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Ciclo 2017-II

Escuela Profesional de Psicologia Humana

2003-20104 BIOLOGIA GENERAL


Trabajo
académico Docente:
Manuel Cornejo del Carpio
Nota:

Ciclo: 1 Sección:
Módulo I
Datos del alumno: Forma de publicación:
Apellidos y nombres:
Publicar su archivo(s) en la opción TRABAJO ACADÉMICO que figura en
el menú contextual de su curso

Código de matrícula:
Panel de control:

Uded de matrícula:

Fecha de publicación en
campus virtual DUED
LEARN:

Hasta el Domingo 05
de Noviembre 2017
(Hora: 23.59 p.m)
Recomendaciones:
1. Recuerde verificar la
correcta publicación de
su Trabajo Académico
en el Campus Virtual
antes de confirmar al
sistema el envío
definitivo al Docente.

Revisar la
previsualización de su
trabajo para asegurar
archivo correcto.

2. Las fechas de publicación de trabajos académicos a través del campus virtual DUED LEARN están definidas
en la plataforma educativa, de acuerdo al cronograma académico 2017-I por lo que no se aceptarán
trabajos extemporáneos.
3. Las actividades de aprendizaje que se encuentran en los textos que recibe al matricularse, servirán para su
autoaprendizaje mas no para la calificación, por lo que no deberán ser consideradas como trabajos
académicos obligatorios.

Guía del Trabajo Académico:


4. Recuerde: NO DEBE COPIAR DEL INTERNET, el Internet es únicamente una fuente de
consulta. Los trabajos copias de internet serán verificados con el SISTEMA
ANTIPLAGIO UAP y serán calificados con “00” (cero).

5. Estimado alumno:
El presente trabajo académico tiene por finalidad medir los logros alcanzados en el desarrollo del curso.
Para el examen parcial Ud. debe haber logrado desarrollar hasta la pregunta 2 y para el examen final debe
haber desarrollado el trabajo completo.

Criterios de evaluación del trabajo académico:


Este trabajo académico será calificado considerando criterios de evaluación según naturaleza del curso:

Presentación adecuada Considera la evaluación de la redacción, ortografía, y presentación del


1 del trabajo trabajo en este formato.
Considera la revisión de diferentes fuentes bibliográficas y electrónicas
confiables y pertinentes a los temas tratados, citando según la normativa
Investigación
2 bibliográfica:
APA.
Se sugiere ingresar al siguiente enlace de video de orientación:

Situación problemática o Considera el análisis contextualizado de casos o la solución de


3 caso práctico: situaciones problematizadoras de acuerdo a la naturaleza del curso.

Considera la aplicación de juicios valorativos ante situaciones y


4 Otros contenidos escenarios diversos, valorando el componente actitudinal y ético.

TRABAJO ACADÉMICO

Estimado(a) alumno(a):

Reciba usted, la más cordial bienvenida al presente ciclo académico de la Escuela


profesional de Psicología Humana en la Universidad Alas Peruanas.
En la guía de trabajo académico que presentamos a continuación se le plantea
actividades de aprendizaje que deberá desarrollar en los plazos establecidos y
considerando la normativa e indicaciones del Docente Tutor.
PREGUNTAS:

1. Visualice los videos y proponga un comentario personal sobre el significado de


Biología e introducción a la Biología Celular. 4 pts.
https://www.youtube.com/watch?v=VcbgBgppNGg Parte 1
https://www.youtube.com/watch?v=yt0JkgZqLfo Parte 2

2. Elabore un mapa conceptual u otro organizador visual sobre la organización de la


célula. 4 p
3. ts.
Consultar 3 fuentes virtuales o físicas. Incluye la Guía didáctica.
4. Elabore un comentario crítico sobre el sistema de endomembranas y su importancia
en la interacción celular. 4 pts.
Consultar 3 fuentes virtuales o físicas. Incluye la Guía didáctica.
5. Análisis crítico: 6 pts.
Elabore un ensayo: Tecnología del ADN recombinante y sus aplicaciones. (5
páginas como máximo)
Considerar el formato siguiente:

a. Introducción.
Resumen
Secuencia de ideas a desarrollar
b. Desarrollo.
Antecedentes históricos del tema
Definición de conceptos
Estado actual o vigencia del tema
c. Conclusiones.
Conclusiones propias del tema
Aportes personales teóricos y/aplicativos al tema
Consultar 3 fuentes virtuales o físicas. Incluye la Guía didáctica.
https://www.youtube.com/watch?v=ZmkjgKXFOik
https://botanik2.files.wordpress.com/2008/02/capitulo-28.pdf
https://culturacolectiva.com/tecnologia/historia-del-adn/
Ortografía. 2 pts.
Las consultas e inquietudes se harán en las tutorías virtuales con el docente en
los horarios programados para el curso.
¡Muchos éxitos en el desarrollo de su trabajo académico!
INTRODUCCIÒN

La Biología es la ciencia que estudia los seres vivos. Su nombre procede del griego
Bios, que significa vida, y logos, que significa estudio o tratado. La posición que ocupa
esta ciencia entre las llamadas "ciencias de la naturaleza" (las que se ocupan del
estudio de la materia) es en cierto modo paradójica, ya que se trata de una posición al
mismo tiempo marginal y central. Marginal porque la materia viva, de la cual se ocupa,
es sólo una porción infinitamente pequeña de toda la materia que existe en el
universo. Pero también central porque dentro de esa pequeña porción nos
encontramos nosotros, los seres humanos. Desde los albores de la civilización el
hombre se plantea, y aspira a encontrar respuesta, a preguntas de tipo filosófico
acerca de nuestro papel en el Universo ()quiénes somos?, )de donde venimos?, )a
dónde vamos?, etc.)
DESARROLLO

1. Visualice los videos y proponga una definición personal sobre el significado de


dicha ciencia y su relación con el ser humano. 4
pts.
https://www.youtube.com/watch?v=fTKoVfEHUFw

LA BIOLOGÍA.
La biología, es aquella ciencia que estudia a los seres vivos. Ya sean
estos animales, plantas o seres humanos. Principalmente, la biología, se preocupa
de los procesos vitales de cada ser. Como su nacimiento, desarrollo, muerte y
procreación. Por lo que estudia el ciclo completo de los mismos. Lo que le permite,
una visión globalizada y más exacta, de cada uno de ellos. Por lo mismo, se
pueden realizar estudios más acabados, como asimismo, paradigmas más
perduraderos en el tiempo. La biología, en la actualidad, tiene como gran aliado, a
la tecnología. Por medio de ella, sus estudios y análisis, son más acabados y
completos. Ya que una gran cantidad de elementos, no pueden ser percibidos o
captados, por medio de las capacidades intrínsecas del ser humano. Por lo que su
campo de observación y experimentación, se amplía enormemente, al utilizar la
tecnología.

La palabra como tal, proviene del griego, tanto de bios (vida) y logos (estudio). Por
lo tanto, la palabra en si, lo dice todo. Estudio de la vida. Justamente lo que se
señalaba anteriormente. Claro está, que la llegada de la modernidad, su sentido
tomó una amplitud mayor, que la dada por los griegos. Que entre los cuales, se
destacó Aristóteles, quien ya en su tiempo, trató de clasificar a los distintos seres
vivos que habitaban en sus tierras. El concepto moderno, abarcó desde un
principio, buena parte, de lo que hoy se estudia en biología. Su concepto fue
acuñado a comienzos del siglo XVII. Y fueron los europeos, quienes la
desarrollaron en aquellos inicios. Uno de los hombres más brillantes, el cual realizó
un gran aporte a la biología, fue el francés Louis Pasteur, con sus estudios
bacteriológicos. Ya que de ellos, se pudo generar diversa vacunas, contra
las enfermedades que afectaban al hombre en aquel tiempo. Dentro de las cuales,
se destaca la antirrábica. Vacunas que son base, de lo que hoy se ocupa, para
contraatacar a los microorganismos que afectan nuestra salud.
En aquellos años, se establecieron dos tipos de reinos. El animal y el
vegetal. Paradigma, que se mantuvo por muchos años, como la categorización más
aceptada por los científicos. En la actualidad, aquel paradigma se ha derribado, ya
que hoy en día, se consideran más de 20 reinos distintos. Lo que hoy se conoce,
como los sistemas cladísticos.
Lo que se debe tener claro, es que la biología, se subdivide en diversas
subcategorías de la misma. Esto ya que cada una, se ha ido especializando en
distintos ámbitos. Por ejemplo, tenemos a la bioquímica, la biología molecular,
la fisiología, la ecología, la biogenética, entre otras muchas disciplinas. Todas ellas,
se vinculan por lo anteriormente señalado, que es la base del estudio de la biología.
O sea, el nacimiento, desarrollo, muerte y reproducción de los seres. Este concepto
básico de vida. Es el que entrelaza de una u otra manera, las distintas disciplinas
de la biología. Por lo tanto, se puede decir, que todas las variantes de estudio de la
biología, tienen en común, la evolución de la vida. Ya que todo ser vivo, ha ido
evolucionando hasta lo que estoy. Situación que no resiste mayor análisis. Por lo
mismo, es que es fundamental el estudio de la biología, para comprender lo que
somos y cómo llegamos hasta éste nivel evolutivo.

El objeto de estudio de la Biología son los seres vivos es lógico que comencemos
por tratar de definir dicho objeto de estudio. Se suele definir un ser vivo como aquel
que tiene una estructura compleja, se nutre, se relaciona y se reproduce. Sin
embargo las definiciones breves como ésta suelen ser imprecisas y es preferible
aproximarse al concepto de ser vivo identificando una a una sus propiedades más
sobresalientes. Esto es lo que haremos a continuación. Los seres vivos están
integrados por moléculas inanimadas. La ciencia moderna ha descartado o, mejor
dicho, no considera dentro de su ámbito, la vieja doctrina vitalista, que sostenía que
los seres vivos estaban dotados de una misteriosa "fuerza vital" de naturaleza no
material (y por lo tanto espiritual) que les comunicaba el atributo de la vida. Cuando
se examinan aisladamente las moléculas que forman parte de la materia viva, estas
moléculas se ajustan a todas las leyes físicas y químicas que rigen el
comportamiento de la materia inerte. Sin embargo, los organismos vivos poseen,
además, unos atributos extraordinarios que no exhiben las simples acumulaciones
de materia inanimada (por ejemplo las rocas o los océanos) y que resultan de la
mutua interacción entre sus moléculas constituyentes. Examinemos ahora algunas
de estas propiedades.

NIVELES DE ORGANIZACIÓN EN BIOLOGÍA.

Las estructuras que forman parte de cada uno de estos niveles se organizan dando
lugar a estructuras más complejas que forman parte del nivel inmediatamente
superior, las cuales desempeñan funciones y presentan propiedades que pueden
no aparecer en los niveles inferiores; estas funciones y propiedades "nuevas"
emergen como fruto del mayor grado de organización y complejidad que presentan
los niveles superiores, de la interacción mutua entre las estructuras constituyentes
de cada nivel, como una expresión más, en definitiva, de la vieja frase: "el todo es
más que la suma de las partes". A continuación analizaremos brevemente los
distintos niveles de organización que habitualmente se consideran en Biología
ordenados de menor a mayor complejidad. Tendremos en cuenta además que en
cada uno de ellos pueden aparecer varios subniveles de complejidad creciente.
a) NIVEL ATÓMICO.- Lo constituyen los elementos químicos que forman parte de
la materia viva, los cuales reciben el nombre de bioelementos. Es el nivel más
simple.
b) NIVEL MOLECULAR.- Lo constituyen los compuestos químicos que forman
parte de la materia viva, los cuales reciben el nombre de biomoléculas. Dentro de él
se pueden distinguir varios subniveles: precursores, sillares estructurales,
macromoléculas, etc.
c) NIVEL CELULAR.-Está constituido por las células, unidades morfológicas y
funcionales de todos los seres vivos. Es el primer nivel cuyas estructuras están
dotadas de vida propia.
d) NIVEL ORGÁNICO.-Lo constituyen los organismos pluricelulares. En ellos las
células del nivel precedente se organizan para formar tejidos, éstos a su vez para
formar órganos, los órganos se asocian para formar aparatos y sistemas, y el
conjunto de todos éstos constituye el organismo propiamente dicho. Tejidos,
órganos, aparatos/sistemas y organismos representan diferentes subniveles dentro
del nivel orgánico.

e) NIVEL POBLACIONAL.-Lo integran diferentes tipos de asociaciones de


organismos entre sí y con su entorno que constituyen varios subniveles dentro del
nivel poblacional. Así, los organismos no viven aislados, sino formando grupos de
individuos de la misma especie llamados poblaciones; la asociación de poblaciones
de diferentes especies da lugar a comunidades o biocenosis que, en combinación
con los factores ambientales propios del lugar en que viven, constituyen los
ecosistemas. El conjunto de ecosistemas que ocupan un área geográfica
relativamente amplia con características climáticas comunes se denomina bioma, y,
por último, el conjunto de los biomas de este planeta da lugar a la biosfera

2. Elabore un mapa conceptual u otro organizador visual sobre la estructura celular. 4


pts.
Consultar 3 fuentes virtuales o físicas. Incluye la Guía didáctica.

http://cuadrocomparativo.org/mapas-mentales-sobre-la-celula/
http://lacienciaybiologia.blogspot.pe/2013/03/mapa-conceptual-sobre-la-celula-y-
sus.html

https://www.goconqr.com/en/p/819385-estructura-celular-mind_maps

3. Elabore un comentario sobre los Priones y la salud del ser humano. 4 pts.
Consultar 3 fuentes virtuales o físicas. Incluye la Guía didáctica.

Los priones, conocidos universalmente como los causantes de la enfermedad que


afecta a ovejas o a las vacas (“vacas locas” tienen un lado bueno y productivo. A
pesar de la mala fama que llevan arrastrando, un estudio publicado por Journal of
Neurosciencie, hace referencia a las cualidades positivas de estas proteínas. Todos
la tenemos en nuestro organismo, y aunque pueda asustar de buenas a primeras,
esta proteína es una de las encargadas de proteger la mielina (una capa protectora
de las neuronas) Los priones, alojados en nuestro sistema nervioso, forman parte
de la plasticidad de nuestro cerebro.

Si te estás preguntando cómo una proteína que, a priori, resulta tan nociva para los
animales, tenga en realidad consecuencias positivas. La clave para entender todo
esto es la dualidad de la proteína. Posee dos configuraciones, una buena y una
mala. La positiva es la que describe este estudio científico. La mala es la causante
de tantos problemas tanto en la ganadería como en el ser humano.
Las proteínas conforman grandes cadenas de eslabones irregulares: los
aminoácidos. Pero en el organismo no se dan como hileras propiamente dichas,
sino que se suelen plegar de tal forma que parecen ovillos. Vamos, como si
dejáramos caer una cadena al suelo. El resultado se asemejaría bastante a la hilera
de proteínas. Además, esta estructura no es pura casualidad. Los aminoácidos se
caracterizan por su tendencia a acercarse unos a otros, o por el contrario, a
repelerse (todo dependerá de las cargas, sean débiles o puentes de hidrógeno) De
ahí el extraño plegamiento, muy estricto. Gracias a esta forma en concreto es más
fácil acoger otras moléculas para hacerlas reaccionar. Si no adquieren esa forma
concreta, acaban destruyéndose.

Lo fascinante de los priones es esa capacidad de tener dos configuraciones


tridimensionales, ambas estables, ambas opuestas. La nociva es capaz de esquivar
los sistemas de limpieza del organismo. Es por eso por lo que atacan el cerebro de
los animales, y de los seres humanos. De todas maneras, a pesar de este estudio,
el mecanismo de actuación aún no está muy claro. Se sabe que los priones
provocan una reacción en el cerebro que desencadena un cambio de configuración
en todo su entorno, adoptando la nociva en lugar de la buena.

En el ser humano las enfermedades más paradigmáticas de este grupo son el kuru
y la enfermedad de Creutzfeldt-Jakob (ECJ), y en los animales la encefalopatía
espongiforme bovina (EEB) y el scrapie, siendo esta última la enfermedad en la que
se han centrado la mayoría de los estudios experimentales y que puede ser
considerada como el prototipo de todas ellas. A pesar de su capacidad de
transmisión, no se ha demostrado de modo convincente que estas enfermedades
estén causadas por ningún agente microbiano convencional, y se supone que están
producidas por una proteína denominada «prión». Un prión se define como un
agente patógeno infeccioso de estructura proteica, resistente a los procedimientos
que modifican o hidrolizan los ácidos nucleicos. El término lo introdujo Prusiner en
1982 con el propósito de destacar que se trata de agentes (proteinaceous infectious
particles) distintos de virus y viroides.

Resultan sorprendentes dos hechos relacionados con estos procesos patológicos:


el primero, que el agente causal de la enfermedad sea una proteína transmisible
que se multiplica en el huésped y que no se halla asociada a ácidos nucleicos, por
lo que no parece un componente estructural o enzimático de un microorganismo
convencional (virus, viroide u otro), y el segundo, aparentemente en contradicción
con el anterior, que algunas de las enfermedades englobadas en el grupo pueden
presentarse de tres modos distintos: esporádicamente, por infección exógena o
como una enfermedad familiar (genética), siendo todas las formas transmisibles
experimentalmente. Sin embargo, ambos hechos podrían tener una explicación
común. Las células del ser humano y de los animales producen en condiciones
fisiológicas una proteína normal de elevada homología en todas las especies
estudiadas, de 253-254 aminoácidos (33-35 kD de masa); esta proteína se ha
denominado PrP (proteína del prión) y en el ser humano el gen que la codifica se
encuentra en el brazo corto del cromosoma 20. Se desconoce su función fisiológica,
pero es más abundante en las células del SNC que en otros tejidos, por lo que se
ha postulado que podría estar en relación con el desarrollo neuronal, aunque
animales transgénicos en los que se ha suprimido el gen que la codifica presentan
un desarrollo normal. La proteína, también denominada PrP (c por celular), es
procesada y exportada a la superficie celular, donde se une a un residuo de
fosfatidilinositol glucosilado. Posteriormente, la proteína podría ser endocitada en
vacuolas citoplásmicas y ser catabolizada o bien regenerada, volviendo a la
superficie.

En las preparaciones del tejido cerebral de los animales con scrapie se detectó una
proteína con características fisicoquímicas diferentes de las proteínas
convencionales, ya que era resistente a las proteasas y a otras sustancias con
actividad proteolítica y capaz de formar agregados y depósitos fibrilares.
Presentaba la misma secuencia de aminoácidos que la PrP normal (PrP c), pero
había sufrido un cambio conformacional (de plegamiento) que podría justificar las
diferencias con aquél, y se la denominó PrP (sc por scrapie). En el resto de
enfermedades degenerativas transmisibles se han hallado proteínas con estas
características: igualdad de secuencia y cambio conformacional respecto a la PrP
se han denominado según la enfermedad PrP, PrP (GSS por síndrome de
Gerstmann-Sträussler-Scheinker) y otras, pero algunos autores, dada la homología
de la secuencia primaria entre todas ellas, las denominan colectivamente PrP. Esta
proteína constituiría el prión.

Además de las evidencias epidemiológicas, estas enfermedades (humanas y


animales) se han podido transmitir a animales de experimentación, inicialmente
ovejas y cabras. La posibilidad de transmitir el scrapie a pequeños roedores de
laboratorio (ratón y hámster) y acortar el tiempo de incubación de la enfermedad
facilitó el estudio experimental de estos procesos y la obtención de cantidades
sustantivas de proteína muy purificada, y se observó que la proteína depositada
intracelularmente es la PrP 27-30 (27-30 kD), que es un fragmento (proteasa
resistente con 67 aminoácidos menos) de la PrP (de 33-35 kD). La PrP 27-30 sería
un catabolito de la PrP; ambas son capaces de transmitir y reproducir la
enfermedad.

Como se ha señalado, no existen diferencias en la secuencia de aminoácidos entre


la PrP y la PrP de una misma especie animal (y escasa diferencia interespecífica;
aproximadamente 5-30 aminoácidos), ni tampoco se han detectado diferencias en
la organización del gen en animales sanos o enfermos, lo que explicaría que la
diferencia entre la PrP y la PrP no es una mutación, sino un plegamiento diferente
de la proteína elaborada.

Las enfermedades priónicas constituyen el nuevo paradigma en la nosología


neurológica. Aunque hasta ahora su incidencia es baja, su carácter transmisible
plantea nuevos problemas de salud pública.

Pueden definirse como entidades neurodegenerativas que afectan a humanos y


animales, producidas por el metabolismo aberrante de una proteína priónica (PrP),
que presentan un período de incubación prolongado, transmisibilidad y evolución
clínica fetal. Se ha utilizado el término de prionpatías para nombrarlas y debido a la
espongiosis que producen en el sistema nervioso también se les conoce con el
nombre de encefalopatías espongiformes subagudas.

La historia de estas enfermedades recoge, como primeras referencias, la


descripción que hicieran en el siglo XVIII los ganaderos europeos de una
enfermedad neurodegenerativa total que afectaba a ovejas y cabras, denominadas
“tembladera” (scrapie, en inglés) 4 Llama la atención el aspecto de esponja del
cerebro de estos animales, de donde se deriva el término de espongiforme. No fue
hasta principios del siglo XX que se describieron por Creutzfeldt y Jakob los
primeros casos de encefalopatía espongiforme en el hombre, por lo que la
enfermedad recibió la denominación de enfermedad de Creutzfeldt-Jacob. 5 En
1960 el grupo de Gajdusek demostró su transmisibilidad y en 1982 Stanley
Prusiner descubrió el agente patógeno, el prión, demostrando que se trataba de
partículas puramente proteicas sin ácido nucleico, trabajo por el cual le fue otorgado
el Premio Nobel de Medicina en 1997.
Estos trabajos descubren la existencia de dos proteínas PrP distintas, una de ellas
causa la enfermedad. Ambas poseen igual secuencia, pero distinta conformación
tridimensional. Además, las PrP anormales o patógenas parecen ser capaces de
inducir el replegamiento de las PrP normales. Estos hallazgos causaron gran
desconcierto en la comunidad científica debido a su clara contradicción con el
dogma central de la biología: “todas las formas de vida, desde los virus hasta las
plantas y los animales superiores, transmiten sus caracteres a las siguientes
generaciones a través del ADN (excepcionalmente ARN)”. El flujo de la información
es en todos los casos: ADN " ARNm " secuencia de aminoácidos " estructura
tridimensional de la proteína.

La teoría de los priones supone la existencia de dos plegamientos para una única
secuencia de aminoácidos y lo que resulta más interesante e inquietante, el
replegamiento de la PrP normal por acción de la PrP patológica, sugiere un flujo de
información de una proteína a otra a nivel de estructura terciaria. 3, 4, 7 Por tal motivo
los priones constituyen las únicas partículas vivas que contradicen el dogma central
de la biología.

4. Análisis crítico: 6 pts.


Elabore un ensayo: La biología celular como ciencia de la vida. (5 páginas como
máximo)
Considerar el formato siguiente:

a. Introducción.
Biología I, pertenece al campo de conocimiento de las ciencias naturales y
tiene como propósito formativo que el Estudiante comprenda la composición
de la materia-energía de los sistemas físicos, químicos y biológicos, así como
sus cambios y su interdependencia, a través de una interrelación con los
aspectos de desarrollo sustentable y no comprometer la capacidad de las
generaciones futuras.

Resumen
El origen de la vida ha sido tema de discusión desde hace muchos años atrás,
influenciado por diversas teorías religiosas y naturalistas, se ha intentado
obtener una conclusión lo más cerca de la realidad. La teoría del origen de las
células, es de tipo científico, ya que ha sido propuesta en base a un método de
investigación bastante complejo y certero, apoyado en conocimientos
empíricos y dogmáticos previos.
Se atribuye el origen de la vida a moléculas orgánicas básicas organizadas a
partir de elementos químicos principales: Carbono, Hidrógeno, Oxigeno,
Nitrógeno, Fósforo, Azufre, todos importantes en la síntesis de dichas
biomoléculas. Organizadas las moléculas orgánicas se establece la unidad
anatomo funcional y genética de la vida, pero como una célula primitiva
carente de núcleo celular verdadero a partir de la cual se origina la
complejidad de los millones de organismos vivientes de la biosfera terrestre,
es decir la teoría evolucionista toma más fuerza con los adelantos tecnológicos
y científicos realizados, sin dejar de tomar en cuenta la presencia de un ser
superior que indujo la organización de la materia. Aun se discute el origen del
universo, existe una gran variedad de teorías que con el tiempo, permitirán
obtener un conocimiento certero de la génesis de todo lo existente.

b. Desarrollo.

Antecedentes históricos del tema

ORÍGENES DE LA BIOLOGÍA CELULAR Y MOLECULAR


LOS PRIMEROS PASOS
Desde hace muchísimos años, tantos que no podría precisarse el momento
exacto, el hombre busca descubrir un orden para el Universo y ubicarse a sí
mismo dentro de ese orden. Es la búsqueda de un lugar en esa vastedad la
que originó fábulas, mitos y leyendas que asignaban a uno o varios dioses la
creación y el mantenimiento de todo lo existente. Es esa misma búsqueda,
casi desesperada, la que animó a muchos hombres a cuestionar estas
explicaciones y encontrar otras, que no delegaran el poder de la existencia -
en definitiva, de la vida y la muerte - en fuerzas sobrenaturales o seres
mitológicos. La Grecia antigua nos da cuenta de ese esfuerzo por encontrar,
desde el quehacer filosófico, las respuestas a viejas y nuevas preguntas.
Según lo que nos ha llegado a través de la tradición escrita, son los filósofos
griegos los primeros que, cuestionando el contenido de los mitos y
creencias, dedicaron sus esfuerzos a “descubrir” cierto orden y principios
unificadores de todas las cosas, que explicaran tanto su origen como su
permanencia.
Esta tradición tuvo su continuidad, a lo largo de la historia posterior, en los
trabajos de numerosos pensadores. Entre ellos se destacan los de los
eruditos musulmanes, cuyo máximo esplendor se concretó en los siglos X y
XI.
Estos hombres no sólo contribuyeron a difundir la obra de los griegos que
los precedieron, sino que hicieron aportes propios al saber médico -
naturalista de su época. Sin embargo, es al influjo de las visiones
mecanicistas que surgieron en la Europa del siglo XVII, cuando nacieron los
principios de lo que conocemos como ciencia moderna.
Es en ese momento cuando hombres de la talla del astrónomo italiano
Galileo Galilei (1564-1642), del filósofo francés René Descartes (1596-
1727) y muchos otros, proponen determinados métodos, tanto del
pensamiento como de la acción, destinados a fundamentar experimental y
racionalmente las ideas sobre el Universo.
El surgimiento y consolidación de la ciencia experimental constituye, sin
lugar a dudas, uno de los grandes logros de la humanidad.
Fundamentalmente por dos razones: por lo que implica para el hombre
sentirse capaz de explicar y predecir los fenómenos naturales y no atarse a
los caprichos de algún “ente” sobrenatural y por lo que ese conocimiento y
predicción implican para el mejoramiento de las condiciones de vida de la
humanidad, al convertirse en poderosas herramientas para modificar la
realidad natural.
Estos hechos son reflejados en las siguientes palabras del científico y
divulgador de las ciencias Bertrand Russell (1872-1970): “Ciento cincuenta
años de ciencia han resultado más explosivos que cinco mil años de cultura
precientífica.”
La cultura científica retomó y desarrolló muchas de las ideas de los griegos
que habían quedado en el olvido durante el dilatado período de la Edad
Media, que afectó a toda la cultura de occidente durante casi mil años. Una
de estas ideas es la existencia de ciertas unidades fundamentales - un
principio común de estructura- cuyo conocimiento, nos permitiría acceder al
principio ordenador de todas las cosas. Para las ciencias de la naturaleza, la
posibilidad de ubicar físicamente las unidades mínimas donde se
manifestaran las propiedades de un determinado sistema, fue un poderoso
acicate de cuya mano nació un sinnúmero de programas de investigación.
Cualquier estructura material, por más compleja que fuera, podía, según
esta visión, desmontarse en sus constituyentes más íntimos a fin de
estudiarlos por separado. El estudio de cada uno de ellos y el conocimiento
de la forma en que se producía el “montaje” de los mismos para dar como
resultado el sistema completo, permitiría elucidar los misterios más
profundos de la naturaleza.
René Descartes fue uno de los primeros y máximos exponentes de esta
visión que recibió el nombre de “mecanicismo”, debido a que en ella se
asimilaban los sistemas vivos a las máquinas, cuyo conocimiento podía ser
deducido del estudio de cada una de sus partes. Descartes fue también
quien propuso una forma de pensamiento que, según él, daría los mejores
resultados en el arte de conocer la naturaleza. Se denominó la duda
metódica, ya que consistía en dudar permanentemente de las evidencias,
sometiendo a la crítica recurrente todo conocimiento alcanzado.
La duda cartesiana fue considerada la mejor forma de protegerse del
dogmatismo. Aunque Descartes no recurrió con demasiada frecuencia a la
contrastación experimental de sus afirmaciones, la forma mecanicista de
pensar el mundo natural y el método crítico cartesianos se erigieron como
las formas más aceptadas destinadas a conocer científicamente la realidad.
Esta corriente de pensamiento se conoce como racionalista, ya que confiaba
plenamente en los métodos del razonamiento, como herramientas
reveladoras de las verdades en los más diversos campos del conocimiento.
La búsqueda y caracterización de los elementos simples que formaban los
sistemas más complejos, se constituyó en un sueño para la ciencia.
Persiguiendo ese sueño nacieron los modelos de átomos y moléculas,
constituyentes elementales de toda la materia.
El conocimiento de las características tan particulares de los seres vivos,
producto de la extrema complejidad de estos sistemas comparados con los
sistemas inertes, no escapó del sueño mecanicista. Uno de los problemas
principales del pensamiento biológico de todos los tiempos fue establecer la
relación entre estructura y vida.
Paralelamente con el despliegue de las propuestas racionalistas - que como
dijimos confiaban en la razón como fuente principal del conocimiento -,
crecía otra corriente dentro de los naturalistas. La misma se amparaba en
los métodos experimentales que ya dominaban el campo de los
conocimientos en física desde los trabajos pioneros de Galileo Galilei. El
esfuerzo, por tanto, se fue volcando paulatinamente a fundamentar los
conocimientos en la observación y la experimentación. Esta nueva corriente
se conoce como empirista. De la asociación entre las corrientes racionalista
y empirista - pese a los enfrentamientos que solían darse entre
ambas- empezaron a tomar forma las primeras ideas sobre la constitución
elemental de los seres vivos.

DESDE LAS FIBRAS Y LOS GLÓBULOS A LAS CÉLULAS


Pero el tema de la vida superaba en mucho a las posibilidades del
mecanicismo de explicarlo haciendo caso omiso de la idea de una fuerza
exterior, que infundiera tal propiedad a la materia. Es mismo Descartes que,
fiel a su mecanicismo radical, negó la existencia de una fuerza o principio
distinto al resto de las fuerzas de la naturaleza para las propiedades de la
vida, sostuvo, sin embargo, que la conciencia del hombre respondía a una
oscura “alma racional”, no reductible a la composición material de su cuerpo.
Así la búsqueda de la estructura elemental se mantiene fuertemente
asociada con las posiciones vitalistas, que establecen una dualidad
fundamental entre la materia y las propiedades de la vida.
Los vitalistas suponen que cualquiera sea la estructura que caracteriza la
vida, debe además ser la residencia de un “principio vital” o una “fuerza vital”
oculta. Nacieron así los modelos que intentaban dar cuenta de la
complejidad de la vida en la organización de unos pocos constituyentes
básicos dotados de tal fuerza vital. Una de las ideas más antiguas es la
“teoría fibrilar”. Probablemente nació de la observación de estructuras
“fibrosas” macroscópicas, de las que dieron cuenta médicos y fisiólogos de
los siglos anteriores, tales como fibras musculares, venas y nervios.
Las fibras son concebidas como las partes sólidas de los organismos, cuya
asociación da lugar a la formación de tejidos y órganos. Son las fibras las
estructuras donde reside la fuerza vital y por lo tanto portadora de vida, tanto
en lo estructural como en lo funcional.
Sin embargo el sueño cartesiano al que aludíamos anteriormente, no
permite evadirse de una búsqueda más y más profunda hacia el interior de
las cosas. Convencidos de que la naturaleza de la materia es infinita y que,
detrás de cada estructura última debe todavía haber otra más elemental, a la
cual puede ser reducida la primera, esa búsqueda no se detuvo.
Y llevó la pregunta ¿de dónde proceden las fibras? La observación al
microscopio de ciertas estructuras globulares, vino a dar una primera
respuesta. Nació así la idea del glóbulo y el establecimiento de una fuerte
corriente “globulista” complementaria de la teoría fibrilar.
Los globulistas, que basaron sus ideas en las observaciones de
microscopistas tan importantes como Marcelo Malpighi (1628 - 1694) o
Anton Van Leeuwenhoek (1632 - 1723), no pretendían reemplazar en
principio a la fibra como constituyente fundamental de la vida. Simplemente
encontraron en estas estructuras globulares, llamadas “granuli globuli” por
Malpighi y “glóbulos protusados” por Leeuwenhoek, el origen de las fibras a
las que seguían considerando portadoras de la fuerza vital.

POR FIN, LAS CÉLULAS


Resulta interesante volver a considerar aquí que la observación de estos
“glóbulos” es muy anterior al establecimiento de la teoría globulista,
antecedente inmediato de la teoría celular. Normalmente, se asigna el
descubrimiento de las células a Robert Hooke (1635-1703), que comunica
sus observaciones alas Royal Society de Londres en el año 1667.
Robert Hooke era un inventor y renombrado naturalista de su época, que
realizó importantes contribuciones, principalmente en el campo de la física
teórica y experimental. Según relata el mismo, la primera observación de
células (nombre que él le dio debido a su parecido con las celdillas de un
panal de abejas) la realizó al analizar al microscopio una delgada capa de
corcho. Luego extendió esas observaciones a otros vegetales, identificando
las mismas estructuras “porosas”.
Es muy interesante el hecho de que estas consideraciones de Oken son
sólo especulativas, sin pretensiones de ser corroboradas experimentalmente
o por vía de la observación Pero sin duda prepararon el terreno para el
surtimiento de la teoría celular, ya que proveyeron un marco teórico para
interpretar las observaciones microscópicas.
Es así como naturalistas franceses como el botánico Henri J. Dutrochet
(1776-1847) o el zoólogo Felix Dujardin (1801-1860), prácticamente llegan a
esbozar la teoría celular, asignando a las células (que todavía recibía
diferentes nombres tales como utrículos, vesículas, glóbulos, etc.) un
carácter de unidad estructural y fisiológica de los organismos. Dutrochet,
denomina “sarcode” a la sustancia que conforma el interior de las células y
este constituye el primer antecedente de la descripción del plasma celular
denominado posteriormente protoplasma.
Pero es en Alemania, donde los herederos directos de la “Naturphilosophie”,
formalizan una verdadera teoría celular. Esta teoría supera en mucho,
debido a su coherencia, a todas las propuestas anteriores y resuelve por el
momento el tema de encontrar y caracterizar las unidades fundamentales de
la vida.

LA PRIMERA TEORÍA CELULAR


Hacia la década de 1830, ya se habían establecido los progresos
fundamentales, en los planos de la observación y teórico, que
preanunciaban la primera teoría celular. Se había descubierto la
organización celular de vegetales y de ciertos tejidos animales (Dutrochet y
Purkinje, 1801), se había identificado el núcleo en las células vegetales
(Robert Brown 1831) y se había descubierto en el interior de las células una
sustancia a las que se asignaba el carácter de “materia viva”: el protoplasma
(Dujardin, 1835). ¿Qué más faltaba para considerar a estos descubrimientos
una verdadera teoría celular?
Restaban todavía dos cosas fundamentales que aún no estaban
teóricamente resueltas, no habían sido avaladas por observaciones. En
primer lugar la generalización de la existencia de las células para explicar la
organización de todo el mundo vivo y, en segundo lugar, la determinación
del origen de dichas células. Es en ese momento cuando aparecen en
escena los nombres de Matías Schleiden (1804 -1881) y de Teodor
Schwann (1810 -1882).
Schleiden era un abogado nacido en Hamburgo que, tardíamente, dedicó
sus esfuerzos a las ciencias naturales. Según se conoce, padecía de fuertes
desequilibrios mentales y tuvo más de un intento de suicidio, lo que acabó
con su promisoria carrera de leyes. En 1833 decide cambiar de vida y se
anota como alumno en la carrera de medicina de la prestigiosa Universidad
de Gotinga. Pero es en 1838, cuando Schleiden, tomando como referencia
el descubrimiento del núcleo celular por parte de Robert Brown, se aboca a
describir y proponer una función para el mismo. De tal grado es la
perseverancia en sus observaciones y la precisión que logra que identifica
dentro del núcleo al nucleolo.

LOS ANIMALES TAMBIÉN


Como ya adelantamos, el otro protagonista de esta historia es el zoólogo
alemán Teodor Schwann, un alumno destacado de un famoso naturalista
berlinés llamado Johannes Müller (1801 -1858) considerado un teórico
genial y un hábil experimentador. Müller había, entre otras contribuciones,
adelantado el hecho de que la fermentación se debía a la acción
descomponedora de ciertos microorganismos. Esta idea recién se impuso
con los aportes de Louis Pasteur (1822 -1895) a mediados del siglo XIX. Su
contribución a la teoría celular parte de extender al campo de los animales
los descubrimientos hechos por Mattias Schleiden en las plantas. El mismo
se dio cuenta tempranamente de este hecho y según lo relata en el siguiente
texto: “Un día en que cenaba con M. Schleiden, este ilustre botánico me
señaló el papel importante que juega el núcleo en el desarrollo de las células
vegetales. Me acordé de inmediato de haber visto un órgano similar en las
células de la cuerda dorsal, y comprendí en el mismo instante la suma
importancia que tendría un descubrimiento si llegaba a demostrar que en las
células de la cuerda dorsal este núcleo juega el mismo papel que el núcleo
de las plantas en el desarrollo de las células vegetales”.
Como se desprende de la cita, Schwann aceptaba la idea errónea de
Schleiden sobre la generación de las células a partir del núcleo. Todavía no
se había descubierto la división celular, caracterizada por el proceso de
división del núcleo (cariocinesis) seguido de la división del citoplasma
(citocinesis). Pero uno de los objetivos declarados de Schwann es demostrar
que cada célula y los tejidos que éstas forman tienen vida propia. Pretende
probar que el organismo es, simplemente, el resultado de una asociación
celular.
El fin de estas investigaciones es negar el papel ampliamente aceptado de
una “fuerza vital” y explicar la morfogénesis de los animales y vegetales por
“principios mecánicos, sin la intervención de oscuras fuerzas inmateriales.
Hasta ese momento, aunque esbozada, todavía no se había universalizado
suficientemente la idea de que la célula es la unidad básica sobre la que se
apoya cualquier manifestación de vida. Sin embargo, la nueva teoría sirvió
como marco general para un extenso y fecundo programa de investigación
en fisiología y anatomía que ganó a los círculos médicos de la época. De
esta forma, rápidamente surgen una serie de tratados en estas disciplinas
que terminan por establecer la universalidad de la constitución de los seres
vivos.
No ocurrió lo mismo en el ámbito de la educación donde, hasta la última
década del siglo XIX, todavía el concepto de la organización celular todo el
mundo vivo no se reflejaba en los libros de texto de la enseñanza media y
universitaria, especialmente fuera de Alemania. Algunos historiadores de las
ciencias, responsabilizan de este hecho a la influencia de ciertos filósofos
que calificaban a la nueva teoría de una patraña, una “fantástica teoría” que
en nada reflejaba la realidad biológica. Entre estos filósofos adversos a la
teoría celular se encuentra Auguste Comte (1798 -1857).
Comte fue, paradójicamente, uno de los pensadores cuyas ideas tuvieron
mucho que ver con el establecimiento de los métodos y las formas
modernas de la investigación científica. De todas formas, aunque para esa
época la idea de la célula como unidad orgánica y funcional ya estaba
establecida, quedaban en la penumbra los procesos por los cuales se
produce la generación de nuevas células.

LA DIVISIÓN CELULAR
En otras palabras, era desconocido el hecho de que las células tienen su
origen siempre por multiplicación de células preexistentes y que esta
multiplicación se realiza -siempre- por partición del material que compone
a la “célula madre” (división celular). En la resolución de esta cuestión, entra
en escena el nombre fundamental del patólogo de origen alemán Rudolf
Virchow (1821 -1902). Los estudios de Virchow se centran en el origen de
los tumores cancerosos y otras enfermedades degenerativas de los tejidos.
Hacia 1845, este investigador, convencido de que las células son el centro
de toda la actividad vital, y basándose en observaciones de su colega
Remak, llega a la conclusión de que las células se originan únicamente a
partir de células preexistentes.
Esta conclusión es expresada por Virchow en latín y en como una máxima
que se ha hecho famosa: “ommis cellula e cellula” (toda célula proviene de
otra célula). Probablemente se inspiró para su enunciación en otra máxima
expresada por el naturalista italiano Lázzari Spallanzani (1729 -1799) que
rezaba “omne vivum ex vivo”, para afirmar que todo ser vivo provenía de
otro ser vivo y cuestionar de esta forma la extendida idea de que la vida
surgía por generación espontánea.
Virchow en una cita famosa, hace referencia a esta asociación de ideas de
la siguiente forma: “También en patología podemos establecer el principio
general de que no existe creación de novo, de que no podemos demostrar,
tanto en la evolución de los organismos completos como en la de los
elementos particulares, la generación espontánea. [...] negamos en la
histología fisiológica o patológica la posibilidad de formación de una nueva
célula a partir de una sustancia no celular.
Dondequiera que se origine una célula, allí tiene que haber existido
previamente una célula (ommis cellula e cellula), lo mismo que un animal
solo puede provenir de un animal y una planta de otra planta”.
CÉLULAS, GENÉTICA Y EVOLUCIÓN
A principios del siglo XX, con el redescubrimiento de los trabajos de Gregor
Mendel (1822 - 1884) y los conocimientos acumulados sobre la célula, se
abrió un nuevo campo del saber biológico: la citogenética. Esta disciplina
permitió correlacionar los acontecimientos que ocurren durante la división
celular, con los principios que rigen la herencia de los caracteres.
Así se pudo comprobar la ubicación física de los factores mendelianos
(genes) en los cromosomas (Walter S. Sutton en 1902) y estudiar los efectos
genéticos de diversas alteraciones en el material genético.
La idea de mutación impuesta por Hugo De Vries (1848-1935) y constatada
en los trabajos de Thomas Morgan (1866-1945) -sobre la mosca drosophila-
para explicar los cambios en los organismos, permitió “fundir” en un mismo
marco explicativo general tanto la teoría celular, como la genética
mendeliana y la teoría darwinista de la evolución
Estas disciplinas se habían desarrollado paralelamente durante todo el siglo
XIX, sin que se establecieran firmes principios unificadores entre las teorías
que las sustentaban.
Esta gran unificación de distintos modelos biológicos, dio como resultado la
denominada TEORÍA SINTÉTICA DE LA EVOLUCIÓN, surgida en la década
del 30. La teoría sintética pronto se constituyó como una poderosa
herramienta conceptual en manos de los bioquímicos y biólogos, rindiendo
enormes frutos en el campo de los conocimientos biológicos.

NACE LA BIOLOGÍA CELULAR


La siguiente frase del historiador de las ciencias Desiderio Papp muestra
cómo las tendencias principales en el desarrollo de la biología durante
nuestro siglo, retoman y superan los anhelos de los naturalistas de siglos
anteriores.
“Describir la vida del organismo en términos de la física y química fue el
magno objetivo que los iatromecánicos y iatroquímicos del siglo XVII se
habían propuesto. En nuestra centuria se logró, en varios campos de la
biología, acercarse a su ideal en mayor medida de lo que hubieran osado
soñar los protagonistas renacentistas.”

Esta frase de D. Papp se justifica si consideramos que es en este siglo


cuando se pasa de las descripciones microscópicas a una biología
firmemente apoya en la bioquímica, capaz de analizar y sintetizar
macromoléculas en el laboratorio. Es en este siglo cuando se caracteriza
químicamente a los genes y se explora con éxito la ultraestructura celular.
Se logra interpretar las estructuras observables en función de modelos
moleculares de gran poder explicativo. Si bien, a principios de siglo ya
estaba establecida la presencia de ADN como un constituyente importante
en el núcleo celular, a la hora de considerar cuáles eran las moléculas
responsables de la transmisión de caracteres hereditarios, los bioquímicos
se inclinaban por las proteínas.
Este convencimiento respondía al hecho de haberse identificado hasta ese
momento una gran cantidad de tipos proteicos diferentes que hacían pensar
que eran determinantes de la gran cantidad de caracteres de los
organismos.
De la misma forma, el hecho de que estos tipos proteicos pudieran ser
generados sobre la base de la posición y número de una cantidad
relativamente pequeña de aminoácidos, reforzaba la idea de que fueran las
proteínas el asiento físico de los genes. Hacia 1940, el físico de origen
alemán Max Delbrük y el microbiólogo italiano Salvador Luria fundan lo que
se denominó como “grupo fago”. El grupo fago estaba constituido por
investigadores de diversas disciplinas que se dedicaron con ahínco a
determinar la estructura de los virus bacteriófagos.
Tenían la esperanza de que tales estudios les permitirían conocer la forma
en que los genes controlaban la herencia celular. Recién hacia 1944, el
bioquímico norteamericano Oswald T. Avery, investigando la acción
infecciosa de los neumococos, descubrió que el ADN era el soporte material
de los caracteres hereditarios en todos los seres vivos, sin excepción.
Este descubrimiento se constató también en los enigmáticos virus, que
formaban parte de los desvelos del grupo fago desde hacía ya un lustro.
Con este descubrimiento, los estudios bioquímicos sobre la constitución
química y la estructura del ADN pasaron a ocupar un primer plano. El
importante físico alemán emigrado a los Estados Unidos durante la segunda
guerra mundial, Erwin Schrödinger expresa en forma muy gráfica el papel
esencial que se le asignaba por aquella época al ADN: “la fibra cromosómica
contiene, cifrada en una especie de código en miniatura, todo el porvenir del
organismo, de su desarrollo, de su funcionamiento. Las estructuras
cromosómicas cuentan también con los medios para poner este programa
en ejecución. Son a la vez la ley y el poder ejecutivo, el plan del arquitecto y
la técnica del constructor ...”
Estas ideas expresadas por Schrödinger tuvieron fundamental importancia
en el desarrollo posterior de la genética molecular ya que daban sentido y
dirección a la búsqueda emprendida. Se debía hallar una estructura tal que
se correspondiera con la posibilidad de codificar todas las instrucciones
necesarias para el desarrollo y reproducción de los organismos.
A partir de ese momento, el empleo y desarrollo de instrumental sofisticado,
que había sido poco considerado para el estudio de los seres vivos y
formaba parte del arsenal de físicos y químicos, paró a desempeñar un
papel protagónico.
La biología ingresó en los laboratorios y los recursos metodológicos, teóricos
e instrumentales que hasta ese momento eran característicos de los
estudios en física y en química, se integraron plenamente a las
investigaciones sobre la vida. Esta cierta imprecisión para establecer los
límites entre ramas científicas que tradicionalmente habían permanecido
bastante ajenas unas de otras, da cuenta de la nueva posibilidad de
comenzar a explicar ciertos aspectos esenciales de la vida en los mismos
términos en que se explican los sistemas físicos y químicos. El antiguo
sueño mecanicista, tan claramente expresado en la obra de René Descartes
- el brillante filósofo francés del siglo XVII-, parecía empezar a cumplirse: la
posibilidad de que el fenómeno de la vida pudiera comprenderse a partir del
estudio de sus constituyentes más “íntimos”.
De entre todas las técnicas que en esos años se volcaron al análisis del
ADN, el primer indicio de su estructura provino de la cristalografía. El
análisis de cristales de proteína purificada, sugirió - en la década del 40- al
físico estadounidense Linus Pauling y al inglés Maurice Wilkins que esta
molécula mostraba la forma de un filamento helicoidal.
El trabajo de los cristalógrafos no pasó desapercibido para los
investigadores James Watson y Francis Crick, quienes se basaron en los
mismos para sugerir que, también, la molécula de ADN era de tipo
helicoidal. Finalmente, en abril de 1953 propusieron el modelo definitivo de
la molécula de ADN - el modelo de la doble hélice- y pocas semanas
después sugirieron la forma en que se replicaba. Por fin se contaba con un
modelo de la forma en que se disponían los genes en los organismos y
cómo se copiaban para transferirse de un organismo a otro asegurando la
continuidad de la especie.
Por estos descubrimientos, que son unos de los fundamentales de toda la
historia de la biología, recibieron el premio Nobel de medicina y fisiología
nueve años después. Pero todavía faltaba interpretar la forma en que fluía la
información contenida en el ADN para que esta molécula cumpliera con las
funciones de replicarse y traducirse a proteínas. Con el aporte de diversas
investigaciones desarrolladas a partir del impulso que tuvo el modelo de la
doble hélice, en 1957, el propio Crick enuncia el “dogma central de la
biología molecular” con los conceptos centrales de replicación, transcripción
y traducción.
Si bien, el “dogma central” daba cuenta de la forma en que fluía la
información genética, todavía no se había podido descifrar el código
genético ni la forma en que se producía la transcripción y traducción. En
1961 los investigadores franceses Jacob y Monod postulan el papel central
del ARN mensajero y cuatro años después, diversos experimentos que
tuvieron como protagonista central a Niremberg terminaron con el descifrado
completo del código genético.
Posteriormente con las técnicas de secuenciación del ADN, la genética
molecular entró en su fase decisiva de desarrollo que la llevó mucho más
allá del interés teórico y desató una gran cantidad de técnicas que
transformaron a este conocimiento en una de las claves para el desarrollo
de la biomedicina y la industria.

EL PROYECTO GENOMA HUMANO


Pero el aspecto más inquietante de las biotecnologías es el que se refiere a
la modificación genética del propio hombre. El proyecto genoma humano,
que tiene como meta completar el mapeo genético del hombre hacia el año
2000, generará la posibilidad de implementar a gran escala las llamadas
terapias génicas para las más diversas enfermedades genéticas humanas.
La ingeniería genética, así como es una de las más promisorias de las
biotecnologías destinadas a mejorar la calidad de vida de la población
humana, necesita ser reglamentada para que no se transforme
en nuevos intentos de llevar adelante prácticas de carácter eugenésico.

EPÍLOGO
El descubrimiento de que el ADN es el soporte físico de la información
genética, junto a la posibilidad de haber descifrado el código, que nos
permite comprender el mensaje escrito en los genes, representa uno de los
logros más asombrosos de la investigación biológica. Significó desentrañar
uno de los grandes misterios: qué es la vida y cómo es posible que los seres
vivos se perpetúen en el tiempo.
Desde el establecimiento de la estructura del ADN por Watson y Crick en
1953, el avance en torno al conocimiento de la vida a nivel molecular ha sido
vertiginoso. Según Crick: “en junio de 1966, la reunión anual del laboratorio
de Cold Spring Harbor trató el tema del código genético.
Se señaló el fin de la biología molecular clásica, ya que la definición
detallada del código genético - el pequeño diccionario- había demostrado
que básicamente las ideas fundamentales de la biología molecular eran
correctas. Para mí y para mucha más gente, dentro y fuera de la profesión,
era extraordinario que hubiésemos llegado hasta ese punto tan rápido.
Cuando comencé a investigar temas biológicos, en 1947, no tenía la menor
sospecha de que las grandes cuestiones que me interesaban -¿de qué está
hecho un gen?, ¿cómo se replica?, ¿cómo se pone en marcha y cómo se
para?, ¿qué es lo que hace?- según suponía, rebasaría mi carrera científica
activa y me encontré con la mayoría de mis ambiciones satisfechas” La
biología celular nos ha permitido ver a los seres vivos como producto de una
compleja organización a nivel molecular. Muchos de los fenómenos
biológicos encuentran su explicación en las reacciones químicas que se dan
en los diversos compartimentos celulares. Incluso se intentan explicar desde
esta perspectiva muchos de los aspectos característicos del funcionamiento
de los seres vivos multicelulares y que han adquirido un alto grado de
complejidad en su organización.
A esta tendencia no escapa el cerebro humano, donde se ha estudiado con
mucho detenimiento la relación entre diferentes procesos y enfermedades
neurológicas, y la actividad de los mediadores químicos que transmiten
información de una célula neuronal a otra.
Este conocimiento de las “moléculas de la vida” se ha extendido y expandido
hacia el desarrollo de diversas estrategias de carácter tecnológico. La
ingeniería genética, un conjunto de técnicas para transferir genes de un
organismo a otro, ha sido aplicada a bacterias, hongos, plantas y animales.
No sólo ha abierto nuevas perspectivas en la producción agrícola. Se ha
proyectado de manera significativa sobre el mundo de la salud. En primera
instancia existen nuevas posibilidades de diagnóstico con relación a
numerosas enfermedades genéticas, así como la posibilidad de establecer
nuevas relaciones entre el genoma y diversas afecciones que aquejan al
hombre. Aunque se están desarrollando, a su vez, numerosas
investigaciones en torno a la posibilidad de aplicar procedimientos de terapia
génica, agregar el gen normal o reemplazar al gen causante de la
enfermedad por el gen normal, Tim Beardsley de la revista Investigación y
Ciencia afirma: “... la carrera del gen sigue su curso. Se encontrarán mejores
medicinas, algunos harán fortuna y otros resultarán perjudicados. Porque de
lo que no cabe duda es de que, si bien todos los seres humanos comparten
ADN, no todos compartirán sus beneficios. Según un informe de la
Organización Mundial de la Salud, en 1993 murieron 12,2 millones de niños
menores de 5 años en los países en vías de desarrollo. Más del 95% de
esas muertes pudieron haberse evitado, según la OMS, si esos niños
hubiesen estado bien nutridos y hubiesen tenido acceso a los cuidados
médicos que son una práctica normal en los países que pueden
costeárselos. Para los desheredados de la Tierra, la medicina genética es
todavía un sueño muy lejano.”
El avance en las investigaciones del programa genoma humano tendrá una
profunda incidencia en la vida de las personas del planeta. Aumentará
nuestro conocimiento en torno al origen y las causas de numerosas
enfermedades.
Seguramente, y a partir de este conocimiento se desarrollarán nuevas
terapias, pero en muchos otros casos esto no se producirá a corto plazo.
Ha comenzado un profundo debate, al cual no podemos ser ajenos, sobre el
impacto que el diagnóstico genético puede tener sobre la vida de las
personas, cuando este se refiere a enfermedades sin tratamiento posible.
Un capítulo aparte, tal vez el más problemático, se abre con la posibilidad de
manipular el genoma de la línea germinal. Las modificaciones que hagamos
en el mismo afectarán a las futuras generaciones. Como en pocos temas,
cuando nos preguntamos qué es lícito hacer y qué no en relación al genoma
de la línea germinal, debemos tener en cuenta no sólo nuestros derechos
sino los de las generaciones que vendrán.
El desarrollo de la biología molecular ha sido explosivo, ha abierto líneas de
investigación científica y tecnológica jamás imaginadas. Pero cuál será el
futuro de este programa de investigación es una duda sobre es importante
reflexionar.
La investigación científica no sólo le importa a los especialistas, es de
interés para cada habitante del planeta. ¿En qué sentido se orientarán las
nuevas investigaciones en biología molecular? Y ¿qué orientación tomarán
las aplicaciones tecnológicas derivadas de este saber?
La vida de muchas personas se verá influida por la respuesta que se den a
estos dos interrogantes. El progreso en el conocimiento científico no es
inevitable, depende de cuánto trabajan en su preservación los gobiernos, los
investigadores y la población en general. Uno de los temas fundamentales
podría referirse a cuál será el sentido social que se le dará a la moderna
investigación científica.
Entre la promesa y el riesgo, el conocimiento que hemos logrado sobre los
códigos de la vida al finalizar el siglo, no deja de ser impresionante. Muestra
las potencialidades del intelecto humano, que ha dado al hombre el lugar tan
particular que ocupa frente al resto del mundo natural.

Definición de conceptos

La Biología Molecular

Es una rama de la Biología orientada a la comprensión de todos aquellos


procesos celulares que contribuyen a que la información genética se
trasmita eficientemente de unos seres vivos a otros. Estudia los mecanismos
mediante los cuales esa información se expresa en la célula en forma de sus
productos (proteínas) que desarrollan las funciones celulares específicas. Se
dice que la biología molecular surgió en el momento en que se dilucido la
estructura del ADN y se vio favorecida por una serie de adelantos en la física
y química que generaron las herramientas materiales para el estudio de
estas moléculas tan pequeñas
Aplicaciones de la Biología Molecular:
- Salud, Agricultura, Ganadería y Ambiente.
- Ingeniería Genética de Plantas, Animales y Microorganismos.
- Diagnóstico de enfermedades genéticas o infecciosas. - Medicina
forense y análisis de Paternidad
Biorremediación Biotecnología:

Es toda aplicación tecnológica que utiliza sistemas biológicos y organismos


vivos o sus derivados para la creación o modificación de productos o
procesos para usos específicos. Podríamos definirla también como el de los
organismos vivos para la obtención de productos útiles para el ser humano.

LAS BIOTECNOLOGÍAS
El desarrollo de los modelos teóricos que constituyen la genética molecular y
de las técnicas que permiten la manipulación del material genético derivó en
un fuerte impulso de las llamadas biotecnologías. Aunque desde hace
milenios el hombre ha utilizado a los microorganismos y otros seres para
producir alimentos o desinfectantes (piénsese en la fabricación del pan,
queso o en el uso de mohos para evitar infecciones), esto se realizaba en
forma empírica. Es decir que se contaba con un conjunto de técnicas
desarrolladas a lo largo de la historia que permitían producir algunos
productos de consumo humano utilizando distintos microorganismos. Sin
embargo, desde principios de siglo se han venido estudiando y mejorando
estas técnicas así como incorporando nuevas, hasta desarrollar importantes
líneas de investigación aplicada que se han dado en llamar biotecnologías.
El conocimiento obtenido a instancias del desarrollo de la genética
molecular, ha dado un impulso aún mayor a la explotación industrial de los
organismos con el advenimiento de las técnicas de ingeniería genética. Ya
no se trata sólo de aislar organismos útiles para algún fin sino de fabricarlos
“a medida”.
Las palabras del biólogo inglés J.B.S. Haldane, pronunciadas en 1929 - y
que, tal vez, daban cuenta sólo de un sueño de bioquímico -, se han hecho
realidad: “Si no eres capaz de encontrar un microbio que produzca lo que
quieras, ¡créalo!”.
Hoy es posible (y así se hace) modificar genéticamente a muchos
microorganismos para que fabriquen diversos productos que naturalmente
no producen. Entre ellos se encuentran antibióticos, hormonas, vacunas y
una infinidad de productos de uso medicinal. También, se proyecta producir
de esta forma combustibles, diversos alimentos y extraer valiosos metales
de las rocas.
A partir del desarrollo de plantas transigencias se ha mejorado la
productividad de muchos cultivos, ya sea porque se les introducen genes
que les confieren resistencia a muchas enfermedades o porque se obtienen
vegetales de mejor calidad. También se han producido diversos animales
transgénicos que son utilizados fundamentalmente en la investigación
biomédica y otros que se proyecta podrían resultar de utilidad para la
producción agropecuaria.
Otro de los capítulos controvertidos de las biotecnologías es el que se
refiere al desarrollo de las técnicas de fertilización asistida. Esta nueva
disciplina médica que incorpora tecnologías destinadas a superar problemas
reproductivos, sigue siendo tema de intensos debates en los planos social,
teológico, moral, jurídico y científico.

Estado actual o vigencia del tema


Se puede definir a la tecnología como la sistematización de conocimientos y
técnicas aplicables a cualquier actividad, para fines prácticos o comerciales.
De tal manera que cuando se altera o se utiliza algún organismo, célula o
molécula biológica entonces se trata de la biotecnología. La biotecnología
surgió desde las primeras civilizaciones aproximadamente 10 000 años,
como las culturas neolíticas de Egipto y lejano oriente que utilizaban
levaduras para la fabricación de cerveza y pan, domesticaban plantas y
animales de manera selectiva.
Al igual en el continente americano, como lo revelan las semillas de
calabaza que se encontraron conservadas en una cueva en México cuyas
características de tamaño y grosor de cáscara revelan la práctica de cultivos
selectivos. Biotecnología Moderna. Actualmente el avance en la ciencia ha
llegado hasta aparecer la ingeniería genética, la bioquímica, biología celular,
etc. Abriendo oportunidades en actividades de investigación biológica de
enfermedades, agricultura y ganadería, etc. La biotecnología moderna ha
transformado significativamente muchas de las actividades del hombre como
por ejemplo: Agricultura y ganadería Medicina Preservación del ambiente
Industria

c. Conclusiones.
Conclusiones propias del tema
La biología molecular es una rama de la Biología orientada a la
comprensión de todos aquellos procesos celulares que contribuyen a que
la información genética se trasmita eficientemente de unos seres vivos a
otros. Estudia los mecanismos mediante los cuales esa información se
expresa en la célula en forma de sus productos (proteínas) que desarrollan
las funciones celulares específicas.
La primera teoría celular. Se había descubierto la organización celular de
vegetales y de ciertos tejidos animales (Dutrochet y Purkinje, 1801), se
había identificado el núcleo en las células vegetales (Robert Brown 1831) y
se había descubierto en el interior de las células una sustancia a las que
se asignaba el carácter de “materia viva”: el protoplasma (Dujardin, 1835).

Aportes personales teóricos y/aplicativos al tema


El campo de la biología molecular traslapa con biología y química y
particularmente, genética y bioquímica. Un ámbito fundamental de la
biología molecular se refiere a entender cómo los diversos sistemas
celulares obran recíprocamente en términos de función de la manera de
síntesis de la DNA, del ARN y de la proteína.
Las técnicas específicas usadas en biología molecular son nativas al
campo pero se pueden también combinar con métodos y los conceptos
referentes genéticas y a bioquímica, tan allí no son ninguna distinción
grande hecha entre estas disciplinas.

Sin Embargo, cuando los campos se consideran independientemente de


uno a, la bioquímica se refiere a los materiales químicos y a los procesos
esenciales que ocurren en organismos vivos. El papel, la función y la
estructura de biomoléculas son ámbitos fundamentales del enfoque entre
bioquímicos, al igual que la química detrás de funciones biológicas y de la
producción de biomoléculas.

La Genética se refiere a los efectos de genes sobre los organismos vivos,


que se examinan a menudo con los estudios del “golpe de gracia”, donde
se diseñan los modelos animales de modo que falten uno o más genes
comparados a un “tipo salvaje” o al fenotipo regular.

La biología Molecular observa los mecanismos moleculares detrás de


procesos tales como función de la réplica, de la transcripción, de la
traslación y de la célula. Una manera de describir la base de la biología
molecular es decir que se refiere a entender cómo los genes se transcriben
en el ARN y cómo el ARN entonces se traduce a la proteína. Sin Embargo,
este retrato simplificado es se reconsidere actualmente y revisada debido a
los nuevos descubrimientos referentes al papeles del ARN.
CONCLUSION

 Todavía constituye una controversia el hecho de que una proteína provoque


una enfermedad infecciosa. Otro punto sin respuesta es el mecanismo por el
cual el agente infeccioso se multiplica en el individuo afectado si no contiene
ácidos nucleicos, y esta misma característica genera otra interrogante no
resuelta, relacionada con la memoria genética: ¿cómo puede la proteína
priónica guardar la información sin alterar los aminoácidos que la forman?,
simplemente moldea o cambia su forma por mecanismos desconocidos aún.

 También es interesante tener en cuenta que una proteína que se expresa en el


cerebro y otros tejidos durante el desarrollo embrionario, en todos los
mamíferos, puede ser prescindible sin efectos negativos.

 La Biología Molecular es una rama de la Biología orientada a la comprensión


de todos aquellos procesos celulares que contribuyen a que la información
genética se trasmita eficientemente de unos seres vivos a otros. Estudia los
mecanismos mediante los cuales esa información se expresa en la célula en
forma de sus productos (proteínas) que desarrollan las funciones celulares
específicas
BIBLIOGRAFÍA

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