Professional Documents
Culture Documents
Instrumentación y escala
Como en otros períodos, la instrumentación se adaptó a los requerimientos musicales
del período. Compositores como Hector Berlioz orquestaron sus obras de una forma
nunca antes escuchada, dándole una nueva prominencia a los instrumentos de viento.
El tamaño de la orquesta estándar aumentó, y se incluyeron instrumentos tales como
el píccolo y corno inglés, que antes se utilizaban muy ocasionalmente. Mahler escribió
su octava sinfonía, conocida como la Sinfonía de los miles, por la masa orquestal y
coral que se requiere para interpretarla.
Además de necesitar una orquesta más grande, las obras del romanticismo se
tornaron más largas. Una sinfonía típica de Haydn o Mozart, compositores del
clasicismo, puede durar aproximadamente veinte o veinticinco minutos. Ya la tercera
sinfonía de Beethoven, que se suele considerar como del romanticismo inicial, dura
alrededor de cuarenta y cinco minutos. Y esta tendencia creció notablemente en las
sinfonías de Anton Bruckner y alcanzó sus cotas máximas en el caso de Mahler, con
sinfonías que tienen una hora de duración (como es el caso de la primera y la cuarta)
hasta sinfonías que duran más de una hora y media (como la segunda, tercera o
novena).
Por otro lado, en el romanticismo creció la importancia del instrumentista virtuoso. El
violinista Niccolò Paganini fue una de las estrellas musicales de principios del siglo
XIX. Liszt, además de ser un notable compositor, fue también un virtuoso del piano,
muy popular. Durante las interpretaciones de los virtuosos, solían destacar más ellos
que la música que estaban interpretando.
Estos son algunos de los instrumentos que aparecen en el romanticismo:
VIENTO
Contrafagot: Especie de fagot de grandes dimensiones, cuyos sonidos se producen a
la octava grave del fagot ordinario.
Saxofón: Instrumento de viento compuesto de un tubo cónico de metal encorvado en
forma de U, con varias llaves y una boquilla de madera y caña. Los hay de varios
tamaños.
Corno inglés: Instrumento de viento, más grande y de sonido más grave que el oboe.
Tuba: Instrumento de viento de grandes proporciones y de sonoridad voluminosa y
grave.
TECLADO
Piano: Aunque ya existía en el Clasicismo, el piano es el gran instrumento del
romanticismo. Permite la mayor expresividad a los compositores, que son, muchas
veces, virtuosos de este instrumento.
BREVE CRONOLOGÍA
Post-romanticismo (1870–1949)
Se puede considerar un movimiento de finales del siglo XIX y principios del XX que se
diferencia del Romanticismo por la exuberancia orquestal y la desmesura en los
desarrollos sinfónicos, también se caracteriza por un intenso cromatismo que supera
a Richard Wagner y acaba en la atonalidad. En los compositores postrománticos se
observa la melancolía que les produce la pérdida de la cultura romántica.
Los compositores más representativos de este estilo fueron Gustav Mahler y Richard
Strauss
El músico romántico
Por la actitud ante la sociedad y el mundo, Beethoven se convirtió en el modelo del
movimiento romántico, que a la vez no dejaba de ser un modelo peligroso. Fue,
ciertamente, la figura de éste la que proporcionó a la era romántica el paradigma para
su concepto de "Artista". Esto no hizo desaparecer la idea que se tenía de "músico"
que prestaba a la sociedad un servicio directo, es decir, el canto, organista de iglesia,
cantante de coro, director de orquesta de teatro y un largo etcétera.
Lo que sí está claro es que la etapa romántica dio lugar al enfrentamiento entre el
"artista" y el "filisteo" , como decía Robert Schumann musicalmente en su
obra Carnaval. Con Beethoven se inició un período en el que las sinfonías, oratorios,
música de cámara, coral y lírica, de todo tipo, e incluso las óperas, se componían sin
que nadie las encargara, para un público imaginario, para el futuro, y para la
eternidad.
El aislamiento del músico romántico no se produjo sin un efecto retroactivo en su
personalidad y en el carácter de su obra. Con anterioridad a 1800 toda composición
tenía que ser susceptible de una valoración inmediata; si la desviación de las viejas
costumbres, de la tradición, era excesiva, no quedaba exenta de peligros, como más
de un compositor tuvo ocasión de aprender por propia experiencia. Este fue el caso
de Monteverdi, Gluck, o Haydn entre otros.
Por otro lado, competir en originalidad era, más la excepción que la regla. Así pues,
las generaciones se sucedían. Los músicos románticos plantaron cara a la tradición, y
no sólo dejaron de evitar la originalidad, sino que la persiguieron y cuanto más libre de
ideas preconcebidas estuviera una obra, tanto mayor era la estimación que
despertaba.
La música romántica, la música del siglo XIX, aparece repleta de una sucesión de
personalidades de lo más variadas, con una serie de perfiles mucho más acusados y
diferenciados que en los siglos precedentes, y resulta una tarea muy difícil trazar con
nitidez la trayectoria de su evolución.
TRABAJO
Alumno :
Profesor :
Ricci Chafloque Urbina
Tema :
La Música en el Romanticismo
Curso :
Historia de la Música III
ESFAP :
Ernesto López Mindreau