutadas por Salvador Domínguez Gordillo, (Sevilla 1877-1979) y dorado por
Vargas, (fig. 21).

54
RODA PEÑA, José: “El paso procesional. Talla, dorado y escultura…, p.43.

185
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

Estilísticamente se caracteriza por un eclecticismo que combina los típicos


elementos barroquizantes con otros más clasicistas. También estrenaría en 1897
un paso para la imagen de San Andrés de estética parecida55.

Fig. 21.- El paso en una fotografía realizada en


torno a 1930

Entre 1897 y 1899 sacaron tres pasos: el Misterio, que había sido
restaurado, el mencionado de San Andrés y el de palio56.

55
RODA PEÑA, José: “El paso procesional. Talla, dorado y escultura…, p.43.
56
CARRERO RODRÍGUEZ, José: Anales…, p. 249.// RODA PEÑA, José: La Pontificia, Real, Ilustre y
Fervorosa Hermandad y Archicofradía de nazarenos de Nuestro Padre Jesús del Soberano Poder en su
Prendimiento, […], en Misterios de Sevilla. Tomo II. Sevilla 2003, p. 57.

186
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

VI.4. – Pasos neogóticos

En la segunda mitad del siglo XIX se produce una novedad en cuanto a los
estilos de los pasos, gracias a la aparición de una nueva modalidad inspirada en los
postulados góticos.
A pesar de ser una corriente claramente revisionista, aporta una novedosa
perspectiva en lo que a pasos procesionales se refiere, dejando entrever que al
menos hay cierta inquietud por aportar algo nuevo a este tipo de obras.
Supondrá a nivel ornamental una aproximación a este estilo, sin llegar a un
considerable nivel de calidad, sobre todo en esta centuria, ya que en el siglo XX sí
se llegará a un virtuosismo importante en la talla y en la decoración.

• Paso de la Carretería

El primer paso neogótico del que se tienen noticias es el encargado por la


hermandad de la Carretería, para la tarde del Viernes Santo de abril de 1862.
Sostenía una escena alegórica que representa el Triunfo del Espíritu sobre la
Materia, en el que aparecían dos ángeles, uno elevando la cruz, hollando los
instrumentos de la Soberbia y la Vanidad, y el otro, con una palma que
representaba la Victoria y un tarjetón con una inscripción, obra de Vicente
Hernández Couquet. Aunque no tenemos fuentes gráficas sabemos que las hizo
Juan Rossi57.
Un año antes, en 1861, habían iniciado mejoras importantes en su
patrimonio, entre ellas, el dorado y la nueva decoración del paso de Misterio que
realizara en 184458.
Sabemos que en 1867 sacaban dos pasos, dejando de procesionar el
alegórico, que no volvería a salir hasta 187659.

57
RODA PEÑA, José: “El paso procesional. Talla, dorado y escultura…, p.48.
58
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p.447
59
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales.., p. 498-499.

187
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

• Pasos de la cofradía del Santo Entierro

Esta cofradía pierde en 1810 todas sus pertenencias salvo las imágenes,
debido al saqueo de los franceses, por lo que en 1829 el asistente de la ciudad D.
José Manuel Arjona reorganiza la hermandad60.
Años más tarde da un giro estilístico a sus enseres realizando en dos años
los siguientes pasos en estilo gótico, que sustituyen a los existentes que tallara
Juan de Astorga bajo diseño del arquitecto Melchor Cano.
Los tres pasos son diseñados por D. Antonio Canto Torralbo.

- Paso del Duelo, (1874)

En primer lugar se estrena un paso tallado


por Juan Rossi, (fig. 22).
El Diario “El Porvenir” lo describe como
“un bellísimo pedestal gótico, en el que resaltan
varios templetes con ángeles pasionarios, y cuyas
erguidas y esbeltas pirámides sirven de base a los
cuatro candelabros que iluminan el paso”61 ,
siendo la composición de sus candelabros de
guardabrisas de líneas ascendentes y dinámicas.
Fig. 22.- El paso en una fotografía
de principios del siglo XX

60
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales.., p. 583.
61
RODA PEÑA, José: “El paso procesional. Talla, dorado y escultura…, p.49

188
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

- Paso del Triunfo de la Santa Cruz, (1880)

Transcribimos la interesante
descripción que hacía Bermejo y
Carballo de este paso en 1882: “El
primero tenía una peana con algunos
adornos tallados, que estaban según
antes dijimos, jaspeadas, en dichos
años se doró. Esta servía como de
zócalo a un figurado monte”62, (fig.
23).
Fig. 23.- Paso de 1880 Morfológicamente el paso es
bastante simple, caracterizándose por
los catorce templetes o torres de aguja que dividen el canasto, provocando
casetones en los que vemos decoración del mismo estilo. Va alumbrado por
sencillos pero estilizados candelabros que soportan una vela en cada esquina.
Fue dorado por última vez por Joaquín Bellido Serrano en 1984.

- Paso de la Urna, (1877-1880)

Durante estos años se


acomete la ejecución del paso
neogótico de la Urna, (fig. 24),
tallando la misma Juan Rossi.
Contrastaba poderosamente la
riqueza ornamental de la Urna donde
aparecía la imagen del Yacente con
la simple decoración los respiraderos
Fig. 24.- Paso de la Urna de Juan Rossi
y el canasto, el cual era dividido por

62
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p. 492.

189
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

templetes de estilo gótico, entre los que aparecen motivos inspirados en el mundo
vegetal de enorme simplicidad, algo que se repite en todo el paso. Las jarras y los
pequeños candelabros de guardabrisas son de igual estilo, destacando
artísticamente sólo la urna que remata la composición63.
Eran doradas, de líneas rectas y estilo neogótico, con candelabros en las
esquinas para un cirio en el primero y candelabros de guardabrisas en los demás.
Bermejo se refirió también a esta ejecución: “El paso del Señor tenía una
peana o basamento pintado con muchos adornos tallados que después se doró, y
sobre ella descansa la urna sepulcral de muy buen dibujo, y perfectamente
construida, tallada y dorada, con cierre de cristales, que permitía ver el Sagrado
Cuerpo del Redentor”64.

• Paso de La Lanzada

La hermandad de la
Lanzada en 1877, estrena
paso de estilo neogótico y
dorado, -de grandes
proporciones-, (fig. 25), que
posteriormente pasaría a una
cofradía de Jerez de la
Frontera; con posterioridad,
sufrirá años de decadencia
hasta que en 1896 vuelve a
Fig. 25.- El paso en una fotografía de principios
del siglo XX salir tras trece años de
inactividad65.

63
GARCÍA DE LA TORRE, Fuensanta: Estudio histórico artístico de la Hermandad del gremio de los
toneleros de Sevilla…, p. 114.
64
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p. 492.
65
Ibidem.

190
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

Poseemos una buena documentación gráfica de este paso, el cual en su


concepción es muy interesante, sobre todo por sus diez capillas de estilo gótico
que lo dividen, -cuatro en los laterales y una en el frontal y la trasera-, en las que
se incluyen figuras alusivas a la pasión; estas capillas dividen el paso provocando
espacios tallados de forma rítmica con motivos inspirados en el mundo vegetal,
con un friso o moldura en la parte superior, así como seis candelabros de
guardabrisas “de piña”.
Sus respiraderos son “de cajón”, con casetones decorados con motivos
góticos de inspiración vegetal, sustituyéndose por unos nuevos en 1917.

• Paso de Jesús de la Salud, (San Bernardo)

Tras salir de nuevo en 1841, la hermandad


de San Bernardo pasó por años de decadencia
hasta 1880, volviendo a hacer estación de
penitencia en 1881, estrenando pasos, en el caso
del crucificado de estilo gótico, (fig 26), bien
ejecutado al parecer por los talleres de D. José
de la Peña y Ojeda66.
Su estructura era muy simple, de líneas
rectas, con decoración rítmica inspirada en
motivos vegetales de estética gótica y moldura o
friso en su parte superior, añadiéndose años Fig. 26.- Fotografía del paso
después el escudo corporativo en el frontal. de 1920

Los respiraderos al igual que el canasto


eran “de cajón”, con motivos semejantes al resto del paso, siendo los candelabros
de guardabrisas muy estilizados.
No llevaba decoración escultórica.

66
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p. 431.

191
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

• Paso de la hermandad del Calvario

Esta cofradía procesiona por vez


primera el 28 de marzo 1888, incorporándose
en 1891 en la madrugada, estrenando en 1895
este paso gótico, el cual iba iluminado por
cuatro grandes faroles que iban sobre un
vástago muy alto, (fig. 27).
Dichas andas las había construido
Salvador Domínguez y pasó posteriormente a
una cofradía de La Algaba67, aunque con
anterioridad lo había comprado la de la
Estrella.
Fig. 27.- Fotografía del paso a
principios del siglo XX Respecto a esta obra, decir que
estructuralmente es de la simplicidad propia de
este tipo de pasos, destacando las esquinas, con ojivas dividas por numerosas
columnitas que terminan en las habituales agujas góticas, dividiéndose todo el
canasto en tableros tallados con elementos de inspiración vegetal sin ningún tipo
de decoración escultórica, al igual que los respiraderos “de cajón”, con motivos
rítmicos del mismo estilo y de gran sencillez.

• Paso para el Cristo de la Expiración, (El Museo)

Después de veintinueve años El Museo vuelve a hacer estación de


penitencia a la Catedral en 1880, esta vez desde San Antonio Abad debido a las

67
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 458.

192
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

dimensiones de sus pasos que impedían que saliera de su capilla. Durante esos
años salían con el paso del Cristo del Amor ya que este no procesionaba. Tres
años después el Vicario Capitular, Francisco Cabrero autoriza a la hermandad a
agrandar la puerta de la capilla del Museo para que pueda salir68.
Tras nueve años sin salir lo hace en 1892
con un nuevo paso, aunque hay historiadores que
apuntan a que se estrenó en 190069.
Esta realización de 1892 parece ser la que
apreciamos en la fotografía de principios del
siglo XX, (fig. 28), reformadas en 1918.
El paso de estilo gótico era de perfiles
rectos y casetones decorados con motivos
inspirados en el mundo vegetal, caracterizándose
por las columnas, agujas y ojivas que se sitúan
en algunas zonas del canasto, llamando

Fig. 28.- Fotografía del paso a


especialmente la atención las capillas que
principios del siglo XX parecen formarse en las esquinas. Lo
complementan los dinámicos y estilizados
candelabros de guardabrisas además de los antiguos evangelistas de Ruiz Gijón.
En la reforma de 1918, llevada a cabo por Salvador Domínguez, la
modificación que se produce será considerable, pues alarga la parihuela, tallando
de nuevo los tableros del canasto, ejecutando además los respiraderos,
candelabros, maniguetas y crestería, todo de estilo gótico al igual que el resto del
conjunto70.
Al parecer, iba decorado con escudos de la hermandad, el de la Merced y la
corona real, llevando los chaflanes ocupados por cuatro capillitas en las que iban

68
PÉREZ PORTO, Luis Carlos: Relación e historia de las Cofradías sevillanas, desde su fundación a
nuestros días. Sevilla 1916.
69
MONTERO ESPINOSA, José Mª: Antigüedades del Convento de la Casa Grande de San Agustín de
Sevilla y noticias del Santo crucifijo que en él se venera. Sevilla 1817.
70
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p.169.

193
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

colocados sobre riscos cuatro ángeles pasionarios. En 1920 se doró y en 1926


consta que lo restauraron71.

• Paso de las Aguas

La hermandad de las Aguas en 1893


estrena un paso neogótico para el Misterio del
Calvario. En 1897 sale con dos pasos
apareciendo en el primero el crucificado solo
con el ángel, (fig. 29)72.
Por la documentación fotográfica nos
llaman especialmente la atención las capillas
con pináculos y agujas en las esquinas, además
de cuatro evangelistas, mientras que diversos
templetes dividen en partes el canasto donde
Fig. 29.- Fotografía del paso a
finales del XIX se encuadran tableros tallados y calados con
motivos vegetales interpretados, típicos de la
morfología gótica.
Los respiraderos como suele ser común en estos años son “de cajón”, con
motivos florales tallados y maniguetas en las esquinas, destacando también en la
composición las molduras que rematan el canasto y los candelabros de
guardabrisas de las esquinas muy estilizados, al igual que en los laterales, llevando
los mismos decoración que evocan elementos de la naturaleza de inspiración
gótica.

71
JIMÉNEZ SAN PEDRO, Rafael.: 1900: “La Semana Santa de hace un siglo”. Boletín de las Cofradías,
nº 493. Sevilla, marzo de 2000.
72
SEVILLA, -periódico-, edición del 6 de abril de 1954.

194
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

• Paso de la Santa Cruz, (La Hiniesta)

Esta corporación estrena


en 1885 unas andas para el
Misterio alegórico de la Santa
Cruz, (fig. 30).
La construcción del paso
era bastante simple, pues su
canasto estaba dividido en
casetones en los que se
desarrollaba en la talla elementos Fig. 30.- Ilustración firmada por M.Grima

góticos de tipo vegetal; entre


ellos se situaban portaditas con motivos eucarísticos que recordaban a fachadas de
arquitectura gótica, incluidas agujas, destacando asimismo la crestería a modo de
gabletes y cuatro candelabros de guardabrisas73.
Toda la crestería de formas triangulares recordaba esta estética, pero lo que
más llamaba la atención sin duda son las esquinas, en las que se reproducían
pequeñas capillas en las que parece que no se colocaba ninguna imagen,
imitándose una especie de bóveda además de las habituales agujas góticas.
Sabemos que en la Semana Santa de 1897 este paso lo utiliza la hermandad
de la Cena para su Misterio74 tal y como lo describe Almena Vinet: “representa la
Sagrada Cena, en el que el divino maestro, con sus discípulos sentados en la
mesa, están en actitud de bendecir el pan y el vino. La peana, de estilo gótico,
está dorada con inscripciones y alegorías al Misterio que representa”75.

73
DELGADO ABOZA, Francisco Manuel: “El paso de Misterio de la Sagrada Cena en el siglo XIX y
XX…, p. 12
74
RODA PEÑA, José: “El paso procesional. Talla, dorado y escultura…, p.48
75
ALMELA VINET, Francisco: Semana Santa en Sevilla…, p.14.

195
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

VI.5.- El paso neobarroco: Década de los 40 y segunda mitad del XIX

No podemos hablar de una evolución o mejora de las obras de este estilo, ya


que se caracterizan por la mediocridad, aunque progresivamente aumentan su
calidad en los últimos años del siglo, precedente de lo que será una fase de auge
en el XX.
Numerosos documentos de los que disponemos se describen algunos pasos
como “de estilo antiguo”, lo que significa que siguen los modelos barroco con
ciertas variantes y en general de manera más pobre, algo que deducimos por
referencias gráficas que tenemos de algunos de estos documentos.
Como autores destacan en lo que a talla de canastos se refiere Juan Rossi,
Emilio Pizarro, Vicente Hernández Couquet, -que se dedicaba principalmente a la
imaginería-, o Ricardo Reguera.

• Paso para Jesús Nazareno, (La O)

Esta será el 9 de abril de 1830 la


primera cofradía que cruza el río por el
puente de barcas, describiéndose que el
Nazareno iba con la cruz de carey sobre
“peana dorada” y en las esquinas del paso
grandes faroles de plata76, (fig. 31).
No conocemos esas andas, pero sí las
estrenadas en 1846, con una peana “imitando
las antiguas” de líneas rectas, perfiles y
bombo en el canasto, iluminado por
Fig. 31.- Fotografía del paso de 1882
candelabros de guardabrisas en las esquinas,

76
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 524.

196
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

siendo los respiraderos del mismo estilo. Este paso, que terminó en la hermandad
del Santo Entierro de la localidad sevillana de Carmona, se restauró el en 1884 por
el taller de Peña y Ojeda77.
El canasto está bien tallado y calado por una profusa talla de motivos
vegetales sobre los que se asentaban seis tarjetas con escenas pasionistas, así como
cuatro medallones en las esquinas sobre los cuales aparecían elementos
relacionados con la pasión. Sobre estas esquinas además se situaban cuatro
ángeles mancebos de aceptable nivel que sostenían objetos pasionistas y tras ellos
unos dinámicos candelabros de guardabrisas.
En la reforma de 1884 cuando se incorporan los nuevos respiraderos, ya que
los originales como se aprecian en las ilustraciones de M. Grima eran de cajón y
decoración de tipo vegetal; los nuevos eran de mejor categoría, con ornamentación
semejante alternando líneas rectas con la profusa talla inspirada en la naturaleza,
escudos corporativos y maniguetas de madera oscura a juego.

• Paso de la Soledad, (San Buenaventura)

La hermandad de San Buenaventura


aprueba unas Reglas en 1843, por lo que ya
en 1852 hacen su primera estación de
penitencia el Viernes Santo, estrenando un
paso dorado de líneas rectas con zócalo de
impronta barroca, perfiles, ménsulas y
escudos78, (fig 32).
Bermejo da otra descripción: “La
Fig. 32.- Foto realizada en torno a 1900 peana de este paso es de tableros formando

77
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p. 529.
78
DELGADO ABOZA, Fco. Manuel: Real, Ilustre y Franciscana Hermandad y Cofradía de nazarenos de
la Santa Cruz en el Monte Calvario, Santísimo Cristo de la Salvación y Nuestra Señora de la Soledad, en
Misterios de Sevilla. Tomo II. Sevilla 2003, p. 286.

197
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

cilindro sus esquinas, con adornos, la cual después de haberse dorado, ha


quedado muy lucida”79.
El paso es de composición peculiar, sin excesivo virtuosismo ornamental,
destacando unos los característicos cilindros en las esquinas que sobresalían,
recordando al fuste de una columna del tipo acanalado. Los planos del canasto
eran tableros lisos con motivos decorativos de hojas de acanto, con pequeños
medallones, además de llevar un friso en su zona superior. No llevaba esculturas
de pequeño formato y los candelabros de guardabrisas son de tipo barroco
dinámico.

• Paso para Jesús de la Pasión

Esta hermandad llevaba desde su recuperación acontecida en 1833, varios


años saliendo con pasos prestados hasta que en 1846 se estrena por fin uno nuevo
de caoba para el Nazareno, siendo muy tratada con medias cañas, molduras y
perfiles dorados, llevando escudos de las órdenes religiosas que se encuentran
unidas a la hermandad80.
En la Semana Santa de 1858 los pasos de la cofradía se iluminarán con
veinte lámparas solares, lo que hacía brillar la riqueza de sus andas81.

• Paso de Jesús de las Tres Caídas, (San Isidoro)

La hermandad de San Isidoro después de sufrir los avatares de la


Revolución Francesa, -ya que casi perdieron las andas que en su día tallara

79
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p. 512.
80
GONZÁLEZ DE LEÓN, Félix: Crónicas de Sevilla de 1800 a 1852…, p. 107-108.
81
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 352.

198
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

Francisco Antonio Gijón, dejándola en un


estado pésimo-, se recupera poco a poco,
reformándose estas varias veces desde
185282.
Finalmente, en 1853 estrenan unas
nuevas de caoba con perfiles dorados, con
elementos decorativos en su talla
vegetales y de hojas de acanto, molduras y
escudos en sus centros y esquinas con
motivos heráldicos, (fig. 33)83.
Fig. 33.- Fotografía realizada en torno
a 1920

Bermejo y Carballo las describe explicando que tenía “peana pintada,


imitando carey con filetes y adornos de plata”84.
Suponemos que alude a las que apreciamos en las ilustraciones firmadas por
M. Grima, en la que sobresalen como elemento decorativo unas jarras en las
esquinas superiores del canasto y los escudos corporativos.
Estas se doran y reforman profundamente por Francisco Ruiz Rodríguez en
1914, añadiéndole adornos de talla85.

• Paso del Descendimiento, (Quinta Angustia)

La Quinta Angustia estrena en 1857 unas nuevas andas, líneas rectas y


hojas de acanto sueltas, labrado por Juan Rossi, bajo dibujo de Antonio Canto
Torralbo86, (fig. 34).

82
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 352.
83
GONZÁLEZ DE LEÓN, Félix: Historia crítica y descriptiva…, Sevilla 1852, p.123.
84
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p. 290.
85
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p 539. // Boletín de las Cofradías de Sevilla. Enero 1964.
86
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 324.

199
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

El paso lo llevó a cabo Juan Rossi,


siendo de composición piramidal, sobrio en la
decoración, pero de impronta barroca, con
medallones en las esquinas, heráldicas alusivas
a la corporación en el centro y laterales; junto a
estos se incluían unos ángeles del mismo color
de la peana, que flanqueaba estos medallones.
Asimismo, el paso lo alumbraban candelabros
de guardabrisas “de piña”, los cuales eran
rematados en su parte central y superior por
otros ángeles.
Fig. 34.- El paso de 1857
No llevaba respiraderos de talla, tan sólo
una tela con flecos.

• Paso del Cristo de la Conversión, (Montserrat)

El 10 de abril de 1857 estrenan paso


para la escena de la Conversión,
describiéndose en esta ocasión el canasto
con faldones de color rojo, con
aplicaciones de tallas doradas, así como
ángeles mancebos en las esquinas, que se
mantendrían unos años87, (fig. 35).
En 1882, Bermejo y Carballo la
describe de la siguiente forma: “tiene la
peana forrada de terciopelo azul, con
zócalo, medias cañas, molduras y otros
Fig. 35.- Fotografía del paso

87
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 549.

200
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

adornos dorados. En los centros de los cuatro frentes se registran las armas de la
Hermandad de los Duques de Montpensier, sus hermanos mayores, las del
Cardenal Romo, su protector que fue, y las de Santo Domingo. En las esquinas
hay adornos de gusto caprichoso que sirven como de base a unos ángeles
mancebos que van encima, concluyendo la peana con angelitos pequeños y otros
perfiles”88.
La explicación que hace el historiador no puede ser más acertada, tal y
como vemos en la ilustración en la que se ve el canasto de perfiles y bombo,
llevando en sus centros medallones los escudos, basándose su talla en las hojas de
acanto y motivos vegetales, destacando los ángeles de buena factura y de tamaño
académico que van en las esquinas, junto a los candelabros de guardabrisas que
son bastante pequeños. Estos ángeles llevan escaleras y clavos, -alusivos a la
pasión-, y recuerdan a los modelos barrocos del estilo de Pedro Roldán del siglo
XVII. Los respiraderos son “de cajón” y su talla es semejante a la descrita.

• Paso del Dulce Nombre de Jesús, (Quinta Angustia)

En 1858 salió un paso


alegórico del Niño Jesús, que se
estrenaba, describiéndolo Bermejo
como unas andas con hermosa peana
dorada llena de adornos y altos
relieves, así como candelabros con
muchas luces; de igual valor y estilo
Fig. 36.- Ilustración de M. Grima califica la del paso del
Descendimiento, el cual llevaba
unos candelabros parecidos a los del otro Misterio89, (fig. 36).

88
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p.309.
89
Ibidem…, p. 459.

201
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

Por la documentación gráfica firmada por M. Grima apreciamos la similitud


estilística y compositiva que tenía en relación al del Descendimiento.

• Paso de Jesús de la Sentencia

Se estrenan en 1859 estas


andas de estilo neobarroco, que
ejecutó Vicente Hernández
Couquet, (fig. 37), con cartelas y
ángeles querubines que las decoran,
elementos situados posteriormente
en el coro de la basílica de la
Macarena90.
Según Bermejo y Carballo la
peana “aunque moderna, imitaba en
su construcción a las más antiguas,
tallada y calada primorosamente
Fig. 37.- Fotografía de finales del
XIX con varios relieves de la peana
antigua”91.
Efectivamente el paso, de enorme envergadura, evocaba la morfología
característica de las hojas de acanto y los habituales elementos vegetales, que
recreaban unos medallones, -ocho en total-, en los que aparecían escenas de la
Pasión, siendo los respiraderos “de cajón” con motivos de talla similares a los del
canasto, en los que aparecían diversos medallones de pequeño tamaño con objetos
de la Pasión. Llevaba candelabros de guardabrisas y carecía de esculturas de bulto
redondo para complementar la ornamentación.

90
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 435.// CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: El vaso a la
Macarena, historia y leyenda I, en Diario ABC, Sevilla, 20 de febrero de 1985. //LA ANDALUCÍA, -
periódico-. Sevilla, 21 de abril de 1859.
91
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p. 192.

202
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

En 1898 el tallista Hipólito Rossi restaura este paso, encargándose también


Emilio Pizarro de una reforma general de las imágenes secundarias de la escena de
la Sentencia92.
En 1910, el paso sufrirá una profunda reforma a cargo de José Gil,
convirtiéndolo prácticamente en una nueva obra.

• Paso alegórico del Profeta Isaías, (Montserrat)

En 1861 sale este paso de


la cofradía de Montserrat,
escultura labrada por Vicente
Hernández Couquet, siendo las
andas de Eduardo Robles Pardo,
representando al profeta
escribiendo la Venida, Pasión y
Muerte de Nuestro Señor
Fig. 38.- Ilustración de M. Grima Jesucristo, (fig. 38). Dejaría de
salir en 188593.
Parte del canasto estaba forrado de terciopelo carmesí, con adornos de talla
dorados94, como apreciamos en la ilustración firmada por M. Grima.
Su composición era piramidal y abombada, con escudos corporativos en las
esquinas y en sus centros, así como una básica talla basada en motivos inspirados
en el mundo vegetal. Los respiraderos eran de forma rectangular y semejante al
canasto en su talla decorativa, además de llevar faldones de color azul. También
resultaban peculiares sus dinámicos candelabros de guardabrisas.

92
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 436.
93
Ibidem…, p. 550.// EL PORVENIR, -periódico-. Sevilla, 31 de marzo de 1861.
94
RODA PEÑA, José: “El paso procesional. Talla, dorado y escultura …p.43.// BERMEJO Y
CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p. 309.

203
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

• Paso de Jesús de la Pasión

La hermandad de Pasión estrena en


1865 un interesante paso para el Nazareno,
(fig. 39), obra de Juan Rossi, concebido de
forma más simple según podemos apreciar
en las fotos de la época.
Bermejo y Carballo lo describe así:
“consta de una hermosa peana, de forma
antigua, con adornos toda dorada, sobre
ella en un figurado monte va la Sagrada
Imagen del Señor”95.
Su composición es piramidal, sobre
una base abombada y lisa en la que
Fig. 39.- Fotografía del paso aparecen motivos decorativos de hojas de
realizada a finales del siglo XIX
acanto al más puro estilo barroco, que
provocan formas las cuales sirven como medallones en los que aparecen escudos
alusivos a la hermandad, destacando en su frontal el de la corporación.
En sus esquinas también hay escudos incluidos, de menor tamaño, llamando
especialmente la atención los dinámicos y estilizados candelabros de guardabrisas,
así como sus grandes molduras de hojas de acanto en la parte superior de todos los
lados del canasto.
Los respiraderos son los característicos de esos tiempos, -de cajón-, con
hojas de acanto talladas y motivos vegetales.

95
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p. 277.

204
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

• Paso de las Siete Palabras

En 1865 estrena las andas


que, bajo dibujo de su cofrade
Joaquín Díaz, realiza el tallista
Ricardo Reguera, (fig. 40). Es de
estilo neobarroco dorado, con
perfiles y bombo, líneas rectas y
un moldurón, llamando
especialmente la atención las
esquinas con motivos barrocos
Fig. 40.- Ilustración de M. Grima
de hojas de acanto, en los que se
encuadran unas pequeñas
cartelas sobre las que se aprecian temas relacionados con la Pasión. El dorado era
de Francisco Morales y Francisco Gámiz, midiendo la parihuela 2,32x4,18x1,49.
Su costo según las cuentas de Mayordomía ascendió a poco menos de 2500
reales, precio en el que iba incluido el dorado. En madera se invirtieron 822,54
reales y en el tallado 658; en el herraje 311 y en el dorado 626,7296.
Es de suponer que tan escasa cantidad de dinero no serviría para pagar esta
obra sino “una peana dorada con tableros diestramente tallados y primorosos
adornos; coronando sus ángulos ángeles mancebos con grupos de luces” tal como
lo describe un periódico de aquellas fechas97.
Otras fuentes apuntan que al paso se realizaría en 1879 por los mencionados
autores, cobrando por el trabajo su ejecutor 4820 reales más otros 900 que cobró
por unos penachos de la crestería de 1880. Eduardo Rodríguez se ocuparía de la
carpintería98, y de su dorado Francisco de Paula Morales Bermejo, que entonces

96
Archivo de la Hermandad de las Siete Palabras. Sección Siete Palabras. Leg. 3.1.70. Libro de
Mayordomía 1865-1867 y 1913-1914. Cuentas del 6 de abril d 1864 al 14 de mayo de 1865.
97
EL PORVENIR. Sevilla, 8 de abril de 1865.
98
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p. 335// HERNÁNDEZ PARRALES, Antonio:
Hermandad del Stmo. Cristo de las Siete Palabras, Mª Stma. De los Remedios, Sagrado Corazón y Clavos
de Jesús y Ntra. Sra. De la Cabeza”. En Boletín de las Cofradías de Sevilla. Sevilla 1965.

205
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

era mayordomo de la cofradía y sobrino del Hermano Mayor e historiador José


Bermejo y Carballo; cobró 11. 000 reales99.
Se da la curiosa circunstancia de que este paso se recuperaría en 1923
después de que la hermandad utilizara desde 1881 otro que en principio era para el
Misterio alegórico de la corporación100.
En 1930 se le añaden unos nuevos respiraderos barrocos, obra de Francisco
Carrero, de la misma línea estilística del resto de la composición, siendo dorado
por Vélez Bracho101.

• Paso de la Soledad, (San Lorenzo)

Después de que en 1874 la Soledad de


San Lorenzo sale por última vez bajo palio, un
año después estrena un paso de estilo
neobarroco, (fig. 41), muy en la línea de los
descritos anteriormente, con perfiles y bombo
en el canasto y líneas rectas, cuyo coste fue
veintiún mil reales, vendiéndose posteriormente
a una hermandad de la localidad sevillana de
Aznalcóllar102.
Esta obra que en 1880 se reformaría para
Fig. 41.- Fotografía del paso
aumentar sus dimensiones, llevaba un canasto
de poca altura y de curiosa morfología, de
pirámide invertida, con crestería en su parte superior y motivos vegetales de estilo
barroco, con detalles naturalistas como unas conchas situadas en las esquinas y

99
Archivo de la Hermandad de las Siete Palabras. Sección Siete Palabras. Leg. 3.1.69. Cuentas de
Mayordomía 1864-1900. Recibo firmado el 11 de marzo de 1881.
100
Archivo de la Hermandad de las Siete Palabras. Sección Siete Palabras. Leg. 3.1.70. Libro de
Mayordomía 1865-1867 y 1913-1914. Cuentas del 6 de abril d 1864 al 14 de mayo de 1865.
101
OLLOQUI JIMÉNEZ, A.: Resumen histórico de la vida de la Hermandad de las Siete Palabras. Sevilla,
15 de Marzo de 1946.
102
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p. 508.

206
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

escudo corporativo en sus centros, destacando los dinámicos candelabros de


guardabrisas, al igual que sus respiraderos, muy peculiares con ritmos circulares,
gracias a su composición de hojas “de cartílago”.

• Paso para el crucificado de San Agustín

En la Semana Santa de 1881 estrena


unas andas para el crucificado, (fig. 42),
de estilo barroco, iluminado con
candelabros de guardabrisas en las
esquinas. El historiador Bermejo y
Carballo comenta sobre esta ejecución que
“era de mucho gusto”, descubriéndola en
nuestro caso gracias a las numerosas
ilustraciones y fotografías que poseemos,
pues esta ejecución pasó tras la
desaparición de esta hermandad a otras
Fig. 42.- Fotografía de finales
del XIX corporaciones.
Su composición era de líneas rectas,
perfiles y bombo en el canasto, el cual poseía secciones talladas con motivos de
inspiración vegetal, incluyéndose en las esquinas y sus centros cartelas con
motivos pasionistas. Llama la atención la pronunciada crestería del mismo
lenguaje formal, así como los respiraderos de cajón, decorados con recursos
ornamentales semejantes al resto del paso.
Por las fotografías de aquellos años sabemos que en los años veinte llevaba
cuatro grandes y esbeltos faroles y no los mencionados candelabros.

207
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

• Paso para Jesús de la Expiración, (Cachorro)

Se trata de una obra


estrenada en 1889, de líneas
rectas perfiles y bombo en el
canasto, así como candelabros de
guardabrisas en las esquinas,
(fig. 43 y 44). Los respiraderos
eran de la misma línea y todo
dorado; este paso lo posee hoy la
Fig. 43.- Fotografía del paso en 1921
hermandad de San Esteban y lo
realizaron los señores Olaya y
Govea, -sucesores de Peña103-.
Estilísticamente se asemeja a la comentada anteriormente de las Siete
Palabras, de 1865, basándose su ornamentación en motivos vegetales como la hoja
de acanto, conchas, frutas y flores policromadas.
Parece que la talla de este paso
o parte de la misma pudo acometerla
Antonio Cruz Gómez, cobrando por el
trabajo 1250 pesetas, llevando a cabo
su dorado los talleres de Olaya y
Govea104.
Años después, en torno a 1910,
José Gil restaura este paso y le hace
Fig. 44.- El paso en la actualidad
nuevos respiraderos de estilo
barroco105.

103
MACÍAS MÍGUEZ Manuel: Antecedentes históricos…, Sevilla 1982. // LA ANDALUCIA, -periódico-
. Sevilla, 18 de abril 1889.
104
RUIZ COPETE, A. Mª: […], Cofradía de Nazarenos de la Salud y del Buen Viaje, […], en Misterios de
Sevilla. Sevilla 2003, p.475
105
SERRANO Y ORTEGA, M: La iconografía pasionista y las reformas del paso del Señor del Gran Poder
al finalizar el siglo XIX y comienzos del XX. Sevilla 1901.

208
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

En la actualidad las andas se conservan en buenas condiciones, aunque con


algunas modificaciones, ya que cuando se ejecutó, en los centros del canasto iban
escudos alusivos a la corporación, así como en las esquinas objetos relacionados
con la Pasión, mientras que hoy día lleva tarjetas con escenas pasionistas de
reciente realización. Lo mismo ocurre con las cabezas de ángeles y evangelistas
que hoy recorren los respiraderos, así como las maniguetas color caoba.

• Paso de Jesús de las Tres Caídas, (Triana)

Un nuevo estreno se produce en la


madrugada de 1894 para el Misterio de las
Tres Caídas de Triana, de estilo barroco,
líneas onduladas, perfiles, bombo en el
canasto y candelabros de guardabrisas en las
esquinas. Los respiraderos, -de pequeño
tamaño pero de líneas dinámicas- eran de
diseño parejo y se hicieron en los talleres de
Salvago y Cía, (fig. 45)106.
Ya en 1882, Bermejo y Carballo
describió un paso anterior, sin fecharlo,
aunque especifica que era una “parihuela
Fig. 45.- Fotografía de
principios del siglo XX antigua” tallada y dorada, de la cual no
tenemos documentación gráfica107.
Volviendo al estreno de 1894, el canasto sobresale por su carga ornamental
y por su trabajada talla, típica barroca, con motivos vegetales, numerosos y
dinámicos ángeles, los cuales flanquean unas cartelas que se sitúan en las esquinas
y centros del canasto; en sus entrantes vemos unos guardabrisas o tulipas para
iluminarlo.

106
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 470
107
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p. 533.

209
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

En la misma línea de movimiento, se encuadran los candelabros de


guardabrisas, -muy estilizados-, y los respiraderos que se decoran con hojas de
acanto y motivos vegetales, llevando escudos corporativos en sus centros.
Para la Semana Santa de 1941 las andas del paso del Señor son agrandadas,
llevando a cabo este trabajo los talleres de Carrera. El Sr. Quiles ejecuta el diseño
de los respiraderos que talló José García Roldán, siendo dorados por Antonio
Sánchez, (fig. 46).
Estos respiraderos contienen una
acentuada carga ornamental, con numerosos
elementos barrocos de inspiración vegetal,
sobresaliendo la hoja de acanto, así como
cabezas de ángeles policromadas y cartelas con
escenas pasionistas adaptadas en los centros de
los mismos.
Hoy día estas andas pertenecen a la
Hermandad de Nuestro Padre Jesús atado a la
Columna de Utrera108.
Fig. 46.- El paso, tras la
importante reforma de 1941

• Paso para la Coronación de Espinas, (el Valle)

Parece ser que en 1898 estrenan un paso que sustituye el de 1833, del cual
las crónicas dicen que es de estilo “churrigueresco”, además de destacar su talla y
dorado, así como la decoración en la que aparecen dieciséis ángeles109, lo cual
deja en evidencia que se enriquece bastante a nivel ornamental.
No poseemos documentación gráfica de esta obra.

108
CORREO DE ANDALUCÍA, El. Programa de Semana Santa. Sevilla 1941.
109
ELPORVENIR. Sevilla 7 de abril de 1898.

210
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

• Paso de Jesús de la Cruz al Hombro, (el Valle)

Al igual que
ocurriera con el de la
Coronación en 1898
estrena un paso que
sustituye al anterior, de
estilo barroco y de
grandes proporciones,

Fig. 47.- Detalle del canasto del paso


(fig. 47)110.
Los relieves de
buena factura que lleva
en la actualidad, de 1903, representan escenas de la Muerte de Goliat, la Oración
en el Huerto de Jesús, la Sentencia, el Prendimiento, los Azotes, la Coronación de
Espinas, la Destrucción del Templo, la Degollación de San Juan Bautista, el Hijo
Pródigo, el Juicio de Salomón, Judit y Holofernes y la escena de Jael matando a
Sidara.

• Paso de Jesús atado a la Columna, (Las Cigarreras)

Durante el último tercio del siglo el historiador Bermejo y Carballo señala


que la hermandad de las Cigarreras lleva dos pasos, describiendo el de la
Flagelación como unas andas “de irregular extensión, siendo su peana de estilo
antiguo, tallada y calada, con seis medallones con asuntos de la Pasión; más han
tenido la torpeza de pintarla varias veces de aceite, estando dorado”111.

110
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 336.
111
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p.160.

211
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

Gracias a esta descripción suponemos


que estas son las que utilizaba todavía a
principios del siglo XX, (fig. 48), de perfiles
rectos y bombo, molduras en su parte superior,
con talla en el canasto de hojas de acanto, las
cuales forman medallones para incluir las
cartelas que mencionaba Bermejo, en las que
aparecían elementos u objetos alusivos a la
Pasión.
Sobre los medallones de las esquinas se
asentaban unos arcángeles barrocos de
Fig. 48.- Fotografía del paso a
principios del siglo XX aceptable factura, muy dinámicos, en actitud
de sostener unos estilizados candelabros de
guardabrisas, así como otros dos ángeles en los laterales que cumplían la misma
función.
Asimismo, los respiraderos al principio eran muy escuetos, con decoración
vegetal, pero fueron sustituidos posteriormente por unos de cajón que utilizaban
motivos extraídos de la naturaleza, en especial de hojas de acanto y escudos
corporativos en cada uno de sus planos.
Este paso lo adquirió la cofradía de los Azotes de Sanlúcar de Barrameda,
(Cádiz).

212
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

VI.6.- Otras obras en esta centuria

Enumeramos a continuación pasos de los cuales tenemos constancia de su


existencia, pero no de su estilo artístico.

• Paso alegórico para la hermandad de la Estrella

La hermandad de las Penas de Triana, -La Estrella-, tuvo un paso alegórico


tal y como cuenta Bermejo y Carballo a finales del XIX, aunque no tenemos
referencias estilísticas, pues el historiador se limita a describir las escena del
mismo: “El paso primero que antes sacaba, era del modo siguiente: iba con una
Cruz verde sobre el mundo, y enroscada en el la serpiente con la manzana en la
boca. Del clavo de los pies de la Cruz salían dos palmas que terminaban en los
brazos, y en el centro de estos, estaba una corona de laurel. Al pié del Sagrado
Madero había una María con una estrella, y a un lado una calavera en
significación de la muerte”112.

• Paso de Jesús de la Conversión, (1851)

Tras reorganizar en 1849 unos jóvenes la hermandad de Montserrat que


llevaba muchos años extinguida, se aprueban las Reglas un año después, logrando
salir a la calle en 1851 con dos pasos. Las referencias que tenemos del paso del
crucificado son interesantes, pues al parecer iba con tableros “cubiertos por
terciopelo celeste” y “golpes de talla dorados”, tal y como escribe Bermejo y
Carballo113, por lo que suponemos la simplicidad de su composición, interpretando
el término “golpes de talla” como los elementos decorativos o molduras dorados
que complementaban la ornamentación.
112
BERMEJO Y CARBALLO, José: Glorias Religiosas…, p. 538.
113
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p.549.

213
Capítulo VI Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

No descartamos, por la similitud de la descripción, que esta obra tenga algo


que ver con el paso que estrenara la corporación en 1857, comentado
anteriormente.

• Paso para Jesús de la Salud, (Los Gitanos)

En 1880 la cofradía de Los Gitanos se traslada a San Román, pues llevaban


veinte años sin hacer Estación porque los pasos no cabían por San Nicolás, su sede
canónica114.
Después de no salir desde 1840 salen por vez primera en la madrugada de
1889, estrenando el paso del Nazareno, que era de forma de tableros y columnitas
talladas115.

• Paso Jesús de la Cruz al Hombro, (el Valle)

Tenemos constancia de que la cofradía del Valle salía en 1833 de San


Andrés, siendo el segundo paso para este Misterio una peana tallada y dorada con
muy buenas tarjetas con relieves de la Pasión y en las esquinas cuatro ángeles
mancebos; sobre la peana se figura el encuentro con Jesús de la mujer Verónica;
de estas andas no poseemos documentación gráfica116.

114
ARCHIVO GENERAL DEL ARZOBISPADO: Legajo número 2. Hermandades de Sevilla.
115
ALMELA VINET, Francisco: Semana Santa en Sevilla…, p. Sevilla 1899, pp.54-55.
116
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 335

214
CAPÍTULO VII

________________________________
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

VII
1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

VII.1.- Resurgimiento de la talla procesional, (1900-1939)

Los primeros años del siglo XX tuvieron un carácter continuista en la


evolución de los pasos, existiendo numerosos encargos, y mejorando el nivel de
calidad en muchos de ellos.

Dos acontecimientos marcarán el panorama sociocultural de la ciudad:

• La Exposición Iberoamericana de 1929, la cual supuso para muchos


artistas del momento su revalorización hasta el punto de situarse en el
primer nivel de consideración nacional, a pesar de que en la imaginería
aún tenían vigencia los talleres tradicionales de impronta gremial1.
• La Guerra Civil Española, (1936-1939). En los años previos al conflicto,
se perderán muchas imágenes y enseres debido a los saqueos de iglesias y
almacenes de cofradías, patrimonio que tras guerra deberá recuperarse.

1
BLAZQUEZ SÁNCHEZ, Fausto: La escultura sevillana en la época de la Exposición Iberoamericana de
1929. (1900-1930). Ávila 1989. p.85-144.

216
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

A pesar de estas pérdidas, se llevan a cabo bastantes obras, contrastando


algunas pobres con otras muy buenas. Dentro de estas últimas, se apuntan
modelos muy interesantes y de un virtuosismo en lo ornamental pocas veces visto
con anterioridad.

La influencia de Antonio Susillo, (1857-1896) en sus contemporáneos y


discípulos, Joaquin Bilbao, (1864-1934), o Antonio Castillo Lastrucci, (1882-
1967), resultará fundamental para el auge de la talla procesional2.

Susillo, sevillano de nacimiento aunque formado en París, no dedicará su


tiempo a las cofradías, pero sí muchos de sus seguidores.

Además de los tallistas, numerosos artistas de cierto renombre participan en


los diseños para estos pasos, como José Ordónez, (1867-1945), Gonzalo Bilbao,
(1960-1938), Pedro Domínguez, Sebastián Santos Rojas, (1895-1977), Francisco
Buiza, (1922-1983), o Rafael Barbero, (1913- 1990), entre otros, devolviendo a la
escultura decorativa su antigua categoría artística, pero casi siempre tomando
como referencia los clásicos modelos barrocos3.

En la primera mitad del siglo sobresale en el oficio de la talla ornamental la


figura de Luis Jiménez Espinosa, (1895-1979) que acometió alguno de los mejores
trabajos del siglo.

En lo que se refiere a trabajos de ebanistería sobresale Francisco Bailac


Cenizo, que construyó numerosas andas procesionales, estela profesional que ha
continuado su hijo Francisco Bailac González4, además de otros como Vicente
Serradilla, Carlos Alba o José Huertas.

2
GONZÁLEZ GÓMEZ, Juan Miguel, RODA PEÑA, José: Imaginería procesional…, p.161.
3
Ibidem, p.67.
4
RODA PEÑA, José: “El paso procesional. Talla, dorado y escultura …, p.59

217
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

Por último, debemos aclarar que debido a la abundante información alusiva


a los pasos a partir de ahora, hemos preferido desglosar el comentario de cada uno
de ellos en tres apartados: Datos cronológicos-autoría, motivos de soporte o
estructurales, (columnas), y descripción y motivos ornamentales.

VII.1.1.- Estilos artísticos, (1900-1939)

El arte, la talla ornamental, la imaginería y en general los oficios artísticos


relacionados con las cofradías, se separarán del resto de las tendencias artísticas
del momento. Las hermandades miran al pasado, algo lógico si tenemos en cuenta
la dificultad de adaptar las nuevas tendencias vanguardistas al mundo cofrade,
además de la fuerza con la que se impuso el barroco Sevilla.

Es por ello por lo que a partir del siglo XX, estas obras seguirán basándose
en los modelos pasados, pero mejorando en virtuosismo y riqueza ornamental.

Tal y como ocurriera en el XIX, en Sevilla se construyen menos retablos y


si se ejecutan será con técnicas poco elaboradas, eligiéndose en muchos casos
técnicas industriales, como el vaciado de piedra artificial o la cerámica. Este gusto
pudo ser promovido por la Escuela de Artes y Oficios, que provocó el interés por
nuevas fórmulas, algo que no se vio reflejado en la producción cofrade que, como
decimos, continúa evolucionado basándose en las tradicionales fórmulas5.

En líneas generales habrá cierta libertad ornamental en los pasos,


elevándose la riqueza en la decoración y la iconografía, combinándose a veces los
de madera tallada con otros elementos policromados o de orfebrería.

5
GAÑÁN MEDINA, Constantino: Técnicas y evolución de la imaginería polícroma…, p. 64.

218
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

En esta etapa, se utilizan los mismos estilos artísticos que en el XIX:

• Estilo neobarroco

El barroco se consolida en estos años como el estilo predilecto,


inspirándose en la mayoría de los casos en obras retablísticas tradicionales del
barroco sevillano, o en pasos anteriores como el del Gran Poder de 1688.

• Estilo neogótico

Pocas obras de hacen de este estilo, pero una de ellas resultará fundamental
para la evolución de esta modalidad. Se trata del magnífico paso de la hermandad
de la Lanzada, realizado por Luis Jiménez Espinosa, inspirado en la crestería del
Retablo Mayor de la Catedral de Sevilla.

• Estilo historicista

Evoluciona de forma continuista respecto a las realizaciones del siglo XIX,


caracterizándose de nuevo por su eclecticismo y por su progresivo
enriquecimiento ornamental, además de la potenciación de elementos de impronta
renacentista.

219
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

VII.2.- El paso neobarroco, (1900-1939)

Los primeros años del siglo XX servirán para ratificar el barroco como
modelo predilecto para el paso procesional, experimentando el revisionismo en
sus diferentes variantes, llevándose a cabo numerosas obras de interés, no siempre
de la calidad deseada, aunque en algunas excepciones asistimos a la consecución
de algunas andas de enorme riqueza e interés ornamental.

Gracias a estos pasos de mayor calidad, comienza a intuirse un virtuosismo


que tendrá su culmen en décadas posteriores.

Estos primeros años tienen al tallista José Gil como uno de sus máximos
exponentes, además de otros como Salvador y Pedro Domínguez o Guillermo
Muñiz.

VII.2.1.- La producción de José Gil

Su producción se caracteriza por un acentuado estilo neobarroco, basado en


los tradicionales elementos decorativos, como las hojas de acanto, motivos
vegetales, y el gusto por la inclusión de objetos ornamentales como cartelas o
esculturas de pequeño formato, utilizando cierta variedad compositiva y
candelabros de guardabrisas de igual estilo.

A continuación enumeramos las realizaciones de ese autor, aunque en


apartados posteriores se comentarán otros trabajos del mismo, como
restauraciones u otras ejecuciones de menor nivel.

220
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

• Paso de Jesús Nazareno, (El Silencio)

- Datos cronológicos y autoría: José Ordóñez diseña un nuevo paso que


comienza a tallar José Gil en 1902. En realidad se trata de una reforma casi total
que parte del paso de Cristo de 1737, y que ya vimos en el capítulo V. Resultado
de esa reforma es el paso que vemos en la actualidad, (fig. 1)6.

Fig. 1.- El paso en la actualidad

6
GARCÍA DE LA CONCHA DELGADO, Federico: Primitiva hermandad de los Nazarenos de Sevilla,
Archicofradía Pontificia de y Real de Ntro. Padre Jesús Nazareno y Mª Stma. de la Concepción, en
Nazarenos de Sevilla. Tomo I. Sevilla 1997, p. 296.

221
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

- Motivos estructurales: No lleva columnas ni elementos de soporte.

- Descripción y motivos ornamentales: Después del sustancial cambio del


paso a raíz de la intervención comentada se aprecian unos apliques realizados por
el escultor Juan Luis Guerrero, que labraría los ángeles y querubines que
complementan el paso.
José Gil tallaría las nuevas cartelas, crestería y respiraderos en estilo
barroco, con la originalidad de que no se perdiera la línea de los perfiles y bombo
al dejar espacios lisos y sin tallar. Toda esta obra sería presupuestada en diecisiete
mil pesetas, midiendo la parihuela 2,14x4,20x1,377.
En 1913 estrena los faroles diseñados por Virgilio Mattoni que hoy día
posee la hermandad de las Siete Palabras; bellos, pero algo grandes para el paso8,
motivo por el cual, ya en 1960 los eliminan para incluir los actuales repujados por
Manuel Villarreal9.

Ya en 1973 se dorará de nuevo este paso, labor que realiza Luis Sánchez
Jiménez, acabando un año después; también se policromarían nuevamente las
cartelas por el mismo autor10.

El hecho de que en la actualidad el canasto disponga de esa dinámica talla


de hojas de acanto y zonas lisas lo hace muy peculiar, a lo que se añaden las
mencionadas esculturas que lo complementan y motivos florales policromados.
Los respiraderos resultan así mismo muy originales, por su línea de corte en la
parte inferior y su talla de hojas de acanto, en la que se insertan elementos
alusivos a la Pasión.

7
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 388.
8
CORREO DE ANDALUCÍA, EL: Publicado el 7 de febrero de 1913. Sevilla.
9
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 390.
10
CORREO DE ANDALUCÍA, El. Programa de Semana Santa. Sevilla 1973.

222
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

• Paso de La Exaltación

- Datos cronológicos:
Esta corporación sale tras
diecinueve años en 1902,
estrenando un nuevo canasto
de estilo barroco, tallado en
los talleres de José Gil, (fig.2
y 3).
Fig. 2.- El paso fotografiado en la calle en 1927

- Motivos estructurales utilizados: Columna salomónica.

- Descripción y motivos ornamentales: Inspirados en el mundo vegetal,


predominando la hoja de acanto, hojas, frutas y flores, además de otros motivos
figurativos, como ángeles y arcángeles de estilo neobarroco. Destacan en el paso
los ángeles mancebos atribuidos a Luisa Roldán, “La Roldana”, -colocados en las
esquinas que proceden del primitivo paso-, y los ricos adornos tallados con
columnas salomónicas. En la actualidad mide 2,20x5,51x1,46 m.
El canasto es a nivel
compositivo de los denominados
“de casetones”, los cuales están
divididos tres en cada lateral y uno
en la parte delantera y trasera,
separados todos ellos por las
columnas salomónicas, llevando
además seis candelabros de
guardabrisas del mismo estilo. La
Fig. 3.- Detalle del paso en la actualidad
talla es la clásica de hojas de

223
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

acanto y otros motivos inspirados en la naturaleza vegetal, distribuyéndose de


forma simétrica en cada uno de los casetones que forman el canasto.
- Novedades o cambios posteriores: En 1911 estrena los respiraderos
realizados por el mismo taller de José Gil aunque estos se sustituirían en 1930 por
otros de estilo barroco dorados, siendo su autor el tallista José García Roldán,
encajando acertadamente con la composición, ya que utiliza motivos vegetales y
hojas de acanto semejantes al canasto junto a otros elementos como ángeles
incluidos a modo de relieve, frutas y cabezas de ángeles.
Aun así la composición de la talla de los mismos es más dinámica siendo
las formas más caprichosas y no tan simétricas como en el canasto.

• Paso de La Sentencia

- Datos cronológicos: El 25 de
marzo de 1910 se estrena un paso
para el Misterio de la Macarena. Es
de estilo barroco y lo hizo José Gil,
el cual añadió al conjunto los
relieves de 1859, (fig. 4).

Se da la circunstancia de que el
autor tomó el paso de Hernández
Fig. 4.- El paso en una fotografía de 1930
Couquet del siglo XIX para
reformarlo, considerándose un
nuevo paso por el sustancial cambio del mismo.

- Motivos estructurales utilizados: Motivos naturalistas de inspiración vegetal,


integrados en la misma composición, ya que no aparece ninguna columna.

224
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

- Descripción y motivos ornamentales: De líneas rectas, con perfiles, bombo en


el canasto y moldura en su parte superior. Estas tarjetas fueron complementadas
por unos ángeles querubines que hizo Juan Luis Guerrero, de aceptable factura.
Curiosamente, este paso se encuentra actualmente a modo de barandal en el coro
de la Basílica de la Macarena.

La decoración se inspira en el mundo vegetal, predominando la hoja de


acanto, hojas, frutas y flores, además de otros motivos figurativos, como ángeles y
arcángeles.

Su talla se caracteriza por los tradicionales motivos decorativos de impronta


barroca, particularmente motivos vegetales, como la hoja de acanto, frutas y hojas,
línea estilística que reproducen los candelabros de guardabrisas, de gran
dinamismo barroco, a juego con el resto de la obra.

- Novedades o cambios posteriores: Una década después, en la madrugada


del 2 de abril de 1920 estrena unos respiraderos de estilo barroco y dorados que
realizó José García Roldán11.

• Paso para Jesús de la Salud, (San Bernardo)

- Datos cronológicos: Esta corporación encargará unas nuevas andas para el


crucificado en 1925, en madera tallada y dorada, de líneas rectas con perfiles y
bombo en el canasto, siendo los respiraderos de la misma línea. Fue realizado por
José Gil y el dorado de Francisco Ruiz Rodríguez, (fig. 5)12.

11
Boletín de las Cofradías de Sevilla. Sevilla, Mayo 1974.
12
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 229.

225
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

Es el paso que lleva en la


actualidad, siendo su traza y su talla de
buen gusto barroco y proporciones justas,
recordando al característico paso del
Cachorro de 1889, hoy en la cofradía de
San Esteban.

- Motivos estructurales: Su estructura


es abombada y no aparece ningún tipo de
columna ni soporte en la composición.

- Descripción y motivos ornamentales:


En lo que a talla se refiere el autor aplica
en todo el conjunto el habitual lenguaje
Fig. 5.- Reciente fotografía del paso
barroco de hojas de acanto, frutas y otros
motivos inspirados en la naturaleza,
incluyendo escudos corporativos y cartelas pintadas en las esquinas con motivos
pasionistas, llamando poderosamente la atención la línea de los respiraderos con
maniguetas a juego y los estilizados candelabros de guardabrisas de lenguaje
plástico similar.

Blas Rodríguez se encargó de hacer las cartelas que muestran las escenas
pasionistas del Ecce Homo, la Caída en la calle de la Amargura, el Encuentro de
Jesús con María y el Nazareno cargando con la Cruz, mientras que Jaime Mata
acometió las talladas que contienen escudos corporativos.

- Novedades o cambios posteriores: En 1972 encargan a Francisco Bailac


una nueva parihuela y se doró el paso, labor que realizó Luis Sánchez Jiménez13,
aunque el último dorado de esta ejecución corrió a cargo de Manuel Calvo
Camacho en 1995.

13
CORREO DE ANDALUCÍA, El. Programa de Semana Santa. Sevilla 1973.

226
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

• Paso de las Cinco Llagas, (La Trinidad)

- Datos cronológicos: Este autor talla


un nuevo paso de Misterio de estilo
neobarroco para las Cinco Llagas; lo
hizo en 1935 y esa Semana Santa sólo
procesionó este paso entre los tres que
poseían, (fig. 6)14.

- Motivos estructurales utilizados: Al


ser de composición abombada carece de
columnas y de cualquier tipo de soporte.

- Descripción y motivos
ornamentales: De líneas rectas, con
perfiles y bombo en el canasto, así como
Fig. 6.- Paso en la actualidad
dinámicos candelabros de guardabrisas
en las esquinas.

Sigue la misma línea estilística del paso del Cachorro de 1889,


apreciándose en sus centros y ángulos motivos u objetos alusivos a la Pasión de
Cristo, así como escudos relacionados con la corporación, complementándolo
además una crestería en su parte superior; los motivos vegetales complementaban
la ornamentación, predominando la habitual hoja de acanto. Los respiraderos
seguían la misma traza barroca, llevando en sus centros escudos corporativos y
motivos vegetales tallados en el mismo.

14
LA UNIÓN, -periódico-. Sevilla, 5 de abril de 1936.

227
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

- Novedades o cambios posteriores: En 1941 se ejecutan nuevos


candelabros de guardabrisas para el crucificado, tallados por Rafael Fernández del
Toro y dorados por José Campos, de composición dinámica y barroca15.

Se enriquecen y restauran en 1971, labor que realiza Carlos Bravo Nogales;


se hacen nuevos los respiraderos de estilo barroco, resultando estos más
ostentosos que los anteriores, con mayor carga ornamental de hojas de acanto y
otros recursos inspirados en la naturaleza.

También se hacen nuevas las cartelas que incluyen motivos pasionistas,


labor acometida por Antonio Martín, siendo estas de buena calidad. Al año
siguiente se dorarían por los talleres de Herrera y Feria16.

VII.2.2.- Otras obras barrocas destacadas en este periodo

• Paso de Jesús de la Pasión de 1900

- Datos cronológicos y
autoría: El primer encargo del
siglo lo llevó a cabo la
hermandad de Pasión, la cual
evocará nuevamente los
postulados barrocos en el 1900
estrenando nuevas andas para
el primer paso diseñadas y
Fig. 7.- Fotografía del paso realizada en torno a 1920
talladas por Pedro Domínguez,

15
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 574.
16
CORREO DE ANDALUCÍA, El. Programa de Semana Santa. Sevilla 1931.

228
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

de líneas onduladas y con perfiles y bombo en el canasto, (fig. 7).


Por fallecer el artista en 1908 continúa su labor Manuel Gutiérrez Cano, (1845-
1915), siendo el dorado de Puedo.

- Motivos estructurales: No utiliza ningún tipo de soporte.

- Descripción y motivos decorativos utilizados: De estructura piramidal,


llevaba cuatro medallones representando el Beso de Judas, Coronación de
Espinas, Calle de la Amargura y Presentación de Jesús a Pilatos, rodeados los
mismos por veinte ángeles querubines y en las esquinas unas parejas de estos
sosteniendo escudos.

La construcción de este paso se caracteriza por su dinamismo y por el nivel


decorativo que lo complementaba, con unos interesantes ángeles que flanqueaban
las distintas tarjetas que se encajaban en el canasto, siendo los respiraderos de
líneas rectas y con los elementos habituales de hojas y motivos vegetales en la
talla.

- Novedades o cambios posteriores: Estrenaría en 1911 cuatro candelabros


de guardabrisas realizados por Juan Luis Guerrero, que en 1923 serían sustituidos
por cuatro faroles de metal plateado del orfebre Antonio Amiáns de Austria para
las esquinas de las andas del Señor, que sustituirían a los guardabrisas y que son
los que aparecen en la fotografía17.

Por desgracia, este paso se pierde en 1940 debido a un incendio en el


almacén de la corporación causado por un cortocircuito18.

17
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 354.
18
CORREO DE ANDALUCÍA, El. Programa de Semana Santa. Sevilla 1952.

229
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

• El paso del Calvario

- Datos cronológicos: Un conocido


cofrade del Calvario, el escritor e
investigador Farfán Ramos, diseña en 1909
para esta hermandad las andas del
crucificado, talladas por Salvador
Domínguez, (fig. 8).
- Motivos estructurales: No posee
ningún tipo de columna.

- Descripción y motivos
ornamentales: Acometido en ricas maderas
de caoba, de líneas onduladas y estilo
neobarroco, sigue la traza del que posee el
Fig. 8.- Paso en la actualidad Gran Poder, con la peculiaridad de llevar
sus boceles de mayor a menor para reducir
el monte que es tallado imitando a piedras. Llevaban faldones de damasco morado
con bordados de recorte, -bordados eliminados años después-, y en las esquinas
del canasto, águilas bicéfalas, corriendo la talla a cargo de Salvador Domínguez.
Las águilas llevan apliques de plata, material del que están realizadas las
cartelas con atributos pasionistas, acertada labor que realizó el orfebre cordobés
Ángel Cabanas. En los laterales del crucificado aparecen dos arcángeles
ceriferarios de Emilio Pizarro que hoy día posee la hermandad de la Vera Cruz;
además de estos iluminan cuatro candelabros altos con gruesos cirios en las
esquinas; en 1913 se estrenarían los respiraderos “de cajón” dividido en secciones
que complementan el canasto comentado con anterioridad, realizados en igual
estilo y por el mismo autor19.
La talla decorativa del conjunto es naturalista, pues está inspirada en
motivos de tipo vegetal, como hojas y flores, además de perleados.
19
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 460.

230
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

- Novedades o cambios posteriores: En 1922 se sustituyen los ángeles


ceriferarios que iban junto al crucificado, -de escaso mérito-, por dos jarras
labradas el metal, que son las que lleva actualmente. Además en 1928 se añaden
también en los entrantes del canasto unos faroles de metal plateado repujados por
Jorge Ferrer20.

• Pasos de Jesús del Silencio, (Amargura)

Fig. 9.- Paso en la actualidad

- Datos cronológicos y autoría: Para sustituir un paso de metal plateado


realizado en 1911 se lleva a cabo otro en 1919. Este se quema en 1936 junto con
las imágenes secundarias por lo que dos años después Juan Luis Rodríguez

20
CORREO DE ANDALUCÍA, El. Programa de Semana Santa. Sevilla 1952.

231
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

construye uno semejante a este aunque con una talla más exquisita, coincidiendo
con la terminación de las imágenes del misterio por Cayetano González, (fig. 9)21.
Su diseño estaba inspirado en la peana dieciochesca del paso de María
Santísima del Mayor Dolor y Traspaso, titular dolorosa de la hermandad del Gran
Poder22.

La doró Francisco Ruiz Rodríguez y podemos valorarla como una de las


más destacadas del siglo XX, siendo la que utiliza la cofradía en la actualidad.

- Motivos estructurales: Su composición es abombada y no lleva columnas.

- Descripción y motivos ornamentales: Principalmente destaca por su


composición de pirámide invertida y concepción del espacio, de perfiles
ondulados, con leves entrantes y bombo, llamando la atención su impronta
arquitectónica, por sus numerosas líneas rectas y curvas, especialmente sus
esquinas y la moldura que remata el canasto. A este respecto podemos valorarlo
como uno de los mejores de la ciudad.

En su concepción la talla tanto


en el canasto como en los
respiraderos, es “de pellejina”, pues en
sus formas no destaca tanto la
perfección en el golpe de la gubia
como su magnífica visión general del
conjunto. Destacan en el canasto Fig. 10.- Una de las cartelas del paso

asimismo las cartelas policromadas de


Francisco Posadas, (fig. 10), con escenas pasionistas de gran valor artístico.

21
RODRÍGUEZ MATEOS, Joaquin: Pontificia, Real e Ilustre Hermandad Sacramental y cofradía de
nazarenos de Nuestro Padre Jesús del Silencio en el Desprecio de Herodes, María Stma. de la Amargura,
San Juan Evangelista y Beata Ángela de la Cruz, en Misterios de Sevilla. Sevilla 2003, p. 281.
22
Ibidem.

232
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

Abundan también los motivos florales y vegetales, la hoja de acanto y de


cartílago, siendo las maniguetas las que pertenecían al paso que se quemó en
1936, ya que estas se salvaron.

Los respiraderos son de traza dinámica, con decoración de inspiración


vegetal semejante al canasto.

• Paso de las Siete Palabras

- Datos cronológicos: La hermandad de las


Siete Palabras en 1914 estrena un paso, siendo
el costo de su dorado de 5500 pesetas, (fig. 11
y 12). Esta obra no gustó demasiado y fue
vendida a la del Buen Fin en 1923, que pagó
4600 pesetas y que hoy día sigue usando junto
con unos respiraderos de José Martínez de
León de 192823.

- Motivos estructurales: No aparece


ninguna columna ni elementos de soporte.

- Descripción y motivos ornamentales: El


Fig. 11.- La composición en una paso era muy característico, de perfiles rectos,
fotografía de 1918
pero dividido en casetotes con una profusa
decoración barroca de hojas de acanto y motivos vegetales, que provocan formas
caprichosas en las esquinas, en las que se enmarcan unos escudos corporativos,
destacando las molduras que hay en la parte superior con los mismos motivos
vegetales. Interesante son los estilizados y dinámicos candelabros de guardabrisas,

23
EL CORREO DE ANDALUCÍA. Sevilla 9 de abril de1914.

233
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

así como los respiraderos, a juego con el canasto, de líneas movidas y con
abundante talla de motivos vegetales del tipo del canasto.

- Novedades o cambios
posteriores: El imaginero
contemporáneo Antonio Jesús Dubé
Herdugo (1976), realiza a principios
del siglo XXI seis profetas
policromados de estilo barroco para
las esquinas y laterales del canasto.
Fig. 12.- El paso tal y como
procesiona actualmente

• Paso de la Soledad, (San Buenaventura)

- Datos cronológicos: El 2 de
abril de 1915 se estrenan unas andas
doradas para la hermandad de San
Buenaventura.
- Motivos estructurales: Carece de
columnas y elementos de soporte.
- Descripción y motivos
ornamentales: Su composición es
piramidal, de líneas rectas con perfiles y
bombo en el canasto.

Fig. 13.-El paso, fotografiado el


año de su estreno

234
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

Gracias a la documentación gráfica que poseemos apreciamos las singulares


propiedades de este paso, elevándose el canasto de mayor a menor tamaño, con
unos curiosos ángulos que no forman esquinas, sino un plano en el que se incluyen
unas cartelas con escenas pasionistas. En el frontal aparece el escudo de la
corporación de gran tamaño, destacando también el profundo calado del mismo, y
la crestería que lo remata.

Los respiraderos, como muchos de su tiempo, son de forma rectangular,


enmarcando decoración vegetal propia de la estética barroca, de motivos vegetales
y escudos en sus centros, con maniguetas de similar estilo.

- Novedades y cambios posteriores: En la Semana Santa de 1928


estrenarían unos característicos y estilizados candelabros de guardabrisas y en
1935 se doraría de nuevo24.

• Paso de la Humildad y Paciencia

- Datos cronológicos y
autoría: A partir de 1902 la
hermandad de la Sagrada Cena
sufre algunos años de
decadencia, pero en 1915 se
acometería la realización de un
paso para el Cristo de la
Humildad y Paciencia, (fig. 14).
- Motivos estructurales: Fig. 14.- Paso de 1915
De composición abombada, no
posee columnas ni elementos de
soporte.

24
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p.504.

235
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

- Descripción y motivos ornamentales: Si nos atenemos a la documentación


fotográfica de época, era de escaso mérito y poseía pocos elementos decorativos,
siendo de estilo barroco, por la composición abombada del canasto y su
decoración de hojas de acanto; Llevaba ocho cartelas repartidas por el canasto y
como iluminación cuatro candelabros de guardabrisas de estilo barroco.

• Paso de la Sagrada Cena

- Datos cronológicos: Por la documentación fotográfica encontrada en el


archivo de la hermandad de la Cena, sabemos que entre 1917 y 1919 utilizaron un
nuevo paso para el misterio eucarístico, tanto en la procesión del Corpus como en
Semana Santa. Lo interesante de esta realización es que, cuando la cofradía
adquirió el de La Carretería en 1920, este paso lo compra por 750 pesetas la de
Jesús ante Anás en 1921, reformándolo totalmente José Sanjuán Navarro25.

Fig. 15 y 16.- Observamos la simplicidad decorativa del de la Cena,


comparada con el misterio de Jesús ante Anás tras la reforma.

- Motivos estructurales: Al principio el paso se dividía en casetones por


simples pilastras, dándole un aire historicista, pero tras la profunda reforma de
1921 y 1922, se divide en pequeñas y delgadas columnas.

25
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p.210.

236
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

- Descripción y motivos ornamentales: El de la Cena iba entero pintado de


blanco, llevando en los casetones heráldicas y escudos corporativos y militares,
mientras que el de Jesús ante Anás lo enriquecieron con una profusa decoración
barroca, incluyendo en los casetones nuevas cartelas, y siendo dorado por José
Sanjuán26. Además se añaden nuevos respiraderos dinámicos de estilo barroco y
crestería, apareciendo unos guardabrisas repartidos por los laterales del canasto y
faroles en vez de los candelabros que llevaba el de la Cena.

Hemos incluido esta ejecución en este apartado de pasos barrocos, ya que el


de la Cena nos parecía difícil de clasificar. Cierto es que si nos basamos en la
composición el paso tiene reminiscencias clásicas, pero, debido a su simplicidad
decorativa, hemos preferido darle protagonismo al paso reformado entre 1921 y
1922.

• Paso de la Coronación de Espinas

- Datos cronológicos
y autoría: En la Semana
Santa de 1918, aparece el
nuevo paso de Gonzalo
Bilbao para el de la
Coronación, el cual utiliza
en la actualidad, (fig. 17 y
18).

Fig. 17.- El paso en la actualidad

26
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p.210.

237
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

- Motivos estructurales: No posee columnas ni elementos de soporte.

- Descripción y motivos ornamentales:


Es de justas proporciones y en estilo barroco-
rocalla, predominando el lenguaje propio de
este tipo de hoja, con espejitos en los huecos
calados de la talla, que le hacen ser muy
singular.
Fig. 18.- Detalle de los espejos
Compositivamente, es de líneas rectas y y la rocalla

un perfil de menor a mayor, para dar vuelo y


que las figuras encajen correctamente en su parte superior, dorado y con faroles en
las esquinas; los faldones son de damasco rojo con adornos bordados en oro, de
igual morfología que el canasto, todo diseñado por Gonzalo Bilbao.
Los respiraderos son asimismo de líneas rectas, llevando en cada una de sus
esquinas maniguetas a juego. Hoy día es el único que queda de estas
características, haciendo uso de los llamativos espejitos, los cuales destacan más
en los respiraderos, que son de perfil recto y justas proporciones, así como los
faroles de metal que flanquean esta obra en las esquinas, de metal plateado. Lleva
dos cartelas policromadas realizadas por José Rivera García y que representan el
Lavatorio y a San Juan Evangelista, careciendo esta ejecución de esculturas de
bulto redondo.
- Novedades o cambios posteriores: En 1967 se amplían las andas, además
de añadir dos cartelas en los laterales de Antonio Vega, quitándose los clásicos
espejitos que volvieron a colocarse en 1975. Manuel Peralta volvió a dorar el
paso27.

En 1974 se ejecutan unos nuevos faroles de metal plateado de Manuel Seco


Velasco28.

27
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p.339.
28
CORREO DE ANDALUCÍA, El. Programa de Semana Santa. Sevilla 1964.

238
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

• Paso del Cristo de la Fundación

- Datos cronológicos y autoría:


En 1922 la cofradía de los Negritos
estrenaría nuevo paso para el
crucificado, tallado por Francisco
Domínguez, (fig. 19).

- Motivos estructurales: Columnas


salomónicas dividen el canasto en
secciones actuando como soporte
compositivo.

- Descripción y motivos
ornamentales: es de madera de caoba,
de hechura recta y estilo barroco, con
Fig. 19.- Paso en la actualidad
unos característicos faroles de madera a
juego, en el que también sobresalen las
columnas salomónicas que complementan toda la composición, rematándolos unas
peculiares coronas.
Toda la ejecución es de buena factura, siendo sus respiraderos de cajón y de
casetones tallados con decoración de hojas clásicas de acanto, conchas y diversos
motivos inspirados en el mundo vegetal.
Se sitúan escudos corporativos en los centros de cada uno de sus lados,
frontal y trasera, en los que vemos otros elementos como coronas talladas y
ángeles en relieve.

239
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

• Paso del Niño Jesús, (Quinta Angustia)

- Datos cronológicos y autoría: En el Corpus


de 1927 se estrenan las nuevas andas para el Niño
Jesús que diseñó el pintor Gonzalo Bilbao. En julio
de 1936 la Iglesia es saqueada desapareciendo las
imágenes Titulares y otros enseres importantes. Un
año después sólo salieron con el paso de Cristo, con
un crucificado de la Santa Escuela de Cristo de la
Natividad, cedido por el Arzobispado29.

Fig. 20.- Paso del - Motivos estructurales: Columnas salomónicas.


Niño Jesús

- Descripción y motivos ornamentales: Se forma sobre una peana un airoso


templete con columnas salomónicas. Fue tallado por Antonio Infantes Reina,
siendo los faldones de color blanco con una cenefa roja y bordados aplicados por
Francisco Farfán Ramos30. Este paso, o parte de él, pudiera ser el que apreciamos
en la fotografía del archivo de la Universidad de Sevilla, (fig.20).

• Paso de Jesús de la Expiración, (el Cachorro)

- Datos cronológicos y autoría: En 1929 se produce una importante novedad,


ya que estrena el paso de Cristo, (fig. 21 y 22). Lo talló Francisco Carrero,
constituyendo una realización de indudable presencia, mientras que Jorge Ferrer
labró los faroles de plata que luce en los centros de los costados. Hoy día es
propiedad de la hermandad de la Cena de Jerez de la Frontera, cofradía que lo
conserva sin cambios significativos31.

29
HERNÁNDEZ DÍAZ, José: Estudio de los edificios religiosos… Sevilla 1936.
30
LA UNIÓN, -periódico-. Sevilla, 13 de abril de 1927.
31
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 514.

240
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

- Motivos estructurales: Tiene como


curiosidad, que los mismos ángeles y arcángeles
provocan el efecto de “sostener” el canasto.

- Descripción y motivos ornamentales: Es de


líneas onduladas, perfiles y bombo en el canasto
y candelabros en las esquinas con los
respiraderos del mismo estilo. En el encontramos
una llamativa variedad de elementos decorativos
propios del barroco, como motivos vegetales y la
rocalla, destacando las esquinas que sobresalen

Fig. 21.- El Cachorro en el paso para constituir una especie de peana para los
de 1929
candelabros de guardabrisas, la cual está
sostenida por ángeles de buena factura.

El diseño y la parte escultórica se


debió a Castillo Lastrucci, al igual que
los relieves, ángeles querubines y
mancebos que decoran todo el
canasto. Sus respiraderos van en la
línea dinámica barroca, empleándose
elementos ornamentales semejantes a
los del canasto, sobresaliendo en sus
esquinas unas maniguetas de madera Fig. 22.- Paso en la actualidad

oscura. Cuando se construyó su


tamaño era 2,25x4,38x1,52.

241
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

• Paso de Jesús de las Penas, (San Roque)

- Datos cronológicos y autoría: La


cofradía de San Roque en 1929 realiza el actual
paso de Cristo, hecho por el taller de los
Hermanos Cubillo Hidalgo y Medina, siendo su
peculiar diseño de Carlos García Eiris32, (fig.
23).

- Motivos estructurales: La misma talla


naturalista de inspiración vegetal actúa como
soporte de la obra.

- Descripción y motivos ornamentales: Es un

Fig. 23.- El paso en la actualidad


paso muy característico, ya que su morfología
se basa en el uso de la rocalla, sinuosa y
asimétrica, de ascendencia dieciochesca, así
como motivos florales y vegetales, concibiendo un canasto de perfiles muy
abultados33.

Llaman la atención especialmente las líneas onduladas del canasto, con


grandes y dinámicas hojas “de cartílago” en las que se incluyen los mencionados
motivos; estas, recorren todo el canasto desde las esquinas a los centros de cada
plano.

- Novedades o cambios posteriores: Décadas más tarde, en 1963 junto con


el Cirineo realizado por Antonio Illanes para la escena del paso, estrena unos
respiraderos a juego, y dos años después también son novedad los faroles de
orfebrería dorada que lleva en la actualidad34.

32
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 84.
33
CORREO DE ANDALUCÍA, El. Programa de Semana Santa. Sevilla 1963.
34
RODA PEÑA, José: “El paso procesional. Talla, dorado y escultura …, p.76.

242
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

Los respiraderos que lleva hoy día son de Manuel Cerquera, de 1963 y de
estilo semejante a los anteriores-, mientras que los relieves policromados que
aparecen fueron ejecutados por Rafael Barbero Medina en 1966, año en el cual
también se dora el paso por Manuel Calvo Camacho. Representan las cartelas el
Nacimiento de Jesús, la Entrada en Jerusalén, la Oración en el Huerto, el
Prendimiento, la Calle de la Amargura y el Triunfo de la Eucaristía, siendo estas
de aceptable factura.

Ese mismo año de 1963, Francisco Maireles pintó unas cartelas para el paso,
las cuales serían eliminadas a pesar su buen nivel artístico35.

• Paso para Jesús de la Salud, (Los Gitanos)

- Datos cronológicos: En 1931, se hace un


nuevo paso, (fig. 24). Esta obra desaparece el 18
de julio de 1936, ya que es saqueada y quemada
la Iglesia de San Román junto con su almacén,
por lo que pierden sus pasos, enseres e imágenes
titulares36.

- Motivos estructurales: De composición


abombada, no lleva elementos que recuerden a
Fig. 24.- Fotografía realizada en columnas, actuando la misma talla como soporte
torno a 1930
estructural.

- Descripción y motivos ornamentales: La composición es de perfiles y canasto


abombado, llevando cuatro ángeles en las esquinas de los candelabros y ocho más

35
RODA PEÑA, José: “El paso procesional. Talla, dorado y escultura …, p.64.
36
MONTOTO, Santiago: Parroquias de Sevilla. Sevilla 1981, p.54.

243
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

en los laterales que recogen unas guirnaldas de flores. Llamaban poderosamente la


atención los escudos alusivos a la cofradía, de grandes dimensiones, situados en
los centros de cada plano del canasto. Recuerda en su composición al que hiciera
la cofradía del Cachorro en 1889, y que hoy posee la hermandad de San Esteban.
Los respiraderos eran del mismo estilo, todo dorado, siendo ejecutada esta
interesante obra en los talleres de José Sanjuan37.

37
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 482.

244
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

VII.3.- El paso neogótico, (1900-1939)

El paso neogótico será el estilo elegido por parte de algunas corporaciones,


que en algunos casos lo tomarán como su estética general en toda la cofradía,
dando así unidad a todo su cortejo y a todo su patrimonio.

Las producciones siguen las mismas pautas del XIX, aunque en estos daños
hemos destacado la construcción del paso de La Carretería a cargo de Guillermo
Muñiz.

VII.3.1.- Pasos de estilo neogótico

• Paso del Cristo de las Misericordias, (Santa Cruz)

- Datos cronológicos: Estrenan un paso


en 1922, de impronta neogótica, (fig. 25).

- Motivos estructurales: Columnas y


arquerías góticas servían al canasto como
soporte.

- Descripción y motivos ornamentales: De


líneas rectas en la planta del canasto y con
respiraderos de igual estilo, destacando las

Fig. 25.- Fotografía realizada en pinturas pasionistas realizadas por Rafael


torno a 1922
Rodríguez Blas y Esteban Rodríguez. Los

245
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

adornos fueron realizados en pasta de madera, completándose la obra con cuatro


faroles de hierro forjado de Andrés Contreras. El proyecto fue dirigido por Juan y
Cayetano González Gómez, siendo la ebanistería de los talleres de Manuel
Casana.

- Novedades o cambios posteriores: Este paso, al ser pequeño en relación a los


similares de su época, se amplia en 1945, labor llevada a cabo por parte del taller
de Juan Pérez Calvo, para lo que es necesario pintar nuevas tablas con escenas de
la Pasión, además de restaurar algunas, labor que realiza el pintor Bonillas38.
Como veremos más adelante, esta interesante obra se sustituiría en 1973 por otra
de semejantes características.

• Paso de Jesús de la Salud, (La Candelaria)

- Datos cronológicos: Tras fundarse la


corporación en 1922, estrenan este paso de estilo
neogótico, (fig. 26). Lo llevó a cabo en su totalidad
Francisco Ruiz Rodríguez, y tras hacerse uno
nuevo años después, pasó a pertenecer al nazareno
de Mérida, (Badajoz), la cual lo conserva en la
actualidad.

- Motivos estructurales: El paso se divide en


casetones por medio de columnitas góticas,
rematadas en la parte superior por pináculos.
Fig. 26.- El paso en los años 20
- Descripción y motivos ornamentales: Los
casetones poseen decoración de inspiración

38
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 215.

246
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

naturalista, destacando en sus centros la inclusión de escudos corporativos. Una de


las curiosidades son las bombillas que iluminaron por energía eléctrica los
peculiares faroles góticos, algo que quedó en una simple anécdota. Sus
respiraderos eran de cajón, con decoración semejante a la del canasto.

• Paso de la Carretería

- Datos cronológicos y autoría: En


1922 se produce un importante estreno en
lo que a andas procesionales se refiere, de
estilo neogótico, por parte de la
hermandad de la Carretería, (fig. 27).
En la Semana Santa de 1921 el
Misterio de esta cofradía no sale ya que
estaba haciéndose este nuevo paso por
parte de Guillermo Muñiz, que finalmente
se estrenaría al año siguiente.

- Motivos estructurales: La misma


Fig. 27.- Paso en la actualidad
talla naturalista actúa como soporte de la
obra.

- Descripción y motivos ornamentales: Es de


madera oscura simulando hojas de cardo atadas con
una soga. Lo complementaba unos originales
candelabros de forja con guardabrisas que
iluminaban la escena superior y en las esquinas
ángeles mancebos de Cristóbal de Guadix y Luis
Antonio de los Arcos, del siglo XVII. Fig. 28.- Detalle del paso
“anudado”

247
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

La obra es de enorme originalidad y única en su estilo en Sevilla, por su


estética sobria, sin utilizarse gran variedad de elementos, pues se basa
exclusivamente en el motivo vegetal ya mencionado, de grandes hojas de cardo,
las cuales desprenden una impronta neogótica, aportando la novedad en el canasto
de una gruesa soga tallada que produce el efecto de “atar” el conjunto vegetal,
(fig. 28), resultando una obra imponente. Los respiraderos siguen la línea estética
de movilidad y dinamismo, formando todo el conjunto una interesante dinámica
de formas que van y vienen de forma caprichosa, sin una aparente estructura
simétrica ni organizada.

Los antiguos ángeles policromados que decoran las esquinas, aun siendo del
XVII, encajan a la perfección con la sobriedad y el romanticismo del conjunto.

248
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

VII.4.- El paso historicista, (1900-1939)

Al igual que ocurriera en el XIX, el paso historicista se basa en un


eclecticismo ornamental que evocan elementos decorativos de diversas tendencias,
predominando los recursos ornamentales clásicos y barrocos.

Las únicas novedades respecto a la centuria anterior son el aumento de la


riqueza y el virtuosismo de estas obras, además de la potenciación de los recursos
decorativos de impronta renacentista.

VI.4.1.- Pasos de estilo historicista

• Paso del Descendimiento, (Quinta Angustia)

- Datos cronológicos y autoría: En


1904 se estrena esta gran obra, novedosa
por su diseño y por los materiales
empleados, dibujada por Pedro
Domínguez, (fig. 29).
- Motivos estructurales: Unos
motivos vegetales a modo de volutas
actúan dentro de la decoración como
soporte del canasto.
- Descripción y motivos
ornamentales: Su construcción se basa en
líneas rectas y un perfil de mayor a
Fig. 29.- Paso en la actualidad

249
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

menor, ejecutado en ricas maderas nobles de caoba teñidas. Va adornado con


esculturas y adornos fundidos en bronce en los talleres de Masriera de Barcelona,
según modelos de Emilio Bartolomé y de José García. En los centros cartelas con
escudos de la hermandad, Sevilla, León XIII y España, y en las esquinas las
imágenes sedentes de los evangelistas. Los respiraderos son de iguales adornos y
los faroles del mismo metal. El bronce costó catorce mil pesetas, los modelos
cuatro mil quinientas y la parte de ebanistería y maderas cinco mil. El llamador,
que representa un dragón de bronce, lo diseñó Gonzalo Bilbao. Mide
2,39x4,85x1,4439.

Las pequeñas imágenes que


complementan esta decoración son
de aceptable factura, encajando
adecuadamente en el conjunto.
Aunque el material que
destaca en esta ejecución es el
bronce, la base compositiva radica
en la madera, que divide en
Fig. 30.- Detalle del canasto
secciones el paso, desde unos
tradicionales respiraderos de cajón,
-rectangulares y divididos en secciones-, a un canasto que comienza con una
moldura oscura con motivos vegetales; después otra superior, -la más grande-, de
color más claro y en la que se encajan las figuras de bronce, y una última moldura
dividida por emperlados con cabezas de ángeles en bronce.

En los respiraderos se da una curiosidad ornamental y es que las maniguetas


van debajo de los mismos, llevando además en su parte superior unos pequeños
ángeles desnudos de bronce que están de pié y apoyados en el paso.

39
EL LIBERAL, Sevilla, 31 de Marzo de 1904.

250
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

- Novedades o cambios posteriores: Este paso se reforma en 1978 en


profundidad, sustituyéndole las maderas y reproduciendo las anteriores, labor que
corrió a cargo de Manuel Guzmán Bejarano, no cambiando su fisionomía40.

• Paso de La Piedad, (el Baratillo)

- Datos cronológicos y autoría:


Después de que la hermandad del
Baratillo utilizara para procesionar en
1905 y 1906 el paso del Triunfo de la
Santa Cruz de la hermandad del Santo
Entierro, en 1908 estrena por fin uno
propio, ejecutado por Emilio Pizarro, de
líneas rectas con tableros tallados en
Fig. 31.- Foto del paso en 1937
estilo barroco y dorado41.

- Motivos estructurales: Llevaba en sus esquinas unas volutas a modo de


columnas.

- Descripción y motivos ornamentales: Su talla no era excesivamente virtuosa


como podemos apreciar en la documentación gráfica, aunque el conjunto
compositivo daba buen resultado, no disponiendo de decoración escultórica, tan
sólo unos medallones corporativos en los centros de cada tablero, llevando además
respiraderos de caoba del mismo estilo y “de cajón”.

40
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p.328.
41
CORREO DE ANDALUCIA, EL: Publicado el 20 de marzo de 1959. Sevilla.

251
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

• Paso para Jesús de la Salud, (los Gitanos)

- Datos cronológicos: El 10
de abril de 1914 esta cofradía
estrena unas andas para el
primer paso, (fig. 32).

- Motivos estructurales:
Posee unas volutas de
inspiración naturalista en los
Fig. 32.- Paso de 1914 ángulos del canasto.
- Descripción y motivos
ornamentales: Se trata de una
composición de líneas rectas con tableros a modo de casetones en sus centros,
doradas, de escaso nivel artístico. Iba decorado con unas molduras en la parte
superior de hojas de acanto, llevando el escudo de la corporación en el centro de
cada plano del mismo.
Los respiraderos, -que no los llevó en sus primeros años-, eran de forma
rectangular con motivos decorativos de origen vegetal muy elementales.
Asimismo, lo componían unos dinámicos candelabros de guardabrisas de
estilo barroco.

252
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

• Paso de la Sagrada Cena

- Datos cronológicos y autoría: El


28 de marzo de 1920 estrena las actuales
andas del misterio de estilo corintio de
madera oscura, ejecutadas por Salvador
Domínguez, (fig. 33).

- Descripción y motivos
ornamentales: La composición del
canasto es de casetones, divididos entre
ellos por pequeñas columnas de orden
corintio. Su decoración, en ocasiones de
impronta barroca, se inspira en motivos
vegetales, frutas, flores y hojas de acanto.
No lleva estatuaria para decorar el paso.
Fig. 33.- El misterio de la Cena en la
actualidad
Por otra parte los respiraderos son
de traza dinámica y talla basada en los
mismos elementos decorativos del canasto, incluyendo las maniguetas. Les rodean
motivos tallados relacionados con elementos pasionistas.

- Novedades o cambios posteriores: Se le añadieron en 1924 los relieves


antiguos del taller de Pedro Roldán, que son los que lleva actualmente, y que iban
situados en los centros de los casetones42.

Años más tarde, en 1966, estrena los faroles de madera dorada para el
mismo paso, ejecutados por Luis Jiménez Espinosa, que son los que lleva hoy
día43.

42
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 73.
43
CORREO DE ANDALUCÍA, El. Programa de Semana Santa. Sevilla 1952.

253
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

• Paso de Los Estudiantes

- Datos cronológicos y autoría: La


hermandad de Los Estudiantes efectúa en 1926
su primera salida procesional con este nuevo
paso en el que va el magnífico crucificado de la
Buena Muerte, obra de Juan de Mesa. Las andas
las había realizado el tallista Oliveras, siendo la
labor de ebanistería de los talleres de Vicente
Serradilla. La parihuela medía 2,21x3,72x1,47
m. (fig.34).

- Motivos estructurales: Pilastras de


capitel de orden corintio.
Fig. 34.- El paso en la actualidad
- Descripción y motivos ornamentales: El
paso tiene un canasto dividido en casetones
separados por las mencionadas columnas, y tallados cada uno de ellos con
distintos motivos vegetales a juego con los respiraderos. En la parte superior hay
una moldura de hojas de acanto. Los respiraderos son “de cajón” divididos en
casetones, decorados con hojas de acanto, lazos tallados y algún pequeño motivo
arquitectónico.

- Novedades o cambios posteriores: En su segunda salida procesional


estrena cuatro faroles llamados mudéjares situados en las esquinas del paso,
donados por su hermano D. Tomás García García, terminándose además la talla
completamente.

254
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

En 1931 será cuando estrene los evangelistas en caoba de las esquinas,


realizados por Antonio Bidón, (fig. 36) y en 1938 se sustituirían los faroles
mencionados por dos sobrios hachones en las esquinas44.

Las esculturas de Bidón encajan bien en la composición, siendo las cuatro


muy hieráticas y poco virtuosas en su talla, al igual que todo el conjunto.

Importante eclecticismo el que se aúna en este paso. Por un lado, la


impronta clásica de las pilastras de orden corintio, la ornamentación de tintes
barrocos, y una estatuaria que recuerda a las figuras del neogótico, como las del
retablo de los Luises comentado en el capítulo tercero, (fig. 35).

Fig. 35.- Figura


en el retablo
neogótico de los
Luises

Fig. 36.- Figura


en el paso de
Los Estudiantes

• Paso del Cristo de las Aguas

- Datos cronológicos y autoría: En 1929 estrenan unas nuevas andas que serían
talladas por Guillermo Muñiz en madera de caoba, (fig. 37).

44
LA UNIÓN, -periódico-. Sevilla, 5 de abril de 1936.

255
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

- Motivos estructurales: Columnas de orden


corintio dividen el canasto en casetones.
- Descripción y motivos ornamentales: En
el apartado ornamental el paso estaba decorado
en sus centros con motivos de orfebrería, -en el
frontal se situaba el escudo corporativo-, así
como evangelistas en las esquinas.

Los casetones se decoran con motivos de


inspiración vegetal, principalmente hojas de
Fig. 37.- Paso de 1929
acanto.

• Paso de Jesús de la Presentación al Pueblo, (San Benito)

- Datos cronológicos: Esta cofradía se


reorganiza en 1921, -no salía desde 1868-,
volviendo a procesionar el Martes Santo
desde la parroquia de San Benito tras setenta
y cuatro años. Lo hace con dos pasos.

En el primero iba el Cristo sin


acompañamiento, (fig. 38), y en el segundo
la Virgen bajo palio. Los años siguientes
decaería nuevamente para volver a salir en

Fig. 38.- El paso en una foto de 1922 1928. Ese año volvería a salir sólo con el
paso de Misterio con todas las figuras45.

45
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 200.

256
Capítulo VII 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

- Motivos estructurales: Columnas clásicas de capitel corintio.

- Descripción y motivos ornamentales: Curioso cuando menos este paso de


1922, sobre todo por la utilización de elementos renacentista. Pequeñas portadas
con frontones clásicos dividen en secciones todo el canasto, además de columnas
entre las cuales se intercalan pequeños signos pasionistas o corporativos. Los
candelabros de guardabrisas son barrocos y muy dinámicos, contrastando algo con
el resto de la composición, aunque sabemos que en 1938 estrena unos nuevos de
guardabrisas46.

46
CORREO DE ANDALUCÍA, El: Publicado el 30 de marzo de 1938. Sevilla.

257
CAPÍTULO VIII

________________________________
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

VIII
1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

VIII.1.- Plenitud ornamental en los pasos

Terminada la Guerra Civil en 1939, la década de los cuarenta resultará


fundamental para el resurgimiento artístico de los pasos.

Entre 1940 y 1950 habrá contrastes en lo que a calidad se refiere,


realizándose obras interesantes junto con otras bastante pobres. Parece lógico si
tenemos en cuenta la crisis económica existente en el país tras la Guerra Civil, la
cual perjudicó la tesorería de la mayoría de las corporaciones.

Tras superar esa primera década después, en los años cincuenta se disparan
los encargos, debido en gran medida al gran número de cofradías que se fundan en
esta etapa. Son numerosos los tallistas y escultores imagineros que tendrán un
protagonismo especial y que aumentarán su aportación a estas composiciones en
esta fase de crecimiento.

Básicamente son los mismos autores de la etapa anterior los que trabajan en
la realización de los pasos, aunque digno de mención en estos tiempos es Antonio
Castillo Lastrucci, (1882-1967), que será el protagonista principal de la

259
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

recuperación de las cofradías tras los numerosos objetos perdidos. Su intervención


fue muy productiva a nivel de imaginería, pero no sólo para recuperar las
imágenes desaparecidas, sino por la producción de su taller, en el que se
desarrollaban trabajos de estatuaria y pasos.

Junto con él, aparecen auténticos “gigantes” de la talla procesional, algunos


ya conocidos, como Rafael Fernández del Toro, Francisco Ruiz Rodríguez,
Manuel Guzmán Bejarano, Antonio Martín o Antonio Vega, que llevarán los
pasos a un nivel ornamental pocas veces visto con anterioridad.

Sin duda, durante la segunda mitad del siglo XX, la perfección y el


virtuosismo en la talla se eleva a su máxima expresión, llegándose a un
refinamiento ornamental enorme, aunque en lo que a composición se refiere, se
mantienen los tradicionales recursos.

VII.1.1.- Estilos artísticos, (1939-2000)

En líneas generales, la evolución es continua respecto a la etapa anterior, ya


que los modelos siguen creciendo a nivel ornamental, produciéndose el momento
de mayor plenitud artística en los pasos procesionales sevillanos.

Podemos destacar una idea potenciada en estos años, y es que los


diseñadores buscan sorprender investigando modelos y recursos no utilizados con
anterioridad, eso sí, siempre partiendo de los modelos antiguos de retablo, sobre
todo barrocos.

Podemos decir que hay “novedades”, pero siempre a partir de cauces


antiguos.

260
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

En cuanto a los estilos artísticos encontramos los mismos utilizados con


anterioridad, además de un modelo “neorrenacentista”:

• Estilo neobarroco

Se consolida como el predilecto de las cofradías, continuando su evolución


respecto a la etapa anterior y enriqueciéndose mucho a nivel ornamental,
potenciándose elementos no vistos anteriormente, como el estípite.

• Estilo neogótico

Igual que en caso anterior, se caracteriza por su enriquecimiento


ornamental, aumentando la utilización de recursos no utilizados anteriormente.

• Estilo historicista

Época de contrastes, que comienza con pasos bastante mediocres,


evolucionando después a una mayor riqueza, aumentando el uso de recursos
decorativos de impronta clásica.

• Estilo neorrenacentista

Encuadramos en esta modalidad pasos que poseen una impronta basada en


elementos renacentistas. Debemos tener presente, que no podemos hablar de un
“renacimiento pleno”, ya que el contenido ecléctico-historicista sigue presente.
Sin embargo, hemos preferido encuadrar unos pasos en este estilo por marcar
diferencias con el ámbito historicista.

261
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

Es por ello por lo que no podemos hablar de un estilo relacionado con


algún modelo de retablo, sino de composiciones de aires clásicos de las que se
desprende una impronta renacentista.

262
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

VIII.2.- El paso neobarroco, (1939-2000)

De nuevo se impondrá drásticamente como el preferido por las


hermandades, hasta el punto de que son muy escasas las producciones de otros
estilos en comparación con este.

Los autores abren el abanico de la creatividad, por lo que dentro de la


composición típica de paso barroco, encontramos motivos ornamentales que antes
no se habían utilizado, sobresaliendo la potenciación de elementos arquitectónicos
como capillas, bóvedas y una devoción mayor por la escultura figurativa que había
estado algo estancada en los últimos años.

Rafael Fernández del Toro, Antonio Girón y Antonio Martín, llevan a cabo
obras importantes, además de otros que comienzan una extensa producción, como
José Gallego, Antonio Vega o Manuel Guzmán Bejarano, discípulo del gran
maestro Luis Jiménez Espinosa y a la postre autor que resultará decisivo por su
extensa productividad.

En el caso de la estatuaria, todos los grandes de la primera mitad de siglo


participan en la decoración de los pasos procesionales, muy especialmente Castillo
Lastrucci, Sebastián Santos Rojas, Luis Ortega Bru y Francisco Buiza Fernández,
que en la mayoría de los casos seguirán influenciados por el gusto barroco del
XVII.

También destacan en el último tercio del siglo otros imagineros como José
Antonio Navarro Arteaga o Mariano Sánchez del Pino, incluso en el apartado de
diseño, como Antonio Dubé de Luque, que colabora especialmente con Manuel
Guzmán Bejarano.

A continuación, enumeramos los autores y sus obras en estos años.

263
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

VIII.2.1.- Rafael Fernández del Toro

Sus pasos se basan en modelos anteriores, aportándoles mayor riqueza


ornamental.

• Paso para el Cristo de la Expiración, (El Museo)

- Datos cronológicos y autoría: Este autor lleva a cabo un trabajo para el


crucificado de la Expiración del Museo en 1940, paso que hoy día conservamos
gracias al dibujo de Francisco Jiménez Román, (fig. 1).

Fig. 1.- El paso en la actualidad

- Motivos estructurales: La talla naturalista de inspiración vegetal actúa


como soporte de la obra.
- Descripción y motivos ornamentales: Es de estilo barroco con líneas
entrantes en el canasto, con perfiles y bombo, centrando cada cara una cartela de
temática pasionista y rematando las esquinas con los evangelistas de Francisco

264
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

Antonio Gijón del XVII. Se completa con una pareja de ángeles mancebos
policromados de buena factura, situados en las esquinas de José García Roldán.
Está iluminado por seis candelabros de guardabrisas tallados y dorados al igual
que el paso, dorado realizado por Manuel Fuentes1.
El conjunto evoca el canon clásico barroco como el paso del Gran Poder de
1688, encajando perfectamente con los importantes evangelistas de Gijón que
poseían, de gran dinamismo, formando un todo imponente al servicio del
crucificado del XVI que lleva en la escena superior.
La talla ornamental se basa en el tradicional lenguaje de hojas de acanto,
frutas y bandas conmemorativas, siendo coronada la delantera y la trasera del
canasto con una corona real que va sobre escudos corporativos.

Destacan asimismo los respiraderos del mismo


estilo, que utiliza recursos decorativos similares a la
canastilla, sobresaliendo muchas frutas talladas y
policromadas, hojas de acanto, algunas “de cartílago”,
llamando la atención por su dinamismo, así como los
símbolos pasionistas que lleva tallados y policromados en
sus centros.
Fig. 2.- Detalle del paso
En las esquinas aparecen cuatro sobrias
maniguetas de forma cónica y color madera oscura.

- Novedades o cambios posteriores: Los valiosos ángeles mancebos


policromados son de Francisco Buiza tallados con gran acierto en 1972, (fig. 2),
evocando el dinamismo del modelo barroco con un magnífico tratamiento de los
ropajes estofados y el estudio del natural, mientras que las cartelas de color oscuro
representan escenas la Oración en el Huerto, la Coronación de Espinas, la Calle de
la Amargura y el Traslado al Sepulcro, siendo su autor José García Torres.

1
CORREO DE ANDALUCÍA, El. Programa de Semana Santa. Sevilla 1940.

265
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

• Paso para la Piedad, (el Baratillo)

- Datos cronológicos: Por


parte del mismo autor se estrenan
las andas del grupo de la Piedad
del Baratillo en 1944, (fig 3).
- Motivos estructurales: La
misma talla naturalista de
inspiración vegetal actúa como
soporte de la obra.
- Descripción y motivos
Fig. 3.- El paso en la actualidad
ornamentales: Su estilo es
parecido al descrito
anteriormente, basado en el paso del Gran Poder, de profunda y calada talla
barroca, con líneas onduladas, perfiles y bombo en el canasto, entrantes en los que
se incluyen grandes guardabrisas, cartelas en las esquinas, y crestería que remata
el canasto junto con jarras de madera doradas en los laterales del mismo estilo,
además de dos angelitos de estilo barroco en cada lateral.

Los respiraderos son de igual impronta barroca, de gran dinamismo,


utilizando motivos ornamentales semejantes, de hojas de acanto, de “cartílago”,
frutas y motivos vegetales. Completan la obra cuatro candelabros en las esquinas
de la misma traza. La ebanistería era de los talleres de Juan Pérez Calvo y la talla
de Rafael Fernández del Toro; el dorado de Antonio Sánchez2.

2
CORREO DE ANDALUCÍA, El. Programa de Semana Santa. Sevilla 1944. // CARRERO
RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 241.

266
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

• Paso de Jesús ante Anás

- Datos cronológicos: Se
estrena en 1945, (fig. 4).
- Motivos estructurales:
No posee columnas. La misma
talla naturalista de inspiración
vegetal actúa como soporte de
la obra.

Fig. 4.- El paso en la actualidad

- Descripción y motivos ornamentales: El canasto es abombado, teniendo


como base decorativa hojas de acanto y motivos vegetales; su carpintería es de los
talleres de Juan Pérez Calvo; sus relieves son de Ortega Bru, (fig. 5), y el dorado
de Antonio Sánchez González. Manuel Echegoyán sacará de punto los ángeles de
buena factura pertenecientes a la antigua cofradía, para colocarlos en la parte
central del canasto a juego con los que van en las esquinas delante de los
candelabros, y a los que Juan Carrero considera obras de Francisco A. Gijón por
su similitud con los del Gran Poder3.

Destacar que los mencionados relieves serán la


primera aportación de este tipo que hará Ortega Bru para la
Semana Santa de Sevilla, a la postre uno de los imagineros
de la segunda mitad de siglo más importantes. En este
caso, el lenguaje plástico que apreciamos en las cartelas,
ofrece una estética barroca a nivel compositivo y
morfológico. Fig. 5.- Cartela

3
CORREO DE ANDALUCÍA, El. Programa de Semana Santa.. Sevilla 1945.

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Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

La talla es la que en los talleres se denomina de pellejina, por su poco


calado.

• Paso para Jesús de la Salud, (Los Gitanos)

- Datos cronológicos: En 1946 se


estrena este paso, (fig. 6).
- Motivos estructurales: La talla de
inspiración vegetal actúa como soporte de
la obra.
- Descripción y motivos
ornamentales: De estilo rocalla con espejos
al uso, perfiles y bombo no muy acentuado
en el canasto, asimismo realizados en el
taller de Juan Pérez Calvo y dorado por

Fig. 6.- El paso en una foto de los


Antonio Sánchez. En las esquinas lleva
años 70
unos ángeles mancebos sedentes de
aceptable factura que portan viriles en las
manos, siendo ejecutados por Fernández Andes. Posteriormente, pasó a la
hermandad del Cristo de Confalón de Écija4.
Tanto el canasto como los respiraderos llevaban en su talla zonas lisas que
alternaba con elementos barrocos de inspiración vegetal, rocalla, pequeños
recursos arquitectónicos como frisos o volutas, además de una corona de la que
nacía una cortina tallada, la cual enmarcaba un escudo corporativo en cada uno de
los centros del canasto.
Llevaba cuatro candelabros en las esquinas grandes y otros dos más pequeños,
uno en cada lateral, del mismo estilo barroco.

4
CORREO DE ANDALUCÍA, El. Programa de Semana Santa. Sevilla 1946.

268
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

- Novedades o cambios posteriores: En 1968 se dora por Manuel Peralta, que


además quitó los espejos que lo decoraban, alterando considerablemente la
estética del mismo5.

• Paso para el Traslado al Sepulcro, (Santa Marta)

- Datos cronológicos: Esta


cofradía, debido a las enormes
dimensiones del paso se marcha en
1952 de San Bartolomé a San
Andrés6. Aun así tiene que realizar
obras en la puerta para salir en
1953; el paso lo diseña Guillermo
Bonilla y fue dorado por Antonio
Sánchez González, (fig 7).
- Motivos estructurales: No
lleva columnas.
- Descripción y motivos
ornamentales: llevando unos
Fig. 7.- El paso en la actualidad ángeles en las esquinas de buena
factura, realizados por Luis Ortega
Bru, que portan unos faroles plateados de Fernando Marmolejo. Medía
2,4x5,29x1,427.
Este paso de buena ejecución, lo complementan seis cartelas del canasto que
hizo el mencionado escultor, y en ellas se muestran escenas de distintos pasajes de
la vida de Santa Marta como las del dragón de Provenza y la Resurrección de

5
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 483.
6
Ibidem, p. 133.
7
CORREO DE ANDALUCÍA, El. Programa de Semana Santa. Sevilla 1953.

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Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

Lázaro. En el frontal va el escudo de la cofradía y en la trasera emblemas de la


parroquia de San Andrés y San Bartolomé.
En el canasto, predominan lo tradicionales motivos vegetales, como las hojas
de acanto, siendo su perfil de líneas dinámicas y bombo; los respiraderos y
maniguetas tienen la misma línea estética.
- Novedades o cambios posteriores: Sería dorado de nuevo en 1982 y
restaurado en 1999; el policromado de los ángeles de Ortega Bru corrió a cargo de
Luis Sánchez Jiménez8.

• Paso para La Sentencia, (Macarena)

Fig. 8.- Paso de Ntro. Padre Jesús de la Sentencia

8
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 135.

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Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

- Datos cronológicos: Sin duda una gran realización estrenada el 8 de abril de


1955, por la hermandad de la Macarena, diseñada por Juan Pérez Calvo y
ejecutada por Rafael Fernández del Toro y dorada por Antonio Sánchez.
- Motivos estructurales: No posee
columnas ni elementos de soporte.
- Descripción y motivos ornamentales: de
estilo barroco y líneas rectas, con
candelabros de guardabrisas y respiraderos
del mismo estilo; llevaba en su estreno
relieves de calidad del color de la madera, -
policromados posteriormente-, ángeles
Fig. 9.- Detalle de canasto y respiraderos
mancebos y pequeñas imágenes de los
evangelistas estofados de buena ejecución,
obras que realizara Ortega Bru.
Estos ángeles son complementados por templetes a modo de relicarios que
llevan en sus manos, trabajo de orfebrería de Fernando Marmolejo Camargo, el
cual los hizo en plata representando a San Gil, San Basilio, San José y Santo
Domingo de Guzmán9. Los acertados relieves muestran escenas del Nacimiento,
la Adoración de los Reyes, Entrada de Jesús en Jerusalén, Calle Amargura,
Primera Caída de Jesús, Mercaderes del templo, Milagro de Lázaro, Prendimiento
de Jesús, Azotes, Exaltación, Entierro y Resurrección.
La obra es muy completa, valorándose como una de las mejores del autor,
predominando numerosos motivos ornamentales, como la hoja de acanto, de
cartílago, elementos vegetales, conchas, así como motivos arquitectónicos,
alternando la talla con zonas lisas sin tallar, con un profuso calado de la madera.
Los respiraderos son semejantes a nivel de talla, del mismo estilo barroco
dinámico, al igual que los candelabros de guardabrisas y las maniguetas.

9
CORREO DE ANDALUCÍA, El. Programa de Semana Santa.Sevilla 1955.

271
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

- Novedades o cambios posteriores: En 1959 se policroman por parte de


Rafael Barbero los relieves que hiciera Ortega Bru10, y el 24 de marzo de 1978 se
estrena un nuevo dorado, labor que corrió a cargo de Luis Sánchez Jiménez11.

VIII.2.2.- Francisco Ruiz Rodríguez

Su producción también se basa en modelos anteriores, aunque sobresale el


paso de la Soledad de San Lorenzo, obra de enorme originalidad y riqueza
decorativa.

• Paso de Jesús de las Tres Caídas, (San Isidoro)

- Datos cronológicos y autoría:


Francisco Ruiz Rodríguez, (1888-1961)
apodado “Currito el dorador”, realiza para
la cofradía de San Isidoro en 1941 unas
nuevas andas para el paso de Cristo, (fig.
10).
- Motivos estructurales: No lleva
columnas ni elementos que sirvan de
soporte.
- Descripción y motivos
ornamentales: El canasto es de líneas
onduladas con perfiles y bombo. Las
Fig. 10.- El paso en la actualidad cartelas las realizó Blas Rodríguez,
policromadas y estofadas con escenas de la
Pasión. Ángeles querubines decoran la parte superior, los dos delanteros algo
mayores son del siglo XVIII de autor desconocido y proceden de unos cuadros de

10
CORREO DE ANDALUCÍA, El: Publicado el 12 de febrero de 1959. Sevilla.
11
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 454.

272
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

Tortolero situados en la parroquia de San Isidoro. El resto los sacó el tallista de


punto a partir de estos modelos Manuel Vergara; los candelabros de guardabrisa,
llamados “de palma” proceden del paso anterior. Los respiraderos son de igual
traza.
Como hemos comentado, las cartelas son pinturas interesantes de Blas
Rodríguez, que dedicó parte de su obra a la pintura mural, con motivos relativos a
la Transfiguración, la Resurrección de Lázaro, la Multiplicación de panes y peces,
el Milagro del Ciego de Jericó, las Bodas de Caná, el Milagro del Centurión, la
Barca Milagrosa y el Milagro del paralítico. Destacan las esquinas debido a que
sobresalen del canasto cuatro de estas escenas.
Los respiraderos poseen la misma línea dinámica del resto del conjunto e
iguales recursos decorativos, presidiendo sus centros motivos heráldicos
relacionados con la corporación.

• Paso para la Soledad, (San Lorenzo)

Fig. 11.- Fotografía del paso en la


actualidad

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Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

- Datos cronológicos: La Soledad de San Lorenzo el 23 de marzo de 1951


estrena las interesantes andas diseñadas en 1949 por el pintor Santiago Martínez
(1890-1979), realizadas con gran acierto en el taller de Francisco Ruiz Rodríguez,
que también las doraría, (fig 11).
- Motivos estructurales: No posee columnas ni elementos de soporte.
- Descripción y motivos ornamentales: Son de original estilo neobarroco,
de líneas rectas, con perfiles y bombo en el canasto y con respiraderos de igual
estilo, siendo su costo de 250.000 pesetas12.
En su ornamentación se mezclan hojas de acanto con azucenas estofadas en
su color de pureza y tulipanes matizados gracias al dorado pulido; esta talla la
hicieron Rivette y Francisco Carrero, mientras que el dorado lo llevó a cabo
Manuel Calvo y la ebanistería Bailac Ceniza. Los bustos tallados de María
Salomé, María de Cleofás, los Santos Varones, Evangelistas, profeta Isaías y
Jeremías, los acometió Manuel Vergara, siendo estos de buena factura,
repartiéndose entre los respiraderos y el canasto. Unos ángeles mancebos de buena
calidad van en las esquinas, concretamente entre los candelabros, siendo los
delanteros del altar de su capilla y los segundos sacados de punto por Manuel
Vergara. En la zona frontal del canasto, en una capilla, va una imagen de una
Asunción, que es propiedad del diseñador y que todos los años la cede para la
salida.
Se ilumina por candelería y por candelabros en las esquinas del mismo
estilo barroco, cuatro grandes con ocho brazos y dos más pequeños en los
laterales, así como uno en cada esquina de cinco pequeños brazos. Costó en su
momento doscientas cincuenta mil pesetas y medía 2,26x3,84x1,4513.
Una de las peculiaridades de este paso son los laúdes que corren en rojos
frisos que rodean tanto el canasto como los respiraderos, en las cuales aparecen
talladas con letras doradas unos escritos bíblicos en latín, dando la sensación de
pequeño sobrecanasto la situada en la canastilla, provocando pequeñas molduras

12
Web oficial de la Hermandad de la Soledad de San Lorenzo de Sevilla:
www.hermandaddelasoledad.org/home.htm
13
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 602.

274
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

sobre la que se asienta la parte superior donde se representará la escena. Esta


inscripción latina alusiva a la Virgen, tomada de versículos y estrofas de las
Sagradas Escrituras y dividida en capitulum (C), estrofa (E) e himno (H),
podemos traducirla de la siguiente forma: (C) “¿A quién te compararé o con quién
te asemejaré, hija de Jerusalén? ¿A quién te igualaré yo para consolarte, Virgen,
hija de Sión? Inmenso como el mar es tu quebranto”. (E) “¿A dónde se fue tu
amado? ¡Oh la más hermosa de las mujeres! ¿A dónde se marchó tu Querido, y le
buscamos contigo?”. (H) “Sin embargo, la Virgen, más intrépida que los mismos
mártires, se mantiene de pie; por un nuevo milagro, no muere, oh Madre, entre
tantas causas de muerte, y crucificada por tan atroces dolores. Reina de los
Mártires ruega por nosotros. Tú permaneciste junto a la Cruz de Jesús”.
Los respiraderos, (fig. 12), muy
interesantes en su concepción, se dividen en
casetones en los que hay una medalla con un
retrato de los anteriormente comentados,
presidiendo su zona central una capilla donde
vemos una de las Marías talladas, situándose
unas borlas a modo de colgaduras, las cuales
apreciamos en las maniguetas.
- Novedades o cambios posteriores: En
1960 se estrenarían unos nuevos candelabros en
plata de ley realizados por Manuel Seco Velasco
Fig. 12.- Detalle del respiradero y, años después cuatro jarras en plata de ley para
el paso realizadas por el mismo autor14.

14
CORREO DE ANDALUCÍA, El: Publicado el 30 de agosto de 1959. Sevilla.

275
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

VIII.2.3.- Antonio Girón

Su único paso es el realizado para el cristo de la Conversión, (Montserrat).

• Paso para el Cristo de la Conversión, (Montserrat)

Fig. 13.- Frontal del paso

- Datos cronológicos y autoría: El 7 de abril de 1944 aparecen por vez


primera en la calle las andas talladas por Antonio Girón y doradas por Alfonso
González, para el paso de la Conversión; el proyecto era de Rafael Lafarque y su
estilo neobarroco, (fig. 13).
- Motivos estructurales: No aparecen columnas ni elementos de soporte.
- Descripción y motivos ornamentales: De líneas onduladas, perfiles y
pronunciado bombo en el canasto, siendo los respiraderos de una traza semejante.
Iba iluminado por candelabros de guardabrisas realizados por su diseñador,

276
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

llevando además unos relieves color tierra flanquedos en las esquinas por unos
arcángeles, -dos en cada esquina- y doce ángeles que complementan el paso.
Los trabajos de carpintería los acometió José Huertas Balbuena y toda la
obra escultórica es de Rafael Lafarque, siendo los ángeles y arcángeles de
mediana calidad, aunque complementan la composición adecuadamente; los
relieves pasionistas, de línea realista y buen nivel, representan las escenas del
encuentro con la Verónica, Oración en el Huerto, una escena del Calvario y el
Prendimiento, así como los de las esquinas, -de menor tamaño pero igual estilo-,
en el que aparecen los cuatro evangelista15.
La composición del canasto se complementa por la talla en la que
predominan hojas de acanto habituales del barroco, siendo estas “de cartílago” en
muchas ocasiones, sobre todo en los respiraderos. Se incorporan a la talla
numerosas frutas y flores policromadas.
- Novedades o cambios posteriores: Este paso de Misterio estrenará en
1975 nuevos candelabros de guardabrisas “de piña”, de madera tallada y dorada,
obra ejecutada por Girón y dorada por Antonio Sánchez González16.
En la Semana Santa de 2005, aparecen restaurados todas las pequeñas
figuras de pequeño formato que decoran el paso, acertada labor que realizó el
imaginero sevillano Fernando Murciano.

VIII.2.4.- Antonio Castillo Lastrucci

Fue un escultor muy prolífico en cuanto a imaginería, aunque tan sólo


realizó un paso para la Semana Santa de Sevilla.

15
Web de la Hermandad de Montserrat: http://montserrat.hermandades-de-sevilla.org/home3.htm
16
CORREO DE ANDALUCÍA, El. Programa de Semana Santa. Sevilla 1974.

277
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

• Paso del Prendimiento, (Los Panaderos)

- Datos cronológicos y autoría: Gran precursor de la recuperación


patrimonial de las cofradías, realizará este importante trabajo, muy interesante por
ser íntegro de su producción.

Fig. 14.- Foto reciente del paso

El estreno se produce en 1945, siendo todo nuevo en el paso de Misterio:


Imágenes, andas de hechuras rectas, con perfiles y bombo, respiraderos de estilo
barroco, ángeles y candelabros de guardabrisas, todo de igual línea estética17, (fig.
14).
- Motivos estructurales: No lleva columnas ni elementos que sirvan de
soporte.
- Descripción y motivos ornamentales: El canasto, a nivel compositivo, es
de los denominados de “pirámide invertida” o “de maceta”, abriéndose de menor a

17
CORREO DE ANDALUCÍA, El. Programa de Semana Santa. Sevilla 1945.

278
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

mayor tamaño, en el que predomina a nivel de talla las hojas de acanto, así como
frutas y flores.
Estos motivos forman el marco en el que
se encuadran las cartelas policromadas de
Lastrucci, (fig. 15), seis en total, -dos en cada
lateral y una en el frontal y en la trasera, en las
que aparecen escenas pasionistas, de calidad
aceptable propias del realismo académico del
autor. En ellas vemos las escenas de Oración en
el Huerto, El Prendimiento, la Sentencia, la Calle
de la Amargura, el Calvario y la Piedad. Fue
dorado y restaurado por los talleres de Herrera y
Fig. 15.- Cartela del paso
Feria en 197118.

En los respiraderos predomina la hoja de acanto “de cartílago”,


encontrando asimismo en sus centros pequeños textos bíblicos policromados sobre
medallones, siendo toda su morfología de gran dinamismo.

VIII.2.5.- Francisco Posadas

Tan sólo existe un paso realizado por este autor.

• Paso de la Entrada en Jerusalén

- Datos cronológicos y autoría: En 1945 se ejecuta el actual paso de la


Entrada en Jerusalén, que sustituye al de Manuel Casana, siendo su talla de
Francisco Posadas, (1885-1950), y el dorado de Alfonso González19, (fig. 16).

18
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 252
19
COLÓN PERALES, Pablo: “Etapa contemporánea: siglo XX”, en El Cristo del Amor y su
Archicofradía. Sevilla 1998. p. 232.

279
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

- Motivos estructurales: No lleva columnas ni elementos que sirvan de


soporte.

Fig. 16.- Fotografía del paso en la actualidad

- Descripción y motivos ornamentales: Es de estilo neobarroco, con bombo


y entradas en el canasto, provocando formas que sobresalen en las esquinas y en el
centro de cada lado; en estos salientes lleva varias cartelas policromadas en las
que figuran las representaciones de la Tempestad Calmada, la Profecía de Simeón,
Jesús entre los Doctores de la Iglesia, Nacimiento, Adoración a los Reyes Magos,
la Sagrada Familia, la Huída a Egipto y el Lavatorio.
El lenguaje ornamental empleado es el habitual de las hojas de acanto y
motivos vegetales, además de llevar en cada uno de sus centros una medalla
policromada con algún motivo heráldico.

280
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

Los respiraderos, dorados y de grandes proporciones, poseen riqueza


cromática en los motivos ornamentales empleados como, hojas de acanto, frutas y
hojas, al igual que las maniguetas y candelabros de guardabrisas.
- Novedades o cambios posteriores: En 1970 se doran las andas por el taller
de Luis Sánchez20.

VIII.2.6.- Manuel Guerra

Tan sólo existe documentación de un paso realizado por este autor.

• Paso para Jesús ante Caifás, (San Gonzalo)

- Datos cronológicos y
autoría: Para el Misterio de esta
hermandad en 1947 realiza Manuel
Guerra un paso, diseñado por Pires
Azcárraga, (fig. 17). En el año 2000
fue sustituido por otra realización
de Manuel Guzmán Bejarano.

Fig. 17.- El paso en su primera salida de 1947,


- Motivos estructurales:
aún sin terminar Columnas salomónicas.
- Descripción y motivos
ornamentales: La traza es de estilo barroco, con bombo y entrantes en el canasto,
llamando poderosamente la atención la columna salomónica como principal
elemento ornamental en la composición, así como los ángeles mancebos que
flanquean cartelas en los laterales, en el frontal y en la trasera; en las esquinas hay
uno de factura semejante. Los respiraderos eran también de estilo barroco,

20
CORREO DE ANDALUCÍA, El. Programa de Semana Santa. Sevilla 1945.

281
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

predominando la hoja de acanto dinámica como elemento principal, así como


algún elemento vegetal y un motivo heráldico en cada plano del paso.
A nivel de talla no era muy virtuoso, pero compositivamente daba un buen
resultado estético, caracterizándose además por tener un elevado número de
guardabrisas para iluminarlo.

Fig. 18.- El paso en una fotografía en torno a 1990, tras las


reformas y poco antes de ser sustituido

- Novedades o cambios posteriores: Este paso sufrió hasta que se sustituyó


a principios del siglo XXI numerosas modificaciones: En primer lugar se
eliminaron las columnas salomónicas que lo rodeaban y los ángeles que
flanqueaban las cartelas, debido a sus dimensiones, sustituyéndolos por motivos
ornamentales. También se sustituyeron en los entrantes del canasto unas pequeñas
jarras por candelabros de guardabrisas y se eliminaron los respiraderos de madera
tallada, quedando en su lugar unos de tela de poco mérito con una moldura dorada
y tallada que realizó Guzmán Bejarano. Estrenará en 1969 candelabros de
guardabrisas del mismo autor, dorados por Manuel Calvo21, (fig. 18).

21
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 140.

282
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

VIII.2.7.- José Gallego

Tan sólo existe documentación de un paso realizado por este autor

• Paso de la Presentación al Pueblo, (San Benito)

- Datos cronológicos: Tras


unos años en los que el paso salía
con maderas lisas aparece por fin
tallado en estilo neobarroco y
dorado. Se había estrenado en 1953,
y su dorado correspondió a los
talleres de Herrera y Feria. Después
de sustituirse en 1967 pasó ser
Fig. 19.- Fotografía reciente del paso
propiedad de la hermandad de Santa
Marta de Jerez de la Frontera22,
(fig. 19).
- Motivos estructurales: No poseía columnas, debido a que la misma talla
naturalista de inspiración vegetal actúa como soporte de la obra.
- Descripción y motivos ornamentales: Su composición era abombada, sin
entrantes, basada en los tradicionales recursos decorativos vegetales, además de
poseer en las esquinas cabezas talladas y policromadas de evangelistas y ocho
cartelas repartidas por todo el canasto, de estilo barroco y mediana calidad.
También los respiraderos, del mismo lenguaje estético, contenían en cada plano un
motivo pintado de tema pasionista, además de cuatro maniguetas de color madera
oscura.

22
CORREO DE ANDALUCÍA, El. Programa de Semana Santa. Sevilla 1952.

283
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

VIII.2.8.- Manuel Guzmán Bejarano

Quizás nos encontremos ante el autor más prolífico del siglo XX en lo que
se refiere a talla procesional, no sólo por su aportación en Sevilla sino en todo el
territorio nacional.
La mayoría de sus pasos se basan en modelos anteriores, pero aportándoles
una mejoría considerable en la ornamentación y en la talla, incluyendo elementos
poco utilizados con anterioridad.
La producción de Manuel Guzmán Bejarano, (1921-2004), en Sevilla es la
siguiente:

• Paso para el Cristo de las Almas, (Los Javieres)

- Datos cronológicos: Sale por


primera vez en 1957 con este paso
neobarroco, (fig. 20).
- Motivos estructurales: No tiene.
- Descripción y motivos
ornamentales: Es de entradas sinuosas,
perfiles y bombo en su canasto, siendo
muy ricos y bellos los respiraderos que
están tallados en idéntico estilo.
Numerosos recursos ornamentales se
aprecian en la talla dorada, como motivos
vegetales, perleados, alternándose con

Fig. 20.- Fotografía del paso en la


estos pequeños elementos arquitectónicos,
actualidad así como pequeñas heráldicas talladas en
sus centros.

284
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

La iluminación se basa en cuatro barrocos y esbeltos candelabros de


guardabrisas en las esquinas, otros dos en el centro de los costados y otros tres en
los entrantes. Se completa la obra con ángeles querubines y mancebos, así como
unas pequeñas representaciones de cabezas de apóstoles, todo realizado por Rafael
Barbero Medina, siendo estos de buena factura. El dorado fue de González y
Ortiz23.
Un incidente destacado que afecta a estas andas acontece durante un ensayo
de los costaleros en diciembre de 1976, ya que una furgoneta perdió los frenos
inesperadamente y chocó contra el paso, sin causar daños personales pero sí serios
desperfecto materiales. Debido a este incidente en la Semana Santa de 1977 salen
sin respiraderos y con una parihuela nueva.
En 1979 estrena el dorado del canasto realizado por Antonio Sánchez; los
respiraderos ese año van sin dorar.

• Paso para Jesús de las Tres Caídas, (Triana)

Fig. 21.- Fotografía del paso en la actualidad

23
CORREO DE ANDALUCÍA, El. Programa de Semana Santa. Sevilla 1956.

285
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

- Datos cronológicos: El 27 de marzo de 1970 son novedad en la hermandad


de la Esperanza de Triana las nuevas andas para el primer paso; ese año aún salen
sin terminar.
- Motivos estructurales: Aunque no tiene columnas, los pequeños ángeles
incluidos en el canasto actúan como “soporte” de la composición.
- Descripción y motivos ornamentales: son de estilo barroco, dorado con
líneas sinuosas, perfiles y bombo en el canasto, llevando candelabros de
guardabrisas con el dinamismo propio del barroco; esta gran obra mide
2,35x5,30x1,52, (fig. 21).
Es una de las obras más portentosas de este autor para la Semana Santa, por
la riqueza de talla en toda la composición, sobresaliendo la elaboración detallada
de los elementos ornamentales de tipo vegetal, como la hoja de acanto, frutas,
hojas, y otros elementos que evocan motivos naturales, además de jarras talladas y
otros pequeños motivos arquitectónicos.
A todo esto se añaden ángeles mancebos policromados, al igual que los
respiraderos del mismo estilo, en los que también aparecen cabezas de ángeles
policromadas.
- Novedades o cambios posteriores: Posteriormente se dora el paso de
Misterio en 1973 por Antonio Sánchez; lleva cartelas en las que se aprecian
adornos y alegorías de la hermandad en plata de ley, de los talleres de Villarreal,
estrenados ese mismo año24.

24
CORREO DE ANDALUCÍA, El. Programa de Semana Santa. Sevilla 1973.

286
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

• Paso para el Cristo de la Providencia, (Los Servitas)

- Datos cronológicos: La
hermandad de Los Servitas en 1970, tras
su reorganización, hace Estación al
Convento de la Paz con un paso.
Esta corporación en 1936, había
perdido en el incendio de la Iglesia de
San Marcos numerosos enseres, entre
ellos, los pasos25, por lo que en 1971
estrena un nuevo canasto barroco,
(fig.22).
- Motivos estructurales: No tiene
columnas ni elementos de soporte.

Fig. 22.- Delantera del paso


- Descripción y motivos
ornamentales: Se trata de una virtuosa
composición de maderas oscuras y
líneas onduladas, realizando Antonio Vega las cartelas; el mismo autor hace los
cuatro hachones para iluminar que llevaba26.
En la zona superior aparecía una peana de gran tamaño, recubierta de
planchas imitando a carey y apliques de orfebrería.
- Novedades o cambios posteriores: Este paso sería renovado por el
ebanista Francisco Bailac Cenizo que construye un nuevo canasto en 1978,
labrado en ricas maderas de color oscuro siguiendo la traza del que tenían. Las
nuevas cartelas son de Antonio Vega y el paso mide 2,26x4,20x1,50. Un año
después se harían los nuevos respiraderos de estilo barroco rocalla, de Manuel

25
Boletín de las Cofradías de Sevilla. Sevilla, septiembre 1970.
26
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 567.

287
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

Guzmán Bejarano. Unos nuevos faroles iluminarían el paso, diseñados por


Antonio Dubé de Luque y ejecutados por Manuel Ríos Navarro27.
En 1983 se terminan las andas del Misterio, ya que Manuel Guzmán
Bejarano le talla las esquinas, apareciendo además unas acertadas figuras de los
profetas, - Isaías, Daniel, Jeremías y Ezequiel-, querubines y cartelas con escenas
de la Virgen, -Visitación, la Anunciación, la Asunción y la Inmaculada-, cuyos
modelos eran de Ortega Bru y Francisco Buiza, pero finalizadas por Manuel
Escamilla28.
En 1983 Manuel Ríos Navarro labra una nueva peana de alpaca plateada,
según traza de impronta renacentista de Antonio Dubé de Luque, que es la que
lleva actualmente.

• Paso para el Cristo de la Humildad y Paciencia, (Sagrada Cena)

- Datos cronológicos: El 7 de abril


de 1974 vuelve a salir el Cristo de la
Humildad, que no lo hacía desde 1937.
Lo hace sobre un canasto de Manuel
Guzmán Bejarano, (fig. 23).
- Motivos estructurales: No posee
columnas ni elementos de soporte.
- Descripción y motivos
ornamentales: Es de estilo barroco, con
entrantes dinámicos, perfiles y bombo en
el canasto. Los faroles de las esquinas son
cuatro de los que iban en la trasera del
Fig. 23- El paso, tras su conclusión
en 1993 palio de esta corporación. Estos serían

27
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 567.
28
CORREO DE ANDALUCÍA, El: Publicado el 20 de marzo de 1969. Sevilla.

288
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

enriquecidos en 1979 con uno, realizando esta labor Manuel de los Ríos.
Los faldones y respiraderos eran de terciopelo morado con partes de malla
para el respirar de los costaleros.
La talla intercala zonas sin tallar con otros recursos de inspiración natural,
predominando la hoja de acanto, de cartílago, conchas y otros elementos
naturalistas.
- Novedades o cambios posteriores: En 1993 se completaría esta obra con
unos respiraderos y sobrecanasto tallados por Juan Mayorga en el que se aprecian
motivos vegetales, conchas, frutas, todo de gran sobriedad, así como maniguetas a
juego, sostenidas por ángeles de madera oscura. Apliques de plata, con cabezas de
ángeles y motivos pasionistas lo completaban, así como cuatro evangelistas en las
esquinas de Darío Fernández y dos pequeños ángeles en cada lateral.
También se eliminan los candelabros comentados, añadiéndose unos nuevos
de orfebrería y talla. Toda esta reforma se hizo bajo el diseño artístico de Antonio
Dubé de Luque.

• Paso para el Cristo de la Expiración, (El Cachorro)

- Datos cronológicos:
El 12 de abril de 1976 la
hermandad del Cachorro no
salió por la lluvia, pero se
estrenaban las andas
realizadas por Manuel
Guzmán Bejarano, diseñadas
por el autor en estilo barroco,
(fig. 24).
Fig. 24- El paso en una foto reciente

289
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

- Motivos estructurales: No tiene columnas ni elementos de soporte.


- Descripción y motivos ornamentales: La arquitectura del paso es irregular;
los respiraderos son del mismo estilo y cartelas de plata de ley con escenas de la
Pasión, - Jesús Atado a la Columna, Coronación de Espinas, Oración en el Huerto
y el misterio de la Piedad-, modeladas por Francisco García Madrid y Rafael
Barbero pero labradas por orfebrería Triana. Estos también hicieron en el mismo
metal los profetas Jeremías, Isaías, Daniel y Elías, así como los ángeles mancebos
que sujetan los faroles de las esquinas y del centro del canasto, cuya orfebrería era
de Juan Borrero.
En las esquinas y el centro del canasto van unos faroles y tras ellos unos
candelabros de guardabrisas. El dorado completo lo hizo Antonio Sánchez
González.
Llaman poderosamente la atención la compenetración de motivos vegetales
con los arquitectónicos, y el uso poco habitual de la madera tallada y dorada con
la plata labrada.
- Novedades o cambios posteriores: En 1998 Manuel Verdugo volvió a
dorarlo y Antonio Sánchez los respiraderos.
En 1997 se incorporaron nuevos ángeles en las esquinas de buena factura
ejecutados por José Antonio Navarro Arteaga.
También intervino Juan Borrero que hizo en 1974 las miniaturas, los
relieves y los faroles. En los relieves de los respiraderos podemos ver el Beso de
Judas, las Caídas de Jesús, El Calvario, El Descendimiento, El Entierro de Jesús y
su Resurrección.

290
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

• Paso para el Cristo de la Sed

- Datos cronológicos: El diseño


correspondió a Antonio Dubé de Luque
mientras que la talla la hizo Guzmán
Bejarano en 1990, acometiendo su
dorado Manuel Calvo, (fig. 25).
- Motivos estructurales: No
lleva columnas ni elementos de soporte.
- Descripción y motivos
ornamentales: Su perfil es abombado,
con pronunciados entrantes y una
barroca, calada y densa talla
policromada de hojas de acanto,
motivos policromados de vegetales y
frutas, siendo los respiraderos
igualmente barrocos y muy dinámicos.
Fig. 25.- El paso en la actualidad En lo que se refiere a elementos
ornamentales contiene unos ángeles
querubines policromados de buena
calidad que portan atributos pasionarios realizados en 1990 por Manuel Carmona
Rodríguez. Las pinturas de las cartelas, -en esmalte- fueron realizadas por
Alfonso Magüesín y muestran escenas de la Sed, la Aparición de Jesús a la
Samaritana y Moisés haciendo brotar agua de las rocas29.
Asimismo contiene elementos arquitectónicos, llamando poderosamente la
atención la parte superior de las esquinas que sirven de base a los dinámicos
candelabros de guardabrisas.

29
RODA PEÑA, José: “El paso procesional. Talla, dorado y escultura decorativa…, p.76.

291
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

Los respiraderos llevan los mismos recursos ornamentales ya mencionados,


sobresaliendo las numerosas cabezas de ángeles policromados, la hoja de acanto,
pequeños motivos arquitectónicos y pinturas pasionistas de escaso tamaño que se
reparten por la talla.
Este paso es una muestra del acentuado virtuosismo barroco al que se llega
en esta última etapa de la talla procesional, ya que las formas se hacen
especialmente dinámicas y barrocas, así como la concepción general del canasto.

VIII.2.9.- Antonio Martín Fernández

Junto con Guzmán Bejarano, Antonio Martín, (1927), es el tallista más


prolífico en este siglo, aportando gran cantidad de novedades a la talla. Sin duda,
es el autor más original en cuanto a la concepción del paso barroco, llevando el
ideal retablístico a las andas en su máxima expresión.
Aunque gran parte de su producción se basa en modelos antiguos, la
mayoría de sus obras se enriquecen con numerosos elementos no vistos
anteriormente, conjugando a la perfección una infinidad de recursos como el
estípite, la columna salomónica, frisos, cornisas, molduras, además de una extensa
figuración y una original forma de adaptar los elementos al paso.

• Paso para el Cautivo, (Tiro de Línea)

- Datos cronológicos: La hermandad del Tiro de Línea en 1958 sale por


primera vez con este paso neobarroco de Antonio Martín, (fig. 26).
- Motivos estructurales: No posee columnas ni elementos de soporte.

292
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

- Descripción y motivos ornamentales: Posee perfiles y bombo en su


canasto, portando cuatro faroles de talla en sus esquinas que hoy posee una
hermandad de la Algaba30.
El dorado lo terminó en ese mismo
año los talleres de Luis Sánchez y los
ángeles que lo completan eran de
Francisco Buiza, los cuales son un
ejemplo perfecto que demuestra el
dominio de este autor en esculturas de este
tipo de formato, encajando la impronta
barroca del autor no sólo en su
composición sino en un exquisito
tratamiento del estofado de las telas y
encarnadura31.
La línea estilística de este paso es
Fig. 26.- El paso actualmente una buena referencia para apreciar el
virtuosismo al que se llega en la talla de
este tipo de obras, ya que su lenguaje plástico es muy barroco con grandes
entradas y salientes en el canasto, así como un acentuado recargamiento
ornamental basado en hojas de acanto, motivo vegetales y frutas, u otros motivos
como perleados o pequeños elementos arquitectónicos. Destacan los seis
arcángeles de Buiza ya mencionados,- en las esquinas y laterales-; estos fueron
restaurados en 1999 por Juan Manuel Muñoz Yules.
Asimismo, por el canasto se reparten ángeles mancebos, pequeñas cabezas
de ángeles y en los centros de cada plano escudos relacionados con la corporación,
todo de buena categoría artística.
Los respiraderos son también de extraordinario dinamismo y virtuosismo
decorativo, utilizando los mismos elementos para su decoración.

30
CORREO DE ANDALUCÍA, El. Programa de Semana Santa. Sevilla 1958.
31
CORREO DE ANDALUCÍA, EL: Publicado el 21 de marzo de 1959. Sevilla.

293
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

- Novedades o cambios posteriores: Los faroles comentados con


anterioridad se sustituyeron por candelabros de guardabrisas en 1959, del mismo
tallista que hiciera los primeros. Antonio Díaz dora el paso en 1981, siendo
reformados los candelabros. Manuel Domínguez ejecuta para adornar el canasto
nuevas cartelas con escenas pasionistas y cuatro evangelistas para las esquinas de
madera. El dorado actual se debe a Antonio Sánchez González en 197432.

• Paso para la Presentación al Pueblo, (San Benito)

- Datos cronológicos: En 1967 esta cofradía procesiona por primera vez en


la historia con tres pasos, estrenando unas magníficas andas barrocas para su
misterio, (fig. 27). La ebanistería era de Francisco Bailac.

Fig. 27.- Foto reciente del paso

32
PASTOR TORRES, Álvaro: “[…] Nuestro Padre Jesús Cautivo en el Abandono de sus discípulos, […]”,
en Misterios de Sevilla. Sevilla 2003, p. 347.

294
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

- Motivos estructurales: En el canasto


no lleva columnas ni elementos de soporte,
mientras que los respiraderos contienen unas
pilastras de orden corintio, fuste acanalado, y
decoración con motivos ornamentales como la
rocalla.
- Descripción y motivos ornamentales:
A nivel estilístico lo encuadramos en el estilo
barroco rococó o churriguera, con entrantes,
perfiles, bombo en el canasto, y candelabros Fig. 28.- Cartela del bautismo
de guardabrisas. Los ángeles que lo adornan
son de Francisco Buiza, del más puro estilo
neobarroco y gran calidad de talla y policromía. Medía su parihuela
2,20x4,90x1,50 m. El dorado corrió a cargo de Herrera y Feria33.
Los relieves y cartelas que lo decoran son del mismo Buiza, apareciendo las
escenas del Nacimiento de Jesús, la Huída a Egipto, el Bautismo de Cristo y a
Jesús entre los Doctores, (fig. 28).
En toda la talla, de enorme virtuosismo, encontramos numerosos elementos
de inspiración vegetal, como flores policromadas o doradas, emperlados, además
de objetos alusivos a la pasión, como los clavos de Cristo, la corona de espinas o
las escaleras para el descendimiento.
- Novedades o cambios posteriores: Los apóstoles que lo decoran son de
Berlanga Ávila, uno del discípulo del maestro Francisco Buiza, ejecutados en
1985.

33
CORREO DE ANDALUCÍA, El. Programa de Semana Santa. Sevilla 1967.

295
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

• Paso para el Cristo de la Sangre, (San Benito)

- Datos cronológicos: al igual


que el paso de la Presentación al
Pueblo, se estrena paso en 1967 para
el otro Titular de la cofradía de San
Benito, (fig. 29).
- Motivos estructurales: No
posee columnas ni elementos de
soporte.
- Descripción y motivos
ornamentales: De estilo barroco y líneas
valientes, enriquecido con pequeñas
capillas en su respiradero en las que
aparecen Santos, además de numerosos
ángeles querubines repartidos por toda la
composición y cuatro magníficos
evangelistas de Buiza en los entrantes
Fig. 29.- Paso en la actualidad del canasto, (fig. 30), de la misma
impronta barroca del paso, llamando
especialmente la atención el arcángel
eucarístico situado en la parte superior del frontal, del mismo autor; todos poseen una
exquisita policromía, encontrándose además el paso iluminado por seis candelabros de
guardabrisas del mismo estilo.
A esta obra figurativa hay que añadirle una exquisita talla de motivos de
inspiración naturalista, como flores y hojas de acanto, además de emperlados,
motivos litúrgicos tallados y policromados y pequeños detalles arquitectónicos.

296
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

- Novedades o cambios posteriores: Su talla y dorado


fue terminado el año siguiente, corriendo este último a cargo
de Luis Sánchez Jiménez. Asimismo, destacar que Francisco
Buiza realiza en 1981 ocho nuevos ángeles y querubines
para completar esta composición.

Fig. 30.- Arcángel

• Paso de Jesús de las Penas, (La Estrella)

Esta corporación
encarga unas nuevas andas
en 1978 aunque no sale
hasta 1980. La ebanistería
corrió a cargo de Bailac
Cenizo, siendo la talla de
Antonio Martín en madera
de pino y estilo
neobarroco34, (fig. 31 y
Fig. 31.- Paso de Jesús de las Penas
32).

- Motivos estructurales: Columnas salomónicas de capitel corintio.


- Descripción y motivos ornamentales: El autor vuelve a exponer su gusto
por la exhaustiva y virtuosa talla ornamental, en una ejecución de perfiles y
bombo en el canasto, aunando a la perfección motivos vegetales inspirados en la
naturaleza con otros elementos arquitectónicos, como la columna salomónica que
complementa las capillas de las esquinas en las que van incluidas relieves,

34
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 85

297
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

llamando la atención unos pequeños arcángeles en los entrantes, en número de


ocho.
Todos los relieves, figuras decorativas, como evangelistas y ángeles, son
policromados y de buena calidad, con marcado acento barroco, realizados por
Ortega Bru, que el año de su estreno dejó sin terminar lo que respecta a la
policromía35. Las escenas de las cartelas son: Expulsión de los mercaderes,

Fig. 32.- Canasto del paso

Nacimiento de Jesús, Calvario, Exaltación, el Descendimiento, la Piedad y la


Resurrección.
En los respiraderos, del mismo estilo a nivel de talla ornamental, podemos
ver representaciones de los Profetas, los Apóstoles, San Cristóbal, San Sebastián,
San Juan Bautista y el Resucitado.
- Novedades o cambios posteriores: En 1981 se terminaría el trabajo con la
intervención en los estofados de los ángeles por parte de Calvo Camacho36.

• Paso para Jesús Despojado

- Datos cronológicos: En 1975 la de Jesús Despojado estrena un nuevo paso


de madera de Guinea construido por Francisco Bailac Cenizo y tallado por

35
ABC, diario. Sevilla, 30 de marzo de 1980.
36
ABC, diario. Sevilla, 14 de abril de 1981.

298
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

Antonio Martín, con cuatro guardabrisas que fueron de Montserrat y cuatro


ángeles mancebos que pertenecían a las Siete Palabras37, (fig. 33).
- Motivos estructurales: No lleva
columnas ni elementos de soporte.
- Descripción y motivos
ornamentales: Es de estilo neobarroco y
tallado en madera de cedro con zonas
doradas, algo poco común, llevando
además candelabros de guardabrisas
dorados que realizara Manuel Romero
Palomo en 1974.
En los respiraderos hay cuatro
capillas en las que aparecen
policromadas las imágenes de San Gil,
San Judas Tadeo, Santiago y San Juan
Fig. 33.- El paso, poco después
de su estreno de Dios.
Su concepción es muy
arquitectónica, de perfil recto y casetones, con entrantes en los que aparecen
elementos ornamentales inspirados en el mundo vegetal, predominando la hoja de
acanto, llamando particularmente la atención los doce guardabrisas que iluminan
el canasto. Además, complementa en los frentes del canasto motivos heráldicos
relacionados con la corporación.
- Novedades o cambios posteriores: Unas figuras de Santos de buena
calidad y estilo barroco aparecen dentro de unas peculiares hornacinas doradas
situadas dentro de las esquinas, realizadas por José Antonio Navarro Arteaga en
torno al año 1990. Estos Santos son San Antonio Mª Claret, San Julián, San
Bartolomé y San Marcos, todos ellos alusivos a templos relacionados
históricamente con la cofradía.

37
Programa de Semana Santa “EL CORREO DE ANDALUCÍA”: El Correo de Andalucía. Sevilla 1974.

299
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

• Paso de Jesús atado a la columna, (las Cigarreras)

- Datos cronológicos: En 1973 la


hermandad de las Cigarreras estrena un
magnífico paso para el Cristo, de pino
de Flandes, realizado en los talleres de
ebanistería de Francisco Bailac Cenizo,
mientras que el diseño y tallado corrió
a cargo del artista Antonio Martín, (fig.
34).
- Motivos estructurales:
Columnas salomónicas y estípites
soportan toda la composición del
canasto.
- Descripción y motivos
ornamentales: Es de estilo neobarroco y
Fig. 34.- El paso en la actualidad
líneas rectas, aunque con entrantes,
perfiles y casetones en el canasto,
candelabros de guardabrisas en las esquinas y centro de los costados.
Su concepción es muy retablística y sobre todo arquitectónica, debido a su
diseño basado en motivos de este tipo, con frisos, columnas salomónicas y
estípites, volutas, además de la habitual decoración de hojas de acanto y otros
motivos vegetales. Numerosas cabezas de ángeles policromados lo decoran,
cabezas de los evangelistas, así como dos arcángeles en cada esquina, también
policromados. Todas ellas son de buena factura, impregnadas del barroquismo que
contiene la composición.

300
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

- Novedades o cambios posteriores: El paso se


terminaría en 1976, tras dorarse por los talleres de
Antonio Díaz. Buiza policromó las imágenes que
complementan las andas38.

Fig. 35.- Detalle del canasto

• Paso del Cristo de la Salud, (Los Gitanos)

- Datos cronológicos: El 6 de
abril de 1979, Viernes de Dolores se
bendice el nuevo paso de Jesús de la
Salud, prestado anualmente por su
cofrade Manuel Carrera, (fig. 36).
- Motivos estructurales:
Columnas de estilo salomónico,
enriquecidas con motivos vegetales,
de capitel corintio.
- Descripción y motivos
ornamentales: Es de estilo
neobarroco, líneas onduladas, bombo,
perfiles en el canasto y respiraderos
Fig. 36.- Paso del Señor de la Salud
del mismo estilo. Se decora con
figuras policromadas de evangelistas,
(fig. 37), cartelas, ocho ángeles mancebos situados en los entrantes y querubines,
todo acometido por Francisco Buiza. Su talla y diseño corrió a cargo de Antonio

38
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 303.

301
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

Martín y el dorado por Luis Sánchez, siendo la carpintería de Francisco Bailac


Cenizo. Los faroles de las esquinas son de Manuel de los Ríos.
Los relieves contienen escenas del Nacimiento del Señor, del Bautismo, del
Traslado al Sepulcro y de la Resurrección, mientras que, a lo largo del canasto
aparecen tallas de San Agustín, Santa Clara, Santo Tomás de Aquino, San Pascual
Bailón, San Buenaventura, San Antonio, San Pío X y Santa Escolástica, todas
ellas de Francisco Buiza.

Fig. 37.- Detalle del canasto


Fig. 38.- Capilla del canasto

Podemos decir que es una de las obras cumbres del autor, tanto por su
composición y diseño como por la riqueza y virtuosismo de su talla. Vuelve a
utilizar la unión de elementos arquitectónicos, -columnas, frisos, volutas…- con
otros de tipo vegetal, como hojas de acanto, conchas y perleados, además de llevar
esculturas de tamaño académico de gran calidad, realizadas por el mencionado
Buiza; también se integran objetos alusivos a la pasión.
En sus cuatro capillas principales vemos escenas de la vida de Cristo en
madera policromada, (fig. 38), encontrándose estas flanqueadas con otras dos
pequeñas capillas de diferentes Santos. Lleva además numerosos ángeles
mancebos distribuidos en el paso, incluido los respiraderos, que junto con las
maniguetas utiliza los mismos recursos dinámicos que el barroco canasto.

302
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

VII.2.10.- Antonio Vega Sánchez

Antonio Vega, (1928), basa la mayoría de sus composiciones en antiguos


modelos, pero aportando una gran riqueza ornamental a sus composiciones, que a
continuación enumeramos.

• Paso para Jesús de las Penas, (San Vicente)

Fig. 39.- Frontal del paso

- Datos cronológicos: Después de haber salido algunos años con enseres de


escasa categoría esta cofradía estrena en 1959 un nuevo y magnífico canasto y
moldurón tallado, (fig. 39). Sin duda se inspira en el antiguo modelo barroco del
paso del Gran Poder de Ruiz Gijón, siendo en este caso la ebanistería de talleres
de Carlos Alba, bajo proyecto de Castillo Lastrucci y la talla de Antonio Vega; el
dorado con oro fino de San Luis lo acometió Luis Sánchez Jiménez. Los faroles de

303
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

plata son de Cayetano González en su diseño, y fueron ejecutados por Manuel


Villarreal Fernández. En los entrantes del canasto van ocho bombonas, -grandes
guardabrisas-, para la iluminación, y las esquinas van sedentes los cuatro
evangelistas, dieciocho ángeles entre las cartelas y el frontal del paso; también
otros diez de mayor tamaño entre la base de los faroles y la de la cruz siendo todos
buenas tallas de Rafael Barbero Medina39.
- Motivos estructurales: No posee columnas ni elementos de soporte.
- Descripción y motivos ornamentales: Todo el conjunto es de estilo
neobarroco, siendo la canastilla líneas onduladas, perfiles y bombo, con ocho
entrantes en los que se incluye una gran tulipa y salientes rematados en el centro
de cada uno con cuatro cartelas de la vida de Cristo.
Las escenas que representan los relieves son la Natividad, la Entrada en
Jerusalén, la Oración en el Huerto y el Expolio.
La trabajada talla de este paso se basa en tradicionales motivos vegetales,
como la hoja de acanto, perleados, flores y distintos tipos de hojas dejando por su
recargamiento ornamental muy pocas zonas sin trabajar.
Los respiraderos son bordados, los cuales nacen de una moldura tallada de
madera dorada, aunque aparecen figuras con cabezas, manos y pies de marfil, así
como escudos corporativos bordados.
- Novedades o cambios posteriores: Sería en 1962 cuando se completa la
obra con unos faldones, proyecto de Cayetano González y bordados por sobrinos
de José Caro bajo la dirección de Esperanza Elena Caro40.

39
CORREO DE ANDALUCÍA, El. Programa de Semana Santa. Sevilla 1959.//CARRERO RODRÍGUEZ,
Juan: Anales…, p. 150.
40
Ibidem.

304
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

• Paso para Jesús de la Salud, (La Candelaria)

- Datos cronológicos: Esta cofradía


estrena en 1964 un nuevo paso realizado por
el tallista Antonio Vega Sánchez, (fig. 40).
- Motivos estructurales: No lleva
columnas ni elementos de soporte.
- Descripción y motivos ornamentales:
De estilo barroco-rocalla, con perfiles y
entrantes en el canasto, inspirado en su
composición en el modelo del Gran Poder de
Ruiz Gijón. Los relieves son del mismo
autor, no siendo de excesiva calidad aunque
complementan bien la composición del
Fig. 40.- Fotografía reciente
del paso canasto. El dorado lo hizo Luis Sánchez
Jiménez, a pesar de que se estrenó en 1998
uno nuevo realizándose en los talleres de Manuel Calvo.
Las cartelas muestran representaciones de los milagros realizados por Jesús. Se
aprecian evangelistas tallados por Luis Álvarez Duarte en 1998.
- Novedades o cambios posteriores: Este mismo autor realiza el ángel que
soporta la caída de la cruz en 1995.

• Paso para Jesús de la Vera Cruz

- Datos cronológicos: Es en 1966 cuando la Vera Cruz estrena el paso


actual de madera de abebay de Guinea, tallado por Antonio Vega Sánchez, (fig.
41).

305
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

- Motivos estructurales: No lleva columnas


ni elementos de soporte.
- Descripción y motivos ornamentales: Es
de estilo neobarroco, con perfiles, bombo y
entrantes en el canasto, llevando figuras en las
esquinas a escala reducida de santos relacionados
con la Exaltación de la Cruz. También aparece
con cuatro hachones.
Los motivos que se incluyen en la talla del
canasto son de inspiración vegetal, teniendo como

Fig. 41.- Paso de 1966


base decorativa la hoja de acanto, aunque se
alterna con pequeños motivos arquitectónicos.
- Novedades o cambios posteriores: En
1973 sufre una pequeña modificación ya que en los huecos de los entrantes se
colocan unos faroles de plata de ley de la Viuda de Villarreal.

VII.2.11.- José Martínez

Las composiciones de José Martínez, (1916-1980) se caracterizan por su


barroquismo, además de su simplicidad compositiva y ornamental, sin hacer
ninguna aportación destacada.

306
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

• Paso para Jesús de la Redención

- Datos cronológicos: Se trata de un


canasto tallado por José Martínez en 1959 y
sustituido en 2003, (fig. 42).
- Motivos estructurales: No lleva
columnas ni elementos estructurales.
- Descripción y motivos ornamentales:
Castillo Lastrucci le talla los candelabros de
guardabrisas y unos pequeños arcángeles en
las esquinas de mediana calidad; posee
además apliques de orfebrería de Fernando
Marmolejo, de los cuales cuatro de ellos
Fig. 42.- Fotografía del paso antes de representaban escenas pasionistas.
ser sustituido

Se trata de una composición de líneas rectas, dividido en casetones tallados


con motivos vegetales de inspiración barroca, situándose en las esquinas unas
jarras doradas. Junto a ellas aparecían los mencionados arcángeles policromados
que se dejaron de incluir años más tarde. Los respiraderos se basaban a nivel
ornamental en los mismos elementos, principalmente hojas de acanto, en los que
se incluían escudos corporativos, aunque estos fueron sustituidos en 1992 por
unos de mayor calidad y de la misma línea estilística, diseñados por Antonio Dubé
de Luque y realizados por Francisco Bailac González, a los que se añadieron
cabezas de ángeles de Miguel Ángel Pérez Fernández41.
Las cartelas labradas del paso en metal plateado, representaban el escudo
de la hermandad, San Fernando, San Lucas y la escena de la Presentación al
Pueblo.

41
JIMÉNEZ SANPEDRO, Rafael: “[…] cofradía de nazarenos de Nuestro Padre Jesús de la Redención en
el Beso de Judas, […]”, en Misterios de Sevilla, Sevilla 2003, p. 233.

307
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

• Paso para Jesús Resucitado

- Datos cronológicos: En su primera


salida de 1973 estrena un paso de estilo
neobarroco, (fig. 43).
- Motivos estructurales: No lleva
columnas ni elementos de soporte.
- Descripción y motivos
ornamentales: De líneas rectas y perfiles, y
bombo en el canasto, así como jarras en las
esquinas, respiraderos y guardabrisas a
juego con el conjunto, obra de José
Martínez.
Fig. 43.- Fotografía del paso en la A nivel compositivo recuerda al
actualidad
modelo de paso realizado para el Cachorro
de 1899, encontrándose su talla basada en los tradicionales motivos decorativos
barrocos, como la hoja de acanto, frutas, hojas y otros motivos inspirados en el
mundo vegetal.
Apreciamos tallados en el paso el escudo de la cofradía, Santo Tomás,
Jesús reunido con los apóstoles y la Transfiguración del Señor. En las esquinas
aparecen motivos con la Inmaculada, san Juan Bautista de la Salle, Noli me
Tangere y San Pedro en su barca.
Este paso sería dorado por Luis Sánchez Jiménez en 197942.

42
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 610-611.

308
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

• Paso para Jesús Nazareno, (La O)

- Datos cronológicos: Se trata de las


andas del paso actual, estrenadas el 8 de
abril de 1977, de estilo neoarroco con
perfiles y bombo en el canasto, (fig. 44).
- Motivos estructurales: La misma
talla naturalista de inspiración vegetal
actúa como soporte de la obra,
integrándose en la misma elementos
arquitectónicos.

Fig. 44.- Paso en la actualidad


- Descripción y motivos
ornamentales: Su composición es
piramidal, basándose su trabajada talla en
hojas de acanto, flores, perleados, pequeños motivos arquitectónicos, cabezas de
ángeles y otros elementos de inspiración vegetal. Los respiraderos utilizan los
mismos recursos formales, apareciendo en sus centros escudos relacionados con la
corporación.
Tanto el diseño como el trabajo de taller eran de José Martínez, mientras
que los faroles de metal dorado los realizaron Juan Borrero y Antonio Pérez. Los
evangelistas policromados son de Rafael Barbero, y de José Martínez las cartelas.
En las esquinas se sitúan unas hornacinas en las que se encuentran unos
evangelistas sedentes policromados ejecutados por Rafael Barbero, de aceptable
nivel y de estilo barroco; asimismo José Martínez hizo las cartelas policromadas
de mediana factura con escenas pasionistas alusivas a otras hermandades del
barrio de Triana.
- Novedades o cambios posteriores: Aparecieron totalmente doradas en
1979, trabajo que hizo Antonio Sánchez González y, junto a las cartelas, unos
ángeles querubines de Rafael Barbero.

309
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

VIII.2.12.- Juan Mayorga

Tan sólo existe una obra de Juan Mayorga, (1936) en la Semana Santa
sevillana.

• Paso para el Sagrado Decreto, (La Trinidad)

Fig. 45.- Paso en la actualidad

- Datos cronológicos y autoría: Realizado en 1995, su diseño es de Antonio


Dubé de Luque. La carpintería corrió a cargo de Francisco Bailac, tallándolo Juan
Mayorga y siendo dorado por Mariano Rojo. Fue complementado por unos
respiraderos-faldones bordados realizados en el taller de Fernández y Enríquez,
(fig. 45).
- Motivos estructurales: No lleva columnas ni elementos de soporte
- Descripción y motivos ornamentales: Se trata de una composición muy
recargada a nivel ornamental, de trazo rectilíneo, con doce ingletes dobles y
cuatros simples; sus esquinas se truncan hacia el interior en cuarto de
circunferencia, donde se sitúa el arranque del candelabro. La línea de alzado del
canasto es barroca, curvas que va abriéndose en la parte superior. La cornisa

310
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

superior la compone ricas molduras que combinan partes lisas con tallas de hojas
de acanto, llegándose en toda la composición a un virtuosismo ornamental
extremadamente recargado.
Un total de seis candelabros iluminan el paso, cuatro en las esquinas con
diez luces cada uno y dos en los laterales con cinco. Son de poca altura y dos
brazos del mismo descienden fuera del canasto. Los laterales también son de poca
altura y corren sobre la canastilla. Las cazoletas y las coronillas de los
guardabrisas son de plata cincelada.
Los respiraderos se componen de una moldura, de la que parten motivos
tallados en las esquinas, se alternan con espacios con telas y malla dorada.

VIII.2.13.- Francisco Verdugo

Se trata de la primera obra de este joven autor, nacido en 1976, para la


Semana Santa de Sevilla.

• Paso para Jesús de la Paz, (Carmen Doloroso)

- Datos cronológicos y autoría:


Diseñado por Francisco Reyes Villadiego en
1996, siendo la carpintería de Manuel
Caballero Farfán y tallado por Francisco José
Verdugo entre el año 2000 y 2004. El dorado
se empezó en 2007 por parte del taller de Abel
Velarde y Justiniano Sánchez, (fig. 46).
- Motivos estructurales: No lleva
columnas ni elementos de soporte.
- Descripción y motivos ornamentales:
El paso es de estilo neobarroco, aunque su
Fig. 46.- Frontal del paso

311
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

línea no es excesivamente dinámica, basándose su composición en casetones


divididos por motivos ornamentales salientes de hojas de acanto y otros recursos
ornamentales de tipo vegetal. Todos los pequeños complementos barrocos que
lleva en lo que a imaginería se refiere, los ha realizado José María Leal para la
Semana Santa de 2008, dándole más vida al canasto. Los candelabros de
guardabrisas son del mismo estilo barroco.

VIII.2.14.- Obras conjuntas

Por la intervención de tres o más tallistas, incluimos los siguientes pasos en


este apartado.

• Paso para Jesús de la Victoria

- Datos cronológicos: Es una obra


conjunta de varios maestros, ya que fue
diseñado por Antonio Jiménez Isorna y
tallado por José Martínez, Antonio Vega
Sánchez y Antonio Martín Fernández en
1950, (fig. 47).
- Motivos estructurales: No lleva
columnas ni elementos de soporte.
- Descripción y motivos
ornamentales: Los relieves de las cartelas
son de 1957 de Antonio Gavira Alba y
muestran la Calle de la Amargura, la
Fig. 47.- Foto reciente del paso

312
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

Humildad y Paciencia, la Crucifixión y el Traslado al Sepulcro, (fig. 53), siendo


estas de buena calidad y policromadas.
El conjunto se basa en motivos inspirados en la naturaleza, prevaleciendo la
hoja de acanto como base de la talla además de otros elementos extraídos del
mundo vegetal, como flores y frutas, sobresaliendo sin duda los ángeles
policromados de las esquinas realizados por Francisco Buiza, los cuales parecen
sostener los dinámicos candelabros de guardabrisas, estos de la misma morfología
que todo el conjunto.
Completan la composición otros dos candelabros del mismo tipo pero de
menor tamaño en los laterales, así como jarras a juego.
Los respiraderos contienen los mismos recursos decorativos que el resto de
la composición, siendo toda la obra dorara por última vez a finales de la década de
los ochenta por Antonio Sánchez.

• Paso para Monte-Sion

- Datos cronológicos: En 1955 se estrenan unas andas diseñadas por


Herrera y Feria. El canasto es en su totalidad de Guzmán Bejarano,-siendo su
primera aportación para la Semana santa de Sevilla-, pero los respiraderos del
mismo estilo fueron ejecutados por Antonio Vega Sánchez y Antonio Martín43,
(fig. 48).
- Motivos estructurales: No lleva columnas ni elementos de soporte.

43
Web oficial de la Hermandad de Monte-Sion: http://www.hermandad-de-monte-
sion.org/procesio/semsanta/sem-mis.htm

313
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

- Descripción y motivos ornamentales:


de estilo neobarroco, líneas onduladas, siendo
su composición de estructura piramidal, perfil
ondulada, y justas proporciones, algo que
puede tener que ver el reducido tamaño de la
puerta y de la capilla de su propiedad. En su
talla decorativa, encontramos casi todos los
formalismos tradicionales barrocos, como la
hoja de acanto, frutas, hojas “de cartílago” y
otros motivos de tipo vegetal.
En cada centro del canasto lleva un
relieve, sobre los que además, en el caso de la
trasera y el frontal, se asienta una corona
tallada y policromada. En la base de cada uno
Fig. 48.- El paso de Monte-Sion de ellos se sitúan también dos cabezas de
en la calle
ángeles. Las escenas que se aprecian en estas
tarjetas son la Coronación de Espinas, las
Columnas y Azotes, la Calle de la Amargura y el Calvario, realizadas
acertadamente por Buiza, mientras que los evangelistas policromados de estilo
barroco son de Ricardo Rivera, incluidos en los huecos de las esquinas. Los
respiraderos y sus seis candelabros de guardabrisas son en su talla semejantes al
canasto, con movidas y dinámicas formas vegetales talladas como las
anteriormente comentadas. Fue dorado por última vez por Manuel Calvo Camacho
en 198669.
- Novedades o cambios posteriores: El mismo Ricardo Rivera realizó en
1986 las nuevas esquinas para el paso.

314
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

VIII.3.- El paso neogótico, (1939-2000)

Pocas obras de este estilo se ejecutan en la última mitad del siglo XX,
debido al gusto por el modelo barroco, aunque a pesar de todo, existen algunas
destacadas, sobresaliendo la figura de los tallistas Antonio Martín Fernández y de
nuevo la de Luis Rodríguez Espinosa y sus discípulos.
En el sentido morfológico, al igual que ocurriera con el modelo neobarroco,
se llega a un mayor virtuosismo y un mayor recargamiento ornamental,
añadiéndose poco a poco elementos decorativos para complementar la
composición.

VIII.3.2.- Luis Jiménez Espinosa

• Paso gótico de la Lanzada, (1949)

- Datos cronológicos y autoría: En 1949 se ejecutan unas nuevas para el


Misterio, obra de Luis Jiménez Espinosa, que recibiría la Medalla de Bronce de la
Ciudad por esta magnífica talla, (fig. 49).
- Motivos estructurales: La misma talla naturalista de estilo gótico e
inspiración vegetal actúa como soporte de la obra.
- Descripción y motivos ornamentales: Sin duda estamos ante una de las
mejores obras de este tipo acometidas en esta centuria, además de una de las de
mayor tamaño. Su trazado se basa en la crestería del Retablo Mayor de la
Catedral, de líneas rectas con perfiles y bombo en el canasto, donde destacan las
cartelas talladas sobre el mismo bloque, -no son independientes-; junto con los
candelabros y respiraderos a juego.

315
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

Aunque el auténtico ideólogo del paso es Jiménez Espinosa, la talla fue


desarrollada por uno de los discípulos más importantes del maestro, Manuel
Guzmán Bejarano.

Fig. 49.- Frontal del paso

Los interesantes ángeles mancebos policromados que sujetan las cartelas de las
esquinas son de Ortega Bru, inspirados en los que, de estilo gótico, existen en la
tumba del cardenal Cervantes.

Llaman particularmente la atención los templetes de las esquinas, que


simulan una pequeña bóveda con estilizadas agujas que desprenden el estilo
elegido para la ejecución. Bajo las mismas se incluyen unos medallones, así como
en los centros de cada plano del canasto escudos corporativos.

La talla destaca por su recargamiento ornamental, sobre todo si la


comparamos con los pasos góticos del XIX que eran mucho más austeros.
Apreciamos también la utilización de motivos vegetales, destacando sus

316
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

candelabros de guardabrisas, del mismo estilo y muy recargados a nivel


ornamental, al igual que los respiraderos y maniguetas de grandes dimensiones y
de la misma morfología que el canasto.

VIII.3.1.- Antonio Martín Fernández

• Paso del Cristo de las Misericordias, (Santa Cruz)

- Datos cronológicos: En 1973 Antonio Martín Fernández realiza unas


nuevas andas para el crucificado de Santa Cruz siguiendo el estilo del anterior,
(fig. 49).
Las figuras en madera policromada de inspiración gótica las hizo Rafael
Barbero, situándose tres en cada esquina. Las pinturas que incluye son de
Francisco García Gómez, (fig. 50).
- Motivos estructurales: Columnas o
pilares fasciculados, soportando arquerías e
imitaciones a bóvedas góticas.

- Descripción y motivos ornamentales:


Lleva una capilla en cada esquina para acoger
en su interior en grupo de tres las imágenes del
apostolado que realizara Rafael Barbero,
inspirándose en los existentes en el remate del
Retablo Mayor de la Catedral de Sevilla. Las
nuevas pinturas de estilo flamenco e italiano
son de gran calidad, rematando la obra un
moldurón a juego con el canasto que soporta
los faldones.
Fig. 50.- El paso en la actualidad

317
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

Esta gran obra se terminaría en 1975 con el dorado de Luis Sánchez


Jiménez y los faldones bordados por en convento de Santa Isabel. Los pequeños
motivos arquitectónicos se complementan con otros de tipo vegetal más
tradicionales, no llevando respiraderos, tan solo una moldura tallada y maniguetas
del igual estilo.

- Novedades o cambios
posteriores: Manuel Seco Velasco entrega
en 1977 nuevos candelabros de
guardabrisas para este paso, que
compositivamente son “de piña”,
rematados por el escudo de la
corporación44.
Fig. 51.- Detalle del frontal del canasto
Llaman poderosamente la atención
las esquinas, que se elevan para servir
como base a estos candelabros.

• Paso del Duelo, (Santo Entierro)

- Datos cronológicos: En 1964 estrena esta corporación unas magníficas


andas para el Duelo, (fig. 52), diseñadas por Luis Jiménez Espinosa, de estilo
neogótico y doradas. Las cuatro cartelas las realizó Francisco García. El dorado
corrió a cargo de Serafín Jiménez45.

44
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 216.
45
Web dedicada a la cofradía del Santo Entierro de Sevilla: http://www.arrakis.es/~nautylus/entierro.htm

318
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

- Motivos estructurales: Columnas de estilo gótico.

Fig. 52.- Paso del Duelo

- Descripción y motivos ornamentales: Se trata de una ejecución de líneas


rectas; llevando además candelabros de tres guardabrisas en las esquinas y un par
en cada lateral. Las cuatro cartelas pasionistas policromadas son de buena factura,
aportándole un sello semejante al lenguaje morfológico del canasto.
Toda la talla,- incluido los
respiraderos-, evoca motivos vegetales de
impronta gótica, alternándose con
elementos arquitectónicos, destacando las
capillas en las que se incluyen las escenas
pasionistas, coronadas por una bóveda
tallada y situadas en los centros de cada
Fig. 53.- Detalle del paso
plano del canasto.
Además se incluyen ojivas y agujas

319
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

góticas, resultando un conjunto muy arquitectónico, destacando la crestería del


canasto de la misma estética, careciendo de escultura decorativa al margen de las
mencionadas cartelas.

VIII.3.3.- Obra conjunta

• Paso para la Urna, (Santo Entierro)

- Datos cronológicos: Que esta


corporación ha seguido durante siglos
una línea estética en torno al gótico, lo
demuestra el hecho de que cambiarán el
paso de la Urna en 1996, realizado por
Antonio Ibáñez y Joaquín Pineda, (fig.
54).
La ebanistería corrió a cargo de
Manuel Caballero y el dorado por
Manolo y Antonio doradores S.L.
- Motivos estructurales:
Fig.54.- Trasera del paso Columnas de estilo gótico.
- Descripción y motivos
ornamentales: El canasto contiene una serie de molduras, gabletes y hornacinas a
modo de ojivas en sus esquinas que llevan las imágenes policromadas de San
Fernando, San Pedro Nolasco, San Laureano y San Gregorio, de nivel aceptable.
Estos mismos autores ejecutaron la Urna en el mismo año y siguiendo el mismo
estilo de la anterior. Lo complementa unos respiraderos cada uno con un escudo:

320
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

el de la Casa Real Española, el de Sevilla, el de la hermandad del Santo Entierro y


el de los Mercedarios46.
La composición recuerda al otro paso del Duelo comentado anteriormente,
sobresaliendo su ideal arquitectónico, por la aportación de recursos como agujas y
portadas góticas, ya que tanto los respiraderos como el canasto se dividen en
secciones sobre las que están tallados elementos góticos inspirados en el mundo
vegetal, destacando las esquinas, -en las que se incluyen las figuras de los Santos-,
así como las del canasto, con las escenas pasionistas. Los candelabros son del
mismo estilo y su composición es “de piña”.

46
Web dedicada a la cofradía del Santo Entierro de Sevilla. http://www.arrakis.es/~nautylus/entierro.htm

321
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

VIII.4.- El paso historicista, (1939-2000)

Este modelo sigue evolucionando hacia una impronta más renacentista,


aunque sigue combinándose con elementos ornamentales barrocos.
Son escasas las realizaciones de este tipo, aunque encontramos los
siguientes casos.

VIII.4.1.- Manuel Casana

La escasa liquidez de algunas corporaciones provoca que algunos de estos


encargos sean de bajo nivel, convirtiendo el paso en un elemento más funcional
que decorativo. Un buen ejemplo de estas obras lo tenemos en la producción de
este autor.

• Paso para la Entrada en Jerusalén

- Datos cronológicos y autoría: Realizado


en 1939, en los ambientes cofrades se le
denominó “la cómoda”, (fig. 55), por recordar a
un mueble de este tipo47.
- Motivos estructurales: No lleva.
- Descripción y motivos ornamentales: Los
respiraderos eran barrocos dorados, de hojas de
acanto como único recurso utilizado además de
Fig. 55.- El paso poco después un pequeño escudo conmemorativo de la cofradía
de su estreno
en cada lado; el ejecución era de madera oscura y
líneas rectas, de casetones, con pequeños motivos

47
CORREO DE ANDALUCÍA, El. Programa de Semana Santa. Sevilla 1937.

322
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

decorativos vegetales, así como escudos en el plano que forma el canasto en cada
esquina. Destaca un moldurón barroco en la parte superior del canasto, de hojas de
acanto y dorado, siendo las maniguetas del mismo estilo.

• Paso para Jesús Despojado

- Datos cronológicos y de autoría: Esta cofradía,


tras fundarse en 1936, sale con un paso por primera
vez en 1941, acometido por Manuel Casana, (fig.
56).
- Motivos estructurales: No lleva.
- Descripción y motivos ornamentales: de
madera oscura y líneas rectas con apliques de
orfebrería de Andrés Contreras y candelabros de
guardabrisas48.
Destaca su simplicidad compositiva y su
Fig. 56- Fotografía de 1941
sobriedad, ya que no porta ningún elemento
decorativo salvo los casetones que dividen el
canasto, con los apliques de orfebrería y otros recursos que recuerdan motivos
vegetales de estética barroca; los respiraderos son “de cajón” componiéndose de
igual forma que el canasto.

48
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 64.

323
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

• Paso para Jesús de la Salud, (Los Gitanos)

- Datos cronológicos: El 11 de abril de 1941


estrena nuevo paso Jesús de la Salud de Los
Gitanos, ejecutados por los talleres de Manuel
Casana, (fig. 57).
- Motivos estructurales: No lleva.
- Descripción y motivos ornamentales: De
madera oscura, líneas rectas con apliques de
orfebrería y “de casetones”, en los que se incluían
motivos decorativos de hojas de acanto y otros
Fig. 57.- El paso, vegetales. Este paso se vendió a la hermandad del
aún sin terminar
Medinaceli de San Fernando, -Cádiz-49.
El canasto era muy parecido al mencionado con anterioridad de Jesús
Despojado, realizado por este autor el mismo año.

• Paso de Jesús de la Vera Cruz

- Datos cronológicos: En 1944 realizada su


primera estación con un solo paso, estrenándolo,
(fig. 58).
- Motivos estructurales: Pilastras de capitel
corintio.
- Descripción y motivos ornamentales: Se
trata de unas andas de color oscuro y líneas rectas,
con tableros y casetones en los que se incluye un
motivo decorativo. Al igual que los anteriores, el
Fig. 58.- El paso el primer año
de su salida canasto no tiene esquinas, ya que forma un plano

49
CORREO DE ANDALUCÍA, El. Programa de Semana Santa. Sevilla 1941.

324
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

en el se incluye un pequeño y simple motivo decorativo.


- Novedades o cambios posteriores: Castillo Lastrucci en 1956 lo
modificará bastante: le introduce unos hachones que portan dos ángeles cada uno,
de discreta factura, colocándose además en el canasto escenas del Via Crucis con
reproducciones de imágenes y misterios de otras hermandades, que sustituyen a
los casetones anteriormente comentados; lleva asimismo a escala reducida en las
esquinas imágenes de Santos relacionados con la Exaltación de la Cruz.
En la actualidad estas andas las posee la cofradía de la Vera Cruz de
Benacazón50.

VIII.4.2.- José Merino, (Málaga 1881)

Su único paso para Sevilla es de elevada impronta clasicista, aunque


contiene elementos de otras tendencias.

• Paso para el Cristo de Burgos

- Datos cronológicos y de
autoría: Interesante aportación la
que nos hace el tallista José
Merino, para la cofradía del
Cristo de Burgos, estrenado en
1939, (fig. 59).
- Motivos estructurales:
Actúan como soportes columnas
realizadas con motivos vegetales,
además de personajes que
aparecen en el canasto. Fig. 59.- El paso en la calle

50
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 143.

325
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

- Descripción y motivos ornamentales: de líneas rectas, de maderas oscuras,


destacando los adornos de figuras situadas entre su trazado, completando la obra
cuatro faroles de madera en las esquinas que pasarían después a la hermandad de
la Hiniesta51.
Se trata de una de las obras de mayor impronta clásica, difícil de clasificar
por su eclecticismo, siendo su ornamentación muy interesante, principalmente por
su concepción decorativa, ya que aparecen numerosas medallas de pequeño
formato, con retratos de personajes alusivos a la Pasión, así como numerosos
casetones en el canasto, dentro de los cuales se encuadran estas medallas y en sus
centros escenas pasionistas, situándose en la parte frontal del canasto el momento
en el que Pilatos se lava las manos; todas las escenas están flanqueadas con
pequeñas figuras de Santos y rematadas con un frontal arquitectónico de estilo
renacentista que evoca una capilla.
En los casetones aparecen también pequeños motivos de decoración vegetal
y animal, además de caras igualmente pequeñas de perfil a modo de medallas,
llamando poderosamente la atención la gama de colores tierra-oscuro con la que
está policromado el paso entero.
La composición de los respiraderos es “de cajón”, con escudos en sus
centros, apareciendo en el frontal el de esta cofradía, dividiéndose en casetones
que enmarcan motivos vegetales y pequeñas cabezas de ángeles.
El canasto está realizado en madera de roble americano, los respiraderos en
madera de caoba de Cuba y los adornos de taracea en madera de limoncillo y palo
santo.
- Novedades o cambios posteriores: Este paso, cambiaría levemente su
fisionomía posteriormente, debido a que en 1958 Antonio Martín realiza los
trabajos para agrandar el paso, midiendo ahora 2,24x3,62x1,4852.
Asimismo, en 1968 estrenaría unos faroles de estilo renacimiento, de sabor
italiano, en plata de ley obra de Emilio García Armenta53. El taller de los
Hermanos Caballero restauró para la Semana Santa de 2006 el conjunto.

51
CORREO DE ANDALUCÍA, El. Programa de Semana Santa. Sevilla 1944.
52
Ibidem…, Sevilla 1958.

326
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

VIII.4.3.- José Sanjuán Navarro

• Paso para el Cristo de la Sed

- Datos cronológicos y autoría: En


1971 se bendice este paso de impronta
historicista, de madera oscura. Llevaba
cuatro sobrios hachones, tallado por José
Sanjuán Navarro, (fig. 60).
Estrena el año de su primera salida de
1979 unos adornos realizados por José
Manuel Ramos según modelos de Juan
Ventura y, al año siguiente, estrenará nuevos
adornos del mismo orfebre además de unas
pequeñas figuras realizadas en bronce54. Fig. 60.- Paso de 1971

- Motivos estructurales: Columnas de


impronta clásica cilíndricas, de capitel
corintio, y pequeños motivos vegetales en el fuste.
- Descripción y motivos ornamentales: Se trata de un paso muy sobrio, con
unos humildes respiraderos de tela y malla y un canasto de líneas rectas y
casetones divididos por numerosas columnas. En los casetones se incluyen
motivos clásicos de inspiración vegetal.
Asimismo entre las columnas se incluyen las mencionadas figuras de
bronce de escasa entidad artística.

53
CORREO DE ANDALUCÍA, El. Programa de Semana Santa. Sevilla 1968.
54
ABC, diario. Sevilla, 14 de marzo de 1979.

327
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

VIII.4.4.- Antonio Martín

• Paso para el Cristo de la Buena Muerte, (la Hiniesta)

- Datos cronológicos y autoría: Se


estrena en 1972, diseñado por Cayetano
González, siendo la ebanistería del trabajo
de maderas oscuras realizada por Francisco
Bailac Cenizo, así como la talla de
Antonio Martín, (fig. 61).
La escultura decorativa de los
respiraderos es de Francisco Buiza
Fernández, mientras que los apliques de
orfebrería son de Cayetano González y
Manuel Seco Velasco.
- Motivos estructurales: Pilastras de
Fig. 61.- Paso de la hermandad
de la Hiniesta fuste acanalado y capitel corintio.

- Descripción y motivos ornamentales: Compositivamente recuerda a


algunos de la producción de Manuel Casana, sobre todo por los planos del canasto
en las esquinas, así como por su concepción arquitectónica, aunque es este caso la
obra es de mayor calidad que las habituales de Casana.
Lleva decorando el paso capillas, figuras y ángeles esculpidos en madera de
naranjo, por Rafael Barbero. Mide 2,32 x 4 x 1,40.
Se trata de un paso difícil de definir, aunque el diseño podríamos asociarlo
con el típico estilo “corintio”, de leves reminiscencias renacentistas y barrocas,
sobre todo en la figuración. Está labrado en caoba hondureña, siendo de líneas
rectas, con casetones de talla y apliques de plata, llevando ménsulas en las
esquinas de igual metal.

328
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

En los centros del canasto lleva relieves y en las esquinas los ya comentados
querubines de Barbero; las escenas que se representan en estos relieves son: la
Custodia sacramental flanqueada por seises, Noli me Tangere, Lavatorio y la
Inmaculada.
Los respiraderos son igualmente de hechura rectilínea, en los que tiene
redículos que acogen a San Leandro, San Isidoro, San Fernando y San
Hermenegildo, resultando la talla más elaborada, con motivos decorativos
inspirados en el mundo vegetal. Las dimensiones de la parihuela son 2,32 x 4 x
1,50 m55.
- Novedades o cambios posteriores: La realización de este paso se ha
terminado progresivamente hasta el año 2006, basándose la cofradía en la idea de
su diseñador original. En lo que se refiere a orfebrería lo ha terminado el taller de
los Hermanos Delgado, -que también se ha encargado de restaurar el paso en este
apartado-, mientras que las tareas de carpintería las ha acometido Juan García, que
curiosamente ha utilizado restos de madera de caoba sobrantes para la realización
del paso en el inicio de su realización. En lo que se refiere a talla decorativa
también se ha intervenido, en este caso por parte de José Pérez Delgado, que ha
limpiado y consolidado las cartelas, los ángeles y las figuras de los Santos obra de
Buiza.
Aun así hay que subrayar como reforma más importante la inclusión en las
cuatro esquinas del paso diferentes piezas de plata en las molduras inferiores del
canasto, la peana de las jarras y la capilla trasera de la jarra con pilastras y frontón
semicircular que remata la esquina, siendo toda esta labor acometida por el taller
de los Hermanos Delgado56.

55
BALBUENA ARRIOLA, Emilio José: Terminación del paso de Cristo de la Buena Muerte, en Boletín
de las Cofradías. Sevilla, enero de 2006.
56
Web de la Hermandad de la Hiniesta de Sevilla:
http://www.hermandaddelahiniesta.org/index.php?seccion=estacion1&pasos=ID_CRISEl

329
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

VIII.5.- El paso “neorrenacentista”

En nuestra opinión no existe ningún paso plenamente Renacentista, pero sí


pasos en los que predominan elementos ornamentales relacionados con ese estilo.
Ante todo, el único paso que tenemos de esta estética, lo encuadramos en
este apartado “neorrenacentista” sin olvidar que sigue siendo un paso impregnado
de eclecticismo, y en el que predominan los elementos de orfebrería.
No podemos hablar, por tanto, de un estilo relacionado con algún modelo
de retablo, sino de composiciones en las que, simplemente, predominan los
recursos Renacentistas.

VIII.5.1.- Emilio García Armenta

Destacamos a este orfebre, y diseñador del paso que nos ocupa, como autor
de la obra, ya que el protagonismo ornamental de estas andas es la orfebrería,
quedando la madera como base de la composición.

• Paso para la Soledad, (San Buenaventura)

- Datos cronológicos: La hermandad


de San Buenaventura el 19 de abril de 1957
estrena un paso de madera oscura diseñado
por el orfebre Emilio García Armenta, (fig.
62). Rafael Barbero interviene en los
ángeles que lo decoran y Manuel
Domínguez en la orfebrería.
- Motivos estructurales: Columnas de
fuste acanalado y capitel corintio,

Fig. 62.- Paso de la Soledad

330
Capítulo VIII 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

complementadas con elementos decorativos en orfebrería de inspiración vegetal.


- Descripción y motivos ornamentales: El canasto es de líneas rectas con
casetones, llevando los respiraderos a juego y airosos candelabros de guardabrisas,
correspondiendo la talla a Manuel Guzmán Bejarano.
En los casetones del canasto lleva adornos en plata de ley, así como en la
base de cada columna y en algunas zonas de sus perfiles; toda la obra de orfebrería
es de su diseñador. Bajo los candelabros aparecen unos ángeles de Rafael Barbero,
de buena factura.
Los adornos de plata de ley los labró Manuel Domínguez, apareciendo
algunos pasajes de la Virgen centrados en su parte frontal, por una simbología de
la Invención de la Santa Cruz57.
- Novedades o cambios posteriores: En 1976 quedaría terminado
definitivamente el paso con algunas variaciones respecto al primer proyecto.

57
CARRERO RODRÍGUEZ, Juan: Anales…, p. 504-505.

331
CAPÍTULO IX

________________________________
Capítulo 9 La talla procesional en la actualidad

IX
La talla procesional en la actualidad

IX.1.- La talla procesional en nuestros días.

Podemos afirmar que en los pocos años que llevamos de siglo XXI se están
potenciando los ideales de la segunda mitad del XX, caracterizándose por el
virtuosismo ornamental y la exaltación del modelo barroco, recurriendo a diseños
basados en composiciones anteriores.

Todos los pasos realizados para Sevilla en esta primera década son de
impronta barroca.

333
Capítulo 9 La talla procesional en la actualidad

IX.1.1.- Manuel Durán

• Paso para el Cristo del Desamparo y Abandono

- Datos cronológicos y
autoría: Al constituirse como
corporación penitencial en
1987, no se planteó por
problemas económicos para
la primera salida procesional
de 1989, la posibilidad de
hacer un paso nuevo para la
imagen del crucificado, por
lo que se adquiere uno de la
Fig. 1.- Paso de la hermandad del Cerro
hermandad del Nazareno de
Utrera, que amplía y reforma
Francisco San Román, dándole color caoba y aplicándole motivos de orfebrería
plateada. Ya entonces existía un proyecto de los Hermanos Delgado López para
ejecutar una nueva obra, algo que se consumiría años más tarde1, (fig. 1).

Se trata del proyecto de 2001, diseñado en su totalidad por los Hermanos


Delgado, y tallado por Manuel Durán con carpintería de Manuel Caballero.

- Motivos estructurales: Lleva columnas barrocas labradas en metal, las cuales


actúan como soporte de las capillas que se incluyen

- Descripción y motivos ornamentales: Su traza es de perfiles rectos pero


abombada en el canasto, con una elaborada talla ornamental, basada en motivos

1
VEGA, Juan Miguel: El barrio del Cerro del Águila y la Hermandad de Nuestra Señora de los Dolores”.
Sevilla 2002.

334
Capítulo 9 La talla procesional en la actualidad

barrocos, sobre todo inspirados en el mundo vegetal, destacando los apliques de


plata repartidos por toda la composición, llamando la atención especialmente las
capillas en los centros de cada plano del canasto, en las que aparecen imágenes
Titulares de cofradías relacionadas con esta Hermandad, además de columnas
barrocas y otros motivos referentes a la ciudad.

Los respiraderos, así como los dinámicos guardabrisas, se encuadran en la


misma línea estilística del canasto.

IX.1.2.- Taller de Manuel Guzmán Bejarano

• Paso para Jesús ante Caifás, (San Gonzalo)

- Datos cronológicos y autoría:


Ejecutado por el taller de Manuel Guzmán
Bejarano, se empezó a construir por fases
desde el año 2000, (fig. 2). En las esculturas
decorativas intervino José Antonio Navarro
Arteaga, que talló los ángeles, arcángeles y las
cartelas2.

- Motivos estructurales: No lleva


columnas ni elementos de soporte.

- Descripción y motivos ornamentales: El


Fig. 2.- Paso de la hermandad
de San Gonzalo

2
DELGADO ABOZA, Francisco Manuel: “[…] Cofradía de Jesús del Soberano Poder ante Caifás, […]”,
en Misterios de Sevilla. Sevilla 2003, p. 440.

335
Capítulo 9 La talla procesional en la actualidad

estilo evoca los postulados barrocos llegando a un profundo virtuosismo, con un


canasto abombado muy del gusto de Guzmán Bejarano, el cual incluye numerosos
recursos decorativos de tipo vegetal, además de perleados, cabezas de ángeles y
cuatro evangelistas de estilo barroco policromados, todos de buena factura.
Los respiraderos alternan talla y bordados, empleando los mismos recursos
decorativos que el canasto.

Destacan además los candelabros barrocos que iluminan la composición,


muy dinámicos y con numerosas luces.

IX.1.3.- Taller de los Hermanos Caballero

• Paso para el Cristo de las Aguas

- Datos cronológicos y autoría:


Estrenado en el 2003, realizado por
el taller de los Hermanos Caballero,
(fig 3).

- Motivos estructurales: No lleva


columnas ni elementos de soporte.

- Descripción y motivos
ornamentales: De nuevo nos
encontramos con un paso de estilo
barroco de profundo virtuosismo, con

Fig. 3.- Paso en la calle


entradas y bombo en el canasto y
recargada talla ornamental, basada en

336
Capítulo 9 La talla procesional en la actualidad

hojas de acanto, motivos vegetales, frutas, cabezas de ángeles, perleados,


así como evangelistas en los laterales del paso. Cuatro cartelas de escenas
pasionistas se incluyen en los salientes de los ángulos del canasto. En cada
candelabro de las esquinas aparece un arcángel sosteniéndolo3.

• Paso para Jesús de la Redención

- Datos cronológicos y
autoría: Al igual que el
anterior se trata de una obra
de los Hermanos Caballero,
estrenado en el 2005, siendo
de caoba, con apliques de
orfebrería dorada, (fig. 4 y 5).

Fig. 4.- Paso en la calle

- Motivos estructurales: Lleva columnas como soporte de las capillas


centrales, de estípites con complementos decorativos de orfebrería dorada.

- Descripción y motivos ornamentales: Su talla es muy virtuosa,


dividiéndose el canasto en entrantes y capillas donde aparecen numerosos motivos
decorativos, como rosas, uvas hojas, espigas, además de otros motivos de
impronta barroca y cabezas de ángeles realizadas en orfebrería dorada.

3
Web oficial del taller de los Hermanos Caballero: http://www.hermanoscaballero.com/

337
Capítulo 9 La talla procesional en la actualidad

En las capillas se incluyen motivos diversos realizados igualmente en


orfebrería, entre los que se encuentran una representación figurativa de la Fe o una
custodia.

Fig. 5.- Detalle del canasto

Las esquinas son rematadas por arcángeles dorados y sobre ellos se asientan
candelabros de guardabrisas de estilo barroco.

IX.1.4.- Francisco Pineda

• Paso para Jesús Cautivo y Rescatado

- Datos cronológicos y autoría: Se estrenó, aún sin terminar, en 2007, y su


talla se llevó a cabo en el taller de Francisco Pineda, siendo su estilo barroco-
rocalla, (fig. 6).

- Motivos estructurales: No lleva elementos de soporte ni columnas.

338
Capítulo 9 La talla procesional en la actualidad

- Descripción y motivos
ornamentales: El diseño posee un
recargamiento y un virtuosismo ornamental
propio del estilo churriguerra, basándose
todo el conjunto en motivos ornamentales de
inspiración vegetal, como la rocalla o la hoja
de acanto, siendo la línea del canasto
parecida a la del modelo por excelencia del
Gran Poder. Sus complementos decorativos
los ha realizado Ventura Gómez, discípulo
de Luis Álvarez Duarte.

Sus respiraderos, de líneas dinámicas,


Fig. 6.- El paso en una foto de 2008
siguen la misma línea ornamental del
canasto.

IX.1.5.- Antonio Ibáñez

• Paso para Jesús de la Vera Cruz

- Datos cronológicos y autoría:


El paso, realizado en madera de
caoba de Cuba y ejecutado por
Antonio Ibáñez se estrena en la
Semana Santa de 2008, (fig. 7).

Fig. 7.- El paso el año de su estreno

339
Capítulo 9 La talla procesional en la actualidad

- Motivos estructurales: Estípites con capiteles de orden corintio cobran


protagonismo en la composición, situándose en las capillas del paso, una en cada
esquina.

- Descripción y motivos ornamentales: El canasto posee una línea


dinámica, con un perfil ondulado. En los laterales se incluyen cuatro faroles de
plata repujada, y en la zona superior se sitúan cuatro hachones de cera verde. En
las capillas de las esquinas se encuentran las figuras de Santa Elena, San
Francisco, el Emperador Constantino y el Papa Paulo III.

Los respiraderos de cajón alternan bordados en plata realizados por el taller


de Carrasquilla con talla en madera de ornamentación semejante a la del canasto.

340
CAPÍTULO X

________________________________
Capítulo 10 Conclusiones finales

X
Conclusiones finales

X.1.- Conclusiones finales

Después de la extensa catalogación realizada, enumeramos las conclusiones


que arroja este trabajo.

X.1.1.- Conclusiones generales

1. El paso procesional no es sólo un elemento práctico para transportar


imágenes, sino un objeto artístico que aúna en sí mismo una cuidada
composición y una diversidad decorativa muy importante.

2. Son numerosos los oficios involucrados en el universo de las cofradías, los


cuales hacen posible que los pasos posean una gama interesante de
aportaciones artesanales y artísticas, en las que principalmente se
encuentran la carpintería, imaginería, talla decorativa, orfebrería, dorado y
policromía.

342
Capítulo 10 Conclusiones finales

3. Además de la funcionalidad devocional y formativa de los pasos, sobresale


su valor estético como objeto artístico compuesto por numerosos elementos
ornamentales y figurativos.

4. Existe una relación entre los pasos y los retablos de las iglesias sevillanas.
La impronta de estos últimos en sus diferentes modalidades ha sido la
referencia fundamental para la ejecución de estas obras. De forma
progresiva, los pasos han asimilado la tipología y los recursos decorativos
de los retablos, siempre teniendo en cuenta los condicionantes espaciales y
morfológicos que tienen las andas. Lo mismo ha ocurrido con la estatuaria,
que se ha adaptado de la misma forma que los elementos decorativos
inspirados en la naturaleza.

5. Podemos considerar a los pasos como auténticos retablos itinerantes,


retablos en movimiento que se desplazan gracias a los costaleros. Los
diferentes medios para “propulsar” un paso de manera mecánica, no han
sido nunca del gusto del pueblo.

6. Diversos condicionantes pueden relacionarse en relación al tamaño de los


pasos. En primer lugar, debemos tener en cuenta la propia ciudad y el
tamaño de sus calles. También parece haber estado condicionado por las
dimensiones de una de las puertas de la Catedral por la que
tradicionalmente entran los pasos.

7. La técnica más utilizada en los pasos de Cristo o de Misterio es la talla en


madera, oscura o dorada. También se recurre a la imitación de jaspes, -hoy
día en desuso-, o la policromía de algunos elementos. Muchas veces se
enriquecen con otros materiales para su decoración, como metal repujado
dorado o plateado.

343
Capítulo 10 Conclusiones finales

X.1.2.- Conclusiones histórico-artísticas

1. En este cuadrante, vemos el número de pasos de Cristo o de Misterio


realizados a lo largo de la historia en sus diferentes estilos:

PASOS DE CRISTO O MISTERIO REALIZADOS


PARA LA SEMANA SANTA DE SEVILLA EN MADERA TALLADA

Pasos Pasos Pasos Pasos Pasos de


barrocos góticos/neogóticos historicistas neorrenacentistas estilo
desconocido
Siglos _ _ _ _
XV-XVI*
Siglo 22 0 0 0 10
XVII*
Siglo 2 0 0 0 4
XVIII*
Siglo XIX 17 11 27 0 4
Siglo XX 53 7 15 1 0
Siglo XXI 6 0 0 0 0
TOTAL 100 18 41 1 25
*Los datos de estos siglos son aproximados, debido a lo confuso de los documentos en esas centurias

SUMA TOTAL: 185 pasos

De estos números se desprende la predilección por parte de las cofradías del


paso barroco en sus diferentes fórmulas, destacando además el siglo XX como el
de mayor productividad. Como es lógico, el siglo XVII se sitúa en el segundo
lugar en producciones barrocas, con unas veintidós obras realizadas más otras
tantas desconocidas, entre las que habría alguna de ese estilo.
También observamos que el paso historicista sobresale en número,
especialmente en el siglo XIX. Pensamos que esto se explica, además de por ser la

344
Capítulo 10 Conclusiones finales

impronta artística predominante en dicha centuria, por constituir la fórmula más


económica y aseada para ejecutar un paso.
La impronta neogótica es la menos adaptada según el cuadrante, aunque sí es
cierto que consiguió ser la más atractiva para algunas cofradías, que dieron a todo
su cortejo este tipo de estética, algo que no ocurriría con el historicismo.
Según nuestro estudio, sólo hemos señalado un paso como neorrenacentista,
por ser el único que contiene elementos que realmente se acercan a esa tipología.

2. El paso procesional tal y como hoy lo conocemos, surge en Sevilla en la


segunda mitad del siglo XVI. Sus precedentes más ancestrales los
encontramos en la procesión del Corpus, en los pequeños soportes de las
Custodias eucarísticas, así como en las denominadas “rocas” o tarascas. Al
principio nacieron como un mero objeto para transportar imágenes, pero
desde el siglo XVII fueron enriqueciéndose poco a poco gracias a la
intervención de artistas importantes relacionados con la talla artística.
Consecuentemente, han sido durante muchos años reflejo del arte del
momento.

3. Desde la realización de los primeros pasos, sobre todo a partir de la


segunda mitad del XVII, estos han evolucionado de forma pareja a las
tendencias artísticas del momento. Sin embargo, a partir del siglo XX,
coincidiendo con la aparición de las vanguardias, el arte y la realización de
los pasos se ha independizado, siendo desde entonces la producción una
imitación de los modelos antiguos, eso sí, mejorando en virtuosismo y
refinamiento.

4. En los pasos se ha aplicado un lenguaje plástico relacionado con cuatro


estilos artísticos: El barroco, el neorrenacentista, el neogótico y el
historicista, caracterizado por un eclecticismo que aunaba reminiscencias
clásicas y barrocas. Las cofradías han elegido estas fórmulas estéticas para

345
Capítulo 10 Conclusiones finales

sus pasos, hasta el punto de que desde principios del siglo XX tan solo se
han preocupado por la evolución de estos estilos.

5. A nivel de composición los pasos de Cristo o de Misterio se clasifican


según su canasto o canastilla, existiendo tres tipos: Piramidal, de maceta o
pirámide invertida y de perfil recto.

6. Aunque podemos clasificar los pasos según su estilo artístico, debemos


subrayar que su evolución en ocasiones ha sido espontánea y fruto del paso
del tiempo. A veces se han unido dos o más estilos, sobre todo los que
encuadramos en la impronta historicista, por lo que en ocasiones resulta
difícil definir su tipología.

7. El barroco, en sus diferentes variantes morfológicas, ha sido el modelo de


paso más utilizado en la historia de la Semana Santa de Sevilla. Esta
modalidad ha evolucionado desde el siglo XVII hasta nuestros días. Nunca
se han dejado de hacer pasos de este tipo, casi siempre inspirados en
modelos de arquitectura barroca sevillana.

8. En el siglo XX se potencia el estilo barroco, apareciendo nuevas


producciones muy ricas en decoración, adaptándose recursos ornamentales
que no se habían utilizado anteriormente.

9. El paso barroco de Nuestro Padre Jesús del Gran Poder de 1688, realizado
por Francisco Antonio Gijón, es el más influyente de cuantos se han
ejecutado.

10. La estatuaria barroca de los pasos ha imitado los clásicos modelos del Siglo
de Oro sevillano hasta nuestros días. Estos modelos parten de los grandes
maestros como Martínez Montañés, Pedro Roldán o Duque Cornejo.

346
Capítulo 10 Conclusiones finales

11. El neogótico en los pasos aparece en el siglo XIX y, aún siendo de carácter
revisionista por su relación con el gótico y el neogótico, tiene en Sevilla
unas características concretas que le hace peculiar. Evolucionará hasta
nuestros días potenciándose su calidad ornamental y virtuosismo.

12. El paso neogótico, ante todo está influenciado por dos factores: el
portentoso Retablo Mayor de la Catedral de Sevilla, y la corriente
neogótica existente en la ciudad en el siglo XIX.

13. No podemos afirmar que en el neogótico se adapte una estatuaria del


mismo nombre, debemos referirnos más bien, a una adaptación de la
estatuaria clásica-historicista a un contexto neogótico.

14. El estilo historicista se caracteriza por su eclecticismo, un modelo difícil de


definir, ya que aúna elementos de diversos estilos, sobre todo de índole
clásica y, en menor medida, barroca. Al igual que ocurriera con el
neogótico, progresivamente mejorará en calidad artística, empezando por
pasos de escasa riqueza ornamental y recursos de bajo coste, hasta llegar a
magníficas realizaciones en el siglo XX, en las que abunda la utilización de
detalles renacentistas que aportan una sustancial mejoría de estas obras.

15. En la talla procesional actual, aunque el virtuosismo ornamental ha llegado


a cotas sin precedentes, se asumen pocos riesgos, ya que casi todos los
pasos se ciñen a los clásicos modelos barrocos, rechazándose otros estilos y
variantes, algo que resulta cuando menos criticable. Incluso podemos
afirmar que se está dando de lado estilos tradicionales como el neogótico y
el propio historicismo.

347
Capítulo 10 Conclusiones finales

X.1.3.- Cuadrante-resumen de la evolución del paso

EVOLUCIÓN EN EL TIEMPO DE LOS PASOS DE CRISTO O MISTERIO


EN LA SEMANA SANTA DE SEVILLA

Época Características/Estilos Pasos- referencia

Del siglo XIV a la Sabemos de la existencia de


primera mitad del cofradías en estos años, pero ---------
XVI apenas hay datos para definir
un modelo de paso procesional

- Paso de La Soledad de
Andas de gran sencillez San Lorenzo, (1550
Segunda mitad del estructural, pequeñas y con aprox.)
XVI, pocos elementos decorativos, - Pasos de la Hermandad
(transición al como lienzos pintados y de Jesús Nazareno, (El
barroco) algunas figuras. Silencio),
probablemente de
finales del XVI

Tras una etapa de tentativas, en - Paso de 1659 para la


la segunda mitad de la centuria hermandad de la Quinta
nace el modelo barroco, gracias Angustia, de Pedro
a la intervención de grandes Roldán.
maestros del momento, - Paso de la Hermandad
culminando con el paso para de la Exaltación de
SIGLO XVII Jesús del Gran Poder. 1678, (taller Pedro
Además, se empiezan a aplicar Roldán).
la impronta del retablo - Paso para Jesús del
sevillano a los pasos Gran Poder de 1688,
procesionales (Francisco A. Gijón).

- Paso de la Sagrada
Mortaja, (1710)-
El paso barroco consagrado en - Paso del Sano Entierro,
la segunda mitad del XVII, se (1727?), de autor
SIGLO XVIII difunde con fuerza en esta anónimo.
centuria, potenciándose en ellos - Paso de Jesús
su carácter retablístico Nazareno, (El Silencio),
de 1737, (autor
anónimo)

348
Capítulo 10 Conclusiones finales

Neogótico: Nueva modalidad - Paso del Triunfo de la


que aparece en la segunda Santa Cruz, (Santo
mitad de la centuria, de Entierro) de 1880,
impronta gótica. Se caracteriza anónimo.
por la sobriedad ornamental y - Paso de la Lanzada de
el uso de recursos decorativos 1881, realizado por
de tipo arquitectónico, como Salvador Domínguez.
pequeñas capillas, arquerías y - Paso de la Santa Cruz,
torres, y la escasez de (la Hiniesta) de 1885, de
figuración. autor desconocido.

Historicista: Dentro del - Paso de la Entrada en


eclecticismo que contiene esta Jerusalén de 1817,
modalidad, destacamos anónimo.
SIGLO XIX diversas pautas que sigue el - Paso de Jesús del
estilo, como líneas rectas, Silencio en el desprecio
abundancia de columnas de de Herodes, (1841),
orden corintio, canastos realizada por Rodríguez
divididos en casetones y el uso Espinosa.
frecuente de jaspeados. - Paso de la Exaltación
de 1885, realizado por
José García Roldán

- Paso de la Carretería
de 1844, (Rodríguez
Barroco: Existe una rica Espinosa)
variedad morfológica en los - Paso del Nazareno de
pasos barrocos, con numerosas Pasión, (Juan Rossy), de
modalidades compositivas, 1865.
como pasos de perfiles rectos, - Paso de Montserrat de
abombados y dinámicos. 1857, anónimo.
Sin ser la época de mayor - Paso de la Soledad,
brillantez barroca, se ejecutan San Lorenzo de 1875,
pasos interesantes. anónimo.
- Paso del Cachorro de
1889 de Olaya y Govea,
(actual de San Esteban)

349
Capítulo 10 Conclusiones finales

- Paso de la Exaltación
de 1902, realizado por
Barroco: Se define en este José Gil.
periodo como modelo preferido - Paso de la Coronación
por las cofradías, ganando en de Espinas, (1918),
virtuosismo. Se abren nuevas realizado por Gonzalo
variantes del modelo, poco Bilbao.
comunes anteriormente, como - Paso de Jesús del
el barroco-rocalla. Silencio en el desprecio
de Herodes, (1938), por
Jun Luis Rodríguez.

Historicista: Dentro del estilo


existe diversidad morfológica, - Paso de la Quinta
aunque en todos se alternan Angustia de 1904,
fórmulas ornamentales barrocas realizado por varios
y otras de reminiscencias autores.
SIGLO XX clásicas, potenciándose - Paso de la Sagrada
(1900-1939) recursos renacentistas. Destaca Cena de 1920, realizado
en la mayoría de las por Salvador
composiciones la columna de Domínguez.
orden corintio como base
compositiva.

Neogótico: El estilo continúa su - Paso de santa Cruz de


evolución respecto al XIX, 1922, (varios autores)
mejorando en riqueza y
virtuosismo

350
Capítulo 10 Conclusiones finales

- Paso para la
hermandad del Museo
de 1940, (Fco. Pérez del
Toro)
- Paso de la Soledad de
Barroco: El estilo evoluciona San Lorenzo de 1951,
hacia un virtuosismo sin realizado por Francisco
precedentes. Existe mayor Ruiz.
variedad ya que los autores - Paso de la Sentencia de
adaptan a los pasos modelos 1955, (Rafael
barrocos poco comunes Fernández)
anteriormente, aportándose - Paso de Las Penas,
novedosos recursos (San Vicente), de 1959,
ornamentales y compositivos. realizado por Antonio
El estilo barroco se confirma en Vega.
estos años como el preferido en - Paso de la Presentación
la mayoría las cofradías. al Pueblo, (1967), de
Antonio Martín.
- Paso de las Tres
Caídas, (Triana), de
1970, realizado por
SIGLO XX Manuel Guzmán
(1939-2000) Bejarano.

- Paso del Duelo de


Neogótico: El estilo evoluciona 1964, (Luis Jiménez
hacia una mayor riqueza Espinosa)
ornamental y un magnífico - Paso de Santa Cruz de
virtuosismo en la talla. 1973, (Antonio Martín)

- Paso del Cristo de


Historicista: Mejoran en Burgos, (1939) por José
virtuosismo y riqueza Merino.
decorativa, evolucionando en la - Paso del Cristo de la
misma línea que en la primera Buena Muerte,
mitad de la centuria. (Hiniesta) de 1972, por
Antonio Martín.

- Paso de la Soledad,
Neorrenacentista: Pasos en los (San Buenaventura) de
que predominan elementos 1957, (Emilio García
decorativos Renacentistas Armenta)

351
Capítulo 10 Conclusiones finales

- Paso del Cristo de las


Aguas, realizado por los
Barroco: De nuevo el estilo se Hermanos Caballero en
define como el predilecto. Se 2003.
sigue la línea trazada en la
centuria anterior, potenciando - Paso de la hermandad
el virtuosismo ornamental y el de Jesús Cautivo y
barroco más abigarrado. Rescatado, realizado por
Francisco Pineda en
2007

Siglo XXI
Historicista: No se ha hecho -------------
ningún paso de este estilo

Neogótico: No se ha hecho
ningún paso de este estilo -------------

Neorrenacentista: No se ha
hecho ningún paso de este -------------
estilo

352
TERMINOLOGÍA

________________________________
TERMINOLOGÍA1

Agallón: Cuenta gruesa de rosario.

Bocel: Moldura convexa lisa, de sección semicircular y a veces elíptica.

Canasto o canastilla: Volumen situado sobre la parihuela de los pasos de Cristo o


de Misterio, formando una estructura que puede ser de perfil recto o abombada, y
que sirve como base de la escena representada en la parte superior del paso.

Cartela: Ménsula a modo de relieve que suele decorar un paso, representándose


en ella alguna escena de temática religiosa. También denominada en la antigüedad
tarjeta.

Ceriferario: Acólito o estatuaria que portan ciriales o algún tipo de elemento


luminoso en un acto de culto o procesión.

Costalero: Persona que soporta en su nuca y hombros los pasos o andas


procesionales, provisto de la denominada “ropa”, que la componen un saco o
costal y una almohadilla denominada “morcilla” para aliviar el peso. Su calzado
suele ser alpargatas o zapatillas deportivas.

Faldón: Tela que cubre la parihuela o estructura interior del paso.

Filete: Parte de una moldura que se presenta en forma de lista larga y angosta.
Línea o lista fina que sirve de adorno en el dibujo.

Flamígero: Elemento decorativo que imita el efecto de arrojar o emitir llamas.

Guarnición: Adorno para vestidos, ropas o colgaduras.

Hacha: Palo de madera que lleva en su parte superior una arandela y cubillo de
metal, con el objetivo de colocar una vela y llevarlo en la mano.

1
Las definiciones son del autor de la tesis, salvo algunas extraídas del Diccionario Cofrade editado por
Juan Carrero Rodríguez en 1980.

354
Hachón: Cirio grande que se utiliza normalmente para iluminar algunos pasos en
los que aparece un crucificado.

Horcajada: Horquilla que va colocada en la parte superior de una vara, y que


servía para cobijar las maniguetas de una parihuela, cuando estas quedaban
paradas en una procesión, pues dichas parihuelas en la antigüedad a veces no
llevaban patas. En las procesiones sevillanas se usaban antes de la incorporación
de los costaleros.

Horquetas u horquillas: Horcajada.

Manigueta: Manija o mango que sobresale en los costados de las parihuelas en su


parte trasera y frontal. En la antigüedad, servían para apoyar el paso en el suelo
con las horquillas cuando este estaba parado. En Sevilla hoy día es un simple
elemento decorativo, no así en otros lugares de Andalucía.

Mesa: Entarimado situado en la parte superior del canasto, sobre el cual se


representa la escena del paso.

Parihuela: Estructura de cuatro o seis patas, trabadas por una zambrana o listón.
En la parte superior de dicha estructura van las trabajaderas, que son los
travesaños utilizados por los costaleros para portarlas.

Peana: Canasto o canastilla. En sus orígenes era sinónimo del término “paso”.

Penacho: Adorno que imita plumas para crear un efecto decorativo.

Pellejina: Término coloquial que utilizan algunos tallistas, para denominar un


golpe de talla suave, que recuerda estéticamente a una forma de pellejo animal, en
contraposición a una talla más definida.

Perleado o emperlado: Recurso ornamental que consiste en imitar cuentas de


rosario o perlas, normalmente alineadas.

355
Tarjeta: Cartela.

Sobrepelliz: Vestidura blanca de lienzo blanco que llega del hombro a la cintura,
con mangas perdidas o muy anchas. Suele ir encima de la sotana que llevan los
eclesiásticos en las procesiones o actos religiosos.

Vara: Medida utilizada en la antigüedad que equivalía a ochocientos treinta y


cinco milímetros y nueve décimas.

356
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Periódico El Correo de Andalucía. Sevilla 1940.

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Periódico El Correo de Andalucía. Sevilla 1945.

PROGRAMA DE SEMANA SANTA “EL CORREO DE ANDALUCIA”:


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PROGRAMA DE SEMANA SANTA “EL CORREO DE ANDALUCIA”:


Periódico El Correo de Andalucía. Sevilla 1948.

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Periódico El Correo de Andalucía. Sevilla 1952.

PROGRAMA DE SEMANA SANTA “EL CORREO DE ANDALUCIA”:


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Periódico El Correo de Andalucía. Sevilla 1955.

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Periódico El Correo de Andalucía. Sevilla 1956.

PROGRAMA DE SEMANA SANTA “EL CORREO DE ANDALUCIA”:


Periódico El Correo de Andalucía. Sevilla 1958.

PROGRAMA DE SEMANA SANTA “EL CORREO DE ANDALUCIA”:


Periódico El Correo de Andalucía. Sevilla 1959

PROGRAMA DE SEMANA SANTA “EL CORREO DE ANDALUCIA”:


Periódico El Correo de Andalucía. Sevilla 1963.

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Periódico El Correo de Andalucía. Sevilla 1964.

PROGRAMA DE SEMANA SANTA “EL CORREO DE ANDALUCIA”:


Periódico El Correo de Andalucía. Sevilla 1966.

PROGRAMA DE SEMANA SANTA “EL CORREO DE ANDALUCIA”:


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Web de la Real Academia de la Lengua Española: http://www.rae.es/

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http://www.hermanoscaballero.com/

Web oficial de la Hermandad del Calvario de Sevilla:


www.hermandaddelcalvario.org

Web oficial de la Hermandad de la Hiniesta de Sevilla:


http://www.hermandaddelahiniesta.org/

Web oficial de la Hermandad de Monte-sion de Sevilla: http://www.hermandad-


de-monte-sion.org/

Web oficial de la Hermandad de Montserrat de Sevilla:


http://montserrat.hermandades-de-sevilla.org/

Web sobre de la Hermandad del Santo Entierro de Sevilla:


http://www.arrakis.es/~nautylus/entierro.htm

Web oficial de la Hermandad de la Soledad de San Lorenzo de Sevilla:


www.hermandaddelasoledad.org/home.htm

375
ÍNDICE GRÁFICO

________________________________
ÍNDICE GRÁFICO
(Por capítulos)

CAPÍTULO I.- Introducción, justificación y consideraciones

1.- Parihuela de un paso actual. Fotografía extraída de la Web oficial de la


Hermandad del Cautivo de Alcalá de Guadaira, (Sevilla):
(www.hermandaddelcautivo.com)

CAPÍTULO II.- El paso procesional como objeto artístico

1.- Paso actual del Descendimiento, (Quinta Angustia). Fotografía realizada por
Jesús Vega.
2.- Paso del Stmo. Cristo del Amor. Fotografía extraída de Sevilla Penitente, tomo
II, pág. 30. Sevilla 1995.
3.- Paso de la Lanzada. Fotografía extraída de Sevilla Penitente, tomo II, pág. 54.
Sevilla 1995.
4.- Paso del Duelo. Fotografía de Jesús Vega.
5.- Paso del Stmo. Cristo de la Conversión de 1857. Fotografía extraída de
http://foroelnazareno.mforos.com
6.- Paso actual del Stmo. Cristo de la Conversión. Fotografía extraída de Sevilla
Penitente, tomo II, pág. 65. Sevilla 1995.
7.- Candelabro de guardabrisa del paso de la Columna y Azotes. Fotografía de
Jesús Vega.
8.- Candelabro de guardabrisas del paso del Stmo. Cristo de la Expiración, (Santa
Cruz). Fotografía de Jesús Vega.
9.- Farol del paso del Stmo. Cristo de la Fundación. Fotografía de Jesús Vega.

377
10.- Ilustración de costaleros realizada por Lucas Valdés. Fotografía extraída de
Sevilla Penitente, tomo III, pág. 129. Sevilla 1995.
11.- Manigueta del paso de Jesús del Silencio en el Desprecio de Herodes.
Fotografía realizada por Jesús Vega.

CAPÍTULO III.- Impronta del retablo sevillano en la ornamentación del paso

1.- Retablo mayor de la Iglesia de los Terceros de Sevilla. Fotografía realizada por
Jesús Vega.
2.- Retablo mayor del Hospital de la Caridad de Sevilla. Fotografía extraída de “El
Retablo salomónico”, capítulo I del libro El Retablo Barroco Sevillano. Sevilla
2000, pág. 29.
3.- Retablo de la iglesia de San Luis de los Franceses de Sevilla, (retablo mayor de
la capilla doméstica). Fotografía extraída de “El Retablo de estípites”, capítulo II
del libro El Retablo Barroco Sevillano. Sevilla 2000, pág. 138.
4.- Retablo mayor de la iglesia del Divino Salvador de Sevilla. Fotografía
realizada por Jesús Vega.
5.- Imagen de San Juan realizada por Martínez Montañés. Fotografía extraída de
http://picasaweb.google.com/rafael.sanchez.cascajo
6.- Imagen de San José realizada por Pedro Roldán. Fotografía extraída de
http://www.lahornacina.com/semblanzasroldan.htm.
7.- Imagen de San José realizada por Pedro Duque Cornejo. Fotografía extraída de
la web de cultura de la Junta de Andalucía:
http://www.juntadeandalucia.es/cultura/web/publico/index.jsp
8.- Detalle del paso de la Exaltación de Ntro. Sr. Jesucristo. Fotografía extraída de
Sevilla Penitente, tomo II, pág. 13. Sevilla 1995.
9.- Detalle del paso de Jesús de la Salud y del Buen Viaje. Fotografía realizada por
Jesús Vega.

378
10.- Detalle del paso del Stmo. Cristo de la Sed. Fotografía realizada por Jesús
Vega.
11.- Columna salomónica. Fotografía realizada por Jesús Vega.
12.- Evangelista del paso del Stmo. Cristo de la Expiración, (El Museo).
Fotografía realizada por Jesús Vega.
13.- Cartela del paso de la Sagrada Cena. Fotografía realizada por Jesús Vega.
14.- Detalle de la cabeza de un ángel incluida en el respiradero de un paso.
Fotografía realizada por Jesús Vega.
15.- Detalle floral del canasto de un paso procesional. Fotografía realizada por
Jesús Vega.
16.- Motivos vegetales tallados en un paso procesional. Fotografía realizada por
Jesús Vega.
17.- Hojas talladas de cartílago en el respiradero de un paso. Fotografía realizada
por Jesús Vega.
18.- Detalle decorativo tallado en un paso procesional. Fotografía realizada por
Jesús Vega.
19.- Pájaro tallado en un candelabro. Fotografía extraída del capítulo “la cofradía
del Prendimiento, (Los Panaderos)”, tomo II de Misterios de Sevilla. Sevilla 2003,
pág. 66.
20.- Escudo corporativo tallado en un paso procesional. Fotografía realizada por
Jesús Vega.
21.- Capilla incluida en el canasto de un paso. Fotografía realizada por Jesús
Vega.
22.- Pelícano tallado incluido en un paso procesional. Fotografía realizada por
Jesús Vega.
23.- Águilas bicéfalas talladas en un paso procesional. Fotografía realizada por
Jesús Vega.
24.- Arcángel tallado para decorar el paso del Cristo de la Sangre, (San Benito).
Fotografía realizada por Jesús Vega.

379
25.- Perleado tallado en el canasto de un paso. Fotografía realizada por Jesús
Vega.
26.- Detalle decorativo en el respiradero de un paso. Fotografía realizada por Jesús
Vega.
27.- Detalle decorativo en el respiradero de un paso. Fotografía realizada por Jesús
Vega.
28.- Retablo mayor de la Catedral de Sevilla. Fotografía realizada por Jesús Vega.
29.- Puerta de la Concepción de la Catedral de Sevilla. Fotografía extraída de
http://www.turismoenfotos.com/items/espana/sevilla/747_puerta-de-la-
concepcion/
30.- Retablo de la Capilla de los Luises de Sevilla. Fotografía realizada por Jesús
Vega.
31.- Pórtico de la Asunción, (Catedral de Sevilla). Fotografía extraída de
http://www.foroxerbar.com/viewtopic.php?t=6341
32.- Tímpano de la Puerta de la Concepción de la Catedral de Sevilla. Fotografía
realizada por Jesús Vega.
33.- Paso de la Urna, (Santo Entierro). Fotografía realizada por Jesús Vega.
34.- Detalle del paso del Duelo a finales del siglo XIX, (Santo Entierro).
Fotografía extraída de Sevilla Penitente, tomo II, pág. 48. Sevilla 1995.
35.- Paso de la Lanzada. Fotografía realizada por Jesús Vega.
36.- Detalle del canasto del Cristo de las Misericordias, (Santa Cruz). Fotografía
realizada por Jesús Vega.
35.- Detalle de una columna gótica en un paso. Fotografía realizada por Jesús
Vega.
38.- Detalle de un ángel que decora un paso. Fotografía realizada por Jesús Vega.
39.- Cartela incluida en un paso gótico. Fotografía realizada por Jesús Vega.
40.- Detalle incluido en un respiradero. Fotografía realizada por Jesús Vega.
41.- Pequeño cuadro pintado en el canasto de un paso gótico. Fotografía realizada
por Jesús Vega.
42.- Capilla y cartela incluida en un paso. Fotografía realizada por Jesús Vega.

380
43.- Detalle del canasto de un paso gótico. Fotografía realizada por Jesús Vega.
44.- Detalle del canasto de un paso gótico. Fotografía realizada por Jesús Vega.
45.- Detalle del canasto de un paso gótico. Fotografía realizada por Jesús Vega.
46.- Frontal del canasto del paso del Stmo. Cristo de la Buena Muerte, (Los
Estudiantes). Detalle del canasto de un paso gótico. Fotografía realizada por Jesús
Vega.
47.- Retablo Mayor de la parroquia de San Roque de 1850, Extraído de “El
Ayuntamiento de Sevilla y el retablo mayor neoclásico de la Parroquia de San
Roque”, por José Roda Peña. Sevilla.
48.- San Pedro de Alcántara, (Cáceres). Fotografía extraída de
http://es.wikipedia.org/wiki/Enrique_P%C3%A9rez_Comendador
49.- Columna y pilastra de estilo corintio incluidas en un paso procesional. Detalle
del canasto de un paso gótico. Fotografía realizada por Jesús Vega.
50.- Detalle del canasto de un paso procesional. Fotografía realizada por Jesús
Vega.
51.- Frontón del canasto de un paso procesional. Fotografía realizada por Jesús
Vega.
52.- Escultura en un paso procesional. Fotografía realizada por Jesús Vega.
53.- Relieve incluido en un paso procesional. Fotografía realizada por Jesús Vega.
54.- Detalle de un respiradero. Fotografía realizada por Jesús Vega.

CAPÍTULO IV.- Siglos XIV-XVI: Primeros precedentes de pasos


procesionales

1.- Grabado anónimo de una procesión del XVI. Ilustración extraída de Sevilla
Penitente, tomo I, pág. 37. Sevilla 1995.
2.- Humilladero de la Cruz del Campo en la actualidad. Fotografía realizada por
Jesús Vega.
3.- Pintura del Humilladero de la Cruz del Campo de Sevilla. Ilustración extraída
de Sevilla Penitente, tomo I, pág. 14. Sevilla 1995.

381
4.- Grabado de una “roca”. Ilustración extraída de Sevilla Penitente, tomo III, pág.
126. Sevilla 1995.
5.- Ilustración de la Custodia en el Corpus de 1647. Extraída del libro de actas del
I Congreso de Capataces y Costaleros. Sevilla 1993.
6.- Dibujos de la antigua Archicofradía de Jesús Nazareno, (El Silencio). Archivo
de la corporación.

CAPÍTULO V.- Siglos XVII y XVIII: Evolución estilística del paso


procesional

1.- Detalle ilustración principios del XVII. Extraida de Anales de las cofradías
sevillanas, pág. 34. Sevilla 1984.
2-. Antigua cartela del paso del Descendimiento, (Quinta Angustia). Fotografía
extraída de Sevilla Penitente, tomo II, pág. 9. Sevilla 1995.
3.- Arcángel del paso de la Exaltación de Nuestro Señor Jesucristo, (Sevilla).
Fotografía extraída del tomo II de Sevilla Penitente, pág. 17.
4.- Cartela del paso de de la Exaltación de Nuestro Señor Jesucristo, (Sevilla).
Fotografía realizada por Jesús Vega.
5.- Cartela de la crucifixión del misterio de la Sagrada Cena. Fotografía realizada
por Jesús Vega.
6.- Paso actual de Ntro Padre Jesús del Gran Poder. Fotografía extraída de Sevilla
Penitente, tomo III, pág. 28. Sevilla 1995.
7.- Paso actual de Ntro. Padre Jesús del Gran Poder. Fotografía extraída de
http://www.arrakis.es/~nautylus/granpoder.htm
8.- Paso de Ntro. Padre Jesús del Gran Poder finales XIX. Archivo de la
Hermandad de Ntro. Padre Jesús del Gran Poder de Sevilla.
9.- Paso actual del Stmo. Cristo del Amor. Fotografía extraída de www.rafaes.com
10.- Ilustración propiedad de la Hermandad de Jesús Nazareno de Sevilla, (El
Silencio). Archivo de la cofradía.

382
11.- Ilustración firmada por M. Grima del paso de Ntro. Padre Jesús Nazareno en
el siglo XIX. Extraída del libro “Las Cofradías de Sevilla” en cromo-litografías.
Servicio de publicaciones de del Excmo. Ayuntamiento de Sevilla. Sevilla 1983.
12.- Detalle del ángel tallado por Hita del Castillo en el misterio de Jesús del
Silencio en el Desprecio de Herodes.
13.- Misterio de la Sagrada Mortaja en el siglo XIX. Fotografía extraída de
“Historia de las cofradías de Sevilla”. Publicación/coleccionable de Diario ABC
de Sevilla. Sevilla 1995, pág. 238.
14.- Paso del misterio de la Sagrada Mortaja en la actualidad. Fotografía extraída
de Sevilla Penitente, tomo II, pág. 35. Sevilla 1995.

CAPÍTULO VI.- Siglo XIX: Evolución estilística del paso procesional

1.- Dibujo de columna y capitel de orden corintio. Ilustración extraída de


http://www.gaztenet.com/teleformacion/griego/pages/contenido/corintio.htm.
2.- Ilustración firmada por M. Grima del paso las Cinco Llagas, (La Trinidad) en
el siglo XIX. Extraída del libro “Las Cofradías de Sevilla” en cromo-litografías.
Servicio de publicaciones de del Excmo. Ayuntamiento de Sevilla. Sevilla 1983.
3.- Ilustración del paso del Descendimiento, (Quinta Angustia), en el Santo
Entierro Magno de 1854. Diorama de los reales Alcázares de Sevilla.
4.- Ilustración firmada por M. Grima del paso del Sagrado Decreto, (La Trinidad)
en el siglo XIX. Extraída del libro “Las Cofradías de Sevilla” en cromo-
litografías. Servicio de publicaciones de del Excmo. Ayuntamiento de Sevilla.
Sevilla 1983.
5.- Paso de la Entrada en Jerusalén. Fotografía extraída de
http://foroelnazareno.mforos.com
6.- Ilustración firmada por M. Grima del paso del Stmo. Cristo de la Expiración,
(El Cachorro) en el siglo XIX. Extraída del libro “Las Cofradías de Sevilla” en

383
cromo-litografías. Servicio de publicaciones de del Excmo. Ayuntamiento de
Sevilla. Sevilla 1983.
7.- Ilustración de la Sagrada Cena en el Santo Entierro Magno de 1854. Diorama
de los Reales Alcázares de Sevilla.
8.- Ilustración del paso de la Urna en el Santo Entierro Magno de 1854. Diorama
de los Reales Alcázares de Sevilla.
9.- Ilustración del paso del Duelo en el Santo Entierro Magno de 1854. Diorama
de los Reales Alcázares de Sevilla.
10.- Ilustración del Stmo. Cristo de la Humildad y Paciencia en el Santo Entierro
Magno de 1854. Diorama de los Reales Alcázares de Sevilla.
11.- Paso de la Sagrada Oración de Jesús en el Huerto, (Monte-sion). Fotografía
del archivo de la cofradía.
12.- Paso de la Sagrada Oración en el Huerto, (Monte-sion) en 1935. Fotografía
extraída de “Historia de las cofradías de Sevilla”. Publicación/coleccionable de
Diario ABC de Sevilla. Sevilla 1995, pág. 150.
13.- Ilustración firmada por M. Grima del paso de la Coronación de Espinas, (El
Valle) en el siglo XIX. Extraída del libro “Las Cofradías de Sevilla” en cromo-
litografías. Servicio de publicaciones de del Excmo. Ayuntamiento de Sevilla.
Sevilla 1983.
14.- Paso de Jesús del Silencio en el Desprecio de Herodes. Fotografía extraída del
capítulo “la cofradía de Jesús del Desprecio de Herodes…” tomo I de Misterios de
Sevilla. Sevilla 2003, pág. 263.
15.- Ilustración firmada por M. Grima del paso del Stmo. Cristo de la Salud, (La
Carretería), en el siglo XIX. Extraída del libro “Las Cofradías de Sevilla” en
cromo-litografías. Servicio de publicaciones de del Excmo. Ayuntamiento de
Sevilla. Sevilla 1983.
16.- Paso de Jesús con la Cruz al Hombro. Foto extraída de
http://www.galeon.com/juliodominguez/2007/motin.html

384
17.- Ilustración del paso de Ntro. Padre Jesús de las Penas por Antonio Iglesias, (s.
XIX). Extraída del libro Anales de las cofradías sevillanas, de Juan Carrero
Rodríguez.
18.- Ilustración firmada por M. Grima del paso del Stmo. Cristo del Buen Fin en
el siglo XIX. Extraída del libro “Las Cofradías de Sevilla” en cromo-litografías.
Servicio de publicaciones de del Excmo. Ayuntamiento de Sevilla. Sevilla 1983.
19.- Ilustración firmada por M. Grima del paso de la Exaltación en el siglo XIX.
Extraída del libro “Las Cofradías de Sevilla” en cromo-litografías. Servicio de
publicaciones de del Excmo. Ayuntamiento de Sevilla. Sevilla 1983.
20.- Paso del Stmo. Cristo del Calvario en 1888. Fotografía del archivo de la
Hermandad.
21.- Paso del Prendimiento en torno a 1930. Fotografía extraída de Sevilla
Penitente, tomo II, pág. 42. Sevilla 1995.
22.- Paso del Duelo, (Santo Entierro) a principios del siglo XX. Fotografía
extraída de Sevilla Penitente, tomo II, pág. 48. Sevilla 1995.
23.- Paso del Triunfo de la Santa Cruz, (Santo Entierro). Fotografía realizada por
Jesús Vega.
24.- Paso de la Urna de Juan Rossy. Fotografía extraída de Sevilla Penitente, tomo
II, pág. 50. Sevilla 1995.
25.- Paso de la Lanzada a principios del siglo XX. Fotografía extraída de “Historia
de las cofradías de Sevilla”. Publicación/coleccionable de Diario ABC de Sevilla.
Sevilla 1995, pág. 118.
26.- Paso de Ntro. Padre Jesús de la Salud, (San Bernardo). Fotografía extraída de
http://foroelnazareno.mforos.com
27.- Paso del Stmo. Cristo del Calvario de 1865. Fotografía extraída de
http://foroelnazareno.mforos.com
28.- Paso del Stmo. Cristo de la Expiración, (El Museo). Fotografía extraída de
http://foroelnazareno.mforos.com
29.- Paso del Stmo. Cristo de las Aguas entre 1893 y 1897. Fotografía extraída de
http://foroelnazareno.mforos.com

385
30.- Ilustración firmada por M. Grima del paso del misterio de la Santa Cruz, (La
Hiniesta), en el siglo XIX. Extraída del libro “Las Cofradías de Sevilla” en cromo-
litografías. Servicio de publicaciones de del Excmo. Ayuntamiento de Sevilla.
Sevilla 1983.
31.- Paso de Jesús Nazareno, (La O). Fotografía extraída de
http://foroelnazareno.mforos.com
32.- Paso de la Soledad de San Buenaventura en torno a 1900. Fotografía extraída
de “Historia de las cofradías de Sevilla”. Publicación/coleccionable de Diario
ABC de Sevilla. Sevilla 1995, pág. 218.
33.- Paso del Stmo. Cristo de las Tres Caídas, (San Isidoro). Fotografía extraída de
“Historia de las cofradías de Sevilla”. Publicación/coleccionable de Diario ABC
de Sevilla. Sevilla 1995, pág. 230.
34.- Paso del Descendimiento, (Quinta Angustia). Fotografía extraída de “Historia
de las cofradías de Sevilla”. Publicación/coleccionable de Diario ABC de Sevilla.
Sevilla 1995, pág. 154.
35.- Paso del Stmo. Cristo de la Conversión. Fotografía extraída de
http://foroelnazareno.mforos.com
36.- Ilustración firmada por M. Grima del paso del Dulce Nombre de Jesús,
(Quinta Angustia), en el siglo XIX. Extraída del libro “Las Cofradías de Sevilla”
en cromo-litografías. Servicio de publicaciones de del Excmo. Ayuntamiento de
Sevilla. Sevilla 1983.
37.- Paso de Ntro. Padre Jesús de la Sentencia. Fotografía extraída de la web
oficial de la Hermandad: www.hermandaddelamacarena.es
38.- Ilustración firmada por M. Grima del paso del profeta Isaías, en el siglo XIX.
Extraída del libro “Las Cofradías de Sevilla” en cromo-litografías. Servicio de
publicaciones de del Excmo. Ayuntamiento de Sevilla. Sevilla 1983.
39.- Paso de Ntro. Padre Jesús de la Pasión a finales del siglo XIX. Fotografía
extraída de http://foroelnazareno.mforos.com

386
40.- Ilustración firmada por M. Grima del paso de las Siete Palabras en el siglo
XIX. Extraída del libro “Las Cofradías de Sevilla” en cromo-litografías. Servicio
de publicaciones de del Excmo. Ayuntamiento de Sevilla. Sevilla 1983.
41.- Paso de la Soledad de San Lorenzo de 1875. Fotografía extraída de “Historia
de las cofradías de Sevilla”. Publicación/coleccionable de Diario ABC de Sevilla.
Sevilla 1995, pág. 254.
42.- Paso del Stmo. Cristo de San Agustín. Fotografía extraída de
http://foroelnazareno.mforos.com
43.- Paso del Stmo. Cristo de la Expiración en 1921. Fotografía del archivo de la
cofradía.
44.- Paso de Jesús de la Salud y del Buen Viaje. Fotografía extraída de Sevilla
Penitente, tomo II, pág. 46. Sevilla 1995.
45.- Paso del Stmo. Cristo de las Tres Caídas de 1894, (Triana). Fotografía
extraída de “Historia de las cofradías de Sevilla”. Publicación/coleccionable de
Diario ABC de Sevilla. Sevilla 1995, pág. 198.
46.- Paso reformado del Stmo. Cristo de las Tres Caídas de 1894, (Triana).
http://foroelnazareno.mforos.com
47.- Frontal del canasto de Jesús Nazareno, (el Valle). Fotografía de Jesús Vega.
48.- Paso de la Columna y Azotes de Ntro. Señor Jesucristo a principios del siglo
XX. Fotografía extraída de http://foroelnazareno.mforos.com

CAPÍTULO VII.- 1900-1939: Evolución estilística del paso procesional

1.- Paso de Ntro. Padre Jesús Nazareno, (El Silencio). Fotografía realizada por
Jesús Vega.
2.- Paso de la Exaltación en 1921. Fotografía del archivo de la hermandad.
3.- Detalle del paso de la Exaltación en la actualidad. Fotografía extraída de
Sevilla Penitente, tomo II, pág. 13. Sevilla 1995.
4.- Paso de Ntro. Padre Jesús de la Sentencia. Fotografía extraída de la web oficial
de la hermandad: http://www.hermandaddelamacarena.es/

387
5.- Paso del Stmo. Cristo de la Salud, (San Bernardo). Fotografía extraída de
www.rafaes.com
6.- Paso del Stmo. Cristo de las Cinco Llagas. Fotografía extraída de
http://foroelnazareno.mforos.com
7.- Paso de Ntro. Padre Jesús de la Pasión. Fotografía del archivo de la
Universidad de Sevilla.
8.- Paso del Stmo. Cristo del Calvario. Fotografía de Jesús Vega.
9.- Paso de Jesús del Silencio en el Desprecio de Herodes de 1938. Fotografía
extraída de Sevilla Penitente, tomo III, pág. 16. Sevilla 1995.
10.- Cartela del paso de Jesús del Silencio en el Desprecio de Herodes. Fotografía
de Jesús Vega.
11.- Paso de las Siete Palabras de 1914, (en la foto de 1918 ya pertenece a la
hermandad del Buen Fin). Fotografía del archivo de la cofradía de San Bernardo.
12.- Paso del Stmo. Cristo del Buen Fin. Fotografía de Jesús Vega. Fotografía
extraída de http://foroelnazareno.mforos.com
13.- Paso de la Soledad, (San Buenaventura) en 1915. Fotografía extraída de
“Historia de las cofradías de Sevilla”. Publicación/coleccionable de Diario ABC
de Sevilla. Sevilla 1995, pág. 220.
14.- Paso del Stmo. Cristo de la Humildad y Paciencia a principios del siglo XX.
Fotografía del archivo de la cofradía.
15.- Paso de la Cena, probablemente en 1919. Fotografía del archivo de la
Hermandad de la Sagrada Cena de Sevilla.
16.- Paso de Jesús ante Anás en 1921. Fotografía extraída de “Historia de las
cofradías de Sevilla”. Publicación/coleccionable de Diario ABC de Sevilla. Sevilla
1995, pág. 98.
17.- Paso de la Coronación de Espinas, (El Valle). Fotografía extraída de Sevilla
Penitente, tomo III, pág. 18. Sevilla 1995.
18.- Detalle del paso de la Coronación de Espinas, (El Valle). Fotografía extraída
de Sevilla Penitente, tomo II, pág. 52. Sevilla 1995.
19.- Paso del Stmo. Cristo de la Fundación. Fotografía extraída de www.rafes.com

388
20.- Paso del Niño Jesús. Fotografía del archivo de la Universidad de Sevilla.
21.- Paso del Stmo. Cristo de la Expiración, (El Cachorro). Postales “Escudo de
Oro”. Ediciones FISA. Barcelona.
22.- Paso del Stmo. Cristo de la Expiración, (El Cachorro). Fotografía de Jesús
Vega.
23.- Paso de Ntro. Padre Jesús de las Penas, (San Roque). Fotografía extraída de la
web oficial de la hermandad: http://www.hermandadsanroque.com/
24.- Paso de Ntro. Padre Jesús de la Salud, (Los Gitanos). Fotografía extraída de
http://foroelnazareno.mforos.com
25.- Paso del Stmo. Cristo de las Misericordias en torno a 1922. Fotografía
extraída de http://foroelnazareno.mforos.com
26.- Paso de Jesús de la Salud, (La Candelaria). Fotografía realizada en torno a
1923, extraída de “Historia de las cofradías de Sevilla”. Publicación/coleccionable
de Diario ABC de Sevilla. Sevilla 1995, pág. 94.
27.- Paso del Stmo. Cristo de la Salud, (La Carretería). Fotografía extraída de
http://www.rafaes.com/html-2004/semana-santa-2007-viernes-santo-
carreteria.htm
28.- Detalle del paso del Stmo. Cristo de la Salud, (La Carretería). Fotografía
extraída de Sevilla Penitente, tomo II, pág. 58. Sevilla 1995.
29.- Paso del Descendimiento, (Quinta Angustia). Fotografía extraída de Sevilla
Penitente, tomo II, pág. 204. Sevilla 1995.
30.- Detalle del paso del Descendimiento, (Quinta Angustia). Fotografía de Jesús
Vega.
31.- Paso de La Piedad (el Baratillo), en 1937. Archivo de la hermandad del
Baratillo.
32.- Paso del Stmo. Cristo de la Salud, (Los Gitanos). Fotografía extraída de
“Historia de las cofradías de Sevilla”. Publicación/coleccionable de Diario ABC
de Sevilla. Sevilla 1995, pág. 206.
33.- Paso de la Sagrada Cena. Fotografía de Jesús Vega.

389
34.- Paso del Stmo. Cristo de la Buena Muerte, (Los Estudiantes). Fotografía de
Jesús Vega.
35.- Detalle del retablo neogótico de la Capilla de Los Luises de Sevilla.
Fotografía de Jesús Vega.
36.- Detalle del paso del Stmo. Cristo de la Buena Muerte, (Los Estudiantes).
Fotografía de Jesús Vega.
37.- Paso del Stmo. Cristo de las Aguas. Fotografía del archivo de la Universidad
de Sevilla.
38.- Paso de la Presentación al Pueblo en 1922. Fotografía extraída de
http://foroelnazareno.mforos.com.

CAPÍTULO VIII.- 1939-2000: Evolución estilística del paso procesional

1.- Paso del Stmo. Cristo de la Expiración, (el Museo). Fotografía extraída de
Sevilla Penitente, tomo II, pág. 65. Sevilla 1995.
2.- Arcángel del paso del Stmo. Cristo de la Expiración, (el Museo). Fotografía de
Jesús Vega.
3.- Paso de Cristo de la Hermandad del Baratillo. Fotografía extraída de “Historia
de las cofradías de Sevilla”. Publicación/coleccionable de Diario ABC de Sevilla.
Sevilla 1995, pág. 123.
4.- Paso de Jesús ante Anás. Postales “Escudo de Oro”. Ediciones FISA.
Barcelona.
5.- Cartela del paso de Jesús ante Anás. Fotografía de Jesús Vega.
6.- Paso de Ntro. Padre Jesús de la Salud, (Los Gitanos). Postales “Escudo de
Oro”. Ediciones FISA. Barcelona.
7.- Paso del Traslado al Sepulcro, (Santa Marta). Fotografía extraida de la web
oficial de la hermanad: www.hermandaddesantamarta.org
8.- Paso de Ntro. Padre Jesús de la Sentencia, (La Macarena). Fotografía extraída
de amarguraysilencio.blogspot.com

390
9.- Detalle del paso de Ntro. Padre Jesús de la Sentencia, (La Macarena).
Fotografía extraída de Sevilla Penitente, tomo II, pág. 72. Sevilla 1995.
10.- Paso de Ntro. Padre Jesús de las Tres Caídas, (San Isidoro). Fotografía
extraída de sssevillaxxi.blogspot.com
11.- Paso de la Soledad, (San Lorenzo). Fotografía de Jesús Vega.
12.- Detalle del paso de la Soledad, (San Lorenzo). Fotografía de Jesús Vega.
13.- Paso del Stmo. Cristo de la Conversión, (Montserrat). Fotografía extraída de
Sevilla Penitente, tomo II, pág. 67. Sevilla 1995.
14.- Paso del Prendimiento, (Los Panaderos). Fotografía extraída de Sevilla
Penitente, tomo II, pág. 94. Sevilla 1995.
15.- Detalle del paso del Prendimiento, (Los Panaderos). Fotografía extraída del
capítulo “La cofradía del Prendimiento, (Los Panaderos)”, tomo II de Misterios de
Sevilla. Sevilla 2003, pág. 66.
16.- Paso de la Entrada en Jerusalén. Fotografía extraída del capítulo “la cofradía
de la Entrada en Jerusalén…”, tomo I de Misterios de Sevilla. Sevilla 2003, pág.
158.
17.- Paso de Jesús ante Caifás, (San Gonzalo) de Manuel Guerra. Fotografía
extraída de http://foroelnazareno.mforos.com/
18.- Paso de Jesús ante Caifás, (San Gonzalo) de Manuel Guerra. Fotografía de
Jesús Vega.
19.- Paso de la Presentación al Pueblo, (San Benito) de 1953. Fotografía extraida
de http://foroelnazareno.mforos.com
20.- Paso del Cristo de las Almas, (Los Javieres). Foto extraída de la web oficial
de la cofradía: http://www.javieres.com/html/pasocristo.htm
21.- Paso del Stmo. Cristo de las Tres Caídas, (Triana). Fotografía extraida de
http://trescaidastriana.blogspot.com/2008_04_01_archive.html
22.- Paso de la Piedad, (Los Servitas). Fotografía de Jesús Vega.
23.- Paso del Stmo. Cristo de la Humildad. Fotografía de Jesús Vega.
24.- Paso del Stmo. Cristo de la Expiración, (El Cachorro). Fotografía extraída de
www.pasionensevilla.es.

391
25.- Paso del Stmo. Cristo de la Sed. Fotografía de Jesús Vega.
26.- Paso del Ntro. Padre Jesús Cautivo. Fotografía extraída del capítulo “la
cofradía de Nuestro Padre Jesús Cautivo…”, tomo I de Misterios de Sevilla.
Sevilla 2003, pág. 361.
27.- Paso de la Presentación al Pueblo, (San Benito). Fotografía de Jesús Vega.
28.- Cartela del paso de la Presentación al Pueblo, (San Benito). Fotografía de
Jesús Vega.
29.- Paso del Stmo. Cristo de la Sangre, (San Benito). Fotografía extraída de
www.pasionensevilla.tv
30.- Arcángel del paso del Stmo. Cristo de la Sangre, (San Benito). Fotografía de
Jesús Vega.
31.- Paso del Stmo. Cristo de las Penas, (La Estrella). Fotografía extraída de
http://foroelnazareno.mforos.com/.
32.- Detalle del respiradero del paso del Stmo. Cristo de las Penas, (La Estrella).
Fotografía extraída de http://foroelnazareno.mforos.com/.
33.- Paso de Jesús Despojado. Fotografía extraída de
http://foroelnazareno.mforos.com/.
34.- Paso de la Sagrada Columna y Azotes, (Las Cigarreras). Fotografía extraída
de www.rafaes.com.
35.- Cartela del paso de la Sagrada Columna y Azotes, (Las Cigarreras).
Fotografía de Jesús Vega.
36.- Paso de Ntro. Padre Jesús de la Salud, (Los Gitanos). Fotografía de Jesús
Vega.
37.- Detalle del paso de Ntro. Padre Jesús de la Salud, (Los Gitanos). Fotografía
de Jesús Vega
38.- Detalle del paso de Ntro. Padre Jesús de la Salud, (Los Gitanos). Fotografía
de Jesús Vega.
39.- Paso de Ntro. Padre Jesús de las Penas, (San Vicente). Fotografía extraída de
Sevilla Penitente, tomo II, pág. 70. Sevilla 1995.

392
40.- Paso de Ntro. Padre Jesús de la Salud, (La Candelaria). Fotografía extraída de
la web oficial de la hermandad:
http://www.hermandadcandelaria.com/patrimonio.html
41.- Paso del Stmo. Cristo de la Vera-Cruz. Fotografía de Jesús Vega.
42.- Paso de Jesús de la Redención. Fotografía extraída de Sevilla Penitente, tomo
II, pág. 92. Sevilla 1995.
43.- Paso de Jesús Resucitado. Fotografía extraída de www.rafaes.com
44.- Paso de Jesús Nazareno, (La O). Fotografía extraída de
http://foroelnazareno.mforos.com/.
45.- Paso del Decreto, (La Trinidad). Fotografía extraída de www.rafaes.com
46.- Paso de Ntro. Padre Jesús de la Paz, (Carmen Doloroso). Fotografía extraída
de www.rafaes.com
47.- Paso de Ntro. Padre Jesús de la Victoria, (La Paz). Fotografía de Jesús Vega.
48.- Paso de Ntro. Padre Jesús de la Oración en el Huerto, (Monte-sion).
Fotografía extraída de www.rafaes.com
49.- Paso de la Sagrada Lanzada. Fotografía de Jesús Vega.
50.- Paso del Stmo. Cristo de la Expiración, (Santa Cruz). Fotografía de Jesús
Vega.
51.- Frontal del canasto del paso del Stmo. Cristo de la Expiración, (Santa Cruz).
Fotografía extraída de Sevilla Penitente, tomo II, pág. 77. Sevilla 1995.
52.- Paso del Duelo, (Santo Entierro). Fotografía de Jesús Vega.
53.- Frontal del canasto del paso del Duelo, (Santo Entierro). Fotografía de Jesús
Vega.
54.- Paso de la Urna, (Santo Entierro). Fotografía de Jesús Vega.
55.- Paso de la Entrada en Jerusalén. Fotografía extraída de “Historia de las
cofradías de Sevilla”. Publicación/coleccionable de Diario ABC de Sevilla. Sevilla
1995, pág. 6.
56.- Paso de Jesús Despojado. Fotografía realizada en 1941. Archivo de la
cofradía.

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57.- Paso de Ntro. Padre Jesús de la Salud, (Los Gitanos). Fotografía del Archivo
de la Universidad de Sevilla.
58.- Paso de la Vera Cruz. Fotografía extraída de
http://foroelnazareno.mforos.com
59.- Paso del Stmo. Cristo de Burgos. Fotografía de Jesús Vega.
60.- Paso del Stmo. Cristo de la Sed de 1971. Fotografía extraída de
http://foroelnazareno.mforos.com/.
61.- Paso del Stmo. Cristo de la Buena Muerte, (La Hiniesta). Fotografía extraída
de www.rafaes.com
62.- Paso de la Soledad de San Buenaventura. Fotografía extraida de
http://sssevillaxxi.blogspot.com/2008_05_01_archive.html

CAPÍTULO IX.- La talla procesional en la actualidad

1.- Paso del Stmo. Cristo del Desamparo y Abandono. Fotografía de Jesús Vega.
2.- Paso de Jesús del Soberano Poder ante Caifás. Fotografía extraída de
http://sssevillaxxi.blogspot.com/
3.- Paso del Stmo. Cristo de las Aguas. Extraída de
http://www.hermanoscaballero.com/
4.- Paso de Jesús de la Redención. Fotografía de Jesús Vega.
5.- Detalle del paso de Jesús de la Redención. Fotografía de Jesús Vega.
6.- Paso de Ntro. Padre Jesús Cautivo y Rescatado. Fotografía extraída de
www.rafaes.com
7.- Paso del Stmo. Cristo de la Vera Cruz. Fotografía extraída de
http://www.galeon.com/juliodominguez/2008/evera.html

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