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Probadores de formación con wireline usan una sonda que se puede colocar a una
profundidad seleccionada en formación para proporcionar mediciones precisas de presión
y tipo de fluido, pero datos de producción limitados.
La prueba de pozos usa un empacados bajado con tubería de perforación o tubería flexible.
El intervalo probado no está definido con presión y las mediciones en el fondo del pozo son
limitadas, pero el volumen de fluido producido permite una elevación completa del
potencial de producción.
Existen muchas aplicaciones de pruebas de pozos, pero se agrupan en cuatro clases fundamentales.
Esta clase de aplicación utiliza la medición de presión de formación estática directa. Incluye.
Permeabilidad y piel.
Se interpreta que la presión y las mediciones asociadas (por ejemplo, el flujo en el fondo del pozo)
dan como resultado parámetros dinámicos del yacimiento relevantes para el flujo del fluido, como
la permeabilidad de la formación y cualquier aparición de piel (por ejemplo, daño de la formación)
que pueda afectar el flujo. Las medidas ayudarán a determinar
permeabilidad del yacimiento
bien entregabilidad
La esencia de las pruebas de formación es el flujo del pozo, que presenta la oportunidad única de
recuperar muestras del fluido del yacimiento. Permite
Caracterización de Yacimientos.
La respuesta de presión durante una prueba de pozo proporciona la firma característica de los
eventos de flujo de fluido del reservorio que se interpretarán en términos de límites,
heterogeneidades y volumen del reservorio. Permite
- Determinar las condiciones de los límites del reservorio, tales como barreras impermeables y
condiciones de presión constante.
- Caracterizar las heterogeneidades de los reservorios, como sistemas en capas y fracturas naturales.
Las tres formas principales de probar un pozo están cubiertas en las siguientes secciones.
Las pruebas de capacidad de entrega convencionales, que involucran equipo extenso de superficie
y de fondo de pozo, están diseñadas para simular las características de producción de los nuevos
pozos. La Figura 1 muestra un diseño típico de la superficie en alta mar para una prueba de pozo de
exploración y un bosquejo de las herramientas de prueba de pozo de perforación (DST).
Pruebas alámbricas
Durante una prueba de pozo, se aplica un cronograma de flujo de flujo particular al reservorio
seleccionado, utilizando un equipo de control de flujo superficial o de fondo de pozo (en el caso de
pruebas convencionales y pruebas de pozo de inyección o de producción) o una rutina de extracción
seleccionada por software (en el caso de Pruebas de formación alámbrica). Los cambios de presión
resultantes y los caudales (superficiales y opcionalmente en el fondo del pozo) se registran en
función del tiempo, generalmente en el mismo pozo o sonda, o en un pozo cercano o sonda durante
las pruebas de interferencia. A partir de la respuesta de presión medida y de las predicciones de
cómo las propiedades del reservorio influyen en esta respuesta, se pueden inferir los valores de
estas propiedades, que incluyen la permeabilidad, el factor de piel y otros parámetros. Un aspecto
particular de la prueba de pozos es el muestreo de fluido de formación, que es una de las razones
principales por las que se analizan los pozos.
Bueno las pruebas son muy variadas en la naturaleza. A diferencia de las ejecuciones de registro,
que consisten en grabaciones de propiedades de formación estática como densidad y resistividad,
las pruebas de pozo deben diseñarse antes de ejecutarse. Las pruebas de pozo efectivas deben
obedecer al ciclo de diseño-ejecución-evaluación, donde las operaciones se diseñan primero para
apuntar a la medición de parámetros específicos, luego se ejecutan en el campo y luego se evalúan:
la evaluación se espera que arroje los valores de los parámetros apuntados. Si no se cumplen los
objetivos, la evaluación se retroalimenta en el diseño de futuras pruebas, a veces también en el
diseño de la prueba que se está realizando, y el proceso continúa a través del ciclo de diseño-
ejecución-evaluación para optimizar los resultados frente a las expectativas.
Debido a que las pruebas de pozo se pueden diseñar para lograr muchos objetivos en condiciones
ambientales y de depósito muy variadas, la implementación en el campo se puede realizar de varias
maneras, utilizando muchas configuraciones de hardware diferentes y un amplio conjunto de
métodos de interpretación.
Este capítulo discutirá los objetivos de las pruebas de pozos (incluidos el hardware y los sensores de
medición utilizados), las pruebas de adquisición de datos, la interpretación, las aplicaciones y el
software. Un capítulo separado tratará el muestreo del fluido de formación.
PRUEBAS DE POZOS OBJETIVOS
Las pruebas de pozo se realizan en todas las etapas de la vida de un reservorio: exploración,
desarrollo, producción e inyección. En cada una de estas etapas, las pruebas se realizan con
objetivos establecidos, utilizando hardware específico y opciones de diseño.
Se utiliza un comprobador de cableado para medir las presiones estáticas de todas las capas
permeables de interés. Las gráficas de presión en función de la profundidad ayudan a establecer los
gradientes del fluido de formación e identificar los contactos del fluido en el reservorio. La
herramienta MDT también se puede utilizar con un módulo de empacador para realizar una prueba
de producción a menor escala.
Una razón principal para probar pozos de exploración es recuperar una muestra fluida. Esta es la
mejor etapa para caracterizar el fluido del reservorio, porque el reservorio está en un estado virgen
y no se ha producido ningún fluido. En las etapas posteriores de la vida de un reservorio, la
composición del fluido cambia y la composición del fluido de la superficie puede no coincidir
exactamente con la composición del fluido en el fondo del pozo. (Esto es especialmente cierto en
situaciones de dos fases, como los reservorios de condensados). Debido a que el programa de
muestreo de fluidos en un pozo de exploración es particularmente importante, contará con un
programa de muestreo por cable (incluida la recolección de muestras de calidad PVT) y volúmenes
más grandes producidos durante La operación DST.
Durante la fase de desarrollo, los objetivos de la prueba son diferentes de los de las etapas de
exploración y evaluación. Presumiblemente, se ha evaluado la capacidad de entrega del yacimiento
y se ha caracterizado el fluido del yacimiento. El operador ahora necesita comprender mejor las
comunicaciones hidráulicas para relacionar la caracterización del yacimiento con el modelo
geológico.
Las pruebas de formación en esta etapa consisten predominantemente en pruebas de presión por
cable en pozo abierto. El énfasis está en las presiones estáticas del reservorio, que se utilizan para
confirmar los contactos del fluido y los gradientes de densidad del fluido. Sobre esa base, los
diferentes compartimientos hidráulicos del reservorio se determinarán y se unirán al modelo
geológico. A menudo, la producción de campo ya ha comenzado mientras se están perforando pozos
de desarrollo adicionales. En los nuevos pozos, los gradientes de presión ya pueden reflejar la
influencia de la producción en la presión del yacimiento. En esos pozos, el simulador de reservorio,
si está instalado, se usará para predecir los perfiles de presión vertical que serán confirmados por
las mediciones del comprobador de cableado. Cualquier diferencia se usaría para refinar el modelo
geológico e introducir compartimentos adecuados en el modelo dinámico. Esta etapa es crucial en
reservorios con un gran número de capas apiladas, como los depósitos deltaicos (que son los
reservorios productores de hidrocarburos más prolíficos). Para estos, las mediciones de presión por
cable son una ayuda inestimable para la caracterización de la dinámica de yacimientos, porque no
hay otra forma práctica de evaluar las comunicaciones verticales y laterales y la volumetría de estas
pequeñas acumulaciones individuales. Esta aplicación contribuyó a la aceptación inmediata de la
primera herramienta de prueba de cableado, el RFT * Repeat Formation Tester. Hasta la
introducción de esta herramienta a mediados de la década de 1970, las mediciones de presión
distribuidas no habían estado disponibles para los ingenieros de yacimientos.
El objetivo principal de las pruebas convencionales, si se realiza en los nuevos pozos de desarrollo,
es medir cualquier piel que resulte del daño de la formación. Si la piel está ausente, los pozos pueden
producir a su máximo potencial. Si se detecta una capa alta, se debe corregir antes de poner en línea
los pozos.
Otra razón para probar los pozos de desarrollo es prepararlos para las operaciones de estimulación,
que pueden ser necesarias para producirlos económicamente. Esto es común con muchos
reservorios en áreas de baja producibilidad, donde el operador necesita un retorno temprano de las
inversiones. Cuando las tasas de producción no estimuladas no serían económicas, el operador a
menudo gasta hasta $ 1 millón o más en operaciones de estimulación extensas, como la fracturación
hidráulica. La recuperación de esta inversión podría llevar meses. Las pruebas de pozo
convencionales son especialmente importantes para evaluar las ganancias de productividad
logradas a través de la medición de la piel, determinar la longitud de la fractura y su conductividad
hidráulica, y evaluar los riesgos financieros.