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EN SAYO DERECHO DEL TRABAJO

II
Enviado por PattyVillaro • 7 de Diciembre de 2014 • 13.344 Palabras (54
Páginas) • 357 Visitas

INTRODUCCION

El objetivo fundamental de este trabajo de investigación, radica en


desmembrar los antecedentes históricos del Derecho Laboral tanto en
nuestro país como en lo internacional, y para el éxito del objetivo
mencionado haremos un estudio profundo y pero a su vez simple de cada
etapa sobresaliente que enmarcan el caminar de esta materia.
Empezaremos por mencionar al sindicalismo que nace como una reacción
de movimiento obrero en la Revolución Industrial como consecuencia de
la falta de derechos que los trabajadores tenían en las fábricas de
Inglaterra. En ese periodo también la lucha de clases, la conciencia de
clase, la lucha colectiva obrera de Europa y el modo de producción
capitalista, será el motor del principio dejar-hacer y dejar-pasar con un
sentido nuevo.

Analizaremos el origen y evolución de las coaliciones obreras en


Europa, frente a las leyes represivas como la Ley Le Chapelier
prohibiendo se constituyeran sindicatos. En esa época la participación de
los trabajadores franceses en su movimiento revolucionario, la primera
internacional y el gran movimiento de resistencia de la “Comuna de Paris”
integrada en su mayoría por obreros armados que tomaran por asalto el
hotel de Ville (Alcaldía).

Acontecimiento sucesor sumamente determinante en la historia es


que con las Leyes de desamortización y nacionalización de los bienes
eclesiásticos de 1821, con las Leyes de colonización, la ley de
desamortización de 1856 y la de nacionalización de bienes eclesiásticos
1859, la gente empezó a apropiarse de terrenos que fueron primero del
Rey Azteca y de uso común del Calpullalli luego con la conquista
pertenecieron al monarca español, a los nobles y que todas terminaban en
manos de la iglesia. Con las Leyes antes citadas la gente se apropio de los
terrenos en comento al realizar denuncias, también se denunciaron las
tiendas de raya y la baja política que provocara la Revolución Mexicana
del 20 de noviembre de 1910. con esto La Constitución liberal de 1857, fue
la que permitió el Derecho de reunión o de asociación, pues reconoció que
los derechos del hombre son inmutables y sagrados por lo que es así como
surge la asociación mutualista.

Otra etapa es en la que el Derecho Colectivo del Trabajo Mexicano se


desdobla en varios principios e Instituciones: La libertad de evolución
fluye hacia la asociación profesional y la huelga. Veremos que La coalición
que tiene su fundamento en el Artículo 123 Constitucional Fracción XVI
en donde se reconoce el Derecho que tienen los trabajadores para
coaligarse en defensa de sus intereses…infine. La coalición es un acuerdo
temporal de un grupo de trabajadores para la defensa de un interés
actual; una vez satisfecho este interés cesa la coalición. Así mismo El
Derecho a huelga es un Derecho adjetivo o instrumental en el sentido de
que es un procedimiento o instrumento para imponer una solución
sustantiva también conocida como el Derecho de reunión.

Haremos un retroceso en el tiempo hacia Cuando el trabajador tan


solo disponía de su fuerza de trabajo y de su salario si se lo pagaban, no
tenía una legislación protectora es decir estaba indefenso ante la justicia,
con la llegada de la Revolución Industrial en 1860 origino que frente a la
burguesía se fomentara la solidaridad de obreros ante las injusticias del
sistema. Pero las asociaciones de obreros y los sindicatos fueron
perseguidos en todo el mundo, México no fue la excepción. El sindicato se
encuentra establecido:

 El artículo 9 constitucional otorga el derecho de reunión y este


derecho es el antecedente obligado del derecho de sindicalización al
poderse reunir hombres y mujeres.

 El artículo 123 Constitucional Fracción XVI, establece la libertad de


coalición y sindicalización.

La Ley Federal del Trabajo de 1970 en su Artículo 356 señala:

“Sindicato es la asociación de trabajadores o patrones constituida para el


estudio, mejoramiento y defensa de sus respectivos intereses”.

No podemos dejar de mencionar La reforma al artículo 249 de la Ley


Federal del Trabajo en el año de 1940 se refiere en concreto a la fracción
primera en la que a los sindicatos se prohíbe intervenir en asuntos
religiosos.

Esta prohibición se explica por influjos de variada naturaleza pero


que son susceptibles de agruparse como originados en hechos e ideas que
corresponden a dos tendencias político-sociales, la prohibición significa
restringir el sindicalismo exclusivamente al campo de las relaciones
obrero patronales.

El PRM es creado por el general Lázaro Cárdenas en 1939 dando fin


al maximanto de calles y al PNR, también crea un frente unido de
trabajadores el cual tendrá representante o lideres., los cuales serian los
mediadores entre los obreros y el Gobierno.

El conflicto de Nueva Rosita se da en el periodo presidencial de


Miguel Alemán y tiene su origen con los derechos ganados de la
Constitución de 1917 con el derecho a huelga, contratación colectiva,
jornada y salarios justos.

Tenemos que El conflicto ferrocarrilero se da en el sexenio del


presidente Adolfo López Mateos este movimiento se inicia el 2 de mayo
1958 con la formación de la gran comisión para el aumento de salarios, se
da una gran manifestación en el Distrito Federal en donde mueren los
trabajadores Rafael Alday Sotelo y Andrés Montaño Hernández tomando
el ejercito las instalaciones sindicales, en una nueva elección sindical gana
Demetrio Vallejo militante del POCM, en este movimiento Demetrio
Vallejo y Valentín Campa que fueron detenidos fueron liberados hasta
1969.

Por ultimo veremos Otra huelga de gran trascendencia en todo el


país, fue la huelga que realizaron los trabajadores de las plantas de hierro
gris y hierro maleable de CINSA-CINFUNSA del grupo industrial saltillo,
huelga que estallo el 16 de abril 1974, los trabajadores desconocieron al
comité ejecutivo y eligieron a Salvador Alcázar como nuevo líder.

El movimiento de huelga en SPICER en donde más de 600


trabajadores sostuvieron una huelga en donde el espontaneismo al que
igual que CINSACINFUSA se da consolidación empírica de un
sindicalismo independiente frente al sindicalismo oficial, también se
distinguió por el apoyo de la izquierda entre otros del SUTERM.
TEMA I

LAS RELACIONES DE PRODUCCIÓN Y LA NECESIDAD DE SU

REGULACIÓN JURÍDICA COLECTIVA

RELACIÓN DE PRODUCCIÓN.

Relaciones de producción es un concepto frecuentemente utilizado


por Karl Marx en su teoría del materialismo histórico y en Das Kapital.
Más allá de examinar casos concretos, Marx nunca se define con exactitud
el concepto general. Es evidente, sin embargo, que se refiere a todas las
clases sociales y técnicos de las interconexiones humanos que participan
en la producción social y la reproducción de la vida material. "Social"
indica pertenencia, el grupo y la actividad cooperativa y (en latín, ‘socio’
significa camarada, compañero o asociado). "Técnico" se refiere a la
relación entre los productores y los objetos de trabajos.

En combinación con las fuerzas productivas, las relaciones de


producción constituyen históricamente un modo específico de
producción. Karl Marx contrasta las relaciones sociales de producción con
las relaciones técnicas de producción, en el primer caso, son las personas
(sujetos) que están relacionados, en este último caso, la relación es entre
personas y objetos en el mundo físico en que viven (los objetos son, en el
contexto de la producción, lo que Marx llama "medios de trabajo" o
medios de producción.

Sin embargo, Marx sostiene que con el aumento de la economía de


mercado, esta distinción es cada vez más oscurecida y distorsionada. En
particular, una economía monetaria, es posible definir, manipular y
simbolizan las relaciones entre las cosas que la gente hace en la
abstracción de las relaciones sociales y técnicos involucrados. Marx dice
que esto lleva a la reificación (thingification o Verdinglichung) de las
relaciones económicas, el fetichismo de la mercancía que es un buen
ejemplo.

Uno de los problemas teóricos de la economía marxista es distinguir


exactamente entre las relaciones de producción y las relaciones de
distribución, la determinación de la importancia de cada uno en la
asignación de recursos. Según el más crudo y más vulgar interpretación
de Das Kapital, la explotación sólo se produce en el punto de producción.
El propio Marx, obviamente, no afirmar en absoluto, que sólo postula el
comando sobre el excedente de mano de obra de otros como la base de la
existencia del capital y su poder económico.

Marx discute el problema teórico en dos lugares principales: la


introducción a los Grundrisse, manuscrito y en el capítulo 51 de Das
Kapital.

RELACIONES TÉCNICAS Y RELACIONES SOCIALES.

Relaciones De Producción

Conjunto de relaciones que se establecen entre los hombres como


consecuencia de la producción o trabajo.

En las relaciones de producción el marxismo distingue entre:

• relaciones técnicas: relaciones que se establecen entre el agente y el


medio de producción y el proceso de trabajo en general (por ejemplo el
artesanado o producción individual, o el modo de producción cooperativo
simple que existía en la caza primitiva).Da lugar a la división técnica del
trabajo;

• relaciones sociales: se establecen entre los agentes mismos; son los


vínculos que se establecen entre los hombres que participan en el proceso
de producción. Dan lugar a las clases sociales, que son básicamente dos:
los propietarios de los medios de producción y los no propietarios de los
medios de producción. Las dos formas de las relaciones sociales son la
relación de explotador a explotado y la relación de colaboración recíproca
en donde no se da la explotación (comunismo primitivo y futuro
comunismo).

Las relaciones de producción no son consecuencia de la voluntad de


las personas sino de las condiciones materiales de producción
correspondientes a cada momento histórico.

MANUFACTURA Y GRAN INDUSTRIA.

Desarrollo de las máquinas y de la producción mecánica

El empleo capitalista de las máquinas sólo tiende a disminuir el


precio de las mercancías, a reducir la parte de la jornada que el obrero
trabaja para sí, con el fin de prolongar aquella en que trabaja nada más
que para el capitalista. Es un método especial para fabricar plusvalía
relativa. “La fuerza de trabajo en la manufactura y el medio de trabajo en
la industria moderna son los puntos de partida de la revolución
industrial.”

Señala que todo mecanismo desarrollado se compone de tres partes


distintas: motor, transmisión y máquina de trabajo. Las dos primeras
existen para comunicar a la última el movimiento que la hace atacar el
objeto de trabajo y modificar su forma.

“La máquina, punto de partida de la revolución industrial reemplaza,


pues, al trabajador que maneja una herramienta por un mecanismo que
opera a la vez con varias herramientas semejantes y que recibe su impulso
de una fuerza única, sea cual fuere su forma. Pero tal máquina
herramienta no es más que un elemento simple de la producción
mecánica. El aumento de las dimensiones de la máquina, y de la cantidad
de sus herramientas, exige un mecanismo mayor para impulsarla. Y este
mecanismo requiere, a su vez, una fuerza superior a la del hombre, para
vencer su resistencia, aparte del hecho de que el hombre es un
instrumento muy imperfecto para producir un movimiento uniforme
continuo. Pero si se supone que actúa simplemente como motor, que una
máquina ocupa el lugar de su herramienta, es evidente que se lo puede
reemplazar por fuerzas naturales.”

Plantea dos formas distintas del conjunto del mecanismo


productivo: la cooperación de varias máquinas homogéneas (que ejecuta
todas las operaciones hasta entonces efectuada por un mismo artesano o
por varios obreros reunidos en una manufactura) o un sistema de
máquinas. “El sistema de máquinas propiamente dicho sólo reemplaza la
máquina independiente cuando el objeto de trabajo recorre
sucesivamente una serie de distintos procesos graduados, ejecutados por
una cadena de máquinas-herramientas distintas pero combinadas entre
sí. La cooperación por división del trabajo que caracteriza a la
manufactura reaparece aquí como combinación de máquinas de
operación parcelaria.” (368)La manufactura anticipa el esbozo de la
división del trabajo que luego el sistema de máquinas desarrollará. Con la
imposición del sistema de máquinas y la producción mecánica, el proceso
productivo se hace “objetivo”, independizándose de la subjetividad del
trabajador. Antes, la operación estaba adaptada al artesano; ahora ocurre
a la inversa: se ha emancipado de las facultades individuales del obrero.
“Por consiguiente, así como el principio de la manufactura es el
aislamiento de los procesos particulares por la división del trabajo, el de la
fábrica, por el contrario, es la continuidad interrumpida de esos mismos
procesos.”

Marx concluye que la manufactura constituye, en términos


históricos, la base técnica de la gran industria. La industria dominada por
máquinas exige también un aumento incesante de obreros especialistas.
En cierto grado de su desarrollo, la gran industria entra en conflicto con
su base dada por el oficio y la manufactura.

LAS FUERZAS PRODUCTIVAS, Y SU SOCIALIZACIÓN.

Las FUERZAS PRODUCTIVAS son las fuerzas que resultan de la


combinación de los elementos del proceso de trabajo bajo relaciones de
producción determinadas. Su resultado se mide por una determinada
productividad del trabajo.

El trabajo del hombre va perfeccionándose a través de la historia, es


decir, como van desarrollándose las fuerzas productivas de la sociedad.
Por ejemplo, la producción artesanal, en la que la tejedora realizaba su
trabajo en su hogar, es reemplazada por la producción industrial, en que
se reúne un gran número de tejedoras que utilizan telares mucho más
complejos, hasta llegar al telar mecánico moderno.

En esta producción industrial el trabajo pasa a tener un carácter


cada vez más social. Existen distintas secciones dentro de la industria:
hilado, tejeduría, conos, tintorería, etc. En cada sección labora
determinada cantidad de trabajadores, y sólo se llega a producir el tejido
mediante la participación del conjunto de los trabajadores de las distintas
secciones.

La producción deja de ser, en este caso, un proceso de producción


individual para transformarse en un proceso de producción en que
intervienen muchos trabajadores, es decir, en un proceso de producción
social. Y el producto deja de ser el resultado del trabajo de un individuo
para ser el resultado del trabajo de los trabajadores de las distintas
secciones. Ya nadie puede decir "este producto lo he hecho yo", "este
producto es mío".
Este carácter cada vez más social que van tomando las fuerzas
productivas en su desarrollo es lo que se ha denominado proceso de
socialización de las fuerzas productivas.

La socialización de las fuerzas productivas desborda ampliamente el


marco de la fábrica; abarca toda la sociedad. Ella depende
fundamentalmente de dos hechos: el origen cada vez más social de los
medios de producción, y el destino cada vez más social del producto.

CLASES SOCIALES EN EL MODO DE PRODUCCIÓN CAPITALISTA.

MODO CAPITALISTA DE PRODUCCIÓN: modo de producción de


los bienes materiales basado en la propiedad privada capitalista sobre los
medios de producción y en la explotación del trabajo asalariado. El
régimen capitalista sustituyó al modo feudal de producción (ver).
Constituye una organización social dividida en dos clases fundamentales,
cuyos intereses son diametralmente opuestos: la clase de los capitalistas,
propietarios de los medios de producción, y la clase de los proletarios,
carentes de propiedad y de medios de subsistencia, por lo que, ante la
amenaza del hambre, se ven obligados a vender constantemente su fuerza
de trabajo a los capitalistas. El capitalismo es la última formación
económico-social basada en la propiedad privada y en la explotación del
hombre por el hombre. Su ley económica cardinal, su hierra motriz y su
principal estimulo radican en la producción y en la apropiación de la
plusvalía, que tiene como fuente el trabajo no retribuido de los obreros
asalariados.

Después de desarrollar hasta dimensiones antes nunca vistas las


fuerzas productivas sociales, el régimen capitalista, en virtud de las
contradicciones internas antagónicas que le son inherentes, de sus vicios y
lacras, ha condenado a una gran parte da la sociedad, a los trabajadores, a
la ruina y a la miseria, pues son fundamentalmente los capitalistas
quienes se apropian de todos los beneficios que origina el incremente de
la producción social.

LA LUCHA, CONCEPTO, TIPOS Y FORMAS.

Del latin “luctare:, lucha significa pelea o combate, ya sea en el plano


del enfrentamiento físico entre dos ejércitos armados, como entre uno o
mas humanos, usando armas o su propia fuerza y estrategias de pelea.
La lucha también puede darse pacíficamente en el plano de las ideas,
para poder imponer las propias, frente a ideologías opuestas e incluso la
persona pude tener una lucha interna, por conflicto de valores.

Que el enfrentamiento que se produzca entre los obreros y sus


patrones forme parte de la lucha de la clase obrera contra la burguesía y
su gobierno y, por lo tanto, que aunque defienda los intereses inmediatos
de ese grupo de trabajadores, esté conectada a la lucha organizada de esa
clase por la realización de sus intereses a largo plazo, es decir, a la lucha
por la conquista del poder político para poder llegar desde allí a destruir
la sociedad capitalista y construir la sociedad socialista.

Pues bien, para que se cumplan estas condiciones es necesario que la


clase obrera esté organizada como clase a nivel nacional a través de su
organización sindical y que sus luchas estén orientadas por un partido
proletario que reúna a los sectores más avanzados de ella. De esta manera
la lucha por objetivos inmediatos de un grupo de trabajadores puede
llegar a conectarse con los objetivos a largo plazo de toda la clase obrera.

Ahora bien, después de haber definido lo que entendemos por lucha


de clase en general, debemos detenernos a examinar los diferentes tipos
de lucha que podemos distinguir en los enfrentamientos entre las clases
sociales opuestas.

Podemos distinguir enfrentamientos a nivel económico o del proceso


productivo, a nivel ideológico o de las ideas, y a nivel político o del
aparato de Estado. Distinguimos, por lo tanto, tres tipos de lucha de
clases: económica, ideológica y política.

1) LA LUCHA ECONÓMICA.

La lucha económica es el enfrentamiento que se produce entre las


clases opuesta a nivel de la infraestructura o región económica. Este
enfrentamiento se caracteriza por la resistencia que oponen a este nivel
las clases explotadas a las clases explotadoras.

2) LA LUCHA IDEOLÓGICA.

La lucha de clases se da también en el terreno de las ideas, ya que las


ideas burguesas contribuyen a mantener la dominación de la clase
explotadora sobre los explotados. La burguesía logra imponer estas ideas
debido a que, gracias a su poder económico, controla las instituciones a
través de las cuales se difunden las ideas: radio, prensa, televisión, cine,
escuelas, universidades, etcétera. Las ideas de la burguesía penetran en
todas las actividades de la sociedad e incluso logran introducirse en los
organismos de la clase obrera si ésta no logra mantener una actitud de
permanente vigilancia.

A esta lucha en el terreno de las ideas la llamamos lucha ideológica

3) LA LUCHA POLÍTICA.

La lucha política es el enfrentamiento que se produce entre las clases


antagónicas a nivel de la región jurídico-política de la sociedad, o sea, la
lucha de los explotados contra las leyes y las instituciones que mantienen
la dominación de las clases explotadoras.

TEMA II

ORIGEN Y EVOLUCIÓN DE LAS COALICIONES OBRERAS EN

EUROPA

REVOLUCIÓN INDUSTRIAL Y ACCIÓN OBRERA LEYES REPRESIVAS.

La revolución industrial es un periodo de cambio que se caracteriza


por una ruptura importante en toda Europa con los anteriores sistemas
existentes, ya sean tanto sociales, como de poder y económicos. Esta
época vino marcada por las revoluciones burguesas que se dieron en
general en este continente y que marcaron el sino de la historia
contemporánea.

Ahora bien, en lo concerniente a lo económico-social, la revolución


burguesa trajo consigo una nueva forma de entender la propiedad que
vino aparejada con una nueva maquinaria y por ende, una nueva de
producción que hizo modificar los substratos sociales del viejo continente.
La aparición de las grandes fábricas hizo desaparecer paulatinamente la
gran proporción de agricultores y jornaleros para dar paso a una gran
clase obrera industrial que vivía en ciudades. Es por ello que me planteo
varias ideas antes de profundizar en el tema. De un lado, la pobreza, las
enfermedades y el desempleo. Me imagino un mundo sucio, con la basura
en las calles y en las casas. Un mundo enfermizo, con gente que muere por
pestes desconocidas para ese tiempo y que se multiplican a cada día. Un
mundo desocupado, gente sin trabajo porque las maquinas pueden
hacerlo mucho mejor o simplemente no son necesarios. Del otro lado, la
riqueza, la tecnología y la expansión. En mente tengo a un mundo
progresista, el esplendor de las ciudades gracias a los nuevos sistemas. Un
mundo nuevo, la aparición de nuevas formas de producir, nuevos gases,
sustancias, y metales que lo revolucionaron. Un mundo echando raíces, la
gente empezó a elegir otros lugares para vivir, por pestes o porque era
sencillo gracias a las nuevas vías de transporte.

Así, ante este planteamiento nos preguntamos, cuales fueron los


elementos que rodearon a estas revoluciones y en que medida afectaron a
la formación de estas clases sociales y de la sociedad en si, en un entorno
económico que se movía a gran velocidad, muchas veces superando a los
mismos agentes sociales inmersos en estos cambios.

Este fuerte desarrollo económico estuvo rodeado por una serie de


factores ideológicos e institucionales que lo hicieron posible. Sabemos que
el progreso económico puede tener lugar bajo distintos factores, pero
también conocemos que ciertos ambientes sociales y jurídicos, así como
sencillamente algunos ambientes naturales, son claramente más
favorables al avance material que otros. Analicemos estos.

En cuento al marco legal, el documento básico del nuevo orden se


encuentra en la Declaración de los Derecho del Hombre y del Ciudadano.
Todos los ciudadanos tenían "igual acceso a todos los honores, oficios y
empleos públicos, de acuerdo con... sus virtudes y talentos". La ideología
que propugnaban los revolucionarios franceses era enormemente liberal,
de forma que en 1971 la Asamblea francesa llegó a aprobar la drástica ley
de Chapalier que prohibía las organizaciones o asociaciones tanto de
trabajadores como de patronos.

EL CARTISMO.

La Revolución Industrial se había producido a mediados del siglo


XVIII. Como consecuencia de ella, los patrones acumularon ganancias,
con las diferencias entre los precios de venta y los costos de producción,
que los hicieron ricos.

La clase obrera, desprovista de derechos laborales, trabajaba sin


descanso, en condiciones insalubres, por una remuneración ínfima que no
satisfacía sus más básicas necesidades.
En los albores del siglo XIX, se vio nacer el reclamo de los
trabajadores oprimidos, que viendo que individualmente no conseguían
respuesta a sus pedidos, comenzaron a organizarse en forma colectiva.

Estos grupos de trabajadores industriales, comenzaron a hacer surgir el


movimiento obrero, como defensa ante la explotación capitalista.

Los sectores obreros más fuertes, organizaron sindicatos, agrupados


por lugares y oficios, cuyo accionar se vio debilitado por la gestión
violenta de ciertos grupos radicalizados.

En Inglaterra, el movimiento obrero comenzó a gestarse en 1838, con el


nacimiento del movimiento cartista.

Los obreros ingleses elaboraron un petitorio, redactado por William


Lovett (fundador de una organización obrera llamada London Working
Men´s Associations) y Francis Place, (maestro del gremio de la sastrería)
denominado Carta del Pueblo, que hicieron firmar por gran cantidad de
trabajadores, dirigida al Parlamento, donde solicitaban una serie de
mejoras, publicadas en mayo de 1838.

En ese documento se exigía, entre otras cosas:

La posibilidad de sufragar, a todo hombre mentalmente sano, sin


antecedentes penales, y mayor de 21 años.

Sufragio secreto, dividiendo al electorado en circunscripciones de igual


tamaño.

Elección democrática de los miembros del Parlamento,


permitiéndose que los representantes puedan ser pobres o ricos, sin
exigirse la posesión de propiedades.

Remuneración para los representantes políticos del pueblo, para que


cualquier persona, cualquiera sea su oficio o profesión pueda desempeñar
cargos públicos, sin tener que preocuparse de su estabilidad económica
para atender cuestiones personales.

Reconocimiento de derechos laborales, entre los que se contaba,


particularmente, jornadas laborales con extensión máxima de diez horas.
Los tres dirigentes del movimiento cartista eran Lovett, de ideas
moderadas, O´Brien, más revolucionario y Feargus O´Connor, de origen
irlandés, abogado y periodista, fundador de la Democratic Association y
en junio de 1830, de la Gran Unión del Norte, de carácter violento y
revolucionario.

La petición se presentó en julio de 1839, siendo denegada por el


Parlamento, a pesar de que contaba con 1.200.000 firmas.

Tras fallidos intentos de huelgas generales y revueltas violentas, una


nueva petición, con 3.000.000 de firmas fue presentada al Parlamento,
pero la respuesta fue nuevamente adversa.

Organizada por O´Connor, se desarrolló una marcha, con destino al


Parlamento para entregar una tercera propuesta, el 10 abril de 1848, en
Kennington Common, pero no pudo cumplir su objetivo ante el avance
del ejército con objetivo de represión.

Hasta 1858, se observaron manifestaciones de este movimiento, aunque


sin significación político-social.

Durante la década 1850-1860, se produjo un resurgimiento


económico, que declinó la actuación política y radicalizada de los
movimientos obreros y motivó el renacimiento de los sindicatos. En 1868,
se logró la acción conjunta y coordinada de los diversos Sindicatos, a
través de la constitución de la Trades Union Congress.

EL MOVIMIENTO REVOLUCIONARIO FRANCÉS DE 1848 -PRIMERA

INTERNACIONAL-LA COMUNA DE PARÍS.

En Octubre de 1870 se empezaron a producir en París


manifestaciones para seguir la guerra contra los prusianos. Ante el temor
de nuevas revueltas proletarias, las clases dirigentes (tanto monárquicas
como republicanos burgueses) formaron un gobierno que pactó un
armisticio con los prusianos, trasladándose además a Versalles para evitar
al pueblo parisino. Así mismo se debían organizar unas elecciones para la
creación de una nueva Asamblea Nacional.

En el París sitiado esta rendición se vio como una traición por parte
del proletariado, que empieza a pedir la Comuna, se hace con las armas de
los arsenales y organiza la resistencia. En el resto de Francia, sin
embargo, estos acontecimientos provocados por los proletarios y la
pequeña burguesía parisina se vieron como otro intento de revolución,
como en 1848. Esto provocó que en las elecciones de febrero de 1871 los
monárquicos y conservadores fueran mayoría, frente a unos pocos
diputados de izquierda (republicanos radicales y socialistas). La nueva
asamblea no reconoce la nueva República proclamada en Septiembre y
elige a Thiers, político conservador, como jefe de Gobierno para
desencadenar la contrarrevolución ante el apoyo creciente a la Comuna.

Su primera acción fue intentar desarmar a la población de París,


para lo cual pacta con Bismark la devolución de prisioneros de guerra
para realizar la represión. Ante este intento el pueblo de París, junto a la
Guardia Nacional sublevada del gobierno, les hace frente hasta incluso
tener la posibilidad de tomar Versalles.

Sin embargo optaron por la moderación, fuertemente criticada


posteriormente, e incluso se permitió en la ciudad la movilidad libre de
grupos conservadores, prensa monárquica y toda la libertad que se podía
pensar, París era una ciudad abierta. La Francia dominada por Thiers, sin
embargo, se caracterizaba por la represión de cualquier simpatizante de la
Comuna y, por supuesto, por un control policial absoluto.

El 26 de Marzo de 1871 se realizan elecciones libres en la ciudad y se


proclama oficialmente la Comuna de París, invitando al resto de ciudades
a hacer lo mismo y luchar contra Thiers, su llamamiento no tuvo
respuesta ante la falta de comunicaciones con el exterior. En estas
elecciones fueron elegidos toda clase de ideas y personas, anarquistas,
blanquistas, proudonistas, socialistas de la I Internacional, e incluso hubo
representantes de los barrios burgueses que más tarde se retirarían y
huirían.

El hecho de ser la “Iª Revolución Socialista” no es por el predominio


de ciertos miembros socialistas, sino por la iniciativa de creación de una
organización político-administrativa, establecida casi de forma
espontánea, con la unión de todas las ideologías representadas.

EL PARTIDO SOCIAL DEMÓCRATA ALEMÁN SEGUNDA

INTERNACIONAL.
Tras la derrota de la Comuna de París la Primera Internacional
quedó hecha trizas. Los años siguientes fueron años de reacción política
en toda Europa. La formación de los Estados nacionales y el poderoso
avance de los medios de producción, en una época de boom económico,
dieron alas a la burguesía e intimidó, en un primer momento, a la clase
obrera. Pero a su vez, el desarrollo industrial creaba las bases para su
fortalecimiento y su organización. Tras la victoria en la guerra franco-
prusiana de 1871, Alemania entró en una era de expansión industrial
parecida a la que vivió Inglaterra veinte años antes. A medida que
avanzaba la economía, el movimiento obrero crecía y se organizaba para
luchar por mejorar sus condiciones de vida. El Partido Socialdemócrata
Alemán tuvo un gran crecimiento y ganó mucha influencia. De esta
manera, Alemania se convirtió en la punta de lanza de la Segunda
Internacional.

Mientras esto ocurría en Alemania, en el resto de Europa no se


daban las mismas condiciones. Este contraste en la situación hacía
presagiar que no era el mejor momento para la creación de una nueva
internacional. De hecho, los intentos de revivir la internacional que
hicieron los socialistas belgas y alemanes quedaron en nada. Pero esta
situación cambió a finales de la década de 1880, provocado por el
fortalecimiento del movimiento socialista y los sindicatos en Europa y la
crisis en Inglaterra, que agitó la conciencia de la clase obrera inglesa.

Las condiciones objetivas para la creación de una nueva


internacional ya estaban dadas, y la ocasión específica fue el centenario de
la Revolución Francesa en 1889. Ese año en París se fundaba la Segunda
Internacional. Hubo dos congresos obreros. Uno organizado por los
socialistas alemanes y otro por los sindicalistas ingleses y los reformistas
franceses. Fue el organizado por los alemanes el que llegó a tener mayor
fortaleza y logró una unidad duradera. Éste fue el primer congreso de la
Segunda Internacional.

TEMA III

ORIGEN Y EVOLUCIÓN DE LAS SINDICALIZACIÓN EN MÉXICO

Y DEL DERECHO COLECTIVO DE TRABAJO

LEYES DE DESAMORTIZACIÓN Y NACIONALIZACIÓN DE BIENES


ECLESIÁSTICOS Y LIBERACIÓN DE FUERZA DE TRABAJO.

Era tal la injerencia de la Iglesia en la vida institucional del país que


baste recordar la existencia del Ministerio de Justicia, Negocios
Eclesiásticos e Instrucción Pública, donde la justicia, la religión y la
educación se veían como tres asuntos muy relacionados entre sí. De aquí
la importancia de que el 12 de julio de 1859 se haya proclamado la Ley de
Nacionalización de Bienes Eclesiásticos.

La separación de la Iglesia y el Estado era un problema vital para la


subsistencia del Estado, era un problema grave a resolver para sanear las
finanzas públicas, para reactivar la economía misma del país, para dar
paso a la modernidad y brindarle a la población las bondades de la
laicidad, era un problema de duplicidad de competencia, de usurpación de
funciones. En una palabra, o se daba este cambio o el Estado se hundiría
en medio de tanta contradicción. El paso del México colonial al México
moderno lo dio el movimiento de Reforma y justo es reconocer el mérito
de quienes empeñaron en ello no sólo su palabra e ideas, sino su vida
misma.

No se puede entender la historia de este país sin hombres de la talla


de Valentín Gómez Farías, José María Luis Mora, Juan N. Álvarez,
Ignacio Comonfort, Benito Juárez, Guillermo Prieto, Ponciano Arriaga,
Miguel y Sebastián Lerdo de Tejada, Ignacio L. Vallarta, Francisco Zarco,
Ignacio Cumplido, Vicente Riva Palacio Guerrero, Manuel Paynó, Jesús
González Ortega, Santos Degollado, Melchor Ocampo, Leandro Valle,
Ignacio Ramírez, Ignacio Manuel Altamirano, José María Iglesias e
incluso el mismo Porfirio Díaz Mori, héroe del 2 de abril, entre los más
destacados de quienes hicieron posible el movimiento de Reforma que
llevó a México como nación independiente a ir escalando los peldaños no
sólo de la modernidad como ya lo hemos repetido, sino a afianzarse como
un Estado dentro del concierto de los países del mundo.

Pasada la euforia del 27 de septiembre de 1821, afirma el brillante y


talentoso Justo Sierra en su libro Evolución Política del Pueblo Mexicano,
cuando la nación alcanzó su independencia del imperio español, la idea de
que era imprescindible e impostergable realizar una reforma radical a la
estructura socioeconómica heredada de la Colonia no se hizo esperar,
pues las contradicciones propias del sistema empezaron a dejarse sentir
en la inestabilidad política que caracterizó a los gobiernos que se
sucedieron en el poder de 1829 a 1854 y el estallido de la revolución de
Ayutla marcó el inicio de lo que se venía gestando desde 1833, en que
Valentín Gómez Farías como presidente interino intentó, con la asesoría y
fundamentación ideológica del Dr. José María Luis Mora, llevar a cabo la
primera reforma, pero no tuvo éxito debido a que Santa Anna regresó al
poder. Una vez consumada la revolución de Ayutla y sucediéndose en la
presidencia de la República Juan N. Álvarez e Ignacio Comonfort, se
expiden tres leyes a las que bien podríamos ubicar como dentro de una
segunda etapa de la Reforma: la Ley Juárez (Ley de Administración de
Justicia y Orgánica de los Tribunales de la Federación); la Ley Lerdo (Ley
de Desamortización de Bienes de la Iglesia y de Corporaciones) y la Ley
Iglesias (El Decreto o Ley sobre Aranceles Parroquiales y el Cobro de
Derechos y Obvenciones), expedidas y publicadas siendo Benito Juárez
ministro de Justicia, Negocios Eclesiásticos e Instrucción Pública en el
gobierno de Juan N. Álvarez; Miguel lerdo de Tejada, ministro de
Hacienda en el gobierno de Ignacio Comonfort, y José María Iglesias,
ministro de Justicia, Negocios Eclesiásticos e Instrucción Pública también
en el gobierno de Comonfort, mismas que, al igual que la Constitución
Federal de los Estados Unidos Mexicanos del 5 de febrero de 1857,
trataron de aplicarse con serias restricciones y abortaron como proyectos
viables al estallar el 17 de diciembre de 1857 el Plan de Tacubaya y
declararse abiertas las hostilidades de la guerra de Reforma.

La Ley de Administración de Justicia y Orgánica de los Tribunales de


la Federación, expedida el 23 de noviembre de 1855, conocida como la Ley
Juárez, tenía por objetivo suprimir los fueros militares y eclesiásticos en
los negocios civiles, por lo tanto los tribunales de las dos corporaciones,
Iglesia y Ejército, debían concretarse a intervenir en los asuntos de su
competencia y no en los asuntos civiles.

La Ley de Desamortización de Bienes de la Iglesia y de


Corporaciones, expedida el 25 de junio de 1856 y conocida como la Ley
Lerdo, obligaba a las corporaciones civiles y eclesiásticas a vender las
casas y terrenos que no estuvieran ocupando a quienes los arrendaban,
para que esos bienes produjeran mayores riquezas, en beneficio de más
personas.

El Decreto o Ley sobre Aranceles Parroquiales y el Cobro de


Derechos y Obvenciones, que se expidió el 11 de abril de 1857 y se conoce
como la Ley Iglesias, prohibió el cobro de derechos y obvenciones
parroquiales que hasta entonces exigían los sacerdotes a los pobres,
considerándose pobres aquellas personas que no obtuvieron a través de
su trabajo personal más de la cantidad diaria indispensable para la
subsistencia.

CONSTITUCIÓN LIBERAL DE 1857.

Esta fue promulgada el 5 de febrero de 1857 (en México). También la


constitución de 1917 fue promulgada un 5 de febrero (en Querétaro). entre
los diputados notables del congreso constituyente de 1856 se encontraban
Ignacio Ramírez, político y poeta conocido como "el nigromante", José
María Mata, Ponciano Arriaga, santos degollado, Melchor Ocampo,
miguel y Sebastián Lerdo de Tejada, Benito Juárez, y otros más.

La mayoría de ellos de ellos eran fanáticos masones. como no había


conservadores entre ellos, esta constitución salió puramente liberal, lo
que provocó en los conservadores un descontento y rechazó absoluto,
declarándose enemigos de ella y repudiándola. algunos de sus puntos
eran:

1. no se reconoció la libertad de cultos, únicamente la religión cristiano-


católica. Esto era un ardid político para que la juraran todos.

2. decretaba ya, parcialmente, la diferencia o separación entre la iglesia y


el estado.

3. establecía un registro civil. Con esto, el registro parroquial dejaba de


ser el oficial.

4. no se nacionalizaban los bienes del clero; pero la iglesia no podía


administrar o poseer bienes raíces.

5. el respeto a las garantías individuales, llamados derechos humanos,


declarados por primera vez durante la revolución francesa.

6. establecía un sistema unicameral en el poder legislativo; con ello


desaparecía la cámara de senadores y quedaba solo la de diputados.

Esto no fue del agrado de Comonfort porque se dotaba de gran


fuerza al poder legislativo y con ello el ejecutivo perdía ventaja en el
dominio del país.
7. se ratificaba la ley Juárez, es decir se prohibía a los tribunales
eclesiásticos y militares conocer en materia que no fuera de su absoluta
competencia.

8. proclamaba la libertad de pensamiento y expresión del hombre.

9. proclamaba la libertad de enseñanza y de prensa. Esa libertad de


prensa atacaba a la iglesia; pero también era un arma de doble filo,
porque se podía revertir contra el gobierno mismo y presentarlo o
exponerlo públicamente.

10. sé reimponía la exclaustración.

Con todo esto y con la amenaza de la iglesia de excomulgar a quien


jurara la constitución, casi nadie la juró, salvo los empleados y
funcionarios públicos, a quienes se les obligo a hacerlo.

La constitución de 1857 formó parte de la legislación conocida como


las Leyes de Reforma, promulgadas por un grupo de liberales del que
destacan Benito Juárez, Miguel Lerdo de Tejada y Melchor Ocampo.

ASOCIACIONES MUTUALISTAS.

Las asociaciones mutuales se definen como personas jurídicas de


derecho privado, sin ánimo de lucro, constituidas libre y
democráticamente por personas naturales, inspiradas en la solidaridad,
con el objeto de brindarse ayuda recíproca frente a riesgos eventuales y
satisfacer sus necesidades de seguridad social.

El mutualismo hace parte de la economía solidaria que corresponde


al grupo de empresas que se organizan para ayudar mediante la
prestación de servicios sin ánimo de lucro. Cada modalidad de empresa
solidaria tiene su misión propia y sus propósitos específicos que le
determinan su modo de funcionamiento, y los cuales constituyen sus
principios.

Los principios que guían las mutuales se derivan de su devenir histórico y


del papel que buscan cumplir hacia el futuro.

PRINCIPIOS HUMANÍSTICOS

PRINCIPIOS ECONÓMICOS
PRINCIPIOS ADMINISTRATIVOS

1. Ayudar en las dificultades y educar para la solidaridad. Las


mutuales buscan soluciones a los riesgos de la vida, a través de la ayuda
mutua y la colaboración con el que sufre.

2. Mejorar la condición humana. Las mutuales nunca promueven la


guerra, la violencia o la agresividad, sino la tolerancia, la solidaridad, la
ayuda, la fraternidad, el amor. Buscan promover la bondad entre los
humanos.

3. Apoyar al trabajador y a su familia. Las mutuales fueron creadas


por trabajadores, por ello deben promover el trabajo y ayudar a quienes
derivan su sustento de éste.

4. Hacer democracia. El mutualismo reconoce los derechos humanos


y promueve la participación de los asociados en la dirección y vigilancia
de la mutual.

5. Crear un fondo común no devolutivo. Los asociados pagan cuotas


de sostenimiento, para contribuir al fondo mutual que se utiliza en pagar
los auxilios y la administración.

6. Servir sin ánimo de lucro. No significa que todos los servicios que
presten las mutuales tengan que ser gratuitos. Se trata de mantener un
patrimonio o bienes comunes que son irrepartibles y se utilizan en
servicios para los asociados.

7. Crear riqueza colectiva. Los excedentes que se van obteniendo no


se reparten sino que se utilizan en servicios comunes que beneficien a
todos los asociados.

8. Eficiencia y honestidad. Es decir, honradez y capacidad en los


directivos de las mutuales para el manejo de los fondos comunes.

9. Promover la autogestión comunitaria. Las mutuales son


manejadas por sus dueños o asociados, quienes son a la vez aportantes y
usuarios. Una mutual es una empresa de la comunidad.

10. Reconocer la dignidad del hombre. Cada persona vale como ser
humano sin distingos de raza, sexo, riqueza, clase social o política. En las
mutuales cada asociado tiene los mismos deberes y derechos.
11 Educar. La manera de cambiar al ser humano es formándolo para
que desarrolle sus capacidades, a través del trabajo honrado y del servicio
a su familia y a la comunidad.

12. Hacer cultura de la previsión de riesgos. La vida trae dificultades, y las


mutuales deben crear conciencia sobre la necesidad de prevenirlas.

GRAN CIRCULO DE OBREROS MEXICANOS.

El gran círculo de obreros libres se crea en 1901 como una ‘sociedad


de resistencia’ para defenderse de los capitalistas, de los extranjeros y del
gobierno. Pero nuevamente sus dirigentes son cortejados por el gobierno
de Díaz para que así, disminuyeran sus manifestaciones, después de
Cananea (1906) y Río Blanco (1907), "se estima que fueron asesinados
200 obreros y que 400 fueron hechos prisioneros". Los obreros que
pertenecieron al gran círculo, y que eran simpatizantes y militantes del
Partido Liberal Mexicano, fueron objeto de una terrible persecución y se
les prohibió entrar a las manifestaciones del Gran Círculo.

Las condiciones de trabajo obligaron a la unificación de los


trabajadores en sociedades mutualistas y hermandades. Una de ellas fue
el Gran Círculo de Obreros (GCO) que se estableció en Contreras y llegó a
convertirse en la organización más importante en el país con sucursales
en diferentes Estados. Sus objetivos estaban encaminados hacia "el
bienestar y la mejora de la clase trabajadora".

El origen del Gran Círculo de Obreros se remonta a la década de


1860, y su primera directiva se nombró en septiembre de 1872, tres años
después contaba con 28 sucursales, en su mayoría de obreros textiles,
seguidos por los sombrereros artesanos:

1a. Fábrica El Águila, Contreras, D.F.

2a. Fábrica San Ildefonso, México.

3a. Fábrica La Fama, Tlalpan, D.F.

19a. Fábrica La Magdalena, Contreras, D.F.

La principal arma de los obreros textiles del Valle de México fueron


los múltiples brotes huelguísticos, para luchar por la desaparición de la
tienda de raya, la reducción de la jornada de trabajo (de 14 a 12 horas de
labor diaria), servicio médico, medicinas en las enfermedades
profesionales y la abolición del trabajo nocturno.

ORGANIZACIONES LIBERALES.

El Programa del Partido Liberal Mexicano fue publicado el 1 de julio


de 1906 por la Junta Organizadora en San Luis, Missouri, a través del
periódico Regeneración que en esa ocasión tuvo un tiraje de 250,000
ejemplares, también se reprodujo en medio millón de pliegos que fueron
distribuidos en México, Europa, Estados Unidos y algunos países de
Sudamérica. Este Programa agrupó a decenas de organizaciones liberales,
principalmente de obreros, en contra la dictadura de Porfirio Díaz.

El programa se elaboró a partir de la convocatoria que la Junta


Organizadora hiciera el 25 de febrero de 1906 y publicada a través de
Regeneración,1 a todos los militantes para hicieran llegar sus propuestas
por correo. El 15 de abril se sometió a consideración el Proyecto del
Programa del Partido Liberal Mexicano2 y finalmente fue publicado el 1
de julio.

CASA DEL OBRERO MUNDIAL, PACTO CON EL EJÉRCITO

CONSTITUCIONALISTA.

En atención a que los obreros de la Casa del Obrero Mundial se


adhieren al Gobierno constitucionalista, encabezado por el ciudadano
Venustiano Carranza, se ha acordado hacer constar las cláusulas que
normarán las relaciones de dicho Gobierno con los obreros y las de éstos
con aquél, para determinar la forma en que los obreros han de prestar su
colaboración a la causa constitucionalista, los ciudadanos Rafael
Quintero, Carlos M. Rincón, Rosendo Salazar, Juan Tudó, Salvador
Gonzalo García, Rodolfo Aguirre, Roberto Valdés y Celestino Gasca,
nombrados en comisión ante el Primer Jefe del Ejército Constitucionalista
Encargado del Poder Ejecutivo, por el comité revolucionario de la ciudad
de México, el cual, a su vez, representa a la Casa del Obrero Mundial, y
por el licenciado Rafael Zubarán, secretario de Gobernación, en
representación del citado primer jefe.

1ª El Gobierno constitucionalista reitera su resolución, expresada


por decreto de 12 de diciembre del año próximo pasado, de mejorar, por
medio de leyes apropiadas, la condición de los trabajadores, expidiendo
durante la lucha todas las leyes que sean necesarias para cumplir aquella
resolución.

2ª Los obreros de la Casa del Obrero Mundial, con el fin de acelerar


el triunfo de la Revolución constitucionalista e intensificar sus ideales en
lo que afecta a las reformas sociales, evitando en lo posible el
derramamiento innecesario de sangre, hacen constar la resolución que
han tomado de colaborar, de una manera efectiva y práctica, por el triunfo
de la Revolución tomando las armas ya para guarnecer las poblaciones
que están en poder del Gobierno constitucionalista, ya para combatir a la
reacción.

3ª Para llevar a cabo las disposiciones contenidas en las dos


cláusulas anteriores, el Gobierno constitucionalista atenderá, con la
solicitud que hasta hoy ha empleado, las justas reclamaciones de los
obreros en los conflictos que puedan suscitarse entre ellos y los patrones,
como consecuencia del contrato de trabajo.

4ª En las poblaciones ocupadas por el Ejército Constitucionalista y a


fin de que éste quede expedito para atender las necesidades de la
campaña, los obreros se organizarán de acuerdo con el comandante
militar de cada plaza, para el resguardo de la misma y la conservación del
orden.

5ª En caso de desocupación de poblaciones, el Gobierno


constitucionalista, por medio del comandante militar respectivo, avisará a
los obreros su resolución, proporcionándoles toda clase de facilidades
para que se reconcentren en los lugares ocupados por las fuerzas
constitucionalistas.

El Gobierno constitucionalista, en los casos de reconcentración,


auxiliará a los obreros, ya sea como remuneración de los trabajos que
ejecuten, ya a título de ayuda solidaria, mientras no se les proporcione
trabajo, con objeto de que puedan atender las principales necesidades de
subsistencia.

6ª Los obreros de la Casa del Obrero Mundial formarán listas en


cada una de las poblaciones en que se encuentren organizados, y desde
luego en la ciudad de México, incluyendo en ellas los nombres de todos
los compañeros que protesten cumplir con lo que dispone la cláusula
segunda. Las listas serán enviadas, inmediatamente que estén concluidas,
a la Primera Jefatura del Ejército Constitucionalista, a fin de que ésta
tenga conocimiento del número de obreros que estén dispuestos a tomar
las armas.

6° Los obreros de la Casa del Obrero Mundial harán una propaganda


activa para ganar la simpatía de todos los obreros de la República y del
obrero mundial hacia la Revolución constitucionalista, demostrando a
todos los trabajadores mexicanos las ventajas de unirse a la Revolución,
ya que ésta hará efectivo, para las clases trabajadoras, el mejoramiento
que persiguen por medio de sus agrupaciones.

7ª Los obreros establecerán centros y comités revolucionarios en


todos los lugares que juzguen conveniente hacerlo. Los comités, además
de la labor de propaganda, velarán por la organización de las
agrupaciones obreras y por su colaboración en favor de la causa
constitucionalista.

8ª Los obreros que tomen las armas en el Ejército Constitucionalista


y las obreras que presten servicios de atención o curación de heridos, u
otros semejantes, llevarán una sola denominación, ya sea que estén
organizados en compañías, batallones, regimientos, brigadas o divisiones.
Todos tendrán la denominación de "rojos".

CONSTITUCIÓN Y REFORMAS. SALUD Y REVOLUCIÓN SOCIAL. H.


Veracruz, 17 de febrero de 1915.

Firmado: Rafael Zubarán Capmany. Rafael Quintero. Carlos M.


Rincón, Rosendo Salazar. Juan Tudó. Salvador Gonzalo García. Rodolfo
Aguirre. Roberto Valdés. Celestino Gasea. Rúbricas".

HUELGA DE 1916.

La ideología de los sindicatos osciló entre el socialismo y el


marxismo más furibundo. Irónicamente, Carranza reprimió varios
movimientos de huelga. Hubo después algunos altibajos motivados
primordialmente por los vaivenes políticos. Esos mismos tumbos
impidieron un desarrollo acelerado de la industria. México siguió siendo
un país agrícola y minero.

A fines de julio de 1916 los organismos agrupados en la Federación


de Sindicatos Obreros del Distrito Federal exigieron a los patrones que los
salarios les fueran pagados en oro y no en papel infalsificable, y
convinieron, en secreto, declarar huelga general, que iba también dirigida
contra el gobierno, al que consideraban aliado de la empresa.

El movimiento estalló a las 3 de la mañana del día 31, cuando los


electricistas suspendieron los servicios de luz y fuerza a la ciudad.

El presidente Venustiano Carranza mandó llamar a palacio a los 11


miembros del comité de huelga, los reprendió severamente y los envió
detenidos a la penitenciaria.

También se ordenó la ocupación militar del domicilio del Sindicato


Mexicano de Electricistas, la casa del Obrero Mundial, la Unión de
empleados de Restoranes, y las oficinas de Acción Mundial.

El 1° de Agosto decretó el presidente Carranza la ampliación de la


Ley del 25 de Enero de 1862, castigando con la pena de muerte a los que
incitaran a la suspensión del trabajo en las fábricas o empresas destinadas
a prestar servicios públicos, a los que con ese motivo destruyeran o
deterioraran efectos de propiedad de esas empresas, provocaran
alborotos, hicieran fuerza a las personas o impidieran a otras que
ejecutasen sus labores habituales.

El 2 de Agosto se levantó la huelga; el 13 se reunió el Consejo de


Guerra para juzgar a los dirigentes, declarándose la inculpabilidad de
todos ellos por el delito de rebelión y turnándose el asunto a las
autoridades del fuero común. Después un segundo consejo volvió a
exonerar a los acusados, menos a Ernesto Velasco, a quien se condenó a la
pena de muerte. Esto suscitó protestas obreras en todo el país.

El 28 de Septiembre, Carranza decretó que el pago de los jornales se


hiciera en oro nacional.

El 5 de febrero de 1917 se promulgó la nueva constitución, y pese al


adelanto notable que significó su promulgación, la cual incluyó él articulo
123 y el establecimiento de garantías para los trabajadores entre las que
podemos mencionar: Jornada máxima de trabajo de ocho horas, Edad
mínima para trabajar de 16 años con jornada especial y establecimiento
de descansos, Pago de salarios además de establecer obligaciones
patronales, vacaciones, formación de sindicatos y el derecho a huelga;
pero no fue sino hasta 1931 cuando se proclamó la Ley Federal del
Trabajo, reglamentaria del artículo citado y en su numeral 259 estableció
que la huelga es la suspensión legal y temporal del trabajo, como
resultado de una coalición de trabajadores.

El 1° de Mayo siguiente, cuando Carranza rendía su protesta como


presidente constitucional, 20 mil trabajadores pedían la vida y la libertad
de Velasco, y el 18 de Febrero de 1918 se le concedió finalmente el indulto.

Al término del gobierno del presidente Carranza, en 1920, se


registraron 173 huelgas en toda el país; en 19221, coincidiendo con el
principio del general Obregón, 310, que disminuyeron a 136 en 1924,
primer año de la administración del presidente Calles; 51 en 1925, 23 en
1926, 16 en 1927 y 7 en 1928. Mientras estuvieron en el poder,
sucesivamente, el licenciado Portes Gil, el ingeniero Ortiz Rubio y el
General Rodríguez, ocurrieron 14 huelgas en 1929, 15 en 1930, 11 en 1931,
56 en 1932 y 13 en 1933.

CONGRESO CONSTITUYENTE DE 1917.

En el curso del 1916, Venustiano Carranza impulsó la idea de


convocar a un Congreso Constituyente que debía introducir algunas
modificaciones en la Carta Magna de 1857. Con esto se trataba de dar por
terminada la lucha armada y regresar al orden legal.

La convocatoria se hizo en septiembre y las sesiones se llevaron a


cabo de diciembre de 1916 a fines de enero de 1917. Hubo una gran
diversidad en las opiniones de los diputados, lo cual produjo la formación
de dos grupos extremos: izquierdas exaltadas y derechas moderadas que
se alarmaban ante algunas medidas.

El grupo progresista se relacionaba con Álvaro Obregón, en tanto


que los moderados con Venustiano Carranza. Entre los primeros había
muchos que pelearon en los campos de batalla y querían destruir
rápidamente el pasado para entrar en el porvenir que habían soñado para
México, entre ellos Francisco J. Múgica, Esteban Baca Calderón,
Heriberto Jara, Cándido Aguilar, Juan de Dios Bojórquez, Rafael
Martínez de Escobar, Luis Espinosa y Froylán Manjarrez. El ala moderada
tuvo como núcleo fundamental a los ex diputados renovadores. La gran
masa del Congreso llegó libre de partidismos y fue la que formó la
mayoría equilibradora de los extremos.
El grupo obregonista estaba respaldado por el recién creado Partido
Liberal Constitucionalista. La tendencia radical logró una mayoría, que se
demostró en la composición de las comisiones. Del proyecto presentado
por Carranza fueron aceptados los cambios en cuanto a la organización
política del país, que le reafirman su carácter presidencialista. En una
serie de artículos fundamentales impuso su criterio el ala jacobina. De
hecho, en la Constitución quedaron incorporadas las propuestas y
demandas de las diversas corrientes revolucionarias.

La Carta Magna está conformada por los siguientes títulos:

I. De las garantías individuales.

II. De la soberanía nacional y de la forma de gobierno.

III. De la división de poderes.

IV. De las responsabilidades de los funcionarios públicos.

V. De los Estados de la Federación.

VI. Del trabajo y la previsión social.

VII. Prevenciones generales.

VIII. De las reformas a la Constitución.

IX. De la inviolabilidad de la Constitución.

Como la de 1857, la Constitución de 1917 establecía el sistema


federal, la separación de poderes, la no reelección, un Poder Legislativo en
dos Cámaras, y una Comisión Legislativa Permanente. A diferencia de su
antecesora, dio gran fuerza al Ejecutivo.

Siguiendo lo dispuesto en los transitorios de la Constitución,


Carranza convocó a elecciones para Presidente y para diputados y
senadores al XXVII Congreso de la Unión. El 1 de mayo de 1917 Carranza
rindió protesta como Presidente constitucional.

TEMA IV

EL DERECHO COLECTIVO DEL TRABAJO MÉXICANO


EL DERECHO DE COALICIÓN Y DE HUELGA

la supresión de los delitos de coalición, asociación y huelga, hizo (le


esta última una situación de hecho, no sancionable penalmente, pero sin
ninguna protección legal: en la Era de la tolerancia era demasiado grande
el prestigio del derecho civil y estaba tan firmemente asentado el régimen
individualista y liberal, que a nadie ocurrió que los huelguistas pudieran
tener algún derecho o defensa en los casos de suspensión de sus labores.
de ahí que la doctrina y los tribunales aplicaran estrictamente los
principios del Código de Napoleón: la huelga producía el incumplimiento
de las obligaciones contraídas legítima y libremente, lo que era causa
suficiente para la rescisión (le las relaciones de trabajo, 16 cual, a su vez,
daba nacimiento a la consecuente responsabilidad civil. Por otra parte, si.
Los trabajadores no huelguistas, aunque fuesen una pequeña minoría, se
presentaban a continuar sus labores, nadie podía impedirlo, más aún, la
fuerza, Pública estaba lista para entrar en acción y protegerlos.
Finalmente, el empresario podía contratar nuevos trabajadores y solicitar
la ayuda dc la policía para proteger su derecho y el de su personal. No
obs¬tante, las huelgas devinieron un platillo diario: era magnífico
contem¬plar la solidaridad de la clase trabajadora, una fuerza social y
moral que paralizaba a los trabajadores no huelguistas e impedía a los
obreros libres actuar como esquiroles.

La elevación de la huelga por la frac. XVII del Artículo 123 a un


derecho de la clase trabajadora, garantizado y protegido en la Declaración
de derechos sociales de 1917, no fue el resultado de un debate porque la
clase trabajadora no discutió con los empresarios, ni siquiera con el
estado, si la huelga debía o no ser elevada a la categoría de un acto
jurídico, simplemente impulso la elevación como una verdad no sujeta a
discusión.

En el mes de febrero de 1917 se consolido la naturaleza jurídico-


constitucional de la trilogía del derecho colectivo de trabajo: sindicato,
convención colectiva y huelga. Nos parece que podríamos cambiar aquí la
colocación de los ángulos: la sindicación y las convenciones colectivas son
derechos sustantivos, en tanto la huelga es un derecho adjetivo e
instrumental, en el sentido de que es un procedimiento para imponer una
solución sustantiva. Por lo tanto el nuevo triangulo seria: la sindicación y
las convenciones colectivas los ángulos sustantivos de base y la huelga el
ángulo tercero., cuya misión consistiría en la contemplación de las
vibraciones sociales y económicas para conquistar, en lucha con el capital,
la mejor realización de los principios sindicales y la fijación de
condiciones humanas de prestación del trabajo.

A partir de la declaración de los derechos de huelga ha sufrido una


transformación radical: la mayoría de los trabajadores ha sufrido una
transformación radical: la mayoría de los trabajadores puede suspender
las actividades de la empresa o establecimiento, en la inteligencia e que el
patrono y la minoría disidente están obligados a respetar la decisión; así
lo ordena el articulo cuarto de la ley, en su numeral segundo:

Se ofenden los derechos sociales en los casos:

• Cuando declarada una huelga en los términos que establece esta


ley, se tratare de sustituir o se substituya a los huelguistas en el trabajo
que desempeñen, sin haberse resuelto el conflicto motivo de la huelga.

• Cuando declarada una huelga en iguales términos de licitud por la


mayoría de los trabajadores, la minoría pretenda reanudar sus labores o
siga trabajando.

La huelga fue un derecho debidamente protegido como situación


jurídica y entro a formar parte del derecho colectivo del trabajo con la
promulgación de la constitución mexicana el 5 de febrero de 1917, al
establecer en la fracción xvii del articulo 123 , que las leyes reconocerán
como un derecho de los obreros y de los patrones, las huelgas y los paros.
Desde entonces la huelga se transformo en un derecho colectivo y consiste
en la facultad de suspender totalmente los trabajos de una negociación,
cuando se satisfagan determinados requisitos legales, antes de esa fecha
se le negó legitimidad.

DERECHO DE REUNIÓN Y DERECHO DE ASOCIACIÓN

La libertad de asociación o derecho de asociación es un derecho


humano que consiste en la facultad de unirse y formar grupos,
asociaciones u organizaciones con objetivos lícitos, así como retirarse de
las mismas. La libertad o el derecho de asociación suponen la libre
disponibilidad de los individuos para constituir formalmente
agrupaciones permanentes o personas jurídicas encaminadas a la
consecución de fines específicos. Es una de las prolongaciones de las
libertades de pensamiento, expresión y reunión y una antesala de los
derechos de participación, en la medida en que la participación política se
canaliza preferentemente a través de formas específicas de asociaciones,
entre las que los partidos políticos que ocupan un lugar señalado.

Es considerado al igual que el derecho de reunión un derecho


humano de primera generación. Siempre y cuando se use este derecho de
manera pacífica y para cualquier objeto lícito, según la ley estará
permitido a cualquier persona, nacional o extranjero, pero en cuanto a los
asuntos políticos internos del país solo los ciudadanos (nacionales y
nacionalizados) pueden tomar cartas en asuntos políticos por esta vía,
quedando pues a extranjeros limitado este derecho. Claro está, quedan
totalmente prohibidas las reuniones armadas y aquellas que de una u otra
manera quieran presionar con violencia a alguna autoridad judicial, para
que resuelva a su favor.

Mientras que en la reunión se interpreta el agrupamiento de


personas como momentáneo, circunstancial, en la asociación hay cierta
continuidad en el tiempo y permanencia, esto debido a que sus peticiones
y fines comunes requieren, para su logro, plazos más prolongados y su
cumplimiento no puede ser instantáneo. La reunión faculta a un grupo a
concurrir temporalmente en un mismo lugar, la asociación faculta a un
grupo por plazos más largos ilimitados o permanentes.

Las Constituciones del siglo XIX no reconocen la libertad de


asociación, pero a partir de 1848 ésta será exigida, llegando a su
consagración e incluso a que se atribuyan a determinados grupos
(partidos, sindicatos) tareas en la vida del Estado constitucionalmente
relevantes. Los distintos sistemas de regulación (en ocasiones específicos
para las diversas finalidades: asociación política, sindical, etc.) varían
desde la exigencia de concesión o reconocimiento expreso por el poder
público, o de mera comunicación de la constitución a la autoridad, hasta
la ausencia de formalidad alguna.

DERECHO DE COALICIÓN Y ASOCIACIÓN PROFESIONAL

La primera ley que reconoce a las asociaciones profesionales en


nuestro país, es la ley de 6 de octubre de 1915 promulgada por Agustín
Millán, en ese entonces gobernador provisional de Veracruz.

Para ubicar correctamente el derecho de sindicalización, se debe


tomar en consideración el contenido de los artículos 9 y la fracción XVI
del 123 constitucional, de cuya lectura se desprenden las diferencias que
dan contenido al cuadro siguiente, concluyendo que su finalidad es
diferente y por lo mismo, el derecho de coalición, asociación profesional o
de sindicalización tiene su fundamento en la fracción XVI del artículo 123
constitucional:

ARTICULO 9 CONSTITUCIONAL ART. 123 “A” FRAC. XVI


CONSTITUCIONAL

• PERTENECE A TODOS LOS HOMBRES

• ES UNA GARANTIA INDIVIDUAL

• ES UN DERECHO GENERAL

• ES UN DERECHO FRENTE AL ESTADO

• ES EL DERECHO UNIVERSAL DEL HOMBRE A ASOCIARSE CON


LOS DEMAS • PERTENECE UNICA Y EXCLUSIVAMENTE A LOS
TRABAJADORES Y PATRONES

• ES UN DERECHO DE CLASE

• ES UN DERECHO ESPECIAL

• ES UN DERECHO DE UNA CLASE SOCIAL FRENTE A OTRA CLASE


SOCIAL, AUN CUANDO TAMBIEN ES UN DERECHO FRENTE AL
ESTADO

• ES UN DERECHO DE CLASE CUYA FINALIDAD ES CONSEGUIR


EL MEJORAMIENTO DE LAS CONDICIONES DE VIDA DEL
TRABAJADOR AL OBLIGAR A LOS PATRONES A TRATAR CON LAS
ASOCIACIONES PROFESIONALES (NEGOCIACIÓN COLECTIVA)

TEMA VI

LEGISLACIÓN OBRERA

PROYECTO DE CÓDIGO FEDERAL DEL TRABAJO 1929.

Al proyecto de Código Federal del Trabajo de 1929, conocido como


“Proyecto Portes Gil” corresponde el mérito de haber reglamentado por
primera vez para nuestro derecho el Contrato-Ley.
En la ley de 1931 el contrato ley, era denominado Contrato Colectivo
de carácter obligatorio, aparecía regulado dentro del mismo capítulo
dedicado al contrato colectivo en general.

Actualmente, aunque el articulo 123 Constitucional no menciona


expresamente los contratos, la Ley reglamentaria (LFT) si lo considera,
Durante varios años sostuvo algún sector de la doctrina que no era
obligatorio para los empresarios su celebración, por no estar incluido en
las garantías sociales de dicho artículo, pero se afirmó por la doctrina y
por Jurisprudencias de la corte al respecto que el mismo artículo había
considerado al contrato colectivo, por lo que debía considerársele incluido
en el párrafo introductorio de la disposición constitucional, aparte de que,
al autorizarse la huelga de los trabajadores, se reconocía su derecho para
la reclamar la reglamentación colectiva de trabajo.

Concepto del Contrato-Ley.

Este también es llamado contrato colectivo de carácter obligatorio,


según el artículo 404: Contrato-ley es el convenio celebrado entre uno o
varios sindicatos de trabajadores y varios patrones, o uno o varios
sindicatos de patrones, con objeto de establecer las condiciones según las
cuales debe prestarse el trabajo en una rama determinada de la industria,
y declarado obligatorio en una o varias Entidades Federativas, en una o
varias zonas económicas que abarquen una o más de dichas Entidades, o
en todo el territorio nacional. Lo cuestionable del concepto es que no es
necesariamente un contrato, toda vez; que puede darse el caso de que
existe en una empresa donde nadie lo desee, por ser ajeno a las dos
terceras partes de los trabajadores sindicalizados que hubieren solicitado
la celebración del mismo, además de ser un acuerdo de voluntades
relativo, ya que requiere de la declaración de autoridad administrativa
para su validez. Por otra parte tampoco en Ley ya que su vigencia no es
general, ni tiene las características de los actos emanados del poder
Legislativo.

PROYECTO LEGISLACIÓN FEDERAL DEL TRABAJO 1931.

Aunque la Constitución Federal de 1917 no estableció ninguna


disposición específica en esta materia, pues omitió la reglamentación o
definición de las características de la relación existente entre el Estado y
sus trabajadores, “la Ley Federal del Trabajo de 1931, estatuyó, en su
artículo segundo, que las relaciones entre el Estado y sus trabajadores, se
regirán por las Leyes del Servicio Civil que al efecto se expidieran.”[

Es hasta que el legislador aprueba la Ley Federal del trabajo, en 1931,


que se estipula que las relaciones entre el Estado y sus servidores, se
regirán por las Leyes de Servicio Civil que se expidan.

Años más tarde, el jueves 12 de abril de 1934, se expide un acuerdo


sobre la organización y el funcionamiento del servicio civil, que consigna
algunas normas profectoras para los servidores públicos, siendo un
antecedente del Estatuto Jurídico de los servidores públicos así como del
servicio civil de carrera, si embargo, no e llevó a la práctica.

En México se considera por separado a los trabajadores al servicio


del estado y a los empleados del sector privado. La Constitución de 1917
no establecía originalmente esta diferenciación ni se establecía una
disposición específica para tipificar a los empleados públicos, fue la Ley
Federal del Trabajo de 1931, en su artículo 2º, donde se estableció que las
relaciones entre el estado y sus servidores se regirían por las leyes del
servicio civil que se expidieran.

LEY FEDERAL DEL TRABAJO 1931.

El proyecto De Portes Gil , sirvió de antecedente de la Ley Federal De


Trabajo de 1931, ya que de este proyecto se tomaron en cuenta varios
renglones.

De ahí da paso a la primera Ley Federal de Trabajo se expide el 18 de


agosto de 1931, y es reglamentaria del Art. 123 de la constitución.

Dicha ley fue derogada el 1° de mayo de 1970 y posteriormente; el 1°


de mayo de 1980 fue modificada en lo que se refiere a la parte procesal,
misma que esta vigente hasta nuestros días.

REFORMA AL ART. 249 L.F.T., 1940.

Desde el 17 de octubre de 1940 se reformo el art. 249 de la LFT,


excluyendo de las prohibiciones de los sindicatos la de intervenir en la
politica.

Se concede la facultad de combatir actos del Estado, bien sean


positivos o negativos, de la autoridad registradora. En efecto, si no se
contesta en un termino prudente la petición, se viola el principio de que a
toda petición debe recaer acuerdo de la autoridad a quien se haya
dirigido, la cual tiene obligación de hacerla conocer (art. 8 const.).

EL PRM Y LA CTM.

Otra de la política de cárdenas para unificar a los sectores populares


fue la creación de la CTM. Esta organización obrera llego a ser en el futuro
el bastión del gobierno cardenista. Uno de los objetivos inmediatos de la
CTM fue la lucha por un salario justo, derecho a la huelga, tiempo de
trabajo y la abolición d la prop. Privada.

El gobierno cardenista no estaba en contra de la industrialización, al


contrario el mismo era partidario de ella, pero Cárdenas buscaba una
industrialización conciente. Buscaba crear ejidos de pequeñas
comunidades industriales; ahora la industria estaría al servicio de una
sociedad agraria; su objetivo central era el desarrollo de la economía
agrícola.

En el apogeo del cardenismo se desarrollo el campo de las


comunicaciones, la irrigación de campos y se dio crédito a los agricultores
y se comenzó a utilizar el déficit fiscal. Es decir Cárdenas comenzó a
alentar el desarrollo económico y social del país. A este proceso se le
conoce como el Estado activo, es decir la expansión del estado por medio
de instituciones.

Cuando Calles creo el PNR dejo fuera de a piezas fundamentales de


la sociedad; Cárdenas considero necesario cambiar la organización del
partido oficial. Es así como se crea el PRM cuya base social estaba
integrada por los sectores más importantes del momento: Los obreros,
Campesinos el sector popular y la milicia. Con este cambio el PRM se
convirtió en una de las bases más sólidas del presidencialismo mexicano.

Mención aparte merece la política adoptada por Cárdenas en cuanto


al ala obrera y campesina. En el gobierno cardenista se propuso crear un
programa político el cual tenia por objeto el crear una planta industrial
básicamente de cooperativas de modo que los obreros fueran a la vez los
dueños de los medios de producción.

Otra de las importantes políticas cardenistas fue la creación de un


frente unido de trabajadores; el cual tendría representantes o líderes, los
cuales serian los mediadores entre los obreros y el gobierno, dando paso
así a la CTM.

CONFLICO DE NUEVA ROSITA.

La Huelga de Nueva Rosita fue una huelga laboral en el mineral de


Nueva Rosita, Coahuila, México en contra de la empresa Mexican Zinc Co.
en 1950. El conflicto se prolongó por 6 meses sin solución satisfactoria
para los trabajadores mineros.

En 1950, la Mexican Zinc Co., filial de la American Smelting and


Refining Co. (ASARCO), había recortado las prestaciones de los
trabajadores, además de que las condiciones laborales en la mina eran
deplorables. El 17 de septiembre los mineros agrupados en la Sección 14,
fracción I (pertenecientes a las minas de Nueva Rosita, Palau y Cloete) del
Sindicato Industrial de Trabajadores, Mineros, Metalúrgicos y Similares
de la República Mexicana (SITMMSRM), entregaron un pliego de
violaciones al Contrato colectivo de trabajo y un emplazamiento a huelga
para el 16 de octubre a la Junta de Conciliación y Arbitraje de la Secretaría
del Trabajo, la cual resolvió apoyar a la empresa norteamericana; declaró
improcedentes las demandas e inexistente la huelga. Los patrones de las
minas contrataron 1,500 esquiroles y despidieron a los huelguistas.

Nueva Rosita fue sitiada por el ejército, los soldados patrullaban las
calles y disolvían a culatazos a todo grupo de más de tres personas. La
prensa oficial acusaba a los huelguistas de flojos, alborotadores y
comunistas.

CONFLICTO FERROCARRILERO.

El movimiento ferrocarrilero, primero por mejoras salariales, e


inmediatamente después por democracia sindical, se inició el 2 de mayo
de 1958 con la formación de la Gran Comisión Pro Aumento de Salarios, y
se consolidó con la proclamación del Plan del Sureste el 12 de junio y el
estallido de paros a partir del 26 de ese mes. El 28 de junio su primera
gran manifestación en el Distrito Federal (DF) es reprimida al terminar
por la policía y los bomberos. El ejército ocupó el mismo día todos los
locales sindicales.

Ante la persistencia y ampliación de la lucha, las autoridades


laborales tuvieron que aceptar que hubiera elecciones sindicales, mismas
que gana por abrumadora mayoría Demetrio Vallejo (militante del
POCM), quien toma posesión como secretario general el 27 de agosto de
1958.

El 25 de febrero de 1959 estalla la huelga en los Ferrocarriles


Nacionales por la revisión contractual y se logra un acuerdo de aumento
salarial. El 25 marzo estalla la huelga en el Ferrocarril del Pacífico y en el
Ferrocarril Mexicano demandando un aumento similar, que es declarada
inexistente, y un paro de solidaridad de media hora en los Ferrocarriles
Nacionales. Al día siguiente el sindicato propone al gobierno levantar los
paros a cambio del cese a las violaciones al contrato colectivo, pero el 27
comenzaron los despidos y, cuando aún continuaban las pláticas con el
gobierno, se procedió a la detención de Vallejo y los demás líderes
sindicales.

El ejército ocupó todos los locales sindicales e instalaciones


ferrocarrileras, aprehendió a casi 10 mil trabajadores y luego fueron
despedidos casi 9 mil. El 3 de abril se reprimió en el DF una
manifestación popular en apoyo a los ferrocarrileros y se detuvo a más de
300 personas.

EL MOVIMIENTO MÉDICO DE 1964.

El movimiento médico comenzó en noviembre de 1964, cuando los


residentes e internos del hospital 20 de noviembre del ISSSTE
reclamaron el pago de aguinaldos atrasados y 206 de ellos fueron
despedidos. En respuesta a los despidos se formó la Asociación Mexicana
de Médicos Residentes e Internos (AMMRI) que comenzó a organizar
paros que para el día 26 de ese mes ya abarcaban a 40 hospitales del
ISSSTE, Seguro Social y Ferrocarriles. El 10 de diciembre el presidente
Gustavo Díaz Ordaz, recién entrado en funciones, prometió estudiar sus
peticiones de aumento de sueldos y participación en la elaboración de
planes de estudios, con lo que el 15 se levantó el paro.

El 20 de marzo la AMMAC llamó a separarse de los sindicatos


controlados por la FSTSE y el 25 propuso la creación de un sindicato de
trabajadores de la salud. El 19 de abril estalló otro paro que se mantuvo
hasta el 3 de junio y se celebró otra reunión con Díaz Ordaz, que sólo
resolvió un aumento mínimo de sueldos pero ninguna otra demanda.
Ante ello, los médicos realizaron una manifestación el 20 de abril que fue
atacada por grupos de choque de la FSTSE. El 14 de agosto se inicia un
paro de residentes y el 23 uno de médicos titulados.

El 26 de agosto hay otra gran manifestación, pero esa noche la


policía tomó los hospitales 20 de Noviembre, Rubén Leñero y Colonia,
sustituyendo a los paristas con médicos militares. Al día siguiente las
enfermeras del 20 de Noviembre fueron secuestradas por los grupos de
choque de la FSTSE. Cientos de médicos, los más activos en el
movimiento, fueron despedidos y sus líderes encarcelados.

TEMA VII

LEGISLACIÓN LABORAL Y EL MOVIMIENTO OBRERO

DURANTE EL PERIODO 1970-1980

INSURGENCIA SINDICAL; EL CONFLICTO CINSA – CIFUNSA.

16 de abril de 1974, estalla la huelga de Cinsa-Cifunsa. Las pasiones


de ambos bandos se recrudecen. Los ricos dicen que es cuestión de honor,
los obreros afirman que vencerán a los patrones.

Una vez reconocido por la Junta, el comité ejecutivo acudió a la


empresa, solicitando hablar con el señor Rivera, (actualmente catedrático
de la Escuela Normal Superior) gerente de relaciones industriales de
CIFUNSA. El personal de seguridad dejó entrar al comité ejecutivo, pero
el mismo señor Rivera impidió que entraran los asesores del FAT,
Antonio Villalba Granados y Arturo Alcalde Justiniani. Entró el comité
ejecutivo, pero ya Salvador Alcázar Aguilar se había puesto de acuerdo
con Villalba y Alcalde sobre que "en lo más mínimo" hablarían por sí
mismos, por lo que pedirían recesos para consultar en cada punto a los
asesores. Mientras salían y entraban los nuevos dirigentes, el ambiente se
ponía tenso. El señor Rivera les pidió un pliego petitorio que
inmediatamente presentaron, les ofreció que les llamaría en media hora,
pero nunca les volvieron a llamar. Este incidente de falta de autonomía
del comité ejecutivo frente al FAT probablemente llevó a la empresa a
pensar que los dirigentes obreros estaban totalmente manejados por el
FAT. Pero al no responder al pliego petitorio, la empresa rompió el
diálogo con el comité ejecutivo y con los trabajadores.
Ante el desconocimiento de hecho de su comité ejecutivo por los
patrones, los trabajadores salieron a las calles clamando por la huelga. Se
dirigieron a la casa de la familia López del Bosque, donde realizaron un
acalorado mitin que desbordó las pasiones de ambos bandos. Para los
trabajadores, los patrones estaban desconociendo a su comité ejecutivo;
para los patrones, el conflicto ya no era intersindical, ni tan sólo un grave
problema para sus negocios, los ataques directos a la familia López del
Bosque lo habían convertido en un asunto personal en el que intervenían
las pasiones. Más que una posición calculada, desde ese momento ya se
perfilaba la posición que adoptaría el GIS: "no podíamos aceptar a un
comité ejecutivo manipulado por el FAT y revisar un contrato colectivo ya
firmado"; "cuando asumimos la posición dura no fue por gusto, sino
porque nos tocó bailar con la más fea".

Mientras los trabajadores gritaban en el mitin y en las calles


¡Huelga!, los asesores del FAT redactaban el emplazamiento. Al día
siguiente los trabajadores acudieron a la asamblea, en donde se sometió a
discusión y votación la propuesta de la huelga que fue aprobada
abrumadora mente. Se terminó de preparar la documentación para que el
sindicato emplazara a CINSA y

CIFUNSA a huelga por desequilibrio en los factores de la

producción, solicitando un incremento de 35% frente al 12.5% contenido


en el contrato colectivo

firmado por la directiva depuesta.

EL MOVIMIENTO DE SPICER LA TENDENCIA DEMOCRÁTICA DEL

SUTERM, SINDICALISMO UNIVERSITARIO Y LA LEGISLACIÓN


ESPECIAL.

El movimiento de Spicer es tan reciente y ha sido tan comentado y


discutido que resulta difícil proporcionar, ya no un balance preciso de la
huelga, sino por lo menos una visión imparcial de ella. Sin embargo, el
relato mismo del conflicto—aprovechando el testimonio de sus
protagonistas, los propios trabajadores— resulta significativo. El
movimiento en Spicer, que se distinguió entre otras cosas por la atención
que recibió de parte de la izquierda y por la participación de algunos
sectores de la misma, confirmó que actualmente, en las luchas sindicales,
la izquierda, apenas recién salida del cascarón pequeñoburgués, prefiere
imponerle al proletariado desde fuera una doctrina sin preocuparse por
ofrecer alternativas políticas concretas que

correspondan seriamente al nivel de la lucha, al grado de


organización y de conciencia, a las condiciones materiales que privan en
una u otra rama industrial. El resultado que tenemos es una izquierda
impaciente por conseguir que los trabajadores aprendan unas cuantas
consignas pero incapaces de impulsar una lucha a partir de las situaciones
concretas.

Esta es una afirmación que se matiza en el cotidiano desarrollo de los


movimientos populares. Por eso y por las implicaciones que tienen,
resulta imperativo conocer las lecciones que esas situaciones concretas
ofrecen al movimiento obrero y a los sectores que pretenden incidir en él.

El de Spicer no fue un movimiento aislado. Podemos ubicarlo dentro


de la heterogénea corriente del llamado “sindicalismo independiente”
que, compuesto de luchas muy diversas, se caracteriza por su discrepancia
respecto de la burocracia sindical oficial y por la búsqueda de alternativas
de organización democráticas. Nunca ha faltado disidencia sindical, aun
en los momentos en que las centrales obreras oficialistas, pilar básico del
Estado mexicano, han sido más fuertes. Pero los últimos años,
particularmente desde 1972, han estado señalados por la proliferación de
sindicatos independientes e intentos de sindicalización democrática. Ante
esas experiencias, el gobierno ha asumido diferentes posiciones, desde la
tolerancia combinada con los intentos de asimilar tales movimientos
hasta la oposición abierta, sustentada en la represión. El movimiento de
Spicer transitó de uno a otro de esos extremos.

DESDE LA HUELGA del STEUNAM de 1972-73, el sindicalismo


universitario irrumpió como un fenómeno de masas. Surgieron sindicatos
de administrativos, de académicos y de institución en prácticamente todo
el país, tanto en las universidades públicas como en algunas
universidades privadas. Gracias a ese proceso, los sindicatos
universitarios comenzaron a ser estudiados en los diversos centros de
investigación, en los medios periodísticos y en los propios organismos de
los trabajadores de las universidades e instituciones de educación
superior e investigación. Producto de dicha situación, son los organismos
sindicales abordados por los cuatro textos transcritos en esta entrega
EL CONGRESO DEL TRABAJO.

La lucha interna por la supremacía sindical dentro de la


Confederación de Trabajadores de México (CTM) durante el período
1941-1952 dio como resultado que los grandes sindicatos nacionales de
industria (petroleros, ferrocarrileros y mineros) abandonaran dicha
central para crear otras alternativas sindicales, la Central Única de
Trabajadores (CUT) en 1947, y la Unión General de Obreros y Campesinos
(UGOCM) en 1949. Para restaurar el resquebrajado orden sindical, el
Estado canceló mediante la fuerza todo vestigio de vida sindical
democrática.

Con la coerción militar y policiaca aplastó la autonomía obrera e


impuso dirigencias sindicales sometidas a su política y su voluntad. De
esta manera el charrismo se impuso a los trabajadores petroleros,
ferrocarrileros, mineros, telefonistas y electricistas.

Otras fuerzas sindicales que aceptaron la colaboración con el Estado,


pero no con la dirigencia de la CTM, se agruparon en la Confederación
Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC), creada en 1952; y la
Confederación Revolucionaria de Trabajadores (CRT), organizada en
1954. De esa manera se configuraron dos bloques sindicales integrados al
Estado y al partido oficial (PRI): de un lado, la

CTM, la Confederación Regional Obrera Mexicana (CROM) y la


Confederación General de Trabajadores (CGT); y del otro, la CROC y la
CRT. Para armonizar el funcionamiento de uno y otro, el poder público
las encuadró, con excepción de la CROC, en el Bloque de Unidad Obrera
(BUO).

En el marco de la insurgencia obrera de 1958- 1959 se rearticularon las


fuerzas sindicales. En 1958, la CROC, la CRT, el SME y la Federación

Nacional de Trabajadores de la Industria Eléctrica (FNTICE)


establecieron una alianza bajo la denominación de Coalición Obrera
Revolucionaria (COR), misma que en 1960 se transformó en Central
Nacional de Trabajadores (CNT). Desde entonces y hasta 1965, el BUO y
la CNT habrían de mantener una cerrada competencia por la
preponderancia sindical.
Gustavo Díaz Ordaz y el Congreso del Trabajo El 15 de febrero de
1966 se inauguró la Asamblea Nacional Revolucionaria del Proletariado
Mexicano en el Palacio de Bellas Artes, bajo el patrocinio del gobierno de
Gustavo Díaz Ordaz. El 18 de febrero de 1966 nació una vez aprobada la
constitución, exposición de motivos y declaración de principios, la figura
más emblemática del corporativismo mexicano, el

Congreso del Trabajo (CT).

El CT, institución fundamental del dominio y la hegemonía del


Estado sobre la clase obrera y sus organizaciones sindicales, tuvo
asignadas desde su nacimiento, un conjunto de funciones históricas
propias de su interlocución con el Estado y su condición de sector obrero
del PRI: 1) espacio de discusión, negociación y coordinación de las
políticas laborales estatales; 2) instrumento orgánico para moderar,
contener o aplastar todo disenso respecto a tales políticas; 3) aparato de
organización, movilización y control político-electoral de las y los
trabajadores; 4) estructura organizadora y educadora del consenso hacia
las políticas laborales gubernamentales y las prácticas de dominio del
partido de Estado; 5) maquinaria de dominación y coerción sobre el
conjunto de las fuerzas sindicales del país; 6) fuerza de masas del Estado
para mantener, en momentos de crisis política, un determinado equilibrio
de sus relaciones con la clase dirigente o con las clases subalternas; 7)
instancia general de negociación y acuerdo entre las burocracias
sindicales respecto a las zonas de influencia sindical y los repartos de
“cuotas” de poder político; y, 8) mecanismo institucional de comando de
la CTM sobre el conjunto de las dirigencias sindicales corporativas.

CONCLUSION

Podemos concluir este arduo estudio asentando que se ha podido


analizar las distintas etapas de las relaciones de producción a partir de la
Revolución Industrial hasta llegar a nuestra etapa contemporánea.

A su vez y de igual manera conocimos y analizamos paso a paso los


elementos esenciales del Derecho colectivo de trabajo, así como las
instituciones a que le dieron origen, abarcando aspectos históricos como
la Revolución Industrial, los diferentes movimientos sindicales
internacionales , que han conformado la legislación en el Sistema Jurídico
Mexicano.

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