VALORACIÓN AMBIENTAL

ELABORADO POR:

RAMIRO ALEXANDER CHAMBA BRICEÑO

DOCENTE: ING. STALIN PALADINES

UNIVERSIDAD NACIONAL DE LOJA

AREA DE LA ENERGIA LAS INDUSTRIAS Y LOS RECURSOS NATURALES NO

RENOVABLES

GEOLOGIA AMBIENTAL Y ORDENAMIENTO TERRITORIAL

ECONOMÍA AMBIENTAL

Loja, Ecuador

2017
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INTRODUCCIÓN:

El presente ensayo cuyo tema es la valoración ambiental tiene como objetivo definir y

comprender los conceptos de la valoración ambiental la misma que pretende obtener una

medición monetaria de la ganancia o pérdida de bienestar o utilidad que una persona, o

un determinado colectivo, experimenta a causa de una mejora o daño de un activo

ambiental accesible a dicha persona o colectivo. Azqueta (2002)

La valoración ambiental puede definirse formalmente como un conjunto de

técnicas y métodos que permiten medias las expectativas de beneficios y costes derivados

de algunas de las siguientes acciones: a) uso de un activo ambiental; b) realización de una

mejora ambiental; c) generación de un daño ambiental. Freeman (1993) y además el

ambiente tiene valor porque cumple con una serie de funciones que afectan el bienestar

de las personas: los usuarios. Las personas se ven afectadas positivamente al gozar de un

ambiente sano; si se alterara el ambiente se verían afectados negativamente. (Azqueta,

1994).

Por otro lado en cuento a los métodos de valoración ambiental Romero (1997) nos

indica que estos tienen un punto en común, que consiste en conceptualizar y medir los

beneficios ambientales por lo que realmente la gente desea ese beneficio. De una manera

análoga, los costes asociados a un daño ambiental se conceptualizan y miden por lo que

realmente a la gente le disgusta ese daño ambiental, y ese daño subroga por lo que la gente

está dispuesta a aceptar como compensación por dicho daño.

El trabajo se desarrollara desde conceptos básicos hasta temas más puntuales, por

lo tanto se tendrá una idea clara de la valoración ambiental y su incidencia sobre el

ambiente, además se tomará en cuenta fuentes bibliográficas así como libros y

documentos referentes al tema en cuestión.

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DESARROLLO:

Valoración Ambiental

Sobre la conceptualización de valoración ambiental existen conceptos básicos como lo

menciona Azqueta (2002); es un instrumento al servicio de la política ambiental mediante

el cual se pretende imputar valores económicos a los bienes y servicios ambientales. La

valoración económica resulta necesaria para lograr dos objetivos económicos prioritarios

en todo sistema económico: la eficiencia económica y el crecimiento sostenible.

Por una parte, la escuela de economía ambiental conceptualiza que todos los valores

(ambientales) son antropocéntricos, instrumentales y utilitarios: es decir, derivan de su

utilidad para los seres humanos; de igual manera la escuela de la ecología profunda, no

dice que el medio ambiente no humano, los ecosistemas y bienes naturales, tienen un

valor intrínseco, independiente de los intereses humanos. Es por estas razones que se

analiza inmediatamente que el ecosistema no debería ser valorado, ya que no es posible

conocer ese valor intrínseco, además que se incluyen juicios de valor y no los propios del

medio ambiente, además el problema de no valorar los bienes ambientales es que esto

equivale, en la práctica y en ausencia del consenso citado, a que su precio sea nulo. Y

cuando un bien es nulo en economía, su consumo es infinito. Freema (1993)

Turner (1993) menciona que la valoración ambiental está basada en un enfoque

antropocéntrico y utilitario. Aunque no incluye todos los posibles valores, es más amplia

de lo que parece, y recoge o trata de recoger todos los que contribuyen a la satisfacción o

bienestar de la humanidad.

Finalmente es necesario conocer sobre la interpretación errónea del valor ambiental, en

ocasiones se ha utilizado como estimador del mismo el coste de reemplazo. Es decir se

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determina el valor ambiental en función de lo que costaría sustituir los servicios del bien

ambiental por otros similares, siendo un enfoque erróneo ya que hace cuando menos

peculiar un análisis coste – beneficio: los costes y los beneficios podrían incluso coincidir,

entonces este método debe usarse únicamente cuando se cumplan ciertas condiciones

como: la alternativa considerada debe proporcionar exactamente los mismos servicios que

el bien ambiental; la alternativa debe ser la más barata posible; y debe haber evidencia

suficiente de que el servicio sería demandado por la sociedad si fuera provisto mediante

dicha alternativa.

TIPOS DE VALORES AMBIENTALES:

El medio ambiente, o los bienes ambientales, proporcionan servicios a la humanidad, que

solo que le dan valor y que nos permiten distinguir entre los distintos tipos de éste:

 Fuente de recursos productivos

 Sumidero de residuos.

 Fuente de utilidad (no asociada a la producción)

 Servicios de soporte a la vida en la Tierra.

Siendo la fuente de recursos productivos medida por la contribución a la generación de

beneficios en las actividades de producción al igual que el segundo (sumidero de

residuos). En ambos casos, se suelen clasificar como beneficios indirectos del medio

ambiente, ya que su valor se calcula no de forma directa, sino como ya hemos visto a

través de su contribución al proceso productivo.

La fuente de utilidad incluye los impactos directos de los bienes ambientales en la

utilidad. Estos impactos pueden derivarse del disfrute de bienes ambientales (pesca,

senderismo); que pueden ser consuntivos o no consuntivo: por ultimo las actividades
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económicas también se benefician de los servicios de soporte a la vida en la Tierra como

regulación del clima, mantenimiento de la capa de ozono.

Así pues, generalmente se distingue entre varios tipos de valor en función del servicio

que proporciona el medio ambiente, tal como se recoge en el siguiente cuadro, englobados

del valor económico total. Tietenberg (2006)

Gráfica 1. Relación del valor económico total

Fuente: Tietenberg (2006)

El valor de uso directo es el que corresponde parcialmente al tercer servicio del medio

ambiente mencionado, mientras que el indirecto correspondería a los dos primeros

servicios, y en lo que sea posible, al cuarto. El valor de no uso correspondería a la parte

de no utilización de la función de utilidad directa del medio ambiente. Pearce (1995)

Entonces el valor de no uso es el que un individuo asocia a un activa ambiental cuyos

servicios no ha utilizado ni piensa utilizarlos en el futuro, pero cuya simple existencia le

reporta un valor por sí mismo o como legado a sus descendientes debe tenerse en cuenta

el valor de existencia que es interpretado por algunos como un valor intrínseco; el valor
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de existencia tal como se entiende generalmente es un valor antropocéntrico y utilitario,

mientras que el valor intrínseco es deontológico y biocentrico. Azqueta (2002).

MÉTODOS DE VALORACIÓN AMBIENTAL:

Los métodos de valoración ambiental pretenden obtener la disposición a pagar por un

cambio positivo en un bien ambiental (o la disposición a aceptar una compensación por

un cambio negativo). Se distinguen por la manera en que obtienen del consumidor esta

medida de valor. (Tietenberg, 2006) para clasificarlos se toma en cuenta dos aspectos: si

la valoración procede de un comportamiento observado en el mercado, o de un

comportamiento hipotético; o si expresa directamente por el consumidor o bien se revela

por sus decisiones.

Gráfica 2. Clasificación de los métodos de valoración

Fuente: Tietenberg (2006)

Finalmente la valoración económica de impactos ambientales consiste en averiguar cómo

puede traducirse en unidades monetarias el cambio originado en el bienestar de las

personas, al alterarse la calidad del medio ambiente. Por otra parte, es conocido que la

teoría microeconómica proporciona una serie de medidas monetarias del cambio en el

bienestar individual, bien fundamentadas teóricamente y acertadas desde el punto de vista

analítico. Tietenberg (2006). Las situaciones que se pretenden valorar económicamente

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con relación a los bienes y servicios ambientales, son, normalmente, de dos tipos si bien

se encuentran relacionadas entre sí. En primer lugar, puede interesar conocer la valoración

de los servicios que proporciona un determinado recurso ambiental. Entonces cunado los

bienes y servicios ambientales carecen de mercado, y por tanto de precio, existen, dos

opciones para efectuar su valoración. La primera consiste en inferir el valor que las

personas confieren al recurso en cuestión analizando el comportamiento de éstas en

mercados con los que el recurso ambiental está relacionado, estos métodos son

denominados métodos indirectos (o métodos de preferencias reveladas), siendo los más

desarrollados coste de viaje, y los métodos basados en el enfoque de los precios

hedónicos, cuando se pretende evaluar la contribución de determinados activos

ambientales en la producción de bienes y servicios destinados a los mercados se emplea,

el enfoque de la función de producción.

La segunda opción se adopta cuando no es posible ni siquiera encontrar mercados

relacionados con el bien o servicio ambiental. En este caso se infiere el valor económico

a partir de la simulación de la creación de un mercado. Denominándose métodos directos

(métodos de las preferencias establecidas), y dentro de este enfoque pueden distinguirse

las distintas fórmulas que presenta la valoración contingente. Romero (1997)

ENFOQUE DE LA FUNCIÓN DE PRODUCCIÓN:

En este método el bien ambiental objeto de estudio se contempla como un factor de

producción adicional integrante de la función de producción de un bien con valor de

mercado. Álvarez (1994); además Herruzo y Zekri (1994) también estimaron mediante el

cómputo de una “función de daño”, el valor de las pérdidas económicas que supone el

mantenimiento del laboreo tradicional frente a la alternativa del laboreo de conservación.

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MÉTODO DEL COSTE DE VIAJE:

La realización de gran número de mejoras en el medio natural permite ampliar las

oportunidades de recreo de lugares específicos o incluso de regiones enteras. El método

del coste de viaje presenta multiples variantes, que, básicamente suponen la utilización

del coste de viaje a un espacio natural de interés como medida de su “precio”. Esta

información se utiliza, junto a la información relativa a la cantidad de visitas al lugar para

estimar la demanda de sus servicios recreativos. Azqueta y Pérez (1997).

MÉTODO DE LOS PRECIOS HEDÓNICOS

Se basa en la teoría de las características de los bienes. Lancaster (1996). La idea

subyacente a la técnica de los precios hedónicos es que, si un bien está en realidad

constituido por un conjunto de atributos, entonces su precio de mercado deberá ser un

agregado de los precios individuales de todos ellos. Este método se ha utilizado

frecuentemente para medir el impacto de la calidad del aire, el nivel de ruidos, o la

proximidad de zonas verdes en el precio de las viviendas urbanas. Garrod y Willis (1992).

MÉTODO DE VALORACIÓN CONTINGENTE

De igual manera Freema (1993) nos menciona que la valoración contingente, es un

método directo de valoración económica. Ante la ausencia de mercados propios o

relacionados para los activos ambientales, el método de la valoración contingente lo que

hace es simular dichos mercados creando un mercado hipotético. La observación del

mercado hipotético se hace mediante un cuestionario que se distribuye entre una muestra

representativa de la población de usuarios o consumidores potenciales de un bien o

servicio ambiental.
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Este método puede ser utilizado para valorar todo tipo de bienes y servicios ambientales.

Además, al contrario que los métodos anteriores permiten estimar valores de opción y

valores de existencia. El método de la valoración contingente es el método de valoración

económica de impactos ambientales más utilizado.

CONCLUSIONES

La valoración ambiental dentro de los parámetros ambientales es de suma importancia ya

que permite al ambiente tener derechos sobre el hombre, además de garantizar el

compromiso a la regeneración de los espacios que hayan sido contaminados o tengan

algún impacto negativo para el mismo ambiente. Sin embargo hay que tener en cuenta

que muchos de los valores monetarios no representan la realidad de los daños ocasionados

ya que el ambiente en si es no es posible asignarle un valor monetario definido por lo

tanto es necesario el uso de métodos que permitan acercarnos a la realidad del mismo.

Al momento de realizar estudios de valoración ambiental tiene que ver con el hecho de

que, en la práctica, no es posible encontrar las condiciones ideales que se suponen,

normalmente, en los métodos teóricos de evaluación económica de impacto ambiental,

Así, a menudos es difícil delimitar con exactitud la relación entre el cambio ambiental y

las acciones económicas de determinados agentes.

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REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS:

AZQUETA, D. (2002). Introducción a la economía ambiental, McGraw-Hill, Madrid.

AZQUETA, D. y PÉREZ, L. (1997). El valor económico de los servicios recreativos de

los espacios naturales. McGraw-Hill, Madrid.

ROMERO, C. (1997). Economía de los recursos ambientales y naturales, Alianza

Economía, Madrid.

PEARCE, D.W. y TURNER, K. H. (1995), Economía de los recursos naturales y del

medio ambiente, Celeste, Madrid.

FREEMA, A.M. (1993). The measurement of environmental and resources values:

Theory and methods, Resources for the future, Washington D.C.