You are on page 1of 28

CUENTOS MITOS Y LEYENDAS

Provincia Germán Busch

1
PRESENTACIÓN

L
as políticas asumidas por el Gobierno Autónomo
Departamental en el ámbito cultural están definidas por dos
áreas de acción: la valoración de la cultura a través de la
implementación de espacios adecuados para la expresión de
manifestaciones culturales en un ambiente de intercambio que
permita rescatarlas y fortalecerlas. Además el fomento al respeto,
valoración y afirmación de todas las identidades culturales del
departamento.
En este marco, la presente colección rescata para las futuras
generaciones un conjunto de cuentos, mitos y leyendas que
reflejan la identidad cultural de cada una de nuestras subregiones.
A través de ese imaginario, místico en algunos casos, cada
narración nos abre paso a múltiples dimensiones en su lectura.
En ellos se ven reflejados valores, fe, analogías con la realidad
actual, simbolismos y cosmovisiones.
Pero esencialmente, este material es un espacio para que los
jóvenes expresen las diversas facetas que representa la memoria
oral de sus pueblos, incentivando nuevos valores en el género
literario, apostando al continuo desarrollo cultural cruceño y que
hoy finalmente ponemos al alcance de la población en general.

Rubén Costas Aguilera


GOBERNADOR DEL DEPARTAMENTO

3
SOBRE ESTA EDICIÓN

L
a Secretaría de Educación y Cultura, con el propósito de
estimular la creatividad de los estudiantes y principalmente
recuperar el acervo cultural guardado en la memoria oral y
escrita de cada provincia; a través de su Dirección de Cultura y
Turismo, encara desde la gestión 2012 el Concurso de Cuentos,
Mitos y Leyendas.
El presente material es el resultado de las obras ganadoras de
estos concursos: cuentos con temáticas y contenido regional,
acompañados de ilustraciones y con redacción vertida en
español. No obstante, se buscó privilegiar a aquellos documentos
que se presenten en su dialecto regional con su correspondiente
traducción.
Los participantes en esta primera etapa fueron estudiantes desde
5to de primaria hasta 5to de secundaria. Se estimuló que sus
obras estuviesen desarrolladas en base al diálogo con personas
de la tercera edad que habiten en sus municipios, fomentando
así el diálogo intergeneracional.
Cada relato juvenil es amplio y diverso en cada lugar; refleja el
contexto natural, cultural e histórico; creatividad en la redacción,
descripción de lugares, personajes y diálogos narrados con
modismos de la zona.
El jurado compuesto por personalidades ligadas al ámbito literario
y cultural, deliberó y definió los cuentos, mitos y leyendas que
mejor mostraban la singularidad de su población.
Esta publicación pretende contribuir a rescatar, revalorizar y
promover este tipo de expresiones, además de compartir el
conocimiento transmitido de generación en generación por la
tradición oral como parte de su patrimonio intangible. Y como
fin definitivo, fortalecer la identidad cultural de cada una de las
subregiones del departamento.

4
ÍNDICE
Título Pag.

La Catarata de Santa Tecla 6


La Sirenita encantada de bahía Cáceres 8
El Encanto 11
El Carbunco 13
Los Guardianes del Mutún 16
La Maquina Vieja 19
El Guajojó 21
La Leyenda del Mutún 26

5
LA CATARATA DE
SANTA TECLA

6
Una historia desarrollada hacia 1980 a 1990, en aquel entonces
el viaje de Puerto Suárez a Santa Cruz duraba cinco meses, en
el carretón tirado por seis o siete bueyes. Cierto día, un fraile
cuyo nombre se perdió en el tiempo, debió venir hacia Puerto
Suárez, punto clave de la frontera con el Brasil.
Una caravana de carretones venía de Santa Cruz hacia Puerto,
se dirigía al Bananal (ahora conocido como ZOFRAMAQ)
nombrado así por la naciente de la quebrada que allí había.
A la mitad del viaje, el fraile le pide a la caravana detenerse
para que los bueyes pastoreen en lo que se conoce como El
Tumbador Grande. Más allá de El Tumbador uno de la caravana
le dice al fraile que quería ver la catarata que allí reposa. El fraile,
aceptó y cuando llegaron a la catarata se quedó asombrado por
su belleza; la catarata tenía la forma de un plato, con aguas
cristalinas.
El fraile delante de esa belleza, quedó sorprendido por su
hermosa naturalidad y la bautizó con el nombre de Catarata de
Santa Tecla.

Estudiantes: Joel Clinton Vélez Ardaya, Ray Diego


Rivero Durán, Daniela Gil Ribera, Marlucy Fátima
Gallardo Roca, Camila Suárez Estenssoro, Thiany
Rebeca Rocha Mendoza
Relator: Reimundo Rivero Caballero
Unidad Educativa: Madre Clara Ricci
Maestra (o): Diane Nery Ayala Perrogón

7
LA SIRENITA ENCANTADA
DE BAHÍA CÁCERES
La sirena es una guardiana de la Bahía de Cáceres de un
hermoso lugar llamado Puerto Suárez, se dice que aparece
en las noches de luna llena, que es cuando la sorprenden
sentada en una gran piedra. Tiene el cabello muy largo, a veces
difícil de mirarla porque brilla y cuando ella se da cuenta que
los pescadores la están mirando pronto se da un zambullido y
desaparece inmediatamente esta bella sirena.
Pero cuando ella quiere asustar a los pescadores que van
durante la noche y dejan sus redes templadas para ver si sacan
diferentes pescados que hay en el lugar como pirañas, ventones,
sábalos, pacuses y mucho más, la sirena rompe las redes con
sus filosos dientes haciendo que los pescadores salgan del lugar
y escapen, entonces la sirena queda feliz dando fuertes gritos
de alegría pudiendo hacer que los pescadores queden sordos
quienes enseguida tienen que escapar.
La sirena encantada solo se deja ver por los hombres de este
lugar. Cierto día un soldadito que se encontraba a orillas de la
bahía; como aquí hace tanta calor decide darse un zambullido
para que le pase un poco el calor que tenía, como él era de
otro lugar y estaba prestando su servicio militar en la región no
sabía sobre la sirena encantada que aparecía en las noches
de luna llena, no tenía ningún miedo, había estado el soldadito
ya bastante tiempo en el agua, pero al momento de salir se
sorprendió con la hermosa mujer que estaba sentada en una
piedra y creyendo que era una mujer cualquiera que estaba
sentada en una piedra bañándose, el veía que ella lo estaba
llamando con una delicada voz y se fue apegando poco a poco,
pero en el momento que ella mostró su cara fue increíble porque
el vio sus enormes dientes, parecidos a los de una piraña y una
enorme cola de pescado.

8
Estudiantes: Bazán Azaba Yohaly, Yoibona Solíz
María Alejandra, Justiniano Méndez Wegner,
Masabí Vargas José Carlos, Peña Soza Víctor
Unidad Educativa: Germán Busch
Maestra (o): Patricia Arias G.

9
Entonces, se dio un gran susto intentó salir del agua y la sirena se
largó para vencerlo a toda fuerza y llevárselo, cuando de repente
se siente medio dormido, se despierta y se da cuenta que está
en otro lugar llamado El Tumbador un lugar alejado de la bahía,
pero donde también la sirena acostumbraba a aparecer, aunque
por allá no molesta a los pescadores.
Al día siguiente el comentario en el pueblo, sobre el soldadito que
había desaparecido, pero hubieron dos pescadores Don William
y Walter que conocían muy bien ese lugar, cuando de repente se
topan con el soldadito que estaba perdido y asustado por lo que
le había sucedido; aunque los pescadores no se asombraron al
verlo, ya que estaban acostumbrados a ver a la sirena pero a
diferencia de otros, ellos no la molestaban.
Es por eso que los pobladores de este lugar tienen mucho miedo
ir a pescar durante las noches de luna llena, para no llegar a
encontrarse con la sirena encantada de Cáceres.

10
EL ENCANTO

Sentado alrededor de una fogata comienza a narrar una historia


que había ocurrido hace treinta y ocho años atrás, cuando él
tenía cuarenta años de edad.
Una mañana junto a su primo Rigoberto Franco planearon una
cacería y unas horas más tarde salieron hacia el monte.
Eran aproximadamente las cuatro de la tarde, ya internados
en el espeso monte, deciden armar su puesto y encender una
pequeña fogata. La noche llega, cuando de repente un rugido
rompe la concentración de los cazadores; es un animal silvestre,
asustados disparan al vacío hiriendo al animal. Van en busca de
él, pero el animal alcanza a internarse en el bosque. Siguiendo
rastros van en busca de la bestia y dos kilómetros adentro la
encontraron, pero ya agonizando.
Alzan la vista y ¡sorpresa!!! Se admiran porque acaban de llegar
a un lugar maravilloso… y en el centro de este hermoso paisaje,
una mesa llena de comida; se asombraron mucho más aún
porque no había nadie más en el lugar para disfrutar de esos
exquisitos alimentos. Tentados por el hambre, deciden acercarse

11
a la mesa y servirse, ya saciados se posan para descansar en
aquel hermoso lugar.
Pocas horas antes del amanecer regresaron al pueblo con el
animal en el hombro y ansiosos de contar lo sucedido.
Los habitantes del pueblo al escuchar la historia se reían y no
les creían, ya que a simple vista ese monte era como tinieblas
y pocos entraban en él; los cazadores se callan ante la burla de
sus vecinos, que creen que solo fue imaginación en una de sus
borracheras.
Un anciano del lugar de muy avanzada edad, se acerca a ellos y
les dice que les cree, les cuenta que vivió la misma historia; que
ese lugar no era visto por cualquiera, que los que llegaban a él
serían de gran manera seres afortunados.
Les recomendó que guarden su experiencia como una gran
hazaña mágica. Es así como llamaron “Encanto” a ese hermoso
lugar, aunque los cazadores volvieron para ver de nuevo el lugar,
no fue visto nuevamente y es así como este mágico lugar queda
en una linda historia.

Estudiantes: David El-Hage, Yimmy Durán,


Yoanny Abdalan, Darlen Cuellar, Danixa Tamo
Relator: Modesto Franco López
Unidad Educativa: Madre Clara Ricci
Maestra (o): Lourdes Valverde

12
EL CARBUNCO

13
Todo comienza cuando mi papá salió de la casa en busca de leña,
o pa` su suerte alguna chafra pa` arder fuego para el maneau del
desayuno… Eran casi las doce de la noche y pa` más yapa sale
sin su escopeta con la que acostumbraba salir… entonces sube
en el auto y comienza…
Al llegar a la entonces empresa Sidersa, vio algo que brillaba, le
dio miedo porque al rato aparecieron más; serían pues luces o por
ahí, su cabeza le estaba jugando una mala pasada, porque pa´
que… el viejo tenía miedo, claro que a las una de la madrugada
quien querría salir de su cama…
De repente crio coraje y pensó: Si lo sigo, ¡tal vez sea un entierro!
Se bajó de su cacharro con las piernas que le temblaban, parecía
un ternero recién nacido, dio unos cuantos pasos; entonces se
acordó que en el cacharro tenía su machete y ahí volvió hacia el
auto y lo buscó como condenau y arranca otra vez en marcha…
Cuando en una piedra vio a un bichito, creyó que era un conejo,
se le vino a la cabeza: Si lo llevo, va aumentar el maneau de
mañana… lo quiso agarrar; entonces se le aparecen más de
ese mismo bichito, al viejo se le puso su piel como el cuero de la
gallina, pero éste era más cuerudo que se le enfrentó y mirando
la frente del bichito vio nada más y nada menos que una piedra
preciosa. Entonces se acordó, este bicho debe ser el carbunco
y como dice la gente, que a tal bicho se le saca esa piedra que
tiene en su frente y la persona que logra sacarle se queda rica.
El viejo afanau a sacarle, también recordó que hay que sacarse
la ropa y quedarse como uno vino al mundo y con el calzoncillo
intentar sacarle tal piedra, el viejo en su afán quiso hacerlo bien
y la fregó, porque dejo que el bichito se le cruce bajo las piernas
y tarde se acordó que tenía que juntar las piernas para que no se
le cruce, porque si se les cruza, se les escapa y no vuelve nunca
más, fue ahí donde el viejo se puso triste, al saber que su fortuna
se le había ido por las piernas, el bichito entonces le habló, el
viejo se estremeció… el bicho le dijo: “oí voj ejcuchá bien, si no
querej que te lleve pelechá de aquí… “.
El viejo salió de ahí como condenau, ya eran las dos y treinta de

14
la madrugada, cuando se escuchó ese cacharro llegando y entró
a la casa como mandau, mis hermanos mayores le preguntaron:
“Oiga papá ¿Qué le pasó puej…?” El viejo tartamudeo un rato y
después les dijo lo que le había pasado. Ese rato nadie le hizo
caso; cuando mi mamá lo escuchó, le dijo: “Mañana mijmo vaj a
misa”. Y eso fue todo; pero al otro día, el viejingo bien plantau,
bien pintudingo a las 6:30 madrugó a la misa.
Según algunas personas, este animalito el carbunco, simboliza
riqueza en abundancia, otras afirman que trae mala suerte, peor
si les habla; puede también anunciar buenos tiempos, como
también no tan buenos. Su piedra preciosa según su tamaño, se
puede determinar si lo que trae es bueno o malo.

Estudiante: Alan Méndes Cuéllar


Relator (a): Sra. Julia Frías Herrera
Unidad Educativa: Madre Clara Ricci

15
LOS GUARDIANES
DEL MUTÚN

Hace mucho tiempo, en el cerro del Mutún denominado San

16
Hace mucho tiempo, en el cerro del Mutún denominado San
Pedrito cuenta Don Fernando Lino que antes en sus tiempos de
trabajo, él era sereno en ese lugar donde se extraía el hierro,
su trabajo era cuidar los materiales, las dinamitas, picotas, que
pertenecían a la empresa COMIBOL.
Él iba a San Pedrito, donde hacía turnos en el mismo puesto,
pasaba el mayor tiempo en el ingenio donde se cargaba el
mineral para ser llevado a Argentina por Puerto Busch.
La gente no quería trabajar en la noche porque era oscuro y daba
miedo retornar a altas horas de la noche. En San Pedrito muchas
cosas se veían como los fantasmas y otros seres misteriosos.
Había un arbolito en el camino hacia el Mutún, de día era bonito,
pero en la noche se transformaba; uno de esos días Don Fernando
al pasar por ese árbol vio que sus ramas derramaban tierra,
viento y la neblina cubría todo el cerro, en eso Don Fernando vio
que alumbraba como la luz de un auto, él se acercó a la luz pero
ya había desaparecido y solo se escuchaba el viento en el cerro.
Al día siguiente después de un día de trabajo, en la tranca por la
noche escuchó un grito, él pensó que eran algunos cazadores
pero no quiso acercarse.
Al otro día, ya no quería ir más a trabajar todo el día, especialmente
de noche. La tercera vez seguía escuchando gritos de lejos pero
no veía a nadie.
Otra noche Don Fernando fue bajando del cerro y los gritos se
escuchaban cada vez más cerca, alcanza a verlo y era un hombre
gordo, alto y de blanco. Cuando lo tuvo más cerca, vio que de
su boca emitía una bulla que no se entendía, no paraba, se
acercaba más y más, hasta que al fin se distinguió el camarada
con un sombrero grande de color blanco.
Donde estaban las maquinas se escuchaban unos gritos que lo
dejó paralizado por un buen rato, Don Fernando dijo que no era
un cazador, sino un hombre; como la luna estaba clara, le gritó:
¡Que quiere! ¡Dónde va usted! Pero no le contesto, ni lo miró,

17
ni nada, Don Fernando lo persiguió con una linterna hasta que
desapareció.
Al amanecer Don Fernando contó a sus amigos lo que le había
sucedido, sus amigos le dijeron que nadie iba a querer trabajar
allá porque se iban a morir de miedo. Al otro día bajó a pie Don
Fernando por el camino viejo, donde escuchó un carruaje que
descendía del cerro, las personas estaban fumando y entraron
al lugar donde estaba Don Fernando pero ni intentaron agarrarlo
ni él a ellos.
Don Fernando bajó a San Pedrito, en un arbolito tendió su hamaca
y se echó, llegada la noche escuchó un pájaro que cantaba, se
asustó pero no dijo nada, al rato una voz del árbol dijo ¡papá! Ahí
sí que asustó de verdad porque era una voz claringa.
Ya eran las siete de la noche cuando llegó a cantar bien encima
de él, terminado el ruido se asustó desató su hamaca y se fue.
Cuando amaneció fue a trabajar y en eso vio una luz clarita que
alumbró, al acercarse desapareció.
Otra vez fue a la tranca, en eso pasó un carruaje a carrera pero
no paró, después pasó una mujer de blanco también a carrera,
Don Fernando dijo que seguro eran unos fantasmas.
Desde entonces no volvió a trabajar en el Mutún, pero pidió
trabajar en otro lugar, pero ya no de sereno, porque en el cerro
Mutún existían y existen muchos misterios.

Estudiantes: Paula Camila Ramos E, Rodrigo Salvatierra K.


Daniela Alvis Yorruri, Bruno Castro Correa, Luís Alfredo Suárez R.
Relator (a): Fernando Lino
Unidad Educativa: Madre Clara Ricci
Maestra (o): Lourdes Valverde

18
LA MAQUINA VIEJA

Según algunos vecinos del Barrio Los Ángeles cuentan la


inolvidable leyenda: En los primeros años de fundación de
Puerto Suárez, tierra fértil, de gente trabajadora y hospitalaria.
La Alcaldía otorgó una aplanadora, máquina que solo funcionaba
a leña. Esto hizo que Don Yiloh Colombo se hiciera cargo del
mantenimiento de ella.
En esos tiempos Puerto Suárez, contaba con cuatro calles, que
eran habitadas por pocos vivientes. Después de mucho trabajo
Don Yiloh se enfermó gravemente, lo que impidió hacer su
trabajo cotidiano, paso mucho tiempo enfermo y de la cual no
pudo recuperarse. Se puso en estado grave, aunque él pensaba
en su trabajo y en la máquina, con la cual había enfrentado el
hambre y sacaba adelante su familia.

19
Una mañana de sol ardiente, como último deseo pidió a su
familia ir a visitar su máquina, ya que no las veía hacía ya
mucho tiempo. Al llegar se emocionó y comenzó a derramar
lágrimas, recordando los momentos vividos junto a ella, dándole
la tranquilidad de morir en paz y orgulloso de su trabajo.
Después de mucho tiempo de su fallecimiento la maquina se
quedó como un atractivo en la plaza principal.
El Alcalde en ese entonces, vio la necesidad de progreso del
pueblo, mandando comprar maquinas modernas, esto hizo que
la maquina fuera dejada relegada y sin función quedando como
recuerdo. Después de un tiempo decidieron mudarla a la plaza
del Barrio Los Ángeles.
Mucha gente cuenta que cuando llegaba el mal tiempo,
escuchaban ruidos de aquella máquina que sabía funcionar
tiempos atrás por las calles y cuando los vecinos salían a mirar
no veían nada.
Se dice que era la sombra de Don Yiloh conduciendo la máquina.
Los vecinos hicieron una reunión donde contaron todo lo ocurrido
al párroco de la iglesia, quien envió una carta al Alcalde pidiéndole
bendecir las cuatro calles por donde circulaba la máquina.
Esto hoy en día quedó como una leyenda, pero la maquina
como un recuerdo que ayudo a crecer al pueblo, dejando una
emocionante historia, donde todos debemos sentirnos orgullosos
de ser porteños.

20
EL GUAJOJÓ

21
Había una vez, una señora llamada Virginia que tenía una hija que
se casó con un joven llamado Marcos de 32 años, quien había
heredado un chaco que le dejo su padre antes de morir, tenía
una plantación de yuca, caña, maíz, etc. la suegra lo mandaba
cada vez a trabajar pero él era muy flojo, la suegra Virginia ya no
quería mantenerlo, desde entonces se empezaron a odiar, uno
porque no quería trabajar y la otra porque era mandona.
Un día Marcos decidió ir a trabajar al chaco y llevaría a su suegra
en compañía de su esposa; Marcos como ya no soportaba a su
suegra, mandó a su esposa al pueblo con todo lo que habían
cosechado y como era demasiado lejos él sabía que iba a
demorar en volver, él había quedado solo con la suegra, pensaba
en darle muerte, pero luego pensó mejor y decidió abandonarla
más allá del chaco y llegar a casa y decir que se había perdido,
de esa manera pudo deshacerse de ella, la hija muy apenada
quería regresar, pero justamente llegó una tempestad que no se
pudo entrar durante más de una semana al lugar.
Todos los moradores del pueblo suponían que ya se había
muerto o el tigre se la había comido, entonces solo les quedó
resignación.
Después de un largo tiempo, como doña Virginia había
sobrevivido en el bosque comiendo hierbas y animales, pasaba
y pasaba el tiempo, ella llegó a ser hechicera y se transformaba
en un lobo grande cada vez que se ponía la luna y otras veces
se transformaba en un pájaro que cantaba muy feo; cuando se
transformaba en lobo salía al pueblo y si alguien se le atravesaba
se lo devoraba y cuando se transformaba en pájaro anunciaba
muerte y la gente tenía mucho miedo cuando aparecían esos
bichos, un día doña Virginia en sus hechicerías decidió quedarse
pájaro y ya no convertirse en lobo, el hechizo cada vez era menos
fuerte que cuando quería volver a ser gente le costaba, hasta
que finalmente se quedó pájaro para toda su vida. La gente de
ese pueblo estuvo desde entonces más tranquila porque ya no
aparecía el lobo y el pájaro no hacía daño a nadie solo anunciaba
muerte cuando cantaba y lo llamaron guajojó, porque cantaba
como si estuviese llorando.

22
El yerno Marcos y su hija de doña Virginia pudieron vivir más
tranquilos desde que ella ya no había nadie que se metiera en
su vida, porque era ella la malvada, desde entonces él nunca
fue flojo le gustaba trabajar y así fueron felices con sus tres hijos
trabajando y vendiendo lo que cosechaban.

Estudiantes: Julio Cuéllar, Rafael Sánchez,


Raúl Melgar Claudio Yamil, José Daniel Daza
Relator (a): Dña. Chavela
Unidad Educativa: Madre Clara Ricci
Maestra (o): Miriam Melendres C.

23
LA CARROZA DE LA OTRA VIDA

Una noche tormentas y relámpagos, la poca gente del pueblo


que recién habitaba en la ahora populosa ciudad de Puerto
Suárez, se encerraba en sus casas muy temprano, porque se
veía llegar una torrencial lluvia.
En esa época, todavía no se conocía la luz eléctrica en las calles,
ni en las viviendas, la gente usaba mecheros que funcionaban a
diésel, estos eran un tipo de bombona de lata y tenían la mecha
de tela de algodón la cual sobresalía al exterior para ponerle
fuego, ya que las velas eran muy caras y muy escasas para
comprar en la única pulpería que había en el pequeño poblado.
Desde tempranas horas de la noche, se escuchaba el aullar de
los perros propios y de los vecinos, los dueños gritaban órdenes
de ¡callarse! A sus animales, lo cual era aceptado por algunos
momentos y luego otra vez y casi al mismo tiempo comenzaban
de nuevo a aullar lastimeramente y con más fuerza. La gente
acostumbró el oído a la bulla de los perros y se acostaron a
dormir, ya que al día siguiente les esperaba un caluroso y
cansador día de trabajo.
Al promediar las doce de la noche, mi abuelo Don Julio Cuéllar
Leaños, cuenta que sintió como si alguien lo llamara y despertó
sobresaltado, puso atención a los ruidos de la noche, aparte del
sonido agudo de los grillos y otras aves nocturnas; continuaba
el llanto de los perros, pero esta vez con más fiereza, como si
estuvieran a punto de morder a alguien.
La curiosidad fue más fuerte y mi abuelo se levantó y salió a
curiosear, cuando de pronto vio venir una carroza por la angosta
y larga calle, era totalmente negra, tironeada por un caballo
igualmente negro que brillaba en la oscuridad de la noche y
de los cuales también pudo ver que desde los cascos de los
caballos salía una luz como rayos de fuego en cada trote que
daba. Mi abuelo se aplastó escondiéndose para seguir mirando
a la extraña figura que pasaba por su calle.

24
Lo increíble de este suceso de la vida real, es que ¡El carruaje
y el caballo no pisaban la tierra! Era como si flotaran en el aire
pero a una buena velocidad, por eso era el alboroto de los perros
en toda la vecindad.
Mi abuelo al ver eso tan extraño, sintió un terrible escalofrío
en todo su cuerpo y corrió a su cuarto, pero no pudo seguir
durmiendo por el tremendo susto; al amanecer del nuevo día le
comentó a mi abuela Wilfreda Rojas lo que vio y ella le dijo que
podría ser un alma en pena que no halló descanso en la muerte
o tal vez era el diablo buscando un alma para llevarse y que él
hizo bien en esconderse, porque de haberlo visto se lo hubiese
llevado. Comentando a los vecinos la aparición y algunos se
asustaron mucho, uno de ellos paró las orejas y dijo:
¡Entonces fue eso lo que mató al compadre Manuel, porque
amaneció y la comadre lo encontró muerto, seguramente él se
dejó ver con el jinete de la carroza de la otra vida!
Todos se hicieron la señal de la cruz y se fueron a trabajar.
Así que estimado lector, cuando escuches el aullar lastimero de
los perros escóndete debajo de tus sabanas porque la muerte
puede estar rondando en tu barrio.

Estudiantes: Naomi Chelsea Telles Cuéllar,


Cecilia Hinojosa Ricaldi, Juliana Espinoza
Rojas, Yessenia Ayllón Salazar
Relator (a): Veralise Cuéllar Rojas
Unidad Educativa: Madre Clara Ricci
Maestra (o): Miriam Melendres C.

25
LA LEYENDA DEL
MUTÚN
En un pueblo de pocos habitantes vivía una familia humilde, el
padre se llamaba Kuan y sus hijos Mutún quien era el mayor y
Urucum el menor, un día Mutún prometió a su padre y hermano
que nada les iba a faltar porque él iba a trabajar muy duro. Y así
fue, Mutún trabajó tanto que sus manos se volvieron duras como
el hierro.
Un día el padre enfermó gravemente, sin saber que hacer Urucum
se internó en la selva buscando ayuda y no volvió más. Al poco
tiempo murió Kuan y Mutún lo enterró en el mismo pueblo, luego
fue a buscar a su hermano encontrándolo muerto en las faldas
de un cerro pequeño, lo enterró y lloró amargamente porque
dejaba ahí a uno de sus seres más queridos. Al regresar a su
pueblo vio un cerro que le llamo la atención; subió hasta la cima
y poniéndose de rodillas, con las manos sobre la tierra, lloró
desgarrando a su corazón y recordando la promesa que había
hecho a su padre y hermano y que no pudo cumplirla.
Sus lágrimas y dolor conmovieron todo el lugar, el mismo cerro
empezó a llorar, los animales empezaron a observar acercándose
a él y dejando huellas en el lugar que perduran hasta el día de
hoy; la naturaleza se apiadó de él convirtiéndolo en un ave para
que pueda ir a visitar a su hermano y regresar donde estaba su
padre. Ese cerro se convirtió en una mina de hierro en señal
de sus manos duras, las piedras preciosas son el corazón
bondadoso que el poseía y sus lágrimas se transformaron en
agua dulce que emana de este cerro llamado Mutún.

Estudiantes: Eloisa Sonia Vasquez Chuquimia


Unidad Educativa: Felipe Leonor Ribera
Maestra (o): Shiela Vargas Veliz

26
27
Dirección de Cultura y Turismo
Av. Omar Chávez esq. Pozo
Telf.: 3333249
Santa Cruz - Bolivia

www.santacruz.gob.bo
28

You might also like