SUBSIDIO

TRIBUNAL Y PARROQUIA
En las causas de nulidad matrimonial
 La labor de la Parroquia y la del Tribunal Eclesiástico se realiza cómo:
PROLONGACIÓN DE LA MISIÓN DEL OBISPO EN SU DIÓCESIS

Cada labor tiene sus características particulares, pero se complementan.

Exhortación Apostólica
EVANGELII GAUDIUM, n° 27

«Sueño con una opción misionera

capaz de transformarlo todo, para
que las costumbres, los estilos, los
horarios, el lenguaje y toda
estructura eclesial se convierta en
un cauce adecuado para la
evangelización del mundo actual
más que para la
autopreservación.»
…
«La reforma de estructuras que exige la
conversión pastoral sólo puede
entenderse en este sentido:
PROCURAR QUE TODAS ELLAS SE
VUELVAN MÁS MISIONERAS…

QUE LA PASTORAL ORDINARIA EN

TODAS SUS INSTANCIAS SEA MÁS
EXPANSIVA Y ABIERTA…

QUE COLOQUE A LOS AGENTES

PASTORALES EN CONSTANTE
ACTITUD DE SALIDA
y favorezca así la respuesta positiva de
todos aquellos a quienes Jesús convoca
a su amistad.
…
«Como decía Juan Pablo II a los Obispos
de Oceanía:

TODA RENOVACIÓN EN EL SENO DE LA

IGLESIA DEBE TENDER A LA MISIÓN
COMO OBJETIVO PARA NO CAER
PRESA DE UNA ESPECIE DE
INTROVERSIÓN ECLESIAL»
 El origen de la reforma surge desde:
SÍNODO EXTRAORDINARIO DE LA FAMILIA (octubre de 2014)

Motu Proprio MITIS IUDEX DOMINUS IESUS (8 de septiembre de

2015)

REFORMA ESTRUCTURAL de las normas para llevar los procesos de nulidad

matrimonial canónica.
Al igual que la Parroquia, el Tribunal debe vivir su CONVERSIÓN PASTORAL

Con:

Actitud misionera

Expansiva y Abierta

Actitud de salida

Respuesta positiva
El mismo Obispo en su Iglesia, de la que es
constituido pastor y cabeza, es por eso
mismo juez entre los fieles que se le han
confiado.
Se espera que el Obispo se
esmere en la conversión del
Tribunal de modo que las
costumbres, los estilos, los
horarios, el lenguaje y toda la
estructura eclesial se convierta
en un cauce adecuado para la
evangelización.
Los párrocos son la prolongación del Obispo en
sus respectivas parroquias y forman una unidad
con el Obispo.
Por tanto, también los párrocos participan de la
dimensión judicial del Obispo
 Hay algunos Obispos confundidos y desconcertados ante los
planteamientos del MIDI por no considerarse expertos en Derecho
Canónico ni entender como van a cumplir las normas judiciales.

El MIDI pide a los

Obispos:

Que, actuando como

pastor, sea misionero
para cada persona, en
todo lugar.
TODO LO QUE REALIZA LA IGLESIA ES PASTORAL

incluyendo la labor judicial, pero no toda la pastoral es

judicial.

Debemos vincular la pastoral judicial

con la pastoral no judicial de modo
articulado en la dimensión misionera que
conduce a todos al seguimiento de
Jesús para su salvación.
No es necesario que el Obispo
y el párroco sean canonistas.
Es necesario que sean buenos pastores
que conocen a sus ovejas y les conduzcan
con espíritu misionero.
VISITADORES DEL TRIBUNAL A LAS PARROQUIAS
y
VADEMÉCUM

Ambas herramientas facilitan la vinculación del Tribunal con las comunidades.

Esto permite la conversión del Tribunal con la fuerza transformadora que

contiene el MIDI cuando es acogido con la vitalidad del Espíritu Santo.
Este documento es un auténtico grano de mostaza, con
virtualidad de desarrollo, de modo que a medida que va
creciendo se descubren nuevos campos en los que se
tendrá que entrar para avanzar por los caminos del reino
Para asumir esta actitud misionera,
ponemos la mirada en lo que hizo Jesús:
«Vinieron a casa de Simón y Andrés, con Santiago y juan.
La suegra de Simón estaba acostada con fiebre, e
inmediatamente se lo dijeron. Él, acercándose, la tomó de
la mano y la levantó. La fiebre le dejó, y ella se puso a
servirles». (Mc 1, 29-31)
 JESÚS

Se
acercó…

La tomó de
la mano…

La
levantó…
- Tenemos que saber acercarnos a quien sufre por la situación angustiosa de su
matrimonio roto.
- Tenemos que escuchar y comprender su situación.
- Tenemos que tomarla de la mano y ponerla en un proceso de acompañamiento
sanador.
- Tenemos que levantarla para que pueda moverse con autonomía y libertad.
La comunidad viva de la Parroquia es la que hace visible
al Señor.
No hay que pretender que
sea el Párroco quien lo
haga todo.

Los agentes de Pastoral

familiar parroquial son los
miembros especialmente
señalados para poner en
práctica este servicio.
Todos los fieles de la parroquia tienen su labor.
Es una labor semejante a la de quienes estaban
con Jesús cuando llegó a la casa de Simón Pedro.

Cada uno tenemos que reflejar

al Señor, unidos todos
formando un solo Cuerpo. Es
el cuerpo de Cristo del cual
cada uno somos miembro,
teniendo cada uno funciones
distintas en bien de todo el
cuerpo.
Los fieles pueden hacer saber a la Parroquia dónde hay
alguien con la situación matrimonial en situación de conflicto,
roto o con interés en la nulidad.

Es entonces cuando la parroquia se acerca a ella para actuar

como Jesús.
Acercarse no es el ejercicio físico para llegar hasta donde está una
determinada persona.
El acercamiento que interesa es el acercamiento interior.

Manteniendo una actitud

de sencillez y escucha,
avanzar con mucho
respeto, creando las
condiciones para que la
persona tenga confianza
para abrir su campo
interior, privado y a veces
vergonzoso.
La actitud de
acercamiento no es
sólo para comenzar la
interrelación, sino que
se ha de mantener
en todo momento y
por parte de todos
pues, este paso, tiene
gran repercusión para
los pasos siguientes y
para el resultado final.
ADVERTENCIA
Por ningún motivo se ha de
actuar presionando para que
la persona se abra, esto
produce alejamiento.

Hay personas que, con su

actitud, marcan distancia.

La prepotencia o indiferencia
producen alejamiento.
La acción de escuchar se realiza para seguir acompañando
con una dimensión sanadora (y no por curiosidad morbosa).

ADVERTENCIA
Para actuar como
«verdadero compañero
de camino» se ha de
mantener vigilancia para
evitar dependencias, ya
sea por autoritarismo o por
vínculos creados, que
vendría a resultar acción
esclavizadora y no
liberadora.
Del acompañamiento, tomando de la mano, brota de
inmediato el «levantar», propiciando que la persona pueda
caminar por sí misma, con toda dignidad, libre del peso
de sus heridas y de cualquier atadura que impida o limite el
personal protagonismo responsable de sus actos.

La persona ya
puede, por decisión
personal, ponerse a
servir.
Se inicia por la información
que le llega al párroco (o a la
comisión parroquial, agentes
pastorales) con relación a la
persona que se encuentra
confundida en lo referente a
la validez de su matrimonio.

Es de mucha
importancia
comenzar con el
«acercamiento».
 NUNCA DEBE PRESCINDIRSE DE ESTE PASO
Es muy importante aprender a «perder tiempo» para escuchar con calma.

Es en este momento cuando el párroco puede darse cuenta si el

problema es un conflicto solucionable o si se trata de algo más
profundo sin reconciliación posible y con posibles raíces en la nulidad
del matrimonio.
 Cuando el párroco piensa que es posible que se trate se un
matrimonio nulo, pide el servicio del Visitador del Tribunal a
las Parroquias.

Se inicia el proceso de preparación de la demanda para llegar con ella al Tribunal.

El PROCESO PRE-JUDICIAL
En este proceso no actúa sólo el Visitador, sino que también
el Párroco y su equipo parroquial.

Se sigue atendiendo a la persona, actuando con los criterios

propios de la pastoral general.
 El párroco continúa con la actitud de acompañamiento, «tomándola de
la mano», con los ojos puestos en su crecimiento y salvación.

Esta actitud de acompañamiento se debe mantener durante el proceso judicial.

 En el Tribunal tenemos que
vivir una verdadera
conversión para ser fieles a
las orientaciones del MIDI.
No se trata únicamente de un
cambio de normas sino de
asumir «el estilo» de cercanía
con las personas para que su
paso por el tribunal se
convierta en un cauce
adecuado para la
evangelización.
Así como en la Parroquia, al acompañar a una persona que tiene
su causa en el Tribunal, están atentos a lo que pasa en el
tribunal…
También será conveniente que en el Tribunal estemos atentos a
lo que pasa en la Parroquia.

Actuando en forma
articulada, podremos ser, de
verdad, IGLESIA MISIONERA
 La SENTENCIA no
sólo es un
El proceso judicial documento judicial
termina con la valioso, sino que
SENTENCIA y las también es un
notificaciones instrumento
correspondientes pastoral de gran
magnitud que, junto
a la labor del
Párroco, dará
mucho fruto en un
momento clave para
el inicio de una
nueva etapa de la
vida.
Manteniendo fija la mirada
en la SALVACIÓN DE LAS
ALMAS, queda claro que
el PROCESO PASTORAL
no ha terminado, aunque
haya terminado el proceso
judicial.

Debemos mantener la
ACTITUD DE
ACOMPAÑAMIENTO si
es necesario para que
puedan vivir
intensamente el proceso
del perdón.