LA IRRACIONALIDAD DE LO RACIONALIZADO

COMENTARIOS METODOLÓGICOS SOBRE LA RACIONALIDAD

INSTRUMENTAL Y SU TOTALIZACIÓN
FRANZ JOSEF HINKELAMMERT

El texto comienza planteando la relación entre racionalidad y eficiencia,

considerando los aportes de la competitividad. En donde ésta borra de la
conciencia el sentido de la racionalidad y se percibe como una “realidad
virtual”, según la cual todo tiene su criterio e la competitividad, lo cual se
extiende a todos los valores de la vida, entonces, una cultura humana que
no produce competitividad, tiende a desaparecer. El dominio de la
competitividad no admite acciones frente a los efectos destructores que
ésta produce. Es así que el autor, introduce la idea de la irracionalidad de
lo racionalizado que menciona que es lo mismo que la ineficiencia de la
eficiencia y donde entre a mayor racionalización, mayor irracionalidad.
Entonces, deja de haber un progreso ya que las consecuencias son
regresivas y la vida humana pierde sentido.
La Teoría de la Acción Racional (TAR), en la tradición de Max Weber,
desde la Teoría económica, indica una relación lineal entre medio-fin, en
donde éstos últimos son específicos y pueden ser realizados por
actividades calculadas del ser humano. Hay una Racionalidad (formal), ya
que se juzga la forma de lograr un fin con el mínimo de medios. En la TAR,
se establece que el medio no es un fin en si mismo, sino que el fin decide
sobre los medios y el juicio de los medios sobre los fines solo es
cuantificable su los medios y fines son expresados en términos
monetarios. Entonces, la relación medio-fin es una relación de producto-
precio del producto y de insumo y producto, lo que representa la
rentabilidad, o sea, la eficiencia. Sin embargo, si toda la sociedad se
organiza en términos de eficiencia y rentabilidad, éstas se transforman en
los valores supremos que deciden sobre la validez de los demás valores.
Esto se resume en competitividad y eficiencia y se conceptualiza como
racionalidad de la acción. La competitividad, como valor supremo que
no crea valores, sino que es el criterio de su validez. Adam Smith, dice que
la competencia produce de forma no intencional la armonía social y realiza
el interés general, lo que llama la mano invisible, que coordina las
actividades productivas y realiza a partir de ésta, el bien común. Lo que se
puede resumir como “lo racionalizado no produce irracionalidades”.
La competitividad como valor supremo, no estipula ningún valor
ético, se trata de una utopía presentada como algo realista. La TAR, no
efectúa juicios éticos. De acuerdo a Weber, la ciencia posee neutralidad
valorativa y puede hablar de la racionalidad de los medios, es decir que es
una racionalidad formal, donde hay juicios de hecho y no de valores. La
racionalidad con arreglo a valores, tiene que ver con la elección de los
fines que escapa a la racionalidad de las ciencias. La racionalidad
instrumental, es en donde la realidad es tomada en cuenta solamente
como referente de falsación o verificación de los juicios medio-fin. La teoría
de la acción, niega cualquier relación de la acción con la realidad que no
sea lineal, negando cualquier juicio científico válido que no se refiera a la
relación lineal.
La TAR, no da respuesta a estos problemas de los hechos y de los valores.
Todo es tomado como algo dado. Weber, define la acción como algo que
debe entenderse como una conducta humana, siempre que el sujeto o los
sujetos de la acción enlacen a ella un sentido subjetivo. La acción social,
es una acción donde el sentido mentado por su sujeto o sujetos está
referido a la conducta de otros, orientándose por ésta en su desarrollo.
Con la TAR, se autolimita al marco de la racionalidad medio-fin y es
imposible descubrir que la acción racional no tiene ningún sentido
racional potencial. En consecuencia, se excluye del análisis la relación
entre los fines realizados y la vida de los sujetos. En la TAR, , los juicios de
hecho no son juicios medio-fin.
la racionalidad medio-fin, identifica los juicios medio-fin, con juicios
de hecho que no sean juicios medio-fin, ahora cuando se efectúan
relaciones fines con la vida del sujeto y se tratan de juicios de hecho. Solo
se puede hablar de un fin, cuando varios fines compiten. La ciencia no
puede efectuar ninguna decisión, sino que tiene que tratar todos los juicios
referentes a la decisión en favor de un fin como juicios de gusto. La vida
del sujeto, no puede ser un fin, dado que no puede ser tratada como un fin
en competencia con otros.
Ahora, ninguna acción calculada de racionalidad medio-fin es
racional, si en consecuencia elimina al sujeto que sostiene dicha acción.
La racionalidad medio-fin es lineal, en tanto que esta otra racionalidad es
circular. A éste círculo lo podemos llamar racionalidad reproductiva del
sujeto.