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Objetivos:
PARA COMPARTIR:
PARA APRENDER: (Instrucciones: Por turnos, lea con tus compañeros los siguientes
párrafos. Conforme vayas leyendo y subrayen las ideas que te llamen la atención).
I. INTRODUCCION
En esta sesión veremos al tercer propósito para tu vida: discipulado. Fuiste creado para
SER como Cristo.
Una vez que estás en la familia de Dios y experimentas la comunión, Dios quiere que
pases el resto de tu vida desarrollando características familiares. Quiere hacerte como
Jesucristo. Esto es discipulado.
Efesios 4:11-13
¿Cómo Dios nos hace más como Jesús? Muchos de nosotros hemos oído a la gente
decir, "Jesús cambió mi vida." ¿Cómo hace eso Jesús? ¿Hace cirugía o te lava el
cerebro? ¿te toca con una varita mágica y de repente cambias?
Hay muchos consejos confusos en cuanto a cómo Dios nos cambia. Algunas personas
dicen, "Espera en el Señor." Otros dicen, "Si va a ocurrir, depende de mi." Uno es el
enfoque pasivo; el otro el punto de vista activista.
Pablo trata con este nuevo tema en su carta a los Filipenses. En el capítulo 2:12-13
(NIV). La Biblia dice: “...lleven a cabo su salvación con temor y temblor, pues Dios es
quien produce en ustedes tanto el querer como el hacer para que se cumpla su buena
voluntad.”
Noten que Pablo utiliza dos frases para explicar esta sociedad. Pon en círculo las
palabras "lleven a cabo" y "produce." Llevar a cabo es tu parte. Producir es la parte
de Dios. Debemos llevar a cabo, ejercitar lo que Dios está produciendo.
Nota que no dice, "consigue" tu salvación. Dice, "llévala a cabo." La Biblia dice que
la salvación "no es por obras, para que nadie se gloríe" (Efesios 2:9 VRV). Pablo
está escribiendo a los cristianos. Les está diciendo, desarrollen lo que ya tienen.
Por ejemplo, ¿qué haces cuando entrenas? Entrenas no para obtener un cuerpo,
sino para desarrollar el cuerpo que ya tienes. Cuando un granjero trabaja la tierra,
la está cultivando, no la está creando. De la misma manera, no trabajamos para
lograr nuestra salvación, pero "ejercitamos" sus implicancias.
Ahora nota la frase, "su salvación.” Pon en círculo la palabra "su." Pablo está
hablando sobre una tarea individual. Debes aceptar una responsabilidad personal
por tu crecimiento espiritual. Nadie más puede crecer espiritualmente por ti. Es tu
vida, no la de otro, y Dios quiere que lleves a cabo, ejercites sus implicancias.
La siguiente frase dice, "con temor y temblor.” ¿Qué significa? No significa que
debemos temer a Dios porque los hijos de Dios nunca necesitan temer a su Padre
Celestial. Jesús pagó la pena por nuestros pecados en la cruz y se nos dio la
gracia de Dios para que ahora seamos parte de Su familia.
De lo que debemos temer es que perdamos todo lo que Dios ha hecho por
nosotros. Debemos tomar nuestra salvación seriamente porque tiene implicancias
eternas. Esta es nuestra parte de la ecuación de nuestro crecimiento espiritual.
2. La parte de Dios: producir en nosotros
Nota la parte de Dios en tu crecimiento. Mira la siguiente frase: " pues Dios es
quien produce en ustedes.” Esa es la parte de Dios. concéntrate de nuevo en la
palabra "produce". Tenemos la palabra "energizante" o "energía" de la palabra
griega. En otras palabras, Dios es el energizante para los cambios en tu vida. Él
dice, "Te daré el deseo y el poder para hacer lo que necesitas hacer y para lo que
sabes que es bueno de hacer. Te daré poder, autorizaré y energizaré."
Aún tu deseo por crecimiento espiritual viene de Dios. cuando eliges actuar en ese
deseo, tomar en serio tu crecimiento espiritual, y comprometerte a vivir una vida
dirigida por propósitos, Dios te dará la habilidad de crecer. No estarás solo afuera;
Dios te dará el cambio.
Con esto en mente, necesitas entender que hay tres herramientas que Dios utiliza
para obrar un carácter semejante a Cristo en nuestras vidas, y tres elecciones que
necesitamos hacer que resulte en nuestra manera de actuar, pensar, y responder.
Primero veamos las tres herramientas que Dios utiliza para hacernos más como Su
Hijo, Jesucristo:
1. La primera herramienta que Dios usa para hacerte como Jesús es la BIBLIA.
2 Timoteo 3:16,17 (NVI) dice, "Toda la Escritura es inspirada por Dios y útil para
enseñar, para reprender, para corregir y para instruir en la justicia, a fin de que el
siervo de Dios esté enteramente capacitado para toda buena obra…”
Si quieres tomar en serio el asunto de cambiar para ser más como Jesús,
necesitas ir a la Biblia. Leerla, estudiarla, memorizarla, y meditar en ella, y empezar
a hacerla funcionar en tu corazón y mente. Cuanto más tengas la palabra de Dios
en tu vida, más serás transformado.
A veces la gente dirá, "Siento que ésta es la voluntad de Dios para mi vida,"
pero cuando oyes lo que dicen, sabes que no puede ser porque la Biblia enseña
todo lo contrario. La voluntad de Dios nunca contradice la palabra de Dios.
Puede que digan, "Pero parece tan bueno." Puede que sea cierto, pero a
menudo los sentimientos nos engañan. Puedes tener sentimientos de varias
fuentes: la memoria de un programa de TV guardado en tu mente, tus
hormonas, o la pizza que comiste anoche. Siempre debemos confiar en la
palabra más que en nuestros sentimientos. Muchos cristianos están
confundidos sobre la voluntad de Dios simplemente porque no conocen su
Palabra.
Cuando consagras tu vida a Cristo, Jesús pone su Santo Espíritu dentro de ti. Una
vez más, no es un sentimiento, sino el Espíritu de Dios mismo. El Espíritu Santo
nos da el poder que necesitamos para cambiar. La Biblia dice en Romanos 8:11
(NVI), "...el Espíritu dará vida a sus cuerpos mortales." El Espíritu de Dios dentro
de ti te dará el poder que necesitas para cambiar-para dejar hábitos malos,
desarrollar nuevos, cambiar tu manera de pensar, y responder a situaciones de la
manera que Jesús lo haría.
2 Corintios 3:18 (NVI) dice, " somos transformados a su semejanza con más y más
gloria por la acción del Señor, que es el Espíritu." No te pierdas esta increíble
verdad. Es el Espíritu de Dios quien obra en ti y contigo para lograr el propósito de
Dios en tu vida: volverte más como Cristo.
3. La tercera herramienta que Dios utiliza para hacerte como Jesús son las
CIRCUNSTANCIAS.
Aún si lees la Biblia una hora diaria, todavía tienes 23 horas por día para que
tengas circunstancias. Así, Dios usa la herramienta de las circunstancias aún más
que la Biblia. Utiliza problemas, presiones, dificultades, y "estrés" para moldearnos
y formar nuestro carácter.
La Biblia, en Romanos 8:28,29 (NVI), dice, "… Ahora bien, sabemos que Dios
dispone todas las cosas para el bien de quienes lo aman, los que han sido
llamados de acuerdo con su propósito. Porque a los que Dios conoció de
antemano, también los predestinó a ser transformados según la imagen de su Hijo,
para que él sea el primogénito entre muchos hermanos...." …." Nota que Él no
dice que todo lo que nos sucede es bueno. Sin embargo, Él dice que usará todo
lo que sucede para nuestro bien. Todo lo que te sucede, bueno o malo, Dios lo
utiliza para hacerte crecer.
Entonces, ¿de dónde vienen los problemas? Vienen de una variedad de fuentes:
primero, vivimos en un mundo pecaminoso, caído. Adán metió la pata, y nosotros
experimentamos las consecuencias. Segundo, tienes un enemigo. Su nombre es
Satanás, y quiere destruir tu vida; siempre está trabajando contra ti. Tercero, a
veces tomas malas decisiones y te causas problemas a ti mismo.
Estas son las tres herramientas que Dios usa para hacerte más como Cristo: la
Biblia, el Espíritu Santo y las circunstancias.
Ahora vamos a cambiar de tema. ¿Qué tres opciones necesitas hacer para cooperar
con el proceso del crecimiento espiritual de Dios? ¿Cuál es tu parte en esta ecuación?
Proverbios 4:23 (NVI) dice Por sobre todas las cosas cuida tu corazón, porque de
él mana la vida." [Cuidado con lo que piensas, porque tu vida es moldeada por tus
pensamientos] Todo empieza en tu cabeza. Cómo piensas determina lo que
sientes; cómo sientes determina como actúas. Así que, si quieres cambiar tu forma
de actuar o sentir, debes empezar cambiando tu forma de pensar.
Por ejemplo, digamos que tienes un hábito que quieres cambiar en tu vida, te gusta
fumar o comerte las uñas. Imagina que estás en un barco en un lago y el barco se
dirige al este. El piloto automático determina la dirección del barco. Te dice "hacia
el este" si quieres que el barco se vaya hacia el oeste, hay dos formas de darle la
vuelta. Una forma es tomar el volante y forzar al barco a ir a la otra dirección. Estás
teniendo el control del volante , forzando al barco a ir hacia el oeste, mientras tanto,
el piloto automático continúa diciendo "hacia el este."
Esto es lo que sucede cuando tratas de cambiar tu vida a través del poder de tu
fuerza de voluntad sola. Te fuerzas a volver y cambiar. Pero todo el tiempo estás
al control del volante de tu vida, forzándola a ir hacia un lado, cuando tu inclinación
natural, (el piloto automático) quiere que vayas en la otra dirección. Estás bajo
presión, tratando de cambiar a través de tu fuerza de voluntad. Pronto, te cansarás
de controlar el volante y eventualmente lo soltarás, y tu vida se volverá a su antiguo
rumbo. Te sales de la dieta. Empiezas a morderte las uñas. Vuelves a fumar. El
cambio por fuerza de voluntad rara vez dura.
Completa esta oración: "es como yo ser....” Completa la oración diez veces y
sabrás exactamente cuál es tu piloto automático. Es la forma en que piensas sobre
ti mismo.
Es aquí donde viene el poder. Jesús dio una hermosa ilustración de esto en Juan
15:4-5: "Permanezcan en mí, y yo permaneceré en ustedes. Así como ninguna
rama puede dar fruto por sí misma, sino que tiene que permanecer en la vid, así
tampoco ustedes pueden dar fruto si no permanecen en mí. "Yo soy la vid y
ustedes son las ramas. El que permanece en mí, como yo en él, dará mucho fruto;
separados de mí no pueden ustedes hacer nada."
El fruto es una obra interna. ¿Cómo se vería si plantase un árbol viejo, muerto y
luego, dos semanas antes de la cosecha, le atase unas manzanas? Se vería tonto.
Sin embargo, muchos cristianos están tratando de hacer lo mismo. Están tratando
de atar buenas obras a sus vidas para parecer que están progresando. En
realidad, las buenas obras son sólo actividades externas que agregaron a sus
vidas sin ningún cambio interno.
¿Cómo sabes si estás dependiendo del Espíritu de Dios? simple: verifica tu vida
de oración. Lo que oras es lo que dependes de Dios. Lo que no oras es lo que no
estás dependiendo de Dios. ¿qué significa depender de Dios? significa orar
continuamente, sobre todo. Oras sobre tus decisiones, sentimientos, relaciones,
fechas límites, compras, todo. Eso significa depender de su Espíritu.
Si voy a hacer mi parte en cambiarme, debo elegir lo que pienso, y debo elegir
depender del Espíritu de Dios minuto a minuto. Hay otra elección más que debo
hacer.
¿Ves el paralelo entre los recursos de Dios y tus elecciones? Dios usa el recurso
de su Palabra; puedes elegir leerla. Dios nos da su Espíritu Santo, puedes elegir
depender de Él. Dios usa las circunstancias; puedes elegir responder a las
circunstancias.
" La vida cristiana no es un evento de una sola vez. Es un evento seguido por un
proceso. Si alguna vez te preguntas, ¿cuánto tiempo se toma volverse cristiano?
puedes decir con certeza, "un momento de por vida" naciste de nuevo
instantáneamente pero debes crecer y desarrollarte por el resto de tu vida.
Victor Frankl, el famoso psicólogo, fue aprisionado en un campo de concentración
Nazi en la segunda guerra mundial. Se acuerda que un día le desvistieron, tomaron
sus ropas, calzados, familia, anillo de bodas, y todo lo demás que pudieron. Pero
estando allí enfrente de los soldados Nazi se dio cuenta que había una cosa que
nunca le podrían quitar: su libertad de elegir su respuesta ante las circunstancias.
Esta es la libertad más grande que Dios te ha dado. No puedes elegir lo que te
sucede, pero puedes elegir cómo vas a responder. Y si eliges responder como lo
haría Jesús -con amor, confianza, obediencia, fe, gozo, y paciencia- descubrirás
que Dios lo usa para hacerte una mejor persona en vez de una persona amargada.
No puedes elegir lo que te sucederá la próxima semana, mes o año. Pero puedes
elegir cómo responderás, si la situación será para tu crecimiento o detrimento, si
tu respuesta a esa situación será un escalón más hacia la madurez o un canal
hacia el fracaso. La elección es tuya.
III. REFLEXIONA Y RESPONDE. (Instrucciones: Escoge alguna de las ideas que le haya
sido importante para ti y toma un minuto para decirles a todos lo que escogiste y por qué es
importante para ti)
Piensa sobre cómo algunos de los problemas y circunstancias con que te enfrentaste
esta semana pudieron ser usadas por Dios para hacerte más como Jesucristo. Si
hacemos nuestra parte, Él hará Su Parte y sucederá algo maravilloso: nos volveremos
más como Jesús. _______________________________________________________
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¿Cómo debería cambiar tu vida hoy, el hecho de que uno de mis propósitos existenciales
es SER COMO CRISTO? _____________________________________
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En una escala del 1 al 10, ¿qué tan bien estoy viviendo el tener compañerismo con la
familia de Dios?
1 2 3 4 / 6 7 8 9 10
¿Por qué te diste esa calificación? __________________________________________
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