Professional Documents
Culture Documents
En tiempos oscuros o de desesperación, el creyente puede contar con la ayuda de su Madre, la Virgen
María. Aquí está la oración que en estas situaciones aconseja el Papa Francisco:
Virgen María, Madre que nunca has abandonado a un hijo que grita ayuda,
Madre cuyas manos trabajan sin parar
para tus hijos tan amados.
Porque son empujados por el amor divino y
la infinita misericordia que sale de tu corazón.
Voltea hacia mí tu mirada llena de compasión.
Mira la acumulación de nudos que asfixian
mi vida.
Virgen Madre, con la gracia y tu poder de intercesión ante tu Hijo Jesús, mi Salvador, recibe hoy este
«Nudo» (nombrarlo si es posible).
Por la gloria de Dios, te pido disuélvelo
y para siempre.
Espero en Ti.
Acepta mi petición.
Líbrame, guíame, protégeme.
Sé mi refugio.