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Sociedad y Estado

UNIVERSIDAD MAYOR DE SAN ANDRÉS


FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS
CURSO PREFACULTATIVO
GESTIÓN 2011

SOCIEDAD Y ESTADO
Texto compilado y elaborado por:
Dr. Juan Ramos Mamani

Dr. Emerson Calderón Guzmán


DIRECTOR CURSO PREFACULTATIVO

DISTRIBUCIÓN GRATUITA
PROHIBIDA SU VENTA

La Paz – Bolivia
2011

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Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

Depósito
Legal No.
Segunda Septiembre 2011
edición
Tiraje : 3.500 ejemplares

Título : SOCIEDAD Y ESTADO

Autores : Facultad de Derecho y Ciencias Políticas


UMSA

Impreso en:

Prohibida su venta total o parcial por medios electrónicos, fotocopias, y otros sin autorización
escrita del autor.

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Sociedad y Estado

CONTENIDO

PRESENTACIÓN

INTRODUCCIÓN

TEMA 1
ORIGEN DEL ESTADO
1. Sociedad, Estado y Derecho
1.1. Concepto de Sociedad
1.2. La sociedad y sus elementos
1.3. Sociedad y Política
1.4. Estado, justicia y moralidad
1.5. Los orígenes del Estado
2. Síntesis: De las Teorías sobre el origen del Estado
2.1. Las teorías teológicas u origen divino del Estado
2.2. Teoría del origen familiar del Estado
2.3. Las teorías naturalistas
2.4. Teorías del origen violento del Estado
2.5. Teorías del origen convencional del Estado,
del pacto social o voluntarista
2.6. Teoría ético espiritual
2.7. Teoría de la constitución histórica,
espontánea y necesaria del Estado

TEMA 2
CONCEPTOS Y DEFINICIONES DEL ESTADO
1. ¿Qué es el Estado?
1.1. Noción de Estado
1.2. Estado en sentido amplio
1.3. El nombre del Estado como organización política
1.3.1. El nombre de la organización política en Grecia
1.3.2. El nombre de la organización política en Roma
1.3.3. El nombre de la organización política en la Edad Media
1.3.4. Origen de la palabra Estado en sentido moderno
2. Definiciones del Estado
3. Elementos del Estado
3.1. Población

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3.2. Territorio
3.2.1. Componentes del territorio
3.3. Gobierno
3.4. Fin social

TEMA 3
FORMAS DE ESTADO
1. Formas modernas de Estado
1.1. Estado Unitario o Simple y sus características
1.2. Estado Federal y sus características
1.3. Estado Confederado y sus características
1.4. Estado Autonómico
1.4.1. Concepto de autonomía
1.4.2. Caracteres del proceso autonómico
1.4.3. Principios del régimen autonómico

TEMA 4
SISTEMAS DE GOBIERNO
1. Sistema de Gobierno Presidencialista
1.1. Conceptos
1.2. Características del Sistema de Gobierno
Presidencialista
2. Sistema de Gobierno Parlamentario
2.1 Conceptos
2.2 Características del Sistema de Gobierno Parlamentario
3. El Semipresidencialismo

TEMA 5
TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN
1. Etimología
2. Conceptos
3. Primacía de la Constitución
4. Principio de jerarquía de las normas jurídicas
5. Estructura o partes de la Constitución
5.1. Parte Dogmática
5.2. Parte Orgánica
6. Clasificación de constituciones
7. ¿Qué es el Poder Constituyente?
8. ¿Cuál es su naturaleza?
9. ¿Cuál su importancia?
10. ¿Cuáles son sus características y limitaciones?

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Sociedad y Estado

11. ¿Qué debemos entender del Poder constituyente


originario y derivado?
11.1. Poder Constituyente Originario
11.2. Poder Constituyente Derivado
12. Poder Constituido

TEMA 6
CONSTITUCIÓN POLÍTICA DEL ESTADO
BASES FUNDAMENTALES

TEMA 7
CONSTITUCIÓN POLÍTICA DEL ESTADO
(PARTE DOGMÁTICA)

TEMA 8
CONSTITUCIÓN POLÍTICA DEL ESTADO
(PARTE ORGÁNICA)

TEMA 9
LEY DE DESLINDE JURISDICCIONAL

BIBLIOGRAFIA DE REFERENCIA

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Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

PRESENTACIÓN

La Facultad de Derecho y Ciencias Políticas de la Universidad


Mayor de San Andrés (UMSA) tiene el agrado de presentar los textos
oficiales de enseñanza-aprendizaje para la Prueba de Admisión del
Curso Prefacultativo de la Carrera de Derecho, Gestión 2011.

La Carrera de Derecho de la UMSA fue creada el año 1830 por


el Mariscal Andrés de Santa Cruz y Calahumana y durante estos 181
años de actividad académica y formación profesional, la Carrera se ha
convertido en el centro de generación de conocimiento jurídico del país,
cumpliendo a la vez con la sagrada misión de acreditar profesionales
abogados con un alto espíritu de servicio a la comunidad.

La Carrera tiene como base de constitución, el carácter


democrático, popular e intercultural. Su gestión académica se cimienta
en el CO-GOBIERNO, entendido como un sistema de equilibrio
democrático que consiste en la conformación de órganos de decisión y
gobierno entre docentes y estudiantes, y en la LIBERTAD DE
CATEDRA, que tiene su fundamento en la libertad de pensamiento de
docentes y estudiantes en un proceso constante de debate de
posiciones y posturas ideológicas en un marco de democracia y
respeto.

Estudiar en la Carrera de Derecho es una oportunidad para los


postulantes que pretenden formar parte de la comunidad universitaria y
posteriormente del foro intelectual de la ciencia jurídica, que requiere
como nunca antes de abogados comprometidos con los proceso de
transformación y cambio, que encara el país.

Los abogados formados en nuestras aulas son profesionales de


alto prestigio y reconocida reputación por la alta calidad y excelencia
académica invertida en su formación. Este objetivo es posible debido a
que los Docentes de la Carrera de Derecho, gozan de una amplia
experiencia en la trasmisión de conocimientos especializados.

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Sociedad y Estado

Asimismo, la Facultad de Derecho y Ciencias Políticas de la


UMSA ha suscrito una serie de convenios con Universidades
Extranjeras que otorgan a sus estudiantes la posibilidad de continuar
sus estudios a nivel de postgrado, maestría y doctorado. Igualmente,
proporciona autenticas oportunidades para que sus alumnos realicen
prácticas profesionales antes de la graduación, ya que ha celebrado
también importantes convenios con entidades públicas y privadas del
país.

Bajo estas premisas, los presentes textos de enseñanza-


aprendizaje que ponemos a consideración de los postulantes a la
Carrera de Derecho están diseñados para que los mismos tengan una
adecuada orientación sobre el contenido de las diferentes materias a
ser impartidas durante el Curso Prefacultativo.

En este contexto, las autoridades, los docentes y la comunidad


universitaria de la Facultad de Derecho y Ciencias Políticas de la
UMSA expresan a los postulantes del Curso Prefacultativo su
predisposición de ofrecerles las mejores condiciones posibles para el
desarrollo del Curso y desean a todos los participantes, el mayor de los
éxitos en su preparación para el examen de admisión.

Dr. Julio Mallea Rada Dr. Marco Centellas Castro


DECANO VICEDECANO

Dr. Juan Ramos Mamani Dr. Emerson Calderón Guzmán


DIRECTOR DIRECTOR
CARRERA DE DERECHO CURSOPREFACULTATIVO 2011

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Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

INTRODUCCIÓN

Si alguna palabra puede hoy acompañarnos para realizar la


presentación de este texto es la palabra estudio. Pues este trabajo
pretende acercar al estudiante una serie de trabajos referidos a la
sociedad y el Estado con el propósito de aportar a la comprensión de
los procesos sociales, políticos y económicos de Bolivia.

Por ello incorporamos elementos conceptuales que nos sirvan de


herramientas para analizar situaciones históricas completas. De ello
deriva la relevancia de esta combinación entre conceptos teóricos y
acontecimientos históricos.

De lo que se trata es de reivindicar un término central de la vida


universitaria y del sistema educativo, celebrando el estudio y los
estudios. El texto “Sociedad y Estado” no se limita a ser un trabajo
acumulado para componer una obra. Se diría que lo más decisivo es
que se ofrece como un conjunto de fuerzas y de razones, de análisis y
de argumentos y, sobre todo, de voluntades, de decisiones implicadas
que alientan y estimulan la labor universitaria como tarea de enorme
incidencia social.

Pronto se comprenderá que el presente trabajo no es simplemente una


descripción y que el análisis implica a la par decisión y compromiso
cabalmente plasmados en el texto, enmarcado en los objetivos de una
universidad implicada en el desarrollo local, territorial, social y político,
en el bien estar de los ciudadanos, a partir de una clara posición en la
sociedad del conocimiento, en su generación y transmisión.

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Sociedad y Estado

Nuestra Universidad ha sido y es factor de dinamización e


internacionalización determinante del país, un factor decisivo de
inclusión social, de igualdad, de bien estar y de progreso. Por ello este
texto es a su vez un espacio de difusión y de convocatoria, una
perspectiva y un horizonte para aquellos cuya firme intención es
integrarse a las aulas de la Carrera de Derecho y de tornarse en
ejemplo de estudio para nuestra sociedad.

Dr. Juan Ramos M.


Docente Titular
Derecho Constitucional
Derechos Humanos

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Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

TEMA 1

ORIGEN DEL ESTADO

3. Sociedad, Estado y Derecho

2.8. Concepto de Sociedad


Los seres humanos, desde que aparecen sobre la Tierra hasta
nuestros días, viven en sociedad, es decir, "Un sistema duradero que
se reproduce a sí mismo, dentro de cuyos límites territoriales y
culturales viven su vida la mayoría de sus miembros". (Green y Johns)
Con esta expresión sociológica nos referimos a la reunión de hombres
o animales, que viven bajo leyes comunes, producen los fenómenos
sociales y tienen una cultura común, en un sistema duradero. Por su
parte, Hankins expresa que "…la sociedad es cualquier grupo
relativamente permanente, capaz de subsistir en un medio físico dado y
con cierto grado de organización que asegura su perpetuación
biológica y el mantenimiento de una cultura, y que posee además, una
determinada conciencia de su unidad espiritual e histórica",
encaminada a su propio mantenimiento y preservación. Dotado de
inteligencia y con sus manos, el hombre construye un mundo social
diverso a la naturaleza cuyas fuerzas lo dominan. Ese orden es el
mundo de la cultura, resultado de un trabajo en común, de sus luchas

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Sociedad y Estado

por la supervivencia, de un afán por alcanzar una vida justa, armónica y


civilizada, protegida por los altos valores como la libertad, la justicia
social, el Derecho, y las estructuras democráticas. Por todo ello, hemos
de preocuparnos por responder a esta pregunta, que se formula Helmut
Schoek: "¿Cómo se llegó a la socialización, a la sumisión de unos
individuos libres a un sistema de controles sociales y de coacción
social?"

Lo que conocemos es que se originan una complejidad de fenómenos


sociales, que se concretan en conductas, acciones y reacciones
sociales, que se traducen en múltiples instituciones políticas,
económicas, jurídicas y sociales, que forman el marco en que se
desenvuelve la vida de relación.

El fenómeno político, la conducta política, las instituciones políticas y,


en general, las sociedades políticamente organizadas, forman el objeto
de nuestro estudio que concentra su atención en el análisis de los
hechos y formas políticas, sobre todo el Estado, que es la forma
superior de ese desarrollo, el cual se encuentra en una encrucijada de
la historia ante el embate del marxismo-leninismo, que en voz de su
fundador configuró su desaparición: "La clase trabajadora sustituirá el
viejo orden burgués con una asociación que excluirá las clases y sus
antagonismos y ya no habrá poder político propiamente dicho, porque
el poder político es simplemente la forma oficial del antagonismo en la
sociedad burguesa." (Carlos Marx, La miseria de la Filosofía, 1847).

Hay varios conceptos de sociedad, cuyo sentido debemos citarlas


previamente, para una mayor claridad de nuestra exposición:

1. Los conceptos de "sociedad" y de "humanidad", nos dice


Joussain Petit traité de sociologie economique), "…son propiamente
hablando una abstracción, lo que existe son hombres viviendo en
sociedad y, por consiguiente, grupos sociales, sociedades
particulares".
2. También se habla de sociedad en un concepto circunstancial o
transitorio de sociedad. Estos últimos son grupos transitorios,
temporales, de fines concretos, parciales o particulares, como una

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Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

sociedad recreativa, deportiva, comercial, industrial, cultural, científica,


o como los pasajeros de un barco, de un avión, de un automóvil o de
un ferrocarril, como un campamento militar, campos accidentales de
trabajo y otros análogos.
3. Mas debemos limitamos a un concepto relativo de sociedad, el
más usual en el campo de los estudios sociológicos. En este caso la
sociedad aparece como una reunión de seres humanos que integran
un orden social superior, permanente, asentado sobre un territorio para
alcanzar fines comunes, por medio de la acción recíproca o interacción
social. La palabra sociedad es empleada con frecuencia como un
término genérico que designa una reunión de hombres en los que se
producen fenómenos sociales, se establecen vínculos de solidaridad e
instituciones económicas en relación con sus necesidades. La sociedad
es universalidad y totalidad. Sus diversos temas hacen alusión a los
problemas comunes de toda sociedad y otros se relacionan con las
variaciones de una sociedad con las demás.

La sociedad es la creadora de la cultura entendida originalmente como


un cultivo del espíritu, luego como la misma obra social creadora de
bienes culturales, transitorios o permanentes transmisibles y
estimulantes de la acción humana, como adiciones al mundo de la
naturaleza y encaminadas al perfeccionamiento del hombre. "La cultura
meramente exterior y material recibe (en el área lingüística alemana) el
nombre de civilización. Su misión es servir de base y supuesto a la
cultura interior." (WaIter Brugger, Dicc. de filosofía, pág. 132.)

2.9. La sociedad y sus elementos


La sociedad como elemento básico de una organización política tiene
los elementos siguientes:

1. Estamos en presencia de un grupo humano coherente, de acción


general y unitaria;
2. Este grupo se propone la cooperación y la realización de fines o
intereses principales, como su propio mantenimiento, su preservación
y su continuidad biológica;
3. La obra social es continua, apremiante y arraigante para estimular
las relaciones sociales complejas de seres humanos diversos en sexo,

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Sociedad y Estado

edad, condición económica, etc.;


4. El asentamiento territorial es necesario para asegurar la
subsistencia y la acción social permanente;
5. El grupo social es actuante, estimulante de la acción cultural
colectiva en sus variadas relaciones y procesos y sobre la base de que
dentro de una sociedad pueden existir multitud de culturas y de que
dentro de un Estado se pueden manifestar varias Naciones.
6. El grupo social imprime su propio carácter a las creaciones
sociales, de tal modo, que hasta en la misma obra individual, en el
creador excepcional o en el genio, aparece todo lo que es experiencia
o sentido social. El grupo social adquiere conciencia de su unidad
espiritual e histórica. Hay una conciencia social inicialmente
rudimentaria y progresiva que va imprimiendo en el hombre sus
características mentales. "Por eso podemos decir válidamente que el
hombre es tal, porque la sociedad lo ha hecho así y mientras mejor
conocemos los procesos de formación de la personalidad humana,
tanto más comprobamos el papel fundamental que la sociedad ha
desempeñado en su desarrollo" (Modarse, Elementos de sociología, pág. 12.).

2.10. Sociedad y Política


"Somos ya muy viejos cuando nacemos", dijo, Anatole France. Existe
un mundo cultural, íntimamente ligado al mundo de la naturaleza, que
vive y muere con el hombre, que se viene formando en el transcurrir de
los siglos en un continuo proceso de adaptación y cooperación, y que
se rige por sus propias teorías y principios, diferentes al indestructible
mundo de las cosas naturales. El mundo construido por los seres
humanos es un legado muy valioso de nuestros antecesores, fruto de
la inteligencia y del trabajo de las comunidades, en una lucha
interminable por su propio mantenimiento y preservación.

Como todos los términos de las ciencias sociales, el concepto de


sociedad se nos presenta ambiguo, es decir, susceptible de variadas
significaciones. Si la cultura es una elaboración y formación humanas,
la sociedad no es privativa del hombre, porque hay otros seres que
viven en comunidades gobernados por principios de sociabilidad, pero
son grupos estables e inalterables en la proyección de sus funciones y
creaciones. El hombre, por el contrario, es proteico y su inteligencia le

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Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

permite evolucionar con notable variedad e intensidad. La vida social


es continuada y actuante, creadora de complejas relaciones sociales.

En su acepción más general, el concepto de sociología parte de la


naturaleza gregaria del hombre como hecho o fenómeno. Esta
característica fue señalada por Aristóteles, cuando afirmó que el
hombre es un animal social. En este sentido la sociedad aparece como
un conjunto de seres humanos que se proponen la realización de todos
los fines que imponen la convivencia por medios comunes.

Considerando el concepto de sociedad en su sentido restringido,


aparece como una determinada entidad, resultado de esa interacción
humana que adopta las formas más disímbolas y una actitud
consciente y libre del hombre para gobernar sus actos.

La sociedad, como entidad original, es un grupo de seres humanos que


cooperan al cumplimiento de sus fines esenciales, como su propia
conservación, existencia o permanencia y su perpetuación. Este
concepto incluye la continuidad de un complejo de relaciones de
asociación, que dan origen a la compensación de los tipos humanos.
Hay, además, un elemento territorial, que es el asiento físico en el cual
se desarrollan los procesos o relaciones sociales.

El hombre se distingue de los demás seres del planeta por estar


provisto de elementos psicológicos que le permiten la construcción, el
mantenimiento y la transmisión de una cultura. Por eso se ha dicho que
el hombre es un símbolo y se mueve en un bosque de símbolos. Hay
una relación directa entre las necesidades humanas y la inteligencia.
La primera es el estímulo para la integración de la sociedad; la
segunda, construye la cultura. El compartir una cultura es la
característica de la sociedad. "Cuando usamos la palabra cultura en
sentido general, dice, Biesanz, no en el específico, nos referimos a la
porción de la conducta humana que se aprende, la parte del medio
ambiente que ha sido hecha por el hombre".

La necesidad de reproducción engendra la familia, como la necesidad


de alimentarse origina la economía. Otros factores vitales contribuyen a

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Sociedad y Estado

fortalecer las formas sociales que van creando sus propias estructuras.

La sociología ha precisado que el elemento social es el grupo y no el


individuo. La cultura es obra de la interacción de los grupos que
muestran en todas partes, ciertas similitudes, frente a la diversidad de
las conductas humanas. Esto se debe a que el hombre es sumamente
flexible y adaptable; sus necesidades fundamentales pueden
satisfacerse de muchos modos. Una vez atendidas sus necesidades
primarias, le queda al hombre un gran sobrante de energía creadora y
de inteligencia.

Las cosas materiales no son de ningún modo parte de la cultura, sino


que son productos o adjuntos de la conducta cultural. La cultura es
esencialmente inmaterial, es conducta socialmente adquirida por medio
de símbolos, y se transmite por medio de conceptos y juicios: Cada
cultura tiende a ordenar la posición del individuo en el mundo que la
rodea, cosmos, sociedad, grupo, familia, naturaleza. Toda clase está
subordinada a un constante proceso de cambio.

Gustavo Radbruch, señala que "La cultura no es la estatua caída, rota,


tirada al suelo; la ciencia no es el libro empolvado de una biblioteca, la
virtud no es la piedra labrada de un templo; por el contrario, afirma, que
el conocimiento, la ciencia, la sabiduría, la justicia, la verdad, se
inscriben radicalmente en el alma humana personal, en el fondo del
espíritu humano viven y de él toman su fuerza creadora”.

La cultura del hombre le sirve a éste de tres modos: adapta al hombre


como especie biológica a su medio ambiente; le suministra al individuo
ajustes ya dispuestos a su medio ambiente natural, a sus semejantes, y
a sus propias necesidades e impulsos biológicos y psicológicos; y
asegura la unidad y supervivencia del grupo social.

Son esas expresiones de la cultura las que construyen el Derecho, en


tanto que la vida se desenvuelve en una variedad infinita de
manifestaciones, dominadas por el sentido jurídico. La vida social está
sometida a una diversidad de normas que responden a propósitos
diversos: costumbre, morales, religiosos, etiquetas sociales,

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Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

convenciones sociales, hasta las normas estatales, esto es, las leyes.

Con el Derecho (entendido en sentido general, normas morales


religiosas, costumbre y otros) nace el Estado, pues son fenómenos
coetáneos. La historia demuestra que los humanos se presentan en su
desarrollo evolutivo en grupos humanos vinculados políticamente en
. Durante el desarrollo de esta obra, pondremos de manifiesto la
importancia histórica y actual de la administración pública, como
culminación formas muy elementales, en las que la presencia del
Derecho va siendo inevitable, desde las formas más primitivas, hasta
llegar al Estado moderno, que es la culminación institucional del
Derecho regida a través de las leyes.

Autoridad y poder surgen de las necesidades mismas de la vida social.


Autoridad viene de “autor” que es el que inventa y dirige. El fenómeno
jurídico comienza a vincularse estrictamente con los fenómenos
políticos, es decir, con aquellos fenómenos que se relacionan con
la integración y con el funcionamiento de los órganos
autoritariosde un largo proceso de perfeccionamiento de las
instituciones públicas dentro de los estados modernos.
Describiendo magistralmente este proceso evolutivo de las
funciones que hoy integran, el Estado moderno, nos dice, Jellinek.

"La situación central de estas cuestiones corresponde a la


administración. Ha habido grandes épocas en la historia: en las que
la legislación era completamente desconocida, ha sido preciso un
amplio desarrollo en la cultura para que aparezca, junto al Derecho
consuetudinario, el Derecho legislado. Aún hoy la legislación es
una función intermitente. Otro tanto acontece con las decisiones
judiciales. En la evolución social, pueden igualmente hallarse largos
períodos en los que en ninguna circunstancia ha necesitado el juez
mostrar su actividad. Pero la administración, que contiene en sí ya al
gobierno, necesita siempre ser ejercida. Sin ella el Estado no podría
existir ni un momento. Se puede concebir un Estado despótico sin
leyes ni jueces, pero un Estado sin administración sería la anarquía. La
administración, por lo tanto, es la función más comprensiva. Toda
preparación de las leyes le compete a ella, la actividad del juez ella

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Sociedad y Estado

la apoya, y, por último, ella es la que asegura la ejecución de las


decisiones judiciales. Aun históricamente, se muestra la
administración como la función fundamental, pues la legislación va
unida en un principio a ella. Más tarde se la separa, y la actividad
jurisdiccional, limitada en su comienzo a una acción insignificante,
alcanza con el proceso de la evolución del Estado un campo de
actividad cada vez más amplio. Por eso puede designarse como
administración toda la actividad del Estado que queda, una vez
separada la legislación y la actividad jurisdiccional. En esta misma
posibilidad de su limitación negativa se muestra la significación
que tiene el Estado. Sólo la administración es susceptible a ser
explicada por la mera oposición a las demás actividades y órdenes
del Estado".

2.11. Estado, justicia y moralidad


El Estado aparece, al cabo de una larga evolución corno un orden de
convivencia de la sociedad políticamente organizada, en una institución
o ente público superior, soberano y coactivo.

Hemos comprobado que la explicación nominal, no es suficiente para


conceptuar al Estado, ya que son tan numerosas las organizaciones e
instituciones políticas y limitado el sentido de ellas, no nos ofrecerán
una base segura a nuestra especulación.

Como el concepto de justicia individual o particular resulta insuficiente,


ha surgido la necesidad de enfrentar a esa justicia otra justicia que
trasciende lo individual o un principio de igualdad y la reconoce y
entrega a una comunidad, es entonces cuando hablamos de una
justicia social.

La justicia se apoya en el bien común y sitúa al individuo con sus


deberes frente a una sociedad.

Desde luego, la justicia común no es la justicia social, no porque sean


dos tipos de justicia, sino exclusivamente porque no debe haber otra
justicia, que la justicia social. Volver al criterio aristotélico de que la
justicia distributiva es una justicia propia de la sociedad política.

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Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

El legislador puede o no acertar en una ley el concepto de la justicia


social cuando antepone el derecho de una comunidad a un derecho
individual. La justicia social parte de la verdadera naturaleza del grupo
humano. La sabiduría legislativa consiste en armonizar estos factores
sociales e individuales, que hoy luchan por una sociedad diferente.

Platón afirmó en el libro cuarto de La República que la justicia es una


virtud que mantiene a cada uno en los límites del deber, en tanto que
para Aristóteles en su Ética de Nicómaco, V, Cap. I, la justicia es un
hábito por el cual los hombres son aptos para obrar justamente,
además, como una virtud que sostiene a los demás.

Repetimos proverbialmente los abogados el concepto de Ulpiano que


considera a la justicia como la voluntad constante y perpetua de dar a
cada cual su derecho, en tanto que en las Siete Partidas la justicia es
"holgada virtud que dará siempre en las voluntades de los hombres
justos y comparte a cada uno su derecho igualmente”.

La naturaleza del hombre y la sociedad imponen ciertos principios


necesarios para mantener la convivencia, ciertos ajustes sin los cuales
no es posible la vida social. La justicia tiene un sentido proporcional
que sólo a una sociedad organizada políticamente le es dado
reconocer. Aquello que reclamamos y aquello que se nos puede dar sin
perjuicio de otro o de la comunidad.

Nada más profundo que el Salmo 72, Vers. 1: "Oh Dios, da tus juicios
al Rey. Y tu justicia al hijo del rey". Y cada uno de los siguientes y
maravillosos versículos son un verdadero tratado de justicia. "Y como
el rocío (que destila sobre la tierra) Florecerá en sus días la justicia".

Ya situados en el mundo moderno Emil Brunner en su libro La Justicia


(UNA, pág. 15), afirma: "Durante casi dos milenios, el pensamiento
jurídico occidental fue inspirado y determinado por aquella idea de
justicia de la antigüedad cristiana, y por el 'derecho natural cristiano'. El
sentimiento jurídico originario e inmediato halló en aquella idea una
expresión intelectual correspondiente y adecuada. A primera vista,
parece que lo más hacedero y fácil sería volver a aquella idea. Sin

18
Sociedad y Estado

embargo, no podemos realizar ese retorno pura y simplemente, sin


más, porque aquella idea no constituye una magnitud unívoca".

Asistimos, por lo tanto, a una decadencia de la idea occidental de


justicia. ¿Pueden los seres humanos formular su aportación para un
nuevo concepto de la justicia como base del orden social? Los
comunistas rusos o los comunistas chinos pretenden tener su propia
explicación del sentido de la justicia.

Más el Estado democrático se escuda en un concepto general y


ambiguo de justicia social. Ello nos lleva al mismo planteamiento de
Brunner: "¿Cuáles son los fundamentos sobre los cuales se deberá
edificar de nuevo? ¿Dónde está la idea de justicia, que es la única que
hará posible una tal construcción nueva? Esta cuestión no es
simplemente una de las cuestiones con que nos encontramos hoy en
día, sino que es por antonomasia la cuestión del presente. Hay algo
que resulta claro; no es posible la nueva edificación tomando como
base el principio de que la justicia sea algo relativo. Así como no se
puede construir una casa sobre un terreno pantanoso, tampoco se
puede construir un orden social justo tomando como base la tesis de
que la justicia sea algo relativo. Con una medida que constantemente
varíe no se puede medir nada. Cierto que todo lo que los hombres
pueden producir en materia de ordenaciones sociales será sólo
relativamente justo. Pero tal orden relativamente justo será posible, tan
sólo si nos orientamos hacia una idea de la justicia absoluta, si
medimos lo que edificamos mediante la plomada de la justicia divina.

Cuando la conciencia humana se serene y los hombres usen la


inteligencia creadora, no para destruirse, sino para construir un mundo
mejor, la idea de justicia social habrá de revisarse para darle un
contenido nuevo, una significación más de acuerdo con la realidad del
mundo.

No serán congresos de filósofos ni de hombres de ciencia los que


afronten esta lucha por la justicia nueva, ellos serán asesores de
asambleas universales de legisladores, que señalarán la ruta del futuro
de la humanidad. La justicia no habrá de arrancarla a la historia, ella

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será el aspecto grotesco del problema del hombre que tendrá que
definir su recorrido hasta que el Sol se canse. La justicia yace en lo
más profundo y delicado de la vida de los pueblos, y es el fruto de sus
sentimientos más nobles.

2.12. Los orígenes del Estado


El tema del origen del Estado no apasiona en la actualidad a los
estudiosos de esta materia como en los siglos pasados. El origen del
Estado aparece como una cuestión oscura y de difícil determinación
por los escasos elementos originales de que se dispone y que se
sustituyen por hipótesis, teorías o supuestos.

Autores como Marcel de la Bigne de Villeneuve (Traité général de


l'Etat, Sirey, t. 1, pág. 37), afirma que sin darle una importancia
exclusiva como en el siglo XVIII, sí considera que ella no es
despreciable y que la solución no es indiferente a la determinación del
papel exacto del poder estático.

Por su parte Hans Kelsen (Teoría General del Estado, Ed. Labor, págs.
27 y sgs.), afirma que "…una vez conocido el Estado como ideología
social específica, el problema capital de la llamada sociología o teoría
social del Estado, la cuestión acerca del 'origen del Estado' se divide
en dos problemas metódicamente distintos. Por de pronto, se presenta
la cuestión antes indicada acerca de las condiciones naturales del
nacimiento de aquellos actos psíquicos que tienen por contenido la
específica ideología del Estado; hasta ahora no existe un intento serio
de solución a esta cuestión, en torno a la cual se han emitido los juicios
más vulgares y los tópicos más vagos. Apenas se ha llegado a
establecer que el nacimiento del Estado hallase condicionado por la
coexistencia permanente de una amplia multitud de hombres; con esto
se indica, sin embargo, la condición natural de origen de toda ideología
social, de diferenciación superior, pero en modo alguno la propia del
Estado. Hasta ahora no se ha acertado en la empresa de descubrir las
condiciones específicas del Estado".

Y continúa el mismo autor: "un modo diferente de plantear el problema


es cuando se tiende no a averiguar las condiciones de nacimiento de

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Sociedad y Estado

los actos que contienen la ideología del Estado, sino a descubrir una
evolución dentro de la esfera ideológica misma. El sentido de esta
cuestión se determina así: ¿Cómo se convierte la ideología social en
general, en una ideología estatal específica? ¿Cómo de una situación
que es ya social, pero que no es aún estatal, cómo de un orden social,
pero aún no estatal, surgen una situación y un orden estatales? Y se
reconoce que lo específico de este orden estatal radica en su carácter
coactivo (cumplimiento forzoso); si se admite que el Estado es, en lo
esencial, un aparato de coacción; es decir, si se reconoce que el orden
estatal es un orden regulador de la coacción, un orden que prescribe
que en el caso de que un hombre realice un hecho socialmente
dañoso, otro hombre realice en contra suya un acto coactivo, con
objeto de evitar en lo posible la comisión de tales hechos, entonces la
cuestión en torno al origen del Estado se transforma en la cuestión del
origen de un orden dotado de este específico carácter técnico social".

3. Síntesis: De las Teorías sobre el origen del Estado


Con las limitaciones que los autores mencionados señalan acerca del
origen del Estado, algunos autores como De la Bigne de Villeneuve
(ob. cit., pág. 38), consideran que es posible reducir a cuatro grupos las
teorías del origen del Estado. Otros autores se extienden a siete
grupos, a saber:

a) Las teorías teológicas u origen divino del Estado;


b) Teoría del origen familiar del Estado;
c) Las teorías naturalistas;
d) Teorías del origen violento del Estado;
e) Teorías del origen convencional del Estado, del pacto social o
voluntarista;
f) Teoría ético espiritual;
g) Teoría de la constitución histórica, espontánea y necesaria del
Estado.

3.1. Las teorías teológicas u origen divino del Estado


Estas doctrinas fundamentan el origen del Estado en un ente
sobrenatural, esto es, creado por Dios. La divinidad ha creado el poder
político.

21
Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

La doctrina se manifiesta en diversos pueblos de la Tierra, con sus


tradiciones teocráticas, como los pueblos judeocristianos. San Pablo en
la Epístola de los Romanos, capítulo XIII, versículo I, afirma: "…no hay
potestad que no venga de Dios y todas las que existen son ordenadas
por Dios".

Todas estas doctrinas se apoyan en la fe que es una virtud teologal por


la que nuestro intelecto está dispuesto a asentir firmemente a todas las
verdades reveladas. Para San Pablo, Hebreos XI, I, "…la fe es la
sustancia de nuestras esperanzas, que nos convence de las cosas que
no podemos ver".

La teología especulativa ha establecido el origen mediato del Estado,


teniendo a Dios como su causa eficiente; y el origen inmediato del
Estado como obra del hombre.

3.2. Teoría del origen familiar del Estado


Para esta teoría el elemento social es sin duda el grupo. La historia no
es otra cosa que la formación de grupos desarrollados en un complejo
movimiento sinérgico creador de organizaciones, estructuras y nuevas
formas sociales.

La necesidad de reproducirse crea la familia y establece los vínculos


de sangre de los primeros grupos. "La familia, dijo Bodino, es la
verdadera fuente y el origen de toda República y miembro principal de
ella". A esta tesis se agrega la teoría patriarcal de Filmer, la teoría del
matriarcado y otras formas que describen la naturaleza de la familia o
familias originales.

Se reconoce que la familia es el núcleo primitivo, más se asignan otros


fundamentos al origen del Estado.

Las teorías en torno a los orígenes de la sociedad son muy


discrepantes en cuanto se nos han ofrecido diferentes cuadros del
desenvolvimiento de los grupos primitivos.

22
Sociedad y Estado

Las teorías patriarcales toman como base al paterfamilias como centro


de las actividades del grupo primitivo. Son los diferentes grupos
familiares los que acaban por constituir la sociedad bajo la dirección o
guía del jefe de familia, encargado de proteger a la comunidad.

Las teorías matriarcales se nos ofrecen en una notable variedad de


organizaciones desde las etapas rudimentarias de la promiscuidad
inicial hasta las organizaciones en que el elemento constante del grupo
es la madre. Parentesco y sucesión derivan de los lazos evidentes de
la relación maternal. Los hijos durante un largo proceso social se
mantienen unidos a la madre, sin la cual sin duda, hubieran
sucumbido. En resumen la sociedad primitiva se origina en la familia.
Además de los lazos de parentesco, la sociabilidad es un factor
determinante. Así nace el principio de autoridad, y es la conciencia la
que origina la sociedad política primitiva. Es de particular interés el
momento en que el grupo nómada se transforma en un grupo
sedentario, de todas maneras la familia es un factor de agrupación
política. Así lo han afirmado Moret y Davy, Posadas e Ihering. A partir
de esos momentos surgen los grupos sociales que se proyectan hasta
nuestros días. Autoridad y poder dan paso al Gobierno y
posteriormente al Estado.

3.3. Las teorías naturalistas


Estas teorías parten de la idea de que el Estado es un fenómeno
natural o sujeto a fuerzas derivadas de la naturaleza.

Las fuerzas aludidas son de carácter geográfico, topográfico,


hidráulico, hasta las fuerzas sociales, económicas, políticas. Las
luchas sociales, racistas y de clases comprenden la estructura de esas
formas que generan finalmente al Estado.

Dentro de estas opiniones hemos de comprender las teorías o


doctrinas sobre el origen violento del Estado que examinamos a
continuación.

3.4. Teorías del origen violento del Estado


Numerosos autores admiten como causas de formación de las formas

23
Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

políticas, la violencia. Uno de los autores que expresa esta teoría es


Oppenheimer en su libro L'Etat. "El Estado encuentra su nacimiento en
la guerra. El Estado es, enteramente en cuanto a su origen, y casi
enteramente en cuanto a su naturaleza durante los primeros estadios
de su existencia, una organización social impuesta por un grupo
vencedor a su grupo vencido, organización cuyo único fin es de
reglamentar la dominación del primero sobre el segundo defendiendo
su autoridad contra las revueltas interiores y los ataques exteriores. Y
esta dominación no ha tenido jamás otro fin que la explotación
económica del vencido por el vencedor".

Otro como Gumplowicz afirma que la civilización es consecuencia de


las luchas sociales. Todos los Estados han surgido de conquistas
sangrientas; sabemos que el Estado es la condición sine qua non de la
prosperidad, del desarrollo de la civilización.

Un aspecto más general de las tesis de la violencia que explican al


Estado, como la síntesis de los grupos humanos que han mantenido un
proceso de lucha social, es la teoría de la lucha de clases de Carlos
Marx.

Los trabajos de Morgan anteceden a estas doctrinas. Este autor había


descubierto a su modo, en América, la teoría materialista de las
historias, que cuarenta años antes descubrió Marx; y en su paralelo,
entre la barbarie y la civilización había ido a dar los mismos resultados
esenciales que Marx.

Por su parte Federico Engels inspirado en Morgan examina los


caracteres de la sociedad antigua y afirma: "Siendo la base de la
civilización la explotación de una clase por otra, su desarrollo es
constantemente antinómico. Cada progreso de la producción es al
mismo tiempo un retroceso para la clase oprimida, es decir, para la
mayoría. Cada beneficio para unos es por necesidad un perjuicio para
otros; cada grado de emancipación conseguido por una clase es un
nuevo elemento de opresión para otra. La prueba más inconcusa de
esto nos la da la introducción del maquinismo, cuyos efectos conoce
hoy el mundo externo. Y si, como hemos visto, entre los bárbaros

24
Sociedad y Estado

apenas puede establecerse la diferencia entre los derechos y los


deberes, la civilización señala entre las dos una diferencia y un
contraste que saltan a la vista del hombre menos inteligente, en el
sentido de que da casi todos los derechos a una clase y casi todos los
deberes a la otra". F. Engels, Origen de la familia, la propiedad privada y el
Estado, Ed. Mexicanos Unidos, S. A., pág. 204.

Las formas estatales de este siglo XXI son variadas y contradictorias: el


Estado del subdesarrollo, el Estado autoritario y Estado totalitario; el
Estado dictatorial, el Estado militar, Estado monárquico, democrático
hasta social y democrático.

2.5. Teorías del origen convencional del Estado, del pacto social o
voluntarista
La idea de un contrato o convención ha dominado en numerosos
autores. Se distingue entre el contrato social como generador de la
sociedad civil y el contrato político que dio origen a las formas políticas
y posteriormente al Estado.

Dice Juan Jacobo Rousseau en El contrato social (Cap. 1, 1, Cap. IV) :


"Antes de examinar el acto por el cual un pueblo elige a un rey, sería
bueno de examinar el acto por el cual un pueblo es un pueblo; porque
ese acto siendo necesariamente anterior al otro, es el verdadero
fundamento de la sociedad".

La base de la exposición de Rousseau es el estado de naturaleza. El


estado de naturaleza es el estado salvaje; los hombres viven desde
luego felices, porque ellos poseen dos cualidades, la libertad de
aceptar y la de rehusar y la facultad de perfeccionarse. El autor trata de
demostrar que la propiedad privada y la invención de la metalurgia y de
la agricultura han civilizado y perdido al género humano rompiendo la
igualdad primitiva.

Un horrible estado de guerra coloca a los seres humanos sin más


norma que la violencia y la injusticia. Es necesario por lo tanto, pensar
en un poder supremo que gobierne a los grupos antagónicos. Para
crear este orden fue menester que el hombre aportara una parte de su
libertad.

25
Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

La esencia del contrato social radica en que cada uno de nosotros


pone en común su persona y todo su poder bajo la suprema dirección
de la voluntad general y nosotros recibimos a cada miembro como
parte indivisible del todo.

Para Rousseau la voluntad justifica al Estado, más no proporciona


datos sobre su origen. El hombre pasa de un estado de naturaleza a
una forma social voluntaria. El hombre ha nacido libre y sin embargo en
la actualidad vive encadenado, sujeto a un orden estatal.

La explicación se encuentra en el pacto social, que supone la


enajenación total de cada asociado con todos sus derechos a la
comunidad. La libertad natural se sustituye por la libertad civil que es
garantizada por el Estado.

El hombre cede su libertad natural al Estado. La voluntad no es el


origen del Estado, sino su justificación. Los hombres entregan una
parte de su libertad natural a cambio de una comunidad superior.

2.6. Teoría ético espiritual


La naturaleza racional y libre del hombre es la causa del Estado. Sólo
la vida social impulsada por la inteligencia humana es capaz de
alcanzar las formas políticas. Tal fue la explicación de Aristóteles al
hablarnos del zoon politicon. La sociabilidad lleva a la perfección. La
sociedad para subsistir requiere de una organización y del poder
coactivo. Ideas que perduran hasta el pensamiento medieval y
moderno.

2.7. Teoría de la constitución histórica, espontánea y necesaria


del Estado
No hay duda de que la evolución de las sociedades primitivas acusa
algunos rasgos de uniformidad, respondiendo a necesidades idénticas
y a complejos problemas sociales, que a pesar de su diversidad,
coinciden en formas y aspectos semejantes. No es un cuadro estático
de evolución, porque siendo la vida social tan compleja, a pesar de las
coincidencias señaladas los pueblos acusan evoluciones y regresiones
originadas por su propio desarrollo.

26
Sociedad y Estado

El profesor Groppali nos dice: "Ahora bien, ha sido a través del estudio
comparativo del curso de la evolución de los grupos sociales, que se
han podido advertir paralelismos y constantes, de modo que, sin
prescindir de alguna diversidad y de una mayor o menor rapidez de
desenvolvimiento, se puede afirmar con cierta seguridad que los tipos
de la evolución social se pueden reducir a los siguientes en orden
progresivo: a) La horda primitiva en relaciones sociales promiscuas,
con estructura diferenciada, y con indistintas funciones de defensa y de
protección; b) La gens o clan, agregado compuesto de individuos
ligados por vínculos de un parentesco imaginario o ficticio, fundado
sobre la creencia de derivar de un mismo tótem; c) Tribus compuestas
de familias en las que el parentesco en línea recta y de base
preferentemente materna ha tomado una forma distinta; d) La familia
patriarcal, de quien la familia romana representa el ejemplo más
característico; la familia paterna como se encuentra entre los pueblos
de la Europa moderna".

Un último grupo de teorías se refieren a la constitución espontánea y


necesaria del Estado. La sociedad es un fenómeno complejo, entre
cuyos aspectos más importantes está el sentido de los fenómenos
políticos que conducen a la creación del Estado. Las explicaciones
sobre el origen del Estado son consideraciones sociológicas.

El Estado es una creación colectiva que responde a numerosas


causas. Si el nacimiento de las sociedades civiles responde como
expresaba Platón a la necesidad de asociación, el nacimiento de las
organizaciones políticas, principalmente la comunidad política más
perfecta como es el Estado, responde a causas muy diversas.

Para poder situar en forma conveniente el problema del origen del


Estado, hemos de aludir, aunque en forma un tanto arbitraria, al
desarrollo o evolución de las formas políticas.

I. Nuestro punto de partida es no aludir a la edad incierta de la


humanidad, aquellos momentos en que el ser humano formaba parte
de agregaciones humanas unidas principalmente por el espíritu
gregario y el dominio de sus instintos naturales.

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Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

II. La segunda etapa se inicia de los pueblos pastores hasta la


integración de la agricultura, con las primeras formas políticas
rudimentarias: horda, clan, tribu, fratría, etc., de los clanes a los
imperios.
III. La tercera etapa comprende a los pueblos primitivos de la
antigüedad de China a Roma.
IV. La cuarta etapa bien puede denominarse los preludios del Estado
en el largo proceso de la Edad Media.
V. La quinta y última etapa es la etapa máxima que va del nacimiento
del Estado hasta la época actual, en estos aspectos principales:
a) El Estado nacional y patrimonial. Coincide con la formación de las
nacionalidades europeas. El Estado es patrimonio del monarca, el cual
lo transmite a sus herederos.
b) El Estado policía o Estado gendarme, fundado en los principios del
liberalismo. El gobernante no gobierna en nombre propio, sino que es
un órgano del Estado y asume una representación política discrecional
o reglada pero justificándose por la satisfacción del interés general.
c) El Estado de Derecho gobernado por el principio de que el
gobernante debe ser sometido al Derecho y los particulares encuentran
en la ley una limitación a la acción gubernamental y un reconocimiento
de un sistema de derechos que le brindan un amplio campo de acción.
En el Walfare State (Estado de bienestar) se alude a una organización
en la que el Estado se propone el control de la política social y
económica para subordinarla al bienestar general. La idea de bienestar
social tiende a la satisfacción de las necesidades más apremiantes de
una sociedad, de las cuales debe ser liberada, eliminando la opresión
económica que la domina y creando las infraestructuras que se
enfrentan a las condiciones reales de una comunidad, entre ellas el
reconocimiento de los derechos sociales (Véase la obra de Gurnard Myrdal,
El Estado del futuro, F.C.E., México.)
d) Las formas estatales del siglo anterior a éste, son variadas y
contradictorias: el Estado normal del subdesarrollo, el Estado
autoritario y Estado totalitario; el Estado dictatorial, el Estado militar y el
Estado monárquico.
e) El Estado de justicia social, de seguridad y de responsabilidad
pública. El Estado reconoce, por fin, que su misión no es la protección
exclusiva de los intereses particulares; por legítimos que ellos puedan
ser, los cuales en ningún caso deben interferir el interés general. La

28
Sociedad y Estado

sociedad debe considerarse en la unidad de sus problemas


fundamentales, dando oportunidad a todos y creando un régimen de
seguridad civilizado.

Esta evolución nos lleva a un problema de filosofía política resumido en


esta pregunta compleja: ¿Cuál debe ser la proyección del Estado en el
futuro? ¿Subsistirá el Estado democrático, una vez realizados los
necesarios y convenientes reajustes o será necesaria una
transformación política más radical? O finalmente: ¿El Estado es un
fenómeno social llamado a desaparecer como lo preconiza el
comunismo internacional?, la respuesta se generará en cada una de
las realidades nacionales.

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Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

TEMA 2

CONCEPTOS Y DEFINICIONES DEL ESTADO

4. ¿Qué es el Estado?

En el mundo de hoy es difícil encontrar, aun entre personas de escasa


cultura, quién no tenga en mente una noción, así sea muy vaga, de lo
que es el Estado, de lo que representa este ente en su vida, de lo que
de él puede esperar o puede temer cada cual. Su presencia en el
mundo real es un hecho evidente, que se hace sentir en todas las
actividades y en todos los momentos de la existencia, desde antes del
nacimiento hasta más allá de la muerte; puede decirse que todas las
acciones del hombre como ser social, aún las más íntimas o
individuales, están en una u otra forma, directa o indirectamente,
sometidas a regulaciones y controles estatales o, en última instancia, a
la vigilancia imperceptible del Estado. Su realidad resulta, pues,
evidente; lo sentimos gravitar sobre nosotros, a la vez que lo
estimamos necesario para el desarrollo de nuestra existencia. Sin
embargo, la idea que el común de las gentes tiene acerca de lo que es
el Estado, es más bien producto de la propia intuición que de una
comprensión exacta de lo que significa este ente. En efecto, la mayoría
de las personas identifican al Estado con alguno de los elementos que
lo constituyen: lo más corriente es que se lo identifique con el poder

30
Sociedad y Estado

público y más concretamente con uno de sus titulares: el gobierno. En


ello se piensa, cuando se dice, por ejemplo, "el Estado manda", "el
Estado prohíbe", "el Estado cobra impuestos". También se lo suele
confundir con el territorio, con el país, o con su componente humano,
con la nación.

4.1. Noción de Estado


Del Estado podrían citarse tantas definiciones cuantos autores han
estudiado este tema. En la mayor parte de ellas se encontrarán
coincidencias en cuanto se refiere a los elementos que lo constituyen.
Por el contrario, la diversidad de enfoques sobre su naturaleza o
finalidad, es notoria. PLATÓN lo concibió como un ente ideal;
ARISTÓTELES como una sociedad perfecta; HEGEL, SAVIGNY y los
románticos como un ser espiritual"; ROUSSEAU, como la asociación
política libremente fundada por los partícipes del contrato social; KANT,
como "reunión de hombres que viven bajo leyes jurídicas"; KELSEN lo
identifica como una "ordenación de la conducta humana”; CARRÉ DE
MALBERG como un conjunto de elementos heterogéneos; DUGUIT lo
define como "una agrupación humana fijada sobre un territorio
determinado, donde los más fuertes imponen su voluntad a los más
débiles"; BURDEAU, como "titular abstracto y permanente del poder,
cuyos gobernantes no son sino agentes de ejercicio esencialmente
pasajeros:" ESMEIN como "la personificación jurídica de la Nación";
FISCHBACH como "una situación de convivencia humana en la forma
más elevada". Para HAROLD J. LASKI, el Estado constituye una
sociedad de hombres unidos por el deseo de enriquecer la vida
colectiva. DEL VECCHIO lo define como “la unidad de un sistema
jurídico que tiene en sí mismo el propio centro autónomo y que está, en
consecuencia, provisto de la suprema cualidad de persona en sentido
jurídico”. BISCARETTI DI RUFFIA, por su parte, lo define como "ente
social que se forma cuando en un territorio determinado se organiza
jurídicamente en un pueblo que se somete a la voluntad de un
gobierno". Para MARX es un instrumento de dominación de clases;
para los anarquistas, en fin, es un obstáculo para la vida y la libertad
del hombre. BAKUNI decía que "el Estado es un inmenso cementerio
donde vienen a enterrarse todas las manifestaciones de la vida
individual". LENIN, por su parte, sostuvo que "ahí donde comienza el

31
Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

Estado termina la libertad". Mussolini, por el contrario, en el otro


extremo, afirmaba que "el Estado es el absoluto delante del cual los
individuos y los grupos no son sino lo relativo".

De tal diversidad de definiciones y de enfoques, puede deducirse la


extrema complejidad de la tarea de definir de manera certera la
naturaleza de este ente. No pareciera, pues, en principio, aconsejable
adoptar como definitiva alguna definición en particular, no obstante la
precisión y vigor del contenido de muchas de ellas, pues todas, sin
duda, encierran al menos una parte de verdad: Es evidente que el
Estado aparece como un ser espiritual a la vez que como agrupación
humana; que él es tanto un ente ordenador de la conducta, como un
titular abstracto y permanente del poder; que puede ser, en ciertas
circunstancias, un instrumento de dominación de clase o un obstáculo
para la libertad individual, como puede y debe ser también una
situación de convivencia en la forma más elevada.

De todas maneras nótese que en varias de estas definiciones que, a


título de ejemplo, hemos citado, sobre todo los de contenido jurídico,
se hace referencia a uno o a varios de los elementos constitutivos del
Estado, que más adelante habrán de estudiarse.

4.2. Estado en sentido amplio


En su acepción gramatical amplia Estado equivale, entre otros
conceptos, a “situación en que está una persona o cosa”. En su
acepción político-jurídica, el Estado también expresa la idea de una
situación, algo que permanece dentro del cambio: la manera de ser o
de estar políticamente. En un sentido amplio podríamos decir,
entonces, con PORRÚA PÉREZ, que Estado es la manera de ser o de
estar construida políticamente una comunidad humana. Pero si
examinamos la sociedad humana, como anota el tratadista mexicano,
encontramos que dentro del Estado existen otros grupos sociales; que
el hombre se relaciona con sus semejantes en asociaciones de distinto
orden como son la familia, la Iglesia, las corporaciones, los sindicatos,
los partidos políticos, las empresas privadas, etc. Todas estas
instituciones son grupos de hombres asociados. Pero el hombre,
además de pertenecer, con un fin específico, a una de estas

32
Sociedad y Estado

agrupaciones, forma parte también de varias de ellas a la vez:


simultáneamente puede ser miembro de una familia, seguidor de un
credo religioso, afiliado a un partido político, socio de una empresa o
miembro de un sindicato. Pero además, en vista de otro fin específico
más elevado, el hombre se asocia con sus semejantes y las diversas
agrupaciones de una misma sociedad se asocian entre sí, para
constituir un grupo social más amplio, cuyos objetivos son más
elevados y permanentes, al cual denominamos Estado. Las funciones
de esta agrupación, su naturaleza y sus fines tienen, características
diferentes de los otros grupos. Para formar esta asociación humana
más amplia, las relaciones que se establecen entre los hombres no son
ya exclusivamente de tipo personal o afectivo, económico, cultural,
científico, social o religioso, sino esencialmente político. Desde luego,
no es posible descartar el complejo de relaciones que entran en juego
en la estructuración del ente estatal. Consciente o inconscientemente,
los hombres agrupados bajo la forma estatal perciben que esa relación
no obedece exclusivamente a una situación política, sino que ella
implica, en alto grado, una comunidad de intereses económicos,
sociales, culturales y de otros órdenes. Por ejemplo religiosos, cuando
se trata de un Estado confesional; ideológico, cuando se trata de
Estados que profesan oficialmente determinado credo político. Pero la
relación por excelencia, de la cual surge el Estado, es la relación
política en su sentido más amplio.

Consecuentemente, el Estado puede ser comprendido, en un sentido


amplio mediante dos acepciones: como una estructura social y como
una estructura de poder. En el primer sentido se toman en
consideración los hechos que están en la base de su organización,
primordialmente los hechos sociales, las relaciones humanas. En este
sentido el Estado es objeto particular del estudio de la sociología y de
la teoría general del Estado; JELLINEK hace en su obra el análisis
profundo de la cuestión. En el segundo sentido, es decir como
estructura de poder, toman las relaciones de mando y obediencia
existentes entre gobernantes y gobernados dentro del Estado, así
como el vínculo jurídico que liga a todos sus componentes. Su estudio
en este último sentido, aunque también es objeto de la teoría general
del Estado, cae directamente dentro de la órbita de nuestro curso, ya

33
Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

que, como dijimos atrás, el derecho constitucional se ocupa


fundamentalmente de los aspectos jurídicos y políticos del ente estatal.

4.3. El nombre del Estado como organización política


El término "Estado", aplicado a la organización política de la sociedad,
es decir a ese conjunto que conforma una población, asentada sobre
un territorio determinado y sometida a un poder público soberano,
apenas empezó a ser utilizada en la época del Renacimiento y
generalizada en Europa entre los siglos XVI y XVII, coincidiendo con el
proceso de afianzamiento de los Estados-nación de la época moderna.
La expresión viene del latín status (situación) y fue referida, en este
caso, a la situación política en que se encontraba una determinada
sociedad organizada. A la utilización de ese término se llegó, entonces,
tras un largo proceso de evolución de las organizaciones políticas, que
hasta los inicios de la época moderna habían recibido diferentes
nombres genéricos: reinos, imperios, principados, repúblicas, ciudades.

Para comprender mejor el proceso de conformación del Estado


moderno, es importante, entonces, conocer la evolución que tuvo, a
través del tiempo, el nombre de las organizaciones políticas.

4.3.1. El nombre de la organización política en Grecia


Fue en Grecia donde se desarrolló, por primera vez, una organización
política que, en cierta forma, prefiguraba al Estado moderno dentro del
marco de la ciudad, a la cual se denominó polis. El vocablo
correspondía a la realidad política existente en esa época. El hecho
político griego tenía un ámbito territorial correspondiente a los límites
de la ciudad, de ahí que se emplee la palabra política para denominar
lo concerniente a esa comunidad social que es la polis. “Todas las
tendencias, todos los esfuerzos comunes de los helenos en la religión y
el derecho, las costumbres y la sociabilidad, el arte y la ciencia,
la propiedad y la agricultura, el comercio y la industria, convergen a la
noción de ciudad. Es en la ciudad solamente donde el hombre es un
ser jurídico; fuera de ella no hay ni seguridad, ni libertad, ni aun
humanidad. Él es un bárbaro y está sometido a una sumisión
incompatible con la idea del hombre”.

34
Sociedad y Estado

La ciencia del Estado entre los griegos se construyó, pues, sobre el


Estado-ciudad, o la ciudad-Estado, y nunca pudo llegar a comprender
el Estado como dotado de una grande extensión territorial. Un nombre
que exprese aquella relación en que se encuentra el territorio respecto
a los habitantes, no tuvo jamás significación entre los griegos".
Empero, más tarde, aparece un fenómeno político más amplio,
equivalente al concepto de comunidad, al cual llamaron to-koinón, que
literalmente significa comunidad.

4.3.2. El nombre de la organización política en Roma


En Roma, heredera directa de la teoría política griega, el fenómeno
político estuvo restringido, en los primeros tiempos, a la extensión
territorial de la ciudad. Se denomina civitas a la comunidad organizada
socialmente, término que también significa ciudad. Además, existió
entre los romanos un término para señalar la comunidad de intereses:
íca, que significa cosa común a todo el pueblo, comunidad de los
ciudadanos. Este vocablo república se siguió utilizando durante
muchos siglos para denominar la comunidad política en sentido
general.

Con la expansión del imperio romano, esas expresiones no se


modificaron; se siguió utilizando el término civitas, siendo así que
solamente era titular de derechos plenos el cives romanos, el
ciudadano romano. Posteriormente, con la conquista del mundo
conocido entonces, surgió otra expresión para calificar la nueva
situación de dominio político sobre el extenso territorio
conquistado: la de imperium, noción a la cual nos referimos más
adelante. Después del Edicto de Caracalla, que hizo ciudadanos a los
habitantes de la campiña, desplazando hacia todo el territorio
adyacente a las ciudades el concepto de Estado, con fines militares,
comenzó a transformarse el término tomando otro sentido más
amplio".

4.3.3. El nombre de la organización política en la Edad Media


Ya hemos mencionado cómo las invasiones bárbaras, durante la alta
Edad Media, acarrearon la disolución de la institución estatal,
encarnada en el Imperio. Sin embargo, la idea de Estado subsistió,

35
Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

particularmente en la mente de la clerecía, conocedora de los autores


de la Antigüedad clásica, y en la de los príncipes y gobernantes. Poco
a poco, especialmente, entre los siglos XIII y XVI, fueron emergiendo
del seno del feudalismo los trazos fundamentales del Estado moderno.
Más adelante habremos de referirnos a ese proceso. Durante la Edad
Media el vocablo latino imperium es traducido a diversas lenguas
indoeuropeas: empire en francés, imperio en castellano, empire en
inglés, etc. Igualmente la palabra regnum se traduce al alemán como
reich, al francés como royaume, al castellano como reino. Todas estas
expresiones dan la idea común de dominación, de imperio, por parte de
un príncipe. Pero no hay una clara diferenciación, o mejor, una
identificación entre comunidad política y unidad territorial. En Alemania
se reservó la expresión reich al poder imperial, distinguiéndola de land
(actualmente estado), aplicada a los distintos territorios del reino, con lo
cual se identificaba el elemento territorial con el Estado mismo.

4.3.4. Origen de la palabra Estado en sentido moderno


En el Renacimiento se planteó en Italia el problema de distinguir la
totalidad del territorio de las diversas comunidades políticas
particulares en que se encontraba dividida la península itálica. Cada
reino constituía una citá. Surgió entonces, en el lenguaje jurídico
italiano, el término Stato (de status), sinónimo de situación, que fue
unido primero al nombre de la ciudad, v. gr.:Stato Firenze. De esta
manera, se encontró un término que podría aplicarse a cualquier
fenómeno político, sin consideración a la forma que revistiera -
monarquía o república -, O a su tamaño - Estado grande o pequeño -.
La primera utilización del término en su sentido moderno atribuye a
MAQUIAVELO, al introducir en la literatura política de la época, a
través de El Príncipe (1515) la expresión "lo stato", para designar el
nuevo status político.

MAQUlAVELO comienza su obra capital con estas palabras: "Todos los


Estados, todos los dominios que han tenido y tienen imperio sobre los
hombres, han sido y son repúblicas o principados". Él analiza también
en su obra y de manera bastante precisa, lo que llamó ragione di stato
de la Edad Moderna. El tratadista G. SABlNE comenta: "Más que
ningún otro pensador político, fue MAQUIAVELO el creador del

36
Sociedad y Estado

significado que ha atribuido al Estado en el pensamiento político


moderno. Aun la propia palabra "Estado", empleada para
designar al cuerpo político soberano, parece haberse difundido en los
idiomas modernos en gran parte debido a sus escritos. El Estado como
una fuerza organizada, suprema en su propio territorio y que persigue
una política consciente de engrandecimiento en sus relaciones con
otros Estados, se convirtió no sólo en la típica institución política
moderna, sino en la institución cada vez más poderosa de la sociedad
moderna". En efecto, el término stato se tradujo luego en el sentido
utilizado por MAQUIAVELO, al alemán (Staat), al francés (État), al
español (Estado), al inglés (State), al portugués (Estado) y a las demás
lenguas romances. La expresión en el lenguaje político sirvió para
designar un fenómeno totalmente nuevo, como lo explica HERMAN
HELLER: "A partir del Renacimiento y en el continente europeo, las
poliarquías que hasta entonces tenían un carácter impreciso en lo
territorial y cuya coherencia era débil e intermitente, se convierten en
unidades de poder continuas y reciamente organizadas, con un sólo
ejército que era además permanente, una única y competente jerarquía
de funcionarios y un orden jurídico unitario, imponiendo además a los
súbditos el deber de obediencia con carácter general. A consecuencia
de la concentración de los instrumentos de mando militares,
burocráticos y económicos, en una unidad de acción política -fenómeno
que se produce primeramente en el norte de Italia debido al más
temprano desarrollo que alcanza allí la economía monetaria- surge
aquel monismo de poder, relativamente estático, que diferencia, de
manera característica al Estado de la Edad Moderna del territorio
medieval".

En la anterior explicación, HELLER describe de manera concisa lo que


representó, durante el período comprendido entre el final de la Edad
Media y la época del Renacimiento, el tránsito del feudalismo al Estado
moderno, como fenómeno de desplazamiento de ciertas funciones o
actividades fundamentales para la vida de la comunidad, de las manos
de los señores a las de un poder unificado. El jurista alemán anota
cómo los grupos políticos de la Edad Media eran defendidos,
dominados y administrados por personas a las que pertenecían, como
propiedad, los medios administrativos, ya fuesen de carácter militar,

37
Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

judicial o de otra clase, tales como los armamentos, los medios de


transporte, las grandes edificaciones, etc. Gracias a que la base de su
poder era la propiedad feudal hereditaria, les fue posible a los
feudatarios llevar a cabo la gestión privada de la administración militar
y civil, y también alcanzar la independencia económica respecto de su
señor feudal. La evolución que se llevó a cabo, en el aspecto
organizativo, hacia el Estado moderno, consistió -como anota HELLER-
en que los medios reales de autoridad y administración, que eran
posesión privada, se convierten en propiedad pública, y el poder de
mando que se venía ejerciendo como un derecho del sujeto se
expropia primero en beneficio del príncipe absoluto, y luego del Estado.

Durante los siglos XVI y XVII la expresión penetró en el lenguaje


político alemán y francés. BODIN emplea en Los seis libros de la
república (1576) por primera vez la palabra república como sinónimo de
Estado, reservando esta para designar formas concretas de
organización, tales como el Estado aristocrático, que llama, utilizando
un vocablo arcaico, éstat aristocratique, en contraposición al Estado
popular o democrático, éstat populaire. Años después, LOYSEAU
habla de état en el mismo sentido amplio de MAQUIAVELO. En el siglo
XVI se habla de Estado para distinguir esta forma de organización de
los demás fenómenos particulares como la Iglesia, el ejército, la
nobleza. Es, más tarde, en el siglo XVIII, cuando se aplicó para
designar la comunidad política aunque en un doble sentido: general,
por comunidad política en sí misma y, particular, para designar una
demarcación territorial dentro del Estado.

Esta dualidad de significado aún subsiste en nuestro tiempo en los


Estados federales, en los cuales se designa de igual manera los
territorios miembros del Estado central. En sentido científico estricto,
como dice PORRÚA PÉREZ, no debería usarse esta denominación
sino la de entidades federativas, pues la palabra Estado debe
reservarse para denominar a la organización política a la que
corresponde la soberanía plena, que es el Estado federal". Pero esta
impropiedad en el uso de la palabra Estado no se limita al caso que
acabamos de comentar, sino que es generalizada, al confundirla, en el
lenguaje ordinario, con otras expresiones que, equivocadamente, se

38
Sociedad y Estado

consideran sinónimos.

5. Definiciones del Estado

Estudiada la noción de Estado partiendo de los diversos enfoques que


sobre su naturaleza se han dado, examinado el origen del nombre de la
organización política y el alcance de su significado moderno, y
analizado su aspecto jurídico-político predominante como
institucionalización del poder, podemos señalar, en conclusión, que el
término Estado puede ser comprendido en tres sentidos diversos, cuya
distinción es útil establecer.

a) En sentido amplio, puede entenderse por Estado un


conglomerado social, política y jurídicamente constituido, asentado
sobre un territorio determinado, sometido a una autoridad que se
ejerce a través de sus propios órganos, y cuya soberanía es
reconocida por otros Estados. En este sentido
decimos, por ejemplo, que Colombia es un Estado, o que Francia es un
Estado.

En la anterior definición encontramos los elementos constitutivos del


Estado: a) Un "conglomerado social, política y jurídicamente
constituido", esto es la población; b) un territorio determinado, elemento
físico; c) una "autoridad que se ejerce a través de sus propios
órganos", es decir, el poder público soberano; y d) el reconocimiento de
la soberanía por otros Estados.

Esta definición es la que nos servirá en lo sucesivo para determinar


claramente el ente de cuyo estudio nos ocupamos en esta primera
parte. De ella puede deducirse que el Estado es un todo, una unidad
que comprende diversos elementos que concurren por igual en la
conformación de ese ente.

b) En sentido restringido, la expresión Estado equivale, dentro de


esa sociedad políticamente organizada, a los órganos que ejercen el
poder público, esto es los gobernantes en sentido amplio, o sea
quienes están investidos de autoridad sobre el conglomerado que

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Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

forma la Nación. En este sentido se habla, por ejemplo, de un Estado


intervencionista o de un Estado absolutista.
c) En sentido más restringido, la palabra Estado se asimila dentro
de la organización general de los poderes públicos, al poder central,
del cual emanan los demás; directa o indirectamente. Se habla,
entonces, de Estado central por oposición a las comunidades locales, a
los departamentos, provincias, regiones, organismos descentralizados,
etc.

A lo largo de esta obra, el término Estado se utilizará


fundamentalmente como ya dijimos, en su primer sentido, es decir, en
su sentido amplio, conforme lo hemos definido. La expresión en sus
otros dos sentidos, será tangencialmente empleada, cuando la
naturaleza del tema tratado lo exija para su mejor comprensión. Para
que la definición que hemos dado del Estado en su sentido amplio sea
mejor comprendida, es preciso examinar en seguida los elementos que
constituyen este ente, los cuales han quedado incluidos en esa
definición.

6. Elementos del Estado

La doctrina tradicional ha considerado que los elementos del Estado


son tres: la población, el territorio y el poder público o autoridad. Se
debe anotar que a este respecto ha habido también discrepancia entre
los autores, según el modo de considerarlos. En cuanto a los dos
primeros —población y territorio— puede decirse que hay unanimidad
en señalarlos como elementos básicos, aunque hay diferenciación en
la terminología empleada: algunos, por ejemplo, hablan de "pueblo" y
otros de "Nación", en lugar de "población". En ambos casos, como más
adelante se explicará, esos términos son inapropiados, ya que tanto la
palabra "pueblo" como la palabra "Nación" tienen significados muy
precisos en el derecho constitucional, que no corresponden al de
población como elemento del Estado. En cuanto al tercero, la
diferenciación va un poco más lejos: para algunos tratadistas, como
CARRÉ DE MALBERG, ese elemento es la potestad pública; para
BURDEAU es el consentimiento al poder; XIFRA lo denomina poder
autónomo; DUGUIT, distinción entre gobernantes y gobernados; otros

40
Sociedad y Estado

muchos lo denominan gobierno. A nuestro juicio el término poder


encierra la esencia de lo que se quiere considerar como tercer
elemento del Estado, por lo cual creemos adecuado adoptarlo.

Además, es necesario tener en consideración otra diferenciación de


conceptos, en cuanto a que para muchos autores hay que agregar un
cuarto elemento a los tres de la doctrina tradicional. Así, para A.
HAURIOU, ese cuarto elemento seria el orden económico, social,
político y jurídico a cuya realización se dedica el poder. Para algunos
tratadistas italianos como GROPPALI, seguidos por PORRÚA PEREZ,
ese elemento sería el fin que persigue el Estado. Ambos conceptos
coinciden, pues, en señalar el fin del Estado, como elemento del
mismo, lo cual consideramos impreciso, ya que, a nuestro juicio, no
deben confundirse los elementos que componen un ser con el fin que
persigue. Por nuestra parte, estimamos que, en efecto, es necesario
incluir un cuarto elemento del Estado, sin el cual este ente no llega a
configurarse con la plenitud de sus atributos: el reconocimiento de su
soberanía por otros Estados.

6.1. Población
Efraín Polo Bernal, en su obra “Derecho Constitucional”, nos dice que
“La población es la totalidad de los seres humanos que viven en el
territorio de un Estado, es, dicen otros, la corporación, asociación o
pluralidad de hombres sometidos a una autoridad común e integradora
o no de esa autoridad. Se compone, entonces, la población por dos
grupos: a) El nacional; y b) El extranjero. El primero, entraña a la
nación boliviana; y el segundo, no la compone”.

Naranjo Mesa, en su obra citada, indica que “la población de un Estado


la conforman todos sus habitantes, permanentes o transeúntes,
nacionales o extranjeros. Casi todas las constituciones prescriben la
obligación para los habitantes, nacionales o extranjeros, de vivir
sometidos a la Constitución y las leyes del respectivo Estado y respetar
y obedecer a las autoridades del lugar”.

Camilo Velásquez, señala que la población “está compuesto por la


totalidad de los habitantes del Estado sin distinción en cuanto a su

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Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

calidad de nacionales o extranjeros, mayores o menores, de


domiciliados o transeúntes. Esta noción, que se inspira en una cierta
lógica de volumen, tiene la mayor importancia en el logro de los fines
del Estado”.

Guido I. Risso, en su obra Curso de Derecho Constitucional, Pág. 64,


dice: La población está integrada por hombres que en su convivencia,
forman grupos, asociaciones, instituciones; es decir, se relacionan en
interacciones y procesos sociales”.

6.2. Territorio
Territorio proviene del latín territorium-ii, que traducido al castellano
significa, porción de la superficie perteneciente a una región, provincia
o nación.

Naranjo Mesa, señala que “El estudio del territorio, como espacio físico
o material, incumbe a ciencias como la geografía, la geología o la
geopolítica; a nosotros corresponde estudiarlo en cuanto sirve de
asiento a la población del Estado y en cuanto ámbito espacial dentro
del cual se ejerce el poder del Estado; también cabe considerarlo como
campo de aplicación de la política”. Es decir en este ámbito se aplica la
Constitución y las leyes de la república.

León Duguit, señala que el territorio es “el límite material de la acción


efectiva de los gobernantes”.

Camilo Velásquez, en su obra citada, Pág. 65, señala que el “territorio


es el espacio geográfico en el cual se despliega la acción soberana.
Permite saber hasta dónde puede llegar la acción del poder público. La
noción de territorio implica la existencia de límites, de suerte que hasta
hace poco (siglo XIV) resultaba un concepto impreciso; sólo a partir de
los desarrollos recientes de la cartografía se conocen límites trazados
con precisión matemática.

El territorio, como elemento del Estado es, además, un factor


integrador. En efecto, permite brindar un espacio geográfico que
propicia la creación de la nacionalidad, la cual aparece de manera

42
Sociedad y Estado

general al disponerse una convivencia en un lugar compartido, que fija


frente a los demás Estados lo que le es propio como límite de la
competencia de su poder”. Más adelante continúa “A pesar de que es
difícil imaginar la existencia de un Estado, sin territorio, se han
presentado situaciones históricas, como la de los “gobiernos en el
exilio” que se proclamaron en la Segunda Guerra Mundial, sobre
Polonia y Checoslovaquia, o el caso del gobierno en el exilio con
ocasión de la llegada de Franco al gobierno en España.

6.2.1. Componentes del territorio


El territorio está compuesto por: El suelo, subsuelo, espacio aéreo, mar
territorial, y la plataforma submarina.

6.3. Gobierno
Algunos autores estudian este elemento como “poder público”,
“soberanía”, nosotros creemos que desde el punto de vista
constitucional, nos debe interesar “gobierno”, que proviene de latín
“gubernare” que significa dirigir, administrar, mandar, conducir, guiar.

Gobierno ha sido entendido desde dos puntos de vista: Concepto


genérico y específico.

6.4. Fin social


Hauriou, en su obra “Derecho Constitucional e Instituciones Políticas”,
Pág. 114, señala que estaremos en presencia del “Estado cuando se
hayan reunido los cuatro elementos siguientes:

1. Una agrupación humana.


2. Un territorio sobre el que está fijo el grupo.
3. Un poder que dirige al grupo.
4. “Un orden económico, social, político y jurídico a cuya realización
se dedica el poder”.

Para los tratadistas italianos, como ser: Groppali, seguidos por Porrúa
Pérez, este elemento sería el “fin que persigue el Estado”. Ambos
conceptos coinciden que el fin social viene a ser uno de los elementos
importantes del Estado.

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Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

Vladimiro Naranjo Mesa, ya citado, señala que “es necesario incluir un


cuarto elemento del Estado, sin el cual este ente no llega a
configurarse con la plenitud de sus atributos: el reconocimiento de su
soberanía por otros Estados”.

Helio Juan Zarina, en su obra Derecho constitucional, Pág. 290, señala


que “el Estado no busca, exclusivamente, el bien particular de cada
hombre sino el bien común y simultáneo a todos los habitantes. De tal
forma que de ese bien participen, también, las personas
individualmente considerada. A su vez, el bienestar de cada uno de los
individuos del Estado conlleva a la existencia del bien social”.

44
Sociedad y Estado

TEMA 3

FORMAS DE ESTADO

En un principio las formas preestatales y las estatales y el Gobierno se


asimilan o confunden, sobre todo para aludir a la forma general como
estructura política total, llamada posteriormente Estado. "Aun cuando
en el lenguaje vulgar se confunden Estado y Gobierno”, nos dice
Francisco Porrúa Pérez, ob. cit., pág. 456, no obstante, ya tenemos
nosotros los elementos necesarios para poder afirmar que no son
términos equivalentes. La palabra “Estado” designa la organización
política en su conjunto, en su completa unidad formada por los
diferentes elementos que la constituyen. “Gobierno” se utiliza para
designar el conjunto de los poderes públicos. De los órganos a
quienes se atribuye el ejercicio de la soberanía. El Estado es un
concepto más amplio; abarca el todo. El Gobierno únicamente se
refiere a uno de sus elementos, el que tiene la dirección misma del
Estado, o sea, según estudiamos al analizar el poder público, los
órganos a través de los cuales éste se manifiesta".

Posteriormente, en la modernidad, Estado y Gobierno se distinguen


precisando que el Estado abarca el todo de los fenómenos políticos y
el Titular de su soberanía; y el Gobierno una parte del Estado o el
conjunto de sus órganos, a quienes se encarga la realización de sus

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Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

fines y ejercicio de su soberanía, que se deposita en el pueblo. El


Estado aparece como un orden o estructura que no se confunde con
el Gobierno, ya que es una parte formal de aquél. Este proceso
político va a dar paso a las formas de Gobierno y a las formas de
Estado.

2. Formas modernas de Estado

Las formas de Estado son técnicas jurídico-políticas que se dedican a


diseñar la estructura administrativa interna de los Estados,
consecuentemente hoy presenta las siguientes formas: Estado Unitario
o simple, Estado Federal, Estado Confederado, Estado Autonómico y
Estado Pluricultural (nuestro).

2.1. Estado Unitario o Simple y sus características


Eliseo Aja, en su obra El Estado Autonómico, Editorial Alianza, Madrid-
España, 2003, pág. 23, señala: “Son la forma más tradicional y sencilla
de organización del poder político…”.

Naranjo Mesa, citando a G. Burdeau, señala que él “Estado simple o


unitario es aquel que posee un sólo centro de impulsión política y
administrativa, es decir, aquel en el cual la soberanía se ejerce
directamente sobre todo el conglomerado social asentado sobre un
mismo territorio. De esta suerte la totalidad de los atributos y funciones
del poder político emanan de un titular único, que es la persona jurídica
llamada Estado. Todos los individuos colocados bajo la soberanía de
este obedecen a una misma y sola autoridad, viven bajo un mismo
régimen constitucional y son regidos por unas mismas leyes”.

Camilo Velásquez, en su obra citada, Pág. 87, señala “El Estado


unitario se caracteriza por la existencia de un centro predominante de
impulsión de Gobierno. Lo anterior no significa que las competencias
estatales no sean ejercidas por un número plural de órganos. Viene a
explicar el sentido del estado unitario la circunstancia de que esos
distintos órganos se encuentran vinculados con un sólo centro o fuente
subordinante del poder público, que los enlaza de manera más o

46
Sociedad y Estado

menos rígida, de suerte que puede hablarse de Estados unitarios


centralizados o descentralizados”.

Pizzorusso, señala que hay Estado simple o unitario “cuando un país


se rige por un único sistema de órganos de gobierno, por lo general
con sede en una misma ciudad —la capital— y que actúan sus poderes
sobre todo el territorio del Estado”.

Por su parte, Andrés Serra Rojas en su obra Teoría del Estado, Pág.
551, nos enseña que “El Estado unitario dominado por una soberanía
genérica y órganos centrales de proyección nacional, es aquel que
corresponde a una forma centralizada, tanto en lo político como en lo
administrativo. Históricamente este tipo de Estado corresponde al
régimen absolutista.

En el Estado unitario se forma un poder central, sin autonomía para las


partes o regiones que lo componen, y es el único que regula toda la
organización y acción de un poder único, que unifica y coordina a todas
las demás entidades públicas y privadas”.

Pablo Dermizaky, en su obra consultada, pág. 85, señala que “Tres


caracteres distinguen a esta forma de Estado:

a) La centralización del poder político en el gobierno nacional;


b) La unidad del ordenamiento jurídico (derecho público y privado) en
todo el territorio;
c) Y la unidad de la jerarquía administrativa a través de una
organización que extiende asimismo a todo el territorio”.

Esta forma de Estado fue adoptada por la mayoría de los países del
mundo ya sea en Europa, Asia y África. En América Latina el Estado
unitario también se ha dado con excepción de los países Argentina,
Brasil, México y Venezuela, en estas últimas la forma federal es más
teórica que práctico. Bolivia se adscribe a esta forma de Estado.

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2.2. Estado Federal y sus características


Eliseo Aja, en su obra El Estado Autonómico, Editorial Alianza, Madrid-
España, 2003, pág. 25, señala: “La federación es una construcción
moderna, “inventada”, literalmente, por la Constitución de los Estados
Unidos de América (1787), porque es profundamente diferente de la
confederación y de otras formas de asociación de Estados, como la
unión real, que existían anteriormente”.

Adolfo Cabino Ziulu, en su obra Derecho Constitucional, Ediciones


Desalma, Buenos Aires-Argentina, 1997, pág.155, dice: “El federalismo
es una forma de Estado, caracterizada por la descentralización del
poder con relación al territorio. Esto significa que además del órgano
central del poder existen órganos locales. Ellos deben tener, desde
luego, cierto grado de independencia respecto del poder central, que
incluye el concepto de autonomía. En el Estado federal, la tendencia
centrífuga o descentralizadora prevalece sobre la fuerza centrípeta o
centralizadora”.

Naranjo Mesa, en su obra citada, Pág. 296, “El Estado federal, por su
parte, es una asociación de Estados en el cual los miembros están
sometidos en ciertos aspectos a un poder central único, pero
conservan su propia autonomía para el ejercicio de determinadas
funciones internas de carácter administrativo o político”.

Andrés Serra, en su obra citada, señala que “El Estado Federal, ha


expresado Mouskheli (Teoría jurídica del Estado Federal), es un Estado
que se caracteriza por una descentralización de forma especial y de
grado más elevado; que se compone de colectividades miembros
dominados por él, pero que poseen autonomía constitucional y
participan en la formación de la voluntad nacional, distinguiéndose de
este modo de las demás colectividades públicas inferiores”.

En esta definición geosocial nos encontramos que la base del Estado


Federal es la existencia de un territorio, una población y un régimen
jurídico general que determine una Federación representativa de la
personalidad del Estado y titular de la soberanía”.

48
Sociedad y Estado

Bidar Campos, sintetiza las siguientes características:


a) “Es una forma propia del Derecho Político y del Derecho
Constitucional; en esto se diferencia de la confederación, que es una
unión derivada de un pacto.
b) Existen en él órganos con funciones específicas —ejecutivas,
legislativas y judiciales— para operar el poder del Estado.
c) El gobierno federal gobierna directamente a los individuos que
componen su población, sin perjuicio del que similarmente
corresponde a los gobiernos federados o locales.
d) En el Estado federal, de acuerdo con la tesis sustentada por la
doctrina judicial actual de nuestro país, los Estados particulares no
son soberanos; la soberanía pertenece al Estado Federal, los
Estados locales sólo gozan de autonomía.
e) El Estado federal es, por eso, el único sujeto de derecho de la
comunidad internacional.
f) La federación como régimen constitucional, es indisoluble e
indestructible”.

El sistema federal aparece con la Constitución de los Estados Unidos


de Norteamérica de 1787, seguido por otros países de distintos
continentes, Argentina, Brasil.

2.3. Estado Confederado y sus características


Eliseo Aja, en su obra El Estado Autonómico, Editorial Alianza, Madrid-
España, 2003, pág. 25, señala: “Inicialmente, las 13 ex colonias
americanas independizadas de Inglaterra (1776) organizaron una
confederación, pero la misma reveló inmediatamente sus debilidades y
las ex colonias, en un esfuerzo por formar “una unión más perfecta”,
crearon el primer sistema federal, una unidad política común, que se
supraordenaba a la que existía en los 13 Estados…”.

“Esta forma de Estado compuesto surge, generalmente, por el acuerdo


entre diferentes Estados que convienen en su unión, pero conservando
cada uno de ellos su propia autonomía y su propia soberanía interna.
Queda así unido solamente por las disposiciones del acta de
confederación; en todo lo demás conservan su libre competencia.
Están únicamente sujetos a las decisiones del poder confederal en los

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asuntos expresamente previstos en el pacto; entre estos generalmente


se incluye lo relativo a las relaciones internacionales, en lo cual
delegan parte de su soberanía con objeto de que la confederación
lleva, ante los demás Estados, la representación de sus miembros”,
señala Naranjo Mesa en su obra citada, Pág. 295.

La Confederación es una asociación de Estados en el sentido del


Derecho Internacional.

Walter F. Carnota y otros en su obra Curso de Derecho Constitucional,


Pág. 65, señala que “…el Estado Confederal es aquel integrado por
entidades cuasi-soberanas, unidas bajo un órgano común que tiene
competencia sólo para muy limitadas cuestiones, y que no tiene
imperium directo sobre los ciudadanos de los estados confederados,
sino por medio de los gobiernos de éstos”.

Alcides Alvarado, en su obra citada, señala que las características de


esta forma de Estado son:

a) La Confederación de Estados es una alianza reforzada, porque tiene


una organización compuesta por una Dieta o Asamblea de los
Estados, que se reúne periódicamente para tratar de los asuntos
comunes previstos en el pacto.
b) Pero no es un Estado Federal, porque esta organización no tiende a
crear una voluntad estatal superior, ni una personalidad
internacional, sino solamente un medio de ejercer en común la
voluntad propia de cada uno de los Estados confederados. La Dieta,
o el Consejo de ministros, no es el órgano de un súper Estado, sino
una especie de conferencia internacional en la que las decisiones
importantes se adoptan únicamente con la unanimidad de votos de
los Estados e incluso, a veces, por medio del referéndum”.

2.4. Estado Autonómico

2.4.1. Concepto de autonomía


Luis María Cazorla Prieto en su obra Temas de Derecho
Constitucional, Editorial Aranzadi, España, Pág. 280 adelante, señala:

50
Sociedad y Estado

La autonomía, desde su significación original, como una de las notas


definidoras de la “polis” griega, junto a la libertad y la autarquía y con el
sentido de soberanía o poder independiente hasta nuestros días, ha
sido utilizada en contextos y con significados tanto políticos como
jurídicos bien distintos. En el proceso de consolidación del Estado
moderno y contemporáneo la autonomía queda referida a los
ordenamientos no originarios que son, por definición, no estatales y
derivados o consentidos del Estado. Así, pues, autonomía ha venido a
significar la potestad de dictar normas propias que pasan a integrarse
en el ordenamiento jurídico del Estado. Así el Tribunal Constitucional
Español, en la Sentencia de 2 de febrero de 1981, señala que: “Ante
todo resulta claro que la autonomía hace referencia a un poder
limitado. En efecto, autonomía no es soberanía —y aun este poder
tiene sus límites—, y dado que cada organización territorial dotada de
autonomía es una parte del todo, en ningún caso el principio de
autonomía puede oponerse al de unidad, sino que es precisamente
dentro de éste donde alcanza su verdadero sentido, como expresa el
artículo 2 de la Constitución Española. Es la Ley en definitiva, la que
concreta el principio de autonomía de cada tipo de Entes, de acuerdo
con la Constitución. Y debe hacerse notar que la misma contempla la
necesidad —como una consecuencia del principio de unidad y de la
supremacía del interés de la nación— de que el Estado quede
colocado en una posición de superioridad, tal y como establecen
diversos preceptos de la Constitución Española.

En resumen el Estado autonómico es una verdadera descentralización


político-administrativa.

2.4.2. Caracteres del proceso autonómico.


El reconocimiento del derecho a la autonomía y, por tanto, el proceso
autonómico se articula sobre una serie de principios:

a) Principio de generalidad; es un derecho general pero articulado


de forma muy flexible y elástica, al objeto de responder a hechos
históricos o geográficos muy concretos.

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Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

b) Principio de voluntariedad; la Constitución no crea un Estado


regional, sino que permite esa estructuración. Sin embargo, la
voluntariedad es más teórica que real, y se impone la generalización.
c) El denominado “principio dispositivo”; ha dado lugar a
problemas de articulación interna, según BALAGUER CALLEJON,
entre los que caber destacar: 1) La inexistencia de un sistema de
distribución de competencias racional que dejará establecida ya en la
propia Constitución cuáles eran las competencias del Estado y de las
Comunidades Autonómicas. 2) La inexistencia de mecanismos de
integración de las Comunidades Autonómicas en la adopción de
decisiones estatales.
d) Principio de gradualidad; el sistema es de implantación gradual.
e) Principio de la progresividad en su integración; la posibilidad
de ampliar sucesivamente las competencias.
f) Principio de diversidad de plasmación; adaptar su estructura y
funcionamiento a sus propias exigencias (Cazorla, Alcubilla, García,
282- 284).

2.4.3. Principios del régimen autonómico.


Los principios estructurales del Estado autonómico condicionan el
mismo y dan su auténtica configuración y estos son:

a) Principio de unidad. Este principio está presente a lo largo de


toda la Constitución. Para PAREJO ALONSO queda subrayado
en el artículo 2, “…nación indivisible e indisoluble”, lo que
supone la negación del derecho de autodeterminación, ya que
existe un único poder constituyente. Esa unidad, dice
ENTRENA CUESTA, es anterior y no fruto de la Constitución y,
por fin, muestra de esa unidad son las instancias últimas de
decisión para resolver conflictos, es decir, el Tribunal Supremo
y el Tribunal Constitucional.
b) Principio de autonomía. El principio de autonomía,
dialécticamente opuesto al de unidad, presenta dos vertientes
subrayadas por la doctrina y el Tribunal Constitucional: la
autonomía como derecho y como principio de organización y
funcionamiento del Estado, que se manifiesta en la constitución

52
Sociedad y Estado

de unos entes públicos de carácter territorial dotados de unos


poderes y competencias.
c) Principio de supremacía estatal. La Constitución establece,
en el artículo 149.3, la supremacía del Derecho estatal en
todas las materias que no sean de la exclusiva competencia de
las Comunidades Autonómicas…. En todo caso, la
superioridad de los fines generales sobre los específicamente
comunitarios implica una jerarquía de los entes políticos que
los procuran.
d) El principio de supletoriedad. Del artículo 149.3 de la
Constitución Española de 1978 se deriva, asimismo, el
principio de supletoriedad del Derecho estatal.
e) Principio de igualdad. En primer término, como señala
ENTRENA CUESTA, igualdad en cuanto a contenido posible
dentro del marco constitucional. Su determinación queda a
merced de la libre decisión de los habitantes, si bien por
supuesto está en función de la vía de acceso como luego
veremos. No hay un modelo único, sino un marco de
competencias posible, si bien la tendencia ha sido agotar el
marco de competencias posibles que la Constitución ofrece. En
segundo término, la Constitución pone especial cuidado en
evitar que la igualdad pudiera romperse con el ejercicio del
autogobierno. Así se reconoce la igualdad jurídica por vía
negativa en el artículo 138.2, a cuyo tenor: “Las diferencias
entre los Estatutos de las distintas Comunidades Autónomas
no podrá implicar nunca privilegios económicos o sociales”.
f) Principio de solidaridad. Según VANDELLI, es el principio de
síntesis entre los de unidad y autonomía o el principio que
permite la “integración” de las Comunidades Autónomas en la
unidad estatal. Integración que hace posible sin perjuicio de su
propia autonomía, añade MUÑOZ MACHADO.
g) Principio de federación de las Comunidades Autónomas.
Consagrado en el artículo 145.1, si bien la prohibición queda
amortiguada en el artículo 145.2, al permitir acuerdos de
cooperación intercomunitarios: 1) Para gestión y prestación de
servicios propios de las ciudades (que deben comunicarse a
las Cortes Generales (parlamento)); 2) Otros acuerdos de

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Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

cooperación que asimismo exigen autorización de las Cortes


Generales.
h) Principio de cooperación. Tiene el mismo punto de partida
que el principio de solidaridad; conecta las Comunidades
Autónomas con los poderes centrales en una posición de
paridad o de relativa equiparación en materia en la que esto
será factible (SANTOLAYA MACHETTI).

54
Sociedad y Estado

TEMA 4

SISTEMAS DE GOBIERNO

La expresión sistemas de gobierno se reserva para señalar la


organización y estructura interna de los órganos del Estado, en lo que
hace a sus titulares, ámbitos de competencia, funcionamiento y
relaciones mutuas. La distinción que se hace entre los sistemas de
gobierno tiene ante todo un funcionamiento en la realidad histórica y
política de los Estados modernos más que en la teoría o la doctrina.
Podrían esbozarse muchos sistemas de gobierno a los existentes en el
mundo contemporáneo, pero con ello se entraría en el terreno de la
utopía. Lo que nos interesa en el presente curso es el conocimiento de
los sistemas que imperan en el mundo de hoy.

Los sistemas de gobierno, como lo anota BURDEAU, se encuentran


aún vinculados a las interpretaciones susceptibles de hacerse sobre la
teoría de la separación de poderes, con lo cual se da nacimiento a tres
sistemas: a) aquel en que se intenta dar explicación práctica a la regla
de separación de poderes, asegurando el equilibrio entre el ejecutivo y
el legislativo; es el sistema parlamentario; b) aquel en virtud del cual se

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Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

establece la preponderancia práctica del ejecutivo: es el sistema


presidencial; y c) aquel que favorece la preeminencia de una asamblea
representativa sobre el ejecutivo: es el sistema convencional o de
asamblea (parlamento).

Cabe agregar a estos sistemas el de monarquía absoluta, puesto que


aún subsisten algunas en el mundo contemporáneo.

2. Sistema de Gobierno Presidencialista

2.1. Conceptos
Paolo Biscaretti di Ruffia, citado por Pablo Asbun, en su obra Formas
de Gobierno en América Latina, Pág.11, nos indica que “El gobierno
presidencialista es aquél que más rígidamente realiza el principio de la
separación de poderes; a los cuales están dedicados los primeros
artículos de la Constitución Federal de Norteamérica de 1787”. Los
aportes de más alta significación jurídica y política se deben a
presidentes de la talla de Washington, Jefferson, Lincoln, Roosevelt y
Kennedy, respectivamente.

Esta forma de gobierno es la establecida y adoptada por primera vez


por la Constitución de los Estados Unidos de Norteamérica de 1787, en
cuyo artículo II, Sección 1 (La rama ejecutiva), prescribe “El Poder
ejecutivo estará investido en un Presidente de los Estados Unidos de
América. Este desempeñará su Cargo por un Período de cuatro años y,
junto con el Vicepresidente escogido para el mismo Período, será
elegido de la manera siguiente: “De conformidad con lo que la
Legislatura competente prescriba, cada Estado nombrará varios
Electores, en un número equivalente al total de Senadores y
Representantes que él mismo esté autorizado para enviar al Congreso:
sin embargo, ningún Senador o Representante ni Persona alguna que
ostente un Cargo de Confianza o que le produzca ingresos bajo la
autoridad de los Estados Unidos, podrán recibir la designación del
Elector”.

La Revista del Instituto de Ciencias Jurídicas de Puebla, titulada:


Estado, sistemas electorales y derechos en América Latina, de Carlos

56
Sociedad y Estado

Villabella Armengol y otros, en la pág. 6, señala: “El presidencialismo


como forma de gobierno se diseñó en los Estados Unidos a partir de la
revolución burguesa que se desarrolló entre 1774-1783 en los marcos
de un proceso de liberación colonial contra el Reino Unido, aspecto que
le impregna un tono fundacional al surgimiento de la nación
norteamericana y proporciona un carácter creador a su ordenamiento
jurídico e institucional”.

La forma de gobierno que se estudia (presidencialismo) se extendió a


toda la América Latina, cuyos países la adoptaron una vez que se
desgajaron del sistema colonial hispano-portugués y es también
modalidad organizacional en algunos países del Caribe.

“En los países de América Latina el régimen presidencialista no es


típico como en el norteamericano y mexicano, habida cuenta, si
bien existe un sólo gobierno para el Estado y el Ejecutivo, los ministros
de Estado son nombrados por el Jefe de Estado, sin el requisito de la
aprobación de las designaciones y remociones por el Parlamento, sino
sólo depende del Presidente”.

2.2. Características del Sistema de Gobierno Presidencialista


Las características de este sistema de gobierno son:

a) El poder ejecutivo es unitario. Está depositado en el Presidente de la


República.
b) En este sistema el Presidente de la República, concentra las
funciones de Jefe de Estado y Jefe de Gobierno, encabezando como
tal todo el andamiaje burocrático de la administración pública.
c) Es elegido por sufragio popular, por un período constitucional y no
por el Parlamento, lo que le da independencia frente a este poder.
Además le otorga legitimidad plebiscitaria y lo enviste como
intérprete de la voluntad popular.
d) El Presidente de la República en su condición de Jefe de Gobierno
nombra y remueve libremente a sus cooperadores, llamados
Ministros de Estado o Secretarios de Estado; personas de su
confianza y pertenecientes a su línea política, dibujándose como

57
Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

colaboradores que se mueven en su órbita para el desempeño de


determinadas funciones.
e) El Presidente de la República, hoy en los países Latinoamericanos
por el frágil sistema democrático se hizo necesario que sea también
jefe del partido político o coalición gobernante.
f) El presidente de la República puede ser de un partido político
diferente al de la mayoría del congreso (caso Jaime Paz Zamora).
g) El Presidente de la República posee un período fijo de gobierno,
esto es, ni él, ni los Ministros deben pedir aprobación de sus actos al
congreso.
h) Ni el presidente ni los Ministros o Secretarios de Estado pueden ser
miembros del Congreso al mismo tiempo.
i) El Presidente de la República no tiene facultades para disolver el
congreso.

3. Sistema de Gobierno Parlamentario

3.1. Conceptos
Vladimiro Naranjo, en su obra citada, Pág. 298, manifiesta: “El sistema
de gobierno parlamentario —o de gabinete, como también se le
denomina— es aquel en el cual el ejecutivo está dividido en dos
elementos: un jefe de Estado y un jefe de gobierno, siendo este último,
junto con su gabinete, responsable políticamente ante el Parlamento, el
cual tiene facultades para revocar su mandato o puede, a la inversa,
ser disuelto por el gobierno”.

Manuel Jiménez de Parga, nos dice que el régimen parlamentario “…es


el sistema típico de la colaboración de los poderes. Por un lado hay un
Jefe de Estado (Rey o Presidente de la República) políticamente
irresponsable por otro, un parlamento que controla la gestión
gubernamental”.

El Gobierno Parlamentario está basado en la composición política de


las Cámaras, en cuanto a los partidos mayoritarios o coaliciones que la
componen. El Jefe de Estado designa su Gabinete a propuesta del
Presidente del Consejo. Este Gabinete es responsable políticamente
ante dichas Cámaras que los respaldan.

58
Sociedad y Estado

Esta forma de Gobierno tiene su antecedente en el Constitucionalismo


Inglés, donde se “…distingue entre un jefe del Estado con el nombre
del Presidente de la República o en las monarquías constitucionales de
Rey y un Jefe de Gobierno con el nombre de Primer Ministro o
Presidente de Gobierno, encargado por el Presidente de la República o
el Rey de formar el gobierno o el gabinete con aprobación del
parlamento, permaneciendo el Primer Ministro y los ministros del
Ejecutivo mientras cuenten con el respaldo parlamentario, pero que no
afecta al presidente del Estado”.

La forma típica de este sistema encontramos en Inglaterra, de donde


viene el proverbio la “reina reina, pero no gobierna”.

3.2. Características del Sistema de Gobierno Parlamentario


Las características de este sistema de gobierno son:
a) El Poder Ejecutivo es doble: Existe un jefe de Estado que tiene
funciones de representación y protocolo, y un jefe de gobierno que
es quien lleva la administración y el gobierno.
b) Los miembros del gabinete (gobierno poder ejecutivo) son también
miembros del parlamento (poder legislativo).
c) El gabinete está integrado por los jefes del partido mayoritario o por
los jefes de los partidos que por coalición forman la mayoría
parlamentaria.
d) En el Gabinete existe una persona que tiene supremacía y a quien
se le suele denominar “Primer Ministro”, porque ejerce las funciones
de Jefe de Gobierno.
e) El gabinete subsistirá siempre y cuando cuente con el respaldo de la
mayoría en el parlamento.
f) La administración pública está encomendada al Gabinete, pero éste
se encuentra supervisado permanentemente por el Parlamento.
g) Existe entre el Parlamento y Gobierno un mutuo control.
h) A su vez, el parlamento puede negar su voto de confianza u otorgar
un voto de censura al Gabinete, con lo cual éste se ve obligado a
dimitir, pero el gobierno no se encuentra desarmado frente al
parlamento, pues tiene la atribución constitucional de pedir al Jefe de
Estado, quien accederá, que disuelva el parlamento. En las nuevas

59
Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

elecciones es el pueblo quien decide quien poseía la razón: sí el


parlamento o el gobierno
i) El Jefe de gobierno, y los miembros del gabinete son a la vez
miembros del Parlamento.
j) El Parlamento es elegido por el pueblo titular de la soberanía, por lo
que el Ejecutivo deberá consultar y obtener el apoyo del mismo.

Entre los Estados que tienen un sistema parlamentario de gobierno


podemos mencionar a: Gran Bretaña, Italia, Canadá, Australia, India,
Dinamarca, España, Francia, Japón, Noruega, Nueva Zelanda,
Portugal, Suecia, etc.

4. El Semipresidencialismo

Giovanni Sartori, en su obra “Ingeniería Constitucional Comparada”,


Pág. 136, nos dice: “Hemos visto que tanto el parlamentarismo como el
presidencialismo pueden fallar, especialmente en sus formas puras. Es
a partir de estos dos extremos que nos vemos motivados a buscar una
solución “mixta”, una forma política que se encuentre en medio de los
sistemas presidenciales y parlamentarios y que tenga elementos de
ambos. A esta forma mixta se la conoce —significativamente— como el
semipresidancialismo. Aunque no debemos tomar el nombre muy
literalmente, sí indica que nuestro sistema se entiende y construye
mejor desde el punto de vista del presidencialismo, no del
parlamentarismo. Porque el razonamiento se desarrolla más fácilmente
desde arriba hacia abajo, que desde la base del parlamentarismo.

El denominador común del presidencialismo y del semipresidencialismo


es un presidente electo popularmente, o al menos, un presidente que
no es electo en y por el Parlamento. Pero más allá de esa base común
las dos formas se alejan radicalmente la una de la otra, porque el
semipresidencialismo es “semi” precisamente porque divide en dos al
presidencialismo al sustituir una estructura monocéntrica de autoridad
con una autoridad dual. En los sistemas presidenciales, el presidente
está protegido y aislado de la interferencia parlamentaria por el
principio de la división de poderes. En cambio, en el sistema

60
Sociedad y Estado

semipresidencialista funciona basado en el poder compartido; a su vez,


el primer ministro debe conseguir un apoyo parlamentario continuo.

La característica que cualquier semipresidencialismo debe tener (en


virtud de su nombre) es una estructura de autoridad dual, una
configuración con dos cabezas. De este modo, cualquier Constitución
semipresidencialista deberá establecer de alguna manera, una diarquía
entre un presidente, que es el jefe de Estado, y un primer ministro, que
encabeza al gobierno”.

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Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

TEMA 5

TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN

6. Etimología

En el campo del Derecho Constitucional, el término Constitución,


comenzó a usarse profusamente a partir de la revolución burguesa y
particularmente con la revolución norteamericana por la independencia,
porque fue durante su proceso, por primera vez en la historia de la
humanidad, que el Congreso de Filadelfia aprobó en 1787, la primera
constitución escrita, sistematizada y codificada del mundo.

Sin embargo, el origen etimológico de la palabra constitución se


encuentra en latín compuesta de dos términos “Constltutio-onis”, que
se traduciría en castellano como constituir, establecer una determinada
cosa.

Otros teóricos, sostienen que la etimología de la palabra constitución,


proviene del latín, pero del verbo compuesto “Constituere” que
significa como estar constituido.

62
Sociedad y Estado

Adolfo Gabino, en su obra “Derecho Constitucional”, Pág. 16, señala


que “Etimológicamente, deriva de las voces latinas “statuere” o
“estatutum”, que significan “reglar”, “establecer”, “ordenar”.

Por otra parte, es necesario transcribir el punto de vista de Giovanni


Sartori en su obra “Ingeniería Constitucional y Comparada”, Pág. 211,
que dice: “No tiene caso, en mi opinión, remontar el constitucionalismo
a los griegos y romanos. El término griego para lo que llamamos
constitucionalismo era politeia (que asimismo se traduce como
“república”), y el latín constitutio nada tiene que ver con lo que
llamamos Constitución (Sartori, 1962). Hasta mediados del siglo XVII,
durante el protectorado de Cromwell, aún no había aparecido el
concepto de Constitución. La época de Cromwell fue la época en que
los ingleses se dedicaron especialmente a lo que nosotros
consideramos el bosquejo de constituciones. No obstante, a los
documentos de ese tiempo se les llamó de varias maneras, pactos,
instrumentos, acuerdos y leyes fundamentales, pero nunca
“constitución”. Este término, así como el concepto de
constitucionalismo, fue acuñado en el siglo XVIII, y obtuvo nuestra
aceptación general como significado de concepto después de la
experiencia estadounidense en la elaboración de su Constitución.

Cualquiera sea el origen etimológico, para nosotros significa,


“organización, composición, estructuración de un determinado Estado”.

7. Conceptos

La palabra “constitución” reconoce una diversidad de sentidos en


consecuencia trataré de citar la mayor cantidad de puntos de vista,
para concluir con un concepto.

Alipio Valencia Vega, “La Constitución, es la norma o conjunto de


preceptos fundamentales de una sociedad jurídica y políticamente
organizada. La Constitución es la ley fundamental, porque ella
establece primariamente la formación y el desarrollo del Estado y es la
constitución de la que deriva por grados, todo el resto del orden
normativo o jurídico del Estado”.

63
Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

Ciro Félix Trigo: “La constitución es la ley fundamental o super ley


conforme a lo cual se organizan los poderes públicos, se regulan los
derechos libertades individuales y se limita la acción del poder público;
es la expresión jurídica del régimen del Estado, sujeto a limitaciones en
el ejercicio de sus poderes y se la concibe como el mejor sistema de
garantías contra las arbitrariedades y el despotismo de los
gobernantes”.

Pablo Dermizaky P., conceptualiza “Una Constitución es el código,


norma o ley fundamental de un país que determina la estructura
jurídico-política del Estado, la forma o sistema de su gobierno y los
derechos y deberes de la población”.

Adolfo Gabino, en su obra citada, Pág. 16, señala que la “Constitución


es la ordenación fundamental del Estado”.

8. Primacía de la Constitución

La primacía constitucional debe considerarse como el principio básico


de todo sistema jurídico.

Por primacía constitucional podemos entender dos cosas distintas: a)


que la Constitución, como ley fundamental de la organización, no sólo
es la ley primera y suprema, sino que se encuentra por encima de
todas las demás leyes en posición subordinante. Su carácter y
naturaleza, el mecanismo especial previsto para su formulación y
reforma, depositado en un “superlegislador” para distinguirlo de los
órganos ordinarios encargados de la legislación común, su primacía
sobre las otras leyes, que deben subordinarse a ella, la hacen que
revista el carácter de “super ley”. En este sentido el término
superlegalidad se nos presenta como equivalente a supremacía,
expresión tradicional en el derecho y la doctrina constitucional
americana que ha determinado con precisión su contenido; y 2) que
existe un conjunto de principios situados por encima de la constitución
escrita. Este es el sentido que asigna al término “superlegalidad” la
doctrina europea. Así, Maurice Hauriou denominó superlegalidad
constitucional a los principios fundamentales de la organización del

64
Sociedad y Estado

Estado, a los que colocaba por encima de la Constitución escrita, como


inherentes al orden social y político y actuando dinámicamente como
límites del poder constituyente no originario”, así manifiesta el profesor
Carlos S. Fayt en su obra Derecho Político Tomo II, Pág. 32.

Hans Kelsen, al exponer la teoría de la pirámide jurídica, ideada por


Merkl, explica: “La norma que determina la creación de otra es superior
a esta; la creada de acuerdo con tal regulación, es inferior a la primera.
El orden jurídico, especialmente aquel cuya personificación constituye
el Estado, no es, por tanto, un sistema de normas coordinadas entre sí,
que se hallasen, por así decirlo, una al lado de la otra, en un mismo
nivel, sino que se trata de una verdadera jerarquía de diferentes niveles
de normas: la unidad de estas se halla constituida por el hecho de que
la creación de una norma —la de grado más bajo—, se encuentra
determinada por otra —de grado superior—, cuya creación es
determinada, a su vez, por otra todavía más alta. Lo que constituye la
unidad del sistema es precisamente la circunstancia de que tal
regressus termina en la norma de grado más alto, o norma básica
(norma fundante básica en Kelsen), que representa la suprema razón
de validez de todo el orden jurídico. La estructura jerárquica del orden
jurídico de un Estado puede expresarse toscamente en los siguientes
términos: supuesta la existencia de la norma fundamental, la
Constitución representa el nivel más alto dentro del derecho nacional”.

“La posición jerárquica que la Constitución ocupa, pues, respecto del


resto del ordenamiento jurídico de un Estado, es clara. No sólo
obedece esa ubicación en la cúspide al hecho de ser la norma
fundamental —o contener el conjunto de normas fundamentales—, de
la cual derivan su validez las demás normas positivas, sino, además,
por el hecho de llevar implícita toda una filosofía política que sirve de
orientación no sólo a los agentes del poder —los gobernantes—, sino
la conducta de los gobernados, en cuanto miembros activos del
conglomerado social”. Señala, así Naranjo Mesa en su obra citada, Pág. 381-
382.

La supremacía constitucional es uno de los principios básicos en que


se asienta el orden constitucional. En su expresión más generalizada,

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Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

implica reconocer a la constitución como norma fundamental de un


Estado, o sea, adjudicarle la calidad de norma superior.

9. Principio de jerarquía de las normas jurídicas

Precisamente de la supremacía de la Constitución y de su relación de


ésta con las demás normas jurídicas, nace el “principio de la jerarquía
de las normas jurídicas”. Precisamente la existencia de una jerarquía
en las normas jurídicas —en función de sus órganos emisores, de su
importancia y de su sentido funcional— es que resulta un orden
jurídico, en este caso más propiamente un orden constitucional,
garantía de la seguridad jurídica. Y la justificación de niveles
jerárquicos —normas constitucionales, normas legales, normas
administrativas y otras disposiciones—, se generan del principio de
supremacía constitucional.

Rivera Santibáñez, en su obra citada, Pág. 22, nos dice que “…el
principio de la supremacía de la constitución supone la concurrencia
del principio de la jerarquía normativa, que consiste en que la
estructura jurídica de un Estado se basa en criterios de niveles
jerárquicos que se establecen en función de sus órganos emisores, su
importancia y el sentido funcional. Significa que se constituye una
pirámide jurídica y fundamento de las demás normas jurídicas”.

De acuerdo con la doctrina constitucional dominante hoy, podemos


establecer la siguiente jerarquía de las normas jurídicas: Constitución,
leyes orgánicas, leyes ordinarias, Decretos.

10. Estructura o partes de la Constitución

Desde que aparecieron las constituciones escritas como consecuencia


del Constitucionalismo clásico, la ley fundamental se ha dividido en dos
partes: Una parte Dogmática y otra parte Orgánica. En ninguna
constitución moderna dejan de haber estas dos partes pueden ser más
o menos amplias.

66
Sociedad y Estado

10.1. Parte Dogmática


También llamada por algunos autores “material”. Es aquella parte de la
constitución que contiene no solamente una solemne declaración de
derechos y fijación de garantías, sino también una especie de
enumeración de aquellos. Los derechos son las facultades que tienen
las personas dentro del Estado, y que éste les reconoce y no puede
transgredirlos, y las garantías son los instrumentos legales mediante
los cuales se ponen en ejercicio los derechos, cuando estos han sido
desconocidos o atropellados por quienes tienen en sus manos el poder
público.

La parte dogmática “contiene la tabla de derechos y libertades básicos


de los individuos y sus grupos; las definiciones político-sociales que
ayudan a interpretar el sentido jurídico-político de la Constitución”

Todo esto nos conduce a señalar que la parte dogmática establece


“Derechos fundamentales de primera, segunda, tercera, cuarta, quinta,
deberes, garantías, recursos y principios constitucionales”.

10.2. Parte Orgánica


Es aquella parte de la Constitución que señala fundamentalmente la
organización del Estado y sus formas; en realidad define la forma de
gobierno estatal, el origen y el ejercicio del poder público, y las
modalidades como ésta actúa y su ejercicio, quienes lo ejercen, las
instituciones y autoridad por medio de los cuales se lo ejerce los
distintos mecanismos institucionales para la actuación del Estado, la
forma en que estos mecanismos se ligan, se separan y se controlan
mutuamente; es decir, es la disposición de la actividad vital del Estado
para cumplir sus objetivos.

Ningún Estado, desde que surgió el primero en la historia de la


humanidad, por embrionario que fuera, ha dejado de tener
organización, y por consiguiente, en la constitución tácita, sobre
entendido en las normas consuetudinarias, existía lógicamente lo que
hoy llamamos la parte orgánica.

67
Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

La parte orgánica “versa sobre su organización de los poderes públicos


y sus interrelaciones, y correspondientes competencias, que son más
complejas en los Estados federales o con autonomía regional; sobre el
modo de producción y modificación del ordenamiento jurídico
fundamental y sobre la trama de las instituciones políticas”

Todo ello nos conduce a señalar que la parte orgánica establece “La
organización y funcionamiento de los poderes Legislativo, Ejecutivo,
Judicial, la constitución, forma de elección, requisitos para ser elegido,
período constitucional, atribuciones. Asimismo, establece el Estado, su
forma, el gobierno su forma, soberanía, su forma, democracia, su forma
y otras instituciones”.

11. Clasificación de constituciones

Las constituciones como leyes fundamentales y supremas del


ordenamiento jurídico de cada país, varían en sus disposiciones y su
sistematización preceptiva, de acuerdo a las formas de gobierno de los
Estados.

• Constituciones consuetudinarias o no escritas.


• Constituciones escritas.
• Constituciones: otorgadas, pactadas e impuestas (Esta
clasificación corresponde a la antigüedad).
• Constitución originaria y Constitución derivada.
• Constitución programática y Constitución utilitaria.
• Constitución normativa, Constitución nominal y Constitución
semántica, etc.

12. ¿Qué es el Poder Constituyente?

El Poder Constituyente es un poder indelegable, aunque se encargue


su ejercicio a un cuerpo especial destinado a ese fin, y cuyos miembros
son elegidos con ese único objeto. En realidad, el pueblo no se
desprende nunca de ese poder, y por eso debe reservarse la palabra
definitiva, mediante el Referéndum.

68
Sociedad y Estado

La doctrina del Poder Constituyente fue formulada por el Abate


Emmanuel Sieyès, durante la Revolución Francesa y muy
particularmente en su obra ¿”Qué es el Tercer Estado”? publicada en
1788 y que ha sido reactualizada en los últimos años (versión
castellana por Francisco Ayala, Buenos Aires, 1948), al fundamentar la
necesidad de distinguir el Poder Constituyente voluntad política
creadora del Estado, mediante la dictación de su estatuto máximo, la
Constitución, de los poderes (órganos) constituidos creados por ella.

Por su parte, Néstor Pedro Saguéz, en su obra Elementos de Derecho


Constitucional, pág. 115, dice:

Segundo V. Linares Quintana, señala que el Poder Constituyente como


la facultad soberana del pueblo a darse su ordenamiento jurídico-
político fundamental originario, por medio de una Constitución, y a
revisar a ésta, total o parcialmente cuando sea necesario. En el primer
caso —añade Linares Quintana— el poder constituyente es originario;
en el segundo, es constituido, instituido o derivado.

Segundo V. Linares Quintana en su “Tratado de la Ciencia del Derecho


Constitucional”, define al Poder Constituyente “…como la facultad
soberana del pueblo a darse su ordenamiento jurídico-político
fundamental originario, por medio de una Constitución, y a revisar a
ésta, total o parcialmente. Cuando sea necesario. “En el primer caso —
añade Linares Quintana— el poder constituyente es originario; en el
segundo, es constituido, instituido o derivado””.

Carlos Sánchez Viamonte, el Poder Constituyente es “…la suprema


capacidad y dominio del pueblo, sobre sí mismo, para darse una
organización política y un ordenamiento jurídico”. “Es la voluntad
política creadora del Estado —añade Sánchez Viamonte— que se
convierte en voluntad jurídica al dictar la Constitución y crear, mediante
ella, el gobierno y el ordenamiento jurídico de la Sociedad”. El mismo
autor, en su obra “Manual de Derecho Constitucional”, Págs. 9 - 91,
define al Poder Constituyente expresando que éste “…es la soberanía
originaria, extraordinaria, suprema y directa en cuyo ejercicio la
sociedad política se identifica con el Estado, para darle nacimiento y

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Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

personalidad, y para crearle sus órganos de expresión necesaria y


continua. Originaria; porque es su primera manifestación de soberanía
y da origen al orden jurídico; extraordinaria; porque, a diferencia de los
poderes del gobierno, que son ordinarios y permanentes, el Poder
Constituyente sólo actúa cuando es necesario dictar una Constitución o
reformarla y cesa, cuando ha llenado su cometido; suprema, porque es
superior a toda otra manifestación de autoridad, desde que la crea o
constituye (poderes constituidos); determina su naturaleza, organiza su
funcionamiento y fija sus límites; directa, porque, según la doctrina que
inspiró su creación, su ejercicio requiere la intervención directa del
pueblo”.

13. ¿Cuál es su naturaleza?

La naturaleza del poder constituyente consiste en que: “…una vez


dictada la Constitución, el poder constituyente, como función, entra en
reposo, pero permanece vivo y latente en las disposiciones
constitucionales, en las cuales adquiere permanencia o, por lo menos,
estabilidad. Su ejercicio no se agota. Permanece en estado virtual o de
latencia, apto para ponerse de nuevo en movimiento cada vez que sea
necesaria la revisión de la Constitución o la reforma parcial de ella, esta
es la verdadera naturaleza del PODER CONSTITUYENTE”.

A nuestro juicio, no es tolerable tal prescindencia. El concepto del


poder constituyente nace de la idea de pueblo; es un poder que
corresponde al pueblo titular de la soberanía y sólo cobra sentido como
expresión de voluntad popular. Fue creado para el pueblo, como el
concepto de soberanía había sido creado para el rey. No es posible
restituir a los autócratas y oligarcas, con el nombre de poder
constituyente, aquella soberanía que los reyes perdieron.

14. ¿Cuál su importancia?

La importancia del Poder Constituyente se percibe en los momentos de


cambio de Constitución, pacífico, revolucionario, cuando surge “un
clima constituyente” que sensibiliza a la opinión pública. Es
comprensible que los ciudadanos se interesen por la elaboración de la

70
Sociedad y Estado

nueva Constitución, fundamento de todo el ordenamiento jurídico, base


de la convivencia pacífica.

Aunque la gran mayoría de los ciudadanos ignoran estos argumentos


jurídicos y desconozcan los términos jurídicos como poder
constituyente, ese clima constituyente les atrae y obliga a seguir los
debates en torno al nuevo texto constitucional.

15. ¿Cuáles son sus características y limitaciones?

Humberto Quiroga Lavié, en su obra Derecho Constitucional, Pág. 42,


señala que las características del Poder Constituyente, son:

“a) Es supremo: pues como poder social constituyente no es


constituido y no depende de ningún poder anterior.
b) Es ilimitado: en la medida de sus posibilidades (lo cual significa que
de hecho podrá estar sujeto a límites, pues no es un ser absoluto).
Además, no está sujeto a límites jurídicos.
c) Es extraordinario: cuando se ejerce a través de la normatividad,
pues se lo hace en casos de excepción.
d) Es ordinario: cuando se ejerce a través de la normalidad, pues
funciona continuadamente por medio de la interpretación constitucional
de la corte suprema y por las mutaciones constitucionales que
actualizan su efectividad.
e) Es único e indivisible: porque, se ejerza como se ejerza, es el
mismo poder constituyente; no cabe distinguir entre poder originario y
derivado.
f) Es intransferible: porque cuando un órgano ejerce el poder
constituyente lo hace siempre en forma originaria y no por delegación.
g) No es soberano: porque la soberanía es la cualidad de la norma
fundamental de un Estado según la cual ella no deriva de una norma
superior: soberanía es equivalente a invalidez (pues la norma no deriva
de otra su fundamento). En cambio, el poder constituyente no es una
norma sino una relación social”.

71
Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

16. ¿Qué debemos entender del Poder constituyente originario


y derivado?

16.1. Poder Constituyente Originario


El Poder Constituyente es originario cuando el nuevo orden jurídico que
él establece nace sin apoyarse en una norma positiva anterior, es decir,
cuando surge por primera vez. Ello puede tener lugar en el caso del
nacimiento de un nuevo Estado, al darse este su propia Constitución
independiente, o como consecuencia de la ruptura del orden jurídico
anterior, bien sea como resultado de un cambio revolucionario. El
Poder constituyente es originario, cuando importa la fundación de una
sociedad política global estableciendo su organización política y jurídica
fundamental, sin atenerse a reglas positivas preexistentes.

Vladimiro Naranjo Mesa, señala que el Poder Constituyente es


originario cuando el nuevo orden jurídico que él establece nace sin
apoyarse en una norma positiva anterior, es decir, cuando surge por
primera vez. Ello puede tener lugar en el caso del nacimiento o
conformación de un nuevo Estado, al darse este su propia Constitución
independiente, o como consecuencia de la ruptura del orden jurídico
anterior, bien sea como resultado de un cambio revolucionario.

Néstor Pedro Sagués, en su obra Teoría de la Constitución, citando a


Donoso Cortés, y recurriendo a parábolas meteorológicas, dice que el
Poder Constituyente originario “parece como el rayo que rasga el seno
de la nube, inflama la atmósfera, hiere a la víctima y se extingue”. En
términos más jurídicos, EISENMANN lo presenta, así: ninguna regla
limita su poder; ninguna obligación jurídica, positiva ni negativa, pesa
sobre él; puede incluir o no en la constitución toda regla que le plazca.
Porque es jurídicamente todopoderoso, él funda un orden radicalmente
nuevo en su principio; porque crea las primeras reglas, su ausencia de
toda regla de derecho, es decir, de derecho positivo anterior, dispone
de un poder jurídicamente absoluto.

En síntesis, el poder constituyente es originario cuando crea el Estado


mediante una Constitución y es derivado cuando la reforma.

72
Sociedad y Estado

16.2. Poder Constituyente Derivado


Naranjo Mesa, señala que el Poder Constituyente es Derivado, cuando
el ordenamiento jurídico nuevo surge de un sistema constitucional ya
establecido, basado en competencias y mediante procedimientos ya
existentes en vigor. Su funcionamiento está previsto en disposiciones
de la Constitución anterior, la cual dispone procedimientos especiales
para su revisión o reforma. De ahí que una de sus características sea
la legalidad, esto es, la sujeción al derecho establecido, del cual deriva
su eficacia.

Para Néstor P. Sagués, las enmiendas, reformas, revisión y sustitución


constitucional de la Constitución, son efectuadas por el Poder
Constituyente derivado.

Es cuando con el acto constituyente se modifica, total o parcialmente,


la organización política y jurídica resultante de una Constitución
persistente y conforme a los procedimientos establecidos por ella.

Humberto Quiroga Lavié, en su obra Derecho Constitucional, Pág. 39,


define que el “Poder Constituyente derivado (reformador) es aquel cuyo
ejercicio está regulado y limitado por el poder constituyente originario a
través de la constitución: para reformar la constitución se debe cumplir
con el procedimiento y respetar los límites que la propia constitución
establece. El racionalismo acepta, por esta vía, la reforma total o
parcial de la constitución, si se cumplen con los recaudos normativos;
el decisionismo sostiene que por esta vía no se puede cambiar la
constitución: sólo cabe modificar las normas que no afecten a las
decisiones fundamentales; el iusnaturalismo entiende que no se
pueden modificar aquellas partes de la constitución que sirven de
sustento a su estructura ideológica valorativa (aunque exista decisión
política fundamental en tal sentido: una ideología sólo se puede
cambiar por otra ideología mejor”.

17. Poder Constituido

El Poder Constituido no es más que la reunión de los poderes


Legislativo, Ejecutivo y Judicial establecidos por una constitución.

73
Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

TEMA 6

CONSTITUCIÓN POLÍTICA DEL ESTADO


BASES FUNDAMENTALES

PREÁMBULO

En tiempos inmemoriales se erigieron montañas, se desplazaron ríos,


se formaron lagos. Nuestra amazonia, nuestro chaco, nuestro altiplano
y nuestros llanos y valles se cubrieron de verdores y flores. Poblamos
esta sagrada Madre Tierra con rostros diferentes, y comprendimos
desde entonces la pluralidad vigente de todas las cosas y nuestra
diversidad como seres y culturas. Así conformamos nuestros pueblos, y
jamás comprendimos el racismo hasta que lo sufrimos desde los
funestos tiempos de la colonia.

El pueblo boliviano, de composición plural, desde la profundidad de la


historia, inspirado en las luchas del pasado, en la sublevación indígena
anticolonial, en la independencia, en las luchas populares de liberación,
en las marchas indígenas, sociales y sindicales, en las guerras del
agua y de octubre, en las luchas por la tierra y territorio, y con la
memoria de nuestros mártires, construimos un nuevo Estado.

Un Estado basado en el respeto e igualdad entre todos, con principios


de soberanía, dignidad, complementariedad, solidaridad, armonía y
equidad en la distribución y redistribución del producto social, donde

74
Sociedad y Estado

predomine la búsqueda del vivir bien; con respeto a la pluralidad


económica, social, jurídica, política y cultural de los habitantes de esta
tierra; en convivencia colectiva con acceso al agua, trabajo, educación,
salud y vivienda para todos.

Dejamos en el pasado el Estado colonial, republicano y neoliberal.


Asumimos el reto histórico de construir colectivamente el Estado
Unitario Social de Derecho Plurinacional Comunitario, que integra y
articula los propósitos de avanzar hacia una Bolivia democrática,
productiva, portadora e inspiradora de la paz, comprometida con el
desarrollo integral y con la libre determinación de los pueblos.

Nosotros, mujeres y hombres, a través de la Asamblea Constituyente y


con el poder originario del pueblo, manifestamos nuestro compromiso
con la unidad e integridad del país.

Cumpliendo el mandato de nuestros pueblos, con la fortaleza de


nuestra Pachamama y gracias a Dios, refundamos Bolivia.

Honor y gloria a los mártires de la gesta constituyente y liberadora, que


han hecho posible esta nueva historia.

PRIMERA PARTE

BASES FUNDAMENTALES DEL ESTADO


DERECHOS, DEBERES Y GARANTÍAS

TÍTULO I
BASES FUNDAMENTALES DEL ESTADO

CAPÍTULO PRIMERO
MODELO DE ESTADO

Artículo 1. Bolivia se constituye en un Estado Unitario Social de


Derecho Plurinacional Comunitario, libre, independiente, soberano,
democrático, intercultural, descentralizado y con autonomías. Bolivia se

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Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

funda en la pluralidad y el pluralismo político, económico, jurídico,


cultural y lingüístico, dentro del proceso integrador del país.

Artículo 2. Dada la existencia precolonial de las naciones y pueblos


indígena originario campesinos y su dominio ancestral sobre sus
territorios, se garantiza su libre determinación en el marco de la unidad
del Estado, que consiste en su derecho a la autonomía, al
autogobierno, a su cultura, al reconocimiento de sus instituciones y a la
consolidación de sus entidades territoriales, conforme a esta
Constitución y la ley.

Artículo 3. La nación boliviana está conformada por la totalidad de las


bolivianas y los bolivianos, las naciones y pueblos indígena originario
campesinos, y las comunidades interculturales y afrobolivianas que en
conjunto constituyen el pueblo boliviano.

Artículo 4. El Estado respeta y garantiza la libertad de religión y de


creencias espirituales, de acuerdo con sus cosmovisiones. El Estado
es independiente de la religión.

Artículo 5. I. Son idiomas oficiales del Estado el castellano y todos los


idiomas de las naciones y pueblos indígena originario campesinos, que
son el aymara, araona, baure, bésiro, canichana, cavineño, cayubaba,
chácobo, chimán, ese ejja, guaraní, guarasu’we, guarayu, itonama,
leco, machajuyai-kallawaya, machineri, maropa, mojeño-trinitario,
mojeño-ignaciano, moré, mosetén, movima, pacawara, puquina,
quechua, sirionó, tacana, tapiete, toromona, uru-chipaya, weenhayek,
yaminawa, yuki, yuracaré y zamuco.
II. El Gobierno plurinacional y los gobiernos departamentales deben
utilizar al menos dos idiomas oficiales. Uno de ellos debe ser el
castellano, y el otro se decidirá tomando en cuenta el uso, la
conveniencia, las circunstancias, las necesidades y preferencias de la
población en su totalidad o del territorio en cuestión. Los demás
gobiernos autónomos deben utilizar los idiomas propios de su territorio,
y uno de ellos debe ser el castellano.

76
Sociedad y Estado

Artículo 6. I. Sucre es la Capital de Bolivia.


II. Los símbolos del Estado son la bandera tricolor, rojo, amarillo y
verde; el himno boliviano; el escudo de armas; la wiphala; la
escarapela; la flor de la kantuta y la flor del patujú.

CAPÍTULO SEGUNDO
PRINCIPIOS, VALORES Y FINES DEL ESTADO

Artículo 7. La soberanía reside en el pueblo boliviano, se ejerce de


forma directa y delegada. De ella emanan, por delegación, las
funciones y atribuciones de los órganos del poder público; es
inalienable e imprescriptible.

Artículo 8. I. El Estado asume y promueve como principios ético-


morales de la sociedad plural: ama qhilla, ama llulla, ama suwa (no
seas flojo, no seas mentiroso ni seas ladrón), suma qamaña (vivir bien),
ñandereko (vida armoniosa), teko kavi (vida buena), ivi maraei (tierra
sin mal) y qhapaj ñan (camino o vida noble).
II. El Estado se sustenta en los valores de unidad, igualdad, inclusión,
dignidad, libertad, solidaridad, reciprocidad, respeto,
complementariedad, armonía, transparencia, equilibrio, igualdad de
oportunidades, equidad social y de género en la participación, bienestar
común, responsabilidad, justicia social, distribución y redistribución de
los productos y bienes sociales, para vivir bien.

Artículo 9. Son fines y funciones esenciales del Estado, además de los


que establece la Constitución y la ley:
1. Constituir una sociedad justa y armoniosa, cimentada en la
descolonización, sin discriminación ni explotación, con plena justicia
social, para consolidar las identidades plurinacionales.
2. Garantizar el bienestar, el desarrollo, la seguridad y la protección e
igual dignidad de las personas, las naciones, los pueblos y las
comunidades, y fomentar el respeto mutuo y el diálogo intracultural,
intercultural y plurilingüe.
3. Reafirmar y consolidar la unidad del país, y preservar como
patrimonio histórico y humano la diversidad plurinacional.

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Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

4. Garantizar el cumplimiento de los principios, valores, derechos y


deberes reconocidos y consagrados en esta Constitución.
5. Garantizar el acceso de las personas a la educación, a la salud y al
trabajo.
6. Promover y garantizar el aprovechamiento responsable y planificado
de los recursos naturales, e impulsar su industrialización, a través
del desarrollo y del fortalecimiento de la base productiva en sus
diferentes dimensiones y niveles, así como la conservación del
medio ambiente, para el bienestar de las generaciones actuales y
futuras.

Artículo 10. I. Bolivia es un Estado pacifista, que promueve la cultura


de la paz y el derecho a la paz, así como la cooperación entre los
pueblos de la región y del mundo, a fin de contribuir al conocimiento
mutuo, al desarrollo equitativo y a la promoción de la interculturalidad,
con pleno respeto a la soberanía de los estados.
II. Bolivia rechaza toda guerra de agresión como instrumento de
solución a los diferendos y conflictos entre estados y se reserva el
derecho a la legítima defensa en caso de agresión que comprometa la
independencia y la integridad del Estado.
III. Se prohíbe la instalación de bases militares extranjeras en territorio
boliviano.

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Sociedad y Estado

TEMA 7

CONSTITUCIÓN POLÍTICA DEL ESTADO

(PARTE DOGMÁTICA)

TÍTULO II
DERECHOS FUNDAMENTALES Y GARANTÍAS

CAPÍTULO PRIMERO
DISPOSICIONES GENERALES

Artículo 13. I. Los derechos reconocidos por esta Constitución son


inviolables, universales, interdependientes, indivisibles y progresivos. El
Estado tiene el deber de promoverlos, protegerlos y respetarlos.
II. Los derechos que proclama esta Constitución no serán entendidos
como negación de otros derechos no enunciados.
III. La clasificación de los derechos establecida en esta Constitución no
determina jerarquía alguna ni superioridad de unos derechos sobre
otros.
IV Los tratados y convenios internacionales ratificados por la Asamblea
Legislativa Plurinacional, que reconocen los derechos humanos y que
prohíben su limitación en los Estados de Excepción prevalecen en el

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Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

orden interno. Los derechos y deberes consagrados en esta


Constitución se interpretarán de conformidad con los Tratados
internacionales de derechos humanos ratificados por Bolivia.

Artículo 14. I. Todo ser humano tiene personalidad y capacidad


jurídica con arreglo a las leyes y goza de los derechos reconocidos por
esta Constitución, sin distinción alguna.
II. El Estado prohíbe y sanciona toda forma de discriminación fundada
en razón de sexo, color, edad, orientación sexual, identidad de género,
origen, cultura, nacionalidad, ciudadanía, idioma, credo religioso,
ideología, filiación política o filosófica, estado civil, condición económica
o social, tipo de ocupación, grado de instrucción, discapacidad,
embarazo, u otras que tengan por objetivo o resultado anular o
menoscabar el reconocimiento, goce o ejercicio, en condiciones de
igualdad, de los derechos de toda persona.
III. El Estado garantiza a todas las personas y colectividades, sin
discriminación alguna, el libre y eficaz ejercicio de los derechos
establecidos en esta Constitución, las leyes y los tratados
internacionales de derechos humanos.
IV. En el ejercicio de los derechos, nadie será obligado a hacer lo que
la Constitución y las leyes no manden, ni a privarse de lo que éstas no
prohíban.
V. Las leyes bolivianas se aplican a todas las personas, naturales o
jurídicas, bolivianas o extranjeras, en el territorio boliviano.
VI. Las extranjeras y los extranjeros en el territorio boliviano tienen los
derechos y deben cumplir los deberes establecidos en la Constitución,
salvo las restricciones que ésta contenga.

CAPÍTULO SEGUNDO
DERECHOS FUNDAMENTALES

Artículo 15. I. Toda persona tiene derecho a la vida y a la integridad


física, psicológica y sexual. Nadie será torturado, ni sufrirá tratos
crueles, inhumanos, degradantes o humillantes. No existe la pena de
muerte.

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Sociedad y Estado

II. Todas las personas, en particular las mujeres, tienen derecho a no


sufrir violencia física, sexual o psicológica, tanto en la familia como en
la sociedad.
III. El Estado adoptará las medidas necesarias para prevenir, eliminar y
sancionar la violencia de género y generacional, así como toda acción
u omisión que tenga por objeto degradar la condición humana, causar
muerte, dolor y sufrimiento físico, sexual o psicológico, tanto en el
ámbito público como privado.
IV. Ninguna persona podrá ser sometida a desaparición forzada por
causa o circunstancia alguna.
V. Ninguna persona podrá ser sometida a servidumbre ni esclavitud. Se
prohíbe la trata y tráfico de personas.

Artículo 16. I. Toda persona tiene derecho al agua y a la alimentación.


II. El Estado tiene la obligación de garantizar la seguridad alimentaria, a
través de una alimentación sana, adecuada y suficiente para toda la
población.

Artículo 17. Toda persona tiene derecho a recibir educación en todos


los niveles de manera universal, productiva, gratuita, integral e
intercultural, sin discriminación.

Artículo 18. I. Todas las personas tienen derecho a la salud.


II. El Estado garantiza la inclusión y el acceso a la salud de todas las
personas, sin exclusión ni discriminación alguna.
III. El sistema único de salud será universal, gratuito, equitativo,
intracultural, intercultural, participativo, con calidad, calidez y control
social. El sistema se basa en los principios de solidaridad, eficiencia y
corresponsabilidad y se desarrolla mediante políticas públicas en todos
los niveles de gobierno.

Artículo 19. I. Toda persona tiene derecho a un hábitat y vivienda


adecuada, que dignifiquen la vida familiar y comunitaria.
II. El Estado, en todos sus niveles de gobierno, promoverá planes de
vivienda de interés social, mediante sistemas adecuados de
financiamiento, basándose en los principios de solidaridad y equidad.

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Estos planes se destinarán preferentemente a familias de escasos


recursos, a grupos menos favorecidos y al área rural.

Artículo 20. I. Toda persona tiene derecho al acceso universal y


equitativo a los servicios básicos de agua potable, alcantarillado,
electricidad, gas domiciliario, postal y telecomunicaciones.
II. Es responsabilidad del Estado, en todos sus niveles de gobierno, la
provisión de los servicios básicos a través de entidades públicas,
mixtas, cooperativas o comunitarias. En los casos de electricidad, gas
domiciliario y telecomunicaciones se podrá prestar el servicio mediante
contratos con la empresa privada. La provisión de servicios debe
responder a los criterios de universalidad, responsabilidad,
accesibilidad, continuidad, calidad, eficiencia, eficacia, tarifas
equitativas y cobertura necesaria; con participación y control social.
III. El acceso al agua y alcantarillado constituyen derechos humanos,
no son objeto de concesión ni privatización y están sujetos a régimen
de licencias y registros, conforme a ley.

CAPÍTULO TERCERO
DERECHOS CIVILES Y POLÍTICOS

SECCIÓN I
DERECHOS CIVILES

Artículo 21. Las bolivianas y los bolivianos tienen los siguientes


derechos:
1. A la autoidentificación cultural.
2. A la privacidad, intimidad, honra, honor, propia imagen y dignidad.
3. A la libertad de pensamiento, espiritualidad, religión y culto,
expresados en forma individual o colectiva, tanto en público como en
privado, con fines lícitos.
4. A la libertad de reunión y asociación, en forma pública y privada, con
fines lícitos.
5. A expresar y difundir libremente pensamientos u opiniones por
cualquier medio de comunicación, de forma oral, escrita o visual,
individual o colectiva.

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Sociedad y Estado

6. A acceder a la información, interpretarla, analizarla y comunicarla


libremente, de manera individual o colectiva.
7. A la libertad de residencia, permanencia y circulación en todo el
territorio boliviano, que incluye la salida e ingreso del país.

Artículo 22. La dignidad y la libertad de la persona son inviolables.


Respetarlas y protegerlas es deber primordial del Estado.

Artículo 23. I. Toda persona tiene derecho a la libertad y seguridad


personal. La libertad personal sólo podrá ser restringida en los límites
señalados por la ley, para asegurar el descubrimiento de la verdad
histórica en la actuación de las instancias jurisdiccionales.
II. Se evitará la imposición a los adolescentes de medidas privativas de
libertad. Todo adolescente que se encuentre privado de libertad recibirá
atención preferente por parte de las autoridades judiciales,
administrativas y policiales. Éstas deberán asegurar en todo momento
el respeto a su dignidad y la reserva de su identidad. La detención
deberá cumplirse en recintos distintos de los asignados para los
adultos, teniendo en cuenta las necesidades propias de su edad.
III. Nadie podrá ser detenido, aprehendido o privado de su libertad,
salvo en los casos y según las formas establecidas por la ley. La
ejecución del mandamiento requerirá que éste emane de autoridad
competente y que sea emitido por escrito.
IV. Toda persona que sea encontrada en delito flagrante podrá ser
aprehendida por cualquier otra persona, aun sin mandamiento. El único
objeto de la aprehensión será su conducción ante autoridad judicial
competente, quien deberá resolver su situación jurídica en el plazo
máximo de veinticuatro horas.
V. En el momento en que una persona sea privada de su libertad, será
informada de los motivos por los que se procede a su detención, así
como de la denuncia o querella formulada en su contra.
VI. Los responsables de los centros de reclusión deberán llevar el
registro de personas privadas de libertad. No recibirán a ninguna
persona sin copiar en su registro el mandamiento correspondiente. Su
incumplimiento dará lugar al procesamiento y sanciones que señale la
ley.

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Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

Artículo 24. Toda persona tiene derecho a la petición de manera


individual o colectiva, sea oral o escrita, y a la obtención de respuesta
formal y pronta. Para el ejercicio de este derecho no se exigirá más
requisito que la identificación del peticionario.

Artículo 25. I. Toda persona tiene derecho a la inviolabilidad de su


domicilio y al secreto de las comunicaciones privadas en todas sus
formas, salvo autorización judicial.
II. Son inviolables la correspondencia, los papeles privados y las
manifestaciones privadas contenidas en cualquier soporte, éstos no
podrán ser incautados salvo en los casos determinados por la ley para
la investigación penal, en virtud de orden escrita y motivada de
autoridad judicial competente.
III. Ni la autoridad pública, ni persona u organismo alguno podrán
interceptar conversaciones o comunicaciones privadas mediante
instalación que las controle o centralice.
IV. La información y prueba obtenidas con violación de
correspondencia y comunicaciones en cualquiera de sus formas no
producirán efecto legal.

SECCIÓN II
DERECHOS POLÍTICOS

Artículo 26. I. Todas las ciudadanas y los ciudadanos tienen derecho a


participar libremente en la formación, ejercicio y control del poder
político, directamente o por medio de sus representantes, y de manera
individual o colectiva. La participación será equitativa y en igualdad de
condiciones entre hombres y mujeres.
II. El derecho a la participación comprende:
1. La organización con fines de participación política, conforme a la
Constitución y a la ley.
2. El sufragio, mediante voto igual, universal, directo, individual,
secreto, libre y obligatorio, escrutado públicamente. El sufragio se
ejercerá a partir de los dieciocho años cumplidos.
3. Donde se practique la democracia comunitaria, los procesos
electorales se ejercerán según normas y procedimientos propios,
supervisados por el Órgano Electoral, siempre y cuando el acto

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Sociedad y Estado

electoral no esté sujeto al voto igual, universal, directo, secreto, libre


y obligatorio.
4. La elección, designación y nominación directa de los representantes
de las naciones y pueblos indígena originario campesinos, de
acuerdo con sus normas y procedimientos propios.
5. La fiscalización de los actos de la función pública.

Artículo 27. I. Las bolivianas y los bolivianos residentes en el exterior


tienen derecho a participar en las elecciones a la Presidencia y
Vicepresidencia del Estado, y en las demás señaladas por la ley. El
derecho se ejercerá a través del registro y empadronamiento realizado
por el Órgano Electoral.
II. Las extranjeras y los extranjeros residentes en Bolivia tienen
derecho a sufragar en las elecciones municipales, conforme a la ley,
aplicando principios de reciprocidad internacional.

Artículo 28. El ejercicio de los derechos políticos se suspende en los


siguientes casos, previa sentencia ejecutoriada mientras la pena no
haya sido cumplida:
1. Por tomar armas y prestar servicio en fuerzas armadas enemigas en
tiempos de guerra.
2. Por defraudación de recursos públicos.
3. Por traición a la patria.

Artículo 29. I. Se reconoce a las extranjeras y los extranjeros el


derecho a pedir y recibir asilo o refugio por persecución política o
ideológica, de conformidad con las leyes y los tratados internacionales.
II. Toda persona a quien se haya otorgado en Bolivia asilo o refugio no
será expulsada o entregada a un país donde su vida, integridad,
seguridad o libertad peligren. El Estado atenderá de manera positiva,
humanitaria y expedita las solicitudes de reunificación familiar que se
presenten por padres o hijos asilados o refugiados.

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Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

CAPÍTULO CUARTO
DERECHOS DE LAS NACIONES Y PUEBLOS INDÍGENA
ORIGINARIO CAMPESINOS

Artículo 30. I. Es nación y pueblo indígena originario campesino toda


la colectividad humana que comparta identidad cultural, idioma,
tradición histórica, instituciones, territorialidad y cosmovisión, cuya
existencia es anterior a la invasión colonial española.
II. En el marco de la unidad del Estado y de acuerdo con esta
Constitución las naciones y pueblos indígena originario campesinos
gozan de los siguientes derechos:
1. A existir libremente.
2. A su identidad cultural, creencia religiosa, espiritualidades,
prácticas y costumbres, y a su propia cosmovisión.
3. A que la identidad cultural de cada uno de sus miembros, si así lo
desea, se inscriba junto a la ciudadanía boliviana en su cédula de
identidad, pasaporte u otros documentos de identificación con
validez legal.
4. A la libre determinación y territorialidad.
5. A que sus instituciones sean parte de la estructura general del
Estado.
6. A la titulación colectiva de tierras y territorios.
7. A la protección de sus lugares sagrados.
8. A crear y administrar sistemas, medios y redes de comunicación
propios.
9. A que sus saberes y conocimientos tradicionales, su medicina
tradicional, sus idiomas, sus rituales y sus símbolos y vestimentas
sean valorados, respetados y promocionados.
10. A vivir en un medio ambiente sano, con manejo y aprovechamiento
adecuado de los ecosistemas.
11. A la propiedad intelectual colectiva de sus saberes, ciencias y
conocimientos, así como a su valoración, uso, promoción y
desarrollo.
12. A una educación intracultural, intercultural y plurilingüe en todo el
sistema educativo.
13. Al sistema de salud universal y gratuito que respete su cosmovisión
y prácticas tradicionales.

86
Sociedad y Estado

14. Al ejercicio de sus sistemas políticos, jurídicos y económicos


acorde a su cosmovisión.
15. A ser consultados mediante procedimientos apropiados, y en
particular a través de sus instituciones, cada vez que se prevean
medidas legislativas o administrativas susceptibles de afectarles.
En este marco, se respetará y garantizará el derecho a la consulta
previa obligatoria, realizada por el Estado, de buena fe y
concertada, respecto a la explotación de los recursos naturales no
renovables en el territorio que habitan.
16. A la participación en los beneficios de la explotación de los
recursos naturales en sus territorios.
17. A la gestión territorial indígena autónoma, y al uso y
aprovechamiento exclusivo de los recursos naturales renovables
existentes en su territorio sin perjuicio de los derechos
legítimamente adquiridos por terceros.
18. A la participación en los órganos e instituciones del Estado.
III. El Estado garantiza, respeta y protege los derechos de las naciones
y pueblos indígena originario campesinos consagrados en esta
Constitución y la ley.

Artículo 31. I. Las naciones y pueblos indígena originarios en peligro


de extinción, en situación de aislamiento voluntario y no contactados,
serán protegidos y respetados en sus formas de vida individual y
colectiva.
II. Las naciones y pueblos indígenas en aislamiento y no contactados
gozan del derecho a mantenerse en esa condición, a la delimitación y
consolidación legal del territorio que ocupan y habitan.

Artículo 32. El pueblo afroboliviano goza, en todo lo que corresponda,


de los derechos económicos, sociales, políticos y culturales
reconocidos en la Constitución para las naciones y pueblos indígena
originario campesinos.

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Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

CAPÍTULO QUINTO
DERECHOS SOCIALES Y ECONÓMICOS

SECCIÓN I
DERECHO AL MEDIO AMBIENTE

Artículo 33. Las personas tienen derecho a un medio ambiente


saludable, protegido y equilibrado. El ejercicio de este derecho debe
permitir a los individuos y colectividades de las presentes y futuras
generaciones, además de otros seres vivos, desarrollarse de manera
normal y permanente.

Artículo 34. Cualquier persona, a título individual o en representación


de una colectividad, está facultada para ejercitar las acciones legales
en defensa del derecho al medio ambiente, sin perjuicio de la
obligación de las instituciones públicas de actuar de oficio frente a los
atentados contra el medio ambiente.

SECCIÓN II
DERECHO A LA SALUD Y A LA SEGURIDAD SOCIAL

Artículo 35. I. El Estado, en todos sus niveles, protegerá el derecho a


la salud, promoviendo políticas públicas orientadas a mejorar la calidad
de vida, el bienestar colectivo y el acceso gratuito de la población a los
servicios de salud.
II. El sistema de salud es único e incluye a la medicina tradicional de
las naciones y pueblos indígena originario campesinos.

Artículo 36. I. El Estado garantizará el acceso al seguro universal de


salud.
II. El Estado controlará el ejercicio de los servicios públicos y privados
de salud, y lo regulará mediante la ley.

Artículo 37. El Estado tiene la obligación indeclinable de garantizar y


sostener el derecho a la salud, que se constituye en una función
suprema y primera responsabilidad financiera. Se priorizará la
promoción de la salud y la prevención de las enfermedades.

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Sociedad y Estado

Artículo 38. I. Los bienes y servicios públicos de salud son propiedad


del Estado, y no podrán ser privatizados ni concesionados.
II. Los servicios de salud serán prestados de forma ininterrumpida.

Artículo 39. I. El Estado garantizará el servicio de salud público y


reconoce el servicio de salud privado; regulará y vigilará la atención de
calidad a través de auditorías médicas sostenibles que evalúen el
trabajo de su personal, la infraestructura y el equipamiento, de acuerdo
con la ley.
II. La ley sancionará las acciones u omisiones negligentes en el
ejercicio de la práctica médica.

Artículo 40. El Estado garantizará la participación de la población


organizada en la toma de decisiones, y en la gestión de todo el sistema
público de salud.

Artículo 41. I. El Estado garantizará el acceso de la población a los


medicamentos.
II. El Estado priorizará los medicamentos genéricos a través del
fomento de su producción interna y, en su caso, determinará su
importación.
III. El derecho a acceder a los medicamentos no podrá ser restringido
por los derechos de propiedad intelectual y comercialización, y
contemplará estándares de calidad y primera generación.

Artículo 42. I. Es responsabilidad del Estado promover y garantizar el


respeto, uso, investigación y práctica de la medicina tradicional,
rescatando los conocimientos y prácticas ancestrales desde el
pensamiento y valores de todas las naciones y pueblos indígena
originario campesinos.
II. La promoción de la medicina tradicional incorporará el registro de
medicamentos naturales y de sus principios activos, así como la
protección de su conocimiento como propiedad intelectual, histórica,
cultural, y como patrimonio de las naciones y pueblos indígena
originario campesinos.

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Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

III. La ley regulará el ejercicio de la medicina tradicional y garantizará la


calidad de su servicio.

Artículo 43. La ley regulará las donaciones o trasplantes de células,


tejidos u órganos bajo los principios de humanidad, solidaridad,
oportunidad, gratuidad y eficiencia.

Artículo 44. I. Ninguna persona será sometida a intervención


quirúrgica, examen médico o de laboratorio sin su consentimiento o el
de terceros legalmente autorizados, salvo peligro inminente de su vida.
II. Ninguna persona será sometida a experimentos científicos sin su
consentimiento.

Artículo 45. I. Todas las bolivianas y los bolivianos tienen derecho a


acceder a la seguridad social.
II. La seguridad social se presta bajo los principios de universalidad,
integralidad, equidad, solidaridad, unidad de gestión, economía,
oportunidad, interculturalidad y eficacia. Su dirección y administración
corresponde al Estado, con control y participación social.
III. El régimen de seguridad social cubre atención por enfermedad,
epidemias y enfermedades catastróficas; maternidad y paternidad;
riesgos profesionales, laborales y riesgos por labores de campo;
discapacidad y necesidades especiales; desempleo y pérdida de
empleo; orfandad, invalidez, viudez, vejez y muerte; vivienda,
asignaciones familiares y otras previsiones sociales.
IV. El Estado garantiza el derecho a la jubilación, con carácter
universal, solidario y equitativo.
V. Las mujeres tienen derecho a la maternidad segura, con una visión y
práctica intercultural; gozarán de especial asistencia y protección del
Estado durante el embarazo, parto y en los periodos prenatal y
posnatal.
VI. Los servicios de seguridad social pública no podrán ser privatizados
ni concesionados.

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Sociedad y Estado

SECCIÓN III
DERECHO AL TRABAJO Y AL EMPLEO

Artículo 46. I. Toda persona tiene derecho:


1. Al trabajo digno, con seguridad industrial, higiene y salud
ocupacional, sin discriminación, y con remuneración o salario justo,
equitativo y satisfactorio, que le asegure para sí y su familia una
existencia digna.
2. A una fuente laboral estable, en condiciones equitativas y
satisfactorias.
II. El Estado protegerá el ejercicio del trabajo en todas sus formas.
III. Se prohíbe toda forma de trabajo forzoso u otro modo análogo de
explotación que obligue a una persona a realizar labores sin su
consentimiento y justa retribución.

Artículo 47. I. Toda persona tiene derecho a dedicarse al comercio, la


industria o a cualquier actividad económica lícita, en condiciones que
no perjudiquen al bien colectivo.
II. Las trabajadoras y los trabajadores de pequeñas unidades
productivas urbanas o rurales, por cuenta propia, y gremialistas en
general, gozarán por parte del Estado de un régimen de protección
especial, mediante una política de intercambio comercial equitativo y de
precios justos para sus productos, así como la asignación preferente de
recursos económicos financieros para incentivar su producción.
III. El Estado protegerá, fomentará y fortalecerá las formas
comunitarias de producción.

Artículo 48. I. Las disposiciones sociales y laborales son de


cumplimiento obligatorio.
II. Las normas laborales se interpretarán y aplicarán bajo los principios
de protección de las trabajadoras y de los trabajadores como principal
fuerza productiva de la sociedad; de primacía de la relación laboral; de
continuidad y estabilidad laboral; de no discriminación y de inversión de
la prueba a favor de la trabajadora y del trabajador.
III. Los derechos y beneficios reconocidos en favor de las trabajadoras
y los trabajadores no pueden renunciarse, y son nulas las
convenciones contrarias o que tiendan a burlar sus efectos.

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Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

IV. Los salarios o sueldos devengados, derechos laborales, beneficios


sociales y aportes a la seguridad social no pagados tienen privilegio y
preferencia sobre cualquier otra acreencia, y son inembargables e
imprescriptibles.
V. El Estado promoverá la incorporación de las mujeres al trabajo y
garantizará la misma remuneración que a los hombres por un trabajo
de igual valor, tanto en el ámbito público como en el privado.
VI. Las mujeres no podrán ser discriminadas o despedidas por su
estado civil, situación de embarazo, edad, rasgos físicos o número de
hijas o hijos. Se garantiza la inamovilidad laboral de las mujeres en
estado de embarazo, y de los progenitores, hasta que la hija o el hijo
cumplan un año de edad.
VII. El Estado garantizará la incorporación de las jóvenes y los jóvenes
en el sistema productivo, de acuerdo con su capacitación y formación.

Artículo 49. I. Se reconoce el derecho a la negociación colectiva.


II. La ley regulará las relaciones laborales relativas a contratos y
convenios colectivos; salarios mínimos generales, sectoriales e
incrementos salariales; reincorporación; descansos remunerados y
feriados; cómputo de antigüedad, jornada laboral, horas extra, recargo
nocturno, dominicales; aguinaldos, bonos, primas u otros sistemas de
participación en las utilidades de la empresa; indemnizaciones y
desahucios; maternidad laboral; capacitación y formación profesional, y
otros derechos sociales.
III. El Estado protegerá la estabilidad laboral. Se prohíbe el despido
injustificado y toda forma de acoso laboral. La ley determinará las
sanciones correspondientes.

Artículo 50. El Estado, mediante tribunales y organismos


administrativos especializados, resolverá todos los conflictos
emergentes de las relaciones laborales entre empleadores y
trabajadores, incluidos los de la seguridad industrial y los de la
seguridad social.

Artículo 51. I. Todas las trabajadoras y los trabajadores tienen derecho


a organizarse en sindicatos de acuerdo con la ley.

92
Sociedad y Estado

II. El Estado respetará los principios sindicales de unidad, democracia


sindical, pluralismo político, autosostenimiento, solidaridad e
internacionalismo.
III. Se reconoce y garantiza la sindicalización como medio de defensa,
representación, asistencia, educación y cultura de las trabajadoras y
los trabajadores del campo y de la ciudad.
IV. El Estado respetará la independencia ideológica y organizativa de
los sindicatos. Los sindicatos gozarán de personalidad jurídica por el
solo hecho de organizarse y ser reconocidos por sus entidades
matrices.
V. El patrimonio tangible e intangible de las organizaciones sindicales
es inviolable, inembargable e indelegable.
VI. Las dirigentas y los dirigentes sindicales gozan de fuero sindical, no
se les despedirá hasta un año después de la finalización de su gestión
y no se les disminuirán sus derechos sociales, ni se les someterá a
persecución ni privación de libertad por actos realizados en el
cumplimiento de su labor sindical.
VII. Las trabajadoras y los trabajadores por cuenta propia tienen el
derecho a organizarse para la defensa de sus intereses.

Artículo 52. I. Se reconoce y garantiza el derecho a la libre asociación


empresarial.
II. El Estado garantizará el reconocimiento de la personalidad jurídica
de las asociaciones empresariales, así como las formas democráticas
organizativas empresariales, de acuerdo con sus propios estatutos.
III. El Estado reconoce las instituciones de capacitación de las
organizaciones empresariales.
IV. El patrimonio de las organizaciones empresariales, tangible e
intangible, es inviolable e inembargable.

Artículo 53. Se garantiza el derecho a la huelga como el ejercicio de la


facultad legal de las trabajadoras y los trabajadores de suspender
labores para la defensa de sus derechos, de acuerdo con la ley.

Artículo 54. I. Es obligación del Estado establecer políticas de empleo


que eviten la desocupación y la subocupación, con la finalidad de crear,
mantener y generar condiciones que garanticen a las trabajadoras y los

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Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

trabajadores posibilidades de ocupación laboral digna y de


remuneración justa.
II. Es deber del Estado y de la sociedad la protección y defensa del
aparato industrial y de los servicios estatales.
III. Las trabajadoras y los trabajadores, en defensa de sus fuentes de
trabajo y en resguardo del interés social podrán, de acuerdo con la ley,
reactivar y reorganizar empresas en proceso de quiebra, concurso o
liquidación, cerradas o abandonadas de forma injustificada, y
conformarán empresas comunitarias o sociales. El Estado podrá
coadyuvar a la acción de las trabajadoras y los trabajadores.

Artículo 55. El sistema cooperativo se sustenta en los principios de


solidaridad, igualdad, reciprocidad, equidad en la distribución, finalidad
social, y no lucro de sus asociados. El Estado fomentará y regulará la
organización de cooperativas mediante la ley.

SECCIÓN IV
DERECHO A LA PROPIEDAD

Artículo 56. I. Toda persona tiene derecho a la propiedad privada


individual o colectiva, siempre que ésta cumpla una función social.
II. Se garantiza la propiedad privada siempre que el uso que se haga
de ella no sea perjudicial al interés colectivo.
III. Se garantiza el derecho a la sucesión hereditaria.

Artículo 57. La expropiación se impondrá por causa de necesidad o


utilidad pública, calificada conforme con la ley y previa indemnización
justa. La propiedad inmueble urbana no está sujeta a reversión.

SECCIÓN V
DERECHOS DE LA NIÑEZ, ADOLESCENCIA Y JUVENTUD

Artículo 58. Se considera niña, niño o adolescente a toda persona


menor de edad. Las niñas, niños y adolescentes son titulares de los
derechos reconocidos en la Constitución, con los límites establecidos
en ésta, y de los derechos específicos inherentes a su proceso de
desarrollo; a su identidad étnica, sociocultural, de género y

94
Sociedad y Estado

generacional; y a la satisfacción de sus necesidades, intereses y


aspiraciones.

Artículo 59. I. Toda niña, niño y adolescente tiene derecho a su


desarrollo integral.
II. Toda niña, niño y adolescente tiene derecho a vivir y a crecer en el
seno de su familia de origen o adoptiva. Cuando ello no sea posible, o
sea contrario a su interés superior, tendrá derecho a una familia
sustituta, de conformidad con la ley.
III. Todas las niñas, niños y adolescentes, sin distinción de su origen,
tienen iguales derechos y deberes respecto a sus progenitores. La
discriminación entre hijos por parte de los progenitores será
sancionada por la ley.
IV. Toda niña, niño y adolescente tiene derecho a la identidad y la
filiación respecto a sus progenitores. Cuando no se conozcan los
progenitores, utilizarán el apellido convencional elegido por la persona
responsable de su cuidado.
V. El Estado y la sociedad garantizarán la protección, promoción y
activa participación de las jóvenes y los jóvenes en el desarrollo
productivo, político, social, económico y cultural, sin discriminación
alguna, de acuerdo con la ley.

Artículo 60. Es deber del Estado, la sociedad y la familia garantizar la


prioridad del interés superior de la niña, niño y adolescente, que
comprende la preeminencia de sus derechos, la primacía en recibir
protección y socorro en cualquier circunstancia, la prioridad en la
atención de los servicios públicos y privados, y el acceso a una
administración de justicia pronta, oportuna y con asistencia de personal
especializado.

Artículo 61. I. Se prohíbe y sanciona toda forma de violencia contra las


niñas, niños y adolescentes, tanto en la familia como en la sociedad.
II. Se prohíbe el trabajo forzado y la explotación infantil. Las actividades
que realicen las niñas, niños y adolescentes en el marco familiar y
social estarán orientadas a su formación integral como ciudadanas y
ciudadanos, y tendrán una función formativa. Sus derechos, garantías y

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Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

mecanismos institucionales de protección serán objeto de regulación


especial.

SECCIÓN VI
DERECHOS DE LAS FAMILIAS

Artículo 62. El Estado reconoce y protege a las familias como el


núcleo fundamental de la sociedad, y garantizará las condiciones
sociales y económicas necesarias para su desarrollo integral. Todos
sus integrantes tienen igualdad de derechos, obligaciones y
oportunidades.

Artículo 63. I. El matrimonio entre una mujer y un hombre se


constituye por vínculos jurídicos y se basa en la igualdad de derechos y
deberes de los cónyuges.
II. Las uniones libres o de hecho que reúnan condiciones de estabilidad
y singularidad, y sean mantenidas entre una mujer y un hombre sin
impedimento legal, producirán los mismos efectos que el matrimonio
civil, tanto en las relaciones personales y patrimoniales de los
convivientes como en lo que respecta a las hijas e hijos adoptados o
nacidos de aquéllas.

Artículo 64. I. Los cónyuges o convivientes tienen el deber de atender,


en igualdad de condiciones y mediante el esfuerzo común, el
mantenimiento y responsabilidad del hogar, la educación y formación
integral de las hijas e hijos mientras sean menores o tengan alguna
discapacidad.
II. El Estado protegerá y asistirá a quienes sean responsables de las
familias en el ejercicio de sus obligaciones.

Artículo 65. En virtud del interés superior de las niñas, niños y


adolescentes y de su derecho a la identidad, la presunción de filiación
se hará valer por indicación de la madre o el padre. Esta presunción
será válida salvo prueba en contrario a cargo de quien niegue la
filiación. En caso de que la prueba niegue la presunción, los gastos
incurridos corresponderán a quien haya indicado la filiación.

96
Sociedad y Estado

Artículo 66. Se garantiza a las mujeres y a los hombres el ejercicio de


sus derechos sexuales y sus derechos reproductivos.

TÍTULO III
DEBERES

Artículo 108. Son deberes de las bolivianas y los bolivianos:


1. Conocer, cumplir y hacer cumplir la Constitución y las leyes
2. Conocer, respetar y promover los derechos reconocidos en la
Constitución.
3. Promover y difundir la práctica de los valores y principios que
proclama la Constitución.
4. Defender, promover y contribuir al derecho a la paz y fomentar la
cultura de paz.
5. Trabajar, según su capacidad física e intelectual, en actividades
lícitas y socialmente útiles.
6. Formarse en el sistema educativo hasta el bachillerato.
7. Tributar en proporción a su capacidad económica, conforme con la
ley.
8. Denunciar y combatir todos los actos de corrupción.
9. Asistir, alimentar y educar a las hijas e hijos.
10. Asistir, proteger y socorrer a sus ascendientes.
11. Socorrer con todo el apoyo necesario, en casos de desastres
naturales y otras contingencias.
12. Prestar el servicio militar, obligatorio para los varones.
13. Defender la unidad, la soberanía y la integridad territorial de Bolivia,
y respetar sus símbolos y valores.
14. Resguardar, defender y proteger el patrimonio natural, económico y
cultural de Bolivia.
15. Proteger y defender los recursos naturales y contribuir a su uso
sustentable, para preservar los derechos de las futuras
generaciones.
16. Proteger y defender un medio ambiente adecuado para el
desarrollo de los seres vivos.

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Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

TÍTULO IV
GARANTÍAS JURISDICCIONALES Y ACCIONES DE DEFENSA
CAPÍTULO PRIMERO
GARANTÍAS JURISDICCIONALES

Artículo 109. I. Todos los derechos reconocidos en la Constitución son


directamente aplicables y gozan de iguales garantías para su
protección.
II. Los derechos y sus garantías sólo podrán ser regulados por la ley.

Artículo 110. I. Las personas que vulneren derechos constitucionales


quedan sujetas a la jurisdicción y competencia de las autoridades
bolivianas.
II. La vulneración de los derechos constitucionales hace responsables a
sus autores intelectuales y materiales.
III. Los atentados contra la seguridad personal hacen responsables a
sus autores inmediatos, sin que pueda servirles de excusa el haberlos
cometido por orden superior.

Artículo 111. Los delitos de genocidio, de lesa humanidad, de traición


a la patria, crímenes de guerra son imprescriptibles.

Artículo 112. Los delitos cometidos por servidores públicos que


atenten contra el patrimonio del Estado y causen grave daño
económico, son imprescriptibles y no admiten régimen de inmunidad.

Artículo 113. I. La vulneración de los derechos concede a las víctimas


el derecho a la indemnización, reparación y resarcimiento de daños y
perjuicios en forma oportuna.
II. En caso de que el Estado sea condenado a la reparación patrimonial
de daños y perjuicios, deberá interponer la acción de repetición contra
la autoridad o servidor público responsable de la acción u omisión que
provocó el daño.

Artículo 114. I. Queda prohibida toda forma de tortura, desaparición,


confinamiento, coacción, exacción o cualquier forma de violencia física
o moral. Las servidoras públicas y los servidores públicos o las

98
Sociedad y Estado

autoridades públicas que las apliquen, instiguen o consientan, serán


destituidas y destituidos, sin perjuicio de las sanciones determinadas
por la ley.
II. Las declaraciones, acciones u omisiones obtenidas o realizadas
mediante el empleo de tortura, coacción, exacción o cualquier forma de
violencia, son nulas de pleno derecho.

Artículo 115. I. Toda persona será protegida oportuna y efectivamente


por los jueces y tribunales en el ejercicio de sus derechos e intereses
legítimos.
II. El Estado garantiza el derecho al debido proceso, a la defensa y a
una justicia plural, pronta, oportuna, gratuita, transparente y sin
dilaciones.

Artículo 116. I. Se garantiza la presunción de inocencia. Durante el


proceso, en caso de duda sobre la norma aplicable, regirá la más
favorable al imputado o procesado.
II. Cualquier sanción debe fundarse en una ley anterior al hecho
punible.

Artículo 117. I. Ninguna persona puede ser condenada sin haber sido
oída y juzgada previamente en un debido proceso. Nadie sufrirá
sanción penal que no haya sido impuesta por autoridad judicial
competente en sentencia ejecutoriada.
II. Nadie será procesado ni condenado más de una vez por el mismo
hecho. La rehabilitación en sus derechos restringidos será inmediata al
cumplimiento de su condena.
III. No se impondrá sanción privativa de libertad por deudas u
obligaciones patrimoniales, excepto en los casos establecidos por la
ley.

Artículo 118. I. Está prohibida la infamia, la muerte civil y el


confinamiento.
II. La máxima sanción penal será de treinta años de privación de
libertad, sin derecho a indulto.

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Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

III. El cumplimiento de las sanciones privativas de libertad y las


medidas de seguridad están orientadas a la educación, habilitación e
inserción social de los condenados, con respeto a sus derechos.

Artículo 119. I. Las partes en conflicto gozarán de igualdad de


oportunidades para ejercer durante el proceso las facultades y los
derechos que les asistan, sea por la vía ordinaria o por la indígena
originaria campesina.
II. Toda persona tiene derecho inviolable a la defensa. El Estado
proporcionará a las personas denunciadas o imputadas una defensora
o un defensor gratuito, en los casos en que éstas no cuenten con los
recursos económicos necesarios.

Artículo 120. I. Toda persona tiene derecho a ser oída por una
autoridad jurisdiccional competente, independiente e imparcial, y no
podrá ser juzgada por comisiones especiales ni sometida a otras
autoridades jurisdiccionales que las establecidas con anterioridad al
hecho de la causa.
II. Toda persona sometida a proceso debe ser juzgada en su idioma;
excepcionalmente, de manera obligatoria, deberá ser asistida por
traductora, traductor o intérprete.

Artículo 121. I. En materia penal, ninguna persona podrá ser obligada


a declarar contra sí misma, ni contra sus parientes consanguíneos
hasta el cuarto grado o sus afines hasta el segundo grado. El derecho
de guardar silencio no será considerado como indicio de culpabilidad.
II. La víctima en un proceso penal podrá intervenir de acuerdo con la
ley, y tendrá derecho a ser oída antes de cada decisión judicial. En
caso de no contar con los recursos económicos necesarios, deberá ser
asistida gratuitamente por una abogada o abogado asignado por el
Estado.

Artículo 122. Son nulos los actos de las personas que usurpen
funciones que no les competen, así como los actos de las que ejercen
jurisdicción o potestad que no emane de la ley.

100
Sociedad y Estado

Artículo 123. La ley sólo dispone para lo venidero y no tendrá efecto


retroactivo, excepto en materia laboral, cuando lo determine
expresamente a favor de las trabajadoras y de los trabajadores; en
materia penal, cuando beneficie a la imputada o al imputado; en
materia de corrupción, para investigar, procesar y sancionar los delitos
cometidos por servidores públicos contra los intereses del Estado; y en
el resto de los casos señalados por la Constitución.

Artículo 124. I. Comete delito de traición a la patria la boliviana o el


boliviano que incurra en los siguientes hechos:
1. Que tome armas contra su país, se ponga al servicio de estados
extranjeros participantes, o entre en complicidad con el enemigo, en
caso de guerra internacional contra Bolivia.
2. Que viole el régimen constitucional de recursos naturales.
3. Que atente contra la unidad del país.
II. Este delito merecerá la máxima sanción penal.

CAPÍTULO SEGUNDO
ACCIONES DE DEFENSA

SECCIÓN I
ACCIÓN DE LIBERTAD

Artículo 125. Toda persona que considere que su vida está en peligro,
que es ilegalmente perseguida, o que es indebidamente procesada o
privada de libertad personal, podrá interponer Acción de Libertad y
acudir, de manera oral o escrita, por sí o por cualquiera a su nombre y
sin ninguna formalidad procesal, ante cualquier juez o tribunal
competente en materia penal, y solicitará que se guarde tutela a su
vida, cese la persecución indebida, se restablezcan las formalidades
legales o se restituya su derecho a la libertad.

Artículo 126. I. La autoridad judicial señalará de inmediato día y hora


de la audiencia pública, la cual tendrá lugar dentro de las veinticuatro
horas de interpuesta la acción, y dispondrá que la persona accionante
sea conducida a su presencia o acudirá al lugar de la detención. Con
dicha orden se practicará la citación, personal o por cédula, a la

101
Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

autoridad o a la persona denunciada, orden que será obedecida sin


observación ni excusa, tanto por la autoridad o la persona denunciada
como por los encargados de las cárceles o lugares de detención, sin
que éstos, una vez citados, puedan desobedecer.
II. En ningún caso podrá suspenderse la audiencia. En ausencia del
demandado, por inasistencia o abandono, se llevará a efecto en su
rebeldía.
III. Conocidos los antecedentes y oídas las alegaciones, la autoridad
judicial, obligatoriamente y bajo responsabilidad, dictará sentencia en la
misma audiencia. La sentencia podrá ordenar la tutela de la vida, la
restitución del derecho a la libertad, la reparación de los defectos
legales, el cese de la persecución indebida o la remisión del caso al
juez competente. En todos los casos, las partes quedarán notificadas
con la lectura de la sentencia.
IV. El fallo judicial será ejecutado inmediatamente. Sin perjuicio de ello,
la decisión se elevará en revisión, de oficio, ante el Tribunal
Constitucional Plurinacional, en el plazo de las veinticuatro horas
siguientes a su emisión.

Artículo 127. I. Los servidores públicos o personas particulares que


resistan las decisiones judiciales en los casos previstos por esta
acción, serán remitidos por orden de la autoridad que conoció de la
acción ante el Ministerio Público para su procesamiento penal por
atentado contra las garantías constitucionales.
II. La autoridad judicial que no proceda conforme con lo dispuesto por
este artículo quedará sujeta a sanción, de acuerdo con la Constitución
y la ley.

SECCIÓN II
ACCIÓN DE AMPARO CONSTITUCIONAL

Artículo 128. La Acción de Amparo Constitucional tendrá lugar contra


actos u omisiones ilegales o indebidos de los servidores públicos, o de
persona individual o colectiva, que restrinjan, supriman o amenacen
restringir o suprimir los derechos reconocidos por la Constitución y la
ley.

102
Sociedad y Estado

Artículo 129. I. La Acción de Amparo Constitucional se interpondrá por


la persona que se crea afectada, por otra a su nombre con poder
suficiente o por la autoridad correspondiente de acuerdo con la
Constitución, ante cualquier juez o tribunal competente, siempre que no
exista otro medio o recurso legal para la protección inmediata de los
derechos y garantías restringidos, suprimidos o amenazados.
II. La Acción de Amparo Constitucional podrá interponerse en el plazo
máximo de seis meses, computable a partir de la comisión de la
vulneración alegada o de notificada la última decisión administrativa o
judicial.
III. La autoridad o persona demandada será citada en la forma prevista
para la Acción de Libertad, con el objeto de que preste información y
presente, en su caso, los actuados concernientes al hecho denunciado,
en el plazo máximo de cuarenta y ocho horas desde la presentación de
la Acción.
IV. La resolución final se pronunciará en audiencia pública
inmediatamente recibida la información de la autoridad o persona
demandada y, a falta de ésta, lo hará sobre la base de la prueba que
ofrezca la persona accionante. La autoridad judicial examinará la
competencia de la servidora pública o del servidor público o de la
persona demandada y, en caso de encontrar cierta y efectiva la
demanda, concederá el amparo solicitado. La decisión que se
pronuncie se elevará, de oficio, en revisión ante el Tribunal
Constitucional Plurinacional en el plazo de las veinticuatro horas
siguientes a la emisión del fallo.
V. La decisión final que conceda la Acción de Amparo Constitucional
será ejecutada inmediatamente y sin observación. En caso de
resistencia se procederá de acuerdo con lo señalado en la Acción de
Libertad. La autoridad judicial que no proceda conforme con lo
dispuesto por este artículo, quedará sujeta a las sanciones previstas
por la ley.

SECCIÓN III
ACCIÓN DE PROTECCIÓN DE PRIVACIDAD

Artículo 130. I. Toda persona individual o colectiva que crea estar


indebida o ilegalmente impedida de conocer, objetar u obtener la

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eliminación o rectificación de los datos registrados por cualquier medio


físico, electrónico, magnético o informático, en archivos o bancos de
datos públicos o privados, o que afecten a su derecho fundamental a la
intimidad y privacidad personal o familiar, o a su propia imagen, honra y
reputación, podrá interponer la Acción de Protección de Privacidad.
II. La Acción de Protección de Privacidad no procederá para levantar el
secreto en materia de prensa.

Artículo 131. I. La Acción de Protección de Privacidad tendrá lugar de


acuerdo con el procedimiento previsto para la acción de Amparo
Constitucional.
II. Si el tribunal o juez competente declara procedente la acción,
ordenará la revelación, eliminación o rectificación de los datos cuyo
registro fue impugnado.
III. La decisión se elevará, de oficio, en revisión ante el Tribunal
Constitucional Plurinacional en el plazo de las veinticuatro horas
siguientes a la emisión del fallo, sin que por ello se suspenda su
ejecución.
IV. La decisión final que conceda la Acción de Protección de Privacidad
será ejecutada inmediatamente y sin observación. En caso de
resistencia se procederá de acuerdo con lo señalado en la Acción de
Libertad. La autoridad judicial que no proceda conforme con lo
dispuesto por este artículo quedará sujeta a las sanciones previstas

104
Sociedad y Estado

TEMA 8

CONSTITUCIÓN POLÍTICA DEL ESTADO

(PARTE ORGÁNICA)

SEGUNDA PARTE
ESTRUCTURA Y ORGANIZACIÓN FUNCIONAL DEL ESTADO

TÍTULO I
ÓRGANO LEGISLATIVO

CAPÍTULO PRIMERO
COMPOSICIÓN Y ATRIBUCIONES DE LA ASAMBLEA
LEGISLATIVA PLURINACIONAL

Artículo 145. La Asamblea Legislativa Plurinacional está compuesta


por dos cámaras, la Cámara de Diputados y la Cámara de Senadores,
y es la única con facultad de aprobar y sancionar leyes que rigen para
todo el territorio boliviano.

Artículo 146
I. La Cámara de Diputados estará conformada por 130 miembros.
II. En cada Departamento, se eligen la mitad de los Diputados en
circunscripciones uninominales. La otra mitad se elige en
circunscripciones plurinominales departamentales, de las listas

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Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

encabezadas por los candidatos a Presidente, Vicepresidente y


Senadores de la República.
III. Los Diputados son elegidos en votación universal, directa y
secreta. En las circunscripciones uninominales por simple mayoría
de sufragios. En las circunscripciones plurinominales mediante el
sistema de representación que establece la ley.
IV. El número de Diputados debe reflejar la votación proporcional
obtenida por cada partido, agrupación ciudadana o pueblo
indígena.
V. La distribución del total de escaños entre los departamentos se
determinará por el Órgano Electoral en base al número de
habitantes de cada uno de ellos, de acuerdo al último Censo
Nacional, de acuerdo a la Ley. Por equidad la ley asignará un
número de escaños mínimo a los departamentos con menor
población y menor grado de desarrollo económico. Si la distribución
de escaños para cualquier departamento resultare impar, se dará
preferencia a la asignación de escaños uninominales.
VI. Las circunscripciones uninominales deben tener continuidad
geográfica, afinidad y continuidad territorial, no trascender los
límites de cada departamento y basarse en criterios de población y
extensión territorial. El Órgano Electoral delimitará las
circunscripciones uninominales.
VII. Las circunscripciones especiales indígena originario campesinas,
se regirán por el principio de densidad poblacional en cada
departamento. No deberán trascender los límites departamentales.
Se establecerán solamente en el área rural, y en aquellos
departamentos en los que estos pueblos y naciones indígena
originario campesinos constituyan una minoría poblacional. El
Órgano Electoral determinará las circunscripciones especiales.
Estas circunscripciones forman parte del número total de
diputados.

Artículo 147.
I En la elección de asambleístas se garantizará la igual participación
de hombres y mujeres.
II. En la elección de asambleístas se garantizará la participación
proporcional de las naciones y pueblos indígena originario campesinos.

106
Sociedad y Estado

III. La ley determinará las circunscripciones especiales indígena


originario campesinas, donde no deberán ser considerados como
criterios condicionales la densidad poblacional, ni la continuidad
geográfica.

Artículo 148.
I. La Cámara de Senadores estará conformada por un total de 36
miembros.
II. En cada departamento se eligen 4 Senadores en circunscripción
departamental, por votación universal, directa y secreta.
III. La asignación de los escaños de Senadores en cada departamento
se hará mediante el sistema proporcional, de acuerdo a la Ley.

Artículo 158. I. Son atribuciones de la Asamblea Legislativa


Plurinacional, además de las que determina esta Constitución y la ley:
1. Aprobar autónomamente su presupuesto y ejecutarlo; nombrar y
remover a su personal administrativo, y atender todo lo relativo a
su economía y régimen interno.
2. Fijar la remuneración de las asambleístas y los asambleístas, que
en ningún caso será superior al de la Vicepresidenta o
Vicepresidente del Estado. Se prohíbe percibir cualquier ingreso
adicional por actividad remunerada.
3. Dictar leyes, interpretarlas, derogarlas, abrogarlas y modificarlas.
4. Elegir a seis de los miembros del Órgano Electoral Plurinacional,
por dos tercios de votos de sus miembros presentes.
5. Preseleccionar a las candidatas y a los candidatos para la
conformación del Tribunal Constitucional Plurinacional, Tribunal
Supremo de Justicia, Tribunal Agroambiental y Consejo de la
Magistratura.
6. Aprobar la creación de nuevas unidades territoriales y establecer
sus límites, de acuerdo con la Constitución y con la ley.
7. Aprobar el plan de desarrollo económico y social presentado por
el Órgano Ejecutivo.
8. Aprobar leyes en materia de presupuestos, endeudamiento, control
y fiscalización de recursos estatales de crédito público y
subvenciones, para la realización de obras públicas y de
necesidad social.

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Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

9. Decidir las medidas económicas estatales imprescindibles en


caso de necesidad pública.
10. Aprobar la contratación de empréstitos que comprometan las
rentas generales del Estado y autorizar a las universidades la
contratación de empréstitos.
11. Aprobar el Presupuesto General del Estado presentado por el
Órgano Ejecutivo. Recibido el proyecto de ley, éste deberá ser
considerado en la Asamblea Legislativa Plurinacional dentro del
término de sesenta días. En caso de no ser aprobado en este
plazo, el proyecto se dará por aprobado.
12. Aprobar los contratos de interés público referidos a recursos
naturales y áreas estratégicas, firmados por el Órgano Ejecutivo.
13. Aprobar la enajenación de bienes de dominio público del Estado.
14. Ratificar los tratados internacionales celebrados por el Ejecutivo,
en las formas establecidas por esta Constitución.
15. Establecer el sistema monetario.
16. Establecer el sistema de medidas.
17. Controlar y fiscalizar los órganos del Estado y las instituciones
públicas.
18. Interpelar, a iniciativa de cualquier asambleísta, a las Ministras o
los Ministros de Estado, individual o colectivamente, y acordar la
censura por dos tercios de los miembros de la Asamblea. La
interpelación podrá ser promovida por cualquiera de las Cámaras.
La censura implicará la destitución de la Ministra o del Ministro.
19. Realizar investigaciones en el marco de sus atribuciones
fiscalizadoras, mediante la comisión o comisiones elegidas para el
efecto, sin perjuicio del control que realicen los órganos
competentes.
20. Controlar y fiscalizar las empresas públicas, las de capital mixto y
toda entidad en la que tenga participación económica el Estado.
21. Autorizar la salida de tropas militares, armamento y material bélico
del territorio del Estado, y determinar el motivo y tiempo de su
ausencia.
22. Autorizar excepcionalmente el ingreso y tránsito temporal de
fuerzas militares extranjeras, determinando el motivo y el tiempo
de permanencia.

108
Sociedad y Estado

23. A iniciativa del Órgano Ejecutivo, crear o modificar impuestos de


competencia del nivel central del Estado. Sin embargo, la
Asamblea Legislativa Plurinacional a pedido de uno de sus
miembros, podrá requerir del Órgano Ejecutivo la presentación de
proyectos sobre la materia. Si el Órgano Ejecutivo, en el término
de veinte días no presenta el proyecto solicitado, o la justificación
para no hacerlo, el representante que lo requirió u otro, podrá
presentar el suyo para su consideración y aprobación.
II. La organización y las funciones de la Asamblea Legislativa
Plurinacional se regulará por el Reglamento de la Cámara de
Diputados.

Artículo 159. Son atribuciones de la Cámara de Diputados, además de


las que determina esta Constitución y la ley:
1. Elaborar y aprobar su Reglamento.
2. Calificar las credenciales otorgadas por el Órgano Electoral
Plurinacional.
3. Elegir a su directiva, determinar su organización interna y su
funcionamiento.
4. Aplicar sanciones a las diputadas o a los diputados, de acuerdo
con el Reglamento, por decisión de dos tercios de los miembros
presentes.
5. Aprobar su presupuesto y ejecutarlo; nombrar y remover a su
personal administrativo y atender todo lo relativo con su economía
y régimen interno.
6. Iniciar la aprobación del Presupuesto General del Estado.
7. Iniciar la aprobación del plan de desarrollo económico y social
presentado por el Órgano Ejecutivo.
8. Iniciar la aprobación o modificación de leyes en materia tributaria,
de crédito público o de subvenciones.
9. Iniciar la aprobación de la contratación de empréstitos que
comprometan las rentas generales del Estado, y la autorización a
las universidades para la contratación de empréstitos.
10. Aprobar en cada legislatura la fuerza militar que ha de
mantenerse en tiempo de paz.
11. Acusar ante la Cámara de Senadores a los miembros del Tribunal
Constitucional Plurinacional, del Tribunal Supremo y del Control

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Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

Administrativo de Justicia por delitos cometidos en el ejercicio de


sus funciones.
12. Proponer ternas a la Presidenta o al Presidente del Estado para la
designación de presidentas o presidentes de entidades
económicas y sociales, y otros cargos en que participe el Estado,
por mayoría absoluta de acuerdo con la Constitución.
13. Preseleccionar a los postulantes al Control Administrativo de
Justicia y remitir al Órgano Electoral Plurinacional la nómina de
los precalificados para que éste proceda a la organización, única y
exclusiva, del proceso electoral.

Artículo 160. Son atribuciones de la Cámara de Senadores, además


de las que determina esta Constitución y la ley:
1. Elaborar y aprobar su Reglamento.
2. Calificar las credenciales otorgadas por el Órgano Electoral
Plurinacional.
3. Elegir a su directiva, determinar su organización interna y su
funcionamiento.
4. Aplicar sanciones a las Senadoras y los Senadores, de acuerdo al
Reglamento, por decisión de dos tercios de los miembros
presentes.
5. Aprobar su presupuesto y ejecutarlo; nombrar y remover a su
personal administrativo, y atender todo lo relativo con su economía
y régimen interno.
6. Juzgar en única instancia a los miembros del Tribunal
Constitucional Plurinacional, del Tribunal Supremo, del Tribunal
Agroambiental y del Control Administrativo de Justicia por delitos
cometidos en el ejercicio de sus funciones, cuya sentencia será
aprobada por al menos dos tercios de los miembros presentes, de
acuerdo con la ley.
7. Reconocer honores públicos a quienes lo merezcan por servicios
eminentes al Estado.
8. Ratificar los ascensos, a propuesta del Órgano Ejecutivo, a General
de Ejército, de Fuerza Aérea, de División y de Brigada; a Almirante,
Vicealmirante, Contralmirante y General de Policía Boliviana.
9. Aprobar o negar el nombramiento de embajadores y Ministros
plenipotenciarios propuestos por el Presidente del Estado.

110
Sociedad y Estado

CAPÍTULO SEGUNDO
PROCEDIMIENTO LEGISLATIVO

Artículo 162. I. Tienen la facultad de iniciativa legislativa, para su


tratamiento obligatorio en la Asamblea Legislativa Plurinacional:
1. Las ciudadanas y los ciudadanos.
2. Las asambleístas y los asambleístas en cada una de sus Cámaras.
3. El Órgano Ejecutivo.
4. El Tribunal Supremo, en el caso de iniciativas relacionadas con la
administración de justicia.
5. Los gobiernos autónomos de las entidades territoriales.
II. La ley y los reglamentos de cada Cámara desarrollarán los
procedimientos y requisitos para ejercer la facultad de iniciativa
legislativa.

Artículo 163. El procedimiento legislativo se desarrollará de la


siguiente manera:
1. El proyecto de ley presentado por asambleístas de una de las
Cámaras, iniciará el procedimiento legislativo en esa Cámara, que
la remitirá a la comisión o comisiones que correspondan para su
tratamiento y aprobación inicial.
2. El proyecto de ley presentado por otra iniciativa será enviado a la
Cámara de Diputados, que lo remitirá a la comisión o las
comisiones.
3. Las iniciativas legislativas en materia de descentralización,
autonomías y ordenamiento territorial serán de conocimiento de la
Cámara de Senadores.
4. Cuando el proyecto haya sido informado por la comisión o las
comisiones correspondientes, pasará a consideración de la
plenaria de la Cámara, donde será discutido y aprobado en grande
y en detalle. Cada aprobación requerirá de la mayoría absoluta de
los miembros presentes.
5. El proyecto aprobado por la Cámara de origen será remitido a la
Cámara revisora para su discusión. Si la Cámara revisora lo
aprueba, será enviado al Órgano Ejecutivo para su promulgación.
6. Si la Cámara revisora enmienda o modifica el proyecto, éste se
considerará aprobado si la Cámara de origen acepta por mayoría

111
Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

absoluta de los miembros presentes las enmiendas o


modificaciones. En caso de que no las acepte, las dos Cámaras se
reunirán a requerimiento de la Cámara de origen dentro de los
veinte días siguientes y deliberarán sobre el proyecto. La decisión
será tomada por el Pleno de la Asamblea Legislativa Plurinacional
por mayoría absoluta de sus miembros presentes.
7. En caso de que pasen treinta días sin que la Cámara revisora se
pronuncie sobre el proyecto de ley, el proyecto será considerado en
el Pleno de la Asamblea Legislativa Plurinacional.
8. El proyecto aprobado, una vez sancionado, será remitido al Órgano
Ejecutivo para su promulgación como ley.
9. Aquel proyecto que haya sido rechazado podrá ser propuesto
nuevamente en la Legislatura siguiente.
10. La ley sancionada por la Asamblea Legislativa Plurinacional y
remitida al Órgano Ejecutivo, podrá ser observada por la
Presidenta o el Presidente del Estado en el término de diez días
hábiles desde el momento de su recepción. Las observaciones del
Órgano Ejecutivo se dirigirán a la Asamblea. Si ésta estuviera en
receso, la Presidenta o el Presidente del Estado remitirá sus
observaciones a la Comisión de Asamblea.
11. Si la Asamblea Legislativa Plurinacional considera fundadas las
observaciones modificará la ley conforme a éstas y la devolverá al
Órgano Ejecutivo para su promulgación. En el caso de que
considere infundadas las observaciones, la ley será promulgada
por la Presidenta o el Presidente de la Asamblea. Las decisiones
de la Asamblea se tomarán por mayoría absoluta de sus miembros
presentes.
12. La ley que no sea observada dentro del plazo correspondiente será
promulgada por la Presidenta o Presidente del Estado. Las leyes
no promulgadas por el Órgano Ejecutivo en los plazos previstos en
los numerales anteriores serán promulgadas por la Presidenta o el
Presidente de la Asamblea.

Artículo 164. I. La ley promulgada será publicada en la Gaceta Oficial


de manera inmediata.

112
Sociedad y Estado

II. La ley será de cumplimiento obligatorio desde el día de su


publicación, salvo que en ella se establezca un plazo diferente para su
entrada en vigencia.

TÍTULO II
ÓRGANO EJECUTIVO

CAPÍTULO PRIMERO
COMPOSICIÓN Y ATRIBUCIONES DEL ÓRGANO EJECUTIVO

SECCIÓN I
DISPOSICIÓN GENERAL

Artículo 165. I. El Órgano Ejecutivo está compuesto por la Presidenta


o el Presidente del Estado, la Vicepresidenta o el Vicepresidente del
Estado, y las Ministras y los Ministros de Estado.
II. Las determinaciones adoptadas en Consejo de Ministros son de
responsabilidad solidaria.

SECCIÓN II
PRESIDENCIA Y VICEPRESIDENCIA DEL ESTADO

Artículo 166. I. La Presidenta o el Presidente y la Vicepresidenta o el


Vicepresidente del Estado serán elegidas o elegidos por sufragio
universal, obligatorio, directo, libre y secreto. Será proclamada a la
Presidencia y a la Vicepresidencia la candidatura que haya reunido el
cincuenta por ciento más uno de los votos válidos; o que haya obtenido
un mínimo del cuarenta por ciento de los votos válidos, con una
diferencia de al menos diez por ciento en relación con la segunda
candidatura.
II. En caso de que ninguna de las candidaturas cumpla estas
condiciones se realizará una segunda vuelta electoral entre las dos
candidaturas más votadas, en el plazo de sesenta días computables a
partir de la votación anterior. Será proclamada a la Presidencia y a la
Vicepresidencia del Estado la candidatura que haya obtenido la
mayoría de los votos.

113
Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

Artículo 167. Para acceder a la candidatura a la Presidencia o a la


Vicepresidencia del Estado se requiere cumplir con las condiciones
generales de acceso al servicio público, contar con treinta años de
edad cumplidos al día de la elección, y haber residido de forma
permanente en el país al menos cinco años inmediatamente anteriores
a la elección.

Artículo 168. El periodo de mandato de la Presidenta o del Presidente


y de la Vicepresidenta o del Vicepresidente del Estado es de cinco
años, y pueden ser reelectas o reelectos por una sola vez de manera
continua.

Artículo 169. I. En caso de impedimento o ausencia definitiva de la


Presidenta o del Presidente del Estado, será reemplazada o
reemplazado en el cargo por la Vicepresidenta o el Vicepresidente y, a
falta de ésta o éste, por la Presidenta o el Presidente del Senado, y a
falta de ésta o éste por la Presidente o el Presidente de la Cámara de
Diputados. En este último caso, se convocarán nuevas elecciones en el
plazo máximo de noventa días.
II. En caso de ausencia temporal, asumirá la Presidencia del Estado
quien ejerza la Vicepresidencia, por un periodo que no podrá exceder
los noventa días.

Artículo 172. Son atribuciones de la Presidenta o del Presidente del


Estado, además de las que establece esta Constitución y la ley:
1. Cumplir y hacer cumplir la Constitución y las leyes.
2. Mantener y preservar la unidad del Estado boliviano.
3. Proponer y dirigir las políticas de gobierno y de Estado.
4. Dirigir la administración pública y coordinar la acción de los
Ministros de Estado.
5. Dirigir la política exterior; suscribir tratados internacionales;
nombrar servidores públicos diplomáticos y consulares de
acuerdo a la ley; y admitir a los funcionarios extranjeros en
general.
6. Solicitar la convocatoria a sesiones extraordinarias al Presidente o
Presidenta de la Asamblea Legislativa Plurinacional.

114
Sociedad y Estado

7. Promulgar las leyes sancionadas por la Asamblea Legislativa


Plurinacional.
8. Dictar decretos supremos y resoluciones.
9. Administrar las rentas estatales y decretar su inversión por
intermedio del Ministerio del ramo, de acuerdo a las leyes y con
estricta sujeción al Presupuesto General del Estado.
10. Presentar el plan de desarrollo económico y social a la Asamblea
Legislativa Plurinacional.
11. Presentar a la Asamblea Legislativa Plurinacional, dentro de las
treinta primeras sesiones, el proyecto de Ley del Presupuesto
General del Estado para la siguiente gestión fiscal y proponer,
durante su vigencia, las modificaciones que estime necesarias. El
informe de los gastos públicos conforme al presupuesto se
presentará anualmente.
12. Presentar anualmente a la Asamblea Legislativa Plurinacional, en
su primera sesión, el informe escrito acerca del curso y estado de
la Administración Pública durante la gestión anual, acompañado
de las memorias ministeriales.
13. Hacer cumplir las sentencias de los tribunales.
14. Decretar amnistía o indulto, con la aprobación de la Asamblea
Legislativa Plurinacional.
15. Nombrar, de entre las ternas propuestas por la Asamblea
Legislativa Plurinacional, a la Contralora o al Contralor General
del Estado, a la Presidenta o al Presidente del Banco Central de
Bolivia, a la máxima autoridad del Órgano de Regulación de
Bancos y Entidades Financieras, y a las Presidentas o a los
Presidentes de entidades de función económica y social en las
cuales interviene el Estado.
16. Preservar la seguridad y la defensa del Estado.
17. Designar y destituir al Comandante en Jefe de las Fuerzas
Armadas y a los Comandantes del Ejército, de la Fuerza Aérea y
de la Armada.
18. Designar y destituir al Comandante General de la Policía
Boliviana.
19. Proponer a la Asamblea Legislativa Plurinacional los ascensos a
General de Ejército, de Fuerza Aérea, de División y de Brigada; a

115
Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

Almirante, Vicealmirante y Contralmirante, y a General de la


Policía, de acuerdo a informe de sus servicios y promociones.
20. Crear y habilitar puertos.
21. Designar a sus representantes ante el Órgano Electoral.
22. Designar a las Ministras y a los Ministros de Estado, respetando el
carácter plurinacional y la equidad de género en la composición
del gabinete ministerial.
23. Designar a la Procuradora o al Procurador General del Estado.
24. Presentar proyectos de ley de urgencia económica, para su
consideración por la Asamblea Legislativa Plurinacional, que
deberá tratarlos con prioridad.
25. Ejercer el mando de Capitana o Capitán General de las Fuerzas
Armadas, y disponer de ellas para la defensa del Estado, su
independencia y la integridad del territorio.
26. Declarar el estado de excepción.
27. Ejercer la autoridad máxima del Servicio Boliviano de Reforma
Agraria y otorgar títulos ejecutoriales en la distribución y
redistribución de las tierras.

Artículo 174. Son atribuciones de la Vicepresidenta o del


Vicepresidente del Estado, además de las que establece esta
Constitución y la ley:
1. Asumir la Presidencia del Estado, en los casos establecidos en la
presente Constitución.
2. Coordinar las relaciones entre el Órgano Ejecutivo, la Asamblea
Legislativa Plurinacional y los gobiernos autónomos.
3. Participar en las sesiones del Consejo de Ministros.
4. Coadyuvar con la Presidenta o el Presidente del Estado en la
dirección de la política general del Gobierno.
5. Participar conjuntamente con la Presidenta o el Presidente del
Estado en la formulación de la política exterior, así como
desempeñar misiones diplomáticas.

116
Sociedad y Estado

SECCIÓN III
MINISTERIOS DE ESTADO

Artículo 175. I. Las Ministras y los Ministros de Estado son servidoras


públicas y servidores públicos, y tienen como atribuciones, además de
las determinadas en esta Constitución y la ley:
1. Proponer y coadyuvar en la formulación de las políticas generales
del Gobierno.
2. Proponer y dirigir las políticas gubernamentales en su sector.
3. La gestión de la Administración Pública en el ramo
correspondiente.
4. Dictar normas administrativas en el ámbito de su competencia.
5. Proponer proyectos de decreto supremo y suscribirlos con la
Presidenta o el Presidente del Estado.
6. Resolver en última instancia todo asunto administrativo que
corresponda al Ministerio.
7. Presentar a la Asamblea Legislativa Plurinacional los informes que
les soliciten.
8. Coordinar con los otros Ministerios la planificación y ejecución de
las políticas del gobierno.
II. Las Ministras y los Ministros de Estado son responsables de los
actos de administración adoptados en sus respectivas carteras.

TÍTULO III
ÓRGANO JUDICIAL Y TRIBUNAL CONSTITUCIONAL
PLURINACIONAL

CAPÍTULO PRIMERO
DISPOSICIONES GENERALES

Artículo 178. I La potestad de impartir justicia emana del pueblo


boliviano y se sustenta en los principios de independencia,
imparcialidad, seguridad jurídica, publicidad, probidad, celeridad,
gratuidad, pluralismo jurídico, interculturalidad, equidad, servicio a la
sociedad, participación ciudadana, armonía social y respeto a los
derechos.
II Constituyen garantías de la independencia judicial:

117
Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

1. El desempeño de los jueces de acuerdo a la carrera judicial


2. La autonomía presupuestaria de los órganos judiciales.

Artículo 179. I. La función judicial es única. La jurisdicción ordinaria se


ejerce por el Tribunal Supremo de Justicia, los tribunales
departamentales de justicia, los tribunales de sentencia y los jueces; la
jurisdicción agroambiental por el Tribunal y jueces agroambientales; la
jurisdicción indígena originaria campesina, se ejerce por sus propias
autoridades; existirán jurisdicciones especializadas reguladas por la
ley.
II. La jurisdicción ordinaria y la jurisdicción indígena originario
campesina gozarán de igual jerarquía.
III. La justicia constitucional se ejerce por el Tribunal Constitucional
Plurinacional.
IV. El Consejo de la Magistratura es parte del Órgano Judicial.

CAPÍTULO SEGUNDO
JURISDICCIÓN ORDINARIA

Artículo 180. I. La jurisdicción ordinaria se fundamenta en los


principios procesales de gratuidad, publicidad, transparencia, oralidad,
celeridad, probidad, honestidad, legalidad, eficacia, eficiencia,
accesibilidad, inmediatez, verdad material, debido proceso e igualdad
de las partes ante el juez.
II. Se garantiza el principio de impugnación en los procesos judiciales.
III.La jurisdicción ordinaria no reconocerá fueros, privilegios ni
tribunales de excepción. La jurisdicción militar juzgará los delitos de
naturaleza militar regulados por la ley.

SECCIÓN I
TRIBUNAL SUPREMO DE JUSTICIA

Artículo 181. El Tribunal Supremo de Justicia es el máximo tribunal de


la jurisdicción ordinaria. Está integrado por Magistradas y Magistrados.
Se organiza internamente en salas especializadas. Su composición y
organización se determinará por la ley.

118
Sociedad y Estado

Artículo 182. I. Las Magistradas y los Magistrados del Tribunal


Supremo de Justicia serán elegidas y elegidos mediante sufragio
universal.
II La Asamblea Legislativa Plurinacional efectuará por dos tercios de
sus miembros presentes la preselección de las postulantes y los
postulantes por cada departamento y remitirá al órgano electoral la
nómina de los precalificados para que éste proceda a la organización,
única y exclusiva, del proceso electoral.
III. Las y los postulantes o persona alguna, no podrán realizar campaña
electoral a favor de sus candidaturas, bajo sanción de inhabilitación. El
Órgano Electoral será el único responsable de difundir los méritos de
las candidatas y los candidatos.
IV. Las magistradas y magistrados no podrán pertenecer a
organizaciones políticas.
V. Serán elegidas y elegidos las candidatas y los candidatos que
obtengan mayoría simple de votos. La Presidenta o el Presidente del
Estado ministrará posesión en sus cargos.
VI. Para optar a la Magistratura del Tribunal Supremo de Justicia será
necesario cumplir con los requisitos generales establecidos para los
servidores públicos: haber cumplido treinta años de edad, poseer título
de abogado, haber desempeñado, con honestidad y ética, funciones
judiciales, profesión de abogado o cátedra universitaria durante ocho
años y no contar con sanción de destitución del Consejo de la
Magistratura. Para la calificación de méritos se tomará en cuenta el
haber ejercido la calidad de autoridad originaria bajo su sistema de
justicia.
VII. El sistema de prohibiciones e incompatibilidades aplicado a las
Magistradas y a los Magistrados del Tribunal Supremo de Justicia será
el mismo que para los servidores públicos.

Artículo 183. I. Las Magistradas y los Magistrados, no podrán ser


reelegidas ni reelegidos. Su periodo de mandato será de seis años.
II. Las Magistradas y Magistrados del Tribunal Supremo de Justicia
cesarán en sus funciones por cumplimiento de mandato, sentencia
ejecutoriada emergente de juicio de responsabilidades, renuncia,
fallecimiento y demás causales previstas en la ley.

119
Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

Artículo 184. Son atribuciones del Tribunal Supremo de Justicia,


además de las señaladas por la ley:
1. Actuar como tribunal de casación y conocer recursos de nulidad en
los casos expresamente señalados por la ley.
2. Dirimir conflictos de competencias suscitados entre los tribunales
departamentales de justicia.
3. Conocer, resolver y solicitar en única instancia los procesos de
extradición.
4. Juzgar, como tribunal colegiado en pleno y en única instancia, a la
Presidenta o al Presidente del Estado, o a la Vicepresidenta o al
Vicepresidente del Estado, por delitos cometidos en el ejercicio de
su mandato. El juicio se llevará a cabo previa autorización de la
Asamblea Legislativa Plurinacional, por decisión de al menos dos
tercios de los miembros presentes, y a requerimiento fundado de la
Fiscal o del Fiscal General del Estado, quien formulará acusación si
estima que la investigación proporcionó fundamento para el
enjuiciamiento. El proceso será oral, público, continuo e
ininterrumpido. La ley determinará el procedimiento.
5. Designar, de las ternas presentadas por el Consejo de la
Magistratura, a los vocales de los tribunales departamentales de
justicia.
6. Preparar proyectos de leyes judiciales y presentarlos a la Asamblea
Legislativa Plurinacional.
7. Conocer y resolver casos de revisión extraordinaria de sentencia.

Artículo 185. La magistratura del Tribunal Supremo de Justicia será


ejercida de manera exclusiva.

CAPÍTULO TERCERO
JURISDICCIÓN AGROAMBIENTAL

Artículo 186. El Tribunal Agroambiental es el máximo tribunal


especializado de la jurisdicción agroambiental. Se rige en particular por
los principios de función social, integralidad, inmediatez, sustentabilidad
e interculturalidad.

120
Sociedad y Estado

Artículo 187. Para ser elegida Magistrada o elegido Magistrado del


Tribunal Agroambiental serán necesarios los mismos requisitos que los
miembros del Tribunal Supremo de Justicia, además de contar con
especialidad en estas materias y haber ejercido con idoneidad, ética y
honestidad la judicatura agraria, la profesión libre o la cátedra
universitaria en el área, durante ocho años. En la preselección de las
candidatas y los candidatos se garantizará la composición plural,
considerando criterios de plurinacionalidad.

Artículo 188. I. Las Magistradas y los Magistrados del Tribunal


Agroambiental serán elegidas y elegidos mediante sufragio universal,
según el procedimiento, mecanismos y formalidades para los miembros
del Tribunal Supremo de Justicia.
II. El sistema de prohibiciones e incompatibilidades aplicado a las
Magistradas y los Magistrados del Tribunal Agroambiental será el de
los servidores públicos.
III. El tiempo de ejercicio, la permanencia y la cesación en el cargo
establecidos para las Magistradas y los Magistrados del Tribunal
Supremo de Justicia serán de aplicación a los miembros del Tribunal
Agroambiental.

Artículo 189. Son atribuciones del Tribunal Agroambiental, además de


las señaladas por la ley:
1. Resolver los recursos de casación y nulidad en las acciones reales
agrarias, forestales, ambientales, de aguas, derechos de uso y
aprovechamiento de los recursos naturales renovables, hídricos,
forestales y de la biodiversidad; demandas sobre actos que atenten
contra la fauna, la flora, el agua y el medio ambiente; y demandas
sobre prácticas que pongan en peligro el sistema ecológico y la
conservación de especies o animales.
2. Conocer y resolver en única instancia las demandas de nulidad y
anulabilidad de títulos ejecutoriales.
3. Conocer y resolver en única instancia los procesos contencioso
administrativos que resulten de los contratos, negociaciones,
autorizaciones, otorgación, distribución y redistribución de derechos
de aprovechamiento de los recursos naturales renovables, y de los
demás actos y resoluciones administrativas.

121
Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

4. Organizar los juzgados agroambientales.

CAPÍTULO CUARTO
JURISDICCIÓN INDÍGENA ORIGINARIA CAMPESINA

Artículo 190. I. Las naciones y pueblos indígena originario campesinos


ejercerán sus funciones jurisdiccionales y de competencia a través de
sus autoridades, y aplicarán sus principios, valores culturales, normas y
procedimientos propios.
II. La jurisdicción indígena originaria campesina respeta el derecho a la
vida, el derecho a la defensa y demás derechos y garantías
establecidos en la presente Constitución.

Artículo 191. I. La jurisdicción indígena originario campesina se


fundamenta en un vínculo particular de las personas que son
miembros de la respectiva nación o pueblo indígena originario
campesino.
II. La jurisdicción indígena originario campesina se ejerce en los
siguientes ámbitos de vigencia personal, material y territorial:
1. Están sujetos a esta jurisdicción los miembros de la nación o pueblo
indígena originario campesino, sea que actúen como actores o
demandado, denunciantes o querellantes, denunciados o
imputados, recurrentes o recurridos.
2. Esta jurisdicción conoce los asuntos indígena originario campesinos
de conformidad a lo establecido en una Ley de Deslinde
Jurisdiccional.
3. Esta jurisdicción se aplica a las relaciones y hechos jurídicos que se
realizan o cuyos efectos se producen dentro de la jurisdicción de un
pueblo indígena originario campesino.

Artículo 192. I. Toda autoridad pública o persona acatará las


decisiones de la jurisdicción indígena originaria campesina.
II. Para el cumplimiento de las decisiones de la jurisdicción indígena
originario campesina, sus autoridades podrán solicitar el apoyo de los
órganos competentes del Estado.
III. El Estado promoverá y fortalecerá la justicia indígena originaria
campesina. La Ley de Deslinde Jurisdiccional, determinará los

122
Sociedad y Estado

mecanismos de coordinación y cooperación entre la jurisdicción


indígena originaria campesina con la jurisdicción ordinaria y la
jurisdicción agroambiental y todas las jurisdicciones
constitucionalmente reconocidas.

CAPÍTULO QUINTO
CONSEJO DE LA MAGISTRATURA

Artículo 193. I. El Consejo de la Magistratura es la instancia


responsable del régimen disciplinario de la jurisdicción ordinaria,
agroambiental y de las jurisdicciones especializadas; del control y
fiscalización de su manejo administrativo y financiero; y de la
formulación de políticas de su gestión. El Consejo de la Magistratura se
regirá por el principio de participación ciudadana.
II. Su conformación, estructura y funciones estarán determinadas por la
ley.

Artículo 194. I. Los miembros del Consejo de la Magistratura se


elegirán mediante sufragio universal de entre las candidatas y los
candidatos propuestos por la Asamblea Legislativa Plurinacional. La
organización y ejecución del proceso electoral estará a cargo del
Órgano Electoral Plurinacional.
II. Los miembros del Consejo de la Magistratura de Justicia requerirán,
además de las condiciones generales de acceso al servicio público,
haber cumplido treinta años de edad, poseer conocimientos en el área
de sus atribuciones y haber desempeñado sus funciones con ética y
honestidad.
III. Los miembros del consejo de la Magistratura de Justicia durarán en
sus funciones seis años, y no podrán ser reelegidas ni reelegidos.

Artículo 195. Son atribuciones del Consejo de la Magistratura de


Justicia, además de las establecidas en la Constitución y en la ley:
1. Promover la revocatoria de mandato de las Magistradas y de los
Magistrados del Tribunal Supremo de Justicia y del Tribunal
Agroambiental, cuando, en el ejercicio de sus funciones, cometan
faltas gravísimas determinadas por la ley.

123
Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

2. Ejercer el control disciplinario de las vocales y los vocales, juezas y


jueces; y personal auxiliar y administrativo del Órgano Judicial. El
ejercicio de esta facultad comprenderá la posibilidad de cesación
del cargo por faltas disciplinarias gravísimas, expresamente
establecidas en la ley.
3. Controlar y fiscalizar la administración económica financiera y todos
los bienes del Órgano Judicial.
4. Evaluar el desempeño de funciones de las administradoras y los
administradores de justicia, y del personal auxiliar.
5. Elaborar auditorias jurídicas y de gestión financiera.
6. Realizar estudios técnicos y estadísticos.
7. Preseleccionar a las candidatas y a los candidatos para la
conformación de los tribunales departamentales de justicia que
serán designados por el Tribunal Supremo de Justicia.
8. Designar, mediante concurso de méritos y exámenes de
competencia, a los jueces de partido y de instrucción.
9. Designar a su personal administrativo.

CAPÍTULO SEXTO
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL

Artículo 196. I. El Tribunal Constitucional Plurinacional vela por la


supremacía de la Constitución, ejerce el control de constitucionalidad, y
precautela el respeto y la vigencia de los derechos y las garantías
constitucionales.
II. En su función interpretativa, el Tribunal Constitucional Plurinacional
aplicará como criterio de interpretación, con preferencia, la voluntad del
constituyente, de acuerdo con sus documentos, actas y resoluciones,
así como el tenor literal del texto.

Artículo 197. I. El Tribunal Constitucional Plurinacional estará


integrado por Magistradas y Magistrados elegidos con criterios de
plurinacionalidad, con representación del sistema ordinario y del
sistema indígena originario campesino.
II. Las Magistradas y los Magistrados suplentes del Tribunal
Constitucional Plurinacional no recibirán remuneración, y asumirán

124
Sociedad y Estado

funciones exclusivamente en caso de ausencia del titular, o por otros


motivos establecidos en la ley.
III. La composición, organización y funcionamiento del Tribunal
Constitucional Plurinacional serán regulados por la ley.

Artículo 198. Las Magistradas y los Magistrados del Tribunal


Constitucional Plurinacional se elegirán mediante sufragio universal,
según el procedimiento, mecanismo y formalidades de los miembros
del Tribunal Supremo de Justicia.

Artículo 199. I. Para optar a la magistratura del Tribunal Constitucional


Plurinacional se requerirá, además de los requisitos generales para el
acceso al servicio público, haber cumplido treinta y cinco años y tener
especialización o experiencia acreditada de por lo menos ocho años
en las disciplinas de Derecho Constitucional, Administrativo o
Derechos Humanos. Para la calificación de méritos se tomará en
cuenta el haber ejercido la calidad de autoridad originaria bajo su
sistema de justicia.
II. Las candidatas y los candidatos al Tribunal Constitucional
Plurinacional podrán ser propuestas y propuestos por organizaciones
de la sociedad civil y de las naciones y pueblos indígena originario
campesinos.

Artículo 200. El tiempo de ejercicio, la permanencia y la cesación en el


cargo establecidos para las Magistradas y los Magistrados del Tribunal
Supremo de Justicia será de aplicación a los miembros del Tribunal
Constitucional Plurinacional.

Artículo 201. Las Magistradas y los Magistrados del Tribunal


Constitucional Plurinacional se regirán por el mismo sistema de
prohibiciones e incompatibilidades de los servidores públicos.

Artículo 202. Son atribuciones del Tribunal Constitucional


Plurinacional, además de las establecidas en la Constitución y la ley,
conocer y resolver:
1. En única instancia, los asuntos de puro derecho sobre la
inconstitucionalidad de leyes, Estatutos Autonómicos, Cartas

125
Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

Orgánicas, decretos y todo género de ordenanzas y resoluciones


no judiciales. Si la acción es de carácter abstracto, sólo podrán
interponerla la Presidenta o Presidente de la República, Senadoras
y Senadores, Diputadas y Diputados, Legisladores, Legisladoras y
máximas autoridades ejecutivas de las entidades territoriales
autónomas,
2. Los conflictos de competencias y atribuciones entre órganos del
poder público.
3. Los conflictos de competencias entre el gobierno plurinacional, las
entidades territoriales autónomas y descentralizadas, y entre éstas.
4. Los recursos contra tributos, impuestos, tasas, patentes, derechos
o contribuciones creados, modificados o suprimidos en
contravención a lo dispuesto en esta Constitución.
5. Los recursos contra resoluciones del Órgano Legislativo, cuando
sus resoluciones afecten a uno o más derechos, cualesquiera sean
las personas afectadas.
6. La revisión de las acciones de Libertad, de Amparo Constitucional,
de Protección de Privacidad, Popular y de Cumplimiento. Esta
revisión no impedirá la aplicación inmediata y obligatoria de la
resolución que resuelva la acción.
7. Las consultas de la Presidenta o del Presidente de la República, de
la Asamblea Legislativa Plurinacional, del Tribunal Supremo de
Justicia o del Tribunal Agroambiental sobre la constitucionalidad de
proyectos de ley. La decisión del Tribunal Constitucional es de
cumplimiento obligatorio.
8. Las consultas de las autoridades indígenas originario campesinas
sobre la aplicación de sus normas jurídicas aplicadas a un caso
concreto. La decisión del Tribunal Constitucional es obligatoria.
9. El control previo de constitucionalidad en la ratificación de tratados
internacionales.
10. La constitucionalidad del procedimiento de reforma parcial de la
Constitución.
11. Los conflictos de competencia entre la jurisdicción indígena
originaria campesina y la jurisdicción ordinaria y agroambiental.
12. Los recursos directos de nulidad.

126
Sociedad y Estado

Artículo 203. Las decisiones y sentencias del Tribunal Constitucional


Plurinacional son de carácter vinculante y de cumplimiento obligatorio,
y contra ellas no cabe recurso ordinario ulterior alguno.

TÍTULO IV
ÓRGANO ELECTORAL

CAPÍTULO PRIMERO
ÓRGANO ELECTORAL PLURINACIONAL

Artículo 205.
I. El Órgano Electoral Plurinacional está compuesto por:
1. El Tribunal Supremo Electoral
2. Los Tribunales Electorales Departamentales
3. Los Juzgados Electorales
4. Los Jurados de las Mesas de sufragio
5. Los Notarios Electorales
II La jurisdicción, competencias y atribuciones del Órgano Electoral y
de sus diferentes niveles se definen, en esta Constitución y la ley.

Artículo 206
I. El Tribunal Supremo Electoral es el máximo nivel del Órgano
Electoral, tiene jurisdicción nacional.
II. El Tribunal Supremo Electoral está compuesto por siete
miembros, quienes durarán en sus funciones seis años sin
posibilidad de reelección, y al menos dos de los cuales serán de
origen indígena originario campesino.
III. La Asamblea Legislativa Plurinacional, por dos tercios de votos
de los miembros presentes, elegirá a seis de los miembros del
Órgano Electoral Plurinacional. La Presidenta o el Presidente del
Estado designará a uno de sus miembros.
IV. La elección de los miembros del Órgano Electoral Plurinacional
requerirá de convocatoria pública previa, y calificación de
capacidad y méritos a través de concurso público.
V. Las Asambleas Legislativas Departamentales o Consejos
Departamentales seleccionarán por dos tercios de votos de sus
miembros presentes, una terna por cada uno de los vocales de

127
Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

los Tribunales Departamentales Electorales. De estas ternas la


Cámara de Diputados elegirá a los miembros de los Tribunales
Departamentales Electorales, por dos tercios de votos de los
miembros presentes, garantizando que al menos uno de sus
miembros sea perteneciente a las naciones y pueblos indígenas
originarios campesinos del Departamento.

128
Sociedad y Estado

TEMA 9

LEY DE DESLINDE JURISDICCIONAL

CAPÍTULO I
DISPOSICIONES GENERALES

Artículo 1. (OBJETO).
La presente Ley tiene por objeto regular los ámbitos de vigencia,
dispuestos en la Constitución Política del Estado, entre la jurisdicción
indígena originaria campesina y las otras jurisdicciones reconocidas
constitucionalmente; y determinar los mecanismos de coordinación y
cooperación entre estas jurisdicciones, en el marco del pluralismo
jurídico.

Artículo 2. (MARCO CONSTITUCIONAL).


I. Dada la existencia pre colonial de las naciones y pueblos
indígena originario campesinos y su dominio ancestral sobre sus
territorios, se garantiza su libre determinación en el marco de la unidad
del listado, que consiste en su derecho a la autonomía, al
autogobierno, a su cultura, al reconocimiento de sus instituciones y a la
consolidación de sus entidades territoriales.

129
Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

II. La presente Ley se fundamenta en la Constitución Política del


Estado, la Ley Nº 1257 que ratifica el Convenio 169 de la Organización
Internacional del Trabajo, la Ley Nº 3897 de 26 de junio de 2008, que
eleva a rango de Ley la Declaración de las Naciones Unidas sobre los
Derechos de los Pueblos Indígenas y demás instrumentos
internacionales de Derechos Humanos aplicables.

Artículo 3. (IGUALDAD JERÁRQUICA).


La función judicial es única. La jurisdicción indígena originaria
campesina goza de igual jerarquía que la jurisdicción ordinaria, la
jurisdicción agroambiental y otras jurisdicciones legalmente
reconocidas.

Artículo 4. (PRINCIPIOS).
Los principios que rigen la presente Ley son:
a) Respeto a la unidad e integridad del Estado Plurinacional. El
ejercicio de las jurisdicciones constitucionalmente reconocidas, en el
marco del pluralismo jurídico, tiene la finalidad de preservar la unidad y
la integridad territorial del Estado Plurinacional;
b) Relación espiritual entre las naciones y pueblos indígena
originario campesinos y la Madre Tierra. Las naciones y pueblos
indígena originario campesinos tienen derecho a mantener y fortalecer
su propia relación espiritual con sus tierras y territorios que
tradicionalmente han poseído, ocupado, o utilizado y asumen las
responsabilidades para con las generaciones venideras.
En el marco de sus cosmovisiones, las naciones y pueblos indígena
originario campesinos mantienen una relación armoniosa, de
complementariedad y respeto con la Madre Tierra;
c) Diversidad cultural. La diversidad cultural constituye la base
esencial del Estado Plurinacional Comunitario. Todas las jurisdicciones
constitucionalmente reconocidas deben respetar las diferentes
identidades culturales;
d) Interpretación intercultural. Al momento de administrar e impartir
justicia, las autoridades de las distintas jurisdicciones reconocidas
constitucionalmente deben tomar en cuenta tas diferentes identidades
culturales del Estado Plurinacional;

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Sociedad y Estado

e) Pluralismo jurídico con igualdad jerárquica. Se respeta y


garantiza la coexistencia, convivencia e independencia de los
diferentes sistemas jurídicos, dentro del Estado Plurinacional, en
igualdad de jerarquía;
f) Complementariedad. Implica la, concurrencia de esfuerzos e
iniciativas de todas las jurisdicciones reconocidas constitucionalmente;
g) Independencia. Ninguna autoridad de una jurisdicción podrá
tener injerencia sobre otra;
h) Equidad e igualdad de género. Todas las jurisdicciones
reconocidas constitucionalmente, respetan, promueven, protegen y
garantizan la igualdad entre hombres y mujeres, en el acceso a la
justicia, el acceso a cargos o funciones, en la torna de decisiones, en el
desarrollo del procedimiento de juzgamiento y la aplicación de
sanciones;
i) Igualdad de oportunidades. Todas las jurisdicciones garantizan
que las niñas, niños y adolescentes, jóvenes, adultos-mayores y
personas en situación de discapacidad, tengan las mismas
posibilidades de acceder al ejercicio de sus derechos sociales,
económicos, civiles y políticos.

CAPÍTULO II
DERECHOS FUNDAMENTALES Y GARANTÍAS
CONSTITUCIONALES

Artículo 5. (RESPETO A LOS DERECHOS FUNDAMENTALES Y


GARANTÍAS CONSTITUCIONALES).
I. Todas las jurisdicciones reconocidas constitucionalmente,
respetan promueven y garantizan el derecho a la vida, y los demás
derechos y garantías reconocidos por la Constitución Política del
Estado.
II. Todas las jurisdicciones reconocidas constitucionalmente
respetan y garantizan el ejercicio de los derechos de las mujeres, su
participación, decisión, presencia y permanencia, tanto en el acceso
igualitario y justo a los cargos como en el control, decisión y
participación en la administración de justicia.
III. Las autoridades de la jurisdicción indígena originaria campesina
no sancionarán con la pérdida de tierras o la expulsión a las y los

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Facultad de Derecho y Ciencias Políticas – Prefacultativo 2011

adultos mayores o personas en situación de discapacidad, por causa


de incumplimiento de deberes comunales, cargos, aportes y trabajos
comunales.
IV. Todas las jurisdicciones reconocidas constitucionalmente,
prohíben y sancionan toda forma de violencia contra niñas, niños,
adolescentes y mujeres. Es ilegal cualquier conciliación respecto de
este tema.
V. El linchamiento es una violación a los Derechos Humanos, no
está permitido en ninguna jurisdicción y debe ser prevenido y
sancionado por el Estado Plurinacional.

Artículo 6. (PROHIBICIÓN DE LA PENA DE MUERTE).


En estricta aplicación de la Constitución Política del Estado, está
terminantemente prohibida la pena de muerte bajo proceso penal en la
justicia ordinaria por el delito de asesinato a quien la imponga, la
consienta o la ejecute.

CAPÍTULO III
ÁMBITOS DE VIGENCIA DE LA JURISDICCIÓN INDÍGENA
ORIGINARIA CAMPESINA

Artículo 7. (JURISDICCIÓN INDÍGENA ORIGINARIA CAMPESINA).


Es la potestad que tienen las naciones y pueblos indígena originario
campesinos de administrar justicia de acuerdo a su sistema de justicia
propio y se ejerce por medio de sus autoridades, en el marco de lo
establecido en la Constitución Política del Estado y la presente Ley.

Artículo 8. (ÁMBITOS DE VIGENCIA).


La jurisdicción indígena originaria campesina se ejerce en los ámbitos
de vigencia personal, material y territorial, cuando concurran
simultáneamente.

Artículo 9. (ÁMBITO DE VIGENCIA PERSONAL).


Están sujetos a la jurisdicción indígena originaria campesina los
miembros de la respectiva nación o pueblo indígena originario
campesino.

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Sociedad y Estado

Artículo 10. (ÁMBITO DE VIGENCIA MATERIAL).


I. La jurisdicción indígena originaria campesina conoce los asuntos
o conflictos que histórica y tradicionalmente conocieron bajo sus
normas, procedimientos propios vigentes y saberes, de acuerdo a su
libre determinación.
II. El ámbito de vigencia material de la jurisdicción indígena
originaria campesina no alcanza a las siguientes materias:
a) En materia penal, los delitos contra el Derecho Internacional, los
delitos por crímenes de lesa humanidad, los delitos contra la seguridad
interna y externa del Estado, los delitos de terrorismo, los delitos
tributarios y aduaneros, los delitos por corrupción o cualquier otro delito
cuya víctima sea el Estado, trata y tráfico de personas, tráfico de armas
y delitos de narcotráfico. Los delitos cometidos en contra de la
integridad corporal de niños, niñas y adolescentes, los delitos de
violación, asesinato u homicidio;
b) En materia civil, cualquier proceso en el cual sea parte o tercero
interesado el Estado, a través de su administración central,
descentralizada, desconcentrada, autonómica y lo relacionado al
derecho propietario;
c) Derecho Laboral, Derecho de la Seguridad Social, Derecho
Tributario, Derecho Administrativo, Derecho Minero, Derecho de
Hidrocarburos, Derecho Forestal, Derecho Informático, Derecho
Internacional público y privado, y Derecho Agrario, excepto la
distribución interna de tierras en las comunidades que tengan posesión
legal o derecho propietario colectivo sobre las mismas;
d) Otras que estén reservadas por la Constitución Política del
Estado y la Ley a las jurisdicciones ordinaria, agroambiental y otras
reconocidas legalmente.
III. Los asuntos de conocimiento de la jurisdicción indígena
originaria campesina, no podrán ser de conocimiento de la jurisdicción
ordinaria, la agroambiental y las demás jurisdicciones legalmente
reconocidas.

Artículo 11. (ÁMBITO DE VIGENCIA TERRITORIAL).


El ámbito de vigencia territorial se aplica a las relaciones y hechos
jurídicos que se realizan o cuyos efectos se producen dentro de la
jurisdicción de un pueblo indígena originario campesino, siempre y

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cuando concurran los otros ámbitos de vigencia establecidos en la


Constitución Política del Estado y en la presente Ley.

Artículo 12. (OBLIGATORIEDAD).


I. Las decisiones de las autoridades de la jurisdicción indígena
originaria campesina son de cumplimiento obligatorio y serán acatadas
por todas las personas y autoridades.
II. Las decisiones de las autoridades de la jurisdicción indígena
originaria campesina son irrevisables por la jurisdicción ordinaria, la
agroambiental y las otras legalmente reconocidas.

CAPÍTULO IV
COORDINACIÓN Y COOPERACIÓN

Artículo 13. (COORDINACIÓN).


I. La jurisdicción indígena originaria campesina, la ordinaria, la
agroambiental y las demás jurisdicciones legalmente reconocidas, en el
marco del pluralismo jurídico, concertarán medios y esfuerzos para
lograr la convivencia social armónica, el respeto a los derechos
individuales y colectivos y la garantía efectiva del acceso a la justicia de
manera individual, colectiva o comunitaria.
II. La coordinación entre todas las jurisdicciones podrá realizarse
de forma oral o escrita, respetando sus particularidades.

Artículo 14. (MECANISMOS DE COORDINACIÓN).


La coordinación entre las autoridades de las diferentes jurisdicciones
podrá ser mediante el:
a) Establecimiento de sistemas de acceso transparente a
información sobre hechos y antecedentes de personas;
b) Establecimiento de espacios de diálogo u oirás formas, sobre la
aplicación de los derechos humanos en sus resoluciones;
c) Establecimiento de espacios de diálogo u otras formas para el
intercambio de experiencias sobre los métodos de resolución de
conflictos;
d) Otros mecanismos de coordinación, que puedan emerger en
función de la aplicación de la presente Ley.

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Sociedad y Estado

Artículo 15. (COOPERACIÓN).


La jurisdicción indígena originaria campesina, la ordinaria, la
agroambiental y las demás jurisdicciones legalmente reconocidas,
tienen el deber de cooperarse mutuamente, para el cumplimiento y
realización de sus fines y objetivos.

Artículo 16. (MECANISMOS DE COOPERACIÓN).


I. Los mecanismos de cooperación se desarrollarán en
condiciones de equidad, transparencia, solidaridad, participación y
control social, celeridad, oportunidad y gratuidad.
II. Son mecanismos de cooperación:
a) Las autoridades jurisdiccionales y las autoridades del Ministerio
Público, Policía Boliviana, Régimen Penitenciario u otras instituciones,
deben prestar inmediata cooperación y proporcionarán los
antecedentes del caso a las autoridades de la jurisdicción indígena
originaria campesina cuando éstas la soliciten;
b) Las autoridades de la jurisdicción indígena originaria campesina
prestarán cooperación a las autoridades de la jurisdicción ordinaria, de
la agroambiental y de las otras jurisdicciones legalmente reconocidas;
c) La remisión, de la información y antecedentes de los asuntos o
conflictos entre la jurisdicción indígena originaria campesina y las
demás jurisdicciones;
d) Otros mecanismos de cooperación, que puedan emerger en
función de la aplicación de la presente Ley.

Artículo 17. (OBLIGACIÓN DE COORDINACIÓN Y COOPERACIÓN).


Las autoridades de todas las jurisdicciones no podrán omitir el deber de
coordinación y cooperación. Esta omisión será sancionada como falta
grave disciplinaria en la jurisdicción ordinaria, la agroambiental y las
especiales; y en el caso de la jurisdicción indígena originaria
campesina, de acuerdo a sus normas y procedimientos propios.

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DISPOSICIÓN FINAL
ÚNICA.

La presente Ley se traducirá, publicará y difundirá en todos los idiomas


de las naciones y pueblos indígena originario campesinos del Estado
Plurinacional de Bolivia.

DISPOSICIÓN DEROGATORIA Y ABROGATORIA


ÚNICA.

Quedan derogadas y abrogadas todas las disposiciones jurídicas


contrarias a la presente Ley.

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BIBLIOGRAFIA DE REFERENCIA

- CONSTITUCION POLITICA DEL ESTADO: Gaceta Oficial de


Bolivia, Edición Oficial, La Paz-Bolivia, 2009.

- Naranjo Mesa Vladimiro: Teoría Constitucional e Instituciones


Políticas, Editorial Temis S.A., Santa Fe de Bogotá – Colombia,
Séptima Edición, 1997.

- Ramos Mamani Juan: Teoría Constitucional y Constitucionalismo


Boliviano, Academia Boliviana de Estudios Constitucionales,
Segunda Edición, La Paz – Bolivia, 2009.

- Serra Rojas Andrés: Teoría del Estado, Editorial Porrua S.A., Av.
República Argentina, 15 México, Decimo segunda Edición, 1993.

- Velásquez Turbay Camilo: Derecho Constitucional, Universidad


Externado de Colombia, Bogotá – Colombia, Primera Edición,
1998.

- Otros autores citados en cada tema.

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