OBEDIENCIA DE LOS HIJOS A LOS PADRES EN LA SOLTERÍA

Desarrollado por: Yurmario Betancourt

En esta era postmoderna el orden en los deberes y obligaciones para

cada uno de los miembros que conforman la familia ha sido desvirtuado de tal
manera que los roles se han invertido. En este caso particular en la dirección
de la relación hijo-padre, tenemos a los hijos dándole órdenes a sus padres,
son los padres quienes ahora pareciera que son los que deben estar a merced
de los hijos, pero este desequilibrio familiar claramente no es lo que Dios ha
establecido en Su Palabra, sino una transgresión directa de Su Ley. Por
ejemplo, el simple hecho de que Dios incluyese en el Decálogo el mandamiento
“Honra a tu padre y a tu madre”, habla de la importancia de este
mandamiento para Dios. Pero, ¿Qué es lo que lo hace tan importante como
para nosotros debamos guardarlo? ¿Debo hacerlo solo durante el tiempo
que dure mi soltería? Son estas y otras interrogantes a las que buscaremos
darle una respuesta bíblica en el desarrollo del tema.

Ahora bien, como cristianos si nuestra fe en Cristo es real, un lugar

donde puede ser probada es en el hogar; los hijos y los padres tienen
responsabilidades mutuas que deben ser cumplidas. Sin embargo, los hijos
deben honra a los padres aun si estos son exigentes he injustos, esta honra
debe ser interna y externa, como veremos más adelante.

UN MANDATO DESDE EL ANTIGUO TESTAMENTO

Desde el A.T Dios ha establecido el mandato:

“Honra a tu padre y a tu madre, para que tus días sean prolongados en la

tierra que el Señor tu Dios te da”.

Éxodo 20:12

Si le echamos un vistazo al Decálogo podemos observar como Dios establece

la importancia de las relaciones en nuestras vida, en primera instancia cómo
debe ser un correcta relación con ÉL, y cómo debe ser nuestra relación entre
los demás miembros de la comunidad. De tal manera, que la efectividad de mi
relación con Dios debe mostrarse en cómo me relaciono con los demás, es por

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ello que si mi relación con Dios es un fracaso, lo más probable es que la
relación con mis padres sea un fracaso, y si una de las relaciones terrenales
más importantes que pudiese tener un ser humano en su vida va mal, es igual
de probable que mi relación en mi entorno sea igual. Es por ello que es en el
hogar donde se forma y fortalece nuestras primeras relaciones, que nos
ayudarán a establecer mejores relaciones con nuestro entorno. Es por esta
razón que Dios establece como mandato la honra a los padres.

“Nuestra relación con Dios es de suma importancia para ser obedientes a

los padres, es decir el amor a Dios hará más efectiva mi obediencia.”

A ESTOS DIOS LOS ENTREGÓ A UNA MENTE REPROBADA, SE HAN

REVELADO

“28 Y como ellos no aprobaron tener en cuenta a Dios, Dios los entregó a
una mente reprobada, para hacer cosas que no convienen; 29 estando
atestados de toda injusticia, fornicación, perversidad, avaricia, maldad;
llenos de envidia, homicidios, contiendas, engaños y malignidades; 30
murmuradores, detractores, aborrecedores de Dios, injuriosos, soberbios,
altivos, inventores de males, desobedientes a los padres”

Romanos 1:28-30

Aquellas personas que han determinado rechazar a Dios como Señor,

que no tienen en bien el reconocer a Dios, Él los ha entregado a los caminos
de sus propia prudencia, a caminos de maldad, caminos productos de una
mente manchada por el pecado (desobediencia a los padres). Rebeldes en
contra la autoridad Soberana de Dios, rebeldes en contra de la autoridad
paterna, y toda rebeldía en contra cualquier autoridad impuesta por Dios, es
rebelión en contra de Dios mismo, es pecado en contra de Dios.

Entonces, ¿Por qué debo obediencia a mis padres?

Porque es JUSTO, ¿Por qué es justo? Porque procede de Dios, la

Fuente de toda Bondad. Porque todo lo que Dios hace es bueno en gran
manera. Porque simplemente es su voluntad.

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EL NUEVO TESTAMENTO TAMBIÉN TIENE ALGO QUE DECIR

¿Cómo debe ser esa obediencia?

“Hijos, obedeced en el Señor a vuestros padres, porque esto es justo. 2

Honra a tu padre y a tu madre, que es el primer mandamiento con
promesa; 3 para que te vaya bien, y seas de larga vida sobre la tierra”.

Efesios 6:1-3

Una palabra: Obedeced

Del griego (jupakouo), oír bajo (como subordinado), como quien está bajo una
autoridad.

La frase "en el Señor", nos habla de cómo debe ser esa obediencia.
Expresa la fe que tienen Cristo y demuestra el amor que esta produce en
honra. La obediencia que forma parte de honrar a nuestros padres, por ende
debe ser tanto interna como externa. Pues quizás por un lado obedezca a
regañadientes y por otro les esté maldiciendo, hasta el punto inclusive de
desearles la muerte. Proverbios 20:20. Esta situación es tan grave ante los
ojos de Dios que según la Ley era pecado de muerte. Éxodo 21:17, Jesús
mismo hizo acotación de ello, Mateo 15:3-9.

v.8 "Este pueblo de labios me honra; mas su corazón está lejos de mí"

Los religiosos de la época servían a Dios solo de labios, su obediencia

era meramente externa, a los ojos de los hombres. Cuando a Él le importa es la
condición del corazón con la cual ejerzo obediencia. Estos habían cambiado el
mandamiento por la tradición, el Corbán simplemente era la excusa perfecta
para deslindarse del mandato de honrar a los padres, aunque externamente
obedecían a tradición. Por tanto, nuestra obediencia y honra a los padres debe
ser tanto interna como externa. El primer mandamiento dice: "Amarás al Señor
tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente. Este
el primero y grande mandamiento. Y el segundo es semejante: amarás a
tu prójimo como a ti mismo". Mateo 22:37-39. Nuestros padres son nuestro

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prójimo, prójimo que fue hecho a la imagen de Dios y que han sido puestos
como autoridad sobre los hijos, por cual a toda autoridad impuesta por Dios se
le debe obediencia y honra, y nuestra obediencia a Dios debe ser interna y
externa, lo que nos lleva nuevamente al primer mandamiento.

"La obediencia refleja la fe que como hijo cristiano tengo en Cristo y

demuestro el amor que esta produce en cada una de mis relaciones"

A esto el apóstol enfatiza aún más lo anterior citando el mandato del

Decálogo "Honrar a tu padre y a tu madre, que es el primer mandamiento
con promesa". La obediencia cumple el mandato de Dios que dice: "Honra a
tu padre y a tu madre". Honra que significa respetar y considerar a los padres
en amor, y se manifiesta en la obediencia.

¿Absoluta o Parcial?

“Hijos, obedeced a vuestros padres en todo, porque esto agrada al

Señor.”

Colosenses 3:20

Absoluta, siempre y cuando no vaya en contra de lo establecido por Dios

en Su Palabra. Parcial, cuando esta vaya en contra de los establecido por Dios
en Su Palabra, del mismo modo que no debemos obedecer a las autoridades
gubernamentales cuando estás no piden hacer algo que va en contra de la
Voluntad de Dios, así mismo si sucede con nuestros padres quienes también
son una autoridad. Hechos 23:3-5, Hechos 5:29.

¿Hasta cuándo debe ser esa obediencia?

Lo primero que debemos entender, como ya se ha dicho antes, que los

padres son una autoridad impuesta por Dios sobre nuestras vidas desde
nuestra niñez hasta nuestra adultez, dicha sujeción será hasta que cese de
estar bajo el cuidado de mis padres. Sin embargo, mi responsabilidad de
honrarlo es para siempre.

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¿Cómo puedo honrarlos después de adulto siendo
soltero?

Si ya he cesado del estar bajo el cuidado de mis padres, le debo honra.

Por ejemplo:

 Aun les debo respeto. Ej.: ¿Cómo me dirijo a ellos al hablarle?

 Debo considerarlos. Ej.: ¿Si tienen alguna necesidad y cuento con el
poder para ayudarles lo hago?
 Sin aun vives con ellos, debes aportar con los gastos de la casa.
 Predícales el evangelio sino aun no son creyentes.
 Pasa tiempo con ellos, comparte con ellos.
 Pídele su consejo. Proverbios 1:8-9
 Orando por ellos.

Esta honra está anclada a una promesa: "para que te vaya bien, y seas de
larga vida en la tierra".

“Con respecto a esto la obediencia a los padres no es el único factor que

determina e tiempo que una persona vive, pero es un factor importante. La
desobediencia a padres piadosos es señal de vida indisciplinada. Además de
esto se ha tener en cuenta que aunque un hijo llegue a una edad centenaria,
en tanto que continúe en su maldad no le irá bien. ¡No tendrá paz!.”

William Hendriksen.

Para reflexionar: Si aquel que no estimó el ser igual a Dios como cosa a que
aferrarse, sino que se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho
semejante a los hombres; y estando en la condición de hombre, se humilló a sí
mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz. Respetó,
honró y obedeció a sus padres, con obediencia perfecta, sujetándose bajo la
autoridad de su creación, Lucas 2:51, cuanto más nosotros debemos honra a
nuestros padres, que somos nada ante él.

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Conclusiones

 La obediencia a nuestros padres no es una opción es un mandato.

 Nuestra relación con Cristo es de suma importancia para ser obedientes
a los padres. (El amor de Dios hará más efectiva mi obediencia)
 La sujeción a mis padres será hasta que cese de estar bajo su cuidado.
Sin embargo, mi responsabilidad de honrarlo es para siempre.
 La obediencia a mis padres es absoluta, siempre y cuando no vaya en
contra de lo establecido por Dios en Su Palabra. Es parcial, cuando esta
vaya en contra de lo establecido por Dios en Su Palabra.
 Jesús fue el mayor ejemplo de obediencia y sujeción a los padres, un
ejemplo digno de imitar y seguir.

Poema: Mi Padre, cuando Yo tenía...

- Ann Landers –

4 años : Mi papá puede hacer de todo.

5 años : Mi papá sabe un montón.
6 años : Mi papá es más inteligente que el tuyo.
8 años : Mi papá no sabe exactamente todo.
10 años : En la época en que mi papá creció,
las cosas seguramente eran distintas.

12 años : Oh, bueno, claro, mi padre no sabe nada de eso.

Es demasiado viejo para recordar su infancia.

14 años : No le hagas caso a mi viejo.

¡Es tan anticuado!

21 años : ¿Él? Por favor, está fuera de onda,

sin recuperación posible.

25 años : Papá sabe un poco de eso,

pero no puede ser de otra manera,
puesto que ya tiene sus años.

30 años : No voy a hacer nada hasta no hablar con papá.

40 años : Me pregunto cómo habría manejado esto papá.
Era inteligente y tenía un mundo de experiencia.

50 años : Daría cualquier cosa por que papá estuviera aquí

para poder hablar esto con él.
Lástima que no valoré lo inteligente que era.
Podría haber aprendido mucho de él.

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