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ÁNODO Y CÁTODO

El ánodo y el cátodo son los tipos de electrodos que se encuentran en las celdas electroquímicas.
Estos son dispositivos capaces de producir energía eléctrica a través de una reacción química. Las
celdas electroquímicas más usadas son las pilas

Existen dos tipos de celdas electroquímicas, las celdas electrolíticas y las células galvánicas o
voltaicas. En las celdas electrolíticas, la reacción química que produce la energía no sucede de
forma espontánea, sino que la corriente eléctrica se transforma en una reacción química de
oxidación-reducción.

La celda galvánica está compuesta por dos semiceldas. Estas están conectadas por dos elementos,
un conductor metálico y un puente salino.

El conductor eléctrico, como indica su nombre, conduce la electricidad porque tiene muy poca
resistencia al movimiento de la carga eléctrica. Los mejores conductores suelen ser metales.

El puente salino es un tubo que conecta las dos semiceldas, mientras mantiene el contacto
eléctrico de las mismas, y sin dejar que los componentes de cada celda se unan. Cada semicelda de
la celda galvánica contiene un electrodo y un electrolito.

Cuando se produce la reacción química, una de las semiceldas pierde electrones hacia su
electrodo, a través del proceso de oxidación; mientras que la otra gana los electrones para su
electrodo, a través del proceso de reducción.

Los procesos de oxidación se producen en el ánodo, y los procesos de reducción en el cátodo


Definición de ánodo y cátodo

Ánodo

El nombre del ánodo proviene del griego ανά (aná): hacia arriba, y οδός (odós): camino. Faraday
fue el que acuñó este término en el siglo XIX.

La mejor definición de ánodo es el electrodo que pierde electrones en una reacción de oxidación.
Normalmente se vincula al polo positivo del tránsito de la corriente eléctrica, pero no siempre es
así.

Pese que en las pilas el ánodo es el polo positivo, en las luces led es todo lo contrario, siendo el
ánodo el polo negativo.

Normalmente se define el sentido de la corriente eléctrica, apreciándolo como un sentido de las


cargas libres, pero si el conductor no es metálico, las cargas positivas que se producen se trasladan
al conductor externo.

Este movimiento implica que tenemos cargas positivas y negativas que se mueven en sentidos
opuestos, por lo que se dice que el sentido de la corriente es el recorrido de las cargas positivas de
los cationes que se encuentran en el ánodo hacia la carga negativa de los ánodos que se
encuentran en el cátodo.

En las celdas galvánicas, al tener un conductor metálico, la corriente generada en la reacción sí


que sigue el camino desde el polo positivo al negativo.

Pero en las células electrolíticas, al no tener un conductor metálico, sino un electrolito, pueden
encontrarse iones con carga positiva y negativa que se mueven en sentidos opuestos.

Los ánodos termoiónicos reciben la mayor parte de los electrones que provienen del cátodo,
calientan el ánodo y tienen que encontrar una forma de disiparse. Este calor se genera en la
tensión que se produce entre los electrones.

Cátodo

El cátodo es el electrodo con carga negativa, que en la reacción química sufre una reacción de
reducción, donde su estado de oxidación se reduce cuando recibe electrones.

Al igual que con el ánodo, fue Faraday quién sugirió el término cátodo que proviene del griego
κατά [catá]: ‘hacia abajo’, y ὁδός [odós]: “camino”. A este electrodo, se le atribuyó la carga
negativa a lo largo del tiempo.

Este planteamiento resultó falso, ya que dependiendo del dispositivo en el que se encuentre, tiene
una carga u otra.

Esta relación con el polo negativo, al igual que con el ánodo, surge por la suposición que la
corriente fluye desde el polo positivo hasta el negativo. Esto surge dentro de una celda galvánica.
Dentro de las celdas electrolíticas, el medio de traspaso de la energía, al no ser en un metal sino
en un electrolito, pueden coexistir iones negativos y positivos que se mueven en sentidos
opuestos. Pero por convenio, se dice que la corriente va desde el ánodo hacia el cátodo.

REFERENCIAS:

SIENKO, Michell J.; ROBERT, A.Chemistry: principles and properties. New York, US: McGraw-Hill,
1966.

MASTERTON, William L.; HURLEY, Cecile N.Chemistry: principles and reactions. Cengage Learning,
2015.

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