Professional Documents
Culture Documents
El mercado de valores se encuentra regulado en nuestro país por la Ley de Mercado de Valores No. 19-
00 (“Ley 19-00”) promulgada el 8 de mayo de 2000, y por su Reglamento de Aplicación No. 729-04
promulgado el 3 de agosto de 2004. Dichos instrumentos legales fueron la respuesta al interés del
Estado Dominicano de promover el desarrollo del mercado de valores en el país, propiciando el
incremento de la oferta y demanda de títulos negociables mediante la creación de mecanismos
centralizados de negociación que garanticen a los inversionistas la información suficiente y veraz para
sus decisiones de inversión, así como la existencia de instrumentos financieros que respondieran a las
necesidades del mercado y lo mantuvieran organizado, eficiente y transparente.
El ámbito de aplicación de la Ley 19-00 abarca la oferta pública de valores, tanto en moneda nacional
como en moneda extranjera, sus emisores, las bolsas de productos, los participantes en el mercado de
valores, así como toda persona física o jurídica, nacional o extranjera, que participe en el mercado de
valores. La oferta pública es definida como aquella dirigida al público en general o a sectores
específicos de éste, a través de cualquier medio de comunicación masivo. La oferta privada de valores
está regulada por las disposiciones del derecho común, en especial, por el principio de la libertad
contractual.
En general, el mercado de valores dominicano está compuesto por los siguientes participantes
conforme se definen en la Ley 19-00: Bolsas de Valores, Bolsas de Productos, Intermediarios de
Valores, Cámaras de Compensación, Depósito Centralizado de Valores, Calificadoras de Riesgos,
Fondos Mutuos o Abiertos, Fondos Cerrados de Inversión, Administradoras de Fondos, y las
Compañías Titularizadoras.
- Bolsa de Valores
Las bolsas de valores son instituciones autorreguladoras aprobadas por la Superintendencia de Valores,
cuyo objeto es la prestación de servicios a los puestos de bolsas que se inscriban en ellas, a fin de que
éstos puedan llevar a cabo las transacciones con valores de manera continua y ordenada. Las bolsas de
valores deben constituirse en compañías por acciones con un capital social mínimo de
RD$15,000,000.00 en adición a un 20% de reserva legal.
- Bolsa de Productos
Las bolsas de productos son instituciones autorreguladoras autorizadas por el Consejo Nacional de
Valores, cuyo objeto exclusivo es la prestación de servicios requeridos para llevar a cabo la
comercialización de productos originados o destinados a los sectores agropecuario, agroindustrial y
minero, incluyendo aquellos insumos que dichos sectores necesiten.
- Intermediarios de Valores
- Cámaras de Compensación
Las cámaras de compensación son compañías por acciones autorizadas por la Superintendencia de
Valores, con un capital social mínimo de RD$5,000,000.00 dividido en acciones nominativas y
negociables, más un 20% de reserva legal, cuyo objeto exclusivo es ser contraparte de todas las
compras y ventas de contratos futuros, opciones de valores y similares autorizados por la
Superintendencia de Valores. De igual forma, deben administrar, controlar y liquidar las operaciones,
cuentas corrientes, posiciones abiertas, márgenes y saldos disponibles que efectúen y mantengan los
clientes e intermediarios del mercado de valores.
El Consejo Nacional de Valores tiene la facultad de autorizar a las bolsas de valores de manera
individual o conjunta, así como a otras compañías para que ofrezcan los servicios de depósito
centralizado de valores, siempre que éstas últimas cuenten con un capital social de mínimo
RD$5,000,000.00 más un 20% de reserva legal. El depósito centralizado de valores es el conjunto de
servicios prestados a los participantes del mercado, que consisten en custodiar, transferir, compensar y
liquidar los valores que sean negociados al contado en dicho mercado, y el registro de tales
operaciones.
A la fecha, el país cuenta con una sola empresa autorizada para operar como depósito centralizado de
valores, denominada Cevaldom Depósito Centralizado de Valores, S.A., autorizada en virtud de la
Resolución Primera de fecha 6 de marzo de 2004.
- Calificadoras de Riesgos
Son compañías por acciones inscritas en el registro del mercado de valores y autorizadas por la
Superintendencia de Valores para evaluar y calificar el riesgo de los valores objeto de oferta pública,
basándose fundamentalmente en la solvencia económica del emisor, la liquidez del título, las
características del instrumento en cuestión, la probabilidad de no pago, y demás variables que puedan
influir en la calificación del valor.
- Fondos de Inversión
Existen dos tipos de fondos de inversión: (i) abiertos (o mutuos) que, conforme lo define la Ley 19-00,
es un patrimonio variable que se encuentra conformado por aportes de personas (físicas o jurídicas)
para su inversión en valores de oferta pública, y que es administrado por una compañía administradora
de fondos por cuenta y riesgo de los aportantes previo contrato suscrito entre las partes a tales fines. Y
por otro lado, los fondos de inversión (ii) cerrados, que se diferencian de los abiertos en que su
patrimonio es fijo, sus activos deben ser homogéneos y sus cuotas serán negociables en las bolsas.
- Administradoras de Fondos
Las administradoras de fondos de inversión han de ser compañías por acciones autorizadas por el
Consejo Nacional de Valores cuyo objeto exclusivo es el de administrar fondos.
- Compañías Titularizadoras
Son las personas jurídicas facultadas para agotar el proceso de titularización, mediante la constitución
de un patrimonio cuyo propósito exclusivo es respaldar el pago de los derechos conferidos a los
tenedores de valores emitidos con cargo a dicho patrimonio. De igual forma se encargarán de la
transferencia de los activos al patrimonio y la emisión de los respectivos valores.
Órgano Regulador
No obstante, debe velar por la transparencia del mercado de valores y sus operaciones, a través de la
difusión de todas aquellas informaciones necesarias, y tiene la autoridad para aplicar las sanciones
administrativas, pecuniarias y legales que dispone la normativa aplicable. Para estos fines cuenta con
un Registro de Mercado de Valores y Productos, en el que se inscribe toda la información pública
correspondiente a los valores y los demás participantes del mercado.
De igual forma, existe el Consejo Nacional de Valores, compuesto por 7 miembros y cuya función
principal es la de fungir como agente conciliador en los conflictos que surjan entre los distintos
participantes del mercado, así como también de conocer las solicitudes de apelación de las decisiones
de la Superintendencia de Valores y las bolsas que sean presentadas por dichos participantes.
b. Mapa Conceptual sobre la conformación del Consejo Nacional de Valores.
Presidente del
Consejo Nacional de
Superintendente de Valores Valores Representante Ministerio de
Miembro Ex Oficio Hacienda, Miembro Ex-Oficio
La BVSD fue creada por la cámara de comercio y producción del Distrito Nacional Inc. y aun cuando
mantendrá vínculos institucionales con la misma, gozara de autonomía funcional y financiera.
La dirección de la BVSD estará a cargo del consejo de Directores compuesto por un mínimo de nueve
(9) miembros, designados por la Junta de Directores de la cámara de comercio y producción del D. N. y
en el mismo, estarán representados las empresas miembros de la Bolsa (es decir, los puestos), así como
los inversionistas particulares e institucionales.
Las principales funciones del Consejo de Directores de la Bolsa son dictar, enmendar, modificar e
interpretar lo establecido en el reglamento de la Bolsa.
El consejo de directores se reunirá trimestralmente y en cualquier otra ocasión que lo amerite con la
debida convocatoria a cada director.
El consejo de directores estará asesorado por un comité de miembros Asesores y de conciliación el cual
se encargara de asistirle acerca de los cambios deseables en la unidad contratación, los múltiplos de
cotización, las comisiones, las reglas que norman las contrataciones y liquidaciones, las solicitudes de
posibles nuevos puestos o Agentes, así como respecto a otros asuntos relativos a las operaciones
bursátiles.
Asimismo, éste comité tiene a su cargo la resolución de cualquier disputa entre los puestos, cuando
éstos hayan decidido someterse a dicha decisión en vez de un arbitraje.
d. Objetivos y conformación de la Bolsa de Valores de la República Dominicana y de los
órganos relacionados con ésta,
En el 1997 la Bolsa cambia su nombre por el de Bolsa de Valores de la República Dominicana Inc.,
debido a que sus operaciones se habían extendido a otras ciudades del país. Sin embargo, el
mercado de valores privado existe desde mucho antes de que la Bolsa de Valores iniciara sus
operaciones.
Existen empresas, de las más sólidas del país, que acostumbran a negociar papeles comerciales, a
través de un promotor de valores pagado por ellas mismas, sin necesidad de ir a la Bolsa. En
mayo del 2000, dentro del marco de una serie de reformas estructurales en materia de política
tributaria, de comercio exterior, de privatización de las empresas estatales y del mercado de
valores, entre otras, llevadas a cabo por las autoridades dominicanas, se promulgó la Ley de
Mercado de Valores, previamente haber sido consensuada con los sectores involucrados.
La Ley de Mercado de Valores es una ley moderna y genérica, cuyo objetivo principal es regular el
mercado de valores mediante el establecimiento de disposiciones de carácter general que
permitan el desarrollo del mismo de una manera organizada, eficiente y transparente.
En el año 2001, la Bolsa de Valores de la República Dominicana Inc. cambió su estatus jurídico de
entidad sin fines de lucro a compañía por acciones, acorde con las disposiciones de la Ley de
Mercado de Valores. En marzo del año 2002 fue aprobado el Reglamento de Aplicación de la
citada Ley; asimismo en el mes de mayo del mismo año fueron nombrados los miembros del
Consejo Nacional de Valores, el Superintendente y el Intendente de Valores, en quienes descansa
la responsabilidad de organizar y poner en marcha a la Superintendencia de Valores de la
República Dominicana, entidad reguladora de este mercado.
Facilitar el intercambio de fondos entre las entidades que precisan financiación y los
inversores
Proporcionar liquidez a los inversores en Bolsa
Fijación de precios de los títulos a través de la ley de la oferta y la demanda
Dar información a los inversionistas sobre la empresas que cotizan en Bolsa.
Publicar los precios y cantidades negociables para informar a los inversores y entidades
interesados.
Objetivos específicos
Prestar en materia de valores y operaciones de bolsa, así como brindar a sus clientes un
sistema de información y procesamiento de datos.
Realiza operaciones de compra y venta de moneda extranjera con arreglos a las
regulaciones cambiaras
Realiza operaciones con el mercado internacional con instrumento de deuda pública
externa del país.
Otorga crédito con sus propios recursos únicamente con el objeto de facilitar la adquisición
de valores por sus comitentes y estén o no inscritos en la bolsa y con las garantías de tales
valores
El desarrollo de mercado de capitales induce a que el ahorro y la inversión sean más eficientes,
produciendo dos efectos:
Para los inversionistas genera un mayor retorno de sus inversiones, obteniendo un mayor nivel de
riqueza en el largo plazo, el que a su vez se traduce en un mayor consumo.
Para los demandantes de fondos que enfrentan la necesidad de realizar inversiones; el desarrollo del
mercado de capitales significa un menor costo de financiamiento, que se manifiesta en empresas más
competitivas en sus respectivos mercados, mejores salarios y más empleos.
Más directamente, la existencia de una Bolsa y sus posibilidades de crecimiento dependerán mucho de
la transparencia, eficiencia y honestidad gerencial de las empresas. Aquí existe, como en muchos casos,
un círculo vicioso. Mientras las empresas no se organicen mejor, la Bolsa se estanca. Y mientras la
Bolsa no crece, no hay incentivo para la transparencia. Pero, como en muchos de estos casos, las
fuerzas del desarrollo y de la modernización lo van rompiendo. Ya en nuestro país, vemos el inicio de
ese proceso.
El Gobierno contribuye a romper este círculo, al momento en que la Dirección de Impuestos Internos
empieza a exigir la presentación de estados financieros más realistas. La banca comercial también
colabora en este proceso, reclasificando sus préstamos, acorde con las normas de la Superintendencia
de Bancos; y a penalizar con altas tasas de interés aquellos estados que arrojan resultados negativos
ficticios en su gestión. Ambas normativas ya están en vigor, y contribuyen a que en los próximos años,
la mayoría de los estados financieros refleje de manera diáfana la realidad financiera de las empresas.
Este proceso incide en el crecimiento de la Bolsa, y una mejor recaudación fiscal.